Sunteți pe pagina 1din 31

INDICE:

ETICA PROFESIONAL::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::p.3

ETICA Y POLITICA:::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::p.11

ETICA Y EMPRESA::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::p.18

ETICA Y HUMANISMO::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::p.26

1
La ética general

La forma de actuar de un individuo se evidencia en el obrar bien o mal. En


términos muy generales lo bueno es aquello que involucra la presencia de
valores morales, mientras que lo malo es lo que objeto de un juicio moral
negativo.” La ética nos remite a un saber, tanto teórico como práctico, cuyo
propósito es señalar lo que está bien, lo que es justo, en suma lo que es
moral.

“Mas allá de esta definición global, corresponde al teórico establecer, de


manera prioritaria que es lo bueno, mediante un tratamiento científico” 1.
Esta actividad desplegada por el teórico de la ética llega a tener
consecuencias prácticas. Dentro de este desarrollo, por sus mismas
características al concretar qué es lo bueno se puede influir en el
comportamiento de las personas, orientándolo hacia el bien, no de forma
particular, ni por intereses personales, sino como una búsqueda de normas
y principios con validez universal.

La ética profesional

La parte de la ética general que estudia, de forma particular, los deberes y


los derechos de los profesionistas es la denominada ética profesional. En

1
FUENTES Sara María, Ética y poder, p. 30

2
torno a ella tenemos dos perspectivas: la especulativa y la práctica. La
primera estudia los principios fundamentales de la moral tanto individual
como social y los toma como punto de partida en el análisis de los deberes
y derechos profesionales.

La segunda determina y establece mediante reglas y normas de


comportamiento, el orden necesario para procurar el bien del grupo o
comunidad. “Ambas se ocupan de lo que es moralmente justo en las
acciones de los profesionistas”2.

Por su especificidad, es común que las reglas de la ética profesional sean


asentadas por los teóricos del área (como ha sido en los tratados sobre
ética a lo largo de la historia) o por los mismos especialistas que trabajan
en diferentes áreas de determinadas empresas o instituciones.

En esas condiciones, los códigos de ética profesional sirven de guía para la


acción moral. Esto es de gran ayuda en especial para los nuevos
profesionistas que se incorporan a los distintos ámbitos de trabajo y
además, a partir de ellos, el conglomerado de profesionistas explicita su
intención de respetar su profesión, de trabajar con lealtad y de cumplir con
la sociedad.

En ello desempeña un papel fundamental el hecho de que las normas que


regulan el comportamiento de los profesionistas son más dependientes de
los acuerdos con la sociedad, ya sea de forma explícita o implícita, que en
cualquier otra área de lo social.

2
COCINA Javier, Ética profesional comparada, p. 39

3
Por otra parte, se hace necesario advertir que se debe tener la sensibilidad,
también profesional, de no seguir las normas ciegamente en un afán de fiel
obediencia. Dichas normas deben analizarse y estimarse en su justa
dimensión y circunstancia. Es decir, es conveniente abstraer las normas de
su contexto ideal, utópico y colocarlas en la realidad de la interacción y
desempeño profesional. Esto nos lleva a asegurar que el éxito profesional
solo es legítimo si considera que quienes participan en el proceso son fines
en sí mismos y de ninguna manera han de ser considerados medios.

Las profesiones y los profesionistas

El origen de las asociaciones profesionales se halla en la antigua Roma.


Quienes se consideraban profesionistas o profesionales se agrupaban en los
colegia y cada uno de ellos estaba representado por una deidad.
Posteriormente, en la época medieval, se forman gremios, los cuales
estaban bajo la encomienda de un patrón y cada gremio se regía por sus
propias normas internas. “Un gremio aparte de aglutinar a quienes ejercían
un oficio, normaba los deberes que debían cumplirse y señalaba los
privilegios que la sociedad debía a sus miembros” 3.

Esta concepción de deberes y derechos (presente más tarde en las


asociaciones de profesionistas) ha trascendido hasta nuestros días con un
elemento más: los profesionistas tienen un compromiso moral con la
sociedad. Este compromiso les lleva idealmente a cultivar valores y
cualidades, con el fin de aspirar a alcanzar la excelencia necesaria para
cubrir de forma óptima las necesidades sociales, las de su gremio, las de la
corporación para la cual trabajan y las del mismo profesionista.

3
CORTINA, Adela y CONILL, Jesús, 10 palabras clave en la ética de las profesiones, p.42

4
Pero entonces ¿qué es una profesión? Una profesión es una actividad que
comprende un trabajo que requiere conocimientos, capacidades y
habilidades en los cuales la aplicación del intelecto en largos periodos de
educación, previa al desempeño de la profesión desempeña un papel
importante. El ejercicio de una profesión requiere práctica constante y
actualización de conocimientos y, en estas condiciones, el trabajo del
profesionista es recompensado en forma económica, así como también
reconociendo el prestigio a que se hace acreedor.

Las profesiones se agrupan en cuerpos colegiados, asociaciones o gremios,


con la intención de conservar y acrecentar el patrimonio tanto intelectual
como moral de su comunidad, defendiendo deberes y derechos mediante el
acuerdo de normas y criterios. Estos son de índole tanto ética como técnica
y tienen la finalidad de satisfacer las necesidades sociales de manera
óptima.

Como podemos deducir, las necesidades sociales tornan indispensable la


profesionalización de las actividades conducentes a su satisfacción. Su
carácter moral deriva de esta finalidad y debe abarcar el trabajo profesional
y conformar la ética del profesionista.

Cortina y Collin, han señalado lo que en nuestros días debe conformar el


ethos del ejercicio de una profesión 4:

 Como actividad humana social es un bien específico indispensable.

 Es legítimo que la sociedad exija a los profesionistas que


proporcionen ese bien.

4
CORTINA Adela, óp. Cit., p. 44

5
 Los profesionistas han de ejercer su actividad con vocación.

 Han de poseer además de conocimientos habilidades y capacidades,


las licencias y credenciales necesarias para ejercer.

 Han de pugnar por la universalidad de su ética, moral y valores para


superar su aplicación a grupos cerrados.

 Han de trabajar en forma permanente a favor de la excelencia


profesional.

 Han de participar en la elaboración de códigos éticos, principios


morales y establecimiento de los valores necesarios.

En este orden de ideas y más allá de la delimitación de los valores que han
de quedar plasmados en los códigos propios de cada institución o
corporación, nos aproximaremos a reflexionar acerca de los valores morales
que han de ser parte constitutiva de todo profesionista que se precie de
actuar con ética.

Ética profesional y libertad

Entendemos la libertad como la posibilidad de la persona de elegir un modo


de actuar que, en determinadas circunstancias, demanda la aplicación de
referentes éticos, cristalizados en principios y que toman cuerpo en un
comportamiento en valores. Dicho comportamiento está signado por una
diversidad de factores, entre ellos, el entorno social, el momento, la presión
de los demás, etc., sin embargo no es determinado por ellos.

La libertad como valor de la ética profesional es medular dentro de las leyes


del mercado global que rigen en la actualidad distintos ámbitos de la vida

6
económica y, por ende social en el mundo entero. Hemos de entender esa
libertad como una acción históricamente localizada en el marco de lo
personal y de las comunidades tanto profesional como social.

La libertad entonces, además de un principio, debe ser vista como un modo


de vida. Esto nos indica, adicionalmente el valor ético que representa la
libertad que el profesionista que quiera ser moralmente libre o se precie de
serlo, debe practicar este modo de libertad en la cotidianidad de su
actividad profesional. Así, son sus elecciones y decisiones las que van
construyendo su libertad día a día.

7
CONCLUSIONES:

Referirse, al tema de la ética profesional, resulta imprescindible en la


formación de cualquier estudiante, especialmente de quienes estamos
cursando los últimos semestres de la licenciatura, pues además de conocer
la importancia de la ética en la vida cotidiana, es importante conocer la
relación con la ética profesional, pues aspectos como el desarrollo
tecnológico, y los diversos logros de los seres humanos han acelerado los
cambios.

En nuestros días, la información recorre grandes distancias en poco tiempo


el nuevo orden mundial diseminado por todas partes en el planeta, plantea
a los profesionistas el requerimiento de ser altamente competitivos. Para
ello, se requiere sin duda recurrir a la ética, es decir intentar ser
competitivos pero con los valores éticos de fondo, cualquiera que sea la
profesión que se practique, sin importar el ambiente donde se desarrolle, ya
sea de manera individual o grupal.

8
BIBLIOGRAFIA:

 CORTINA Adela, CONILL Jesús, 10 palabras clave en la ética de


profesiones, España, Ed. V.Divino, 2000

 FUENTES, Sara María, Ética y poder, México, Plaza y Valdés, 2005

 COCINA Javier, SOLORIO Laura, Ética profesional comparada, México,


Instituto Mexicano de Contadores Públicos, 1995

 HERNANDEZ Baqueiro, Ética actual y profesional, México,


Ed.Thomson, 2006

9
La relación entre la ética y política

Uno de los temas recurrentes de la filosofía clásica y contemporánea es la


relación entre la ética y la política. Se trata de un asunto de enorme interés
dado que, hasta hoy, no ha tenido una solución definitiva. Es decir, no
existe aún, y difícilmente llegará a darse algún día, una interpretación
unánime en torno al vínculo entre lo que es moral y la forma en que el
ejercicio del poder puede ser valorado con base en criterios éticos.

“Esto ha dado pie a que la relación entre la ética y la política sea


considerada como un tema recurrente precisamente por eso, porque no hay
una respuesta unívoca en torno a ese vínculo”5. La razón por la cual no se
ha podido establecer un criterio-eje que pueda interpretar ese vínculo es
que no hay una pauta exclusiva por medio de la cual se pueda distinguir lo
que es válido en moral frente a lo que es lícito en político.

Ése es el reto. Asentar un parámetro que nos permita diferenciar con


claridad lo que es éticamente permisible y lo que es políticamente
aceptable. Una de las semejanzas entre la ética y la política es la siguiente:
ambas consideran o deben considerar a la humanidad como un fin en sí
mismo. Qué duda cabe que lo ideal sería que la actividad política tuviera
como fin primordial y último el bien común, pero desgraciadamente

5
HERNANDEZ Baqueiro, Ética actual y profesional, p. 428

10
asistimos con frecuencia a espectáculos bochornosos en los que se pone de
manifiesto la corrupción de hombres y sistemas que persiguen el interés
particular, pisoteando los derechos y las libertades de los gobernados.

No se trata del rechazo mayoritario que, como hemos visto los individuos
mantienen frente a las formas de dominación tiránicas, dictatoriales,
totalitarias o frente a cualquier gobierno absolutista; se trata más bien de la
desconfianza hacia la política y lo político que se conserva en las
democracias, en los sistemas en los que el pluripartidismo está permitido y
en los que las libertades de los ciudadanos están garantizadas.

Esta desconfianza que, si bien no es generalizada, si comparten muchos


ciudadanos, se debe principalmente a dos causas muy concretas:

En primer lugar, a la propia historia, remota o cercana.


En segundo lugar, a la demagogia presente.

No cabe duda de que a la historia hay que considerarla, entre otras cosas,
como el espejo retrovisor que llevamos en nuestra vida, a través del cual
sabemos de dónde venimos, que hemos dejado atrás y que podemos
aprender del camino que otros han recorrido. Pues bien, muchas páginas de
historia están plagadas de actuaciones políticas incorrectas, injustas e
indeseables y tales acontecimientos provocan una inferencia que podríamos
considerar falsa, cual es la de que todo ha de seguir así y que actuación
política no tiene arreglo. Pero la propia historia también nos ha dado
ejemplos de actuaciones políticas justas y ejemplares, de las cuales nos
enorgullecemos y solemos presentarlas como modelos de comportamiento
político.

11
La política es, sobre todo una actividad humana sujeta a consideraciones y
valoraciones morales como cualquier otra actividad. Una visión sintética de
lo que deber ser la relación armónica entre ética y política, nos lleva
analizar su origen histórico en el mundo griego y medieval hasta llegar a
esa ruptura radical que representó la Edad Moderna con Maquiavelo, para
después adentrarnos en algunos pensadores del mundo moderno y
contemporáneo.

Gerhard Ritter, escribió sobre los criterios morales de la acción política:6 El


problema de la relación entre política y ética es el problema de la
responsabilidad ética de la lucha política. Tal problema solo puede ser
planteado con seriedad allí donde existe una instancia ética, un tribunal
situado por encima de los poderes seculares en lucha, es decir, o un Dios
ante el cual quienes en la tierra detentan el poder o luchan por él tienen
que responder, o a una conciencia moral que se sepa estrechamente
vinculada a ciertas normas de ética racional.

La política, como fenómeno profundamente humano que es, tiene que estar
en estrecha relación con la ética, porque uno de los propósitos de la política
es contribuir a la creación de un orden de convivencia civilizado para la
comunidad humana. Entonces, tiene una función ordenadora de la
convivencia que requiere valoraciones éticas.

Sin embargo, a pesar de que ambas tienen un objeto común, ambas tienen
juicios diferentes, porque los juicios de la política intentan explicar las
fuerzas que mueven la sociedad, y los juicios de la ética que se aplican al
campo social tratan de justificar una acción o un programa que realiza
valores deseables por el grupo. De esta manera como el comportamiento
social puede ser objeto de descripciones diferentes, una moral y otra
política, es conveniente esta aproximación, muy selectiva, tal vez

6
Tomado de FLÓREZ Pérez, Edgar, Elementos de ética, filosofía, política y derecho, p.13

12
incompleta a lo que algunos autores han elaborado como teoría de las
relaciones entre la ética y la política.

Ética y propaganda política

“Podría definirse la propaganda como el esfuerzo hecho por un gobierno


para persuadir a los gobernados de que deben obedecerlo” 7. En lugar de
amedrentar, se trata de convencer; pero de hecho los medios empleados
para ello conducen a una especie de presión indirecta. El concepto moderno
de propaganda conserva esa nota característica de intento de persuasión,
de servir de estímulo válido que provoque unas respuestas favorables y de
ciertas dosis, en ocasiones excesivas, de manipulación.

Es innegable que la dureza de la propaganda electoral, obedece


fundamentalmente a dos objetivos: persuadir y convencer al ciudadano
para que su voto se le conceda a un partido político determinado y
desprestigiar a los partidos políticos contrarios que participan en la
contienda.

El efecto de la propaganda sobre las masas dependerá del grado de cultura


y de aprendizaje político y democrático que las masas tengan. Bien es
verdad que las técnicas modernas de propaganda política son enormemente
sutiles y complicadas y que pueden, apelando al sentimiento, al
subconsciente o a llamadas emocionales, manipular la voluntad política de
los ciudadanos; pero éstos, si su grado cultural es elevado y si su
aprendizaje democrático también lo es, estarán mejor preparados para
soportar estas campañas propagandísticas que periódicamente se celebran
en su país y sobre todo para detectar la demagogia y la manipulación allí
donde se encuentren.

7
RODRIGUEZ Lozano V, et.alt, Ética, p. 180

13
Desde el punto de vista se le ha de exigir a la propaganda política:

a) La ausencia de todo tipo de radicalismo. Es frecuente en las campañas


electorales y luego durante las legislaturas, oír hasta la saciedad que la
verdad y la actuación correcta y conveniente la tiene un partido concreto,
mientras que las opciones contrarias están todas en un error.

b) La ausencia también de todo tipo de agresividad. Aun reconociendo la


dificultad que entraña que en los enfrentamientos y contiendas políticas eso
se consiga, el ciudadano, que es en última instancia quien va a decidir el
tipo de gobierno que le conviene, tiene el derecho de manifestar que no
está dispuesto a consentir agresiones gratuitas y descalificaciones de
personas y de grupos, esto es, tiene que exigir serenidad, prudencia y rigor
en todas las afirmaciones que los políticos aseveran en sus campañas.

Los partidos políticos. Necesidad y limitaciones

Los partidos políticos son necesarios. “Las distintas ideologías y los


diferentes modos de entender la sociedad y su funcionamiento han de
organizarse para adquirir fuerza, cohesión, suma de intereses y una amplia
representación en la sociedad en la que aparecen.” 8

En los gobiernos de autoridad carismática o tradicional, o sea en aquellos en


los que las decisiones últimas estaban en manos del caudillo o del señor, no
aparecen normalmente partidos políticos sino, a lo sumo, tendencias

8
HERNANDEZ Baqueiro, op.cit, p.430

14
opuestas a la forma personal de gobernar del caudillo del señor y que,
lucharán por arrebatar el poder a quien lo ostenta, sin que ello suponga la
aparición de una ideología política distinta.

En las dictaduras fascistas y en los estados totalitarios, los partidos políticos


no tienen cabida, porque el sistema se lo impide y, a lo sumo, funcionan en
la clandestinidad.

Pero en las democracias, los partidos políticos son los pilare den los que se
sostiene, pues representan opciones distintas para una misma sociedad y la
democracia vive del esfuerzo que cada una de estas opciones haga por
conseguir el poder y poner en práctica sus alternativas de gobierno.

CONCLUSIONES:

El tema de ética y política ha sido objeto de innumerables debates


prácticamente desde que se ubica la relación entre ambas, en torno al cual
no ha sido posible emitir un criterio único al respecto. Sin embargo, es
justamente en nuestros días, donde es prácticamente evidente que las
prácticas políticas, alrededor del mundo, carecen de elementos éticos.

Por lo anterior, resulta fundamental comprender, cuál sería la relación entre


ellas dos, es decir, hasta qué punto la política debe recurrir a la ética y no
olvidarse de ella, pues esencialmente ambas buscan el beneficio general
sobre el particular. Para ello es imprescindible analizar elementos donde se

15
ve o no plasmada la presencia de la ética en la política, como es la
propaganda política, con el efecto que busca y los medios que utiliza, así
como los partidos políticos con todo lo que estos representan.

BIBLIOGRAFIA:

 HERNANDEZ Baqueiro, Ética actual y profesional, México,


Ed.Thomson, 2006

 FLÓREZ Pérez Edgar, Elementos de ética, filosofía, política y


derecho, España, Ed. El Nacional, 2005

 RODRIGUEZ Lozano V., FRADE Perdomo P., et. alt., Ética, México,
Ed. Alhambra, 1995

16
Ética y eficiencia en la empresa

La gran paradoja que define el rumbo de la empresa moderna es, quizá,


discernir entre la ética y la eficiencia. “En efecto el triunfante mundo
capitalista, cuyo emblema es la industria, se halla atrapado al momento de
responder este ambivalente reto”9. Por un lado, se presenta la necesidad de
ser altamente eficiente para poder obtener mayores ingresos que repartir a
quienes participan en la cadena productiva y, por el otro, de mostrar una
ética acorde con las exigencias sociales que pretenden un comportamiento
justo de la empresa.

Si bien el ámbito de la eficiencia y su consecuente resultado de ganancias


monetarias no debiera estar confrontado con el de la ética, en ocasiones
está impregnado de intereses y de conductas que rebasan el buen
comportamiento tan deseado en las empresas.

Es decir, pretender obtener ganancias en muchas ocasiones puede significar


manifestar comportamientos poco éticos, como pueden ser desdeñar el
trabajo de los empleados al brindarles salarios insuficientes, no proveerlos
de servicios de salud, ni capacitación o inmiscuirse en conductas corruptivas

9
WEBSTER Andrés, Valores éticos empresariales, p. 355

17
con tal de mejorar las condiciones de las empresas en el mundo competitivo
empresarial.

Ética en las empresas

La ética va hacia el interior de la empresa, en los miembros que la


conforman y también hacia afuera, en el trato de éstos con sus clientes e
interesados externos; por ello, su ámbito alcanza a todos los actos
humanos. La empresa debe crear una cultura de valores que incluya los de
carácter ético para que sus participantes sepan cómo actuar, tanto dentro
como fuera de la misma. Debemos poner el mismo empeño en ejercer la
ética, que en alcanzar las metas y objetivos que nos hemos trazado para
triunfar en los negocios.

Si la empresa carece de un fundamento organizacional ético, lo más


probable es que fallará por esta misma en la sociedad en general. El estudio
de la ética no genera un producto, sino que nos compromete con un
proceso que consiste en tomar decisiones, las mejores decisiones, no
egoístas.

La ética contribuye a:

 Esbozar el proceso de la reflexión ética.

 Vincula nociones éticas como las de derecho y justicia, con la


administración de los sistemas de información y de poder.

 Muestra como se analizan y evalúan los diferentes componentes del


proceso de toma de decisiones.

18
 Ofrece métodos y técnicas para desarrollar un clima organizacional en
el que pueda practicarse y mejorar la reflexión ética. Describe de qué
modo la ética interpreta la acción y las organizaciones humanas.

Cuando enfrentamos las preocupaciones éticas de las organizaciones,


debemos considerar varios aspectos. Una ética negativa sólo nos indica lo
que no se debe hacer, por ejemplo las empresas tienen la responsabilidad
negativa de no dañar el ambiente, no fabricar productos peligrosos, no
explotar a los obreros.

Sin embargo, tienen la responsabilidad positiva que consiste en el buen


desempeño, por ejemplo, capacitar y otorgar poder a los empleados,
proporcionar un buen rendimiento a la inversión, contribuir al desarrollo de
la sociedad, etc…

A la ética no se le debe interpretar como un conjunto de reglas o castigos, o


incluso como un código, la ética debe ser vista y tratada como un proceso
de decisión, de lo que debe hacerse, para ello, debemos reflexionar a la luz
de los elementos involucrados en la situación concreta que se ha de
resolver.

Este proceso de reflexión representa un rasgo fundamental de las


organizaciones; es su estructura para la toma de decisiones. “La ética de los
sistemas, apunta hacia la precisión de que la justicia, es la primera virtud
de las instituciones sociales, tanto como la verdad lo es de los sistemas de
pensamiento.”10 Una organización no es sólo una red de relaciones de
poder, sino también de una red de personas.

10
VIGURI Carlos, Ética interna en las organizaciones, p. 78

19
El modelo empresarial de la nueva economía y la responsabilidad social.

El modelo empresarial contemporáneo, sustentado en el programa


capitalista-liberal, representa un cambio en la empresa tradicional, derivado
de diversos factores. “Entre éstos podemos ubicar la tecnología, la
expansión del proyecto democratizador y el crecimiento de los valores
posindustriales; podríamos englobar estos factores en el concepto de nueva
economía mundial y su consecuente resultado: la sociedad del
11
conocimiento” .

Así mismo, estos cambios representan una reformulación de la actividad de


los empresarios y consecuente actitud frente a sus trabajadores y a la
sociedad. Es decir, la realidad cambiante lleva de la mano también
cambiante ética empresarial, que es la que intentaremos visualizar.

Una de las características de la sociedad del conocimiento es que, en virtud


de que la tecnología y el acceso a la información pública permiten que
muchas empresas sean capaces de producir bienes semejantes, y por
ejemplo, una de las diferencias que el consumidor podrá evaluar para
comprar un producto y no otro, es, que tanta responsabilidad demuestre la
empresa en su interrelación con la sociedad.

Desde la perspectiva de la responsabilidad social, las empresas son


interpretadas como un agente más de la sociedad cuyo objetivo no sólo es
ofrecer productos, sino que estos respondan a los fines de mejoramiento de
la calidad de vida de la propia comunidad. Una empresa socialmente
responsable es aquella que no contamina, que no contrata capital humano
en condiciones deplorables, que no hace uso del trabajo de menores, que

11
WEBSTER, op.cit, p.356

20
destina algo de sus excedentes al abatimiento de la pobreza, a programas
educativas, al rescate del patrimonio cultural, entre otras muchas
características.

Por ello, podemos asegurar que para que una empresa se ostente como
socialmente responsable, es decir, integrante de un componente ético
importante, debe estar sometida a las siguientes acciones de forma
imprescindible:

 Información: Por ser preciso conocer lo que se está ejecutando en la


empresa.

 Evaluación: Por ser obligatorio y necesario cuantificar de la mejor


forma posible tanto técnica como económica el tamaño de las
actuaciones.

 Convergencia: Por ser imprescindible coordinar todas las actuaciones


marcadas por la estrategia de la empresa, con la esperanza de que
sean aquellas convergentes entre sí y perfectamente funcionales.

 Transparencia: Por ser necesario que lo que se haga sea claro,


medible y comparable y demostrar que lo que se dice sea cierto. Es
la transparencia a demostrar, en la rendición de cuentas, lo que
indicará la calidad de la responsabilidad.

 Coherencia: Por ser obligatorio la máxima relación y coherencia entre


lo que se dice y lo que se hace, para poder ser factibles la credibilidad
y los resultados de beneficios y de la reputación.

21
 Diálogo. Por ser imprescindible el diálogo abierto, sincero y
transparente de aquellos grupos de interés en la empresa, así como a
las necesidades de la sociedad.

 Apertura: Porque la empresa responsable debe ser una empresa que


acepte un condicionamiento externo, creciente, puesto que el diálogo
anteriormente aducido debe llevar a una apertura de la empresa a la
sociedad.

 Descentralización: Porque todas las iniciativas de responsabilidad


social, se deben realizar por toda la empresa, puesto que todos los
componentes de la empresa tanto personas como conceptos
materiales, son sus protagonistas.

 Perspectiva integral: Por ser conveniente integrar todas las iniciativas


en una estrategia coordinada y perfectamente coherente.

 Voluntad de transformación: Por ser importante, el que existiendo y


con posibilidad de resolver los posibles obstáculos y dificultades y con
esa voluntad y tomando en cuenta los conceptos anteriores, se podrá
desarrollar con éxito la responsabilidad social conveniente.

22
CONCLUSIONES:

El tema de ética y empresa, debe estar estrechamente relacionado, pues no


solamente nos afecta como estudiantes o profesionistas, nos afecta como
ciudadanos, como seres humanos, pues evidentemente, en cualquier país,
en cualquier lugar, existen empresas, de diversa índole, tamaño, capacidad,
etc. El tema de ética dentro de las empresas, se ve en ocasiones empañado
por conseguir aspectos como la eficiencia, o la obtención de utilidades a
cualquier costa.

De buscar exclusivamente el beneficio económico, si bien, la empresa


obtendrá ganancias en el corto plazo, no será capaz de ganar un lugar en la
sociedad, especialmente en el público que busca preservar valores
tradicionales. Por eso, resulta fundamental que las empresas en su
desarrollo, tengan presentes valores como la transparencia, el diálogo, o a
la apertura, pues no se trata solamente de analizar el funcionamiento
interno de la empresa, se trata de interesarse en las repercusiones positivas
y negativas que esta pueda tener en su entorno.

23
BIBLIOGRAFIA:

 WEBSTER Andrés, Valores éticos empresariales, México, Ed.Thomson,


2006

 VIGURI Carlos, Ética interna en las organizaciones, México, Ed.


Cengage Learning, 2008

 BROWN Marvin, La ética en la empresa, México, Ed. Paidós, 1999

24
¿Qué es el humanismo?

El humanismo es un concepto definido desde la filosofía y se trata de una


actitud que intenta poner especial énfasis en la dignidad y el valor de la
persona humana, considerándola como un ser racional capaz de practicar el
bien y encontrar la verdad. Se trata también de un concepto utilizado para
definir los movimientos culturales y literarios presentes en la Europa del
siglo XIV y XV, en el que renace el estudio de la Roma y Grecia clásica, en
la que se resalta el valor de lo clásico por sobre su importancia en el
contexto cristiano.

El Humanismo se conforma como todo un movimiento, y se origina en Italia


a fines de la Edad Media, cuando personajes tan importantes como Dante y
Francesco de Tetrarca, entre otros, realizaron grandes aportes al
descubrimiento y conservación de las obras clásicas.

“La expansión de este movimiento tomó aún más fuerza gracias a la


difusión de los textos clásicos, lo que fue posible por el novedoso uso de la
imprenta en el siglo XV luego de que parte de la nobleza y el alto clero haya

25
contribuido de manera muy significativa en la recopilación y traducción de
los textos clásicos en cuestión.”12

El humanismo tuvo un fuerte impacto en la literatura y el arte, sin embargo,


fue expandiéndose y entrando a países como Inglaterra donde sus
influencias llegaron a tomar parte importante tanto en la educación como en
la teología, conformándose como una de las causas principales de la
Reforma. Fue en este país donde la difusión del movimiento humanista
estuvo a cargo de grandes instituciones educativas como las afamadas
universidades de Oxford y Cambridge.

La relación del humanismo con la ética

Los humanistas enriquecieron inmensamente las perspectivas éticas del


momento, devolviendo a la circulación, depurados en el texto y en la
interpretación, todas las obras que aún hoy son nuestra principal fuente de
conocimiento del pensamiento antiguo. El humanismo muestra una
dimensión ética fundamental y una notoria perseverancia en algunas
direcciones de la especulación moral. Ciertos humanos se interesaron por
ejemplo, en la física, la metafísica o la matemática y produjeron frutos
importantes en esos terrenos; pero no puede decirse que en el humanismo
haya un componente físico, metafísico o matemático representativo

La ética y el ser humano

Podemos afirmar, que desde que la ética surgió y fue aceptada y


reconocida, se estableció una re-definición del actuar humano y del ser en
relación con otros seres y consigo mismo. Lo anterior representa como

12
LARRAÑETA Olleta, La preocupación ética, p. 38

26
analizamos en párrafos anteriores la escencia del humanismo y de su
relación justamente con la ética.

Definitivamente muchas de las acciones no se pueden cuantificar, ni existen


parámetros para determinar hasta dónde un sujeto ha beneficiado o
perjudicado más que otro, para ello habría que tener un punto de vista
relativo, entonces los absolutos ya no aplicarían.

Entonces, y de acuerdo al humanismo: ¿Quién tiene el derecho, la


capacidad y el poder de juzgar quién es ético y quién no lo es?, una persona
dentro de una organización miente para salvar un proceso de producción, y
sin embargo, es un factor obligado en la consciencia humana, el ser es
trascendente y se da cuenta que a veces llega a realizar acciones que van
en contra de su propia voluntad de decisión.

Habría que preguntarse el rol de la ética en la actualidad. Diversidad de


organizaciones pretenden una estructura ética basada en la armonía, en la
confianza, dignidad humana, respeto y en los procesos de relación con otros
seres pensantes, ¿no es acaso esto el fin del ser humano? ¿Por qué la ética
debe ser pronunciada tan constantemente como para reafirmar que estas
acciones no se presentan? Todavía la situación es más caótica cuando el ser
ético trata de ver las acciones y acontecimiento de una manera fría y
supuestamente muy objetiva, cuando ninguna persona humana puede ser
desligada de su educación previa, axiología, formación espiritual,
estereotipos positivos y negativos que posea, todo esto de una forma o de
otra empaña la observación del actuar humano.

Es preciso aclarar que las Ciencias Sociales y Exactas, como cualquier


campo de acción necesitan de la ética. “De esa manera la ética se distingue
en el actuar individual y social, con este post modernismo tan interesante,

27
ya muchos grupos sociales no saben ni lo que es bueno y deseable a lo que
es malo y negativo”13.

El post modernismo viene a relativizar muchas ideas, a decir que todo


puede ser justificado y que cada acción depende de una cultura o contexto,
esto no se niega, muchas de las conductas humanas y sobre todo
habituales son formadas por una familia, por una cultura que expresa estos
valores como deseables. Sin embargo, es preciso considerar que el valor de
una acción humana no depende de quién la observe, sino depende de las
consecuencias y repercusiones que produzca a nivel personal y social.

El humanismo de la ética

Precisamente hoy que el humanismo está en crisis por la agresividad de las


ciencias positivas y de las filosofías de variado signo, se hace referencia a la
defensa del humanismo ético, donde la moral ocupa un puesto escencial. La
moral es el norte y guía de la planificación humana. “La moral pretende
hacer seres humanos, no ángeles o seres fantásticos”14

Persiste entonces siempre la preocupación por el hombre, por sus dramas


interiores y exteriores, por sus escisiones íntimas y sus alienaciones
externas. Este es el sentido profundo de su ética: una tarea para estimular
al hombre a la lucha por la conquista de sus propios dones y por el disfrute
de sus facultades, una ética que devuelva a los individuos y a los grupos el
sentido humano, el instinto de felicidad, el deseo de libertad.

13
GONZALEZ García, Francisco, La ética y el actuar humano, p. 28
14
LARRAÑETA, óp. Cit, p. 39

28
La cultura como formación humana

“Hemos de entender por cultura el tejido o la urdidumbre construido por las


personas de un grupo”. La cultura, además, guarda y custodia lo realizado
por el pasado y reconstituye (en función de su carácter abierto) nuevos
sentidos e interpretaciones y nuevas formas de ver la realidad. Lo cultural
se va gestando siempre como posibilidad, dentro de los horizontes del
mundo, es siempre creación y virtualidad, de ahí que lo nuevo y lo inédito
puedan alterar la tradición.

En la cultura, los seres humanos se encuentran y se agrupan en una


actividad común y conjunta. Ahí se reconocen los unos y los otros y
adquieren conciencia mutua de los que son por medio de los diferentes
mundos de formas de los que se componen la cultura. El ser humano vive
en palabras del lenguaje y sólo así sabemos unos de los otros. Por lo tanto
la cultura es un mundo intersubjetivo que tiene que ser accesible a todos
los sujetos, pues así se conduce del yo al tú, y se logra la síntesis por medio
del lenguaje.

Con todo lo dicho, podemos decir que el término cultura puede entenderse
desde un sentido muy amplio como el cultivo de las capacidades y aptitudes
humanas, o como el resultado de su ejercicio, como creación, invención y
formación, como educación formativa integral de una persona, al dar forma
a las disposiciones naturales del ser humano. Por lo tanto, el mundo de la
cultura engloba y comprende todo el ámbito humano y también lo biológico,
aun este ámbito no podría explicarse sin lo cultural, sin el sentido que cada
cultura en concreto imprime.

29
CONCLUSIONES:

El humanismo, es probablemente el tema que más cercana relación tiene


con la ética, es decir al buscar la dignidad y el adecuado desarrollo de la
persona humana, se tiene por sentado que la ética está inseparablemente
presente en esos conceptos. Para ello es evidente que tenemos que analizar
el desarrollo, la evolución que ha tenido el ser humano, a la par de esos
conceptos, al punto de comprender, como son entendidos en la actualidad,
alrededor del mundo.

La relación del humanismo con la ética, se ve representada en aspectos de


diversas ciencias, especialmente las sociales que buscan la realización del
ser humano, especialmente en su convivencia con los demás, donde la
cultura juega un papel fundamental, pues es a través de esta donde la
relación se ve más efectivamente plasmada. De ahí la importancia de no
solamente comprenderla, especialmente fomentarla pues es lo único que
evitará precisamente la deshumanización.

30
BIBLIOGRAFIA:

 LARRAÑETA Olleta Rafael, La preocupación ética, España, Ed. San


Esteban, 1990

 GONZALEZ García Francisco, La ética y el actuar humano, México, Ed.


Prentice Hall, 1996

 GARCIA Dora Elvira, Ética y cultura, México, Ed. Thompson, 2004

31

S-ar putea să vă placă și