Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Las erupciones volcánicas, son el resultado del aumento de temperatura y movimiento en el núcleo de
la Tierra. Al aumentar mucho la temperatura habitual del magma, este sube hacia la superficie a través
de canales y chimeneas que encuentra en los volcanes.
La violencia o la fuerza de la erupción volcánica viene dada por la temperatura y acidez de la lava, por
los gases emitidos, por el nivel de sílice de la lava, ya que cuanta más sílice contenga mayor será la
explosión, y por el estado de la chimenea, pues si está obstruida la explosión será más violenta.
TERREMOTO
Las zonas en que las placas ejercen esta fuerza entre ellas se denominan fallas y son, desde luego,
los puntos en que con más probabilidad se originen fenómenos sísmicos. Sólo el 10% de los terremotos
ocurren alejados de los límites de estas placas.
La actividad subterránea originada por un volcán en proceso de erupción puede originar un fenómeno
similar.
En general se asocia el término terremoto con los movimientos sísmicos de dimensión considerable,
aunque rigurosamente su etimología significa "movimiento de la Tierra".
TSUNAMI
Sólo cuando llegan a la costa comienzan a perder velocidad, al disminuir la profundidad del océano. La
altura de las olas, sin embargo, puede incrementarse hasta superar los 30 metros (lo habitual es una
altura de seis o siete metros).
La causa más frecuente para la formación de olas gigantes son los terremotos ocurridos en el fondo
marino. Cuando éste se mueve violentamente en sentido vertical, el océano ve alterado su equilibrio
natural. Cuando la inmensa masa de agua trata de recuperar su equilibrio, se generan las olas
gigantescas.
Su tamaño dependerá de la magnitud del seísmo y de la deformación vertical del fondo marino. No
todos los terremotos generan tsunamis, sino sólo aquellos de magnitud considerable, que ocurren bajo
el lecho marino y que son capaces de deformarlo.