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Hay que distinguir con claridad que los beneficios de una empresa o proyecto, se miden a través de la
rentabilidad y la liquidez, ambas son importantes, pero diferentes, están íntimamente relacionados y
se integran en el Balance General. El cálculo de la rentabilidad se rige del principio del devengado y
la liquidez del efectivizado. En este sentido se pueden presentar las siguientes situaciones:
I. MEDIDAS DE RENTABILIDAD
Revisemos los formatos para el cálculo de a rentabilidad como son el Estado de Ganancias y
Pérdidas, el EBIT, el EBITDA y el NOPAT:
Cabe señalar que la utilidad neta no constituye una buena aproximación de la capacidad de
generación de flujos de efectivo de un negocio, ya que se ve afectada por la deducción de
gastos contables tales como: depreciación del activo fijo, amortización del activo intangible,
corrección monetaria, diferencias de tipo de cambio. Además, la utilidad neta se ve afectada
por flujos de ingresos y egresos que tienen un carácter transitorio como, por ejemplo: otros
ingresos fuera de la explotación, otros egresos fuera de la explotación y otras cuentas
extraordinarios. Por ultimo no toma en cuenta la incidencia de todo el activo, pasivo y
patrimonio en la generación de efectivo.
Es la Utilidad Antes de Intereses e Impuestos (UAII), se calcula a partir del estado de resultados. Es
la utilidad antes de descontar los gastos financieros y los impuestos, y se conoce como el resultado
operacional o de explotación del período. Esta cifra suele ser útil como medida de los beneficios
económicos generados por una compañía a partir de sus actividades operacionales y durante un
determinado período. El cálculo del EBIT se muestra en la Cuadro 4.
El EBIT prescinde de los aspectos financieros y tributarios, pero no de los gastos contables
que no implican pagos efectivos de dinero (tales como la depreciación de los activos fijos y la
amortización de los activos intangibles, los cuales están incluidos en los costos y gastos de
explotación).
Esta cifra suele ser útil como medida de los beneficios económicos generados por una compañía a
partir de sus actividades operacionales durante un determinado período, ya que prescinde de
cuestiones financieras y tributarias, así como de gastos contables que no implican pagos efectivos de
dinero. El cálculo del EBITDA se muestra en la Cuadro 5
El uso del EBITDA presenta ciertas ventajas, entre las cuales podemos señalar las siguientes:
El EBITDA es una medida aproximada de la capacidad de generación de flujo de efectivo
operacional de un negocio, por lo que en la práctica suele ser muy observado en la industria
financiera.
El cálculo del EBITDA prescinde de cuestiones financieras y tributarias, así como de los gastos
contables de depreciación y amortización, lo que permite medir el resultado económico de un
negocio al margen de ciertas circunstancias que podrían darse en determinadas empresas, tales
como el acceso a préstamos en condiciones favorables de crédito (bajas tasas de interés,
amplios plazos de pago, etc.), tratamientos fiscales específicos, diferentes formas de depreciar
contablemente el activo fijo, etc.
Por ello, el EBITDA es la medida de flujo de efectivo operacional que suelen observar los
inversionistas, especialmente cuando el negocio es un holding. Esto se debe a que un holding (al
agrupar a un conjunto de empresas que pueden o no tener operaciones relacionadas) puede incidir
en los gastos operacionales, en los gastos financieros y en la utilidad de una unidad de negocios en
particular, ya sea a través del uso de la capacidad instalada de otras empresas del holding (sin que
por el uso de esos recursos materiales o humanos deba realizar algún desembolso de dinero), de la
adquisición de ciertos productos o servicios a precios de costo (cuestión que genera subsidios
cruzados) o de pactos financieros (operación que le permitiría a una de las unidades del holding
financiarse a un costo relativamente bajo). Además, a través de las operaciones de una empresa con
otras unidades de negocios pertenecientes al holding, es posible rebajar legalmente las ganancias
sujetas al pago de impuestos corporativos y, en consecuencia, reducir el monto de dinero a pagar por
impuesto a la renta.
No obstante, el EBITDA es sólo una parte del flujo de efectivo, ya que faltan aquellos flujos que se
derivan de las variaciones del capital de trabajo. Se debe tener presente que, al calcular el EBITDA a
partir del Estado de Resultados, se están considerando ventas que pueden estar cobradas o no; y
pagos que, si bien han sido registrados en la contabilidad, pueden no haberse efectuado en el
período analizado. Los pagos efectivamente realizados se pueden calcular sobre la base del
incremento de las existencias y de la variación de los saldos de las cuentas de proveedores en el
período considerado. Estos dos elementos, como también cualquier variación adicional en las
cuentas de activos y pasivos circulantes, se deben considerar para calcular la variación del capital de
trabajo. Finalmente, el EBITDA no considera los flujos de efectivo generados por las inversiones en
activos fijos, inversiones que tienen el objetivo de mantener o incrementar la capacidad de generación
de flujos de efectivo futuros del negocio.
4. NOPAT (Net Operating Profit After Taxes) o EBIAT (Earning Before Interest After
Taxes)
En las finanzas corporativas, el beneficio neto después de impuestos, pero antes de intereses
(NOPAT) es considerado el beneficio operativo para todos los inversores, incluidos los accionistas y
tenedores de deuda. NOPAT es utilizado por analistas e inversores como la mejor aproximación a la
rentabilidad para comparar los resultados financieros de una empresa a lo largo de su historia y con
la competencia.
Al calcular NOPAT, se eliminan los gastos de intereses y los efectos de otras actividades no
operativas (ganancias y pérdidas no recurrentes) de la utilidad neta para llegar a un valor que se
aproxima al valor de las ganancias anuales de una empresa.
NOPAT no incluye pérdidas únicas y otros cargos no recurrentes porque no representan el Verdadera
rentabilidad continua del negocio. Por ejemplo, una empresa puede incurrir en costos de adquisición
que no se espera que ocurran en el futuro. Estos costos afectarían negativamente las ganancias del
año actual, pero no representan con precisión las operaciones de la empresa. Estos costos deben
excluirse al realizar cualquier tipo de análisis para determinar la eficiencia operativa y financiera de
una empresa o para comparar el desempeño con otras empresas.
Para un cálculo aproximado, NOPAT aproxima las ganancias antes de intereses después de
impuestos (EBIAT).
El cálculo aproximado para NOPAT es: NOPAT = beneficio operativo x (1 - tasa impositiva)
La capacidad y habilidad de una empresa para generar flujos de efectivo positivos es un tema que
concentra la atención de quienes se interesan en el desempeño financiero de la entidad, tales como
accionistas, instituciones financieras y proveedores, entre otros. Los flujos de efectivo se generan por
las actividades de operación, inversión y financiamiento que la empresa realiza.
ACTIVIDADES DE INVERSION:
Generan flujos de efectivo por los Ingresos y egresos necesarios para la puesta en marcha del
proyecto, así como para la redefinición de su capacidad: (+) Activos fijos, (+) activos intangibles, (+)
capital de trabajo
ACTIVIDADES DE OPERACION:
Generan flujos de efectivo por los Ingresos y egresos correspondiente a cada periodo de operación:
(+) Venta bienes y servicios, (+) cxc, (-) compras, (-) cxp, (-) egresos por la producción de
bienes/servicios, (-) gastos administrativos, (-) gastos comerciales y (-) tributarios, todos
desembolsables
ACTIVIDADES DE LIQUIDACION:
Generan flujos de efectivo por los Ingresos y egresos al terminar el proyecto: (+) Venta de activo fijo,
(+) recuperación de CT, (-) perdidas, (-) e Impuestos
Existen diversos indicadores para medir la liquidez generada por una empresa en un determinado
período. Los más utilizados son: el flujo de caja neto (FCN), el flujo de caja libre (FCL) y el Flujo de
Efectivo (EFE). Revisemos los formatos para el cálculo de la liquidez, el Flujo de caja (FC) y el Flujo
de efectivo (EFE)
El flujo de caja libre también se conoce como flujo de efectivo (caja) de los activos, es una
herramienta financiera usada para la evaluación de proyectos de inversión y valorización de
empresas. Es el flujo de fondos generado por la empresa luego de impuestos, sin considerar la deuda
financiera y los dividendos pagados.
El Flujo de caja libre, permite estimar la rentabilidad de los activos, es decir, la rentabilidad de la
empresa o del proyecto como un todo. De tal forma que, el valor de la empresa es el VAN de los
flujos de Caja Libre, descontada a la tasa del WACC, bajo el supuesto que la estructura de capital se
mantendrá. El cálculo del FCL sirve para determinar la parte del beneficio empresarial que se puede
repartir entre los accionistas y deudores.
Cuadro 10. FCL método NOPAT (Net Operating Profit After Taxes) o EBIT
COMPONENTES 0 1 2 … n n+1
(+) NOPAT X X X X
FC OPERATIVO
(+) Depreciacion + amortizacion X X X X
(+) Venta de AF X
(+) Recuperacion CT X FC LIQUIDACION
(-) Impuestos por liquidacion X
(-) Inversion Activos Fijos X X X
(-) Inversion Activos Intangibles X X X FC INVERSION
(-) Inversion Capital de Trabajo o NOF X X X
FLUJO DE CAJA LIBRE X X X X X X
También llamado flujo de caja patrimonial o flujo de caja financiero o flujo de efectivo
apalancado. El FCA es el efectivo que deja el proyecto al accionista después de cubrir
sus costos, pagar sus impuestos, ejecutar las inversiones necesarias para la marcha del
negocio (hasta acá es FCL) y pagar a los acreedores
COMPONENTES 0 1 2 … n n+1
(+) FCL X X X X
(-) Servicio a la deuda X X X X
(+) Escudo Fiscal de los Intereses X X X X
(+) Deuda o Aporte de accionistas X X X X X
FLUJO DE CAJA DEL ACCIONISTA (FCA) X X X X X X
Es el Estado de Flujo de Efectivo es un Estado Financiero Básico que muestra el efectivo generado y
utilizado en las actividades de operación, inversión y financiación.
Es el estado financiero más relevante, porque supera muchos convencionalismos contables que
desorientan a los usuarios de la información contable, además porque a través de éste se puede
evaluar la gestión de la liquidez en los tres frentes fundamentales de decisión financiera: la operación
del negocio, las inversiones y la financiación.
Actividades de Operación
Las actividades de operación, se refieren básicamente a aquellas actividades relacionadas con el
desarrollo y puesta en marcha del objeto social o actividad principal de la empresa, con esto nos
referimos a la producción o comercialización de sus bienes Y/o la prestación de servicios.
Dentro de estas actividades tenemos las siguientes:
En el flujo de efectivo neto de las actividades de operación se presenta revelando información sobre
las principales categorías de cobros y pagos en términos brutos, esta información se puede obtener:
Actividades de Inversión
Las actividades de inversión hacen referencia a las inversiones que realiza la empresa en activos
fijos, ya sea esta operación de compra y venta, adquisición de inversiones en otras empresas,
Actividades de Financiación
Las actividades de financiamiento se refieren a la adquisición de recursos para la empresa, que bien
pueden ser de terceros (pasivos) o de sus socios (patrimonio). En estas actividades de financiación
debemos de excluir los pasivos que corresponden a las actividades de operación, es decir,
proveedores, pasivos laborales, impuestos, etc. Podemos decir que este tipo de actividades la
conforman las obligaciones financieras a largo plazo y la colocación de bonos, la capitalización de la
empresa mediante nuevo aporte de los socios, o la colocación de acciones para incorporar nuevos
socios. Estas actividades pueden ser:
Para su elaboración existen dos métodos: El Método Indirecto y el Método Directo, cada uno de ellos
tiene sus propias características para la elaboración.
(*) De acuerdo a ley, la reserva legal es el 7% de las utilidades, hasta un máximo del 20% del capital
social. En el ejemplo se cubrió el 20%, es decir $ 72.000, razón por la cual no se calculó la reserva
para el 2014
Para efectos prácticos utilizaremos los siguientes datos, los cuales son los mismos valores que
utilizamos en el Flujo de Efectivo de Efectivo Método Indirecto:
Balance General
ACTIVO 20X2 20X1
ACTIVO CORRIENTE 853,000.00 774,000.00
Efectivo y equivalente 119,500.00 90,000.00
Cuentas por Cobrar Comerciales 369,000.00 301,500.00
Otras cuentas por cobrar 13,500.00 18,000.00
Gastos pagados por anticipado 67,500.00 54,000.00
Inventario 283,500.00 310,500.00
ACTIVO NOCORRIENTE 729,000.00 749,250.00
Propiedad, planta y equipo 900,000.00 882,000.00
Depreciación acumulada - 171,000.00 - 132,750.00
TOTAL ACTIVO 1,582,000.00 1,523,250.00
PASIVO 20X2 20X1
PASIVO CORRIENTE 544,500.00 526,500.00
Prestamos bancarios a CP 108,000.00 90,000.00
Cuentas por pagar comerciales 369,000.00 378,000.00
Provisiones y retenciones 54,000.00 49,500.00
Beneficios a empleados 13,500.00 9,000.00
PASIVO NO CORRIENTE 162,000.00 270,000.00
Prestamos bancarios a LP 162,000.00 270,000.00
PATRIMONIO 875,500.00 726,750.00
Capital social 360,000.00 360,000.00
reserva Legal 72,000.00 72,000.00
Utilidades Acumuladas 294,750.00 90,000.00
Utilidad del Ejercicio 148,750.00 204,750.00
TOTAL PASIVO Y PATRIMONIO 1,582,000.00 1,523,250.00
a) Se realiza una comparación de los balances del ejercicio anterior, con los resultados del balance
del ejercicio 20X2.
b) De dicha comparación se establecen las diferencias en los saldos de las cuentas, a esto proceso
se le denomina establecer variaciones, las cuales pueden ser en su caso positivas o negativas.
c) Como ya conocemos el tipo de variación, en la siguiente columna “eliminaciones” liquidamos las
variaciones de las cuentas de balance y mediante el sistema de caja regularizamos el saldo neto
de las cuentas del Estado de Resultado, tomando en cuenta también las otras causas de los
flujos.
En resumen, se reversan todas las operaciones que SI realizaron operaciones directas con efectivo
y/o casi efectivo
Los cambios durante el período en los inventarios y en el derecho por cobrar y obligaciones por
pagar de las actividades de operación
Las partidas sin reflejo en el efectivo, tales como depreciación, provisiones, impuestos diferidos,
ingresos acumulados
Cualesquiera otras partidas cuyos efectos monetarios se relacionen con inversiones o
financiación
Antes de comenzar a elaborar el Flujo de Efectivo por el Método Indirecto, es necesario tomar en
cuenta que hay una manera práctica y sencilla para poder determinar el efecto de la variación en el
efectivo, que nos permite interpretar y analizar los aumentos o disminuciones que afectan
directamente al efectivo. Estas reglas se derivan de la ecuación activo=pasivo + patrimonio neto.
a) Se realiza una comparación de los balances del ejercicio anterior, con los resultados del balance
del presente ejercicio.
b) De dicha comparación se establecen las diferencias en los saldos de las cuentas, a esto proceso
se le denomina establecer variaciones, las cuales pueden ser en su caso positivas o negativas.
c) Como ya conocemos el tipo de variación, en la siguiente columna “efecto neto del
efectivo” realizamos el análisis de cómo afecta cada variación al efectivo y la consideramos como
una entrada o bien una salida.
d) Posteriormente identificamos en la última columna de la hoja de trabajo el tipo de actividad a
considerar, esto con el fin de estructurar el flujo de efectivo en actividades de operación, inversión
o financiamiento.
En resumen, se reversan todas las operaciones que NO realizaron operaciones directas con efectivo
y/o casi efectivo
Por otro lado, el método indirecto además presenta los movimientos de efectivo con un ajuste en la
utilidad o pérdida considerando los importes de las cuentas que no requieren efectivo pero que de
alguna manera influyen en la capacidad de la empresa para realizar sus pagos, un ejemplo de esto
son las pérdidas cambiarias o la depreciación de activos.
La fórmula de este método es:
+ Actividades de operación = + Resultado del período +/- importes sin uso de efectivo
+ Actividades de inversión
+ Actividades de financiamiento
Cuadro No. 12. Cuadro comparativo de las medidas de ganancias de una compañía
Flujo de Efectivo
EBITDA
EGYP
EBIT
ANEXO A
EL CICLO OPERACIONAL DE LA EMPRESA (CP) Y EL CAPITAL DE TRABAJO
También llamado ciclo productivo, es el número de días desde que se compra los insumos y materias
primas que se recibe el pago por la venta del producto que se elaboró con esos materiales. El CP,
está compuesto por: el ciclo de producción (CPRD), más el ciclo de cobranza (CC
CP = caja + ppc + cprod - ppp
Ppc = periodo promedio de cobro
Ppp = periodo promedio de pago
CAPITAL DE TRABAJO= Son las inversiones que, en forma de caja, cuentas por cobrar e inventarios
tiene que realizar una empresa para financiar una empresa el número de días que van desde la
compra de insumos hasta recibir el pago por la venta de los productos
ANEXO B
Liquidación de activo
Existen tres técnicas para determinar el valor de la venta de un activo:
Método de valor en libros (VL): el valor de venta es igual al valor en libros en el momento de la
venta
Método de valor de mercado (VM): Este valor puede ser mayor o menor que le valor en libros
Hay tres escenarios:
VM > VL, se paga impuesto a la renta por la ganancia
VM = VL, no se paga impuesto a la renta
VM < VL, hay un escudo fiscal por la perdida
Valor actual del flujo de caja futuro, calcula el valor futuro del activo al final del proyecto
ANEXO C
CAPEX
Las inversiones en bienes de capital, gastos en capital, capex (contracción del inglés capital
expenditure) o CAPEX son inversiones de capital que crean beneficios. Un CAPEX se ejecuta cuando
un negocio invierte en la compra de un activo fijo o para añadir valor a un activo existente con una
vida útil que se extiende más allá del año imponible. Los capex son utilizados por una compañía para
adquirir o mejorar los activos fijos tales como equipamientos, propiedades o edificios industriales. En
contabilidad, los CAPEX se incluyen en una cuenta de activos (capitalización) incrementando el valor
base del activo (el costo o valor de un activo ajustado por motivos impositivos).
A fines impositivos, los CAPEX son costos que no pueden ser deducidos en el año en el cual son
efectuados y deben ser capitalizados. La regla general es que, si la propiedad adquirida tiene una
vida útil mayor del año imponible, el costo debe ser capitalizado. Los desembolsos relacionados con
los CAPEX se amortizan o deprecian a lo largo de la vida útil del activo en cuestión. Tal y como se ha
explicado anteriormente, los CAPEX crean o aumentan la base del activo o propiedad, la cual una vez
ajustada, determinará la base impositiva en caso de venta o transferencia.
Generalmente se realizan para:
ANEXO D
NECESIDADES OPERATIVAS DE FONDOS (NOF)
1. DEFINICIÓN DE LAS NOF
Para desarrollar su actividad productiva, las empresas realizan una serie de procesos repetitivos que
recibe el nombre de ciclo productivo (o ciclo de explotación).
Este ciclo productivo afecta a los elementos del activo corriente y es el que determina la actividad
corriente de la empresa.
Comienza con la compra de materia prima que se transforma en productos terminados, los cuales, una
vez vendidos y cobrados a los clientes, permitirán la adquisición de nueva materia prima para reiniciar
el proceso que se repetirá de forma continua mientras la empresa se mantenga en funcionamiento.
La duración de este ciclo dependerá del tiempo que permanezca la materia prima en el almacén, de la
duración del proceso productivo, del crédito concedido a los clientes y de la política de pago a
proveedores.
Al período de tiempo que por término medio se tarda en producirse este ciclo operativo se le
denomina Período Medio de Maduración.
Pues bien, para mantener este ciclo operativo, durante todo ese período, las
empresas necesitan disponer de unos recursos, de unos fondos.
Efectivamente, las empresas necesitan fondos para financiar las inversiones en el Activo Corriente, ya
que mantener este activo en condiciones óptimas conlleva una serie de exigencias:
Pero, por otra parte, también reciben financiación cuando los proveedores y ciertos acreedores
(Seguridad social, Hacienda, empleados, etc.) les conceden una serie de días para el pago de las compras,
impuestos y servicios.
En general, la materia prima, la mano de obra y los gastos generales del período (sueldos, impuestos,
seguros sociales, etc.) no se pagan al contado; por tanto, los proveedores y acreedores, al concedernos
un plazo de pago, contribuyen a financiar parte de nuestras necesidades financieras que requerimos
para el ciclo productivo, acortando así el período medio de maduración. Es lo que se conoce
como recursos espontáneos (también conocido como financiación espontánea o créditos de
provisión).
Los recursos espontáneos se denominan así porque la financiación que se obtiene es de forma
automática y sin coste explícito. No se requiere una negociación previa y surgen por el desarrollo normal
de la actividad empresarial. Obedecen al tiempo que transcurre desde que se recibe el bien o servicio
hasta que se realiza su pago (se dispone de unos recursos durante cierto tiempo sin coste adicional). Por
lo tanto, estos recursos espontáneos no están materializados en unidades monetarias; se trata de una
financiación que se obtiene por el aplazamiento de las obligaciones de pagos (de productos, de servicios
o de deudas fiscales).
Pues bien, la diferencia entre la financiación que debe realizar la empresa en su Activo Corriente y la que
recibe de forma gratuita de sus proveedores y acreedores por el aplazamiento de los pagos (financiación
espontánea) conforma lo que se denomina las Necesidades Operativas de Fondos (NOF):
En las finanzas operativas, a la suma de existencias, clientes y tesorería se le conoce como Activo
Corriente Operativo (ACO) y a la financiación espontánea como Pasivo Corriente Operativo
(PCO), de tal forma que la expresión anterior quedaría: NOF = ACO – PCO
Las NOF
ACO - PCO
Pero fijémonos bien: nos estamos refiriendo al activo y pasivo corriente operativo, que son distintos
al activo y pasivo corriente que figuran en el balance de la empresa. A diferencia del Fondo de
Maniobra (FM = AC - PC), las NOF no se pueden extraer directamente de la contabilidad, ya que:
En el Activo Corriente Operativo (ACO) se incluye clientes y deudores a corto plazo (sin
deducir los descontados), las existencias y la tesorería adecuada para satisfacer las
necesidades ordinarias de la empresa. Es decir, las NOF no consideran la tesorería contable.
Precisamente, la diferencia entre el AC y el ACO está en el saldo que se toma de la tesorería: el
Activo Corriente contable (AC) muestra la tesorería real, mientras que el Activo Corriente
Operativo (ACO) registra la tesorería adecuada (tesorería operativa). Es decir, la
tesorería planificada previamente por la empresa para hacer frente a sus operaciones sin que se
produzcan déficit de liquidez.
Conviene distinguir:
Como podemos ver, en el contexto de las finanzas operativas, el vocablo operativo se utiliza para
referirse a los activos y pasivos a corto plazo que se derivan únicamente de las operaciones de la
empresa. No se consideran, por lo tanto, en ningún momento, las decisiones que se hayan podido
adoptar de inversión de posibles excedentes de tesorería ni de financiación bancaria.
Las NOF comprenden las inversiones netas que necesitan las empresas realizar en su activo
corriente operativo para realizar sus operaciones corrientes, una vez deducida la financiación
espontánea.
Las NOF representan el volumen de fondos que la empresa necesita para desarrollar su actividad
sin que se produzcan desequilibrios de tesorería.
- Por un lado, tenemos el exceso de los recursos a largo plazo (recursos permanentes), una vez que han
cubierto las inversiones a largo plazo (el Activo fijo). Si con los recursos permanentes tenemos suficiente
para financiar todo el Activo fijo y aún sobran recursos, este exceso (conocido como Fondo de maniobra,
FM) se destinará a financiar las NOF.
- Y, por otro lado, tenemos los recursos bancarios a corto plazo. Nos referimos a las pólizas de crédito,
descuentos bancarios, etc. que las empresas deben negociar con las entidades bancarias para conseguir
financiación a corto. A partir de ahora, a estos recursos los denominaremos recursos negociados a
corto plazo (RNC).
1. ¿Con qué volumen de Fondo de Maniobra (FM) cuenta la empresa para financiar sus NOF?
2. ¿El importe de los recursos que ha negociado la empresa (a los que llamaremos recursos negociados
a corto plazo, RNC) corresponde con las verdaderas necesidades de recursos que tenía la empresa (a los
que llamaremos necesidades de recursos negociados, NRN)?
Es decir, por un lado, debemos comprobar hasta dónde financia el FM a las NOF, y por otro, analizar si
los recursos que se han negociado (RNC) cubren las verdaderas necesidades de fondos (NRN) que tenía
la empresa.
Esta cuestión es probablemente la más importante del análisis de las finanzas operativas (finanzas a
corto plazo), ya que es primordial que las empresas, antes de contratar los recursos bancarios a corto
plazo (RNC), realicen un análisis riguroso que les permitan prever y cuantificar las verdaderas
necesidades de fondos (NRN) que tiene en un momento determinado. Conocer con antelación estas
necesidades ayuda a la elección de las fuentes de financiación, lo que permite minimizar los costos
financieros y, por supuesto, aportar estabilidad financiera en el tiempo.
Sabemos que muchas empresas muestran cierta incapacidad para diagnosticar con tiempo suficiente el
volumen de recursos bancarios que deberían haber negociado (RNC), llevándoles, en muchas ocasiones,
a situaciones con grandes dificultades financiera.
Significa que el exceso que queda de recursos permanentes, una vez financiado el activo fijo (el FM),
no es suficiente para financiar las operaciones del activo corriente operativo y que, por lo tanto, la
empresa tendrá que negociar recursos a corto plazo. Se dice que la empresa tiene unas necesidades
de recursos negociados (NRN).
FM > NOF
Significa que el excedente de financiación proveniente del activo fijo (el Fondo de Maniobra) es más
que suficiente para financiar las operaciones corrientes de la empresa (el activo corriente operativo) y
que, por lo tanto, existirá un sobrante materializado como excedente de tesorería (ET).
Si se da esta igualdad (NRN = RNC), diremos que la empresa se encuentra en equilibrio financiero
perfecto; una situación en la que se atienden todos los pagos en plazos y se mantiene la tesorería mínima
planificada (tesorería adecuada, tesorería deseada o tesorería operativa), sin déficit ni excedente.
Si, por el contrario, al comparar el volumen real de los recursos que necesita la empresa (NRN) con el
importe total de lo que ha negociado realmente a corto plazo (RNC), se encuentran grandes diferencias,
estaremos ante dos posibles situaciones:
RNC < NRN
Si los recursos negociados (RNC) no alcanzan las verdaderas necesidades de recursos (NRN), la empresa
se habrá visto forzada a "tirar" de otros recursos no planificados (incumplimiento en el plazo de pago
a proveedores, más disposición de la tesorería que la prevista). Se dice que la empresa ha incurrido
en recursos forzados (RF).
Si los recursos negociados (RNC) superan las verdaderas necesidades de recursos (NRN), la empresa se
encontrará con un exceso de financiación que se verá materializado en una tesorería superior a la
mínima planificada. En este caso, se dice que en la empresa posee excedente de tesorería (ET).
Si nos encontramos en el primer caso, en el que la empresa no ha negociado los suficientes recursos para
hacer frente a las verdaderas necesidades financieras, se verá obligada a hacer frente a ciertos pagos con
la tesorería disponible, reduciéndola por debajo del mínimo planificado, y posteriormente, ante la
incapacidad de atender ciertos pagos, a atender con retraso a sus proveedores, aumentando el
aplazamiento concedido y acordado con ellos. Estos son los recursos forzados de la empresa.
Efectivamente, el volumen de las operaciones que realiza una empresa en un ejercicio económico y las
variaciones que sufre en un determinado período, quedan reflejadas en las partidas que componen el
activo corriente y en gran parte del pasivo corriente. De ahí, que su análisis se denomine análisis a corto
plazo o análisis de las finanzas operativas.
Finanzas operativas
son las que se refieren a la financiación de
las operaciones corrientes de la empresa
Estas partidas del balance a corto plazo quedan afectadas por las variaciones diarias de las operaciones
de la empresa, ya sean por causa de las estacionalidades, por cambios de las circunstancias del entrono
o por su propia actividad de crecimiento.
Pues bien, en este artículo, y concretamente en este apartado, vamos a describir cómo se analizan estas
finanzas operativas, ayudado por los conceptos que ya hemos visto en los apartados anteriores.
Para desarrollar este análisis, vamos a seguir el procedimiento que se describe en el gráfico de la derecha:
Comparar el FM con las NOF para averiguar si existe excedentes de tesorería (ET) o, por el
contrario, existe la necesidad de negociar recursos (NRN).
En el caso de existir necesidad de recursos negociados (NRN), comparar su volumen con los
recursos realmente negociados a corto plazo (RNC) para averiguar si en la empresa existe
excedente de tesorería (ET) o, por el contrario, ha incurrido en recursos forzados (RF).
Calcular el FM y las NOF: Para ello, hallamos la diferencia entre el Activo Corriente y el Pasivo
Corriente (que nos dará el FM) y la diferencia entre el Activo Corriente Operativo y el Pasivo
Corriente Operativo (que nos dará las NOF).
Calcular los recursos realmente negociados por la empresa (RNC) para compararlos
con las NRN. De esta forma descubriremos si existe excedentes de tesorería (si NRN < RNC) o,
por el contrario, se ha incurrido en la utilización de recursos forzados (si NRN > RNC).
Con todo esto, solo nos queda desarrollar un ejemplo práctico para que queden las ideas fijas y claras
sobre las NOF y lo que representan en las finanzas operativas.
Para el desarrollo de este ejercicio práctico vamos a aplicar el procedimiento descrito en el gráfico del
apartado anterior, lo cual implica realizar los siguientes cálculos:
1. Calcular el FM
2. Calcular las NOF
3. Calcular la diferencia entre el FM y las NOF.
4. Calcular los RNC, en el caso de que el FM < NOF
5. Calcular la diferencia entre los RNC y las NRN
FM
NOF
FM - NOF
RNC
RNC - NRN
1. En primer lugar, calculamos el Fondo de Maniobra, como la diferencia entre el Activo Corriente y el
Pasivo Corriente:
FM = AC – PC = 1.000
2. Para calcular las NOF (ACO - PCO) necesitamos, evidentemente, hallar antes el importe del activo
corriente operativo (ACO) y del pasivo corriente operativo (PCO) que, como sabemos, no se desprenden
directamente del balance; se necesita realizar unos ajustes acordes a la política planificada por la
empresa:
En el ACO debemos sustituir la tesorería real que figura en el balance por la tesorería operativa de la
empresa: 10% de la deuda a corto plazo
10% de 17.000 = 1.700
En el PCO debemos sustituir el saldo contable de proveedores por su saldo operativo; es decir, por el
saldo resultante de aplicar el pago a 90 días:
nº días x compras x (1+ % IVA) / 360
3. Calculamos la diferencia entre el FM y las NOF, observando que el FM es menor que las NOF. Esto
nos indica que la empresa tiene unas necesidades de recursos negociados (NRN) por importe de 8.000.
4. Los recursos que la empresa ha negociado a corto plazo en este período (RNC) se pueden extraer del
balance. Está compuesto por los descuentos bancarios que ha gestionado (5.000) y el importe dispuesto
de la póliza de crédito (1.000), ascendiendo a un total de RNC de 6.000.
5. Calculamos la diferencia entre las necesidad de recursos negociados (NRN) y los recursos realmente
negociados a corto plazo (RNC) para averiguar si la empresa ha creado un excedente de tesorería (ET)
o, por el contrario, como es el caso, ha incurrido en recursos forzados (RF).
Efectivamente, al ser las NRN mayores que los RNC, comprobamos que la empresa ha tenido que
recurrir a unos recursos forzados (RF) por importe de 2.000.
Es decir, la empresa, ante la falta de liquidez, acudió al descuento bancario (5.000) y dispuso de 1.000 de
la póliza de crédito y, sin embargo, todavía le faltaban 2.000 para cubrir todas sus necesidades, por lo
que tiró de la caja (tesorería) y retrasó el pago a sus proveedores (obsérvese que los importes de estos
recursos forzados obedecen a las diferencias entre los saldos contables y operativos de tesorería y
proveedores).
En definitiva, estos recursos forzados representan el déficit de financiación que tiene la empresa al 31
de diciembre de 2016. Ante esta situación, se ha visto "forzada" a aplicar otros recursos que solvente este
déficit, disponiendo de la tesorería más allá de lo previsto, dejándola por debajo del saldo mínimo
planificado (tesorería operativa o deseada) y retrasando el pago a sus proveedores (ampliando el plazo
de pagos).
Como hemos dicho al principio del artículo, no planificar correctamente y a tiempo las NOF pueden
provocar situaciones de déficit obligando a recurrir a recursos no planificados con el consiguiente
incremento de los costes financieros y la disminución de la liquidez (tesorería) y de la rentabilidad.
Con este análisis, hemos podido comprobar que la empresa no ha sido capaz de generar todos los
recursos que el proceso de crecimiento iniciado a finales de 2015 requería, viéndose obligada, durante
2016, a recurrir a recursos forzados; es decir, a recursos mal negociados.
Sin embargo, la dinámica de la misma empresa puede romper en ocasiones este equilibrio. Por
ejemplo, cuando entra en una fase de crecimiento. Es lógico que en esos momentos los flujos de caja
generados no sean suficientes para cubrir las nuevas necesidades creadas por esta expansión,
obligando a la empresa a recurrir a recursos que, si no han sido planificados con antelación, pueden
provocar desajustes financieros.
Como se indicaba al principio del artículo, para mantener en óptimas condiciones el ciclo productivo,
las empresas deben dedicar y mantener inmovilizados ciertos recursos durante su duración (período
medio de maduración).
Pues bien, para mejorar las NOF, será necesario reducir la cantidad de estos recursos inmovilizados y
acortar en lo posible la duración del ciclo productivo. Para ello, existen una serie de medidas, entre las
que destacamos:
Alargar el período de pago a los proveedores; a mayor plazo de pago más obtención de
financiación espontánea.
Acortar el proceso productivo en el tiempo.
Acortar los días que los productos terminados permanecen en el almacén. Es necesario
venderlos cuanto antes.
Acortar los plazos concedidos a los clientes para los cobros.