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HIGIENE DE LOS HORNOS DE PANADERIA

La limpieza en los hornos más aun de panadería son unos problemas más comunes.
Todos los gases provocan una serie de capas de grasa y tela araña. El primer
elemento, la grasa es muy peligroso ya que es altamente inflamable. Un negocio que
no limpia el conducto de sus extractores corre un riesgo de incendio alto. Además se
juega que en caso de incendio que el seguro no le cubra.

¿Qué les aconsejamos a las panaderías?

Cada panadería, desde las muy pequeñas (pequeñas pastelerías o panaderías con un
equipamiento reducido) hasta las mayores plantas industriales (que producen pan,
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bollería y pasteles a diario) deben estar equipadas con varios sistemas eficaces para la
limpieza y desinfección del ambiente. Así es como pueden garantizar un alto nivel de
higiene y calidad. De manera general, les aconsejamos cumplir con la ley:

1- Aconsejamos la limpieza de los extractores de horno anual.

2- Cuando la superficie a limpiar es extensa, recomendamos un sistema de


aspiración centralizado. Permite aumentar la eficiencia del programa de
mantenimiento y reducir el tiempo requerido para su limpieza.

3- Además equipar la panadería o la planta productiva para garantizar adecuada


limpieza y desinfección, según la ley vigente (registros).

4- Limpieza general del laboratorio, en especial el polvo relacionado con la harina


de grano u otros cereales.

5- Limpieza regular del interior del horno: la limpieza debe eliminar restos de harina
y migajas quemadas.

HORNO CASERO
En el caso tener un horno pequeño en casa, existen algunos trucos que pueden
ayudar a mejorar la limpieza del horno

En el caso de que no esté demasiado sucio, prueba una alternativa no tóxica. Empléala
regularmente y no tendrás que comprar productos químicos. Bien utilicemos un quita
grasa comercial o no, el proceso es el mismo. Solo tenemos que sustituir un producto
por otro. Para comenzar utiliza el lado suave de una esponja que no raye con agua
jabonosa y recoge las migas del interior del horno. Aclara la esponja y vuelve a pasarla
de nuevo.
Prepara una pasta en un cuenco mezclando bicarbonato sódico con un poco de
agua. Con un paño de cocina extiende la pasta por el interior del horno y déjala toda
la noche. Si usamos un quita grasas comercial bastará con dejarlo actuar unos
minutos.
Después, aclara con agua tibia la esponja que no raya y pasa el lado abrasivo por el
interior del horno a fin de remover y eliminar los restos de alimentos quemados. Por
último, moja y escurre una esponja limpia en el barreño lleno de agua tibia y úsala para
recoger los restos y la suciedad del interior del horno. Aclara y vuelve a pasar hasta que
el horno quede limpio.

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