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PRIMER MILITARISMO EN EL PERÚ

A inicios de la República, el Perú vivió un periodo de inestabilidad política causada por los caudillos militares.

José De La Mar Agustín Gamarra Luis José de Orbegoso Felipe Santiago

Salaverry

En sus primeros años de vida independiente, el Perú no contaba con una “élite civil” o clase preparada
capacitada para dirigir el país y los intereses del pueblo. Los criollos que componían la clase dirigente
durante el Virreinato se encontraban desorganizados y empobrecidos, debido a los daños que produjo la
guerra de Independencia, por lo que el poder terminó cayendo en manos de los jefes militares vencedores
de Ayacucho, a quienes se les llamó caudillos.

Los caudillos eran militares, que habían combatido y ganado prestigio ante la sociedad durante la guerra
de Independencia; contaban con un ejército de soldados leales a su causa y buscaban tomar el poder a
través de golpes de Estado; lo que les llevó a pensar que tenían el derecho a gobernar el país. El caudillismo
se convirtió en una empresa cuyo objetivo era la conquista del poder y el Estado era el botín a repartirse.
Entre los principales caudillos militares destacan:

Agustín Gamarra, fue el caudillo más influyente, gobernó el Perú en dos periodos: 1829-1833 y 1840-1841.
Se caracterizó por ser autoritario, tener la oposición del Congreso y sofocar rebeliones. Murió mientras
trataba de invadir Bolivia.

Felipe Santiago Salaverry, dio golpe de Estado a Orbegoso y se proclamó Jefe Supremo de la República,
gobernó entre 1835 y 1836. Se opuso a la Confederación Perú-Boliviana, sin embargo fue derrotado y
fusilado en Arequipa, quedando el Perú en manos de Santa Cruz y los ideales de la Confederación.

Andrés de Santa Cruz, fue líder de la Confederación Perú-Boliviana (1836-1839). La idea de unificar fue
porque ambos países compartían un mismo pasado, un mismo territorio durante la época Tiahuanaco y
del Virreinato y si ambos países unían sus recursos agrícolas, mineros y ganaderos serían poderosos y
ricos. Fue derrocado por una expedición restauradora dirigida por Chile y por sus opositores políticos.
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El gobierno de estos caudillos no fue resultado de una elección democrática. Para lograr sus objetivos, el
caudillo debía mantener buenas relaciones con las familias aristocráticas y con los hacendados locales,
que le prestaban tropas y dinero. Pero, al mismo tiempo, debía ganarse el favor de las clases populares,
para llegar a la presidencia a través de un golpe de Estado o un levantamiento. Cuando llegaban al poder
concentraban su atención en satisfacer sus propios intereses y las exigencias de sus amigos políticos. Eran
gobiernos de minorías, no representaron al país en su conjunto, retrasando su desarrollo. El gobierno
estaba centralizado en Lima, olvidando a las poblaciones de la sierra y selva, lo que impidió la integración
de la población peruana, obstaculizando la formación de un Estado-nación.

Además de la estabilidad política, el Perú debió afrontar una crisis económica; resultado de las guerras
por la independencia y de las luchas internas entre los militares que deseaban llegar al poder. La
destrucción de campos de cultivo, del ganado, de las minas, y en general de todo lo que se producía en el
Perú, afectó nuestra economía. Además, muchísimos campesinos habían sido enrolados en el ejército y
no había quien trabajara la tierra.

En medio de la guerra el Perú tuvo que conseguir préstamos de los propios peruanos y de Inglaterra, país
que aprovechó la retirada de España para vendernos sus productos. Así en poco tiempo, la dominación
colonial española fue reemplazada por la inglesa.

Fuente:
Personal Social 5. editorial Santillana, 2013.
Telefónica Fundación. Perú Republicano.
Recuperado de: http://educared.fundaciontelefonica.com.pe/sites/peru-republicano/fenomeno1.htm