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CAPÍTULO I: MARCO TEORICO

1.1. Antecedentes
A Nivel Internacional
En Zamora, Ecuador (Betancourt, 2016) investigó sobre la minería aurífera uno de los
mayores problemas de contaminación de metales pesados que se encuentran en el
sector de San Carlos de las Minas se vio la necesidad de realizar el presente trabajo de
investigación que tuvo como finalidad evaluar el potencial fitorremediador de la especie
Capsicum annuum L, como planta acumuladora de mercurio, ya sea movilizando,
degradando o estabilizando el contaminante en la planta, presentando de esta manera
una alternativa eficaz y económica para la remedición de suelos contaminados por
concentraciones de mercurio , razón por lo cual se plantearon los siguientes objetivos:
1) Determinar el grado de contaminación actual del suelo por mercurio en el sector de
Puente Azul, parroquia San Carlos de las Minas; 2) Evaluar el potencial fitorremediador
de la especie Capsicum annum L. en suelos contaminados por mercurio. El ensayo tuvo
una duración de 105 días, realizando el monitoreo respectivo de las 24 plantas
sembradas en los diferentes tratamientos, además se realizaron análisis de suelo
iniciales como finales, y mediante estos resultados se pudo precisar que la especie
Capsicum annum L, es una planta que cuenta con potencial fitorremediador ya que se
comprobó que tiene tolerancia a suelos contaminados por mercurio, pues se adaptó sin
dificultad. Y presentó una descontaminación de 57.1% en el tratamiento 1, mientras que
la muestra testigo tuvo una descontaminación de 42.9%.

En Barcelona, España (Gonzales, 2016) investigó sobre En esta tesis, se buscó


desarrollar una metodología para la remediación a escala real de los suelos afectados
históricamente por las emisiones de la Fundición de cobre CODELCO Ventanas (ubicada
entre las comunas de Puchuncaví y Quintero, región de Valparaíso). Las emisiones
históricas generaron altas concentraciones de Cu y en menor medida de otros metales,
en los suelos de la zona aledaña a la Fundición. Estas condiciones representan
actualmente un riesgo a la salud de la población y a la biota Para lograr el objetivo de
remediar los suelos, se seleccionó la técnica de fitoextracción, por ser ambientalmente
amigable y ser una técnica de bajo costo. La técnica se basa en la extracción de metales
por parte de plantas acumuladoras y su posterior cosecha, lo que, después de una
cantidad variable de ciclos de cultivo, permite disminuir las concentraciones de metal a
un nivel target (usualmente un valor que no cause riesgo a la salud o biota o un valor
cercano al background). Se estableció que un período de una década es aceptable para
un proceso de remediación a gran escala. Como base para desarrollar la metodología
de fitoextracción se seleccionaron tres especies nativas identificadas anteriormente en
el área: Baccharis linearis, Argemone subfusiformis y Oenothera picensis. Las altas
concentraciones de Cu halladas en la biomasa aérea de estas especies en un muestreo
exploratorio (promedio 391 y 314 y 600 mg/kg, respectivamente), su adaptación a la
zona, y su alta producción de biomasa las definieron como especies con potencial para
la fitoextracción. Sin embargo, ensayos iniciales determinaron que se requieren
estrategias que mejoren su potencial extractor pues, en condiciones naturales, la
proyección del número de ciclos de cultivo que se requeriría para remediar un suelo
contaminado por Cu es muy elevado (cientos a miles de años), lo que lo hace inviable
en condiciones reales.

En Bogotá, Colombia (Cordero, 2015) realizó una Investigación donde: los valores de
pH iniciales promedio en los lotes son de 7,9, 7,6 y 8,5 y los valores después del
tratamiento son 7,4, 6,1 y 7,8 lo cual demuestra que el pH disminuyó a través del tiempo
teniendo gran influencia en cuanto a la movilidad de los metales en el suelo ya que a
medida que este valor fue menor se logró una disminución en la concentración de los
metales pesados. Cabe anotar que de igual forma el mantener unos valores de pH altos
implica que la movilidad de metales sea baja especialmente en el caso del plomo. En
términos generales los valores promedio en los lotes la Laguna, el Plan y el Churrusco
para metales como zinc de 1781,3 mg/kg, 698,4 mg/kg y 2191,8 mg/kg, cobre de 488,2
mg/kg, 355,6 mg/kg y 462,3 mg/kg, manganeso de 46,8 mg/kg, 48,6 mg/kg y 48,3 mg/kg
y hierro 198,0 mg/kg, 180,9 mg/kg y 175,8 mg/kg no superaron los límites establecidos
para determinarse como nivel de contaminación. En cuanto a los tratamientos
establecidos y su porcentaje de germinación la Mombasa de 70%, la
Brachiariadecumbens de 73% y la combinación de especies de 75% siendo la que mejor
porcentaje y velocidad de germinación presento. En cuanto a desarrollo la Mombasa
alcanza una mayor altura pero menor cobertura de la superficie del suelo y la
Brachiariadecumbens genera mayor densidad y cobertura en el suelo. El tratamiento con
Mombasa demostró una eficiencia para fitorremediación media ya que los resultados
obtenidos inicial promedio en los lotes para cadmio y plomo son 250,8 mg/Kg y 1.135,5
mg/kg para el lote la Laguna , 42,1 mg/kg y 1.256,6 mg/kg para el lote el Churrusco y
123,8 mg/kg y 1.280,3 mg/kg para el lote el Plan y en comparación con los obtenidos al
final del tratamiento que para cadmio y plomo son 164,7 mg/kg y 948,6 mg/kg para el
lote la Laguna, 0,0 mg/kg y 940,9 mg/kg para el lote el Churrusco y 35,8 mg/kg y 985,5
mg/kg para el lote el Plan; lo cual presenta una disminución en la concentración de
metales en el suelo. Es importante resaltar que el valor registrado para cadmio en el
segundo lote fue de 0,0 mg/kg ya que los datos obtenidos de medición fueron demasiado
bajos para ser detectados por el equipo siendo beneficioso para el suelo, pero sin
embargo sigue registrando valores tóxicos para plomo. Además se evidencia que el
primer y tercer lote sigue obteniendo valores considerados tóxicos tanto para cadmio
como para plomo.
En Quito, Ecuador (Bonilla, 2013) realizó una Investigación donde: evalúa la capacidad
de tres especies vegetales Amaranto, Acelga y Alfalfa para absorción de plomo en
suelos contaminados utilizando la técnica de fitorremediación. Las plantas se
desarrollaron en semilleros, para luego ser trasplantadas a una matriz de suelos
contaminados con plomo. La germinación de las mismas se dio bajo dos condiciones:
Germinación de las semillas en el invernadero sin la adición de abonos o nutrientes para
su crecimiento y Germinación de semillas en una empresa especialista en esta actividad
(Pilvixa) en la cual al momento del crecimiento de las especies se realizó la adición de
abonos orgánicos y nutrientes para su crecimiento. Para la cuantificación de plomo se
usó la técnica de absorción atómica por llama. Las mediciones se realizaron a los suelos
iniciales sin contaminación, suelos contaminados, a los 20, 30, 45, 60 y 90 días de
exposición de las especies en el suelo contaminado y al suelo final fitorremediado. Las
tres variedades de plantas en estudio que fueron expuestas a abono orgánico durante
la germinación en semillero presentaron mayor absorción que las plantas que no
tuvieron adición de ningún tipo de abono. Con los resultados obtenidos se determinó el
número de cultivos que se necesitan para alcanzar las concentraciones establecidas
por la Tabla 3, Anexo 2, libro 6 del TULSMA (100 mg/Kg).

En México (Ortiz, 2009) investigó sobre las actividades mineras y metalúrgicas


practicadas en la Comarca Lagunera, México han contaminado el suelo, el aire y el agua.
El uso de plantas es una de las estrategias para la remediación de suelos contaminados
con metales pesados. Sin embargo, son pocos los estudios sobre remediación con
plantas de zonas áridas y su asociación con micorrizas. El objetivo de este estudio fue
evaluar la capacidad extractora de Plomo (Pb) y Cadmio (Cd) del quelite (Amaranthus
hybridus L.) al adicionar una mezcla de micorrizas arbusculares (Entrophospora
columbiana, Glomus intraradices, G. etunicatum, G clarum) al sustrato contaminado con
Pb o Cd. Dos experimentos, uno por cada metal, con diseño experimental de bloques al
azar con cuatro repeticiones fueron desarrollados. En el primero se adicionaron tres
cantidades de micorrizas (0-2.5 y 5.0 g·kg-1) en suelos con 300 mg·kg-1 de Pb. En el
segundo experimento, las mismas cantidades de micorrizas fueron probadas en suelos
contaminados con 15 mg·kg-1 de Cd. Las concentraciones de Pb y Cd en raíz, hoja y
tallo a los 65, 95 y 125 días de edad de la planta se determinaron con un
espectrofotómetro de absorción atómica. Los resultados indican que la adición de
micorrizas incrementó significativamente (P<0.05) la concentración de Pb y Cd en raíz,
tallo y hoja de quelite. Las concentraciones de estos metales se incrementaron
significativamente conforme la edad de la planta.

En México (Rodríguez, 2006) investigó sobre el uso de especies vegetales como


agentes descontaminantes de suelos contaminados por metales pesados representa
una alternativa tecnológica económica y limpia que merece ser estudiada. En el pre-
sente trabajo se evaluaron las especies: Cenchrus ciliaris, Helianthus annus, Ricinus
communis, Nicotiana tabacum, Sorghum sudanense y Brassica campestris, que fueron
cultivadas en macetas con un suelo de textura franco arenosa que se contaminó
artificialmente con 0, 500 y 1000 mg de Pb kg-1 de suelo con el objetivo de evaluar su
capacidad de acumular plomo. Las especies difirieron en su capacidad de acu- mular
plomo. En el tratamiento 500 mg de Pb kg-1 de suelo el orden de estas capacidades (P
≤ 0.05) fueron: N. tabacum (3.27 y 3.08 mg de Pb kg-1 en la materia seca total y en la
parte aérea respectivamente) > R. communis > C. ciliaris > S. sudanense > B. campestris
> H. annus. Mientras que en el tratamiento 1000 mg de Pb kg-1 de suelo el orden (P ≤
0.05) fue: R. communis (6.79 y 3.94 mg de Pb kg-1 en la materia seca total y parte aérea
respectivamente) > S. sudanense > C. ciliaris > H. annus > N. tabacum = B. campestris.
Con base en la literatura especializada, no se identificó a ninguna de las seis especies
evaluadas como “hiperacumuladora de plomo”.

A Nivel Nacional
En Huancayo, Perú (Yarasca, 2015) realizó una Investigación donde: la biorremediación
se considera una tecnología viable y rentable emergente que tiene como responsabilidad
limpiar los elementos traza de metales pesados como es el caso del plomo. Este método
no ha sido muy propagada por la existencia de diversas dudas al respecto. Estos pueden
resumirse como la incertidumbre del sistema de comportamientos en diferentes
escenarios, tales como: contaminante, la concentración de contaminante y el
comportamientos de la fisiología de la planta. Enfoques anteriores han implementado
diversos algoritmos matemáticos a caracterizar los sistemas de fitorremediación, tales
como: juegos de ecuaciones diferenciales de soluciones, correlación estadística y
dinámica de sistemas. La fitorremediación con un enfoque dinámico emplea la estructura
clásica de plantas para simular plantación interacción suelo-contaminante. Este modelo
ha demostrado su capacidad para reproducir procesos de fitorremediación de plomo,
obteniendo más del 95% de correlación con los datos experimentales, y también
proporciona la capacidad de saber la velocidad de flujo de contaminantes y su
concentración en el tejido vegetal. El sistema de ecuaciones diferenciales que describe
el modelo incluye un parámetro global que encapsula la dependencia de
biodisponibilidad de la planta en el contaminante-y su interacción con los medios. El
modelo ha demostrado la capacidad para imitar respuesta de la planta como una función
de la concentración de contaminantes y su aplicabilidad como herramienta de evaluación
del rendimiento del sistema para la fitorremediación.

En Arequipa, Perú (Paiva, 2015) realizó una Investigación donde: la mayor problemática
ambiental que actualmente viene atravesando el planeta tierra es la contaminación de
los suelos por metales pesados que son herencia del uso excesivo e indiscriminado de
sustancias químicas como los plaguicidas fertilizantes en la actividad agrícola, la
fabricación de pinturas, barnices, las actividades mineras y metalúrgicas que han venido
contaminando los ecosistemas y especialmente los cuerpos de agua, suelo , aire , con
residuos de metales como el Cu, Zn, Pb, Cd, As, Cr, Hg, productos estos que no se
degradan y, en el tiempo siguen acumulándose provocando efectos negativos en los
organismos principalmente en las plantas para luego pasar a los animales y al hombre
generando impactos negativos en el ambiente. Este problema ha generado el interés
de muchos investigadores que se han enfocado hacia el desarrollo de nuevas
tecnologías una de ellas es la fitorremediación considerada como una alternativa para
el tratamiento de los suelos contaminados con metales pesados, en las últimas décadas
ha adquirido auge por ser un procedimiento pasivo útil para remediar simultáneamente
una serie de contaminantes. Con base en lo anterior el principal objetivo de la presente
investigación es evaluar la capacidad de absorción y acumulación de plomo por la raíz,
tallo hojas e inflorescencia en Amaranthus spinosus (jatacco silvestre, opa jatacco ojo
de pescados) sometido a diferentes concentraciones de este metal.

En Trujillo, Perú (Hoyos y Guerrero, 2014) Investigaron la concentración de plomo y


cadmio por bioacumulación en Brassica Oleracea subsp. capitata (L.) Metzg. Y
Raphanus sativus L., regadas con aguas a diferentes concentraciones de cada metal.
Para ello se trabajó con 20 plantas de B. oleracea subsp. capitata (L.) Metzg. Y R. sativus
L., con 14 días de desarrollo vegetativo, trasplantadas aleatoriamente y de forma
individual en pozas experimentales con suelo homogenizado franco arenoso libre de
metales plomo y cadmio. Éstas, asimismo, fueron sometidas a tratamientos de 0, 150 y
300 mg/L de cada metal con 4 repeticiones durante 60 días, se recolectaron muestras
de suelo, raíz y parte aérea de cada especie vegetal para los análisis correspondientes
de plomo y cadmio por espectrofotometría de absorción atómica Perkin Elmer. Los
resultados con un nivel de confianza del 95% refieren que en la parte aérea de B.
oleracea subsp. capitata (L.) Metzg., en la raíz de R. sativus L., y en el suelo donde
fueron cultivadas, existe diferencia estadísticamente significativa entre las
concentraciones de plomo y cadmio de un tratamiento a otro. Se concluye, por tanto, que
en la parte aérea de B. oleracea subsp. capitata (L.) Metzg., y en la raíz de R. sativus L.,
el plomo y el cadmio se bioacumulan con mayor concentración en soluciones de 300
mg/L, lo que demuestra que existe una relación direccional ascendente con las
soluciones concentradas de los diferentes tratamientos.

En Lima, Perú (Chávez, 2014) realizó una Investigación donde: pese a la elevada
contaminación de plomo en el suelo, hay muchas especies vegetales que han
desarrollado estrategias para prosperar bajo condiciones adversas, lo cual las convierte
en especies potenciales para ser utilizadas en procesos de fitorremediación. En este
estudio, se recolectaron 37 muestras vegetales de 12 sitios localizados en la ciudad de
La Oroya y lago Junín (departamentos de Cerro de Pasco y Junín - Perú), lugares con
pasivos mineros, seleccionando 2 especies pertenecientes a los géneros Calamagrostis
y Nicotiana para su cultivo bajo 3 niveles de plomo 700 ppm, 1000 y 1200 ppm, debido
a su elevada concentración de plomo encontrada en campo (3180 ppm radicular y 143
ppm aérea, y 1883 ppm en flores y 2136 ppm en Tallos respectivamente). Junto a estas
fue cultivado Vetiver (Vetiveria zizanoides) a fin de comparar su potencial fitorremediador
con el de las especies nativas mencionadas en invernadero bajo un diseño factorial con
nivel de significancia de 0.01% durante 60 días en la Universidad Agraria - Lima. Del
estudio se concluyó que la Nicotiana tiene un mejor potencial de fitorremediación por su
desarrollo de biomasa aérea, la elevada concentración de biomasa (276.7 ppm en zona
radicular, y 96.5ppm en zona aérea), extracción del metal (0.3 mg de Pb), capacidad de
natural de translocar el metal hacia las partes aéreas e inmovilización del metal en la raíz
(Factor de Translocación: 0.39) y a su mejor adaptación a otras condiciones climáticas.
Se pudo corroborar también la hipótesis de que las plantas nativas son las más
adecuadas para fitorremediar espacios naturales. Estos resultados podrían mejorarse
con condiciones climáticas más favorables para las especies nativas así como un mayor
tiempo de evaluación. Podría incluirse también algunos otros metales pesados en la
evaluación a fin de determinar si estas plantas pueden usarse para fitorremediar suelos
con contaminación polimetálica.

En Huancayo, Perú (Peña y Beltrán, 2013) encontraron que: durante la Aplicación de la


fitorremediación en suelos contaminados por metales pesados utilizando Helianthus
annuss L. en la Estación Experimental agropecuario el Mantaro, consta de haber
utilizado Helianthus annuss L, la cual ha sido instalado en 03 lotes (A, B, y C) de la
estación experimental EL MANTARO”, de la UNCP, para descontaminar los suelos
contaminados por metales pesados (cobre, cadmio, cromo, hierro, manganeso, plomo ,
y metaloides antimonio y arsénico para ello se tomaron muestras de suelos en tres
etapas diferentes, antes del cultivo, en el cultivo y después de la cosecha; para el análisis
de suelos se utilizó el método analítico instrumental de ICP-Masas, analizados en el
Laboratorio Certificado por la Indecopi J. Ramon: Los resultados de la concentración de
metales pesados en el lote A fueron: Pb ( 111,5 ppm). Los resultados de la concentración
de metales pesados en el lote B son: Pb (54,5 ppm). Los resultados de la concentración
de metales pesados en el lote C es: Pb (44,2 ppm) y después de la cosecha de la planta
los resultados fueron los siguientes: Lote A Pb (60,07 ppm), para el lote B: Pb (39,1ppm)
Y lote C es: Pb (43,6 ppm). Los resultados de la caracterización fisicoquímica del suelo
contaminado, fue analizado en la Universidad Agraria La Molina nos reportó: pH 6,93,
Conductividad eléctrica 0,58, Porcentaje de carbonato 6,0, Porcentaje de Materia
Orgánica 3,31, Capacidad de intercambio catiónico 15,78 y la textura Suelo Franco.

2.2. Bases teóricas


2.2.1. Metales pesados

Los metales pesados son un grupo de elementos químicos que tienen una densidad
mayor de 4 g/cm3 a 7 g/cm3. El término siempre suele estar relacionado con la
toxicidad que presenta. Dentro de los metales pesados hay dos grupos los
micronutrientes que son necesarios en pequeñas cantidades para los organismos,
pero tóxicos una vez pasado cierto umbral. Incluyen As, B, Co, Cr, Cu, Mo, Mn, Ni,
Se y Zn; y los metales pesados sin función biológica conocida que son altamente
tóxicos y presentan la propiedad de acumularse en los organismos vivos. Son
principalmente Cd, Hg, Pb, Cu, Ni, Sb y Bi (Cordero, 2015).

Las concentraciones de metales pesados en los suelos están asociadas a los ciclos
biológicos y geoquímicos y pueden alterarse por actividades antropogénicas como
las prácticas agrícolas, el transporte las actividades industriales la eliminación de
residuos, entre otras. Por otra parte es bien conocido que los metales pesados son
peligrosos porque tienden a bioacumularse en los seres vivos (Cordero, 2015).

Entre los metales pesados hay elementos esenciales y no esenciales para los seres
vivos, aunque el límite entre estos dos grupos no está claramente delimitado y la lista
de elementos biológicamente importantes aumenta con el tiempo. Normalmente se
reconocen como elementos esenciales al Fe, Mn, Zn, Cu, Co y Mo, como elementos
benéficos al Ni y Cr para algunas plantas, y se considera que no tienen ninguna
función biológica ó no esenciales a los elementos como el Cd, Hg, Pb y As (Bowen,
1979); ya sean esenciales o no, pueden llegar a ser tóxicos cuando su aporte es
excesivo y afectar negativamente al crecimiento y reproducción de los organismos,
pudiéndoles causar incluso la muerte. La presencia de estos en los suelos inhibe
además la actividad enzimática microbiana y reduce la diversidad de las poblaciones
de flora y fauna, provocando infertilidad en los suelos incrementando los procesos
erosivos. En las plantas la acción tóxica está determinada por su accesibilidad al
organismo y por reacciones bioquímicas y fisiológicas (Ferguson, 1990), cuyos
efectos pueden ser inhibición de la fotosíntesis y de la respiración, alteración de la
relación hídrica, marchitamiento, bloqueo de enzimas, o del transporte de
nutrimentos, sustitución de elementos esenciales de las biomoléculas, entre otros
(Castro, 2013).

La transferencia al hombre puede ocurrir a través del suelo (inhalación e ingestión de


polvo), alimentos, agua, aire o piel (resultado de la absorción dérmica de
contaminantes del suelo y agua) (Chaney, 1997). Los efectos toxicológicos hacia los
humanos, particularmente de Cd, Zn, Hg, Pb y de metaloides como el As, representan
algunos de los más peligrosos. A continuación se presentan características de los
elementos empleados en este trabajo (Castro, 2013).
 ¿De dónde provienen?
Todos los metales pesados se encuentran presentes en los medios acuáticos (el
agua químicamente pura no existe en la naturaleza), aunque sus concentraciones
(en ausencia de contaminación) son muy bajas. Los metales pesados se
encuentran en estas aguas como coloides, partículas minerales (sólidos en
suspensión), o fases disueltas (cationes o iones complejos). Las formas coloidales
suelen dar lugar a la formación de hidróxidos, mientras que las partículas sólidas
incluyen una gran variedad de minerales. Las fases disueltas pueden a su vez ser
capturadas por adsorción o absorción en arcillas o hidróxidos. Adicionalmente, los
compuestos orgánicos pueden constituir fases con gran capacidad de captura de
cationes metálicos, que en ocasiones dan lugar a fases extremadamente tóxicas
(Cordero, 2015).

 ¿Dónde se encuentran?
Los metales pesados se encuentran en los alimentos que comemos, el aire que
respiramos, en los edificios, ropa, maquinaria, agua del grifo, empastes dentales
y utensilios de cocina entre muchas otras situaciones cotidianas. Algunos metales
son necesarios ya que son minerales que nuestro cuerpo necesita. Pero la
mayoría de los metales pesados son tóxicos y causan cáncer, problemas de
tiroides, deficiencias en el aprendizaje, problemas neurológicos, desequilibrios
hormonales y muchos otros problemas de salud (Cordero, 2015).

A). Metales pesados en el ambiente


Los metales pesados son componentes naturales de la corteza de tierra. Como
elementos de rastro, algunos metales pesados (ejemplo; plomo, cobre, selenio,
cinc) son esenciales mantener el metabolismo del cuerpo humano. Sin embargo,
en concentraciones más altas pueden conducir al envenenamiento. El
envenenamiento por metal pesado podría resultar, por ejemplo, de la
contaminación del agua potable (tuberías del plomo), las altas concentraciones
en el aire cerca de fuentes de la emisión, o a través de la cadena alimenticia
(Castro, 2013).
Los metales pesados son peligrosos porque tienden a bioacumularse. La
bioacumulación significa un aumento en la concentración de un producto químico
en un organismo biológico en un cierto plazo, comparada a la concentración del
producto químico en el ambiente (Castro, 2013).
Tabla 1: Concentraciones máximas de metales pesados en suelo

receptor

B). Propiedades del Plomo

 PLOMO
Es un elemento químico cuya nomenclatura es Pb, de número atómico 82,
peso atómico 207.19 y valencias químicas 2 y 4. El plomo es un metal pesado
de color azuloso, que se oscurece para adquirir un color gris mate, es flexible,
inelástico, se funde con facilidad y es relativamente resistente al ataque de
los ácidos sulfúrico y clorhídrico, pero se disuelve con lentitud en ácido nítrico
(Bonilla, 2013).
El plomo es un metal pesado, azuloso, suave y maleable, usado en varios
procesos industriales. Existe naturalmente en la corteza terrestre, de donde
es extraído y procesado para usos diversos. Cuando el plomo es ingerido,
inhalado o absorbido por la piel, resulta ser altamente tóxico para los seres
vivos en general y para los humanos en particular. Es tóxico para los sistemas
endócrino, cardiovascular, respiratorio, inmunológico, neurológico, y
gastrointestinal además de poder afectar la piel y los riñones. No es
biodegradable y persiste en el suelo, aire, agua y hogares. Nunca desaparece
sino que se acumula, en los sitios en los que se deposita y puede llegar a
envenenar a generaciones de niños y adultos a menos que sea retirado. Los
efectos biológicos del plomo, son los mismos, independientemente de que
entre en el organismo por inhalación o ingestión. El plomo interfiere con la
función celular normal y con varios procesos fisiológicos (Castro, 2013).

PLOMO Y SUS EFECTOS


El plomo es un contaminante mayor en el ambiente y que genera gran
preocupación para la salud humana y los ecosistemas debido a que por peso
molecular tiende acumularse en suelos, sedimentos y cuerpos de agua en
forma rápida y a permanecer en el ambiente como un contaminante
atmosférico (Chávez, 2014).
 EN LA SALUD
El plomo a través de los años ha sido usado en la fabricación de tuberías,
elementos de construcción, pigmentos, soldadura suave, pinturas,
gasolina, pesticida, cables y productos metálicos, convirtiéndose en la
fuente de contaminación de alimentos, agua de consumo y aire,
constituyendo el cuarto metal con mayor efecto perjudicial sobre la salud
humana (Bonilla, 2013).
Los compuestos del plomo son tóxicos y han producido envenenamiento
de trabajadores por su uso inadecuado y por una exposición excesiva a
los mismos, en general, la absorción de plomo puede constituir un grave
riesgo para la salud dado que puede provocar un retraso del desarrollo
mental e intelectual de los niños y causar hipertensión y enfermedades
cardiovasculares en los adultos. En el 2006 la Agencia Internacional para
la Investigación del Cáncer (IARC) clasificó al plomo inorgánico como
probable carcinógeno para los humanos (Grupo 2A). En la Figura se
presenta las rutas de llega del Pb, al sistema digestivo o al respiratorio de
los humanos(Bonilla, 2013).
Figura 1: Rutas de contaminación humana por Pb

El plomo es un metal carente de valor biológico, es decir, no es


requerido para el funcionamiento normal de los seres vivos; debido
a su tamaño y carga, el plomo puede sustituir al calcio por tanto su
área de acumulación son los tejidos óseos y las vías de
contaminación humana que pueden ser por inhalación e ingestión
de agua y alimentos, causando diferentes efectos como: (Bonilla,
2013).
 Pérdida de los reflejos, anemia, pérdida de la fertilidad,
problemas en el sistema nervioso, graves daños al cerebro
(encefalopatía) y envenenamiento por plomo cuando los
niveles de plomo en la sangre alcanzan 40 μg/dl o más.
 En el caso de mujeres embarazadas el plomo puede entrar en
el feto a través de la placenta de la madre. Debido a esto puede
causar serios daños al sistema nervioso y al cerebro de los
niños por nacer.
 En adultos que trabajan en ambientes expuestos a la
contaminación con plomo, el metal puede acumularse en los
huesos, donde la permanencia media es superior a los 20 años
como muestra la Figura 1.5. La osteoporosis, embarazo, o
enfermedades crónicas pueden hacer que éste plomo se
incorpore rápidamente a la sangre (Bonilla, 2013).

Figura 2: Acumulación de plomo en piezas dentales

Los problemas relacionados con la sobreexposición al plomo en adultos


incluyen:
 Daño en los riñones.
 Daño en el tracto gastrointestinal.
 Daño en el sistema reproductor.
 Problemas en la síntesis de la hemoglobina.
 Daño en los órganos productores de sangre.
 Daños neurológicos.
 Abortos.

 EN LAS PLANTAS
Para el caso de las plantas, el síntoma predominante en plantas no
tolerantes al plomo es un severo retraso en su crecimiento, menor peso
de las raíces y aparición de nuevos brotes en la planta (Verma y Dubey,
2003), debido a la alteración de actividad enzimática, así como de la
nutrición mineral y el balance hídrico, afectando en general el estado
hormonal y celular. También, es marcada la disminución en los niveles de
fotosíntesis, especialmente en la fase II de este proceso debido a la
inhibición del transporte de electrones (Miles et al., 1972), con la
consecuente reducción en la acumulación de carbohidratos producto
principal de la fotosíntesis (Chávez, 2014).

C). Contaminación por metales pesados


La actividad industrial y minera arroja al ambiente metales tóxicos como plomo,
mercurio, cadmio, arsénico y cromo, muy dañinos para la salud humana y para
la mayoría de formas de vida. Además, los metales originados en las fuentes de
emisión generadas por el hombre (antropogénicas), incluyendo la combustión de
gasolina con plomo, se encuentran en la atmósfera como material suspendido
que respiramos. Por otro lado, las aguas residuales no tratadas, provenientes de
minas y fábricas, llegan a los ríos, mientras los residuos industriales contaminan
las aguas subterráneas. Cuando se abandonan metales tóxicos en el ambiente,
contaminan el suelo y se acumulan en las plantas y los tejidos orgánicos
(Gonzales, 2016).

La peligrosidad de los metales pesados es mayor al no ser química ni


biológicamente degradables. Una vez emitidos, pueden permanecer en el
ambiente durante cientos de años. Además, su concentración en los seres vivos
aumenta a medida que son ingeridos por otros, por lo que la ingesta de plantas
o animales contaminados puede provocar síntomas de intoxicación. De hecho,
la toxicidad de estos metales ha quedado documentada a lo largo de la historia:
los médicos griegos y romanos ya diagnosticaban síntomas de envenenamientos
agudos por plomo mucho antes de que la toxicología se convirtiera en ciencia
(Gonzales, 2016).

D). Efecto de los metales pesados en el suelo

El suelo se ha convertido en un medio receptor de multitud de sustancias


potencialmente contaminantes. Su condición de interface entre la biosfera
(biomasa terrestre, biomasa marina y hombre), la litosfera (corteza, suelo y
sedimentos), la hidrosfera (agua dulce y agua de mar) y la atmósfera lo convierte
en una “estación de tránsito” de los contaminantes, en la que pueden
permanecer retenidos grandes períodos de tiempo (lo que aumenta la posibilidad
de que puedan ser degradados y perder su naturaleza contaminante) o ser tan
móviles que se incorporen a los demás medios y, de ahí, a las redes tróficas con
los consecuentes problemas que ello acarrearía (Paiva, 2015).
Figura 3: La dinámica de los contaminantes en el suelo y las interacciones entre planta-
animal-hombre-medioambiente son factores todos ellos a tener en cuenta a la hora de
evitar problemas de contaminación.

E). Factores que afectan a la disponibilidad de los metales


Para conocer el comportamiento de los metales pesados en los suelos deben
considerarse los siguientes factores:

Propiedades del suelo.


Tales como el pH, la textura, las condiciones de óxido-reducción, el contenido en
materia orgánica, la capacidad de intercambio catiónico y la presencia de otros
elementos.
 pH.
Es el principal factor de control de la disponibilidad de los metales para las
plantas. La mayor parte de los metales tienden a estar más disponibles a pH
ácido, ya que al producirse un descenso del mismo se mejora tanto la
solubilidad de los metales como su absorción por las raíces de las plantas.
En algunos casos, suele ocurrir que un incremento del pH del suelo no
provoca necesariamente una disminución en la disponibilidad de los metales
como ocurre con el As, Mo, Se y Cr. De manera que, el pH es un parámetro
importante para definir la movilidad del catión, debido a que en medios de pH
moderadamente alcalino se produce la precipitación como hidróxidos. Sin
embargo, en medios muy alcalinos estos hidróxidos pueden pasar de nuevo
a la solución como hidroxicomplejos. Por otra parte, algunos metales como
Se, V, As y Cr pueden estar en la disolución del suelo en forma de aniones
solubles (Paiva, 2015).

 Textura
Los suelos de textura fina proceden probablemente de minerales
secundarios que se alteran con facilidad y que son generalmente la
fuente principal de metales pesados. Los suelos de textura gruesa
tienen minerales primarios como el cuarzo, con un bajo contenido en
metales pesados.

 Condiciones de óxido-reducción.
Muchos metales forman sulfuros relativamente insolubles en
condiciones fuertemente reductoras. Éstos incluyen el Cd, Zn, Ni, Co,
Cu y Pb. Otros metales como Fe y Mn pueden volverse más solubles en
estas condiciones.

 Materia orgánica
La materia orgánica del suelo presenta una elevada afinidad por ciertos
metales (Co, Cu, Mo, Ni, Pb y Zn), reaccionando con ellos e influyendo
en su disponibilidad. La disponibilidad de los metales está
generalmente asociada con la formación de complejos de los metales
con las sustancias húmicas y con otros compuestos de elevado peso
molecular. Los metales, una vez que forman estos complejos, pueden
migrar más fácilmente a las capas profundas o mantenerse en la
solución del suelo como complejos orgánicos solubles (Paiva, 2015).

 Capacidad de Intercambio Catiónico (CIC).


La CIC es una función del contenido en arcilla y materia orgánica del
suelo, controla también la disponibilidad de los metales. En general, un
incremento en la CIC produce un aumento en el tiempo en que estos
metales se encuentran disponibles para las plantas dado que aumenta
la capacidad del suelo de fijar metales.(Gonzales, 2016)

F). Comportamiento de los metales pesados en el sistema suelo-planta

El sistema suelo-planta se considera un sistema abierto, que se encuentra


sujeto a aportes, tales como contaminantes, fertilizantes y pesticidas, y
también a pérdidas, mediante lixiviación, erosión o volatilización. La
incorporación de los metales pesados por las plantas se produce
fundamentalmente desde el suelo, a través de las raíces, y está influenciada
por varios factores entre los que destacan el tipo de suelo, la temperatura,
pH, aireación, condiciones redox y fertilización, la especie vegetal, el
momento del desarrollo y el sistema radicular, entre otros. Aparte de la
absorción que tiene lugar por medio de las raíces, las plantas también
pueden incorporar cantidades significativas de algunos elementos a través
de la absorción foliar. Una vez que los iones metálicos han sido
absorbidos, pueden moverse por toda la planta. Este movimiento depende
del tipo de metal, del órgano de la planta y de su edad. En general, la
proporción en que los elementos son movilizados en el interior de las
plantas disminuye conforme al siguiente orden: Cd>B>Zn>Cu>Pb (Sierra,
2006).

Los metales pesados incorporados al suelo pueden seguir cuatro


diferentes vías:

 Quedar retenidos en la solución del suelo o bien, fijados por adsorción,


complejación y/o precipitación.

 Ser absorbidos por las plantas e incorporarse a las cadenas tróficas.

 Pasar a la atmósfera por volatilización.

 Movilizarse a las aguas superficiales o subterráneas.

Cuando un contaminante se incorpora al suelo desencadenarse una serie


de procesos físicos, químicos o biológicos que condicionan los efectos
que éste puede causar no sólo sobre el sistema suelo sino también sobre
el resto de compartimentos ambientales y, sobre la cadena trófica. Para
valorar el impacto ambiental de la contaminación en el sistema suelo-planta
se deben conocer las características del contaminante, del medio receptor
y su entorno y, los modelos que rigen el comportamiento del contaminante
y su transferencia a las plantas. Una vez incorporado el contaminante, éste
puede verse influenciado por procesos tales como transformación,
retención y transporte (Sierra, 2006).
Figura 4: Dinámica de los metales pesados en el sistema suelo-planta

G). Daños hacia la salud

La exposición a estos elementos está relacionada con problemas de salud como


retrasos en el desarrollo, varios tipos de cáncer, daños en el riñón, e, incluso,
con casos de muerte.
La relación con niveles elevados de mercurio, oro y plomo ha estado asociada al
desarrollo de la autoinmunidad (el sistema inmunológico ataca a sus propias
células tomándolas por invasoras). La autoinmunidad puede derivar en el
desarrollo de dolencias en las articulaciones y el riñón, tales como la artritis
reumática, y en enfermedades de los sistemas circulatorio o nervioso central
(Ortiz, 2009).

2.2.2. Definición de fitorremediación


La fitorremediación es una metodología dentro de la biorremediación que
consiste en el uso de especies vegetales que debido a su capacidad de
absorber, volatizar, tolerar y acumular altas concentraciones de
contaminantes permiten la remoción de los mismos; esta práctica se
diferencia de otras ya que tiene las características ser económica, no
compleja y limpia ya que no afecta la estructura del suelo, ni utiliza reactivos
químicos. La aplicación de esta técnica se basa en prácticas agronómicas
comunes que buscan acercarse al estado óptimo del recurso, este entendido
como la capacidad del suelo de realizar sus funciones de la mejor manera.
Esta estrategia presenta las ventajas de que se pueden realizar in situ, es
decir sin necesidad de transportar el suelo o sustrato contaminado, son de
bajo coste, permiten su aplicación, tanto a suelos como a aguas, sólo
requieren prácticas agronómicas convencionales, actúan positivamente
sobre el suelo, mejorando sus propiedades físicas y químicas, y son
ambientalmente aceptables, debido a que se basan en la formación de una
cubierta vegetal (Cordero, 2015).
Esta alternativa contempla varios procesos los cuales contribuyen a la
descontaminación de suelos, aguas contaminadas y sedimentos por medio
del uso de plantas como lo son: la fitoestabilización, fitoextracción,
fitoestabilización, fitovolatización, rizofiltración, la fitodegradación, etc.
A). Tipos de fitorremediación

i. Fito extracción: La fitoextracción hace referencia a la absorción de


contaminantes del suelo por las raíces de las plantas, y su transporte a
las partes aéreas o cualquier parte que sea recolectable, para eliminar
los contaminantes y promover una limpieza a largo plazo del suelo.
Según este enfoque, las plantas capaces de acumular metales deben
ser plantadas en las zonas contaminadas y la biomasa enriquecida en
metales pesados por la absorción radicular debe ser cosechada. Como
resultado, una fracción de metal pesado se elimina del sistema. El éxito
de la fitoextracción como técnica de rehabilitación potencial depende de
factores como la disponibilidad de los metales, así como de la capacidad
de las plantas para absorber y acumular los metales en las partes
aéreas. La biomasa cosechada normalmente se incinera, y raramente se
recicla o se usa debido a su carga contaminante. Las plantas ideales
para la fitoextracción deben tener la habilidad de producir grandes
cantidades de biomasa, ser fáciles de recolectar, y tener un rango amplio
de acumulación de metales pesados en sus partes recolectables
(Bonilla, 2013).
ii. Rizo filtración: la rizofiltración emplea plantas cultivadas
hidropónicamente (sin tierra, sólo con un suero enriquecido que
incorpora todos los nutrientes necesarios para la planta), para absorber
con sus raíces la toxicidad concentrada en el agua.
El agua contaminada se dispone en piscinas o estanques, o también se
aplica como riego. En función del problema medioambiental que tratar,
el cultivo hidropónico es trasladado a un emplazamiento contaminado, o
bien el agua tóxica es transportada a un lugar de cultivo y tratamiento
centralizado. (Peña y Beltrán, 2013)

iii. Fito estabilización: permite inmovilizar contaminantes en el suelo a


través de su absorción y acumulación en las raíces o bien, por
precipitación en la zona de la rizósfera. Este proceso reduce la movilidad
de los contaminantes y evita su migración a las aguas subterráneas o al
aire.(Peña y Beltrán, 2013)

iv. Fito degradación: las plantas y los microorganismos asociados a


ellas degradan los contaminantes orgánicos en productos inofensivos, o
bien, mineralizarlos hasta CO2 y H2O. En este proceso los
contaminantes son metabolizados dentro de los tejidos vegetales y las
plantas producen enzimas como la dehalogenasa y la oxigenasa, que
ayudan a catalizar la degradación.(Peña y Beltrán, 2013)

v. Fito volatilización: se produce a medida que los árboles y otras


plantas en crecimiento absorben agua junto con contaminantes
orgánicos e inorgánicos. Algunos de estos pueden llegar hasta las hojas
y evaporarse o volatilizarse en la atmósfera.(Peña y Beltrán, 2013)

B). Plantas utilizadas en la fitorremediación para metales


pesados (plomo)

Hay plantas que tienen la interesante capacidad de limpiar los ambientes


contaminados. Pueden acumular o transformar sustancias tóxicas que
aparecen en el suelo o el agua. Las plantas también ayudan a impedir
que el viento, la lluvia y las aguas subterráneas extiendan la
contaminación a otras zonas. Este uso de las plantas se conoce como
“fitorremediación”, y aunque es bastante reciente, ofrece ventajas muy
interesantes, como el bajo costo y la rapidez del proceso. Al tomar por
las raíces el agua y los nutrientes, las plantas también extraen del suelo
los contaminantes. Dependiendo de la sustancia, podrá almacenarse en
las raíces, tallos y hojas, o transformarse en sustancias menos
perjudiciales en el interior de la planta o en gases no tóxicos que se
liberan al ambiente, entre las más comunes tenemos.

 Brassica Juncea:

Brassica Juncea es el nombre botánico de esta especie perteneciente


a la familia Cruciferae y es conocida de forma común como: hojas de
mostaza, mostaza de la india, mostaza oriental y mostaza parda.
(Rodríguez, 2006)

Figura 5: Brassica Juncea

Descripción general:

Esta Anual original de Europa del Norte a Asia Central puede llegar a
alcanzar setenta y cinco centímetros de altura y veinticinco
centímetros de anchura. Brassica Juncea se vale de antófilos para
polinizar sus flores de color amarillo dotadas de unidades
reproductivas hermafroditas.

Necesidades:

La especie Brassica Juncea se desarrollará mejor en suelos con PH,


ácido, neutro, alcalino o muy alcalino. Su parte subterránea crecerá
con vigor en soportes con textura arenosa, franca o arcillosa, éstos
se pueden mantener generalmente húmedos. Es de suma
importancia regar teniendo en cuenta la información anterior, pero
también factores tales como: exposición al sol, temperatura, textura
del suelo, época del año, etc. Todo ello para buscar un equilibrio más
o menos constante en la humedad del soporte. Un aspecto
interesante a comentar es que no tolera los echarcamientos, por lo
que la zona de plantación debe estar muy bien drenada.
En cuanto a sus necesidades lumínicas, podemos aseverar que es
medianamente exigente, puede situarse en un lugar con semisombra
o con exposición directa al sol indistintamente.
Con respecto a su dureza contra condiciones adversas podemos
decir que el rango mínimo de temperaturas con las que puede lidiar
son las de la Zona 7 soportando inclusive heladas.
Usos:
En los últimos años investigadores descubrieron que esta familia de
plantas podía ser un buen fitorremediador de metales pesados tales
como el mercurio que esta entre sus prioridades. (Rodríguez, 2006)

2.3. Hipótesis

2.3.1. Hipótesis general:

 La raíz de la Brassica Juncea (mostaza) es eficiente en la Biorremediación para


remover soluciones con alta concentración de metales pesados, amortiguan y
reducen la biodisponibilidad de los metales pesados, tales como el mercurio,
cadmio, etc. ya que posee una muy alta tolerancia a estas substancias y
almacena los metales pesados en sus células.

2.3.2. Hipótesis específico:

 Los factores óptimos son: Temperatura, Metales, Porosidad, Estructura y tipo de


suelo, Tamaño de la planta.

 La Brassica Juncea (mostaza) no es tan eficientes para la remoción de metales


pesados ya que se requiere también la incorporación de otros tipos de especies
para este tipo de Biorremediación.

2.4. Definición de términos

Biorremediación: Es el uso de seres vivos para restaurar ambientes contaminados,


para la cual se pueden emplear diversos organismos, los más usados son los
microorganismos (tanto bacterias, como algas y hongos) y las plantas (en procesos
llamados Fito remediación).
Brassica juncea: llamado también mostaza castaña, mostaza de la India, mostaza
china, o mostaza de hoja, aparte de ser utilizado en la gastronomía, también es
utilizado en la Fito remediación, para ayudar a extraer metales pesados, tales
como plomo, del suelo en sitio de residuos peligrosos, ya que posee una muy alta
tolerancia a estas substancias y almacena los metales pesados en sus células.
Fito acumulación: Las plantas tolerantes, absorben y translocan metales a parte a
metales a parte aérea. Se rea. Se usan para reducir la movilidad de los mismos y evitar
el pasaje a napas subterráneas o al aire.
Fito estabilización: Las raíces de las plantas absorben, precipitan y concentran metales
pesados.
Fito remediación: Conjunto de métodos para degradar, asimilar, metabolizar o
detoxificar metales pesados, por medio de la utilización de plantas que tengan la
capacidad fisiológica y bioquímica para absorber, retener degradar o transformar
dichas sustancias a formas menos tóxicas.
Fito volatilización: Las plantas absorben les metales pesados y los liberan a la
atmósfera con la transpiración.
Lupinus Albus: Nombre científico del altramuz, también llamado choco o lupino, planta
herbácea de tallo erecto y velloso, hojas palmeadas, flores amarillas, purpuras o azules.
Mercurio: Es un metal pesado altamente tóxico, que amenaza a la salud humana y al
medioambiente.
Plomo: El plomo es un metal pesado de densidad relativa o gravedad específica 11,4
a 16 °C, de color plateado con tono azulado, que se empaña para adquirir un
color gris mate. Si es expuesta se va acumulando en el organismo afectando a diversos
sistemas del organismo, con efectos especialmente dañinos en los niños de corta edad.
Remediación: Remoción de contaminantes del medio ambiente – suelo, aguas
subterráneas o aguas superficiales, para la protección general de la salud humana y
del ambiente, o de tierras provistas para el desarrollo de la agricultura o esparcimiento.
Residuos tóxicos: Los residuos tóxicos son aquellos que contienen sustancias, las que
en grandes cantidades producen riesgos a los seres humanos, a los animales, a las
plantas y a todo el medio ambiente. Los efectos de los residuos tóxicos dependen de
la cantidad, del ritmo de liberación y del tiempo de permanencia en el medio ambiente.

2.5. Definición operativa de variables e indicadores

DEFINICION DEFINICION UNIDAD DE


VARIABLES DIMENCIONES INDICADORES
CONCEPTUAL OPREACIONAL MEDIDA
Brassica Juncea Son capaces de Tamaño de la
es el nombre metabolizar planta
 Tamaño de  Centímetros
botánico de esta metales pesados
VARIABLE especie o bien de la Planta
INDEPENDIENTE: perteneciente a acumular mayor
(Brassica Juncea) la familia cantidad de  Temperatura  Grados °C
nabo silvestre Cruciferae y es contaminantes  pH  0-14
conocida de concentrándolas
forma común en sus hojas,
como: hojas de tallos raíces.
mostaza, Son capaces de
mostaza de la extraer metales
india, mostaza pesados del suelo.
oriental y
mostaza parda.
El plomo es un El plomo es
metal pesado, altamente reactivo
contaminante y Efectos del
producido en consecuentemente plomo en la  Plomo (Pb)  ppm
mayor cantidad puede ser tóxico planta.
en las industrias para las células Disminución del
y mineras y es vivas de plantas plomo en el
VARIABLES potencial dañino El plomo suelo
DEPENDIENTES: para la salud en concentrado en el
Disminución de grandes suelo es capaz de
Concentración de concentraciones. contaminar no solo
plomo Su disminución al suelo mismo
reduce el sino también a
impacto otros seres vivos
ambiental y la como a las plantas,
cuida la salud del animales,
hombre. personas, así
como también al
agua.

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