MODELOS En el devenir histórico, podemos resaltar 3 grandes etapas de la orientación en nuestro país:
Privilegia el método experimental y la evaluación
psicodiagnostica del sujeto individual en su perfil psicológico, pata confrontarlo con las ofertas educativas y laborales y proponerle una serie de carreras o trabajos posibles, sin el acompañamiento en el proceso de elección. El paradigma prevaleciente en esta estrategia es el MODELO de la psicología diferencial. PSICOTECNICO Privilegia el rol del orientador como experto asesor, (1910-1960) quien da un diagnóstico del sujeto y le prescribe una serie de alternativas para que opte de acuerdo a su prescripción. Se destacan los estudios psicométricos, la estandarización de test mentales. Si bien, es la modalidad más antigua, no deja de estar presente en la actualidad en algunas propuestas orientadoras.
Surge a partir de la creación de las carreras de
psicología y de psicopedagogía. Se basa en el psicoanálisis y la psicología social. Aplica la estrategia clínica operativa tomando en cuenta la singularidad de cada situación de consulta, y la focaliza en función de dos ejes relevantes: la educación y el trabajo. MODELO CLINICO Acompaña a los consultantes a construir un (1960-1990) proyecto personal con inserción social. Este modelo privilegia el rol protagónico de los orientados, con el orientador como acompañante. Se aplicó por mucho tiempo y sigue vigente en la orientación de sujetos en transición hacia un nuevo nivel educativo. Opera en forma individual y grupal, y extiende su acción a la realización de talleres en ámbitos de educación y de salud mental. La orientación afronta las aceleradas transformaciones del mundo económico, laboral y sociocultural. Los nuevos desafíos llevan a nuevos paradigmas resaltándose el del pensamiento complejo y el trabajo interdisciplinario para abordar los nuevos escenarios sociales y subjetivos. El pensamiento complejo se despliega en el siglo XX ante el ocaso del pensamiento positivista. El nuevo abordaje epistémico se abre a conocimientos MODELO multidimensionales, reconociendo los principios de INTERDISCIPLINARIO incompletud, articulando dominios disciplinarios. En esta etapa, se utiliza la estrategia constructivista, trabajando con los anudamientos socio-histórico culturales, educativos, laborales que transversalizan a cada sujeto, grupo, institución y comunidad donde se efectúa la orientación, incluyendo a los orientadores como sujetos contextualizados. Este modelo promueve el protagonismo de los orientadores y abre la participación a otros sujetos, grupos o instituciones del contexto que contribuyan a la construcción de los proyectos personales.
La teoría si bien sigue el modelo clínico, se abre a lo multireferencial,
incorporando aportes sociológicos, antropológicos, pedagógicos, de las ciencias políticas y económicas, yendo más allá de un abordaje exclusivamente psicológico, centrado en la subjetividad individual, y sobrepasando al aporte psicotécnico.
Las consultas cambian hoy sus características: se demanda por parte de
estudiantes universitarios que quieran revisar sus opciones luego de incursionar por varias carreras que abandonan, o que habiendo terminado una primera carrera, solicitan ayuda para decidir opciones de postgrado, hacer una segunda carrera o cambiar el ámbito laboral.
La orientación ha diversificado sus ramas: no solamente vocacional
profesional u ocupacional, sino también educacional, laboral, personal y continua.
Las prácticas se realizan en forma de procesos individuales, grupales, mixtos y
de talleres. Los ámbitos pueden ser es educativos públicos y privados, en los distintos niveles educativos, particularmente al finalizar los ciclos primarios y secundarios y en universidades, en hospitales públicos, servicios de salud pública y en prácticas de consultoría privada.
¿Cuáles son los cambios en las subjetividades que nos consultan?
Las movilizaciones históricas, políticas, económicas, sociales modelan de nuevas
maneras las subjetividades emergentes. Las condiciones históricas anudan complejidades que vuelven hoy trabajoso el tema de explotarse y conocerse a uno mismo, así como conocer la realidad contextual, altamente compleja y cambiante.
Concierto en profundidad y comprende estás nuevas condiciones, entender,
traducir y hablar estos nuevos lenguajes humanos, culturales y tecnológicos, se convierte en el desafío actual de los orientadores.
Dentro de estos cambios en los contextos y las subjetividades, son
particularmente interesantes para la orientación los cambios en las subjetividades de género, tanto en las mujeres como en varones.
La formación de los orientadores demanda una actualización y formación
continuas. Requiere de especializaciones de postgrados, abiertas a graduados universitarios en apertura a un amplio abanico interdisciplinario. La orientación es una disciplina en construcción y en transformación. Requiere de nuestro compromiso humano y profesional.
La identidad profesional de los orientadores será en parte una identidad
especializada en el ámbito de sus incumbencias, y en parte una identidad social basada en el vínculo interhumano, en el servicio y la ética