Sunteți pe pagina 1din 20

DISEÑO INDUSTRIAL

Formación, propósitos y acciones


DISEÑO INDUSTRIAL
Formación, propósitos y acciones
Oscar Salinas Flores

COMPILADOR

Universidad Nacional Autónoma de México

México, 2013
índice
Presentación
Jorge Tamés y Batta
9

Introducción 13
Oscar Salinas Flores

LA FORMACIÓN DEL DISEÑADOR

Los motivos del diseño: Entre el proyecto disciplinario


y la colaboración transdisciplinaria 17
Enrique Ricalde Gamboa

Globalización y escuelas de diseño industrial 29


Arturo Treviño Arizmendi

Lo que pre-ocupa 45
Roberto González

La formación de diseñadores industriales 53


Fernando Fernández Barba

LOS PROPÓSITOS DEL DISEÑO

La visión social del diseño industrial. La investigación 61


a través de los ojos del diseño
Erika Marlene Cortés López y Aura Rosalía Cruz Aburto

Hacia una historia crítica del diseño 71


Eloísa Mora Ojeda

Espacio, diseño, identidad 95


César González Ochoa
Diseño: propósito y valor 111
Luis Rodriguez Morales

DISEÑO Y SOCIEDAD

La sustentabilidad en la formación del diseñador.


Educación con miras a la sustentabilidad,
una necesidad indudable 121
Brenda García Parra

Diseño industrial incluyente 129


Mauricio Moyssén Chávez

El diseño de la innovación o la innovación en el diseño 141


Héctor López Aguado

Innovación y productividad en el diseño 157


Julio Frias Peña

Las nuevas formalidades del diseño como efecto de las Tecnologías


de la Información y Comunicación (TIC) 167
Guillermo Gazano Izquierdo

Diseño Industrial para no diseñadores 173


Luis Equihua Zamora

8
introducción

Hablar sobre el diseño que vivimos en la actualidad no es tan simple


como sucedía en los primeros años de esta disciplina en México. El dise­
ño de hoy muestra múltiples facetas que reflejan lo que es el mundo del
siglo xxi y la complejidad de las sociedades actuales.
De hecho, todo aquello que separaba a las diversas disciplinas del di­
seño, cada vez se muestra menos y el concepto de diseño asociado a una
especialidad se diluye frente a los nuevos retos de un entorno que de­
manda al diseñador no solo objetos, sino también servicios o incluso
sistemas que requieren grupos de diversos profesionales que actúen inter­
disciplinariamente. El diseño, como lo plantea Luis Rodríguez en este li­
bro, “se entiende como un proceso para solucionar problemas complejos
y no solo se centra en la aplicación de habilidades y conocimientos rela­
cionados con la configuración formal o con la producción industrial”, y
es por ello que la formación del diseñador ha iniciado una transformación
que responde a las nuevas condiciones sociales, culturales y tecnológicas.
En México, hemos experimentado una evolución de la disciplina que
en los últimos años ha suscitado un cambio notable en el perfil de los
diseñadores y, se acerca a una nueva forma de relacionarse con un mer­
cado profesional que también cambia de acuerdo a las circunstancias que
impone el desarrollo del país, como resultado de sus interrelaciones den­
tro de la cultura globalizada de nuestro mundo.
En este libro, se incluye un grupo de diseñadores profesionales que se
distinguen por su orientación hacia la formación de nuevos diseñadores
industriales dentro de la Universidad Nacional Autónoma de México, y
que colaboran tanto en el Centro de Investigaciónes de Diseño Industrial
como en el Posgrado en Diseño Industrial, de la Facultad de Arquitectura.
Nos ofrecen una serie de reflexiones que parten de experiencias, pro­
yectos o propuestas que muestran el estado que guarda la enseñanza y la
práctica de la disciplina del diseño no solo en el ámbito de la unam, sino
en un amplio espectro de nuestra sociedad. Los textos que conforman esta
publicación se han dividido en tres áreas que nos muestran

13
•• La formación del diseñador
•• Los propósitos del diseño, y
•• El tema de diseño y sociedad

A partir del interés de los autores, y resultado de su experiencia profesio­


nal, con el objetivo de ayudarnos a entender mejor hacia donde y cómo
se conduce la disciplina.
En la sección sobre la formación del diseñador, reflexionan sobre los
contenidos de un programa académico y su pertinencia para lograr una
sólida formación, así como los mecanismos y acciones que impulsan la
relación e integración de un sistema educativo con grupos, instituciones
y empresas locales y globales, como demandan estos tiempos, que a su
vez, nos llevan a identificar al diseño como una disciplina con distintos
campos profesionales.
En la segunda parte, se abordan los propósitos del diseño, analizan­
do diversos principios que soportan y dan sentido a los fundamentos de la
profesión desde diversas ópticas. Desde nociones, como la identidad en
el diseño, hasta la necesidad de abordar la historia y el análisis crítico a
través de la investigación, nos acerca a la comprensión de los campos de
dominio que el diseñador aborda en su actuación.
En la última sección, diseño y sociedad, se presentan diversos análisis
sobre las responsabilidades del diseñador frente a los grupos que m������
����
s re­
quieren de sus soluciones y participación en el mejoramiento de la cali­
dad de vida de los ciudadanos. Un diseño incluyente hacia una sociedad
sustentable, es hoy un tema de primera importancia en la integración de
los nuevos programas académicos de Diseño Industrial y, un motivo para
que algunos de nuestros autores analicen la actuación y el compromiso que
los diseñadores tienen que asumir en el ejercicio de una profesión cam­
biante que se propone cada vez menos someterse a las exigencias de un
mercado de consumo, como lo hacía hace medio siglo en los inicios de
la disciplina en México.
Al final, los autores vuelven a enfatizar en la innovación como objetivo
primordial del trabajo del diseñador profesional; elemento fundamental
que parte desde la concepción misma del entorno en que se prepara a los
nuevos diseñadores, que prosigue con la estructura mental que adquiere
el estudiante a lo largo de su formación, y concluye con su capacidad
como profesional para colaborar en el desarrollo de objetos, servicios y
sistemas que la sociedad de nuestros tiempos requiere.

14
En resumen, los quince autores de esta publicación nos ofrecen un
análisis diverso de aquellos temas que ocupan, inquietan y mueven a los
diseñadores preocupados por generar las reflexiones y discusiones sobre
la profesión del diseño que nos puedan ayudar no solo a entenderla me­
jor, sino principalmente, a participar en su evolución y transformación
de acuerdo a las demandas de este mundo complejo en que habitamos, y
los nuevos límites que se manifiestan alrededor de nuestra forma de vida.
Con el cambio de siglo, se han presentado transformaciones notables en
la caracterización de las disciplinas del diseño e incluso se han modifica­
do o desaparecido los términos con que se determinaba el significado y
propósito de cada una de ellas, incluyendo al Diseño Industrial, como un
reflejo de las nuevas necesidades y las circunstancias que nos impulsan a
vivir como vivimos.
Que el contenido de este libro sea un aliciente para la reflexión y el
análisis de todos aquellos interesados en la profesión del diseño y su par­
ticipación en el desarrollo de nuestra sociedad.

Oscar Salinas Flores

15
La formación
del diseñador
Los motivos del diseño:
Entre el proyecto disciplinario y la colaboración
transdisciplinaria

Enrique Ricalde Gamboa1

A principios de los años 90 me interesó comprender los soportes teóricos


de mi profesión: el diseño industrial. Lo hice a través de una visión panorá­
mica. Me propuse analizar, si realmente el diseño era un dominio en sí
mismo, o un proceso que podía estar presente en distintas áreas del cono­
cimiento; me interesaba entender, si éste proceso era realmente el mismo.
El paso de los años, la experiencia académica y profesional, así como la
continua reflexión teórica, nos ha permitido a los diseñadores darnos cuen­
ta que: la noción de diseño cambia constantemente, los factores condicio­
nantes del cambio se encuentran –en la mayoría de los casos, fuera del  Bamboocycles,
Diego Cárdenas Landeros
dominio del diseño, así como, la influencia determinante de las fuerzas
sociales, del mercado y de los avances tecnológicos.
Tal vez, los dos cambios más importantes, que se han producido en la
apreciación que ahora se tiene del diseño son, por un lado, dejar de
buscar –el qué: el sentido de la configuración en diseño, 2 para despla­ 1 El autor es actualmente, estudiante
del programa de doctorado en
zarnos –al cómo: hacia el proceso que en realidad es inverso: la confi- Arquitectura de la Facultad
de Arquitectura de la Universidad
guración del sentido en diseño, y por otro lado, se ha hecho patente la Nacional Autónoma de México.
necesidad de explorar los vínculos de nuestra disciplina con otras disci­ La investigación en desarrollo, se
encuentra registrada con el nombre
plinas. Lo primero, me ha permitido revalorar el gran espectro de acción de “La Transdisciplina en el diseño”
del diseño y su desplazamiento de lo material hacia lo virtual (Maldona­ y cuenta con apoyo del Consejo
Nacional de Ciencia y Tecnología
do, Aicher),3 así como, ver con renovado interés el planteamiento hecho (Conacyt). Este ensayo es parte de los
avances de investigación presentados
por Jones,4 de abrir el diseño hacia una noción de circularidad, a la en el Congreso 30 años del Posgrado
manera que se plantea desde la cibernética (Wiener, von Foerster), de Diseño Industrial de la unam en
el mes de agosto de 2011, así como,
o desde los vínculos de ésta con la psicología y la teoría de la comuni­ del 5º Coloquio de Doctorantes en
Arquitectura realizado en febrero de
cación (Watzlawick), o a la manera en que se desarrollan los seres vivos 2012 en la unam.
desde la perspectiva de la biología y los sistemas abiertos (Maturana, 2 Véase, Ricalde Gamboa, E. (2004).
“El sentido de la configuración en
Varela, Capra); es decir, conceptualizar al diseñador como un sistema diseño”. Tesis de maestría, Posgrado
autoorganizador que intercambia información con otros especialistas y en diseño industrial, unam.
3 Ver, Maldonado, T. (1994). Lo real y lo
energía y materia con el entorno, buscando siempre nuevos caminos virtual. Barcelona, Gedisa; Aicher, O.
(2001). Analógico y digital. Barcelona,
y oportunidades de acción. Gustavo Gili.
Lo primero que conviene aclarar, es que este ensayo no enfrenta un 4 Ver, Jones, J.C. (1985). Diseñar el
Diseño. Barcelona, Gustavo Gili.
dilema; es decir, no invita a la reflexión para decidir entre dos polos de

17
 Fig. A: representación
de campo monodisciplinar

acción del diseño: el proyecto disciplinario o la colaboración transdisci­


plinaria. Se trata de reflexionar y comprender los motivos que hacen que
cada modo de trabajo, se encuentre en el centro mismo de las acciones
de diseño, con sus oportunidades de intervención y las contradiccio­
nes que genera. La especialización disciplinaria (monodisciplina) y las
demás formas de colaboración disciplinaria –inter, multi y transdiscipli­
na, son conceptos que generalmente se confunden, o en el mejor de los
casos son considerados como sinónimos. Aún hoy en día, esta situación
provoca dudas en algunos.

Uno
Especialización

Al estudiar las relaciones entre número y geometría y relacionarlos con


los aspectos más primarios de nuestra mentalidad, González Ochoa
(2003)5 nos da la oportunidad de vincular número, forma y mentalidad.
Nos dice que, todo aquel interesado en la búsqueda de la realidad, toma
como válido que: “todo fluye, nada permanece; todo está naciendo o
muriendo o se mueve entre esos procesos; … en una búsqueda mítica de
los procesos de transformación”.
Inicia su texto con las características del número uno, citando a Jámbli­
co el neoplatónico del siglo cuarto de nuestra era: “el uno, la mónada, es
5 Ver González Ochoa, C. (2003). el origen no espacial de los números y se llama así por su estabilidad
Música congelada. Mito, número,
geometría. México, Ubari Ediciones. El puesto que preserva la identidad específica de cada número con el cual se
doctor González Ochoa, forma parte une”; pues, “todo ha sido organizado por la mónada –asevera Jámblico–
de mi Comité Tutor en el programa de
doctorado y le agradezco el haberme porque contiene potencialmente todo: los principios que están en todos
facilitado su texto. La estructura de
este ensayo, le debe mucho, pues los números. Además –continúa– “la mónada se produce así misma y es
a lo largo del texto aparecerán producida de sí misma puesto que es autosuficiente, imperecedera; es
entrecomillados con citas del mismo.
evidentemente la causa de la permanencia, …” (pp. 31-32). Para la tradi­

18 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones


 Foto 1: Yves Behar, Fuseproject:
diseño de productos,
San Francisco, California.

6 Tal es el caso de colaboración


disciplinaria en la Universidad
de Georgetown, en donde los
investigadores de 14 departamentos
de la Universidad, participan en
el Programa Interdisciplinario
en Neurociencias colaborando
multidisciplinariamente.
7 Datos obtenidos con el buscador
Google. Fecha de consulta
27/02/2012.
8 Datos obtenidos con el buscador
Google. Fecha de consulta
27/02/2012.
9 http://www.icsid.org/about/about/
articles31.htm [acceso 6 abril, 2011].

ción pitagórica y platónica, el círculo era la figura per­ estructural, editorial, entre otros. Lo mismo podemos
fecta, la más semejante a sí misma, la representación decir, si colocamos en el campo de nuestro buscador
del número uno, la mónada. (pp. 37-41) “definiciones de Arquitectura”, pues obtendremos,
Tomo el texto de González Ochoa, para establecer 1 590 000 ligas de respuesta, además de las búsquedas
analogías entre los números y las formas geométricas relacionadas que nos dan otras definiciones de Arqui­
con los campos disciplinares y la colaboración entre dis­ tectura más específicas, como lo son, por ejemplo, de­
ciplinas. También entre lo que él llama “insensibilidad finiciones y opiniones de Arquitectura hechas por
hacia los números” y lo que yo llamo, insensibili­ arquitectos.8
dad para traspasar los límites del propio campo disci­ Este amplio panorama de definiciones, nos hace ver
plinar. Como analogías, son similares en algunos la riqueza y apertura de los diseños hoy en día, y nos
aspectos, pero en otros no. Por ejemplo, en los debates indica, que más que cerrar las definiciones, lo que se
sobre colaboración disciplinaria (Follari), no se con­ abre es la idea de pluralidad. Tal vez, esto se ve con
templa para cada modalidad, un número específico de mayor claridad en la definición de diseño, en el sentido
participantes.6 que lo define la organización internacional de diseño
Esta postura para ir más allá del propio campo, que icsid (International Council of Societies of Industrial
aún prevalece, nos impide entender gran parte de los Design por sus siglas en inglés) e ida (International De­
nuevos problemas y retos que tendremos que enfrentar sign Alliance por sus siglas en inglés),9 y que de alguna
como diseñadores industriales en los años por venir. La manera incluye a la mayoría de los campos y profesio­
indagación sobre convivencia y colaboración discipli­ nes del diseño, y a la cual, nos adherimos:
nar, no es una negación de las bondades de la especia­
lización disciplinaria. Por el contrario, nos obliga a Diseño como actividad creativa cuyo objetivo es es­
profundizar y adecuar nuestras competencias, para que tablecer las cualidades polifacéticas de objetos,
nos sirvan de andamiaje en nuestro que hacer cotidiano, procesos, servicios y sus sistemas considerando todo
académico o profesional, y, que al mismo tiempo, nos su ciclo de vida. Por lo tanto, el diseño es el factor
abran la posibilidad de acercamientos disciplinarios flui­ central de la humanización innovadora de tecnolo­
dos con expertos y especialistas de otras disciplinas. gías y un factor crucial del intercambio cultural y
Si colocamos en el campo de un buscador en Inter­ económico. También nos dicen, que el diseño trata
net “definiciones de diseño” obtendremos 4 400 000 de descubrir y evaluar relaciones estructurales, or­
ligas de respuesta,7 además de las búsquedas relaciona­ ganizativas, funcionales, expresivas y económicas,
das que nos dan definiciones más específicas por cam­ con la tarea de: mejorar la sustentabilidad global y la
po de acción de los distintos diseños: industrial, gráfico, protección del medio ambiente, apoyar la diversidad

Los motivos del diseño: Entre el proyecto disciplinario y la colaboración transdisciplinaria 19


cultural a pesar de la globalización del mundo, conferir a sus productos,
servicios y sistemas, las formas que son expresión de (semiótica) y con­
gruentes con (estética) su propia complejidad. Diseño esta relacionado
con productos, servicios y sistemas concebidos con herramientas, orga­
nizaciones y la lógica introducida por la industrialización –no solo cuan­
do se produce por procesos en serie–. Así, el diseño es una actividad que
implica un amplio espectro de profesiones en las cuales, productos, ser­
vicios, gráficos, interiores y arquitectura toman parte. En conjunto, estas
actividades deben mejorar –en armonía con otras profesiones relaciona­
das– el valor de la vida. Por tanto, el diseñador se refiere a un individuo
que practica una profesión intelectual, y no simplemente un oficio o un
servicio para las empresas.

No es interés de este trabajo, ahondar en aspectos y características que


como monodisciplina, cada profesión del diseño10 tiene, pues cada una
cuenta con recursos propios y los aplica con éxito. Podemos sostener
que, en el caso del Diseño Industrial o de la Arquitectura, contamos con
una probada efectividad de acción profesional, demostrada ampliamente
con ejemplos de aplicación de conocimientos “especializados” del cam­
po disciplinar. Esta postura no esta en duda.
Veamos qué sucede cuando aparece el otro, la otra disciplina, el núme­
ro dos.
10 Para entender el significado de
la palabra diseño y su origen ver:
Zimmermann, Y. (2002). Del Diseño.
Barcelona, Gedisa. Para conocer Dos
la diversidad de puntos de vista y Interacción
definiciones sobre el diseño: Simón
Sol, G. (2009). + de 100 definiciones
de diseño. México, UAM Xochimilco. El número dos, nos recuerda González Ochoa, aglutina varias cosas
Para un análisis teórico sobre la
definición, posición del diseño en una, iguala la pluralidad y la unidad. “Nuestra mente divide el
respecto a los nuevos retos que le
aguardan: Rodríguez Morales, L. mundo en pares de opuestos: en cielo y tierra, día y noche, luz y oscu­
(2010). Diseño: estrategia y táctica. ridad, derecho e izquierdo, hombre y mujer, yo y tú, etc.”. En el caso
México, Siglo XXI, Colección Diseño
y Comunicación, en especial ¿Qué de las disciplinas, implica abandonar la seguridad del campo propio,
es el diseño? pp. 47-62. Para una
teoría general de los diseños: Acha, para acercarse al otro, compartir metodologías y procedimientos; en
J. (1988). Introducción a la teoría de otras palabras convivir con él. Tal es el caso de la colaboración inter­
los diseños. México, Trillas. Para una
revisión ágil, gráfica e histórica sobre disciplinaria. Aparentemente, nos dice González Ochoa, “el dos es el
la arquitectura; escritos, definiciones
y opiniones de arquitectos Evers, B.
resultado de tomar dos unos y ponerlos juntos; sin embargo, esto no es
& Thoenes, C. (2011). Teoría de la tan obvio. La ecuación 1+1 = 2 no corresponde al ideal del único y
Arquitectura: del Renacimiento a la
actualidad (2 vols.). Köln, Taschen. eterno uno; sólo existe el uno que no puede duplicarse o repetirse”.
(pp. 43-46)

20 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones


 Fig. B: representación de
colaboración interdisciplimaria
 Foto 2:
Santiago Calatrava: Museo de Arte
de Milwaukee
Entendemos que, el dominio del diseño comparte características signi­
ficativas con campos de conocimiento que por su misma naturaleza, se
encuentran cercanos al nuestro. Tal es el caso de, la ingeniería, la psico­
logía cognitiva, la antropología, la estética, entre otros.11
Las experiencias de acercamientos interdisciplinarios cuentan con más
de 40 años, durante los cuales muchas de las discusiones y análisis de
conveniencia han girado alrededor de cuestiones epistemológicas y más
recientemente filosóficas (McEwen et al.).12 En realidad, los modos de
acercamiento interdisciplinario se han mantenido hasta nuestros días y su
elección depende de cada caso en particular. Sin embargo, hay un aspec­
to que resulta importante resaltar: la colaboración interdisciplinaria se ha
dado por necesidad, principalmente por, ampliación del conocimiento,
complejidad del problema, surgimiento de nuevas tecnologías, procesos
y materiales. “¿Cómo, entonces, la unidad va más allá y se convierte en
lo múltiple?, ¿Cómo puede la mónada generar otros principios, otras for­
mas, otros números? y, ¿Cómo lo mismo produce lo otro, cómo el yo ge­
nera el tú?” Una manera de hacerlo, nos dice, González Ochoa, es por
medio de un espejo: simplemente es necesario poner frente al primer
círculo otro círculo igual. (p. 49)
Los dos círculos que se traslapan tienen un región central que simboli­
za la unión cielo y tierra, arriba y abajo, creador y creación, y, forman el 11 Ver: Martín Juez, F. (2002).
antiguo símbolo de lo dual. “El principio de dualidad o de lo otro fue Contribuciones para una antropología
del diseño. Barcelona, Gedisa; Calvera,
llamado díada por los griegos”. (p. 49) A. (ed.) (2007) De lo bello de las
cosas. Materiales para una estética del
Como podemos observar en el esquema, a diferencia del enfoque tra­ diseño. Barcelona, Gustavo Gili.
di­cional; es decir, de solución del problema desde el interior de cada dis­ 12 Citado en García, R. (2006). Sistemas
complejos. Conceptos, método y
ciplina, el problema se resuelve por medio de la colaboración entre fundamentación epistemológica de
ellas. La interdisciplina une conocimientos y es muy apropiada en la fase la investigación interdisciplinaria.
Barcelona, Gedisa, 2008.
de ideación y conceptualización. En el caso específico de la co­laboración

Los motivos del diseño: Entre el proyecto disciplinario y la colaboración transdisciplinaria 21


 Fig. C: representación de colaboración
multidisciplinaria

interdisciplinaria, el acercamiento es tal que se comparten metodologías,


se integran procesos de investigación y, su organización y resultados son
más complejos, pues existe la búsqueda de un fin común.
En el ejemplo de la foto 2, se aprecia la interacción afortunada de co­
nocimientos de los campos disciplinares de la Arquitectura y de la Inge­
niería; es decir, convergencia interdisciplinaria.
Retomando a González Ochoa entendemos que, si bien, “La díada
enfatiza la diferencia, muestra los límites aparentes del mundo, los con­
flictos y los ecos de nuestro sentido de separación”, y en “cada oportuni­
dad tratan de unirse y llegar a ser otra vez el todo”. (pp. 57-58)
Existen ejemplos clásicos y muy conocidos de paradojas –el mentiroso
que dice que miente o el padre que ordena a su hijo que no cumpla con
las órdenes. En la esencia de toda paradoja, esta la implicación o reflexi­
vidad del que enuncia; es un espejo que refleja y refracta. Entonces,
¿Dónde ubicar las competencias del diseño: en el proyecto disciplinario
o en la colaboración transdisciplinaria? La respuesta es: en ambos lados,
ya que ubicar las competencias en el proyecto disciplinario, nos permite
mantener el nivel de especialización en los límites de la propia disciplina.
Pero también requerimos competencias para colaborar en los modos in­
ter, multi y transdisciplinario.
En toda díada también existe un lado negativo que tiende a predominar
por el lado de la discordia y de la división: por lo tanto, se requiere pasar
de la dualidad a la trinidad.

Tres
Colaboración

“Tres es el ‘más allá’: se ha dicho que el término latino tres está relaciona­
do con trans, ‘a través’, ‘penetrar’. El paso a tres es el decisivo, pues es el

22 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones


 Foto 3: Centro de ciencias
sobre las plantas Donald Danforth
en San Louis Missuri.

13 En la descripción de González Ochoa,


el tres significa muchos, y también
a través, lo cual nos coloca en la
posición de incluir bajo éste número
tanto la multidisciplina como la
transdisciplina. Hemos preferido
separarlos para facilitar
su comprensión.

que introduce la progresión infinita en la secuencia de no establecen vínculos entre disciplinas, ni una pers­
números. En muchas tradiciones el tres significa ‘mu­ pectiva articulada. Algunos autores destacan que es el
chos’, más allá de la dualidad. El tres es acumulativo y nivel inferior de integración, que ocurre cuando alre­
significa finalidad. Donde quiera que haya tres existe dedor de un interrogante se busca información y ayuda
un paso a través de algo, un renacimiento o una trans­ en varias disciplinas, sin que dicha colaboración con­
formación”. …“El tres resuelve la díada en un todo y tribuya a modificarlas o enriquecerlas. Esta puede ser la
una unidad hacia su origen en la mónada. Ninguna so­ primera fase de la constitución de equipos para trabajo
lución duradera es posibles sin tres aspectos, dos interdisciplinario.
opuestos y una presencia neutral que limita, balancea Desde éste punto de vista, las profesiones del diseño
y transforma. Si se hace una selección apropiada, se se distinguen al considerar sus acciones como compo­
consigue un nivel de experiencia previamente desco­ nentes de colaboración social amplia: redes de depen­
nocido, de balance y completud”. (pp. 60-71)13 dencia mutua (académicas y/o profesionales), grupos de
En la colaboración multidisciplinaria, las disciplinas interés (por edad, sexo, nacionalidad, ingreso, estatus
participantes, permanecen sin modificación; es decir, socio-económico, entre otros), afinidad o identidad
no comparten los mismos métodos. Los profesionales culturales, estilos de vida, nivel socio-económico, etc.
implicados en una tarea multidisciplinar adoptan Podemos decir, que la perspectiva de las profesiones
actitudes de colaboración con objetivos comunes. Es del diseño, es una forma de entendimiento y participa­
posiblemente, el acercamiento disciplinar más popular, ción en el mundo construido por los humanos que nos
ya que al no integrarse el trabajo metodológico entre abre la posibilidad de pensar y participar en él de dis­
disciplinas permite un cierto grado de independencia tintas maneras: facilitando la comunicación humana
entre participantes. (diseño gráfico), estableciendo cualidades polifacéticas
La colaboración multidisciplinaria es apropiada en de los objetos, procesos y servicios (diseño industrial),
la etapa de desarrollo en el proceso de diseño. El tres y humanizando de forma innovadora la tecnología (diseño
el triángulo como su expresión geométrica, nos dan la de la interacción, arquitectura, diseño industrial), opti­
definición misma de estructura. mizando el intercambio cultural y económico (diseño
Dadas las tres disciplinas, vemos que vemos que el gráfico, diseño industrial, arquitectura), mejorando la
proyecto P, al ser independiente a ellas, requerirá de sustentabilidad y la protección del medio ambiente (ar­
una actitud de colaboración con objetivos comunes. quitectura, diseño industrial), apoyando la diversidad
Los investigadores hacen análisis independientes, y en cultural a pesar de la globalización (diseño escé­nico, di­
el resultado final no presentan un resumen integrador, seño gráfico, arquitectura, diseño industrial), evaluando

Los motivos del diseño: Entre el proyecto disciplinario y la colaboración transdisciplinaria 23


 Fig. D: representación de colaboración
relaciones estructurales, constructivas y organizativas (diseño industrial,
transdisciplinaria arquitectura, diseño artesanal); en síntesis, mejorar –en armonía con otras
profesiones– el valor y la calidad de vida.
En la imagen superior vemos un ejemplo de colaboración multidisci­
plinaria: arquitectura, Ingeniería genética, química y biología.
Al contrastar espíritu y naturaleza, Gregory Bateson14 menciona la ley
de Gresham de la evolución cultural, según la cual las ideas excesivamen­
te simplistas desplazan siempre a las más elaboradas, y lo vulgar y detes­
table desplaza siempre a lo hermoso. Y sin embargo, lo hermoso persiste.

Empecé a pensar que las anticuadas, malamente establecidas ideas so­


bre epistemología, en especial sobre la epistemología humana, refleja­
ban una física obsoleta y contrastaban curiosamente con lo poco que
parecíamos saber acerca de los seres vivos. Era como si se supusiera
que los miembros del género humano eran criaturas totalmente singu­
lares y materialistas, frente a un universo viviente donde imperaba lo
general (no lo singular) y lo espiritual (no lo materialista).

Desde la perspectiva de Bateson, la naturaleza no se encuentra allá afuera


ajena a nosotros, sino que refleja en cambio, los aspectos más complejos
de los seres humanos, los estéticos, los intrincados, los refinados. Reconoce
así, en la naturaleza, “las raíces de la simetría humana, de la belleza y de la
fealdad, de la estética, de la propia condición viva del ser humano y su
pequeña cuota de sabiduría”.

Los principios del número nos conducen ahora a otra dimensión del
universo, a la profundidad.

Cuatro . . .
Transformación
14 Bateson, Gregory (2002). Espíritu y
naturaleza. Buenos Aires, Amorrortu., En las mitologías de todo el mundo, la madre tierra se describe como la
pp. 15-16.
que alimenta los patrones emergentes con materia de los cuatro tipos

24 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones


descritos por los antiguos como los cuatro elementos fundamenta­
les: tierra, agua, aire y fuego. …En lo relativo a los procedimientos cons­
tructivos, mientras que el triángulo se constituye conectando los puntos  Foto 4: Arq. Renzo Piano.
Museo Academia de las Ciencias
existentes de la vesica piscis, la construcción del cuadrado requiere de
en San Francisco, Cal.
la facultad del pensamiento racional, puesto que es necesario pasar por  Foto 5: Tomás Saraceno:
un procedimiento secuencial y lógico para descubrir los puntos ocultos instalación Spider’s Web
que se deben de conectar. (Ibíd., pp. 84-85)

Entiendo proyecto transdisciplinario, como un proyecto que cruza cam­


pos disciplinares, que integra y conecta conocimientos de manera cola­
borativa; que los conocimientos se encuentran en distintos campos de
especialización, en distintos lugares. En la colaboración transdisciplina­
ria, no se entiende la colaboración, si ésta no es parte de las problemática
de los distintos entornos. En la transdisciplina, la colaboración lleva al
crecimiento de las propias disciplinas participantes. El vínculo entre disci­
plinas propicia el surgimiento de propiedades emergentes. La colabora­
ción transdisciplinaria es, la aceptación de la complejidad (Morin)15 del
mundo real que no puede abordarse de modo simple. En la colaboración
trasndisciplinaria, vemos como el entorno natural, social, y cultural influ­
yen en la solución estructural y conceptual del diseño.
No hay duda que, las distintas acciones de diseño, tradicionalmente se 15 Para un panorama de los antecedentes
de Morin sobre el pensamiento
han alimentado de diferentes campos de conocimiento, lo que ha provoca­ complejo: Morin, E. (1981). El método.
do más de una dificultad al momento de determinar las características del La naturaleza de la naturaleza. Madrid,
Cátedra. Para una introducción sobre
propio campo disciplinar. Sin embargo, el diseño como campo y especiali­ el tema: Morin, E. (1990). Introducción
al pensamiento complejo. Barcelona,
dad monodisciplinar, con su propios recursos: habilidades, conocimientos Gedisa, 1994. Para ver la propuesta de
y actitudes, tiene mucho que aportar en la colaboración transdisciplinaria. aplicación del pensamiento complejo
en la ecuación: Morin, E. (1999).
La invitación que hago como diseñador16 es, adentrarnos y acercarnos Los siete saberes necesarios para la
educación del futuro. México, Correo
al modo de pensamiento complejo, con componentes imaginarios (Spen­ de la unesco, 2001.
16 Para un mayor detalle de la propuesta
cer-Brown), pues de acuerdo con Ibáñez (1990),17 son imaginarios porque teórica ver, Ricalde Gamboa, E. (2007).
no están en el espacio sino en el tiempo: en uno de los futuros posibles. El “Transdisciplina, diseño y comprensión:
la plataforma integradora”, en Anna
pensamiento simple, que él llama, de primer órden, piensa el objeto; en Calvera (ed.), De lo bello de las cosas.
Materiales para una estética del diseño,
cambio el pensamiento complejo, –de segundo órden–piensa el pensa­ Barcelona, Gustavo Gili.
miento del objeto; es decir, se interesa por el pensamiento de las personas.

Los motivos del diseño: Entre el proyecto disciplinario y la colaboración transdisciplinaria 25


Entonces, desde un principio debemos distinguir: el co­ en logística, o en una mayor especialización, aún con­
nocimiento (de objetos) de la comprensión de las accio­ siderando, que todo esto puede impulsarnos hacia de­
nes de los sujetos. lante. El mayor logro, vendrá de un cambio en nuestra
Algunos de los principios que fundamentan el pen­ manera de pensar, que nos permita reenfocar nuestros
samiento complejo y la colaboración transdisciplinar esfuerzos para mejorar nuestra efectividad organizati­
son: no existe un centro obvio para la acción, cada va-capacidad de colaboración transdisciplinaria. El
nuevo miembro agrega valor, debe existir un deseo de surgimiento de un nuevo enfoque más estructurado y
contribución en todos los participantes, el conocimien­ organizado alrededor de acercamientos y convergen­
to se desarrolla en los cruces (emerge), la creatividad es cia disciplinares, nos obligará realmente a examinar la
potenciada, los valores surgen de la organización misma evidencia para asegurar que los recursos que inverti­
(dna), la fuerza de los puntos de intersección los con­ mos se ubiquen, allí donde el potencial de beneficios
vierte en ejes rectores, todo y todos nos encontramos es más elevado. Requerirá de nuestra parte, adaptar
interconectados de alguna u otra manera, las uniones nuestras herramientas de gestión y organización, así
débiles son importantes, pues también existe poder en como, la construcción de nuestra capacidad colectiva
las conexiones frágiles distantes. para obtener resultados concretos.
Desde el punto de vista de los beneficios sociales y
ambientales, la colaboración transdisciplinaria: estimu­
la en la academia la creación de líneas de investigación
Conclusión relacionadas con el cuidado del medio ambiente, y del
entorno social y cultural a mediano y largo plazo; como
Sin lugar a dudas, la “innovación” ha sido la caracterís­ área de oportunidad es muy dinámica y se encuentra
tica distintiva en las esferas social y de desarrollo de los en crecimiento constante, debido al enorme desarrollo
últimos años. Este campo ha sido pionero de logros y del conocimiento y la tecnología a nivel internacional.
de avances tecnológicos. Sin embargo, la próxima gran Habrá que estar muy atentos a la búsqueda de las pro­
fuerza disruptiva para el desarrollo, deberá buscarse, piedades emergentes que genere la colaboración múl­
no únicamente en un laboratorio, o a través de avances tiple abierta (inteligencia colectiva).

17 Ibáñez, J. (comp.), (1990). Nuevos


avances en la investigación social.
Investigación social de segundo órden.
Barcelona, Anthropos.

26 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones


Referencias

Becher, Tony (1989). Tribus y territorios académicos. Barcelona, Gedisa 2001.


Capra, F. (2002). La trama de la vida: Una nueva perspectiva de los sistemas vivos.
Barcelona, Anagrama.
Carbajal Escobar, Y. (2010). “Interdisciplinariedad: desafío para la educación supe­
rior y la investigación”, en Revista Luna Azul núm. 31, julio-diciembre 2010,
Colombia, Universidad de Caldas, pp. 156-169.
Charle, C., Schriewer, J., Wagner, P. (comps). (2004). Redes intelectuales trasna-
cionales. Formas de conocimiento académico y búsqueda de identidades cul-
turales. Barcelona, México, Pomares, 2006.
Flores-Malagón, A., Millán de Benavides, C. et al. (2002). Introducción en Alberto
Flórez-Malagón y Carmen Millán de Benavides (eds.), Desafíos de la transdisci-
plinariedad. Bogotá: Universidad Javeriana.
Flores Valdéz, J. y Martínez Mekler, G. (comps.) (2011). Encuentros con la com-
plejidad. México, Siglo XXI, unam.
Follari, R. (2005). “La interdisciplina revisitada”, en Andamios. Revista de Investi-
gación Social, junio, año 1, vol. 1, núm. 2, México: Universidad Autónoma de
la Ciudad de México. pp. 7-17
Foerster, H., In Pakman, M., & Sluzki, C. (1991). Las semillas de la cibernética:
Obras escogidas. Barcelona, Gedisa.
García Canclini, N. (2004). Diferentes, desiguales y desconectados. Mapas de la
interculturalidad. Barcelona, Gedisa.
García, R. (2006). Sistemas complejos. Conceptos, método y fundamentación
epistemológica de la investigación interdisciplinaria . Barcelona, Gedisa, 2008.
Gutiérrez Serrano, N.G. (coord.), (2009). Redes, comunidades, grupos y trabajo
entre pares en la investigación eductativa. México, crim, unam, Plaza y Valdés.
Maturana, H., & Varela, F. (2003). El árbol del conocimiento: Las bases biológicas
del entendimiento humano. Buenos Aires, Lumen, Editorial Universitaria.
Nicolescu, B. (2008). Transdisciplinarity: Theory and Practice Cresskill, NJ: Hamp­
ton Press.
Nicolescu, B. (2002). Manifesto of Transdisciplinarity . Albany, State University of
New York Press.
Plattner, H., Meinel, C. & Leifer, L. (editors) (2011). Design Thinking. Understand,
Improve, Apply. Heidelberg, Londres, Springer.
Watzlawick, P. (1981). Teoría de la comunicación humana: Interacciones, patolo-
gías y paradojas. Barcelona, Herder.
Wiener, N. (1985). Cibernética o el control y comunicación en animales y máqui-
nas. Barcelona: Tusquets.

Los motivos del diseño: Entre el proyecto disciplinario y la colaboración transdisciplinaria 27

S-ar putea să vă placă și