PRÁCTICA 6.
CUANTIFICACIÓN DE LA RESPIRACIÓN AEROBIA POR EL MÉTODO
COLORIMÉTRICO.
Palabras clave: respiración, aerobia, colorimétrico.
Abstract. Breathing is a cellular process that includes
the metabolic pathways that degrade carbohydrates and
other organic molecules with the simultaneous release
of energy in the form of ATP, the products of this
degradation are carbon dioxide (CO2) and water.
Objective: Carry out the quantification of CO2
production, product of anaerobic cellular respiration of
different seeds, as well as observe the variation of this
process due to temperature. Methodology: For this
determination a preparation was made 36 hours in
advance, which consisted of soaking different seeds for
one hour and then placing them in a bag inside a bottle
with NaOH. After the time, a titration of each bottle with
HCl and phenolphthalein was carried out as an indicator,
using Barium Chloride to precipitate the CO2 produced.
Results: The most remarkable case was that of the
beans, since in these, no matter what temperature they
were at, the respiration was carried out with very high
results. Yes, a significant increase was observed from
one temperature to another, but of all the seeds, it was
the one with the highest values in all the bottles used for
the test. Conclusion: Although cellular respiration is the
same in seeds, the effect of temperature can vary
depending on the plant.
Resumen. La respiración es un proceso celular que
incluye los caminos metabólicos que degradan
carbohidratos y otras moléculas orgánicas con la
liberación simultánea de energía en forma de ATP, los
productos de esta degradación son dióxido de carbono
(CO2) y agua. Objetivo: Realizar la cuantificación de la
producción de CO2, producto de la respiración celular
anaerobia de las diferentes semillas, así como observar
la variación de éste proceso por efecto de la
temperatura. Metodología: Para esta determinación se
realizó una preparación con 36 horas de anticipación,
que consistió en remojar diferentes semillas durante
una hora y posteriormente colocarlas en un saco dentro
de un frasco con NaOH. Transcurrido el tiempo, se
realizó una titulación de cada frasco con HCl y
fenolftaleína como indicador, utilizando Cloruro de Bario
para precipitar el CO2 producido. Resultados: El caso
más destacable fue el de las alubias ya que en éstas,
sin importar la temperatura a la que se encontraban, la
respiración se llevó a cabo con resultados muy altos. Sí
se observó un aumento significativo de una temperatura
a otra, pero de todas las semillas fue la que presentó los
valores más altos en todos los frascos empleados para
la prueba. Conclusión: Aunque la respiración celular es
igual en las semillas, el efecto de la temperatura puede
variar dependiendo la planta.
Introducción. Las semillas son la unidad de
reproducción sexual de las plantas y tienen la función
de multiplicar y perpetuar la especie a la que
pertenecen. Para que la semilla cumpla con su objetivo
es necesario que el embrión se transforme a una
plántula que sea capaz de valerse por sí misma y
finalmente convertirse en una planta adulta, todo ello
comprende una serie de procesos metabólicos y
morfogenéticos cuyo resultado final es la germinación
de las semillas.
La respiración es un proceso celular que incluye los
caminos metabólicos que degradan carbohidratos y
otras moléculas orgánicas con la liberación simultánea
de energía en forma de ATP. Los productos de esta
degradación son dióxido de carbono (CO2) y agua
(Nelson y Cox,1993).
El CO2 es por tanto un producto de la actividad
respiratoria de las células, es decir del desdoblamiento
de la glucosa. Dentro de las células la glucosa es
degradada en distintas fases. En la primera fase la
glucosa se rompe en dos moléculas por la acción de
enzimas, ambas moléculas entran inmediatamente a la
siguiente fase en donde se vuelven a romper al perder
un átomo de carbono, mismos con las que se formarán
moléculas de CO2 que se desechan de la célula. El
rompimiento de estas moléculas se continúa en una
tercera fase por la acción de un conjunto de reacciones
cíclicas en las que también se libera CO 2. Por tanto, el
CO2 es resultado de todo el proceso de degradación
que sucede en las células y no es de ninguna manera
producto de la transformación del oxígeno como se
piensa con frecuencia.
El CO2 producido durante la respiración puede
determinarse indirectamente a través del método de
titulación. Cuando el CO2 entra en contacto con una
solución de hidróxido de sodio (NaOH) este gas se
disocia en iones carbonato que quedan disueltos en
dicha solución. Utilizando un indicador como la
fenolftaleína la presencia de estos iones se hace
evidente al aparecer una coloración rosa, y puede
determinarse su cantidad añadiendo a esta solución un
ácido fuerte como el ácido clorhídrico que provoca que
la muestra se torne incolora por la neutralización de
estos carbonatos. La cantidad de HCl gastado para ello
es equivalente a la cantidad de iones carbonato y por
tanto a la cantidad de CO2 producido durante la
respiración (Aguilar, 2011).
Antecedentes. En 1804 Theodore de Saussure detectó
el fenómeno respiratorio de las plantas, en sus
Recherches chymiques sur la vegetation trata el tema
de la nutrición y respiración vegetal en su totalidad.
Sobre la respiración de las plantas, realizó minuciosos
experimentos con semillas en las que observó que el
oxígeno circundante desaparece durante la
germinación, reemplazándose simultáneamente por un
volumen semejante de dióxido de carbono. Hoy en día
se conoce que las plantas respiran por todos sus
órganos: raíz, tallo, hojas, flores y frutos. La respiración
no necesita la luz solar, se realiza indistintamente con
luz o en la oscuridad, en las mitocondrias. Ocurren
múltiples pasos oxidativos, cada uno catalizado por una
enzima específica.
La respiración es la central energética que dirige las
fuerzas celulares necesarias para la biosíntesis, el
mantenimiento celular y el transporte activo en plantas,
está acoplada a la producción de ATP, poder reductor,
esqueletos de carbono y es el proceso que provee
numerosos substratos para las reacciones de
biosíntesis en el citoplasma. La demanda y oferta de
estos metabolitos producidos a partir del proceso
respiratorio varía dependiendo del tejido particular, el
estado de desarrollo de la planta y de factores medio
ambientales.
Adicionalmente, es un proceso que libera grandes
cantidades de CO2 a la atmósfera, a nivel global se ha
calculado que las plantas terrestres liberan como
producto de la respiración aproximadamente 60
gigatoneladas de carbón por año a la atmósfera. La
respiración incluye el proceso de glucólisis que ocurre
en el citosol, el ciclo del ácido cítrico mejor conocido
como ciclo de Krebs, que ocurre en la matriz de la
mitocondria y la cadena de transporte de electrones que
ocurre en la membrana interna del mismo organelo
(Campbell y Faraday, 2016).
En términos generales, la glucólisis es un proceso en el
que la sacarosa es dividida en dos azúcares de seis
carbonos, los cuales entran a la cadena de reacciones
y son convertidos en piruvatos que, al perder un átomo
de carbono, ingresan al ciclo de ácidos tricarboxílicos
como Acetil-CoA, en la mitocondria; adicionalmente se
obtiene energía química en forma de ATP en pequeñas
cantidades, poder reductor en forma de NADH y
algunos ácidos inorgánicos como el malato.
Dentro de la mitocondria se desarrollan las dos fases
siguientes de la respiración; en la matriz de este
organelo se encuentra la maquinaria enzimática
necesaria para dirigir el conjunto de reacciones del Ciclo
de Krebs, en las cuales se obtienen como productos,
dióxido de carbono (CO2) y precursores de otras rutas
metabólicas de importancia para la célula,
adicionalmente se genera una gran cantidad de poder
reductor y se sintetiza ATP.
Finalmente, la última fase respiratoria, la fosforilación
oxidativa, es un proceso que está acoplado a varios
complejos, en su mayoría proteicos, que se encuentran
embebidos en la membrana interna de la mitocondria y
que consiste en una serie de reacciones de oxido-
reducción que finalmente reducen la molécula de
oxígeno, obteniendo como resultado agua. Durante la
ocurrencia de esta cadena de transporte de electrones
se utiliza la mayor parte de poder reductor generado en
las fases anteriores y se genera un gradiente de
concentración de protones hacia el espacio
intermembranal con el cual se dirige la síntesis de ATP
en una de las formas más eficientes y comunes en los
organismos aeróbicos.
El complejo proceso respiratorio de las células
vegetales es similar a lo observado en las células
aeróbicas de otros organismos; sin embargo, en las
mitocondrias de las plantas se presentan algunas
particularidades que las diferencian de las del reino
animal y les confieren su carácter exclusivo,
otorgándoles vías alternativas de respiración y con ello
mayor flexibilidad para reaccionar ante diversas
situaciones que pueden llegar a ser limitantes del
metabolismo. El conocimiento del proceso de la
respiración en el metabolismo de la planta ha avanzado
enormemente en años recientes, así como la
comprensión estructural, anatómica y bioquímica de la
mitocondria, reflejando su destacada participación en el
adecuado funcionamiento de organismos autotróficos
(Aguilar y Melgarejo, 2009).
La energía obtenida a través de la respiración,
almacenada en forma de ATP, es utilizada para el
crecimiento de los órganos vegetales de la planta, el
mantenimiento de las estructuras existentes, el
transporte de metabolitos e iones, la regeneración de
proteínas y los procesos de respiración además de la
síntesis de ATP. La respiración genera toda una serie
de compuestos de carbono e intermediarios, que son
precursores de la síntesis de aminoácidos y
compuestos nitrogenados derivados, ácidos grasos y
glicerol, porfirinas y pigmentos carotenoides y
flavonoides compuestos fenólicos para la síntesis de
lignina y polisacáridos para la síntesis de la pared
celular. El conjunto de reacciones que conforman la
respiración comprende la glucólisis, vía de oxidación de
las pentosas fosfato, la Beta oxidación de los ácidos
grasos, el ciclo de Krebs, la oxidación del poder reductor
por la cadena respiratoria mitocondrial y la fosforilación
oxidativa de ADP. Para la Génesis de ATP, las vías
metabólicas de la respiración de los carbohidratos
pueden dividirse en cuatro etapas; la primera etapa
comprende la degradación de almidón y sacarosa,
obtenidos durante la fotosíntesis, para formar fructosa-
6-fosfato. En una segunda etapa la fructosa-6-fosfato es
fosforilada a glucosa 1,6-bifosfato, la cual es oxidada
hasta piruvato a través de la vía glucolítica. En una
tercera etapa el piruvato entra en la mitocondria, donde
es oxidado hasta CO2 por medio del ciclo de Krebs,
produciéndose la mayor parte de NADH mitocondrial.
En la cuarta etapa el NADH es finalmente utilizado por
la cadena de transporte electrónico mitocondrial, para
producir ATP. A sí mismo, la vía de las pentosas fosfato
complementa la vía glucolítica, utilizando la glucosa-6-
fosfato como sustrato para dar lugar a fructosa-6-fosfato
y gliceraldehído-3-fosfato, ambos intermediarios de la
vía glucolítica. Por otro lado, los ácidos grasos pueden
utilizarse como sustratos respiratorios a través de la
Beta-oxidación, obteniéndose Acetil-CoA qué puede
entrar en el ciclo de Krebs o en el ciclo del glioxilato
(Davies, 1980).
Hipótesis. A diferentes temperaturas el proceso de
respiración celular se ve alterado, aumentando al
incrementarse la temperatura y disminuyendo conforme
la temperatura desciende, por lo que se espera
observar una variación en la producción de CO 2 en
relación directa a la temperatura aplicada en cada uno
de los sistemas a estudiar; mayor cantidad de CO 2 en
los sistemas por encima de la temperatura ambiente y
menor en aquellos por debajo de ésta.
Objetivos.
1. Evaluar la cantidad de CO2 producido por
semillas de diferentes especies vegetales, así
como relacionar su producción como un
indicativo del proceso de respiración celular.
2. Reconocer el efecto de la temperatura sobre la
respiración y, por tanto, sobre la producción de
CO2.
Metodología. Se colocaron 50mL de NaOH 0.2N en
cada uno de los cuatro frascos. Este paso se llevó a
cabo dos días antes de la realización de la práctica. Se
dejaron remojar durante 1 hora 30g de cada una de las
diferentes semillas (chícharo, frijol negro, frijol bayo,
lentejas, garbanzo, maíz, quinoa). De los 30g
anteriores, se dividieron en secciones de 10g y se
colocaron en un saquito hecho de gasa. Se colgó el
saquito con semillas del tapón con un hilo, sujetando Análisis estadístico. Los datos obtenidos se
bien para evitar que se cayera al NaOH. Se colocó cada organizaron en dos tablas y una gráfica. En la primera
frasco a cada una de las siguientes temperaturas 0, 25 tabla, se colocaron los mL de NaOH empleados en las
y 40°C. Se dejaron reposar 36 horas y posteriormente titulaciones de cada semilla a las diferentes
se quitaron los saquitos de las semillas temperaturas. Debido a que se realizaron las
cuidadosamente. Se tomaron alícuotas de 10mL de titulaciones por duplicado, se obtuvo el valor promedio
NaOH, y se añadieron 5mL de BaCl2 y posteriormente para cada condición. La segunda tabla incluye también
3 gotas de fenolftaleína. Se tituló con HCl 0.2N, hasta una clasificación de temperaturas y semillas, pero con
que se presentó vire del indicador. Se repitió la titulación los mg de CO2 obtenidos en cada caso y de esta deriva
con cada frasco y anotaron los resultados en la bitácora. una gráfica en la cual puede apreciarse mejor la
variación de los resultados de cada semilla. Estos
Finalmente, se realizaron los cálculos necesarios para valores finales se obtuvieron mediante la fórmula:
conocer el CO2 atrapado.
(𝐷)(𝑁)(22) = 𝑚𝑔 𝑑𝑒 𝐶𝑂2
Diagrama de trabajo.
Ecuación 1. Para el cálculo de los mg de CO2 obtenidos.
En la cual: 2. Frijol 4.4 11 5.5
negro
𝐷 = 𝐷𝑖𝑓𝑒𝑟𝑒𝑛𝑐𝑖𝑎 𝑒𝑛 𝑙𝑎 𝑐𝑎𝑛𝑡𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒 𝐻𝐶𝐿 𝑔𝑎𝑠𝑡𝑎𝑑𝑜 3. Alubias 20.9 30.8 52.8
4. Lentejas 13.2 58.3 18.7
𝑁 = 𝑁𝑜𝑟𝑚𝑎𝑙𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒𝑙 á𝑐𝑖𝑑𝑜
5. Garbanzo 1.1 8.8 23.1
22 = 𝑃𝑒𝑠𝑜 𝑒𝑞𝑢𝑖𝑣𝑎𝑙𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑑𝑒𝑙 𝐶𝑂2 6. Maíz 5.5 3.3 2.2
7. Frijol 3.3 13.2 29.7
Resultados. De acuerdo con los resultados obtenidos,
negro
se observó en la tabla 1 que las alubias fueron las que
mostraron un cambio más notorio en la titulación ya que,
conforme aumentó la temperatura, disminuyó la Gráfica 1. Comparación de mg de CO2 obtenidos en las
cantidad de ácido empleado. Por el contrario, el maíz diferentes semillas empleadas
palomero tuvo a los 40°C un gasto muy parecido al
control y a los 0°C un gasto menor, lo que nos dice que, Maíz palomero Frijol negro Alubias
para esta semilla, la respiración se dio mejor a bajas
temperaturas, lo cual también sucede con el maíz del Lentejas Garbanzo Maíz
equipo 6. Frijol negro2
Estos datos se confirman en la tabla 2 con el cálculo de

58.3

52.8
CO2 obtenido que también nos muestra los valores más
altos para las alubias en las tres temperaturas y también
hace evidente lo que se analizó con la Tabla 1 con el

30.8

29.7
maíz ya que, podemos observar los valores de CO 2

23.1
20.9

18.7
efectivamente en la temperatura más baja.

13.2

13.2
9.9

11

8.8
5.5

5.5

5.5
Después de estos datos que se observan como los más
4.4

3.3

3.3

3.3

2.2
relevantes, el resto de las semillas empleadas dan 1.1
resultados parecidos a los de las alubias, pero en 0° C 25° C 40 °C
diferentes rangos.
Tabla 1. mL de NaOH empleados en las titulaciones Discusión. En esta práctica se buscó como propósito
comprobar y calcular mediante un modelo sencillo,
Equipo Control (ml) 0° C (ml)
elaborado en clase, la cantidad de CO2 producido por
1 2 ⨱ 1 2 ⨱
1. Maíz 8.1 8.2 8.15 7.4 8.0 7.7 las semillas vegetales durante la respiración celular, así
palomero como la influencia que tiene la variación de la
2. Frijol negro 8.3 8.6 8.4 8.4 8.0 8.2 temperatura en el sistema y, por lo tanto, en la
3. Alubias 9.3 9.1 9.2 8.1 8.4 8.25 respiración celular. En algunos casos, el aumento de la
4. Lentejas 9.3 9.2 9.25 10.0 9.7 9.85 temperatura favoreció la respiración celular y se
5.Garbanzo 10.0 9.4 9.7 9.6 9.7 9.65
6. Maíz 8.8 8.7 8.75 9.0 9.0 9.0
observó un aumento en los mg de CO2, pero también
7. Frijol negro 9.5 8.7 9.1 8.9 9.0 8.95 logramos observar el efecto contrario, así como el caso
en específico de una semilla que en todas las
Equipo Ambiente 25° C (ml) 40° C (ml temperaturas presentó la mayor cantidad de CO2
1 2 ⨱ 1 2 ⨱ obtenido, observándose que, sin importar las
1. Maíz 8.5 8.3 8.4 8.0 8.0 8.0
palomero
condiciones, esta llevó a cabo su respiración celular.
2. Frijol negro 7.8 8.0 7.9 8.0 8.3 8.15 Estos procesos se comprobaron mediante titulaciones
3. Alubias 7.6 8.1 7.8 6.7 7.0 6.8 ácido-base con indicador de fenolftaleína para
4. Lentejas 6.0 7.2 6.6 8.4 8.4 8.4 evidenciar cuando la solución extraída (NaOH) que se
5. Garbanzo 9.2 9.4 9.3 8.6 8.7 8.65 combinó con el CO2 perdía su basicidad provocando la
6. Maíz 8.9 8.9 8.9 9.0 8.7 8.85
desaparición del color. Por otro lado, antes de cada
7. Frijol negro 9.1 8.0 8.5 7.5 8.0 7.75
titulación, se utilizó Cloruro de Bario para precipitar el
gas obtenido. De acuerdo con las siguientes
reacciones:
Tabla 2. mg de CO2 obtenidos

Equipo mg CO2
0° C 25° C 40° C
1. Maíz 9.9 5.5 3.3
palomero
 2𝑁𝑎𝑂𝐻 + 𝐶𝑂2 → 𝑁𝑎2 𝐶𝑂3 + 𝐻2 𝑂
Reacción 1. Interacción del Hidróxido de Sodio con el producto de
la respiración.
𝐵𝑎𝐶𝑙2 + 𝑁𝑎2 𝐶𝑂3 → 𝐵𝑎𝐶𝑂3 + 2𝑁𝑎𝐶𝑙
Reacción 2. Precipitación del Dióxido de Carbono a través del
Cloruro de Bario.
Las semillas pueden comenzar a germinar luego de que
la dormancia cesa y las condiciones ambientales
resultan satisfactorias. El primer paso en la germinación
es la captación de agua, llamada imbibición (de imbibe,
“beber”) … A medida que la semilla capta el agua,
experimenta cambios metabólicos: las enzimas son
activadas por la hidratación, el RNA y luego las
proteínas son sintetizadas, de modo que se incrementa
la tasa de respiración celular y otras vías metabólicas
son activadas. (Sadava, 2009) Tal como nos menciona
el dato anterior, la germinación y, por lo tanto, la
respiración celular de las semillas se activa desde que
estas empiezan el proceso de captación de agua razón
por la cual, para la realización de la práctica
necesitamos que nuestras semillas estuvieran
previamente remojadas y con esto poder activar el
proceso para al finalizar, cuantificar nuestros
resultados.
El proceso químico mediante el cual se libera la energía
de un carbohidrato o azúcar es la oxidación y se
denomina respiración celular. Es importante saber que
los procesos de la respiración celular pueden ocurrir
tanto en presencia de oxígeno como en su ausencia. En
el primer caso, la respiración celular recibe el nombre
de respiración aérobica; en el segundo, respiración
anaeróbica. (De Abate, 1999) Apoyándonos en esta
información, procedimos a realizar el modelo que nos
ayudaría a comprobarlo y para esto, se colocaron los
saquitos con las porciones de las semillas remojadas en
frascos reciclados de jugos, productos como: café,
mayonesa, entre otros, que al taparse no permitieran la
posible salida del gas producido y evitar que pudieran
verse afectados nuestros resultados, lo cual pudo
suceder con nuestro equipo (equipo 2) ya que, como
puede apreciarse en las tablas 1 y 2 de resultados,
fuimos dos equipos los que emplearon frijol negro en el
experimento, pero en nuestro caso, los mg de CO 2
calculados no coincidieron con la bibliografía a
diferencia del equipo 7. El mismo caso se observó con
las lentejas que presentaron mayor cantidad de CO2 a
25° C que a 40° C, lo cual pudo deberse a la fuga que
se mencionó o, por otro lado, un caso particular en dicha
semilla en la cual, se lleva a cabo mejor la respiración a
temperatura ambiente que a temperaturas altas.
Uno de los factores abióticos más significativos entre los
que afectan a la tasa respiratoria es la temperatura.
Independientemente de la tasa absoluta de respiración,
los incrementos de la temperatura generan incrementos
exponenciales de la respiración. (Ribas, 2006) Tal como
se revisó también en la introducción de la práctica, la
temperatura es uno de los factores que pueden afectar
la respiración celular. La bibliografía nos dice que
conforme aumenta la temperatura, aumenta la
respiración, pero al comparar con nuestros resultados,
podemos observar que hubo casos en los que no se
cumplió dicha información, tal es el caso de maíz que
como maíz palomero y como granos de maíz sin
procesar, la respiración se favoreció al lado contrario ya
que, al cuantificar los mg de CO2 se observó que la
cantidad más alta se dio en los 0°C y conforme esta
subía, la respiración bajaba de acuerdo a lo obtenido en
las titulaciones. Por otro lado, en los casos en los que
más se notó una comprobación de los datos fue en el
del garbanzo que tuvo un aumento significativo y que sí
era directamente proporcional con su temperatura. Por
último, el caso más destacable fue el de las alubias ya
que en estas, sin importar la temperatura a la que se
encontraban, la respiración se llevó a cabo con
resultados muy altos. Sí se observó un aumento
significativo de una temperatura a otra, pero de todas
las semillas fue la que presentó los valores más altos en
todos los frascos empleados para la prueba.
Cuestionario.
1.- Definir y explicar el concepto de coeficiente
respiratorio.
R= es el ratio o relación que existe entre el volumen de
dióxido de carbono (CO2) que un organismo produce y
el volumen de oxígeno (O2) que consume. Se trata de
un parámetro que permite conocer el tipo de
metabolismo llevado a cabo por un organismo mediante
la medición de los gases ventilados por el individuo
durante el proceso de inhalación - exhalación,
empleando para ello una cámara metabólica, cámara
calorimétrica o también conocidad como cámara de
Atwater (Muller, 2008).
2.- a). ¿Cómo se calcula?, b). ¿Cuál es su utilidad
práctica?
a). R= El cociente respiratorio se calcula dividiendo el
volumen de CO2 que se desprende y el volumen de
O2 que se consume:
𝑉𝐶
𝐶𝑅 =
𝑉𝑂
 CR es el cociente respiratorio
 VC es el volumen de CO2 producido
 VO es el volumen de O2 consumido
b). R= El C.R permite conocer las características del
esfuerzo llevado a cabo a nivel metabólico, o lo que es
lo mismo, la tasa metabólica basal. En disciplinas
deportivas es útil para establecer si el ejercicio realizado
durante la práctica de un deporte es de tipo aeróbico o
anaeróbico.
Dado que el hecho de que un ejercicio sea anaeróbico
o aeróbico depende, a su vez, de tipo de vía energética
empleada, esto puede indicar el tipo de sustancias que
el organismo está empleando u oxidando como
"combustible" (grasas, glucosa o proteínas), para la
obtención de energía (Mathews, et al, 2013).
Conclusiones. Se logró cuantificar la cantidad de CO2
producido por todos los tipos de semillas durante su
respiración celular, así como observar el papel de la
temperatura en este proceso y como puede alterarlo
directamente, pero con algunos casos particulares de
ciertas semillas que fueron afectados a la inversa u
otras de las que obtuvieron resultados combinados, con
un aumento o descenso que no fue proporcional. La
semilla que mejor nos ayudó a cumplir los objetivos y
comprender el proceso fueron las alubias. Se concluye
que, aunque la respiración celular es igual en las
semillas, el efecto de la temperatura puede variar
dependiendo la planta.
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