A partir del texto, cómo veo que en Pavese, el autor se eleva más allá de su dolor con

nombre propio para sublimar-construir una obra artística capaz de producir efecto
estético sobre el espectador.
-“Como hombre, sufre; como escritor, transforma su sufrimiento en arte.” Con estas
palabras, Sontag deja clara y concisamente el proceso que lleva lugar la literatura de
Pavese. El autor toma algo que está dentro de él y lo saca para crear obras a partir de
esta cosa que lo atormenta. Luego de leer el texto de Sontag y empezar el libro Entre
mujeres solas (1949) de Pavese creo poder entender la manera cómo el autor construye
estos personajes que no están cómodos con su propia existencia. A Pavese lo atormentan
un montón de cosas, desde el amor, el sexo y las ganas de morirse; es con esto, con esta
materia prima que empieza a desarrollar historias y personajes que parecen nacer desde
allí. Son personajes que tienen el sufrimiento de la humanidad, puede ser que cada uno
por diferentes motivos, pero sufren en vida.
Revisando el diario de Pavese, El oficio de vivir Sontag encuentra que el hilo
conductor del escrito es cómo usar el sufrimiento, “cómo actuar respecto a él”. Entonces
ella ilumina tres de las maneras cómo Pavese actúa sobre el sufrimiento. La primera es
la literatura, la segunda el aislamiento, “amabas como técnicas para inspirar y
perfeccionar su arte” y la tercera manera es el suicidio que se entiende no como el fin del
sufrimiento sino como la “última manera de actuar sobre el sufrimiento” Así el suicidio
es hacer uso del sufrimiento tal y como Pavese hace uso de este para construir
personajes e historias. “Expresar en forma de arte, con propósito catártico, una tragedia
interior puede hacerlo sólo el artista que a través de la tragedia vivida ya andaba
tendiendo sutilmente sus hilos constructivos, ya desarrollaba una incubación creadora.”
Sacada de El oficio de vivir Pavese nos ilumina sobre su propio proceso creador. Se trata
de tomar el dolor y andar con él. Caminar y caminar, reflexionar sobre él y empezar a
tejer una obra de a pocos.

Sólo así se explica mi vida actual de suicida. Y sé que estoy

condenado para siempre al suicidio ante todo obstáculo y dolor.
Es esto lo que me aterra: mi principio es el suicidio, nunca
consumado, que no consumaré nunca pero que me halaga la
sensibilidad.

Hay que haber sentido el deseo desordenado de la

autodestrucción. No hablo del suicidio: gente como nosotros,
enamorada de la vida, de lo imprevisto, del placer de «contarla»,
no puede llegar al suicidio más que por imprudencia. Y, además,
el suicidio se ve ya como uno de aquellos heroísmos míticos, de
aquellas fabulosas afirmaciones de una dignidad humana ante el
destino, que interesan por su solemnidad pero no tienen que ver
con nosotros.

La unidad del diario de Pavese habría que buscarla en sus reflexiones sobre cómo
usar el sufrimiento, cómo actuar respecto a él. La literatura es uno de sus usos.
Otro, el aislamiento; ambos como técnicas para inspirar y perfeccionar su arte, y
como valor en sí mismo. Y el tercero es el suicidio, uso definitivo del sufrimiento,
concebido no como fin del sufrimiento sino como última manera de actuar sobre
el sufrimiento.

5 obras en las que e tratamiento del dolor es desafortunado:

-Black Swan de Darren Aronofsky (2010)
En la película, el dolor de Nina, la protagonista, parece que ocurriera de afuera
hacia adentro. Me refiero a que es algo externo a ella cuando la angustia viene desde
adentro. Es adentro donde nace y empieza a crecer hacia fuera hasta manifestarse de
diferentes maneras. Nina es la que está sintiendo todas esas cosas, todas las
preocupaciones y ansiedades pero en la película parece que ella no fuera consiente de
sus propios dolores. Todo el tiempo está asustada y esa es otra cosa, las etapas del
sufrimiento de Nina son dos: no entiende nada o es apoderada por una rabia
incontrolable. En ambos casos es un dolor externo a ella y eso no tiene mucho sentido.
No hay capas ni matices en la situación. El personaje es muy plano para estar lidiando
con un tema tan complejo.