UNIVERSIDAD FERMÍN TORO

VICE RECTORADO ACADÉMICO

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
ESCUELA DE DERECHO

LA HIGIENE Y SALUD

Profesor: Carlos R. Giménez Moreno

Estudiante: Jangerlys Rodríguez
C.I: 29. 673. 079
Sección: M-611/B

Noviembre, 2019
 El realizar un estudio del tema de la higiene y salud es de suma
importancia para cualquier individuo; debido a que van de la mano uno con el
otro; y al realizar un enfoque retrospectivo nos podemos dar cuenta que
involucra al ser en toda su expresión por su necesidad para el desarrollo de la
vida de forma plena; así como un requisito indispensable para que se pueda
llevar a cabo durante el tiempo de su ciclo vital; de manera que, al ignorarla o
no darle la importancia que se merece estamos contradiciéndonos nosotros
mismos y negando nuestra existencia. En tal sentido a continuación se
presentan varias definiciones para una mejor comprensión y poder analizarla
con base a ello.

Con respecto a la salud, es necesario destacar el artículo de Bermejo, J.

(2006) el cual cita a Tremblay J., quien la refiere como “estado de bienestar
resultante de una armonía física, psicológica y espiritual del ser humano”. Esto
implica la relación entre las partes y en cierto grado un equilibrio; sin embargo
presenta ambigüedades al no enfocar la importancia del entorno donde el ser
se desenvuelve de allí que sea sometida a discusión y en algunos momentos
desestimada: De igual manera, García D., quien la define como “capacidad de
posesión y apropiación por parte del hombre de la propia corporeidad”. Un
término abstracto y ambiguo que no considera aspectos propios de la
naturaleza humana y su relación con su medio.

De lo anterior se puede establecer que la salud viene dada de acuerdo a

ciertas condiciones existentes entre las cuales están el mantenimiento de un
bienestar tanto físico, mental y social del individuo; quien mediante hábitos de
higiene y conducta apropiada se puede desempeñar de forma óptima en el
hogar, el trabajo, sus estudios y en la sociedad en general permitiéndole a su
vez ir mejorando su calidad de vida.

En tal sentido, es necesario tener presente la salud en todo momento de

la vida debido a que ella nos garantiza el mantenernos vivos, realizar nuestras
actividades de la vida cotidiana de la mejor manera posible y con ello lograr
todo lo que nos propongamos; de allí que está considerada a nivel de las
diferentes organizaciones existentes; bien sea una Institución educativa donde
es obligatorio la realización de actividades físicas deportivas con el fin de
mantener el cuerpo en óptimo estado; así como en las diferentes empresas
laborales que deben tener programas dirigidos a la recreación y el
esparcimiento, establecidos estos en la Ley de higiene y seguridad laboral.
 Considerando que para hablar de salud hay que tener presente la higiene;
al respecto se puede hablar que es el proceso mediante el cual un individuo
cuida su salud a través de hábitos de limpieza que se adquieren durante toda
su vida; primero en el hogar y luego se refuerzan en la escuela y la
cotidianidad; traducido en acciones que permiten evitar enfermedades,
mantener un aspecto pulcro y limpio y a la vez contribuyen a una mejor
integración al entorno o contexto donde se desenvuelve.

Respecto a la higiene, para su estudio hay que considerar una definición

general de la misma; así tenemos; “La higiene es el cuidado que las personas
se dan a sí mismas para preservar la salud. En ella influyen factores culturales,
sociales, económicos e individuales”. (Vacas 2009 p. 25). Considerando tal
definición, hay que precisar que la higiene empieza con nosotros y el cuidado
que tengamos al respecto; pero también influyen factores externos del entorno
donde nos desenvolvemos; debido a ello en todo lugar se debe tener presente
las mínimas pautas para mantenernos libre de enfermedades o infecciones
debidas a agentes patógenos como bacterias y virus.

Cabe destacar, que se ha comprobado a lo largo de la historia, que los

hábitos o acciones que caracterizan a la higiene diaria y personal de cada
individuo como tal; son necesarias para asegurar a la persona un buen estado
de salud, logrando evitar el que entre en contacto con virus o bacterias, que
podrían causarle enfermedades desde un simple resfriado hasta la muerte. De
esta manera, limitando la exposición a enfermedades y manteniendo en
términos generales un buen estado de pulcritud del cuerpo, estamos
manteniendo una buena higiene y con ello, el individuo mantiene su salud
integral, requerida para su desenvolvimiento social.

Es necesario señalar, que la higiene involucra muchos aspectos en el

entorno de cada individuo; desde su higiene personal, referida al cuidado y
aseo consciente de nuestro cuerpo y necesaria para prevenir el desarrollo de
infecciones, enfermedades y malos olores; así como, la higiene en su
cotidianidad, ya sea en su hogar para asegurar la salud personal y la de los
suyos; en los estudios mediante el uso adecuado de uniforme e instalaciones
o en el trabajo mediante el cumplimiento de normas exigidas según el sector
productivo donde se desenvuelve; así como en el uso de maquinarias y
equipos especializados requeridos en su labor productiva.
 En el mismo orden de ideas, hay que considerar la manera en la que nos
vemos a nosotros mismos y cómo nos perciben los demás, esto impacta
directamente en nuestra autoestima y motivación. De modo que si tenemos un
concepto distorsionado de nuestra forma de ser o apariencia, bajamos nuestra
autoestima y con ello nuestro arreglo personal, desmejorando de forma
drástica nuestra apariencia personal, nuestra seguridad y con ello
desmejorando la higiene personal. Si al contrario estamos motivados y
tenemos confianza en nosotros mismos entonces lo reflejaremos en nuestra
presencia, salud mental y física.

De lo expuesto se desprende que la salud es proporcional al grado de

higiene que tengamos; en otras palabras, depende del aseo que le realicemos
a nuestro cuerpo y el entorno donde nos desenvolvemos; ya que para comer,
preparar alimentos, consumir bebidas, estudiar, realizar cualquier actividad;
necesitamos que el lugar donde se lleve a cabo la acción requerida se
mantenga limpia dentro de los parámetros mínimos de higiene. De modo que,
se deben tener hábitos de limpieza que nos resguarden de enfermedades,
bacterias y virus presentes en el aire y en todo lo que nos rodea.

Es importante señalar, que debemos crear consciencia de higiene

personal, hecho por el cual se inculcan hábitos desde la infancia en nuestros
hogares y en la escuela a modo de aprehenderlos y hacerlos propios; pensar
en cada parte de nuestro cuerpo de manera separada, cuando se trata de
higiene, llevando a cabo pequeñas acciones como lavarse las manos cada vez
que se pueda varias veces por día, bañarse de manera regular empleando
jabón de forma generosa, utilizar ropa cómoda, limpia y fresca, cepillarse los
dientes luego de cada comida y, también, mantener los ambientes frescos,
ventilados y limpios. Todos estos pequeños actos y muchos otros contribuyen
a mejorar la calidad de vida de las personas y proporcionan un buen estado
de salud que limita mucho más la presencia de posibles enfermedades.

Cabe destacar, que se deben tener presentes acciones en el hogar, en el

ámbito laboral, académico y familiar y con ello garantizar nuestra salud física
y mental; para lo cual debemos tener presente contar con una buena
iluminación, temperatura adecuada y aireación en los diferentes espacios,
desarrollar nuestras actividades en un ambiente agradable, motivador y libre
de stress, entre otras.
 Como último aspecto, es necesario señalar que el ser humano dentro de
sus premisas de existencia tiene presente la salud e higiene como modo de
vida; ya que si no se les da la importancia debida estaríamos expuestos a un
sin fin de microorganismos presentes en el amiente y causantes de
enfermedades; cabe destacar, que para tener ambas se requiere de un
equilibrio físico, mental y social; el primero realizando actividades deportivas y
recreativas de forma frecuente que garanticen su bienestar; lo segundo
realizando nuestras actividades en un ambiente agradable, con condiciones
óptimas y libres de stress y en comunidad contribuir con el mantenimiento del
ambiente evitando contaminación, seleccionando la basura y hasta reciclando.

REFERENCIAS

BERMEJO, J. (2006). Qué es la salud. [Documento en Línea] Disponible en:

https://www.josecarlosbermejo.es/que-es-la-salud/[Consulta: 2019/11/12]
Díaz, M. ( ). El Concepto de Salud. [Documento en Línea] Disponible en:
http://www.sld.cu/galerias/pdf/sitios/mednat/salud1_1.pdf [Consulta:
2019/11/12].

HORWITZ, N., FLORENZANO, R.Y RINGELING, I. (1985). Familia Y Salud

Familiar. Un Enfoque Para La Atención Primaria. [Documento en
Línea] Disponible en: http://iris.paho.org/xmlui/bitstream/handle/12345
6789/16959/v98n2p144.pdf?sequence [Consulta: 2019/11/12].

VACAS, C. (2009). Hábitos de Higiene en la Escuela. Revista digital

Innovación y experiencias educativas.