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de agua al interior de su estructura, hecho que incide en la estabilidad de las obras civiles que allí
se localicen, por cuanto la humedad en altas proporciones puede generar disminución en la
durabilidad y funcionalidad de las mismas.
Se ha demostrado que muy frecuentemente, la causa de falla de las obras de estabilización, tiene
origen en un drenaje inadecuado o inexistente, por lo que es fundamental llevar a cabo el diseño
del subdrenaje, de acuerdo con las condiciones del sitio. Esto permitirá una mayor confiabilidad
en la estabilidad de las obras por proteger y un incremento apreciable en la vida útil de las
mismas.
La presencia de agua en un talud genera una disminución en la resistencia al esfuerzo cortante del
suelo, lo que frecuentemente es la causa de falla del mismo. El objeto de un sistema de
subdrenaje es eliminar los excesos de humedad del terreno en donde se localice una obra para
protegerla y permitir un mayor estabilidad y durabilidad a la misma e interceptando corrientes
subterráneas y abatiendo niveles freáticos altos.
Un sistema de subdrenaje consiste en una estructura hidráulica formada por un medio filtrante y
un medio drenante; el primero, es aquel que retiene las partículas sólidas y permite el paso del
líquido, mientras que el medio drenante actúa como vehículo, transportando el líquido que pasa a
través del filtro.
Drenajes
Los sistemas de drenaje subsuperficial se emplean con el objeto de eliminar los excesos de agua
en las estructuras, proveniente de las siguientes fuentes:
- Agua que se ha desplazado hacia arriba a través de los estratos subyacentes por acción de
la capilaridad:
Las zonas en las cuales el agua se encuentra a una presión inferior a la atmosférica, se
denominan zonas de agua capilar. El potencial de capilaridad más alto suele ocurrir en
suelos con altos contenidos de limos y arcillas.
Subdrén de zanja
Este sistema consiste en construir una zanja a determinada profundidad, la cual es rellenada con
material filtrante. Frecuentemente se introduce en el fondo una tubería perforada con lo cual los
excesos de agua serán captados por el medio filtrante y conducidos a la tubería, que llevará el
agua por gravedad a un lugar de descarga adecuado.
Existen diferentes tipos de zanjas y su empleo depende de la necesidad de captación, la
disponibilidad de los materiales y el costo:
Las tuberías perforadas suelen tener un diámetro entre 10 y 20 cm y los orificios se ubican en la
mitad inferior y en la franja entre los 22.5º y los 45º con respecto a la horizontal como se muestra
en la siguiente figura.
Subdrenaje en zanja
Terraplén proyectado
Terreno natural
Material permeable
Tubo perforado
Subdrén Chimenea
Este tipo de subdrén se construye en la parte posterior del muro, es decir en el espaldón y su
función es evitar que se generen presiones hidrostáticas que afecten la estabilidad del mismo.
Consiste en un filtro de un espesor que puede oscilar entre 40 y 80 cm, dispuesto en forma
vertical a lo largo de la altura del espaldón del muro, formado por material granular limpio de
finos con una granulometría entre ¾” y 2 ½”, cubierto con un Geotextil de tipo no tejido.
Lloraderos
Subdrén
chimenea con
Geotextil
Cuneta
Subdrén
longitudinal
Lloraderos
Como complemento al drenaje en el espaldón del muro, es necesario construir lloraderos que
permitan la salida de agua de exceso. Los lloraderos consisten en tuberías de diámetro entre 2 ½”
y 4” que se introducen dentro del muro espaciados entre 2 y 3 m aproximadamente en sentido
vertical y entre 1 y 2 m aproximadamente en sentido horizontal en una longitud de ¾ de la base
del muro.
Lloraderos
Figura 15. Muro de contención en concreto lanzado con lloraderos para el subdrenaje.
Vía Bogotá-Villavicencio
Lloraderos
Como complemento al drenaje en el espaldón del muro, es necesario construir lloraderos que
permitan la salida de agua de exceso. Los lloraderos consisten en tuberías de diámetro entre 2 ½”
y 4” que se introducen dentro del muro espaciados entre 2 y 3 m aproximadamente en sentido
vertical y entre 1 y 2 m aproximadamente en sentido horizontal en una longitud de ¾ de la base
del muro.
Figura 15. Muro de contención en concreto lanzado con lloraderos para el subdrenaje.