La polifonía profana tiene también un desarrollo notable.
La chanson fue un género
cultivado por algunos compositores franco-flamencos. En Italia conviven las formas sencillas como la frottola con el madrigal, género profano por excelencia del XVI. El madrigal toma nombre de la forma poética sobre la que se construye. En términos poéticos, el madrigal es una composición de estructura variable que combina hetpasílabos y endecasílabos con rima consonante. La temática suele ser amorosa. La musica reservata adquiere aquí un significado más profundo. Todo esto convive con formas más locales, como el villancico, el romance y la ensalada en España.
En lo que respecta a la música instrumental encontramos una vinculación aún muy
notable entre polifonía vocal e instrumental. Los géneros que mejor representan esto son el motete instrumental y el ricercare. Ambos utilizan el contrapunto para desarrollar un sujeto, que en esta época mantiene sus características vocales. Tientos y fantasías a menudo mantienen esos mismos principios contrapuntísticos. La chanson vocal tuvo su equivalente en la canzona, intrumental. La influencia de la danza dio lugar a formas instrumentales como pavana, gallarda, alemanda, etc., que tendrían un desarrollo mayor durante el barroco. Por último, las formas semi-improvisatorias como la toccata o el preludio aparecen ya en esta época, y se mantendrán en los dos siglos siguientes.