La importancia del rol docente con perspectiva de

género
“Educar en valores es una misión enormemente difícil. Sin embargo, se trata de una misión
irrenunciable."
Mª del Rosario CERRILLO MARTÍN

INTRODUCCION:
Con el transcurso de los años la escuela en argentina fue mutando y tomando diferentes roles que
quiza, con anterioridad no cumplia. La economia del pais va influyendo a todos los sectores y
golpea fuertemente a la población que asiste a las instituciones escolares. Los docentes junto con
la escuela tuvieron que adaptarse a estos cambios para sostener la continuidad y para sostener a
los alumnos y alumnas que asisten en ella. El docente contenedor pasó a ser el rol principal de
los maestros ante la miseria que están atravesando los niños y niñas, y quizá, es la escuela el
único lugar donde se trata de sostener las infancias de esos jóvenes. La escuela, ya no es el lugar
donde solo aprenden contenidos sino también valores y donde experimentan la convivencia con
el otro, que es diferente a mi y que tengo que respetarlo. Por lo que entendemos que es
primordial que todos los contenidos que se enseñan en la escuela tengan en cuenta la perspectiva
de genero para poder así pensar en una sociedad más justa, más igualitaria y con menos
violencia.

PROCESO:

En la sociedad actual argentina estamos viviendo niveles de violencia pocas veces visto con
anterioridad. Se han perdido muchos valores a lo largo de los años y la globalización tiene
mucho que ver con eso, la mayor parte de la sociedad vive conectada en redes sociales pero no
sabe quién es el vecino del departamento del frente o quiénes viven en su mismo edificio, no sólo
no sabe sino que tampoco le interesa. La sociedad argentina se volvió de alguna manera una
sociedad que confronta y no escucha, que no atiende a los llamados de nadie que mínimamente
conozca.
Este desinterés por el otro, ese otro desconocido y diferente hizo que en muchas ocasiones reine
el individualismo y la escuela es el lugar donde todas las problemáticas de la sociedad se
encuentran y conviven.
La escuela argentina está sufriendo hace muchos años la falta de inversión pero desde que
asumió Mauricio Macri como presidente está en un abandono absoluto. La escuela, el lugar que
asiste y sostiene a las y los jóvenes de nuestro a país dejó de ser, en muchas ocasiones, el lugar
donde se transmiten conocimientos para contener a nuestros niños y niñas.
Que los docentes tengan que dejar de lado su rol de educador de contenidos para enseñar valores
y que esos niños o adolescentes entiendan que esos valores son de suma importancia marca otro
desafío dentro de nuestra tarea de educadores.
La escuela está llena de violencia, de niños con resentimiento porque la noche anterior no
cenaron porque hace semanas que duermen congelados porque no tienen abrigo y podría seguir
enumerando las causas por las cuales mis alumnos y alumnas siendo tan pequeños ya están
cansados. Se vuelven adultos, resuelven rápido problemáticas que no son acordes a su edad y así
van creciendo como pueden y no como deben. Y ahí estamos nosotros, los docentes, tratando de
recuperar la infancia intentando que vuelvan a jugar que vuelvan a divertirse. Y además,
intentamos inculcarle valores que ellos no reconocen porque no tienen una figura que los
inculque y absorben muchas veces situaciones de su entorno difíciles, ellos nos escuchan y nos
prestan atención aún cuando creemos que no. Por eso es muy importante que entendamos que ​la
práctica docente como una ​acción ​moral​ comprometida socialmente, bajo el marco de un
contexto y de una tradición y sujeta a críticas​, es decir, no puede entenderse como algo ya
construido, se va creando y recreando en base a la acción. Por eso no se puede hablar de un fin
externo a ella o material. Cada meta es la deseada solo en base a un contexto histórico y social,
así, lo que era esperable en una época, ya no lo es.
De este modo, "​el educador ya no es sólo el que educa, sino aquel, que en tanto educa es
educado a través del diálogo, quien al ser educado, también educa".[15]​ Así la educación se
convierte en una comunión donde nadie es superior a nadie. Donde los educandos, se vuelven
investigadores críticos de su ​proceso​. Se logra, a través del diálogo constante, una comprensión
del mundo en la relación entre educador y educando que lleva a una transformación profunda de
la concepción de la educación. Se establece, de esta forma, un modo auténtico de pensamiento
crítico y acción que lleva a un replanteamiento por parte de los alumnos, de la idea de quienes
son y lo que serán (​conciencia​ de ​clase​).

Durante todo este proceso, el docente – educador deberá tener en cuenta la ​historia​, las
costumbres y el marco político de su tarea, así como también su propia intencionalidad ​política​,
ya que la educación nunca es neutra. Freire agrega que se debe rescatar la sensibilidad sin perder
la rigurosidad científica característica del proceso de enseñanza - ​aprendizaje​. Debe promover,
además del diálogo, el lugar a la pregunta como pregunta en sí, sin respuestas automatizadas o ya
elaboradas. La acción de preguntar, estimula y refuerza la ​creatividad​ y la confianza de los
alumnos, así como también los prepara para desarrollarse frente al mundo y las situaciones
cotidianas para lograr esto, previamente se hace indispensable crear un ​ambiente​ donde reine la
confianza.

En el libre Perfiles eticos y politicos de la educacion su autor Carlos Cullen

"​En la sociedad los individuos deben ser capaces de afrontar nuevos desafíos constantemente.
La misión del "profesor-mediador" no es sólo instruir en un cuerpo de conocimientos más o
menos científico, sino coadyuvar para que el educando descubra por sí mismo los valores y las
herramientas que le permitan poner en práctica esos conocimientos, así como descubrir por sí
mismo otros nuevos”