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1) La realidad nacional y su importancia.

Una visión general del Perú


¿Por qué es importante conocer nuestra realidad nacional?

Porque nos va a permitir a nosotros que formamos la nación, saber que recursos naturales,
minerales, vegetales y petrolíferos tenemos, tener un ordenamiento jurídico y nuestras
manifestaciones culturales como la danza o el folklore; todo esto con el objetivo de que el estado
pueda proponerse objetivos, proyectos de estado para la explotación de nuestros recursos como
la extracción, la agricultura, el turismo, la minería, la industria y generar más empleo en la
población y mejore su calidad de vida.
La REALIDAD NACIONAL incluye al hombre y su entorno natural y artificial, la diversidad cultural y
sus potencialidades económicas y sociales, nos permite diseñar objetivos, políticas, estrategias y
planes para afrontar las necesidades y obstáculos internos; y para negociar, disuadir, y transar con
otros Estados.

Es objetiva porque, trata de elementos tangibles como los recursos económicos, sociales, situación
política, estado de desarrollo, de un determinado país, etc. Es subjetiva porque, su concepción
depende de las ideologías predominantes en cada época histórica que nos toca vivir (ideologías
neoliberales, marxistas,etc). Es multirrelacionada porque, se trata de un sistema interno y externo,
no está aislada de la globalización, del comercio nacional externo y/o interno. Es dinámica
porque, cambia en el espacio y tiempo histórico, actualmente, el Perú ocupa el 6º.lugar con mayor
crecimiento en el Mundo; según el Banco Mundial el Perú es el 5º. País en el Mundo con mayor
crecimiento de exportaciones y su crecimiento está basado en el consumo interno.

El Análisis de la REALIDAD NACIONAL nos sirve para identificar nuestros problemas de desarrollo y
seguridad, identificar obstáculos y limitaciones, evaluar capacidades, establecer políticas y
estrategias, etc.
En síntesis, la REALIDAD NACIONAL es el conjunto de los elementos que componen nuestro poder
nacional y potencial nacional, y está engarzada al entorno externo y a sus fuentes internas.
Conocerla adecuadamente nos de la posibilidad de gobernar, es decir, de llevar adelante
estrategias adecuadas de desarrollo, seguridad y bienestar nacional con miras al BIEN COMUN.

2) La sociedad peruana y sus características. Los grupos sociales en el Perú. La población


peruana.
Etnicidad

La mayoría de los peruanos son "mestizos", un término que normalmente se refiere a una mezcla
de amerindios y peruanos de ascendencia europea. Los peruanos de ascendencia europea
representan aproximadamente el 15% de la población. Amerindios puros conforman un gran
segmento de la población, el 35%. Y la mayoría de las comunidades amerindias se encuentran en
los Andes del sur, todavía hay una gran parte que se encuentra en el sur y la costa central debido a
la inmigración masiva de los agricultores del sur de las ciudades andinas a la ciudad de Lima. Hay
también un número menor de personas de origen africano, japonés y chino.
Perú tiene la segunda mayor población de personas de ascendencia japonesa en América Latina
después de Brasil. Muchos de ellos viajaron a Japón en los años 80 debido a que la situación
económica en el Perú había empeorado. Muchos volvieron después de que el presidente peruano
Alberto Fujimori desarrolló la economía.
Por otro lado, una gran comunidad de personas de origen chino viven en Lima, donde los
restaurantes chinos (chifas) son muy frecuentes. En contraste con los japoneses, los chinos se
casan entre sí mucho más. Asiáticos puros en Perú constituyen el 3% de la población, el mayor
porcentaje que cualquier otra nación latinoamericana.
Alrededor del 2% de los peruanos son de pura ascendencia africana, y la mayoría de ellos viven en
ciudades costeras al sur de Lima, como en la Región Ica, las ciudades como Cañete, Chincha, Ica,
Nazca y Acari.
Grupos Indígenas
Los dos principales grupos étnicos indígenas son las diversas comunidades quechua hablantes,
seguidas de cerca por el aymara, así como varias decenas de pequeñas tribus amerindias étnicas
dispersas por todo el país más allá de la Cordillera de los Andes y en la cuenca del Amazonas.

Religión

La mayoría de los peruanos son cristianos católicos (más del 75% de la población), aunque sólo
dos tercios participan en la liturgia y los servicios. La religión predominante en Perú, se ha
mantenido con una poderosa influencia en los asuntos del Estado y en las actividades diarias
después de 460 años. Las actividades de la Iglesia y de personal son, por supuesto, centradas en
Lima, y el Palacio Arzobispal se encuentra simbólicamente ubicado al lado este de la Plaza de
Armas.
Estos días, los sacerdotes y obispos de la parroquia desempeñan funciones importantes en los
asuntos locales. Los rituales de la religión católica, los principios morales y los valores están
profundamente arraigados en la cultura peruana.
Catolicismo y la Religiosidad Nativa
Cuando los españoles conquistaron el Perú, no sólo trajeron su religión, sino que también
encontraron una civilización con fuertes tradiciones culturales nativas. Los habitantes nativos del
Perú mantenían firmes conceptos animistas acerca de los espíritus y las fuerzas que están
presentes en entornos naturales. Los Incas y otros pueblos andinos veneraban el Inti (Dio Sol), la
Pachamama (madre tierra), y otros dioses.
En la conversión del pueblo al catolicismo, los españoles siguieron una táctica deliberada de
sincretismo, donde sustituyeron deidades locales por santos cristianos y utilizaron a menudo la
ubicación del templo como el establecimiento de las iglesias.
Como resultado de ello, el catolicismo que las comunidades están viviendo es muy diferente al de
otros lugares del mundo. Las poblaciones nativas mantienen sus nociones acerca de los espíritus y
las fuerzas que se encuentran en el mundo natural, como las grandes montañas nevadas donde los
apus (señores de los lugares sagrados) se encuentran eternamente. Muchos lugares son vistos
como inherentemente peligrosos, y es creído que emanan aires o esencias que pueden causar
enfermedad, y los pobladores se acercan a estos lugares con cuidado.
Por otra parte, las celebraciones anuales de santos patronos suelen coincidir con importantes
períodos de cosecha y son claramente interpretaciones pre conquista de los tiempos de cosecha
que luego fueron disfrazadas por celebraciones católicas.
Las principales figuras religiosas son:
 El Señor de los Milagros
 Santa Rosa de Lim)
 San Martin de Porres
Otras Religiones
Recientemente diversas iglesias han aparecido, y podemos ver que la población peruana es
todavía muy religiosa y que el porcentaje de ateos y agnósticos declarados es muy bajo.
Por ejemplo, en el Perú hay iglesias protestantes que son el fruto de la labor de misioneros
norteamericanos y europeos. También existen: Testigos de Jehová, Mormones, Adventistas,
Budistas, Musulmanes, Hindúes y Hare Krishnas.

Festividades

Las Fiestas populares son el producto de las tradiciones y leyendas de cada pueblo. Estas
celebraciones reúnen música, danzas, comidas y bebidas típicas. Además de las celebraciones
religiosas como la Navidad, Corpus Christi o la Semana Santa, hay otras que expresan el
sincretismo de las creencias de los pueblos indígenas con el cristianismo. Por ejemplo, existe la
Alasitas (una palabra aymara que, según algunos estudiosos de personas, significaría
«comprame») que combina la artesanía y la feria de miniaturas con bailes, comidas y una misa.
Otro ejemplo es la peregrinación del Qoyllur Rit'i (Cuzco), que reúne el antiguo culto a los apus
(divinidades tutelares de las montañas), con una peregrinación a un santuario cristiano en una
larga caminata a la cima de una montaña, de más de 5.000 metros sobre el nivel del mar, que está
cubierta con nieve. Más de 6000 personas hacen de este viaje cada año, aunque no todos ellos
pueden regresar.
En estas fiestas populares, es muy común el consumo de alcohol y mucha comida. Por lo general,
cada ciudad tiene sus propias tradiciones y se preparan con varios meses de anticipación para
celebrar sus fiestas anuales. Para estas actividades, hay una persona que es "responsable" de
organizar el evento y es llamada "El Padrino", usualmente se gastar mucho dinero ofreciendo
deliciosa comida y alcohol a todos los habitantes y también a los huéspedes. Ser parte de una de
estas fiestas populares "Fiestas Patronales" es una experiencia muy memorable ya que durante
unos días, todo es felicidad, comer muy deliciosa comida, beber mucho y, por supuesto, bailar al
ritmo de la banda o la música local.
Los mejores carnavales del Perú se encuentran en:
 Cajamarca
 Puno
 Ayacucho

Costumbres

Estos son algunos aspectos acerca de las costumbres peruanas. Es mejor conocer a la gente de
este país y aprender a apreciar sus características propias que pueden o no ser diferentes a la
suya.
Please know that:

 Generalmente se tutea a la gente, salvo aquellos que tienen un alto nivel social o bien las personas
mayores.
 El beso es obligado entre entre hombre y mujer: una vez, en la mejilla derecha. El beso no es
común entre hombres.
 Siempre respete a los representantes de la ley (motociclistas, agentes de policía). Uno se dirige a
un policía diciéndole “Jefe”.
 Hacerse llamar El Gringo no tiene nada de peyorativo y no tiene ninguna connotación americana.
 Si está en un restaurante y su pedido es mayor que su apetito, quizás el mozo le propondrá
envolver el plato para llevárselo; es normal aquí. Olvide su orgullo y acepte para dárselo a algún
necesitado en la calle.
 Si un peruano le da la mano, es que él lo aprecia. Si le da grandes abrazos, o es un primo o sino le
tiene mucha estima.
 El peruano es muy "directo". Hable siempre en "primer grado", olvidando el lado negativo; "no está
mal" será entendido como "está casi mal". "No está lejos" deberá decirse simplemente "está cerca".
 Muchos vendedores o mendigos están en las calles, generalmente deseando una moneda a
cambio de cualquier servicio o artículo (limpiar el parabrisas, vender un caramelo). Ningún consejo
que darle, solamente debe saber que siempre es para comer.
 Cuando tomes un taxi, déjate guiar por tus propios instintos, si sientes que el taxista no es una
buena persona, elija otro. Mientras que en el taxi cierra la puerta con seguro y cierra la ventana.
Además, oculta tu bolso o cartera.
 Generalmente se da propina en un restaurante o un bar, aún si está incluida en la cuenta. Prevea,
si lo desea, 5 a 10%.
 Incluso si tienes alrededor de 20 Polos que dicen "No drogas" en el hogar, acepta que la gente del
país mastica hojas de coca. Miralo como parte de la cultura social y con un componente ritual.
Además, ten en cuenta que: las hojas de coca no son cocaína y que las Hojas de Coca son legales.
Puedes probar chacchar (masticar) la Hoja de Coca a manera de experimentar la cultura. Si no te
gusta masticarlas, intenta probar una infusión de "mate de hojas de coca" , el cual es también muy
eficaz contra el mal de altura.
 Fotografiar a los indios es raramente apreciado; en efecto, la mayoría piensa que la foto les saca el
alma. Entonces, pídale autorización, a veces se la darán a cambio de una pequeña remuneración.
Claro que no estamos hablando de los indios muy bien vestidos, con una llama "con correa"
quienes están ahí sólo para eso.
 A diferencia de otros países, aquí no se celebra el día de Acción de Gracias, en cambio la Navidad
si tiene un fuerte significado en cuanto a que se reúne la familia el 24 en la noche (Nochebuena)
para esperar las 12 y abrazarse, felicitarse y darse regalos.
 El conducir un auto es un dolor de cabeza en Perú. Siempre es de manera defensiva.
 La mejor característica de los peruanos es que son: Trabajadores, amigables y gente feliz.
 La peor característica de los peruanos es que son: inpuntuales, conformistas y que les guste beber
mucho (no de manera general).
 La pasión de los peruanos es la comida y las festividades.
 Uno de los ingresos económicos más importantes del país es el turismo: aporta mucho dinero y un
poco de sueños. Aún cuando no compre nada, a veces a la gente le gustará conversar con usted
de su país, que la mayoría de ellos nunca conocerá. En todos los casos, usted será bien tratado
porque el peruano es de carácter jovial y acogedor.
 En términos generales no es recomendable comer de los kioskos callejeros, pero es un tema de
elección. Durante su estadía en Perú verá Kioskos que ofrecen comida y a la vista se aprecia que
no ha sido preparada con limpieza. Por otro lado, en distritos como Miraflores, Barranco, en
algunos lugares del centro de Lima, la comida que comercializan los Kioskos es muy típica,
deliciosa y no peligrosa para el estómago. Para saber discernir deberás utilizar tu criterio personal.
Aquí algunas de las cosas que hacen que los peruanos sentirse muy orgullosos:
Comida:
 Ceviche
 Papa a la Huancaina
 Lomo Saltado
Cosas que marcaron la historia:
 Independencia
 La guerra del Pacífico
 La lucha antiterrorista
Personajes que marcaron la historia:
 Tupac Amaru II
 Miguel Grau
 Ramón Castilla
Los monumentos más importantes:
 Machu Picchu
 Sacsayhuamán
 Las Líneas de Nazca
Símbolos de La ciudad:
 La Plaza de Armas
 El Palacio de Gobierno
 Centro Civico de Lima
La principal Zona Geográfica:
 Los Andes
 La Cuenca del Amazonas
 El Parque Nacional Manu
Las bebidas Nacionales:
 Inca Kola
 Chicha Morada
 Mate de Coca

Lenguaje

En el Perú, el idioma predominante es el español. Sin embargo, no es sorprendente encontrar


palabras no-europeas inmiscuirse constantemente en la conversación de cualquier peruano:
Cancha, por ejemplo, palabra Inca para "patio", sigue siendo comúnmente usada para referirse a la
mayoría de las zonas deportivas. También significa palomitas de maíz.
Chuma, es decir, sin gusto, o sin suficiente azúcar .
Otras palabras quechua: llama, cóndor, puma y pampa entre otras.
Tal vez lo más interesante es la gran riqueza del argot criollo tradicional utilizado con igual vigor en
todos los niveles de la sociedad. Este complejo discurso, es difícil de capturar sin casi la total
fluidez en español, algunas frases útiles:
Dandole la dirección a un taxista: "Alfonso de fresa" - Significa "de frente al fondo".
La palabra "Guarda" - realmente significa "cuidado/Ten cuidado"
La frase "Un Toque" - significa "un momento/espera un momento".
Además, no utilizar la palabra "indio", puede ser peyorativo ya que fue utilizado por los
conquistadores.
Otra palabra a tener cuidado es Cholo / Chola / Cholita. Esta palabra puede ser utilizada
cariñosamente entre peruanos (que es una denominación muy común para un niño, por ejemplo),
pero es ofensivo procedente de un forastero.

3) La conciencia nacional y la constitución de la identidad nacional. Raíces de la discriminación .

La sociedad peruana es estamentaria. Se construye como una


pirámide donde se montan los que tienen mayor poder sobre los que tienen
menos poder, y en la cúspide se asientan los blancos, varones, heterosexuales,
saludables y con dinero. Ésta es una tara del siglo XVIII según unos y del siglo
XVI según otros. Los estamentos se consolidan sobre la base de ingresos
económicos, pero, además, de simbología social. Quijano (1980) ya planteó el
problema de la dominación cultural en el Perú. Heller (1988) sugiere que las
sociedades premodernas son jerarquizadas. Pero añade que en este tipo de
sociedad pensar en la igualdad es imposible porque nadie se puede imaginar estar
en la posición del otro. Quizá por eso es que el «trepar» tiene las características
especiales que se encuentran en el Perú. «Cholear», eleva socialmente al que
tiene menos, por ejemplo, como sostiene Twanama. Puede ser que el que
«cholea» tenga pocos ingresos, mas el mero hecho de mostrar discriminación lo
afirma socialmente. En las clases altas ha surgido un fenómeno nuevo: el hablar
de los «caras de huaco» o de los «indígenas» con referencia a lo traicionero y de
mal olor. Éstas sí son las clases altas, blancas, ricas, etc. Ésta es la expresión del
Poder que se esconde detrás de la fachada según la cual en el Perú no hay
racismo. No «cholean» strictu senso. Digámoslo así: «cholear» se ha
proletarizado y la discriminación se ha sofisticado. De allí comienza el sistema
de discriminaciones hasta el piso de los excluidos, o dominados excluidos para
ser aún más exactos. El dominado excluido no tiene derecho a nada y provoca la
discriminación absoluta del resto de la sociedad. De este modo, por ejemplo, la
mujer quechuahablante es dejada de lado, los niños y niñas quechuahablantes son
dejados de lado, y más abajo están los ashaninca y las tribus de la selva. Y más
abajo aún, los ashaninca analfabetos, homosexuales, y así de manera escalonada
se desciende hasta el último círculo del infierno. La lógica de la administración
de la salud parece obedecer a la cúspide de la pirámide del Poder, que a su vez no
es quizá blanco si bien se conduce como si lo fuera. Y entonces los funcionarios
públicos hacen caer el peso de su ínfimo poder sobre cada uno de los pacientes
que llegan a una posta médica que ya fue discriminada por estar en zonas de
pobreza o extrema pobreza, quechuahablante, en la sierra, y que por lo tanto
reciben ingresos muy magros del gobierno central. En estos tiempos, una
operación de apéndice en Huancavelica en un hospital publico le cuesta al
paciente 500 soles.

Los prejuicios se materializan mediante acciones reales El principio de la


sobre personas reales, quizá sin tomar en cuenta que por discriminación es
el mero hecho de ser seres humanos tienen el derecho a fatal [...], aunque los
ser respetados, aunque estas personas tengan vidas que libertarios insistan
pueden valer cero en términos de productividad en que el derecho a
marginal. Ojalá la productividad de las personas les discriminar es un
confiriera la esencia de seres humanos. La propiedad derecho natural
tampoco da esa esencia. Por eso es esencia. Las porque el mercado
discrimina.
discusiones sobre el alma de los indios acabaron en el
siglo XVI, aunque actuemos todavía como si los blancos
o blanqueados tuvieran alma y el resto no importara. El principio de la
discriminación es fatal para estos fines, aunque los libertarios insistan en que el
derecho a discriminar es un derecho natural, porque el mercado discrimina. En
una sociedad plagada y trabada por las discriminaciones, es una inmoralidad,
insisto. Sea discriminación pública o privada. Y se ve acentuada en la lógica de
que el que más tiene, más puede, que rige hoy en día más que nunca, aunque
rigió siempre.
El otro lado de esta cultura es no expresar la realidad. En el mundo del siglo
XVIII la apariencia y lo simbólico de la condición social eran elementos como la
cortesía al extremo, ceder ante lo extranjero (siempre mejor, por blanco y por
extranjero), no decir que no jamás (porque es de mala educación), no preguntar
mucho (por no ofender), jamás decir lo que se piensa {por no delatarse). Esto
aparece claramente reflejado en las Tradiciones peruanas de Ricardo Palma.
Cuando esta actitud se traslada al mundo del siglo XXI, torna medio complicado
hacer negocios, por ejemplo. Traten de comprar una casa en Cusco y verán cómo
el precio muta cien veces, y a la hora de la firma se termina en que el vendedor
no vende, comprador cheque en mano y todo. Peor, hagan que un candidato sea
relativamente fiel a su discurso político. Jamás. Que alguien piense en el «interés
nacional». Nunca. Por último, mirar el mundo, tener una visión del mundo...
Imposible. Miramos el mundo sólo de costado y tras una tela. No hay un Instituto
de Relaciones Internacionales en un país de 23 millones de habitantes, con 4,000
Km de costa y cinco fronteras vivas, Y muchos han tratado de hacer eso. Es una
imposibilidad. Tener análisis internacionales interesantes en los medios,
imposible. Sólo los importados. Tener una posición negociadora. ¿Una posición?
Imposible, es de mala educación. Estas son taras que cuando las juntamos con los
sistemas de discriminación acaban en que somos una sociedad de descuartizados
entre el siglo XVIII y el XXI. Hemos entrado al siglo XXI con estas taras que
son tan insoportables como la brutalidad y la prepotencia con que los que no
tienen poder expresan el escaso poder que tienen (dieciséis soldados
descuartizando a dos estudiantes japoneses porque se pasaron un puesto de
vigilancia en la selva y no hablaban castellano, por ejemplo). Un chofer de combi
que voltea a la izquierda estando en el lado derecho de una avenida principal en
cualquier ciudad del país, igualmente abusa de su escaso poder (y es un peligro
público). Un guachimán... etc. En el siglo XVIII colonial no existía el respeto por
el otro, porque el «otro» no existía. Mientras en París se discutía la igualdad, la
fraternidad y la libertad, en las colonias ondeaba la bandera de los reinados
europeos, con toda la estupidez (parafraseando a Henrique Urbano) posible.

El nuevo Perú que emerge, con sus fragmentos, trae consigo la realidad de la
dispersión en beneficio de la globalización. El proceso de desindustrialización, la
reprimarización de las exportaciones, la autogeneración de empleo, la juventud
de la nueva población, las consecuencias de las migraciones de la sierra a la costa
y la selva de décadas anteriores, las consecuencias de la guerra interna de 1981 a
1992, la nueva y fuerte presencia de mujeres en la fuerza de trabajo, la
reaparición de epidemias son parte de lo nuevo. Algunos de los temas tienen un
amargo sabor a antiguo y olor a rancio. Tanto como el regreso de la pacatería (del
siglo XVIII) al poder político (hay que rezar el rosario, qué vergüenza) en
nombre de lo liberal. Los defensores de las políticas así llamadas liberales
afirman para el siglo XXI el poder perdido desde el siglo XVIII. Son unos
conservadores reaccionarios que están dispuestos a conferir a los prejuicios del
siglo XVIII patente de corso para gobernar mejor un país dividido. Todo esto en
nombre del individualismo.

Cuando la diplomacia económica no se


El siglo XVIII vive aún porque no
nos queremos y no estamos utiliza en beneficio del bien común y el
reconciliados con nuestras modelo de crecimiento da muestras de no
diferencias étnicas, sociales, ser distributivo, las cifras del PBI son
culturales, históricas, raciales y maquilladas y las estadísticas sociales están
geográficas. suplantadas, la realidad golpea a la puerta.
Para atender a esa realidad se constituyen
programas de focalización, de erradicación de la pobreza, o programas de lucha
contra la pobreza. O, mejor todavía, se actúa como si nada pasara. Carreteras y
escuelas resuelven el problema, siguiendo el lema del dictador Machado en las
elecciones cubanas de 1934. Sólo que no estamos en Cuba y tampoco en 1934.
La articulación del mercado interno mediante las carreteras es un requisito del
desarrollo, sin duda. Pero no es el único. La construcción de escuelas y postas
medicas es una demanda social. Una demanda mayor: escuelas equipadas, cuyos
maestros tengan un salario digno y los alumnos capacidad de estudiar, y postas
con medicamentos que mantengan la salud del cuerpo y no la esperanza perdida.

Para poder tener políticos modernos, primero hay que tener una apreciación
moderna de la política. Los peruanos no la tenemos, porque carecemos de una
visión moderna de nosotros mismos. El siglo XVIII vive aún porque no nos
queremos y no estamos reconciliados con nuestras diferencias étnicas, sociales,
culturales, históricas, raciales y geográficas.

1. La geografía y el género de la pobreza

El Perú es un país que vive de espaldas a su pasado


glorioso, del cual se enorgullece mostrando las ruinas de las culturas inca y
pre-incas. El pasado glorioso es la vergüenza del presente y lo que hay que
olvidar, cubrir, distorsionar, homogeneizar, y «blanquear». La geografía de ese
pasado glorioso está en la sierra: desde las ruinas apoteósicas de Machu Picchu y
Ollantaytambo hasta Chavín de Huántar. Ése es un pasado tan vergonzante en el
presente, que los departamentos más pobres del país son: Cajamarca,
Huancavelica, Apurímac, Amazonas, Huánuco, Puno, Cusco y Ayacucho. Salvo
Cajamarca, todos los otros sumados no llegan a representar el 12% del PBI del
país. Podríamos hacer desaparecer esos departamentos más Tumbes (0.52% del
PBI total) y no pasaría nada. Ucayali y Madre de Dios igualmente podrían
desaparecer (1.2% del PBI total) sin generar un problema económico.
Posiblemente sería un alivio porque es probable que en términos neoliberales se
esté subsidiando a estos departamentos, que representan un costo y no obtienen
beneficio. Claro, allí están los yacimientos mineros y esos sí son importantes. La
gente que habita allí, aparentemente no. En términos de la racionalidad
económica vigente, estos departamentos podrían convertirse en huertos o
jardines, la población podría ser ahogada en el río, y todos seríamos más felices y
más ricos. De allí que no haya políticas de desarrollo. Es más, mientras menos
desarrollo, mejor. Se hace un uso más racional en términos costo beneficio del
que se hizo nunca.

Si el mercado no se ocupa de la población, mala Si el mercado no se ocupa


suerte. Parece que las glorias del Tahuantinsuyo de la población, mala suerte.
y la fortaleza de la cultura aimará no nos Parece que las glorias del
acomodan a los costeños. Que el colapso del Tahuantinsuyo y la fortaleza
sistema de haciendas bajo el cual se de la cultura aimará no nos
desarrollaron, o no, los espacios de la sierra y acomodan a los costeños.
sus poblaciones, no han sido asumidos con
modernidad. Es decir, no son parte del mercado, ni son parte de la atención del
Estado para el desarrollo. No tenían siquiera carreteras asfaltadas hasta la década
del 90, aunque desde el gobierno del Gral. Odría se hicieron las carreteras
afirmadas. Asfalto en la costa y tierra afirmada en la sierra era una lógica que
mostraba la opinión pública de consenso sobre lo que la sierra merecía. Fue la
opinión política nacional la que llevó a ese tipo de desarrollo.

La articulación entre la sierra y la costa mediante proyectos mineros, desde el


sigloXVI, y más aún desde el siglo XIX, no ha dado como resultado ninguna
mejora en las condiciones de vida de la población de esas partes de la sierra. Las
riquezas de mercurio y la plata de Huancavelica, que dieron pie al moderno Tren
Macho a fines del siglo XIX, dejaron al departamento en un estado tal a fines del
sigloXX que los alcaldes bajaron a Lima a caballo en 1997 para dialogar con el
presidente de la República... y éste no los recibió. La metáfora se podría repetir
casi para cada departamento, y para cada distrito de cada departamento. El
resultado de la marginación y la falta de incorporación a la vida económica
nacional, conforme el desarrollo económico embargaba a la costa en las décadas
entre 1950 y 1970, fue la migración de los varones, jefes de familia. Este
fenómeno produjo una feminización de la pobreza en la sierra rural desde la
década del 70. La interrogante es por qué, luego de la reforma agraria, la
migración a la costa y la selva se mantiene en las décadas del 70 y 80.
Si bien la negación de la sierra —antes y después de la reforma agraria— es
mayor que la negación de la selva en cuanto aporte económico, no lo es en
cuanto aporte cultural. La selva se encuentra relegada como producto de su
propia geografía y de la falta de esfuerzos estatales por articularla al resto del
país. El tren de la Sierra Central debió terminar en Tingo María. Ni siquiera el
tren llegó allí. Quedó como una zona aledaña que vino a ser reconsiderada en los
años sesenta con la propuesta de construir una carretera marginal de la selva que
uniera las diversas partes de la selva alta y se entroncara con carreteras
transversales que salieran a la costa. Ése fue un proyecto frustrado. Las
migraciones a la selva y los esquemas de colonización quedaron igualmente
truncos. No fueron revalidados los pueblos que moran en esos espacios donde
conviven decenas de culturas estudiadas por diversos institutos como el CETA de
Iquitos, por ejemplo. Quedó como un espacio que un grupo de investigadores y
misioneros estudian para revaluar la cultura. Para la sociedad peruana quedó
abandonada hasta la llegada del narcotráfico, cuando adquirió importancia por las
razones equivocadas. Y pasó de la categoría de muy pobre a pobre. Los
departamentos en esta franja son: Ancash, Madre de Dios, Loreto, Pasco, San
Martín y Ucayali. La historia reciente nos indica que el ascenso de muy
pobres a pobres se logra con el incremento de la producción de hoja de coca, y el
auge de Sendero Luminoso que brotó con violencia en esas zonas, la excepción
siendo Loreto. Los departamentos que tienen mayor aporte de PBI que de
población son los vinculados al narcotráfico en la categoría de pobres. En
términos de la teoría marginalista, los departamentos cuya contribución al PBI es
menor que su contribución poblacional, restan al PBI nacional y por lo tanto son
una carga para el resto del país. La realidad política es que dichos departamentos
están siendo descartados, mas la población está allí presente y es sujeto de
derechos civiles y políticos, además de contar con derechos económicos y
sociales. Tienen un capital cultural alto y, como todos los seres humanos,
derecho a una vida digna. Éste es un horror ante el cual los peruanos de
principios del siglo XXI debemos estar conscientes de la importancia que debe
tener el desarrollo de todos los peruanos y de todas las regiones para el futuro del
país. La integración del Perú como un solo país comienza por su integración
física para llevar a la convivencia plena de culturas diversas de costa, sierra y
selva, hasta hoy segmentadas por las raíces históricas del pasado milenario en el
espacio nacional. Luego tiene que venir el desarrollo para cerrar las inmensas
brechas, donde Lima tiene el récord de aporte al PBI nacional y todo lo demás es
ínfimo o muy pequeño.

La geografía de la pobreza muestra que a largo plazo los hombres dejan a las
mujeres en el campo, donde ellas siguen trabajando la tierra. La reunificación
familiar ocurre con una distancia de 20 años {1972-1993). Las mujeres tienden a
seguir a los hombres veinte años después de que ellos las han dejado atrás. En
consecuencia, existe una distribución normal de las regiones geográficas donde
hay más mujeres que hombres en 1993. Es decir, aunque las mujeres llevan la
carga de la extrema pobreza en el campo, a largo plazo migrarán y se convertirán
en urbanas pobres(31.9% en Lima y 22.3% en la costa urbana). Esto no ocurrirá
con 1a migración de Ia sierra a la selva, donde las mujeres no migran,
aparentemente.

Los departamentos no tan pobres o aceptables son los departamentos de la costa


y Junín. Junín es conocida como una zona de comerciantes y está articulada a la
economía costeña mediante la agricultura. Huasa Huasi es la capital de la semilla
de papa que se usa en la siembra en la costa, por ejemplo.

Según el mapa de la pobreza elaborado por FONCODES, hay cuatro categorías


de departamentos o divisiones civiles del territorio en el Perú: muy pobre, pobre,
no tan pobre y aceptable. La división se hace de acuerdo al porcentaje de
población rural que hay en el área geográfica. A mayor participación rural, el
área es considerada más pobre. Este criterio es tomado en consideración por
FONCODES/UNICEF (1994). Lo que he hecho es utilizar la metodología de
Naciones Unidas para ver los indices de masculinidad (número de hombres por
100 mujeres) por departamento. Lo primero que la evidencia presenta es la
situación poblacional entre rural y urbana, y la he comparado entre 1972 y 1993.

 Los muy pobres incluyen: Cajamarca, Huancavelica,


Apurímac, Amazonas, Huánuco, Puno, Cusco,
Ayacucho. Estas áreas siempre han tenido 50% de su
población en el sector rural. Se ha reducido de un rango
de 86% a 63.3% en 1972 de la población rural del sector
a 75.3% y 51.9% en 1993. Todos estos departamentos
son andinos menos Amazonas, en el borde de la selva,
que es mitad andino y mitad selvático.
 Los pobres incluyen Ancash, Madre de Dios, Loreto,
Pasco, San Martín y Ucayali. El rango fue de 60.1% a
43.8% de su población en el sector rural en 1972
a42.6% y 34.9% en 1993. Estos son todos
departamentos selváticos menos Pasco.
 Los no tan pobres incluyen Junín, La Libertad, Piura y
Lambayeque. El rango va de40.5% a 27.3% de su
población en el sector rural en 1972, a34.5% y 22.9% en
1993. Estos son todos departamentos costeños menos
Junín.
 Los aceptables incluyen a Moquegua, Ica, Tumbes,
Arequipa, Tacna, Lima y el Callao, donde menos del
20% de la población permaneció en el sector rural en
1993. Los rangos se han reducido de30% y 2.5% en
1972 a17.2% y 0.1% en 1993. Éstos son todos
departamentos costeños.

En promedio, la población rural del Perú se ha reducido entre 1972 y 1993,


de40.5% del total de la población a29.9%. La población urbana del Perú es un
poco mayor que en el resto de América Latina,79.1% vs. 77%-78% para América
Latina como un todo (Naciones Unidas, 1995). En todo caso, el proceso de
urbanización es un indicador de modernización. Las sociedades modernas son
urbanas y los centros urbanos están mejor provistos para brindar servicios
básicos, empleo y esparcimiento que el campo, sin duda alguna.

Luego [...] vemos el número de mujeres por cada 100 hombres en áreas urbanas y
rurales. Parece que hay un cambio en el número de mujeres por cada 100
hombres al paso del tiempo. En 1972 había más hombres que mujeres en el país
(99.5 mujeres por 100 hombres). Las regiones muy pobres tienen índices de
mujeres por hombres mucho más altos, evidenciando que los hombres las dejan
atrás en el campo, cuando emigran a otras regiones menos pobres.

Después de una década de reforma agraria, en 1981, al comienzo de las


actividades de Sendero Luminoso, el proceso de migración y el desbalance
hombre-mujer continúa igual para los muy pobres. Era el quinto año de la
declinación económica que había empezado en 1976 y los hombres emigraron a
Madre de Dios y Pasco debido a la minería, y a San Martín, Loreto y Ucayali
para cultivar coca.

La década de la guerra no cambia el patrón de migración y el balance de mujeres


por cada 100 hombres permanece casi igual en 1993 que en 1981 para los
departamentosmuy pobres, con excepción de Puno y Cajamarca donde se
recupera el balance, quizá porque las mujeres siguieron a sus hombres.

La migración hacia la zona productora de coca aumentó, resultando así una


reducción de las mujeres por cada cien hombres, de 91.3 a 87.6 en San Martín
entre 1981 y 1991 y de 92.9 a 90.6 en Ucayali en el mismo período.

La migración sostenida parece característica de los departamentos no tan


pobres. La Libertad y Lambayeque tienen una relación de más de 100 entre las
mujeres y los hombres (103.5 y 104.8). Se ha deteriorado desde 1972, después de
la reforma agraria, y no ha recuperado su equilibrio, mostrando un flujo de salida
permanente de hombres.

Lima, el punto favorito por la migración, muestra que hay 104.3 mujeres por 100
hombres y que dos fenómenos pueden estar ocurriendo: la migración de mujeres
a Lima desde los departamentos muy pobres, puesto que sus hombres emigran
para producir coca u obtienen sus ingresos en la minería durante los años de la
guerra (1981 a 1992) ; y los hombres emigran de Lima hacia fuera, dejando a las
mujeres atrás, siguiendo el mismo patrón doméstico. En 1993, Lima (104.3) tenia
uno de los porcentajes más altos de mujeres por 100 hombres, sólo después de
Ayacucho (105.1), y Madre de Dios (104.5). Los departamentos fronterizos
parecen atraer migrantes hombres y en Tacna, Tumbes y Moquegua en 1993 hay
más hombres que mujeres.

Se debería señalar que los mayores desbalances generados por la migración


desde por lo menos los años 70 (aunque tal vez desde antes) no están de ninguna
manera afectados por los programas de retorno después de la guerra. El número
total de los que han retornado en 1995-1996 es de 2,960 personas distribuidas por
Ayacucho, Huancavelica, Apurímac y Junín, de un estimado total de 600,000.
Esto quiere decir que los programas del gobierno para poblaciones retornantes no
son lo suficientemente atractivos y numerosos para incluirlas a todas. Desde la
evidencia de largo plazo, parecería que la guerra aumentó la tendencia a la
migración, aunque la mantuvo en los rangos que existían desde 1972. Para dar
una idea de la situación, digamos que Lima duplicó su población entre 1971 y
1993 debido a la migración. Cusco la incrementó, Arequipa y Huancayo
mostraron aumentos significativos y en menor medida lo hicieron otras áreas
urbanas de la costa.

Se podría decir que en líneas generales el pasado glorioso inca y pre-inca es hoy
un territorio abandonado donde hay una población irrelevante, que habla un
idioma de segundo nivel, que es campesina y por lo tanto no demanda
políticamente como los actores sociales en los centros urbanos, y está constituida
en gran medida por mujeres, con lo cual, incluso si demandaran, tendrían poca
relevancia.

Se podría decir que [...] el


pasado glorioso inca y pre-
inca es hoy un territorio
abandonado donde hay una
Se podría afirmar, por lo tanto, que el Perú que
población irrelevante, que
entra en la globalización hereda una tara que se habla un idioma de segundo
acentúa. La tara no es de la población que vive nivel...
en estas regiones, sino de la clase política y de
la sociedad costeña que persevera en ignorar lo que queda arriba del cerro o
detrás del cerro, en una referencia evidente a la planicie arenosa de la costa. La
respuesta de las poblaciones a esto es el regionalismo cerrado que se observa en
Cusco, donde el forastero es mal visto y mal recibido, aunque no su dinero. La
respuesta desde el gobierno moderno de los 90 es construir carreteras, postas
médicas y escuelas. FONCODES pavimenta, construye puentes; Infes construye
escuelas; el Ministerio de la Presidencia instala postas medicas. ¿Es eso atender
la pobreza? ¿La pobreza no es acaso la falta de capacidad adquisitiva para cubrir
el consumo básico de la persona y/o de la familia? ¿Tiene relevancia este tipo de
proyectos en el corto plazo sobre la pobreza de las poblaciones atendidas por los
proyectos? En el largo plazo es irrelevante porque se produce la migración. Es
necesario invertir en actividades productivas y asistir a los campesinos en el
aumento de su productividad agrícola.

2. La demografía y la política de la exclusión


Este texto forma parte del documento «The Dynamics of Exclusion: The Peruvian Case» elaborado
para Project Counselling Services en coautoría con Eduardo Cáceres de Aprodeh.

El profesor Gerschenkron (1952) discute que lo que le da un


sentido de valor a una persona está relacionado con el nivel de ingresos que esta
persona recibe, porque es mediante sus ingresos que la persona siente el valor
que él o ella tiene en la sociedad. Desde ese punto de vista, el sentido de
autoestima y los derechos ciudadanos están relacionados con los ingresos. ¿Qué
pasa cuando los niveles de ingreso son bajos? La persona se considera poca cosa.
¿Qué pasa cuando la persona no tiene empleo? La persona es excluida, no
pertenece a una red social, pierde sus derechos. En algún grado, los filósofos
clásicos liberales asocian los derechos con la propiedad. Es una apreciación
subjetiva de la relación que existe entre ingresos y derechos humanos.

¿Qué ocurre en lo económico cuando una En algún grado, los filósofos


persona tiene empleo y no le alcanzan sus clásicos liberales asocian los
ingresos para vivir? Trabajan los niños y derechos con la propiedad. Es
niñas para complementar el ingreso familiar una apreciación subjetiva de la
y entonces comienza un tema espinoso que relación que existe entre
afecta la moral de la nación. El punto de ingresos y derechos humanos.
partida es que el trabajo infantil creció como resultado de la depresión expresada
como perdida del empleo, ingresos y nuevas inversiones en los países
latinoamericanos. El Perú, en este marco, tiene la envidiable posición de líder en
América Latina en la caída de los ingresos, con 32% de caída en tres años: 1988-
1990. Empero, la caída de los ingresos no expresa la caída en las remuneraciones.
En el Perú, al menos, las remuneraciones en términos reales cayeron 80% en
Lima y 30% en Chachapoyas entre 1973 y 1994. Se observa una ligerísima
recuperación a partir de 1993. Huelga decir que las remuneraciones son mayores
en Chachapoyas que en Lima en 1994. Esto se relaciona con la actividad del
narcotráfico en el área de Chachapoyas. Los promedios nacionales —si es que se
pudiera hablar de promedios en esta amplia gama— de caídas, son de 75% de
caída para los sueldos entre 1973 y 1994, y algo similar para los salarios.
Además, el empleo decreció. Es decir, menos personas perciben un sueldo o un
salario. La PEA creció en cerca del 73%, de 4.5 millones de personas a 7.8
millones de personas entre esos dos años. La proporción empleada, de acuerdo a
los datos del INEI, bajó de 65/o de la PEA a 16% entre 1982 y 1994, para los que
ofrece información homogénea. Debe ser mayor el empleo adecuado en la década
del 70, pre-crisis.

Se puede afirmar con toda certeza que la depresión económica peruana, inscrita
en la depresión económica latinoamericana, empobreció a todo el país con las
excepciones notables de algunos pequeños sectores cuyos ingresos provenían de
utilidades. El peso de las utilidades en el ingreso nacional, hasta donde queda
registro de ello, aumentó al 50% del PBI en 1990. Se extrapolaron los niveles de
vida. Con la recuperación, lo que se observa (aunque no hay datos aún que
permitan sustentarlo) es que alrededor del 10% de la población se ve beneficiada
preferentemente. Es aquella sujeto de crédito. La prueba de esto es el número de
tarjetas de crédito emitidas, que suma 480,000. Esto no corresponde al número de
familias sino de personas y/o empresas. Se podría decir que son dos millones de
personas naturales las que se benefician del crédito de forma directa e indirecta, y
éstas representan el área de beneficio preferencial de la recuperación económica.
El resto quedó excluido del crédito y de los beneficios de la recuperación, del
empleo y de las mejoras de la salud. Los observan desde el margen.

Las edades de la población en cuestión son relevantes porque los niños y niñas de
menos de 15 años que trabajan sumaban 1.2 millones en el Perú en 1996.
Tomando como referencia etárea el año de 1993, esto representa el 14% de los
niños y niñas peruanos. Representa alrededor de un 16% de la PEA adicional a la
PEA registrada, que genera ingresos a la familia en un rango de actividades que
va desde el trabajo legal hasta la delincuencia, pasando por una combinación de
ambos, Se conoce que la banda poblacional entre los 15 y 25 años representa
alrededor de 30% de la población total, con lo que dos tercios del país tiene
menos de 25 años. Se puede decir que la sociedad ha envejecido porque hay más
población mayor de 64 años y menos población de menos de 14 años. La banda
etárea intermedia creció, siendo urbana en gran medida, fruto de las migraciones
antes descritas. Ésos son los jóvenes de hoy, urbanos e hijos de migrantes.

En este marco debernos entender que lo que ha ocurrido con los derechos
humanos en el Perú tiene que ver con la falta de valor económico de las personas.
La gente no importa. La sociedad no interesa. Interesan los tarjeta de crédito
habientes, con rango de ciudadanos consumidores. El resto es descartable. Las
violaciones de los derechos humanos son

vistas como detenciones arbitrarias, secuestros,


... lo que ha ocurrido con
los derechos humanos matanzas de personas inocentes. Lo hemos
en el Perú tiene que ver observado en el Perú, sobre todo en los
con la falta de valor departamentos catalogados como muy pobres[...].
económico de las Esto se ha reducido en los años 90. El problema con
personas. La gente no este acercamiento a los derechos humanos es que
importa. La sociedad no metafóricamente infiere que la ausencia de crimen
interesa. es la vuelta al imperio de la justicia. El chantaje, la
intimidación y el miedo pueden asemejar la
aparición de «la ley y el orden», y el subempleo y los bajos sueldos cubren la
semejanza con una economía donde todos los trabajadores son valorados y
respetados. Los niños y niñas crecen fuera del espectro de la ley y el orden o con
ésta en su contra, porque el trabajo infantil está penalizado. Allí comienza a
construirse una nueva imagen del Perú para los jóvenes de hoy. Los hijos de los
sectores de mayores ingresos en la sociedad no tienen esta percepción sino que se
ubican en la parte dominante de la misma, acrecentándose así las distancias entre
peruanos, que de suyo eran grandes en el punto de partida de 1990, cuando se
inicia 1a «globalización» y «modernización».

En el Perú hay una falsa percepción según la cual «ser moderno» es sinónimo de
la rápida incorporación de tecnologías, y el establecimiento de nuevos escenarios
para el país. Para lograr esto «se requiere de autoritarismo», porque hay un
problema de «falta de gobernabilidad». Éste es el sentido común que ha reelegido
a Fujimori una vez y que podría reelegirlo por segunda vez, en una espiral que da
la razón a quienes afirman que el Perú necesita un dictador porque no sabemos
cómo vivir con nosotros mismos.

Los procesos de modernización en toda la historia han sido limitados, dado que
los ciudadanos no se consideran sujetos de derechos y deberes. No son líberos,
personas libres que se relacionan de manera impersonal con el mercado, debido a
las razones teóricas mencionadas anteriormente. Lo que llevó a la crisis del poder
no ha sido una ausencia de autoridad sino el ejercicio irracional de la misma. La
pregunta sobre los derechos humanos en el Perú remite entonces a la pregunta
sobre la modernización del Perú, su cultura y su política.

3. La República sin ciudadanos

El sistema tradicional de dominación que ha prevalecido en el Perú hasta


mediados del siglo veinte suponía falta de equidad entre los peruanos. La
ciudadanía era un reconocimiento formal, restringido por la raza, clase, religión,
opción sexual, género y nivel de ingresos. Todo lo que se desvía de ser varón
blanco, heterosexual, limeño, católico y rico es subordinado a este valor supremo
patriarcal. Para los subordinados —todo el resto de la sociedad— la impunidad
ha sido una constante en los casos de abuso o crímenes cometidos por los
dominantes. En el Perú, los ingresos no aseguraron la inserción en el Poder; y la
movilidad social tuvo un límite y un techo en términos de Poder. El dinero
«blanquea», aunque no es todo lo que se requiere para pertenecer al Poder. Esto
ha sufrido algunos cambios en los últimos treinta años, derivados de los efectos
de la reforma agraria y de la gratuidad de la educación universitaria. Eso explica
la posibilidad de que exista un presidente de la República hijo de migrantes
japoneses, así como ministros de diferentes grupos étnicos. Son cambios que
auguran un país mejor integrado. La actuación pública del hijo de migrantes ha
calcado la conducta del patriarca blanco en el desprecio mostrado hacia todo el
resto de la sociedad: la metáfora de los alcaldes de Huancavelica cabalgando a
Lima para pedir una entrevista con el «Señor Presidente», que éste no les
concedió, es una metáfora de cómo el «Señor Presidente» ha adoptado los
valores blancos y olvidó los elementos de subordinación que sufrió como no
blanco, pobre, etc. Se lo recordaron en la investigación periodística sobre sus
orígenes. Para afirmar su poder de blanco macho y distante, quien respondió a las
preguntas de la periodista en televisión fue su madre, cuyo castellano es malo,
recordándole a la teleaudiencia su ascendencia humilde y su calidad de persona
de origen subordinado. O sea, se puede incluso manipular desde el Poder la
imagen de igualdad del oprimido usando a un oprimido como portavoz cuando se
goza del ascenso social. Esto lo convierte en un miembro de la clase dominante
vergonzante. Cuando deje el poder presidencial, desaparecerá de la cúspide del
Poder real. Es extraño cómo una sociedad rígida puede generar símbolos de
poder transitorios y por tanto producir personas de esta talla. Es la misma
sociedad, por cierto, capaz de producir un Sendero Luminoso aniquilador de
símbolos del Poder. Y los que aniquilan son adolescentes.

La lucha por los «derechos» se basó en la lucha de clases desde 1920. Dos
momentos marcan el paso de lucha los años 20 y los años comprendidos entre las
décadas de los años 60-70. Las luchas por los derechos civiles generaron
conflicto con el Estado, el cual reaccionó mediante la represión. El final de
período estuvo marcado por la Asamblea Constituyente de 1978-79, y antes la
Asamblea Constituyente de 1932-33, donde los legisladores trataron sin éxito de
relacionar los derechos a las leyes de la tierra; por ejemplo, encontrar la relación
entre el régimen político y el progreso social.

Después de 1980, las estadísticas de violencia y muerte en el Perú expresaron


horror. En trabajos recientes, Basombrío y Degregori (1997) sugieren que si los
escenarios para la guerra no hubiesen sido en su mayoría Huamanga y Huanta, el
Perú hubiese registrado unas 800,000 muertes. La guerra interna ha sido una
guerra «mediática», pensada por ambos lados en términos de opinión pública en
áreas donde nada importaba. Fue una guerra de símbolos donde el terror y el
contraterror fueron armas usadas por ambos lados como armas psicológicas
proyectadas al resto de la sociedad, afuera del escenario de la guerra.

Hasta 1983, la guerra estuvo concentrada en Ayacucho (departamento muy


pobre) y áreas adyacentes. Ese año las fuerzas armadas y los medios de
comunicación entraron al conflicto con la masacre de ocho periodistas en
Uchuraccay. Quien hubo ordenado la masacre había calculado muy bien el
impacto: protestas, indignación en los medios de comunicación producto del
evento ocurrido en las alturas de Ayacucho. El deseo de exterminar estuvo claro
para todos los peruanos, Transmitió un terror paralizante a toda la población
civil. Todos fuimos los culpables, por ponerlo en términos del informe de la
comisión investigadora. El mensaje contrario fue transmitido por la masacre de
Lucanamarca. Los campesinos aprendieron que Sendero quería la conquista de
subjetividades individuales y sociales. El poder de destrucción, o de defensa,
conquista o restauración era un poder simbólico.

Entonces las tácticas militares de poca monta, como por ejemplo los rastrillajes
en los pueblos jóvenes por parte del ejército, o los asesinatos selectivos y los
coches bomba por el otro lado, actuaban en el simbolismo de Poder y terror.
Ambos se basaban en instituciones débiles, en la ausencia de mediadores y
subjetividades endebles. El diagnóstico del Perú que tenia Sendero es que era
semi-feudal, por ejemplo, pre-moderno, sin una sociedad civil diferenciada ni
una esfera pública diferenciada, tomándolo directamente del diagnóstico de
Mariátegui para los años 20. El Estado, según Sendero, estaba en proceso de
desintegración, con una tendencia hacia el autoritarismo, donde la unidad
nacional sólo podía ser obtenida con la mediación de la Iglesia y el ejército, en
especial el ejército. El jaque era de ejército a ejército.

El orden y el desorden son indisociables, la violencia permea toda realidad social,


al punto que en la moderna sociedad posindustrial ha surgido una especia
de voyeurviolentista. Porque la violencia vende: el criminal, el delincuente, el
rebelde, el combatiente, el héroe, mezclado con el vándalo tipo hooligan, hasta el
extraterrestre, son los actores de un nuevo tipo de diversión. Los juegos de video
y el cine han

hecho de ellos los protagonistas más rentables ... ha surgido una especia
de una industria que, partiendo del culto al de voyeur violentista. Porque
cuerpo proveniente del deporte, se desliza por la la violencia vende...
vía del exceso hacia la arbitrariedad, la locura
colectiva, la agresión social salvaje y el menosprecio por la vida del otro, pues
matar resulta divertido (Vega Centeno, 1997).

Los que tienen el Poder, cuentan con un atajo para el proceso de legitimación
mediante la construcción de un consenso que apuesta por el uso de la fuerza. En
este marco, la intermediación social está muy reducida o debilitada. El poder del
lenguaje, la religión, las sociedades migrantes y otros trabajos voluntarios está
debilitado. En el Perú esto se expresa en la administración de las diferencias con
el «otro», en tiempos de paz y el uso extremo de la fuerza en tiempos confusos.
Es entonces cuando los militares ingresan como intermediarios. Los «otros»
están al lado derecho del diagrama de exclusión. «Ellos» eran «sacrificables», y
son los que perdieron sus vidas debido al fuego cruzado de la guerra entre
Sendero y las fuerzas armadas. Sólo cuando la guerra llegó a Lima y a sus
sectores residenciales se tomó conciencia de que había alcanzado a todos. No
sólo les pasaba a «ellos»: nos podía pasar también a «nosotros».

Hay razones estructurales para la violencia, tal y como hemos visto antes. Hasta
los militares y civiles comprometidos con la guerra estaban al tanto de esto y del
discurso de las raíces estructurales de la violencia que ganó peso durante los años
80. La exclusión era vista en términos de la extrema pobreza, la discriminación y
la marginación. Otros elementos tales como la interacción en la esfera política
han entrado como un argumento a través del trabajo de Rodríguez Rabanal, quien
sugiere que la violencia es la continuación de la política mediante otros medios,
parafraseando a Clausewitz que afirma que la guerra es la continuación de la
diplomacia a través de otros medios. Propone que la vida social continúa con
cicatrices de pobreza por medios destructivos e inéditos. En este sentido la
violencia no libera, más bien refuerza la comunicación ilógica que hay detrás de
la sociedad que ha nutrido a la violencia. Esto se manifiesta de varias formas:
desde el letargo, la depresión y las actitudes de sacrificio mediante enfermedades
psicosomáticas, hasta la abierta agresión contra el «ser» y el «otro».
En el ser interior de las personas que dieron
Cualquier ideología puede llenar
el vacío: el senderismo o el libre testimonio para el trabajo de Rodríguez
mercado, siempre que el mesías Rabanal, los principios de represalia y la
lo guíe. búsqueda compensatoria por el gran
salvador, un mesías, está presente. La
inhibición de la violencia se reduce, puesto que la violencia aumenta y una
tendencia hacia impulsos agresivos de destrucción crece entre la población. Esto
nos permite entender la guerra y la peculiar posguerra. Cualquier ideología puede
llenar el vacío: el senderismo o el libre mercado, siempre que el mesías lo guíe.
La meditación racional de una ética no existe y el instinto abre camino a un
pseudo discurso científico (senderismo o libre mercado). Apoya a una figura
autoritaria como Fujimori, como a un mesías al que entrega el escenario. La
impotencia alimenta la esperanza, La esperanza está afuera de uno. La esperanza
está en el mesías. Se puede leer esto tanto en el trabajo de Degregori (1985) Qué
difícil es ser Dios, a propósito de Guzmán, o la religiosidad mesiánica del APRA
en trabajos de Degregrori y de Vega Centeno (1988).

Luego de la masacre de los penales (19 de junio de 1986), la mayoría de los


limeños encuestados coincidían en condenar la violencia ocurrida y los cientos de
personas desarmadas asesinadas. Poco a poco la realidad hizo cambiar a la
opinión pública. Seis años después, el apoyo masivo al autogolpe de Estado en
abril de 1992 estuvo relacionado con la necesidad de restablecer el orden a
cualquier precio, endosando una militarización del país a pesar de sus «excesos».
La masacre que tuvo lugar en los penales en 1991 pasó casi desapercibida, En
todo caso no generó reprobación ni quedó en el recuerdo social.

Después de 1993 la situación comenzó a cambiar. A mediados de ese año la


población sindicó a las fuerzas armadas como responsable de la muerte de 9
estudiantes y un profesor de La Cantuta y estuvo en contra de la Ley de Amnistía
de julio de 1995, cuando los militares responsables de esas muertes fueron
liberados de las cárceles. El cambio en las actitudes está relacionado con el
trabajo de las organizaciones de derechos humanos, periodistas, lideres de la
oposición, sin cuya acción el cambio de actitud no podría ser explicado.
¿Significa esto que hay una percepción común sobre los temas de derechos
humanos en el Perú de hoy? El trabajo efectuado por la Coordinadora de
Derechos Humanos mediante una encuesta llevada a cabo en tres ciudades sobre
la percepción de los derechos humanos, arroja los siguientes resultados:

 A. El lugar común según el cual todos somos sujetos de


derechos humanos con una desigual distribución de la
justicia, leyes débiles y la ausencia de la autoridad, no
aparece con la esperada intensidad entre los muy pobres.
Lo que se reflejó fue que las condiciones para el éxito
no eran iguales para el rico y para el pobre en la
competencia por la vida.
 B. Hay una conexión entre las demandas de la población
por derechos ciudadanos y por la ley y el orden. Esto ha
tenido un resultado en el comentario según el cual el
«orden existente» está marcado por el abuso del Poder...
«todos están bajo sospecha». Es un reconocimiento
consciente y amargo de la exclusión: la experiencia ha
enseñado que todos pueden ser culpables si no son
parte del mundo de las influencias, la ley y el orden.
 C. Hay un embargo sobre los mecanismos sociales para
la reivindicación de los derechos. La protesta está
inhibida por el miedo a ser acusado por subversión. El
discurso dominante se ha llegado a adoptar con la
convicción de que todo está definido y no puede ser
modificado. La única lucha posible es para obtener el
«éxito individual».

Cuando los organismos defensores de los derechos humanos se alejan de la


población en un área, queda la sensación de falta de protección contra la
violación de los derechos humanos. El Estado, como tal, intimida a los muy
pobres y pobres en las zonas identificadas. Por otro lado, parece estar a la sombra
de la conciencia ciudadana el hecho de que todos somos iguales, algunos más
iguales que otros, según la primera respuesta.

4. Nuevos escenarios, ¿nuevos problemas?

La ola neoliberal ha erosionado el contrato social que


gobernó el mundo occidental desarrollado desde los años 30. La ampliación de
los derechos civiles y políticos ha sido parte de ello. Pero la declaración de los
derechos humanos es el resultado de un complejo proceso de luchas mundiales,
políticas y sociales. Los recientes cambios económicos y políticos han cambiado
la percepción que las personas tenían de sus propios derechos, al igual que de los
escenarios donde podían ejercerlos. Los cambios políticos y la modificación del
sentido común afectan el ejercicio de los derechos políticos y civiles. Por otro
lado, la globalización (en términos de la información en tiempo real) crea un
escenario donde es posible buscar afuera el apoyo que no se encuentra en el
ámbito doméstico sobre un determinado tema. De alguna manera los derechos se
están «privatizando» y se están convirtiendo en parte de la vida económica y
social del individuo.
Según Danilo Turk (un reportero especial de La distribución de los ingresos
una Subcomisión de Prevención de es un punto crítico, debido a su
Discriminación y Protección de Minorías de relación con la democracia.
las Naciones Unidas), hay crecientes
iniquidades en términos de ingresos que no sólo hacen imprescindible la
realización de los derechos económicos, sociales y culturales, sino que polarizan
y fragmentan a las sociedades. La disparidad de los ingresos, a la vez que tiene
lugar una reducción del Estado, forma una peligrosa base para la alienación, la
dependencia y el cinismo que puede llevar, en última instancia, hacia el deterioro
de las relaciones sobre las cuales se funda la sociedad civil. La distribución de los
ingresos es un punto crítico, debido a su relación con la democracia.

El Perú tiene la peor distribución de ingresos en América Latina, aparte de Haití.


Esto llevó al levantamiento del movimiento social en los años 20 y los años 60-
70. Después del período de hiperinflación, la depresión y la etapa de extrema
violencia de los años 80, se inició un cambio en la economía que estuvo
secundado por el proceso de reformas estructurales introducido por el Banco
Mundial y el BID en 1990. Dado el contexto, los efectos son que el tejido social
se ha debilitado y el individualismo extremo ha emergido derivando en
agresividad, dentro de un conflicto estéril en aras del mercado. Algunos
elementos que cuestionan el espíritu modernizante de las reformas en el Perú
pueden señalarse:

 Hay una pérdida de la ética del trabajo y un elogio de la


ética del éxito.
 Los derechos y las libertades están restringidos,
dañando así el proceso de individualización.
 La mediación del Estado en los conflictos entre la
sociedad, se ha reducido. La interacción entre el Estado
y la sociedad ha sido reemplazada por la concepción del
mercado político, donde los actores sociales derivan
individualmente en clientes.
 El progreso se ha convertido en un elemento
determinante en la imaginación social, considerado
como mejora del país o de la persona misma. Debe
obtenerse a cualquier precio, incluso resignándose a
perder los derechos. Esta versión particular del éxito
individual, si es frustrado, puede derivar en un alto
grado de insatisfacción, el terreno apropiado para
diferentes formas de violencia estéril. Por ejemplo, las
barras bravas o el asalto de la residencia del embajador
japonés.
 Los puntos más importantes del escenario después del
golpe, el régimen político instalado desde entonces, la
constitución de 1993 y la reelección de 1995 son como
sigue:

1. Autoritarismo expresado como crecimiento del


poder presidencial, al igual que la existencia de
otros mecanismos que permiten al presidente
someter a otros poderes del Estado.
2. La naturaleza cívico-militar del régimen. Las
fuerzas armadas son un partido político para el
gobierno; se encargan incluso de la distribución
de información electoral e información de
partidos político, calendarios con la imagen del
ingeniero Fujimori, y tienen una función
deliberante en la política peruana. La naturaleza
cívico militar parece anclarse en el poder militar,
como se vio cuando el presidente pidió la
renuncia del jefe del Comando Conjunto, pero
esto no ocurrió.
3. La naturaleza arbitraria del gobierno, donde el
Poder Ejecutivo puede cambiar las reglas del
juego de acuerdo con sus necesidades. Por
ejemplo, en 1995 la Ley de Amnistía que dejó
libres a los militares vinculados a masacres y
condenados dos años antes; o las leyes de
referéndum que después de tres reformas
aumentaron el número de firmas requeridas para
realizarlo, de 350,000 de acuerdo con la
Constitución, a 1,200,000 en menos de dos
meses. O la capacidad de disolver el Tribunal
Constitucional porque juzgó que no era aplicable
en términos legales la Ley de Interpretación
Auténtica (que permite la segunda reelección).
4. La legitimidad del régimen se basa en los
resultados y en el apoyo público producto de la
reducción de la inflación, la violencia y la
promesa de mejorar las condiciones de vida en el
futuro, y a la vez en mecanismos para el control
de la población, la falta de partidos político, la
supresión de la oposición en el Congreso y la
falta de ideas.

El panorama político ha cambiado mucho desde que Sendero se aisló de su


supuesta base natural mediante las acciones de la Rondas Campesinas y la
detención del cabecilla Abimael Guzmán en setiembre de 1992. Divididos entre
ellos debido a cartas enviadas por Guzmán desde la cárcel, puede eludir la
amenaza de extinción, aunque no su debilitamiento. El MRTA es más débil aún,
sin posibilidades reales de recuperación. Más allá de los elementos reales de la
subversión, hay un fantasma. La amenaza de Sendero justifica el estado de
emergencia, leyes anti-terroristas, rondas armadas y muchas otras precauciones.

Todo lo señalado excluye la posibilidad de la institucionalización de una


democracia real en el Perú. La

reducción de las violaciones a los derechos


... lo señalado excluye la
posibilidad de la humanos; la solución de los casos pendientes, hasta
institucionalización de el ensayo de algunas medidas parciales no son
una democracia real en suficientes, en este escenario, para instaurar el
el Perú. respeto total de los derechos humanos y las garantías
constitucionales en el país. Los problemas de
derechos humanos en el país no son un tema de casos pendientes, ni son el
resultado de la posguerra. Son más profundos y complejos, deben ser atendidos y
examinados al menos en las dimensiones de política institucional y conciencia
generalizada de los derechos.

5. La distribución del ingreso y la equidad

Los antecedentes mostrados son un principio para poner de relieve los problemas
de falta de equidad. Las discriminaciones son la expresión de la iniquidad. Los
ingresos económicos afirman algo adicional. Si tomamos la distribución del
ingreso de las mujeres para ver cómo se distribuye el ingreso entre «marginales»
y de allí partimos a ver cómo se ve en el mundo de los varones, aparece la
evidencia de que a las mujeres les va bien si son ricas. Les va mal en todos los
demás casos. Es decir, la mujer con dinero es casi un varón, en una sociedad
donde la mujer está discriminada por el mero hecho de ser mujer, recordándonos
el poema de Sor Juana Inés de la Cruz (Hombres necios...).

Viviane Forrester (1997) advierte que en el mundo nuevo que emerge, el empleo
se ha convertido en innecesario para el funcionamiento del aparato económico.
Afirma que a los hombres se los condena a postular en vano (a un empleo),
frustrados de antemano por las estadísticas. Una pregunta desde el Perú al texto
de Forrester, es qué pasaría en Europa si dijéramos que de partida sólo el 11.7%
de las mujeres en edad de trabajar y disposición de hacerlo han tenido un empleo
adecuado en 1991. Si añadiéramos que ante la falta de seguro de desempleo, el
81% de las mujeres en capacidad de trabajar lo han hecho por remuneraciones
por debajo del nivel del salario adecuado para cubrir la canasta mínima de
consumo, y que el 7.3% de esas mismas mujeres se han registrado en el
Ministerio de Trabajo para buscar empleo y por lo tanto son consideradas como
desempleadas. Si no están registradas, formalmente no se consideran
desempleadas.

La realidad a partir de donde se concreta el mercado de trabajo de la mujer,


además, es uno de discriminación negativa. Los avisos de periódico anuncian que
quieren mujeres solteras, la franja de edades, el color y, por supuesto, el nivel
educativo. Allí se reproduce la pirámide de la subordinación de la sociedad
peruana. Si el varón blanco, heterosexual, católico, patriarca y educado es el pico
de la pirámide de la sociedad en su conjunto, se podría añadir que la mujer
blanca, heterosexual, católica y educada es el siguiente escalón.

En términos de ingresos se ha producido un distanciamiento entre las mujeres


ricas y las pobres. Así, el número de mujeres pobres de Lima ha aumentado entre
1985 y 1994 del 49.3% del conjunto de las mujeres al 52%. Hay evidencia
(Durán: 1997) de que el número de hogares liderados por mujeres ha aumentado
del 16.8% en 1985 al 21.4% del total de hogares en 1994. Es decir, hay más
hogares liderados por mujeres y más mujeres por debajo de la línea de pobreza.
Al otro extremo, aunque no existen datos al respecto, se puede inferir que entre
las mujeres no pobres hay una mejora de ingresos producto del nivel de
educación acumulado en el pasado para un cierto sector, que resulta en que la
proporción de hogares pobres (decil 1) y no pobres (decil 9) mantenidos por
mujeres estuvieron en mejores condiciones en 1994 que los de los hombres de
esos mismos deciles, en el mismo año. Es decir, hay una fragmentación social en
marcha.

Al año 1990, según The World's Women de Naciones Unidas, había 69 mujeres
por cada 100 varones profesionales, técnicos y otros. La tendencia se ha
mantenido en la década del 90 y quizá se haya profundizado. El primer quintil
(deciles 1 y 2) es el más pobre y el quinto quintil el más rico (deciles 9 y 10). La
distribución de jefas de hogar por quintil se asemeja en las puntas. En los hogares
más pobres y los más ricos ha habido un crecimiento de los hogares mantenidos
por mujeres.
Entre 1985 y 1991, años para los que hay muestra, en Lima Metropolitana se ha
podido observar que hay más mujeres en el quintil 1 de ingresos como jefas de
hogar en 1991 que en 1985. Pasaron de representar el 16.2% al 23.6% de los
hogares sostenidos por mujeres. La tendencia se repite en el decil noveno y en el
quintil 5, donde se nota que aumentan los hogares mantenidos por mujeres de
19.8% a 24.7%. El decil noveno muestra un aumento de 21.7% de los hogares
dentro de ese decil a 29.4%. Durán afirma que «esto implica que los hogares
liderados por mujeres no son los más pobres y que las tasas más altas de
crecimiento (de hogares liderados por mujeres) no están sólo en los sectores de
bajos ingresos». Concluye Durán: «Hogares liderados por mujeres son más
pobres, pero no son más vulnerables a la caída en las condiciones de vida durante
la crisis y los ajustes estructurales».

Lo que se está diciendo, en suma, es que en líneas generales hay un


empobrecimiento de las mujeres en la sierra rural. Que en Lima Metropolitana el
problema es más complejo. Lima debe ser tomado como el ejemplo
representativo de lo que ocurre en las capitales de departamento. Lo que ocurre
en Lima es que los sectores de altos ingresos han tenido un aumento sustantivo
de hogares liderados por mujeres, explicándose de alguna manera que el ingreso
de la mujer sea similar al del hombre jefe de familia. Esto se explicaría por el
altísimo índice de mujeres profesionales en el Perú, que en 1990 llegaron a ser 69
por cada 100 hombres profesionales. Al otro extremo, en Lima se observa que en
los sectores más pobres también hay un crecimiento de hogares liderados por
mujeres. Esto explicaría el trabajo infantil. El trabajo infantil se ha tornado en un
complemento del ingreso familiar, aunque no esté expresado en los datos de
personas que trabajan en un hogar. El número promedio de personas que trabajan
continúa siendo dos. La evidencia de 1.2 millones de niños que trabajan en el
Perú, equivalente al 15% de la PEA, indica que no son dos sino quizá tres. El
tercero es menor de edad, y estos casos están concentrados en los deciles l y 2.

La distribución del ingreso de las mujeres refleja una mejora de los deciles nueve
y diez, aunque menor que la de los deciles más pobres. Refleja lo que ocurre en
el plano global con el ingreso per cápita. Los sectores de mayor productividad
tienen mayor capacidad de ajuste que los sectores de menor productividad. La
productividad está relacionada con la educación, a pesar de que las mujeres
pueden no trabajar en las profesiones para las que fueron educadas. Es decir, en
el Perú habría un «Norte» que comprende a las mujeres de los deciles nueve y
diez, y un «Sur», que va de los deciles ocho hasta el uno. Lo que brinda la
incorporación a la sociedad es la posibilidad de incluirse en el mercado de trabajo
de manera ventajosa, de ser sujeto de crédito y ser sujeto de igualdad. Las otras
mujeres están en desventaja absoluta por ser mujeres, por no ser blancas y por no
tener los niveles de educación de los sectores nueve y diez. La movilidad social,
en este sentido, se vuelve muy vulnerable y fluida. La capacidad de competir
puede incluir a una mujer y excluir a otra de manera diversa, repitiéndose lo que
ocurre en el plano macro. La evidencia es que los hogares liderados por mujeres
son menos vulnerables a las fluctuaciones de ingresos que los hogares liderados
por varones, que pueden sucumbir a la presión económica y abandonar el hogar o
dejar de ejercer el liderazgo. En este sentido, las mujeres son el refugio de la
sociedad en crisis y expresan con nitidez lo que ocurre en la sociedad en su
conjunto en el plano global.

[...] El ingreso de las mujeres en el Perú ha aumentado para las muy pobres antes
que para las dedicadas al aumento de su productividad que están en el decil 9.
Esto es poco creíble. La nueva inserción económica se establece sobre la base del
aumento de la productividad; con lo que estas cifras estarían distorsionadas por el
mismo elemento de distorsión que el PBI en su conjunto. Alrededor de un 30%.
Y la distorsión podría estar en la asignación de los ingresos a los deciles
inferiores. La distancia entre ingresos [...] se

habría reducido entre 1991 y 1996. Debe ... hemos saltado a la economía
haber poca evidencia empírica de esto, posindustrial sin haber llegado a
porque las distancias entre los sueldos la industrial.
ejecutivos y los salarios han aumentado, por
ejemplo. Y porque hay mayor número de pobres en 1996 que en 1991 (52%
versus 49% de la población). En suma, las cifras publicadas de distribución del
ingreso, con el PBI distorsionado disponible, no permiten reflejar la evidencia
que se tiene mediante otros datos sobre pobreza, y sobre distancias salariales. El
autoempleo es una fuente de ingresos creciente para una parte de la población y
no para toda la población debajo del quinto decil, de ninguna manera. Y que sea
una fuente creciente de ingresos no es una virtud. Es una indicación de que el
aparato productivo no los puede absorber y de que hemos saltado a la economía
posindustrial sin haber llegado a la industrial. Sólo que los servicios no son
cuaternarios debajo del quinto decil, sino reflejan la venta de caramelos, por dar
un ejemplo.

EN SUMA

Es evidente que el Perú tiene rasgos premodernos que están construidos desde la
historia por el sistema de dominación colonial, pero también por la incapacidad
de liberarnos del mismo en el siglo XVIII. Ese sistema de dominación es la
madre del racismo y de la vergüenza del pasado. No obstante, y sin haber pasado
por ningún punto intermedio, hemos saltado a una lógica de igualdades para la
construcción de la economía de mercado. El requerimiento esencial para la
economía de mercado es que todos tengamos igualdad de información e igualdad
de oportunidades para poder actuar en el mercado. Sin embargo, aquí no es el
caso. Vemos que la población de la sierra peruana está en condiciones que no
tienen nada que ver con la igualdad de oportunidades y también observamos que
la situación de las mujeres es abiertamente peor que Ia de los hombres, a pesar de
la mejora de los ingresas de las mujeres en las ciudades, en especial de los deciles
mayores.

Las zonas más deprimidas son las zonas de


La sensación, a fines del
siglo XX, de que la población donde salió la cultura peruana prehispánica.
nativa peruana ha sido una Esto no se ha modificado. La pregunta, es por
carga para las qué. ¿Es que las zonas de sierra que fueron
modernizaciones cunas de civilizaciones se convirtieron en una
occidentales es fuerte. La vergüenza? ¿Es acaso que son zonas donde
sensación que de eso nos queremos olvidar que hubo un pasado? ¿O es
queremos olvidar incluso los que la modernidad y las modernizaciones que
intelectuales, es fuerte.
han ocurrido a lo largo de los siglos han ido
dejando esas zonas atrás? Y, de ser el caso, ¿por
qué? La sensación, a fines del siglo XX, de que la población nativa peruana ha
sido una carga para las modernizaciones occidentales es fuerte. La sensación que
de eso nos queremos olvidar incluso los intelectuales, es fuerte. El peligro de que
decir estas cosas nos empariente con ideologías absolutistas o etnocéntricas, es
también grande. Empero, la tara del pasado, esa carga que frena el ímpetu del
futuro, tiene que ser revalorada. Es preciso reconocer dónde y cuándo nos
quedamos atrapados en un sistema social excluyente en extremo y que por lo
tanto ha dejado en tierra de nadie a los habitantes de la sierra y selva peruanas. El
Estado no llega, y si llega lo hace en forma de fuerzas militares o, ahora, con
infraestructura de diversos tipos. La desarticulación actual de la sierra, sobre
todo, de la economía nacional en relación a su articulación en el pasado es
gigantesca. La selva no se ha desarticulado porque nunca estuvo bien articulada,
tanto por la distancia como por la geografía. La geografía de la pobreza y la
demografía de la pobreza nos muestran una realidad de vergüenza ante la historia
que tiene que llegar a su fin para que comencemos a ser iguales. El imaginario
cultural donde navegamos tiene un fuerte imaginario social colonizador. Es
incapaz de pensarnos como iguales. Con esto no estamos diciendo que solamente
los abusos estén en el imaginario blanco, patriarcal, etc., sino que también
aparecen en otros ámbitos y posiblemente se crucen con otras raíces más antiguas
dentro del continuum histórico en el que estamos inscritos, que se remonta a más
allá del siglo XVI. El sentimiento España 1-Perú 0, por ponerlo en términos
futbolísticos, tiene que ser revertido para podernos pensar como una sociedad
moderna o por lo menos para podernos pensar como una economía de mercado.
De otro modo siempre estaremos echándole la culpa al otro por lo que no
hicimos, y en algunos casos tendremos razón. Será pensándonos como iguales
ante el resto como nos podremos (re)conocer y saber de nuestros potenciales sin
anteponer los intereses ajenos a los propios. La discriminación en su sentido más
amplio es el principal freno del Perú.

4) y 5) El poder político. Tipos. El estado y la trayectoria del estado peruano (filosofía del
incanato, virreinato y republica)
6) Medios de comunicación: funciones y objetivos. Libertinaje de prensa, influencia en la
sociedad peruana. ¿Cuarto poder?
7) 8) Panorama y problemas de los sectores de desarrollo en el Perú: educación, salud,
producción, comercio exterior y turismo.
9) Socio demográfico: presente y futuro de la tercera edad, el problema de la pensión y
jubilación

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