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Manejo y seguimiento

del niño diabético


J. Rodríguez Contreras*,
I. González Casado**
*Médico Adjunto. Servicio de Endocrinología Pediátrica, Hospital
Universitario La Paz, Madrid. **Jefe de Sección. Servicio de
Endocrinología Pediátrica, Hospital Universitario La Paz, Madrid

Resumen Abstract
La diabetes mellitus (DM) se caracteriza por Diabetes mellitus (DM) is characterized by
hiperglucemia crónica y su causa fundamental en persistent hyperglycemia. During childhood and
la edad pediátrica es el déficit de insulina en el adolescence it is mostly due to type 1 DM, with
contexto de una DM de tipo autoinmune. Su adecuado insulin deficiency.
tratamiento y seguimiento pueden evitar o retrasar la In type 1 DM pancreatic beta cells are destroyed
aparición de complicaciones. through an autoimmune mechanism, in
En la DM tipo 1, se produce destrucción de las which several factors (genetic, environmental,
células beta-pancreáticas a través de un mecanismo immunity, beta cell) are involved.
autoinmune en el que se implican factores de Classical presentation consists in polyuria,
predisposición genética, factores ambientales, del polydipsia and weight lose, but it is not
sistema inmune y de la célula beta. always so evident. In order to prevent clinical
La clínica clásica al debut consiste en: poliuria, progression to ketoacidosis, it is important to
polidipsia y pérdida de peso, pero el cuadro clínico no suspect this diagnosis when first symptoms
siempre es tan evidente. Es fundamental la sospecha appear.
diagnóstica precoz ante los primeros síntomas para Diagnosis of DM is established in the presence
evitar la progresión a cetoacidosis. of typical symptoms and plasma glucose of ≥
La DM se diagnostica en presencia de síntomas típicos 200 mg/dL, or in asymptomatic patients with
con glucemia plasmática ≥ 200 mg/dL, o en ausencia repeated measurements of: fasting plasma
de síntomas, con medidas repetidas de: glucemia en glucose ≥ 126 mg/dL, plasma glucose ≥ 200
ayunas ≥ 126 mg/dL, glucemia tras 2 horas de una mg/dL two hours after an oral glucose tolerance
sobrecarga oral de glucosa ≥ 200 mg/dL, o HbA1c ≥ test or HbA1c ≥ 6,5%.
6,5%. In order to exclude other DM types different
Para distinguir la DM tipo 1 de otros tipos de DM es from DM type 1, it is necessary to evaluate the
preciso valorar la presencia de: autoanticuerpos, la presence of autoantibodies, age of presentation,
edad al debut, el patrón de herencia, la tendencia a inheritance pattern, presence of ketosis, obesity
cetosis, la presencia de obesidad y acantosis nigricans and/or acantosis nigricans and presence of stress
y la presencia de factores de estrés o fármacos factors or drugs.
hiperglucemiantes. In order to successfully reach mayor outcomes
Para alcanzar los objetivos de crecimiento adecuado, such as correct growth, good quality of life
buena calidad de vida y el menor riesgo posible de and the lowest risk of complications, it will be
complicaciones, serán fundamentales la administración important to assure: insulin administration,
de insulina, el control de la alimentación, el ejercicio food intake control, physical exercise, glucose
físico, la monitorización de la glucemia, la educación monitoring, diabetologic education, motivation,
diabetológica, la motivación, el reciclaje periódico y el periodical reassessment and screening of
cribado de comorbilidades y complicaciones. comorbilities and complications.

Palabras clave: Diabetes mellitus; Hiperglucemia; Insulina, Niño.


Key words: Diabetes mellitus; Hyperglycemia; Insulin; Child.

Pediatr Integral 2015; XIX (7): 456 – 466

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Manejo y seguimiento del niño diabético

Introducción, definición y Tabla I. Otros tipos de DM(2)


les donde las tasas ya eran altas. Han
clasificación aumentado, especialmente los casos en
- Defectos monogénicos de la menores de 5 años de edad. Existen
La diabetes mellitus (DM) se caracte-
célula beta (p. ej., MODY) variaciones estacionales bien descri-
riza por hiperglucemia crónica y su causa - Causas genéticas de resistencia tas en la incidencia de nuevos casos,
fundamental, en la edad pediátrica, es el a insulina (p. ej., Sd. Rabson- sobre todo en meses de invierno, pero
Mendenhall)
déficit de insulina en el contexto de una algunos trabajos describen las mayores
DM de tipo autoinmune. Su adecuado - Patologías del páncreas exocrino tasas en meses cálidos, o con variacio-
(p. ej., fibrosis quística)
tratamiento y seguimiento pueden evitar nes interanuales(1). Asimismo, tradi-
o retrasar la aparición de complicaciones. - Endocrinopatías con exceso de cionalmente se ha establecido un gra-
hormonas contrarreguladoras
diente de incidencia norte-sur (mayor
(p. ej., Sd. Cushing)
El término diabetes mellitus (DM) incidencia a mayor latitud), que dentro
- DM secundaria a fármacos
hace referencia al trastorno metabólico de España no parece cumplirse(11).
(p. ej., glucocorticoides)
caracterizado por hiperglucemia cró-
- Síndromes genéticos que
nica como resultado de la alteración de incluyen la DM como parte de su Fisiopatología
la secreción de insulina, de la disminu- espectro fenotípico (p. ej., Sd.
ción del efecto de la misma a nivel tisu- Wolfram) En la DM tipo 1, se produce destruc-
lar o de ambas situaciones de manera ción de las células beta-pancreáticas a tra-
simultánea(1). Aunque las causas pue- vés de un mecanismo autoinmune, en el
den ser muy diversas, la inmensa mayo- Realizar un diagnóstico precoz e que se implican factores de predisposición
ría de los pacientes se incluyen dentro instaurar un tratamiento y seguimiento genética, factores ambientales, del sistema
de dos grandes categorías: la DM tipo correctos a largo plazo son labores fun- inmune y de la célula beta.
1, caracterizada por un déficit abso- damentales, por un lado para evitar la
luto de secreción de insulina con una morbilidad aguda (cetoacidosis diabé- La DM tipo 1 implica una defi-
base fundamentalmente autoinmune; tica, potencialmente letal), y por otro ciencia parcial o absoluta (más fre-
y la DM tipo 2, en la que se combinan lado para prevenir, retrasar o tratar pre- cuente) de insulina debida a la des-
la resistencia a la acción de la insulina cozmente las complicaciones crónicas trucción crónica de las células beta del
y una respuesta secretora de insulina (micro y macrovasculares, psicológicas, páncreas, a través de un mecanismo
compensadora que resulta insuficiente, cutáneas, patologías autoinmunes aso- inmunológico. Como en otras enfer-
es decir, una deficiencia relativa de ciadas), influyendo así positivamente medades de base autoinmune, se acepta
insulina(1). Otros tipos menos frecuen- sobre la morbimortalidad(6-9). una etiología multifactorial, con pre-
tes de DM se muestran en la tabla I. sencia de una predisposición genética
Cada una de dichas causas menos clá- Epidemiología sobre la que algún factor ambiental
sicas de DM tiene su fisiopatología y desencadena una respuesta autolesiva
manejo específicos, que exceden a los A nivel mundial, se estima que, del propio sistema inmunitario sobre
objetivos de la presente revisión. del total de la población menor de 15 la célula beta, sin haber sido posible
La DM tipo 2 en niños y adoles- años (1.800 millones de personas), el explicar con detalle hasta el momento
centes es un fenómeno de creciente 0,02% padece DM tipo 1, es decir, de qué manera exacta influyen cada uno
preocupación sanitaria, secundario unos 500.000 niños alrededor del de estos factores(1,2). Este proceso de
a la epidemia aún más alarmante mundo, con una incidencia estimada destrucción es progresivo (Tabla II). La
de obesidad a nivel mundial en este de 80.000 nuevos casos cada año(10). clínica comienza a aparecer cuando se
grupo de edad(3). Aunque muy proba- Existen importantes diferencias epi- han destruido aproximadamente el 90%
blemente aumentará en los próximos demiológicas según el área geográfica, de las células beta. La autoinmunidad
años, la realidad actual indica que la justificadas en parte por la frecuencia se demuestra en la práctica totalidad de
prevalencia de DM tipo 2 en niños y de los distintos genotipos de predispo- los casos (DM tipo 1A) a través de la
adolescentes en nuestro medio es, de sición(1). En nuestro país, la prevalencia detección de autoanticuerpos(1,2).
momento, muy baja en comparación de DM tipo 1 varía según las regio- Los autoanticuerpos más común-
con la de DM tipo 1(4,5). La DM tipo nes entre el 0,01% y el 0,15%(11). Asi- mente analizados en la práctica clínica
1 sigue siendo la causa más frecuente mismo, las tasas de incidencia son de son los dirigidos: contra la insulina
de DM entre niños y adolescentes en entre 11,5/100.000 hab./año (Asturias) (IAA), contra la descarboxilasa del
países occidentales (cerca del 90% de y 27,6/100.000 hab./año (Castilla-La ácido glutámico (anti-GAD), contra
los casos en edad pediátrica), a pesar de Mancha), estimándose una incidencia el antígeno de insulinoma tirosinfos-
que solo supone un 5-10% de los casos media en España de 17,7/100.000 hab./ fatasa-like (anti-IA2) y contra células
de DM en el global de la población año(11). Las tasas de incidencia han ido del islote (anti-ICA)(12). Existen otros
(niños y adultos)(1,2). Por todo ello, a lo aumentando en las últimas décadas y autoanticuerpos implicados, alguno
largo de este artículo, nos centraremos continúan en ascenso, sobre todo en de relevancia demostrada, pero de uso
casi exclusivamente en lo que se refiere países emergentes y en vías de desarro- poco extendido aún (como es el diri-
a la atención del paciente pediátrico llo, habiendo alcanzado una meseta en gido contra el transportador 8 de Zinc
con DM tipo 1. los últimos años en países occidenta- o anti-ZnT8), otros todavía con escasa

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Manejo y seguimiento del niño diabético

Tabla II. Fases de la DM tipo 1(13)


y síntomas del debut de DM tipo 1,
siguiendo una serie de fases (Tabla II).
1. Autoinmunidad, normalidad glucémica, ausencia de síntomas El objetivo fundamental en este punto
2. Autoinmunidad, alteración de la glucemia sin cifras de diabetes (AGA o ATG), consiste en el diagnóstico precoz ante la
ausencia de síntomas aparición de los primeros síntomas, evi-
3. Autoinmunidad, alteración de la glucemia con cifras de diabetes, ausencia de tando la evolución del cuadro hacia una
síntomas cetoacidosis diabética, potencialmente
4. Inicio de síntomas de DM tipo 1 muy grave e incluso fatal sin el ade-
5. DM tipo 1 establecida cuado tratamiento (Tabla III). A nivel
6. DM tipo 1 establecida, con complicaciones mundial, hasta el 80% de los menores
de 15 años que debutan con una DM
AGA: alteración de la glucemia en ayunas; ATG: alteración de la tolerancia a la glucosa tipo 1 lo hacen en forma de cetoacido-
tras prueba de sobrecarga oral de glucosa. sis(10). En España, la cetoacidosis como
forma de debut en este grupo de edad se
estima entre el 25-40%, siendo incluso
validación y, probablemente, otros aún Independientemente de la causa, la mayor del 50% entre los menores de
desconocidos(12). deficiencia de insulina y la consiguiente 4 años(11). Para lograr disminuir estas
Existen más de 60 variantes genéti- disminución de la glucosa intracelular tasas, es necesario sospechar el diag-
cas asociadas con una mayor predispo- pondrán en marcha mecanismos des- nóstico ante la aparición de los prime-
sición a padecer DM tipo 1. La mitad tinados a aumentar aún más la gluce- ros signos y síntomas. La presentación
de dicho riesgo se establece por deter- mia y a formar cuerpos cetónicos como clínica clásica consiste en: poliuria,
minadas combinaciones de alelos del combustible alternativo. Los cuerpos nicturia, polidipsia y pérdida de peso
complejo mayor de histocompatibilidad cetónicos, por su carácter ácido, dismi- de varias semanas de evolución (13),
(HLA) tipo DR y DQ. En cualquier nuyen el pH, y el proceso desemboca pero no siempre resulta tan evidente.
caso, menos del 10% de los portadores en una cetoacidosis diabética (Fig. 1). En muchas ocasiones, el cuadro clínico
de genotipo HLA de alto riesgo desa- inicial resulta más inespecífico y puede
rrollarán la enfermedad(1,13). Clínica pasar desapercibido o confundirse con
Los factores ambientales desenca- otras patologías benignas (Tabla III).
denantes de la respuesta autoinmune La clínica clásica al debut consiste Hay niños en los que la evolución a
son desconocidos. Se discute acerca en poliuria, polidipsia y pérdida de peso, cetoacidosis es muy rápida (sobre todo,
de la posible inf luencia de factores pero el cuadro clínico no siempre es tan los menores de 2 años), y otros en los
infecciosos (p. ej., rubéola, enterovi- evidente. Es fundamental la sospecha diag- que los síntomas iniciales pueden pro-
rus), antígenos alimentarios (p. ej., nóstica precoz ante los primeros síntomas longarse durante meses, empeorando
proteína de leche de vaca, gluten, para evitar la progresión a cetoacidosis. lentamente. Otra medida útil para
metabolismo de la vitamina D), etc., disminuir la frecuencia de cetoacido-
sin que de momento se disponga de Como ya hemos comentado, la des- sis al debut consiste en informar a la
datos suficientes para poder realizar trucción progresiva de las células beta población de los síntomas asociados,
afirmaciones indiscutibles(1,13). dará lugar a la aparición de los signos con campañas de concienciación, para

Déficit de insulina: ↓ Entrada de glucosa al interior celular ↓ Gasto de glucosa


• Absoluto: debut, omisión
de dosis de insulina
• Relativo: infección, estrés…
↑ Hormonas contrarreguladoras
↑↑↑ Hiperglucemia

↑ Glucogenolisis
↑ Glucosuria

↑ Proteolisis ↑ Sustratos de neoglucogénesis


↑ Diuresis y
deshidratación

↑ Lipolisis ↑ Glicerol
↑ Ácido láctico
Figura 1.
Fisiopatología de
la cetoacidosis
↑ Ácidos grasos libres ↑ Cuerpos cetónicos ↑↑ Acidosis
diabética(6).

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Manejo y seguimiento del niño diabético

que consulten precozmente ante la apa- cifra elevada de glucosa, debe deri- Las alteraciones persistentes de la
rición de los mismos(14). varse al paciente de manera urgente glucosa en ayunas o tras SOG o de la
a un centro con experiencia en este HbA1c que no llegan al umbral de los
Diagnóstico campo para confirmar el diagnóstico criterios diagnósticos de DM constitu-
y comenzar tratamiento lo antes posi- yen la situación de “prediabetes”. Nos
La DM se diagnostica en presencia de ble, sobre todo, si asocia elevación de referimos a: la alteración de la glucemia
síntomas típicos con glucemia plasmática ≥ cetonemia o cetonuria, ya sea porque en ayunas (AGA: 100-125 mg/dL), la
200 mg/dL, o en ausencia de síntomas con ya haya aparecido una cetoacidosis o alteración de la tolerancia a la glucosa
medidas repetidas de: glucemia en ayunas para prevenir su aparición(1,13). Para la (ATG) definida por glucemia de 140-
≥ 126 mg/dL, glucemia tras 2 horas de una confirmación diagnóstica, las determi- 199 mg/dL a las 2 horas tras SOG, y
sobrecarga oral de glucosa ≥ 200 mg/dL o naciones de glucosa deben realizarse en la HbA1c de 5,7-6,4%. Estas situacio-
HbA1c ≥ 6,5%. plasma mediante un sistema de labora- nes poseen gran interés, pues implican
torio basado en el método de la glucosa un riesgo incrementado de evolución
Ante la aparición de síntomas oxidasa(13). También es posible llegar a a diabetes. Este riesgo es continuo,
sugestivos de DM, debe realizarse un diagnóstico de DM sin la presencia extendiéndose más allá de los límites
la medición de glucemia capilar, así de síntomas típicos, habitualmente tras inferiores de los rangos mencionados,
como evaluar la presencia de cuerpos el hallazgo casual de alteraciones de y aumenta exponencialmente cerca del
cetónicos (de manera ideal cetonemia la glucosa en analíticas solicitadas por límite superior de los rangos(2).
capilar, y si no hay disponibilidad, otro motivo. Los criterios que deben Ante una descompensación hiper-
cetonuria mediante tira reactiva de cumplirse para establecer el diagnós- glucémica aguda, independientemente
orina). Si de este modo se detecta una tico de DM se exponen en la tabla IV. de si se trata del debut de la enferme-
dad, de omisión de insulina en el dia-
bético conocido, de situación de estrés
Tabla III. Características clínicas del debut de DM tipo 1(13). metabólico (fiebre, enfermedad…)
Signos y síntomas iniciales en el debut (cetoacidosis diabética probablemente no
con déficit relativo de insulina, etc.,
establecida): puede desembocarse en una situación
- Poliuria, nicturia y polidipsia de poco tiempo de evolución de cetoacidosis diabética (Fig. 1). La
- Enuresis de reciente aparición en un niño continente, que puede pasar clínica se describe en la tabla III y
desapercibida como ITU el diagnóstico se establece según los
- Candidiasis vaginal, especialmente en niñas prepuberales siguientes criterios bioquímicos(6):
- Pérdida de peso crónica o fallo de medro
• Hiperglucemia > 200 mg/dL.
- Irritabilidad y disminución del rendimiento escolar
- Infecciones cutáneas recurrentes
• pH < 7,30 o bicarbonato < 15
mmol/L.
Signos y síntomas de debut que requieren actuación urgente (cetoacidosis • Cetonemia y cetonuria positivas.
diabética probablemente establecida):
- Deshidratación moderada o grave
- Vómitos frecuentes y en algunos casos dolor abdominal, que puede confundirse Diagnóstico diferencial
con GEA
- Poliuria continua, a pesar de la deshidratación Para distinguir la DM tipo 1 de otros
- Pérdida de peso debida a pérdida de líquido, masa muscular y masa grasa tipos de DM, es preciso valorar: la presen-
- Rubor facial debido a cetoacidosis cia de autoanticuerpos, la edad al debut, el
- Aliento con olor a acetona patrón de herencia, la tendencia a cetosis,
- Hiperventilación de la cetoacidosis diabética (Kussmaul), caracterizada por
la presencia de obesidad y acantosis nigri-
aumento de la frecuencia y del volumen corriente en cada respiración, similar a
cans y la presencia de factores de estrés o
una respiración continua de tipo “suspiro”
- Alteración sensorial (desorientación, disminución de conciencia o rara vez coma) fármacos hiperglucemiantes.
- Shock (taquicardia, mala perfusión periférica con cianosis periférica)
- Hipotensión (signo muy tardío y raro en niños con cetoacidosis diabética) Una vez establecido el diagnóstico
Dificultades diagnósticas que pueden retrasar el diagnóstico: de DM, la confirmación DM tipo 1
- Niños muy pequeños pueden debutar como cetoacidosis grave debido a una más vendrá determinada por la presencia de
rápida evolución del déficit de insulina en ellos, y porque el diagnóstico suele autoanticuerpos (DM tipo 1A). Para
considerarse más tarde que en otras edades ayudar a distinguir entre DM tipo 1
- La hiperventilación de la cetoacidosis puede confundirse con neumonía o
y otros tipos de DM, se ref lejan las
broncoespasmo (la tos, disnea e hipoventilación típicas de estas entidades
pueden distinguirlas de la cetoacidosis) características diferenciales principales
- El dolor abdominal asociado a cetoacidosis puede similar un abdomen agudo y en la tabla V.
ser referido al cirujano Debe plantearse la posibilidad de
- La poliuria y enuresis pueden confundirse con ITU una DM distinta a la tipo 1 en el niño
- La polidipsia con frecuencia puede ser considerada psicógena en el que no se detectan autoanticuer-
- Los vómitos pueden confundirse con un cuadro de GEA pos y asocia(1):
GEA: gastroenteritis aguda; ITU: infección del tracto urinario.
• Historia familiar autosómica domi-
nante de DM.

PEDIATRÍA INTEGRAL 459


Manejo y seguimiento del niño diabético

Tabla IV. Criterios diagnósticos de DM (ADA 2014, ISPAD 2014) (1,2)*

1. En presencia de síntomas clásicos de hiperglucemia, una glucemia ≥ 200 mg/dL en cualquier momento del día,
independientemente del tiempo tras la última ingesta
2. Glucemia en ayunas ≥ 126 mg/dL**
- Implica ausencia de ingesta calórica previa de, al menos, 8 horas
3. Glucemia 2 horas después de una prueba de sobrecarga oral de glucosa (SOG) o después de una comida ≥ 200 mg/dL**
- La SOG debe realizarse con una dosis de 1,75 g/kg de glucosa anhidra (máximo 75 g) disuelta en agua. La SOG debe evitarse
en caso de síntomas de DM o si se puede realizar el diagnóstico mediante el resto de criterios, ya que podría conducir a una
excesiva hiperglucemia(1)
4. HbA1c ≥ 6.5%**
- Esta determinación debe llevarse a cabo en un laboratorio que utilice un método que cumpla estrictamente una serie de
criterios de certificación y estandarización establecidos(1,2). Los aparatos de medición de HbA1c “de la consulta” no se
consideran lo suficientemente exactos como para usar sus mediciones como criterio diagnóstico(2). El papel de la HbA1c
como criterio diagnóstico en niños no está aclarado por completo(1)

*Estos criterios no son exclusivos de la DM tipo 1; son criterios diagnósticos de DM en general.


**En ausencia de hiperglucemia inequívoca, los criterios 2,3 y 4 deben ser confirmados por segunda vez en días diferentes. También
se confirma el diagnóstico si se cumplen dos criterios diferentes(1,2).

• Diagnóstico de DM en los prime- • Patología asociada: sordera, atrof ia Debe realizarse estudio genético
ros 6 meses de vida. óptica o rasgos sindrómicos. de DM monogénicas en todo paciente
• Hiperglucemia en ayunas (100–150 • Uso de fármacos tóxicos para la menor de 6 meses con DM, ya que la
mg/dL) que no progresa, sobre todo célula beta o causantes de resis- DM tipo 1 es muy rara en este grupo
en pacientes jóvenes, no obesos y tencia a insulina. de edad(1).
asintomáticos. En el caso de hiperglucemia detec-
tada en el contexto de estrés (infección
aguda, trauma, cirugía, distrés respi-
Tabla V. Características clínicas de DM tipo 1, DM tipo 2 y DM monogénicas en
niños y adolescentes(2)
ratorio, fallo hemodinámico, etc.), esta
puede ser transitoria y requiere trata-
DM tipo 1 DM tipo 2 DM monogénicas miento, pero no debe ser considerada
Poligénica Poligénica Monogénica
como diagnóstico de DM(1).
Genética
Aunque la DM tipo 2 en la edad
Edad de debut 6 meses-adulto Pubertad o Habitualmente pediátrica sea aún infrecuente en nues-
habitual joven posterior postpuberal, salvo tro medio, resulta interesante tener en
GCK (MODY2) y cuenta que, debido a la alta prevalencia
DM neonatal
de obesidad entre la población general,
Clínica al debut Habitualmente Variable: desde Variable (puede ser un porcentaje significativo de pacientes
aguda, lenta, leve, un hallazgo casual con DM tipo 1 padece obesidad, aso-
rápida insidiosa a en GCK) ciando con frecuencia un componente
grave de resistencia a la insulina que puede
Asociación con: dificultar su manejo(1).
Cuando la presentación clínica
Autoinmunidad Sí No No es la típica de DM tipo 1, con insu-
Cetosis Frecuente Infrecuente Frecuente en DM
linopenia permanente y propensión a
neonatal, raro en cetoacidosis, pero no se logra demos-
otras. trar la presencia de autoanticuerpos ni
se demuestra otra etiología, se habla de
Obesidad Igual que en la Mayor Igual que en la
DM tipo 1B (a diferencia del tipo 1A,
población frecuencia población
cuando sí se detectan autoanticuerpos)
Acantosis nigricans No Sí No (2). Si bien, está aceptado este subtipo
de DM, más frecuente en África y
Frecuencia (% de Habitualmente Mayoría de 1-4%
DM en edad >90% países < 10%
Asia, es posible que algunos diagnós-
pediátrica) (En Japón 60- ticos de DM tipo 1B de nuestro medio
80%) se establezcan por limitaciones técni-
cas de los laboratorios para determinar
Progenitor con DM 2-4% 80% 90% algunos autoanticuerpos, así como al
DM: diabetes mellitus; GCK: glucokinasa; MODY: Maturity Onset Diabetes of the Young.
probable desconocimiento aún de algu-
nos autoanticuerpos implicados(1,2).

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Manejo y seguimiento del niño diabético

Manejo: tratamiento y necesaria a los niños y a sus familias grave y cetonemia necesita insulina
seguimiento para ser competentes en el autocuidado para resolver la descompensación meta-
y mantener su motivación a lo largo de bólica(1,17). En situación de cetoacido-
Para alcanzar los objetivos de creci-
la infancia y adolescencia, permitién- sis grave, el tratamiento debe realizarse
miento adecuado, buena calidad de vida y doles así, llegar a convertirse en adultos inicialmente con insulina intravenosa
el menor riesgo posible de complicaciones, independientes y saludables(8,15-19). en una unidad de cuidados intensivos(6).
serán fundamentales: la administración de El manejo de los niños y adoles- El tratamiento de mantenimiento
insulina, el control de la alimentación, el centes con DM tipo 1 debe realizarse con insulina pretende imitar en lo posi-
ejercicio físico, la monitorización de la desde unidades especializadas multi- ble la secreción fisiológica de insulina
glucemia, la educación diabetológica, la disciplinares, en hospitales de referen- por el páncreas, aunque aún no se ha
motivación, el reciclaje periódico y el cri- cia para esta patología, con disponibili- logrado una sustitución perfecta y
bado de comorbilidades y complicaciones. dad de los recursos humanos (pediatras equivalente. Las pautas de insulinote-
diabetólogos, educadores en diabetes, rapia más aceptadas son las basal-bolus.
La situación de cetoacidosis dia- nutricionista, psicólogo, trabajador Cuando administramos insulina, la
bética es una urgencia médica que social), recursos materiales y tecno- administramos con los siguientes
requiere tratamiento inmediato en un lógicos necesarios(15,20). Se han esta- objetivos:
centro de referencia con disponibilidad blecido y publicado recientemente los • Insulina basal: su objetivo es
de UCI pediátrica y cuyos objetivos requisitos mínimos para poder consti- remedar en lo posible la continua
son: corregir la deshidratación, corregir tuir un centro de referencia(20). Debe secreción pancreática de pequeñas
la acidosis, revertir la cetosis y corre- existir facilidad para la comunicación cantidades de insulina durante las
gir lentamente la hiperosmolalidad y con el resto de ámbitos del área corres- 24 horas del día.
la hiperglucemia. Si la cetoacidosis pondiente (atención primaria, hospital • Bolo comida: trata de compensar y
no ocurre en el contexto de un debut secundario, colegios), trabajando así en evitar el ascenso de la glucemia tras
diabético, es fundamental investigar y equipo por un mismo objetivo(15,20). El la ingesta.
corregir la causa precipitante(6). paciente y su familia deben ser conside- • Bolo corrector: pretende corregir
El objetivo último del manejo del rados los agentes centrales del equipo una cifra elevada de glucemia y
niño con DM a largo plazo consiste multidisciplinar(15). llevarla a un nivel normal.
en lograr un desarrollo y crecimiento
adecuados, una buena calidad de vida y Insulinoterapia Los tipos de insulina de los que
el menor riesgo posible de complicacio- El tratamiento con insulina es disponemos en la actualidad se mues-
nes agudas y crónicas. Para acercarnos imprescindible en la DM tipo 1 y debe tran en la tabla VI.
a este objetivo último, será necesario iniciarse tan pronto como se realice el Existen dos métodos para adminis-
conseguir el mejor control glucémico diagnóstico para prevenir o tratar una trar una pauta basal-bolus de insulina:
posible, el cual se asocia con una menor posible descompensación. Aunque aún 1. Múltiples dosis de insulina (MDI)
frecuencia de complicaciones. Para no se haya demostrado la autoinmuni- subcutánea: la insulina se admi-
mejorar dicho control glucémico, dis- dad, cualquier niño con hiperglucemia nistra mediante inyección sub-
ponemos de tres herramientas modifi-
cadoras por sí mismas del nivel de glu-
cemia, pilares clásicos del tratamiento Tabla VI. Tipos de insulina más comúnmente utilizados en nuestro medio, y perfiles
de la DM: la administración de insu- de acción según los fabricantes
lina, el control de la alimentación y el
ejercicio físico. Pero, para poder utili- Tipo de insulina Inicio de Pico de Duración
acción acción (h) (h)
zar estas herramientas, es imprescindi-
ble conocer de manera muy frecuente el AAR Aspart (Novorapid ®), 10-20 1-3 h 3-5 h
nivel de glucemia (monitorización de Lispro (Humalog ®), min
la glucemia), aprender cómo se aplican Glulisina (Apidra ®)
dichas herramientas y cómo funciona Insulina Insulina regular 30-60 2-4 h 5-8 h
la enfermedad (educación diabetoló- regular (Actrapid ®, Humulina min
gica) y mantener en el tiempo el inte- regular ®)
rés del paciente y cuidadores (moti- Insulina de NPH 2-4 h 4-12 h 12-24 h
vación). También es importante el acción
cribado rutinario de comorbilidades intermedia
o complicaciones incipientes, así como
AAL Detemir (Levemir ®) 1-2 6-12 h 20-24 h
la evaluación y reciclaje periódicos de
todos estos aspectos mencionados. Por Glargina (Lantus ®) 2-4 No 24 h*
tanto, podemos decir que el manejo del
paciente con DM tipo 1 no consiste sin AAR: análogos de acción rápida; AAL: análogos de acción lenta; NPH: insulina
Protamina Neutra de Hagedorn.
más en un tratamiento farmacológico *Puede durar menos de 24 horas.
con insulina, sino en facilitar la ayuda

PEDIATRÍA INTEGRAL 461


Manejo y seguimiento del niño diabético

cutánea de dos tipos de insulina. la insulina a través de un catéter. pacientes, y también cambian en cada
Como insulina basal se utiliza, en El recambio de la cánula se realiza paciente con el tiempo. Por todo ello,
la mayoría de los casos, un análogo cada 3 días habitualmente, aunque es necesario revisar y reajustar la pauta
de acción lenta (AAL): detemir algunos pacientes necesitan cam- de insulinoterapia con frecuencia. El
(Levemir®) o glargina (Lantus®). biarlo antes. Solo utiliza un tipo objetivo último es proporcionar al
Por el perfil de pico de acción y de insulina (normalmente AAR). paciente y/o a sus cuidadores las herra-
vida media muy poco fisiológico Logra el efecto de insulina basal mientas y conocimientos necesarios
de la insulina NPH, prácticamente con una infusión continua de insu- para que ellos mismos sean capaces
no se utiliza en la actualidad salvo lina a un ritmo muy bajo, y el efecto de realizar ajustes de la pauta de insu-
casos excepcionales, sobre todo de los bolos comida y correctores lina de manera segura y eficaz. Para
en niños muy pequeños. Para los con infusiones rápidas de mayor ello, es necesario un entrenamiento
bolos comida y bolos correctores se cantidad. Con una buena selección exhaustivo y periódico, con revisiones
utilizan análogos de acción rápida de los pacientes puede aportar ven- frecuentes(17).
(AAR): aspart (Novorapid®), lispro tajas sobre MDI: menor frecuen- Una herramienta útil para el cál-
(Humalog®) o glulisina (Apidra®). cia de pinchazos, remeda mejor la culo de los bolos de insulina son los
La insulina regular (Actrapid® o fisiología del páncreas (programar calculadores de bolo (la bomba de insu-
Humulina regular®) se utiliza diferentes ritmos de infusión basal lina tiene uno incorporado en su soft-
menos en la práctica diaria por su de insulina en distintos tramos del ware). Este tipo de dispositivo sugiere
peor perfil, pero continúa utilizán- día; administrar distintos tipos de la cantidad de insulina que debe admi-
dose habitualmente a nivel hospi- bolos según el tipo de ingesta), nistrarse en un determinado momento
talario para perfusión intravenosa e posible descenso de HbA1c de en si se introducen una serie de datos, pero
incluso por vía subcutánea en algu- torno a 0,5%, menor frecuencia de finalmente, debe ser el paciente quien,
nas pautas al debut. Este sistema hipoglucemias graves y posibilidad evaluando las circunstancias concretas
MDI implica múltiples inyeccio- de acoplarse a algunos medidores del momento, acepte o modifique la
nes al día: 1 o 2 de AAL y 1 de continuos de glucemia instersticial sugerencia del dispositivo.
AAR por cada ingesta. Se utilizan (lo que permite nuevas funciones Es imprescindible que los pacien-
jeringas o bolígrafos. No se pueden encaminadas, sobre todo, a evitar tes se aseguren de disponer siempre de
mezclar distintos tipos de insulina hipoglucemias graves). insulina de repuesto suficiente(17).
en la misma jeringa (salvo NPH Pero la bomba de insulina no es
con insulinas de acción rápida). “inteligente” ni autónoma. Aun- Alimentación
Aunque existen presentaciones con que cada nuevo modelo incorpora Establecer un adecuado plan de
mezclas prefijadas de NPH e insu- nuevas funciones que intentan alimentación, asociado a los corres-
lina rápida, estas no se recomien- facilitar el manejo de la DM, son pondientes ajustes de la pauta de
dan en pacientes pediátricos. Las el paciente y sus cuidadores quie- insulina, permite mejorar el control
zonas de inyección más aconseja- nes deben “ordenar” a la bomba glucémico. Debe recomendarse una
bles para la inyección de insulina de la administración de bolos de dieta saludable, equiparable a la del
acción lenta son glúteos y muslos, y insulina, la cantidad de la misma resto de niños y adolescentes sanos,
las zonas para la insulina de acción en cada bolo, la modif icación que permita disminuir los factores de
rápida son abdomen, brazos y ocasional del ritmo de infusión riesgo cardiovascular, y adaptada a las
muslos. Debe recomendarse el uso basal según las circunstancias del circunstancias culturales y psicosocia-
regular de las mismas áreas para momento, etc. Por ello, es impres- les de cada paciente. La ingesta calórica
la insulina del mismo momento cindible realizar una intensa edu- debe procurar el mantenimiento de un
del día, pero con rotación dentro cación diabetológica específica para peso ideal y un adecuado crecimiento,
de ese área de manera frecuente el uso de ISCI, además de conocer el cual debe monitorizarse. En pacien-
para evitar la aparición de lipohi- con detalle cómo manejar la DM tes con DM tipo 1, debe evitarse el
pertrofias, que son secundarias a la con MDI, por si en algún momento sobrepeso. De manera opuesta, la pér-
inyección frecuente de insulina en fallase el sistema de ISCI, situación dida anormal de peso o la incapacidad
la misma zona, y las cuales pueden potencialmente muy grave dada la para ganar peso de manera adecuada,
implicar una absorción errática de ausencia de remanente de insu- debe hacer sospechar una situación de
la insulina si esta se administra en lina de acción lenta en el cuerpo enfermedad (infecciones, enfermedad
esa zona, pudiendo dificultar así el del paciente(17). Asimismo, la fre- celíaca, hipertiroidismo), trastorno del
control glucémico(17). cuencia de mediciones de glucemia comportamiento alimentario o inade-
2. Infusión subcutánea, continua de capilar será igual o incluso mayor cuada administración de insulina(16).
insulina (ISCI) o bomba de insu- que con MDI. El seguimiento debe Como norma general, se reco-
lina: la insulina es administrada en hacerse en centros de referencia(20). mienda ingerir el 50-55% de la calo-
el tejido subcutáneo del paciente rías como hidratos de carbono (con la
a través de una cánula colocada La dosis total diaria necesaria de mínima cantidad posible en forma de
de manera permanente en dicho insulina y su distribución a lo largo azúcares simples), <35% como gra-
tejido, y a la que la bomba envía del día varían enormemente entre sas (<10% como grasas saturadas) y

462 PEDIATRÍA INTEGRAL


Manejo y seguimiento del niño diabético

15-20% como proteínas, pero la pauta dosis de insulina previa y/o aumentar o moderadas frecuentes. Asimismo,
debe adaptarse a cada momento del la ingesta de HC durante y/o después dichos objetivos deben elevarse ante la
desarrollo. Debe cuantificarse estric- del ejercicio. Cuando el ejercicio físico presencia de hipoglucemias inadverti-
tamente la cantidad de hidratos de es imprevisto o no programado, la das, hasta que se restablezca la capa-
carbono (HC) que se ingiere, ya que ingesta extra de HC será la principal cidad de detectar las mismas. Como
la cantidad de insulina administrada herramienta para prevenir hipogluce- referencia, dichos valores ideales se
en cada bolo comida depende de ello. mias. El ejercicio prolongado exige la muestran en la tabla VII(19).
En nuestro medio, los HC se cuan- ingesta periódica de HC durante su
tifican habitualmente en forma de realización. Igualmente, tras la realiza-
“raciones”. Una ración equivale a 10 ción de ejercicio físico debería ingerirse Tabla VII. Objetivos de control
glucémico (deben tomarse como
gramos de HC. Existen múltiples una comida rica en HC que permita referencia, e individualizarse en
tablas de equivalencias para consultar reponer las reservas de glucógeno. cada paciente)(19)
qué cantidad de cada tipo de alimento Es importante medir la glucemia
corresponde a una ración de HC. Se antes de practicar ejercicio físico, ya Valores óptimos
puede establecer una relación o ratio que puede ser perjudicial iniciarlo en Glucemia:
insulina/ración para cada momento del situación de hiperglucemia con cetosis En ayunas 70-145 mg/dL
Postprandial 90-180 mg/dL
día, que exprese la cantidad de insu- y en hipoglucemia. Ante la presencia de 120-180 mg/dL
Al acostarse
lina que se necesita para metabolizar glucemia >250 mg/dL, debe realizarse Durante la 80-162 mg/dL
cada ración de HC, y así flexibilizar medición de cuerpos cetónicos, ya que noche
la ingesta y mejorar la calidad de vida. si estos son positivos (cetonemia >0,5
Aun así, continúa recomendándose mmol/L o cualquier cetonuria pre- HbA1c <7,5%
la regularidad en las horas y hábitos sente) debe corregirse dicha situación
de las comidas para lograr un óptimo con insulina y posponer el ejercicio
control metabólico. Además de la can- hasta que la cetonemia se haya resuelto. Los dispositivos de monitorización
tidad de HC, es importante valorar el Ante la presencia de hipoglucemia, esta continua de glucosa (MCG), míni-
índice glucémico de cada alimento, evi- debe corregirse y debe comprobarse su mamente invasivos, miden el nivel de
tando o restringiendo aquéllos en los resolución 10-15 minutos después, todo glucosa del líquido intersticial bajo la
que este sea más elevado. Aunque en ello antes de comenzar el ejercicio. Por piel cada pocos minutos. Los princi-
menor medida que los HC, se sabe que tanto, la medición de glucemia previa pales inconvenientes para su uso son
la ingesta de grasa y proteína también al ejercicio debe realizarse un tiempo su elevado coste (no financiados en la
inf luye en la glucemia postprandial, antes (unos 20-30 minutos antes) para mayoría de los casos en nuestro medio
por lo que debería evitarse el uso habi- tener un pequeño margen que permita actualmente) y su posible inexactitud
tual del término “alimentos libres” para solucionar algunas de estas situaciones en la medición (no miden glucosa
referirse a los alimentos constituidos y evitar la necesidad de cancelar el ejer- en sangre, sino en el intersticio, y es
fundamentalmente por estos macronu- cicio por falta de previsión. necesario calibrarlos con mediciones de
trientes, incidiendo en la necesidad de glucemia capilar, así como confirmar
una dieta equilibrada(16). Monitorización de la glucemia de igual manera las cifras alteradas).
La automedición frecuente de Aun así, su uso puede aportar grandes
Ejercicio físico glucemia capilar es fundamental en ventajas para mejorar el control glucé-
El ejercicio físico, sobre todo, el el manejo de la DM, por lo que debe mico, sobre todo, con los dispositivos
de tipo aeróbico, produce un aumento facilitarse a todo paciente diabético. de medición “a tiempo real”, que infor-
de la sensibilidad a la insulina. Por lo Debe realizarse un mínimo de 4-6 man de la medición en el momento y
tanto, es posible la presencia de una veces al día, ya que su frecuencia se de la tendencia de cambio del nivel de
tendencia a la hipoglucemia durante o correlaciona con el control glucémico. glucosa, avisando de las predicciones
después (incluso hasta 24 horas des- Los datos de las mediciones deben y permitiendo tomar decisiones en el
pués) de practicar ejercicio físico. Este registrarse en papel o mediante des- momento. Son especialmente relevan-
hecho exige ser tenido en consideración carga informática de los datos del tes para pacientes con hipoglucemias
para prevenir hipoglucemias relaciona- glucómetro periódicamente (a ser inadvertidas, ya que permiten prede-
das con el ejercicio. posible a diario) y ser analizados por cir la aparición de una hipoglucemia
De manera ideal, el ejercicio físico el paciente y cuidadores con frecuen- minutos antes de que ocurra, y actuar
será programado. Esto permitirá rea- cia, para poder detectar precozmente para evitarla. Igualmente, acoplados
lizar ajustes de la pauta de insulina con alteraciones del control glucémico en a la terapia con ISCI, permiten a la
antelación, en función del comporta- determinadas situaciones o momentos bomba actuar de manera automática
miento de la glucemia en cada paciente del día que exijan realizar cambios en en determinadas situaciones (presen-
según su experiencia previa con el tipo el tratamiento. Los objetivos glucémi- cia de hipoglucemia o predicción de
de ejercicio concreto que vaya a reali- cos deben individualizarse para obte- hipoglucemia). Aunque este tándem
zar. Con ello, se pretende evitar des- ner los valores lo más próximos a la ISCI-MCG constituye la base para la
ajustes glucémicos. De manera gene- normalidad, evitando hipoglucemias actuación automática de la bomba de
ral, puede ser necesario disminuir la graves, así como hipoglucemias leves insulina, aún falta bastante camino por

PEDIATRÍA INTEGRAL 463


Manejo y seguimiento del niño diabético

recorrer para disponer de un verdadero basadas en conceptos teóricos claros, glucagón por vía intramuscular o sub-
“páncreas artificial” en la práctica clí- integradas en la rutina asistencial del cutánea (0,5 mg en < 12 años, 1 mg
nica(19). equipo diabetológico, encaminadas a en > 12 años). Debe entrenarse a los
La medición de cuerpos cetónicos, proporcionar habilidades para el auto- cuidadores en la administración de
ya sea mediante tira reactiva de orina manejo y soporte psicosocial, que uti- glucagón y asegurar la disponibilidad
o idealmente cetonemia en sangre lizan técnicas cognitivo-conductuales del mismo.
capilar, debe realizarse siempre ante para solución de conf lictos, manejo Las hipoglucemias leves o mode-
situación de enfermedad (sobre todo, del estrés, establecimiento de objeti- radas se tratarán administrando azú-
si existen vómitos, dolor abdominal, vos, habilidades comunicativas, moti- cares de absorción rápida por vía oral
somnolencia o respiración profunda) vación, etc. y que utilizan las nuevas (habitualmente 10-15 g de glucosa),
y ante cifras de glucemia manteni- tecnologías en el manejo de la DM los cuales deben estar a disposición
das >250 mg/dL, ya que su elevación como herramientas de motivación. Es del paciente en todo momento y en
importante en dichas situaciones puede fundamental considerar la educación cualquier circunstancia (zumos, geles
indicar una descompensación hacia diabetológica no solo como una forma- o tabletas de glucosa…). A los 10-15
cetoacidosis diabética, con necesidad ción en el momento del debut diabé- minutos tras su administración, debe
de actuación urgente(19). tico, sino como parte integrante de la medirse de nuevo la glucemia para
L a hemoglobi na gl icosi l ad a rutina asistencial, con reciclaje perió- asegurar una adecuada respuesta. Si
(HbA1c) es un indicador de la glu- dico rutinario y con especial atención a esta no se ha producido, debe repe-
cemia de los últimos tres meses (4-12 mantener la motivación del paciente y tirse la ingesta de azúcares y repetir la
semanas), el mejor parámetro para cuidadores. Debe intensificarse ante la medición tras otros 10-15 minutos. En
evaluar el control glucémico y el detección de deficiencias en el manejo ocasiones, será necesario administrar
único parámetro objetivo del que se de la DM o ante la instauración de después HC de absorción intermedia-
dispone de evidencia sólida acerca de nuevas herramientas de tratamiento y lenta, para evitar la recurrencia de la
su correlación con las complicaciones seguimiento (ISCI, MCG…)(18). hipoglucemia.
micro y macrovasculares. Debe reali- La presencia de hipoglucemias fre-
zarse, como mínimo, cada 3 meses, a Hipoglucemia cuentes puede terminar disminuyendo
ser posible en la misma consulta del Una consecuencia del tratamiento o anulando la respuesta adrenérgica a
equipo diabetológico, para poder tomar con insulina (cuando este no es estric- la hipoglucemia, lo que conduce a la
decisiones inmediatas en función de su tamente idóneo) es la aparición de presencia de hipoglucemias desaperci-
resultado. El objetivo general en niños hipoglucemias, que constituyen la bidas, uno de los principales factores
y adolescentes diabéticos es un valor complicación aguda más frecuente de de riesgo de hipoglucemias graves.
de HbA1c <7,5%, siempre individua- la DM, y cuya prevención debe ser un Cuando esto ocurra, deberán elevarse
lizando, y elevándolo ante la presencia objetivo prioritario. Desencadenantes los objetivos glucémicos para restaurar
de hipoglucemias graves, hipogluce- típicos son: el exceso de administración la capacidad de detección(21).
mias leves o moderadas frecuentes o de insulina, el defecto de ingesta de
hipoglucemias inadvertidas(19). HC, el ejercicio físico o la ingesta de Cribado de complicaciones y
alcohol. Aunque no existe una eviden- comorbilidades
Educación diabetológica cia absoluta acerca de una cifra con- El esquema de cribado de compli-
Se define como el proceso mediante creta de glucemia bajo la cual definir caciones micro y macrovasculares y de
el cual se proporcionan al paciente y la hipoglucemia, en la práctica clínica otras comorbilidades orgánicas asocia-
a sus cuidadores los conocimientos y se establece <70 mg/dL como el umbral das a la DM tipo 1 se muestra en la
habilidades necesarias para llevar a de glucemia bajo el que debe iniciarse tabla VIII(7,9).
cabo su autocuidado, manejar las cri- tratamiento de la misma en el paciente Los pacientes jóvenes con DM
sis y realizar cambios de estilo de vida con DM. Los signos y síntomas se tienen mayor incidencia de: depresión,
para manejar con éxito la enfermedad. deben a la activación adrenérgica ansiedad, estrés psicológico y trastor-
Es la clave del éxito en el manejo de (sudoración, temblor, palpitaciones…) nos de la conducta alimentaria, sobre
la diabetes, inf luyendo de manera y a la neuroglucopenia (cefalea, difi- todo, entre los que tienen peor control
significativa en el control glucémico. cultad para concentrarse, cansancio). metabólico. El cribado de problemas
Debe llevarse a cabo por un equipo En niños pequeños, son frecuentes las psicológicos a través de herramientas
multidisciplinar bien coordinado, con alteraciones del comportamiento (irri- validadas de evaluación de la calidad
la misma filosofía y adecuadamente tabilidad, rabietas, hipoactividad…). de vida y del desarrollo mental, tanto
formado tanto teóricamente como en Ante la aparición de síntomas de este del paciente como de sus cuidadores,
habilidades educativas. El contenido de espectro debe medirse la glucemia. debe realizarse de manera rutinaria.
la educación debe actualizarse perió- La hipoglucemia grave (aquella con El equipo diabetológico debe incluir
dicamente para incluir las novedades pérdida de consciencia o convulsión) profesionales especializados en salud
en el manejo de la DM y debe adap- requiere tratamiento urgente, ideal- mental para atender a los pacientes
tarse a cada paciente y cuidadores. Las mente administrando glucosa por vía o cuidadores que lo precisen, y para
intervenciones educativas que se han intravenosa en el medio hospitalario. entrenar al resto del equipo en la detec-
demostrado más eficaces son aquéllas Fuera del hospital debe administrarse ción de este tipo de trastornos(8).

464 PEDIATRÍA INTEGRAL


Manejo y seguimiento del niño diabético

Tabla VIII. Cribado de complicaciones y comorbilidades en el paciente diabético(7,9)

Inicio del cribado Método Frecuencia Intervención potencial


Retinopatía A los 10 años o al inicio de Fotografía con cámara de Anual Mejorar el control glucémico
la pubertad si esta ocurre retina u oftalmoscopia Láser
antes, tras 2-5 años de midriática (menos
evolución de la DM sensible)
Nefropatía A los 10 años o al inicio de Ratio albúmina/ Anual Mejorar el control glucémico
la pubertad si esta ocurre creatinina en orina de IECAs o ARA2
antes, tras 2-5 años de 1ª hora o albuminuria Mejorar la HTA
evolución de la DM de 24 horas
Neuropatía No establecido Anamnesis y exploración Mejorar el control glucémico
física
Enfermedad A los 10 años Medición de TA Anual Mejorar el control glucémico
macrovascular Mejorar la HTA
Perfil lipídico Cada 5 años Estatinas (>10 años)
Alteración del Al debut Medición en consulta, Al menos anual Mejorar el control glucémico
crecimiento gráficas de referencia
Sobrepeso Al debut Medición en consulta, Al menos anual Intervención dietética
gráficas de referencia Ejercicio físico
Función Al debut TSH y anticuerpos Cada 1-2 Levotiroxina (si hipotiroidismo)
tiroidea antiperoxidasa años (más Fármacos antitiroideos (si
frecuente si hipertiroidismo)
alterado)
Celiaquía Al debut Anticuerpos IgA anti- Cada 1-2 Derivación a gastroenterólogo
transglutaminasa y/o años (más pediátrico
anti-endomisio (tipo frecuente si Dieta sin gluten
IgG si hay déficit de clínica, o AF
IgA) de 1er grado)
Déficit de IgA Al debut Determinación de IgA Al debut Cribado de celiaquía mediante
total anticuerpos tipo IgG
Lipohipertrofia En la primera visita Exploración física: En cada visita Evitar la zona 2-3 meses
inspección y palpación Rotación de los lugares de
inyección de insulina
Déficit de Al debut Determinación de Anual Tratamiento sustitutivo
vitamina D 25-OH-calcidiol

Estructura del seguimiento


asegurar la continuidad del segui- la aparición de la enfermedad, dada la
El seguimiento habitual se estruc- miento y el buen control durante la implicación de un componente de pre-
tura de la siguiente manera(15): adolescencia y juventud. La edad a disposición genética. Algunos estudios
• Consulta cada 2-3 meses para la que se debe realizar este proceso han permitido establecer un mayor o
reevaluación del automanejo de la de transición no está establecida y menor riesgo de desarrollo de la enfer-
diabetes y revisión de los registros depende de la organización y coor- medad según determinados marcadores
de control glucémico, así como para dinación entre los equipos diabeto- genéticos, autoanticuerpos, marcadores
evaluar el crecimiento, desarrollo y lógicos pediátricos y de adultos de del sistema inmune celular, de daño de
salud general. cada centro(15). la célula beta, etc., pero ningún marca-
• Consulta anual con evaluación y dor de manera individual o score que los
revisión de los conocimientos de Prevención combine permite de momento predecir
alimentación, capacidad de auto- de manera definitiva qué persona desa-
manejo y necesidades psicosocia- No existen intervenciones que hayan rrollará la enfermedad. No existen en
les, cribado de comorbilidades y demostrado prevenir o retrasar la enferme- la actualidad intervenciones que hayan
factores de riesgo de complicacio- dad, por lo que actualmente, no se reco- demostrado prevenir la aparición de
nes crónicas, detección de lagunas mienda el cribado de familiares de primer autoinmunidad (prevención primaria)
o errores en el manejo y reciclaje grado fuera de estudios de investigación. o retrasar la aparición de la fase clínica
y/o actualización de aspectos de de DM tipo 1 una vez establecida la
educación diabetológica. Ante el diagnóstico de DM tipo 1 autoinmunidad (prevención secunda-
• Proceso planif icado y coordinado en un hijo, muchos padres plantearán si ria). Por ello, no se recomienda actual-
de transición a las unidades de dia- sería posible realizar estudios a los her- mente, realizar cribado de anticuerpos,
betes de adultos, con el objetivo de manos o a ellos mismos para prevenir genes de predisposición..., ni ninguna

PEDIATRÍA INTEGRAL 465


Manejo y seguimiento del niño diabético

intervención en fase preclínica fuera de 7.** Donaghue KC, Wadwa RP, Dimeglio 15.** Pihoker C, Forsander G, Fantahun B,
estudios de investigación. En individuos LA, Wong TY, Chiarelli F, Marcovec- Virmani A, Luo X, Hallman M, et al.
chio ML, et al. Microvascular and mac- The delivery of ambulatory diabetes care
de conocido riesgo aumentado, si fuera rovascular complications in children and to children and adolescents with diabe-
posible, debería facilitarse el acceso a adolescents (Pediatric Diabetes ISPAD tes (Pediatric Diabetes ISPAD Clinical
estudios de investigación en marcha en Clinical Practice Consensus Guidelines Practice Consensus Guidelines 2014
este sentido, si así lo desean(12,13). Debe 2014 Compendium). Pediatr Diabetes. Compendium). Pediatr Diabetes. 2014;
2014; 15(Suppl.20): 257-69. 15(Suppl.20): 86-101.
insistirse en recordar los síntomas car-
dinales de DM para consultar precoz- 8.*** Delamater AM, de Wit M, McDarby V, 16.*** Smart CE, Annan F, Bruno LPC,
Malik J, Acerini CL. Psychological care Higgins LA, Acerini CL. Nutritional
mente ante su potencial aparición. of children and adolescents with type 1 management in children and adoles-
diabetes (Pediatric Diabetes ISPAD cents with diabetes (Pediatric Diabetes
Bibliografía Clinical Practice Consensus Guidelines ISPAD Clinical Practice Consensus
2014 Compendium). Pediatr Diabetes. Guidelines 2014 Compendium). Pediatr
Los asteriscos ref lejan el interés del artículo a 2014; 15(Suppl.20): 232-44. Diabetes. 2014; 15(Suppl.20): 135-53.
juicio del autor. 9.** Kordonouri O, Klingensmith G, Knip 17.*** Danne T, Bangstad H-J, Deeb L ,
1.*** Craig ME, Jefferies C, Dabelea D, M, Holl RW, Aanstoot H-J, Menon Jarosz-Chobot P, Mungaie L, Saboo
Balde N, Seth A, Donaghue KC. Defi- PSN, et al. Other complications and B, et al. Insulin treatment in children
nition, epidemiology, and classification diabetes-associated conditions in chil- and adolescents with diabetes (Pediatric
of diabetes in children and adolescents dren and adolescents (Pediatric Diabe- Diabetes ISPAD Clinical Practice Con-
(Pediatric Diabetes ISPAD Clinical tes ISPAD Clinical Practice Consensus sensus Guidelines 2014 Compendium).
Practice Consensus Guidelines 2014 Guidelines 2014 Compendium). Pediatr Pediatr Diabetes. 2014; 15(Suppl.20):
Compendium). Pediatr Diabetes. 2014; Diabetes. 2014; 15(Suppl.20): 270-8. 115-34.
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6.** Wolfsdorf JI, Allgrove J, Craig ME, 2014; 15(Suppl.20): 18-25. and management of hypoglycemia in
Edge J, Glaser N, Jain V, et al. Diabetic 14.** King BR, Howard NJ, Verge CF, Jack children and adolescents with diabetes
ketoacidosis and hyperglycemic hyperos- MM, Govind N, Jameson K, et al. A (Pediatric Diabetes ISPAD Clinical
molar state (Pediatric Diabetes ISPAD diabetes awareness campaign prevents Practice Consensus Guidelines 2014
Clinical Practice Consensus Guidelines diabetic ketoacidosis in children at their Compendium). Pediatr Diabetes. 2014;
2014 Compendium). Pediatr Diabetes. initial presentation with type 1 diabetes. 15(Suppl.20): 180-92.
2014; 15(Suppl.20): 154-79. Pediatr Diabetes. 2012; 13(8): 647-51.

Caso clínico

Varón de 10 años de edad. Debut de diabetes mellitus tipo 1 hace 1 año. Actualmente, se encuentra en tratamiento
con insulina mediante múltiples dosis (MDI) subcutáneas, con dos dosis de insulina detemir al día (mañana y noche) e
insulina aspart en todas las comidas y para corregir hiperglucemias. Aceptable control glucémico, salvo por presencia de
algunas hipoglucemias en las horas posteriores a practicar ejercicio físico. Controlan bien el cálculo de raciones de hidratos
de carbono. A la exploración, se objetiva presencia de lipohipertrofia en muslo.
Los padres comentan que el paciente tiene un hermano de 5 años. Aunque en el momento actual está asintomático
quieren que se le realicen estudios que determinen si va a ser diabético o no.

466 PEDIATRÍA INTEGRAL


A continuación, se expone el cuestionario de acreditación con las preguntas de este tema de Pediatría Integral,
que deberá contestar “on line” a través de la web: www.sepeap.org.
Para conseguir la acreditación de formación continuada del sistema de acreditación de los profesionales sani-
tarios de carácter único para todo el sistema nacional de salud, deberá contestar correctamente al 85% de las
preguntas. Se podrán realizar los cuestionarios de acreditación de los diferentes números de la revista durante
el periodo señalado en el cuestionario “on-line”.

Manejo y seguimiento del 3. ¿Cuál de las siguientes opciones a. La educación diabetológica


niño diabético NO es una característica sugestiva realizada al debut de la enfer-
de DM tipo 1? medad, aun cuando sea de la
1. Acerca del tratamiento con bomba a. Obesidad. mejor calidad, precisa reciclaje
de insulina (ISCI), señale la op- b. Autoinmunidad positiva. periódico.
ción CORRECTA: b. En el manejo del paciente dia-
c. Debut durante la infancia o
a. La bomba de insulina utiliza, adolescencia. bético solo es importante la
al igual que el tratamiento con administración de insulina.
d. Síntomas cardinales (poliuria,
MDI, dos tipos de insulina (un c. Mantener la motivación del
polidipsia, pérdida de peso).
análogo de acción rápida y un paciente y sus cuidadores a lo
análogo de acción lenta). e. Necesidad de tratamiento con
largo del tiempo es necesario
insulina de manera mantenida.
b. Si se produce un fallo de infu- para un buen manejo de la
sión de insulina de varias horas, enfermedad.
4. Sobre la alimentación en el pacien-
existe bajo riesgo de descom- te con diabetes, señale la afirma- d. La monitorización frecuente de
pensación hacia hiperglucemia. ción INCORRECTA: la glucemia es imprescindible.
c. El tratamiento con ISCI per- a. Para un adecuado manejo de la e. Debe realizarse de manera
mite evitar las mediciones de diabetes es imprescindible un periódica un programa de
glucemia capilar. buen conocimiento del cálculo cribado de comorbilidades y
d. Con una adecuada selección de de hidratos de carbono. complicaciones de la enfer-
los pacientes, puede mejorar el b. El ascenso de la glucemia post- medad.
control glucémico. prandial se evita habitualmente
e. La cánula de infusión se puede Caso clínico
gracias a la insulina basal.
cambiar una vez al mes. c. Es posible flexibilizar la can- 6. En relación con el ejercicio físico,
tidad de raciones de hidratos ¿qué es INCORRECTO?
2. ¿Cuál de los siguientes NO forma de carbono utilizando el ratio
parte de los criterios diagnósticos insulina/ración, pero el manejo a. El ejercicio físico justifica las
de diabetes mellitus? suele ser más fácil si existe hipoglucemias de este paciente,
a. Glucemia en ayunas ≥ 126 mg/ regularidad en la ingesta. ya que aumenta la sensibilidad
dL. a la insulina.
d. Las comidas muy ricas en gra-
b. HbA1c ≥ 6,5%. sas y proteínas pueden influir b. El ejercicio físico suele implicar
en la glucemia. un aumento de las necesidades
c. Glucemia ≥ 200 mg/dL a las 2 de insulina.
horas de una sobrecarga oral de e. La distribución de macronu-
glucosa. trientes de la dieta del paciente c. Puede ser necesario adaptar la
con DM debe ser muy similar pauta de insulinoterapia antes
d. Poliuria y polidipsia + gluce- y/o después del ejercicio físico
mia ≥ 200 mg/dL en cualquier a la de niños sanos de la misma
edad y sexo. para evitar hipoglucemias.
momento.
d. Puede ser necesario aumentar
e. Glucemia ≥ 140 mg/dL a las 3 5. Acerca del manejo del paciente con la ingesta de raciones antes y/o
horas de una sobrecarga oral de diabetes, señale la opción INCO- durante el ejercicio físico para
glucosa. RRECTA: evitar hipoglucemias.

PEDIATRÍA INTEGRAL
Manejo y seguimiento del niño diabético

e. La práctica de ejercicio físico d. La administración de insulina sabremos con seguridad si será


regular puede considerarse en esa zona puede dificultar el diabético o no.
parte del tratamiento de la DM. control glucémico. c. Medición de glucemia capilar
e. Debe administrarse la insulina igual que a su hermano diabé-
7. En relación con la presencia de li- en la zona de la lipohipertrofia tico.
pohipertrofia en muslo, ¿cuál es la para que la absorción de la insu- d. Informar de los síntomas car-
afirmación INCORRECTA? lina sea más regular. dinales a vigilar, para solicitar
a. Una vez instaurada, debe evi- asistencia sanitaria precoz si
tarse la inyección de insulina 8. En relación con el hermano, ¿cuál aparecieran, así como facilitar
en esa zona durante 2-3 meses, sería la actitud más correcta? información por si quisieran
para que se resuelva. a. Como la asociación familiar participar en algún estudio de
b. Es importante la rotación de la ocurre siempre, no es necesa- investigación en marcha sobre
zona de inyección de insulina rio realizar estudios, ya que el campo de la prevención en
para evitar su aparición. sabemos que será diabético DM.
c. La administración de insulina seguro. e. Como no se trata de un pro-
en esa zona puede hacer más b. Realizar estudio de autoinmu- blema genético, no es necesario
errática la absorción de insu- nidad pancreática y de genes realizar estudios, ya que no será
lina. de predisposición, ya que así diabético en ningún caso.

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