En las últimas décadas las MYPE son la principal atención por los investigadores y

académicos, como por empresarios y políticos, y esto es debido a su importancia, puesto que

son consideradas como la espina dorsal del sector empresarial, representando el 99% total de

empresas existentes en el mundo y brindando dos tercios del total de puestos de trabajo (Ávila,

2011, citado por Fernández 2019).

En Europa, las MYPE realizan un papel impotante en su economía, constituyendo la mayor

fuente de capacidad empresarial, de innovación y de empleo, ya que de los veinticinco, 23

millones de Pymes generan aproximadamente 75 millones de empleos y representan el 99%

de las empresas existentes (CEPAL, 2010, citado por Fernández 2019).

Por otra parte en Latinoamérica, se destacan a las MYPE, como factor restrictivo para su

desarrollo con limitaciones para acceder al crédito, el costo financiero que pagan para la

obtención de recursos monetarios provenientes de las instituciones financieras, es elevado en

comparación con los costos que pagan las empresas medianas y grandes debido al riesgo

inherente que representa este sector, además por la inestabilidad que muestran para

mantenerse en una misma actividad económica (Batres, Monroy & Rodríguez, 200 ,citado

por Fernández 2019).

Asimismo, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) destaca que más del 80 % de las

empresas latinoamericanas y caribeñas se encuentran en la categoría de micro empresas y

juegan un papel muy importante ya que son motores del desarrollo económico; en la

actualidad existen 10 millones de micro y pequeñas empresas que generan alrededor del 47%

de empleo y ofrece más de 127 millones de puestos de trabajo. Asimismo, contribuyen con el

40% al Producto Bruto Interno (PBI) (Diario la República, 2015).

En lo que respecta a Perú el gobierno ha creado un programa especial de apoyo financiero

para las micro y pequeñas empresas, el cual contaba inicialmente con 200 millones de soles

de recursos en el “banco de la nación”, pero esto no es suficiente porque sólo van a favorecer

a 100 mil micros y pequeñas empresas del Perú (Vásquez, 2015 citado por López 2018).

En lo que respecta a región Ancash, las micro y pequeñas empresas, presentan una deficiente

organización a nivel empresarial que involucra aspectos económicos, financieros y

administrativos. Por ello, que dichas micro y pequeñas empresas en la mencionada región no

tienen acceso al financiamiento bancario, por lo tanto recurren al sistema no bancario formal

por que estas les da mayores facilidades para obtener un crédito (Cárdenas, 2010 citado por

López 2018).