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Autismo
Autism-stacking-cans 2nd edit.jpg
La rigidez en ciertos patrones de orden espacial para los objetos es un
comportamiento asociado a veces con individuos con autismo.
Clasificación y recursos externos
Especialidad Psicología
CIE-10 F84.0
CIE-9 299.00
CIAP-2 P99
OMIM 209850
DiseasesDB 1142
MedlinePlus 001526
eMedicine med/3202 ped/180
MeSH D001321
GeneReviews Autism overview
Wikipedia no es un consultorio médico Aviso médico
[editar datos en Wikidata]
Los trastornos del espectro del autismo o TEA (en inglés, autistic spectrum
disorders o ASD) abarcan un amplio espectro de trastornos1 que, en su manifestación
fenotípica,2 se caracterizan por deficiencias persistentes en la comunicación
social y en la interacción social en diversos contextos, unidas a patrones
restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades.3 Estos
síntomas han de estar presentes en las primeras fases del período de desarrollo de
la persona, aunque pueden no manifestarse totalmente hasta que las demandas
sociales superan sus limitaciones. También pueden permanecer enmascarados por
estrategias aprendidas.3 La historia del estudio científico del autismo comienza
con la publicación en 1943 del artículo «Autistic disturbances of affective
contact» («Trastornos autistas del contacto afectivo»)4de Leo Kanner (1943),54 pero
sufrirá diversos avatares que retrasarán el avance de la investigación hasta bien
entrado el decenio de 1960.5
Índice
1 Sistemas de clasificación
1.1 DSM 5 (2013)
1.2 CIE 10 (1992)
2 Historia
2.1 Autismo o trastorno autista
2.2 Actualidad: concepto de «espectro autista»
3 Cuadro clínico
4 Características
5 Autismo idiopático y autismo sindrómico
6 Etiología
6.1 Bases neurobiológicas
6.2 Causas estructurales
6.3 Factores ambientales
6.3.1 Factores de riesgo prenatales y perinatales
6.3.2 Factores obstétricos
6.3.3 Estrés
6.3.4 Ácido fólico
6.4 Conexión intestino-cerebro
6.5 Controversias históricas en la etiología
6.5.1 Vacunas
6.5.2 Crianza
7 Teorías explicativas
7.1 Teoría de la mente (ToM)
7.2 Falta de coherencia central
7.3 Teoría de la disfunción ejecutiva
7.4 Teoría de la empatía-sistematización
7.5 Neuronas espejo
8 Epidemiología
9 Detección
9.1 Tipos de instrumentos para la detección del TEA
10 Evaluación integral para el diagnóstico
11 Diagnóstico
11.1 Aspectos cognoscitivos
11.2 Diagnóstico diferencial
11.2.1 Autismo infantil y retraso mental
11.2.2 Trastornos de la comunicación social
11.2.3 Autismo y esquizofrenia
12 Intervención
12.1 Definición de TE y NEAE
12.2 TE para tratar con alumnado TEA
12.3 Herramientas
12.4 Proyectos para el tratamiento educativo de personas TEA
12.5 Enlaces externos a las aplicaciones
13 Pronóstico
13.1 Inclusión en escuelas regulares
14 Calidad de vida
15 Otros datos de interés
15.1 Alto y bajo funcionamiento
15.1.1 Síndrome del sabio
15.2 Integración Sensorial
15.3 Síndrome de evitación patológica de la demanda
15.4 Fenotipo ampliado
15.5 Aspectos políticos
15.5.1 Estrategia Española en Trastornos del Espectro del Autismo
16 Véase también
17 Referencias
18 Bibliografía
19 Enlaces externos
Sistemas de clasificación
DSM 5 (2013)
El DSM, en su edición de 1994 (DSM-IV), incluía el Trastorno autista en la
categoría Trastornos generalizados del desarrollo, junto a otras 4 subcategorías:
Trastorno de Rett, el Trastorno desintegrativo infantil, el Trastorno de Asperger y
el Trastorno generalizado del desarrollo no especificado (PDD-NOS, en inglés).15916
CIE 10 (1992)
El CIE tiene su origen en la «Lista de causas de muerte», cuya primera edición
editó el Instituto Internacional de Estadística en 1893. La OMS se hizo cargo de la
misma en 1948, en la sexta edición, la primera en incluir también causas de
morbilidad. A la fecha, la lista en vigor es la CIE-10 de 1992,20 y se usa a escala
internacional para fines estadísticos relacionados con morbilidad y mortalidad, los
sistemas de reintegro y soportes de decisión automática en medicina.20La OMS está
preparando la edición del CIE-11.212223 El CIE-10 de 1992, al igual que el DSM IV,
incluía el autismo dentro de la categoría F84.Trastornos generalizados del
desarrollo, junto a otras subcategorías, de acuerdo con la siguiente
clasificación:24
El trabajo de Asperger no fue reconocido hasta 1981, cuando Uta Frith –psicóloga
estadounidense de origen alemán– lo redescubre y lo traduce al inglés. Aunque tanto
Hans Asperger como Leo Kanner coincidían en muchas de sus apreciaciones, sus
diferentes interpretaciones llevaron a Lorna Wing a usar el término síndrome de
Asperger diferenciándolo del autismo de Kanner, aunque señalaba que bien se podía
tratar de dos manifestaciones distintas de una misma condición.28
Debido en parte a que Leo Kanner echó mano del término autismo para describir la
nueva condición que había descubierto4, ésta quedó estigmatizada por la sombra de
las psicosis, dificultando el avance de las investigaciones hasta bien entrada la
década de los 60 en EE. UU. y aún más tarde en otros países.5
De hecho, esta fue la interpretación que siguieron las corrientes principales del
psicoanálisis, con la particularidad de que se pensaba que estas psicosis tenían un
origen psicogenético,5es decir, que estaba provocadas por la frialdad de la figura
materna a la hora de interaccionar con los hijos en los primeros meses de
desarrollo. Ello da lugar a uno de los episodios más oscuros de la historia del
autismo y de la psiquiatría en general, pues se perpetuó la práctica de separar a
los niños de sus padres y de internarlos en instituciones, además de crear serios
sentimientos de culpa en los progenitores.5
Estas prácticas llegaron al límite en la década de los 605de la mano del
psicoanalista y psicólogo austriaco afincado en Estados Unidos, Bruno Bettelheim,
quien creó el término de “madre nevera” y publicó en 1968 un libro titulado ‘’La
fortaleza vacía’’, sugiriendo que detrás de la apariencia de oposición de los niños
autistas se escondía un interior muy pobre.29 Bettelheim adoptó una posición más
doctrinaria con respecto al autismo, distanciándose de la búsqueda científica y
neurobiológica de Kanner y partiendo de los postulados psicoanalíticos. Trató
también de incorporar la epistemología genética de Piaget.30 Su objetivo era
mantener la Escuela Ortogénica de Chicago, donde los niños eran separados de sus
madres para emprender una terapias de dudosa efectividad.31 Posteriormente, se
pusieron al descubierto muchas irregularidades e incluso hechos polémicos sobre los
métodos utilizados y el trato dispensado a sus pacientes.323331
El psicólogo clínico Ole Ivar Lovaas (Lier, Noruega; 1932 - Lancaster, Estados
Unidos 2010) fue considerado como uno de los padres de la terapia para el autismo,
denominada análisis de conducta aplicada o ACA, más conocido por sus siglas en
inglés como ABA (applied behavior analysis). Sin embargo, fue muy criticado por el
uso de técnicas aversivas.30
Hoy en día está totalmente desechada la hipótesis de las madre nevera, y aunque la
etiología de los TEA no está del todo clarificada, las investigaciones señalan a
una condición neurológica con concurrencia de factores genéticos, epigenéticos y
ambientales que actúan durante la embriogénesis.6
A partir de 1997, comienzan a publicarse las guías de buena práctica para TEA, que
tienen como fin garantizar la calidad científica de las investigaciones, el rigor
en el diagnóstico y la ética en las prácticas de intervención en los TEA de acuerdo
con los descubrimientos científicos que fueron surgiendo a finales de la década de
los 90 y principios del siglo XXI.35
Cuadro clínico
Según el DSM-5, el autismo se caracteriza por retraso o alteraciones del
funcionamiento antes de los tres años de edad en una o más de las siguientes
esferas: interacción social y comunicación; patrones de comportamiento, intereses y
actividades restringidos, repetitivos y estereotipados.36
Características
Déficit en la reciprocidad socio-emocional, que oscilan desde un acercamiento
social inadecuado y errores en el seguimiento de una conversación; un nivel
reducido de compartir intereses, emociones o afectos; fracaso para iniciar o
responder a las interacciones sociales.
La falta de atención a partir del año y medio,aparentemente no escucha.
Déficit en las conductas de comunicación no verbal empleados para la interacción.
Déficit en el desarrollo, mantenimiento y comprensión de las relaciones; que
abarcan; por ejemplo, desde las dificultades para ajustar su conducta para
adaptarse a varios contextos sociales; dificultades para compartir el juego
imaginativo o para hacer amigos, hasta la ausencia de interés por los iguales.37
La gravedad está basada en las deficiencias en la comunicación social y en los
patrones de conducta restrictivos o repetitivos.37
Pero los síntomas de autismo pueden presentarse también como consecuencia de otra
afección de etiología conocida. Es lo que se denomina ‘’autismo secundario’’ o
‘’autismo sindrómico’’.39Para hablar de autismo sindrómico (también se habla de
‘síndromes dobles’) se requiere que la enfermedad asociada con el autismo en esos
pacientes haya sido descrita en su origen en otros pacientes no autistas,
constituyendo éstos la mayoría de los casos.40En este caso, no se puede establecer
un nexo causal entre ambos trastornos.
Determinar esta falta de relación causal puede resultar difícil en síndromes muy
infrecuentes, pero hay algunos en los que ha sido posible, como el síndrome del X
frágil, síndrome deleción 22q13, síndrome de Rett, esclerosis tuberosa,
fenilcetonuria no tratada, rubéola congénita, síndrome de Prader-Willi o trastorno
desintegrativo de la infancia.
Etiología
Aunque no se reconocen causas específicas de los trastornos del espectro autista,
varios factores de riesgo han sido identificados y es posible que contribuyan al
desarrollo del TEA.41
Bases neurobiológicas
La evidencia científica sugiere que en la mayoría de los casos el autismo es un
desorden heredable. De hecho, es uno de los desórdenes neurológicos con mayor
influencia genética. Los resultados de estudios en familias y en gemelos sugieren
que los factores genéticos tienen un papel en la etiología del autismo y otros
trastornos del desarrollo.42
Los estudios en gemelos idénticos han encontrado que si uno de los gemelos es
autista, la probabilidad de que el otro también lo sea es de un 60 %, pero de
alrededor de 92 % si se considera un espectro más amplio. Incluso hay un estudio
que encontró una concordancia de 95,7 % en gemelos idénticos.43 La probabilidad en
el caso de mellizos o hermanos que no son gemelos es de un 2 a 4 % para el autismo
clásico y de un 10 a 20 % para un espectro amplio. No se han encontrado diferencias
significativas entre los resultados de estudios de mellizos y los de hermanos. Sin
embargo, no se ha demostrado que las diferencias genéticas observadas, aunque
resultan en una neurología atípica y un comportamiento considerado anormal, sean el
origen patológico.
Se han encontrado dos genes relacionados con el autismo que también están
relacionados con la epilepsia, el SNC1A causante del síndrome de Dravet y el PCDH19
que provoca el síndrome EFMR también llamado Juberg Hellman. También se han
encontrado deleciones de pérdida de PCDH 10 que han sido relacionadas directamente
con trastornos del espectro autista.44
Recientemente se ha descubierto otro gen más implicado en el desarrollo del autismo
y la asociación entre la epilepsia y el autismo, ya se conocen dos genes, en 2001
se encontró el SNC1A, en 2009 se descubrió la relación con el PCDH19 y en abril de
2011 se ha encontrado el SYN1 en una familia canadiense.45
Causas estructurales
Evidencias actuales indican que los sistemas fronto-estriado y cerebeloso motor son
las principales zonas afectadas en las personas con trastornos del espectro
autista, tanto a nivel anatómico como funcional.49
La reducción del número de células de Purkinje (neuronas del cerebelo que controlan
la función motora, el equilibrio, la marcha y el habla) y la hipoplasia cerebelosa
son las alteraciones neurológicas que se han relacionado con los TEA de manera más
clara. De hecho, el cerebelo es esencial en el desarrollo de la comunicación, las
capacidades motrices, cognitivas y sociales básicas, y las conductas
repetitivas/restrictivas, todas ellas alteradas en las personas con estos
trastornos.49
Factores ambientales
A pesar de que los estudios sobre gemelos indican que el autismo es sumamente
heredable, parecen también indicar que el nivel de funcionamiento de las personas
con autismo pueden ser afectados por algún factor ambiental, al menos en una
porción de los casos. Una posibilidad es que muchas personas diagnosticadas con
autismo en realidad padecen de una condición desconocida parecida al autismo
causada por factores ambientales, o sea, una fenocopia. De hecho, algunos
investigadores han postulado que no existe el "autismo" en sí, sino una gran
cantidad de condiciones desconocidas que se manifiestan de una manera similar.
De todas formas, se han propuesto varios factores ambientales que podrían afectar
el desarrollo de una persona genéticamente predispuesta al autismo:
Factores obstétricos
Hay un buen número de estudios que muestran una correlación importante entre las
complicaciones obstétricas y el autismo. Algunos investigadores opinan que esto
podría ser indicativo de una predisposición genética nada más. Otra posibilidad es
que las complicaciones obstétricas simplemente amplifiquen los síntomas del
autismo.
Estrés
Se sabe que las reacciones al estrés en las personas con autismo son más
pronunciadas en ciertos casos. Sin embargo, factores psicogénicos como base de la
etiología del autismo casi no se han estudiado desde los años 70, dado los nuevos
enfoques que han surgido hacia la investigación de causas genéticas.
Ácido fólico
La suplementación con ácido fólico ha aumentado considerablemente en las últimas
décadas, particularmente por parte de mujeres embarazadas. Se ha postulado que este
podría ser un factor de generación de autismo, dado que el ácido fólico afecta la
producción de células, incluidas las neuronas. Sin embargo, la comunidad científica
todavía no ha tratado este tema.[cita requerida]
Conexión intestino-cerebro
Existe un intenso debate en la comunidad científica sobre la conexión intestino-
cerebro. Varios estudios sugieren una relación entre la sensibilidad al gluten no
celíaca y trastornos neuropsiquiátricos, entre los que figura el autismo.51
En 2014 un meta análisis que incluyó a 1.25 millones de niños de diferentes partes
del mundo concluyó que ninguno de los componentes de la vacuna llevaban al
desarrollo de TEA.61
Crianza
Entre los años 50 y los 70 se creía que los hábitos de los padres eran
corresponsables del autismo, en particular, debido a la falta de apego, cariño y
atención por parte de madre-padre denominados "madre-padre nevera" (refrigerator
mother-father). Estas teorías han sido refutadas por investigadores de todo el
mundo en las últimas décadas. El grupo de estudio para los trastornos del espectro
autista del Instituto de Salud Carlos III del Ministerio de Sanidad califica estas
teorías como uno de los mayores errores en la historia de la neuropsiquiatría
infantil.
Las investigaciones de Spitz y toda la teoría del Apego de John Bowlby, basadas en
la potencia de salud mental que proporciona el apego al bebé, demuestran hasta qué
punto puede beneficiar a los niños autistas un entorno de apego seguro, amor y
respeto.
Teorías explicativas
Muchos modelos se han propuesto para explicar qué es o qué causa el comportamiento
autista.
Sin embargo, hay quienes ponen de manifiesto que, en caso de existir el constructo
hipotético de la Teoría de la Mente, no hay datos decisivos para afirmar que los
autistas no la poseen.63
Teoría de la empatía-sistematización
Baron Cohen propone en 2009 que existe una gradación de estilos cognitivos en un
continuo cuyos extremos estarían definidos por la capacidad de empatización y la
capacidad de sistematizar. Las personas con autismo tendrían un exceso de
sistematización, por lo que fracasarían en el intento de establecer relaciones
empáticas con otras personas.
Neuronas espejo
A finales del decenio de los 90, en el laboratorio de la Universidad de California
en San Diego se investigó sobre la posible conexión entre autismo y neuronas
espejos, una clase recién descubierta de neuronas espejo.
Las neuronas espejo realizan las mismas funciones que parecen desarboladas en el
autismo. Si el sistema especular interviene de veras en la interpretación de
intenciones complejas, una rotura de esos circuitos explicaría el déficit más
llamativo del autismo: la carencia de facultades sociales. Los demás signos
distintivos de la enfermedad-ausencia de empatía, lenguaje e imitación deficiente,
entre otros, coinciden con los que cabría esperar en caso de disfunción de las
neuronas espejo.
Epidemiología
Para 2010, la tasa de autismo se estimó en alrededor de 1-2 autistas por cada 1000
personas en todo el mundo y ocurrió cuatro a cinco veces más frecuente en niños que
en niñas.[cita requerida] Para 2014, cerca del 1,5 % de los niños en los Estados
Unidos (uno de cada 68) le diagnosticaron TEA, un aumento del 30 % a partir de 1 de
cada 88 en 2012.646566 La tasa de autismo entre adultos mayores de 18 años en el
Reino Unido es del 1,1 %.67 El número de personas diagnosticadas ha aumentado
dramáticamente desde la década de 1980, debido en parte a cambios en la práctica
diagnóstica y los incentivos financieros subsidiados por el gobierno para la
identificación diagnóstica;66 la cuestión de si las tasas reales han aumentado
sigue sin resolverse.68
Detección
El diagnóstico del TEA es con frecuencia un proceso de dos etapas. La primera etapa
comprende una evaluación del desarrollo general durante los controles del niño sano
con un pediatra. Los niños que muestran algunos problemas de desarrollo se derivan
para una evaluación adicional. La segunda etapa comprende una evaluación exhaustiva
efectuada por un equipo de médicos y otros profesionales de la salud con un amplio
rango de especialidades. En esta etapa, un niño puede recibir un diagnóstico de
autismo o de algún otro trastorno del desarrollo.
Un control del niño sano debería incluir una prueba para evaluar su desarrollo, con
examen de detección específico del TEA a los 18 y 24 meses, como lo recomienda la
Academia Americana de Pediatría. Realizar exámenes de detección del TEA no es lo
mismo que diagnosticar el TEA.
Lista de verificación para el autismo en los infantes (CHAT, por sus siglas en
inglés)
Lista de verificación modificada para el autismo en los infantes (M-CHAT, por sus
siglas en inglés)
Herramienta de detección del autismo en niños de dos años (STAT, por sus siglas en
inglés)
Cuestionario de comunicación social (SCQ, por sus siglas en inglés)
Escalas de conducta comunicativa y simbólica (CSBS, por sus siglas en inglés).
Para detectar el TEA leve o síndrome de Asperger en los niños mayores, se puede
depender de instrumentos de detección diferentes, como:
Cuestionario de exploración del espectro autista (ASSQ, por sus siglas en inglés)
Escala australiana para el síndrome de Asperger (ASAS, por sus siglas en inglés)
Test infantil del síndrome de Asperger (CAST, por sus siglas en inglés).69
Evaluación integral para el diagnóstico
La segunda etapa de diagnóstico debe ser minuciosa a fin de encontrar si otras
afecciones pueden ser las causantes de los síntomas del niño. Un equipo que incluye
un psicólogo, un neurólogo, un psiquiatra, un logopeda u otros profesionales
experimentados en el diagnóstico del TEA puede efectuar esta evaluación. La
evaluación puede calificar el nivel cognitivo del niño, el nivel de lenguaje, su
conducta adaptativa (habilidades adecuadas en relación con la edad necesaria para
completar las actividades diarias independientemente, por ejemplo, alimentarse,
vestirse y asearse), los niveles de audición, imágenes cerebrales y exámenes
genéticos.69
Diagnóstico
La revisión del DSM 5 modifica el enfoque anterior del DSM IV. Se pasó de
categorizar a los diferentes trastornos a un enfoque dimensional para diagnosticar
los trastornos que se son comprendidos dentro del espectro autista. Así, se
considera que todos los trastornos antes mencionados son mejor representados en una
sola categoría diagnóstica porque muestran los mismos tipos de síntomas y son
diferenciados de mejor manera atendiendo variables clínicas (ej., dimensiones de
severidad) y características asociadas (ej., trastornos genéticos, epilepsia,
discapacidad intelectual).19
Aspectos cognoscitivos
Alrededor del 75% de los pacientes diagnosticados de autismo presentan algún grado
de retraso mental. Se da la circunstancia de que a medida que aumenta el grado de
retraso mental, aumenta también la prevalencia del autismo. Puede decirse que
resulta difícil establecer los límites entre el autismo y el retraso mental en
aquellos casos en los que la deficiencia mental es muy severa.70. También puede ser
que el retraso mental conlleve autismo de modo secundario. En cualquier caso, el
problema fundamental es la fiabilidad de las pruebas que miden el cociente
intelectual (CI) aplicadas a personas con una afección considerable de autismo.
Esto hace que sea imposible hacer una determinación exacta y generalizada acerca de
las características cognitivas del fenotipo autista. Se sabe que los niños
superdotados tienen características que se asemejan a las del autismo, tales como
la introversión y la propensión a las alergias.71 Se ha documentado también el
hecho de que los niños autistas, en promedio, tienen una cantidad desproporcionada
de familiares cercanos que son ingenieros o científicos.72 Todo esto se suma a la
especulación controvertida de que figuras históricas como Albert Einstein e Isaac
Newton, al igual que figuras contemporáneas como Bill Gates, tengan posiblemente
síndrome de Asperger. Observaciones de esta naturaleza han llevado a la escritora
autista Temple Grandin, entre otros, a especular que ser genio en sí "puede ser una
anormalidad".73
Diagnóstico diferencial
Autismo infantil y retraso mental
El autismo infantil produce alteraciones intelectuales que a menudo son muy
difíciles de diferenciar del discapacidad intelectual. Sus principales
características son:
Disociación entre los CI verbal y no verbal, con una superioridad por parte de las
habilidades no verbales
El desarrollo del lenguaje no sigue las etapas normales
Regresiones espontáneas en el proceso de desarrollo comunicativo
Disociaciones claras entre la forma y el contenido del lenguaje y su uso en forma
inapropiada
Los menores que padecen retraso mental suelen exhibir un retraso en el desarrollo
lingüístico, pero siguen las mismas etapas del niño normal. El autismo infantil y
el retraso mental llegan a estar relacionados y, de hecho, se ha considerado que
aproximadamente tres cuartas partes de niños autistas funcionan como adultos con
retraso mental.75
Autismo y esquizofrenia
Aunque personas con esquizofrenia pueden mostrar comportamiento similar al autismo,
sus síntomas usualmente no aparecen hasta tarde en la adolescencia o temprano en la
etapa adulta. La mayoría de las personas con esquizofrenia también tienen
alucinaciones y delirios, las cuales no se encuentran en el autismo.76
Intervención
Véase también: Escala de Evaluación de Tratamiento del Autismo
Los objetivos de las intervenciones son disminuir el impacto de los déficits tanto
en la vida personal como en la familiar y social, mejorar la calidad de vida y la
independencia funcional. Ningún tratamiento se ha establecido como superior y
generalmente debe ser adaptado a las necesidades del niño.
Definición de TE y NEAE
Por un lado, la Tecnología Educativa (TE) es el conjunto de conocimientos,
aplicaciones y dispositivos o herramientas que otorgan la posibilidad de aplicar
las TIC en el ámbito educativo, concretamente en los procesos de enseñanza y
aprendizaje. Gracias a ésta, los docentes pueden diseñar y planificar el proceso de
enseñanza y aprendizaje de manera óptima y eficiente.
Por otro lado, las Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE) engloban todas
las Necesidades Educativas Especiales (NEE) y Necesidades Educativas que pueda
tener el alumnado. Estas últimas se derivan de Dificultades Específicas de
Aprendizaje (DEA), del Trastorno por Déficit de Atención con o sin hiperactividad
(TDAH), de las Altas Capacidades Intelectuales, de Especiales Condiciones
Personales o de Historia Escolar (ECOPHE), o bien por Incorporación Tardía al
Sistema Educativo.
– De la palabra a la frase.
Calidad de vida
Para las personas con discapacidad las dimensiones de la calidad de vida son
semejantes a las del resto de la población.
La calidad de vida mejora en el momento en el que las personas con esta condición
se sienten con el poder de tomar decisiones que repercutan en su vida, durante
muchos años este poder se les ha quitado de las manos a las personas con
discapacidad, siendo asumido por familiares o los profesionales cercanos a la
persona.
La calidad de vida aumenta con la aceptación y la total integración de las personas
a la comunidad en la que se encuentran, brindándoles independencia, siendo esta un
factor esencial en la percepción de la calidad de vida.
Todas las personas experimentamos la calidad de vida en el momento en el que las
necesidades básicas se cumplen y se dan las mismas oportunidades para lograr
distintas metas en contextos tales como hogar, comunidad, escuela y trabajo.80
Otros datos de interés
Alto y bajo funcionamiento
Un criterio común para la distinción entre autismo de alto y de bajo funcionamiento
es un cociente intelectual de más de 70-80 para aquellos que se dice que son de
alto funcionamiento, y de menos de 70-80 para aquellos que se dice que son de bajo
funcionamiento. Este criterio tiene varios problemas:
Se cree que las pruebas de cociente intelectual son inadecuadas para medir la
inteligencia de una persona autista, ya que están diseñadas para personas típicas.
Es decir, estas pruebas asumen que existe interés, entendimiento, conocimientos
lingüísticos, motivación, habilidad motriz, etc. Se conocen casos de personas
autistas cuyo cociente intelectual cambia drásticamente dentro de un periodo
relativamente corto, lo cual probablemente no indica un cambio real en el nivel de
inteligencia.
La percepción de "bajo funcionamiento" por lo general se refiere a carencia de
habla, incapacidad para cuidarse de sí mismo, falta de interacción social, etc.
Esto no siempre coincide con el criterio del cociente intelectual. Existen personas
autistas que carecen de habla (aunque se pueden comunicar por escrito) con un
cociente intelectual alto. Por otro lado, autistas con un cociente intelectual bajo
podrían poseer la capacidad del habla.
Los autistas varían extremadamente en sus capacidades. Una misma persona puede
mostrar características de "alto funcionamiento" y otras de "bajo funcionamiento."
Por lo tanto estas etiquetas son uni-dimensionales y su descriptividad deficiente.
Las personas autistas que son de "bajo funcionamiento" en algún área pueden
desarrollarse y volverse de "alto funcionamiento" en esa misma área. Alguien
diagnosticado autista puede volverse indistinguible de alguien diagnosticado con
Síndrome de Asperger.
Síndrome del sabio
Rimland (1978) encontró que el 10% de los autistas tienen "talentos
extraordinarios" en campos específicos (comparado con un 0,5% de la población
general). Brown y Pilvang (2000) han propuesto el concepto del "niño que esconde
conocimiento" y han demostrado por medio de cambios en las pruebas de inteligencia
que los niños autistas tienen un potencial que se esconde detrás de su
comportamiento.81 Argumentan también que la falta de optimismo que promueve gran
parte de la literatura científica sobre el tema puede empeorar la situación del
individuo autista. Dawson (2005), una investigadora autista, ha realizado
comparaciones cognitivas entre individuos autistas y no autistas; encontró que su
rendimiento relativo en las pruebas de Wechsler y RPM son inversos.82 Un estudio de
la Universidad Estatal de Ohio encontró que los autistas tienen mejor rendimiento
en pruebas de memoria falsa.83 Happe (2001) hizo pruebas a hermanos y padres de
niños autistas y propuso que el autismo puede incluir un "estilo cognitivo"
(coherencia central débil) que confiere ventajas en el procesamiento de
información.84
Integración Sensorial
Anna Jean Ayres, PhD, OTR, (January 18, 1920 – December 16, 1988) fue la Terapeuta
Ocupacional que desarrolló la teoría e intervención en Integración Sensorial en los
EE. UU. Los problemas sensoriales más comúnmente reportados en individuos con
diagnóstico de autismo incluyen hiporrespuesta, hiperrespuesta, patrón de respuesta
mixto y problemas de praxis debidos a déficits en el procesamiento e integración de
diferentes sensaciones.89 Sin embargo, otras caracterizaciones también han sido
reportadas. Por ejemplo, Baranek y sus colaboradores reportaron patrones de
hiporresponsividad (hipo), hiperresponsividad (hiper), intereses, repeticiones y
comportamientos de búsqueda (IRCB) y percepción superior.94 Las evaluaciones
especializadas en integración sensorial son llevadas a cabo por Terapeutas
Ocupacionales con educación de post graduación en este abordaje en más de 22 países
en el mundo. Una formación internacional en esta teoría y marco de intervención ha
sido desarrollada por instructores por medio de la University of Southern
California (USC). Criterios de formación específica han sido establecidos y se
implementan en varios países del mundo.
El DSM 595 ha reconocido la existencia de los problemas sensoriales como parte del
diagnóstico de autismo. Esto ha causado un renovado interés en Integración
Sensorial dentro de Terapia Ocupacional. Terapia Ocupacional con Integración
Sensorial (OT/SI) ha demostrado evidencia científica de efectividad y eficacia en
pruebas controladas aleatorizadas, el nivel más alto de evidencia científica.9697
Mejorías en varias áreas incluyendo aspectos motores, del comportamiento, lenguaje,
juego y actividades de la vida diaria así como también objetivos específicos
establecidos con los familiares han resultado positivos cuando la intervención está
implementada por Terapeutas Ocupacionales con formación adecuada en Integración
Sensorial.
Fenotipo ampliado
El fenotipo autista ampliado (broader autism phenotype o BAP) hace referencia a
personas que, sin presentar un cuadro clínico de TEA, muestran rasgos rasgos
propios del autismo tales como evitar el contacto vistual9910010110210119
Aspectos políticos
Hay grupos que defienden que el autismo no es una enfermedad o desorden en sí, sino
una forma de ser103; es decir, una neurología atípica que merece respeto, creando
una serie de términos para contrastar con los términos en uso común por el público,
por ejemplo, "neurotípico" en lugar de "normal", "neurodiversidad" en lugar de
enfermedad o desorden, y "neurodivergente" en lugar de "anormal".
Este movimiento ha sido criticado fuertemente por algunos padres de niños autistas,
principalmente Kit Weintraub y Lenny Schaffer, quienes han acusado a los activistas
autistas de no ser autistas en realidad, entre otras cosas. Algunos padres de niños
autistas sí lo apoyan. Algunas de sus reivindicaciones son:104
Véase también
Guía de buena práctica para TEA
Síndrome de Asperger
Síndrome de evitación patológica de la demanda
Donald Triplett
Autismo regresivo
Referencias
Jean Xavier, Claude Bursztejn, Maitri Stiskin, Roberto Canitano, David Cohen
(2015). «Autism spectrum disorders: An historical synthesis and a multidimensional
assessment toward a tailored therapeutic program». Research in Autism Spectrum
Disorders 18: 21-33.
Artigas Pallarés, J (2002). «Fenotipos conductuales». Rev Neurol. 34 (Supl 1):
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