El conflicto es un hecho cotidiano en las familias, durante su ciclo vital, se atraviesa
por una serie de etapas que implican cambios y adaptaciones. Estos cambios pueden provocar crisis, de menor y mayor intensidad en su estructura. En cada fase se vive momentos de tensión propios del proceso de negociación, acomodación y crecimiento de la familia. Debemos entender que ninguna familia escapa de la tensión que producen estos cambios, tensión que en términos de crecimiento es salud.
Las crisis halladas en estos ciclos vitales de la familia ocasionan estas situaciones inesperadas:
SEPARACION DE LA PAREJA: o divorcio son de las experiencias dolorosas y
traumáticas que puede enfrentar una familia. Lo es para la pareja, porque de esta forma ven suspendidos temporalmente o concluidos definitivamente, muchos de sus sueños y proyectos que abrazaron en el momento de establecer su vinculación conyugal. Pero lo es también, y de manera muy especial, para los hijos, quienes, sin importar su edad, serán afectados por la decisión de ruptura que adoptan sus padres, sin que puedan hacer mayor cosa más que protestar por algo que, casi siempre, no desean y les llena de incertidumbre y temor. La separación y divorcio en algunas parejas puede ser el resultado de un extenso recorrido de eventos conflictivos, de situaciones de estrés prolongadas y de deterioros crónicos de la relación. Pero puede también sobrevenirse por una decisión precipitada, como una medida a la que se recurre sin haber intentado agotar otras opciones para resolver las dificultades y procurar acuerdos plausibles.
ABORTO: las relaciones negativas, los problemas y conflictos familiares y otras
reacciones negativas dentro del seno familiar y la falta de comunicación por las mismas tensiones en las que se hayan sumergidas los miembros optan por inducir el aborto. La presentación de molestias y discusiones entre los miembros de las familias de los casos ocasionan estos. En el caso que el embarazo se presente en los hijos y el escaso nivel de comunicación y de confianza con los padres, así como reacciones negativas ante la noticia del embarazo ocasione que se tome la decisión fatal del aborto.
ACCIDENTE: Diversos accidentes son causados por factores personales que se
gestan dentro del seno familiar. Los problemas por los que estén atravesando influye en el comportamiento humano, hace que el individuo carezca de motivación para desempeñar una actividad o la realiza con la motivación equivocada ocasionando accidentes por la falta de concentración en los quehaceres diarios, esto lleva a cometer errores y comprometer su seguridad. En otras situaciones la familia es impulsada hacia la crisis por la ocurrencia de eventos estresores no normativos, tales como, un accidente fatal en un miembro de la familia. Este modelo ve las crisis familiares como una variable continua que refleja la total ruptura del sistema, como por ejemplo, cuando ocurre un divorcio; también considera que existen crisis menores, que son virtualmente imperceptibles por la familia. Las crisis familiares reresentan el final del viejo sistema familiar, emergiendo nuevas formas de interacción. (Patterson: 1994; 287). MUERTE: en el mundo cada año se suicidan un millón de personas, muertes que superan las producidas por los accidentes de tránsito o los conflictos bélicos. Las cifras en el Perú también son elevadas e incluyen en muchos casos niños que fueron víctimas de acoso o maltrato psicológico. Vivimos en una cultura de machismo donde los hombres no expresan sus sentimientos, refiere Eva Caballero, psicóloga del Hospital Sisol de San Martin de Porres,, y por ello en muchos casos esa represión se torna en violencia, hacia uno mismo y hacia los demás. En el caso de las parejas, la psicóloga de Sisol dice que más que hablar de culpabilidad debemos hablar de responsabilidad, ya que uno mantiene cierta conducta, pero el otro la sostiene, haciendo que la situación sea tomada como normal hasta que sea inevitable. La especialista expresó que actualmente los hogares se han convertido solo en casas, en donde no se conversa ni se comparte con la familia, por lo que se hace más difícil la identificación de situaciones de riesgo, como la depresión, el estrés, o el maltrato psicológico. La psicóloga del Sisol señaló como causa principal de suicidio los problemas familiares, sin embargo, en los últimos tiempos, el factor emocional producto del maltrato psicológico en colegios, instituciones educativas y hogares difuncionales.
ENFERMEDADES: estar en un ambiente familiar donde siempre hay un malestar
entre los miembros de la familia, puede aumentar los niveles de estrés en algún miembro de la familia y conllevar a la aparición de enfermedades, muchas veces los problemas surgen por problemas económicos, por falta de trabajo o por falta de interés de participación y colaboración de algún miembro de la familia. Los problemas familiares pueden influir en la aparición de enfermedades en especial las mentales, mantener un nivel de estrés constante puede repercutir gravemente en la salud de las personas, ya que puede aparecer la hipertensión, diabetes, problemas circulatorios y musculares, es recomendable en el caso de presentar problemas familiares ante todo tratar de mantener una buena comunicación y de no llegar a un acuerdo conciliatorio acudir a terapeutas que ayuden a mejorar la situación familiar.
DESEMPLEO: la crisis que atraviesa la familia, tiene una incidencia especial en el
empleo porque se cierran las posibilidades de acceder a un trabajo, se une una problemática que influye en el proceso de superación de los factores negativos que una prolongada desconexión con el trabajo se genera en la persona, y es la relación con su entorno familiar. Cuando la persona desarrolla permanentemente una actividad, tiene ingresos, es mirada con respeto en su familia, se le admira de alguna manera y todos están pendientes de hacerle la vida más agradable, ya que de una u otra manera todos son conscientes de que ese trabajo reporta beneficios a sus familiares. Un problema personal puede llevarlo a bajar su productividad; no trate de ocultarlo, lo mejor es que lo comunique a su líder. En el pasado se enseñaba que los problemas de la casa se debían dejar guardados para no afectar lo laboral, sin embargo, el paso de los años ha demostrado que siempre influyen, por eso en lugar de tratar de ignorarlo, lo mejor es saber cómo manejarlos. Tomar conciencia sobre la situación es el primer paso, ya que una crisis familiar incluso puede dañar la productividad, lo que al final de cuentas afecta directamente a la empresa.
FRACASO ECONOMICO: cualquier tipo de organización, si se lleva una mala
orientación y no existe autoridad, es lógico que sobrevenga el caos y se derrumbe la estabilidad. Esto es particularmente válido para la familia, célula primaria de la sociedad, en la cual las cosas marchan según la dirección que imprimen los padres. Y es que ningún triunfo personal de cualquiera de los miembros de una familia, puede anteponerse al fracaso de una familia. Aunque frecuentemente los triunfos personales se miden por el éxito en los negocios, la afluencia social o la popularidad, estas son cosas pasajeras. Hay realizaciones más altas que sí reflejan un aporte permanente y perdurable a la sociedad: los hijos y la descendencia. Ellos son la continuación de la sangre y del ser. Si se quiere dejar un recuerdo en la posteridad, se debe trabajar en el futuro de la familia. Y la única forma de lograr resultados profundos y que dejen huella es haciendo énfasis en el aspecto espiritual de la familia. Están equivocados aquellos que piensan que las obligaciones con sus familias se reducen a atender los gastos domésticos. Esta es una de las principales causas en los fracasos de los hogares pues ¿de qué vale dejar una fortuna económica a los hijos, si no tienen la formación adecuada para hacer buen uso de esos bienes? Tanto papá como mamá pueden caer en errores que no hacen otra cosa que perjudicar la unidad y la armonía de la familia.
VIOLACION: La inexorable repulsión que provoca el abuso de niños y niñas por
parte de sus adultos no debe servir de excusa para mantener la clandestinidad de esta realidad alojada en el seno familiar. Aprender a hablar del tema y a escuchar el dolor es, para Mizrahi, la manera de comenzar a romper el pacto de silencio que solventa este horror. Pero además, deja abierta la puerta a la reparación de los daños sufridos y de las marcas acarreadas durante años para las personas adultas que en su infancia o adolescencia fueron víctimas de la mayor perversión. Esos padres están repitiendo, pero no lo saben, actúan su violencia reprimida. Habría que indagar sus propias infancias. Usan al niño como depositario de sus frustraciones, limitaciones, carencias, violencia infantil reprimida. El niño no tiene capacidad de defenderse, teme denunciar, no está educado. No tiene a quién recurrir, no sabe decirlo, tiene miedo. No entiende. Esos padres buscan una descarga, y encuentran en el/la niño/a una víctima propiciatoria y sin defensa. Los abusos que suelen producirse son dentro de las familias disfuncionales, muy complejas y problemáticas, con serias perturbaciones en la comunicación, con una enorme cantidad de conflictos que están sin resolver y eso genera tensión, violencia, silencio, insultos sin límites, golpes. Son vínculos muy enfermos y enfermantes. En la micro cultura familiar el abuso está permitido implícitamente.
Bibliografia:
- Patterson J, Garwick A. Levels of meaning in family stress theory. Fam Process