Intervención de pacientes crónico degenerativos y

en fase terminal.

Perspectiva de enfermedades crónico degenerativas

en México.

Por Edgar Vicente Quintana Gardea

 México, un país con 126.74 millones de habitantes, en donde la riqueza
cultural, su historia y su gastronomía, han trascendido la barrera del tiempo, hablo
de un país mágico, en donde sus habitantes viven el día con particular simpatía y
despreocupación del mañana. En donde desayunar con un refresco es cosa común,
la comida frita es el platillo de todos los días, un lugar en donde miles de
trabajadores, permanecen bajo la cruel iridiscencia calcinante del sol día tras día,
un país en donde a los adultos no les interesa, ni tienen tiempo, para ejercitarse o
hacer una dieta, un país en donde la comida grasa y el alcohol, están a la orden del
día, y todo esto parte de un problema de salud pública.

La forma en que vive el mexicano, grita una verdad, una verdad que perturba
la perspectiva de salud pública. Lo cierto es que en México no existe la cultura de
la prevención, al mexicano no le gusta prever situaciones, no le gusta informarse,
pues lo cierto es, que de hacerlo, tendría que abandonar el estilo de vida al que está
acostumbrado, parece que fuera mucho mas sencillo, tratar de arreglar la situación,
cuando todo ha pasado, que intentar evitar que suceda, tal como el coloquial dicho
que nace de su particularidad cultural y forma de vivir “mejor pedir perdón que pedir
permiso”.

Empero, el mexicano, no vive siempre despreocupado. Una vez que se le

diagnostica una enfermedad crónico degenerativa, es común verle pasar por un
proceso de duelo, ya que es muy difícil adaptarse al cambio, es difícil dejar de hacer
cosas a las que estabas tan acostumbrado, y de hacerlo implica un cambio radical
en su estilo de vida. A menudo mantener esta resistencia a los cuidados paliativos,
tiene como consecuencia recaídas que empeoran el estado de salud el paciente,
por consecuencia, trae sufrimiento a la familia del afectado.

Cuando una persona del núcleo familiar, desarrolla una enfermedad crónico
degenerativa, es común que el resto de la familia cargue con parte de la
enfermedad, la preocupación no se hace esperar y a menudo buscan ayudar a
controlar los hábitos de salud del afectado, situación que se torna conflictiva, si el
afectado se niega seguir buenos lineamientos en su salud. Toda esta situación
genera conflictos familiares, que, de no ser superados, se traducen en fuertes
resentimientos.

Al no existir una cultura de prevención y una fuerte negación al creer que una
enfermedad crónica degenerativa, nos puede afectar en la vida propia, ocasiona
una gran ola de desinformación, o bien un fuerte desinterés. Es común que por
enfermedad crónico degenerativa, el mexicano promedio, solo piense en cáncer,
diabetes o bien hipertensión, si bien, no es un error el señarlas como tal, se deja
una gran cantidad de enfermedades en el camino, lo cual solo empeora el panorama
de salud pública en el país. ¿Cómo podrá alguien hacerle frente a una situación a
la que desconoce? O bien ¿Cómo lo hará si no le interesa a causa de la
desinformación?

Es importante recalcar, que al tener una ECD (enfermedad crónico

degenerativa), no implica un cambio total de tu forma de vivir, tampoco implica dejar
de hacer todo lo que te gusta o bien el tener los días contados. Lo que si implica, es
tener una clara conciencia del cuidado personal y preocupación por la calidad de
vida propia.

Es difícil explicar porque al mexicano le resulta mas atractivo gastar un alto

precio por ponerse uñas cada mes, ir a una barbería con costos desorbitados o
gastar altas sumas de dinero en celulares y accesorios, que el ir con un médico o
un psicólogo, cuando tu salud física o mental te lo exige. ¿Será acaso que el
mexicano, busca la aprobación de la sociedad mediante “poses de gran señor”, por
sobre la salud y el cuidado propio? O ¿Será que simplemente el mexicano solo
busca vivir el día?
Bibliografía
González Caamaño A. Pérez Balmes J, N. S. (Enero-febrero 1986). Importancia
de las enfermedades crónico degenerativas dentro del panorama
epidemiológico en México. Salud publica de México, 3-13.
José Ángel Córdova-Villalobos, M. E.-M.-E. (septiembre-octubre 2008). Las
enfermedades crónicas no transmisibles en México: sinopsis
epidemiológica y prevención integral. medigraphic, 419-427.