despido no se ven limitados si éste ocurrió con anterioridad a declaración de liquidación concursal de empleador
Sumario:
En esta materia, en causa de unificación de jurisprudencia Rol
31772-2017 la Excma. Corte Suprema ha resuelto que en materia de interpretación de la normativa laboral, uno de los principios fundamentales del derecho del trabajo es el de protección, y una de sus manifestaciones concretas es el principio pro operario, que en el ámbito judicial está referido a la facultad de los jueces de interpretar la norma según el criterio ya aludido, esto es, al existir varias interpretaciones posibles se debe seguir la más favorable al trabajador, conocido también como el in dubio pro operario.
Pues bien, una labor de exégesis no inspirada en dicho
principio, esto es, una por la que dilucidando el correcto sentido de lo que previene la norma contenida en el párrafo final del numeral 1 del artículo 163 bis del Código del Trabajo, concluya que contempla una suerte de inaplicabilidad de lo dispuesto en el inciso quinto del artículo 162 del mismo código, tratándose de todas las causales de término de contrato de trabajo que se invocan por el empleador con anterioridad a la fecha en que es sometido a un procedimiento concursal de liquidación, lo que se traduciría en una de tipo extensiva, provocaría un perjuicio en el patrimonio de los trabajadores, pues se los privaría del derecho a obtener el pago de las prestaciones de orden laboral devengadas desde la data en que se los desvinculó por decisión unilateral de su empleador -no por haberse dispuesto su liquidación en un procedimiento concursal- hasta la convalidación del despido. Lo anterior, porque, como se dijo, la norma del referido artículo 163 bis es excepcional y establece una ficción legal, esto es, la fecha de término de los servicios es la de la resolución de liquidación; sin embargo, esa ficción no puede extenderse a situaciones que la disposición no contempla, como sería si se considera esa data para limitar los efectos de la sanción de la nulidad del despido en el caso que el cese de los servicios haya ocurrido por decisión del empleador con anterioridad a la declaración de liquidación.
En consecuencia, en este caso, el cese de los servicios
ocurrió por decisión del empleador con anterioridad a la declaración de liquidación, por lo que no se le aplica a la norma excepcional del artículo 163 bis del Código del Trabajo, que establece que la fecha de término de los servicios es la de la resolución de liquidación (Corte de Apelaciones de Antofagasta, 21 de octubre de 2019, Rol 218-2019).
Antofagasta, a veintiuno de octubre de dos mil diecinueve.
VISTOS: Ante la Primera Sala de esta Corte de Apelaciones, integrada por las Ministros Titulares Sra. Virginia Soublette Miranda, Sra. Jasna Pavlich Núñez y la Abogado Integrante Sra. Macarena Silva Boggiano, se llevó a efecto la audiencia para conocer el recurso de apelación deducido por el abogado Maximiliano Mendoza Rodríguez, en representación de la parte demandante, en contra de la resolución de fecha 30 de mayo de 2019, dictada en causa RIT C-43-2019, RUC 1840099715-9 del Juzgado de Letras del Trabajo de Calama, que acogió la objeción de liquidación deducida por la demandada solidaria, Codelco Chile, División Chuquicamata, a fin de que se enmiende a derecho y se rechace en todas sus partes la referida objeción. Comparecieron en estrados el abogado recurrente ya individualizado, solicitando la revocación de la resolución en alzada; y el abogado William Ávalos Céspedes, por la demandada solidaria, pidiendo la confirmación de la misma, en virtud de los argumentos que quedaron registrados en el sistema de audio. Se puso término a la audiencia, quedando la causa en estado de acuerdo. CONSIDERANDO: PRIMERO: Que el Abogado don Maximiliano Mendoza Rodríguez, por la parte demandante, dedujo recurso de apelación en contra de la resolución de fecha 30 de mayo de 2019, que acogió la objeción a la liquidación de fecha 8 de abril de 2019, deducida por la demandada solidaria, solicitando que se enmiende conforme a derecho y se rechace en todas sus partes la referida objeción. Señala que su parte inició demanda de despido injustificado, nulidad del despido y cobro de prestaciones adeudadas, iniciándose causa Rit O-114-2018 ante el Juzgado de Calama; la demandada principal no compareció al juicio, y la demandada solidaria no contestó la demanda, tal como consta en autos. Dice que con fecha 25 de septiembre del año 2018 se dictó sentencia en la causa RIT O-114-2018 que acogió la demanda de despido injustificado deducida por su parte en representación de Mario Andrés Castro Ardiles en contra de Anmar S.A, representada legalmente por don Miguel Ángel Cruchet Campusano, todos ya individualizados en autos, declarando que la relación laboral terminó el 8 de febrero de 2018, encontrándose obligada la demandada a pagar la suma de $2.414.245 por indemnización sustitutiva del aviso previo; $7.242.735 por indemnización por años de servicios; $2.172.820 por recargo legal; de igual forma acogió la demanda de prestaciones laborales deducida, condenando a la demandada Anmar S.A, a pagar a) Remuneraciones del mes de enero de 2018 por $4.241.875; b) Remuneración del mes de febrero de 2018 por $1.131.166; c) Feriado proporcional por la suma de $2.474.728; d) Feriado legal por el período 2015-2016 por la suma de $4.241.875; e) Feriado legal por el período 2016-2017 por la suma de $4.241.875; f) Cotizaciones de seguridad social correspondiente a AFP Hábitat, Administradora de Fondos de Cesantía e Isapre Más Vida, correspondientes a las cotizaciones de diciembre de 2017, enero 2018 y los 8 días del mes de febrero de 2018, considerando como base de cálculo una remuneración mensual de $4.241.875; acogió la demanda de nulidad del despido, condenando al demandado Anmar S.A, ya individualizado en autos, a pagar al demandante las remuneraciones y demás prestaciones que deriven de su contrato de trabajo y que se devenguen desde la fecha del despido, esto es, desde el 8 de febrero de 2018 y la fecha de convalidación del mismo; declaró la responsabilidad solidaria de Codelco Chile División Chuquicamata, ya individualizada en autos, en virtud de las normas de subcontratación laboral y se le condenó a pagar de forma solidaria las sumas de dinero indicadas en los numerales I, II y III de dicha sentencia; condenó a la demandada principal Anmar S.A al pago de las costas de la causa, atendido a que fue completamente vencida, las que se regularon en la suma de $1.000.000, sin condenar en costas al demandado solidario Codelco Chile División Chuquicamata, atendido a que tuvo motivos plausibles para litigar; recurso de nulidad deducido por la demandada solidaria y que fue rechazado. Añade, que la causa fue derivada al Juzgado de Cobranza Laboral de Calama para su cumplimiento, iniciándose los presentes autos RIT N° C-43-2019; practicándose liquidación del crédito, la cual fue objetada por la demandada solidaria, objeción que se acogió por los fundamentos que expresó la resolución de fecha 30 de mayo de los corrientes, y que causa un gran perjuicio a su representado. Indica que en la objeción de la liquidación de la demandada solidaria, la contraria señaló que la sanción de nulidad del despido tiene como máximo el mismo período de prescripción de la acción de cobro; asimismo que dicha sanción de nulidad no tiene cabida en este procedimiento de cobranza debido a que la demandada principal tiene actualmente la calidad de deudora en un procedimiento concursal, tramitado ante el Juzgado Civil de Santiago, debiendo aplicarse el artículo 163 bis del Código del Trabajo; asimismo se ha señalado que la base de cálculo sería errónea por exceder los seis meses. Argumenta que el régimen de subcontratación en sus diversos aspectos ha buscado que el trabajador vea cubierta sus prestaciones laborales y demás derechos que surgen de la relación laboral, extremando la responsabilidad, es decir, dándole el carácter de solidaria debido a su falta de diligencia en el ejercicio de controles en el pago de las obligaciones laborales y previsionales que se vean en situación de no ser integrados. Añade que el alcance y contenido de las normas, atendido el fin que persiguen no cabe duda que no ha existido errada interpretación de las mismas, al darles aplicación en los términos que la sentencia lo hizo, que es en definitiva, asegurar el pago de las prestaciones adeudadas por el empleador, todo conforme los principios que ilustran el derecho laboral, en cuanto a la protección de la parte más débil de la relación laboral, esto es, el trabajador. Hace presente jurisprudencia de la Excma. Corte Suprema que en recurso de unificación de jurisprudencia Rol N° 27447-2014, de veintidós de septiembre de dos mil quince, indicó que la responsabilidad por el pago de las remuneraciones desde la fecha del despido y hasta su convalidación, se encuentra comprendida dentro del concepto de “obligaciones laborales y previsionales” que señala el artículo 183 B, en comento, por lo que hace responsable a la empresa mandante en el régimen de subcontratación, de tales prestaciones y hasta la convalidación del despido (Corte de Apelaciones de San Miguel, 15 de abril de 2015, Rol 31-2016 y Corte de Apelaciones de Valparaíso, 11 de mayo de 2016, Rol 99-2016). La Cuarta Sala de la Excma. Corte Suprema sustentó la misma posición al señalar que en lo concerniente a la aplicación de la sanción dispuesta en el artículo 162 a la empresa mandante, es una cuestión jurídica respecto de la cual, en la actualidad, no hay diferentes interpretaciones que justifiquen unificar la jurisprudencia, en cuanto a que la correcta interpretación de la materia de derecho es aquella que determina que la sanción establecida a propósito de la nulidad del despido contenida en el artículo 162 del estatuto laboral, se extiende a la responsabilidad solidaria o subsidiaria del mandante en el contexto de un régimen de subcontratación, conclusión que está acorde con los objetivos de la ley que regula el trabajo en dicho régimen, en la medida que establece un sistema de protección a los trabajadores que se desempeñan en dichas condiciones, ya que, como se indicó, instituyó respecto de la empresa principal una responsabilidad solidaria y subsidiaria en lo concerniente a las obligaciones laborales y previsionales que debe asumir el contratista respecto de su dependiente, para, en definitiva, estimular y velar por el cumplimiento efectivo y oportuno de dichas obligaciones (Corte Suprema, Tercera Sala, 12 de abril de 2016, Rol 12150-2016). En el mismo sentido, se argumentó que de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 162 del Código del Trabajo, el despido de un trabajador no surte efecto si el empleador no está al día en el pago de las cotizaciones previsionales, sancionándolo con el pago de las remuneraciones y demás prestaciones a contar de la data del despido y hasta su convalidación, lo que queda comprendido en los términos de “obligaciones laborales y previsionales” que utiliza el artículo 183 B del mismo cuerpo legal, y de lo que debe responder la empresa principal, según se señaló en el motivo precedente; razón por la que corresponde imputarle las consecuencias de la ineficacia del despido por la existencia de una deuda previsional y, en su caso, al contratista, siempre que los presupuestos fácticos de dicha institución se configuren durante la vigencia del contrato o subcontrato (Corte Suprema, Cuarta Sala, 30 de julio de 2014, Rol 1618-2014). Añade que la posición del máximo tribunal se mantiene al señalarse que la sanción prevista en el artículo 162 del Código del Trabajo es aplicable a la empresa principal, sin que sea óbice el límite previsto a favor de las empresas contratistas en el artículo 183 B del mismo Código. No obsta a la conclusión anterior, la circunstancia que la responsabilidad solidaria de la empresa principal esté limitada al tiempo o período durante el cual los trabajadores prestaron servicios en régimen de subcontratación, porque como el hecho que genera la sanción que establece el artículo 162 del Código del Trabajo se presenta durante la vigencia de dicho régimen, se debe concluir que la causa que provoca su aplicación -no pago de las cotizaciones previsionales- se originó en el ámbito que debe controlar y en el que la ley le asignó responsabilidad, debido a la utilidad que obtiene del trabajo prestado por los dependientes de un tercero y por la necesidad de cautelar el fiel cumplimiento de las obligaciones laborales y previsionales (Corte Suprema, Cuarta Sala, 23 de septiembre de 2015, Rol 28586-2014 y 22 de septiembre de 2015, Rol 27447-2014, 19 de noviembre de 2015, Rol 3797-2015 y 28 de junio de 2016, Rol 20400-2015). Reitera que, en el mismo sentido, la ley hace responsable solidaria o subsidiariamente según corresponda, a la empresa principal y al contratista de las obligaciones laborales y previsionales de dar, en favor de sus trabajadores incluidas las indemnizaciones legales, que deban pagarse por el término de la relación laboral. La misma norma atribuye a la empresa principal, responsabilidad solidaria en el pago de las obligaciones laborales y previsionales de dar, en el evento que ésta no haga valer los derechos de información y de retención, que la ley le otorga, como una forma de sancionarla por la negligencia en el cumplimiento de sus deberes, siempre limitado al período durante el cual los trabajadores prestaron servicios en régimen de subcontratación, lo que no impide extender los efectos de la sanción del artículo 162 del Código del Trabajo a la empresa principal, en virtud de su responsabilidad solidaria (Corte de Apelaciones de Santiago, 21 de julio de 2015, Rol 1975-2014 y 18 de julio de 2016, Rol 564-2016 y 4 de agosto de 2016, Rol 721-2016). Así las cosas, sostiene que la demandada solidaria es responsable del pago de lo sancionado en autos, toda vez que el artículo 162 del Código del Trabajo solo limita la sanción de nulidad hasta que se convalide el despido, el cual no ha ocurrido con su mandante hasta la fecha y que en la especie no es procedente la aplicación del artículo 163 bis del Código del Trabajo, toda vez que las limitaciones a la sanción de nulidad que establece esta norma, dice relación solo cuando el despido es motivo de la declaración de quiebra, y en el caso de su mandante no fue así, pues fue despedido con anterioridad a la declaratoria de quiebra de Anmar S.A., que ocurrió con fecha 30 de abril del año 2018, publicada en el boletín comercial con fecha 26 de septiembre del año 2018. Por otra parte, no le es aplicable a la demandada y condenada solidaria de autos procedimiento concursal, razón por la cual tampoco le es aplicable la excepción prevista en artículo 162 del Código en comento en relación al artículo 163 bis del mismo cuerpo legal. Dice que atendida la naturaleza de la objeción a la liquidación se constata que se trata de una verdadera excepción a la pretensión ejecutiva, y no una mera precisión a los cálculos numéricos de la liquidación practicada en autos, pues la empresa y deudora solidaria objetó la liquidación, alegando la insolvencia de la empresa ANMAR S.A., y asimismo interpretando la norma del inciso 3° del artículo 510 del Código del Trabajo, desarrolló largamente en su escrito los argumentos para justificar su objeción. Hace presente que señalar que la demandada solidaria no contestó la demanda, ni hizo alegación alguna mientras se discutió la demanda y sus recursos, es una alegación que efectúa en su incidente de objeción de la liquidación que nunca planteó, por lo que lo resuelto por el tribunal a quo en la resolución de fecha 30 de mayo de los corrientes, altera y modifica una sentencia fija y que se ejecuta en los presentes autos, lo que causa perjuicio a su parte porque al acoger la oposición de liquidación interpuesta por la demandada Codelco Chile debe practicarse una nueva liquidación que comprenda los períodos solo hasta el día 30 de abril de 2018, y con ello se va a disminuir sin fundamento plausible los créditos y derechos que le asisten en mérito de lo sentenciado, pues rebajaría más de cuarenta y cinco millones la liquidación que se practicó conforme a derecho. Pide que se revoque la resolución recurrida y que en su lugar se rechace la objeción a la liquidación planteada en autos por la demandada solidaria por carecer de fundamentos de derecho, todo con costas. SEGUNDO: Que el Abogado de la parte demandada don William Ávalos Céspedes solicitó la confirmación de la resolución en alzada. Señala que el efecto de la Ley 20.072 es general y, por lo tanto, en ninguna parte de ella se señala que es menester que el término de la relación laboral requiera la liquidación concursal, es un efecto legal que hace que, como lo señala el artículo 163 bis del Código del Trabajo, no se aplique el inciso quinto del artículo 162 a este tipo de sanción cuando se esté declarada la declaración de una empresa, pues no se exige que haya terminado por la causal de liquidación, lo que se señala es que no se va a aplicar la sanción del artículo 162 cuando haya ya declarado un proceso de quiebra como ocurre en el caso de autos, por lo tanto, tomando en cuenta la ley especial que establece un límite para la aplicación de la sanción del inciso quinto del artículo 162 del Código del Trabajo, señala que se debe aplicar porque se está en el caso, la declaración de quiebra es de abril del año 2018, el despido se hizo en febrero de 2018 y en consecuencia, cuando se haga la liquidación y corresponda hacerla se tiene que limitar a la fecha de declaración de quiebra, por lo tanto, la liquidación debería corresponder a los meses de enero, febrero, marzo y abril de 2018, cuando se declaró la quiebra de ANMAR. En consecuencia, por tratarse de una ley especial que se aplica por sobre todo el régimen general, señala que la interpretación del tribunal es correcta y consecuentemente, solicita el rechazo del recurso de apelación interpuesto. TERCERO: Que la Ley 20.720 publicada en el Diario Oficial de 9 de enero de 2014, que sustituyó el régimen concursal vigente a la fecha de su entrada en rigor, por uno de reorganización y liquidación de empresas y personas, e incorporó la quiebra del empleador como una causal de término del contrato de trabajo, excluyó en forma expresa la aplicación de lo dispuesto en el artículo 162 inciso quinto del Código del Trabajo, en el evento que la relación laboral termine porque el empleador fue sometido a un procedimiento concursal de liquidación. Lo señalado, con el objeto de no obligar a la masa de bienes con mayores obligaciones que aquellas que quedaron fijadas a la fecha en que se dictó la resolución de liquidación por el tribunal que conoce el procedimiento concursal respectivo, que es precisamente la que pone término al contrato de trabajo. El citado artículo 163 bis, norma excepcional, dispone una ficción legal para todos los efectos legales, en cuanto a que la resolución de liquidación hace las veces de término del contrato de trabajo. En el caso de que el cese de la relación laboral se produzca por despido, con anterioridad a la fecha de la citada resolución no le es aplicable la norma excepcional del artículo 163 bis, sino la del artículo 162 ambas del Código del Trabajo, toda vez que no existe diferencia con los otros casos en los que se aplica la citada disposición. CUARTO: Que los preceptos citados permiten concluir que se trata de normas de carácter especial, aplicables solo a la persona natural o jurídica que es declarada en liquidación concursal la demandada principal, de manera que sus efectos o consecuencias jurídicas no pueden extenderse a las demandadas que no están en tal situación. Asimismo, el inciso primero del artículo 54 de la ley 20.720 establece que “El Procedimiento Concursal de Reorganización Judicial será aplicable sólo a la Empresa Deudora, que para efectos de este Capítulo se denominará indistintamente Empresa Deudora o Deudor.” QUINTO: Que de los antecedentes de la causa se desprende que el término de la relación laboral se produjo con fecha 8 de febrero de 2018, invocándose la causal de necesidades de la empresa, lo que ocurrió con anterioridad a la fecha en que la demandada principal fue declarada deudora en un procedimiento concursal de liquidación forzosa de fecha 30 de abril de 2018, resolución emanada del vigésimo juzgado civil de Santiago, de manera que concurren los presupuestos que el legislador establece tratándose de lo dispuesto en el artículo 162 inciso quinto del citado cuerpo legal, siendo exigibles y aplicables a la demandada las obligaciones que el derecho laboral contempla y en consecuencia, cada una de las sanciones previstas por su incumplimiento, entre las cuales se encuentra el citado artículo 162, de tal modo que al resolver la resolución recurrida acoger parcialmente la objeción de la liquidación de la deuda, interpuesta por la demandada solidaria Codelco Chile, y hacer aplicable lo dispuesto en el artículo 163 bis del Código del Trabajo, ha incurrido en un yerro que debe ser enmendado. SEXTO: Que en esta materia, en causa de unificación de jurisprudencia Rol 31772-2017 la Excma. Corte Suprema ha resuelto lo siguiente: “Séptimo: Que, en materia de interpretación de la normativa laboral, uno de los principios fundamentales del derecho del trabajo es el de protección, y una de sus manifestaciones concretas es el principio pro operario, que en el ámbito judicial está referido a la facultad de los jueces de interpretar la norma según el criterio ya aludido, esto es, al existir varias interpretaciones posibles se debe seguir la más favorable al trabajador, conocido también como el in dubio pro operario. Pues bien, una labor de exégesis no inspirada en dicho principio, esto es, una por la que dilucidando el correcto sentido de lo que previene la norma contenida en el párrafo final del numeral 1 del artículo 163 bis del Código del Trabajo, concluya que contempla una suerte de inaplicabilidad de lo dispuesto en el inciso quinto del artículo 162 del mismo código, tratándose de todas las causales de término de contrato de trabajo que se invocan por el empleador con anterioridad a la fecha en que es sometido a un procedimiento concursal de liquidación, lo que se traduciría en una de tipo extensiva, provocaría un perjuicio en el patrimonio de los trabajadores, pues se los privaría del derecho a obtener el pago de las prestaciones de orden laboral devengadas desde la data en que se los desvinculó por decisión unilateral de su empleador -no por haberse dispuesto su liquidación en un procedimiento concursal- hasta la convalidación del despido. Lo anterior, porque, como se dijo, la norma del referido artículo 163 bis es excepcional y establece una ficción legal, esto es, la fecha de término de los servicios es la de la resolución de liquidación; sin embargo, esa ficción no puede extenderse a situaciones que la disposición no contempla, como sería si se considera esa data para limitar los efectos de la sanción de la nulidad del despido en el caso que el cese de los servicios haya ocurrido por decisión del empleador con anterioridad a la declaración de liquidación. Octavo: Que, atendido lo expuesto y considerando, al mismo tiempo, los términos del artículo 163 bis, tanto su inciso primero como el acápite final de su número 1.-, del Código del Trabajo, se debe concluir que solo regla la nueva causal de término de contrato de trabajo que se introduce a la normativa laboral, esto es, aquella que se configura por el hecho de someterse el empleador al procedimiento de liquidación; razón por la que se uniforma la jurisprudencia en el sentido que si el vínculo laboral cesó antes de la fecha en que se dictó la resolución que dispuso la liquidación del empleador, el efecto que establece el inciso quinto del artículo 162 del referido código se aplica hasta la convalidación del despido, por lo tanto, la masa de bienes debe responder por el pago de las remuneraciones y cotizaciones previsionales devengadas en dicho periodo y, en forma subsidiaria, la dueña de la obra o faena (Junta Nacional de Jardines Infantiles). Noveno: Que, en estas condiciones, yerran los sentenciadores de la Corte de Apelaciones de Valparaíso al concluir que corresponde limitar los efectos de la sanción de nulidad del despido hasta la fecha de la resolución de liquidación, pues, como ya se dijo, el artículo 163 bis del Código del Trabajo solo regla la nueva causal de término de contrato de trabajo que se introduce a la normativa laboral, esto es, aquella que se configura por el hecho de someterse el empleador al procedimiento de liquidación, pero no restringe el efecto que establece el inciso quinto del artículo 162 del referido código si la relación laboral terminó por despido incausado, antes de esa fecha. Por consiguiente, cabe concluir que, al tratarse de un despido verbal ocurrido con anterioridad a la fecha de la resolución de liquidación y adeudarse las cotizaciones de seguridad social por el tiempo trabajado, concurren los presupuestos que el legislador prevé en el artículo 162 inciso quinto, siendo exigibles y aplicables a las demandadas las obligaciones que el derecho laboral contempla, y consecuencialmente, cada una de las sanciones previstas por su incumplimiento, entre ellas, la del artículo 162 ya citado, de tal modo que al decidirse como se hizo en el pronunciamiento del grado, no se incurrió en la vulneración de la norma del artículo 163 bis del Código del Trabajo. Décimo: Que, conforme a lo razonado, y habiéndose determinado la interpretación acertada respecto de la materia de derecho objeto del juicio, el presente recurso de unificación de jurisprudencia deberá ser acogido. Por estas consideraciones y visto, además, lo dispuesto en los artículos 483 y siguientes del Código del Trabajo, se acoge el recurso de unificación de jurisprudencia deducido por los demandantes respecto de la sentencia de veintitrés de mayo de dos mil diecisiete, dictada por la Corte de Apelaciones de Valparaíso, que hizo lugar al recurso de nulidad que interpuso la demandada subsidiaria, Junta Nacional de Jardines Infantiles, en contra de la sentencia de base de dieciocho de abril de dos mil diecisiete, emanada del Primer Juzgado de Letras de Quilpué, en autos Rit O-76-2016, Ruc 16-4-0055768-7, y se declara que aquella es nula, debiendo dictarse acto seguido y sin nueva vista, pero separadamente, la respectiva de reemplazo. Acordada con el voto en contra de la ministra señora Muñoz y de la abogada integrante señora Etcheberry, quienes fueron de opinión de rechazar el recurso de unificación la jurisprudencia interpuesto por los demandantes respecto de la exégesis del artículo 163 bis del Estatuto Laboral, por estimar que ante la disconformidad de interpretación de determinadas normas legales que se constata en la sentencia respecto de la cual se lo deduce y en las que se acompañan, su correcta inteligencia es la que sustenta la primera, toda vez que si el vínculo laboral cesó antes de la fecha en que se dictó la resolución que dispuso la liquidación del empleador, como es el caso de autos, el efecto que establece el inciso quinto del artículo 162 del referido código se aplica hasta dicha data, con el objetivo de no gravar la masa de bienes con mayores obligaciones que aquellas que quedaron fijadas a la fecha en que se dictó la mencionada resolución de liquidación, siendo, por lo tanto, esa data el límite al que debe ceñirse la obligación de pagar las remuneraciones y cotizaciones insolutas de los trabajadores. Se deja constancia que en el fallo de unificación de jurisprudencia se modificó la postura interpretativa anterior sobre la materia de derecho propuesta, al estimarse más ajustada a los hechos acreditados y a la normativa que la rige. Regístrese. Rol N° 31.772-2017.- Pronunciado por la Cuarta Sala de la Corte Suprema integrada por los Ministros señores Haroldo Brito C., Ricardo Blanco H., señora Andrea Muñoz S., señora Carlos Cerda F., y la Abogada Integrante señora Leonor Etcheberry C. SENTENCIA DE REEMPLAZO: Santiago, ocho de marzo de dos mil dieciocho. En cumplimiento a lo dispuesto en el artículo 483 C del Código del Trabajo, se dicta la sentencia de reemplazo que sigue en unificación de jurisprudencia. Vistos: De la sentencia dictada por la Corte de Apelaciones de Valparaíso con fecha veintitrés de mayo de dos mil diecisiete, se mantienen los fundamentos primero a séptimo, que no se modifican con la decisión que se emite a continuación. Asimismo, se reproducen las argumentaciones sexta, séptima y octava de la sentencia de unificación de jurisprudencia que antecede. Y teniendo, además, presente: Primero: Que, conforme a lo razonado, concurren en la especie los presupuestos fácticos que conducen a aplicar la sanción remuneratoria establecida en el artículo 162, incisos quinto y séptimo, del Código del Trabajo. Segundo: Que, en consecuencia, en el contexto referido la sentencia de base al acoger la acción de nulidad del despido y condenar a la empleadora y, subsidiariamente, a la Junta Nacional de Jardines Infantiles al pago de las remuneraciones y demás prestaciones que se devenguen desde la fecha del despido hasta su convalidación mediante el pago de las cotizaciones previsionales impagas durante el período trabajado, no incurrió en la infracción legal denunciada, razón por la que el recurso de nulidad interpuesto, fundado en la causal contenida en el artículo 477 del Código del Trabajo, en relación con el artículo 163 bis del mismo texto legal, también deberá ser desestimado. Por estas consideraciones y, visto, además, lo dispuesto en los artículos 474, 477, 478 y 479 del Código del Trabajo, se rechazan, sin costas, los recursos de nulidad deducidos por la parte demandante y por la Junta Nacional de Jardines Infantiles, contra la sentencia de dieciocho de abril de dos mil diecisiete, dictada por el Primer Juzgado de Letras del Trabajo de Quilpué, en autos Rit O-76-2016, Ruc 16-4-0055768-7. Acordada con el voto en contra de la ministra señora Muñoz y de la abogada integrante señora Etcheberry, quienes estuvieron por acoger el recurso de nulidad interpuesto por la demandada subsidiaria, por estimar que la sentencia de base incurrió en la causal del artículo 477 del Código del Trabajo, al infringir el artículo 163 bis del mismo texto legal, de acuerdo con los fundamentos expresados en la disidencia de la sentencia de unificación que precede. Regístrese y devuélvase. Rol N° 31.772-2017.- Pronunciado por la Cuarta Sala de la Corte Suprema integrada por los Ministros señores Haroldo Brito C., Ricardo Blanco H., señora Andrea Muñoz S., señora Carlos Cerda F., y la Abogada Integrante señora Leonor Etcheberry C.”. SÉPTIMO: Que en consecuencia, en este caso, el cese de los servicios ocurrió por decisión del empleador con anterioridad a la declaración de liquidación, por lo que no se le aplica a la norma excepcional del artículo 163 bis del Código del Trabajo, que establece que la fecha de término de los servicios es la de la resolución de liquidación. OCTAVO: Que, por lo demás, se advierte que los fundamentos de la objeción deducida están referidos al fondo de la acción ejecutiva, específicamente a los efectos de la sentencia definitiva y no a los errores de suma o cálculos numéricos. NOVENO: Que por lo razonado de manera precedente, procede revocar lo resuelto, y en consecuencia rechazar la objeción a la liquidación practicada en autos, deducida por la demandada solidaria Codelco Chile División Chuquicamata. Por estas consideraciones, disposiciones legales citadas y lo prevenido en los artículos 474 y siguientes del Código del Trabajo, SE REVOCA con costas del recurso, la resolución apelada de fecha treinta de mayo de dos mil diecinueve, dictada en causa RIT C-43-2019, RUC 1840099715-9 del Juzgado de Letras del Trabajo de Calama, que acogió la objeción de liquidación de deuda en cobranza laboral de fecha 8 de abril de 2019, deducida por el demandado solidario Codelco Chile División Chuquicamata y en su lugar SE RECHAZA la referida objeción a la liquidación, por carecer de fundamentos de derecho. Regístrese y comuníquese. Rol 218-2019 (LAB) Redacción de la Ministra Titular Sra. Virginia Soublette Miranda. Pronunciado por la Primera Sala de la C.A. de Antofagasta integrada por los Ministros (as) Virginia Elena Soublette M., Jasna Katy Pavlich N. y Abogada Integrante Macarena Silva B. Antofagasta, veintiuno de octubre de dos mil diecinueve. En Antofagasta, a veintiuno de octubre de dos mil diecinueve, notifiqué en Secretaría por el Estado Diario la resolución precedente.