Planteamiento del Problema

El suicidio ha sido un problema social desde tiempos remotos. Hoy en día se caracteriza

por el incremento de casos y por la gama e intensidad emocional proporcionada por el

entorno. Es un fenómeno mundial que va afectando la vida cotidiana y estado mental de la

persona. Esta conducta ha tenido un impacto estadístico en las últimas décadas sobre todo

en los adolescentes siendo una de las etapas donde se pueden evidenciar cambios

fisiológicos y psicológicos (Núñez, 2010)

Núñez, 2010 expone en su artículo “detrás del suicidio” los factores que están asociados

con la conducta negativa que pueden presentar los individuos como la influencia de la

sociedad, la familia y la cultura. Estos factores llevan de la mano la información de un

adolecente para desenvolverse en la vida y su forma de pensar.

La organización mundial de salud (OMS, 2019) informo sobre las enfermedades

mentales en la adolescencia que lideran el rango más importante en la ideación suicida son:

1- la depresión, 2- ansiedad, 3- el bullying, 4- trastornos por consumo de drogas, 5- el

abuso de sustancias psicoactivas, 6- la violencia, 7- diversos entornos culturales y los

cambios de personalidad; estos comprometen la integridad física y psicológica de la

persona.

Mayo Foundation for Medical Education and Research (Mayo Clinic, 2018) expone en

su artículo la presión que ejerce el entrono socio-cultural en la mente de un apersona para

que esta cometa el acto de suicidio. Los factores determinantes para perder el control de las

emociones y de los pensamientos son: 1- las alteraciones emocionales, 2- desesperanza, 3-

agitación o extrema violencia, 4- conducta poco comunicativa y 5- el aislamiento social. El

acto con mayor frecuencia se comete por el resultado de emociones confrontadas en sí

misma.

Canal Internacional y Nacional (CNN, 2019) Exhorta el aumento de las tasas de suicidio

al contexto sociocultural en que se desarrollan los estados mentales del individuo para que

con el transcurso del tiempo discrepe en las estadísticas por su notoriedad y particularidad

en la ideación de una buena vida. Cada 60 segundos la vida de una persona se une a la listas

de suicidios objetivados o asistidos en su entorno. Las campañas y objetos de prueba para la

prevención de esta ideación suicida superan los estatutos previstos por los profesionales de

la salud y del área social.

El suicidio es la manera más fácil de decirle a la vida ¨ya no puedo seguir más¨ sin

embargo la notoriedad del avistamiento en la mentalidad de sus seres queridos será de gran

impacto emocional. Los sucesos o comportamientos que permitan prevenir o erradicar estas

conductas deben ser informados a un profesional de manera inmediata para poder empezar

un seguimiento de manera particular en el individuo, tal y como lo expone Callozo, 2019 en

su artículo donde determina una edad en el cual los adolescentes realizan el acto de suicidio

como una manera de inhibir su dolor o preocupación; la transición de niño adolescente

puede también trascender con problemas e ideaciones de cual quiere índole, para que tomen

esta decisión la edad determinada están en el rango de 15-17 años y algo notorio que sería

de los 10-14 años siendo las niñas las más afectadas por su entorno social.

Arango, 2019 determino que en Sucre se han presentado pocos casos de suicidio en

niños pero lo que determino un hito entre lo que sería una manera preventiva de llevar una

buena relación con un adolescente se transformó en el tabú común de estos nuevos

milleniales. Los resultados obtenidos determino que la población más factible y vulnerable

son los niños de 4-15 años (son fáciles de manipular y de desmotivar)

En Sincelejo, San Benito, Tolú, San Marcos, se han presentado casos donde los

adolescentes se retan a cumplir absurdas peticiones que van desde lanzarse de un techo

hasta cortarse la vida. En el 2017 el mundo se conmociono por el juego de la ¨ ballena azul¨

el cual consistía en cumplir retos peligrosos que podían matar al individuo o simplemente la

idea de dejarlo lo llevaba a la ideación suicida (Arango, 2019)

La determinación que posee una persona para elegir entre los buenos y malos
pensamientos para realizar el acto del suicidio procede de las bases familiares. El control de
estímulos y de emociones que posee esta persona se ve opaco por la presión de la ideación
suicida que lo atormenta hasta que este ve como única opción acabar con su vida. La
sociedad inconscientemente induce y absorbe los buenos pensamientos para luego
convertirlos en un estereotipo más y en una carga optativa y desagradable a seguir por los
demás. El tabú que poseen las personas al momento de buscar ayuda profesional afecta su
capacidad de decidir qué hacer con su vida y el de su entorno.