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ISSN: 1692-7273
editorial@urosario.edu.co
Universidad del Rosario
Colombia
bomb. 97,6% of the exposed group did not use knowledge about their legislation. It is advisable
elements of personal protection. The empty that academic, governmental and agrochemical
bottles were disposed in an inappropriate way. entities establish efforts to fulfill the function of
In the six months preceding the study 198 acci- education, control and supervision of the pesticides
dental contacts were reported in 72 subjects. use, disregarding if it is a licit or illicit crops.
Conclusion: the inadequate used of toxic Key words: Pesticides, Colombia, protective
pesticides is worrying, as well as the lack of devices, pesticide residues.
mica, ambiental y sanitaria; las autoridades estudiada cumple con las normas vigen-
que actualmente están encargadas de la re- tes, lo cual será un reflejo del acceso a este
gulación y reglamentación de los plaguicidas tipo de información y su adecuada inter-
son el Ministerio de Agricultura y Desarro- pretación por parte de los agricultores. Esta
llo Rural a través del Instituto Colombiano información permitirá generar u optimizar
Agropecuario (ICA), el Ministerio de la Pro- las medidas tendientes a garantizar el cum-
tección Social y el Ministerio de Ambiente, plimiento de las normas vigentes, educar a
Vivienda y Desarrollo Territorial (2, 7). Sin la comunidad y vigilar las condiciones de
embargo, considerando las condiciones de salud de la población expuesta, y, en último
ilegalidad de los cultivos y las características término, disminuir el efecto que puede te-
de orden público de la zona se hace difícil ner el uso inadecuado de plaguicidas en el
establecer el cumplimiento de estas normas. deterioro de la salud de la comunidad y del
El propósito del presente estudio fue ecosistema.
analizar algunos datos obtenidos en la en-
cuesta aplicada en el estudio “Supuestos Materiales y métodos
efectos del glifosato en la salud humana”, Se realizó un estudio retrospectivo,
realizado por la Clínica de Toxicología observacional descriptivo en tres munici-
Uribe Cualla, patrocinado por la Embaja- pios cuyas zonas rurales tienen una im-
da de los Estados Unidos de América. Este portante área dedicada al cultivo de cocaína
análisis busca identificar qué tipo de plagui- en el departamento de Putumayo. El estu-
cidas son empleados por los agricultores dio en mención fue presentado y aproba-
del departamento de Putumayo, específica- do por el Comité de Ética de la Universidad
mente en las veredas de los municipios de del Rosario y avalado por el Comité de
Orito, San Miguel y Valle del Guamuez, y Investigación de la Clínica Uribe Cualla.
el cumplimiento de las disposiciones lega- Para su realización se seleccionaron doce
les relacionadas con el almacenamiento, la veredas, de las cuales fueron visitadas nue-
aplicación, el manejo de desechos y resi- ve, por inconvenientes en el desplazamien-
duos de plaguicidas, y el uso de elementos to por razones de orden público. Para
de protección personal. convocar a la población, los promotores
Los resultados obtenidos permitirán comunitarios y los medios radiales anun-
informar a las autoridades de salud y edu- ciaron una brigada de salud con una dura-
cación, a los entes gubernamentales y no ción de 10 días que se llevó a cabo entre el
gubernamentales, a los líderes comunita- 10 y el 20 de junio de 2001. A esta jorna-
rios, al personal de atención en salud y a da asistieron en forma espontánea 1.244
la comunidad en general, si la población personas, sin restricción de ocupación, edad
Evaluación del uso de plaguicidas en la actividad agrícola del departamento de Putumay
o sexo; dos miembros del equipo investi- exportó al programa STATA con el fin de
gador estaban encargados de la realización realizar el análisis divariado de los resulta-
de la encuesta siguiendo un instructivo de dos. Para el presente análisis se tuvieron en
tal forma que las preguntas fueran hechas cuenta las siguientes variables: edad, géne-
de manera uniforme en todos los casos. De ro, nivel educativo, ocupación en los últimos
los 501 sujetos que aceptaron la aplicación seis meses, manipulación de plaguicidas en
de la encuesta, 11 abandonaron el sitio los últimos seis meses, procedimientos para
acondicionado para la realización de la en- formulación de plaguicidas, métodos de apli-
trevista, quedando así 490 sujetos para cación de plaguicidas, eventos de contacto
incluir en el análisis de los datos. La parti- accidental con plaguicidas (número de even-
cipación de los sujetos en el estudio fue tos y producto implicado), medidas toma-
voluntaria, anónima y estuvo precedida del das tras el contacto accidental con el producto,
diligenciamiento y la firma de un formato uso de elementos de protección personal, lu-
de consentimiento informado, elaborado gar de almacenamiento de los plaguicidas, y
teniendo en cuenta las normas estableci- disposición final de envases vacíos.
das para Colombia en 1993 por el Minis-
terio de la Protección Social y expedidas Resultados
en la resolución 008430/93 (“Normas La población total de análisis para el pre-
científicas, técnicas y administrativas para sente estudio fue de 490 individuos. De los
la investigación en salud”). Una vez apli- estudiados el 58,4% corresponde a pobla-
cada la encuesta los sujetos eran examina- ción femenina (286 mujeres), y el 41,6% a
dos por alguno de los dos miembros del población masculina (204 hombres)En rela-
equipo encargados de esta labor, quienes ción con la edad el 43,1% (211 sujetos) per-
consignaban los antecedentes médicos y las tenece al grupo de 1-10 años, el 12,9% (63
impresiones diagnósticas correspondien- sujetos) al grupo de >10-18 años, el 25,9%
tes a cada caso según los parámetros pre- corresponde al grupo de >18-35 años (127
viamente establecidos para ello. personas), el 12,9% pertenece al grupo de
La información obtenida se consolidó en >35-55 años y, por último, el 5,3% corres-
una base de datos utilizando el programa ponde al grupo de más de 55 años (26 suje-
Microsoft Excel XP. Esta base de datos se tos). (Figura 1).
Salcedo A., Melo OL.
En cuanto a escolaridad, 108 sujetos res de cinco años) (152 sujetos, 31,0%),
se excluyeron para este aspecto por te- seguidos por agricultores o jornaleros
ner edad inferior a cinco años, por tanto, (106 personas, 21,6%), seguidos por
se describe la distribución de los datos co- amas de casa (102 sujetos, 20,8%), estu-
rrespondientes a 382 personas. 15 parti- diantes (93 personas, 19,0%), y cocine-
cipantes habían cursado el nivel preescolar ras (23 personas, 4,7%); los demás oficios
(3,9%), la mayoría, 269 sujetos, refirió incluyeron maestro, vendedor ambulan-
primaria incompleta (70,4%), seguido por te, mecánico, tesorero, lavador de autos,
ningún nivel escolar en 38 sujetos (9,9%), inspector de policía, pastor y constructor
28 personas refirieron haber cursado la con una representación total de alrede-
primaria completa (7,3%), 25 sujetos re- dor del 3%.
firieron bachillerato incompleto (6,54%), Cuando se interrogó acerca del uso de
sólo 6 personas afirmaron haber cursado plaguicidas, 127 personas (25,9%) ma-
todo el bachillerato y un sujeto refirió nifestaron manipular o tener contacto
tener educación universitaria. Se encon- voluntario con estas sustancias para el
traron 51 sujetos analfabetas mayores de mantenimiento de cultivos lícitos e ilícitos.
5 años, de los cuales 19 aceptaron mani- Se encontró que el plaguicida empleado
pular plaguicidas. con mayor frecuencia fue Gramoxone®
En relación con la ocupación, la mayo- –paraquat– (95 individuos, 74,8%), se-
ría de las personas evaluadas eran me- guido por Tamaron® (60 sujetos, 47,2%),
nores (dentro de este grupo se incluyen los datos correspondientes se presentan
niños menores de quince años no estu- en la Tabla 1 ordenados de manera des-
diantes, en su mayoría se trata de meno- cendente según la frecuencia de uso.
Evaluación del uso de plaguicidas en la actividad agrícola del departamento de Putumay
Como parte del estudio se practicó una urogenitales, afecciones de piel no clasifica-
valoración clínica para establecer las enfer- das, cefalea y enfermedad diarreica aguda.
medades de mayor prevalencia en la región Esta información se detalla en la Tabla 4, en
y su posible relación con el uso de plaguicidas; donde se compara su frecuencia entre la po-
algunos de los diagnósticos más frecuentes blación que manifestó contacto o manipula-
fueron: parasitismo intestinal, escabiosis, in- ción de plaguicidas y la población que refirió
fección respiratoria aguda, enfermedades contacto accidental con los mismos.
Evaluación del uso de plaguicidas en la actividad agrícola del departamento de Putumay
de plaguicidas para ayudar a despejar nue- S. Uribe en 1999 (3), se encuentra que si-
vos terrenos y para controlar la maleza y guen siendo usados muchos de los princi-
otras plagas (11, 12). Según un informe pre- pios activos de insecticidas, exceptuando el
parado por S. Uribe en 1999 (3) para la carbaryl y el monocrotofos, y se introdujo
Dirección Nacional de Estupefacientes y la el empleo del principio activo dimetoato (no
Sección de Asuntos Narcóticos de la Emba- reportado en esa publicación). En cuanto a
jada de los Estados Unidos de América los herbicidas persiste el uso de paraquat,
(NAS), se verificó que el 98,7% de los cul- glifosato y 2,4 D en su forma de amina y de
tivadores utilizan insecticidas y fungicidas éster, y se abandona el uso de atrazina y
para controlar las plagas y enfermedades; diurón. Para el caso de los fungicidas se in-
el 92,5% utiliza fertilizantes químicos y el troduce el uso de Metalaxil-M y Propineb,
95,5% controla la competencia de otras y permanece el uso de Mancozeb y Carben-
plantas con herbicidas. Este informe esta- dazim, abandonándose el uso de Oxicloruro
blece la utilización de por lo menos 75 mar- de Cobre.
cas comerciales de agroquímicos. En el Las evidencias arrojadas por el presen-
período 1997-2000, los cultivadores ilícitos te estudio, sobre todo en lo relacionado
de coca han usado un total estimado de con la frecuencia de aplicación de plagui-
11’122.440 kilos de plaguicidas de alta toxi- cidas, permiten confirmar de manera con-
cidad y riesgo severo a la salud humana y tundente el uso inadecuado de múltiples
al medio ambiente en Colombia, principal- productos plaguicidas para el manteni-
mente en las regiones de Putumayo, miento de los cultivos en el departamen-
Caquetá, Guaviare y Nariño (3). Esta canti- to de Putumayo.
dad de plaguicidas se aplicó en 27’806.100 Es altamente preocupante que se utili-
litros de solución líquida en formulaciones cen productos de categoría toxicológica I,
comerciales de los diversos insecticidas, y que se encuentren frecuencias de aplica-
fungicidas y herbicidas (3). Sólo el Putumayo ción de hasta una vez por semana, lo cual
ha consumido en estos cuatro años una ci- empeora los devastadores efectos que tie-
fra de 2’864.528 kilogramos de plaguicidas, nen los plaguicidas sobre los ecosistemas
en una superficie máxima de 60.000 hectá- tropicales. En Colombia, el sólo cultivo de
reas cultivadas (3). El consumo de Putumayo coca ha destruido, durante los años de su
representa el 25,7% del consumo total de establecimiento, más de 575.000 hectáreas
plaguicidas acumulados para el período y de selva tropical en los biomas de la
el 41,2% para el año 2000 (13). Orinoquia y la Amazonia, especialmente;
Comparando los datos obtenidos en el algo así como el 50% de la tasa de defores-
presente estudio con los recolectados por tación anual estimada para Colombia (14).
Evaluación del uso de plaguicidas en la actividad agrícola del departamento de Putumay
Se estima que por cada hectárea de culti- demuestra el presente estudio, esta situa-
vo de coca los campesinos arrasan cuatro ción se empeora en el escenario de los cul-
hectáreas de selva (15). tivos ilícitos, donde participan de las labores
En particular, el cuarto insecticida de agrícolas mujeres y niños, no se emplean
mayor uso (endosulfán, como ingredien- medidas de protección en la aplicación de
te activo), corresponde a la clase I de toxi- agroquímicos, y, por ser una actividad ile-
cidad (extremadamente tóxico), es un gal, está desprovista del control de las au-
producto que desde mayo de 1997 tiene toridades sanitarias. Según datos de la
uso restringido, que estaba autorizado Organización Mundial de Salud –(OMS),
únicamente para el control de la broca del alrededor de 500.000 personas por año
café (Hypotenemus hampei), y el cual fue sufren envenenamiento por ingestión o in-
suspendido definitivamente en el país por halación de pesticidas; de ellas mueren en-
determinación del Consejo de Estado en tre 30.000 - 40.000 cada año (16).
marzo de 1998; este ejemplo demuestra Es alarmante observar que el método
el incumplimiento de la normatividad vi- de formulación de plaguicidas más fre-
gente, conducta que pone en riesgo la sa- cuente es la mezcla manual sin guantes
lud de las personas y del medio ambiente. de protección y, además, no hay conoci-
De igual forma, otros insecticidas que miento de las precauciones y normas que
fueron reportados en el estudio también se deben tener con respecto a este proce-
han sido restringidos, como es el caso del dimiento. El hecho de que 19 sujetos que
parathion y del metilparathion, produc- afirmaron manipular plaguicidas sean
tos que están autorizados sólo para ser analfabetas aumenta el riesgo de inade-
usados contra plagas de algodón, pastos cuado uso de los productos, dado que no
y arroz tecnificado, según la resolución tienen la posibilidad de leer las recomen-
2471 de 1991, expedida por el ICA. daciones registradas en las etiquetas, au-
Según los expertos internacionales, en mentando el riesgo de contaminaciones,
los países en vía de desarrollo los riesgos intoxicaciones, mezclas inadecuadas, etc.
resultantes de la manipulación de plagui- Es preocupante encontrar que la bom-
cidas se deben principalmente a la falta de ba estacionaria sea un método empleado
información, conocimientos y conciencia frecuentemente para la aspersión de los
de los riesgos, a la ausencia de una supervi- productos, dado que esta conducta aumen-
sión adecuada durante las aplicaciones, a la ta el riesgo ambiental y personal, ya que
inexistencia o inobservancia de una legis- las corrientes de viento y neblina pueden
lación apropiada, y a la venta libre de dispersar los plaguicidas mucho más allá
plaguicidas de gran toxicidad (5). Como lo del área que se quiere tratar. De otro lado,
Salcedo A., Melo OL.
hay que resaltar con preocupación que, dentro de las viviendas se aumenta la pro-
aunque la bomba de espalda puede ser el babilidad de contactos accidentales, princi-
método tradicional menos riesgoso, la palmente para la población infantil; de otro
población estudiada no utiliza los elemen- lado, el hecho de almacenar los productos a
tos de protección personal requeridos la intemperie puede generar contaminacio-
para realizar esta práctica de manera se- nes al medio ambiente dadas las condicio-
gura: por ejemplo, para la aplicación de nes meteorológicas de la región. Las
los productos se usa ropa deportiva, con recomendaciones en este aspecto incluyen
grandes áreas corporales descubiertas, sin la construcción de depósitos debidamente
botas, guantes o careta. demarcados, separados de viviendas, cen-
En cuanto al manejo de desechos y resi- tros de descanso, centros educacionales y
duos, se incumplen de manera directa las re- comerciales o de cualquier material o pro-
comendaciones hechas por la normatividad ducto para consumo humano.
vigente; aún se dejan los envases vacíos de El frecuente contacto accidental con
plaguicidas dentro del cultivo, se incineran plaguicidas, especialmente por vía dérmica,
los envases, se arrojan a las fuentes de agua es una situación que debe ser intervenida
o se reutilizan, situación esta que pone en por las autoridades sanitarias y de educa-
altísimo riesgo la salud de las personas y la ción, ya que los productos implicados son
conservación del medio ambiente. Los suje- en su mayoría de clasificación toxicológica
tos desconocen el procedimiento de triple I y pueden generar severos cuadros de in-
lavado, técnica recomendada para el trata- toxicación que comprometen la vida del
miento previo al almacenamiento y disposi- paciente. Esta situación se ve empeorada
ción final de los envases. El desecho de los por la ausencia de adecuadas medidas de
químicos que se utilizan en el proceso del descontaminación adoptadas por las per-
cultivo tiene efectos devastadores sobre los sonas después de este tipo de contactos,
ecosistemas tropicales. Para producir las que incluso podrían empeorar la condición
45.000 toneladas anuales de coca los culti- clínica del intoxicado.
vadores colombianos utilizan 17,6 tonela- Las impresiones diagnósticas registradas
das de fertilizantes y 100.000 galones de en el estudio corresponden en su gran ma-
insecticidas. “No poseen ningún criterio yoría a entidades de etiología infecciosa, que
ecológico, y mucho menos, asistencia técnica se comportan de una manera similar a las
para amortiguar los efectos de los químicos”, reportadas por el Ministerio de la Protec-
dice Héctor Moreno, director del Plante (14). ción Social a nivel nacional en áreas geográ-
El almacenamiento de los productos ficas deprimidas, con escasa accesibilidad a
merece especial atención ya que al tenerlos los servicios de salud, con necesidades bási-
Evaluación del uso de plaguicidas en la actividad agrícola del departamento de Putumay
cas insatisfechas y altos índices de violencia ción personal y sin un adecuado plan de dis-
y migración. Al comparar las frecuencias posición final de envases vacíos.
entre la población general, la población que El marco normativo relacionado con el
afirmó manipular plaguicidas y la población uso, el manejo y la disposición de plaguicidas
que refirió contacto accidental con estos pro- y residuos sólidos derivados de éstos es
ductos, se observa que la prevalencia en los complejo, y está disperso en diferentes nor-
tres grupos se comporta de una manera si- mas; aunque el Decreto 1843 de 1991
milar e incluso llega a ser menor en los dos enmarca las leyes al respecto, existen otras
últimos; consecuentemente, no se podría afir- reglamentaciones más específicas que tam-
mar que el contacto o la manipulación de bién deben ser tenidas en cuenta.
plaguicidas sea un factor de riesgo para la No hay total claridad sobre la definición
presentación de estas enfermedades. Incluso de competencias de las diferentes autori-
enfermedades que pueden tener origen ocu- dades gubernamentales, lo que genera du-
pacional, como el caso del asma, se presen- plicidad y ambigüedad en el cumplimiento
taron en la población general y no en la de sus funciones. Esto se empeora por la
población expuesta a plaguicidas. falta de una verdadera coordinación
institucional entre las entidades nacionales
Conclusiones y regionales.
y recomendaciones Los casos citados en el presente estudio
La agricultura es una de las actividades sólo tienen un carácter demostrativo de la
económicas de mayor importancia en el problemática asociada al uso, manejo y dis-
departamento de Putumayo, y se asocia posición de los plaguicidas, por lo tanto es
con el uso de plaguicidas; lamentablemen- recomendable que las entidades académicas,
te, se pudo evidenciar que las condiciones los institutos de investigación, los ministe-
de formulación, aplicación, almacenamiento rios de la Protección Social, de Agricultura y
y disposición de residuos sólidos prove- Desarrollo Rural, y de Ambiente, Vivienda
nientes de estos productos son inadecuadas: y Desarrollo Territorial, y sus entidades ads-
la población que manipula estas sustancias critas o vinculadas, emprendan esfuerzos
corresponde a todos los grupos etáreos, in- para: realizar un inventario de los sitios de
cluidos los niños; se emplean productos de uso, almacenamiento, expendio, enterra-
clasificación toxicológica I, con una fre- miento y localización de pistas activas y en
cuencia de aplicación de hasta una vez por desuso para aplicación de plaguicidas; eva-
semana, con empleo de métodos de formu- luar los efectos que sobre la salud de las per-
lación que incluyen la bomba estacionaria, sonas y el medio ambiente ocasionan el uso
con ausencia total de medidas de protec- y la disposición de estas sustancias químicas,
Salcedo A., Melo OL.
Referencias
1. Instituto Geográfico Agustín Codazzi. Colombia. Diccionario geográfico de Colombia. 1996: Departa-
mento de Putumayo; 1996.
2. Bonilla JP, Peinado JE, Urdaneta MA, Carrasal E. Informe nacional sobre el uso y manejo de plaguicidas
en Colombia: tendiente a identificar y proponer alternativas para reducir el escurrimiento de plaguicidas
al mar Caribe. Bogotá: Ministerio del Medio Ambiente. Colombia; 2.000.
Evaluación del uso de plaguicidas en la actividad agrícola del departamento de Putumay