Sunteți pe pagina 1din 11

Nómadas (Col)

ISSN: 0121-7550
nomadas@ucentral.edu.co
Universidad Central
Colombia

Puche Navarro, Rebeca


MENTE / CREATIVA / MENTE / INVESTIGATIVA / MENTE
Nómadas (Col), núm. 7, septiembre, 1997, pp. 10-19
Universidad Central
Bogotá, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=105118909002

Cómo citar el artículo


Número completo
Sistema de Información Científica
Más información del artículo Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal
Página de la revista en redalyc.org Proyecto académico sin fines de lucro, desarrollado bajo la iniciativa de acceso abierto
MENTE / CREATIVA /
MENTE / INVESTIGATIVA
/ MENTE*

Rebeca Puche Navarro**

La autora intenta de-construir el proceso de la creatividad como un


resultado de la inspiración a la luz de los planteamientos expuestos por
Margaret Boden. Presenta además un paralelo entre creación e investiga-
ción orientado a desarrollar algunos mitos sobre la formación de investi-
gadores y la manera como se ha pensado el oficio de investigar.

*
La autora quiere reconocer los aportes de Hernán Lozano al texto, y a una grata conversación
con Angela González de donde surgieron ideas precisas.
**
Doctora en Psicología de la Universidad de Ginebra (Suiza), Directora del Centro de Investi-
gaciones en Psicología, Cognición y Cultura de la Universidad del Valle.

10 NÓMADAS
Introducción nes con la mente investigativa debe- otros conceptos. Complementaria-
rá permitir avanzar con más claridad, mente, hay que anotarlo, Boden logra
Cuando me solicitan escribir este en el espinoso tema de la formación su cometido gracias a una privilegiada
artículo para la revista Nómadas, de investigadores. erudición en campos tan disímiles
pienso que la autora ideal para reali- como la historia de las ciencias, la
zar el trabajo es Margaret Boden. El El punto de anclaje del trabajo música y la literatura. La recupera-
año pasado había leído su espléndi- de Boden sobre “la mente creativa” ción de sus ideas sobre la creatividad,
do libro La mente creativa 1 donde es la psicología computacional, es resultará especialmente esclarecedora
lograba “domesticar la paradoja de la decir la especificación de las estruc- para derrumbar mitos y para pensar
creatividad”. ¿Es posible pensar lo im- turas conceptuales, los procesos y los con mente investigativa, el oficio de
pensado? (Boden, 1994). Su manera mapas mentales. La naturaleza y los investigar.
de plantear la contradicción de la mecanismos de la creatividad son
actividad creativa, además de la ri- explicados a partir de la actividad de
queza de su indagación, constituye la mente en la producción de sus pro- La creatividad
una vía singular para explorar el es- pios recursos y en esa elaboración romántica y la mente
pacio de re-pensar la mente inves- identifica el papel de la experticia, creativa como sistema
tigativa. de las restricciones, de las heurísticas generativo
y de las matrices de analogías, entre
La posibilidad de crear conoci- La noción más generalizada y
mientos que hasta un determinado extendida de la creatividad está li-
momento han permanecido imposi- gada al surgimiento repentino y no-
bles de concebir, es una problemáti- vedoso de la solución a un problema.
ca que muy justificadamente se aplica La admiración y el entusiasmo que
a la ciencia y de manera más especí- despierta la creatividad han con-
fica a la investigación científica. tribuido a considerarla como
No es puro azar si la noción de resultado de una inspiración
invención que aparentemen- súbita y propia entonces de
te parece tributaria de la crea- un proceso sacralizado. En
ción, es en realidad de la ese contexto no resulta extraño
familia de la investigación. In- que la creatividad haya sido un
vención, inventos, ingenios, campo preferido del
creación, marcan momentos de la colonizaje romanticista. La
escala de la producción de la nove- ‘iluminación’ inesperada y
dad. No se requeriría de más argu- brillante del creador parece
mentos para señalar la estrecha contraponerse al trabajo dis-
relación entre creación e investi- ciplinado y adusto de la men-
gación. Ese paralelismo, puede te investigativa que, además
abordarse mediante una lectura del de lenta, requiere ser especial-
texto de Boden. Sus planteamien- mente reflexiva y conciente, cuali-
tos arrojan mucha información so- dades de las que carecería por
bre la relación entre “la mente definición la inspiración creativa.
creativa” y lo que podemos convenir En ese contexto de lo ‘inexplicable’
en llamar “la mente investigativa”. y subyugador de la creación, “la
Las preguntas ¿qué los caracteriza?, mente investigativa” parece ser su
¿qué tienen en común?, ¿por qué pa- opuesto natural.
recen tan diferenciados siendo tan
cercanos?, dirigen la reflexión de ese La base de toda la argumentación
artículo. El examen de la mente que Boden desarrolla paso a paso para
creativa y el análisis de sus relacio- des-construir -como se diría ahora…-

NÓMADAS 11
cional de la mente crea- ben a los otros. El impringting está
tiva que, contra todas las ligado a una concepción que ha per-
intuiciones, se opone a la mitido re-pensar la disciplina en la
concepción de capaci- que se inscribe4 , el impacto de la gra-
dad2 . La mente creativa es mática generativa en la lingüística
un sistema generativo de demuestra que la ruptura que crea
reglas que como tal, debe Chomsky no es el resultado de un
ser durable. En ese senti- dato aislado, sino el resultado del
do la mente creativa, ni la dominio experto de las reglas del
inteligencia, pueden se- campo científico al que pertenece.
guir conociéndose en
tanto que capacidades, en- La “mente creativa” así como la
gendradas por caducas “mente investigativa”, concebidos
concepciones de facultad ambos como sistemas, tienen la po-
y con todos los arcaísmos sibilidad de poder cartografiar, explo-
que eso implica. rar y transformar tanto los objetos que
trajinan como -y esto es lo más im-
En la pintura algunos portante para nosotros- su propia
casos ilustran por excelen- mente. Estas actividades de explora-
cia el saber de un sistema ción involucran de manera tácita o
de reglas generativas. explícita procesos evaluativos
Velázquez en un extremo (Boden, 94). Un irónico ejemplo lo
la creatividad como resultado de la de ese sistema de reglas, y Escher en constituye Monterroso quien, ante la
inspiración, es su concepción -y de- el otro, son dos paradigmas del fun- pregunta de cómo hace para escribir,
finición- de “la mente creativa” como cionamiento dentro del mismo contesta dubitativamente que él real-
un sistema. “La naturaleza de la crea- sistema. “Las Meninas”, obra paradig- mente no escribe, solo se corrige.
tividad se concentra en las posibili- mática de Velázquez, condensa la
dades estructurales definidas en tanto magnificencia del funcionamiento de
que reglas generativas consideradas un sistema3 . En el otro extremo se Experticia y tiempo
como descripciones abstractas. Los encuentra Escher: dos de sus obras, versus inspiración
mecanismos de la creatividad por su por ejemplo Ascender y descender,
parte, se concentran en las posibili- y/o Manos que se pintan, dan cuenta El siguiente paso en el análisis
dades inherentes a las reglas gene- de un conocimiento exhaustivo de propuesto por Boden se desprende
rativas consideradas como procesos ese sistema de reglas y son un exce- directamente de su concepción de la
computacionales” (Boden, 1994, lente ejemplo de un funcionamien- “mente creativa” como sistema, y
p.63). De esa definición, se rescatan to que lleva las leyes de ese sistema consiste en plantear que ésta se de-
tres elementos esenciales que consti- hasta un cierto límite, hasta la para- sarrolla y funciona en campos
tuyen una sólida argumentación para doja, en ella se llega casi a negar las específicamente definidos con-
contrarrestar las concepciones de la reglas dentro del mismo sistema que ceptualmente que requieren de muy
creatividad como inspiración. Son las produce. altos niveles de experticia (Boden,
ellos: la idea de la “mente creativa” 94, p.45). Esa es una condición sine
como sistema que posee sus propias En el campo de las ciencias, qua non aunque sea una de esas ver-
reglas generativas, y de la cual se pue- Lorenz o Chomsky en la etología y dades de Perogrullo: Boden, coinci-
den identificar los procesos compu- la lingüística, dos ejemplos tomados de en este punto con muchos otros
tacionales. Vale la pena llamar la al azar, permiten analizar el caso del especialistas en el tema. En el cam-
atención sobre la distinción entre la impringting y la gramática gene- po de las artes son excepcionales los
naturaleza y los mecanismos de la rativa. El uno y la otra se anotan per- autores de una sola obra, libro, pin-
“mente creativa”. Pero realmente lo fectamente dentro de una red de tura, o composición musical. Y el
que más interesa es el carácter fun- conceptos en los que los unos se de- tiempo, llámese experiencia o

12 NÓMADAS
experticia, es el aliado de la activi- dos descubrimientos de Piaget, que mas operaciones de la lógica. Aho-
dad científica. No es admisible en- cambió la concepción de la mente ra bien, encontrar en la lógica el
tonces que la “mente creativa” lo que se tenía del niño, es el que con- modelo de las operaciones menta-
pueda ser en una única ocasión, dado cierne a las conservaciones. El suje- les, equivale a concebir la lógica
que es un sistema que continúa ope- to entre los cinco y los siete años de como una axiomática de la razón
rando en el tiempo. Esa verdad, que edad puede dar indicios de carecer o cuya ciencia experimental corres-
puede resultar sorprendente (o sos- de poseer sistemas normativos. Un ponde a la psicología de la inteli-
pechosa para los contradictores ro- sistema normativo es el que permite gencia (Greco, 1970). La siguiente
mánticos) para la “mente creativa”, postular invariantes dentro de un pregunta es saber si eran impensa-
es evidente en el caso de la “mente conjunto de transformaciones. Iden- bles las conservaciones antes de
investigativa”. tificar las etapas y los procesos que Piaget. La respuesta es sí, sin lugar
conducen a la construc- a duda alguna. Las conserva-
Una dimensión fundamental en ción de la conservación ciones fueron ‘impensa-
esta propuesta, es la introducción de en la mente del niño. das’ para Wallon, muy
la variable tiempo. Por una parte es Esa información cercano sin embar-
claro que si la “mente creativa” es un que toma la go a la concepción
sistema, no es el resultado de deste- forma de genética de Piaget
llos puntuales. Los niveles de ex- y aún más para
perticia, también requieren pensar la Vygostky, más dis-
creatividad desde la perspectiva del tante. ¿Qué ruptu-
tiempo, como el resultado de años de ra suponen las
trabajo. La cuestión central en la ar- conservaciones en la
gumentación es que si se acepta que manera de pensar la com-
la creatividad es un sistema gene- prensión del niño, en la
rativo, entonces necesariamente tie- psicología en la década del
ne que ser durable. Boden toma el cuarenta? Quizá la más im-
caso de Turing para ilustrar la portante es la postulación de los
promesa que la crea- esquemas necesarios para que la
ción de su máquina mente procese la información. Po-
posteriormente der pensar que los cambios en la ma-
cumpliría. En rea- un dato ‘incubado’ nera de pensar el sujeto los objetos,
lidad no importa (¿deducible?) dentro de una no dependen tanto de la informa-
qué ejemplo de científico se concepción genética y experimen- ción que se le ofrezca -que es la mis-
tome, todos habrán de mostrar el tal postula que el conocimiento así ma situación de las conservaciones-
cumplimiento de sus precoces prome- como las herramientas cognitivas, se sino en las herramientas con que
sas. La apuesta es que la “mente construyen. Es un dato que requiere pueda procesar la información.
creativa” sigue funcionando y desa- concebir que las conservaciones es- Cuestión de esquemas, o cuestión
rrollándose a lo largo de la vida inte- tán dentro de las condiciones de método dirían otros, es posible
lectual y productiva de la mente del fundantes del pensamiento científi- que estas dos cuestiones sean en rea-
sujeto. co. Pero la pregunta es: ¿podría lle- lidad una única cuestión.
garse a este descubrimiento sin ser
Un buen ejemplo del valor de un experto y sin dominar con ‘maes- Esta argumentación de la “men-
la experticia y el tiempo en la in- tría cognitiva’ -como se diría ahora- te creativa” como un sistema con
vestigación científica, es el trabajo el sistema cognitivo de la mente del reglas generativas, acompañada de
de Piaget que a lo largo de más de niño? La respuesta es no, y en el caso la experticia como su factor consti-
siete décadas ofreció continuamen- de Piaget éste no solo introduce una tutivo y con la dimensión temporal
te aportes y descubrimientos en el aproximación singular de la mente que la define, pone al descubierto
interior de una disciplina como la del niño sino que su hipótesis es que las evidentes y orgánicas relaciones
psicología. Uno de los más conoci- la mente funciona a partir de las mis- que tiene con la “mente investiga-

NÓMADAS 13
tiva”. La experticia es la primera como en las artes y en cada uno de Creatividad y
condición del investigador, y todos ellos, lo que pone de presente es que restricciones
sabemos que la experticia es tiem- el carácter ‘retrospectivo’ de su des-
po, tiempo lento, aunque la tarea sea cripción por parte de los protagonis- Otra de las ideas centrales de
tratar de reducirlo. tas, encubre el tiempo de preparación Boden en su conceptualización de la
que requirió. Entonces, aunque la “mente creativa” es el papel de las
La experticia en la mente inves- creación parezca súbita y repentina, restricciones, una idea tangente a la
tigativa, es la acumulación organi- la realidad es que las vías de prepara- concepción de la creatividad como
zada y selecta de vías por las cuales ción y los períodos de “incubación” sistema de reglas. “Lejos de ser la an-
transitar dentro de un campo defi- podrían tomar semanas, meses o toda títesis de la creatividad, las restric-
nido; los estados del arte, lo que da la vida como en el caso de Darwin - ciones sobre el pensamiento son las
lugar al llamado ‘oficio del in- que Gruber por ejemplo, desarrolla que hacen posible la creatividad”
vestigador’ son muestra de ello. De ampliamente- (Gruber, 1980). (Boden, 94, p.122). Frecuentemen-
manera indudable la “men- te se considera que la liber-
te investigativa” exige de tad -ausencia de reglas y re-
un conocimiento experto gulaciones- es el caldo de
de uno u otro tipo: conoci- cultivo, si no la condición
miento experto que, para- misma de la creatividad.
fraseando a Boden, termina Dentro de la concepción
siendo directamente pro- computacional de la psico-
porcional a la calidad de los logía que maneja Boden,
descubrimientos de la in- hay que advertir la relación
vestigación. Existe un entre restricciones y
acuerdo general en el hecho experticia por un lado, y
de que el descubrimiento de entre restricciones y mapas
nuevos conocimientos conceptuales o mapas en la
científicos es un trabajo de mente por otro. “Cuantas
especialistas que dominan más limitaciones se impo-
el campo. Un lego simple- nen, más se libera uno mis-
mente no está en capacidad mo de las cadenas que suje-
de encontrar nuevos super- tan el espíritu” dicen que
conductores o de descubrir declaró una vez Stravinski
la causa del sida. Se entien- (Gardner, 1993, p.263). Las
de el valor de la trayectoria restricciones no serían otra
en el reconocimiento de un cosa que “sistemas genera-
descubrimiento o de un tivos que guían el pensa-
aporte específico de la in- miento y la acción por al-
vestigación. En el mundo de las prácticas gunos caminos pero no por otros “.
investigativas y de la actividad cien- (Boden, 1994, p.75, el resaltado es
Ahora bien, dentro de la concep- tífica estos períodos de “incubación” nuestro).
ción inspirada de la creatividad, el son la norma. Respecto a los tiem-
momento singular de la creación es pos previos y que anteceden al des- En el cuento La búsqueda de
también -lejos de su apariencia repen- cubrimiento de la novedad, el papel Aberroes, Borges hace una especie de
tina y súbita- el resultado de largos que allí juega el conocimiento ex- tour de force que consiste en comen-
períodos de incubación. Los ejemplos haustivo detallado y completo del zar un texto que es un cuento, que
en la historia de las ciencias se tie- campo del saber en cuestión, es una luego termina como un ensayo no na-
nen a porrillo. Boden analiza porme- condición fundante de la práctica rrativo. Hoy se hablaría de meta-
norizadamente distintos casos de investigativa. cuento, en el que a lo largo de una
descubrimientos tanto en la ciencia construccón exquisita recrea Anda-

14 NÓMADAS
lucía, para luego pasar a una destruc- tuye la vacuna de Elkin Patarroyo con- plicativa que provee la formulación
ción en la que el narrador -que no es tra la malaria. Todos sabemos que la computacional de la representación”
narrador- subvierte la ilusión de ese vacuna (que ahora podríamos llamar (Varela, 1990, p.48). Ella permite
mundo, mostrando que se trata de un clásica), obedece al principio de crear describir, explicar, o simular las prin-
mundo de solo palabras... Las restric- en el organismo humano, una respues- cipales disposiciones y capacidades de
ciones juegan allí un papel funda- ta inmune al introducirle el micror- la mente tales como el lenguaje, el
mental en la medida en que implican ganismo que produce la enfermedad; razonamiento, la percepción, la co-
el manejo de las propias reglas cons- el quid de esta vacuna es que el ordinación motriz. La pica en Flandes
titutivas. Borges viola exquisitamente microrganismo introducido debe es- en ese nuevo dominio, la restricción
las reglas. Solo cuando el sujeto, pri- tar debilitado, de manera tal que el que se pudo cambiar en el sistema de
mero, domina las reglas, lo hace con organismo humano pueda combatir- reglas, está definida por la represen-
solvencia y experticia, y segundo, lo y así construir la inmunidad. Pata- tación como computación y ese do-
cuando toma conciencia de ellas, rroyo explora otra vía de acceso. Su minio tiene en la “inteligencia
puede utilizarlas adecuadamente y es camino consiste en darle al organis- artificial su proyección más literal”
el momento en el que puede propo- mo humano información genética (Varela, 90, p.48).
ner nuevas reglas, abrir con ellas nue- sobre las proteínas del DNA del mi-
vos campos con nuevos aportes. croorganismo, y con esta información Pero existen otros aportes y des-
el organismo humano puede buscar las cubrimientos que si bien no crean
Las restricciones sobre el pensa- coordenadas proteicas para crear la nuevos campos del saber, constituyen
miento por la vía de las limitaciones, respuesta inmunológica. Frente al ca- hipótesis de trabajo que permiten
permite que ciertos pensamientos mino transitado y conocido del do- avanzar en el interior de las discipli-
–ciertas estructuras mentales– sean minio de las vacunas, por medio de nas. Es lo que ocurre en el desenvol-
posibles (Boden, 94, p.74). La crea- organismos vivos (la regulación de vimiento de la ciencia “normal” que
ción de un nuevo espacio conceptual, ciertas reglas), la vacuna sintética hace define Kuhn, versus los casos de la
en esa línea de ideas, es una cuestión posible otro camino (una trocha di- ciencia “revolucionaria” que pueden
de restricciones. Un nuevo espacio rán otros...) -cambiar aquellas reglas estar más cerca de lo que ocurre con
conceptual es el resultado de la regu- y proponer otras-, las del conocimien- la aparición de las ciencias cognitivas.
lación de ciertas reglas; se requiere to que ofrece la información genética. La ciencia llamada “normal” realiza
saber cambiar aquellas, que entre to- El nuevo espacio conceptual de la adiciones, correcciones y ampliacio-
das las existentes permitan, como vacuna sintética implica “comprender nes fácticas, cuyos estatutos pueden
dice Boden, comprender lo que po- lo que podría o no podría ser posible”. variar dentro de una gama bastante
dría o no podría ser posible -que no amplia. El estatuto de esos cambios
probable- y útil. Otro caso excepcional de la crea- es un tópico apasionante, pero lo más
ción de un nuevo dominio, en la indicado para esta reflexión es esqui-
Boden toma el caso de Schoen- ciencia, lo ilustra también de mane- var la discusión sobre el estatuto de
berg para analizar la creación respec- ra privilegiada el surgimiento de la los cambios y analizar esas adiciones
to de las restricciones. El aporte de ciencia cognitiva. Varela lo señala al (sean ellas fácticas o conceptuales)
este compositor consiste en abando- presentar una cartografía de las ideas desde el punto de vista de las restric-
nar las restricciones en torno a una actuales sobre ese campo: “las cien- ciones y de la experticia.
clave, en otras palabras abandonar el cias y tecnologías de la cognición
campo de la música tonal, e introdu- (CTC) constituyen la revolución Otra derivación posible del jue-
cir las posibilidades de usar cada nota conceptual y tecnológica más impor- go de las restricciones en la ciencia
de la escala cromática. Se abandona tante desde la física atómica”. ¿Cuá- ordinaria son las metodologías y las
un espacio conceptual y se abre otro les restricciones se modificaron y prácticas del trabajo científico. Las
que antes no existía. cuales se mantuvieron para hacer de metodologías permiten retrasar el
la ciencia cognitiva la mutación más itinerario de un experimento. Y la
Un ejemplo cercano y actual en importante de las ciencias humanas réplica de ese experimento es una de
el descubrimiento de una nueva vía en los últimos 30 años? La respuesta las condiciones de su credibilidad y
en el campo inmunológico, lo consti- es sintética: en la “herramienta ex- validación. Si se descubre que el bebé

NÓMADAS 15
de dos meses imita gestos no visibles Mente creativa, mente En este momento es muy perti-
de su propio cuerpo, uno y otro ex- investigativa y nente otra distinción que introduce
perimento deben poderse replicar, Boden, se trata de una distinción
formación de
conduciendo a los mismos resultados complementaria que resulta bastan-
para que esa novedad sea reconocida investigadores te eficiente en el estudio de la propia
por la comunidad de sus pares e in- actividad creativa, la diferencia en-
corporada dentro del conjunto de Parece claro que la “mente inves- tre, “P-creativo: psicológico-creativo
conocimientos de ese campo. La ló- tigativa”, al igual que la “mente crea- que concierne a las ideas (en la cien-
gica de la prueba, sea el plan del ex- tiva”, no son un don, ni un talento cia o en las artes y oficios) (…) que
perimento, o el trabajo de campo, misterioso, ni una capacidad innata, son fundamentalmente novedosas
responde a la idea de contrastar, com- características que se definen porque respecto de la mente individual, sin
probar y verificar. Esos pasos son las ‘se tiene o no se tiene’; pero ¿puede importar cuantas personas puedan
reglas del juego dentro de las que se construirse, adquirirse o formarse? haber tenido la idea (Boden, 94,
desarrolla el quehacer y la búsqueda Para seguir consistentemente con los p.55); y el H-creativo: histórico-
del científico. Ellos parecen espe- argumentos aquí expuestos, hay que creativo, que en parte se aplica a las
cíficamente diseñados para cristali- afirmar con certeza que “la mente ideas particularmente novedosas res-
zar esas reglas. Sin embargo no se investigativa” es entonces suscepti- pecto a toda la historia humana....”
excluye que un descubrimiento o una ble de ser aprendida o adquirida. (Boden, 94, p.55).
creación novedosa e importante para
el conocimiento, sea el descubri- Esta diferenciación permite la
miento de un nuevo procedi- utilización del H-creativo
miento y de una nueva para el desarrollo del para-
metodología que era im- lelismo entre “mente
pensable (e impensada) creativa” y “mente
desde la metodología investigativa” y del P-
clásica. Ese nuevo pro- creativo para esclarecer la
cedimiento requiere en- cuestión sobre la forma-
tonces determinar qué es ción de investigadores. Las for-
lo que se puede o no se pue- mas de adquisición del sistema de
de cambiar. Esta diferenciación per- reglas normativas y generativas que
mite distinguir entre diversos niveles define el proceso de formación de la
de novedad. Una idea meramente “mente investigativa” involucra el
novedosa es una que puede ser des- acceso a un dominio y a una exper-
crita o producida por el mismo con- ticia en un campo determinado. Re-
junto de reglas generativas que otras quiere del conocimiento en las
ideas conocidas. Una idea genui- metodologías propias a ese campo, en
namente original o creativa es una los desarrollos teóricos, por supues-
que no puede serlo (Boden, 94). Por to, pero también en el oficio y en la
eso es importante identificar los cocina de esos campos. Es igualmen-
mecanismos respecto de los cuales te necesario que la formación del in-
se trata de una idea genuinamente vestigador suponga el dominio de las
original. restricciones de un campo.

Los estatutos de esas ideas mues- Pero ¿existe acaso una manera de
tran que las relaciones entre “mente inducir procesos de producción de
creativa” pueden efectiva y consis- ideas novedosas? Planteado así pare-
temente transpolarse a la actividad ce un despropósito; sin embargo,
investigativa, y no de manera preci- existen distintos niveles de respuesta
samente inspirada. a esa cuestión. La introducción al

16 NÓMADAS
conocimiento -y eso sigue siendo lo pensar la cuestión de la formación de de los intereses científicos en los jó-
fundamental y extraordinario del co- investigadores. En el escenario plan- venes y en los más jóvenes. En sínte-
nocer- en cualquiera de sus niveles, teado por Gardner, el primer persona- sis, la formación de los investigadores
constituye por excelencia la entrada je (aunque ello no implica descuidar en sentido amplio debe fomentarse
a un espacio desde el cual pensar los otros) arroja una respuesta que ha- desde ese momento del aprendiz in-
“pensamientos nuevos”. Esa posibili- bría que considerar. Se trata del cul- genuo, que se hace preguntas y que
dad, independientemente de quienes tivo y fomento de ese precoz aprendiz contextos y espacios mejor estruc-
hayan tenido esas ideas previamen- ingenuo que inicia sus intercambios turados permitirían guiar hacia de-
te, es además lo propio del P-creativo. con el mundo. Sus preguntas, ‘ideas sarrollos de la actividad científica, y
Nuevamente ¿es ello susceptible de en la cabeza y en acción’ deben poder mostrar la seducción que el conoci-
aprenderse? ¿Puede adquirirse una for- desarrollarse y encontrar respuestas miento puede desplegar.
mación para pensar pensamientos nue- fluidas y convenientes. Por supuesto
vos? Por desconcertante que parezca, que la escuela es el primero de ellos, Dos ideas parecen imponerse en
ese es el sentido original de el panorama que brinda la
la institución educativa. Lo actividad científica cuan-
chocante es no lograr reco- do se recorre la vida y el
nocer en ese aparato una mundo de quienes hacen
aventura para el conoci- la ciencia. La primera es la
miento. variable tiempo, en el pro-
ceso de formación de in-
Gardner en uno de sus vestigadores en sentido
más recientes textos y con el amplio. En el sistema edu-
que intenta responder a todo cativo, aparentemente, la
el desplome al que han dado formación del investigador
lugar las protuberantes fallas llega en una etapa avanza-
en el sistema educativo bá- da, si se toma el itinerario
sico americano, repasa los que recorre la mente estu-
distintos modelos de adqui- diosa desde el ambiente
sición y acceso al conoci- inicial en el que el niño
miento a la luz de tres accede al conocimiento,
personajes: 1) El aprendiz hasta su llegada a la
intuitivo, ingenuo, natural o universidad. Sin embargo
universal, que desarrolla teo- un análisis más parsimo-
rías prácticas acerca del nioso lo que demuestra es
mundo físico y social que le que los investigadores (en
rodea. 2) El estudiante tra- sentido amplio y provoca-
dicional que entre los 7 y los dor), llegan a las univer-
20 años trata de adquirir los conoci- pero frente a su crisis, se piensa cada sidades, no empiezan allí su
mientos disciplinares que imparte la vez más en formatos paralelos a la es- formación. Por otra parte llegan para
escuela, y 3) El experto disciplinar cuela, como respuestas entusiastas e quedarse. Lo importante es enten-
que domina los conceptos y habili- instigadoras para la búsqueda del co- der que en un sentido amplio, la for-
dades de una disciplina en particular nocimiento. La presencia de museos mación del investigador no se
(Gardner, 93, p.22). Distribuidos esta interactivos de las ciencias, de parti- pospone para el final del ciclo del
vez en tres personajes vuelve a surgir cipación en sociedades amigas de las proceso educativo, el riesgo de pro-
aquí el problema del acceso al cono- ciencias, de actividades que las dis- ceder así es que el resultado no solo
cimiento en función ahora de la edad tintas disciplinas, desde la biología, sea una formación ineficiente, sino
y la posición frente al sistema educa- la física, la bioquímica, pasando por haber debilitado al máximo cual-
tivo5 . El acceso al conocimiento sin la antropología y la etología, desplie- quier iniciativa.
embargo no es nada diferente de guen en su re-encuentro de captación

NÓMADAS 17
La segunda idea es que el inves- y se puede concretar mejor, pero es
tigador en sentido muy estricto, se dudoso que se descubra allí. Se en-
forma en el que-hacer de la investi- tiende entonces por qué se defiende
gación, en las rutinas, en la cocina, la idea del conocimiento como aven-
en el trabajo tura y que las condiciones para gozar
de campo o mejor de esta aventura se establecen
en el labora- desde los primeros ‘pinitos’ del saber.
torio; en ese En el escenario del primer personaje
tiempo lento, de de Gardner, del personaje aprendiz
las prácticas in- espontáneo hay que recuperar su in-
vestigativas. El desa- terés decidido por el conocimiento,
rrollo de las prácticas y cultivar su apego a él.
investiga-
tivas requie-
re de unas Apostillas de
condiciones de
conclusión a la luz de
disciplina, tenacidad, y
perseverancia, pero nada de la investigación y del
eso se puede simular, hay que cons- investigador en
truirlo palmo a palmo en el espacio Colombia
de ese quehacer. Los cursos y cursi-
llos pueden ser un espacio para do- Resulta difícil no incluir alguna
minar contenidos muy reflexión sobre el investigador y la
específicos, pero en nin- investigación en nuestro contexto y
gún momento reempla- nada mejor que traer a colación el
zan el sentido que se último libro de Gómez Buendía y
construye en el proceso Jaramillo, 37 modos de hacer ciencia
investigativo. en América Latina. En él se presenta
una visión escandalosamente objeti-
Ahora bien, una de las cues- va del tercer personaje de Gardner, a
tiones que deriva del problema saber: del científico o experto en su
central aunque ampliamente sos- actividad disciplinar. La especificidad
layado en la problemática del apren- es la reconstrucción de casos en el
dizaje, es la idea de que el conoci- escenario latinoamericano. Gómez
miento en cualquiera de sus niveles Buendía afirma que la ciencia es una
requiere de una libido. La llamada vo- rara avis en el panorama latinoame-
cación del investigador, como dice ricano, su proceso de surgimiento lo
Gómez Buendía, es una cuestión de caracteriza como un transcurso im-
tentación, (Gómez Buendía, 1997) probable y tenso. Al examinar con
es decir de amor y pasión por el cono- juicioso detenimiento ese surgimien-
cimiento. Una inversión de afectos, to, el estudio revela que la ciencia
que permita avanzar en un camino nace del entrecruce cambiante de
que es de largo aliento. Y el amor por cinco factores entre los que estan las
el conocimiento no se adquiere en biografías, saberes, equipos y ambien-
la etapa más avanzada del trán- tes, institucionalización y comunida-
sito a él (la vida universita- des académicas6 .
ria). Es cierto que en las
universidades se alcan- De manera sintética se podría
zan más especificidades decir que Gómez Buendía y Jara-

18 NÓMADAS
millo analizan la idea de la “mente condiciones mismas de la formación GÓMEZ BUENDÍA, Hernando, JARA-
MILLO, Hernán, 37 modos de hacer cien-
investigativa” como una cuestión de de los investigadores. cia en América Latina, Bogotá, Tercer
saberes y el proyecto sobre ese saber, Mundo Editores - Colciencias, 1997.
puntos que son compartidos por GRECÓ, Pierre, L´epistémologie de la psycho-
Boden, aunque al trabajar ella sobre logie. In Logique et Connaissance. La
“mente creativa” permanece en un Citas Pleiade, Paris, Gallimard, 1967.
desglose más específico y parsi- GRUBER, Howard, E. (1984), Darwin sobre
monioso de esos dos exclusivos fac- 1
Publicado en 1990, en Gedisa y con una el hombre. Un estudio psicológico de la
pésima traducción al español en 1994. creatividad científica. Madrid: Alianza.
tores. El equipo, la institución y la
comunidad científica son factores 2
Capacidad, (facultad, don), concepto tri- MARINA, José Antonio, Teoría de la inteli-
gencia creativa, Madrid, Amorrortu,
integrados al análisis de Gómez butario de una concepción en la que se
1996.
entretejen relaciones, como que si es una
Buendía pero que no aplican al aná- MONTERROSO, Augusto, Conversaciones,
capacidad debe provenir de algo, debe
lisis de Boden. La cuestión es que la poderse medir. México, FCE, 1989.
formación del investigador se pue- PIAGET, Jean, Logique et Connaissance, La
3
Foucault da cuenta de ello bellamente en
de circunscribir a los dos primeros Las palabras y las cosas. Pleiade, París, Gallimard, 1970.
factores: investigador y su proyecto; VARELA, Francisco, Conocer, Barcelona,
4
En tanto que pertenecientes a un siste-
pero no es completa si no se la ana- ma, igualmente se podrían tomar otros Gedisa, 1990.
liza desde los tres factores restantes. ejemplos de sus producciones. VYGOTSKY, L.S., Thougt and language,
5
El más trajinado en nuestra disciplina es Cambridge (Mass), MIT Press, 1962.
En esa rara avis que es la ciencia el de la contradicción entre los conoci-
en América Latina, el trayecto que mientos espontáneos y los conocimien-
cumple el investigador en las socie- tos formales y científicos.
dades desarrolladas, es no sólo visi- 6
Para Gómez Buendía se requiere de la pre-
ble, sino reconocido; la formación del sencia de un investigador con una forma-
ción, una vocación y una tentación, esto
investigador tiene un lugar y poste- quiere decir que el investigador “requiere
riormente su trabajo un reconoci- tener una formación pero también tener
miento. El problema del investigador ganas”. Un proyecto de saber que quiere
en nuestro contexto no es que tenga decir una línea de investigación, un mé-
todo, una intención (una pregunta inte-
un bajo perfil, simplemente es que ligente y un método de cómo responder a
carece de él. Para lograr tener un ella). Un grupo, es decir una solidaridad,
equipo, una institución que financie, un liderazgo, una estrategia y un soporte
intelectual y afectivo ligado a una institu-
y una credibilidad entre los pares, se
ción que provee el habitat con sus rutinas
requiere es cierto, de un proyecto de socioadministrativas y los recursos. Final-
vida que involucre una buena forma- mente unos interlocutores, una comunidad
ción y una claridad mental y emo- académica, unos jueces, una legitimidad
que le den sentido y valor a la actividad
cional bastante singular, pero se realizada. (Gómez Buendía, 1997, p.374).
requiere haber conocido y luego ele-
gido esa opción. Sin embargo esa
opción de la carrera del investigador
no es visible y ese no es sino el pri-
mero de la serie de obstáculos que Bibliografía
encontrará de ahí en adelante.
BODEN, Margaret, La mente Creativa, Bar-
celona, Gedisa, 1994.
No se puede desconocer que la
modernidad y la racionalidad son BORGES, Jorge Luis, La búsqueda de Ave-
rroes, 1970.
ellas mismas muy precarias en Amé-
GARDNER, Howard, La mente no escolariza-
rica Latina, (Gómez Buendía, 97, da. Cómo piensan los niños y cómo de-
p.377) lo que se deja sentir en el de- berían enseñar las escuelas. Madrid, Pai-
sarrollo de la ciencia así como en las dós, 1993.

NÓMADAS 19

S-ar putea să vă placă și