El tipo de aislamiento tanto de los equipos como el diseño en la configuración de las
barras afecta básicamente a todos los temas de seguridad, análisis de fallas eléctricas y la naturaleza de la propia instalación. Las subestaciones aisladas en aire son tradicionalmente las más utilizadas, están tienen un tamaño más grande en los dispositivos y barras resultan mucho mayores en conjunto. Con lo anteriormente dicho podemos concluir que por su estructura y características las subestaciones aisladas en aire no son tan prácticas de aplicar y utilizar con respecto a las aisladas en gas (SF6) por el gran consumo en todos sus aspectos.
Recomendaciones:
Siempre disponer de los espacios de una subestación de la forma más eficiente y
segura, no reducir los espacios mínimos requeridos y descritos según las normativas, con el fin de reducir costos con la implementación de equipos tradicionales aislados en aire AIS. Al construirse una subestación o realizar un ampliación, se debe tener en consideración que el equipo a utilizarse sea de un solo fabricante de esta forma no se tendrá incompatibilidad en los equipos ni problemas de diseño por falta de información del equipo original. Se recomienda que la subestación sea del tipo interior para darle mayor tiempo de vida a la subestación ya que el medio que la rodea es muy agresivo (por todos los agentes naturales) que afectan a las subestaciones aisladas por aire (AIS).