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Diez principios pedagógicos para desarrollar el Período de

Iniciación en las salas de la Escuela Infantil.

Por Rosa Violante


Febrero 2009

El Período de Iniciación corresponde a una primera etapa, al momento en el


cual se recibe a los niños y a sus familias institucionalmente y en las salas,
momento del año en el que se establecen los primeros vínculos y los
"contratos" en relación con las expectativas mutuas entre docentes -
institución educativa y niños con sus familias. Es un período caracterizado
por situaciones educativas centradas fuertemente en el compromiso afectivo-
social que implica la separación de los niños de sus figuras de sostén
familiares y conocidas y la posibilidad de iniciar una red de vinculaciones con
otros adultos y otros niños con quienes se aprenden diversos saberes en un
contexto nuevo con lógicas organizativas temporales y espaciales
particulares y diferentes a las familiares.

Este período inicial persigue el propósito de ofrecer las condiciones


institucionales, materiales, afectivas y sociales adecuadas para que los bebés
y niños puedan lograr establecer vínculos de confianza y seguridad en el
nuevo contexto social con los nuevos adultos y niños. En este sentido se
propone que los niños logren reconocer el ambiente escolar-de la escuela
infantil como un lugar seguro y confiable, como un "buen lugar" al que se
tiene ganas de llegar y quedarse porque ofrece desafíos, nuevas propuestas
y al mismo tiempo mantiene ciertos modos de actuar, de jugar, de comer, de
sentirse escuchado, conocidos.
Los principios que siguen constituyen algunas de las múltiples
consideraciones a contemplar cuando se tiene que planificar, diseñar el
periodo de iniciación.

1° Principio:
Conocer a los niños y que los niños nos conozcan... "tiempo al
tiempo..."

Tomar como puntos de partida la información sobre cada niño relevada en


entrevistas con los familiares y en los informes de los docentes de los años
anteriores (en los casos que cuenten con experiencias previas). Observar
como se comporta cada niño durante las visitas individuales a la sala donde
conoce al docente, el espacio físico y algunos de los materiales con los que
pueden jugar. Al ver los modos de actuar de cada niño se pueden conformar
pequeños grupos que podrán compartir momentos de juego especialmente
pensados. La observación atenta nuevamente dará elementos para armar
actividades con el grupo total o alternar con pequeños grupos. Siempre la
propuesta ha de contemplar la posibilidad de interactuar individualmente en
forma alternativa con cada uno de los niños.

2° Principio:
Organizar tiempos, espacios, materiales que promuevan la
exploración y el juego autónomo brindando posibilidades de
interactuar con otros sólo si se desea hacerlo respetando
modalidades de encuentro particulares.

La modalidad de enseñanza centrada en la construcción de escenarios para


explorar, jugar, mirar libros, armar y desarmar construcciones, dramatizar,
resulta especialmente adecuada en el periodo de iniciación ya que permite al
docente (mientras todos los niños están en tarea/jugando) acercarse
individualmente a cada uno según y compartir juegos, acciones
exploratorias, diálogos, comentarios, descubrimientos. Pueden armarse
escenarios permanentes que se van rearmando semanalmente a modo de

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sectores/rincones. Por ejemplo en el arenero, en distintos sectores diferentes
materiales: palas y baldes, regaderas con agua, tubos transparentes,
coladores. En la sala, juego en rincones/sectores: mesa de arena para juegos
de exploración, mesas de libros, títeres, tarjetas con poemas, materiales
para dramatizar, otros sectores con materiales para construir, dibujar,
pintar, modelar. Todos los materiales ofrecidos en simultáneo en distintos
sectores se proponen para que el niño pueda acceder libremente, rotar,
conocer, compartir con otros o jugar solo.

3° Principio:
Armar itinerarios para acompañar procesos individuales y grupales al
mismo tiempo.

Al referirnos a itinerarios se piensa en el modo particular de secuenciar las


actividades. La idea de Itinerario (Hoyuelos, A. 2008) como "itinerancia, es
incertidumbre, vagabundeo, oportunidad que surge más allá de lo
planificado". Se propone, entonces, planificar una propuesta que diariamente
se modifique y ajuste a los tiempos, posibilidades de cada uno y todos los
niños. En este sentido los itinerarios son secuencias que se van armando y
rearmando mientras se transitan, es una construcción artesanal fruto de la
observación atenta, la reflexión sobre lo sucedido y la búsqueda de
oportunidades que verdaderamente enriquezcan y permitan crecer en
aprendizajes a nuestros niños.
Esto se aleja de las secuencias estereotipadas que suman tiempo reloj cada
día considerando que la secuencia ha de centrarse en ampliar, sumando
tiempos de permanencia hasta completar el horario total y para todos los
casos igual.
También se aleja de interpretar que no se anticipa lo que se propondrá a los
niños a través de una planificación. Se piensa en la planificación como
boceto-idea a desarrollar prevista, decidida y pensada pero como lo posible a
desarrollar y rearmar en el devenir cotidiano.

4° Principio:
Informar a los padres sobre el sentido, objetivos y modalidades de
trabajo durante el período de iniciación. Haciéndolos "cómplices"
"co-autores" del proyecto. Planificar algunas actividades junto con
ellos.

Realizar reuniones o pequeños encuentros cotidianos donde se explique a los


familiares que acompañarán a los niños la importancia que reviste el modo
en que se resuelva esta primera experiencia de separación-encuentro,
señalando criterios a tener en cuenta para mantener una actitud
comprometida y respetuosa de los niños. A modo de ejemplo explicar por
qué no se aceptan "desapariciones" de los papas mientras el niño está muy
interesado jugando. Señalar el sentido de las actividades conjuntas, el
respeto por los diferentes tiempos para cada niño sin que esto se "lea" como
dificultad sino como recorridos personales diferentes. Anticipar los criterios y
actividades que se van a desarrollar y de que modo ellos pueden colaborar
para lograr una iniciación satisfactoria para todos los involucrados.

5º Principio:
Realizar acciones conjuntas con los familiares/adultos
acompañantes dando la oportunidad a los chicos de conocer a los
nuevos adultos y nuevos lugares "de la mano" de alguien conocido,
figura de sostén.

Ofrecer experiencias donde el adulto ayuda a resolver la tarea en conjunto


con el niño, por ejemplo, armar cotidiáfonos con material de deshecho,
muñecos de trapo, cocinas, cunas con cajas para el rincón de
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dramatizaciones. Mientras el adulto da forma de cuna a la caja, el niño es
quien la pinta, decide colores, aprende donde buscar los pinceles y el agua.
El niño ayuda a realizar la tarea del adulto de construcción de un material
didáctico que luego formará parte de aquello que podrá elegir
cotidianamente para jugar. Estas propuestas se constituyen en el inicio hacia
un proceso de pasaje paulatino de la figura de sostén y referente afectivo
conocido (madre padre, abuelo, otros) a los docentes y otros adultos de la
institución respetando los tiempos que necesite cada uno de los niños.
Para promover y continuar con los procesos de separación-encuentro en
forma paulatina, se propondrá a los padres realizar tareas en otros ámbitos
del jardín separándose de los niños por un período. Luego, avanzando en
mayores posibilidades de despegue, podrán despedirse niños y familiares por
un lapso corto de tiempo: los familiares salen a comprar galletitas
despidiéndose de los niños para luego, al volver, compartir una merienda
juntos.
Es importante arbitrar estrategias que permitan a los padres que no pueden
quedarse por condiciones laborales a retirase tranquilos porque la institución
propone una alternativa dando respuesta a la situación de cada niño.
También considerar los casos de niños que tienen experiencias anteriores y
pueden despedirse bien , con alegría, sin pasar por cada una de las
modalidades citadas.

6° Principio:
Invitar a los padres a que dejen testimonio de su presencia en el
jardín. Hacer....para sus hijos.

El armado de cotidiáfonos, una caja para guardar bloques pequeños, un


almohadón para recostarse a mirar libros o a escuchar música. Pequeñas
producciones que permiten dejar algo para que sus niños los utilicen en su
ausencia. Al mismo tiempo permite que el "tiempo de espera" de los papas
frente a la separación alejamiento de los niños no esté centrado en la
preocupación por ver y pensar como estarán...como reaccionaran los niños.

7° Principio:
Transformar los "Espacios" en "Ambientes" confiables a través de
tareas realizadas por los docentes, entre docentes y niños, entre
docentes, padres y niños.

En los términos de Forneiro (1996) dicha transformación implica constituir


los espacios físicos en oportunidades para estar con otros, para aprender y
explorar para reconocerlos como propios. Se han de realizar actividades en el
espacio de la sala, del patio, del salón de usos múltiples. En la sala, por
ejemplo, disponer mobiliarios, mesas y sillas junto con los niños. Definir el
lugar para el panel de exposición de trabajos, armar móviles, ordenar
algunos materiales que están en cajas, ubicarlos al alcance de los niños para
que los puedan elegir para jugar (como un modo de "desampacar" y armar el
nuevo lugar juntos) Estas propuestas no excluyen el considerar importante
recibir al niño con un ambiente "base" que ofrezca posibilidades de juego,
destrezas, modelados, lectura de libros, construcciones entre otras ofertas.

8° Principio
Ofrecer propuestas que resulten interesantes, novedosas,
desafiantes por lo tanto durante el período de iniciación resulta
fundamental desarrollar un proyecto o unidad didáctica.

No tiene que ser un período vacío de contenidos a enseñar de las diversas


áreas de conocimiento por centrarse en el logro de objetivos y contenidos
socio-afectivos. No se puede enseñar a confiar en los otros, si los otros no
ofrecen cosas interesantes para hacer. A modo de ejemplo algunos proyectos
posibles podrían ser: "Juegos y juguetes para armar y desarmar". "Los
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juegos tradicionales". "Cuentos y Poesías de Elsa Borneman". "Juegos con
agua". "Las familias de los chicos en la sala: aventuras, anécdotas, historias
y mucho más". "Nuestras mascotas". "Dibujar y Pintar". "Poesías para jugar
y recitar con el cuerpo y las palabras". "Bailar ritmos folklóricos". "Los
animales del zoológico". "La veterinaria". "Los miedos". "Luces y sombras"

9º Principio
El docente tiene que ofrecer propuestas de enseñanza, miradas,
sonrisas, palabras. Abrazos.

Miradas que aprueban, que cuidan, que alertan, que ponen límites, que
invitan a ser cómplices de descubrimientos, juegos, secretos, desafíos.
Sonrisas que reciben con alegría la llegada de los niños, que festejan
acciones, pruebas, logros, anécdotas, comentarios. .Palabras que alimentan,
explican, proponen, consuelan, ayudan a compartir, a comprender, a
dialogar. Palabras para jugar con la sonoridad. Palabras para conocerse y
conocer. Abrazos que contienen, sostienen, se ofrecen como refugio y
referentes de bienestar.

10º Principio:
El período de iniciación ha de planificarse como momento inicial de
un proyecto anual

Se ha de planificar atendiendo a la idea de ofrecer una propuesta de


Educación integral por lo tanto los proyectos o unidades didácticas han de
considerar la enseñanza de contenidos referidos al Eje de la construcción de
la identidad y la vida con otros y al eje de la expresión y comunicación y/o
indagación del Ambiente.

A partir de las observaciones y conociendo a los niños y sus familias resulta


de interés proponer líneas de trabajo anuales.

Iglesias Forneiro (1996) La organización de los espacios en la educación


infantil. En Zabalza comp. (1996) Calidad en la educación infantil. Madrid.
Narce.

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