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frotamiento excesivo de los dientes entre sí en forma rítmica y que conduce al desgaste de una o
más piezas dentarias. Se puede considerar al bruxismo como el rechinamiento de dientes sin algún
objetivo específico ya que esto se da espontáneamente de parte de la persona que lo realiza, este
rechinar no es un trastorno peligroso pero si puede llegar a causar lesiones permanentes en los
dientes. Este es un fenómeno de salud que a pesar de su alta prevalencia en el mundo y las múltiples
investigaciones realizadas en correspondencia con el tema, existen vacíos que apuntan hacia el
diagnóstico y tratamiento terapéutico, debido a su carácter multifactorial, el cual debe ser valorado
por el profesional para poder elegir el método más adecuado para los pacientes que padecen de esta
afección. Teniendo esto en cuenta, podemos tener un panorama definido de lo que es el bruxismo
para así introducirnos al tema y ver detalladamente cada aspecto de este trastorno.
A lo largo del tiempo se han formulado varias teorías de cómo se desarrolla el bruxismo, pero
ninguna de ellas ha sido confirmada o negada por ello se considera de carácter multifactorial.
Muchos expertos en dicho tema han encontrado dos formas en los cuales se podrían dar el
bruxismo; una de ellas dice que podría ser por anormalidades en la anatomía orofacial en la mal
posición de la dentadura en el momento de una mordedura. Otra seria los factores psicológicos, en
este abarca lo que es el estrés cuando estamos bajo alguna presión en el trabajo o el hogar y otro
factor es el sueño, este es importante ya que nos ayuda para nuestro bienestar diario y este conlleva
a la disminución del estrés. El bruxismo se da en cualquier momento del día como en la noche; en
el día este puede ser más apretador que rechinador, en cualquier actividad que uno está realizando
relacionarse con otras manías como comerse la uñas y morderse los labios.
Apretar los dientes puede realizar presión sobre los músculos, tejidos y otras estructuras cerca de
(ATM). Los síntomas implican: Ansiedad, estrés, tensión, depresión, dolor de oído (debido en
parte a que las estructuras de la articulación temporomandibular están muy cerca del conducto
auditivo externo ya que se puede percibir dolor en un lugar diferente de su fuente, lo cual se
denomina dolor referido), trastornos alimentarios, dolor de cabeza, sensibilidad a las cosas
calientes, frías o dulces en los dientes, insomnio, dolor o inflamación de la mandíbula. Por medio
de un estudio es posible apartar otros trastornos que pueden producir un dolor mandibular o un
dolor de oído similares, conteniendo trastornos del oído como infecciones del oído, disfunción de
de estrés y tensión específicos que determinen de alguna manera que hay relación con el trastorno
del bruxismo.
A lo largo del tiempo se han utilizado diferentes métodos para evaluar el bruxismo; los métodos
más utilizados en odontología son los cuestionarios, examen clínico, evaluación del desgaste en el
guarda oclusal y también existen otras opciones que podrían introducirse en la práctica dental como
la detección de la fuerza oclusal y el uso de la electromiografía. Otro método para tratar el bruxismo
sería la férula o guarda oclusal que trata el síntoma y no la causa. Es el tratamiento por tradición y
más comúnmente implementado por los odontólogos generales. El paciente la utiliza de día, de
noche o todo el día en los casos de bruxismo intenso. Puede ser confeccionada de acrílico o de un
material más liviano como la silicona para mayor comodidad en los pacientes. Una forma más de
poder controlar el bruxismo, es mediante el uso de la relajación, una persona que se siente estresada
por algún problema del trabajo u hogar, puede asistir a salas donde dan masajes completos de
sonidos de pájaros o naturaleza, técnicas orientales como el yoga y la acupuntura; poniendo esto
en práctica se tendrá como resultado la relajación para así controlar de forma más natural los
síntomas del bruxismo y elevar el porcentaje de efectividad a la hora del tratamiento para mejorar
la calidad de vida del paciente ya que este es un fenómeno bastante incómodo y estos métodos
Los tratamientos mencionados de una u otra manera ayudan a la prevención del bruxismo, ya que
no se ha identificado el origen, ni una cura eficaz para la enfermedad. Los objetivos del tratamiento
son reducir el dolor, prevenir el daño dental permanente y disminuir el rechinamiento de los dientes
todo lo que se pueda. Esta enfermedad aún no ha sido identificada su origen pero muchos estudios
revelan que provienen del estrés de la persona o la mal posición dentaria, para esto es indispensable
visitar al odontólogo, quien podrá proporcionar métodos o tratamientos adecuados para prevenir el
desgaste dental.
Para lograr un resultado eficaz a la hora de tratar el bruxismo es muy importante que el paciente
sepa manejar su estado mental ya que desde ahí se parte para alcanzar resultados mejores, todo va
desde la parte psicológica para manejar la tensión y el estrés y de paso se pueden implementar mas
técnicas que son determinadas por el profesional, todo desde un análisis y evaluación médica para
saber el paso siguiente en el tratamiento, todo esto aplica para niños, jóvenes y adultos ya que una
que puedan ser aplicados a la práctica dental, una norma que permita determinar si el paciente con
desgaste dental padece de una patología de carácter involuntario, como el bruxismo, o si se trata
etiología diversa incluida la iatrógena y otras. Todo el avance en los tratamientos para mejorar el
bruxismo depende mayormente de la persistencia del paciente, de ello depende el éxito a la hora
- El bruxismo es una enfermedad dentaria o psicológica que afecta a niños, adultos y ancianos
- El bruxismo se puede tratar pero no hay una cura que termine con este fenómeno por
completo, los métodos que existen para el tratamiento son variados y el más común es el
generalizada para el diagnóstico, manejo y control del bruxismo de tipo diurno y nocturno.
- El estrés es la mayor causa del bruxismo según variados estudios que determinan que este
BIBLIOGRAFIA
- Bruxismo y desgaste dental. Emilce Mayela González Soto. Elías Omar Midobuche Pozos.
José L Castellanos. 2015.