RELACIÓN Y REFLEXIONES DE “LA ÉTICA DEL CUIDADO”

 Nos encontramos hoy frente a una gran paradoja: al mismo tiempo que estamos creando
todas las condiciones para la desaparición de la especie humana, hemos creado todas
las condiciones para hacer posible el relacionamiento y el encuentro global como especie.

Ejercicios como el propuesto en clase, son un inicio de estas condiciones de

relacionamiento que son indispensables hoy en día, pero de igual forma es de gran
relevancia cuestionarnos sobre las acciones que estamos ejerciendo para preservar
nuestra especie pues, así como nadie es indispensable para la vida, nosotros no lo somos
para el planeta y está en nuestras manos cambiar actos que nos llevan a nuestra propia
destrucción.

 Reconocernos unos a otros como de la misma especie es uno de los desafíos del
proyecto de humanización.

Esta afirmación de Bernardo Toro, nos indica que aún tenemos que recorrer un camino
para llegar a reconocernos como de la misma especie, lo cual solo es posible a través del
encuentro y el reconocimiento del otro como distinto y diferente a mí, pero tan legítimo y
digno como yo. Es así como el ejercicio en clase es tan relevante pues a través de nuestra
mirada estamos reconociendo la importancia de las sensaciones que me produce el otro
a través de una historia que puede ser contada desde nuestro interior.

 El cuidado del cuerpo no solo es un problema de salud es también un problema político

y de convivencia. Si cada persona aprende a valorar y respetar su propio cuerpo como
un bien insustituible y a respetar el cuerpo de los otros, quizás se crean mejores
condiciones para evitar el daño a los cuerpos: el asesinato, el secuestro, la tortura, el
hambre, el suicidio, etc. La Vida es sagrada porque el cuerpo es sagrado.

Aprender a reconocer como seres invaluables, amorosos, poderosos y generosos nos

hará entregar ese mismo accionar a los otros, mientras estaba en el ejercicio pensaba
que muchos seres humanos pasan por nuestras vidas de forma esporádica pero que
todos somos tan importantes que merecemos quedarnos en los corazones y la memoria,
entregando eso mismo que quisiéramos que nos entregaran a nosotros.

 El cuidado el espíritu implica lograr autonomía, es decir, logra al tiempo autorregulación,

autoconocimiento y autoestima.
Teniendo en cuenta dicha conferencia, superar el enfoque de la ética heterónoma que
tienen nuestros sistemas educativos es uno de los desafíos al que nos convoca la ética
del cuidado pues nuestro accionar o nuestras tradiciones no deben ser una imposición
sino una autorregulación de lo quiero para mí y los otros. Saber cuidarse y cuidar a los
otros requiere de personas que saben autorregularse para cuidar la dignidad de todos es
así como este ejercicio nos permite conocernos un poco más y brindar ese cuidado que
tanto necesitamos, a partir de los sentimientos que cada uno nos pudo brindar pues
muchos encontramos en ese otro una mirada que reconocemos de nuestra vida, ya sea
papá, mamá, hermano etc que nos brinda mayor confianza y entrega.

Por último, si queremos un mundo en donde podamos tener un desarrollo social y

económico cuidando, nosotros y las siguientes generaciones, debemos aprender
necesariamente a hacer transacciones económicas, políticas, sociales y culturales del
tipo ganar-ganar, esta afirmación la escuché en un momento de mi vida y hoy la fuerzo a
través de lo que he vivido, si le apostamos a juego ganar-ganar estamos pensando en
ese beneficio colectivo que nos lleva a evolucionar desde diferentes aspectos. Así, como
el ejercicio nos produjo sentimientos de amor, sinceridad, ternura, respeto, fuerza, el
verdadero ejercicio inicia hoy, donde debemos darle continuidad a ese cuidado del otro
que se dio en apertura desde ese momento.