John Millington Synge: El playboy del mundo occidental
Idioma original: inglés Título original: The Playboy of the Western World Año de estreno: 1907 Valoración: Muy recomendable
La primera vez que El playboy del mundo occidental se representó en el
Abbey Theater de Dublín, causó tanta indignación entre el público (por inmoral, por apolítica, y por representar a los irlandeses como brutos, borrachos y tontos y a las irlandesas como "un montón de hembras paseándose en bragas") que tuvo que venir la policía a mantener el orden. Solo esta anécdota ya da una idea del equívoco lugar que ocupa Synge en el canon literario irlandés de la época: impulsor, junto con Yeats y Lady Gregory, del Abbey Theatre y de la renovación estilística del teatro de comienzos de siglo, pero denostado por los nacionalistas por su actitud irónica, desmitificadora y anticlerical.
En The playboy, considerada su obra maestra, Synge nos sitúa, como en
casi todas sus obras, en el ambiente rural del oeste de Irlanda; pero no lo hace para idealizarlo ni llenarlo de pastores bucólicos o valientes guerreros por la libertad, sino para hablarnos de Christy Mahon, un pobre hombre que dice haber matado a su padre y que, precisamente por eso, se convierte en el ideal amoroso de todas las muchachas del pueblo, incluida Pegeen, la feroz tabernera, que iba a casarse -al parecer sin mucha vocación- con el sinsagre Shawn Keogh.
Lo que sigue a este planteamiento tiene algo de vodevil: muchachas que
se lanzan a los brazos del "héroe", el padre muerto que reaparece, la viuda Quinn que intenta pescar a río revuelto... Y sobre todo, la historia de amor entre Christy y Pegeen, transmitida a través de un lenguaje poético y humorístico al mismo tiempo (de manera que no sabemos si emocionarnos con los personajes o reírnos de su estupidez). No me extraña que a los nacionalistas irlandeses no les gustase la obra, porque no deja en buen lugar a sus compatriotas, y porque elude cualquier referencia a la situación política o histórica de la época; pero para el resto del mundo, El playboy... es una obra divertida, cruel y desinhibida, sin ninguna relación con identidades ni proyectos nacionales.