Unidad Educativa “Olga Bayone de Rodríguez”.

Monografía del proyecto final de investigación para el curso de física

correspondiente al de tercer año de educación media.

Título:

Electromagnetismo: Efecto del campo magnético de la Tierra sobre el

ambiente.

Autoras:

Michelle Alexandra Mora Pimentel.

Giuliana Valentina Nigro Parra.

Vallery Carolina Kunkel Coro.

Yailin Igdimar Tortolero Moreno.

Tutor:

Gruber Caraballo.

San Diego, Edo. Carabobo, Venezuela.

Julio 2019.
 ÍNDICE

Contenido
INTRODUCCIÓN ......................................................................................... 3

CUERPO........................................................................................................ 5

El campo magnético: .................................................................................... 5

¿Qué produce un campo magnético? Ley de Biot-Savart: ......................... 8

En cuanto a otras leyes que cabe destacar: ................................................ 9

El campo magnético de la Tierra: ................................................................. 9

Origen del campo magnético de la Tierra: ............................................... 10

Efecto del campo magnético Terrestre sobre el ambiente: .......................... 12

Efectos Biológicos de los Campos Magnéticos: ...................................... 13

CONCLUSIÓN: .......................................................................................... 16

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ....................................................... 17

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 INTRODUCCIÓN
Antiguamente, la electricidad y el magnetismo eran dos conceptos uno totalmente
aislado del otro. Sin embargo, la existencia de imanes y los distintos experimentos
realizados con ellos, así como también otros factores, terminó por llegar a la conclusión de
que ambos estaban relacionados. A este estudio se le denomina Electromagnetismo.

Michael Faraday fundamentó la existencia de este estudio, para luego ser formulado
por James Clerck Maxwell en el año 1865. Dicha formulación consiste en cuatro
ecuaciones diferenciales que relacionan el campo eléctrico, el campo magnético y sus
respectivas fuentes materiales (corriente eléctrica, polarización eléctrica y polarización
magnética), llamadas las “Ecuaciones de Maxwell”, lo que se consideró como “la segunda
gran unificación de la física”, siendo la primera realizada por Isaac Newton.

Retomando el tema de los imanes, éstos y los efectos magnéticos tienen una gran
importancia natural, tecnológica y cultural. Cuando las partículas cargadas
(mediante fuerzas de atracción y repulsión entre ellas a través de campos
electromagnéticos) provenientes del Sol chocan con la atmósfera terrestre surgen auroras
espectaculares. ¿Por qué?

Sin la simple brújula magnética, navegar a través de los mares sin mapas habría sido
más peligroso y difícil. Asimismo, el campo magnético de la Tierra (así como pistas del Sol
y las estrellas) es utilizado por los pájaros para su vuelo ¿Cómo? Las cintas de los
tocadiscos o los disquetes para al almacenamiento de información, e incluso el proceso que
se usa para generar electricidad a toda la sociedad actual, se basa en el magnetismo y en los
efectos magnéticos.

Si tanto se depende del magnetismo y, por tanto de alguna manera, del campo
magnético de la Tierra ¿Cuál es el efecto del mismo sobre el ambiente? ¿Y por qué sucede?
En el presente informe de investigación se buscará responder estas incógnitas con claridad

3
y precisión, pues es la curiosidad lo que ha llevado al hombre llegar a donde se encuentra
ahora.

«Sabemos que la magnetita tiene un poder maravilloso… Cuando la vi por primera vez me
estremecí… ¿Quién no se asombraría de la virtud de esta piedra…?

San Agustín (354-430 d.C)»

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 CUERPO
El campo magnético:
Los imanes tienen dos polos, llamados el Polo Norte (N) y el Polo Sur (S). Estos
nombres surgieron de la brújula de navegación. La aguja de esta brújula es un pequeño y
delgado imán.

El extremo de la guja apunta, por lo general, en dirección Norte, definida en muchos

lugares de la Tierra como el polo norte magnético N de la aguja (abreviado por polo norte,
y el extremo opuesto de la brújula se defina como el polo sur magnético S (o polo sur).

Al jugar con dos imanes permanentes, es sencillo determinar que: polos opuestos se
atraen uno al otro, véase Fig. 1.

Figura 1 (Imanes con polos opuestos se atraen).

En tanto que los polos de la misma clase o polos iguales, se repelen entre sí. (Véase fig. 2)

Figura 2 (Imanes con polos iguales se repelen).

Estas observaciones significan que el polo magnético imán-Tierra, localizado en el

hemisferio geográfico Norte de la Tierra, debe ser técnicamente un polo magnético Sur; el
polo magnético de la Tierra situado en el hemisferio Norte es un Polo Sur magnético
porque atrae el extremo polar Norte de la aguja de una brújula, tal como se muestra en la
figura 3.

5
 Figura 3: (Modelo explicativo de la dirección de los polos magnéticos y geográficos).

Las fuerzas magnéticas de atracción y repulsión que los polos magnéticos ejercen
entre sí son muy semejantes a las fuerzas eléctricas entre cargas eléctricas (donde los polos
norte y sur desempeñan los papeles de carga positiva y negativa), sin embargo no son la
misma cosa.

Si se toma cualquier barra imantada y se rocía con pequeños pedazos de hierro,

surge un patrón que indica que el imán tiene efecto en su entorno, dicho patrón de líneas
traza el campo magnético del imán, que se imagina está presente en el espacio que lo
circula, aún sin la presencia de estos pequeños pedazos de hierro. La dirección del campo
magnético en cualquier punto, es tangente a la línea de campo en ese punto.

6
Figura 4: (Dirección de las líneas de los campos magnéticos).

Estas líneas de campo magnético son semejantes al campo eléctrico que rodea las
cargas eléctricas. Por convención, en el espacio fuera del material del imán, la dirección del
campo magnético es tangente a la línea del campo que va del extremo magnético norte el
imán a su extremo magnético sur*. Como con el campo eléctrico, la densidad numérica de
líneas de campo magnético en una región es una medida de la magnitud del mismo que
existe ahí. Puesto que las líneas de campo se agrupan entre sí, conforme se aproximan a
cualquier extremo del imán, la magnitud del campo magnético aumentará como
consecuencia.

El patrón de líneas de campo magnético que

*Dentro del imán, las líneas
de campo van del extremo
polar Sur al extremo polar
Norte, conservando su
continuidad desde un punto
hasta su patrón de retorno
curvo exterior.
rodean un imán es semejante al patrón de líneas de
campo eléctrico que rodean un dipolo. Sin embargo, si
se trata de aislar los polos norte y sur del imán,
cortándose en dos, se encuentra que cada trozo tiene
un modelo dipolar para el campo magnético que lo
rodea, aunque más débil. Si se siguen partiendo los
imanes en pedazos cada vez más pequeños, de
determina que es imposible aislar un polo norte o polo
sur magnéticos; ellos aparecen todo el tiempo de
manera inseparable. Los imanes y el campo magnético
son siempre dipolares. Los polos magnéticos siempre
aparecen en pares, norte y sur (dipolos magnéticos), no
se ha descubierto jamás ningún monopolo magnético a

7
 pesar de las meticulosas búsquedas en toda clase de
materiales. Así como también nunca se ha observado
un campo magnético monopolar; perlo los campos
eléctricos monopolares sí son comunes debido a la
Figura 5: (Los imanes siempre serán dipolos, existencia de cargas aisladas positivas y negativas.
por mucho que se corten)
El efecto de un campo magnético sobre las partículas cargadas indica claramente que los
polos magnéticos y el campo magnético no son lo mismo que un campo eléctrico y la carga
eléctrica.

¿Qué produce un campo magnético? Ley de Biot-Savart: El campo

magnético en sí es cargado por cargas en movimiento y a su vez los campos magnéticos

afectan a las cargas en movimiento. La siguiente figura puede mostrarlo resumidamente.

Cargas en a las otras cargas en

un campo que
movimiento Produce movimiento
magnético afecta
(corriente) (corrientes)

Figura 6: (¿Qué produce un campo magnético?)

La relación entre una corriente (cargas en movimiento) y el campo magnético que

las produce se resolvió por primera vez durante el siglo XIX. Fue difícil encontrarla debido
a la naturaleza el problema; en el caso de la gravitación y la electricidad, fue fácil calcular o
encontrar las capas puntuales o el campo apropiado de la masa. Desafortunadamente, para
el campo magnético no hay corrientes macroscópicas puntuales o corrientes con simetrías
esféricas simétricas; las distribuciones de corriente casi siempre tienen configuraciones
geométricas complicadas.

A un nivel microscópico de ciertas partículas (electrón, protón ye el neutrón, así

como otros) tienen momentos dipolares magnéticos intrínsecos permanentes. Al igual que
un dipolo eléctrico produce un campo eléctrico, un dipolo magnético produce un campo
magnético. En la medida que se trate de partículas puntuales, se puede considerar que el

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campo magnético producido por sus momentos dipolares magnéticos es causado por
fuentes muy pequeñas o puntuales de un campo magnético. Los campos que producen,
siempre son dipolares; no se han detectado nunca monopolos magnéticos aislados.

En cuanto a otras leyes que cabe destacar: Las líneas de campo magnético no
empiezan o terminan en alguna parte, ellas siempre forman trayectorias cerradas. La ley de
Gauss para el campo magnético es la segunda de las cuatro ecuaciones fundamentales del
electromagnetismo conocidos en conjunto como ecuaciones de Maxwell.

El campo magnético de la Tierra:

La Tierra tiene un campo magnético permanente. Un modelo elemental consiste en
una enorme barra imantada en el interior del planeta, donde el eje magnético terrestre (una
línea entre sus polos magnéticos sur y norte) está inclinado con respecto a su eje de rotación
cerca de 12°, véase fig. 7.

Figura 7: (Campo magnético de la Tierra)

Una brújula es un dipolo magnético pequeño que se orienta a sí mismo paralelo a la

componente horizontal del campo magnético de la Tierra. La dirección indicada por una

9
línea desde el centro de la brújula hacia el polo norte del instrumento se denomina norte
magnético. El ángulo entre las direcciones del norte magnético y verdadero en cierto lugar
es la declinación magnética. La brújula montada en el plano vertical y alineada a lo largo de
la dirección magnética norte-sur, se llama aguja de inclinación; indica el ángulo que el
campo magnético forma con dirección horizontal.

Origen del campo magnético de la Tierra:

Esto es aún tema de mucho interés e investigación pues sólo se conocen unos
cuantos aspectos del campo magnético de la Tierra:

1. En realidad, el campo no es causado por un enorme imán permanente tal y como se

mostró en la anterior imagen. Aunque el centro de la Tierra consta de mucho hierro
y otros materiales capaces de mantener un momento dipolar magnético permanente
en gran escala, las altas temperaturas en su interior prohíben la formación de un
campo magnético permanente; el material no es ferromagnético a estas
temperaturas.
2. Es probable que el campo magnético sea causado por corrientes de convección de
material iónico en las partes externas del núcleo líquido de la Tierra y se cree que
dichas corrientes de convección están muy vinculadas con la rotación de la Tierra.
El descubrimiento de que el núcleo exterior líquido de la Tierra ligeramente más
rápido que el manto produjo un gran revuelo, pero ¿Qué tiene esto qué ver? Resulta
que los planetas que giran más lento, como Venus, tienen campos magnéticos más
débiles que la Tierra; en cambio, los planetas que giran más rápido tienen campos
más fuertes, como ocurre con Júpiter. El mecanismo detallado para generar el
campo magnético de la Tierra es todavía difícil de entender y complejo; en otras
palabras, no hay en realidad la respuesta a esta pregunta.
3. El campo magnético de la Tierra ha experimentado inversiones de la polaridad
magnética cada varios millones de años, pero tampoco se conoce qué ocasiona estas
inversiones. Esto curre muy rápidamente en una escala de tiempo geológica.
Cuando se invierte la dirección, los polos magnéticos cambian con relativa rapidez
(cerca de 10,000 años) de un hemisferio al otro.

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 El descubrimiento de las inversiones el campo magnético se hizo durante el siglo XX
mientras se exploraba la interesante geología cerca del centro de la cordillera a mitad del
Atlántico. Esas cordilleras existen también en el fondo marino de otros océanos. La
cordillera del Atlántico medio tiene la característica de que es una región donde el magma
caliente (lava) sale lentamente del interior de la Tierra (en el fondo del océano). Dentro del
magma caliente, pequeñas partículas con un momento dipolar magnético se orientan con el
tiempo de forma paralela al campo magnético de la Tierra. La orientación magnética de las
partículas es bloqueada en las rocas cuando se solidifican y proporcionan un registro de la
dirección del campo magnético de la Tierra.

Se han detectado movimientos del polo norte magnético por encima de los 40
kilómetros por año. A lo largo de los últimos 180 años, dicho polo norte magnético ha
estado migrando hasta el noroeste, desde el Cabo Adelaida en la península Boothia en 1831
hasta la bahía Resolute a 600 km de distancia en 2001.

Como el mismo campo magnético de la Tierra se invierte, el campo magnético presente en

cierta ubicación puede ser más grande o más pequeño que el campo magnético promedio
debido a la alineación paralela o antiparalela del material magnético en las rocas
subyacentes. Con un instrumento sensible (magnetómetro) se puede medir la diferencia
entre el campo magnético real en cierta ubicación y el campo promedio. Esta diferencia es
conocida como anomalía magnética. Un patrón distinto de anomalías magnéticas
alternantes existe alrededor de las regiones de las cordilleras en medio del océano. En
particular si la anomalía magnética se mide a lo largo de una línea perpendicular la
cordillera, es evidente que un patrón de bandas o cintas de anomalías alternantes sea
bastante simétrico respecto a esas formaciones. La edad de las rocas aumenta con la
distancia desde la cordillera.

El patrón es similar con el de una lenta banda transportadora que lleva el material
lejos de la cordillera, indicativo del ensanchamiento del fondo marino. Las rocas
superficiales recién enfriadas registran su última dirección del vector del campo magnético
y, a medida que son alejadas lentamente de su cordillera fuente, despliegan un registro del
pasado. La existencia de estas bandas es una prueba firme de la idea de las placas
tectónicas.

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 Efecto del campo magnético Terrestre sobre el ambiente:
Ya que se tienen las ideas planteadas y explicadas, el campo magnético de la Tierra,
aunque no lo parezca, guarda mucha relación con todo. Con la orientación o navegación,
por ejemplo, una de las propiedades que permite orientarse a las aves migratorias, es la
capacidad que tienen para detectar la intensidad y la dirección del campo magnético
terrestre. Dicha capacidad se explicaría por dos mecanismos complementarios; uno está
relacionado con la luz, pues las moléculas de rodopsina que se encuentran en las células de
la retina del ojo absorben fotones y se convierten en pequeños imanes momentáneos,
alineándose en la dirección del campo, este mecanismo se complementaría con el efecto
producido por los cristales de magnetita presentes en el cráneo de las aves. Las vacas y los
ciervos tienden a alinear sus cuerpos en la dirección norte-sur al descansar, pero no cuando
están cerca de líneas de alta tensión; esto ha llevado a creer a los investigadores que el
magnetismo producido es el responsable. Así como también, los seres humanos han usado
brújulas para orientarse desde el siglo XI a. C., y para la navegación desde el siglo XII.

La región por encima de la ionósfera, que se extiende varias decenas de miles de

kilómetros en el espacio, es llamada magnetósfera*, esta capa protege a la Tierra de los
rayos cósmicos que destruirían la atmósfera externa, incluyendo a la capa de ozono que
protege al planeta de la dañina radiación ultravioleta.

El campo magnético terrestre protege a la Tierra de las

*La magnetósfera
partículas cargadas provenientes del viento solar. Estas partículas que
es una capa
podrían destruir la capa de ozono que a su vez protege al planeta de
formada por la
interacción del los rayos ultravioleta. Marte es un buen ejemplar de este caso, pues el
magnetismo de la cálculo de la pérdida de dióxido de carbono de la atmósfera es
tierra y el viento consistente a la pérdida casi total de la misma, consecuencia del
solar. apagado del campo magnético del planeta.

El 3 de Junio de 2007, las cinco sondas espaciales THEMIS, de la NASA, han

descubierto una grieta en el campo magnético de la Tierra que es diez veces más grande de
lo que anteriormente se pensaba posible, hasta cuatro veces más amplia que la Tierra
misma. El viento solar puede fluir a través de esta abertura y "cargar" la magnetósfera para

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que desencadene poderosas tormentas geomagnéticas. Sin embargo, la grieta en sí misma
no es la sorpresa más grande, los físicos espaciales han creído durante mucho tiempo que
los agujeros en la magnetósfera de la Tierra se crean únicamente como respuesta a campos
magnéticos solares que apuntan hacia el Sur. Sin embargo, la gran grieta de junio de 2007
se creó como respuesta a un campo magnético solar que apuntaba hacia el Norte.

Con frecuencia la magnetósfera terrestre es impactada por erupciones solares que

provocan tormentas geomagnéticas, cuyo resultado son las auroras polares, auroras boreales
si se encuentran en el norte; y aurora austral si se encuentra en el sur.

Figura 8: (Aurora boreal)

Efectos Biológicos de los Campos Magnéticos:

Generalmente los seres vivos son buenos transportadores de electricidad debido a su
composición electrolítica, a través de las membranas celulares y los fluidos corporales intra
y extracelulares existen corrientes iónicas, especialmente en las células nerviosas a las
cuales debe estar asociado un campo magnético. Tomando en consideración que en los
sistemas biológicos existen estructuras magnéticamente influenciables, la respuesta de un
sistema biológico a un campo magnético externo depende tanto de las propiedades
magnéticas intrínsecas del sistema como de las características del campo externo y de las
propiedades del medio en el cual tiene lugar el fenómeno.

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 Experimentalmente se ha probado que en los cambios que sufren algunos
parámetros de los sistemas biológicos por la acción de los campos magnéticos influyen no
solamente la intensidad, sino también las características espaciales y temporales de dicho
campo. Dentro de este contexto es diferente el efecto de un campo estático, que produciría
una rotación de los dipolos magnéticos tendiendo a orientarlos en la dirección del campo y
restringiendo su movilidad, esto sería un efecto significativo si llegase a participar en
reacciones químicas. Por otro lado, un campo oscilante que presenta variaciones periódicas
con el tiempo y que puede inducir movimientos sobrepuestos a la oscilación en los dipolos
magnéticos moleculares, podría afectar la velocidad de las reacciones químicas
dependiendo de la amplitud, frecuencia y sentido de las variaciones del campo magnético.

Por otra parte, en los seres vivos que se desplazan en el seno de un campo
magnético como el terrestre, se induce una diferencia de potencial que puede alterar su
motilidad. Aunque el campo geomagnético es relativamente débil, efectos han sido
observados en elasmobranquios. Los tiburones y rayas poseen mecanismos basados en la
inducción electromagnética para orientarse y localizar a sus presas y que la intensidad del
campo magnético puede ser un factor limitante en la capacidad de respuesta del sujeto.
También se ha propuesto que las aves migratorias poseen un mecanismo de orientación
para la navegación basado en la generación de potenciales eléctricos inducidos
electromagnéticamente. Igualmente, se ha encontrado que algunos microorganismos,
particularmente bacterias, tienen la propiedad de orientar su movimiento en respuesta a un
campo magnético externo, estas bacterias contienen una o dos cadenas intracelulares ricas
en partículas de hierro. Asimismo, se han descrito propiedades de magnetosensibilidad para
una gran diversidad de insectos migratorios y aún en el ser humano, aunque en éste último
el hallazgo es controversial.

Por otra parte, las ondas de radio y algunos tipos de luz ultravioleta, son algunas
radiaciones no ionizantes a las que el hombre está frecuentemente expuesto. Los efectos
biológicos de las primeras están siendo determinados en la actualidad, mientras que el daño
que produce la luz ultravioleta en el ADN contribuye a la formación de dímeros de timina,
que es la lesión más frecuentemente inducida por esta radiación, por lo general estos daños
son eliminados por las células a través de mecanismos de reparación por escisión. Si las

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células expuestas no son eficientes en este tipo de reparación, el daño al ADN permanecerá
y la célula sufrirá alteraciones considerables como en el caso del Xeroderma pigmentosum
y del cáncer en la piel.

Por otro lado, radiaciones no ionizantes de frecuencia extremadamente baja como es

el caso de los campos magnéticos de 60 Hz han mostrado tener efectos sobre los sistemas
biológicos y se ha informado que éstos pueden afectar la velocidad de las reacciones y una
gran cantidad de procesos bioquímicos.

Asimismo, se ha informado que los campos electromagnéticos (CEM) tienen efectos

sobre la síntesis de ADN, ARN y proteínas, cambios en la producción de hormonas;
modificación de la respuesta inmune y en el grado de crecimiento diferenciación celular.
Adicionalmente se han obtenido evidencias experimentales que sugieren que los CEM
afectan el crecimiento y proliferación en varios tipos de células.

Se ha evaluado también el efecto de los campos eléctricos en embriones. En un

estudio, se expusieron ratones C3H/Hej machos, a un campo eléctrico de 20 kV/m de 50 Hz
de frecuencia por dos semanas. Después, cada ratón macho fue apareado con 2 hembras
diferentes cada semana durante un período de 8 semanas para que las hembras fueran
fecundadas por los ratones que habían sido expuestos al campo eléctrico y no se
encontraron alteraciones en la sobrevivencia de los embriones. Sin embargo, en otro estudio
encontraron un incremento en la frecuencia de malformaciones congénitas en niños cuyos
padres trabajaban en fuentes generadoras de alta tensión, lo cual podría indicar, efecto a
nivel genético de los CEM.

Por otra parte, es bien sabido que los CEM pueden producir una variedad de efectos
benéficos en los sistemas biológicos. Los campos magnéticos pulsantes, por ejemplo, son
usados para la reparación de fracturas óseas, Andrew y Basset, mostraron que el tejido óseo
es sensible a campos magnéticos y eléctricos de baja frecuencia. Primero se sometió al
tejido a un campo magnético variable de baja frecuencia y se detectó que en el tejido se
inducía una corriente, ya que la lectura del voltímetro se modificaba en presencia de dicho
campo. De este modo se inició el estudio de la posible utilización de campos magnéticos
para la terapia de fracturas persistentes y en algunos casos, de osteoporosis.

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 CONCLUSIÓN:
La presencia de un campo magnético es necesaria para que, en cualquier planeta, en
cualquier sistema estelar, se origine y sustente la vida. Es de ahí que toman los parámetros a
la hora de buscar vida en otros planetas. Así como también, la concurrencia de éstos es
prácticamente la base de la Tierra si se toma el ejemplo del campo magnético terrestre.

A pesar de que muchas personas creen que la electricidad está más relacionada con
la vida cotidiana, el magnetismo puede incluso ser más constante aunque no lo crean. Pero
ambas, unidas es una de las cuatro fuerzas fundamentales del universo actualmente
conocido, el Electromagnetismo.

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 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
 Electromagnetismo. En Wikipedia. Recuperado el 15 de marzo de 2019 de
https://es.wikipedia.org/wiki/Electromagnetismo .
 Electricidad. En Wikipedia. Recuperado el 26 de marzo de 2019 de
https://es.wikipedia.org/wiki/Electricidad
 NASA. (2008). Una grieta gigante en el campo magnético de la Tierra. Recuperado
el 16 de diciembre de 2008 de https://ciencia.nasa.gov/science-at-
nasa/2008/16dec_giantbreach/
 Reese, Ronald Lane. Física Universitaria Volumen II. México D.F. Primera
Edición. Editorial International Thompson Editores, S.A., 2002. ISBN: 970-686-
104-1
 Física 2. Caracas, Venezuela. Primera Edición. Editorial Santillana, 2008. ISBN:
978-980-275-912-5
 Heredia-Rojas, J., Rodríguez-Flores, L., Santoyo-Stephano, M., Castañeda-Garza,
E. y Rodríguez-De la Fuente, A. (2003). Revista de Salud Pública y Nutrición: Los
campos electromagnéticos: ¿Un problema de salud pública?. México. Facultad de
Ciencias Biológicas, Universidad Autónoma de Nuevo León.

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