MATERIA: ENFERMOS AGUDOS Y CRONICOS I

ALUMNA: MARIA GUADALUPE GALICIA GARCIA

GRUPO: 5 C

TURNO: SABATINO
Este escrito que presento el día de hoy, consiste en una narración acerca de lo
que he aprendido de los diferentes temas vistos en las lecturas de la materia de
Enfermos Agudos y Crónicos I del quinto cuatrimestre de la Licenciatura en
Homeopatía.

Los temas revisados son: el concepto de Enfermedad Aguda y Crónica y su

clasificación, la diferencia ente los anteriores conceptos,, la naturaleza de las
enfermedades crónicas; el concepto y las características de la Psora y signos y
síntomas tanto de la Psora Latente, como de la Psora, Desarrollada. Entonces es
así como se encuentra constituido mi escrito; así que comenzare.

Lo primero que aprendí dentro de esta clase es la definicion de la enfermedad

aguda y de la enfermedad crónica, su clasificación y sus diferencias, que lo que
principalmente las diferencia la una de la otra es el factor tiempo, ya que mientras
la aguda es de comienzo súbito o rápido y de evolución corta, la crónica por su
parte son de comienzo paulatino e imperceptible, de evolución lenta, solapada,
prolongada y progresiva.

En cuanto a su clasificación es la siguiente; la enfermedad aguda se clasifica en

Individuales y colectivas, de las individuales se desprenden los traumatismos, las
indisposiciones y las agudizaciones miasmáticas, por su parte las colectivas se
refieren a las esporádicas, epidémicas y miasmáticas agudas.

Las enfermedades crónicas solo se clasifican en medicamentosas, aparentes y

miasmáticas.

Del segundo tema que vimos aprendí que es lo que origina y desencadena a la
enfermedad crónica, que se trata de los miasmas, principalmente la psora, que es
la causa fundamental de la enfermedad.
Otro punto que entendí es que se puede llegar a provocar cualquier enfermedad,
sobre todo aquellas que tienen tendencia eruptiva, se provoca la aparición de
nuevas enfermedades de origen medicamentoso.

En cuanto al tercer tema se refiere entendí que la psora es el origen de las

enfermedades, si la psora no existiese, por ende no existirían las otras
enfermedades crónicas, los miasmas psicosico y sifilítico, haciendo una
redundancia en que la psora es el origen de toda enfermedad. La psora a lo largo
de los tiempos ha recibido diferentes nombres, desde erisipela maligna hasta
culminar en el término sarna, la forma más usual en que este miasma se
manifiesta por medio de erupciones, con picor, sensación pruriginosa y escozor,
como resulta ser las enfermedades que antes mencione.

Ya de las últimas dos lecturas lo que aprendí es lo siguiente Hahnemann decía

que la psora se implanta en el ser humano y aunque en un principio quizás no lo
notemos a simple vista, este miasma o infección está ahí como dormido,
esperando a que se presenten las condiciones que le permitan poder manifestarse
de manera total y clara. Hahnemann menciona diferentes síntomas que nos dan
cuenta de la psora latente, como por ejemplo, la hinchazón de los ganglios del
cuello, anginas frecuentes; afonía frecuente, caída frecuente del pelo, sequedad
del cabello; numerosas costras en el cuero cabelludo, por mencionar algunos.

Y por último cómo es que se da la transición de la etapa latente a la etapa

desarrollada o manifiesta de la psora. La Psora ya manifiesta es el estado con
síntomas incrementados y más fuertes con respecto al latente, que se repiten a
menudo o se vuelven continuos, puede incrementarse por trastornos somáticos,
por influencias del medio o cualquier suceso que signifique una situación de
peligro. Entonces nosotros podremos percibir la presencia de este miasma,
manifestándose por medio de larga lista de síntomas como el vértigo, con marcha
vacilante, dolor de cabeza como si el cráneo se abriera, cuero cabelludo lleno de
escamas con o sin prurito por decir algunos.