ARROYO SALINAS CRISTIAN KEVIN | ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL | TRABAJO 5 | 4MARZO2019
ACIERTOS Y DESACIERTOS DE LA SOCIEDAD DE NACIONES
El fin de la Primera Guerra Mundial supuso la reorganización integral de las
relaciones internacionales y la garantía de la paz en las generaciones futuras del siglo XX. Creada en 1919 por el Tratado de Versalles, la Sociedad de Naciones fue uno de los primeros organismos internacionales más importantes que buscaban la integración mundial de las naciones a una institución que fomentara la cooperación, la solución pacífica de conflictos y la seguridad colectiva internacional. Sin embargo, terminó por ser disuelta tras la Segunda Guerra Mundial en 1946, tras una serie de eventos desafortunados que la sugirieron como incapaz de resolver los problemas que en el siglo XX se manifestaban. Su origen sentó las bases, sin embargo, para la creación de un organismo internacional más formal que perdura hasta nuestros días, la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En el presente, haremos un repaso por los principales aciertos de la Sociedad de
Naciones, su participación en el mantenimiento de la paz y sus intervenciones eficaces en la resolución de conflictos de guerra; posteriormente, trataremos los desaciertos que tuvo dicho organismo, los cuales habremos de enlazar con las razones de su disolución. Reflexionaremos sobre la marcha la relación prima que tuvo para la formación de la ONU y la formalización de la misma.
Dentro de los estatutos primordiales de la SDN se incluía un desarme como política
mundial de carácter obligatorio para todos los países, así como la imposición de sanciones militares a quien no acatara tal acción. Las sanciones militares, inicialmente, podemos verlas como uno de los factores que quizá mermaron la capacidad coactiva de la SDN; actualmente, no existe una organización como tal que imponga sanciones eficaces en contra de cualquier país sin tomar en cuenta los intereses de aquellos que sean miembros permanentes– es decir, Consejo de Seguridad de la ONU–, sin embargo, es probable que aquellos que no estuviesen de acuerdo en el desarme no dotaran de legitimidad a la SDN y paulatinamente su poder político fuera decayendo.
Recordemos que participó en la solución de conflictos en cuestiones de disputas de
soberanía en territorios de ultramar, islas o fronteras entre ciertos países que ARROYO SALINAS CRISTIAN KEVIN | ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL | TRABAJO 5 | 4MARZO2019
tensionaban las relaciones estatales. Su participación en ciertos conflictos de índole
militar fue heredada por la ONU, quien funge como mediador en la actualidad sobre la mayoría de las tensiones bélicas que se susciten, no podemos menospreciar la labor intervencionista que realizó la Sociedad de Naciones, por ejemplo, en resoluciones como en el conflicto de Mosul, cuya soberanía era reclamada por Turquía; la SDN resolvió a favor del Reino Unido en la posesión de dichos territorios, lo cual, hace ver que probablemente, la SDN haya estado persuadida principalmente en defender los intereses de las potencias vencedoras de la Primera Guerra Mundial y había sido utilizada para salvaguardar intereses hegemónicos.
Como hemos mencionado, su principal motivo, discursivo, era posibilitar la
integración de todos los Estados del mundo para una seguridad colectiva, su arbitraje en los asuntos de conflicto sonaba una idea alternativa a la guerra y el principio de una sociedad multilateral, sin embargo, hay que recordar que su talón de Aquiles fue que Estados Unidos no formó parte de dicha SDN, la exclusión de la gran potencia emergente entonces supuso el posterior debilitamiento pues no había sido dotada de una fuerza política apoyada por EEUU. Además, la exclusión de la Unión Soviética por tener un régimen socialista, supuso que la SDN estaba al servicio occidental que devino en fuertes tensiones que culminaron hasta la Guerra Fría. Algunas invasiones y conflictos territoriales, como Manchuria o la Guerra del Chaco, fueron golpes fuertes para la Sociedad pues al tratar de imponer sanciones a los beligerantes, dichos países se retiraban de la misma, lo cual, imposibilitaba su acción política en conflictos de serio alcance. Los crecientes problemas en la Europa occidental que abrieron paso a la Segunda Guerra Mundial hicieron ver que la Sociedad de Naciones no tenía la fuerza ni la razón para seguir existiendo.
Fuentes consultadas:
Rotary International, ed. (septiembre de 1934). «Evaluating the League of Nations»
en The Rotarian. Vol. 45, nº 3. [Consultado online]