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CAPITULO I: Presentación del Trabajo de Investigación

Introducción

Perú es uno de los lugares de mayor riesgo sísmico del mundo, ya que se ubica en una
zona donde convergen la placa Nazca con la placa Continental, generando, cada cierto período,
una gran liberación de energía, lo cual se traduce en grandes terremotos, causando daños
inconmensurables a nuestro territorio. En consecuencia, es imprescindible proteger las obras
civiles ante estos movimientos del suelo mediante la utilización de nuevas tecnologías de
disipación de energía.

Una alternativa, muy interesante y eficaz, que otorga una solución a esta delicada
situación, es la disipación de energía que ingresa a la estructura, a través de amortiguadores
sísmicos que pueden ser incorporados sin mayores inconvenientes a la estructura. Esto
constituye, un sistema denominado “Los Amortiguadores de Masa Sintonizada”. Dentro de estos
sistemas se encuentra “El Péndulo Modular Compensatorio de Masa en un Sistema Estructural
Aporticado”. Estos se utilizan en el control de vibraciones producidas por el viento en estructuras
livianas y flexibles, básicamente estructuradas en base a pórticos, sean éstos de acero o de
concreto armado. Sin embargo, para el caso sísmico peruano, este sistema no dispone de
estudios numéricos que determinen la eficiencia en la disipación de este tipo de vibraciones.

La verificación analítica y experimental de la transferencia de energía de un sistema


principal excitado externamente a otro sistema secundario no excitado, acoplado al primero,
dio origen a los Amortiguadores de Masa Sintonizada, AMS, Den Hartog, J. P. 1985. (Original no
consultado, citado por: Ambrosini 2004). El amortiguador de masa sintonizado es una
herramienta ingenieril clásica consistente en una masa, un resorte y un amortiguador viscoso
colocados en el sistema vibrante principal (generalmente instalados en la parte superior de la
estructura) para atenuar la vibración no deseada a una frecuencia determinada. La frecuencia
natural del amortiguador se sintoniza con la frecuencia natural del sistema principal provocando
que el amortiguador vibre en resonancia, disipando la energía absorbida a través de los
mecanismos de amortiguamiento del AMS.

Después de su invención por Frahm en 1909, el concepto de amortiguadores de masa


sintonizada ha atraído la atención de investigadores de diferentes campos para su aplicación en
control de vibraciones causadas por diferentes tipos de fuerzas.

A modo de ilustración se presentan en la siguiente figura un conjunto de estructuras


ubicadas en Estados Unidos y Australia, las cuales cuentan con Amortiguadores de Masa
Sintonizada instalados en la parte superior para el control de vibraciones producidas por el
viento.

a) b) c) d)

Figura 1.1 Aplicaciones AMS: a) Citicorp Center, New York b) Boston’s Hancock Tower
c) Torre de Sydney d) Torre de Control, Aeropuerto Washington.
1.2 Objetivos

1.2.1 Objetivos Generales


Realizar un análisis del comportamiento y la eficiencia de un Péndulo Modular
Compensatorio de Masa en un Sistema Estructural Aporticado, en la respuesta de
edificios estructurados en base a pórticos de concreto armado sometidos a
aceleraciones basales (edificio hecho a escala de 10 niveles).

1.2.2 Objetivos Específicos

 Elaborar una estructura aporticada a escala de 10 niveles, para proceder a


incorporarle un Péndulo Modular Compensatorio de Masa (también a escala).
 Poner a prueba la estructura (sin el péndulo modular incorporado) para analizar
el comportamiento de la misma ante movimientos ante aceleraciones basales
mediante una mesa sísmica.
 Poner a prueba la estructura (con el péndulo modular incorporado) para analizar
el comportamiento de la misma ante movimientos ante aceleraciones basales
mediante una mesa sísmica.
 Hacer una comparación de ambos resultados y analizar el comportamiento de la
estructura que tiene incorporado el Péndulo Modular Compensatorio de Masa y
cuál es su respuesta sismorresistente ante aceleraciones basales.
CAPITULO II: Sistemas de Control Estructural ante Sismo
A continuación, se entrega una revisión de los principales sistemas de protección
sísmica y se da especial atención al sistema disipador de energía en estudio AMS
(Péndulo Modular Compensatorio de Masa en un Sistema Estructural Aporticado), y de
sus aplicaciones en el mundo.
Los sismos producen diversos efectos en regiones sísmicamente activas. Ellos
pueden ocasionar la pérdida de gran cantidad de vidas humanas, pueden ser los
causantes del colapso de muchas estructuras tales como edificios, puentes, presas, etc.
Otro efecto destructivo de los sismos es la generación de olas de gran tamaño,
comúnmente causada por temblores subterráneos (maremotos). Estas olas son también
llamadas Tsunami, las cuales al llegar a la costa pueden causar la destrucción de
poblaciones enteras.
La licuefacción de suelos es otro peligro sísmico. Cuando el suelo es sometido al
choque de las ondas sísmicas puede perder virtualmente toda su capacidad portante, y
se comporta, para tal efecto, como arena movediza. Los edificios que descansan sobre
estos materiales han sido literalmente tragados.

Figura 2.1: Licuefacción: El sismo de Niigata, Japón, 16 de Junio de 1964


(M=7.5): Inclinación de edificios de departamento.
2.1 Sistema de Control Estructural ante Sismo
Un número importante de avances para mejorar el desempeño en la respuesta
sísmica y el control de daño en los edificios, puentes y otras estructuras han sido
desarrolladas y otras están por venir en el futuro cercano.
El control estructural ante acciones sísmicas se está planteando como una
alternativa al diseño sismorresistente convencional, basado en la ductilidad y el
hiperestatismo estructural. Los sistemas sismorresistentes avanzados tienen por
objetivo el control de los desplazamientos de una estructura haciendo uso de alguno (o
varios) de los siguientes recursos:
• La modificación de las propiedades dinámicas del edificio, de forma que éste
reduzca su 'input' energético o evite actitudes resonantes;
• La disipación de energía introducida al sistema a partir de dispositivos
mecánicos;
• El control con dispositivos que ejerzan fuerzas que contrarresten la acción
sísmica.

Figura 2.2: Sistemas de control estructural ante acción sísmica.

Una primera clasificación permite hablar de sistemas de control pasivo, sistemas


de control activo, sistemas de control semiactivo y sistemas de control híbrido, tal como
se indica en la figura 2.2, Villarreal, G.; R. Oviedo (2008). Los sistemas de control pasivo
se basan en elementos que responden de forma inercial a la acción sísmica y, a
diferencia del resto de sistemas, no precisan de aporte energético para su
funcionamiento. Los sistemas activos, semiactivos e híbridos están formados por
actuadotes de fuerza y/o elementos pasivos, controladores en tiempo real y dispositivos
sensores instalados en la estructura. Estos elementos trabajan conjuntamente a través
de un algoritmo de control de la respuesta estructural en bucle cerrado.
Los sistemas pasivos se clasifican en sistemas de aislamiento de base, de
disipación de energía y en osciladores resonantes. Los aisladores de base, situados sobre
la cimentación y soportando el edificio, desacoplan parcialmente el edificio del
movimiento del terreno, disminuyendo el "input" energético transmitido a la
superestructura y consecuentemente su respuesta estructural. Los disipadores de
energía no alteran el "ínput" energético, que depende básicamente del período
fundamental y de la masa del edificio, manifestando su eficiencia maximizando la
energía disipada y disminuyendo la respuesta estructural. Los amortiguadores de masa
sintonizada (AMS) o "tuned mass dampers" (TMD) introducen masas adicionales,
normalmente situadas en la parte alta de los edificios, cuya excitación absorbe parte de
la energía cinética introducida por el terremoto. Las propiedades más valiosas de los
sistemas pasivos son su robustez (no dependen de fuentes de energía y son
mecánicamente simples) y el coste competitivo de los edificios que los utilizan en
comparación con los construidos de forma convencional. Existen en la actualidad unos
centenares de edificios construidos en el mundo con estos sistemas, algunos sometidos
a terremotos severos como el de Kobe, Japón 1995.
Los sistemas activos contrarrestan los efectos del sismo directamente mediante
actuadores situados en el seno estructural. La gran demanda de energía que
compromete su actuación ante un sismo severo y la complejidad de los algoritmos de
control los convierte en sistemas poco robustos. Ante la necesidad de una respuesta
efectiva ante excitaciones dinámicas comprendidas en una banda amplia de frecuencias
y de un menor consumo energético, se desarrollan los sistemas híbridos y semiactivos.
Los sistemas híbridos son muy similares a los sistemas activos, sin embargo, en ellos
intervienen elementos pasivos que permiten reducir el consumo energético del sistema
ante un evento sísmico. Los sistemas semiactivos emplean dispositivos de control
pasivo, sin consumo energético, cuyas características resistivas permiten ser
modificadas y controladas a tiempo real mediante actuadotes de bajo consumo (por
ejemplo, válvulas de caudal variable) a través de sistemas y algoritmos de control
parecidos a los empleados en los sistemas activos e híbridos.

2.1.1 Sistemas de Control Pasivo


Los dispositivos pasivos son elementos de carácter reactivo cuya respuesta no es
controlable y depende únicamente de las condiciones de trabajo (o de contorno) en que
se encuentren. Son sistemas que intervienen alterando las propiedades dinámicas del
edificio, provocando una reducción de su respuesta estructural. Entre sus ventajas se
encuentra su competitividad económica y la robustez de su comportamiento. Los
sistemas de control pasivo pueden clasificarse en:
a) Sistemas de aislamiento de base,
b) Sistemas disipativos y
c) Sistemas inerciales acoplados.

2.1.2 Control pasivo mediante sistemas inerciales acoplados: Amortiguadores de


Masa Sintonizada

Dado que el presente trabajo se desarrolla en el ámbito de control con


disipadores de energía, se ha creído conveniente desarrollar su estado del arte de
forma más amplia en los apartados específicos posteriores.
El Amortiguador de Masa Sintonizada, tal como se indica en la figura 2.3, consta
de los siguientes componentes:

• Un oscilador de un grado de libertad.


• Un mecanismo de muelle.
• Un mecanismo de amortiguamiento.

Habitualmente se instala en la parte superior de los edificios. La masa y la rigidez


del muelle se determinan de forma que la frecuencia de oscilación sea la misma que la
frecuencia fundamental de la estructura.
*

Figura 2.3 a) AMS en su concepción clásica b) AMS basado en el empleo de


tanques de Agua

El amortiguador de masa sintonizada se ha demostrado efectivo para reducir la


vibración del viento. La mayor desventaja del amortiguador de masa sintonizada es que
requiere una gran masa e importante disponibilidad de espacio para su instalación. Para
compensar este problema, recientemente se ha propuesto el uso de cubiertas con
aislamiento respecto a la estructura inferior o tanques de agua tal como se indica en la
figura 2.3b, para ser usados como masas pendulares. Otro inconveniente del sistema es
que su efectividad se reduce a una banda estrecha de frecuencias cercanas al período
fundamental del edificio, y pueden presentarse situaciones en las que el edificio se sitúe
fuera de su período fundamental:

• En un edificio esbelto se pueden manifestar con distinta intensidad modos de vibración


diferentes al fundamental, en función de las características de la excitación.
• Durante terremotos severos la estructura puede llegar a comportarse plásticamente,
alargando el período de la estructura y comportando una pérdida de sintonía con el
amortiguador de masa sintonizada.

En relación con los amortiguadores de masa sintonizados, ya está


definitivamente probada en la literatura su eficiencia en la reducción de vibraciones
provenientes de acciones de viento y su aplicación comienza a ser corriente en este tipo
de problemas.

Sin embargo, todavía se encuentra en discusión la eficiencia de los AMS en


relación con acciones sísmicas. En este sentido, Villaverde R and L.A. Koyama, 1993.
(Original no consultado, citado por: Ambrosini et al. 2004), demostraron que el esfuerzo
de corte en la base de un edificio de período 2 seg., analizado en forma lineal se reduce
en un 40% cuando es instalado un AMS. Por otra parte, Soto-Brito and S. E. Ruiz (1999),
estudian la respuesta no lineal de edificios con AMS y concluyen que, en este caso, la
respuesta pico no se reduce significativamente. Por último, Pinkaew et al. (2003),
sostienen que, en el caso de estructuras sometidas a daño, los parámetros a estudiar no
deben basarse en la reducción del pico de la respuesta sino en la reducción del daño.
Además, estos autores sostienen que la eficiencia de los AMS está demostrada en el
caso de sismos de larga duración y contenido de frecuencia de banda angosta.

A pesar que existen en la literatura varios trabajos con relación a la eficiencia de


AMS, la mayoría de ellos son realizados con sistemas de un grado de libertad y excitación
de ruido blanco. En este trabajo se modelan estructuras de edificios, sometidas a
diferentes acelerogramas en la base, lo que permite tener una idea preliminar de la
eficiencia de AMS ante cargas sísmicas en estructuras reales.

Den Hartog, (1985), demostró que para sistemas de un grado de libertad no


amortiguados, la amplitud de vibración del sistema excitado es nula cuando la frecuencia
de excitación es igual a la frecuencia del AMS, indicando que toda la energía del sistema
fue transferida al AMS. Luft, R. (1979), halla los parámetros óptimos para un sistema
principal amortiguado y un AMS sin amortiguamiento sometido a una excitación de ruido
blanco. Jensen et. al. (1992), estudiaron como afecta la incertidumbre de los parámetros
del sistema principal en la efectividad del AMS para una carga aleatoria de ruido blanco.
Abé et. al. (1995), usando el método de perturbación, analizan la efectividad de los AMS
para estructuras con frecuencias naturales poco espaciadas y muy espaciadas bajo carga
armónica.

Sin embargo, no existen estudios de optimización de parámetros con sismos con


duraciones y contenidos de frecuencias similares a nuestra realidad.

Los parámetros de diseño del AMS que se deben hallar para lograr la máxima eficiencia
del mismo, son la relación de frecuencia (frecuencia del amortiguador/frecuencia de la
estructura), la relación de amortiguamiento y la relación de masa (masa AMS/masa de la
estructura). Algunos criterios de optimización de los parámetros son:
• Desplazamiento mínimo de la estructura principal (seguridad estructural)

• Rigidez dinámica máxima de la estructura principal

• Mínima trayectoria de la masa amortiguada con respecto a la estructura principal.

• Mínima aceleración de la estructura principal (confort y funcionalidad).

Por ejemplo, las expresiones para los parámetros óptimos de los AMS determinadas por
Warburton et al. 1980. (Original no consultado, citado por: Ambrosini et al. 2004) para una
excitación de ruido blanco de un sistema principal no amortiguado de un grado de libertad,
asumiendo como criterio de optimización la minimización del desplazamiento son:

Donde fopt es el cociente de frecuencias entre la frecuencia del AMS y la frecuencia de


la estructura, µ es la relación de masa (masa del AMS/masa de la estructura) y ζopt es la relación
de amortiguamiento del AMS.

Los AMS sólo pueden ser sintonizados a una sola frecuencia estructural. Como es de
esperarse, para sistemas de N grados de libertad, la efectividad es mayor cuando la estructura
oscila alrededor de un modo predominante. Puede ocurrir que los desplazamientos
correspondientes al primer modo de la respuesta se reduzcan considerablemente, mientras que
los desplazamientos de los modos altos se incrementen cuando el número de pisos aumenta.
Esta dificultad se soluciona colocando varios AMS que cubren una banda de frecuencias
(MAMS).

2.2 Edificios equipados con Amortiguadores de Masa Sintonizada

A pesar de que la mayoría de las aplicaciones se han hecho para sistemas mecánicos, los
amortiguadores de masa sintonizada han sido utilizados para mejorar la respuesta estructural
de edificios excitados bajo cargas de viento. A continuación, se realizará una breve descripción
de varios tipos de edificios con amortiguadores de masa sintonizada.

La figura 2.4 muestra una configuración típica de un amortiguador de masa sintonizada


unidireccional. La masa desliza lateralmente sobre una superficie produciéndose un
desplazamiento relativo entre esta y el piso. Los resortes y los amortiguadores son colocados
entre la masa y los soportes adyacentes. Estos miembros laterales son los encargados de
transmitir la fuerza fuera de fase a la estructura principal del edificio (pórticos). A continuación,
se darán algunos ejemplos de estructuras implementadas con amortiguadores de masa
sintonizada.
Figura 2.4: Diagrama esquemático de un Amortiguador de masa sintonizada.

• John Hancock Tower (Engineering News Record, Oct. 1975).

Dos amortiguadores fueron instalados en la torre John Hancock de sesenta


pisos, ubicada en Boston, para mejorar la respuesta estructural producto de las cargas de viento.
Los amortiguadores se colocaron en forma ortogonal en el piso número 58 para contrarrestar el
movimiento lateral-torsional producto de la forma del edificio. Cada amortiguador pesa 2700kN
y consiste en una caja de 5.2m de lado con 1m de profundidad, el cual se desplaza sobre una
placa de acero de 9m de longitud. La masa del amortiguador se encuentra lateralmente
restringida por resortes anclados a las columnas interiores del edificio y están controlados por
cilindros servo-hidráulicos. La masa oscila linealmente sobre una delgada película de aceite el
cual es introducido por orificios provistos en la placa de acero. Cuando la aceleración horizontal
excede los 0.003g para dos ciclos consecutivos, el sistema es activado automáticamente. Este
sistema fue diseñado y construido por LeMessurier Associates/SCI en asociación con MTS
System Corp., y costó alrededor de tres millones de dólares, esperando reducir la respuesta del
edificio entre un 40% a un 50%.

• Citicorp Center (Engineering News Record Aug. 1975, McNamara 1977, Petersen 1980).

El amortiguador de masa sintonizada del Citicorp (Manhattan), también fue


diseñado y construido por LeMessurier Associates/SCI en asociación con MTS System Corp. Este
edificio de 279m de altura, tiene un periodo fundamental de 6.5 segundos con una razón de
amortiguamiento del 1% en ambas direcciones. El amortiguador de masa sintonizada del
Citicorp se ubica en el piso 63 y tiene un peso de 366 Mg, aproximadamente el 2% de la masa
efectiva del primer modo, y fue 250 veces más grande que cualquier AMS construido en su
tiempo. Tiene un periodo operacional de 6.25s ±20%, con un amortiguamiento lineal regulable
de 8% a 14%, y un desplazamiento relativo máximo de 1.4m. Con la inclusión del AMS se redujo
la amplitud de oscilación del edificio en un 50%. La masa del bloque de hormigón del AMS tiene

2.6m de alto con una sección transversal en planta de 9.1m por 9.1m. Cuando el AMS está
operando, una bomba hidráulica suministra aceite por medio de una serie de válvulas elevando
el bloque cerca de 2cm por dos minutos cuando este se encuentra operando. El amortiguador
de masa sintonizada se activa automáticamente cuando la aceleración horizontal excede los
0.003g para dos ciclos consecutivos, y deja de funcionar cuando la aceleración no excede
0.00075g en ambos ejes durante un intervalo de 30 minutos. El costo estimado por Lemessurier
para el AMS del Citicorp fue de 1.5 millones de dólares, ahorrándose en la construcción del
edificio entre 3.5 a 4 millones de dólares. Esta suma representa el costo de unas 2.800 toneladas
de acero estructural que debería haber sido requerido para satisfacer las restricciones de
deformaciones.

• Canadian National Tower (Engineering News Record, 1976).

Los 102m que tiene la antena de acero ubicada en la parte superior del
Canadian National Tower en Toronto (553m de alto incluyendo la antena), requirió la instalación
de dos amortiguadores de masa sintonizada para prevenir las deflexiones excesivas de la antena
cuando la estructura del edificio se encuentre sometida bajo cargas de viento. Los AMS se
ubicaron a una altura de 488m y 503m. El sistema de disipación de energía fue diseñado por
Nicolet, Carrier, Dressel y Associates, Ltda., con la colaboración de Vibron Acoustics. Los AMS
fueron sintonizados con el segundo y cuarto modo de vibrar.

• Chiba Port Tower (Kitamura et al. 1988).

Chiva Port Tower (Terminada de construir en 1986) fue la primera torre en


Japón equipada con AMS. El Chiva Port Tower es una estructura de acero de 125m de altura con
un peso de 1950 toneladas, con forma de rombo en planta de 15m de lado. Los periodos del
primer y segundo modo de vibrar son 2.25s y 0.51s respectivamente para la dirección X, 2.7s y
0.57s para la dirección Y. El amortiguamiento para el modo fundamental es de 0.5%. Al equipar
la torre con AMS se incrementó el amortiguamiento del primer modo en las direcciones X e Y.
La figura 2.5 muestra el amortiguador de masa sintonizada. Fue construido por Mitsubishi Steel
Manufacturing Co., Ltda., el AMS tiene: una razón de masa respecto de la masa modal del primer
modo de 1/120 en la dirección X y 1/80 en la dirección Y; los periodos en la dirección X e Y son
de 2.24s y 2.72s respectivamente; y una razón de amortiguamiento del 15%. El máximo
desplazamiento relativo del AMS con respecto a la torre es de ± 1m en cada dirección. Con el
AMS se redujo alrededor del 30% al 40% el desplazamiento de la parte superior de la torre y un
30% el momento flector.
Figura 2.5: Amortiguador de masa sintonizada para Chiva-Port Tower.

Las primeras versiones de AMS eran bastante costosos, ocupaban


considerable espacio y demasiado pesados. Recientes versiones, como las mostradas en la figura
2.6, han sido diseñadas para minimizar estas limitaciones. Estos mecanismos emplean gomas
elastoméricas, las cuales funcionan como resortes de corte, y elementos de gomas especiales,
las que proveen de amortiguamiento viscoelástico. El desarrollo de AMS más compactos,
multidireccionales y de fácil ensamblaje, requiere de controles poco sofisticados. La figura 2.7
muestra un amortiguador de masa sintonizada sujeto a una excitación dinámica en un banco de
pruebas. Un amortiguador instalado en la torre Huis Ten Bosh, Nagasaki, es mostrado en la
figura 2.8

Figura 2.6: AMS con amortiguador y resorte ensamblado.


Figura 2.7: Deformada de un AMS.

Figura 2.8: AMS Instalado en la Torre Huis Ten Bosch. Nagasaki.

• Taipei 101

Taipei 101 es un gran logro para la arquitectura e ingeniería mundial.


Elementos tradicionales de China han sido integrados a este moderno edificio. La torre con una
altura total de 508m, supera los 412.400m2 de espacio para centros comerciales, oficinas y
habitaciones. El edificio está estructurado en base a supercolumnas que contienen concreto de
refuerzo hasta el nivel 62, lo cual involucra un total de 95.000 toneladas de acero y 23.900m3
de hormigón de alta resistencia, proporcionándole rigidez a la superestructura con un periodo
de vibración fundamental de 6.8 segundos.

Las figuras 2.9 y 2.10 muestran el sistema de amortiguamiento pasivo utilizado para controlar la
respuesta de esta estructura.

Figura 2.9

Figura 2.10: AMS Taipei 101.

Respuesta Inducida por Cargas de Viento

Rowan Williams Davies & Irwin, de Guelph, Ontario, Canadá apoyados los
arquitectos, CY Lee And Partners, los ingenieros estructurales, Evergreen Consulting
Engineering, testearon en un túnel de viento el desempeño del proyecto. Una gran variedad de
pruebas fue desarrollada para determinar el efecto del viento sobre el diseño de la torre. Es
interesante notar que para ciertos efectos locales sobre la estructura las cargas sísmicas
gobiernan el diseño. Sin embargo, las cargas que gobiernan por completo el diseño de la
estructura, momentos flectores en la base, por ejemplo, son las cargas de viento. Estos estudios
sirvieron para estructurar el edificio de manera de contrarrestar los efectos de estas cargas.

Amortiguador de Masa Sintonizada Implementado

El sistema de control pasivo implementado en esta estructura es mostrado en


la figura 2.10, consiste en un péndulo natural suspendido por medio de cables los cuales a través
de su largo le proporcionan una frecuencia muy similar a la frecuencia fundamental del edificio.
Cuando el edificio comienza a vibrar, el AMS oscila a una frecuencia semejante, disminuyendo
la respuesta de la estructura principal absorbiendo el exceso de energía cinética producto de las
cargas de viento y sismo. Posee un amplio rango de trabajo para los diversos requerimientos
bajo escenarios de carga extrema. Durante las fuertes tormentas de viento para las que fue
diseñada esta torre, se espera que el AMS reduzca la aceleración de la parte superior de la
estructura de un 30 a un 40 %. El AMS no disminuye por completo la oscilación del edificio, solo
reduce el movimiento a niveles aceptables.
CAPITULO III: Marco Teórico
CAPITULO IV: METODOLOGÍA
CAPITULO V: Resultados y Conclusiones

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