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Wilhelm Dilthey, comprender el arte no es solamente reconocer sus cualidades estéticas o de belleza, sino

que es el encuentro con algo con lo que el sujeto se reconoce.


Gadamer
Para Dantas et. al., el método crítico de investigación con base en la fenomenología de Merleau-Ponty se
basa en que “el científico quiere aprender con el sujeto-colaborador que vivió o está viviendo la
experiencia que el investigador quiere estudiar”.
Dantas et. al. citando a Amatuzzi: es importante que en este tipo de investigación se adopte una posición
fenomenológica clínica, desde la cual es importante como parte del proceso exponer impresiones y
sentimientos que suceden por ambas partes, es decir, el investigador y el colaborador (buscar a Muller,
sobre la diferencia conceptual sobre la clínica).
Para Strauss, el proceso de investigación debe cumplir con tres requisitos. (1) La interpretación de los
datos es sucesiva durante todo el proceso, (2) la teoría debe ser conceptualmente densa para evitar caer en
la simplicidad y (3) el análisis de los datos debe ser lo más detallado posible para poder alcanzar la mayor
complejidad que yace en y más allá de ellos.
La reflexividad es fundamental para nuestro trabajo.
Investigación basada en la práctica.
Metacognición como Paralel Process (¿)
La investigación cualitativa y la terapia Gestalt comparten áreas de encuentro a partir de las cuales me
atrevo a afirmar que son procesos parecidos entre sí.

El dolor en la belleza, la belleza en el dolor. Más allá de la dicotomía.

Lo que salvará al mundo líquido no va a ser la belleza, sino la capacidad de atravesar el


dolor.
Dolor y belleza no son conceptos opuestos sino asociados a la capacidad mayéutica del terapeuta
de reconocer la gracia y la luminosidad que existe en el dolor del paciente.
Sufrimiento relacional.
Arraigarse en la emoción por lo que es, en la emoción que puede ser difícil, no buscar solamente
la belleza sino aceptar y atravesar el dolor es lo que, actualmente, los individuos necesitan para
arraigarse en la propia capacidad hacerlo, para fiarse del sentir corporal y emocional con la
finalidad de dejarse dirigir por eso para dar el paso siguiente.
Goodman, sobre la fe: “La fe es saber, más allá de la simple consciencia, que, si se da un paso
más, seguirá habiendo un suelo bajo nuestros pies” (PHG). Goodman define la fe como: “la
sensación de que la vida progresa y la confianza en que el mundo ha de proseguir adelante, se
llama fe”. La “fe gestáltica” es “la confianza en lo que es” y “la superación del egotismo analítico”.
De la negación de la necesidad de agresividad a la negación de la necesidad de enraizamiento
Los fármacos “quitan la posibilidad de vivir el propio ser con el otro en la plenitud de las
sensaciones y del propio papel social (o función personalidad)”.
Sentir el dolor, “es una experiencia que proporciona la sensación de enraizamiento en el propio
cuerpo y en las relaciones”.
La agresión como algo que debe controlarse (el pensamiento social que crea dicotomías).
Para Perls agresión está ligada a la energía vital de morder, que a su vez permite desarrollar la
capacidad de desestructurar la realidad con el fin de crear (o co-crear) una nueva.
Actualmente se revela una falta de sensibilidad ante su necesidad de enraizamiento.
Su experiencia está caracterizada por una falta de apoyo relacional y, como consecuencia, por una
falta de auto-apoyo. Una falta de ground de las experiencias dadas por sentado (¿a priori de la
experiencia?). Falta la contención del caos inicial, el ground relacional sobre el que la experiencia
de la novedad puede apoyarse.
“La escucha, debe ser apoyada actualmente por la escucha del propio cuerpo, desde un tipo de
sensación: como la sensación de enraizamiento, la experiencia de estar contenido y de ser fuerte
que, si hace algunas décadas se daba por descontado, actualmente ha dejado el lugar a la
experiencia de ‘liquidez’”.
“El objetivo terapéutico en la sociedad contemporánea ya no puede ser la desvinculación, o la
individuación, sino que, por el contrario, deber ser la pertenecía, el enraizamiento, la sensación
profunda de ser/estar-con”.
La perspectiva fenomenológica y estética
Definición de estética.
“Si comprendemos el proceso de figura/fondo como algo fundamentalmente percibido podemos
darnos cuenta de la fluidez o rigidez a través de sus cualidades estéticas”.
“Cada momento de la sesión terapéutica adquiere su significado a través de las cualidades estéticas
del contactar, no por las opiniones que tiene el psicoterapeuta de los criterios clínicos, culturales o
de las normas sociales”.
“Más que un juicio cognitivo, el criterio estético es una afirmación sobre ciertas cualidades que
provienen directamente de los sentidos. Estas cualidades son entre otras: la armonía, el ritmo, la
claridad, el tono, la gracia, la fluidez (Bloom, 2005)”.
“En psicoterapia de la Gestalt, este es el modo en el que ser/estar-con del terapeuta y del paciente
crea un campo en el que el cambio es posible: sosteniendo el despliegue del self en la frontera de
contacto para conseguir la realización espontánea (no con ansiedad) de la intencionalidad del
contacto inherente en cada experiencia”.
“Lejos (…) de la idea ilusoria de neutralidad, y en la óptica de la dinámica figura/fondo, pensamos
que todo tiene un significado en el campo fenomenológico en el que se produce, de modo que
incluso una vivencia personal del psicoterapeuta se incluye en los factores del campo co-creado
por paciente-terapeuta”.
El dolor como vibración
El perverso y el terapeuta: dos modos de ser sensible al dolor
“El psicoterapeuta, por el contrario (así como cualquier persona que tenga una actitud real de
ayudar al otro) se abre al “tercero”, y transmite la confianza en el suelo, que puede sostener el paso
deseoso de avanzar, con el resultado de volver a la persona autónoma y creativa, confiada en lo
que quiere ser y hacer en el mundo”.
El dolor que siempre habita en la belleza
“La plenitud de los sentidos es ‘movimiento hacia’ el otro, es la posibilidad de salir del pantano”
(en una experiencia de dolor).
“El ‘movimiento hacia’ se ha vuelto posible debido a un valor específico (…). Es el valor que
surge del sentirse plenamente, de no negar sensaciones o emociones fuertes”.
“Pero esta determinación de dar el salto solamente la puede tomar la propia persona, no se la puede
inducir nadie, es la obra maestra que la propia persona hace con su propia vida, y cada uno tiene
un estilo propio de valor. Este valor, creo, es la definición más correcta de la función yo del self”.
“(…) La confianza en la auto-regulación de la frontera de contacto que cada individuo co-crea
continuamente en las relaciones significativas”.
“Junto a su mujer Laura, a Isadore From y a Paul Goodman, (Perls) ha dado a la humanidad una
teoría nunca sospechada, del arte del movimiento con”.
El concepto de fe como paso del dolor a la belleza
Implicaciones de la ética gestáltica: también el terapeuta debe pasar del dolor propio a la
propia belleza
“La capacidad del terapeuta de ver la belleza en el paciente tiene que ver con la capacidad de ver
la belleza –y la poesía- en el propio modo de mantener el amor por el otro significativo. A pesar
del riesgo de ser herido”.
“Este atravesar el propio dolor viendo la belleza orienta al terapeuta hacia el estar en contacto con
el paciente no dependiendo de esquemas diagnósticos externos, sino dejándose guiar de la
consciencia inmediata, esto es, del estar plenamente en la frontera de contacto con el otro, para
encontrar una solución terapéutica nueva, que parta de la experiencia de la situación, y, por lo
tanto, de cómo el paciente y el terapeuta la co-creen”.
“En un enfoque fenomenológico, inversamente, el psicoterapeuta debe abrir sus propios sentidos
y utilizar su propio sentir para comprender mejor el relato del paciente”.
“Es propio de su dejarse ir hacia las sensaciones del campo fenomenológico que el terapeuta intuya
ya sea la profundidad de la emoción del paciente como las condiciones del campo fenomenológico
en la que esta tiene lugar”.
¿Hay una ética gestáltica?
“El propio terapeuta debe de superar la tentación solipsista de ver el mundo del paciente según el
esquema que se ha construido en la vida y en la profesión, y dar el salto en el vacío con fe en la
capacidad de ajuste creativo del paciente”.
“Todo esto es siempre, como los psicoterapeutas saben bien, un arte, en el que el saber y el sentir,
el contenido y la música se entrecruzan en el encuentro entre terapeuta y paciente. Solamente esto
puede dar al paciente la sensación de seguridad en la relación con el terapeuta, que se convierte en
suelo, el ground, sobre el que es posible abrirse a la intimidad de la relación terapéutica”.
“Verdaderamente me está enseñando a ser una terapeuta-persona”. Anna Fabbrini (2003-2005).
“Mantenerse vivos y llenos de sentido ante el dolor de las diferencias es una ética del
psicoterapeuta gestáltico de un modo especial”.

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