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Cusco
Facultad de Ingeniería de Procesos
Escuela Profesional de Ingeniería Química
ALCOHOLISMO
ASIGNATURA:
ETICA PROFECIONAL PARA EL INGENIERO QUIMICO
PRESENTADO POR:
LICUOANA SOLORZANO NAYSHA (140916)
MAMANI SANTANDER MARIBEL (121505)
OVBIEDO QUISPE ANNY DAYANA (140927)
SALGUERO HUAHUASONCCO ELIANA (155491)
SANCHEZ ANDIA NURIA (142040)
SEMESTRE:
2019-II
Cusco, 2019
Contenido
I. INTRODUCCION ............................................................................................................... 4
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
2.9.1. Dependiente alcohólico complicado en fase final ............................................... 10
BIBLIOGRAFIA ...................................................................................................................... 12
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
I. INTRODUCCION
El consumo de bebidas alcohólicas ha sido una parte integral de muchas culturas durante
miles de años. Durante la industrialización moderna, las bebidas alcohólicas se convirtieron en
un producto de mercado que estaba disponible en todas las estaciones del año.
Los adolescentes son vulnerables a los efectos nocivos del alcohol. El consumo de alcohol
a edades tempranas está asociado a un mayor riesgo de desarrollar alcoholismo y sufrir lesiones
físicas que en algunos casos ocasionan la muerte.
Durante el 2012, el consumo de alcohol en el continente americano superó al promedio
mundial. Además, Perú es unos de los países de América con un gran consumo de alcohol.
En nuestro país el consumo de alcohol es un grave problema de salud pública, con impacto
en la salud mental, educación e ingreso económico familiar, especialmente entre la población
de adolescentes y adultos jóvenes.
El uso nocivo de alcohol está considerado como un factor de riesgo en el padecimiento de
algún tipo de cáncer, enfermedades cardiovasculares y cirrosis hepática.
Chafetz:
“El hombre es libre de escoger entre beber o no alcohol… pero si elige lo primero
adquiere la responsabilidad de no dañarse y de no dañar a la sociedad”.
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
II. MARCO TEORICO
2.1. ALCOHOL
La palabra alcohol, derivada del vocablo árabe alkune, significa esencia y su uso como
bebida comenzó siendo parte de ritos religiosos en comunidades primitivas, puesto que luego
de su ingestión sentían que podían acercarse y hablar con los dioses. (Farreras, 2000)
El alcohol es una de las drogas más consumidas en nuestra sociedad, muchas personas
acompañan sus actividades sociales con el alcohol y es aceptado como un acompañamiento
placentero de las relaciones y los encuentros sociales. Esta percepción del alcohol ha
contribuido a extender su consumo, no sólo entre los adultos, sino también entre los jóvenes y
los adolescentes, que se inician en edades muy tempranas.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) es considerado como una droga, pues
cumple con los criterios que definen a una sustancia como tal: genera adicción, provoca
tolerancia y su ausencia provoca el síndrome de abstinencia.
2.2. ALCOHOLISMO
El alcoholismo es una enfermedad crónica o desorden del comportamiento que se
manifiesta por la ingestión repetida de bebidas alcohólicas, en cantidades que exceden los
límites dietéticos y sociales aceptados por la comunidad, que causan perjuicio a la salud del
bebedor, a sus relaciones con otras personas y finalmente a su actividad económica (Fernández,
1980). El alcoholismo es la dependencia del alcohol.
Según Jellineck, el alcoholismo es todo uso de bebida alcohólica que cause daño de
cualquier tipo al individuo, a la sociedad o a las dos. (Farreras, 2000)
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
El concepto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dice que es un trastorno
conductual crónico manifestado por repetidas ingestas de alcohol respecto a las normas
dietéticas y de la sociedad y que acaban interfiriendo con la salud o las funciones
socioeconómicas del bebedor (Farreras, 2000).La ingestión diaria de alcohol es superior a 50
gramos en la mujer y 70 gramos en el hombre.
2.2.1. Síntomas
2.2.1.1.Ansiedad
Una fuerte necesidad o compulsión de beber.
2.2.1.2.Pérdida de control
La incapacidad propia para limitar el consumo del alcohol en cualquier situación.
2.2.1.3.Dependencia física
Síntomas de abstinencia como náuseas, sudores, temblores y ansiedad, se presentan
cuando se interrumpe el consumo de alcohol después de un período en que se bebió en
exceso.
Una dependencia grave puede llevar a la persona a presentar síntomas de
abstinencia que ponen en peligro su vida, entre los cuales se encuentran las
convulsiones, que empiezan entre ocho y doce horas después de la última bebida. El
Delirium tremens (D.T.´s) comienza de tres a cuatro días después cuando la persona
presenta una agitación extrema, tiembla, alucina y pierde contacto con la realidad.
2.2.1.4.Tolerancia
La necesidad de beber grandes cantidades de alcohol para sentirse bien.
Alguien que bebe cada vez más, a menudo dirá que puede dejar de hacerlo en
cualquier momento que lo decida; sólo que nunca “decide” hacerlo. El alcoholismo no
es un destino, sino un trayecto, un largo camino de deterioro durante el cual la vida se
vuelve cada vez más difícil.
2.7. TRATAMIENTO
El año de 1935 marca un parte aguas en el abordaje de los alcohólicos con la fundación de
Alcohólicos Anónimos (AA).
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
unas buenas capacidades para las relaciones sociales o habilidades sociales (Tomlinson,
Cummins, & Brown, 2013)
El haber sufrido algún acontecimiento traumático en la infancia también hace que
aumente considerablemente el riesgo de consumo de sustancias como el alcohol, puesto que
parece que el uso de sustancias en aquellas personas que han sufrido algún tipo de
experiencia adversa se utilizaría como automedicación, como forma de afrontar las
consecuencias derivadas de esas vivencias traumáticas y superar los sentimientos de pánico,
depresión, estrés, ansiedad o dolor asociados (Huang et al., 2011).
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
2.9.4. Dependiente alcohólico sin complicaciones
Se establece la dependencia física cuya manifestación clínica está dada por la aparición
en períodos de abstinencia de temblores severos, nerviosidad, insomnio, cefalea y
sudoración. Pueden aparecer diarreas, subsaltos musculares o cuadros de delirium
subagudo.
2.9.5. Dependiente alcohólico complicado
Además de lo anterior presenta complicaciones psíquicas como el delirium tremens, la
alucinosis alcohólica y la psicosis de Korsakov, o aparecen complicaciones somáticas como
polineuropatía, esteatosis hepática, cirrosis hepática, cardiomiopatías y gastritis.
2.9.1. Dependiente alcohólico complicado en fase final
Es notable el deterioro físico y psíquico, y su comportamiento social. Se reduce la
tolerancia al tóxico y la aparición ocasional de cuadros convulsivos. Los pacientes
presentan severos cuadros de desnutrición, puede aparecer cáncer del subsistema digestivo,
entre otras.
2.10. CONCECUENCIAS
Problemas hepáticos de todo tipo (p. ej. cirrosis) al obligar al hígado a trabajar
constantemente.
Al encontrarse habitualmente un exceso de alcohol circulando en sangre, se genera
un deterioro del Sistema Nervioso Central, provocando temblores, lentitud en el
pensamiento, amnesia o falta de memoria, alteraciones en el estado de ánimo, mareos
y vértigos, entre otros síntomas.
Puede hacer también que el corazón sufra de insuficiencia cardiaca: palpitaciones,
dificultad para respirar, hinchazón en piernas, abdomen o alrededor de los ojos,
dificultad para realizar ejercicios y esfuerzo físico en general, taquicardia, infartos,
etc.
En el estómago se suelen irritar las vías digestivas, provocando gastritis, así como la
secreción de ácidos que provocan úlceras.
En el páncreas, el alcohol puede producir inflamación cuyos efectos son: náuseas,
vómitos, fiebre, malestar general y mucho dolor.
El alcohol también puede provocar desnutrición cuando afecta al intestino debido a
trastornos en la absorción de las vitaminas, los glúcidos y las grasas.
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
Pueden darse trastornos de ansiedad, de la personalidad, aumento de la agresividad,
irritabilidad, puede provocar alucinaciones, amnesia, abuso de otras drogas,
desencadenar enfermedades mentales graves, etc.
Suele “enrarecerse” el ambiente en casa, se dan más conflictos con la pareja y juega
un importante papel en la violencia familiar, malos tratos a la mujer o marido e hijos,
a los ancianos.
La Violencia, especialmente contra las mujeres es un problema social, relacionado
con el machismo. Frecuentemente esto se asocia o se desencadena con la bebida.
Provoca absentismo laboral y disminución del rendimiento en el trabajo, lo que
conlleva a su vez pérdidas económicas y despidos.
La sociedad rechaza a las personas alcohólicas al no considerarlas enfermas y tener
una visión estereotipada de ellas.
Mortalidad masculina, está asociada al abuso del alcohol: muerte por accidentes 3
veces más frecuente, muerte por Suicidio 7 veces más frecuente y muerte por
agresiones 10 veces más frecuente.
Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
III. CONCLUSIONES
Un Cambio Cultural respecto a la relación que existe con el alcohol que incluya evitar
su consumo en la población adolescente.
Una Profesionalización creciente del tratamiento de las Adicciones con criterios de
eficacia y de calidad.
El Alcoholismo es una enfermedad, con factores psicosociales y ambientales, que
influyen sobre su desarrollo y manifestaciones. La enfermedad es frecuentemente
progresiva y fatal. Se caracteriza por presentar en forma continua o periódica: pérdida
de control sobre la bebida, uso del alcohol a pesar de sus consecuencias, y distorsiones
en el pensamiento, principalmente negación.
BIBLIOGRAFIA
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Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”
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Wilks, J., Callan, V. J., & Austin, D. A. (1989). Parent, peer and personal determinants of
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Jellinek:
“El alcoholismo no está en la botella, sino en el hombre”