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¿Quieres hijos con autoestima?

¡Sé un
padre con autoestima!
Domingo, 2 abril 2017, 19:41
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No desesperes hay una vida entera para construir la autoestima

La autoestima es la valoración positiva o negativa que una persona hace de sí misma en


función de los pensamientos, sentimientos y experiencias que esa persona vive. Padres y
madres sabemos que la autoestima de nuestros hijos influye mucho en su comportamiento
pero muchas veces no sabemos qué hacer ni qué decir para lograr que su autoestima sea
positiva.

Achacamos a la baja autoestima las dificultades que puedan presentar nuestros hijos y
bueno, puede que sea cierto, pero te diré que en la infancia y adolescencia es fácil tener
problemas con la autoestima. En este blog repetimos hasta la saciedad que nuestros hijos e
hijas están en “construcción” y eso significa que necesitan vivir, necesitan tener
experiencias para ir forjando personalidad y también su autoestima y, de nuevo, aquí
los padres tenemos un papel importantísimo que desarrollar: somos proveedores de
autoestima.

¿Quieres hijos con autoestima positiva? Pues te recuerdo que lo que tú trasmites a tus
hijos, con tus palabras, con tus actitudes, con tu comportamiento, con tus
expectativas, con tus gestos va a ser fundamental en la formación de su autoestima.
Esta tarea de ayudar a nuestros hijos a configurar su autoestima requiere de paciencia y de
mucha constancia, pues esta tarea de construirse como persona requiere su tiempo.

¿Cómo ayudar a los hijos para que sean capaces de ir mejorando su autoestima?

En primer lugar, tus hijos necesitan sentir que son aceptados incondicionalmente.
Trasmitimos a nuestros hijos que los queremos, que los aceptamos como son. No tenemos
hijos para que nos den “gloria” a los padres; aceptar a alguien incondicionalmente no
significa que les dejemos hacer lo que quieran hacer, es más, porque los aceptamos tal y
como son es por lo que les ponemos normas y límites. No los queremos porque aprueben,
recojan, obedezcan, los queremos porque son nuestros hijos y cuando suspenden, no
recogen o desobedecen simplemente aplicamos consecuencias.

En segundo lugar, nuestros hijos necesitan que valoremos objetivamente aquello que
hacen. Esto quiere decir que cuando educamos hijos no podemos dejar que las normas y
límites que les proponemos sean más o menos flexibles en función de que nosotros estemos
más contentos, enfadados, cansados, etc. Romper un vaso de cristal en un ataque de rabia
requiere una respuesta más seria que la de romper, sin querer, un valioso jarrón. Eso es
valorar objetivamente.

En tercer lugar necesitan autonomía. Ser capaces progresivamente de ir tomando las


riendas de su vida, para tener autonomía hay que dar responsabilidades a nuestros hijos.
Desde pequeños tienen que tener responsabilidades y posibilidades de tomar decisiones
acordes a su edad. Los educamos para que vuelen.

En cuarto lugar necesitan tener experiencias de éxito. Todos los niños tiene que tener
experiencias de éxito (una experiencia de éxito es aquella en la que nuestro hijo o hija hace
algo que sabe hacer y las debemos de resaltar, para que cuando digan eso de “yo no sé
hacer eso” les digamos, mira hijo, tú sabes hacer tal cosa y si sabes hacer eso puedes
intentar hacer esto otro), pero ojo, tus hijos no son perfectos, así que también deben de
tener experiencias de fracaso, esto los hará más realistas y entenderán cómo se siente uno
cuando las cosas no te salen como esperabas.

En quinto lugar necesitan confianza, sentirse mal en la infancia o en la adolescencia es algo


normal, al igual que equivocarse y cometer errores. Los niños y adolescentes llevan mal eso
de equivocarse, para eso estamos los padres para corregir los errores y mientras corregimos
les hacemos ver que confiamos en ellos. Errar, corregir y confiar.

Por último, lo que necesitan es que su padre y su madre actúen como padres con
autoestima positiva, padres que confían en su competencia como educadores, padres
sin prisas, padres sistemáticos, padres que guían, padres orgullosos de sus hijos,
padres que confían en sus hijos.

Vamos, que tus hijos para tener mejor autoestima te necesitan. Así que estad atentos.

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