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LOS
GRANDES
MAESTROS
DEL TABLERO
R. Reti
sa edición
Club de Ajedrez
RICARDO RETI

LOS GRANDES MAESTROS


DEL TABLERO

Quinta edic;ión

EDITORIA[-FUNDAMENTOS
Club de Ajedrez

Traducción y revisión de Julio Ganzo

© Editorial Fundamentos
Caracas, 15 . 28010 Madrid
Teléfonos: 419 96 19 y 419 55 84

Primera edición, 1965


Segunda edición , 1968
Tercera edición, 1972
Cuarta edición, 1982
Quinta edición, 1987

ISBN: 84-245-0329-5
Depósito legal: M-330-1987

Impreso en España por Técnicas Gráficas, S. L.


Las Matas, 5. 28035 Madrid
primera parte
MAESTROS DE AYER
PROLOGO

A UNQUE este libro tiene el aspecto de una colección de partidas,


sin embargo es un método, pero no un método al estilo de los
matemáticos o de otra ciencia cualquiera. Así como que para
saber nadar es necesario tirarse al agua, para saber jugar al ajedrez es
necesario jugarlo, pues con libros solamente nadie habrá aprendido a
JUgar. Un método para este juego, sólo es un acompañante para el afi-
cionado, es un consejero que le guiará en las falsas o erróneas ideas que
de por sí haya adquirido, evitándole de adquirir otras y, a la vez, le
enseñará en sus horas de solaz las bellezas y las profundidades del fuego
ciencia, dándole alegría que es la presunción necesaria para el éxito.
Estas son las razones que me han determinado en dar a este libro la
forma de una colección de partidas. Las complicadas combinaciones son
una síntesis de teorías sencillas. En el ajedrez es todo lo contrario. La
teoría es una abstracción, una generalización de experiencias adquiridas
en las partidas.
Lo fundamental e indispensable en el ajedrez, es la partida viva, es
en su estudio donde se adquieren los conocimientos teóricos.
He ordenado en principio histórico los resultados de los grandes
maestros del tablero, por la razón de que, al mismo tiempo, es la dis-
posición más lógica. La técnica moderna del ajedrez, se apoya en expe-
riencias antiguas y es por esta causa que las partidas modernas jugadas
por maestros sólo pueden ser comprendidas por el estudio de los maes-
tros antiguos.
Tanto en la elección de las partidas, como en su análisis, siempre he
tenido presente que escribía un método, y me he esforzado en cada caso
a mirar el conjunto y no explicar solamente la teorfa de las aperturas,
sino también el curso del juego medio.
Espero, pues, que este libro será un fiel auxiliar en las proezas de
los ajedrecistas, tanto para los que comienzan como para los que ya
sean fuertes en el juego.
RICHARD RETI.

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RICARDO RETI

E L autor de la presente obra fue, sin duda, uno de los grandes maes-
tros de su tiempo, y aunque tal vez por modestia, no se incluyó
entre ellos, es de justicia situarle en el puesto que le corresponde,
al llevarse a cabo esta edición para beneficio de todos los aficionados
españoles, ya que posiblemente no existe un método pedagógico de aje-
drez que pueda superar la labor didáctica de Reti en LOS GRANDES
MAESTROS DEL TABLERO.
Ricardo Reti nació el 28 de mayo de 1889, en la ciudad austro-hún-
gara de Pezinek, incorporada después de la primera guerra europea a
Checoeslovaquia. Y murió a los 40 años, víctima de la escarlatina, en
.Praga, el 6 de junio de 1929.
Sus padres, judíos húngaros bien ¡1comodados, le proporcionaron los
estudios especiales para que a los quince años, terminado el bachillerato,
hablara varios idiomas y poseyera una extensa cultura, además de cono-
cimientos sobre música, pintura y literatura. Comienza entonces en
Viena la carrera de ingeniero y frecuenta el café donde se juega al aje-
drez. Aunque su entrevista con Schlechter le decepcionó y en el Tor-
neo de Viena, su primera actuación, quedó en último lugar, no por eso
perdió su afición. Ocurría esto en 1908, fecha también de su amistad
con Breyer de cuyas conversaciones brotaron las nuevas ideas sobre
Ajedrez, origen de la llamada "escuela hipermoderna" y que fueron ex-
puestas en el libro de Reti "Las nuevas ideas en Ajedrez", publicado en
Viena en 1921, y que tantas controversias despertó.
Ganó primeros premios en los siguientes torneos: Kassa, 1918; Go-
teburgo, 1920; Teplitz-Schonau (empatado con Spielmann); Buenos
Aires, 1924; Giessen, 1925; Viena, 1926 y Brunn, 1928.

9
Segundos premios en: Hastings, 1922 (tras Rubinstein); Mahrisch-
Ostrau, 1923 (tras Lasker); Hamburgo, 1927, y Dortmund, 1928.
Terceros premios en: Abbazia, 1912; Berlín, 1919, y Scheveningen,
1923.
Ostentó el título de Campeón mundial "a la ciega", pues batió el
récord establecido por Pillsbury, jugando en Sao Paulo, 1929, veintinueve
partidas simultáneas a la ciega, de las que ganó 20, empató 7, perdiendo
solamente en dos tableros.
El lector podrá ver en el último capítulo de este libro (Mi sistema
de apertura) los datos Sl}ficientes para completar esta biografía.

JULIO GANZO.

10,....
ADOLFO ANDERSSEN

Antes de practic¡u el. juego de posi- de Londres en 1862, y el Baden-Baden


ción, se debe aprender a combinar. Esta en 1870.
regla se ha confirmado en la historia del Recordamos al que quiera aprender, que
ajedrez, y no podemos recomendarla has- se fije en las siguientes partidas de An-
. tante a los jugadores jóvenes. derssen, no sólo para recrearse en ellas,
No empecéis vuestro juego con partida sino para fortalecer su juego de combina-
de peón de dama y partida francesa, ción. No hay que creer que el juego de
sino con partidas de juego abierto, gam- combinación sea sólo fruto del talento y
bitos. Cierto es que jugando juego cerrado que no se pueda aprender. Los elementos
el jugador principiante perderá menos son siempre los mismos que se .presentan
partidas, pero en cambio en el juego en relaciones más o menos complicadas,
abierto aprenderá a jugar al ajedrez. tales como ataques dobles, sujeciones, cam-
En los tiempos antiguos, hubo también bios, etc.
jugadores de posición. El más grande fue Cuantas más combinaciones se han vis-
André Danican Philidor, quizá habrá sido to, tanto más fáciles es concebirlas por
el pensador más grande hasta el momento sí mismo.
presente. Pero el que con su ejemplo f<>- En las partidas que estudiaremos, no
mentó en máximo grado la potencia de sólo trataremos de éstas, sino que tam-
combinación del mundo ajedrecista, ma- bién estudiaremos las aperturas. Entre
durándola para la práctica del juego de las aperturas, la primera que sigue es la
posición, fue Adolfo Anderssen. de «Gambito de rey». Se entiende por
Anderssen nació en Breslau en el día «gambito» una apertura en la cual se sa-
6 de julio de · 1818. La información de la crifica un peón a fin de conseguir un
carre ra de su vida es muy sencilla. Es- avance en el desarrollo, o bien otras ven-
tudió filosofía y matemáticas, y hasta el tajas. El gambito conocido como el más
día 13 de marzo de 1879, época que fa- antiguo en la literatura de ajedrez, es el
lleció, ocupó el cargo de profesor en el de rey: l. P4R, P4R; 2. P4AR. La idea
Instituto de su ciudad natal. de este gambito es doble: 1.0 apertura de
Ocupóse del ajedrez en los primeros la columna AR en la cual, una vez efec-
tiempos de su vida estudiantil, sin embar- tuado el enroque, la torre de rey puede
go, la fuerza de su juego se desarrolló entrar rápidamente en acción: 2. 0 la po-
lentamente. Para sus compatriotas alema- sibilidad de formarse un fuerte centro de
nes, y hasta para los internacionales, fue peones, después del alejamiento, o bien
la revelación cuando en el primer torneo del cambio del peón PR, mediante P4D.
de maestros celebrado en Londres, en 1851, La fuerza· de un tal centro de peones, In
con el cual empezó la época moderna del conoceremos más adelante. Desde lue¡1o las
ajedrez, obtuvo el primer premio. A este blancas, después de 2 .... , P X PA, no
triunfo, siguieron otros, especialmente el pueden jugar en seguida 3. P4D, sino que

-11
deben ante todo hacer algo para evitar bw, las negras, tienen cierta preponderan·
la amenaza de las negras DST +. c1a en el centro. Por esta razón, en los
El jugador que está aprendiendo y tam- ultimos años se ha empezado a considerar
bién el experimentado, mejorará sensible· el gambito de Falkbeer casi como la re-
inenre su j·uego, si se esfuerza en tratar futación del gambito de rey.
cada apertura conforme a su (idea) base, "Otra réplica : Las negras pueden tratar
siguiendo un plan preconcebido. Por de ignorar la idea de gambito de las blan-
ejemplo, si se juega el gambito de rey, cas, continuando su desarrollo, y en este
debe tener en cuenta en todo momento caso, no les es necesario jugar inmedia-
los dos objetos principales de esta aper- tamente 2. . .. , P3D, para la defensa,
tura, que son la dominación de la línea porque restringirían la acción de su alfil
AR y la formación de un centro de peo- de . rey. El ataque al peón SR es sólo apa-
nes. rente, porque 3.... , P X P fracasaría a
Si, al contrario, se deja guiar por extra' causa de DST +. Las negras pueden, por
vías y rodeos, él mismo quita el sentido lo tanto, jugar tranquilamente ·2 .... , A4A
de sus primeras jugadas, y entonces la in- y pueden defender más tarde su peón 4R
consecuencia de su juego le será fatal. con P3D sin encerrar su alfil de rey.
¿Cómo deben ahora contestar las ne- Tendremos ocasión de volver a menudo
gras al gambito de rey? En los tiempos sobre el gambito de rey, pero rogamos al
antiguos, era usual aceptar cada sacrificio que estudie que no considere como pala-
que presentaba el contrario, y, por consi- bras inútiles las ideas generales que aquí
guiente, se solía aceptar casi siempre el y tnás adelante exponemos sobre las aper-
gambito de rey mediante 2. . .. , P X P A turas. Por desgraciA, las más de las veces,
procurando defender este peón por P4CR. los jugadores de ajedrez sólo estiman las ·
Esta defensa tiene dos fines: uno, material variantes exactas, pero lo justo es lo con-
y otro posicional. Al defender el peón SA trario. Se ha, confirmado que hay más
queda obstruida la columna AR y enton- verdad ajedrecística en las ideas que en
ces las blancas para corresponder a la idea las variantes. El que comprenda el espí-
de la apertura que es atacar sobre la co- ritu exacto de las aperturas puede tener
lumna AR, deberán casi siempre sacrifi- confianza en que también sin el conoci·
car una 'pieza para quitar de en medio el miento de las variantes, no producirá nin-
peón SA de negro. guna mala partida.
Otra réplica contra el gambito de· rey,
es el contra-ataque en el centro: 2. . .. ,
P4D, a lo cual después de P X PD sigue PARl'IDA NÚM. l.
casi siempre 3 •... , PSR. (Sería un . grave
error 3. P X PR a causa de 3.... , DST +.) GAMBITO FALKBEER
Ahora son las negras que juegan gambito,
llamado éste de Falkbeer, cuyo descubri- Breslau, 1862
dor fue el maestro austríaco Ernesto Car-
los Falkbeer, naCido en Briinn en 1819 y Blancas : Rosanes
fallecido en Viena en 188S. Negras: Anderssen
¿Qué consiguen las negras con este sa-
crificio de peón? Ante todo, el fracaso 1. P4R, P4R
.completo de todos los propósitos que han 2. P4AR, P4D
tenido las blancas con la jugada del gam- 3. PX PD, P5R
bito. La apertura de la columna AR lo 4. A5C+,
mismo que la intención de formar un cen-
tro de peones, .son impedidas radicalmen- Esta jugada es car¡¡cterística del juga·
te. Ahora no se sabe qué objeto tiene el dor de tiempos antiguos. No es jugada
peón 4A en su situación. Además el peón posicional, es decir, no es con miramien-
SR causa cierta · molestia en la posición tos hacia una fina situación ; se perseguía
de las blancas, y éstas se encuentran con sólo una inmediata ventaja material o el
dificultades para su desarrollo. En cam- mate. Hoy día se sabe · que en el campo

ll-
de la apertura el dominio del centro es el alfiles, pero aun así era favorable para
punto e:encial de que se trata. las negras dado el atraso que llevan las
Un jugador moderno se esforzará, ante blancas en su desarrollo.
todo, en desembarazarse del presionador
peón negro SR y, por consiguiente, jugará 14. 0-0-0, ASO
4. P3D. El conductor de las blancas en la
presente partida quiere por, el contrario, Esto causa una debilidad en el flanco
tal como entonces era usual, asegurar la de enroque de las blancas.
preponderancia numérica de sus peones,
aun a costas del propio desarrollo, ju- 15. P3A, TD1C
gando para ello 4. ASC+ para después 16. P3CD,
.de P3AD cambiar su peón SD que po-
dría llegar a ser débil más tarde.
Situación después de la jugada 16. P3CD
4 . . •. , P3AD
5. PX P, CXP Negras : A nderssen

Las más de las veces se acostumbra a


jugar aquí P X P.

6. C3AD, C3A
7. D2R,
Aquí era mejor para las blancas jugar
el peón dama a fin de recuperarse en el
desarrollo que llevan atrasado.
En vez de esto, las blancas persiguen
más ventaja material, es decir, ·g anar otro
peón, el de rey.
Las negras, y con razón, no se esfuer-
zan en defender este peón, sino en conti-
nuar su desarrollo. Cuantos más peones
desaparezcan del tablero y cuantas más
columnas se abren, tanto más resalta la
ventaja del desarrollo.

7 . . . ., A4AD Blancas: Rosai .es


s. ex P, 0-0
9. AXC, PXA
10. P3D, T1R 16•. .. , TR1Dl
11. A2D,
Una típica jugada preparatoria de An-
Las blancas quieren colocar a su rey derssen, principio de una brillante co}llbi-
en seguridad · por medio del enroque lar- nación de la cual su contrincante está
go, pero las negras han conseguido colum- completamente ignorante.
nas abiertas también en su flanco de
dama. 17. C3A,
11. ex e Es claro que SI JUegan 17. P X A,
12. PXC, A4A D X PD no tendrían ninguna salvación.
13. P5R, D3C Si hubiesen penetrado en el propósito de
su contrario, hubieran jugado 17. R2C,
Si 13. . .. , A X P; 14. D4A, y las ne- pero las negras con A3R amenazando
gras debían cambiar uno de sus buenos A X PC hubieran ganado rápidamente.

-13
17 .... , DX P! éste atacar una pieza blanca que tal vez
18. PX D, TXP se colocase en dichos puntos 6AR y SAR.
19. A1R, A6R+! Si las blancas quieren jugar posicional·
mente en el espíritu del gambito de rey,
y mate a la siguiente. antes de todo deben abrir la columna AR
y quitar de en medio el peón SAR. La
continuación posicional es, pues, 4. D4TR,
PARTIDA NÚM. 2. minando de esta manera la defensa 4CR
que cubre el peón del gambito. No es por
GAMBITO KIESERITZKY ningún azar, que jugadores típicos de po-
sición, como Steinitz y Rubinstein, tenían
Breslan, 1862 esta variante en favorable concepto. Consi-
dérese además que las blancas deben de-
Blancas : Rosanes cidir la forma de su continuación en esta
Negras: Anderssen cuarta jugada.
Si juegan 4. A4A, las negras pueden
1. P4R, P4R contestar A2C, y la jugada 5. P4TR ya
2. P4AR, PX P no puede conseguir su objeto ·porque las
3. C3AR, negras tienen la posibilidad de jugar
P3TR y con ello pueden mantener intacta
Con esta jugada se ha formado el su cadena de peones.
gambito conocido bajo el nombre de ca-
hallo de rey. Hay otras continuaciones, las 4. P4TR, P5C
cuales se emplean a menudo: 3. A4A y 5. C5R,
3. A2R, en estos últimos tiempos, se ha
probado también 3. D3A (es el gambito Esta apertura tiene el nombre de gam-
de Breyer), aunque no es usado muy a bito de Kieseritzky. Otra continuación es
me.nudo. el gambito de .Allgaier, donde las blancas
En todas estas continuaciones insistire- juegan 5. ese,
viéndose obligadas, des-
mos más adelante. pués de 5... . , P3TR, a sacrificar su ca-
ballo con 6. C X P, pero en cambio obtie-
3 •... , P4CR nen un ataque muy peligroso.

Como durante tres siglos ya ha sido re- 5. C3AR


conocido, el peón del gambito sólo puede
defenderse a la larga si se cubre en seguí· Aquí se presenta una buena ocasión
da. De acuerdo con lo que hemos anotado para demostrar el valor que tiene el haber
ya en la primera partida ese intento de comprendido el espíritu de una apertura
sostener la ventaja material obtenida, era, y no el estudio de memoria de varias va-
en los tiempos de Anderssen, la forma riantes, que no es tan provechoso. El juga-
predominante de jugar. Ahora las blancas dor de café, que busca la jugada más pró-
tienen en su juego dos continuaciones di· xima para dar ataque, probablemente ju-
versas. Una de ellas consiste en continuar garía aquí, 6. A4A.
su desarrollo así mediante 4. A4A y Pero también el jugador novicio que se
S. 0-0. ha tomado la infructuosa molestia de estu-
Esto es una manera inocente de jugar, diar el célebre método de Bilguer, siguien-
propia de jugadores de ataque superficia- do aquellas indicaciones, hará la misma
les, pero no corresponde al espíritu del jugada, y por un contra-juego de negras,
gambito de rey. La idea de este gambito, llegará a tener desventaja. No debe de
como ya sabemos, es el ataque a la co- extrañarnos el hecho de que en el análisis
lumna AR en la cual los puntos 6AR y del gambito de rey, la obra de Bilguer
SAR han sido debilitados por la jugada contenga numerosos defectos. Un análisis
P4CR, pues ya no pueden ser atacados o de variantes, en el curso de los años, llega
cubiertos por el peón 4CR no pudiendo a manifestarse casi siempre como equivo-

1A _
cada. La ciencia de conocer variantes sólo Las blancas, en vez de colocar esta torre
es una ciencia aparente. . en 2T, que actúa de comparsa, era más
Además el gambito de rey no es ningu- propio que debían reconciliarse con su
na apertura mQderna, y la mayor parte contrario por el sacrificio de calidad, co-
de las variantes proceden del tiempo anti- locando el rey en 2A en esta jugada 14.
guo, cuando era insignificante lo que se
pensaba sobre el juego de posición. Si se 14 . ... , A4AR
mantiene ante la vista la idea de la aper- 15. A5D,
tura, se llega a la conclusión de que. es
preciso hacer desaparecer el peón SA para Le ofrecía mejor defensa 15. A6A para
la liberación de la columna AR. Por lo no permitir el paso de la torre negra
tanto, la jugada indicada es 6. P4D, la a IR.
cual ha sido muy tenida en cuenta por el
maestro más antiguo y más grande del 15 .... , RlC!
juego de posición, Philidor, y más recien- 16. C3A, TlR+
temente por el gran «posicionalista» Ru- 17. RlA, D3C
binstein, que la ha calificado como ven·
tajosa para las blancas. Después de 6. Las negras amenazan el ataque decisi-
P4D-P3D; 7. C3D, C X P; 8. A X P, las vo mediante A4R.
negras tienen efectivamente un peón más,
pero se hallan en una situación nada 18. C4T, D3T
envidiable a causa de la debilidad irrepa-
rable de la columna abierta. No podemos Las negras amenazan mate en cuatro
extrañamos de que el jugador que con- jugadas. Así D7R + ; 20. D x D, T X D+ ;
ducía las blancas en esta partida, hiciera 21. RIC T8R+; 22. R2A, T8A mate.
esta jugada más débil, pero aparentemen- Esta amenaza las blancas no la pueden
te más lógica. parar por medio de 19. P4A, porque lás
negras contestan con D X C ! y después
6. A4A, P4D de 20. D X D, nuevamente T7R +, etc.,
7. P X P, A3D y dan mate.
8. P4D, C4T
SitiUlciÓn después de la jugada 20.' P4T
Como ahora se demuestra las blancas Negrcu: Ander5sen
ya no pueden abrir tan fácilmente la co-
lumna AR. En buena hora debían haber
jugado 0-0, a pesar de la posible contes-
tación D X PT. Rosan es en esta partida,
tal como lo hizo en la anterior, no juega
posicionalmente, sino a la ventaja ma-
terial.

9. A5C+, P3A
10. PX P, PXP
11. C X PAD, ex e
12. AXC+, R1A
13. AX T,

Las blancas tienen una torre más, pero


en cambio una posición peligrosa al flanco
de su rey, y un jue¡zo muy mal desarro-
llado.

13. C6C
14. T2T, Blanca.t: Rosanu

-15
19. C3A, A4R! Situación después de la jugada 18
20. P4T, de lCJ$ negras.
Las negras anuncian mate en cuatro N egra5: Dufresne
jugadas.
20. DSA+!
21.DXD, AXP+
22. A3R, TXA!
23. RIC,
A otra jugada sigue mate con T7R +.
23 . . . ., TSR mate

Seguramente que algunos lectores se ex-


trañarán de que no hayamos aportado las
célebres partidas, Anderssen-Kieseritzky
(Londres, 1851) y Anderssen-Dufresne
(Berlín, 1851) de las cuales, la primera
ha tenido el honor de ser bautizada con
el nombre de <<Inmortal». La primordial
causa es que los contricantes de Andera-
sen .jugaron flojamente, y hoy día que el
sentido ajedrecista se ha refinado, ya no
producen ninguna impresión limpia. Los Blancas: Anders$en
nuevos análisis han demostrado que estas
partidas se originaron más bien por la
inclinación romántica que sentía Anders- más favorables por una razón general, qut.
sen por las combinaciones, y no por la en otras partidas ya volveremos a encon-
lógica del ataque. trar, y sobre la cual el jugador estudiante
SoJpos del parece!' que estas partidas no podrá reflexionar. Las blancas dominan
tienen ningún valor pedagógico, y, por lo el centro; conducen el ataque en las líneas
tanto, no son propias para ser incluidas centrales del tablero.
en un método. Respecto a la partida «<n- En cambio, las negras atacan la posi-
mortal» en el libro del autor «Las Nuevas ción del contrario en su enroque, teniendo
Ideas en el Ajedrez¡¡ (en alemán y en que cooperar la dama y la torre en el
inglés) se encuentran unas consideracio- flanco de rey juntamente con los alfiles,
nes críticas sobre el esencial punto flojo éstos atacando desde el flanco de dama.
de la partida. Respecto a la de Anderssen- Si el contrario domina el centro, una
Dufresne, el doctor Lasker ha hecho re- cooperación de ataque en esta forma no
cientemente idénticas consideraciones. tiene éxito, por la disgregación de las
Pero de todos modos, las combinaciones piezas atacantes. El moderno jugador de
de Anderssen en estas partidas, serán posición que continuamente se esfuerza en
siempre dos brillantes perlas en el tesoro conocer los indicios de la posición: y trata
del ajedrez. la combinación como un medio auxiliar
Aunque no aportemos en total las dos para demostrar después su ventaja de po-
partidas, queremos, sin embargo, reprodu- sición, en esta situación tratará de llevar
cir lo esencial de la crítica situación de el ataque en el centro del tal forma, que
la partida Anderssen-Dufresne, con las con ello impida al propio tiempo los ata-
consideraciones mencionadas que escribió ques del flanco de dama negro (alfiles)
el doctor Lasker. contra el rey blanco.
En esta posición, los dos bandos tie- Así es fácil adivinar la jugada que
·ncn ataque directo contra el rey. Sin em- gana en seguida, indicada por Lasker: Jo
bargo, las perspectivas de las blancas son A4R. Pero Anderssen optó por jugar

16-
19. TDlD, más pequeño, cuando se está seducido por
bellas combinaciones, puede verse tam-
En verdad, esta jugada es prueba de su bién a base de partidas de Anderssen. V a-
incomparable combinación, pero puesto mos a presentar dos ejemplos que ~n
que no se apoya en el conocimiento de las tanto más demostrativos, cuanto son situa·
exigencias posicionales, es más débil que ciones reproducidas a menudo, sin que
19. A4R; tan débil que las negras contes- ningún glosador haya encontrado la cruda
tando con T5C, hubieran conseguido ta- realidad de la situación. Así obsesiona la
blas según. los resultados que dieron más combinación. Al mismo tiempo, quisié-
tarde unos especificados estudios que se ramos q11e esto fuera un estímulo para
hicieron. Pero las negras continuaron así: el jugador estudiante, para que trabaje
independientemente y no se fíe demasiado
19 .... , DXC de las autoridades.

y después de esta jugada, la combinación Situación después de la jugada 11 de


de Anderssen sale triunlante. El lector que las blan~.
3iga con atención tedas las variantes, ro-
bustecerá su fuerza de combinación. Negrns: Anderssen

20. TX C+, CXT

Las negras echan mano, pero Anderssen


da mate en cuatro jugadas. Sin embargo,
la principal variante de la combinación
procede después de 20 .... , RID; y seguil'á
21. T X P+. Si las negras toman esta
torre, entonces se gana la dama negra, al
contestar 22. A2R +. Por consiguiente, las
negras deben jugar 21. ... , RIA y luego
sigue la sorpresa de 22. TBD +.
Esta torre se puede tomar de tres for-
mas, pero las negras siempre están per-
didas.
A) 22 .... , TxT; PX D.
B) 22.... , RXT; 23. A2R+.
C) 22 .... , C x T; 23. D7D+, RXD;
24. ASA+, cualquiera; 26. A7D+ +. La
partida continuó así:
21. DXP+, RXD; 22. ASA+, RIR.
A 22. . .. , R3J.: seguiría mate por Anderssen había sacrlijcado una pieza,
A7D++. pero consiguió un ataque decisivo. Andera-
sen, en busca de combinaciones, jugó :
23. A7D, cualquiera; 24. A XC mate.
Con tales consideraciones no queremos 11. ... , AXP
inducir al aficionado ajedrecista a que
considere la combinación como cosa se- Las blancas contestaron con la equi-
cundaria. Al contrario, la combinación es vocada
lo elemeljtal y como lo hemos observado
no se puede llegar a ser un buen jugador 12. DXC,
sin conocer la combinación. Pero hay que
esforzarse en comprender la posición y y las negras 'Vencieron, continuando con :
no combinar meramente por el gusto de
combinar. Cuán fácil es omitir el detalle 12 • ... , AX Pj

-17
que pudo forzar el mate. A 13. T X A Esta «brillante" combinación dio la
seguía 13 . ... , DBD+; 14. TIA, TBT+. vuelta al mundo ent~ro y nadie preguntó
A la jugada dooe de las blancas, el libro por qué este sacrificio de una dama cuan-
de Gottschall sohre Anderssen, dice lo do mucho más rápidamente se conseguirá
siguiente: «Las blancas no se defendieron el mismo resultado con 16. T X T +,
bien; lo justo era, 12. P X A, D X P; 13. RXT ; 17. A5C+.
D7D +, D X D; 14. C X D, .e tc., Es extra- Con los años, y conforme la evolución,
ño que tanto jugador como crítico pasa- Anderssen también llegó a ser jugador de
ran por alto el hecho de que las negras posición. Aun traeremos aquí otra partida
en la situación del diagrama, con 11. suya, que empieza con juego de posición,
P X P + ; 12. T X P, T8T + podían obli- pero donde en el final vuelve a triunfar
gar a las blancas a abandonar. la fuerza de combinación de Anderssen,
lo que da un carácter .p articular a la par-
tida.
Situación después de la jugada 15 de
las negras.
PARTIDA NÚM. 3.
Negras: HiUel
DEFENSA PHILIDOR

Blancas : Anderssen
Negras: L. Paulsen

1. P4R, P4R
2. C3AR, P3D
La defensa de Philidor. Se tiene por
mejor 2 .... , C3AD, porque de esta ma-
nera las negras preparan la jugada P4D,
y pueden atacar mas enérgicamente en la
apertura para dominar en el centro. La
jugada P3D es, en cierto modo, una re-
signación de las negras cediendo al con-
trario, que jugará P4D, sin luchar la
mayor libertad de movimiento. El hecho
criticado por los teóricos antiguos de que
con la jugada P3D queda encerrado el
alfil de rey, es, en este caso, de pooa im·
Blancas: Anderssen
portancia.

El caso qJJe sigue es más llamativo 3. P4D, PXP


todavía. 4. Dx P, C3AD
5. A5CD, A2D
16. A5C, 6. AX C, AXA
7. A5C, C3A
Respecto a esta jugada el libro sobre 8. C3A, A2R
Anderssen hace un punto de exclamación 9. 0-0-0, 0-0
y dice: «¡Ahora las negras están per· 10. TR1R, T1R
didas !J>.
Las blancas han terminado ya su des-
16•... , DXA5CR arrollo, en tanto que las m;gras sólo lo
17, D5A+, DXD han conseguido en la medida que lo per-
18. T X T+, RXT mite su restringida situación. La posición
19, T8R+ + de los peones blancos en el centro, 4R y

18-
el de las negrllll 3D significa una ventaJa de ser tomado fácilmente. Pero esto, cuan-
perceptible de terreno para las blancas. do la posición es igualada, raras vece!'
Pueden establecer· una favorable continua- es fácil , pues el defensor puede apoyar el
ción las blancas, situando sus torres en peón aislado con tantas piezas ·como usa
IR y en ID, respectivamente, mientras el atacante para tomarlo. ·
que las negras no tienen ninguna colum- La esencial desventaja del peón aislado,
na abierta para su torre de dama. no está en el peón, sino en la casilla de
delante, por ejemplo, la de 4D. Esta ca-
11. RlC, silla pertenece totalmente a las blancas y
éstas podrán· siempre establecer una figu·
Satisfecho en la lucha entablada para ra conservando· una gran eficacia porque
la predominación en el centro, resultado faltan por ambos lados los peones del con-
victorioso, Anderssen hace una tranquila trario que podrían expulsar la figura esta·
jugada de espera, y contribuye así a la blecida, y, por otro lado, el peón aislado
seguridad de su posición. En estos casos es una pieza de obstrucciÓ!l y en esté
como el presente en que se tiene una caso lo es para las torres negras que, de
permanente ventaja de posición, estas ju- otra forma, podrían atacar al caballo.
gadas de seguridad son aplicadas las más La pieza más eficaz en tal situación,
de las veces. es este caballo de las blancas. Las otras
piezas, las mayores operan a lo lejos, pero
11. ... , A2D sólo el caballo es el que halla una crecida
multiplicación de valor al haber obtenido
Las negras quieren jugar su alfil a 3R; una sólida posición en el frente del con-
pero no ello ofrecen a su contrario la trario.
oportunidad de fortalecer más aún su
ventaja. Después de todas estas explicaciones,
está ya bien demostrado que según la as-
12. AX C!, AXA piración que tengan las negras para qui-
13. P5R!, A2R tarse de encima el caballo blanco SD,
14. C5D, AlAR habrán de pagarlo con su alfil de dama.
Aparentemente parece que Anderssen
Las jugadas del bando negro son obli- pierde unos tiempos, pero su táctica con-
gadas todas. Amenaza la pérdida de peón siste en sostener su caballo en la posición
3D, y las negras no deben jugar 14. SD y nos enseña un instructivo estudio
. . . , PxP, a causa de 15. ex A+, Txe; . que lo presenta, igual que toda la pri-
I6. exP. mera parte de esta partida, a Anderssen
como jugador de _posición.
15.PXP, PXP
16. TX T, AXT
La «pointe», consecuencia de la juga- 17. C2D!,' A3A
da 12, introductora de la combinación 18, C4R,
de Anderssen. Si las negras ... A X P; 16.
e X P ! y hubieran perdido un peón. Es- Las negras no pueden ahora jugar
tas están obligadas a dejar aislado el A X e, porque estaría perdido su peón
peón 3D siendo ello la mayor ventaja de de 3D.
la posición de Anderssen, que este cam-
bio por la ventaja obtenida en el princi- 18. P4A
pio de la apertura, en la lucha entablada 19. C(4R)3A,
por su peón 4R y el del contrario 3D.
Sobre el peón aislado diremos algo. Todo En esta forma, las blancas aseguran la
jugador sabe que un peón aislado es una situación, dominadora de su caballo,
desventaja, pero son los menos los que se
dan cuenta del porqué y de la manera de 19.... , D2D
aprovecharla. La mayoría creen que pue- 20. P3TD,

- 19
Tal como en la jugada 11.a volvemos Las negras, que no pueden emprender
a ver cómo Anderssen asegura su ven- nada, intentan una demostración · en el
taja de posición, ~;~.} hacer una tranquila flanco de dama.
jugada de espera que mejora la coloca-
ción de su rey. 25. P4TR, TIR
26. D3D!,
20•.. . , D2AR
21. P3TR, Anderssen conduce fina e inexorable-
mente el ataque contra el enroque, La
Ahora empieza un nuevo acto de la jugada de dama prepara PST.
partida: ataque de peones en el flanco
de rey. En las partidas de café, se ve muy 26 .... , TIC
a menudo, pero raramente es justificado 27. PST, P4T
este ataque en juego de posición. 28. P4CD!,
La precioso antecondición de un ataque
de peones en el flanco es que esté bien En el momento oportuno, las blancas
segura la posición del centro, tal como lo cierran la acción a las negras. El peón
está en esto partida. Caso que fuese po- negro de 4C obra ahora como obstáculo
sible una ruptura en el centro, regular- para el A de 3A.
mente, es falso el agresivo ataque por el
flanco. 28 .... , PXP
29. Px P, DXP
21. . .. , P3TD
De otra manera los peones blancos se-
Lo peor de la situación de las negras rían demasiado fuertes. Las blancas ame·
es la imposibilidad de jugar P3CR, para nazaban, por ejem,plo: TlCR, quizá an-
colocar el alfil en 2CR, porque si P3CR, tes D3AR, además P6C ; P6T es otra
seguiría siempre C6A+. Ahora se re- amenaza y, caso que P3CR, entonces
CO!lOCe la gran fuerza de CSD. Las ne- C6A+ y D4D.
gras intentan la preparación de P3CR ju-
gando TlR para después jugarla a 3R, 30. D X PA, D2A
sustrayendo en primer lugar el peón de 31. D3D, AlD
2TD al ataque de la dama blanca.
Tal jugada liberta el caballo de 3AD,
22. P4CR, pero las negras no tienen otra jugada en
contra de la amenaza de 32. TIT.
La continuación del ataque de peones y,
al mismo tiempo, .la contramedida al pro- 32. C4R, D4A
pósito de las negras.
Las blancas amenazaban C3C, dominan-
22 .... , TlR do la casilla SAR y además Tl TR. A 32.
23. P4A, T3R ... , A4A naturalmente hubiera seguido:
24. PSC, C6A+.
33. TJT,
Con esta jugada se frustra el propósito
de las negras, pero tenemos por falso el Amenazan las blancas, que conducen el
modo de cómo ha sido contrarrestada la ataque con precisión admirable: 34. C3R,
última jugada de Paulsen. Evidentemen- D3C; 35. PSA ... Para impedir esto, las
te, Paulsen quería provocar PSC, para di- negras casi no tienen más jugada que
ficultar la apertura de la columna CR la que sigue frente a la cual Anders-
que -intentaban las blancas, y que por sen nos da otra vez una demostración de
medio de P X P hubiera resultado. su gran fuerza de combinación.
24.... , P4CD 33 •.. ., TtR

20-
Si1uodón tkapuú de 33 . ... , TlR 34. C4--6A +, PXC
35.CXP+, R2A
Jltegrtu: L. Pauhen
36. T X P + , AZC

A R3C, seguiría 37. D3AR.

37. T X A+ , RX T
38. CXT+, RIA
39. D X D+, AX D
40. ex P.

y ganaron las hlaneaa.

Blancas: Anderuen

-21
PABLO MORPHY

La biografía de este eminentísimo ju- Un jugador débil, hoy día comprende


gador, el mayor de todos los maestros muy fácilmente el juego abierto, pero en
¿e ajedrez, está explicada en muy po- la época de Morphy no era este el caso,
1:as palabras. pues a él precisamente le debemos la
Pablo Morphy nació en 1837 en Nueva comprensión.
Orleans. En el año 1857, luchando en el La superioridad . de Morphy sobre sus
primer Torneo Americano, ganó el pri- contemporáneos estriba en que ha sido el
mer premio, delante del maestro alemán primero en comprender la esencia de las
L. Paulsen. situaciones- abieftas que se creó en sí por
Durante los años que siguieron, visitó los buenos fundamentos.
Europa a fin de probar sus fuerzas con
los maestros del continente. Se dice que una posición es abierta
Cuantos le fueron presentados fueron cuando han sido cambiados varios peones
vencidos. Los más significados encuentros del centro, de modo que las piezas ten-
que tuvo fueron contra Li:iwenthal, Harr- gan líneas libres. Las aperturas que em-
witz y Anderssen, siendo el primero en piezan por l. P4R, P4R, son las más
Londres y los dos últimos en París. Poco predestinadas en conducir a posiciones
tiempo después, ya satisfecho de torneos abiertas, porque en la regla debe seguir
y luchas, regresó a su ciudad natal donde P4D y el cambio de peones del centro.
murió el 10 de julio de 1884. En las aperturas de l. P4D, P4D OC'UJ're
_ Morphy fue tachado por sus compa· todo lo contrario. La jugada 2. P4R, es
neros de dechado de aridez, igual que mucho más difícil, porque las blancas no
los campeones del mundo ya antes y des- pueden cubrir su casilla 4R. Las partidas
pués de él. Se le reprochaba que para de apertura de peón de dama, conducen
ganar un miserable peón, cambiaba las casi siempre en situaciones cerradas. En
damas, o sea, en principio, lo propio las que son abiertas se da un desarrollo
que hoy se censura a Capablanca con la rápido de figuras, y esto era el conOci-
única diferencia de que el cambi¿ de da- miento principal de Morphy. Ante todo,
mas para la ganar,:tcia de un peón es hoy se desarrollaba rápidamente en las piezas,
un hecho natural aun para jugadores dé- llevaba un juego activo y no perdía nin-
biles, mientras que en Capablanca se gún tiempo. En contraposición al princi-
trata de ventajas de posición mucho me- pio desarrollativo de Morphy, encontra-
nores. mos entre sus contemporáneos, ataques
Hoy día los tiempos han cambiado, y prematuros a causa de desarrollo insufi.
muchos aficionados que todavía no han ciente o unas jugadas superfluas en asus-
llesado a comprender el difícil modo del tados momentos de defensa.
juep cerrado, admiran, contrariamente Lo juzgaremos más exacto aún en las
el juego abierto de Morphy. ' partidas que siguen.

'- 23
PARTtDA NÚM . 4. las negras no tienen mejor contestación
que 3.... , PxP.
GAMBITO ESCOCES La contestación más usual es 4. C X
PD, pues aparentemente, y gracias al
Mobile, 1855 peón 4R, las blancas tienen más terre-
no en el centro y también un juego libre.
Blancas : Meek Sin embargo, esta ventaja se manifie~
Negras: Morphy como ne duradera, si las negras juegan
consecuentes, y es alejar el peón 4R ya
l. P4R, P4R por ataque ya por cambio, que despué&
2. C3AR, C3AD de preparaciones propias se puede alcan-
3. P4D, PXP zar por mediación del peón P4D.
Con el ejemplo de esta apertura esco-
Queremos decir unas palabras sobre la cesa, quisiéramos demostrar cuánto más
posible pérdida de tiempo por el cambio, ventajoso es comprender el espíritu de
pues en esto nO!! han sorprendido a veees una ap ertura que estudiar sus variantes.
los contrincantes de Morphy. Después de lo preeedente, las jugadas me-
La jugada 3.... , P X P, en verdad no jores para las negras serán las que sean
de desarrollo, que son las que atacan las
es ninguna jugada de desarrollo, pero sin casillas •4R y 4D, pues sólo de esta fo.rma
embargo, no es ninguna pérdida de tiem-
se desvía el peón presionador SR, para
po porque si las blancas quieren ganar poderse lograr P4D.
un peón en seguida o más tarde han de Por otro lado, las blancas sólo podrán
jugar CR X P, que tampoco es una jugada
afianzar su aparente ventaja si logran cu-
de desarrollo porque juega una pieza que brir los puntos 4R y SD para demorar
ya ha sido empleada, el caballo 3AR.
la liberación del juego negro por P4D.
Caso que las negras contestasen con 4. Ambas partes se verán empeñadas en en-
C X C, este cambio sería una pérdida de contrar las tales jugadas de desarrollo que
tiempo, porque las blancas con 5. D X C, ataquen las casillas 4R y 5D. Así resultan
desarrollan una figura que hasta ahora forzosamente las comprens1bles combina-
no lo había sido,
ciones siguientes: 4. ..., C3AR (ataca
Si se reflexiona la posición antes de es- 4R y 5D); 5. C3AD (defiende 4R y 5D):
te cambio errado, se ve que por ambas 5.... , A5CD (continúa el ataque); 6.
partes se ha desarrollado una figura, las e X e (las blancas no tienen mejor COD·
blancas e4D, las negras e3AD. Después tinuación para abrir 4R que esta prepa-
del cambio, las blancas tienen siempre ración para la jugada A3D); 6. .. .,
una figura desarrollada, la de dama a PC x C; 7. A3D, P4D. Las negras han
4D, en cambio las negras no tienen nin- conseguido su objetivo, se ha cambiado el
guna figura en juego. Por lo tanto, se peón 4R y el juego está equilibrado.
debe reeonocer por el resultado de este Como se ve, comprendiendo el e¡spíritu
cambio, que ha sido una manera drástica de la apertura, así se logra la manera-
d~: perder un tiempo.
de jugar que en todos los métodos ee
Otra es la cosa, si "las blancas, por califica como lo mejor, pero, muchos prin-
ejemplo, en la partida escandinava, des- cipiantes se la habrán aprendido de me-
pués de 1. P4R, P4D; continúan con moria y sin idea.
PxP. De todas maneras, las negras ga-
nan un tiempo por DxP, porque la da- 4. A4AD,
ma está expuesta en 4D, por lo cual
las blancas pueden ganar un tiempo en Esta jugada, puede aconteeer sin d~
seguida con 3. e3AD. ventaja aunque se sacrifique un peón in-
La apertura l. P4R, P4R; 2. e3AR, teresadamente, por el más rápido de!-
C3AD; 3. P4D tiene el nombre de par- arrollo. Caracteriza el «gambito eacocés».
tida escocesa. Ya que el peón 4R está Pero las blancas cometen la falta que ya
atacado y no pudiendo ser bien cubierto, veremos, no para jugar el gambito con

24-
rápido desarrollo, sino en el interés de un Situación despu~ de· 9. D X A. .
ataque prematuro contra la casilla 7AR,
ideas propias de aquel :.:empo y cuyo Negras: Morphy
error ha sido probado · por Morphy.

4 .... , A4A
s. ese,
Esto es un error por dos fundamento~~ :
1,0 Las blancas en esta situación abierta,
juegan una pi~ por dos veces, la cual
ya había .sido desarrollada, por lo tanto,
pierden un tiempo, mientras que lu ne-
gras cowiguen UDa ventaja en el desarro-
lio. 2.0 Las blancas olvidan que la aper·
tura es una lucha en el centro y, con
la jugada del texto, pronto cede a su con·
trario la preponderancia del mismo. La
continuación mejor es aquí 5. P3AD, para
continUar después de PXP; 6: AXP+,
RxA; 7. DSD+.

s. ... , e3T
Blancas: Meek
Las negras se defienden con una juga·
da de desarrollo. Si hubieran hecho C4R, ma y, prontamente, estará expuesta al ata-·
en vez de la del texto, que también cubre que del contrario. De esta forma las ne··
y ataca, habríanse obrado de la misma gras van rápido a. una decisiva ventaja.
manera que lo hicieron las blancas en Si éstas en la jugada s.• en vez de jugar·
jugar por segunda vez una figura desarro- C3T hubiesen hecho S. ..., C4R, se ve·
llada ya. Por esta combinación, y en el rían ahora al contemplar el diagrama, la.
curso de la partida, las blancas hubieran diferencia de que el caballo 3AD, estaría.
llegado a una ventaja. indesarrollado en 1CR, a causa de la con··
tinuación del juego que hubiera sido así:
6. ex PA, ex e 6. CxP, CxC; 7. AxC+, RXA; 8 ..
7. Axe+, RXA DST+, P3C; DxA, etc.
8. DST+,
9 .... , P30
La combinación que han introducido 1~ oseo, T1R
las blancas, probablemente gustará a los 11. 03e+,
principiantes. Un experimentado jugador,
se recela enfrente de una combinación tal, Las blancas, por jugar erradamente con
porque las figiiras desarrolladas · de las la dama, pierden tiempo . .Ahora es el prin-
blancas desaparecen del tablero, y las que cipio de la victoria de Morphy, en una
permanecen están aún en sus puestos sin forma apremiante. Debía hacerse 11.
haber sido movidas. Así no puede resul- 0-0.
tar ataque alguno.
11 .... , P40
8. P3e 12. P3AR, e4T
9. DXA, 13. 030, PXP
14. PXP, OST+
Las consecuencias del jue¡¡:o de las blan- 15. P3e, TXP+
cas tan errado es claro de· verse. Tan 16. R2A, 02R
sólo una figura está desarrollada, la da- 17. ezo,

-25
Ahora siguen unos bonitos cambios de No;· no es este el caso, pero tienen ahora
situación que estriban en que la dama un peón menos.
blanca no puede ni debe abandonar el Para recuperarlo deben jugar C X P,
. apoyo de la casilla 2R. que no es ninguna jugada de desarrollo,
porque, el caballo de 3A ya está desarro-
17 . .. ., T6R llado. Para recuperar el peón, las blan-
18. D5C, P3A cas tienen que devolver el tiempo que
19. DI A, A6T - antes habían ganado, y así, después de
20. DIO, TIAR esto, los juegos quedan iguales.

Los princ1p1antes que en el calor de la 5. P5R,


lucha sólo juegan con las piezas que tie·
nen ya desarrolladas, olvidándose de traer Tenemos ahora de nuevo el caso que
las reservas, pueden aprender mucho de ya hemos conocido en la partida anterior
esta jugada. en la jugada s.a y es la pérdida de tiempo
por una jugada de ataque. La jugada 5.
21. C3A, RIR PSR, en verdad ataca al ~aballo 3A, pero
22. Abandonan. no continúa el desarrollo. Si las negras
estuviesen obligadas en contestar con una
jugada defensiva, con una jugada que no
desempeña nada en favor del desarrollo,
PARTIDA NÚM, 5. se igualarían los dos tiempos de pérdida,
y el ataque de las blancas sería justifica·
GAMBITO ESCOCES do. Pero tal como en las partidas ante-
riores Morphy puede contestar a su con-
Nueva York, 1857 trario con una jugada de desarrollo y con
esto gana un tiempo.
Blancas~ Th. Lichtenhein Lo justo hubiera sido 5. 0-0. Si aho-
ra las negras juegan C X P, entonces las
Negras: Morphy blancas recuperan ambos peones sacrifi-
cados con 6. TlR, P4D.
1. P4R, P4R
2. C3AR, C3AD 5. P40
3. P40, PX P 6. A5CD, C5R
4. A4AD, C3A
Por ambas partes se debía jugar ahora
Como ya hemos dicho antes, en las una pieza de las desarrolladas.
situaciones abiertas, ante todo hay que
poner las figuras en juego rápidamente. 1. ex P, Al O
En el juego abierto, aunque superfi-
cialmente, se puede formar una idea abar· Ahora vamos a contar los tiempos otra
cante de la situación con sólo contar las vez. Las blancas no han conseguido nin-
guna ventaja.
figuras que ya están en juego.
Todavía tienen dos figuras desarrolladas
Es .a esto a lo que vamos ahora. Las y jugados los dos peones del centro, o sea
blancas tienen dos figuras desarrolladas, el como antes, sólo cuatro tiempos desarro-
caballo de rey y el alfil de rey, además llados. En cambio, las negras tienen tres
han jugado los dos peones del centro, los figuras desarrolladas, los dos caballos y el
cuales para el incondicional desarrollo de alfil de dama, y los dos peones del centro,
las figuras es necesario. En la posición de en total cinco tiempos de desarrollo. De
las blancas podemos contar cuatro tiem- esta manera, las negras tienen un tiempo
pos ; las negras, en cambio, tienen tam- adelantado, a consecuencia de la jugada
bién dos figuras desarrolladas, pero sólo 5." de las blancas.
un peón; Esto prueba solo tres tiempos.
Por lo tanto, ¿están las blancas mejor? 8. cxc,

26-
Este cambio significa nuevamente una 13. D4A,
pérdida de tiempo, pue$ las negras, al re-
matar con el peón, obligan al alfil de rey Las blancas buscan la salvación con el
blanco ya desarrollado a jugar otra vez. contraataque, pues 13. D2D, pierden en
8. ~... PXC aeguida por T1D. Así nace un furioso
juego de combinación, ofreciendo las me-
Hasta ahora las blancas han perdido dos jores posibilidades de combinar a aquella
tiempos. parte que tenga más figuras en juego.
Vamos a ver si los apercibimos por
nuestra cuenta: 13 ..... AXA!
Las blancas tienen una figura desarro- 14. P3CR,
llada y jugados los dos peones del centro,
por lo tanto, son tres jugadas de desarro- Sería bonito: H. D X PAD + , A2D; 15.
llo. Las negras tienen tres figurBB desarro- DXT+, R2R; 16. P3CR!, AxP+; 17.
lladas e igualmente dos peones del centro R X A, P6R + ; 18. R1R (a 18. R1C, si-
también han sido jugados. gue P7R); 18.... , DSCD+; 19. P3A,
Resulta, por lo tantó, por el examen de D x PC; 20. D X T, ASCR, con mate in-
la posición, que las blancas tienen dos evitable.
pérdidas de tiempo.
14. ... , 010
9. A3D, A4AD 15. PXA, D8D+
10. Axc, DST! 16. R2A, D6A+
11. D2R, PXA 17. R1C, A6T
12. A3R,
Las blancas ya no pueden defender el
En ¡, situación abierta se debe, espe· mate.
ciahnente, cuando se lleva retrasado el des-
arrollo, ante todo poner a salvo el rey, 18. Dx PAD+, R1A
12. 0-0 era lo más indicado. 19. DXT+, R2R
12 . . ... ASCR lO. Abandonan.

Situación des pué' de 12. ... , ASCR ·PARTIDA NÚM. 6.


NegrO$: Morphy
GAMBITO F ALKBEER

Nueva York, 1857

Blancas: Schulten
Negras : Morphy

1. P4R, P4R
l. P4AR, P4D
3. PX PO, PSR
4. C3AD, C3AR
S. P3D, ASCD
6. A2D, P6R!
Aquí tenemos el caso típico en Morphy,
del sacrificio del peón, no en busca de
posibles combinaciones, sino con miras
posicionales.
Marphy, después de reconocer que en
las situaciones abiertas, ante todo hay que
Blanro': Lichtenthein apresurarse en desarrollar, aun tuvo que

-27
ir más lejos, o sea, convencerse de la ne- 13. ... , TXA!
cesidad de crear una posición lo más 14. CXT, eso
abierta pooible, cuando se tiene ··enlaja en 15. DIC, AXC+
el desarrollo, cambiando peones, rompien· 16. R2A, CSC+
do la cadena de peones enemigos y, como 17. RIC,
consecue1iéia última, si es conveniente !111·
crificados incluso, a fin de obtener más Caso de 17. RlR. sigue DST+, y lue-
columnas libres para sus piezas. go D2R. Tras la jugada del texto, las
En el presente caso, las negras sacrifi- negras dan mate forzoso en siete jugadas.
can su peón de rey, porque así obtienen
mucho más rápidamente la columna de 17. C6A+
rey que su mal desarrollado contrincante. 18. Px e, DSD+
19. R2C, D7A+
7. Ax P, O-O 20. R3T, DXPA+
8. AlD, AXC 21. R4T, C3T
9. PXA, T1R+ 22. DICR, C4A+
10. AlR, ASC 23. R5C, D4T mate
11. P4AD,
En esta y la próxima jugada, las blan·
PARTIDA N ÚM. 7 .
cas no debieron aferrarse tan temerosas a
la mayoría de sus peones. Pero ni con
mejor juego era sostenible la partida. PARTIDA FRANCESA

11. ... , P3A Nuc•·a York, 1857


Nue>·ament e el princ1p1o de abrir el Blancas: Morphy
juego, dado el mejor desarrollo.
Negras: Meek
12. PX P, CxP
13. R1A, 1. P4R, P3R

Situación después de 13. RlA Puesto que las negras van atra&adas en
un tiempo, deberían tratar, desde princi·
1\'egra!: Morphy pio, de entorpecer la acción de las blan-
cas para abrir el juego, ya que el juego
abierto favorece siempre a quien está me-
jor desarrollado. Es extraño que este he-
cho sólo se haya reconocido en los últimos
años, y en los torneos modernos, después
de la jugada l. P4R, se ven mucho más a
menudo defensas cerrada's que no la an-
tigua contestación ... , P4R. Entre las de-
fen.o;as cerradas, la partida francesa l. .. .,
P3R es la más antigua.

2. P4D, P4AD

La exacta es P4D. Con la jugada de


texto, las blancas consiguen preponder•n·
cia en el centro.

3. PSD, P4R

En lo general, Morphy no trataba las


Blancas: Schulten partidas cerradas tan bien como 1as abier-

lB-
tas, pero la jugada del texto que es pér· su desarrollo y se reservan aun la forma
.:!ida de tiempo le da ocasión para abrir dt abrir el juego cuando quieran, o con
el juego con ventaja. P4D, o después de la preparación P3AD,
o también después de 0-0 y algunas ju.
4. P4AR, P3D gadas de preparación con P4A. La juga-
5. C3AR, ASC da del texto, tiene para el jugador la des-
6. PX P, AXC ventaja de no ser consecuente. Después
de l. P4R, el impasible peón PR de las
Una pérdida de tiempo nuevamente, y negras es objeto del ataque de las blancas,
en verdad, es el caso que ya hemos tratado con cuya ayuda, y más tarde con P4D o
anteriormente. Es pérdida de tiempo, por P4AR, se puede abrir el juego, única ma-
-el cambio, porque las blancas no recha· nera de hacer valer la iniciativa que tie-
zan con desarrollo simultáneo. Antes del nen las blancas. ,
-cambio, las blancas tienen una figura en Con 2. C3AR, las blancas toman en
3AR, las negras una figura en SCR. Des- seguida el ataque y, después de C3AD dt
pués del cambio la figura negra ha des- las negras pueden continuar consecuentes
aparecido, mientras que la blanca queda con P4D o con la fuerte jugada 3. ASC,
reemplazada por otra. que es la partida española. Con 3. A4A
las blancas continúan su desarrollo, pero
7. DxA, PXP no el ataque al peón SR. Esta es la call!a
8. ASC+, C2D de que en los torneos modernos haya des-
9. C3A, C3A a parecido casi del todo.
10. ASC, A2R Las negras contestan 1«? mejor con la
11. P6Df, jugada. 3 .... , C3A, con la cual, en cierto
modo, las negras toman la iniciativa me-
El sacrificio de peón típico de Morphy, diante el ataque a SR. Es menos seguro
·COn la intención de abrir una columna, 3 .... , A4A (partida italiana), porque de
.decide aquí en seguida. esta fonna aunque de momento se impida
P4D, las blancas pueden probar •· P3A y
11 .... , AXP luego continuar jugando P4D con ganan·
12. 0-0--0. cia de tiempo. Podría probarse 3. A2R
(partida húngara), cuya jugada es bien
Abandonan, pues pierden una pieza. notario cede iniciativas a las blancaS.

3..... A4A
PARTIDA NÚM. 8. 4. P4CD,
GAMBITO EV ANS Otro intento de aprovechar la coloca·
ción del alfil 4AD pera lograr la inicia-
Nueva Orleans, 18S8 tiva.
Las blancas quieren, como en las ano-
De !ei3 partidO$ simultáneas a ciega&. taciones anteriores, jugar P3AD además
de P4D. Pero quisieran una ganancia de
Blancas: P. Morphy tiempo con la jugada P3AD y atraer el
Negras: Aficionado alfil ase o el e por medio del sacrificio
del peón. Esta apertura se llama, según
1. P4R, P4R el nombre de su inventor, a:Gambito
l. C3AR, C3AD Evans». En tiempo de Anderssen y de
3. A4A, Morphy fue muy jugada.

En las partidas que hemos tratado haa- 4. AXPC


ta ahora, sólo se ha encontrado la conti·
nuación 3, P4D, partida escocesa. Con El gambito Evans se puede rehusar
la jugada del texto las blancas continúan muy bien con A3C. El adelantado peón

-29
4C, muy a menudo se manifiesta como Para hacer valer su ventaja de desarro-
débil. Sin embargo, el alfil en 3C es muy llo, las blancas deben tratar de abrir el
eficaz, lo propio que si está en 4AD, pero juego. La jugada de ataque es P5R, pero
menos expuesto. Por esto, no es de reco- las negras la impiden con habilidad.
mendar eJ gambito Evans.
12. esCR
5. P3A, AH 13. P.HR, e4R
14. ex e, ex e
Esto es mejor que A4A, porque más IS. AlR!,
tarde estaría expuesto al ataque P4D.
A 1.5 . A3C las negras, para la simpli·
6. P4D, ficación, jugarían A3R. Ahora las blan-
cas continúan con P4A para la prepara·
La continuación en el estilo de gam- ción del juego abierto.
bito. Las blancas quieren poner a las
negras ante la alternativa, o bien dejar Situación después de 15. A2R!
intacto el centro blanco, o bien optar por
la ganancia de peones. En este caso, las Negras: Aficionado
blan cas tendrían una excelente ventaja de
desarrollo por su juego tan abierto, una
partida al puro estilo Morphy. En la pre-
sente partida, las negras se deciden por
lo último.

6. PX P

Aquí estaría muy bien 6... . , P3D, pa·


ra sostener el apoyo del centro y el del
peón 4R, o bien si las blancas juegan
7. P X P, simplificar el juego.

7. 0-0, PX P
8. A3T,

Probablemente la ventaja del desarrollo


de las blancas no puede equilibrar de nin-
gún modo los peones sacrificados. Aquí se
debe jugar 8. D3C, después de lo cual
las negras deben cubrirse con D3A, pu- Blancas: Morphy
diendo continuar las blancas el ataque
con 9. PSR. Pero las negras tienen a su En esta situación las negras hicieron un
disposición la cómoda jugada C3TR, que error instructivo. Puesto que · las blancas
puede seguir a D3C. tienen un fuerte pesarrollo, las negras de-
bían mantener el · juego cerrado. ,Era muy
8 .... , P3D b{\eno, por ejemplo, P3AR, 11deniás C3C
9. D3C, C3T a fin de dominar la llave 4R, pues las
JO. CXP, AxC blancas con PSR, amenazan abrir el jue·
go. Probablemente les sería a las negras
Este cambio facilita a las blancas una más ventajoso, debido a su ventaja ma-
posición de ataque. terial. En vez de esto, abren el juego, pro-
bablemente, con la falsa idea de libertar
sus movimientos, y solucionan así el difícil
11. DXA, O-O problema que su mismo enemigo no pudo
12. TDJD, solucionar, de abrir el juego.

30-
15. P4AR Esta jugada significa una pérdida de
tiempo. Después de P X P para evitar la
Con esto se abre: 1.0 la columna R; pérdida del peón, las negras deben jugar
2. 0 la diagonal 2TD-8C, y 3.0 la diagonal A X C. Esto es, la pérdida de tiempo de
1 TD-8T que ya no puede ser obstruida que ya se ha hablado. Véase la partida
por P3AR. número 7.
Con sus jugadas 17, 18 y 19, Morphy
4. P X P, AXC
se apodera · de estos tres elementos.
5. Dx A, PX P
16. P4AR, C3A 6. A4AD, C3AR
17. A4A+, RIT
18. A2C, D2R La pérdida de tiempo de. las negras se
deja entrever claramente en la situación.
19. TDIR, T3A Las blancas, con situación simétrica de los
20. PX P, DIA peones, tienen desarrolladas dos figuras,
las negras sólo una. La última jugada de
Las blancas tienen ahora una ocasión las negras es, además, un error que per-
para decidir la partida mediante una bri- mite el sigujente ataque doble de Morphy.
llante combinación.
7. D3CD, D2R
21. T8R!, DXT 8. C3A,
22. Dx T, D2R
23. Dx P+ !, DXD En consideración de la gran ventaja de
24. P6A, DXP+ su desarrollo, Morphy no se conforma con
la ganancia de un peón. Para juzgar la
situación, nótese que la dama en 2R no
¡Desesperación! A 24. . .. , DIA, las se puede considerar como desarrollada
blancas dan mate forzoso con 25. P7 A+, porque está obstruyendo el camino del
C4R; 26. PxC, P4TR; 2. P6R+, R2T;
alfil R, perdiendo además, las negras, un
28. A3D+, R3T; 29. T6A+, R4C; 30. tiempo para cubrir el peón CD.
T6C +, RSA; 31. R2A !, etc.

25. RX D,
8. P3A
Rinden
9. A5CR, P4C

Esto da ocasión a las blancas a la de-


cisiva combinación de sacrificio, pero de
PARTIDA J'!ÚM. 9. otra manera las negras aún estarían más
encerradas.
DEFENSA PHILIDOR
10. ex P, PX C
París, 1858 11. AxP+, C2D
12. 0-0-0,
Blancas: Morphy
Negras: Duque de Brunschwig y Conde El ataque contra el caballo 2D es el
lsouard objeto principal de la combinación.

1. P4R, P4R 12. TID


2. C3AR, P3D 13. TXC!, TXT
3. P4D, A5C 14. TID, D3R

-.31
SitiUlción despu¿s de 14 . ... , D3R .-'. hora las blancas pueden ganar de \'a-
rias formas, lo más fácil era 15. A X C.
:Vegra!: DuqrU! de Braunchrceig y Coude D X D. con A X T + + . Morphy prefiere
l3ouard
aun un camino más elegante.

15. AXT+, CxA


16. ose+, ex o
17. TSD+ +

Blancru: Morphy

32-
GUILLERMO STEINITZ

Guillermo Steinitz nació el 18 de mayo 1892 fueron las más interesantes, rindién-
de 1836 en la ciudad de Praga. Como es- dose más tarde, en 1894, contra el doc-
tudiante se presentó en Viena a la edad tor Em. Lasker. Como Lasker mismo dice,
de 22 años, empezando su carrera de aje- el pensador fue superado por el jugador.
drecista en la «Wiener Schachgesellschaft» Después que Steinitz perdió su título
que ha sido la escuela de muchos maes- de campeón mundial, frecuentó aún va-
tros de ajedrez. En el año 1862, en repre- rios torneos, no consiguiendo ya ningún
sentación de su país, tomó parte en el primer premio más. Murió en 1900.
torneo internacional de Londres, donde Hemos nombrado primero a Morphy
obtuvo el sexto premio y reconociéndose como el más célebre de los maestros del
como la mejor partida del torneo una de ajedrez. Para el gran público es efectiva-
la.s que jugó. mente el héroe del ajedrez. En contra,
Establecióse en Londres viviendo allí los conocedores del juego ven en Steinitz
h88ta 1883. En el año 1866 jugó un al jugador más prófundo, la más sigui·
match. contra Anderssen, quien, después ficada personalidad ajedrecista.
de la retirada de Morphy, había vuelto En el método de Lasker, su autor ha
.a ser el gran maestro. Steinitz ganó por levantado un gran monumento a su ante-
ocho a seis partidas sin empate alguno. cesor, señalando las ideas filosóficas base
Con esta victoria, y aunque el título de del juego de Steinitz. En este libro, fieles
campeón del mundo entonces no se había a su objeto, vamos a demostrar la mane-
establecido todavía, Steinitz lo alcanzó en jabilidad de aquel juego a base de parti-
realidad. Los sucesivos resultados en los das prácticas de Steinitz.
torneos internacionales en que tomó par· Mientras que Morphy practicó el es-
te fueron: Baden-Baden, 1870, segundo tudio del juego abierto, Steinitz se esfor·
premio; Viena, 1872, primer premio; Vie· zó en conocer las legalidades de las si-
na, 1882, seguJ).dO premio. En este último tuaciones cerradas.
torneo, J. H. Zukert0 rt ganó el · primer No es eso una elección fortuita ni ca-
pre-mio, y junto con Steinitz fueron los sual, pues en ajedrez cada maestro pugna
dos directores y sin contradicción de na- por aquel estilo que mejor se adapta a
die los guías del ajedrez. En el año 1886 su carácter.
tuvo lugar la primera lucha para el cam- El juego abierto de Morphy nos de-
peonato del mundo, entre ellos, y como muestra el carácter de un hombre de rá-
que Steinitz habíase establecido·· en los pida libertad de acción que de~ea el éxito
Estados Unidos, los encuentros tuvieron rápidamente. Steini.tz es todo lo contrario,
lugar en la ciudad . de Nueva York, St. no buscaba lo brillante y la rapidez de
Luis y Nuev.a Orleans, alcanzando Steinitz la acción, sino el valor duradero. Así lo
el título oficial por 10 a 5 y 5 tablas. vemos a menudo entretenerse en larga
Posteriormente defendió su título en defensa, sólo por conservar la más ligera
varias luchas y con gran éxito, entre lae ventaja de posición.
cuales dos contra Tschigorin en 1889 y Esta fue la cualidad de su carácter que

-33
hacía de las situacione.3 cerr¡¡das su campo que de las negras. En Morpby, el jugador
predilecto. En la posición cerrada, los de ataque no encontraremos tales ataques,
peones están inmóviles por ambas partes, que hoy nos parecen tan naturales.
señal de una larga lucha ; en posición Un avance así en el flanco, sólo es ad-
abierta tenemos más mudanza. En el es- misible en cuanto se tiene asegurada com·
tudio de esta lucha de posición se resu- pletamente la posición en el centro y des-
me la obra principal de Steinitz y la base de luego, cerrando, mientras que Morphy
de toda la técnica ajedrecista moderna. abría siempre en el centro y obraba rá·
pidamente.
En el fondo del a taque de esta pc-
PARTIDA NÚM. 10 tida, se ve el medio precursor de las de
Steinitz, centro cerrado, seguro y una
PARTIDA ITALIANA presión de peones en el flanco de rey.
Londres, 1862 8. A3CR, P4TRf
9. P4TR,
Blancas : Dubois
Negras: Steinitz Hubiera resultado una combinación ad-
mirable después de 9. C x P; 9.... , PST 1;
1. P4R, P4R 10. CxP, PXA; 11. CXD, ASCR; 12.
2. C3AR, C3AD D2D, CSD; 13. C3A, C6A+; 14. PxC,
3. A4A, A4A AS X P y mate en breve.
4.~.
9 ... . , A5CR
Siguiendo los métodos modernos es más
conveniente esperar a enrocar, a fin de Supongamos que se jugara 10. P X P,
reservarse la posibilidad de enroque llll'- seguiría PST; 11. A2T, C2T y las ne-
go. Es de notar que esta tardanza en el gras alcanzan ventaja. Las blancas tra-
enroque no se encuentra en las partidas tan de contrarrestar el ataque del flanco
anteriores al tiempo de Steinitz, por· ejem- negro con la apertura del juego en el
plo, Morphy, el cual para facilitar el centro, que indudablemente sólo es posi-
avance rápido de 1~ peones centrales, de- ble con el sacriñcio de peones.
bía abrir el juego, y es evidente que para
colocar a su rey en seguridad debía en· 10. P3A, D2D
rocar cuanto antes. 11. P4D, PXPD
12. PSR, PXPR
4 .... , C3A 13. AX PR, CXA
. 5. P3D, P3D 14. cxc, D4Af

Contrarresta el juego de Steinitz con Con esta jugada se ha vencido el con-


el de su contrario, en que espera para trajuego que tenían las blancas en el
el enroque. centro, reforzándose el ataque de las ne-
gras.
6. A5CR,
15. CXA, PXC
Las blancas no sospechan lo que pro- 16. A3D, D4D
vocan con esto; Les hubiera convenido 17. P4C,
más desarrollar su aiñl en 3R.
Intentando continuar después de A3C
6 • .... P3TR con 18. P4AD y PSAD. Las negras sacri-
7. A4T, P4CR fican su alfil amenazando, a previsión de
que el ataque contra ~a columna TR será
Estas son las consecuencias del anticipo decisivo. El eje de la combinaCión está en
de 18ll blancas y del retardo en el enro- la jugada 22 de las negras, pues Steinitz,

34-
a pesar de la pérdida de una piesa, cam· ll. DIR,
bia las damu para quitar la casilla de
huida 2AR al rey blanco. Si 22. TlR, seguiría T8T+ ; 23. R2A,
DXT+; 24. DxD, CxP+; 2S. R2R,
17 •... , TIR+.
18. P4AD,
22 .... , D6R+
Relativamente es lo mejor. Las blancas 23. D X D, PXD
quieren quitar a la dama negra el domi· 24. P3C, TST+
nio de la casilla SAR y de la gran diago- 25. RZC, T( 1T)7T+
nal. En este último caso las blancas te- 26. R3A, TXT+
nían la posibilidad de poder jugar P3C. 27. AXT, T7A+
En el trBllEclUSO de la partida ya vere- 28. RX P, TXA
mos la import!!Dcia de la casilla SAR.
Por la trabazón de las piezas blancas
18 •... , D3A en su situación, este final les es insoste·
19. PX A, TXP nible. Después de J?OC8S jugadas gana·
ron las negras.
Ahora la amenaza de las negras es: 20 •
... , TDlT; 21. P3A, P6C; 22. ASA+
(con el intento A3T), D3R! y un mate PARTIDA NÚM. 11.
próximo.
GAMBITO EVANS
20. P3A, TDlT
21.PXP, D1R Campeonato de Londres, 1863

Naturalmente, si se juega C X P; hu- Blancas : Blackbume


biera sido un error, por la continuación Negras: Steinitz
de 22. ASA+.
1. P4R, P4R
Situación despué! de 22. DlR 2. C3AR, C3AD
3. A4A, A4A
Negra.s: Steinitz 4. P4CD, AXPC
5. P3A, A4A

Como Ya en otra ocasión lo hemos


apuntado,· es ·mejor la jugada A4T, por·
que el alfil no queda expuesto al ataque
por P4D. Según los métodos de apertura
de aquel tiempo, ambas eran consideradas
como equivalentes.
6. P4D,
Si el alfil estuviera en 4T, las negras
no tendrían ahora necesidad de abandonar
el centro con P X P, sino que podrían
jugar 6. P3D. Si las blancas juegan 7.
PXP, PXP; 8. DXD+, CXD; 9.
C X P, quedan en desventaja por la mala
posición de sus peones al intentar recon·
quistar el peón del gambito.
6. PX P
Blancas: Duboi' 7. 0-0, P3D

-35
Sería malo P X P, porque seguiría 8. !izarse, pues es evidente que todo er in-
AXP+, RXA; 9. D5D+ terés de las blancas será oponerse a seme-
jante cambio.
8. P X P; A3C Con la jugada del texto, Steinitz se nos
presenta con una fuerte posición para em-
La situación presente era considerada prender un ataque contra el centro de las
como la normal en el gambito de Evans, blancas.
porque las jugadas que se han empleado
hasta ahora por ambas partes, se concep- 10. A5CD,
tuaban como las mejores.
En una partida Morphy-De Riviere, que
9. C3A, siguió idéntica hasta esta posición, las ne-
gras, para destruir la amenaza PSD, no
Es significativo que este lance que
encontraron nada mejor que A2D, con lo
aparece como comprensible jugada de des-
que abandonaban el ataque contra el cen-
arrollo, la introdujera Morphy en la prác-
tro de sus contrarias. Con la jugada si-
tica del juego. Antes de él, preferíase el
guiente, Steinitz nos demuestra que lo qu¡
ataque directo, como, por ejemplo, 9. PSD
le impulsaba era la conducción del juego
aunque se ve claramente que tal jugada
posicional, su primer principio, y acepta-
tiene también sus reveses. Por un lado,
ba buenamente las pasajeras dificultades
limita la eficacia de A4A; por el otro,
que se le presentaban, para lograr su in-
inmoviliza los peones blancos del centro.
tento.
9 .... , A5C
10 ... . , RIA
11. AXC, PXA
En verdad que las blancas tienen un
peón menos, pero en cambio un desarro-
12. A3T,
llo mejor y, además; un centro de peones.
Esta formación de peones, 4R y 4D blan- Es difícil ahora encontrar un plan me-
cos, y 3D de las negras, la encontraremos jor para las blancas, que el de preparar
a menudo. La ventaja para las blancas el avance del centro, a fin de posibilitar
es que dominan el centro, dándoles la la explotació'n de la mala situación · del
posibilidad de poder llevar las figuras de rey negro.
uno a otro flanco. En cambio, las negras
están cohibidas, sus flancos de rey y dama 12. AxC
tienen mala comunicación entre sí. Véase,
por ejemplo, A3C, que sólo puede ser Aparentemente esto es peligroso, porque
llevado con grandes dificultades y con el abrir la columna CR, beneficia el ata-
pérdida de tiempo al flanco de rey. que de las blancas, pero Steinitz continúa
De estas consideraciones se deduce la , consecuente en su juego de inmovilización
forma en que ambas partes han de conti· del centro del blanco y al debilitamiento·
nuar, dado el centro igualado. del peón 4D.
Las blancas pretenderán llevar el ata·
que contra un flanco, a lo mejor, natu· 13. PX A, D4C+
ralmente, contra el de rey, porque pueden 14. RIT, C2R
pnsentarse con una superioridad. En cam-
bio las negras, tratando de atacar el cen- Para conseguir el ataque, las blancas
tro blanco, mudarán su táctica hacia el deben avanzar antes de todo su peón A;
centro, a consecuencia de la disgregación por lo tanto, deben aspirar a la posición
de sus fuerzllS, que una vez :reunidas es de la casilla SAR.
el resultado único que pueden practicar.
Además, las negras se darán por muy sa- 15. C2R, C3C
tisfechas, dada su situación cohibida , de 16. T1CR, D3A
ir al cambio de figuras, si éste puede rea- 17. D3D, R1C

36-
Ahora se 1mpide P5R, intentando con Ahora está claro que las negras, después
P3TR y R2T, unificar la acción de las to- de 29. P X P . T2 X PR, por el dominio de
rres para la continuación del ataque con· la columna R y por la flaqueza de los peo-
tra el centro de las blancas. nes blancos, quedarían en ventaja. Pero
Blackburnc evita la liquidación y conti·
18. AlA, P3TR núa magistralmente su ataque, que fraca·
19. P4A, R2T sa finalmente por la inexorable deíensn
20. P5A, C2R de su contrario.
21. AlC,
29. T5R, D5T
La debilidad del peón 4D se manifiesta 30. T5A,
sensible. Las blancas lo cuhrl'n con el alfil,
para am enazar C2R-4A-5T. ¡Muy genial!
Las negras no pueden tomar la torre.
21. ... , P4D Tampoco sería conveniente T2 X PR, por
la consecuencia: 31. T X P+ y 32.
Continuación del ataque contra el cen- DxP+.
tro blanco.
30 . ... , DX PR
22. P3A, TDID 31.PXP, Tl-10
23. C4A, TRIC 32. A3T,
24. C5T, D5T
25. P6A, Desde laego las blancas no pueden apo-
derane de la columna R con 32. TSR,
Con su ataque. las blancas recobran su porque las negras matarían la torre
peón del gambito. blanca.

25 . . .. , DXC 32. D3R


26. P x e, T2D 33. T4A, P4A
27.PXP+, P3C
28. TDIR, Las negras ya no ceden más la colum-
na R, impidiendo ahora T4R y amena-
Las últimas jugadas de las negras, nos zando aderilás "D X PA.
dan la impr~sión de que Blackburne ata·
ca impetuosamente y que Steinitz apenas 34. T4T,
se defiende, devolviendo el peón. En el
fondo, es otra la cosa. Mientras que Black- En la combinación, Blackburne ostenta
burne nada en el mar de la combinación, una fuerza de combinación tan digna co-
Steinitz encuentra, en lo característico de mo inútil. Caso de 34. . .. , D X PA, las
su estilo, lo esencial mente posicional y, a blancas ganan con 35. AlA, P4TR; 36.
pesar de las dificultades de la defensa, T x P+ !, PxT; 37. DxP+.
no ha perdido de vista ni por un momen-
to el objeto de su partida: la posición 34... . , P4TR
del dominio del centro.
Parecía, por ejemplo, más indicado ju- Muchos maestros hubieran caído aquí
gar en la jugada 26 . ... , TDIR, y no T2D, en la diabólica trampa de Blackburne,
__porque esta torre en 2D, quedaba expues- haciendo la aparente destructora jugada
ta al ataque mediante P X P; pero la si- 34. D7R, pareciendo que después del cam·
guiente jugada de las negras nos demues· bio de damas el final es perdido para las
tra la previsión de Steinitz, queriendo re- blancas. Pero la continuación hubiera sido
servar la casilla IR para la otra torre. 35. ABA! !, y si las negras toman la dama,
las blancas obtienen un empate por el
28 . . . . , TIR jaque continuo, pero si se intenta 35 .... ,

-37
Situación de&puéa de 34 . ... , P4TR PARTIDA NÚM. 12.

N egrcu : Steini.t:r: FIANCHETTO DE REY

Londres, 1863

Blancas: Steinitz
Negras : Mongredien

1. P4R, P3CR

Este desarrollo de flanco del alfil, que


suele designuse con la palabra italiana
«fianchetto», tiene desde luego ia ventaja
de colocar al alfil sobre la gran diagonal
desde donde domina eficazmente el . cen·
tro; pero tiene también el inconveniente
(especialmente cuando lo juegan negras)
de dejar demasiada libertad de movimien·
to al contrario en el centro. Por lo tanto,
semejante desarrollo de flanco sólo puede
hacene cuando se apoya con otras juga-
das de más fuerza inmediata sobre el cen·
Blancas: Bl.ackbume tro, tal como suele hacerse en las apertu·
ras modernas.
P4TR, sigue nuevamente el sacrificio de
la torre en ST. 2. P4D, A2C
3. P3AD,
35. A2C, T4D
La prudencia con que las blancas ase-
guran su posición en el centro, es carac-
Cubre 4AR, y renueva la amenaza de
terística de Steinitz. Si hubiese hecho ju·
tomar DXPA.
gadas agresivas, como, por ejemplo, 3.
NAD ó P4AR, las negras hubieran pro-
36. D2A, D7R
bablemente conseguido el debilitamiento o
37. D3C, D4C la ruptura del centro blanco, en poco
38. D3A, T7R tiempo.
Ahora es evidente que la cosa ya e&tá 3 ... ., P3C
ultimada. Pero Blackburne presenta aún 4. A3R,
otra trampa.
Las blancas juegan con ,;ran precisión.
39. P4A, Quieren que después de A2C el peón 4R
no sea defendido por A3D, pues este alfil
Si 39.... , AXP; sigue 40. TxP+; estará mejor colocado .en 4AD, sino por
D3CR, A X T; 42. D7C mate. C2D. · Y para poder hacer esto, desarro-
llan primero el alñl de dama.
39.... , TXPD
40. D3AR, 4... ., A2C
5. C2D, P3D
Amenaza el sacrificio de torre o de da· 6. CR3A, P4R
ma en 4TR. 7. PXP!

40•... , D4D A primera vista parece que con e~~ta ju-


41. Aboncloftan. gada las blancas alivian la posición de las

38-
negra. Pero lo cierto es que de esta for· gras es muy mala, y apenas pueden ha·
IDll lu blancas impiden la liberación de cer otra cosa, porque es el único rectll80
la.e piezas negras, que hubiera sido posi· de rechazar el alfil del rey de la gran
ble mediante PR X P, P X P, P4AD. Esta diagonal, con la coopernción de P3TD se-
posibilidad de libernción demuestra cuán· guido de P4C y PSA, y, al m.ismo tiempo,
ta vitalidad encierra la posición de afian· principiar un contraataque contrn la po-
chetto» si se logra apartar los peones cen· sición del enroque blanco.
tralee. que obstruyen el camino,
14. ese, P3TD
7 .... , PXP
8. A4AD, e2R Sitnación después de 14 . ... , P3TD
9. D2R,
N egrru: Mongredien
Nuevamente se repite aquí la caracte-
-rística expectativa de Steinil% para el en·
roque, :reservándose la posibilidad del en·
roque largo. Lo esencial de la posición
puede verse claramente; los peones del
centro, blancos 4R, 3AD y el negro SR,
impiden la invasión de las piezas negras·
al centro, pudiendo, en cambio, las blan-
cas atacar el flanco. Esta formación de
peones, unificada con el natural desarro-
llo de la dama en 2R, del caballo de da·
ma en 2D, y para más tarde el enr11que
largo, es una formación vista en nume·
resas partida~ de ataque jugadas por Steí·
nitz contra jugadores de fama como Black·
bume·, Tschigorin, Laskcr, etc. Esta partí·
da puede servir de modelo d2l desenvolvi-
mie~to del ataque steinitziano.

9 • ... , O-O
lO. P4TR, Blanccu: Seemw
Aquí hay que hacer la misma observa- Si P3TR, las blancas proseguirían con
ción que en la partida 9. El ataque al lS. C X P, T X e;
16. A X PT, obteniendo
enroque, que nos parece como natural ventaja.
en la forma de jugar de Steinil%, por lo
a menudo que lo empleaba, no la encon· 15. ex PT,
tramos en Morphy, quien enrocaba siem·
pre rápidamente a fin de penetrar en el Una combinación calculadísima y bella.
centro. Steinitz empieza su fino ataque
en este momento sin entretenerse en en· 15.... , ex e
rocar, pues de lo contrario tendrán tiempo 16. TX e, RXT
para defender la casilla 4TR con la ac· 17. D5T+, RJe
ción del eaballo C2D y C3AR. 18, TlT,

10. ... , e2D Si en vez de esto se juega 18. D X e,


11. P5T, e3AR no bastaría. Las negras obtendrían venta-
12. PX P, exP ja con D3A ..
13. 0--0--0, P4A
18.... , TlR
Evidentemente la posición de las ne· 19. D X e, D3A

-39
20. AX P+, DXA No para j ugar P4D, sino para conquis-
21. T8T+, RXT tar la situación central de la partida an·
22. Dx D, Abandonan. terior ( ~i tn a ciones de peones 3AD, 4D), la
cual protege el cen tro contra el ataque del.
Las negras aunque tengan dos torres contrario.
por la dama teniendo bloqueados sus a].
files y en vista de que los peones blancos 4 . ... , C3AR
son en mayoría, ya no se pueden defen- S. P3D, ~
der. 6. 0-0, ASC
7. P3TR, . AXC

PARTID.-\ NÚM. 13. Las dos últimas jugadas de las negra~ .


no las hubiera jugado un maestro mo-
DEFENSA PHILIDOR derno, pues precisamente por Steinitz fue
demostrada la ventaja de dos alfiles sob re
Dublín, 1865 alfil y caballo.

Blancas: Steinitz 8. DXA, P3A


Negras: MacDonnel 9. A3C, CD2D
10. D2R, C4A
Esta partida es un buen ejemplo para
el tratamiento de posiciones cerradas. Es Ahora se comprende el fin de la apa-
todo el método de los fundamentos que rentemente inútil jugada 9. A3C. Si el
creó Steinitz, y que fue popularizado por alfil estu,·iera todavía en 4AD, las blan·
los excelentes trabajos pedagógicos del doc· cas no podrían impedir el cambio del
tor Tarrasch. En este libro no responde- mismo.
remos a ninguna controversia teórica. Ex- .
plicaren;¡os en las partida~ únicamente lo 11. AlA,
esencial.
Las blancas están dispuestas a empezar
1. P4R, P4R el ataque de peones contra el flanco de
2. C3AR, P3D rey, con P4AR.
3. A4A,
En anteriores partidas vimos únicamente 11. C3R
la jugada 3. P4D, de impresión enérgica. 12. P3CR!!,
Pero Steinitz se lanza a una construcción
característica segura, más bien defensiva Las blancas quieren conservar los alfi-
del centro. Por la simétrica formación de les, por eso no juegan en seguida P4AR..
peones (los blancos en 3D y 4R; y los ne-
gros en 3D y 4R ), las perspectivas favo- 12 . . .... D2A
recen a los primeros, porque su alfil de 13. P4AR, · TIÜR
rey está desarrollado sobre la cadena de 14. C2D, ;TDlD
peones, mientras que el de negras queda 15. C3A, RlT
encerrado. Esto parecerá poco, pero co-
rresponde al importante fundamento que Las negras, ante su cohibida situación.
todo jugador que quiera adelantar debe no tienen ninguna j-ugada buena. La !Í·
apropiarse, y es que hay tanto más pro- guiente jugada, aclarará aún más la ,·en-
babilidad de obtener una ventaja, cuanto taja de las blancas.
más pequeña sea. A una ventaja grande,
~ólo puede aspirarse s~ el contrario ha co- 16. PSAR, ClA
metido ya graves errores. 17. P4CR, P3TR
18. P5C, PXP
3. A2R 19. C X PC, RlC
4. P3A, 20. R1T,

40-
La esencia de la ventaja de las blancas las negras a la larga estaban perdidas.
se reconoce claramente al ver el planea-
do ataque contra la columna CR y contra 25. TDICR, TR2R
la casilla 7CR. 26. PX P, PXP
Las blancns quieren triplicar sus piezas 27; A4T, T3D
en la columna CR, lo que les es fácil,
dado el terreno de que disponen. Y a no hay sitio para que la torre que-
Las piezas negras se obstruyen en su de en la fila dos de defensa.
propio camino, siéndoles muy difícil in-
tentar en adecuada forma la defensa del 28. TX P+, TXT
punto 7CR. 29. TXT+, DXT
30. AX D
20 .... , C3-2T
21. C3A, T2D y las blancas ganaron.

l.as negras deben empezar a preparar


la defensa de 2CR, lo cual puede hacerse P.utTlDA N ÚM. 14.
solamente de un modo muy pesado.
PARTIDA DE LOS TRES CABALLOS
22. TlCR, AID
23. A6T, P3A Baden-Baden, 1870
24. T2C, P4D
Blancas: L. Paulsen
Situación después de 24 . ... , P4D Negras: W. Steinitz

Negras: l1facDonnell l. P4R, P4R


2. C3AR, C3AD
3. C3A,

Lo que podemos decir de esta jugada,


es parecido a lo dicho de 3. A4AD (véase
partida 8 ). No es la consecuente continua-
ción al ataque al peón SR que empezó
con 2. C3AR.
Por lo tanto, las negras tienen más li-
bertad de acción que en la partida espa·
ñola, después de 3. A5C. La mejor con·
tinuación para las negras es 3. C3A, lle-
gándose así a la partida llamada de cua-
tro caballos. Si las negras escogen otra
jugada en 3.a, entonces la apertura se de-
signa «de los tres cahallosn.

3 .... , P3CR

El fianchetto al alfil de rey, es una


Blancas: Steinitz particularidad encontrada muy a menudo
en Steinitz. Morphy prefería el juego
Se comprende que las negras quieran abierto, rto jugaba el fianchetto, porque
de este modo libertarse, pero Steinitz tie- llevaba rápidamente sus piezas en acción.
ne por esta jugada la ocasión de aprove- Steinitz daba más· valor a las situaciones
char la desventaja característica de la si· cerradas y solía llevar las figuras allí don·
tuación cohibida de las figuras negras que de más tarde tendrían más eficacia aún
se estorban mutuamente. De todos modos a costa de perder . tiempo.

- 41
4. A4A, Las negras han .logrado su plan. Es
evidente que las blancas han de cambiar,
Es más usado 4. P4D, pues abre el jue- porque no pueden permitir la eterna pa-
go. Paulsen evitó esta continuación sin ralización de su alfil por PSAR.
duda porque con ello abría la gran dia-
gonal al alfil de rey de las negras. Por 15.PXP, CxP
otra parte, las blancas también podrían 16. C1A,
de esta manera llegar a aprovechar la
debilidad causada al punto 6AR, mediante Una triste jugada, pero las blancas no
P3eR, aprovechándola con la siguiente se dejan doblar sus peones en el flanco
continuación: 4. P4D, P X P; 5. esD !, de rey, pues se quedarían en el centro
A2e; 6. ASeR, y las blancas con ven· con un peón menos, después de e X.A;
taja siempre, recobran el peón, por ejem- 17. P X e, y en el flanco de rey no ten-
plo, después de P3A; 7. A4AR, o bien drían ningún equivalente, porque el peón
después de eR2R, con 7. A6A. doblado carecería de valor.

4. A2C 16... ., P3A


5. P30, P30
6. A5CR. 020 La formación del centro de peones por
7. P3TO, P4D, está preparada. Antes de hacer la
jugada P4D, Steinitz aún espera la con-
Para no dejarse cambiar el AR con clusión de su desarrollo, porque el cen-
C4T. tro de peones sería débil por la insufi-
7. P3TR ciente posibilidad de poder cubrirlo con
8. A4T, P4CR! otras piezas.

Este avance de peón en el flanco de 17. P3AO, OlAD


rey, aparece como un debilitamiento de
la posición negra, y produce ni más ni Las negras conducen a su dama a la
menos que una impresión desfavorable. eficaz casilla 3eD, desde donde puede
Pero con todo, no es más que la introduc- dominar todas las direcciones.
-ción de un meditadísimo plan que tien-
de a ganar la partida. 18, 02R, D3C
19. AlTO, A20
9. A3CR, CR2R 20. 0-0--0, 0-0-0
21. P3A, CXA
El propósito de ahora es jugar P4AR 22. ex e, P40
y por la amenaza de PSAR, obligar a las
blancas a cambiar PR X P. Las conse- El centro está formado, y ahora se
-cuenciaS para las negras, son la preponde- recordará lo que en preeedente ocasión
rancia de peones en el centro y la posi- hemos manifestado sobre el centro de
bilidad de formarlo. Esta es la idea del peones.
plan de Steinitz, Paulsen intenta salirse Las negras, con la pose!iÓn de un cen·
..al paso, pero es en vano. tro, lüpirarán a dirigir el ataque contra
UD flP.tCO.

10. P4TR, P5C No escogen para ello el flanco de dama,


11. C20, P4TR aunque allí se halle el rey, $ino el flanco
dP. rey, porque allí es donde las blancas
Impidiendo que las blancas desahoguen dari muestra de debilidad.
'su A3CR con su PST. En este caso las blancas no tienen más
remedio que avanzar contra el centro de
12. eso, ex e las negras, porque las figuras blancas es-
u. Ax e, C2R tán desunidas en consideración a m situa-
14. A3C, P4ÁR ción cohibida en el centro y no pueden

-42-
Uevar conjuntamente el juego. Considére- 37. T7C,
,se lo difícil que sería, por ejemplo, llevar
el A de 2T al flanco de rey o el C al Las blancas quieren sacrificar la cali-
-flanco de dama. dad en 7AR, luego A X P haría más sos-
tenible su situación.
23. RIC,
37.... ,
Las blancas, ante todo, resguardan su
rey, porque quieren avanzar contra el Situación de$pués de 37 . ... , A3R
centro negro, con P4AD. Negras: Steimt:
23 ... .• AlA
El a.l1il es conducido al ataque contra
el flanco de rey que es siempre el flanco
derecho de blancas, aunque éstas hayan
enrocado en el otro.

24. RIT, A3D


25. C.lA, TDIA
26. C2D, T3T
21. P4AD, A3R
28. C3C,
Con e.sta jugada, las blancas amenazan
destruir el centro de los peones negros,
-véase: PSAD, AXP; CxA, DxC,
DXP.

28 . . . . , PCX P
29. PX PA, AlAD Blanétu: Pauben
30. C2D, T3-3A
31. TlAD, En esta pOSición perdieron las blancas
por infracción de tiempo. De todas for·
Se amenaza P X P y las negras no po· m88, la partida no se podía sostener. En
drán contestar P X P, a causa de 33. primer lugar 188 negras amenazaban la
DxP. siguiente decisión: T X P. Si se cubre
eon T3C fracasa por PSR. Si 38. TIAR,
3l. Rlf' entonces las negras se encuentran con ma·
32. PXP, PX P yores probabilidades en su situación y
33. TlT-lC, A3D pueden ganar un peón con A X PT.
34. T5C, AlAR
35. CIC,
PARTIDA NÚM. 15.
La última tentativa para importunar el
centro negro con C3A. PARTIDA DE LOS TRES CABALLOS
35. D5D Viena, 1873
36. C3A, PJT
Blancas: Rosenthal
Sería un error D X PT, porque 37. Negras: Steinitz
'l'xPR, AXT; 38. DXA+, RIT; 39.
A X P, daría un contraataque completo; 1. P4R, P4R
ltOr ejemplo: TIR; 40. CSC. 2. C3AD,

-43
Esta apertura, que ha sido analizada 7. A4AD, P3D
por maestros vieneses, ha sido bautizada 8. 0-0, 0-0
con el nombre apartida vienesa». Todas
las continuaciones después de l. P4R,
Las blancas; gracias .a la situación de su
P4R, si quieren pretender dar una ventaja
peón 4R contra 3D, tienen el juego más
a las blancas, deben abrir el juego, ya sea
libre. V éanse las consideraciones de la par-
por P4D, o por P4AR. Para la jugada
tida 3a. La jugada que sigue de las blan-
P4D, la preparación C3AD no es prove-
cas es, sin embargo, precipitada.
chosa, más bien es perjudicial, porque
impide la posibilidad de P3AD. La ju- 9. P4A,
gada 2. C3AD suele hacerse en prepara-
ción · de P4AR. La importancia de la ju·
gada C3AD consiste en que, como ya sa- Las blancas tienen dos bonitos peones
bemos, la contestación más enérgica ru en el centro, pero no les durarán mucho ..
¡¡ambito de rey inmediato P4AR es: P4D
(gambito de Falkbeer ). 9. e4T!
Es comprensible, por lo tanto, la acción 10. A3D, P4D
de 2. C3AD, parecida a la de 2. A4AD 11. P X P,
(juego de alfil ) usada con frecuencia pa-
ra preparar P4AR. La mejor contestación No pueden jugar 11. PSR, porque las
contra la partida vienesa, como también negras ganarían una pieza con P4AD.
contra el juego de alfiles es 2 .... , C3AR,
la cual cubre la casilla 4D, permitiendo 11. exP
así la contestación P4D a 3. P4AR. En la 12. ex e, Dxe
partida que sigue, resulta por la . inver-
!iÓn de jugadas, la que conocemos con el
nombre de upartida de los tres caballos». El peón 4AR está sin motivo alguno-
en su sitio y ofrece un obstáculo para el
2. C3AD A3R. Les sería mucho más agradable a
3. e3A, las blancas tener todavía el peón en 2AR
porque ahora la columna R será más.
débil.
Según el espíritu de la partida vienesa,
después de las consideraciones apuntadas, 13. P3A, T1D
sería lo más natural la jugada inmediata
P4AR, o continuar el desarrollo por 3.
Amenaza ganar una pieza con P4AD.
A4AD, además de P3D y CR2R (3A) y
para más tarde P4AR.
14. D2A,
La preparación de P4AR por P3CR, y
además A2C (continuando la presión SD)
y CR2R, en resumidas cuentas parece Para pode~ contestar con 15. A4R, a la
q:ue es muy aplicable aquí. de las negras P4AD.

3. P3eR 14.... , CSA


4. P4D, PXP Consiguiendo a la fuerza la ventaja de
5. e .x P, dos alfiles unidos contra caballo y alfil.

.4.quí recomendábamos S. CSD (véase 15. Axe, DXÁ


la partida anterior). 16. D2A,
s. Ale Las negras amenazaban A XC ; A X A.
6. A3R, eR2R TXA ..

44-
Situación después de 16. D2A para los alfiles, mientras por otra, son
puestos .de apoyo para los caballos.
Negrru: Steínits El método creado por Steinitz, de apro·
vechar la ventaja de dos alfiles, sólo vale
para posiciones que sin estar cerradas,
tampoco tienen carácter de completamen·
te abiertas, como lo es la presente parti·
da, sino que tengan aún peones como
punto~ de apoy o para el caballo, por
ejemplo, las casillas 4D y SR.
Este método consiste en adelantar l0<1
peones negros a fin de que sean inacce-
sibles para el caballo estos puntos de
apoyo. De esta forma se le reduce a una
completa pasividad, casi nulidad.
Aquí veremos cómo también el alfil
puede ser molestado por idénticas juga.
das de los peones.
Este método también puede emplearse
en la lucha de un alfil contra un caballo,
pero es mucho más raro, porque el avan-
ce del peón debilita a menudo la situación
y da ocasión de que penetren las figura;
Blancas: Rosenthal contrarias. Con un par de alfiles, que
pueden cubrir casillas de ambos colores,
se puede, por regla general, proceder sin
La presente partida es la más antigua, grandes temores a estos avances .
.en la cual vemos la creación de Steinitz,
,d e la ventaja de los dos alfiles unidos. 16.... , P4AD
Gracias a los comentarios a las partidas de
maestros, los ajedrecistas saben en su ma· Quitando al caballo la casilla · 4D.
y oría que dos alfiles son más fuertes que
caballo y alfil. Pero son pocos los que 17. C3A, P3C
.saben el porqué de esta ventaja y cómo
puede ser aprovechada. A fin de que pue- Ahora se ha formado una cadena de
dan comprenderla mejor, diremos algo so- peones negros la cual impide al alfil blan-
bre la diferencia en la aplicación del alfil co de toda acción hacia el flanco de da-
·y del caballo. Contrariamente al alfil, de ma, y en la otra dirección queda cohi-
largo alcance, el caballo, para ser eficaz, bido por la posición de su propio peón
debe situarse cerca de las fuerzas enemi· 4AR.
gas. Esto el caballo sólo puede hacerlo,
so pena de ser expulsado. Podrá situarse 18. C5R, D3R
-casi en exclusivo, en casillas cubiertas 19. D3A, A3TD
por sus propios peones, porque las de- 20. TR1R
más piezas no pueden a la larga inter·
ceder en apoyo del caballo. Está clara· Ahora continúan las jugadas de peones
mente visto que en las situaciones abier- que van reduciendo el caballo.
tas donde no existen peones, el alfil es
más fuerte que el caballo, lo que queda 20. . . ., P3A
confirmado en los resultados de la teoría 21. C4C, P4T
-de finales. 22. C2A, D2A
En las posiciones cerradas, el caballo
ejerce una superioridad al alfil, por una Para jugar A2C. Las dos pequeñas fi.
parte, porque los peones son obstáculos guras blancas se ve cómo están completa-

-45
mente ence:rndas. Psicológicamente es ex- PARTIDA NÚM. 16.
plicable el siguiente intento de liberación,
de las blancas, que por cierto es bien de- ESPAl'\IOLA
ficiente.
Londres, 1876
23. PSA,
Blancas : Steinitz
Es notorio que las blancas no han pre- Negras : Black.hurne
visto que esto origina un débil peón.
l. P4R, P4R
Pero a Steini tz no le escapa u te de- 2. C3AR, C3AD
talle y con sólo cinco jugadas gana el 3. A5C,
peón, lo que no es más que una conse-
cuencia de la ineficacia de las dos figu- La <Cpartida españolu, la cual, corr»
ras blancas.
ya hemoe mencionado, ea la COIIJleCuente
continuación del ataque contn SR, que
23. P4CR principia con 2. C3AR. A decir verdad.
24. TDID, A2C aun no hay ataque ; !i 111.3 negras no · hi-
25. D3C, T4D cieraa ninguna jugada, no sería ventaj()oo
DXT sa para las blanca ~ A X C, PD X A; 5.
26. TXT,
C X P, porque si conlio.uaban así, las ne-
27. TID, gras ganarían el peón, quedando con muy
buen juego, con DSD, o también, D4C. El
A 27. D37, sigue PSC. ataque contra SR se manifiesta ya con
la aola continuación del desarrollo.
27. DXPA
28. D7A, 3• .. ., P3TD

Esta defensa tiende a desaloju el al-


Una desesperada introducción de con- fil, hoy día es la más usada.
traataques, que desde un principio son
jugadas sin éxito, porque las piezas m& 4. A4T
nores blancas no pueden cooperar.
Hemos visto antes que, 4. A X C no
28 .... , A4D gana ningún peón, sino que activaría el
29. P3CD, TJR desarrollo de las n.egras, después de
30. P4A, AlA PD X A. No obstante, se ha intentado
también A X C, la llamada variante de
31. A1A, T7R cambio de la partida española, con la idea
32. TlA, D7A de obtener ventaja en el final, a conse-
cuencia de la empeorada situación de los
Amenaza T X C. peones negros.

33. D3C, DXPT 4 .... , C3A

y las negras ganaron. Parece lógico, jugar en seguida P4CD,


debiendo contestar las blancas con 5. A3C,
pero podría preguntarse qué objetivo lle-
van las blancas en jugar a la española,
pudiendo adoptar la italiana con 3. A4A.
La contestación es, que después de 5. A3C,
la situación es más favorable a las blan-
cas que en la partida italiana después de
3. A4A, por dos motivos: el primero por-

46-
que el alfil en 3C está cubierto y más se- Esta jugada si la hacen los jugadores
guro que en 4A, estando mejor protegido poco eJqJCrto!, resulta eaz:i Eiemp•e una
contra posibles ataques mediante P4D o pérdida de tiempo y d&-ventaja, pero aquí
C4TD o A3R, ataques que en la parti· es sin embargo excelente. La idea no ea
da italiana hay que contestar precisamen- impedir ASC como ea el propósito de los
te con A3C. jugadores menos fuertes, cuando juegan
El otro motivo ccnaiste en . aprovechar P3TR, sino impedir mediante P4CR el
la posibilidad de un ataque con P4TD, por intento de liberación de las negras, una
la debilidad que producen en el flanco ves enrocadas, P4AR. Además, P4CR es
negro de dama los peones avanzados 3TD al mismo tiempo el principio dEl proyecta-
y 4CD y si más adelante, plll'a la libera- do ataque al flanco de rey. ·
ción de 1m juego, las negras juegan P4D,
el punto 4AD, que ya no puede ser de- 7 .... , 0-0
fendido por ningún peón negro, puede, 8. DlR, CIR
en cambio, ser la puerta abierta al ata·
que de las blancas. Para jugar P4AR. Pero las blanus ya
Por esta catl88, las negras evitan por lo han prevenido.
el mayor tiempo posible la jugada P4CD, Esta y la próxima jugada, dan la im-
hasta que sea necesaria para defender la presión de que las negras no pueden en-
casilla 4R. contrar ningún plan adecuado.
5. P3D, 9. P4CR, P4CD
10. A2A, A2C
La partida española de hoy día, se jue- 11. CD2D,
ga con la idea de desarrollar prontamente
P4D, como ya veremos en partidas pos- Las blancas quieren llevar el caballo
teriores. a SD . o SAR pasando por lAR y 3R o
_ Pero Steinitz optó siempre por su par- 3CR. Esta maniobra del caballo, jugada
tida cerrada, con sus peones en 3AD, 3D aquí por primera vez por Steinitz, se
y 4R. para luego atacar tranquilamente vuelva a encontrar con regularidad aun
el fianco de rey. No podemos admitir que en las partidas modernas.
con ello Steinitz renunciaba a la ventaja
de iniciativa de las · blancas. 11. .. ·~ D2D
Ahora, con la continuación del ataque 12. ClA, C1D
contra el peón SR. las negras se ven for- 13. C3R, C3R
zadas en jugar 5 .•••, P3D, obteniendo 14. C5A,
una pequeña ventaja las blancas, pues
1m alfil de rey queda libre mientras que " Es comprensible que las negras no
el de rey negro queda cohibido por la pueden dejar aquí este amenazante ca-
propia cadena de pe()nea (véase en la aper- ballo y lo quieren expulsar con P3C. Un
tura, en la partida 13 ), pero si las negras jugador modemo que conozca los puntos
quieren, en seguida 5. . .. , P4CD; 6. débiles por el método Steinitz, hubiera
A3C, A4AD; entonces la ventaja de blan- preferido jugar antes AlD.
cas e¡¡ que su alfil de rey queda más se-
guro que el de las negras (véase la nota 14... ., P3C
anterior) y que los peones del fianco · 1s. cxA+, DXC
de dama negro están debilitados.
Por primera ves, vemos aquí los lla-
5.... , P3D mados «puntos flacos». Entiéndase por
6. P3A, punto ílaco, la casilla que no puede de-
Steinitz construye su característica po- fenderse ya pOr medio de un peón, y en
sición defensiva en el centro. la cual pueda : establecerse una figura del
contrario, no \¡¡iendo expulsable por una
6•... , A2R propia figura. · Tales casillas son en esta
1. P3TR, situación, 6AR y 6TR. por la circuJul.

..:..... 47
tancia de que las negras no tienen al- Sit~U~Ción claprre& de 25 . ... D2A
fil negro. En p o s e s i ó n de u~ al-
fil así, especialmente para la defensa de Negras: Blackbume
2CR, las negras no tendrían por qué
temer. No puede .hacerse ningún reproche
a Blackburne por no haberse sabido en
aquel entonces. Hasta un Morphy se hu-
biera asombrado si le dijese que a las diez
jugadas siguientes las figuras blancas en
6AR y 6TR serían inexpugnables.

16. A3R, C2C


17. 0-0-0, \ P4AD
18. P4D,

Con las últimas jugadas que han efec·


tuado las blancas, han empezado la con-
quista de la diagonal ( 4D-6A ), para crear.
se paso hacia los puntos débiles de las
negras.

18 . . . . , PRX P
19. PX P, P5A
Blancas: Stfinitz
Esto facilita el intento de las blancas,
pero las negriiS intentaban un contrasta· Caso de P X P, sigue entonces 28. CSC.
que contra el rey blanco.
28. Ax e,
20. P5D C2A
21. D2D, Ahora con esta jugada las· blancas ga-
nan una pieza, pues en caso de D X A, se-
La dama quiere ir a 6TR ; el alfil a guiría 29. TIC.
6AR.
28, .. . , DX D+
21. P4TD, 29. AX D,
22. A4D, P3A
23. D6T, P5C y las blancas ganaron.
24. P5C, P4A
25 • . A6A
PARTIDA NÚM. 17.
Ya está conseguido. Gracias a la po-
sición dominante de las blancas, éstas ESPA~OLA
pueden precipitar la decisión mediante
una bonita combinación. Londres, 1883

25 .... , D2A Blancas, Englisch


(Ver diagraTM siguiente.) Negras: Steinitz

26. PX P, PXP 1. P4R, P4R


l. C3AR, C3AD
A CxPA; 37. A2xC, TxA, y 28. 3. A5C, P3CR
P6C, ganan en seguida.
Esta defensa empleada por Steinitz y
~- 1. P6C, DXPC máa tarde por Pillsbury fue reconocida

48-
i)omo insuficiente a raíz de la partida Después de todo, la ventaja de las ne·
Marco-Pillsbury en Viena, 1898. Lu blan- gras es la menor posible, pero lo bueno
~as descubrieron la debilidad de P3CR, de ella ·es lo instructivo que resulta en
por la continuación: 4. · P4D, P X P; 5. la continuación de la partida. Era más
ASC !. Pareée que las negras en la aper· fuerte 14. . .. , DSAD, pues las blancas
tura de peón de rey, (1. P4R. P4R) no deben cubrir su peón CD y después las
pueden permitirse el ñanchetto, porque negras podrían continuar con TD1D, con
las blancas tendrán ocasión de conducir ganancia de tiempo.
con ventaja de tiempo su juego abierto.
15.exD, TD1D
4. P4D, PXP
5. e X P, Ale Esto amenaza 16. ..., A X P; y si 17.
6. A3R, e3A TDlC, se puede contestar con ASD; (no
7. eD3A, 0-0 A6AD; a causa de 18. C4R).
8. 0-0,
16. P3AD,
Ahora si las negras en continuación de
su desarrollo juegan C XC; 9. A X,C, Una jugada que parece sin importan·
P3D; las blancas tienen la ventaja de cia, y sin embargo debilita la posición de
posición del peón 4R contra el peón 3D, las blancas. Él peón 3AD, por un lado,
el cual, según hem011 dicho, permite a significa una disminución del valor del
las blaricas mayor libertad de movimiento. A3R, porque puede obstruir su camino, y
En justo conocimiento de la .posición, por otro, queda debilitada la casilla 3D
Steinitz asegura, atrasándola, la juga· porque no puede cubrirse ni por peones,
da P4D. ni por el alill. Por lo tanto, en lo suce·
sivo, tal vez en el final. las blancas ten·
8 .... , e2R! drían dificultades para impedir la pene-
tración de las fig~ras negras en sus filas
Vemos aquí que Steinitz tiene una idea, por el punto 3D. Aquí se observa la regla
que mucho más tarde ·se ha modernizado general que vemos a menudo en las par·
en la defensa Alekhine. El quiere provo- tidas de Steinitz, de que no es bueno co-
car 9. PSR, C1R; 10. P4AR para apro- locar sus peones en los cuadros del color
vechar con P3D en bien de su propio de su alill. Nos contentaremos ahora con
desarrollo, el avanzado peón blanco. A _sólo llamar la atención sobre esta regla
pesar de esto, creemos que la continuación general, que es de una gran importancia
de las blancas debía haber sido 9. PSR, para el manejo exacto de las posiciones
pues después de CIR seguía 10. A4AR, cerradas o medio cerradas. Volveremos so-
y hubieran conseguido un buen juego. bre ella.
16... ., TR lR
9. DlD, P4D 17. e3C, P3C
10. PX P, e2XP
11. ex e, DXC Las negras forman la cadena de peones
12. AlR, ese como en la partida anterior, 2TD; 3CD;
4AD.
Esto les proporciona la preponderancia La cual, por una parte, limita la ac-
de los dos alfiles. ción del alfil 3R al fl anco de dama, y,
por la otra, quita la casilla 4D, que es la
13. AXC, AXA casilla más adelantada que está cubierta
14. C3C por un peón propio. (Véase las conside·
raciones anteriores sobre el ·aprovecha·
De lo contrario, las negras aumentan su miento de los alilles unidos. )
presión con TD1D.
18. P3TR, A3R
14.... , DXD 19. TRID, P4AD

-49
20. ASC, P3A Situación después de 30. R2A
21. A4A, R2A
Negras: Steinitz
V~amos ahora que las ventajas de los
dos alfiles son mucho más amplias. Las
negras ya pueden acercar su rey al centro
para la operación del final. Las blancas
con sus figuras restringidas, no pueden ha-
cer lo mismo, porque su rey estaría ex·
puesto al ataque de las figuras del con-
trario.

22. P3A, P4CR

El alfil queda restringido en el flanco


de rey, por la cadena de peones de esta
dirección.

23. TX T,

Las blancas ceden a su contrario la


columna abierta. Pero no pueden jugar
de otra manera; con 23. A3R se pierde Blancos: Enslisch
una pieza.
Por la explotaéión excelente de los dos
23. TXT alfiles, las negras comprimen la situación
24. A3R, P3TR de sus contrarias y la destruyen.
Acabando la cadena de peones en el 30.... , PXP
flanco de rey, y proyectando P4A con lo 31. AX PAR, A4CR
cual se desahoga el A2C y se impide el
acceso al punto SR por parte del caballo Amenaza cambio de alfiles y T7D +
blanco (C2D, C4R ), ya que este punto
(4R) queda atacado por un peón negro 32. AX A,
(4A).
A la jugada inmediata de R3R, gañan
25. T1R, P4A las negras con TIR + ; 33. R2A, T X T;
26. P4AR, 34. R X T, R3R; penetrando el rey ne·
gro en el campo de las blancas por 4D
Un intento de liberación comprensible. y SR.

26.... , A3A 32 .... , PXA


27. P3C, P4TD 33. R3R, R3A
34. P4T,
Continuando la presión sobre el caballo.
A 34. TIT, las negras fuerzan, con R4R
28. CIA, P5T, y PSA + la penetración de su torre ha-
29. P3T, cia 7D.

Debía impedirse P6T. 34. ..., PXP


35. PX P, TIR+
36. R2A, TXT
~~:
A5A
iüÁ, 37. RXT, R4R

50-
Como que el caballo no puede jugar cspaiíola con P4D, en primer lugar han
sin ser tomado por el alfil, ha resultado de guardar el peón en forma indirecta
ahora un final de peones, en el que las mediante el enroque (4. 0-0), pues así
negras, gracias a la posición de su rey, recuperan fácilmente su peón mediante el
ganan, aunq'ue las blancas tengan la ven- ataque a la columna R, jugando lo mejor
taja del distante peón pasado. 5. P4D después que las negras hayan
matado el peón con 4 .... , C X P. Pero
38. C2R, AXC como ya sabemos que Steinitz no jugaba
39. RX A, RSA para abrir el centro, adoptó 4. P3D.
40. P4A, RSC Después de esto, las negras quedaban
41. R3R, PSA+ obligadas a cubrir su peón de rey, y para
esto empleaban P3D, las blancas conse-
Si R X P las blancas aun ganarían con guían nuevamente ventaja porque que-
42. R4A. Se ve bien claramente que las daba libre su alfil de rey, mientras que el
negras ·calcularon en buena hora el final de las negras quedaba molestado por sus
antes de emprender el ataque. propios peones.
Repetimos nuevamente que es mejor
42. R4R, P6R colocar los peones ·en casillas de otro color
43. R3R, R6C que el del propio alfil; (Véase la nota a
44. Rinden. ·la jugada 16 de la partida 17.)
En las aperturas de peón de rey que
tengan cierto carácter cerrado, las posi-
ciones características son para las blancas,
PARTIDA NÚM. 18. los peones en 4R y tal vez 3D y para
las negras, los peones en 3D y .4R. De
ESPA~OLA esto resulta que el mejor alfil de las
blancas es el que corre por casillas ne-
Habana, 1892 gras y el mejor de las negras es el que
e·s tá en campo blanco, o sea, por ambas
Blancas: Steinitz partes el alfil de dama. Hemos visto que
Negras: Tschigorin el alfil de dnma es libre por ambas par-
tes y sólo corren peligro de quedar ence-
1. P4R, P4R rrados los alfiles de rey.
2. C3AR, C3AD En la apertura de peón de dama, pasa
3. ASC, C3A lo contrario (1. P4D, P4D), en la cual
los alfiles de rey son más fuertes, mien-
La llamada «Defensa Berlinesa» de la tras que los de dama permanecen cerra-
partida española. Desde un principio las dos. Mientras que en la apertura de peón
negras emprenden un contraataque con- de rey el peligro de las negras consiste
tra SR, en vez de ocuparse · de la defensa en el encierro del alfil de rey, por la ca-
de 4R. dena de peones 3D y 4R, en la apertura
Si ahora las blancas, como suele suce- de peón de dama es el buen empleo del
der, juegan a la española con la espe- alfil de dama ~ principal problema.
ranza de abrir ventajosamente el juego
con P4D, no parece bueno continuar con 4. P3D, P3D
P3D. Tampoco es indicado en este caso S. P3A, P3CR
4. C3A, porque las negras pueden conti-
nuar el contraataque a SR con ASC, obli- Aquí, donde Steinitz ha empezado a
ganda a las blancas a contentarse con la constituir su típica situación cerrada en
defensiva jugada P3D. el centro, es más tolerable esta juagada
Tampoco es recomendable 4. D2R, si que con anterioridad, cuando las blancas
quieren hacer luego P4D, porque quitan aun podían abrir rápidamente el juego.
una defensa a la casilla 4D. Si las blan-
cas quieren conducir abierta la partida 6. CD2D,

-51
Las blancas establecen la posición de la Steinitz, en vista de la debilidad de Tschi·
misma forma que en la partida 16. gorin producida por la jugada PA X P,
abandona en seguida sus demás ventajas
6. R2C de posición (defensa de su centro cerra-
7. C1A, O-O do) y trata únicamente de aprovech~
8. A4T, del debilitamiento de la diagonal de que
hemos hablado. Pero para ello es preciso
Las blancas quieren conservar su al· de que se ·abra el centro, pues de lo con-
fil de rey. En SC estaba expuesto al trario obstruye las diagonales.
cambio por C2D y C4A, que efectivamen·
te juega Tschigorin además de P3TD. 14. PX P, CXP
15. cxc, DXC
8. C2D 16. A3C, D3A
9. C3R, C4A
10. A2A, C3R Las blancas ya han conquistado una
11. P4TR, diagonal, ahora van por la otra 1TD-8TR.

El ataque de flanco por el peón, que 17. DlR, A2D


ya conocemos de varias partidas de Stei· 18. A3R, R1T
nitz, empieza con esta jugada. 19. 0-0-0, TDIR
11. ... , C2R
12. P5T, P4D De esta forma , las negras impiden des-
13. PT X P, PAXP de un principio el intentado P4D.

20. D1A,
Si se jugase PT X P, las blancas con
14. D2R, huhieran mantenido la sitna·
ción firme del centro, análogamente como Aparece inofensivo, para lograr P~D.
lo que las negras no pueden impedir; p ero
en otras partidas, para el ataque a la co-
lumna TR, mediante el probable enroque la combinación va mucho más lejos.
largo más tarde. Con esta jugada, Steinitz plantea ya la
sorpresa de la jugada 24.
Pero después de PA X P aparece otra
pérfida flaqueza en el flanco de rey ne-
gro, caracterizada por la falta del peón A 20 .... , P4TD
o bien su avance P4AR, más marcada
aún por la posición avanzada del peón en Tschigorin, que está inconsciente al
6C. Esta flaqueza consiste en el debilita- borde de la catástrofe, quiere introducir
miento de las diagonales 2TD-8CR y 1 TD. un contraataque.
8TR, que ya hemos visto en la partida 8.
Esta debilidad es la causa que a menudo 21. P4D, PXP
da brillantes combinaciones. Es evidente 22. C X P, AXC
que Steinitz, en el estudio de brillantes
combinaciones antiguas, no achacó todo A 22 . ... , C XC; con 23. TXP+,
el éxito al genio del maestro vencedor, R X T; 24. Dl T + ganan en seguida.
sino que supuso que tal brillante com-
binación tenía su fundamento en alguna
debilidad de la posición de su contrario. 23. TXA,
Así, probablemente, se ha creado una
teoría de combinaciones; buscando y ha- La gran diagonal ha sido también con-
llando la telación existente entre debili- quistada, y Steinitz tiene a su alcance la
dades de posición propensas a reprodu- rápida y brillante decisión.
-cirse, y las consiguientes combinaciones
a que dan lugar. Así vemos, pues, que 23 . . .. , CXT

52-
SitUllción de& pué& de 23 . ... , C X T de absoluto correcta, siendo mejor conti-
nuar con 4-. P3D, más C3A y A3R, y
N egros: Tschigorin finalmente P4D (tal vez después de D2D
y 0-0-0 ). No obstante, las negras han
de prepararse a contrarrestar el intento
de formación del centro de las blancas.
Si éstas no logran su propósito, tienen,
desde luego, ventaja.
La jugada que destruye el centro de
peones es P4D. Las negras deben jugar
a este fin y deben continuar con 4-. . .. ,
C3A.

4 •. .. , C3A

Después de lo dicho, sería falso jugar


4. ... , P3D, porque las blancas formarían
su centro con 5. P4D, PX P; 6. PxP y
después de 6. A3C saldrían al paso de
C3A y P4D con C3A.

S. P4D, PXP
6. Px P,
BlanClU: Steinit:
También se intentó aquí 6. PSR, pero
las negras contestarían con P4D y lleva-
24. TXP+, RXT rían una ventaja de tiempo.
25. DlT+, R2C
26. A6T+, R3A 6 . ... , A5C+
27. D4T+, R4R
28. DXC+ Abandonan Para ·el ataque af centro de las blancas,
el alfil estaría mejor en 3C, pero después
de 6. · A3C, las blancas podrían impedir
la intentada jugada liberadora de las ne-
PARTIDA NÚM. 19. gras, P4D, con 7. C3A.
ITALIANA 7. C3A,
Hastings, 1895 La más sólida continuación es aquí 7.
A2D, y después de A X A+ ; 8. CD X A,
Blancas: Steinitz las negras podrían jugar P4D, teniendo
Negras: Von Bardeleben las blancas &i juegan 9. P X P, C X P, un
peón aislado en 4D, en vez del proyectado
1. P4R, .. P4R centro. Como ya hemos anotado (véase
2. C3AR, C3AD la partida 3) la ventaja principal de un
3. A4A, A4A peón contrario aislado consiste en que
4. P3A, se puede ocupar sólidamente la CI!Silla
que está delante de él (en el presente caso
Las blancas quieren utilizar la situa- la casilla SD), pudiendo colocar allí una
ción del A4A para formar un centro de pieza sin temor a que sea echada por
peones, con P4D, P X P, P X P. un peón. ·
Sin embargo, si las negras contestan Este plan, las blancas n,o lo pueden mo-
bien, no lo logran, así es que esta IU!ti· lestar con éxito en el curso de la partida,
gua continuación no puede ser calificada por ejemplo, 10. D3C (para atacar SD e

~53
impedir A3R); 10.... , C2R; (todas las 9. o--o, A3R
jugadas de negras llevan la señal del am· 10. ASCR, AlR
plio desarrollo en la construcción del
afuerte» 4D, ilo por cierto del ataque al Con el cambio que sigue, Steinitz im·
peón aislado), además P3AD, D3C (para pide el enroque de las negras y logra
dar juego al AD) y aun A3R. que su ataque sea más fuerte.
Steinitz escoge aquí, en vez de 7. A2D,
la jugada -de gambito 7, C3A; la cual ya 11. AXC, A3XA
se halla en la obra del antiguo maestro 12. C X A, DXC
italiano Greco (principios del siglo XVII), 13. AXA, CXA
y ha sido nombrada ataque de Moller, en 14. TlR, P3AR
consideración al mérito del teórico danés
Moller que la analizó. La idea de este Puesto que las negras no pueden enro-
gambito es la misma que en la mayor car, quieren poner ·Sus torres en comunica-
parte de los gambitos: las blancas no ha- ción por R2A.
cen caso del atacado peón, sino que con-
tinúan audazmente su desarrollo. Si las 15. D2R, D2D
negras pierden tiempo para tomar el peón 16. TD1A,
da un fuerte juego abierto, consiguiendo
las blancas la ventaja de su desarrollo, Esta jugada debe inducir a las negras
por el juego abierto, que a veces puede al abandono de su R2A más C4D (ocupa-
ofrecer una compensación por la desven- ción del punto fuerte) y TIR, con lo cual
taja material. La variante principal del hubieran rechazado el ·ataque de las blan-
gambito de Moller empieza con 7. C X PR cas, y efectivamente, Bardeleben se ate-
8. 0-0, A XC (sería motivo de combina· moriza.
ciones desfavorables para las negras ju-
gar 8. . .. , C X C; 9. P XC, A X P; 10. 16.... , P3A
D3C. En eambio, se puede jugar 9. P4D);
9. PSD; á 9. P X A, las negras se colo- Por lo visto las negras temían que des-
can en seguridad con P4D. Es muy difícil pués de 16. R2A, vendría el sacrificio de
encontrar fundamentos generales para el la calidad mediante 17. DxC+, DXD;
juicio· y trato de estos fogosos giros. Sólo 18: TX D+, RXT; 19. TXP+ . y las
debe aceptarse un gambito, si se ha hecho blancas todavía ganan otro peón por la
un estudio del mismo. Bardeleben, en esta calidad y aparentemente tienen un buen
partida, ha obrado muy bien en perseguir juego con la entrada de la torre en la
la destrucción del centro blanco median- línea séptima.
te P4D. Todo esto no es más que aparienCia,
porque las negras pueden contestar. con
7 ... . , P4D 19. R3D; y 'después de 20. T X PCR, o
8. P X P, CRXP también T X PCD, ganan un tiempo con
TlAD por la amenaza de mate, para lue-
Con semejanza a la variante anterior go con T7 A cambiar la torre blanca o
que empieza con 7. A2D, las blancas tie- rechazarla. Los dos peones blancos no
nen en vez de un centro de peones un ofrecen entonces compensaCión por la ca-
peón aislado en 4D. lidad, puesto que no los tienen pasados,
La forma de juego 4. P3AD, escogida además un caballo frente a una torre es
en esta partida es aquí rehttada por no bastante impotente y el rey negro está
dar la ventaja apetecida, pero las blan- pués pe la jugada del texto, Steinitz con-
cas tienen perspectivas de ataque por el sigue la victoria en forma admirable.
juego de sus piezas, más libres que por
la variante 7. A2D. Si las negras forta- 17. PSD,
lecen con empeño su punto 4D los ata-
ques blancos acabarían por ser rechaza- Un sacrificio posicional de peón que
dos por este baluarte. cambia totalmente la situación. F,:l cuadro

r;4-
SD, que hasta ahora ha sido fuerte, en 22. T X C +, R1A
el cual se ofrecía la perspectiva de que
las negras colocarán una inexpugnable fi. Las negras no pueden tomar la tone.
gura, queda bloqueado por un propio peón
negro y, por lo tanto, inaccesible para las Si D x T signe 23. TIR +, R3D; 24.
mismas figi¡ras de su bando. Por otra D4C +, R2A; 25. C6R +, RIC; 26. D4A
parte, el peón negro que en esto va a y ganan.
4D. será un peón aislado y las blancas
reciben el puesto fuerte 4D, con la p08Í· La profundidad de. la combinación está
· bilidad de sentar ·un caballo para que pe· en que después de la jug~da 22. RIA, to-
netre por 6R, antes de que las,. negras.
obteng¡m la posibilidad de disputar a las das las figuras blancas quedan atacadas,
blancas la posición de la columna me· y además, las negras amenazan mate, así
diante R2A y TIR. es que las blancas, a favor de una figura
más aparentemente, están perdidas, pero
17.... , PXP Steinitz lo ha calculado mucho más ade-
18. C4D, R2A
19. C6R, TRIAD lante.

Debía impedirse 20. T7A. i3. T7A+, RJC


20. D4C, P3CR Es evidente que el rey no puede retro-
21. C5C+, RJR ceder, y la dama no puede tomar la to-
rre, porque seguiría T X T + .
Situación de!pués ele 21 . ... , RlR
Negras: JI, Bardeleben .
24, T7C+,

La torre continúa la persecucton del


rey. Las negras no pueden contestar 24•
. . . , RIA, porque 25. C X P + sería de-
cisivo.

24.... , Rinden

La continuación hubiera sido la siguieD-


te: 24 .... , RlT; 25. TXP+, RlC; J6.
T7C+, RlT; 27. IUT+, RXT; JI.
D7T+, RlA; 29. D8T+, R2R; SO.
D7C+, RlR; 31. DBC+. R2R; S2.
D7A+, RlD; 33. DSA+, DIR; M.
C7A+, R2D; 35. D6D mate.

Bltmctu: Steinitz

-55
SIEGBERT TARRASCH

Steinitz tuvo rivales como Anderssen, Tarrasch ha rendido todo lo notable en


más' tarde Black.hume y Zuckertort que el terreno de ajedrez y como la mejor de
por su talento ajedrecístico le aventaja· sus obras, aparece su libro «Dreihundert
ban, pero por la profundidad de su teoría Schachpartien» (Trescientas partidas de
general en todas las luchas los venció. ajedrez), en la cual expone sus sobornan·
Según observó Lasker, la teoría de Stei- tes principios.
nitz parece abarcar algo mucho más La partida que sigue conduce a una si·
grande que el ajedrez, y es la misma tuación bastante cerrada, dei!pués de la
Vida multiforme, de la que el ajedrez apertura, caracterizándose por los peoneg
es un espejo. Así se desarrollaron en del centro, los blancos 4D y SR, y los
dos tendencias las teorías de Steinitz. En negros 4D y 3R que están parados. Más
primer lugar, por el lado filosófico, como tarde se les unen aún los peones 3TD }'
teoría de la lucha en general, ofreciendo 4CD, así como 3TD y 4CD, todos del
para ello el ajedrez un buen ejemplo, y flanco de dama.
por el puro lado ajedrecístico donde se En esta partida podemos ·aprender dos
trataba de dar una forma a la teoría, que estratagemas, repetidas a menudo·, que no
fuera . la más adecuada para el manejo hace mucho ya las hemos mencionado,
práctico de una partida de ajedrez. pero que ahora especificaremos todavía
El primer camino, demasiado apartado más.
de la partida de ajedrez para poder hacer La primera couiste en que en las si~
eseúela, lo siguio Laslter y el otro lo es- tuaciones cerradas el alfil que se mueve
cogió Tarrasch empezando a dar una for- en cuadros del mismo ·color que los pro-
ma científica a la teoría, siendo el · maes· pios peones .parados viene a resultar una
tro·. de la generación de los maes¡ros de pieza de muy escaso valor si se encuen·
aJedrez posteriores a Steinitz. tra dentro de esta cadena. Es de mucho
El doctor Siegbert Tarrasch nació el menos valor que otro alfil o caballo. En
S de marzo de 1862 en la ciudad de Bres- la partida que sigue, · vemos · un semejante
lau. Estudió Medicina, ejerciendo durante alfil negro de. dama, que se encuentra en-
muchos años . en Nuremberg, y después cerrado por la cadena de peones 3R, 4D,
en Munich. En estos últimos años se ha 4CD y 3TD. La desventaja de este a1ñi
ocupado exclusivamente en materia aje- .no está sólo en el reducido campo de
drecística. acción que tiene, sino en que no puede
Sus mejores éxitos han sido los siguien- contribuir a cubrir los puntos ·débiles de
tes: Primer premio· en lo5. torneos inter- las negras,. como, por ejemplo, 4AD y · 3D
nacionales de Breslau, 1889; Manchester, por dentro de su propia cadena de peo-
1890; Dresden, 1892; Leipzig, 1894; Vie- nes, así es que estas casillas negras están
na, 1_8 98; Montecarlo, 1903; Ostende, predestinadas a ser débiles, en el sentid(}
1907, y además sus aplastantes Victorias interpretado por Steinitz.
sobre Wahlbrodt en 1894 y Marshall en En tales situaciones, se dice que 1as ne-
1905. gras son débiles en las casill'ls negras.

56-
La otra estratagema, que podemos peones, y e~te sistema de apert1.1ra, a
aprender en esta partida, es el típico tra- pesar de los intentos del maestro alemán
tamiento de una situación cerrada del con- Luis Paulsen, ha sido definitivamente
trario. En lo .general, la ·decisión en una abandonado.
situación cerrada no puede acarrearse di- Sin duda, esto sólo se refiere al siste·
rectamente, sino qile se debe abrir la po- ma general .de querer formar y defender
sición ya de antemano. De esta forma la semejante cadena de peones que cohibe
victoria sólo puede ser obtenida mediante al contrario.
un ataque de flanco del que está mejor La jugada 3. PSR, a buen seguro con
colocado, con el objeto de abrir el juego. otra idea, fue sin embargo introducida de
Lo esencial de esto es, antes de la rup- nuevo por Steinitz. En estos últimos años
tura, aprovecharse de la libertad de te- Nimzowitsch ha desarrollado ampliamente
rreno que se tiene, a ,fin de colocar las esta idea de Steinitz, y en muchas parti-
figuras en propicias condiciones para más das la ha llevado a cabo con éxito. En el
tarde sacar provecho del juego abierto. capítulo correspondiente, véanse más de-
talles sobre este particular.
Morphy, el maestro del juego abierto,
PARTIDA NÚM. 20. continuaba con . 3. P X P consiguiendo éxi-
tos contra sus contemporáneos, quienes
FRANCESA raramente comprendían la pérdida de
tiempo; en cambio, hoy día, esta varian-
Hamburgo, 1885 te sólo da empate; es la o: variante del
cambio», la variante de las tablas. Des-
Blancas: Tarrasch pués de 3. PX P, PxP, sólo hay una
Negras: Noa columna abierta, la columna R. Como que
ninguno de los dos jugadores puede ceder
1. P4R, P3R al contrario el dominio de esta única .co-
lumna abierta sin llevar desventaja ne-
En la lucha de la' apertura para el do- cesariamente se llegará a la oposición y al
minio del centro, casi no es posible con- cambio de piezas en ella.
seguir !!l equilibrio para las negras. Des- A esto hay que añadir que ni negras
pués de las jugadas l. P4R, P4R, la me- ni blancas pueden jugar dos pasos su
jor continuación de ataque la tienen las peón AD, para seguir abriendo, sin llegar
blancas, que ya veremos más tarde, en a desventaja, por quedar aislado su peón
la partida española se logra con P4D, de dama después del cambio de peones.
mientras que las negras ha:n de contentar- Al principio de obligarse lo más tard~
se con P3D. posible a un -cambio determinado, corres-
ponde la variante 3. C3AD, de Paulsen,_
2. P4D, P4D que es la continuación más corriente.
Ahoras las blancas tienen atacado un 3. C3AD, C3AR
peón. ¿Qué deben hacer con él? En el
tiempo del maestro Philidor la influencia Otras veces hemos dicho ya que · en las.
era dominante sobre la conducción justa formación de peones centrales proceden·
de las peones, y se jugaba 3. PSR, con- tes de las aperturas de peón de rey, el
siguiendo las blancas una preponderancia peón blanco 4R, contra- el peón negro
de terreno, pero ocurría que con la jugada 3D, da a las blancas mayor libertad . de
de peón habían perdido tiempo, pasando terreno. Sería cosa análoga después de
.la iniciativa ·a las negras en jugar 3. 3. . .. , P X P; 4. C X P {blanco 4D, ne·
P4AD, además de C3AD y D3C, y más gro 3R). .
tarde con P3AR podían atacar el centro No obstante, este cambio aquí, o más
de peones blancos. bien en la próxima jugada. fue realizado a
Resulta de esto que las blancas no pue- menudo por Lasker, Rubinstein, Tattako-
den, a la larga, defender su cadena de wer y Alekhine. Naturalmente, que las

57
negras han de aspirar para más tarde a 9. C3AD, 0-0; 10. C3A, P3A; ll.
P4AD, ó P4R, para alejar al presionan- A3D, PxP; 12. PAXP, Txe; 13,
te peón 4D y ·así desenredar el.juego. P X T (para no perder los doa peones del
centro), DST+; 14. R1A, ex PD; 15.
4. PSR, P4A, D6T+; 16. R2A, A4AD; 17. A3R,
CxP; 18. Px C, A2D. .
Es preferible dejar para más adelante
la decisión sobre el empleo del peón 4R, 9 •.. ·1 D3C
jugando aquí 4, ASCR 10. C3AR,

4 •... , CRlD Las blancas quieren dejar enrocar a las


S. CD2R, negras antes que acarreen el cambio de
damas, porque para el final sería enton-
Para mantener intacta la cadena de ces desfavorable la situ!lción del rey negro.
peones, después de P4AD, con P3AD. Sin
embargo, este plan es . errado del todo. 10. 0-0
11. Ax A, DXA+
Las blancas debían seguir el ejemplo 12. D2D, C3C
-de Steinitz y continuar · con 5. P4AR y 13. C3A, T1D
después de 5 .... , P4AD, jugar 6. P X P,
y contentarse con mantener el pUD,to SR. Para reforzar la amenaza de la jugada
El intento de mantener . intacta la cade- anterior esA, pues después de A X e;
:na de peones, o sea, de seguir cohibiendo P X A, el peón blanco de dama quedaría
el juego de negras, es contrario ·a l prin· debilitado.
cipio que dice que no conviene buscar
·una ventaja grande mientras que no lo 14. C5CD!
justifique alguna falta del contrario o pro-
.Pias ventajas poco a poco acumUladas. Para obstruir la línea de torre en 6D.
5.... , P4AD
A2D
6. P3AD, CD3A 14•... ,
7. P4AR, PXP 15. C6D, TDIC
16. TDIA,· DXD+
Para dar un ejemplo de la forma per- Las blancas se han guardado mucho de
fecta e instructiva de cÓJilli el doctor Ta- cambiar las damas dejando que lo haga el
rrasch explica sus partidas; damos desde contrario, porque el rey blanco queda en
. aquí hasta el final sus propias anotacio- una posición ventajosa.
nes ·de las «Trescientas partidas». Las ne-
cgru sujetarán mejor la ventaja que les 17. RX D, CIA
produce ·la ilógica jugada del caballo 18. C5CD, P3TD
blanco a 2R, si dejasen para más tarde 19. C3A,
este cambio de peón que rompe la tensión
-demasiado pronto, continuando aquí con Como las negras no han explotado
D3C, P3A y 0-0. la debilidad del centro blanco en los
comienzos de la apertura, ahora es ya
8. PX P, ASC+ muy fuerte, comprimiendo considerable-
9. A2D! la situAción de sus contrarias.

Calculando bastante ampliamente, la ju- 19.... , CI-2R


gada más lógica, 9. eaAD, conduciría al 20. A3D, TIC-lA
"Slicríficio de calidad en 3AR posible a 21. P3CD,
menudo en la partida francesa, quedándose
'luego las negras con ~ma fuerte posición Para jugar el caballo 3AD a 6e pol
:de ataque, o sea : vía 4TD lo que antes hubiera sido meo

58-
rrecto a causa de CxPR o CxPD y Para dejar sitio al caballo.
A X C. En la lucha que sigue en el flanco
de dama, . trátase principalmente de la 25 •... , T2A
posesión del punto SA; a8í como 4A, por 26. T2A, TI-1AD
los caballos. (Puede indicarse aquí que 27. Tl-lAD, RlA
en esta lucha las blancas tienen 1118 me- 28. P4e, AlR
jores «chances» para el establecimiento 29. e2D, e2D
dé un caballo en SA como en 4R. El fun- 30. e3e, e3eD
damento está en el hecho que ya hemos 31. esA,
indicado en la introducción de la parti-
da, o sea, que las blancas tienen un buen Por fin el caballo ha conseguido esta
álfil y que está colocado en colores dife- dominante situación.
rentes a los de sus propios peones, cuan- 31. ... , CSA+
do en cambio las negrll8 tienen un mal al-
fil que corre por cuadros del mismo color Esto no es favorable paxa laa negras,
que sus peones. Por eso las blancas pue- pero a otra jugada igualmente las blancas
d~n cambiar el caballo contrario, si se fija
hubieran procedido al ataque contra el
en SAD, que en el último caso es prefe- flanco de rey, ya que la columna AD
rible perder el alfil, ya que en posiciones está cerrada por el caballo SA, y las torres
de esta índole los cuadros 4AD y 3D _del ya no son necesarias en la misma.
bando negro son verdaderamente débiles,
porque el alfil no los puede defender, por 32. Ax e, PXA
lo cual el alfil es inferior a un caballo 33. es-4R,
bien colocado. (Anotación del autor.)
Con esto, el caballo queda mejor colo-
21 .... , ese cado aún. C3-4R, sería malo a causa de
22. P3TD, C4D+ y A3A.
Con el convencimiento de que para la 33. "., P4eD
realización de lo citado, los caballos eran 34. e6D, Tle
más importantes que los alfiles, las blan-
cas ofrecen el cambio; y las negras lo Situación despué~ de' 34 . ... , TlC
rehusan· por el mismo motivo.
Negras: Noa
22. "., es-3A
El caballo amenaza ahora ir hacia 4T.
23. P4eD,
Sería incorrecto C4TD, porque: 23.
C4T; 2.4. CSA, TxC y CXP+.
23 .... , Pn
24. P4TR,
Por una parte, para impedir P4CR, que
sin duda tampoco hubiera sido ventajoso
para las negras, y por otra, como una pre-
paración para el ataque al flanco de rey.

24.... , ClC

En seguida no T2A, a causa de C4T.

25. R3R, BlallC(U: TISI'1'UCh

-59
35. PSA, abrir el juego, si esto puede hacerse. sin
perder la iniciativa. Por este motivo pa-
Empezando el proyectado ataque contra rece merecer preferencia la jugada 3. P4D,
el flanco de rey. · muy usada por Steinitz.
La desventaja de 2. . .. , C3AR frente
35. A2D a 2 .... , e3AD, se demuestra en la partÍ·
36. T2A, e4D+ da rusa que · puede seguir 3 .... , PX P;
37. cxc, PXC 4. PSR. Si a 3. P4D, las negras contes-
38. PSC, P4TR tan con e X P, las blancas pueden con-
39. TI-lAR, Rle tinuar: 4. A3D, P4D·; 5. e X P , A3D;
40. P6C, P3A 6. 0-0, 0-0 ; 7. P4D, . trabajando para
41. T2R, A3A abrir el juego.
42. TI-IR, TID
43. R4A, PXP+ 3... ., P3D
44. TX P, RIA
45. e7A, TIR La variante 3. . .. , ex P; 4. D2R, de-
46. ese, T2-2R mostraría el peligro a que se e)!:ponen las
negras, si quieren mantener en simetría
Un error, pero que ya no era necesario; la apertura del juego.
el juego de las negras ya no puede defen-
derse porque a 46 . . .. , TXT; sigue 47. 4. C3AR, CxP
PxT, T2R; 48. P6A, PXP; 49. PxP, S. P4D, A2R
TXT; 50. C7T+, RlR; 51. P7A+,
R2D; 52. P8A-D, TSA + ;- 53. RSC, En general se 1 juega 5. ..., P4D; y
TXD; 54. CxT+, R2R; 55. P7C, R2A; entonces las blancas pretenden minar la
56. R6T, RIC ; 57 . C6C y ganan. posición con jugadas como A 3D, P4AD ;
e3AD, etc. El problema esencial de la
47. C7T +, Abandonan defensa rusa consiste en saber si las ne-
gras pueden sostener el puesto avanza-
do o si tendrán que conformarse con la
PARTIDA NÚM. 21. pérdida de tiempo al retroceso o al cam-
bio. En la presente partida las negras no
RUSA se esfuerzan en la solución del problema,
sino que le rodean rehusando la lucha
Blancas: Tarrasch por SR. Pero con ello abandonan desde
Negras: Marco .un principio a su contrarío mayor parte
de la libertad de acción, estando inimita·
1. P4R, P4R ble el doctor Tarrasch en la explotación
l. C3AR, e3AR de esta suerte que se le presenta; tan
grande como el mismo Anderssen, cuan-
Esta jugada caracteriza la llamada «par- do como lo hacía Steinitz, descubre un
tida rusa» o bien «defensa de Petroff». punto débil en la posición contraria y
El hecho de que las negras, a pesar la posibilidad de un ataque de mate.
de su desventaja en tener que jugar en
segundo lugar, se arriesguen a atacar en 6. A3D, C3AR
vez de defenderse, tiene que parecer 1108· 7. 0-0, 0-0
pechoso de antemano a todo jugador refle. 8. P3TR!
xiunador que cree en la justicia y lógica
inquebrantable del ajedrez. Esta jugada se encuentra casi regu·
larmente en las partidas de peón de rey
3. ex P, del doctor Tarrasch. El objeto de la mis-
ma es molestar al alfil D, y la prepara·
En el interés del que tiene la mano, ción del ataque al enroque con P4eR.
la m ejor explotación de su ventaja es para más tarde.

60-
a.... , A3R recto al rey. En la partida de Anderssen·
Paulsen ya hemos indicado que tal ataque
\...on las jugadas que siguen, el doctor de peones en el flanco de rey sólo es jus·
Tarrasch conduce en una forma extrema• tificado cuando es imposible el contiaata·
.da mente ·instructiva el estrechamiento de que del contrario en el centro, o sea, cuan·
la posición contraria que ha empezado do se tiene en el centro una ventaja posi·
con 8. P3TR. tiva. En la partida de Anderssen-Paulsen
el punt<> fuerte era en SD. Aquí está en
9. P4A, P3A la formación central de los peones, garan·
10. C5CI tizando la mayor libertad de acción. En
semejantes casos, no sólo es justificado
El peón AR debe cooperar también. el ataque al flanco de rey, sino que es
incluso la única manera de hacer pro-
10.... , C3T ductiva la ventaja.
11. C3A,
21. ... , D1D
Esta no es sólo una jugada de des· 22. A3C, P5T
arrollo. Las blancas quieren reservar la 23. R1T, T1T
casilla 1e para refugio de su alfil de ata- 24. TD1R!
que, después de CSCD.
Para evitar el cambio de torres. Váase
11. C2A la nota en. la jugada 13.
1
'12. l?ifA, P3TR 24• ... , C1R
13. C3A!,
Las negras cubren 3D para continuar
Ya .de las partidas de Steinitz conoce· con A3AR la ·demostración contra el flan·
mos la regla que se aconseja evitar el co de dama.
cambio inútil de piezas, cuando el con·
trario está encerrado. 25. C4A, A3AR

13 . ... , D1A Situación despué1 de 25. ..., A3AR


14. D2A, TIC
Negra~: Marco
Las negras, que no pueden emprender
nada en el centro ui en el flanco de rey,
intentan un contraataque en el flanco de
.dama.

15. P5AR, A2D


16. A4A, P4CD
17. P3CD, P4A
18. PSD, PSC
19. C2R, P4TD
20. P4C, C2T
21. P4TR,

Las jugadas de peón con las. cuales las


'blancas terminan la compresión de las fi.
guras negras, preparan, al mismo tiempo,
la ruptura decisiva que debe abrir el jue-
go en forma ventajosa. Esto es un aspecto
del manejo práctico de situaciones res-
tringidas del contrario y es, por lo tanto,
.automáticamente unida con el ataque di· Blanca~: Tarrasch

-·61
26. e6R! ma moderna para el trato de la partida
española, en la cual el doctor Tarrasch
Este caballo no puede ser tomado por ha prestado excelentes servicios, se basa
las negras porque después de 26. .. ., en que mediante e1 ataque indirecto a
PXC; 27. PAxP, el caballo 2T no pue. SR por las jugadas 2. C3AD y 3. ASCD,
de jugar ni ser defendido. Un ejemplo se induce a las negras a jugar P3D, para
drástico de cómo en las situaciones cerra· luego ganar terreno con P4D, según ya
das las propias piezas suelen estorbarse lo vimos en la partida Anderssen.Paulscn.
entre ellas. Por esto en la defensa moderna de la
partida española las negras .se resisten
26.... , PXP todo lo más posible al tal proyecto de las
27. PX P, D3e blancas. Véase, por ejemplo, la llamada
28. exT, Rxe <<Defensa Berlinesa» 3. .. ., C3AR. Las
29. PSC! negras no cubren su peón 4R, sino que
emprenden un ataque contra el peón 4R.
El ataque final, que decide rápidamen· Como ya lo hemos dicho en la partida 18
te en vista de la débil situación de las pie· (Steinitz-Tschigorin ), las blancas deben
zas negras. jugar 4. 0-0 y abandonar el peón 4R,
si quieren obrar fielm~nte al intento de
29. PX P P4D. Si ahora las negras cubren su peón
30. P X P, exP 4R con 4. P3D, las blancas consiguen su
31. D2TR, Rte intención de jugar 5. P4D. Si las negras
32. ex e, AXC quieren evitar 811 encierro, deben jugar
33. PEiA, P3e 4. . .. , C X P; aunque se ve claramen-
34. A X PC!, Abando non te que las blancas recobran su peón y en
la situación que resultara, que será abier-
ta, quedarán en ventaja gracias al adelanto
SOBRE LA TEORIA DE LA PARTIDA de su desarrollo. Ciertamente que la ven·
ESPAl"l"OLA taja es muy escasa y mucho menos deci·
siva y como que el no tener iniciativa im·
Recordaremos cómo trataba Steinitz la plica necesariamente un perjuicio para las
partida española y también la defensa de negras esta forma de jugar, de la que vol·
Philidor. No buscaba Steinitz ningtina veremos a hablar, debe considerarse como
preponderancia de terreno en el centro, parte integral de la teoría de aperturas.
sino que formaba la posición sólida de los
peones 4R, 3D y 3AD, para asegurarse
el centro contra posibles ataques del con· PARTIDA NÚM. 22.
trario y poder ser agresivo en el flanco.
En cambio, en la partida Anderssen·Paul· i:SPA¡q-OLA
sen, las blancas, después de l. P4R, P4R ;
2. C3AR, P3D, conseguían con 3. P4D Munich, 1908
la preponderancia de terreno en el centro.
La experiencia demuestra que la ju· Blancas: Tarrasch
gada P4D, la cual obtiene más espacio en Negras: Lasker
las aperturas de .peón de rey, es sólo una
jugada fuerte, si las negras han jugado l. P4R, P4R
antes P3D; una regla que hay que re- . 2. C3AR, e3AD
cordar siempre. La razón está en que las 3. ASC, e3A
negras de otra manera, toman el ataque 4. 0--0, exP
contra P4R, con C3AR, se apoderan de la S. P4D,
iniciativa y van sin dificultades a la líber·
tadora jugada P4D, lo que sólo es posible Si ·las blancas después de reconquistar
con un tiempo menos, con grandes difi. el peón quieren conservar una ventaja de
cultades si se ha jugado ya P3D. La for· desarrollo, deben tratar de recobrar el

62-
peón con ayuda de jugadas de desarrollo Esto impide que las blancas jueguen
y ataque, no con TIR y C X P. 17. CXP, por la amenaza de mate con
D4C ó 4D.
5... . , A2R
6. D2R, 17. CXA,
Esto es mejor que TIR, porque así se Las blancas desdoblan los peones ne-
procura la libertad de la torre en darle gros ante la amenaza de sus alfiles, rete-
la casilla 1 D. niendo en la situación que queda una
pequeña ventaja por el atraso del peón
6 .... , C3D 3D. Pero gracias al color diferente de los
7. AxC, PCXA respectivos · alfiles, las negras tienen bue-
nas probabilidades de tablas.
Sería una jugada muy natural PD X P;
y hubiera sido posible también si en 6 las 17. ... , PxC
blancas hubiesen jugado TlR, en vez de 18. TD1D, D3A
D2R. Ahora sería malo PD X P, porque 19. P4AD, TR1R
las blancas continuarían con ventaja en 20. D4C,
x
jugar .7. P P y TID.
Con esto las blancas se apoderan de la
8. PX P, C2C iniciativa, que de lo contrario la hubie-
9. C3A, 0-0 ran conseguido las negras con D3C o T3R
10. T1R, y D4A. Las blancas ahóra amenazan 21.
D7D. Si se jugase 20. .. ., D X PC; sería
malo por 21. TIC, D6A; 22. TIAD, D6T;
Si las negras quieren libertarse, deben
23. A6T, P3C; 24. D4A y ganarían las
procurar de jugar P4D. La jugada del
blancas.
texto tiene por objetivo impedir esta ju·
gada. Por esta causa las negras conducen
20. A3A
al momento su caballo a 3R.
.Pérdida de tiempo, así es que la posi·
10.... , C4A ción de las blancas pronto será muy
11. C4D, C3R superior. La jugada exacta para sostener
12. A3R, ex e la partida era T3R.
13. Ax e,
21. T2R,
Parece oportuno jugar ahora 13. .. .,
P4D, porque después de 14. DXP, AXP, Las blancas impiden T3R, puesto que
las negras, en compensación de peones, si T3R: .22. ASC y 23. T x T ganaría un
hubieran tenido sus dos eficaces alfiles, peón.
pero en la partida Pillsbury•Tarrasch (Vie.

i~: o3C:,
na, 1899), Pillsbm:y dexp.ostró la eficien· TSR
cia de la jugada P4D, ' descubriendo en· D3R
tonces en SAD un punto débil de ne·
gras, y aprovechándolo en seguida con En esta y en la jugada siguiente re-
14. C4T (también hubiera sido bueno 14. producimos las anotaciones del doctor Ta-
D3R ). Para no dar lugar a dicha debili· rrasch en su obra «Der Schachwelttkampf
dad, en la presente partida se continuó Lasker-Tarrasch» (1898).
así: "Una jugada sorprendente que tiene gi·
ros muy interesantes en el curso de la
13 .... , P4AD partida. En general era esperado 22. .. .,
14. A3R, P4D T X P; con la continuación 23. T X P,
15. PX P a. p., AXP TID!; 24. TxT+, DxT, pero ·las blan·
16. C4R, A2C cas obtendrían ventaja después de 25.

-63
P3TR, a causa de la amenaza AóT, T2D, 25. A6T, D3C
etcétera.
Después de la jugada del texto, en pri· A D X A seguiría 26. DXT.
mer lugar se amenaza Tse. Esta jugada
se contesta también a D X PD y no sólo 26. A4A, T3R
se amenaza una catástrofe en íCR, sino 27. AX P, D4T
incluso la pérdida de calidad por A6A. 28. D4C, DX D
Era satisfactorio para las blancas contes- 29. PX D, T5R
tar a D3R con 23. TxP, DxP; 24. T2· 30. Ax P, TXT
2D, a lo que seria desfavorable para las 31. TXT, P4TR
negras 24 .... , TSe, a causa de 25. T8D +, 32. T6D, Abandonan
AlR; 26. DxT además de TxT. La si·
guiente jugada qQe desvía la principal
amenaza Tse, es, no obstante, mucho más
fuerte.>> PARTIDA NÚM. 23.

23. P3TR! FRANCESA

«A 23 .... , DxPA, las blancas conse· Berlín, 1916


glllran un juego superior con 24. A6T,
P3e; 25. TxT, DXT; 26. TxP, por- Blancas: Tarrasch
que el alfil 6T está muy fuerte y permi· Negras: Mieses
te siempre ataque de mate; ya se ame·
naza TxA, DX T; D5R, P3A; D7R y 1. P4D, P3R
mate.» 2. P4R,

23. TID De esta situación ha resultado una par·


2.4. T2-2D, T4R tida francesa.

2 .... , P4D
Situación después de 24• ... , T4R 3. C3AD, PXP

Negras: Ltuker · Véase la nota de la jugada 3 en la par-


tida 20 (Tarrasch-Noa ).

4. ex P, C2D

No es recomendable jugar en seguida


e3AR a causa de 5. e X e+ , D X e; 6.
e3A, amenazando ganar la dama con
A5eR. La continúación del texto ha sid{!
elaborada por Rubinstein, jug\Ín.dOI!e a
mehudo, habiéndosela calificaP.o ·· de «Va-
riante de Rubinstein» en la partida fran-
cesa.
5. C3AR, CR3A
6. A3D, A2R
En una partida anterior entre los mis-
mos jugadores, se desarrolló en 6. ...,
e X e ; 7. A X e, e3A; continuando las
blancas con 8, A5C, A2R; 9. A XC, por
BlllllCa/l: Tarrasch cierto muy bien.

64-
7. 0-0, ex e Situación dupué& de 15. . .. , TRIR
8. AxC, C3A
9. A3D, P3CD Ne1J7as: Miues
Ahora se ofrece el desarrollo del alfil
de dama a 2C, pero P3CD, antes de en-
rocar, es una grave falta de táctica que
coloca rápiclamente a las negras en una
situación insostenible.

10. C5R,

Si ah~ra se juega A2C, las blancas


con 11. ASC +, obligan a sus contrarias
a la renuncia de enroque.

10•.. ., 0-0
ll. C6A, D3D
12. D3A,
Sería inferior jugar primero C X A+ y
después 13. D3A, porque las negras con-
testarían "TIC y A2C, lo que ahora · está
im~;~edido. Bú:ncas: Tarrasch
12.... , .UD
13~ ex A+, Dxe por lA, y las negras hasta pueden abri·
14. ASCR, TD1A gar· esperanzas ·de ataque mediante IU8 to-
rres en las columnai CR y TR. Las blan-
Las negras debían aspirar en absoluto cas, con las jugadas que siguen .ujetan
a libertarse de la pesada presión contra al rey en una red de mate;
su enroque, y a esta finalidad jugar 14.
... , P3'l'R. 18. D6T!,
15. TRI R, TR1R Amenaza el conocido mate en cuatro
jugadas que empieza con 19. ~XP+.
Un.a vez más las negras debí¡~n jugar
P3TR. Ahora ya está impedido por las 18•... , P4AR
blancas. 19• T3R, DXPD
20. P3AD, Abandonan
16. D3T,
V aya donde vaya la dama, siempre se
Las negras ya no podrán jugar más 16. jugaría 21. T3C +.
... , P3TR, porque . l7; AxPT, PXA; 18.
D X PT y ganarían las blancas por. la
amenaza T3R. Las negras esperarán re- EL GAMBITO DE LA DAMA
concilill1'8e con su contrario mediante el
sacrificio de un peón. Ademá~ de 1; P4R, también la jugada
l. P.4D en todo tiempo ha sido una ju-
16.. .. ., D3D g11da muy corri;ente de apertura. · Si las
17. AX e, PXA negras · están inspiradas en querer man-
tener el equilibrio en el eentro, por el
Si ahora se jullga 18. D X PT + , el rey máxi.m o tiempo . posibl,e, contestarán en
se coloca en seguridad en 2R, pailando forma análoga o como Se contesta P4R a

-65
P4R, con idéntico doble paso del peón pARTIDA NÚM. 24.
de dama, o sea, l. ... , P4D. Esto es la
apertura del peón de dama (l. P4D, CONTRAGAMBITO ALBIN
P 4D).
En un principio podría imaginarse que Berlín, 1920
es tm :reflejo de la apertura de peones de
rq, l . P4R, P4R, pero si se medita más Blancas : Tarrasch
a fcni1D, ae ve que en la lucha de aper• Negras: Tartakower ·
tU?a cl3l ~!entro implica condiciones muy
disilllias. l. P4D, P4D
2. P4AD,
Recordaremos que en la apertura de
peón de rey las blancas, después de l. El gambito de dama no es un verdadero
P4R, tienen en principio dos métodos va- gambito, porque ~ negras no pueden
riados para aprovecharse de que tienen la tomar el peón y conservarlo. A 2. . .. ,
mano de la salida y para abrir el juego. PxP, las blancas juegan 3. P3R, y rá-
Uno de los dos métodos es P4AR, la cual pidamente pueden recobrar su peón y, ca-
es una jugada para abrir el juego (gam- so de que las negras quieran cubrirse
bito de rey o partida vienesa, más tarde con 3. ..., P4CD, la ventaja de sus con-
P4AR). El otro método es P4D, por trarias nace de 4. P4TD y si se conti-
ejemplo, la partida escocesa o la partida núa con 4. P3AD; 5. PxP, PXP; 6.
española con el consiguiente P4D. Hemos D3A! ganando una pieza. Si 4 . . .. , A2D,
reconocido que en las partidas de peón de sigue 5. P X P, A X P; 6. P3CD, etc. A
rey los métodos de ·ataque con P4D son 3. P3R, las negras pueden, sin embargo,
más fuertes que con P4AR. En esto hay · libertar su juego con P4R en vez de per·
varios fundamentos, por . ejemplo, P4AR seguir la conservación del peóri de gam-
debilita la situación de su propio rey, gito, pero ésta es tan débil, que las bJan.
mientras que · después de P4D, el peón D cas no tienen ninguna prisa en recobrar.
queda cubierto automáticamente por la lo, sino que tranquilamente juegan 3.
dama, y el 4AR, desde un principio que· C3AR -para impedir 3. . .. , P4R. Así y
da descubierto. todo las negras no tienen la posibilidad
Análogamente tenemos en la apertura de defender su peón del gambito, por
de peón de . dama, después de l. P4D, ejemplo: 3. . .. , P3AD; 4. P3R, P4CD ;
P4D, también dos métodos para conse- 5. P4TD, P3R; 6. PxP, PXP; 7. P3CD
guir la apertura del juego,' siendo las ju. (que en esta posición siempre vuelve co-
gadas de apertura de peón P4AD o bien mo jugada característica) ; 7. . .. , A5C + ;
P4R. Pero, ·contrastando con la apertura 8. A2D, AxA+; 9. CRxA, y las blan-
de peón de ,rey, es la jugada de flanco cas, al obtener nuevamente su peón, se
(P4AD) la que es más fuerte que la cen- quedan con un juego superior.
tral · P4R. La desventaja de P4AR en el
2. P4R
juego de peón de rey1 es evidente que no
existe con P4AD.. Por otra parte, no es
Esta contestación que es conocida con
tan fácil abrir el juego con P4R, en la
el nombre de o:Contragambito Alhin» pre-
apertura de peón de rey, porque al peón
senta la analogía del gambito de Falk-
4R le falta la automática defensa de la
beer. Pero, como ya hemos anotado, la
dama.
apertura del peón de la dama no es nin-
Por eso, en el juego de peón de dama, guna simetría de la apertura del peón de
el gambito de dama (P4AD, o también 2. rey, y las variantes tampoco· puédense lle-
C3AR y luego 2. P4AD) es la oontinua· var simétricamente. El gambito· de Falk-
ción más usada mientras que otros mé- beer es tan fuerte, que estamos dispues-
todos de 11pertura, en ·los que las blan- tos a considerarlo como refutación al gam-
cas · pretenden la mptura con P4R, son bito . de rey. No obstante, en cambio, el
más raras. contragambito Albin apenas ·es correcto.

66-
Su diferencia esencial con el gambito de del peón R, o por afirmar el peón D.
Falkheer, es que la situación del rey blan- Para realizar la movilización aquí tan
co no queda .debilitada. Pero hay más. nece~ária, apenas tienen mejor jugada que
Por ejemplo, en el gambito de Falkheer, el enroque, largo. Pero después de esto,
el peón blanco "del gambito va a SD, y Tarrasch aprovecha las achancesn de ata·
está en una casilla atacada por la dama que que se le presentan en una brillante
negra, mientras que el peón blanco en forma .
el gambito de Albín después de 3. PD X P,
PSD, desde un principio está atacado. Al 1 1. TI R,' C3C
inverso de esto, el molesto peón negro 12. P3TR, A3R
en el gambito de Falkbeer, no queda ata;
cado en 4R, mientras que el de Albin Las negras podían recuperar su peón
está • atacado por la dama blanca en la con A x 1:;, 13. ex A, e3CxP, pero las
casilla 4D ya de~de un principio y des- blancas con 14. A4R además de su gran
pués de e3AR, además de eD2D y e3e ventaja de los dos alfiles que son muy
queda débil muy a menudo. fuertes, hubieran incomodado la situación
del rey negro. Por eso Tartakower . retro-
3. PDX P, PSD cede su alfil, ya que el peón 3R no pue-
de defenderse a las anchas.
Análogo al gambito de Falkbeer, aho-
ra se podría jugar 4. P3R. Pero la ana- 13. A4R, C3CX P
logía es sól9 una apariencia. En 4. P3R, 14. ex e, DXC
las negras obtendrían una ventaj a con
4.... ,ASe+; 5. A2D, PXP; 6. AXA, A 14 .... , e X e, las blancas prosegui-
PxP+; 7. R2R, Pxe=e+. O bien rán con 15. AxP+ , DXA; 16. TxC,
6. D4T+, e3A; 7. AxA, PxP+; 8. y luego, en vista de la comprometida si-
RXP, DST+, etc. tuación de su rey, las negras deberían
decidirse al cambio de damas. Después
4. e3AR, P4AD de 16" ... , DxD; 17. PXD, R2e; 18.
TS-TD, el juego sería perdido totalmente
La corriente jugada aquí es 4. ..., para las negras, en el final.
esAD con la continuación S. eD2D, ade- Verdaderamente que después de la ju-
mú .de P3eR y A2e. Si las negras en gada del texto las blancas, con ganancia
contestación a CD2D, juegan S. .. ., de un peón, podían cambiar las damas
A4AR la:s blancas están obligadas a jugar 1S. DXP+, RXD; 16. AxC+, RXA;
6. P3TD "para evitar el salto del caballo 17. T X D, pero la buena posición, 8118
negro a se. dos alfiles y el peón pasado, darían un
La jugada 4 . ... , P4AD es empleada buen contrajuego a las negras.
muy a men.u do por Tartakower, y es para
evitar que. se debilite el peón D. La ju- 15. C3A, D4AD
gada no da nada ni para el d!lsarrollo ni 16. A4A!,
al ataque y no cabe dentro del !lSPÍritu
del gambito. Una hermosa jugada. A 16 . . 4XPA;
las blancas podrían contestar con 17.
S. P3R, e3AD DxA, DXD; 18. ASA+, T2D; 19.
6. P X P, PX P T8D+, CI-D; 20. esR.
7. A3D, eR2R
8. eD2D, ASe 16 . ... , A3D
9. D3e, D2A 17. AXC, PXA
10. 0-0, 0-0-0 18. AXA, TXA
19. C5R!, TI-ID
Las negras tienen ahora el dificil pro-
blem·a, si quieren conseguir la compen- Nuevamente las negras no pueden ju-
sación, de jugar, o bien por la conquista gar a la conquista del peón AD. A 19.

-67
Situación despué& de 16 . .. . , A4A 24. PSA, P7Q
25. TRlD, A4A
Negras: Tartakower
A ASA, sigue 26. PSC, A7R; 27. P6C,
en caso de 26 .... , A4D; 27. P6TD,
DxPAD; 28. TXP. Si las blancas conti-
nuasen con 26. PSC, las negras contes-
tarían con ASR; 27. D6TD, DxPAD.

26. ose +, R2A

A otras jugadas del rey, las Mancas


quedarían con ventaja al jugar 27. P6A.
Si lo jugasen ahora podría contestarse c011
AlA, y el peón P6A quedaría débil.

27. DST+, RlC


28. PSC, A7A
29. P6C, T2D
30. PX P+,

P6A, sigue naturalmente P X P.


Blancas: Tarrosch
30. RIT
... , P3A, las blancas ·continuarían con 31. P6A, T4D
ventaja 20. C3D, DXP; 21. D3T. 32. P7A, A4A
33. PSA=D+, AXD
20. D4T, 34. D7A,
Ahora las blancas amenazan ganar rá-
pidamente con · P4CD, y después PSA. Las negras deben abandonar m alfil,
Las -negras ponen su última esperanza en quedando ultimada la partida.
s'U · pe·ó n pasado y, para dar válor a éste,
abandonan 1a cálidad, pero pierden aun 34. ...
, T4CD
por la mala situación de su rey. 35. DxA+, R)<P
36. P4TD, T4AD
2'0.... , P6D
37. D4C, DXT
21. P4CD, D5D
22. CX PAD, .TXC 38. TXD, TSA+
23. DXT+, RlC 39. DlD, Abandonan

{)8-
MANUEL LASKER

Manuel Lasker, nacido eq 1868, en de. la partida. Esto es uno de los moti-
Berlinchen (Neumark) no sólo se ha dis- vos .porq11e Lasker ha logrado tantas ve-
tinguido como J:Qae~tro .de ajedrez, sino in· ves como nadie, recuperar la iniciativa ·en
cl'ilso como matemático y filósofo. una posición . que p8l'a él ya había lle-
..Empecemos por anetar sus mejores gado a ser desfavorable.
éxitos aj et4ecístioos. Los JJ?.ás · importan, ·Lo esenci~, lo nueyo, q11e Luker ha
tes son·: Los victoriosos ·encuentros con- llendo al juego del ajedrez, no es todo
tra Steinitz im 1894 (10:5 y 4 empates). técnica pura, es el juego psicológico.·
Marshall, 1907 (8:0 ·y 7 empates): Tar- El autpr de esta obra lo ha señalado
t:a5ch, 1908 (~:3 y ·5 empates), Al ve~­ en un artículo, después del torneo de
cer a·. Stei.D.itz;, Lasker consigujó !ll tí- ajedrez de Nueva York. A continuación
tulo de campeón del m11ndo, q~~ sostu.vo lo daremos más resumidamente;
hasta su desgraciado encuentro contra
Cápablanea (Habana, 1921 ). En los .tor· . «Al estudiar las partidas de. Luker,
neos, sns é:Dtos mayores han .sido el pri· J-qgadas en los torneos, reconoci que, a
mer premio en ·la gran D;J.anifestación de primera vista, en . el eurso parece tener
Nuremberg, en 1896 ; Londres, 1899 ; Pa- una suerte increíble. Hay tomeos en los
rls, . 1900; San Petersburgo, 1909 (em- que quedaba primero y -durante los cua·
patado con. Ruhinstein), San Petersburgo, les ganó casi todas las P!ll'lidllll, a pesar
1914; Mansch-Ostrau; 1923; Nueva York, da q11c la ..mitad de casi todas ellas ie
~,n 1924. Laskcr, de~de ~p~e el ajedrez ha habí,a encontrado a punt,o de perdar, · de
I!.e pdo a ser internacional y desde que los modo que, muchos decian de una influen·
éntoti personalea pueden comprobarse .nu- cia ·hipnótica de Laaker sobre sus, adver·
m&ieamente a bitse de tomeos internacio- saiot. ¿Qué es la verdad? Me esforcé nu!l-
nales; ~s, sin .duda, el maestro que mayo- vamente en de&cubrir el secr«::to de SJ.l.S
res extros ha obtenido. partidas, estudié el por qué de SU$ éxi-
En el capítulo correspondiente a Ta- tos. Ea un hecho que . no se puede .neg.ar :
rrasch, ya hemos hablado sobre la bue Lasker establece siempre mal aus .parti-
filosófica del juego de La!ker., pero he- das, cien veces va a la pérdida y, ain
mOl de aiiadir todavía . q11é Lasker, aun· embargo., la$, gana. La hipótesis de tanta
que se haya apropi8do de la teoría de suene es inveTOIÍmil. Un hombre qlle
St~u, tiene un estilo de juego más pa·.
consigue tant01 ixitos, debe de poseer .una
rectdo · al de Morphy. Al igual q11e Mor- fuerza sorprendente, ¿po1: q11é tmtas vece.!
Ul\11 situi!CÍÓn t~tn mala. de pérdida? Sola .
phy, en las poSiciones cerrádllll no es tan
hdiillble como en las abi~rtas, teiliendo en mente queda una coJ1,testaciÓJJ. que ~rec !
e;quéllu mayor peligro de perder. Pero, sólo l\lna paradoja al ju11garla superficia.-
pne.tó q11e ,ninguna partida cerrada puede mente: Lasker, a menudo, intencionada-
ganarse por llJI.a estrategia, pues a la lar- mente juega mal.
ga siempre tiene q11e haber una ruptura La causa no está tan lejana. El doctor
en al¡ún punto, ningún contrincante de Tartakower ha semla.do la parau?ja que
wker puede destacar esta parte abierta aquí nos vale de aclaración :

-69
¡Una partida se gana siempre por un:¡ este decaimiento sea pracisamente el ori·
ialta, ya sea propia o sea del contrario.» · gen y la causa de una próxima fnltll.
En un juego correcto .que siga en esta ¿Cómo lo consigue? Estudia las partidas,
forma en todo su curso, casi todas las par· la forma de jugar, la fuerza y la flaque-
tidas dan empates. A fin de evitar esto, ' za de los maestros con los cuales ha de
Lasktll lleva la partida por juego teórica· luchar. No busca las mejores jugada.
mente incorrecto al borde del abismo; y . sino · las más desagradables al contrario,
aunque él mismo sólo pueda sostenerse, guiando la partida en una dirección que
su adversario, que cree se siente fuerte, no sea la que agrade a IIU contrincante.
acaba por hun~ a causa de la mayor Sobre este · camino, desconocido por su
potencia ·de Lasker. Así logra la victoria oponente, y con jugadas malas verificadas
que no la hubiera podido conseguir con adrede, Lasker se encamina a menudo ha·
juego completamente correcto. cía el abismo, tal como se halla descrito
Así es como yo había concebido el anteriormente. Así, resulta que encon-
juego de Lasker por mis estudios. En los trando siempre nuevos problemas en su
últimos tomeos intemacionales (Marisch- camino, llega el momento en que el tiem-
Ostrau y Nueva York), tuve ocasión de po apremia, hay que jugar con rapidez
pode:r . contemplar directamente su mane- en posiciones difíciles, se entra en tran·
ra de jugar, verlo frente a los mismos con. ces de apuro y entonces es cuando Lasker
trarios que yo mismo había ·tenido, de aprieta con toda su fuerza verdadera, vie·
los cuale8 yo conocía exactamente el jue- ne el decaimiento nervioso del contrin-
go, y entonces me fue posible comprender cante, la catástrofe psicológica, y con ella
su mejor forma, sus éxitos y su juego, la catástrofe en el tablero.»
y así pude descubrir el por qué del re- Compárese con esto lo que Lasker
pentino hundimiento de sus adversarios. mismo dijo, en una entrevista publicada
Cada: partida de ajedrez es acompaña- en o:De Telegrab, en Junio de 1924.
da una lucha de nervios. El juego de un Se le hizo la siguiente . pregunta: o:¿Se
tomeo no es ninguna ocupación en la me ha dicho que si usted estudia severa-
quietud de la habitación, donde se . tta· mente algunas partidas de su contrario,
baja y se está en disposición de ánimo, conoce usted su fuerza y debilidad?»
y si se está cansado se descans·a, es una La conte!!tación de Lasker fue la si-
lucha espiritual, encamizada hasta el ex· guiente : a:Esto es natural y cabe en un
tremo, ante un público numeroso, a pres- total dentro de mis opiniones teóricas sobre
crita hora y con restricción de tiempo. las luchas. Una · partida de ajedrez es una
Cada uno de los maestros toma muy en lucha en la cual deben aprQvecharse to-
serio su profesión, cada uno tiene la sen· dos los factores. El factor de más valor, es
sación de forjar en cada jugada la obra el conocimiento, por ejemplo, las papidas
de su vida. Es, pues, explicable, que la de Reti nos enseñan que éste juega me-
mayor parte de los maestros de ajedrez, jor con las blancas que con las negras. De
el eonocimie:t1to de una precabida falta es. Maroczy, que se defiende con cuidado y
~ialmente wia _partida perdida les pro- cuando ataca, es porque se ve precisado
duce una p~m depresión nerviosa. por fuerza; Janowaki, tendrá la partida
Yo he visto maestro de ajedrez, que ganada por seis v~ pero siente que
después de UDS. denota, ha permanecido la partida haya de terminar y -~acaba por
todo el día en su habitación, no siendo perder con seguridad. En esto ')la '~hecho
ni capaz ·para tomar alimentos ni recu- lo increíble en el torneo de Nuéva York.
perar ánimos de ninguna manera. En unas Pocas partidas del 'contrario es
El secreto de Lasker consiste en lo si· muy fácil conocer quién es.l>
guiente: lo esencial es para él la lucha de Con estas palabras, Lasker ha : confu-
los nervios. Busca, por el medium de la mado nuestra opinión. "A "DO ser así, qué
partida de ajedrez, atacar en primer lu- importaría que, por ejemplo, Maroczy no
gar la. psicología de su contrario. Sabe gustara de atacar si sólo se buscaba la
producir en éste el decaimiento. nervioso mejor jugada en el tablero, haciendo ea110
que es corriente después de una falta co- omiso del momento . psicológico de~ contra.
metida, ya antes de cometerla, y hace que rio? Por esto se comprende que Lasker

70-
no haya tenido discípulos, no haya fun- P3D. Sólo entonces podrá hacerse con
dado una escuela propia, al contrario de gran fuerza P4D. Aquí, sin embargo (en
Tarrasch, que es el creador de toda una la jugada del texto), las negras, después
generación de maestros.. Lasker fue ad- de cambiar peones en SD, pueden tomar
mirado por sus éxitos; pero no fue com- la iniciativa mediante el ataque a PR, con-
prendido el fundamento de estos éxitos. siguiendo más fácilmente P4D y con ello,
. Sólo en estos últimos años se empieiia a al menos, igualar el juego.
comprender la concepción del juego de
Lasker, evidentemente que esta forma de 2. PX P
juego será el rejuvenecimiento del antiguo 3. DX P,
juego del ajedrez;
La siguiente partida nos ofrece nueva- Si las negras se contentaran con P3D,
mente la lucha de dos alfiles contra alfil las blancas hubieran conseguido la tan
y caballo. Recomendamos al lector que discutida ventaja de la posición del peón
juegue una vez más las partidaa _de Stei- 4R, contra 31). Pero las negras van sin
riitJ que pertenecen a este tema. Vemos dificultad alguna a la liberadora jugada
el mismo avance de peones, que por una P4D.
parte molestan los caballos blancos, y por
otra, forman una barrera contra el alfil C3AD
blanco. Vemos también que en aquel en- ' 3• . . '
4. D3R,
tonces el joven Lasker ya dominaba las
teorías de Steinitz, pero .sobre este par-
ticular viene algo nuevo. La mejor casilla, porque es la meJor
El mismo- avance de peones que produ- manera de dificultar la jugada P4D.
ce la cohibición de las figuras blancas,
introduce un ataque al mismo tiempo 4.... , P3CR -
contra el rey blanco, de modo que la rup-
tura triunfante no conduce, como en las La continuación más sencilla, sería la
partidas de Steinitz, a una posición de fi- consecuente prepar~ción de P4D con 4.
nal ganada, sino a una triunfante combi- .. , C3A; 5. C3AD, ASC y 0-0 y TIR;
nación de ataque contra el rey blanco. por lo cual las blancas ya no podrán im·
pedir P4D. Pero la continuación que ha
escogido Lasker, es correspondiente a su
pARTIDA N ÚM. 25 juego poco claro y particularmente menos
comprensible para su contrario, y, sin em-
GAMBITO DEL CENTRO bargo, bastante buena. Las negras, en su
desarrollo, dan la gran diagonal a su al-
Londres, 1892 fil, que queda libre después del cambio
de PR X P. Las negras, al desarrollar su
Blancas : Blackbume ·alfil por el flanco, pierden tiempo; y lu
Negras: Lasker blancas podrían jugar para impedir la
jugada P4D, pero deben calcular que sll8
1. P4R, P4R oponentes, después de unas jugadas de
2. P4D, preparación, podrían jugar P4AR. En una
palabra, la tarea de las blancas es ahora
Como ya hemos dicho, el plan de abrir oscura y difícil mientras que con -la con·
el juego con P4D, parece ser el intento tinuación descrita anteriormente, ·hubiera
afortunado de conservar la ventaja de sa- sido más fácil, porque el plan de las ne-
lida en la apertura de peón de rey gras se había manifestado con mayor cla-
(l. P4R, P4R). Pero no procede jugar ridad. Este modo de colocar a su adver-
tan rápidamente P4D, sin preparación al- sario ante difíciles problemas, ee una de
guna. HeiD95 visto ya que la mejor pre- las más características cualidades del es-
paración consiste en el ataque al pe6n tilo psicológico de Lasker. .
SR, o sea la partida española, para in-
ducir a las negras á la jugada defensiva 5. A2D,

-71
Probablemente, Blackbame no jugó S. Quita al ,....b4llo la casilla más adelan-
CSAD, porque tem'ia CSC. tada y defemlida pOr Wl peón 4R., y ter-
mina la cadena de peones 2T:a, 3CR. 4AR
S• . .. ,· AlC quo forma un dique contra el alfU blan-
6. C3AD, C!A co, el cual resulta ahora completamente
7. ·~, 0-0 ineficaz.
Ahora las blancas ya no pueden impe- 17. C4•3A, AiR
dir la jugada P4D después de Tllt, y 18. RlC, TRIO
por eato preparan contra P4D una com- l9. C4A, AlA
binación de ataque en estilo de combina- 20. A2R, C3A
ción.
Sistemáticamente, las negras van pe-
8. P3A, netrando en las débiles casill118 negras de
la posición blanca. Hasta ahora, el ca-
La defensa del peón '-R es necesaria hallo estaba fuerte en 4R. Pronto veremos
para la continuación P4D, como en se- OC'tlpada la casilla SD, y la decisión la
guida veremos. traerá la OC'tlpación de 6R.
Nuevamente se .puede contemplar lo
8.... , P4D complicado del estilo de Lask.er, que lo
reúne todo, el .t ípico aprovechamiento de
Es probable que Lasker ha visto de an- los dos alfiles, la típica explotación de
temano el plan de Blackbume, pero tam- la. mala .situación del alfil blanco y final-
bién ha hallado el punto débil del millmo. mente el ataque directo contra el rey.
9. DSA, PXP 21. TXT+, TXT
10. ASCR, DTR 22. TID, TlR!
l!;sto es obligado. Hasta aquí, el plan Para la explotación de la ventaja de
de ataque de Blackbume es bastante bo- dos alfiles, y en lo general pan la ex,
nito. plotación de una ventaja dura~ra que
11. AX C, AXA exije obrar decisivamente mediante. rup-
12. Cx·P, AlC tura o ataque de peones en un flanco, es
13. ASC, bueno conservar a lo menos una torre,
evitando cambiar las dos.
El plan que se ha trazado Blackburne, La torre colocada detrás de los peones
lo ha calculado con la convicción de tener avanzados, a veces facilita la ruptura que-
un. bonito juego libre, pero ha omitido decide la partida.
que las negras, con su ¡ngada siguiente,
pueden cambiar damas (obligado) y que- 23. AlA,
darse con la yentaja de }os dos alfiles.
Las negras amenazaban ganar una pie·
13 .... , D4R za con AXC y P4CR.
14. DXD, C{< D
15. C2R, P3TD 23 , ... , P4CD

Las negras eDJtliezan las típicas juga· Continúa la marcha del peón para es-
d!ls de peones que cohiben caballo y ·alfil. trechar caballo y alfil, y la preparación
Obsérvese que las blancas tienen su peón del ataque contra el rey. Las blanca.,
AR en la casilla 3AR, que es del millmo además, amenazan ganar terreno eon 24.
color del alfil, y de consecuenCia, la ca- C4-SD, pero ahora las negras con 24 ... .,
silla 3R se inclina a la debilidad. PSC; 25. C2R, AXC; 26. TxA, CSD;
27. ClA, T8R; llegarían a una ventajosa
16. A3D, P4AR posici6n.

72.-
24. C3D, A$D Ahora la ruptura no se haee e~ forma
LaJ negras emprenden una reforma de aiatemática como vemoe en las partidas
agrupación. El alfil será conducido 3CD, de Steinitz, sino con el sacrificio de un
cubriendo laa casillu negras del flanco peón, que es el que introduce una com-
de dama nepo, lu euales sermn ~hiles binación posible por la desgraciada co-
delp'llél que ·¡oe -pecme. hayan pasado Ja locación de las piezas blancas.
cempo blanco. Por lo proñto, !e impide
CSA. En la miama forma, el alfil da sitio Esta posibilidad no es debida a una
·al rey para llegar a 3A por 2C. Y sa- casualidad, pues la desmantelada situa·
bemos por las partidas · de Steinitz que ción de l¡¡s blancas es precisamente la
uila VP.Jltaja que tienen los dos alfiles,
es que acompañan y protegen al rey, per. consecuencia necesaria de cómo Laaker
mitiéndole acercarse al centro del tablero, sacó partido de sus dos alfiles, inspirad<>
ya antes del e:rtremo final. en Steinitz.
Si .el punto 4R está defendido por el
rey, las negras pueden alejar su caballo 30. P5C!
de 3A sin miedo, para acercarlo a la dé- 31. C X P,
bU casilla 6R de las blancas, pasando por
2R y 4D.
Si 31. P X P, seguía ASD+ ; 32.
25. C2R, A3C
26. P3CD, R3T, C6C, etc.

Es comprensible el anhelo de las blan- 31. C6R


cas de conseguir más terreno. 32. TlR, C5A+
26 ... ., R2C 33. AxC, TXT
27. P3A, R3A 34. AX P; TSC
28. R2A, C2R 35. P3C, T7C+
29. C2-1A, C4D
30. R2C, 36. R3T, TX PTR

SiiiUlción después de 30. . .. , R2C Tan lejos debió Lasker de calcular su


Negras: Lasker combinación, que el final está ganado sin
dificultades.

37. CZR, T7C


38. CZA, P4C
39. A3D, P4T
40. R4C, A7A
41. P4T, P4A+
42. R5C, AXPCD
43. P5T, P5AD
44. AX PAD, AXC
45. P6T, ASD
46. C4D, AxC
47.PXA, AXP
48. P5D, A7R
49. Á. X A, TXA
so. P7T, T7TD
Blancas: Blackbume 51. Abandonan.

-73
PARTIDA NÚM. 26 4. P4D, PX P
5. CxP, A2C
SICIUANA 6. A3R, P3D
7. P3TR,
Cambridge Springs, 190'
La jugada más usada y más natural e5
Blancas: Laaker. aquí. 7. A2R. Con la jugada del texto,
Negras: Napier Lasker prepara un ataque de peones al
flanco de rey, con lo que casi siempre
1. P4R, P4AD ha logrado el éxito en las partidas s!ci- ·
lianas• .
La partida. siciliana, si las blancas mú Esto es asombroso, porque un ataque ~
o menos pronto juegan P4D, con el fin mejante, tan prematuro y . no habiendo
de lograr un juego abierto, las negras acabado de formar el centro' m mucho me-
<1btienen una esperanza dentro de su apre- nos, contradice las reglas del ajedrez. Mar-
tada situación al jugar P X P, en virtud co en la «Wiener Schachzeitung» (edición
de un peón más en el centro, porque ha· de 1908) ha puesto de relieve esta forma
brán cambiado un peón de alfil por uno de juego en contradicción con los prin-
de central. · cipios que Lasker ha popularizado en su
libro uCommon Sense in Chess» (El sen-
2. CUD, C3AD tido común en el ejedrez ).
3. C3A, ¿Por qué, pues, Lasker escoge esta
continuación? Creemos que, anté todo, es
Lasker el psicólogo quien juega. El opo-
Además de esta preparación de P4D,
en estos últimos años ha sido usada muy nente que escoge la defensa siciliana, tic-
no en perspectiva una larga y penosa de-
a menudo la forma cerrada de la partida
siciliana, en la cual por P4D no se pte- fensa, que le seíiala como premio, gracias
tende abrir ninguna columna. Se desarro- a la preponderancia de peones en el cen-
lla P3CR después A2C, CR2R, P3D y tro, el mejor final. Pero ya sabemos que
-oportunamente P4AR. En oposición a es- contra una tentativa de ataque de flanco,
ta 'pretensión de blancas de obtener ma- y tan anticipa¿o como aquí lo emprende
yor ventaja de terreno en el flanco de Lasker, la única parada es un enérgico
rey, las negras harían bien en buscar contraataque al centro. Pero psicológica-
mente, es extremadamente difícil el re-
contraataque al flanco de dama y avan-
nunciar repentinamente en fsvor de otro
zando más tarde con los peones del flanco
ataque de peones y ruptura en el centro
de dama. Como que así las blancas no
-a .una estrategia ya adoptada en pre-
pueden conseguir ni la apertura del jue-
paración casera y con la cual se han te-
go ni tampoco ventaja de terreno, esta nido éxitos en partidas similares ante-
forma de jugar no es peligrosa para las riores.
negras. Después de todo, vemos en la presente
partida que Napier comprende rápida-
3•... , P3CR mente el cambio de situación, pero en ex-
plicable nerviosidad se precipita demasia-
Esto es, a simple vista, continuación ló- do con giros de sacrificios, bonitos al pa·
:gica. La presión contra 4D, que comenzó recer, pero inmficientes.
i!on l. ..., P4AD y 2. ..., C3AD, es
i!Qntinuada por el desarrollo del alfil en 7. C3A
fianchetto. A pesar de esto, si se quisiera 8. P4CR, ~
corresponder al espíritu de la partida si-
ciliana, sería mejor continuar con 3. .. . , Hubiera sido mucho peor si las negras
P3D, pues entonces la masa de los peo- hubiesen dejado de enrocar por miedo al
nes centrales negros es digna de ser te- ataque de peones que amenazaba. El con-
nida en cuenta y aparece como un factor trajuego de negras de'Qe tener lugar en el
defensivo muy fuerte. centro, según ya explicamos, y para ello

74-
4eben ante todo poner a su rey en se- 18. P5T!,
guridad.
En las posiciones tan abiertas como la
9. P5C, CIR pl'esente, Lasker tiene una vista enorme-
10. P4TR, C2A. mente perspicaz. No se deja desviar por
11. P4A, P4R la . postura del caballo 6A, del terreno de
12. C4-A.R, P4D lucha e:a el que las blancas parecen te-
ner mayor fuerza, o sea, del blanco del
La jugada nerviosa de Napier, de la rey.
que ya hemos hablado, en vez de fortifi- Por lo tanto, las blancas amenazan: 19.
-car tranquilamente su juego con Ase, con Px P, PAXP; 20. exP+, Rle; 21.
el sacrificio de peón, quiere romper el A4A+, e4D; 22. Axe+, TXA; 23.
-centro rápidamente. Pronto reconocemos e7R + . El caballo aislado 6A continúa
que N apier ha calculado, pero aún no lo siendo una amenaza, con la cual las ne-
.suficient~. gras deben contar siempre.
13. PRX P, C5D 18 . . . . , T1R!
14. ex e, 19. ASA,
Despues de 14. Axe, PXA; 15. exP Manteniendo la amenaza.
eXP la situación de las blancas eviden·
temente que"daba derrumbada. 19.... , PCXP
14. exp Sorprendente, pero bien calculaao. A la
jugada PR X P las blancas quedarían con
¡La primera sorpresa! A 15. e X e, las ventaja en 20. PXP, PXP; 21. A4A,
negras adquieren ventaja con P X C!. amenazando A7A.
15. C5A! En cambio, ahora las blancas se hallan
ante un problema mucho más difícil·, To-
davía no pueden tomar el caballo, porque
Seguramente que Napier ha previsto
las negras, gracias a sus dos fuertes alfiles .
esta sorprendente jugada de Lasker, por-
<}Ue si no perdería una figura y la desgarrada pos\_ción de las blancas,
conseguirían un juego favorable después
15. 1 ex e de 20. P XC, AlA; 21. ASC, T X C; 22.
16. DXD, TXD A X T, A X A; Lasker prefiere continuar
17. e7R+, el ataque conlra el rey.

Puede verse cuán lejos han calculado 20. A4A., PXP


de antemano las negras, que por el hecho
de que ni con esta jugada ni con 17. Napier juega también a la realización
e X A, . pueden las blancas conseguir ven- de su contraataque. Jugadas defensivas
taja material 1\ C X A las negras contes- serían poco satisfactorias. A 20 . .. ., A3R,
tarían con 17 C4D; 18. 0-0-0, blancas podrían acarrear un final favora-
ASC, quedando con ventaJa ~ oon H. AXA, PXA; ~ - Px~
AlA; 23. TxP, Ax C; 24. AxA, TXA;
17. R1T 25. P X P. TIAD; 26. 0-0-0, T X P;
27. P6C. Es bien posible que el juego de
Ahora también queda inatacable el ca- las blancas se debe fortalecer aún más en
ballo negro Si 18 P XC, la ventaja de esta variante.
las blancas se va con 18 P X P; 19
A4D, AXA; 20 P XA, TlR Si 18 21. A. X PA, esR
e X A, a fin de tomar más tarde el caba·
llo 3A, las negras se salvan con ventaja Con este genial sacrificio de torre, Na-
con 18. , e4D. pter aprovecha su mejor suerte, con la

-75
cual y contra un jugador menos prac· 15... ., AXA
ticado, acaso hubiera conseguido ganar la 26. TX A, C6C+
partida. 27. RlC, CXT
22. AX T, AXP 2.8. TX P, P4T
23. TICD, A6A+ 29. T3C, AlC
24. RIA, ASCR 30. T3TR, C6C
31. R3A,
Situación después de 24. •.. , ASCR El prither éxito positivo. El peón SA
Negras: Napier no se ,puede defender p9rque a A4R si·
gue 32. C6C + , una amenaza que era
constante durante toda la duración del
ataque.

31. ."' T3T


32. RX P, C7R+
33. RSA, C6A
34. P3T, CS'!'
35. A3R.
Ahora es decisivo el ataque de las blan-
cas. Las negr_as están indefen!>BS contra
P6C y por esto abandonan.

pARTIDA NÚM. 27.

ESP~OLA

Nueva York, 1907


Blanca:;: Lasker Blancas: F. J. Marshall
Negras: M. Lasker
Aunque las blancas tengan una torre
más, las cosas no están ' nada favorables l. P4R, P4R
para ellas. 2. C3AR, C3AD
Las negras tienen cuatro amenazas di· 3. ASC, C3A
rectas: TxA, CxA, C7D+, C6C+. 4. P4D,
Adem·ás, en poco tiempo el rey blanco
está seriamente amenazado, y las negras Ya hemos dicho que el objeto de la
se han apoder.ado totalmente del ataque, jugada P4D, que es procurarse un juego
mientras que ~1 ataque blanco parece per- más libre en las aperturas de, peón de
tenecer al pasado. No se podría creer nun. rey, sólo se consigue cuando las negras ya
ea que en la posición que presenta esta han jugado P3D. En esta partida, es pr&-
partida, las blancas· pudieran decidirla a maturo, y por eso las negras pueden ha·
su fa,·or, cosa que logran precisamente cer sin dificultad la jugada liberadora
por su ataque contra el enroque negro P4D, más adelante.
iniciado . al principio. 4. PXP
25• .Ax PTR!, S.• ()........(), AlR
6. PSR,
Con esta jugada las blancas abandonan
toda ventaja material, p-ero nuevamente El avance de este peón debe meditarse
disponen dtl ataque que a pesar de los siempre. Véase la anotación a· la jugada ·
reducidos· i:nedio5 disponibles conduce a 8 de las negras en la partida 17 y la
la victori~r. jugada 8 de negras en la presente partida •.

76-
C::SR Marshall tiene la sen.sación de que su
0-0 peón SR es más bien 11n punto flaco.
P4D
9•... , PX A
Y a hemos conseguilo la formación de 10. e X A+, DX e
peones; blanco SR y negro 4D. Muy a 11. TRI R, DST
menudo puede conseguirse ésta después La necesidad posicional de esta posición
del cambio del peón blanco 1de dama es PJA. y ,lo más sencillo es jugarlo en
(PR X PD) y las negras logran la liber- seguida. El ajedrez de hoy día ha llegado
tadora jugada P4D y las blancas contes- a un grado de tal desarrollo, que es muy
tan con P5R. difícil ganar una partida con las jugadas
El peón SR, puede apo.yar a veces y en más claras y mejores. Por cierto que eón
forma decisiva el lftaque contra el enro· las combinaciones de un Anderssen, con-
que de las · negras, y es incómodo para és- tradictorias a la posición, poco éxito po-
tas que no pueden tener ningún caballo en drá lograrse hoy día. Pero Lasker sabe
JAR para defender 2TR. Si las negras tie- acarrear complicaciones y combinarlas con
nen que hacer la jugada defensiva P3CR, las necesidades posicionales. Es el método
entonces la casilla 3AR, gracias al apoyo con el que Alekhine y Nimzowistch han
del peón SR, será uno de los puntos de- logrado sus éxitos.
cisivos para las figuras blancas. El peón En la presente partida, Lasker se ha
SR, a veces, facilita combinaciones de formado la idea de que las blancas han
.sacrificio con C6AR o A6AR, si es que jugado TRlR para cubrir SR, retirando
las negras ~an enrocado. Por otra parte, una defensa al punto 2AR. y por otra
el peón SR puede ser ventajoso para sus parte se imagina que laa negras jugarán
contrarias si éstas lo pueden utilizar para PJAR, para abrirse la columna AR; y
abrir la columna AR para su torre con esta concepción trazada en su mente, la
P3AR. Sucede taxqbién a veces que el aprovecha Lasker para iniciar un com·
peón SR, es un objeto de ataque para plicado ataque contra el punto 2A 'R.
las negras, provocando que las blancas lo 12. A3R, P3A
cubran con P4AR, obstruyendo entonces 13. P3AR,
el camino del alfil de dama blanco. (Véa-
se la introducción de la partida 20.) Situación después de 13. ... , P3AR
Los campos blancos de la posición blan-
ca, por ejemplo, 4R y SAR, pueden en· Negrat~: Lmker
tonces resultar débiles y ser puntos de
entrada para las piezas negras.
Por lo tanto, el resultado de esta consi-
deración es que el peón SR, igualmente
puede ser un elemento de fuerza como
de flaqueza. Es fuerte, si las blancas es-
tán en un desarrollo mejor, y también si
tienen ataque. Pero 5i el · desarrollo es
igualado o si tienen la iniciativa las ne-
gras, el peón SR es más bien favorable a
estas últimas.
Se deduce de todo esto que la jugada
PSR sólo se debe hacer si se tiene · buena
posición -- y si proporciona una ganancia
de tiempo.

"9. AXC::,

El cambio de;. alfil por el caballo, el


cual ataca al peón. SR, demuestra que Blancas: Mar:rhall

-77
13 .... , PX P 20. P3C, T4C
14. PX C, P5D
La torre domina totalmente la quinta
El alfil blanco no puede jugar 15. fila.
A2D (sería más malo aún 15. A1C, por la
continuación de D7 A+ , A5C) ; 15. . .. , 21. P4A,
A5C; 16. DIA, T7A; 17. A5C, TxP+;
18. RxT, A6T+; 19. R1T, D7A y Después de esto, el peón de la dama
ganan. está libre, pero sí las blancas hubieran
Marshall por eso expulsa la dama blan- hecho la jugada más lógica 21. C2D, las
ca . Pero no ha penetrado en la profundi- negras quedaban con ventaja por T4TR;
dad de la combinación de Lasker. 22. R2C, T4AD; 23. TIAD, A3T, ame-
Si hubiera previsto que no podía sal- nazando A6D.
var su alfil ni con la jugada siguiente, Aquí es, pues, donde se demue3tra la
lo hubiera devuelto ahora mismo con 15. posibilidad de acción del A en dirección
D2D. a 3T. Esto, o .sea, el desprecio de la
jugada 10 .... , A3T+, es lo que ha in-
Después de 15 .... , PxA; 16. DxP, ducido a las blancas a jugar 21. P4A,
las negras hubieran tenido un jqego de liberando así el peón de damas negro, lo
piezas algo mejor, y las blanca¡¡ una que definitivamente trae la decisión de la
situación de peones claramente superior. partida.
15. P3CR, D3A 21. ... , T4TR
16. Ax P, 22. R1C,
Las blancas deben decidirse a devolver Si P4TR, sigue P4C; 23. PxP, T8T+
la pieza. Si 16. A2D, sigue D7A+; 17. y lll!J blancas quedan definitivamente ·su-
RIT, A6T; 18. TIC, P4TR! (el punto jetadas.
más oculto de la combinación).
Contra la amenaza A5C las blancas no 22. •• •1 P4A
tienen defensa, pues, tanto si l!Í. DxPT
como 19. A1R, las negras con el sacrificio Ahora el peón queda cubierto, y ~un­
de dama D X T + dan mate. que la torre está atajada en la qumta
fila, le queda en cambio libre la sexta.
16.... , PXA Obsérvese que las negras tienen un va-
17. TlAR, DXT+ lioso alfil que corre por campos de color
18. D X D, TXD+ distinto al de los peones negros parados
19. RXT, TIC en el centro.
23. C2D, R2A
Parecía lógico proseguir aquel desarro-
llo con la ganancia de un tiempo con Desarrollando a su rey, antes de que
A3T+ más TIAR. La mayoría .de los las blancas lo incomuniquen con TIAR.
jugadores lo hubieran jugado, pues es una
falta muy difundida que al jugar una pie- 24. TJA+, R2R
:za se juzga su nueva esfera de acción, con 25. P3TD, T3T
abandono de la esfera de acción que di- 26. P4TR, T3T
cha pieza había tenido antes de la juga• 27. TJT, ASC
da. En la posición que ha resultado, el A 28. R2A, R3R
tiene dos posibilidades de acción: hacia 29. P4T, R4R
3TD y 6TR. Y, efectivamente, ambas se 30. R2C, T3AR
realizan con éxito más adelante. Esta es 31. TlR, P6D
la causa de que Lasker, con un cuerdo
dominio de sí mismo, desecha la ganancia El peón, apoyado por el rey, acarrea
de un tiempo con A3T +. la decisión.

78-
32. TlAR, RSD Nuestros exámenes teóricos han progre-
3!. TX T, PXT sado tanto hoy día, que se puede decir
34. R2A, que no satisface del todo este sistema
de defensa. La partida española reúne
Las figuras que dominan filas, alfiles, para las negras tan difíciles problemas
torre y dama, pueden hacer jugadas sin de defensa, que éstas no pueden conten·
tener que abandonar puestos necesitados tarse con sólo las jugadas de desarrollo
de apoyo. Pero las figuras de lento correr claras y sencillas. Por lo tanto, si las ne-
como son el rey y caballo, esto ya es otra gras quieren evitar la posición cerrada
cosa. Por esto, en semejantes finales, que resulta con la defensa de Steinitz, de-
siempre hay que contar con jugadas obli. ben apelar a otros medios que a la larga
gadas. sólo 'les produceñ ·una 'debilidad como, por
La po,ición de las blancas se encuen- ejemplo, el rechazar el ASC por P3TD
tra en este caso, pues, a jugadas del ca· y más tarde P4CD; o contradiciendo el
hallo, sigue R X P; y a una jugada de sentido fino del ajedrez con el incorrecto
rey puede seguir R6R. Las jugadas que contraataque 3.... , CSD o 3 .... , P4AR.
hacen las negras, no son más que juga- En tales consideraciones, la fuerza que
das de espera para aprovecharse de las tiene la partida española está clara.. Es
jugadas obligadas de sus contrarias. también la lógica apertura del juego de
peón de rey, pues, como ya hemos dicho,
34. 1 P3A representa el consecuente ataque al peón
35. PSTD, P3TD SR que desde la jugada primera está in-
36. ClA, RXP móvil en esta casilla central, siendo el
37. Rl R, A7R objeto de ataque en esta lucha de aper-
38. C2D+, R6R tura. Como se ve, la partida española
pretende ser la refutación teórica de la
Nuevamente se encuentran las blancas jugada l. ... , P4R de las negras. El plan
en la situación de tener que hacer una de refutación se traduce con especial cla-
jugada por obligación. El caballo debe ridad en la defensa Steinitz, en la que
augar y ceder sin remedio la casilla 3AR · las negras no se obstinan en hacer des-
al rey contrario. Las negras no se dan víos. La forma de ataque de las blancas
prisa por eso y sólo ocupan dicha casilla ha sido . especialmente perfeccionado por
dos jugadas más tarde. el doctor Tarralfch. La idea del ataque· es
la siguiente: las blancas, en virtud del
39. CtC, P4A ataque contra PSR, quieren obligar a la
40. C2D, P4T jugada de defensa P3D. Si las negras haD
41. CIC, R6A jugado P3D, la continuacióxr del ataque
42. Abandonan. contra SR será la jugada de las blancas
P4D. Si las negras juegan ahora PXP,
sus contrarias han conseguido la forma-
LA DEFENSA DE STEINITZ EN LA ción de peones de la cual ya hemos di-
PARTIDA ESPA~OLA sertado, reconociendo que es favorable pa-
ra las blancas ; peón blanco 4R, y negro
Esta defensa, de la cual queremos di- 3D. Por varias razones, las blancas tienen
sertar algo más en est¡¡s páginas, tiene un juego libre, pues las dos torres blan-
una gran importancia histórica, porque cas tienen a su disposición las columnas
predilectamente ha sido usada por tres R y D para su desarrollo, mientras que
grandes maestros: Steinitz, Lasker y Ca- las torres negras tienen tan sólo la colum-
pablanca. na R. Los alfiles blancos, tienen toda li-
Aún tiene mayor importancia en la teo- bertad, y en cambio el alfil negro de rey
ría de aperturas, pues representa el in- queda contenido por el peón 3D. Los
tento de defenderse contra la apertura es- caballos son piezas lentas, y para que
pañola con las jugadas de desarrollo más sean eficaces han de llevarse cerca de la
claras y lógicas. posición contraria. Para esto, los caballos

-79
tienen que e:;tar en casillas que estén de- - no harían más que complacer a las blan-
fendiaas. Los caballos blancos, por la for- cas. Estas podían entonces jugar en se-
mación de los peones que ya hemos re- seguida · 3. P4D. Si cambian las negras
latado, tienen las casillas defendidas SD y P X P, entonces las blimc.as consiguen la
5AR y en cambio, lo.S' puestos más avan- formación de peones 4R contra 3D. Sin
zados para los caballos negros son 4-R y duda algana, las negras pueden probar
4AD. Se ve, pues, que los · caballos blan- de evitar P X P y defender la casilla 4R.
cos pueden ser llevados más cerca del S1 juegan 3 .... , C3AD, _no es a propó-
bando negro que los · negros del bando . ~ito .. Las blancas, por el cambio de da-
blanco. Verdad es que las negras pueden- mas, pueden destruir el enroque negro,
expulsar al caballo blanco de SAR, por consiguiendo una ventaja clara, aunque
P3CR; y de SD por P3AD, pero la ju- pequeña, o también transigir con la de-
gada última debilita el peón 3D sobre la fensa Steinitz de la partida española, ju-
líne·a abierta D, y la jugada primera, hace gando ASC, en la cual las negras, como
flaquear la situación del rey negro, des- veremos, están obligadas a renunciar al
pués de enrocar hacia el mismo flanco. centro (P X P ). En cambio, las negras
Hasta aquí hemos bosquejado el plan pueden defenderlo con 3.... , CD2D. Esta
de ataque de las blancas. Ahora detallare- defensa, conocido bajo el nombre de de-
mos · también las fases del plan de defen- fensa de Hanham, estuvo algunos años
sa para las negras, en la defensa de Stei- muy de moda, pero a la larga ha resul-
nitz. En primer lugar, las negras deben tado no ser muy satisfactoria. Para las
evitar la jugada P X P, que Tarrasch ha negras es un difícil problema sostener el
ealificado de abandono del centro, y de- equilibrio en el centro, con la' cohibida
ben de evitarla por medio de un contra- posición de sus piezas.
ataque contra SR. No obstante, si las
blancas rechazan este contraataque, por 3. ASC, · C3AR
ejemplo, al estilo de Tarrasch (que ya
veremos más tarde), por las jugadas C3AD Steinitz acostumbraba jugar en seguida
y TIR, entonces las negras están en la ne- 3 . . .. , P3D, que por fin resulta lo mis-
eesidad de hacer PXP. · mo. Naturalmente que la contestación de
Después de eso las negras tienen dos · las blancas sería inmediata 4. P4D.
alternativas.
Pueden tratar de conseguir la libera- 4. 0-0,
dora jugada P4D o tal vez P4AR, para
eambiar el peón SR, cesando así la po- La única contestación justa si las blan-
sición cohibida de negras. Si las negras cas quieren _lograr P4D. Véase la nota de
no tienen ninguna posibilidad de libera- la jugada de defensa P3D.
ción total, deberán tratar de adaptar el
desarrollo de sus figuras al menguado ie- 4 .... , P3D
rrcno de que disponen. Esto podrá ser
tanto más fácil cuantas más piezas pue- Si las negras no quieren jugar 4 .... ,
den cambiar, ocurriendo todo al revés con CxP, están forzadas a hacer la jugada de
l!lll blancas, que deben evitar ·todo cam- defensa P3D.
bio inútil, vista ·la ventaja de terreno que
tienen. 5. P4D,
Veámoslo en el juego siguiente:
Las negras tratan de evitar el aban-
1. P4R, P4R dono del centro, mediante contraataque
2. C3AR, C3AD a SR.

Puesto que el primer intento de las s.... , AlD


blancas consiste en obligar a jugar P3D,
como de(ensa al ataque ·SR,, las negras, Si las blancas juegan ahora 6. A XC
al hacer la defensa Philidor ~- ... , P3D, para conquistar SR, después de A X A el

80-
peón -4R queda doblemente atacado. Pa· 11. CXP, AXP
:ra hacer eficaz la amenaza al peón 4R, 12. C XA, ex e
o sea. para forzar la jugada P X P, las 13. C3D, P4AR
blancas deliMln poner dos defensas al peón 14. P3AR, A4A+
4R.
Ahora parece como si las negras se
6. C3A, A2R hubiesen·· salvado de la amenazante pér·
7. TlR, dida de piezas y recobrarán su peón con
un juego equivalenté;- Caso de que 1111
La BJ;Itigua continuación, que dim&J:Ia blancas jueguen 15. RIA, para ganar :la
del doctor Tarrasch, nuevamente se pre· pieza, entonces las negras contestan con
fiere 7. AxC, A x A; 8. D3D. Según la A3C; 16. P x C, PxP+; 17. C4A, P4CR
jugada del texto, 4R, queda cubierto en y quedan con un buen juego. Se com·
cambio SR, queda .atacado y las negras, prende ahora por qué las negras no po-
fulalmente están obligadas a abandonar dían jugar TRxD en la jugada 10.
el cen.tro con. PXP, entregando a sus con·
trarias el libre juego que pretendíaÍI. 15. ex Al,
Para la teoría de esta demostración, Parece ahora que las negras hayan ven-
es de gran importancia según lo prece- cido todas las dificultades, pero ahora vie-
dente, dar la prueba de que las negras ne una pequeña sorpresa, las tres jugad111
están efectivamente obligadas a renunciar que Tarrasch calculó de más que su ad-
al centro. versario.
Esta demostración fue llevada a cabo ·
en la partida Tarrasch-Marco, Dresde, 1892 15•... , ex e
la cual tomó el curso siguiente: 16. A5C, T4D

7 •... , A otras jugadas ·de torre, las blancas,


igualmente, ganan la calidad con 17. A7R.
Esto no es ninguna desatención, sino 17. A7R,
11na combinación calculada ampliamente.
Las· negras creen que si las blancas ganan Las negras a lo menos pierden la cali·
el peón 4R, conseguirán plena compen· dad, porque a · jugadas de torre, sigue 18.
sación. P4AD.
Pero ~ combinación es refutada por Con motivo de la partida que sigue, y
Tarraseh, pues éste calcula aún más lejos en posterior ocasión, -ventilaremos los prin·
que Marco, y con ello queda probado el cipios del ataque y de la de esta variante
hecho de que las migras se ven efectiva· tan importante en la teoría, después del
mente obligadas a la jugada 7 .... , P X P. obligado abandono del centro por las ne-
gr&s con P X P.
8. AX C, AXA
9. PX P, PXP
10. DX D, PARTIDA NÚM. 28.

A la inmediata 10. CxP, las negras ESPA~OLA


cambian las damas y recobran el peón
4R blanco. Match de Düsseldorf, 1908

10. ..., TDXD Blancas: Tarrasch


Negras: Lasker
Pronto veremos por qué era necesario
para la intentada combinación de Marco, 1. P4R, P4R
tomar con la torre de dama y retener la 2. C3AR, C3AD
torre de rey en lAR. 3. A5C, C3A

-81
4. 0-0, P3D camente, creado las blancas que tienen la
S • . P4D, AlD ventaja de la salida.
·6. 'C3A, AlR
7. TIR, Px P 9 . ... , AXC
d. C X P, 0-0
En la arriba mencionada partida. Stei-
Las negras, que han quedado constreñi· nitz jugó P XC, aunque era menos bue-
das después del abandono del centro, tie- no. Después de la jugada del texto las
nen la elección de dos planes de defensa. blancas ya no pueden impedir a la larga
Uno de ellos es el que escoge Lasker, y lil jugada P4D. Si 10. A3D, seguirá en
consiste en conseguir la liberadora jugada seguida P4D.
P4D, eventualmente también P4AR, a fin
de destruir la formación de peones blan- 10. AxA, PXA
cos en el centro, la cual es muy favorable 11. ClR,
para obtener igualdad. En la partida 27,
ya hemos visto el dudoso valor que tiene Puesto que no puede impedirse P4D,
la contestación PSR a P4D. las blancas empiezan a hacer filigramas.
El otro plan defensivo es · menos egoísta Las negras no ..pueden jugar ahora C X P,
y consiste en no jugar para obtener una pues sus contrarias, con 12. C4D, ade-
igualdad total, sino en conformarse con su más de C X P, quedarían con ventaja.
cohibida situación, pero acomodarse en lo
posible dentro de ella. El que tenga posi· 11. . .. , 020
ción estrecha, hará bien en cambiar cuan-
tas más figuras mejor. Si las negras esco- Era más sencillo jugar en seguida P4D,
gen el segundo plan, empezarán, pues, con· pero como en el complicado estilo de
el doble cambio de piezas: C XC y ade- Lasker, lo primero que quiere es desarro-
más AxA. llar las torres para jugar con más fuerza
aún la jugada P4D, que las blancas de
9. cxc, todos los modos no pueden impedir. El
plan en sí era bueno, pero en su ejecu-
Todas las continuaciones en esta posi- ción, Lasker comete una falta. Debía ha-
ción se basan en la idea de evitar el do- ber desarrollado las torres no a ID y IR,
ble cambio ·de figuras que podría desaho- sino a ICD y ID a fin de mantener libre
gar la estrecha situación de las negras. la casilla 1 R para la retirada del caballo.
Bajo este fundamento, se suele jugar aquí
o 'bien C XC o A XC, esto es, cambiar 12. C3C, TRIR?
una figura para no tener que cambiar 13. 'P3C, TD1D
dos, o bien se retira una de · las dos pie· 14• ..uc,
zas amenazadas de cambio, jugando 9.
C4-2R o. AlA. El retroceso de este alfil, Ahora se reconoce en qué consiste la
hoy en día pasa por ser la continuación desventaja del desarrollo de la torre hacia
más fuerte del ataque, porque las negras IR. Las negras }le han estropeado la an-
tienen entonces las más grandes dificulta- helada jugada P4D, puesto que de ha-
des en libertar su juego. cerla, las blancas podrían contestar con
Con la continuación que Tarrasch ha la ventajosa de PSR, y el caballo no tiene
escogido aquí, consiguió una brillante VÍC· ningún puesto bueno a su disposición. Las
toria contra Steinitz en 1898. Desde en· negras se encuentran en una posición res-
tonces esta continuación es considerada tringida, sin ninguna posibilidad de libe-
como muy fuerte, pero en la partida pre- ración, precisamente enfrente de Tarr8sch,.
sente Lasker la refutó en una forma fá- que trata con singular maestría las situa·
cil. No quiere decir al o:refutarla» que las ciones cohibidas de sus contrarios.
negras queden con ventaja, sino que pue- Seguramente que otro que no fuera Las.
den vencer con relativa facilidad las difi. ker hubiera perdido esta partida, pero
cultades de .J.a apertura, que les han, lógi- La.!ker entra por el camino psicológico

82-
en la valorización de esta situacwn. La 14• . ., ese
siguiente jugada aparece como un descui· 15. AX P, CXPAI
do. En el fondo, hay la intención de sa·
crificar un peón, para .a islar al peón-rey. Si 15 . . , RXA; sigue 16. CSA+. Con
En la partida 3 (Anderssen-Paulsen) he- la jugada del texto se ha aislado el peón
mos visto y descrito la esencia del peón de rey.
aislado, y la ventaja principal que con.
. cede un peón contrario aislado, no es el 16. RX e,
mismo ataque contra este peón, sino que
es la casilla que está delante de ese peón, En vez de u por la ganancia de peón
cuya casilla viene a · ser un punto fuerte las blancas podrían iniciar un ataque con
en que se puede colocar una figura, y ésta 16. D4D que a la larga no se podría pa-
es inexpugnable. rar. Contra un jugador de ataque, Lasker
Como que en el curso de este embrollo, hubiera perdido la partida, o mejor di·
el peón blanco de rey queda aislado, el cho, contra un jugador de ataque, Lasker,
punto 4R resultará también un fuerte el jugador psicológico, seguramente no
~uesto para las negras, donde podrán hubiera escogido el recurso de doble filo
c()locarse y conseguir un contrajuego. ese.
Pero no es precisamente una partida 16. ·.. , RXA
con suerte y contrasuerte la que conviene 17. esA+, RlT
al estilo de Tarrasch. Este prefiere para· 18. 040+, P3A
!izar poco a poco al contrario y finalmente 19. Ox PT,
asaltarle en su estrecha colocación cuando
ya no hay contraataque posible. Así es Ahora podría creerse que las blancas
que Lasker con su jugada siguiente, que con un peón más, y a . causa de la· posi·
realmente hay que tachar de mala, ha ju. ción · dislocada de las negras, conservan
gado maravillosamente bien bajo el punto todavía el ataque. Pero esto no es más
de ruta psicológico. que una apariencia. A causa del aisla-
miento del peón ·R, la casilla 4R es un
Situación después de 14. :JI.2C fuerte puesto para las negras, que el ata-
que de su contrario no puede salvar.
Negras: Lasker
19. AlA!
20. 04D, T4RI

Con esto se acabó el ataque blanco. Las


blancas en el flanco de dama tienen un
peón pasado, aunque su realización esté
lejos, Pero en el centro, las negras son
más fuertes. Objetivamente las blancas es-
tán todavía mejor, pero en esta situación
difícil, Lasker juega con más energía que
Tarrasch, llevando a }a. victoria la ven-
taja suya, mientras que el peón pasado
de las blancas no desempeña ningún
papel.
Después de haber especificado tan de-
talladamente las bases generales de esta
partida, seremos algo menos extensos en
la continuación.

21. TDJD, Tl-lR


22. 03A, 02A
Blancas: Tarrasch 23. C3R,

- RJ
El agresivo caballo blanco que hasta ' Este sacrificio de peón facilita la salí·
ahora estaba aquí, se retira para defen· da del alfil a 4C; y las blancas no tienen
der, y el alfil negro que permanecía en· ocasión de cambiar la dama por las dos
cerrado, se apresta para el ataque. Se nota torres.
que todo esto son los efectos del peón ais-
lado. 41. PX P, A4C
23 •.. . , A3T Las blancas abandonan porque si 42.
24. D3A, P4D T X T, las negras contestarían 42. . .. ,
25. PX P, A6R+ TxT ; 43 . D7D+, T2R.
2.6. RlA, PX P
27. T3D,
LA VARIANTE DE CAMBIO EN LA
Tarrasch opina que aquí se presenta la
última ocasión para conseguir la victoria PARTIDA ESPA~OLA
con la ventaja material de blancas, ju·
gando 27. C5A. Después de las jugadas:
t. P4R, P4R
27 . . . ., D3R 2. C3AR, C3AD
28. T2R, P4AR 3. A5C, P3TD
29. TlD, P5A 4. AxC, PDXA
30. ClT, P5D S. P4D, PXP
31. C2A, 6. DX P, DXD
7. CxD,
Ahora Lasker fuerza la decisión con
dos bonitas y bien calculadas jugadas de resulta una postcton en .la cual ·las blan-
dama (31 y 33) . cas tienen la mejor situación de peones.
Recomendamos . encarecidamente al que

~t C3o,
D3TD estudia que haga la prueba siguiente: Si
T4CR se quitan del tablero todas las piezas sal-
33. TlT, vo los reyes, naturalmente, el final de peo-
nes que resulta es rotundamente ganado
Sería peor 33. P4TD, porque para de- por las blancas. Estas conseguirán por fin
i'ender al rey, en la jugada 35 deberá De· un peón pasado en el flanco de rey, mien·
varse a ID. tras que las negras con sus cuatro peones
contra los tres blancos del flanco de da.
33 •... , D3T ma, de ninguna manera pueden pasar, si
las blancas se colocan bien.
' peón TR ya no puede defenderse
El (Después de 4. . .. , PC X A, las blancas
más, pues si .34. P3TR. las negras ame· ño podían tampoco jugar 5. C X P, por
nazarían el sacrificio de dama en 6TR la contestación D4C; en cambio, eon S.
por T6C. P4D, P X P, conseguirán un juego muy
34. Rl R, DXP bonito. Este es un caso donde · excepcio-
35. RlD, D8C+ nalmente es bueno desarrollar pronto la
36. CtR; T4-4R dama, pues ésta en 4D ocupa una posi,·
37. D6A, ción muy fuerte y molesta para el ·des-
arrollo de las negras, ni tampoco puede
· Para poder contestar a A7A con 38. ser expulsada con ganancia de .tiempo.)
DxT+. Las sitüaciones favorableS en tales de-
fensivas, son las cadenaS' de peones, 3TD,
31. T4-3R 2CD, 3AD, 4TD, 3CD, 4AD. Si las blan.
X
38. j) P, Tl-lR cas colocan sus peones en tal forma no
39. D8D+, Ric deben hacer ~;aso del l!Vance de peones do
40. P4T, P6Af las negras en el flan~:o de dama, que en

84-
resumidas cuentas no pueden romper sus Hay que suponer, por lo tanto, que son
posiciones. Otra buena formación defen- nuevamente motivos psicológicos los que
siva es la cadena de peones 2TD, 3CD, le inducen a emplear esta variante en
2AD. momentos trascendentales. Si se examinan
En ésta, las blancas sólo deberán cui- las circunstancias se encuentra que Las-
dar de cambiar en seguida el peón negro ker ha escogido esta variante siempre que
que adelante a SA, pues de lo contrario pudo suponer en su contrario la intención
las negras desdoblarían su peón doblado. de ir sólo por tablas. Si se juega una par-
En todos estos casos, las negras no pueden tida con la firm e intención de no em-
valerse de .su mayoría en el flanco de da- prender un ataque y de no arriesgarse, de
ma y las blancas, en cierto modo, juegan sólo simplificar; si se ha tomado ya de
un final con un peón más. Naturalmen- antemano esta determinación, habiendo
te, la situación de las blancas en el final llegado a un estado de ánimo pacífico,
es, igualmente, superior si subsiste una u entonces es muy · difícil cambiar de inten-
otra figura sobre el tablero. Si las ·negras ción dannte--·la partid'rr jugar repenti·
tienen .un alfil, entonces las blancas pro- namente a base de animoso ataque. Pero
curarán colocar sus peones del flanco de r esulta que en la variante de cambio, las
dama en campo color distinto al del alfil negras deben jugar al ataque y a la vic-
enemigo. toria, no a tablas, pues si se determina la
dimplificación, ésta va a lo que las blan·
Se conoce, pues, que esta variente, lla- cas han pretendido: n:::t final perdido para
mada la del cambio en la partida espa· las negras.
ñola, da unas perspectivas favorables para Este es el motivo psicológico por el cual
el final a las blancas. Estas pueden limi- Lasker adopta la variante de cambio en
tarse a simplificarlo todo y a cambiar mu- partidas decisivas, cuando cree que desde
chas figuras, y deben ganar la partida. un principio su contrario juega con inten·
¿Con todo eso es favorable esta variante ciones de haber tablas.
para las blancas? Después de la jugada
tercera de las negras, juegan sin mira-
mientos, con fáciles jugadas de cambio, PARTIDA NÚM. 29.
para lograr una ventaja que es equiva-
lente a una ventaja material (de peones). PARTIDA ESPAROLA
Pero un sentido más fino en · ajedrez, se
resiste a creer que con tales jugadas secas, Petersburgo, 1914
siri cálculo ni profundidad, pueda obte-
nerse ventaja. En realidad, la compensa- Blancas: Lasker
ción de las negras es su par de alfiles;
Negras: Capa blanca
Pc>r la si~uación mala de sus peones, con-
secuencia de la variante de cambio, Tam- 1. P4R, P4R
bién ha demostrado la experiencia que si 2. C3AR, C3AD
se ha comprendido el espíritu de los prin- 3. A5C, P3TD
cipios de Steinitz para dar valor a los dos 4. AXC, PDXA
alfiles, más · bien ofrece perspectivas fa- 5. P4D, PXP
vorables a las negras. Es por eso que la 6. DXP, DXD
.v ariante de cambio se emplea raramente. 7. C..x D, A3D
No obstante, ha logrado. un marcado fa.
voritismo, pues el doctor Lasli:er, aunque El alfil está . muy bien. Si las blancas
no a me1;1udo, ha tenido grandes éxitos llegan al cambio del alfil, con el fin de
con ella en ocasiones · decisivas. ¿Cómo se arrebatar a las· negras el arma de los al-·
explica e1to? files, acontecerá PAD· toma y la situación
No es aceptable que Lasker considere de los peones negros mejorará.
esta variante como. fuerte, pues como he.
mos mencionado, la. emplea raramente y, 8. CD3A, C2R
por regla general, prefiere 4. A4T 9 0-0, 0-0

-85
En una partida posterior, Schlechter 12. . ., P 4CR, para impedir 13. A4A y
jugó contra el autor de es te libro, A2D, asegurar la fuerte posición del alfil 3D,
mucho mejor y 0-0-0. y si l as blancas 13. P X P a. p ., C X P; 14.
T X P, las negras contes tan con A4R ade-
10. P4A, TRIR más A XC y T X P, recuperando el peón
y causando desigualdad de alfiles.
Era más enérgico A4AD , lo que Las-
ker impide por la excelente jugada si· 13. A4A, A2C
guiente:
Las n egras debíaU: cambiar. Después 4.
11. C3C, P3 A A X A, P X A, el peén doblado de las ne-
gras queda desdoblado, pero débil el peón
Una jugada defensiva innecesaria del 3D, lo que es de mu cho peso en la balan-
todo, pu es si PSR sería sólo agradable za dado el desarrollo desfavorable de las
para las negras, porque reciben las casi- negras.
llas 4D y 4AR para sus piezas. Por el
juego temeroso de Capablanca , se ve clara· 14. AXA, PXA
m en te que éste, vista de su buena colo- 15. C4D, TD1D
cación en el torneo, tira a tablas, lo cual, 16. C6R, T2D
precisamente en la variante de cambio de 17. TD1D, C1A
la partida española, es lo menos recomen. 18. T2A, P4CD
dable para ellas. 19. T2-2D, T2-2R
20. P4CD,
12. PSA,
Impidiendo la liberación por P4A.
Una sorprendente jugada . A primera
vista parece que el peón se quedará atrás 20. ... , R2A
y débil la casilla 4R. Pero mirando con 21. P3TD, A1T
más exactitud, se ve que esta desventaja 22. R2A, TlT
es menos evidente, pues _en verdad, enfren- 23. P4C,
te hay unas ventajas mayores.
En primer lugar, el alfil blanco obtie- Nuevamente vemos la partida tipo en
. ne más campo de acción (los dos peones aprovechar una ventaja de terreno. El
blancos colocados en 4R y SA, están en centro está cerrado, y las blancas que dis-
casillas de diferentes color al del alfil). El ponen de más terreno, preparan la ruptura
alfil negro de dama y el caballo quedan por el flanco de rey. Las negras intentan
restringidos . en su movilidad. la contrarruptura pof el flanco de dama,
Hay que añadir a esto que las blancas que no tiene éxito. La torre negra no
dominan ahora continuamente el punto puede accionar en la columna que muy
6R, lo que puede resultar una compensa- pronto será abierta, y rápidamente retro-
ción por .la debilidad del punto 4R. cede hacia el centro. Más tarde esta co-
lumna beneficiará a las blancas. En este
12. P3CD caso, es lo que se repite a menudo. Es
bien comprensible que en una situación
Al tener CaiJablanca la infeliz idea de cohibida, se aproveche toda posición de
apartar el alfil dama de la defensa de la liberación en la ruptura de columnas, pe-
casilla 3R, 6R es un punto mucho más ro es a veces mejor dominar esta depresión
clebii que el de las blancas 4R._ Lo más a la liberación. Si el intento este no .apar-
sencillo era el desarrollo de A2D, y des- ta la presión del contrario, como sucede
pués TDlD. Caso que las blancas conti- por ejemplo con P4D en la variante de
núen en 13. A4A, como en la partida, Steinitz de la partida española, sino que
las negras pueden cambiar los alfiles y sólo conduce a la apertura de una colum-
transportar el caballo por lAD a 3D. na en un terreno de lucha apartado, vale
También es digno de tenerse en cuenta más pensárselo bien antes. En cambio,
¡¡j con la apertura de columna se. con• Situación después de 32. ., T2D
-sigue un fuerte contraataque que distrae
al .contrario de su propio ataque y se le Bla~cas: Lasker
desvía de él, entonces conviene llevarla
a cabo. Pero si la apertura de una ca.
lnm~a no -PIQE~rciona un contraataque
duranero, tal apertura redu.ridaiá más bien
en "beneficio del contrario que dispone de
máyor libertad de acción, como sucede en
1a presente partida.
23. P3T
24. T3D, P4TD
25. P4TR, PXP
26. PXP, T2-2R
27. R3A, T1C
28. R4A, P3C
29. T3C, P4C+

Con tal jugada, las blancas obtienen


la decisiva apertura de la columna ·TR.
Era mejor abrir la columna CR con 29 .
.. ., P X P. Si las blancas toman con el Negras: Capablanca
peón de rey, entonces las negras .mejor-
rarían su situación con P4D. Si toman
con el peón de caballo de rey, entonces 33. R3Cl,
las negras cambian torres y coni¡uistan rá-
pidamente la columna CR con la otra Una fina jugada de preparación para la
torre. Después de la jugada del texto, no combinación final. Después de planeado
es posible descubrir ninguna salvación PSR, el rey no debe estar expuesto al
-contra el elegante final de Lasker. jaque de alfil por P4A.

30. R3A!, C3C 33. RlR


31. P X P, PTXP 34. T1-1TR, A2C
32. T3T, 35. PSR!, PDX P
36. C4.R, C4D
37. C6-5A, AlA
Las blancas juegan conformes a su plan
de penetración en el flanco de rey. Si
32. T X P, las negras conseguirán una Las negras deben dar la oalidad, pues
fuerte posición con TlT, CSA. si hacen jugadas . de torre: 38. C X A,
TXC; 39. C6D+ y perderían · una torre
32 .... , T2D limpia. La desventaja material, juntamen-
te · con la posicional, conduce rápidamen-
Más lógico, pero inferior, era CSA. A te al descalabro.
causa de la censurada apertura de la co·
lumna TD, el caballo es necesario en 3C 38. CXT, AXC
para la defensa, ·. como lo demuestra el 39. T7T, TIA
siguiente giro: 32 ... , CSA; 33. T7T ·f;-, 40. T1TD, R1D
RIR; 34. TITD, A2C; 35. C7A+, R2D;
41. TST+, AlA
36. TxT+, RXT; 37. T7T, y las negras
Llegan a una desventaja material, porque 42. CSA
TICD fracasa por 38. C6T. 42. C5A,

-87
PARTIDA NÚM. 30. gras, mientras que la jugada 4R es mu-
cho más difícil, y por eso sólo por excep·
GAMBITO DE DAMA ción, se lleva a cabo, por una parte, por-
que la casilla 4R desde un principio, no
Moscú, 1925 es dominada por las negras, y por otra,
porque las blancas, por el desarrollo na·
Blancas : Rubinstein tural de C3AR, lo dominan doblemente.
Negras: Lasker Puesto que en la defensa del gambito
de dama se tenderá a la jugada liberadora
1. P4D, P4D P4AD, el jugador experto opina que ha-
2. P4AD, cer P3AD es perder un tiempo.
Cortésmente queremos notificar a los
Si las negras quieren contestar z-. .. .; jugadores menos prácticos que después de
C3AR, como lo suelen hacer jugadores estas consideraciones es evidente que no
poco prácticos, las blancas, jugando 3. conviene obstruir el camino de peón alfil
P X P, consiguen una considerable prepon- en el gambito de dama, no desarrollando
derancia en el .centro. Si 3. . .. , C X P, el caballo de dama antes de haber ju-
puede seguir en seguida 4. P4R. Aún gado P4AD. Pues esto sería tan feo como
sería peor 3•... , D X P, pues las blancas por ejemplo jugar el alfil negro a 3D,
continuando con 4. C3AD, igualmente con. antes de haber jugado el peón dama.
seguirán en breve P4R. Resulta de todo Desde luego, la teoría de aperturas cono-
esto que las negras han de defender su ce ya la defensa de Tschigorin 2. . .. ,
peón 4R por otro peón y éste sólo po- C3AD del gambito de dama. La idea de
drá ser 2 . ... , P3R, 2 .... , P3AD (gam· esta defensa es lograr a todo trance y con
bito de dama rehnsado ). energía la jugada libertadora P4R. Pero
Parece más natural 2.... , P3R, pues si las blancas contestan bien, las negras
contribuye al desarrollo, mientras que 2. no lograrán hacer jugada, y más tarde
.. . , P3AD, al contrario, ocupa la casilla tendrán menos probabilidad aún de des-
de desarrollo del caballo de la dama. Si ahogar su juego. Así es que esta defensa
se conobe bien la /esencia de la formación ha pasado ya a la historia.
de los peones en el juego de peón de Es comprensible que 2. ..., P3R sea
dama se encuentra aún otro detalle en la contestación más usada en el gam-
contra de la jugada 2. . .. , P3AD. bito de dama, pero siempre se sigue ~nsa­
Para facilitar la comprensión, queremos yando P3AD, pues esta jugada, aunque
recordar al lector aún no confiado en el tenga sus perjuicios, también ofrece al-
juego de peón de dama, una analogía del . gunas ventajas.
juego de peón de rey. En aquél, después Los juegos de peón de dama tienen en
del cambio PR X PD, el peón blanco re· lo general más carácter de partidas ce-
sulta molesto para el juego negro, y éste rradas que los de peón de rey, porque
sólo puede libertarse si logra apartar este las casillas 4D y SD, desde un principio,
peón, lo que, por regla general, se obtie- están defendidas en mejor forma que 4R
ne mediante P4D o P4AR. y SR siendo, por lo tanto, más raras las
En el juego de peón de dama, análo- rupturas totliles en el centro, en las cua-
gamente el peón 4D, estrechará la situa- les desaparecen totalmente los peones cen-
ción de las negras, y éstas deberán tender trales. Por eso es más importante aquí la
a la liberación de su juego, que es poder diferencia entre un alfil bueno y 1JnO
apartar este peón. Las jugadas liberado- malo. Los alfiles buenos, los que tienen
ras de las negras, que corresponden a las libertad de acción, son aquí los alfiles de
jugadas P4D y P4AR en el juego de peón rey; los malos, que están limitados en su
de rey, son aquí P4AD (P3AD-4A) y eficacia por la posición :!e los peones
P4R. La jugada más normal, análoga a (blanco 4D, 3R, negro 4D, 3R, 3AD) son
4D en el juego de peón de rey, es P4AD, los alfiles de dama.
pues la casilla 4AD está cubierta desde un El alfil negro de dama en la defensa
~rincipio por el alfil de rey de las ne- 2. ..., P3R está. encerrad.o por l11 cadena

38-
ele peones, mientras que el blanco con 3. el slstema de defensa que ha elaborado
'C3AD, C3AR; 4. ASCR y S. P3R, está Rubinstein y empleado por primera vez
c~esar;rollado fuera de la cadena de peo- en el torneo de Merano de 1924. Este sis-
nes. En verdad las blancas tienen así des- tema de defensa, que hoy día es muy pre-
de el principio una pequeña ventaja, y ferido, ha tenido el nombre de o:variante
el juego de las negras sufre a menudo por de Merano».
el encierro de su allil de dama, y por eso
se ha dicho varias veces que el problema 7. Ax PA, P4CD
de la defensa del gambito de dama, con-
siste e.n el desarrollo del allil negro de Rubinstéin evita la tan discu~da y no
dama. En este problema de alliles, la de- del todo aclarada variante principal 8.
féÍIBil 2. .. ., P3AD es más eficaz que la A3D, y persigue otro plan puramente po-
défimsa 2 .... , P3R. En primer lugar por sicional : las negras para llegar a un jue-
2. ..., P3AD, el alfil no queda encerrado go libre deberán continuar con P4AD.
y se puede confiar en poder jugar A4AR Por ew quiere Rubinstein desarrollar su
o' ASCR antes que se necesite P3R. Por alfil de dama a 2C para que después de
otra parte, las blancas deben contar con P4AD, PD X P, este allil domine la gran
qile después de 2. .. ., P3AD, las negras diagonal abierta. Siendo probable que las
maten el peón 4AD (P X P) y defiendan negras contestarán a PD X P con C X P, a
luego el peón del . gambito con P4CD. fin de no perder un tiempo. Rubinstein
Con tal posibilidad las blancas .pueden no retira el alfil atacado a 3D, sino a 2R.
verse obligadas como, por ejemplo, en esta Cuenta también con la posibilidad de
partida, a defender el P AD mediante P3R, oponer su alfil de dama negro desarro-
antes de poder jugar su alfil de dama qile llado oportunamente a 2C, donde éste
así queda encerrado. sería muy fuerte después de P4AD. Pero
según veremos, el plan de Rubinstein fra.
2 . . , ., P3AD casa por una bagatela.
3. P3R,
8. A.iR, P3TD
Para no tener que contar con el em- 9. 0-0, A2C
brollo de la aceptación del gambito por 10. P3CD, A2R
P XP, y para no encerrar el alfil de 11. A2C, 0-0
dama, las blancas suelen a menudo ju- 12. C5R,
gar aquí P X P, pero entonces, después
de · P .X P, el juego negro es más libre, Esto es lo mas consecuente. Después•
por la apertura de la columna AD. del esperado P4AD, el alfil blanco de rey
debe poder oponerse en seguida al alfif
3. . .. , C3AR negro de dama. Esto hay que hacerlo·
4. C3AD, P3R también para que el alfil 2R ceda a la
dama su mejor campo de desarrollo, que
Las negras encierran también su alfil es 2R.
de dama, pues después de 4. . ., A4AR;
S. P X P y 6. D3C sería muy incómodo 12. . ., P4A
para las negras. 13. A3A, D2A
El que estudia debe tener en cúenta es- 14. cxc, ex C!
tas posibilidades de ataque que se ofrecen
¡¡ menudo después del desarrollo prema- ¡ Excelente! Si las blancas para abrir }a.
turo del alfil de dama negro. gran diagonal al AD juegan P X P, enton-
ces las negras toman con caballo y 111'
5. C3A, CD2D flaqueza de las casillas 3D y 4R no es
6. A3D, PXP nada agradable para las blancas.
P.or eso se explica la siguiente jugada,.
Con este cambio y el siguiente avance cuyo objeto es cambiar también el ca·
del flanco de dama de las negras, empieza hallo en 4AD

- 89
15. C4R, TD1DI 2.4. A2C, C3C
25. P3TR, .
El desarrollo natural de las torres era
TDiA y TRID. Pero Lasker jugó aquí Rubinstein no se siente a sus anchas
-con exacto cálculo TDID, y pierde a en su situación algo mala y juega teme-
sabiendas un tiempo con la posterior re- roso. Debía tratar. en absoluto 25. CSA,
.agrupación de las torres. La idea es esa : para conseguir algo de contraataque•
una torre debía colocarse en, seguida en
ID, para impedir la inmediata de blancas 25. DIAD
PxP. Pero Lasker no quería . jugar 26. D3D,
'TR1D, pues se preparaba para retirar la
-dama 1CD, a la jugada siguiente, no que- Las blancas están algo peor, no sólo
riendo entonces encerrar la torre de dama. por su peón aislado,· sino porque el cam-
bio del A3A por el A2C es inevitable a
16. TDIA, DIC la larga, a causa del dominio que las ne-
17. D2R, PXP gras ejercen sobre la gran diagonal 1 TD-
BTR. Además, las blancas se quedan con
Con el alfil las blancas no pueden to- el mal alfil en 2C y el peón 4D, cuyo
mar bien, pues a 18. A X P seguiría P4R. color es idéntico al de su alfil, teniendo
19. A2C (mejor 19. ASA, pero tampoco ventaja las negras con su buen alfll 2R.
-satisfactorio) ; 19. . .. ,P4A ; además PSR, La . casilla 4D es un fuerte puesto para el
con ganancia, de pieza. Por lo tanto, las caballo negro, y en el final para el r ey
blancas están obligadas a jugar 18. PXP, negro. Pero todas estas ventajas serían, sin
por donde resulta errada la disposición de duda, insuficientes para obtener la victo-
Rubinstein en la apertura. El alfil de da- ria. Lasker, sin embargo, encuentra la
ma ya no tiene la bonita perspectiva de maniobra . que decide todo. En primer
conseguir la gran diagonal, más bien este lugar provoca con 26 .... , C4D. la contes-
intento queda atajado por el peón ais- tación 27. P3T, luego retrocede el caballo
lado 41) para dar sitio al alfil (A4D), para obli-
gar, caso que sea necesario, P4CD o PX P
18. PX P, TIA por el avance del peón a 4TD-5T. Los
19. P3C, peones blancos del flanco de dama esta-
rán entonces todos en casillas negras des-
En esta situación Rubinstein no puede favorables, y otros campos blancos en la
,e mprender na:da bueno, y trata, por lo posición blanca Uegarán a ser débiles,
tanto, de dar más elasticidad a su posi- en especial 4AD
ción. La jugada del peón tiene algo en
su favQr 26. ., C4D
Por 1,1na parte, abre una casilla al rey, 27. P3T, C3C
lo que ' en el final con la dama y las 28. R2 T,
torres es muy útil siempre. Por otra par-
te, facilita al incómodo alfil en 3A un ¡Apuro!
campo para un retroceso eventual a 2C
y, finalmente, impide a las negras la pe- 28. 1 A4D
netración hacia SAR La jugada también 29 R2C, D3A
tiene su lado oscuro, y es la debilidad de 30 C2D, P4TDI
la gran diagonal 2CR-8TD, que Lasker
aprovecha en seguida. El peón debe ir a ST para el objeto del
ataque P3TD, y también para alejar el
19. . 1 DIT peón 3CD que defiende el campo 4AD,
20. R2C, TRID .abriendo así este punto plll'll la penetra
2 1. TX T, TXT ción de las figuras negras
22. TIA, TXT
23 AX T, PJT 3 1 D3A,

90 -
Sin el cambio de damas, Ruhinstein hu. Caso de 34. P4CD, natmalmente gana
hiera podldo oponer ima más lárga reais- CSA. Caso de 34. A5T (para desviar el C
tenc.ia. dé 4AD y entonces se jugaria P4CD),
hmker tendría la bonita fonna de ganar
Situación clespu& de 31. D3A 34 .... , PxP; 35. AXC, A4C!!
Negras: ÚHker 34, P X 1"', PXP
35. Rt~,
Las blancas se apresuran en acercar lJU
rey. Con 35. A4C, A.x A; 36. P X A,
PóT; 37. C2D, P7T; 38. C3C, RIA, etc.,
aún perderían más rápidamente.

35. • • •1 AXP
36. R2R, RlA
37. R3D, C4D
38. AlR, A 3D
39. R4A, R2R
40. C5R, AXC
41. P X A, R2D
42. AlD, P4T

Con 43. R5C, las blancas podrían aho-


ra. conquistar el peón torre; en cambio,
Blancas: Rubimtein su flanco de rey sería perdido. 43. R5C,
PóT; 44. AlA, CóA+; 45. R4A, Pl'T;
Ahora Lasker liquida la contienda en 46. A2C, C5R; 47. R3C, CxPA, etc.
forma ampliamente calculada. Podria pre-
sentarse la situación presente como un es- 43. AlA, R3A
tudio de finales: «las negras juegan y 44. A3T, C3C +
ganan». 45. R4D, R4C
31. ... , AXA+f 46. ASA, C5A
47. R3A, P3C
Alejando el caballo blanco del amena- 48. P4A, C6R
zado flanco de dama. Si hubiera primero 49. R3D, C4D
cambiado damas entonces en el cambio
d~ alfiles podía tomar el rey.
Amenaza PST. Si las blancas paran con
32. CXA, 50. P4T, las negras van con su caballo
por cualquier camino a 4AR, y ganan fá-
A 32. D x ·A, D7 A, aún no hubiera aca· cilmente. Por eso Ruhinstein busca otra
rreado la decisión, a causa de la fuerte salida.
contestación 33. D3A. Las negras, sin em-
bargo, contestarían a 32. D X A, con C4D, 50. A3T, P5T
y entonces las blancas contra de la ame- 51. PXP, CxP+
naza D7 A no tendrían ninguna defensa 52. R4R, C4T
más, por ejemplo, 33. D4R, P4A; y la
dama blanca debe ir de nuevo a 3A.
Caso de C X P, entonces 53. R3A, y .a
32. . .. , DXD consecuencia de R3C, R2A, R3C, R2A, el
33. AX D, P5T caballo es atacado siempre.

-91
53. R3A. 56. R4C, R7A
57 • . R5C, R6Df
El último intento debe eer una marcha
del rey. R3A, 4C, SC, 6T, 71, SC. Las- Para .colocar . el propio rey. en UR
ker lo iiÍlpide muy prudentemente. ciuando el rey blanco haya ganado el peón
alfil. El caballo tiene tiempo para tomar
53.... , R5A con toda tranquilidad los peones blancos
54• .A2C, R6C de torre y finalmente también el alfil
55. A1T, P6T Por eso las blancas abandonaD.

92-
CARLOS SCHLECHTER

Allá por el año noventa del siglo pa· Schlechter murió en Budapest el día 27
!llldo, las teorías de Steinitz no eran aún de diciembre de 1918, a consecuencia de
un bien público, ni siquiera ·de los maes- la mala ' alimentación que sufrió el centro
tros ajedrecistas. Así fue que los que las de Europa durante y después de la pri·
conocían alcanzaban fácilmente a «gran· mera guerra mundial.
des maestros» ; sin dar de sí todo lo que
podían, vencían a los mú débiles, y entre
ellos mismos se limitaban a tablas. Aaí PARTIDA NÚM. 31.
nació el estilo de aquel tiempo, poco ini·
dativo y limitado al acecho de las juga· GAMBITO DE DAMA
das flojas que hicieran aquellos que no
estaban versados en las teorías posiciona· Montecarlo, 1904
les de Steinitz. Este estilo llegaba hasta
nivelarse con el estilo personal de los Blancas: Schlechter
maestros, a los que perteneció también Negras: Marco
Schleehter. En el estudio de sus partidas
podemos ver a menudo, a través de la 1. P_,D, P4D
máscara de la epigónica técnica . de su 2. P4AD, P3R
tiempo, los interesantes perfiles de su per·
sonalidad. Esta es la contestación más usada en
Karl Schlechter nació en Viena el día 2 el gambito ·de dama. Las negras están algo
de marzo de 1874. Sus mejores éxitos en encerradas, en particular porque perma·
torneos fueron : 1900, en Munich, donde nece encerrado su alfil de dama.
compartió el primer y segundo premio
con Pillsbury. En 1906 ganó el primero 3. C3AD, C3AR
en Ostende; en 1907 obtuvo el segundo
en esta misma ciudad. En el año 1908, En vez de esta jugada podría probarse
el primero, segundo y tercero, compartidos en seguida la libertadora 3 . . .. , P4AD, que
en Viena; en Praga, 1908, compartió el especialmente ha sido recomendada por el
·primero y . segundo. Ganó el primero en Dr. Tarrasch. Felizmente, el ajedrez no es
Hamburgo en 1910; en Carlsbad compar- tan fácil como aparenta, y débese jugar
tió el segundo y el tercero, en 1911. Ganó más finamente Después de 3 .... , P4AD,
en match a Janowski el año 1902 por las blancas con 4 P A X P puede aislar al
6:1 y 3 empates. Tuvo un encuentro con peón negro de dama consiguiendo una ven.
Lasker (en Viena y Berlín) en 1910, y taja en la posición La justa defensa de
otro contra Tarrasch (Colonia, 1911 ), que- las negras consiste más bien en jugar
dando empatado. Los resultados fueron PDxP, y sólo entonces hacer la libera·
por el primero 1 :1 con 8 empates, y por dora jugada P4AD, P4R. Por medio de
el segundo 3:3 y 10 empates. la jugada P4AD se desarrolla el aliil de

-93
dama a 2C, tal como lo hemos visto en Si las blancas qtllBleran jugar aquí
la partida Rubirulteúi-Lasker. Con el cam- A3D, las negras conseguirían un hermoso
bio PD X P, 11!5 negras aún deben esperar, juego con 8. PXP; 9. AXPA, P4CD;
para que no pueda ocurrir pérdida de ademáe de A2C y P4A. Si las negras, en
tiempo, hasta que las blancas hayan des- vez de 7 .... , P3TD, hubiesen escogido la
arrollado su alfil de rey. De otro modo, jugada 7. . .. , P3A, que es la más usada
las negras corren peligro de desventaja en esta variante, hubieran tenido un tiem-
de desarrollo en el juego abierto que na• po menos por el peón, que debe ir a
cerá en el centro después del cambio de 4AD. En cambio, si después de 7 .... ,
peones. Por eso deben conti!mar su des- P3AD, se hubiese · jugado 8. PSA, esta
arrollo. jugada de compresión ·hubiera sido mala,
.· porque las negras, al contestar inmediata·
4. ASC, A2R mente P3CD y eventualmente después de
P4CD, hubieran arrollado el flanco de
Puede jugarse también 4. . .. , CD2D, dama de blancas con P4TD. Sin embargo,
porque las blancas no pueden continuar en esta posición las negras no pueden ju-
con 5. PxP, PxP; 6. CxP?, para ga· gar en seguida 8. . .. , P3CD, porque las
nar el peón a causa de que las negras con blancas continuarían con 9. P6A y 10.
CXC; 7. AXD, A5C+, ganarían una con CSR.
pieza.
8.... , P4CD
S. P3R, 0-0 Ahora el juego queda cerrado en el
6. C3A, CD2D flanco de dama, y las negras padecerán
7. T1A, siempre bajo su situación estrechada y su
alfil de dama encerrado. Por lo tanto, las
Después de 7. A3D, las negras podrían negras debían a todo trance · de haber ju-
contestar en seguida con PxP. Con la gado a la ruptura antes citada, aunque
jugada del texto, las blancas presentan a fuera con pérdida de "tiempo, empezando
su contrario un dificil problema, porque con 8. . :., P3A, como preparación para
como las negras no quieren cambiar en P3CD.
SAD en tanto que las · blancas no hayan
jugado su alfil, p.o tienen ninguna jugada 9. P4CD, P3A
buena de "desarrollo. De todos modos, las 10. A3D, P4TD
negras pueden calcular que si las blancas
no se deciden por A3D, tampoco encon· Las negras pueden abrirse así la colum-
trarán muchas jugadas para acelerar sn na TD. No obstante, con la forma ya di-
juego. cha (P3AD, además P3CD y eventual·
mente P4TD) hubieron llegado a la aper·
7 . .. ., P3TD tura de .la columna CD y también a la
de TD. La ·experiencia enseña que la co-
En años anteriores se jugaba P3CD. Ac· lumna TD sola no da ningún contraata·
tualmente, la continuación usada es de que satisfactorio contra una embestida
"P3AD La jugada del texto pareció refu. enemiga en el ·flanco de rey, porque se
tada por esta partida, pero recientemente encuentra ·demasiado lejos del campo de
ha sido nuevamente admitida. Henneber- batalla principal. Véase la partida Lasker-
ger. el eminente aficionado suizo; la em· Capablanca.
pleó en una partida contra el Dr. Alekhi· 11. P3TD, T1R
ne, el cual le dio ventaja de tiempo, y 12. 0-0, C4T
éste, al jugar su match contra Capablan·
ca, la empleó a sn vez, pero seguramen· Una falta que Schlechter aproveeha en
te después de un detenido examen. una forma muy bonita para ganar un
peón. Las negras .debían cubrir antes el
8 PSA. peón 3AD con A2C.

94-
13. AXA, DXA Situación de&pués de 26. P4..,4.
14. CSR, ex e
15. AX P+, RIA Negrru: Marco.
16. ox e, CSA
17. A3D, D3A
18. Ax e, PCXA
19. PSC, AlD
Evidentemente las negras no pueden
cambiar, porque el caballo del contrario
penetraría hacia 6D. Las negras están· ló-
gicamente débiles en los campos negros
a causa de su alfil malo.

20. PX P,

Con 20. P6C, la situación hubiera per-


manecido tan cerrada, que no sería po-
sible vislumbrar una ruptura ni una de·
cisión por ningún lado. Las blancas se
hubieran visto obligadas, lentan:u!nte y con
mucho trabajo, a dar valor a la prepon·
derancia de sus peones en el flanco de rey.
Blancas: Schlechter
20•.. . , AXP
21. TIC, P3C
28. TDJCD
22. D6T+, R2R 29. C4A+, R2D
30. T7C+, TXT
31. DXT+, RlR
Pronto se manifiesta· que . el rey en el. 32. P6A, Abandonan
centro, a pesar de · los peones que lo guar-
dan, no está en seguridad. Pero con Rl C
las negras hubieran tenido que abandonar PARTIDA NÚM. 32.
toda esperanza de contraataque.
GAMBITO DE DAMA
23. T6C, R2D
24. D3T, D4C Barmen, 1905

De otro modo hubiera seguido fuerte- Blancas: Schlechter


mente 2-5. D3C. Negras: John

25. Tl-lC, TJT l. P4D, P4D


26. D3A, P4A 2. P4AD, P3R
3. C3AD, P4AR
Schlechter perfora ahora en sorprenden·
La formación de peones que han esco-
te forma la pOBeSiÓn aparentemente fuer·
gido aquí las negras 4D, 3R, 4AR, que
te alrededor del rey negro.
quedará terminada en la próxima jugada
con P3AD, se le ha bautizado con el nom-
27. TXA, RXT bre de posición «Stonewalh (u muro de
28. ex P, piedra»).
No sólo es jugada por las negras, sino
Caso de PxC, decide 29. T6C+, R2A; también por las blancas (formación 4D,
30. DxPD. 3R, 4AR y también 3AD). El objeto pa-

-95
rece evidente: creación de un fuerte pun· 10. D3C,
to de apoyo para el caballo en SR (en
las blancas es el de SR). Preparación de Con esto, las blancas amenazan 11.
un eventtJal ataque al enroque con un cen· PxP, ya que después de PRxP pueden
tro asegurado, mediante el ¡¡vanee P4CR tomar por dos veces en 4R, por estar
(PSCR ). La debilidad esenCial de la for- clavado el peón SD. La contestación 11.
mación Stonewall no es- tan clara, pero ... , PA X P queda impedida, pues hay pér·
se manifiesta notablemente en el curso de dida de pieza por 12. CSCD.
la partida. Consiste en . que el alfil de
dama que se encuentra detrás de los peo- 10•... , RIT
nes permanece más encerrado todavía que 11. TD1A, AXA
en otras defensas del gambito de dama.
Este . alfil malo es la señal característica En consideración de la amenaza 12.
de la presente partida. La formación Sto- P X P más 13. CSCD, las negras pierden
newall es más aplicable para las que tie- la paciencia .y hacen a las blancas el fa.
nen mano que para las negras, porque és- vor de abrirles la columna R con este
tas las más de las veces no tienen tiem· cambio.
po de desarrollar su alfil de dama antes
del cierre de la cadena de peones del 12. PR X A, D2A
mismo color. 13. CSR,

4. C3A, P3A Contrariamente a 4R, véase la nota en


5. A4A, A3D la jugada 9 ; esto será un fuerte puesto.
Hemos conseguido una típica posición en
Las negras ofrecen el cambio de su la cual las negras, que sólo poseen el mal
buen alfil con la esperanza de que des- alfil, están debilitadas en los campos de
pués de 6. A X A, D X A, con la jugada color negro.
de CD2D, y pronto P4R podrán conti- 13 .... , D2R
nuar la liberación de su alfil de dama.
6. P3R!, Se esperaría que Schlechter quiera ex·
pulsar el caballo del excelente puesto con
Esto impide el intento de las negras. P3A, y conseguir la incontestable señoría
Caso de que éstas cambien a A X A, es sobre la columna R.
evidente que después de P X A, la casilla Por esto, es muy sorprendente, a pri·
SR, permanecerá siempre en poder de las mera vista, el siguiente cambio. Pero des-
blancas. Además, las blancas, en la colum- pués de la jugada 15 se ve que las blan·
na abierta R, ejercerán una fuerte pre- cas en esta forma logran mejor aún BU
sión sobre SR, y sobre el peón atrasado intención de abandonar la oolumria R, y
6R. además, se deshacen de su peón doblado.
Tal sistema es aplicable, algunas veces,
6 . .. ., C3A pero si no se conoce no es fácil de hallar.
7. A3D, D2A Sirva esto de información para el juga-
dor que estudia.
Las negras qulSleran obligar a A X A,
·pero Schlechter sigue aferrado en BU es- 14. AX C, PAXA
trategia. 15. P3A, PRXP
16. TDIR, D2AD
8. P3CR!, 0-0 17. D3T,
9. 0-0, CSR
La dama blanca domina desde este pues-
Un buen puesto, pero con ser un buen to los puntos débiles de las ~egras y difi.
puesto para un caballo, no es ninguna ca- culta su desarrollo normal. A 17. C2D,
silla fuerte, porque las blan~as tienen a las blancas con 18. D7R, quedarían oon
su disposición la jugada P3A. ventaja.

96-
17. R1C 31. P5CR, AlD
18. TXP, C3T 32. C3-4C, AIR
19. P3C, 33. C6T+, RIT
34. D2R, DID
La dama ha cumplido su obligación y 35. C5-4C, AlD
poC(I a poco debe &er llevada nuevamente 36. 'D5R, CIR
al flanco de rf!Y 37. T3TR, D2A
19•... , D1D Situación despuh de 37 ... , D2Á
10. P5AD, C2A
11 . D1C, AlD Negnu: ]olm
12. D2AD, D2R
23. T1-AR, TDIR
24. P4CR, AlA
25. T3T,
Un momento importante. Las blancas
fuerzan con esto P3eR, creando otra fla-
queza de las casillas negras, en particu-
lar de 3AR y 3TR.
25 • . .. , P3CR
26. P4C,
Este avance en el flanco de dama re-
sulta sorprendente o inesperado. Es carac-
terístico del estilo de Schlechter, quien, al
¡giial que más tarde Bogoljubow, gustaba
de atacar en forma ancha por todo el ta·
blero. Puesto que las blancas, dada la po-
sición cerrada del centro, tienen más li-
bertad de acción, ventaja que es aumenta· BlOllea&: Schlechter
da por la ineficacia del alñl de dama de
las negras, lo mejor ·que pueden hacer es Si D2R, gana 38. nse.
preparar la ruptura en el flanco, como
ya · lo vimos en otras partidas. En la ·pre- 38. C4-6AI,
sente partida, las blancas preparan la
ruptura en ambos flancos para, finalmen- La estrategia de las blancas ha conse-
te, realizarla en aquel flanco donde .parece guido su punto culminante. Las figuras
dar mejores resnltados, según la defense. blancas se establecen en todas las casillas
que hagan las negras. flojas de la posición negra.
26••. ., D3A
27. T3-3A, T2R 38 • •.. , DXD
28. P4TD, P3TD
29; CID, . Las negras no pueden esquivar el cam-
bio de damas; pues si DID; 39. e X PT t
Las blancas quieren jugar PSeR, para y ganan.
fortificar el asedio a los puntos 6AR y
6TR. Como preparación, se lleva el ca- 40. PA X D, T2R
ballo hacia 3R, porque a la inmediata 40. T3-3AR
29. PSeR, seguiría D4A.
Las negras deben cambiar ahora el e,
29•... , T2C pues de otro modo con 41. e X PD t fuer·
30. C3R, D2R zan el mate.

-97
40•... , ex e PARTIDA NÚM. 33.
41. TX C, TXT
GAMBITO DE D~
42. PRX T,
Viena. 1915
Nuevamente las blancas han ganado la
casilla SR, donde puede situarse en
p.ri· Blancas: Schubert
mer lugar el caballo, y en el pna!
también Negras: Schlechter
el rey.
1. P4D, P4D
2. C3AR,
42 •... , Ttr'.
43. C7A+, Rlt Esta jugada puede servir de introduc-
Clon a varios sistemas ·de desarrollo, me-
44. CSR, TI ~
nos usados en el gambito de dama. Sólo'
45. R2C, aquí la jugada característica de este gam-
bito P4AD, se hace un poco más tarde.
Antes de la ruptura d.ecisiva, las blan-
2 •.. ., P4AD
cas acercan· su ·rey lo más posible, para
poder ganar el ñnai con seguridad. Este Las negras juegan también gambito de
método es característico del aprovecha· dama y consiguen con ello un juego libre.
No es aconsejable para las blancas que
miento de la ventaja de terreno en aque- tome el peón del gambito con 3. P X P, y
llas partidas que no se hayan decidido en todo caso, es imposible conservarlo.
ya por ataques anteriores. Pero aunque las negras consigan un Ji.
bre juego, al jugar de esta forma, la ju-
45 . ... , RIA, gada es sospechosa. El estudio de las aper-
AlR tutas nos enseña la regla general de que
46. P4T,
las negras, en virtud de que . son segunda
mano, si las blancas juegan bien, aquéllas
Las negras conducen su alfil a la de- no pueden igualar el juego del todo. Tie-
fensa contra la ruptura con PSTR, en el nen la elección de dos males: deben de
(lanco de rey. Por esto, Schlechter escoge contentarse con una situación cohibida,
la posibilidad de la. ruptura en el fianco pero firme, que es la desventaja de terre-
no, o hacer prematuramente la liberadora
de dama, ya preparada a media partida. jugada P4AD, que evita la cohibida situa.
ción, y en este caso las blancas siempre
47. R3A, A2A lograrán crear puntos débiles en la posi-
48. R4A, RlR ción contraria de peones. Tarrasch con-
sidera que es mejor crearse un libre jue-
49. TlCD, RlA go de figuras , aun a costa de alguna fia·
50. PSC, queza. Conforme a este principio, en la
partida española, recomienda la defensa
Conscientes de su situación desesperada, de 3. , P3TD; 4. A4T, C3A; S. 0-0,
C X P ; en el gambito de dama lo más
las negras abandonaron la partida. La con- pronto posible, P4AD, ya sea como aquí,
tinuación, en la cual el punto ·SR es la en la segunda jugada, o bien si las blan-
clave de penetración del rey blanco y de- cas juegan 2. P4AD, después de 2. .,
más piezas, hubiera podido ser así: SO. P3R y 3. C3AD,- en la tercera jugada.
... , PTXP; 51. PxP, A1R; 52. PXP, Hoy día, el pal:ecer casi general es que
son más factibles de defensa las posicio-
AxP; 53. CxA, PxC; 54 . .RSR, etc. nes cohibidas que los puntos debilitados;
. y las defensas recomendadas por Tarrasch
han caído en desuso .

98-
3. P4A, - P3R· Este iianchetto del aiñi de rey, adap·
tado a la posición, fue jugado primero por
Aquí las negras tienen. aún ocasión de Schlechtei y elaborado especialmente por
evitar el aislamiento de su peón de dama Rubinstein. En lo general, esta forma de
y de conseguir posición simétrica, jugan- juego se llama variante de Rubinstein del
do 3. PAXP; 4. PxP, C3ARI (no 4 .... , gambito de dama, y vale tanto hoy día
DXP, porque las contrarias conseguirán como la refutación de la defensa de Tar-
una gran ventaja de desarrollo con 5. C3A ): rasch, P4AD.
Pero como que el juego es muy abierto,
la ventaja es mayor aún para los que sa· ... ., C3A
len (blancas), así es que esta forma de
jugar no es recomendable pata las negras. AlC, A3R
!~. 0--0, AlR
4. PAX P, PRX P . A5C,
5. C3A, C3AR
El alfi. no está bien aquí, porque el
Ahora las negras tienen el célebre peón peón 3CR le quita las posibilidades de re-
aislado de dama, del cual tanto ya hemos troceso. La explotación mejor de la debi-
ellcrito. · En lo general un peón del . centro lidad del peón aislado no consiste en el
en la 4.3 línea es una ventaja, porque en ataque al mismo peón (como, 'por ejemplo,
Ií{ lucha para el predominio del centro, ASC), sino como ya se menciona por mu-
c~pera como un soldado más especial- chas veces, en el dominio del fuerte pues-
iífente porque crea los puestos avanzados to delante del peón 4D. Por esto, Bogol-
de caballo SR y SAD. Sobre este particu- jubow recomienda la forma de desarrollar
lar pueden compararse las anteriores so- P3C y A2C, pero la más fuerte es la que
bre la mayor fuerza del peón 4R, enfren- proviene del autor de esta obra: 9. Px P,
te .del peón 3D en la defensa Steinitz de A x P; 10. C4TD, A2R; 11. C4D.
la partida española. Pero el peón 4D no
SÓlo tiene la ventapa de ser un peón cen-
tí-al, sino también la desventaja de estar 9. O-O
aislado. Por otra parte, esto significa que 10. PX P, AXP
Jiu! figuras negras estarán siempre suje- 11. TIA, A2R
ta.s a defensa, y por otra, que la casilla de 12. C4D, P3TR
erifrente del peón, por lo tanto, la casilla
SD, es un punto muy fuerte para las blan·
cas·. Este puesto será más fuerte para las Con esto las negras aprovechan la mala
blancas que los puestos SR y SAD para las situación del ASC. Si las blancas no lo
negras, porque las piezas negras en estos quieren cambiar, por la causa de que el
desarrollo del contrario quedaría favoreci-
puestos pueden ser expulsadas por P3AR
y, respectivamente, por P3CD. Si se va- do, deben retirarlo a 3R.
lora ventaja y desventaja, se puede acep-
tar que en tales circunstancias el peón 13. A3R, C5CR!!
aislado del centro, antes que una fuerza,
es más bien una flaqueza. Eso parece que sea un· error, porque
. Pero no se le puede menospreciar. Co- las blancas pueden ganar dos peones. En
opera al ataque ventajosamente, cuando la el fondo, la jugada no es más que la in-
posición de las piezas negras es buena. De troducción de una combinación muy bien
esto resulta que bajo pérdida de tiempo pensada.
no se juegue al aislamiento de un peón
central del contrario. Pero en la situación 14. CxA,
presente, el aislado peón de dama segu-
ramente es perjudicial. Las blancas deben aceptar la combina-
ción, pues de otra manera caen en des-
6. P3CR, ventaja posicional.

-99
Situación después dé 13. 'A3R ganarían con TlR. Están forzadas en to-
mar el peón 4D. El camhio de 18. T X
N CKJ'CI$: Schlechter T +, esencialmente no hubiera cambiado
la situación. (Véase la nota a la jugada
22 de las blancas.)

1s. ex P, D3D
19. A3T, TXT+
20. RXT, TlD

Esta decisiva traba es la meta de la


combinación de Schlechter.

21. A2e, e2R


22. P4TR,

Si 22. C3A, D3A + ; ganan. Si en la


jugada 18 las blancas hubiesen cambia-
do las torres 8A, su rey· estaría en IC,
y por lo tanto, la jugada 22, por la con-
testación A X P +, C3A tampoco podría
hacerse,
BlancCI$: Schubert
22. ex e
23. Axe,
14. Pxe
15. A3T, ex A A 23. DXC, TIA+ y ganan.
16. Ax P+, RlT
11. P x e, A4e
23 •... , AXPR
Las blancas ahora no pueden .cubrir 'él 24. T3A, DXP
peón 3R por 18. D3D, pues las negras 25. Rinden.

100-
HARRY NELSON PILLSBURY

Harry Nelson Pillsbury nació el día 5 co, la ruptura que cambiaba el juego ce-
de diciembre de 1872 en Sommerville (Es- 'r rado en abierto· era la parte que brindaba
tados Unidos). A la edad de dieciséis años mayor lucimiento a la individualidad, a la
aprendió el juego de ajedrez. Era el año potencia de iniciativa del jugador. Tal
1895 cuando tomó parte por primera vez ruptura no sólo podía lograrse por el
en un torneo internacional en Hastings, y avance sistemático de peones, con cam-
delante de los grandes maestros de su bios obligados, sino también por sacrificios
tiempo, como Tschigorin, Lasker, Tar- de peones y hasta piezas, y a menudo es-
rasch, Steinitz, etc., consiguió el primer tas rupturas violentas son el único J;lledio
premio. Aunque Pillsbury en los demás de evitar la paralización del ,iuego y las
torneos no encontraba quien le venciera, tablas. Este fue el terreno donde Pillsbury,
éste su primer éxito fue también el mayor con su voluntad. y su fuerza combativa,
de su carrera. pudo crear bellezas inolvidables en este
En Munich, 1900, también llegó a la juego, donde su personalidad sobresalía
cima, partiéndola con Schlechter. En los por encima del am~iente de su época.
aijos siguientes los resultados que obtuvo
fueron menoscabados a causa de la tu-
berculosis pulmonar que padecía, a con- EJEMPLOS DE RUPTURAS
secuencia de la cual murió en el año INTERESANTES
1906, a los treinta y cuatro años de edad.
Todos conocemos los dramas peliculeros
De entre todos los maestros de su tiem- americanos donde corre peligro de vida,
po, amparados en las enseñanzas de Stei- ya sea el héroe, ya sea la heroína, mien·
nitz y Tarrasch, la personalidad de Pills- tras lil propio tiempo principia una. ac-
~ury se destaca por su energía y su apa- ción de salvación.
sionado deseo de vencer. El tipo ideal de
El público sigue la acción y la contrac-
la partida ganada con maestría era en
ción con el alma en un hilo, en la impre-
¡¡quel entonces la partida cerrada, en la
sión de que la salvación llegará tarde.
cual los defectos de la apertura, o bien
otras equivocaciones del contrario, eran Sólo en el último momento, cuando se
aprovechadas para su progresivo encierro. hubiera abandonado toda esperanza, la si·
Luego seguía, en general, mediante un ata- tuación se aclara. ·
que de peones en un flanco, la bien pre- Tal drama excitante lo podremos ver en
parada ruptura que abría el juego y daba la partida que sigue (Hastings, 1895 ). Des-
la victoria a aquel que tuviera mejor des- . pués de la jugada 28 de las blancas que-
arrolladas sus pieza9. Dentro de este mar- dó la siguiente posición :

- 101
NegrtU: Tarro3ch 31. CIA,
pues ahora ha quedado impedido D7A.
¿Será esto de utilidad duradera? Las
negras continuaron su . ataque al Banco de
dama con:

31. ... , P6A


32. P3CD, D3A
Amenazando destruir el flanco de dama
y ganar fácilmente con P4TD, P5T, P6T,
PxP, TlT y T6T. Contra esto, ¿qué
pueden hacer las blancas? La defensa, en
vista de los fuertes peones pasad~ de las
negras, parece ser de poco éxito a la lar-
ga. Por eso Pillsbury inicia ahora sn con·
traataque contra el flanco rey negro.

33. P3TR,

Pillsbury ha calculado con exactitud


matemática el tiempo que tiene a su dis.
posición, y con toda tranquilidad prepara
Tarra,sch jugó su acción.
28 •... , DST 33 .... , P4TD
34. C2T,
Que parece decisivo, . porque después de
29. eiA, D7A, el flanco blanco de dama A los que siguen la partida en el ta-
quedaba tomado. Pero Pillsbury ató a su blero creen ver cercano el peligro en el
contrario por medio de: flanco de dama, y les atormenta esta ju·
gada, que les parece lenta en extremo.
29. C4C,
34.. .. , PST
Amenazando el sacrificio de caballo en 35. P4C, PXP
6A y provocó la jugada de apoyo C2D. 36.PXP, TIT
37. PSC, T6T
29. C2D 38. C4C, AXP
30. T4-2A,
Podría creerse ahora que las blancas es-
No pudiendo las negras jugar D X P, tán perdidas, que la salvación llega tarde,
pues las blancas ganarían · con la conti- pero en el último instante sobreviene la
nuación: catástrofe, que extermina las ·triunfantes
31. C4A, A2A; 32. e6e+, AxC; 33. fuerzas negras.
Px A, eiA (si ... , P3T; 34. CxPT, 39. T2CR,
P X e; 35. D X PT + ; 36. T4A) ; 34.
exPA, Pxe; 35. TxP, RIC; 36. T7A, No sólo amenaza P X P, sino también
etcétera. Por esto siguió: CxP.
30. RIC 39•. .. , RIT
40. PX P, PXP
Con esto Pillsbury ganó tiempo para
prevenir lo más peligroso con: Si e X P, 41. e5R, lo decide todo.

102-
41. exA, Txe En el lomeo de Nuremberg 1896, a la
42. e6T, ne . jugada 20 de las negrae, consiguióse la an-
La úiúca jugada. terior sitUación.

43. TXT, RXT En el flanco de ~ las negras tienen


'r:·
ventaja. En el de rey, por la cadena de
Mientras las negras amenazan · P7 y
P8A parece que el ataque de las blancas peones 3CR y 4TR están impedidas las
llega a su fin. Pero ahora, precisamente posibilidades de ruptura con P4CR y PSA.
en el último . momento, viene la catástrofe Por otra parte, también hay que decir que
preparada ya de largo tiempo. la situación de las negras está agujerea·
· 44. D3e +, Rx e ·da en este flanco, tanto que en estas cir-
45. RIT, . cunstancias una acción de las blancas que
Amenaza ahora 46. TlCR. Las negras ocasionara la ruptura seria de graves con-
sólo pueden. prevenir el amenazado mate, secuencias.
;:on grand~ sacrificios.
45. D4D Pillsbury tenía la necesaria osadía, .ener-
46. TteR, DXPA gía y fantasía para conceptuar una rup-
47. D4T+, D4T tura tal y llevarla victoriosamente a cabo.
48. D4A+, D4e
49. TX D, PXT
so; D6D+, R4T 21. PSAI, PCX P
22. e4A, PST
._ Sólo así puede jugar el rey, pues las
'blancas, o toman el caballo con jaque o
amenazan de mate, por lo tanto no hay Para impedir l)3C y D7C.
tiempo para P7 A.
51. Dxe 23. TIT, ..UR
y ganaron. 24. TX e,

Negrcu: La&ker Con este sacrificio de calidl'ld, las hlan·


cas desvían el AD de la protección que
da al flanco de rey.

24. AXT
25. e4DX PR, Pxe
26. ex PR

Caso que las negras retiren la dama ata·


cada, tal vez a DlA, entonces Sigue 27.
D X P A con lo que se completa la ruptura
y derrumba toda la posición de las ne-
gras la cual, como es fácil comprobar, a
pesar de su ventaja material no tiene de-
fensa. Lasker prefirió perder la dama y
jugó 26. A2D lo que bien puede prolon-
Bknctu: Pilübury gar la partida, pero nunca salvarla.

103
Negras: GUMberg Pillsbury seguramente ha visto esta con-
tinuación y la escoge en la próxima ju-
gada, débese a suponer que por la repeti-
ción de ésta quiso ganar tiempo o bien
dar a su contrario la oportunidad de ju-
gar por impedir la repetición y con ello
empeorar aún más su posición ..
25 .... , AlT
26. D X PA, D2D
21. cxc, AXC
Si DXD; 28. C7R+, R1A; 29. CxD,
T2A; y gana en seguida con 30. T3C.
28. D X A, DXD
29. Ax D
y por su preponderancia de peones en
el final, las blancas ganan.

Blancas: Pillsbury PARTIDA NÚM. 34.

En la precedente poaición, que se plan- GAMBITO DE DAMA


teó en una partida del lomeo de Monte-
cario, 1902, Pillsbury introdujo la rup- París, 1900
!ura con el mismo sacrificio de peón, tal
como en la partida anterior. Blancas :· Pillspury
Negras: Marco
19. P5A, PCX P
20. T3T, TZA 1. P4D, P4D
21. D5T, AJA 2. P4AD, P3R
22. TX Pr, PXT 3. C3AD, C3AR
23. C4A, A2CD 4. A5C, A2R
24. T3C, A2C 5. P3R, O-O
6. C3A, P3CD
Si T2C, ganan las blancas con 25. C6R,
D2D; 26. CXT, AxC; 27. A6T. Si las Este desarrollo de alfil de dama al flan-
negras, en vez de esta variante, hubie- co era la defensa más usada en aquel en-
sen jugado 25. . .• , D2R, las blancas tonces. Hoy día se halla en desuso, aun-
hubieran continuado . en la jugada 27. que no haya sido refutada del todo. De
DxPA. todas maneras es dudo.so el orden de ju-
gadas que aquí han elegido las negras.
25. T3T, Antes de jugar P3CD, y acaso antes del
enroque, es mejor CD2D, porque las blan-
En vez de esto, · las blancas ya podían cas podrían iniciar un peligroso ataque
ganar aquí con 25. Dx P A, análogo como con la continuación que empleó Marshall
en la partida: Si 25. D2D, seguiría 26. en este mismo lomeo (véase el respectivo
CXC, DXD; 27. C7R+, R2T; 28. capítulo), 7. PxP, PXP; 8. AXC,
C X D y las negras deberían perder la ca- A x A; 9. A 3D, A2C; 10. P4TR! (ame·
lidad, porque su torre, colocada en la fila naza el conocido sacrificio de alfil en 7T).
séptima, queda atacada siempre y las Obsérvese además que después de 5. . .. ,
negras quedan en clesveniaja de posición CD2D (en vez de 0-0), 6. C3~, el des-
y · con un peón d(i' menos. Puesto que arrollo inmediato del flanco con P3CD,

104-
antes del enroque, l!ei'Ía una señalada fal- Esta situación de caballos, que en la
ta, como lo p~eba la partida miniatura próxima jugada P4A quedará consolida-
de Pillabury en el torneo de Lon~ da, es la introducción del célebre ataque
de 1899: de Pillsbury, que este maestro ha llevado
a cabo cop. brillante estilo en muchaa par-
Blaneu: Pillabury tidas.
Negras: Lee Después del examen verificado por
Teichmann poco después de la muerte de
1. P4D, P4D
Pillsbury, es muy cierto ai este ataque es
2. P4AD, P3R correcto. Hoy en día se suele combatir el
3. C3AD, C3AD desarrollo del ílanco de alfil con un con·
4. A5C, A2R traataque posicional en el flanco de dama.
5. P3R, CD2D (Véase la partida 38: Marshall-Kline ).
6. C3A, P3CD?
7. PXP, PXP 9. CDZD
8. A5C, A2C 10. P4A, P4A
9. CSR, 0-0
10. A6A, AXA Las negras juegan para crearse una su•
11. CXA, D1R perioridad de tres peones contra dos en el
12. CxA+, oxc flanco de dama por PSA, mientraa que
13. CXA+, DXC es mermada la superioridad blanca en el
flanco de rey por el peón atrasado, que
14.CXP.
queda en 3R. En numerosas partidas,
Pillsbury ha demostrado que mientras las
Las blancas han ganado un peón, que
negras buscan ventajas en el flanco de
las negras quieren recuperar en sus pró-
ximas jugad{IB, pero sólo aceleran la pér- dama, las blancas en el flanco de rey so-
dida de la partida. 13.... , DSR; 14. C X bradamente consiguen un fuerte ataque.
C+, PXC; 15. A6T, DXPC; 16. D3A!! La . idea del contrajuego, recomendado
por Teichman, consiste en un ataque di-
Y sigue la partida PiUsbury·M~:~rco
r~cto contra el peón blanco atrasado.; así:
10. .. ., C1R, le obliga a las blancas a
7. A3D, A2C cambiar en 7R. Entonces las negras abren
la columna R mediante CxC, PAxC,
8. P X P,
P3AR.
Este cambio se .hace siempre si las ne-
gras han o:fianchettado» su alfil de ·dama, 11. 0-0, PSA
para no tener que contar siemp~e con la 12. A2A, P3TD
liberación de este alfil mediante PxP.
Naturalmente Id negras deben decidirse Las negras preparan el avance de sus
a rematar el peón, bloqueando su alfil, peones d'!il flanco de dama, pero antes
de lo contrario las blancas podrán en bre-
de que esto suceda el ataque blanco se
ve jugar P4R y crearse así un centro muy
f~el'te.
hace irresistible.

8. PXP 13. D3A, P4C


9. CSR, 14. D3T, P3C

- 105
Siluaóón después de 14• ... , P3C Ahora viene .una ruptura típica eltilo
Pillsbury, la. cual arruina con eorprenden·
Nepu: Marco
te rapidez la situación de las negras.

15. P5Á, P5e


16. PX P, PTXP
17. D4T!, Pxe
ts. ex e, . Dxe
19. TX e, P4T

Para posibilitar la defensa T3TD, que


llega tarde:

20. TD 1AR, T3T


11. ÁX P!, PX Á
22. T X T + , Á XT
23. T X Á+, RX T
24. DST +, R.2A
11Itmau: PilUbury 25. D7T +, Ábondono11

106-
segunda parte
MAESTROS IJE HOY
PROLOGO

L A razón de ser de este método está basada en la creencia de


que ninguna actividad intelectual puede ser bien comprendida a
no ser que hayamos pasado a través de las diferentes fases de su
desarrollo histórico, aunque sea de un modo general. En la primera parte
hemos intentado describir a los viejos maestros y sus ideas. Sin em-
bargo, no debe entenderse que nuestro objetivo fue hacer una completa
historia del ajedrez, ya que hemos omitido a una serie de antiguos
maestros de primera magnitud, tales como Staunton, Paulsen, Zuc;ker-
tort, Bird, Blackburne, Tschigorin, Bum y otros. En cambio, nunca he-
mos perdido de vista el hecho de que estamos escribiendo un libro de
enseñanza y ninguno de los maestros. arriba mencionados, a pesar de sus
grandes éxitos y valiosas ideas, fundaron escuela duradera de jugadores;
el ,desarrollo del ajedrez no siguió el camino indicado por ellos. Black-
bume y Tschigorin, por ejemplo, fueron los antípodas de Steinitz y su
concepción del juego de ajedrez. Esto no implica, naturalmente, una
condenacíón de tan notables maestros; es un hecho histórico imputable
parcialmente a la circunstancia ajena de que Steinitz ostentase el título
de Campeón del Mundo. Y debe ser así si consideramos que la pre-
sente generación de maestros de ajedrez, en muchas de sus ideas, se
acerca a aquellas de Tschigorin y también a algunas de las aperturas del
repertorio de tan gran maestro -su defensa en el Ruy López, por ejem-
plo-, las cuales están otra vez de moda.
Antes hemos hecho una selecCión entre los antiguos maestros y estu·
diamos solamente a aquellos que, en nuestra opinión, influyeron en la
evolución del ajedrez. Pero ahora no nos consideramos tan competentes
para hacer una selección similar entre los maestros que son más promi-
nentes en nuestros días. En es~ segunda parte, por lo tanto, presenta-
remos a todos aquellos maestros que han obtenido éxitos de primera
clase en los años recientes, y hemos realizado grandes esfuerzos para
ser objetivos y hacer justicia a sus ideas, aunque no estén de acuerdo
con las muestras. EL AUTOR.
GEZA MAROCZY

Géza Maróczy nació el 3 de marzo de mo se podia esperar de tan hábil vencedor


.1870, en Szeged (Hungría). Durant!l va· de torneos, en sus finales de partida. La
rios años se dedicó a estudios técnicos y habilidad defensiv·a de Maróczy ha tenido
matemáticos. una gran influencia en el descrédito SU•
Aprendió a jugar al ajedrez a la ed¡¡d frido por diversas vjgorosas pero no ver·
de quince años, y pronto adquirió la pe- daderamente_sólidas aperturas que habían
licia de un maestro en lucha con los me- estado en boga en_otros tiempos, y, .por
jores jugadores de Budapest, pero no ob- otra parte, ha contribuido a hacer más
tuvo el reconocimiento oficial como juga· general el uso de ciertas defensas cerradas
dor de calidad _hasta el torneo internacio. -la Fráncesa y la Siciliana-, que antes
nal principal de Hastings, en 1895. Des- no habían gozado el favor de los maestros,
de aquella época hasta 1908 Marózcy debido a la demanda que de ellas hace el
-tomó parte en la mayoría de los grandes jugador defensivo. ·
.torneos internacionales, figurando siempre
entre los vencedores premiados, excepto en
el torneo Gambito-Viena, de 1903. En el PARTIDA NÚM. 35
período comprendido entre el torneo de
Montecarlo, de 1902, hasta el de Viena, GAMBITO DANES
de 1908, inclusive, Maróczy fue el juga·
dor de más éxito, - no alcanzando nunCá Montecarlo, 1902
un lugar inferior al segundo puesto, con
la excepción más arriba anotada. Ganó el Blancas: Mieses
primer premio en Montecarlo, 1902~ Negras: Maróczy
Montecarlo, 1904; Ostende, 1905; Bar·
men, 1905 (compartido con Janowski), y l. P4R, P4R
Viena, 1908 (compartido con Duras y 2. P-40, PXP
Schlechter). A partir de 1908, Maróczy 3. P-3AD,
tomó parte pocas veces en torneos ínter·
nacionales. Cuando terminó ·la primera El llamado «Gambito Danés», que no
gran guerra volvió a jugar, y una vez es muy usado por los maestros de hoy.
más pudo alcanzar altos -honores al com· Es dudoso si el sacrificio de peón es co.
partir los tres primeros premios con Ale· rrecto y, además, es ineficaz si las -ne·
khine y Bogoljubow en el torneo de Carls· gras rehusan el ofrecimiento y juegan po.
bad, de 1923. sicionalmente. Porque, ¿cuál es el propó-
Los estudiosos del ajedrez no hallarán sito de 3. P3AD? Evidentemente, intentar
con frecuencia mención de las partidas de una concentración de peones en el centro
Maróczy en los manuales de uso corrien· por PxP. Pero las negras pueden preve-
te, porque, en general, no son brillantes nir esto fácilmente coll,linuando m des-
partidas de ataque. Es en la defensa don· arrollo, al replicar c;on 3. •.. , P4D ! Des-
de reside principalmente su fuerza y, co. pués de 4. PRxP, DXP; S. PxP, lu

- 111
blancas tienen el PD aislado en lugar de Esto no es accidental, sino, como más
la intentada concentración de peones en arriba se dice, típico, pues es fácil de ver
el centro; la ventaja de la apertura no que, como regla general, se gana un tiem-
existe y ha de esperar para atacar. Ade- po al sacrificar un peón y continuar el
más, en lugar de 4 .... , DXP, las negras desarrollo. Por otra parte, se perderían
podían todavía jugar mejor 4. . .. , C3AR varios tiempos en recuperarlo.
y C X P, para prevenir el ataque a que
está expuesta la dama en 4D. 12. T1R, A2R
13. AX C, PXA
3 . ... , PXP 14. TX P,
4. A4AD,
Posición después de 14. T x P.
Este ulterior sacrificio es el único só-
lido y usual procedimiento. Negras: Maróc::y

4. PXP
S. AX P, P3D
Schlechter recomienda la excelente de-
fensa que sigue: 5•... , P4D; 6. AXPD.
(Si 6. P X P, las negras continúan con
C3AR, y mantienen su sup erioridad de
peones sin ninguna dificultad especial). 6 •
... , C3AR; 7. AXP+, RXA; 8. DXD,
A5C +, Jo cual da una igualdad material,
si bien las negras tienen la ventaja debi-
do a su superioridad de peones en el flan-
co de dama.

6. C2R,

Es difícil determinar qué jugada ofre·


ce las mejores perspectivas de ataque. Ade-
más del movimiento indicado, han sido Blancas: Mieses
también ensayados 6. C3AR, 6. D3C y 6.
P4A. 14. D2D!

6• ... , C3AD Las negras devuelven su segundo peón.


7. 0-0, A3R Pero después de 15. DXP; 0--{1, las blan-
8. ASD, C3A cas estarían en muy mala posici~n. Mie-
9. D3C, DIA ses, por ello, ataca el otro PC, Jo cual no
10. C4A, AXA mejora la situación. Maróczy se decide 11
11. PX A, C4R enrocar largo y a no defender el peón.

Un típico ejemplo de correcta defensa 15. D3C, o-o-o!


contra el juego de Gambito. Las negras 16. DX P,
no intentan mantener su superioridad de
peones, sino que dan a las blancas la Ambos bandos están ahora iguales de
oportunidad de recuperar primero uno de material, pero las piezas blancas no tienen
los peones y luego el otro. Pero el tiem· una organización efectiva. El flanco de
po que emplean las blancas en recuperar dama de las mismas está sin desarrollo.
sus peones lo utilizan las negras para com- Aquí el viejo aforismo stibsiste al afirmar
pletar su propio desarrollo, de tal manera que, cuando un ataque ha sido rechazado,
que finalmente se convierten en atacantes. el contraataque es doblemente decisivo.

112 -
16. . . , 030 En la Defensa Siciliana, las negras eli-
11. ose, ¡;en el peor desarrollo, como ya hemos di-
cho, en la confianza de ganar más tarde
Forzada, porque después de 17. T5A, la ventaja de posición por medio de su
el vigoroso movimiento ose vencería toda superioridad de peones el centro y de una
resistencia. A 17. C3D, la más simple presión sobre la columna de AD. Por esta
réplica de las negras sería C2D y A3A. razón, 4 .... , C3A es la jugada indicada
para provocar 5. C3AD, puesto que de
17 •... , TRIR otra forma las blancas podrían jugar 5.
P ·1 AD !, logrando una fuerte posición que
Las negras amenazan ezD y las blancas convertiría en ilu sorias las esperanzas de
no pueden impedir por más tiempo la pér. lns ne~ras.
dida de la calidad. 5. C3AD, P30
18. C2D, C20 Antiguamente era costumbre jugar en
19. TXA, OXT esta pos!C!On 5 .. . . , P3R, seguido de P4D,
con objeto de acentuar la superioridad de
Naturalmente, la partida es dr las ne- peones en el centro. De tal suerte, se ju-
gras de todas formas'; no obstante , la vi· ¡:aba .) . .. . , P3R. seguida inmediatamente
¡:orosa conclusión que imponen es notable. de 6. . , P -ID. Pero el resultado de esto
file una partida abierta con el PD negro
20. 03C, ose aislado, lo cual no rsta de acuerdo con el
21. C3A, carácter cerrado. de la Defensa Siciliana .
.\rtualmC'nte, este avance no es tan ra-
Unicamente con 21. C1A, podían las pido. y se da preferencia a la llamada va-
blancas hahcr evitado la pérdida de una riante «Scheveningenn, la cual fue usada
piez~. por primera vez en esta partida por
Euwe. Después de 5 .... , P3R, el juego
21. TIC se desarrolla como sigue: 6. C4DSC,
22. D4T, A5C 1 ; 7. P3TD (7. C6D+, R2R !, ter-
mina el breve ataque con una permanen-
Naturalmente. a 22. ese habría se- te desventaja de posición.); 7 .... , AX
¡:uido P3TR. C+; 8. CxA. P4D; 9. PxP, Px P; 10.
A3D, 0-0; 11. 0-0, y las.._blancas f'¡
22. 06A nen una excelente partida.
23. TIC, oxc Similar a la Variante -5cheveningen es
la de Paulsen, la cual fue usada frecuen-
v ~anan. temente en el pasado: 1. P4R, P4AD; 2.
C3AR. P3R; .1. p.m, PXP; 4. CxP,
P3TD v D2A. con lo cual las negras apla-
zan los. detalles del desarrollo de su lado
PARTIDA NÚ~1 36 de dama. Este método fue eficaz mientras
las blancas continuaban el desarrollo sim-
DEFENSA SieiJ.TANA plP- dr sm piezas con 5. e3AD. Pero ju-
gar>do posiciones -véa>e el comentario a
Srheveningen, l 923 la jugada 4 de esta partida- 5. P4AD!
Jugada efectuada por primera vez por el
Blancas: Maróczy autor contra Tartakower (Mannheim,
Ne¡!ras: Euwe 1914 ), dn a las blancas . la superioridad
de !al manna que la Yarian!r Paulsen es
l. P4R, P4AD raramente jugada hoy día. Por ello, la
2. C3AR, C3AD Variante ScheYeningen puede significar
3. P4D, PX P nn mejoramiento y modernización del vie-
4. ex P, C3A JO m.:todo de Panlsen.

-113
6. A2R, P3R Las negras necesitan jugar P4D. como
se puede comprender, pues de otra ma-
Desde la partida Lasker-Napier, ya co- nera su partida es demasiado restringida .
nocemos la jugada 6. . .. , P3eR, la cual Pero aquí, como generalmente ocurre en
tiene la desventaja, sin embargo, de dejar tales posiciones de la Defensa Siciliana,
demasiado espacio en el medio juego a las P4D no es bueno si las blancas pueden
blancas, ya que después del desarrollo del replicar con PSR. Las blancas dominarían
alfil por 2eR la jugada P3R debilita ex· en el lado de rey y tienen un prometedor
traordinariamente el PD negro y la casilla ataque, y en el lado de dama las negras
4D negra será un punto fuerte para las pueden hacer poco, debido al dominio que
blancas. ej ere en las blancas sobre el punto cen-
tral 4D.
7. 0-0, A2R
8. RlT, 14. D2R, P4D
15. P5R, C5R
Maróczy, que frecuentemente jugó la
Defensa Siciliana, también sabe cómo ata-
Relativamente mejor sería C2D.
carla posicionalmente. Las negras esperan
atacar ocupando la columna de AD con
una pieza mayor y entonces llevar el e a 16. AXC, PX A
4R y SA o e a 4T y SA. Maróczy va 17. D2A, P4CD
ahora a impedir esto; primeramente, con
P4A evita el salto del e a 4R. Pero cotito
inmediatamente 8. P4A sería contestado Las negras defienden su peón con di-
con D3C, la jugada preparatoria ~- RIT ficultad. Si el blanco toma ahora dos ve-
es necesaria. ces en SCD, las negras obtendrían el PA
como compensación.
8. 0-0
9. P4A, D2A 18. P X P, PXP
10. C3C, 19. C4D, A3AD
20. D3C!,
Impidiendo al e negro llegar a SA
por 4T.
Las blancas demuestran ahora sus chan-
ces en el lado de rey y amenazan P-5A-
10. P3TD
6A.
11. P4TD,
20. TXT
Todas las esperanzas negras de presio-
nar al lado de dama están ahora destrui· 21. TXT, TIC
das , y las blancas tienen la ventaja, de-
hido a la superior posición de sus piezas. Para defenderse, las negras tienen que
Como Euwe manifestó más tarde, el en- evacuar la casilla lAR para el alfil. Es
roque no era la buena continuación para fácil comprender que la jugada TIC tien·
bs negras. Debió jugar 8 .... , P3TD in- de a proteger el P de 4C, pero, sin em-
media lamente, y entonces el blanco no bargo, pronto aparece que la torre no está
h abría podido evitar las jugadas P4CD, segura aquí.
CHD y C5A.

11. P3CD 22. P5A, PX P


12. A3A, A2C 23. C X PA, AlA
13. A3R, C5CD 24. A4A, T1T

114-
Posición después de 24 . .. ., TJT Un buen meditado movimiento ganador.
Ahora las negras no tienen defensa con-
Negras: Euwe . tra la amenaza P-6R-7R, puesto que la
dama negra no debe abandonar su expues-
ta posición, De otra manera el sacrificio
blanco de C7R unido a A6TR, sería de-
cisivo. Una jugada inferior sería 25. T X T,
A X T! ; 26. P6R, a la cual replicarían
las negras con D2T, amenazando D8T!
también 25. TlAR no sería tan conclu-
yente como lo hecho en la partida, ya que
las negras podrían jugar 25 ... . , C4D; 26.
CxC, A X C; 27. P6R, D5A.

25. P3C
26. P6R, D2C
27. P7R, A2C

A AxP, seguiría 28. CxA+, DXC;


29. A6D.

28. CXA, RXC


Blancas: 11!aroczy D4T,
29. P3A
30. D6T+, RlC
25. TlAD!, 31. A6D, Abandonan

- 115
FRANK J. MARSHÁLL

M:arshaU . que nació el 21 de agosto de PARTID ,\ NÚM. 37


1877, en Brooklyn , desde la muerte de
Pillsbury, ha sido el indiscutible campeón GA\IIHTO DE DAMA
de los Estados Unidos. En sus primero~
París, ] 900
años de juventud atacaba arriesgándose pe.
ligrosamente. lo que explica su desigual
fortuna en los torneos; en unos quedó mal Blancas: Marshall
dasificado, en otros: Cambridge Springs. Negras: Burn
l 904 ; Nuremberg. 1906 : Dusseldorf. 1908
ganó el primer premio. Los aficionados En lo que se refiere a la apertura .
ven en las partidas de MarshaU el rena- veanse los comentarios sobre la misma de
la par! ida 34
Cimiento de las maniobras de los viejos
.maestros. pero en lo> «matchesn que ha l. P4D, P4D
jugado con los grandes maestros de su 2 P4AD, P3R
·epoca. después de su éxito en los torneo> 3. C3AD, C3AR
la inferioridad de su estilo frente al juego 4. ASC, A2R
posicional de aquéllos quedó demostrada 5. P3R, 0-0
En 1905 perdió en forma decisiva frente 6. C3A, P3CD
a Tarrasch (8 a l y 8 tablas): todavía 7. A3D, A2C
peor fue su derrota frente a Lasker (8 a O 8. PX P, PX P
y 7 tablas). y. finalmente, en 1909. fup 9. A XC, AXA
batido por el joven Capablanca (8 a 1 y 10. P4TR, P3C
14 tablas). Fue probablemente consecuen·
rta de estas desafortunadas experiencias, Se amenazaba el conocido sacrificio del
por lo que Marshall adoptó un estilo más alfil en 7T seguido de ese+ . Si las ne-
sólido. con el resultado que. aunque no gras se defienden con 10.... , PJTR, la9
volvió a ganar ningún primer premio du- blancas continúan el ataque con P4eR-
rante mucho tiempo. sí obtuvo buenos se.
puestos en los torneos.
El éxito que las partidas de ataque de 11. P5T, TlR
Marshall (tan abundantes en combinacio-
nes) obtenían de tiempo en tiempo. aun En la particla Marshall-Marco, del mis-
en posiciones inferiores. por medio de há- mo torneo. las negras ensayaron, en lugar
btles celadas. producían una grata reac- de esta jugada defensiva . .P4A: pero el
ción contra el concepto que de ellas se ataque blanco a las pocas jugadas se hizo
tenía después de Steinitz . muy poderoso.

116-
12. PXP, PTX P PARTIDA NÚM. 38

Como Burn perdió rápidamente después GAMBITO DE, DAMA


de esta jugada, es fácil comprender que
la subsecuente declaración de todos los Nueva York, 1913
críticos era que P A X P era mejor. Es di· Blancas: Marshall
ficil decir si esta crítica está justificada
Negras: Kline
0 no; lo que sí es cierto es que, en cual-
íJUier caso, las blancas alcanzan una fuer· l. P4D, P40 ~
te posición de ataque sin necesidad de sa- 2. P4AD, P3R
trificios de material. 3. C3AD, C3AR
4. C3A, A2R
13. D2A, C2D 5. A5C, CD2D
6. P3R, O-O
7. TIA, P3CD
Posición después de 13 . ... , C2D 8. PX P, PXP
9. D4T,
Negras: Bum
Y a conocemos la táctica adoptada por
Pillsbury contra esta defensa del Gambito
de Dama, quien solía completar su avan-
ce con A3D, 0- 0. CSR y P4A. con ob-
jeto de atacar por el lado de rey. En esta
partida vemos uno de los más modernos
procedimientos que tratan de obtener una
ventaja de posición en el lado de dama,
especialmente atacando el débil punto
6AD a través de la columna abierta de
AD. A este fin, Marshall juega aquí D4T
A6TD para cambiar el AD negro. Otros
procedimientos que persiguen el mismo
objetivo se inician con 9. ASC.
En la presente partida, las negras no
se defienden bien, pero por esta misma
razón Marshall tiene la oportunidad de
demostrar, de una forma muy instrlJ,I!tiva,
cómo se debilita el flanco de dama negro.

9 . . .. , A2C
BlancO$: Marshall
Como las blancas cambian·este alfil por
medio de A6T, es natural que se consi-
14. AX PI, PXA dere A2C como una pérdida de tiempo.
15. DXP+, A2C Sin embargo,. si el negro trata inmediata-
mente de oponerse a la pre5ión blanca en
Después de 15 .. .. , RlA, también ga· la columna de AD con ?4A, las blancas
nan las blancas con 16. CSC, AxC; 17. pueden ganar un peón con D6A. Pero
T7T. como las blancas pierden mucho tiempo
de esta manera. las negras obtienen ven-
taja de desarrollo como compensación por
16. C5CR, D3A el peón perdido. Por esto, Teichmann ha
17. TBT+, RXT recomendado 9 .... , P4A, a pesar de la
18. D7T mate. pérdida del peón. Esta recr :. <dación de

- 117
Teichmann se halla prácticamente apli- Posición después de 13. ... , D X A
cada en el "match» Capablanca-Lasker,
aunque no se. ha aclarado suficientemente Negras: Kline
la solidez del sacrificio de peóu.

10. A6TD, AXA


11. DxA, P3A

P4A es más fuerte, pero después de


12. 0-0 y TID el PD negro es débil.
12. 0-0, CSR
Esto pierde un peón. La partida negra
es ya bastante difícil.
13. Ax A, DXA

Ahora las blancas obtienen una decisiva


ventaja material por medio dé tres mo-
Yimieotos vigorosos.

14. D7C, TRIA


15. Cx P, D3D
16. T X P, Abandonan Blancas: Marshall

118-
RODOLFO SPJ ELMANN

Rodolfo Spielmann nació el 5 de mayo Sus modelos fueron Ande~n y Tschi-


.de 1883, en Viena. Aprendió a jugar gorin.
-siendo todavía un niño, y fue exhibido Spielmann es el último poeta de las
como prodigio, a pesar de lo cual más partidas de gambito, de las cuales quiso
·tarde llegó a ser un gran maestro. Ner- revivir especialmente la de Gambito de
vioso y de temperamento impresiona- Rey. Actualmente sus ideas y sus proezas
ble, era muy desigual en sus resultados. pueden ser ya valoradas desde el punto de
-Gambito, Abbazia, 1922, primer premio; vista histórico. Aportó a sus. empresas el
San Sebastián, 1912, segundo y tercer pre- necesario don: no solamente gran imagi-
mios compartidos con Nimzowitch; Pis· nación y talento para las combinaciones,
tyan, 1912, segundo premio; Torneo Gam. sino también infinidad de recursos en las
hito, Baden, 1914 primer premio; Pis- situaciones complicadas, en las que se
tyan, 1922, segundo y tercer premios, com- sentía en su elemento, debido probable-
partidos· eon Alekhine; Teplitz-Schoenau, mente al hecho de haber aprendido el jue-
1922, primero y .segundo premios, com- go siendo niño (el caso de. Capablanca),
partidos con el autor; Semmering, 1926, . lo que explica sus triunfos. Pero en su
primer premio -en este torneo tomaron verdadera aspiración se encontró contra·
parte todos los maestros de primera fila, riado. Obtenía sus mejores resultados con-
con la excepción de Capablanca y Las- Irá oponentes más débiles que él, que per-
"ker-; Magdeburg, 1927, primer premio; dían la cabeza en las posiciones compli-
La más moderna tendencia en ajedrez, cadas. Las partidas que ganó en viejo es-
de 11! cual tenemos algo que añadir en su- tilo son muy interesantes, pero no convin-
cesivas páginas, ha sido calificada frecuen- centes, razón por la cual no pudo crear
temente de nuevo estilo romántico. Esta escuela. El mismo, en el curso de los
denominación . es errónea, puesto que no años que vivió en su vieja Viena, desper-
fue posible por· más tiempo triunfar en tó poco entusiasmo.
los torneos utilizando la mera técnica des· El pasado ha muerto, pero en la histo-
pués que los principios de Steinitz se ria del ajedrez Spielmann tendrá un lu-
popularizaron y alcanzaron general cono- gar de honor como último mantenedor
·cimiento y los más modernos maestros de la tradición romántica.
procedieron a desarrollar la teoría en ex·
tensión y en . profundidad, mucho más
allá de donde la dejara Steinitz. Spiel- VARIANTE DEL GAMBITO EN
mann, por otra parte, merece realmente LA APERTURA VIENESA
el calificativo de nuevo romántico. Buscó
]a salvación del ajedrez en el retor.J.o al Como ya hemos hecho notar en otra
estilo de los viejos maestros utilizando jun-te, la refutación del gambito de rey
1os principios de Steinitz, que se ·habían hay que buscarla en el contragambito
-convertido en esenciales para la técnica. Falkbeer. Por ello, lo que hay que ha.

- 119
('er e5 preparar la JUgada de gamh1t'l P de SR es convenientemente apoyado y
P4AR con una jugada de desarrollo que se hace inasaltable. De estas consideracio-
1mp1da P4D de las negras. A este fin nes se deduce que si las negras JUegan
puedt> considerarse 2. A4AO tan buena con lógtca, deben proceder inmediatamen-
como la de la partida vienesa 2. C3AO. te a desplazar el P de SR. preparandn
En ambos casos la réplica negra 2 para eUo P3A R Así Uegamos a la co-
C3AR e•ta indicada con objeto de hacer rrecta partrda negra, con 5 ... .• A2R, en-
posible P40. Después de l. P4R, P4- R; roque y P3AR.
2. A4A. C3AR; 3. P4AR, P40; 4. De conformidad con lo anteriormente
P X PO. PSR. las negras obtienen por expuesto, la moderna variante de la par-
medio de una altera('ión en el orden de tida vienesa es como sigue:
las JUgadas una .fácil vanante del contra·
gambito F"alkbeer. Por esto, la, jugada de l. P4R, P4R
alfil no es ('Onveniente para preparar la 2. C3AD, C3AR
JUgada efect iva de gambito. 3. P4AR, P4D
El caso es dtstinto en la partida v•ene- 4. P X PR, CxP
oa. Examinando: 1 P4 R. P4R; 2. C3AO. 5. C3A, A2R
C3AR; 3. P4A. P4D, veamos, que las 6. P4D, O-O
blancas no estan obligadas a 4. P X PD, 7. A3D, P4AR
PSR, entrando ast en la molesta posición
Falkbeer, en la cual el P de 4AR per- Esta jugada tiene el mismo objeto que
manece obstruyendo la columna que se P3AR, y las blanca~ deben jugar P X P
trata de abrir, sino que puede ser abierta en cualquier caso. De otra forma, la po-
por medio de 4. P X PR . Después de la sición del C en 5 R sería demasiado fuer-
continuación 4 .... . C X P; 5. C3AR -se te,· y, por otra · parte, las posibilidades
ha ensayado también aqui 5. D3A, pero de ataque blancas en la columna de AR
este desarrollo prematuro de la dama no serían mínimas sí el P A negro perma-
parece completamente con-ectG-. todas las nece. en su 4AR.
posibles jugadas de las negras han sido
ensayadas y analizadas. por ejemplo, S. 8. P X P a p., AxP
. , C3AO; S. ... , ASCO; S...• ASCR;
S. . • A4AO. Pero las jugadas no sirven Esta jugada con la idea de contraatacar
para nada. solamente las ideas persisten. sobre el PD blanco, da a las negras una
De esta snerte. en contradicción con la partida m á• fácil que si juegan C X P.
práctica y análisis final establecida fue
he(' ha por Breyer en 1917 como la úni- 9. 0-0, C3A
ca sólida y lógica. Esto es. el punto esen-
rial a considerar si juzgamos una aper· Y las negras no tienen dificultades.
tura. es la formación del centro y en este
raso el P blanco en SR. que amenaza
ser mucho más poderoso que en la aná- P~RTIDA NÚM . 39.
loga posición del Rúy López. que ya se
ha discutido antf'riormente. a causa de que Blancas: Spielmann
aqui puedt> ser efectivo el apoyo por me- "''egras : FlamLerg
dio de P4D Si se le permite a las blan-
ra' rompletar su desarrollo sin ser estor- 1. P4R, P4R
badas. este P en SR. en conjunción con 2. C3AD, C3AR
la ('olumna de A R abierta. ejercerá enor- 3. P4A, P40
mr presión sobre la partida negra. espe- 4. P X PR, CXP
rialmente en el flanco d!' rey Como com- 5. C3A, A5CR
pensarión por la columna de AR abierta. 6. 02R!,
las negras no tienen nada más que la
rolumna dl' rey. la ('ual no puedP sumi· Esta excelente jugada de Spielmann es
nistrar ninguna has!' d!' operariool's si el la replira exarta a la otltirna jugada de

120 -
las negras. Frente a la doble amenaza PoJición después de /l. . PJAD
7. C X C y 7. D5C + , las negras deberían
jugar 6. . .. , C X C, y el blanco recaptu· Negras: Flamberg
raría con el PC.

6 •.. . , C4A

En la creencia de que aquí no sería


ventajoso para las blancas la jugada P4D,
por el cambio que sigue.

7. P40!, AXC
8. Ox A, 05T+

Las negra'> esperaban 9. D2A, con la


púsible continuación 9 ..... D X D+ ; 10.
R X D. C3R; ll. C x P, P3AD; y C X P,
después de lo cual las negras habrían te-
nido mejor final. Pero Spielmann no qui·
so perder una tan favorable oportunidad
de revivir el estilo de Morphy. Exacta·
mente lo mismo que su modelo hacía, sa-
rrifica varios peones por puras conside-
raciones posicionales, para obtener una Blancas: Spie/mann .
partida abierta. En la posición resultante,
la ventaja blan<'a I'D desarrollo tiene un
sorprenden!!' derto. No ~upondría una mejora JUgar DSR.
después de lo cual las blancas termina·
rían la partida con 14. ASC +, C3A; 15.
9. P3CR, Dx PD A X C, D X D: 1b. Tl R + .
10. A3R, DXP
11. 0-0-0, P3AD 14. A4AD
12.CXP,
Mucho · más fuerte que 14 . A XC,
Con este sacrificio de caballo, Spiel- AXA: 15. TxA: 0-0.
mann abre definitivamente la posición y
produce el inmediato colapso de la par- 15. 1 D5R,
tida negra. 16. Ax C!, Abandonan
12. PXC Después de D X D. la; blancas fuerzan
13. TX P, D3R el mall' ron Ji TIR +

- 121
MILAN VIDMAR

Vidmar nació en Laibach, en 1887. PARTIDA NÚM. 4{)


Completó sus estudios en la Escuela Téc-
DEFENSA BUDAPEST
nica de Viena y es actualmente profesor
de la de Laibach. Ha ganado cierto re- Berlín, 1918
nombre en el campo de la in~eniería eléc-
trica. Blancas: Rubinstein
Negras: Vidmar
, Jugando en el colegio, como tantos otros
en Viena, alcanzó la categoría de maes- l. P4D, C3AR
tro. No ha tenido tantes éxitos como la
2. P4AD, P4R
mayoría de los maestros que figuran en Esta defensa Budapest, inventada en
este libro. Nunca ganó un primer premio 1917 por Abonyi, Baratz y Breyer, se ca-
en los torneos internacionales más impor- racteriza por su ataque contra las casillas
tantes y casi nunca un segundo premio. negras centrales, que se han debilitado
con 2. P4AD. Sin embargo, desde otros
J?robablemente, su mayor éxito fue com-
puntos de vista, no deja de tener sus des-
partir el segundo y tercer premios con ventajas esta temprana agresividad de las
Rubinstein en San Sebastián (1911 ), me· negras.
dio punto detrás de Capablanca. Sin em·
bargo, Vidmar está incluido entre los más 3. P X P,
apreciados maestros de la actualidad, por Si se cree preferible declinar el sacrifi-
la razón de no padecer descuidos. Con cio, se puede jugar muy bien 3. C3AR,
una casi invariable regularidad, está llegándose a una situación análoga a la
apertura inglesa l. P4AD.
acostumbrado a obtener el tercer lugar,
incluso en los más fuertes torneos. Estos 3• ... , ese
resultados uniformes indican que siempre
Las blancas tienen ahora varias conti-
juega con científica calma y que pone
nuaciones.
toda su fuerza en la partida. Ha de- l. El intento de conservar el peón. La
mostrado ser poco original; no obstante, de!Wentaja de "este procedimiento se reve-
-sus partidas son extremadamente instruc· lará en la presente partida.
2. La impetuosa y agresiva continua-
tivas para el estudioso a causa de su gran ción 4. P4R, C X PR; 5. P4A. Esta con-
daridad y precisión técnica. tinuación promete ser una clara refuta-

122 -
~10n de la defeil88 Budapest, y para ser 8. PX A, D6T
~rrecta debiera presuponer la incorrec- 9. TIA, ..P3A
Ción de la millma. Se puede decir que el 10. PXP,
';ihálisis de este intento es incompleto,
p,ues existe una creciente convicción de A 10. P6R, la réplica negra sería sim-
gue, aunque por una parte, colocado el plemente P X P; 11. DST + , P3C; 12.
primer jugador frente a la defensa Buda- D X C, P4R, recuperando la pieza con
.p est, no aparece justificada la refutación ventaja.
de 2. P4AD; por otra, dicha defensa no
es tan defectuosa ni fácil de demoler. Se 10.... , CxP
tendrán que buscar métodos que asegu- 11. D2D, P3D
ibn al primer jugador, si no una decisi- 12. C4D, 0-0
va ventaja, por lo menos, la pequeña ven- 13. P3R, .
taja que se debe esperar.
·,. La tarea para las blancas de mantener Este es el error decisivo. Con 13. P3A
la ventaja de salida es más fácil en la y 14. P4R, las blancas obtenían una se-
d~.fensa Budapest que en la usual defensa gura posición.
India, a causa de que · la temprana aper-
~qta de la partida despierta en las blan:·· 13 • ... , ex e
cás bien definidas ideas estratégicas. El 14. PAX C, C5R
'éÓ'Í nentario a la sexta jugada de esta par- 15. D2A, D4T+
tida sugerirá cuál es, por lo menos, un 16. R2R,
~imple y conveniente método, si no el más
fuerte.
Posición después de 16. R2R
4. A4A,
Negras: Jlidmar
Si 4. C3AR, las negras pueden recupe·
rar el peón sin ninguna dificultad por
medio de A4A ; ·5. P3R, C3AD.
4 •... , C3AD
5. C3AR, A5C! +
6. C3A,

Si Rubinstein no jugase con el propó-


sito de conservar el peón, habría prefe-
rido la· jugada más natural · 6. CD2D,
romo hará años más tarde. La continua-
ción en este caso sería: 5.... , D2R; 7.
P3TD, CR X PR! 8. C X C, C XC; 9.
P4R, A X C + ; 10. D X A, y las blancas
con sus dos alfiles tienen la partida más
fácil.
6. D2R
7. D5D, AXC!
Blancas: Rubinrtein
Es muy dudoso si el ataque aqut mtro-
ducido por Vidmar habría sido eficaz con·
tra un juego mejor de su oponente. Ved Después de R1D, las negi"Bs continúan
el comentario a la jugada 13.a Una deci- el ataque con A4A; 17. A3D, C X P+.
sión a favor de un inmediato 7 •... , P3A,
en verdadera partida de gambito, habría 16... . , TXA!
's ido probablemente mucho más fuerte. 17. PXT, A4A

- 123
18. D2C, T1R . Posición final
19. R3A, C7D+

Las negras podían también forzar la


ganancia con P4T; 20. P3R, PST. El
rey blanco sería incapaz de· liberarse de
material. En lugar de · esto, Vidmar con·
sigue hacerlo más fácil repitiendo su ú}.
tima jugada, y al intentar evitar una re-
petición de jugadas, Rubinstein elige una
casilla todavía menos favorable para su
rey.

20. R3C, C5R+


21. R4T?, T3R
22. A2R, T3T+
23. A5T, · TXA+
24. RX T, A3C+
Y mate a la sigulente.

124-
JAVIER TARTAKOWER

Tartakower, como tantos otros maestros partidos coa Nimzowitscb, en Nieadorf.


de ajedrez. ha tenido una vida errante. 1927. y otra vez en Londres. 1927.
Nació en Rostov, sobre el Don, en 1887. Tartakower es. además. una personali··
Su lengua nativa es la rusa, pero era súb· dad probada en sus múltiples aptitudes.
dito austro-húngaro, y a partir de la pri· No solamente es doctor en Leyes. maestro
mera gran guerra pasó a ser ciudadano y prolífico autor de libros de ajedrez, sino
polaco. Recibió su educación primaria en que también ha ganado una reputación
la ciudad de su nacimiento. obteniendo en la literatura mundial escribiendo para
más larde grado en Ginebra y comple· el cine, y es particularmente conocido por
tando sus estudios de Leyes en la Univer· sus traducciones de la moderna poesía
sidad de Viena. En la década que prece· rusa al alemán y al francés. Pronto su
dió a la primera guerra mundial, fue pro- brillante inteligencia baUa expresión e!l
bablemente Viena la ciudad donde se re· aforismos y paradojas. produciendo una
unían la mayoría de los maestros de nota, impresión fascinadora. Al pronto hay du-
especialmente los jóvenes más destacados, das de que todo esto sea artificial. pero
como no había sucedido en ninguna otra al un se comprueba la verdadera menta·
ciudad ni en ningún otro tiempo. lidad de Tartakower. que h.ace dificil
Fue en este ambiente en el que Tar- aprehender el fundamento real de sus éxi·
1akower recibió su instrucción ajedrecista. tos. Hay que encontrarlos en su admira·
Bien pronto (1906) triunfó entre cincuen· ble capacidad para el trabajo y en una
ta competidores, ganando el primer pre- infatigable investigación de la verdad, con
mio y el título de campeón de la Liga la cual vence un escepticismo innato que
Alemana de Ajedrez.· en el torneo prin· irrumpe una y otra vez.
dpal internacional en Nuremberg. Pocos Entendemos la psicología del jugador
meses después compartió los tercero y de ajedrez desde el punto de vista del
quinto premios con Maroczy y Vidinar, hombre. Tartakower lo sabe todo. pero
en el torneo de maestros organizado bajo no juega las aperturas que están conside-
los auspicios del Club de Ajedrez de Vie- radas más fuertes. Quiere gustar el pla-
na. Sin embargo. no llegó a colmar la cer de elegir aquellas que se tienen por
expectación que despertó en el ajedrez más débiles. para descubrir los efectos de
mundial por estos rápidos p_rogresos. Has- la teoría hasta donde sea posible. De esta
ta después de la primera guerra mundial manera ha contribuido mucho a la revi·
no obtuvo éxitos que le colocaran entre sión de los viejos dogmas.
]os más eminentes maestros. Solamente
mencionamos los más importantes: segun·
do premio. La Haya. 1921: segundo pre- HOLANDESA
mio, Viena. 1922: primer premio en el
torneo memorial de Srblechter. de la Aso- Entre las aperturas que Tartakower
ciacJOn Austriaca de Ajedrez. Viena. hizo revivir están el ataque holandés (l.
1923: priml'ro y segundo premios. com· P4.<\ R) y la defensa holandesa (1.

- 125
P4AR ). Los inconvenientes del ataque Durante algún tiempo se creyó que se
holandés son el de descub ~ir los propósi- podía refutar la defensa holandesa abrien-
tos del primer jugador y el de cerrar su do la. partida inm ediatamente, jugando en
juego. Así, por ejemplo, es evidente que estilo de gambito 2. P4R el llamado gam-
el AD, para no quedar reducido a una bito Staunton. Pero en cualquier caso es
inactividad por la situación del PAR, dudosa la política de sacrificar un peón
tiene que ser desarrollado en fianchetto, central tan pronto, razón por la cual no
haciéndose necesarias las jugadas P3eD parece muy correcto el sacrificio de peón.
y A2eD. Tales consideraciones facilitan la Después de
defensa del segundo jugador, que puede
realizar un juego cerrado, sin desventaja 1. P4D, P4AR
en espacio, obteniendo así una igualdad. 2. P4R, PX P
El llamado Gambito From, l. .. . , P4R, 3. C3AD, C3AR
mediante el cual el segundo jugador, sin 4. ASCR,
suficiente justificación busca abrir la par·
tida violentam ente sacrificando su peón, las blancas no amenazan nada, porque re-
está en contradicción. con la lógica, y cuperar el peón por 5. A X C y e X P no-
por ello es poco correcto. Las negras pue- constituye una amenaza; en efecto, laa
den recuperar el peón, pero tendrían peor negras tendrían la ventaja, debido a sus
final. dos alfiles. Por consiguiente, de cualquier
forma que juege el negro -naturalmen·
~1ás digna de consideración que el ata- te, no se puede jugar 4. . .. , P3R, a cau-
que holandés, apenas usado en la actuali- sa de e X P- las blancas d eben ofrecer
dad, es la defensa holandesa l. P4D, un verdadero gambito con 5. P3AR. Las
P4AR. No debiera sorprender que una ju- negras se pueden preparar contra esto.
gada buena como primer movimiento de Tartakower recomienda 4 ... . , P3CR; 5.
las n egras no sea recomendada como bue- P3AR, P x P; 6. e X P, P4D, contra lo-
na para las blancas, que tienen un tiem- cual Alekhine opone 5. P4TR, sin que de
po de ventaja. La gran diferencia con- ninguna forma constituya una continua-
siste en el hecho de que las negras, de- ción definitiva del ataque. Nos parece que
bido a esta desventaja, lucharán solamen- una buena continuación sería
te por la igualdad y deben quedar satis-
fechas con un sistema que la garantice, 4 ... ., P3D
mientras las blancas, naturalmente, han
de buscar un plan de desarrollo que les con el doble propósito de avanzar en el
asegure una ventaja, aunque sea mínima. centro con P4R y preparar el enroque
Ahora, la jugada l. ... , P4AR, probable- largo
mente tiene la misma desventaja que l.
P4AR principalmente porque descubre el 5. P3A, PX P
plan de las negras y significa un ence- 6. C X P, ASC
rramiento. La misma · objeción puede ha-
cerse a l. ... , P4D, después de lo cual en cualquier caso, la posición de las ne-
la posición del peón tiende a convertirse gras no es mala.
en fija. De esta forma la defensa holan- ... Sin e~bargo, con objeto de evitar las
desa tiene de común con Í. .. :,' P4D y complicaciones de este gambito, la defen-
también con la defensa india l. ... , C3AR, sa holandesa se inicia con l. ... , P3R,
que todas ellas, de acuerdo con las exi- esto es, l. P4D, P3R; 2. P4AD, .ó 2.
gencias de la lógica, atacan la casilla 4R C3AR, P4AR. Si las blancas juegan 2 .
blanca, que se ha debilitado con la juga- P4R, hemos llegado a la defensa fran-
da l . P4D, y así se entra en un tipo cesa.
de defensa cerrada, mientras que una El gambito Staunton está basado en
temprana apertura del juego facilitaría la una idea posicionalmente correcta, aun·
tarea de las blancas, que tienen la ven- que a veces toma formas atrevidas. El ob-
taja de salida. jeto de la defensa holandesa es el de es-

126-
' tablecér un puesto ·avanzado en la casi· las negras replicarían, no con la defensa
Vlla SR de las negras, por lo general, holandesa, sino con P4D, y 2. P4AD no
C3AR, P3CD, A2CD y la clavada del estaría de acuerdo con el espíritu del sis·
.CD blanco ·p or ASC tratan de realizar tema que solamente utiliza el PAD como
este plan. Si las blancas consiguen, sin ariete, después que las negras han juga-
pérdidas de tiempo y sin peligro atacar do P4D.
penetrando en las casillas 4R y eventual-
mente 5D, el sistema de desarrollo de las
negras ha fracasado y la partida es favo- PARTIDA NÚM. 41
rable al primer jugador. La casilla blanca
4R es por ello el punto estratégico más HOLANDESA
import!lnte de la defensa holandesa, y,
como regla general, desde la apertura co· Teplitz-Schoenau, 1922
mienza la batalla por su posesión. Si las
blancas renuncian a la. lucha por 4R y Blancas: ~aroczy
permiten las negras con la defensa holan· Negras: Tartakower
·desa obtienen una inmejorable partida con
~uchas posibilidades. 1. P4D, P3R
i+ Par a la batalla posicional por 4R, las 2. P4AD, P4AR
'blancas tienen a su disposición dos méto- 3. C3AD, C3AR
;dos que proceden de Steinitz. Uno con- 4. P3TD,
;siste en el desarrollo P4AD, P3R, C3AD,
A3D, CR2R, de tal manera que si en Una jugada que es característica del
'este intervalo las negras han hecho las estilo defensivo de ~aroczy. Trata, na-
'§picas jugadas mencionadas más arriba turalmente, de evitar ASCD. Vemos aquí
'para dominar 4R, las blancas pueden con· que de lo que se trata es de la domi·
\testar con P3AR, y si se presenta la opor- nación del punto 4R, de acuerdo con la
'tunidad, abrirse camino con P4R. Sin em· idea de la defensa holandesa. Aunque
bar'go, este método de desarrollo no es P3TD tiene esta explicación posicional,
digno de confianza, como todos los siste· nos parece demasiado pasiva para explo-
mas que buscan una gran ventaja sin la tar la ventaja de .salida.
j ustificación de un error serio por parte
'del oponente o de una acumulación pre• 4. A2R
via de pequeñas ventajas. La posición de 5. P3R, 0-0
los peones blancos en 4D, 4AD, 3R y 6. A3D, P4D
'3AR puede ser arrollada por P4AD y
P4D. Las negras eligen la formación St:m e-
. El otro procedimiento, · que ha sido wall, que ya hemos visto en la partida
·adoptado en los últimos años por Grün- Schlechter-Johner. La diferencia esencial
feld, consiste en el desarrollo en fianchet· entre las . dos partidas consiste en el he·
to por 2. P3CR. Este sistema es delicado cho de que en este último caso las blan-
'para las negras, porque hace más difícil cas podían desarrollar su AD .a 4AR y
el desarrollo de su AD por 2CD. Si las cambiarlo por el· AR negro, después de
negras juegan ahora P4D para oponerse lo cual las casillas negras del segundo ju-
·al A de 2CR, las blancas obtienen un ata· gador quedan muy débiles. Sin embargo,
que contra el peón fijo negro con P4AD. si las blancas han confinado su AD con
Según Grünfeld, la mejor política para P3R, la formación Stone-wall para las
las blancas es desarrollar el CR a 3TR y negras no tiene grandes inconvenientes, es-
4A. Pero si las negras inician la defensa pecialmente si tienen ventaja de desarro-
holandesa con P3R, esto es, después ·de llo, como ocurre en la presente partida.
l. P4D, P3R, las blancas están obligadas Lo mejor de que disponen las blancas
a hacer la modesta jugada 2. C3AR, si ahora es darse cuenta de que no han oh-
eligen este sistema. Naturalmente, la ju· tenido ventaja de la apertura y oponer
gada 2. P3CR no t endría sentido, porque otra Stone-wall para igualar, por P4AR

-127
eombinado con C3AR y continuar más 16. ·- -1 PAxC
tarde con C5R, _o primero, como en esta 17. C2D,
partida 7. C3AR y 8. 0-0, continuando
entonces con 9. CSR y P4AR. La posición del rey blanco parece bas-
tante comprometida; pero, por otra par-
7. e3A, P3A te, el flanco de dama de las negras está
retrasado en su desarrollo, y si las negras
Obsérvese aquí la posibilidad de caer continúan el ataque rutinariamente, las
en un error muy frecuente en esta forma- blancas ganarían el tiempo necesario para
ción: 7 .... , CSR; 8. PxP, PXP; 9. su consolidación. Ved, por ejemplo, la si-
D3C, y las negras, a causa del doble guiente plausible continuación sugerida
ataque· contra 4D y SR, tienen que deci- por Tartakowe'r: 17.... ,•CIAR; 18. A2C,
dirse por C X C. C3C; 19. elA, A2D; 20. T2R, TlAR;
21. P4C, etc.
8. 0-0, esR En lugar de esta ineficaz continul!ción
9. D2A, A 3D del ataque, Tartakower demuestra la su-
10. P3eD, e2D perioridad de su posición inventando un
11. Ale, tipo de combinación sin precedentes en la
literatura del ajedrez. Sacrifi~a primero
Posicionalmente la próxima tarea de las una torre para demoler la muralla de peo-
blancas debería ser poner en juego su nes que protege al rey, y entonces, delibe-
inútil AD. El desarrollo por 2CD sería radamente, completa el desarrollo de su
lógico si las blancas continúan cou C5R. lado de dama, a pesar de su gran desven-
Sin embargo, Maroczy no juega tan lógica taja material. La posibilidad de hacer esta
y enérgica continuación, sino que conti- combinación se debe al hecho de que,
núa su absurda defensa. aunque las piezas blancas parecen estar
Nimzowitsch resuelve el problema del bien situadas en el flanco de dama, como
AD en tales situaciones con P4TD y A3T. ha demostrado Tartakower, han de reali-
zar una larga y pesada maniobra para
11. ... , T3A proteger su flanco de rey.
12. TRI R, T3T Como las negras, después d.e su sacri-
ficio de torre, no continúan con un in-
Amenazando el sacrificio de A en 7T. mediato ataque, sino que completan su
desarrollo, las blancas no se ven limitadas
13. P3e, D3A a hacer jugadas forzadas, sino que tienen
14. AlAR, muchas para elegir. No es el propósito
general pedagógico de este libro examinar
La posición blanca es ya bastante des- todos los detalles de las posibles varian-
agradable. La jugada que más nos hubie- tes. El hecho es que, a pesar de los nu·
ra gustado hacer, 14. C2D, habría sido merosos análisis, no se ha encontrado una
refutada por las negras con el sacrificio defensa satisfactoria para las blancas.
del e en 7 AR. Las blancas habrían hecho
mejor continuando la maniobra defensiva 17.... , TXP
iniciada con la jugada del texto con 15. 18. RXT, DxP+
A2CR y 16. C2ll. 19. RlT!,
14. P4eR Una jugada débil sería A2C. Las blan-
15. TDlD, PSe cas deben reservarse la opción de jugar
16. ex e, su torre a 2TR vía 2R.

Forzada. Después de 16. C2D, el sa- 19.... , C3A!


crificio del caballo negro sería otra vez
decisivo: 16 .... , exPA; 17. RXC, La clavada del e blanco en 2D consti-
TxP+; 18. A2C, AxP+. tuye el elemento esencial de la combiDa·

128-
ci9n de la~ negr~. Después de 19. ••• , 28. AIR.
'D X PC, seguiría 20. ClC,
y la dama blan-
ca podría acudir a la defensa del flanco Las hlan~ esperan ablandar a m opo-
de rey. nente devolviendo la pieza. Así, si 28 .... ,
D7T+; 29. DX D, Px D+; 30. RXP,
20. TlR, DXPC
T X A, w blancas, a pesar dci m desven-
21. CIC, C4T taja material, alcanzarían una fuerte po-
22. D2D, A2D! sición con 31. C2D y 32. A4T.
23. TlA, DST+
24. RIC, A6C 28 .... , TXA+!
Esto obliga a las blancas a entregar la
calidad. Porque si 25. T2C, entonce~, des- Las negras terminan la partida con
pués de 25 .... , TlAR; 26. D2R, T6A; estilo.
27. A3A, A3D (amenazando T6T); 28.
)\JR, P6C; 29. C2D, D5C, se llega a 29. RXT, P4R
tina situación en. la cual las blancas, a 30. RIC,
p~r de su gran superioridad material,
e!t.á n completamente perdidas contra la Ta:rtakowe:r sugiere aquí, las dos si-
:ifuenaza C-2C-4A. guientes continuaciones: 1.a 30. A X P,
C X A+ ; 31. R2A, A5C; 32. TIR,
25. A3A, C7R+; 33. RIA, RlT y A6T. 2."' 30.
R2R, A5C + ; 31. R2D, D7T !, etc.
Este es el punto crítico de la atrevida
co,ubinación, Como el mismo TarÍakower 30. A5C
~fi~ma, las blancas debieron jugar 25.
31. AxP,
':(2T. Tartakower hace notar que aun así,
Jiis i negras continuarían siendo dueñas de
l!I'(Situación con 25. .. ., A X T + ; 26. Después de 31. T2D, las negras estable-
tp~ A, D4C; 27. AlA, P6C; 28. DIT !, cen su ventaja simplemente con 31. .. .,
.R1'f!; 29. A2R, C3A; 30. TIA; TICR; PxPD; 32. Px PD, A6A; 33. AXP,
~J > T4A, P4R!; . 32. PXPR, DXP; 33. CXA; 34. D2T, DXD+; 35. TXD,
Q4T, T3C; 34. A2D, P5D; 35. P x P, C7R+ y CxP.
,1:):;.< P + ; 36. R2C, D7C, pero pasa por
alto la favorable continuación de las blan· 31. ...
, CXA
'~~s 37. T X C, T X T; . 38. D X T +, 32. TlR, C4A
Djx D; 39. A3AD. 33. D2A, D4C
:Naturalmente esta demostración no 34. PX PR,
R!~1eba la incorrección de la combinación.
Ita totalidad de la variante es mucho ma-
y'Qr y no es lo suficientemente cotivin· Las blancas han · perdido la energía para
defenderse. Pero incluso después de su
.ce.nte.
mejor jugada 34. RlA, la conclusión in·
25. AXT+ evitable no habría tardado mucho. Des·
26. DXA, P6C pués de esto las negras podían continuar
21. 1>2C, . TIAR el ataque con D4T o P4TR.

Las negras completan su desarrollo y al 34. A6A+


lrJJ:ismo tiempo amenazan T7A; 29. DIT, 35. RIA, C6C+
T7T, ganando la dama. 36. Abandonan.

- 129
EFFIJ 1• D. BOGOUUBOW

Effim Bogoljubow nació el 14 de abril no de la naturaleza que el resultado de


de 1889, en el Gobierno de Kiev (Ru- consideraciones técnicas: una corriente
sia). Obtuvo resultados muy desiguales en salvaje que rompe todos los diques. Así,
torneos y matches. Sin embargo, algunas la confianza de Bogoljubow en sí mismo,
de sus victorias fueron lo suficientemente su infinito optimismo, debe ser un fa c.
notables para que hoy día sea considera· tor esencial en &us éxitos. Desde que to-
do uno de los principales aspirantes al tÍ· dos los maestros de primera clase han
tulo mundial. Estas victorias fueron: pri· perfeccionado su técnica hasta el mism(}
mer premio en el gran torneo de Pistyan, grado, el elemento psicológico tiene una
1922 (delante de Alekhine); Carlsbad, importancia mayor que en el pasado, y
1923 (compartido con Alekhine y Maroc- la confianza en sí mismo es extraordina-
zy); Moscú, 1925 (delante de Capablan· riamente importante. Además, este he~ho
ca y Lasker); Berlín, 1926, y Kissingen, ha sido establecido científicamente. A este
1928 (delante de Capablanca ). respecto nos podemos referir a los resul-
Como resultado de ¡;stos grandes éxitos tados de las pruebas psicológicas hechas
debió sin duda Bogoljubow ser incluido, por los profesores rusos de Universidad
no solamente entre los principales maes- con los maestros que tomaron parte en
tros de la actualidad, sino entre los más el torneo de Moscú de 1925.
grandes de la historia del ajedrez. En lo En los últimos años ha sido costumbre
que a este .libro se refiere, nos interesa general juzgar una posición dinámicamen·
sobre todo la cuestión de si ha contribui- te, en contraste con otra o, propiamente
do ó no en algo esencial al perfecciona· hablando, supliendo el punto de vista es-
miento de la teoría y al mejoramiento de tático de Steinitz, de una posición (pun-
la técnica ajedrecística. Bogoljubow mis- tos débiles, etc.). Posiciones pobres, res-
mo ha dicho una vez que antiguamente tringidas, pueden ser buenas si son capa-
ces de desarrollar planes. Por el contra-
jugaba de una manera más moderna;
rio, una buena posición, despejada, que
pero que, recientemente, en sus partidas parece mejor, puede ser mala si no es ca-
había adoptado una forma más clásica. paz de descubrir ningún plan que la haga
Todavía no sabemos qué estilo considera más fuerte. El juego de Bogoljubow, en
él clásico. ¿El de Morphy? ¿El de Stei· particular, está caracterizado por un fuer·
nitz? ¿O el de Lasker? te dinamismo. Es posible que las fuent es
Como hemos dicho antes, Bogoljubow de la fu erza de Bogoljubow yazga en esta
es un hombre caprichoso, que juega muy fase de la partida, la cual ha sido apenas
desigualmente, pero que arrolla a todos estudiada sistemáticamente hasta hoy, de
sus oponentes cuando es completo dueño tal forma que la última palabra acerca de
de sus ideas. Y así su juego nos da la él debe estar reservada a las generacio-
impresión de ser más bien un fenóme- nes venideras.

130-
PARTIDA NÚM. 42 tienen a su disposición la jugada P3A,
que harán en su 12 movimiento.
INDIA
10. P3TD, A2R
Pistyan, 1922 11. TIA, e4A
Blancas: Bogoljuhow 12. P3A,
Negras: H. Wolf Si examinamos el tablero en su tola·
1. P4D, C3AR lidad resulta evidente la inferioridad de
2. P4AD, P3R las negras. debido a su reducido espacio.
3. C3AR, P4A Todas su piezas se obstruyen unas a
4. C3A, otras. Pe,¡ ello es fácil comprender que
las negra¿ !r.atan ahora de avanzar a toda
Es probablemente lo mejor ocupar con costa cou ms peones centrales, para ob-
4. PSD el ·espacio ofrecido por las negras tener el . pacio necesario donde moverse,
eJ! su última jugada. Pero Bogoljuhow pero ya ,; demasiado tarde. Al mismo
deseaba evitar el desarrollo que ee deriva tiempo, ¡,._ jugada natural P4D daría al
del gambito Blumenfeld 4. . . .• P4CD primer jugador una clara ventaja de po-
:.-véase el capítulo correspondiente-, que sición después de 13. P3CD, CD2D; 14.
había sido introducido en la práctica de P x P. ex P: 1s. ex c. A x e: 16. e6A.
los maestros en el torneo de Pistyan por Esto decide a las negras a jugar P4R,
Al~khine. -apertura no bien . conocida en- preparándola con P3C para impedir el
tonces. acceso del caballo blanco a SAR. Natu·
4.... , PXP ralmente P3e debilita la posición de su
5. ex P, rey, siendo esto consecuencia de su posi•.
A5C
6. A2D, ción restringida.

En tales posiciones de ia Defensa In· 12.... , P3C


.dia, las blancas tienen al principio del 13. P4eD, P4R:
medio juego mayor ventaja en espacio. De otra forma el C no tiene una reti-
.Pero los peones negros que no han sido rada deseable. Las negras esperan colo-
movidos y que limitan la partida negra, carlo en 3R.
pueden representar una ventaja en el fi.
nal cuando un espacio reducido no tiene 14. PX e, Pxe
i~iita importancia, de donde se deduce que 15. PR X PO, PXP
la's, negras deben simplificar todo lo posi- 16. P5D, P3D
l!le. Esta simplificación era . posible aquí
~¡. la típica maniobra 6 • . .. , A X C; 7. ·Así, la partida ha pasado del estado
~X A. CSR. Después de lo cual las hlan- ahipermoderno», con un centro de peones
~as no pueden reteper los dos alfiles con movible. a una de las posiciones conocÍ·
!J. A4C, por la replica C3T; 9. A3T, das por las partidas antiguas, donde los
D4T+, En la présente partida, las ne· peones están fijos. La situación se puede
g~as continúan su desarrollo simplemente: examinar más claramente. Las blancas tie-
nen una clara ventaja de posición, prime-
6. P3eD ro por su mayor control de espacio, y se-
7. P3R, A2e gundo por la debilidad del flanco de rey
8. A2R, 0-0 negro. El camino natural para emprender
9. 0-0, C3T un ataque contra este lado sería 17·. P4A.
Sin embargo, las negras se defenderían
De acuerdo con el principio expuesto con AlA: 18. A3D, ASC, combinando con
más arriba, según el cual las negras, en D2D. Como esto es frecuente, Bogoljn·
.posicionc5 restringidas, deben simplificar, how sabe coordinar las posibilidades en
l_a jugada C3A es preferible. No tiene oh- ambos _flancos con su plan general. ·
jeto para las negras continuar la presión
sobre el punto SR, ya que las blancas 11. n e, D2D

- 131
Bogoljubow podía contar con esta re· Bogoljubow estaba decidido a hacer
plica nat.u ral puesto que A4A habría dado este sacrificio hace varias jugadas. Ha-
al primer jugador una clara ventaja en bría sido un error jugar 28. A2A, porque
.el flanco de dama, que habría podido me· las negras no hubiesen tomado inmedia.
jorar con D4T. lamente en 6A, puesto que tienen a su
disposición la jugada C4R.
18. P4A,
28. PXA
Ahora AlA no ofrece una prolongada 29. DX P, DlC
~efensa. Este es el significado de la pre- 30. D5T+, D2T
via jugada de las blancas. 31. DSR+, ClA
32. T7A, D7A
18. ···J TRIC 33. Dx AR, DXA+
19. P5A, AlAD 34. TlA, TXC
20. A 3D, DIO
21. D3A, TXT El sacrificio de dama es el único pro.
22. AXT, cedimiento de evitar un mate rápido.
Dándose cuenta que su ataque en el
35. DX C+, RlT
flanco de rey es ya lo suficiente fuerte
para ser decisivo, abandona a las negras
36. D7A+, RlT
37. TXD, TXT+
la preponderancia en el flanco de dama.
38. R2A, Abandonan
22. TIC
'23. P4C, T7C
24. AlA, TEiC PARTIDA NÚM. 43
25. P5C, C2D
26. PX P, PAXP DEFENSA HOLANDESA
27. D7A+, RJT
Baden-Baden, 1925
Po&ición después de 27 . ... , RIT
Blancas: Bogoljubow
Negras: H. Wolf
Negras: Mieses

Esta partida nos da otro ejemplo del


arte de Bogoljubow de · constmi.r, en un
conjunto armónico, maniobras en amhu
alas que al parecer no tienen relación en-
tre sí. El efecto es más sorprendente, ya
que el centro se encuentra completamen.
te bloqueado por peones.

1. P4D, P4AR
2. P3CR,

Este tratamiento de la Defensa Rolan·


desa, original de Steinitz, es de uso ge·
neral en la actualidad. Su principal oh-
jeto es ejercer presión sobre la larga dia-
gonal, y así impedir el desarrollo en fian·
chetto del AD negro, ya que el peón de
4A!l le impide hacerlo en esta dirección.
Blancas: Bogoljubow Para oponerse a esta presión, las negras
están obligadas, como en esta partida, a
28. AX P!, adoptar la formación Stonewall.

132-
2.... , e3AR La pOSlcton negra es inferior, debido a
3. A2e, P3R su restringido alfil y a la debilidad de
4. e3AR, P4D sus casillas negras: Sin embargo, no es
fácil ver cómo en posición tan bloquea·
Las negras podían esperar para hacer da pueden penetrar las blancas.
esta jugada con objeto de no facilitar el
plan de desarrollo del primer jugador. 16... • Í A2D
Es sabido que la formación Stonewall so- 17. TD1D, P4eD
lamente es satisfactoria cuando puede ser
retenido el AR, porque su cambio crea La mejor jugada, que destruye todas
puntos débiles. Las negras han debido es- las posibilidades de penetración de las
perar a qué el primer jugador haya ce· blancas en el flanco de dama; y que in·
rtado su AD con P3R, para jugar P4D. cluso parece dar al segundo jugador una
posición superior, pUesto que después del
5. 0-0, A3D cambio en 4D negro o 4CD, el peón .blan.
6. P4A, P3A co de 3AD se debilitaría. Por otra parte.
7. e3A, eD2D el flanco de rey está tranquilo y las ne-
gras no tienen nada que temer por aquí.
Si las negras hubiesen tomado el PAD,
las blancas no habríah recuperado con 18. D2e, 0-0
C2D. Atmque no es perfectamente claro 19. D3T,
en la próxima jugada se pueda recuperar
el ·peón, las negras no deben capturarlo, La debilidad de las casillas negras se
ya que entonces la disposición de sus hace sentir, es cierto; pero las negras
fuerzas no tendría sentido y conduciría se pueden proteger todavía adecuadamente
"' ·un rápido colapso frente a la superiori- contra una invasión directa de la dama
dad de las blancas en el centro para abrir. blanca.
se camino. ·
~~: ¡;)(pe
TRlD
8. D2A, esR
9. R1T,
Como se afirmó más arriba, esto pa·
La columna CR tiene que ser usada rece malo a causa de la persistente debi-
para el ataque. lidad del PAD, por cuya razón se podía
esperar PSA con una clara tablas. Sin
9. ... , D.3 A embargo, el objeto de esta jugada se verá
10. A4A, en seguida.
21. . D6T,
Véase el comentario a la cuarta jugada
de las negras.
Esta jugada, aunque . parezca sorpren-
dente, ataca el lado de rey, siendo la
10•... , AXA amenaza 22. A X P, P X A! ; 23. D X D.
11. PX A, D3T Además, el flanco de dama está amena·
12. P3R, eD3A zado por 22. AlA, debiendo las negras
13. esR, e20
evitar la a~enaza principal con 21.
14. TteR, exeR
RlT.
15. PDX e, ex e
16. PX e, 21. ... , D4T

Más naturill sería 16. D X C. Pero Bo- Después de DST, Bogoljubow tendría:
.goljubow desea reservarse la opción de a su disposición una no menos elegante
romper con P X P y probablemente está continuación de ataque que en la presen-
pensando también en un ataque por la te partida, principalmente: 22. T X P,
columna de CD. P X T; 23. A X P + , y entonces:

133
A) 23 .... , RlT; 24. A'xT, TXA; nes blancos, liberado ahora, el cua.I. de
25. D7C, TlD; 26. P6R, etc. aquí en adelante, tomará parte decisiva
Para evitar esta variante fue para lo en el ataque.
que jugó Mieses D4T, puesto qúe ahora
con 25. . .. , DlR, ganaría. 26. TX D+, PXT
B) 23 .... , RlA; 24. T5CI -una ju- 27. PSA 1 TRIAD
gada mágica; todas las demás, tales como 28. P6R 1 A3A
24. D6D+ ó 24 .. P6R, conducirían sola- 29. D7A+ 1 RlT
mente a tablas-; 24 .... , D6T; 25. P6R, 30. P6A1 TlCR
y las negras no tienen defensa, 31. D7A 1 TD1AD
32. D5R, P5D+
Posición de~pué~ de 21 . ... , D4T 33. R1C 1 A4D

Negras: Mie.ses Una celada. Si las blancas toman el A


en seguida, las negras se salvan por
PxPA.

34. P7A+ 1 TlC


35. D X A, Abandonan

La partida que sigue es extraordinaria-


mente característica del estilo optimista
de Bogoljubow. Nos muestra con qué con-
fianza en sí mismo y rectitud realiza sus
planes, incluso en una posición dudosa y,
al mismo tiempo, desprecia las runenazas
de su oponente. Este método no es del
todo recomendable objetivamente, pero
desde el punto de vista psicológico hay
mucho que hablar de él. Está íntima-
mente ligado a la «suerte en ajedrez».
Sabemos de Bogoljubow, lo mismo que
Lasker, es uno de los maestros que ha te-
nido una excepcional buenll' suerte. Esta
Blancas; Bogoljubow suerte no es inmerecida, no obstante, sino
una consecuencia del método de juego.
22. AX P!, La mayoría de los jugadores en una po-
sición pobre cometen el error de atacar
El impenetrable centro en apariencia es impetuosamente a toda costa, sin reparar
abierto, y la da;na blanca, situada en el en los . requerimientos posicionales de la
punto más alejado del flanco de dnma, situación. El resultado más frecuente es
obtiene la deeisión en el lado .de rey. el de precipitar la pérdida de la partida.
Para comprender esto es necesario ima-
22. J'X A ginarse la psicología del jugador que se
23.TXP+ 1 RXT da cuenta de su ventaja. Su principal as-
24. D6A+ 1 RlC piración será asegurar lo ganado, evitar
25. TlC+, ose celadas, simplificar y, sobre todo, defen-
derse. Así es natural que los desesperados
Evidentemente, Mieses esperaba este ataques de su oponente fallen casi siem-
sacrificio -de dama y no consideró peli· pre. Al objeto de jugar correctamente en
grosa la combinación de las blancas, pues- posiciones pobres, se dP.ben conocer y sa-
to que él quedaría .con dos torres y alfil car provecho de las uebilidades psicoló-
por la dama. Sin embargo, la clave de gicas del jugador que tiene la ventaja.
la combinación yace en el centro de peo- Estas debilidades consisten en el hecho

134-
t!e que desea evitar complicaciones y com- la gran diagonal que va .de ITR blanco
" binaciones : que le gustaría ganar de la a 8TD, dándole especial importancia al
' roanera más .simple, sin emprender nin- punto donde se cruzan las dos lineas,
gún nuevo ataque y, especialmente, sin es decir, 4R blanco. Las dos partidas
hacer ningún sacrificio. tienen todavía una semeja·n za posterior,
Por consiguiente, el procedi.Jniento ·p & ya_ que lo mismo Lasker que Bogolju-
l:ológico correcto para un jugador quto bow, en sus esfuerzos para utilizar las
,Se encuentra en mala posición es como verdaderas posibilidades de la posición,
'Sigue: debe fortalecer sn posición lo más no h?.cen caso de los ataques de su ad-
. posible y extenderá sus puntos fuertes y versario, permitiéndoles la destrucción
·líneas gue esté posicionalmente obligado de la posición de su rey por A X PCR.
a establecer, de tal manera que su ad- La maestría de Lasker en el tratamien-
',xersario, que ya ha realizado un esfuer- to de posiciones inferiores es debida a
'tzo y que espera ganar sin violencia pos- su psicológica tendencia a pensar sobre
' ifrior, encuentre verdaderos obstaculos el tablero. En el caso de 'Bogoljubow es
~n su camino que no sean fácilmente evidentemente la consecuencia de su opti-
i\iencibles. En tale8 casos, el reforzamien- mismo, de su fe en su estilo.
''i? posicional' de la partida tiene mayor
,; importancia que imaginar posibles ata-
'!ques y complicadas combinaciones con-
PARTIDA NÚM. 44
t.fa · un adversario que ya tiene ventaja
; y que, como se ha hecho notar más arri-
DEFENSA SICILIANA
'•ba, sólo piensa en simplificar.
Un bonito ejemplo de esta manera de Berlín, 1926
'. salvar la situación lo tenemos en la se-
' gunda partida del match Tarrasch-Laskcr Blancas: Von Holzhausen
:(la número 28 de este libro). Allí la im- Negras: Bogoljubow
. presión que da después de la apertura
¡es · que la posición de Lasker se ha he- l. P4R, P4AD
icho insostenible, y probablemente Tar- 2. C~AR, P3R
. rasch se sentía ya seguro de ganar la
~ partida. La idea de Lasker no es, . sin Muchos analistas consideran mejor en
:embargo, de defensa de la posición de este momento 2. . . ., C3AD, en el su-
,su rey, sino la creación y ocupación de puesto de que las blancas deben obtener
,un punto fuerte de su 4R, y en . este la mejor partida sí pueden jugar P4AD,
',.punto fuerte Tarrasch se detnme, por- puesto que la presión de las negras en
'. q1te, . deseando jugar, no con el mayor la columna de AD es uno de los princi-
;vigor, sino por los medios más sencillos, pales factores de la defensa siciliana.
'hace por pura cautela, varias innecesa- Compárese con el comentario de la par-
''rias jugadas defensivas. tida .Maroczy-Euwe. Después de 2. . . . ,
. La siguiente partida se desarrolla en C3AD; 3. p,m, PXP; 4. CxP, las ne-
·esencia de la misma forma. La posición gras pueden con C3AR forzar la obstruc-
1negra parece muy débil, porque tienrn ción del PAD al jugar el blanco 5. C3A,
.un peón aislado y bloqueado en 4CD y. mientras si en lugar de 2. ... , C3AD la
·además, el flanco derecho y negro está jugada es 2. ..., P3R, como en esta par-
,expuesto al ataque. Exactamente igual tida, las blancas pueden defender su PR
que Lasker hizo en la partida.•.. antes en la s.a jugada COll A3D. Como muestra
'mencionada creando un punto eñ SR, BO:. la presente partida, ninguno de los adver-
goljubow, con la mayor consecue~cia, se sarios considera fuert~ la jugada 5. A3D.
aprovecha de las verdaderas posibilida- Bogoljubow prefiere 2. , .. , P3R, porque
des de la posición. Estas son la columna lo más importante para él es poder des-
de rey, que ha sido debilitada por la arrollar sn CD a 2D o a 3AD, según las
jugáda blanca P4AR y la debilidad de circunstancias.

- 135
3. P4D, PXP Posición después de 17. ... , CSR
4. ex P, e3AR
NegrCI$: Bogoljubow
5. e3AD, P3D
6. A2R, A2R
7. 0--0, 0-0
8. R1T, P3TD
9. P4TD, P3CD
10. P4A, Ale

Se puede observar que las blancas se


guían en su desarrollo por el famoso ejem-
plo de la partida Maroczy-Euwe, Scheven·
ingen, 1923. Pero mientras Euwe en esta
partida permitió que lo aplastasen lenta·
mente, Bogoljubow se aprovecha de la li·
gera desventaja que supone la de otra
forma magnífica jugada P4AR, es decir,
él desea ante todo explotar la debilidad
de la gran diagonal blanca que va de 1 TR
a. STD y especialmente la casilla 4R,
para obtener contrachances.
Blancas: Von Holzlwusen
11. A3A, P4D

De dos filos, pero sólido. Esto parece un error y, sin embargo,


ha sido profundamente bien meditádo. Es
12 • ... ¡ PXP compañera de la jugada ese en la se-
gunda partida del match Tarrasch-Lasker,
Después de PSR, las negras responde. mencionada más arriba.
ría con CSR. . En esta posición, diversi!S y al parecel
decisivas continuaciones, están a disposi-
12. PXP ción del primer jugador. Pero es un he-
13. D3D, C3A cho, sin embargo, que las negras tienen al-
gún contraataque ·en cualquier caso, por
14. ex e, AXC ejemplo: 18. AxC, PxA; 19. D3C:,
15. A3R, P3A; 20. ASA, AXA!; 21. TxD, TDx
T, y las negras con sus dos alfiles y su
A esta situación es a la ·que nos refe- fuerte peón pasado tienen una promete-
rimos en la introducción .d e esta partidá dora compensación por su pérdida de ma-
y en la cual todas las chances parecen terial; o 18. AxC, P X A; 19. D4A,
estar del l11do de las . blancas. Pero ahora AxC; 20. D X A; P6R!; 21. AxPR,
las negras ~lllpiezan a ol'onerse en la ·ro. DlA. Las negras han perdido un peón,
lumna de rey y en la gran diagonal evidentemente, pero han obtenido una
blanca. gran presión en. la columna de rey y en
la gran diagonal (D2CD), y, puestos en
15. TJR lo peor, difícilmente perderán el final,
16. T-DlD, A5e! a cansa de los alfiles de diferente color.

Con objeto de debilitar el punto SR con 18. AX PCR,


la amenaza del cambio en 6AD.
Esta es la tercera y más peligrosa con-
17. A4D, C5R! tinuación de que disponen las blancas,

136
que las negra.s no han pasado por alto, PARTIDA NÚM. 45
sino que han tomado en consideración,
GAMBITO DE DAMA
oomo se verá en seguida :
Berlín, 1928
18. DSTI
19. R1C? Blancas: 1 olmer
Negras: Bogoljubow
Las blancas, pensando que la victoria
estaba .ya en sus manos, descuidadamente 1. P4D, C3AR
2. P4AD, P3A
hacen la jugada que evita la pérdida de
3. C3AR, P4D
calidad de que estaban amenazadas por 4. P3R, P3R
C6C l y C7 Al Debieron entregar la cali- S. A3D,
dad y destruir con ello los Buevos puntos
fuertes adquiridos por las negras. Con dos La · idea es esperar un tiempo en el
desarrollo del CD, con objeto de llevarlo
peones y una buena posición por la cali- a 2D o a 3AD, según las circunstancias.
dad habría tenido posibilidades de ganar Como se verá en seguida, esta precaución
la partida; por ejemplo: 19. C X P, previene la · variante Merano. Las negras
C6C+; 20. RlC, CxT; 21. TxC, podrían realizar una formación Stonewall
con CSR, en. la ·cual el mejor sitio para
A4A+, etc.
el A blanco es 2R.
19. P3A! s. CD2D
6. 0-0, A1R
Con esta jugada las negras ganan · una
pieza y la partida. La única posibilidad de ataque de las
blancas reside en el C de 3AD en combi-
nación con P4R. Anticipándose a esto,
20. . P3CR, Bogoljubow coloca su A en 2R y no en
el aparentemente más agresivo 3D.
Si en eete momento o después juegan
las blancas A X C, para continuar después 7. C3A, O-O
de P X A con D4A ! , las negras hacen fra- 8. P4R, Px PR
9. ex P, P3CD
casar este plan interponiendo la jugada
10. D2R, A2C
A-1A+. 11. T1D,
20. D6T Se podía esperar el desarrollo del AD.
21. ex e, PXC Al mismo tiempo, como hay un gran nú-
22. D4A+, RXA mero de casillas para él, no es tan fácil
23. Dx A6A, A4A+ elegir. Más de acuerdo con la posición
parece ser P3CD y A2C. Como más pron-
24. R1T, PXA to o más tarde las negras tendrán que
25. D X P3A, T6R hacer la jugada liberadora P4A, el A ten-
dría así una bonita diagonal de ataque.
Una fuerte terminación. Las blancas no Como Johner no podía formar su idea · y
pueden tomar la torre de 8TD, porque se- deseaba todavía reservarse todas las posi-
rían mate con T7R. bilidades, eligió la jugada del éxito, que
·no es completamente mala, sino incolora
y, en sencia, provisional.
26. D7C +, R3T Tales jugadas revelan la diferencia en-
27. Abandonan. tre Bogoljubow y la mayoría de sus opo-

137
nentes. Bogoljubow tiene siempre absolu- 16. TD1D
ta confianza en la corrección de sus pla- 17. AlA, TXT+
nes, b.o teniendo por ello vacilaciones ni
pérdidas de tiempo al realizarlos. Aquí
18. TXT, T1D
también, a pesar de ser el segundo juga- 19. TXT+, DXT
~or, gradualmente toma la iniciativa. 20. D3D, D4TI

11 •... , D2A En vista de la amenaza ASR y de la


12. Ase, TR1R falta de protección del PTD, las blancas
13. ex e+, deciden ahora .dejar la posesión de los dos
alfiles a· las negras mediante el cambio
Las blancas tratan de llevar su e a SR. en 6AR. Aparentemente Johner piensa
Habría sido mejor renunciar ya a toda que las negras no podrán hacer <"lectiva
idea de ataque y hacer todos los prepara- esta ventaja, debido a la fuerte posición
tivos posibles para cambiar y simplificar de su e en SR. Pero como Bogoljubow
después de P4A de las negras, que era encuentra la manera de demostrar la su-
~e esperar. perioridad de sus alfiles, 21. -D1D habría
sido preferible, ya que las negras no ha-
13 . .. . , ex e brían podido tomar el PTD; por ejem-
14. esR, P4A!
plo: 21. ... , P3TR!; 22. A4T, DxP? ;
23. A X e, P X A (si A X A, entonces 24.
Las blancas deseaban evitar esta juga-
D7D); 24. D3D !, P4A; 25. D7D, etc.
-da colocando su e en · SR. Las negras no
-deben replicar a 1S. PXP con DXP,
porque las blancas pueden sacrificar su A 21. A X e, D8R+
en 7T después de cambiar en 6AR. 22. OlA, DXD+
23. RX D, AXA
15. PX P, PXP!
24. P3CR, P3TR
Superficialmente podría parecer que las
negras están en inferioridad a causa de Aunque más tarde la fuerza de los dos
1Jlle su peón no está completamente segu- alfiles se hace sentir mucho, no se debie-
ro, y por otra parte, la mayoría de peo- ra considerar este final como ejemplo t í-
nes blancos en el flanco de la dama es de pico de la superioridad del par de alfiles.
menos valor, porque el PCD nunca. podrá En tal caso las negras deben aspirar, so-
pasar de 4C. Así resulta evidente que Bo- bre todo, a restringir el juego del e con
goljubow tiene un peón de ventaja en P3A, y las blancas, en su jugada 23, han
-el centro, la movilización del cual es el debido tomar con peón en lugar de A X A.
difícil problema de la con~inuación de la Ahora, como antes, la ventaja principal de
partida. las negras consiste en su peón de ventaj a
en el centro, que. el PCD no compensa,
16. P4A, puesto que no puede avanzar.
Las blancas están empeñadas en refor- 25. R2R, P4C
·zar su control del punto SR, con objeto 26. R3R, PXP+
de hacer posible a las negras la utiliza-
27. PX P, A2C
ción de ·su peón de más en el centro.
Hay que· hacer notar que el sacrificio de A 28. P3C,
en 7T no tendría éxito. Aunque las blan-
•'as podían obtener tablas con 16. A X P !, Al parecer la buena jugada 28. A4R
RXA; 17. T7D, exT; 18. D5T+, las habría conducido a un final de peones
negras tienen su mejor línea de juego en ¡ranado por las negras después de AXA ;
16 .... , exA; 17. T7D, DXT; 18. exD, 29. RxA, P4A+ con AxC. El peón
e X A, y conservan más de)o equivalente de ventaja de las negras en el centro se
a una dama. convertirá en un peón pasado y protegido.

138-
Posición después de 27 . ... , A2C 30. • • •1 A3AR
31. A2A, R2C
N epas: Bogoljubow 32. A 3D, AlD
33. AlA, AlA
34. A3D, A 3D
35. AlA, R3A
36. C3A,
La jugada 36. C3D no evita la ruptura
con P4R, puesto que las negras tienen
a su disposición ASR.
36. P4R
37. P X P+, AXP
38. A3D,

Las blancas entregan su PTR esperan-


do obtener unas tablas en vista de los
alfiles de color contrario. La partida es-
taba perdida en cualquier forma, ya que
las blancas juegan con un peón de me-
nos, y además, tienen peor posición. Des-
pués de 38. P3T, la continuación inme-
diata sería A7C; 39. P4TD, ABA+; y
Blanccu;: ]ohner PSA o ASR.

28 .... , P4Af 38. AXC


39. RXA, AXP
40. A2R, R4R
El principio de ia maniobra decisiva. 41. R3R, A5A+
El A irá a 3D y el rey a 3AR, después 42. R3A,
<!e lo cual ·el C ha de abandonar. SR, y
así habrá llegado el momento en que las
Después de 42. R3D, las negraa conti-
negras puedan demostrar su superioridad
nuarían con ABA y RSA .
en el centro con P4R. Entretanto, el P
de 4AR ofrece en numerosas variantes 42..... , ASA
bnena protección para el AD en SR. 43. P4T, R5D
44. AlD, R6D
29. P3TD, P4TD 45. A2R+,
30. A3D,
El PC no se puede salvar.
Las blanr.as solamente pueden esperar. 45. A2R+,
Después de AlD, ASR ahogaría por com- 45 . . . . , R7A
pleto la partida blanca. 46. Abandonan.

- 139
AARON NIMZOWITCH

Aaron l';"imzowitch nació en 1887 en Que la opmwn de los aficionados está-


Riga. Sus más importantes victorias fue- influenciada exclusivamente por los últi-
ron: segundo y tercer premios, comparti- mos ·resultados, se puede ver en los jui-
dos con Spielmann, en San Sebastián, cios que han pesado sobre Nimzowitch.
1912; primero y segundo premios, com- Cuando durante varios años no obtuvo éxi-
partidos con Ruhinstein, en ;o.1arienbad, tos, su juego se consideró banoco, afecta-
1925; primer premio en Dresden, 1926; do - juicio que todos los innovadores, in-
primeros premios, compcrtidos con Tarta- cluido Steinitz, han tenido que sufrir-;
kower, en Niendorf y Londres, 1927; pri- pero desde que obtuvo éxitos fue consi-
mer premio· en Berlín, 1928; primer pre- derado como un gran estratega por
mio en el fuertemente disputado torneo muchos.
de Carlsbad, 1929. Inició sus investigaciones en el camp<''·
Mientras Spielman hn5cÓ en el retorno de la estrategia impugnando y corrigien-
al viejo estilo de gambito una salida a la do muchas de las teorías de Tarrasch que
decadencia que el juego había sufrido des- se había generalizado demasiado dogmá-
pués de Steinitz, Nimzowitsch se esforzó ticamente, Por ejemplo, Tarrasch sobre-
por lograr un mayor refinamiento en la estimaba el valor de los peones del
aplicación práctica de los principios de centro en la apertura de la partida. Nim-
Steinitz. Spielmann, jugador combinador y zowitsch demostró que la dominación del
de ataque, fue un consciente enemigo de centro -que es la verdadera aspiración
los stcinitztas, que trataban de ganar por de la apertura- es posible aun sin peo-
pura estrategia ; para Nimzowitch, la nes, por la simple utilización de piezas,.
combinación era el medio ne"cesario para ya que los peones se pueden convertir en
demostrar la superioridad estratégica de dañinas obstrucciones. También sobreesti-
una posición. En esto fue el más desta- maba Tarrasch la desventaja de la posi-
cado maestro .de un grupo que, en la ter- ción restringida. En esto, asimismo, Nim-
minología de Tartakower, se ha llamado zowitch redujo la aseveración de Tar-
con frecuencia «hipermoderno,, ·Pero es rasch a sus justas proporciones.· En las
incorrecto hablar de una escuela hiper- posiciones cerradas, el punto esencial a
moderna. En lo único que coinciden es considerar es la posibilidad de ruptura. Co-
en que todos ellos son «pioneers» que mo regla general, esta posibilidad será tan-
tratan de desarrollar aún más las leyes de to mayor cuanto sea el espacio dominado;
la estretegi.a ajedrecística, que fueron fun- pero no es igual . si consideramos la posi-
dadas por Steinitz, y así hacen delibera- ción en conjunto. En este caso el mayor
damente jugadas flojas desde el punto de control de espacio no es · provech090 y
vista de las viejas reglas. Sin embargo, hasta es posible tener mejor partida in-
dentro de esta coincidencia, los llamados cluso con espacio restringido.· Ejemplos
hipermodernos tratan de encontrar las estratégicos de , esta clase se pueden ha-
más variádas· sendas, pero las conclusio- llar retrocediendo hasta las partidas de
nes finales · están reservadas todavía al Steinitz, pero estos ejemplos han sido ol-
futur~; vidados o incluidos entre lo~ supueytos

140-
~lementos hnrrO<·os de la estrategia de ..\3D. Entonces el peón negro de .30 obs-
Steinitz, mientras que los de Nimzowitch truye el de lO. Las blancas protegían su
forman pnrtc del arsenal de la ciencia peón de 5R con piezas para evitar que la§
.ajedrecístÍ<'a. negras se liberasen .con P3A y provocar
un cambio de peones. Las negras obtie·
nen en e:: ta variante un peón más, que
PARTIDA NÚM. 46. solamente actúa como obstrucción de su
propio desarrollo y que no pueden hacer
DEFENSA FRANCESA valer mientras las blancas mantengan su
bloqueo. Los datos que determinan el va·
Carlsbad, 1911 lor de esta variante no han sido comple-
tados, pero es evidente que las negras co-
Blancas: Nimzowitch meterían un error si tratan de proteger
Negras: Salwc su peón de ventaja. Esto es, si las negras
toman med.idas protectoras tales cmno
1. P4R,. P3R A~AD o D3C, el peón de 4D se converti-
2. P4D, P4D rá en una obstrucdón de las piezas pro-
3. P5R, tectoras, que es exactamente lo que las
blancas buscan.
La llamada variante Paulsen de la de-
fensa francesa, que Nimzowitch revivió y 4. C3AD
¿¡o nueva idea. Las negras están eviden· 5. C3A, D3C
temente restringidas por la situación de 6. A3D, A2D
sus peones de 4D y 3R. Paulsen intentó
hacer pPnnanente esta situación restringi· 'laturalmente, las negras no podían to-
da protegiendo y manteniendo su cadena rnar el peón de 5D inmediatamente, pero
de peones de 4D y SR, intento que fra- ahora sí amenazan tomarlo. Sin embar-
t'asó debido a las ju¡radas negras P4AD y go, las blancas tienen ahora una oportu-
P3AR, y . romo resultado de ello, la va- nidad favorable para cambiar un peón
riante Paulsen no se utilizó durante años. central por un PA enemigo, de acuerdo
Nimzowitch reconoce que lo que el blan· con el plan, ya que con un rápido P4CD
co realmente necesita es bloquear los peo- pueden controlar el punto 4D con piezas.
nes negros de 3R y 4D. pero sin impor· Por ello habría sido mejor 6• . .. , P X P:
tarle si lo hace con peones o con piezas. 7. PxP. A2D.
Como veremos en la presente partida,
no se trata aquí de hacer un intento 7. PX P, AXP
desesperado de man·rener intacta la cade- 8. 0-0, P3A
na de peones 4D y SB, sino de más bien
permitir el cambio de estos 4D y SR pue- Quizá P~TD, para prevenir P4CD, ha·
den ser suficientemente cubiertos por las bría sido posicionalmPnte más sólido: pe-
piezas blancas. Estos se convierten en pun· ro esto habría debilitado el punto sen. lo
tos fuertes o, desde el punto de vista de que habrían podido demostrar las blan-
las negras, en puntos débiles, en el sen· las con P3CD y C3T.
tido de la teoría de Steinitz. Por otra
parte, Steini tz veía la defensa francesa 9. P4eD, A2R
desde este mismo ·punto de vista. 10. A4AR, PXP
11. e X P, ex e
3... ., P4AD 12. AX e,
4. P3AD,
Nimzowitch ha descubierto su plan. La
En partidas anteriores Nimzowitch so- cadena de peones blancos en el centro
lía continuar con 4. A4AR, permitiendo ha desaparecido. pero los puntos 4D · y
así P X P y, naturalmente. él no tomaba SR están bajo su control, de tal manera
este peón, sino que lo bloqueaba con que . .los peones negros de 3R y 40 per·

141
manecen bloqueados, a pesar de la ausen· Posición deJpués de 23 . .. .. RIT
cia de la obstrucción natural por los peo-
nes . blancos. En las jugad¡¡s siguientes Negras: Salwe
Nimzowilch desarrolla sus piezas para
cubrir los puntos estratégicos 4D y SR
de los cuales este último es evidentemen·
te el más. importante porque es el que
penetra más profundamente en la posi·
ción negra.

12. C3A
13. C2D, 0-0
14. C3A, A 3D
15. D2R, TD1A
16. A4D, D2A
17. C5R, AIR
18. TD1R, AXC

El cambio del alfil más móvil debilita


todavía más la posición negra. Sin em-
bargo es natural, psicológicamente, que
las negras, en su restringida posición, de-
seen cambiar.
Blancas: N imzowitch
19. AX A, D3A
20. A4D, AlD
21. D2A, T2AR 31. P3TD, R1A
22. T3R, P3CD 32. A4T,
23. T3C ···'
Amenazando ganar otro peón con A3C.
La restringida posición central negra
y su incapacidad para coordinar sus es- 32 ... . , A1R
parcidas fuerzas, invitan al ataque. Esto 33. ASA, D5D
ahora conduce a una inmediata ventaja. 34. Dx D, PXD
35. TXT, RXT
23 •... , R1T 36. A3D, R3D
37. AxC, PXA
Solamente la jugada P3C, que habría 38. RlA, A3A
sido mny débil, podía evitar pérdidas ma-
39. ~4TR, Abandonan
teriales.

24. AX PTr,
LA VARIANTE HANHAM
Esto decide la partida, ya que des-
pués de C X A; 25. D6C gana rápida-
mente. Como hemos visto, la principal desven-
taja de la defensa Steinitz del Rny Ló-
24•.. . , P4R pez, yace en el hecho de que tarde o
25. A6C, T2R temprano el negro estará obligado a cam-
26. TIR, D3D biar su PR -lo que Tarrasch ha desig-
27. A3R, P5D nado como «abandono del centro:.-, y las
28. A5C, TXP blancas obtienen con ello una partida li·
29. TXT, PXT bre. Del jugador americano Hanham pro-
30. DX P, R1C duce un sistema defensivo que trata de

142
:llevar a efecto esta disposición de peones centro. Sin embargo, la desventaja de la
·de la defensa Steinitz, en 4R y 3D y \'ariante Hanham comparada con la vieja
'mantenerla. En otras palabras, las negras disposición de Steinitz, es que el alfil de
pueden suministrar el suficiente apoyo al rey queda cerrado dentro de la cadena
· P de 4R para escapar de la necesidad de de sus propios peones. Como consecuen-
Jambiarlo, evitando nsí el «abandono del cia tenemos que las posibilidades de ata-
centro». que sobre un ala, que es la única com-
pensación por una posición cerrada en el
1. P4R, P4R centro, es mucho menor, y si es vigoro-
2. C3AR, samente contenido por las blancas, no tie-
ne posibilidades de éxito. .
Las negras protegen su P de 4R, nó El \'erdadero tratamiento de la variante
con 2 .... , C3AD, porque es exactamente Hanham por las blancas, consiste, no en
la jugada que permite 3. ASC del ataque una· fuerte y agresiva acción en el·· -cen-
Ruy López, contra el cual el centro no tro, sino más bien pro\'iniendo todas las
puede ser sostenido sólidamente, sino vol- posibilidades de desarrollo por cualquiera
viendo a la vieja defensa Philidor. de los dos Ilancos. La consecuencia será
que las negras tendrán una partida res-
2. ___ , P3D tringida y que, para no quedarse com-
3. P4D, pletamente ahogadas y conservar para sus
piezas el punto 4R, v.o luntariamente ten-
Ahora la protección 3.. .. , C3AD; per- drán que abandonar el centro cambiando
mitiría también la clavazón 4. ASCD. Por su PR, que, dentro de las ·circunstancias
ello, las negras sostienen el centro con desfavorables de lli partida, es lo mejor
que pueden hacer.
3•.. ., C2D Nimzowitch, que por algún tiempo
jugó la variante Hanham con especial
Esta jugada caracteriza la defensa de predilección, introdujo una mejora tácti-
Hanham. Seguramente, tiene la ventaja ca, replicando primero a 3. P4D con el
sobre la defensa Steinitz de la partida es- contraataque 3. . .. , C3AR, y solamente
pañola, que el centro puede ser mante- después de 4, C3AD, yendo a la protec-
~ido, pero, por otra parte, la posición del ción característica de la defensa con 4.
e en 2D hace más difícil el desarrollo, . . . , CD2D. Esta variante, aunque útil
por lo cual las negras han de jugar con mientras el segundo jugador evite ciertas
el mayor cuidado. Después de 4. A4AD, trampas de la apertura, no cambia en
las negras deben decidirse por 4. . .. , nada el aspecto esencial de la posición.
P3AD, porque 4 . ... , CR3A es de dudoso
valor a causa de S. ese. Por otra parte,
4 .. _., A2R es un gran error, a causa de PARTIDA NÚM. 47.
S. PXP, PxP; 6. DSD, o S.... , CXP;
DEFENSA PHILIDOR
6. C X e, P x C; 7. DST. De todas mane-
ras, se pueden evitar tales dificultades (Variante Hanham)
jugando cuidadosamente, y no hay nada
San Sebastián, 1911
que pueda justificar la condenación de la
variante Hanham. Pero hay una buena Blancas: Teichmann
razón, que se encontrará, si examinan Negras: Nimzowitsch
más detenidamente las características po-
sicionales de la situación. El centro negro 1. P4R, P4R
es sólido, pero restringido. La disposición 2. C3AR, P3D
es similar a la formación blanca de ata- 3. P4D, C3AR
que creada por Steinitz en el Ruy López, 4. C3A,
en la cual él coloca los peones en 4R, 3D
y 3AD, con objeto de iniciar un ataque No existe ventaja para las blancas en
de flanco basado en la seguridad de su 4. PXP, exP; S. A4AD, P3AD.

143
4 •... , CD2D TlTR. En lugar de esto. debían pensar
5. A4AD, A2R en consolidar su ya más bien pobre posi-
6. 0-0, ción, lo cual sería posible con CICD y
P3A.
Aquí hay una posibilidad de combina·
ción de ataque directo, que naturalmente 16.... , TRIR
sería prematuro y, por ello, no tendría 17. P5D, PSC
e(ectividad, por ejemplo: 6. AXP+, 18. PX P, AXP
RXA~ 7. CSC+, R1C; 8. C6R, DlR; 9. 19. C1C, C4A
CXPA, D3C: 10. CxT, DXP; 11. TIA, 20. CD2D, DIA
P X P! (una jugada pobre sería CSC a 11. A4A, P3C
causa de D3D!) seguido de C3R; o 6.
ese. O-O; 7. AxP+, TxA; 8. C6R. Esto prepara el ataque sobre el lado
DlRt,9. CxPA, DlD!; 10. CxT, P3CD de rey. Naturalmente, D X P sepa 1lll
y las· blancas tendrían un final con torre error a causa de 22. A X P+.
y tres peones por dos piezas menores,
pero con una situación desfavorable de- 22. P3CR, R2C
bido a su más pobre desarrollo. 23. C2T, A4CR
14. P3AR,
6. 0-0
7. D2R, P3A Después de 24. P4A, P X P; 25. P X P,
8. A5CR, AJA, donde los peones blancos queda.
r1an atacados.
Esto es un error que da a las negras
una magnífica partida. En lugar de esto, 24• ... , D1A
las blancas no debieron dar oportunidad 25; TR1R,
de expansión a las negras en el flanco
de dama, Como se ha explicado más arri-
ba. A este propósito, la jugada correcta Existía la amenaza de 25 .... , CST; 26.
es 8. P4TD. TIC, AxC; 27. DxA, AXP, la cual es
detenida después de la jugada hecha, por-
8. P3TR que el alfil queda protegido después de
9. A4T, C4T 28. TXA •.
10. A3CR, CXA
11. PTX C, P4CD 25 .... , T1T
12. A3D, P3T 26. CD1A;· P4T
27.PXP, TXP
Al objeto de un eventual P4AD. Evi- ·18. A5D, TD1T
dentemente, las negras han alcanzado ya 29. AxA, DXA
una posición de ataque en el flanco de 30. D4A, D3C
dama. 31. R1C, C3R
13. P4T, A1C Las negras amenazan ahora terminar la
14. TD1 D, D1A partida en forma brillante, como signe:
32 .... , TxC+; 33. CXT, TxC+; 34.
Con P x PD: 1S. C X P, P4AD, las ne- R x T, D7 A+ ; 3S. R3T, ASA; 36. TICR,
gras no ganarían una pieza, porque el C4C+, etc.
blanco replicaría con 16. CSA, PSA; 17.
D4C. 32. T2R, C5D
15. PX PC, PTXP 33. T2R1R,
16. P4CR,
Después de 33. T2A, seguiría A6R!
Las blancas parecen estar soñando con
un ataque por medio de P3CR, R2C j 33 ...., D2C

144-
Pos.ición de5pués de 31 • .. ., C3R. witsch no se contenta con atacar en un
solo lado, sino combina el ataque sobre
Negras: Nimzowitch las dos alas de forma admirable.

DEFENSA INDIA

Las mismas consideraciones · que hacen


dudosa la réplica l. ... , P4R a l. P4R,
también son aplicables a la réplica l. ... ,
f.'4D a l. P4D. Con 1, •.•, P4D, el peón
bianco de 4D; lo 'mismo que el PD ne-
gro, quedan fijados. Por consigJJiente, am-
bos peones pueden convertirse en puntos
de ataque para él bando opuesto, ya sea
por ataque directo o por columna abier-
ta. Mas, cuando se realizan ataques y con-
traataques tempranos, cuando la partida
se abre rápidamente, la ventaja de salida
es más evidente. La práctica confirma esta
teoría. Las blancas pueden jugar inme-
diatamente 2. P4AD para abrir la partida,
mientras que las negras, solamente con
Blancas: Teichmann muchas precauciones y grandes dificulta-
des, pueden llegar a jugar P4AD, lo cual
les es absolutamente necesario en muchas
Ahora las blancas no tendrán una bue- ocasiones para igualar la partida.
na defensa contra 34. .. ., TIAD, porque Ahora se trata de buscar un punto de
34. P3A, sería refutado con P X P; 35. apoyo en el centro replicando a l. P4D,
P X P, D7C +. Por esto deciden sacrificar no con P4D, sino después de ciertas pr~
la calidad, pero la partida está perdida. paraciones, con P4R, análogamente a la
defensa francesa y a la Caro-Kann, en las
34. TX C, PXT cuales la réplica á l. P4R no es P4R, sino
35. C4C, D3C jugar de tal manera que se haga posi·
36. P4A, AlR ble la jugada P4D. Esta defensa fue pues-
37. TlD, P4A ta en práctica por Tschigorin. Primero,
38. C2A, PXP después de l. P4D, las negras juegan l.
39. Dx P+, DXD ... , C3AR, para prevenir o estorbar P4R,
40. TX D, P4D y entonces jugar P3D y CD2D, después
41. P4C, A4A de lo .cual las blancas no pueden evitar
42. TlD, T5T por más tiempo la jugada negra P4R.
43. TX P, AXC Exactamente igual que en la variante
44. RX A, TXP Hanham, el centro es inestable. Si en la
45. R3R, TlAD continuación las blancas se ven obligadas
46. RX P, T5A+ a jugar P X P, la partida, evidentemente,
47. R3D, T5AX PAR se iguala. Si por el contrario las negras
se ven forzadas a cambiar P X P, las blan-
y las negras ganan. Es instructivo ver cas tienen más libertad en el centro. Las
cómo las negras realizan la idea estratégi- blancas tienen, además, la posibilidad, . si
ca de la variante Hanhani en esta partida. la necesitan. de convertir esta posición
Es la misma idea estratégica de la · forma- inestable en una cerrada por P5D, con la
ción de ataqQe de Steinitz en el Ruy Ló,. ve~taja de controlar más espacio. El pe¿n
pez, es decir, un centro firme que hace blanco de 4D está mejor protegido que el
posible un ataque de flanco. · Aquí Nimzo- negro de 4R, y así vemos que esta falta

- 145
de estabilidad favorece a las blancas, ra- esté justificado por la obtención de unlt
zón por la cual no se considera buena la ventaja. Después de l. P4D, las negras
defensa Tschigorin y se juega muy poco no tienen ninguna justificación para ha.
actualmente. Por las mismas razones, la cerio.
defensa l. .. . , C3AR, fue considerada an· De esto deducimos que las negras en la
tiguamente irregular. Se ha trazado un defensa india harán todas aquellas juga·
sistema de defensa, el cual difiere por das que supongan presión sobre SR y 4D
completo del de Tschigorin y que es aho- y así no solamente l. ... , C3Alt y A2CD,
ra generalmente llamado defensa india, .se, sino también especialmente después de lac
gún inspiración de Tartakower. jugada blanca C3AD, la limit~dora ASCD.
Los tempranos días de la apertura in- La diferencia esencial entre la defensa
dia (1920·1924) no ofrecían un sistema, india y l. .. ., P4D yace "en la elB!ticidad
sino una gran falta de sistema y, como de la posición de los peones negros. Si,
consecuencia, una gran diversidad de ju· por ejemplo, las blancas inmediatamente
gadas. Jugaban l . ... , C3AR para mante- hacen esfuerzos para crearse nuevos pun-
ner retrasado todo lo posible el centro, tos fuertes en sus casillas blancas y fuer.
así como para guiarse por la disposición zan P4R, entonces las negras no están
de las fuerzas blancas y hacer difícil la obligadas a persistir en su plan, sino que
formación del centro desarrollando los al- deben adaptarse a la nueva situación y
files en a:fianchetto». Para poner un poco ahora, a su vez, concentrarse en 18.!1 casi.
de orden dentro de esta multiplicidad de llas negras para jugar P3D y P4R. En
jugadas, Kmoch sugirió la siguiente no- esto tienen una ventaja sobre la antigua
menclatura: india antigua, si los alfi1es defensa Tschigorin, principalmente que su
no se desarrollan por los flancos ; india AR está ya .en SCD y .se puede cambiar
de dama o india de rey, si se desarrolla· por el e de 3AD, y así DO queda ence·
han el AR o el AR ; y doble india, si se rrado dentro de la cadena de sus propios
desarrollaban los ·dos. peones.
Creemos que la superfluidad de estas La extensión de este sistema de defensa
designaciones aparecerá pronto. La defensa india se debe principalmente a Nimzo-
india antigua -defensa Tsehigorin men~ witch.
cionada más arriba- es mala y no ee ha
vuelto a jugar, y lo mismo se puede decir PARTIDA NÚM. 48.
del desarrollo en uñanchetto» del AR.
(Aquí no hablamos de variantes -la ma- DEFENSA NIMZO.JNDIA
yoría de las cuales son refutadas con tan·
ta frecuencia-, sino de consideraciones Dresdeu, 1926
generales. ) Con el desarrollo en a:fian-
chetto» del AR negro en 2C, hay que Blancas: Johner
suponer el ataque directo contra el punto Negras: Nimzowitch
fuerte de las blancas ; pero cuando las ne-
gras juegan a la defensiva, no está jus- 1. P4D, C3AR
tificado este ataque directo. Es imposible 2. P4AD, P3R
que tal ataque pueda triunfar. Con A2CD, 3. C3AD,
por qtra parte, las negras continuarían el
ataque ya iniciado con C3AR, contra las. Para evitar la clavada que sigue, ac-
casillas blancas centrales 4R y SD, las tualmente se suele jugar 3. C3AR.
cuales se han debilitado con la primera
jugada blarica l. P4D. La contrajngada · 3. A5C
que las negras tienen que buscar es esta· 4. P3R
blecer un baluarte frente al twnto fuerte,
·tratando así de obtener una posición don· Una modesta jugada mediante la cual
de las fuerzas se equilibren. encierran su AD y, evidentemente, no
Además, solamente se debe ataear el tratan de obtener ventaja de la apertura.
punto fuerte enemigo cuando el ataque .En vista de esta situación, las negras tam·

146-
bién juegan simplemente y no necesitan Con esta original maniobra de bloqueo
desarrollar su AD a 2C. P4TR y D-4A-2T ), las negras previenen
cualquier intento de ataque blanco por
4 .... , 0-0 medio de P4CR. Además, el flanco de rey
5. A3D, P4A de las blancas que de esta forma ha sido
inmovilizado, pronto ofrecerá puntos de
Esta jugada, atacando el PD blanco, es a taque a las negra·s.
el método típico de prevenir la forma-
ción central de peones blancos con P~R. 13. P3TR, C2R
14. DIR, ...
6. C3A, C3A
7. 0-0, AXC Aquí las blancas podían todavía me-
8. PXA, jorar su partida si hubiesen tratado de
reforzar su débil situación jugando su AD
Naturalmente, las blancas tienen ahora a 2D-1R-4T.
el par de alfiles, pero son ineficaces, por-
que el AD tiene solamente un poder li- 14. •.. , . P4TR
mitado debido a la forma en que están 15. A2D, D4A
emplazados los peones. Por otra parte, el 16. R2"t, D2T
hecho de que los peones . doblados de 3A
y 4A estén bloqueados· por el P de 4A Nimzowitch ha completado su mani-
negro, es una evidente desventaja para las obra y el lado del rey que parecía ase-
blancas. que le causarán mucha pertur- gurado, está ahora condenado a un papel
bación en el curso de la partida. pasivo y seriamente amenazad_o.

8 .... , P3D t7. P4TD, C4A


9. C2D,
Amenazando CSC+.
Una .buena jugada que, por una parte, 18. P3C, P4T
protege 4A, permitiendo la eventual ré-
plica C3C a la jugada de ataque C4TD, De esta forma el flanco de dama tam-
y por otra, hace posible P4AR. Esto es bién está bloqueado.
muy importante, porque las negras tienen
que jugar P4R al objeto de liberar su AD. t9. TtCR, C3T
20. AtAR, A2D
9 •...., P3CD 21. AtA, TDtR
tO. C3C1,
Con esta jugada las negras tratan de
Aquí se debió jugar 10. P4A inmedia- forzar PSD de las blancas de tal manera,
tamente, lo cual habría dado a las blan- que despttés de esta inmovilización pue-
cas una partida igualada. dan traer del lado de dama todas sna fuer-
zas para atacar en el de rey.
tO.... , P4R
11. P4A, 22, P5D,

Ahora esta jugada no tardará mucho en Las blancas podían haber esperado to-
conducir a la apertura de la columna de davía, pero las negras las habrían obliga-
alfil. Una jugada más pobre habría sido do con A3R. Ahora las negras inician su
11. PSD, a causa de la réplica PSR y ataque contra el lado de rey.
C4R.
22 .... , RtT
11 .... , P5R 23. C2D, TlCR
12. A2R, D2DI 24. A2CR, P4CR

-147
25. CIA, T2C mate ron 06T. mas qur entregando ;u
26. T2T, C4A dama.
27. AlT, TDICR 31. .. , C5T
28. DIO, PXP -ll. T3R,
Abriendo la partida, lo que requiere Si las blancas con 32. C2D hubiesen
.muchos cuidados porque el PR negro es intentado capturar. el P de SR, habría
ahora débil. Nimzowitch juega esta par· seguido esta bonita terminación: 32. C2D,
·le de la partida con gran abundancia de AlA: 33. CxP. D4A; 34 . C2A. DxP+;
ideas. 35."''C X D, CSC mate.

29. PR X P, AlA 32 . . . ' AlA


33. D2A, AXP
El ataque contra el peón débil de 4AD 34. A X P,
es un medio de alejar fuerzas blancas de Después de 34. R X A, la partida se de-
la defensa del flanco de rey. cide corf D4A +. La posición defensiva· de
las blancas ha sido invadida, y pronto se-
30. D3C, A3T rá completamente insostenible como resuJ.
lado del vigoroso juego de las negras. la
Posición después de 31. T2R. ronclusión es fácil de entender.
Negras: Nimzowitch
34•... , A4A
35. AX A, CXA
36. T2R, P5T
37. TIC2C, PXP+
38. R1C, .D6T
39. C3R, CST
40. RIA, TlR!
41. Abandonan.

PARTIDA NÚM. 49.


DEFENSA NIMZOWITCH
Niendorf; 1927
Blancas: Brinckmann
Negras: Nimzowitch
l. P4R, C3AD
Esta defensa, frecuentemente usada por
Blancru: }ohner Nirnzowitch. trata de presi!mar sobre la
casilla 4D de las blancas, la cual se ha
debil,tado con la jugada l. P4R, y así
31. T2R, preparar, a su vez, P4D. En caso de 2,
P4D, por ejemplo, seguiría 2. ., P4D,
Johner juega para el ataque. Para el para continuar el ataque contr·a el centro
caso del plausible intento de proteger to- blanco pronto con P3A. Nimzowltrh ha
davía más el punto 3CR con A21).1R, rl'comendado siempre un inmedi1.110 3.
Nimzowitch tenía preparada la siguiente P3A, considerando la continuación del ata·
combinación: 31. A2D, T3C; 32. AIR, que blanco por 4. A3D complelamenll'
CSC+; 33. PxC, PxP+; 34. R2C, ineficaz.
A X P! ; 35. D X A, P6R ! y las blancas . Las opiniones difieren respecto a )a me·
únicamente pueden evitar la amenaza de jor manera de combatir la dPfPnsa Nim-

148-
zowttch. la:~k.er recomienda 2. P4D. tes; sin embargo, es magn.üica y trata df>
P40; 3. C3AD. P x P: 4. ASCO. Nos dominar las casillas blancas. En primer [u.
parece que 2. C3AR es la más lógica ju- gar se amenaza P:iT en combinación con
gada. puesto que reduce la efectividad del la inexpugnable posición del C en 4AR.
cabaUo negro de 3AD y opone uua for· Más adelante veremos que, posicionalmen-
111ación 1·errada defensiva a las negras. te, el factor má; importante en esta partí-
da es la dominación por ias negras de
2. C3AI>, las casilla,; blancas, lo cual ha sido po-
sible solamente por el cambio del AR
En sentido absoluto, esta jugada dificil- blanco.
mente es fuerte, porque las negras con
P4R alcanzan la inofensiva Partida Vie- 9. A5C, D1A
nesa. Sin embargo, esta jugada tiene una 10. D3D,
ventaja sobre un inmediato 2. P4D, ya
que la~ negras están deseando jugar P4D, Las blancas quieren evit a r D3T. Posi-
lienrn que hacer primero la jugada pre- cionalmente, habría sido más correcto
paratoria 2 ..... P3R, que impide el des· mantener el C en 3C por P4TR.
arrollo del AD a 4A.
10 .... , C3C
2. ., P3R 11. P3A,
3. P4D, P4D
4. P5R, Aun las blancas podían jugar P4TR.
pero entonces su oponente tomaría la ini-
Esta jugada se puede hacer aquí con ciatÍ\'a en el flanc<! de dama ganando un
menos vacilación que en las variantes aná- tiempo con CSC y P4AD.
li>gas de la defensa francesa, porque las
;n egras no pueden minar el centro con 11. P5T
P4AO tan fácilmente, a causa de la obs- 12. C2R, A2R
trucción que les hace su C de 3AD. Pero 13. P3TR, AXA
la cuestión es si las negras en el final no 14. CxA, CDlR
pueden romper el c•mtro blanco con ven-
taja. Posición después de 14 . ... , CD2R.

4. CRlR Negras: Nimzowitch


5. C3A, P3CD
6. C2R,

Las blancas desean tener la posibilidad


de poder consolidar su centro con P3A,
p~ro permiten a su oponente hacer la si-
guiente jugada, que conduce eventualmen-
te al cambio del inactivo AD por el AR
blanco. lo cuar tiene mpcha importancia.

6. A3T!
7. C3C, AXÁ
8. RX A,

Las blancas tratan de atacar y por ello


no quiere retroceder con su caballo.

8 .... , P4TR!!

Maniobras como esta son sorprenden- Blanca5: Brinckmann

- 149
Se puede sacar mucho provecho del mente aplastado por la falta de una con.
·estudio de esta posición. Las blancas con- traofensiva.
trolan más espacio y así se podría pen-
18 .... , D2A
sar que tienen la ventaja. Pero éste no 19. PX PD, PSA
es el caso. El verdadero criterio por el
20. D2A, PX PD
cual hay que apreciar las posiciones ce-
21. TRl R, O-O
rradas, es la posibilidad .de ruptura. En
22. e3A, PXP
general, el jugador que tiene más liber-
tad de movimiento en una mayor área
23. ex P, ex e
está en mejores condiciones para colocar
24. PX e, PSD
sus piezas lo más ventajosamente ante
25. ese, D4A
una posible ruptura, que su oponente, que
26. e6D, P6D
tiene una posición más restringida. Parece más simple para las negras man.
Como sabemos, ésta es la idea del mé- tener intacta su masa de peones con
todo a jugar en posiciones restringidas P4CD. Sin embargo, las blancas replica.
i}Ue se debe en gran parte a Tarrasch. rían con 27. D2D y obtendrían contra.
Nimzowitch nas demuestra ahora que en chances en el lado de rey, donde tienen la
una posición restringida hay posibilidad superioridad.
de ruptura mediante P4AD y P4AR-SA.
La primera es difícilmente buena, pues- 27.DXPA+ , DxD
to que las blancas dominan más espacio 28. e X D, TXP
en el centro y ~n el flanco de rey, pero 29. TD1 D, T1AD
no en el de dama. Y en el presente 30. C3R, T1D
·caso es particularmente dudosa la jugada 31. e4A, e4A
porque el PD blanco se convertiría en Después de un inmediato P4CD, seguí.
un peón retrasado. La jugada liberadora ría 32. C6D. Pero ahora las blancas deben
dictada por la posición sería, por ello, evitar P4CD.
P-4AR-5A. Pero estas jugadas no se
pueden hacer, porque las blancas nun- 32. P4T,
ca dominarán el punto 5AR. Además, las
negras han hecho muy buenos prepara- A 32. P6R, Nimzo1ritch habría repli-
tivos para el futuro con la aparente ma- cado con T7R. Y si 33. T X P, por ejem-
niobra artificial, pero verdaderamente plo, seguiría TXT; 34. TxTD+, y las
efectiva (C3C; P4TR-ST; C2R, y sobre blancas no tienen suficiente defensa con-
todo, en el cambio del AR blanco). tra la amenaza C6C.
Así, mientras las blancas no tienen po- 32 .... ; R2A
sibilidad de ruptura y se ven limitadas a 33. T4R, T7R!
hacer jugadas de espera detrás de la mu- 34. T4A,
ralla de sus peones, el segundo jugador·
tiene a su disposición las . posibles ruptu- Las blancas están ya completamente
ras con P3AR y P4AD. Unicamente las perdidas. Después de 34. TXT, PXT ;
negras son capaces de tomar la iniciativa 35. TIR, las negras ganarían con TSD;
y, por consiguiente, tienen mejor posi-. 36. T X P, C6C.
ción, a pesar de tener un espacio res-
tringido. 34. R3R
35. T4e, P7D
15. Rle, P3AR! 36. T6e +, R2A
16. e3A, D2D 37. T4C, P3T
17. R2T, P4AD 38. T4A, R3R
18. P4AD,
Las blancas no tienen ahora defensa
CQmo el mismo Brinckmann dice en el contra P4C.
libro del torneo de Niendorf, cometió un
acto de violencia con esta jugada, puesto 39. e6D, e6R
que de otra forma habría sido gradual- 40. Abandonan.

150-
AKIBA RUBINSTE!N

Ruhinstein, que nació el 12 de octubre fectas partidas ·de la época desde Steinitz.
.de 1882 en Staviak, Polonia, fue antes de Las teorías de Steinitz y su aplicación
la primera gran guerra, el más calificado al ajedrez tienen la misma historia que
rival de Lasker para el campeonato del las teorías físicas y su aplicación a la tec-
mundo. Durante la guerra resultaron tan nología. Las partidas de Steinitz fueron
.afectados sus nervios que en años posterio- los mejores ejemplos de sus teorías. Todo
res tuvo tan severas derrotas como gran- una generacij)n de maestros procede de
.des victorias. Sin embargo, en conjunto, ellas, que tienen un gran valor para el
pocos maestros han obtenido un éxito tan juego práctico. Rubinstein fue el jugador
brillante como el suyo en torneos y «mat· más notable de esta generación y sus par-
-ches». Garió primeros premios en los tor- tidas son la más perfecta demostración de
~~eos internacionales de Ostende, 1907 las enseñanzas de Steinitz.
·(compartido con Berstein); Carlsbad,
'1907; St. Petersburgo, 1909 (compartido
con Lasker) ; San Sebastián, 1912 ; Pis- PARTIDA NÚM. 50.
1yan, 1912; Breslau,1912 (compartido con
Duras); Viena, 1922 ; Marienbad, 1925 APERTURA P. D.
·(compartido con Nimzowitch). Su firme-
Lodz, 1908
za y, tal vez, su cará.c ter, rlos lo muestran
el resultado de sus umatches», todos los
~uales ganó, aunque, por regla general,
Blancas: l\Iarshall
por muy pequeño margen, especialmente_ Negras: Rubinstein
con Marshall, Lodz 1908 (3 a 2 y 3 ta·
1. P4D, P4D
"bias) ; Salwe, Lodz, 1908 ; Marshall, Var-
l. A4A,
sovia, 1908 ( 4 a 3 y 1 tablas) : Teich-
mann, Viena, 1902 (3 a 2 y 1 tablas);
Marshall plantea la disposición P3R,
Mieses, Berlín, 1909 (5 a 3 y 2 tablas), P3AD seguida del desarrollo de sus pie·
Schlechter; Berlín, 1918 (2 a 1 y 3 ta- zas con C3AR, CD2D, A3D y 0-0. Este
blas); Bogoljubow, Stockholm, 1920 (5 simple desarrollo fue con frecuencia em-
a 4 y 3 tablas). pleado antiguamente y no justifica ningu·
Rubinstein ohtuvo estas victorias a pe- na ganancia de ventaja efectiva. Con c-.sto,
sar de que los nervios le producían mo- las blancas no intentan obtener prepon·
mentos de completo agotamiento en los derailda en el centro, que debe ser la
cuales cometía graves errores. Más de una aspiración de toda apertura fuerte.
·vez, en partidas de torneo, le han pasado Menos tranquilamente efectiva es la
inadvertidos mates en una o dos jugadas. misma disposición sin el A en 4A y en·
El hecho de que haya podido obtener ta- cerrado en 1AD. En este Caso las blan·
les resultados a pesar de . este handicdp, r.as no pueden dejar de jugar P~R para
babia mucho de su gran habilidad. Con liberar este A, tenij!ndo así las ne~ la
todo, Rubinstein ha creado las más per- ventaja de conocer el plan estratégico de ·

- 151
su oponente y pueden, por lo tanto, orga- 7. DlA, A2D
nizar sus fuerzas para impedirlo. 8. 0--0, TlA
Sin embargo, esta apertura no carece 9. CD2D, A2R
de astucia. La algo restringida posición 10. TIC,
elegida voluntariamente por las bls.ncas
incita a las negras de vez en cuando a El blanco desea jugar CSR, pero no
avanzar por el centro prematuramente puede hacerlo en seguida, porque le repli-
con P4AD y P4R, a lo que el blanco, carían con P X P. Por lo cual las blancas
con la réplica P x PA o P X PR, y P4A desean retirar su dama de la columna de
c. P4R, puede frecuentemente demostrar alfil protegiendo el PCD con la torre.
la debilidad de los peones negros cen·
trales. El maestro belga, Colle, jugó esta 10. ..., 0--0
apertura durante largo tiempo con bue- 11. DID, TRID
nos resultados, pero desistió cuando fue- 12. C5R, ex e
ron descubiertos los correétos métodos de 13. P x e, ClR
defensa. 14. D5T, P4A
Este último sistema de apertnra se pue-
de iniciar también con l. P3AD, después Las negras amenazan ahora el cambio
de lo cual las negras no pueden evitar la de alfiles por medio de A4CD, después de
continuación 2. P4D y P3R. El maestro lo que las blancas no tendráp. posibilida-
español, J un cosa, es de la opinión de que des de atáque y, además, se encuentran
esta serie de jugadas es psicológicamente en inferioridad para el final a cansa de
más efectiva que la iniciación con l. P4D tener el peor alfil. Esto explica la siguien-
y que, después de l. P3AD, las negras te jugada de torre del blanco para evitar
efectuarán más fácilmente prematuros el cambio de alfiles. Pero ahou se ve
avances. La jugad~ l. P3AD se denomina, forzado, cada vez más, a situarse a la de-
según él, apertura zaragozana. fensiva. Lo correcto sería 15. P X P a. p.,
C X P; 16. D2R, con igualdad aproxi-
2 .... , C3AR mada.
3. C3AR, P3R
4. P3R, P4A 15. TRIR, A4CD
S. P3A, C3A 16. AlA, D3T
17. TIT,
Aquí D3C no sería buena, pór la ré-
plica D3C. Si las negras cambian la da- Defendienc'lo el PT y evitan4o, una vez
ma, las blancas tienen la ventaja a causa más, el cambio de alfiles por A6D.
de la columna de TD abierta.
17.... , A6D
6. A3D, D3C 18. AID, D3C
La situación blanca es difícil. La ju- Ahora las blancas no tienen bueqa pro-
gada 7. P3CD sería un serio error posi- tección para su PCD. A 19. P3CD, segui-
cional, debido a la debilidad del P3AD. ría D4T.
La jugada 7. P3C sería contestada con
PSA; 8. DxD, PxD y P4C, DSC y las 19. C3C,
negras tendrían la ventaja a cansa de la
columna de TD abierta. La jugada 7. Tratando de compensar la pérdida del
D2D tiene la desventaja de que el blanco PC con el domi.nio del punto fuerte 4D.
no puede continuar .con CD2D. Por ello, Pero Rubinstein, aunque ya ha ganado
la jugada natural sería 7. J)2A, pero des- una clara ventaja de posición ·--domina
pués de las jugadas negras A2D, TIA, las mucho más espacio en el centro y en el
blancas perderían tiempo a causa de la flanco de dama, mientras el ataque blan-
amenaza P X P y CSCD por esta razón, co en el lado de rey ha sido rechazado--,
las blancas se deciden a hacer la mejor, renuncia a la captura del peón para con-
que es 7. DIA. tinuar sus actividades de bloqueo.

152-
19•.. ., P4T PosiCión desp1,1és de 37. P4CR.
20. A3A, A5R

Después de PST segwna CIA. Ahora


las blancas deben proteger su PC.

21. T2R, C2A


22. TlD, PST
2,3. CIA, P3C
24. D3T, RlT
El ataqt,Je negro en el flanco de damá
ha servidO' para descolocar las piezas blBII-
'1-a~. Esta situación es utilizada por Ru·
binstein, que controla bastante espacio pa-
·ra traSladar sus fuerzas al lado del rey y
apoderarse de la iniciativa.

25. D6T; AXA


26. PX A, P4C!
27. A3C, PSD!
Las negras amenazan ahora entrar vic·
, r~riosamente por la columna de dama con Negras: Rubinstein
PXPR.

28. PR X P, P4AR 37 . . . ., TXP+!


29. C2R,
Es difícil decir exactamente qué es lo
Naturalmente, no se puede jugar 29. que determina la opinión general de los
AxP, PXA: 30. DXPA, a causa de aCirionados con resper!o a un maestro, Ru-
binstein. por ejemplo. es considerado ge-
..\fC.
neralmente como jugador frío. y. sin em'
29. PXA bargo de sus partidas se puede sacar una
30.PTXP, D3A mayor y más rica colección de bonitas
31. DST, TIA combinaciones que de los otros maestro<;
32. R2C, DlR que gozan de gran fama por su juego
33. D4C, D3C combinatorio.
34. TlT, P5A!!
38. DXT,
De esta forma las negras obtil'nen ·defi.
altivamente para su caballo el punto AD. A 38. R X T. seguiría TI A+ : 39. R3C.
DSR: 40. TIA. TM+: 41. R2T. DxPC
35. D4R, R2Cf 42. C3C. R2A. y la·s blancas no tienen
defensa rontra la amenaza CSA.
Las ne~ras sacrifican su PCD, con oh·
Si la~ blancas t"n esla variante juegan
jeto de alejar la dama blanca de la de-
39. R2C. seguiría 3Q . . ..• DSR +: 40 .
ft"nsa del flanco de rey.
RIC. DxPC+: 41. OC (si 41. R2T.
36. D X P, C4D seguiría DST+ y 2~nan: si 41. RIA . 91'·
37. P4CR, guiría D6A): 41 ... T6A! y las blanra-.
no til'nrn dt>fen•n ronlra la ~menaza p.
De esta forma. seguiría PSC. y entonces. 4T-5T.
después de P4 A o P X P, habría seguido f., notable t>n e<las variantes. romo Pn
DSR+. la rontinuar ión de. la partida. el gran utÍ·

- 153
mero de jugadas de espera. Estas juga- nera, deben tomar en consideración l as
das que encontramos frecuentemente en dos posibles iniciativas de las blancas, pue-
~ partidas de Rubinstein, producen la den caer en grandes dificultades si se li.
fascinación de temas para problemas. mitan a una pura táctica defensiva, es
decir, lo que constituye la gran fuerza de
38 •... , DSR esta apertura. De naturaleza similar es la
39. RlC, C6R variante tranquila del Giuocó Piano: l.
40. C3C, P4R, P4R; 2. C3AR, C3AD; 3. A4A,
A4A; 4. P3D, C3A; 5. C3A, P3D; 6.
Existía la amenaza de .T6C +-, 'y a 40. A3R, etc. Por esta razón, la réplica co-
1'2T habría seguido D8C +. rrecta de las negras en tales aperturas ·no
yace en la mera defensa, más bien deben
40. TXC+ apoderarse de la iniciativa aprovechándo-
41. PXT, DSC+ se de la lentitud de las blancas. Tal· ejem.
42. R2A, plo nos ·lo ofrece la Defensa Rubinstein
de la Apertura Española de los 4 caballos.
Si 42. R2.T , seguiría C X P + ; 43. R3T Después de l. P4R, P4R; 2. C3AR,
{si 43·. R2C; las negras ganan con D5R + ) C3AD; 3. C3A, C3A; 4. A5C, Ruhi.ru¡.
43. : .. , DxT+; 44. RxC, P4T mate. tein, en su partida contra Spielmann, en
San Sebastián, 1912, continuó, por prime-
42 .... , CXP+ ra vez con 4 .... , C5D. De esta forma, por
43. R2R, DSR+ una parte adquiere ventaja del hecho de
44. Abandonan. que el C. en 3AD impedirá por algún
tiempo la jugada P3AD y, por otra, el
alfil ahora en 5CD no hace nada. En la
APERTURA DE LOS 4 CABALLOS mencionada partida, Spielmann continuó
con 5. A4A, y después de A4A; 6. C X P,
DEFENSA RuBINSTEIN D2R! ; 7. C3A, P4D; 8. C x C, P x A, las
negras mantuvieron una ligera ventaja.
Hasta aquí hemos hablado de dos cla- Después de esta partida los analistas pen-
-ses de partida de peón de rey. En una saron que las blancas habrían obtenido la
-de ellas, las blancas tratan de hacer jue- ventaja con 8. A X P, pero poco después
go abierto ·por medio de P4D, y, en la Rubinstein, jugando contra Bernstein, de-
·otra, por mediación de P4AR. Existe to- mostró que este procedimiento es inútil
·davía una tercera clase de partida a con- por la fuerte réplica, en estilo de gamhi·
siderar. Examinemos, por ejemplo, la to, 8 .... , A5CR.
Apertura Española de los 4 caballos. Des· Un precedente de esta defensa se put-
pués de l. P4R, P4R; 2. C3AR, C3AD, de encontrar en la partida del mismo tor-
la continuación 3. C3A no parece tan ló· neo Tarrasch-Rubinsteiri, que se mostra-
gica como la del Ruy López, 3. A5C, rá más adelante.
puesto que el desarrollo del CD no con- Bogoljubow• .en su match contra Ru-
·tinúa el ataque iniciado en la . segunda binstein, en Stockolm y Goeteborg, 1920,
jugada contra el PR negro. Pero el ob- hizo un serio esfuerzo para vencer esta
jeto de esta apertura de los 3 caballos (o Defensa. Bogoljubow replicó siempre a
de los 4· caballos, después de 3 .... , C3A), 4 .... , C5D con 5. C x P. Con esta juga·
·no es hacer posible a todo trance P4D, lo da obtuvo éxitos prácticos, es cierto; pero
·cual significaría la consumación del ata· la defensa Rubinstein ha resistido los aná·
que al PR, sino el desarrollo de las piezas lisis posteriores,
'blancas; por ejemplo, con 4. A5C (la La variante principal de estos análisis,
·namada Apertura Española de los 4 ca- procedente de Teichmann, es como sigue:
hallas), A4A ; 5. 0-0, 0-0; 6. P3D,
P3D; 7. A5C y reservarse, por último, 1. P4R, P4R
la elección de abrir la partida con P4D 2. C3AR, C3AD
·o P4AR. Como las negras, de esta ma- 3. C3A, C3A

t54-
4. A5e, e50 Además de esto, la partida tiene un inte-
5. ex P, D2R rés especial, porque Tarrasch, gran cono-
6. P4A, ex A cedor del método de Steinitz, es un expe-
7. exe, P3D rimentado ma.e stro en la ventaja de los
8. e3AR, DXP+ dos alfiles. Por consiguiente, él hace una
9. R2A, e5e+ dura resistencia, en contraste con los opo-
10. R3e, nentes de Steinitz, quienes, probablemen-
te, no siem¡:>re estuvieron atentos al ·peli-
En la jugada 6; P4AR en combinación gro. Sin embargo, no pudo escapar de la
co!l esta valiente maniobra de rey, yace derrota contra la casi milagrosa precisión
l!! novedad de Bogoljugow. · · con que Rubinstein conduce sus fuerzas a
la victoria.
10... . , D3e!
1. P4R, P4R
Rubinstein eligió; en lugar de esto, la 2. e3AR, e3AD
jugada defe~;~siva RlD y perdió. 3. e3A, e3A
. 4. ASe, A4A
11. D4T, D3T
12. e X. P+, En esta partida Rubinstein no juega su
defensa, que es la correcta continuación.
. Tartakower recomienda, en lugar de Esta sería 4. . .. , CSD, y solamente des-
esto, 12. P3TR, lo cual es probablemen· pués de A4T, haría la jugada de cambio
j~i lo mejor, pero ello no significa obs- A4A. Si las blancas toman el peón, se
i'áculo en el camino de las negras. llega a la posición dada en el texto. Por
otra parte, el sacrificio de peón en la
12 ... . , R1D continuación elegida aquí por Rubinstein
13. exT, P4eR no es correcto.

~· las negras tienen un ataque decisivo. 5. ex P, eso


6. A4T,

PARTIDA NÚM. 51 La refutación de la continuación ele-


gida por Rubinstein consiste en 6. A2R,
APEll.TURA DE LOS 4 CABALLOS después de lo cual las negras no pueden
obtener ninguna compensación por el
San Sebastián, 1912 peón sacrificado.

Blancas: Tarrasch 6 .... , 0-0


Negras: Rubinstein 7. P3D,

Esta partida es más notable por la ma- Aquí se ha recomendado 7. C3D, A3C;
nera en que Ruhinstein juega el final que 8. PSR. Pero con esta continuación las
por su apertura. El final ilustra sobre lo blancas sufrirían dificultades en el des-
:,c¡ pe nos es muy conocido por muchas par- arrollo al obtener las negras pronto bue-
;tidas de Steinitz, principalmente de la lu- na posición con P3AR o P3D.
.'c ha de dos alfiles contra aifil y caballo.
:J1.ara una mejor compresión de la mate- 7 .... , P4D
'~ia sugerimos que el lector vea una vez 8. A5eR, P3A
)nás el comentario en conexión con la
'sección de Steinitz en los momentos de A primera vista uno no puede ver qué
·esta partida que tienen las . mismas carac- es lo que las negras tienen como compen-
Jerísticas como, por ejemplo, los movi- sación por el peón sacrificado y, sin em·
•.m ientos restrictivos de peones y su irrup· bargo, es bastante curioso que las blancas
ción de~pués de completar el bloqueo. no lo pueden retener.

- 155
9. D2D, 1!). C2R,

Considerando la continuación de la par· Esto es necesario frente a la amenaza


tida -véase la jugada 12 de las negras--, P4TD. El libro del torneo sugiere la si-
se puede . pensar que esta jugada de dama guiente continuación: 15. TD1R, P4TD ;
permite a las negras recuperar el peón. 16. C2R, C xC; 17. TxC, P5T; 18.
Pero ¿qué otra cosa pueden jugar las CxPAD, A5CR; 19. CxT, AxT; 20 .
blancas? Seguramente el rey no puede AXPD, TXC; 21. .AXP+; 22. Rx A.
permanecer en el centro, y 9. 0-0 no se- Sin embargo, creemos que, en esta oca.
ría bueno a causa de que no se podría sión, los tres peones no equivalen al alfil.
jugar 10. P4AR como réplica a 9. . .. , Por ejemplo, la continuación sería 22 . . .. ,
TlR, y a 10. C3A seguiría A5CR. Por T1R + ; 23 . RlD, P6T; 24. P3C, A5C, y
ello las blancas se ven obligadas a jugar la posición blanca es desesperada.
su dama, con objeto de hacer posible el
enroque largo, para lo cua1 solamente tie-
ne a su disposición la casilla 2D, lo que
15. ex e
16. RXC, T1R
permite a las negras recuperar aparente- 17. R1A,
mente por casualidad su peón, hecho que
no es completamente fortuito, sino que
responde a· requerimientos posicionales. Naturalmente, las blancas se resisten a
hacer esta jugada, porque rompe la unión
9. T1R entre sus torres. Sin embargo, temen que
10. P4A, P4e! a . 17. R2D seguiría P3A; 18. CX P ,
A6R +. Pero parece que esta continua-
Como se verá pronto, esta jugada es ción no sería tan peligrosa, porque las
absolutamente nec~saria antes de proceder blancas podían replicar 19. R2R!! sin
a la recaptura del peón. desventaja.

11. A3e, P3TR 17. A2C


12. A4TR, 18. P3A, P3A

Si las blancas deseaban conservar el Esta jugada de peón y la siguiente obli-


peón debieron jugar 12. A XC, D X A; gan al caballo a volver a un modesto si-
0-0-0. Pero entonces las negras con 13. tio, procedimiento que nos es conocido
... , P4TD! obtienen un fuerte ataque, por las partidas de Steinitz que ilustran
puesto que hs blancas pierden con la la lucha de dos alfiles contra alfil y ca-
atrayente continuación 14. ;E' X P, P5T; ballo.
15. C4R, D2R; 16. P6D, a causa de la
sorpre~dente réplica 16• ..• , P X A! ! ; 17. 19. C4C, P4TR
PxD, PxPT. 20. C2A, A6R
21. A1D, P5T
12 •... , ex PR 22. P3CR, P4T
13. AX D, exD
Ahora empieza una nueva fase de la
;'\hora percibimos por qué Rubinstein partida· que . también conocemos por las
hizo la jugada 10.... , P4C; 11. A3C. De partidas de Steinitz, que ilustran nuestro
no haberla hecho, las blancas podían cap- tema, especialmente el avance de los peo-
turar el caballo después de 14. A4TR. nes, y, por último, su irrupción sobre un
flanco.
14. RX e, TXA
23. A3A, PSe
Así las negras han recuperado su peón, 24. R2e, PXPA
y debido a sus dos alfiles, tienen un final 25. PX PA, A3T
superior. 26. P4Af, .

156-
Reeordaremos que los oponentes de Stei· Posición después de 35• . .. , ASD
nitz, en posiciones similares, permitían
que la cadena de peones enemigos inutili- Negras: Rubimtein
zaran · sus alfiles, mientras· Tarrasch, gran
experto en este tipo de finales, sabe cómo
..destruir la cadena de peones 6A y SD y
hacer efectivo su alfil.

26... ., TDlD

No es tarea digniiicadora para una torre


la de proteger un peón; pero · pronto el
rey negro vendrá a relevarla. Sabemos por
las partidas antiguas que en tales finales
el rey del bando que tiene los dos alfiles
puede entrar en acción rápidamente,
mientras el del bando opuesto no puede
aventurarse tan pronto a causa del fuego
cruzado de los alfiles.

27. PX PD, PXPD


28. TRID, T2R
29. C4C, PXP
30. P X P, ASD BlanCa3: Tarrasch
31. TDlA, T2C
32. T2A, R2A
33. C2A, T7C nante, entonces la superioridad de los dos
alfiles sería muy dudosa. Tarrasch concibe
Las negras no necesitan por más tiem· ahora un plan para conseguÍ? un buen
po sus torres, porque la penetración en empinamiento para su caballo y es real-
el flanco de dama ya se ha realizado y mente dramático ver cómo Rubinstein en
-ahora desean cambiarlas para penetrar con el último momento frustra este plan de
.el rey en este lado. forma bien meditada, exactemente cuando
parecía haber triunfado.
34. TXT, AXT
35. T2D, A5D 36. C3T,
Ahora empieza la parte más emocio- La iniciación del plan. Las blancas de-
nante del final. Como sabemos por las sean jugar PSA al objeto de obtener para
.-antiguas partidas, el sistema de confina. su caballo el bien protegido punto 6R.
miento de los caballos depende fundamen·
talmente de quita?les todas las buenas ca· 36. . .. , R3R
.sillas en las que puedan estar apoyados
·p or peones. Este-·sistema aparece una vez Evitando PSA, pero en la proXIma ju-
más en la posición que hemos alcanzado. gada las blancas vuelven a alejar el rey.
Es decir, los peones no están en forma·
ción cerrada, sino más bien Rubinstein 37. T2AD, R3D
ha maniobrado de tal forma que su peón 38. PSA,
de 4D h ace inaccesible al caballo las ca·
sillas protegidas por el peón blanco de El plan de las blancas parece haber
3D, y su peón de 3AR, las casillas pro- triunfado. ¿Qué harán las negras contra
tegidas por el peón blanco de 4AR. la amenaza C4A?
·Si tal formación no fuera posible y el
caballo pudiera ocupar una casilla domi- 38... . , TlADf

-157
En el momento justo. Después del cam· PARTIDA NÚM. 52
bio de torres, las negras atacari.n el P A,
o con AlA o con R4R, y entonces el ca· GAMBITO DE REY REHUSADO
bailo será alejado definitivamente con Mahr~Ostrau, · 1923
A6R ..
39. A1D, TXT Blancas : Rubinstein
R4R Negras: Hromadka
40. AX T,
41. P4e, A6R 1. P4R, P4R
2. P4AR, A4A
Las _ negras ~anan ahora el final sin
grandes dificultades. porque todas sus Este frío desarrollo de piezas es el más
piezas, incluido el rey, están en inejor simple, pero no el más fuerte método de
rehusar el gambito de rey. Véanse 108-
posición que las conespondientes del han· comentarios sobre la apertura de la pri-
do opuesto, de tal forma que las blancas mera •partida (Rosanes-Anderssen).
no pueden conservar por más tiempo sus
p~nes. La precisión con que Rubinstein 3. e3AR, P3.D
4. C3A,
termina la partida es notable. A este res-
pecto llamamos la atención del lector so- Otra continuación preferida de Morphy
bre las jugadas 43 y 51. es 4. P3A, conduciendo a la concentra-
ción de peones en el centro con P4D.
42. R3A, R5D Este centro, sin embargo, no está suficien-
43. A3e, Ale temente protegido si coruiideramos el su-
perior desarrollo de las piezas negras, y
44. R2R, A3TD no se puede sostener contra una vigorosa
oposición.
Esta insensata repetición de jugadas es
probablemente debida a la proximidad del 4 •... , e3AR
límite de tiempo en la jugada 45. En lugar de esto, 4.... , C3AD seria in-
ferior, porque el blanco con 5. ASC pre-
45. AlA, A4eD sionaría fuertemente la partida negra.
46. P4T, A2D
5. A4A, e3AD
6.~P3D,
Hay ahora la amenaza de P3C.
La situación alcanzada en el oeotro es
47. R3A, .R6A favorable al blanco, porque no puede ser
48. RXA, P5D+ destruida con P X P sin una notable des-
49. R2R, RXA ventaja posicional, a menos que tenga la
posibilidad de continuar inmediatamente
50. C4A, AXPT con P4D, miéntras las blancas pu,~en,
51. e6R, A6e como sucede a veces, abrir la columna de
s2. ex PD+, R7e AR para atacar con P X P o· restringir l a
53. ese, P5T posición negra con P5A. Por esta ventaja
54. R3R, P6T de posición las blancas pueden _aceptar _sin
temor las molestias del enroque corto.
55. exP, Rxe
56. R4D, RSe 6 • ... , A SeR
57. Abandonan.
Más de acuerdo con la posición sería
la jugada en el centro 6. · •.• , A3R. El

158-
doblamiento de peones en la columna de 21. Ate,
rey. está ampliamente compensado por la
apertura de las columnas de dama y AR. Después de 21. P XC las negras tie·
nen un prometedor ataque con P X P; 22.
7. P3TR, Axe A2T, PSR; 23. A4A, PxT; 24. AXA,
8. DxA, eso TIAD, seguido de D7R+.
9. D3C,
21. CSA
Un sacrificio de torre conocido desde
22. D2A, Ale
·hace mucho tiempo. Después de 9 . ... ,
CXP+; 10. RlD, CXT; 11. PXP, 23 . P3CR!,
P X P; 12. D X P, las blancas g~nan .
El prólogo de la combinación decisiva.
9. ... , D2R Las negras no temían esta jugada porque
10. PXP, PXP pensaban que, al cambiar el alfil de 1 CR,
11. R1D, P3A rechazaban el ataque.
12. P4TD!,
23. ex PT
De una parte, las blancas evitan P4CD, 24. TX P, D3D
y por otra preparan el ataque contra el
esperado enroque largo de las negras.
Posición despuél de 24. .. ., D3D
12. ... , TteR
N egrtU: H rorruul.ka
A primera vista parece esto innecesario,
porque la captura sobre 2CR .no se ame-
nazaba; sin embargo, las blancaa ·inten-
tan jugar 13. TIA, con la doble amena-
za 14. DxPC y 14. ASCR. Por esta ra·
zón las negras no han tenido tiempo de
enrocar largo.
13. TIA, P3TR
14. e2R, 0-0-0
ts. ex e, Axe
16. P3A, A3e
17. PST, AiA
18. A3R, R1e
Porque las negras amenazan C X P, lo
que habria sido malo a causa de D4C+.
19. RlA, RlT
20. T3A,
Laa blancas amenazan ahora 21. D2A, Blanctu: Rubinstein
atacando los dos peones de torre.
20.... , e4D
25. D6et!,
Una bonita jugada de las negras, con
la que esperan escapar de la presión blan· Con esta brillante jugada las blancas
ca en la columna de AR. Sin embargo, desbaratan el plan negro al provocar una
Rubi.nstein encuentra una más bonita y simplificación. Naturalmente, las negras
decisiva réplica. no pueden tomar la dama, puesto que no

- 159
podría evitar el mate después de 25 . .. ., da decisiva de material. Si juegan 26 . ... ,
PxD; 26. PxP+, A2T; 27. TxA+, D2A, la torre de IC se pierde después
RlC; 28. T7AxP+, RIA; 29. A6T. del doble cambio en 2AD.
2S ... ., TlD 27. AX D, T7A+
26. ASA!, TXT
28.DXT!, CXD
Las negras no pueden evitar una pérdi- 29. ASA, Abandonan

160-
JOSE RAUL CAPABLAN CA

José Raúl Capahlanca nació en La Ha- parándole ;;on Rubinstein, quien junto
bana el 19 de noviembre de 1888. Apren- con Cap¡ :anca fue considerado el más
dió a jugar a la edad de cuatro años. calificado cival de Lasker en el periodo
Cuando tenía once era ya campeón de anterior a ia primera guerra mundial, los
.Cuba. Durante varios años abandonó el expertos piensan en una más alta cali-
ajedrez para dedicarse a sus estudios, que dad de Rubinstein a causa de la mayor
\\ompletó en la Universidad de Harward.. profundidad de su estilo, pero en gene"
En 1909, a los veintiún años, siendo un ral, la opinión de los aficionados es favo-
llesconocido, se consagró como maestro de rable a Capablanca en el conjunto.
~_!itegoria ·internacional, produciendo la Rubinst~in aprendió el ajedrez cuando
~rpresa de todo el mundo al ganar un tenía dieciocho años y nunca dominó to-
'ffiatch a Marshall por 8 a 1 y 15 tablas. talmente las · d$cultades del medio juego,
iE n rápida sucesión acumuló ·muchas vic- de tal manera que una y otra vez ha co-
:{órias. Para mencionar únicamente los metido sorprendentes descuidos, algw:ias
tg rlp¡des torneos internaCionales, diremos veces en sus partidas mejor concebidas.
~qJ.le ganó primeros premios en San Sebas- Es comó un orador que hablara una len·
iíán, 1911; Londres, 1922, y Nueva York, gua extraña, aprendida de mayor, de tal
],927; segundos premios en San Peters- manera que, a pesar de sus profundas
'búrgo, 1914; Nueve York, 1924. Unica· ideas, no siempre encuentra la palabra
'ijjente en Moscú, 1925, tuvo que confor- más apropiada. Por . el contrario, Capa-
~arse con el tercer premio. En match
blanca, cuando juega al ajedrez habla
Jlerrotó no solamente a Marshall, sino su lengua nativa y concibe sus pensa-
:i1únbién a Kostich (La Habana, 1919) mientos en términos exactos. A esto se
,Por 5 a .O y ninguna partida tablas, y a debe también que juege las más. difí.
~.asker (La Habana, 1921) por 4 a O y
elles partidas de torneo con relativa ra-
fiO tablas. Este último match le dio el tí- pidez, agotarfdo raramente todo el tiempo
:tulo de campeón del mundo, que perdió permitido para la reflexión. Nunca se en-
:{rente a Alekhine en Buenos Aires, 1927. contró agobiado por el reloj.
!·· .Lo que más sorprende, incluso en un
:~ studio superficial del método de juego Las reglas de la técnica signífican para
~ªe Capa blanca, es su gran seguridad,· su el ajedrez lo que las de la gramática para
;casi ausencia de descuidos y de falsas el idioma. Pero en nuestra lengua nativa
~.nterpretaciones de posición. Es indudable- es innecesaria la gramática, que es reem-
!!Pente la consecuencia de haber aprendido plazada por nuestra. práctica del lenguaje,
~: jugar siendo un niño de cuatro años. En rica experiencia almacenada en nuestra
:t ierto sentido, el ajedrez es su lengua na- subconciencia. Y Capablanca posee la má-
'~va. Para él la deducción de posiciones xima facilidad para el ajedrez.
~imples era muy fácil, mientras que los Exactamente por esta s!]perioridad de
jugadores que han aprendido el ajedrez su mente h? triunfado al señalar errores
:.más IaboriosamP.nte, más tarde en la vida, y exageraciones de muchas de las vie-
;tienen que estudiar las situaciones. Com- jas reglas. Pondremos ejemplos de esto.

- 161
La siguiente partida nos brinda la opor· CS. T1 R,
tunidad de discutir el Huy López en la
forma más 088da actualmente. Por analogía con posiciones similares.
se podría pensar que_6. D2H es más fuer-
te aquí. Actualmente la jugada de la to-
PARTIDA NÚM. 53 rre es preferida en la práctica.

HUY LOPEZ 6 • ... , P4CD


7 . A3C, P3D
Nueva York, 1927 8. P3A, C4TD

Blancas: Capablanc. 1 En otros tiempos se consideraba nece-


Negras: Vidmar saria esta jugada aquí, para permitir
P4A y hacer posible de esta forma una
1. P4R, p R contraofensiva en el centro y flanco de
2. C3AR, C3 ~, o dama. Se · argumentaba que después de
3. ASC, P3TD P4D de las blancas el CD negro estaba
reducido a la defensa del PH y que ade-
Esta es prácticamente la única defenSa. más las blancas amenazarían aislar los
de Huy López usada hoy día, ~e ali- peones negros de 3T y 4CD con PSD y
via la presión blanca y el avance de los continuando el ajaqlte con P4TD. Aun.
peones del lado de dama y ofrece la es- que este argumento es estratégicamente
peranza de obtener una contraofensiva, correcto, no tiene efectividad en esta po-
aunque sea a costa de ciertas desventajas. sición, como fue reconocido durante el
Por otra parte, 3 .... , C3A deja al primer torneo de Nueva York de 1924. Es decir,
jugador la iniciativa, y otras defensas, ta• las negras pueden jugar primero 8. . .. ,
les como 3. . .. , CSD, o 3. . .. , P4A, son 0--0 sin temor, ·porque un inmediato 9.
evidentemente incorrectas. P4D daría al segundo jugador una mag-
No ha sido descubierta todavía, ni pro- nífica partida después de la réplica ASC !
bablemente lo será, una defensa del Huy Después de 8 .... , 0--0, la mejor réplica
López que sea satisfactoria en todos sus de las blancas, por ello sería preparar
aspectos. Esta apertura es raramente usa· P4D con 9. P3TH, teniendo qué jugar
da en los torneos modernos debido al he- ahora las negras C4TD por las razones
cho de que, hoy día, la jugada 4. P4H ya mencionadas.
es difícilmente contestada por . P4H. La Como en la presente partida se jugará
hipótesis que el autor estableció en su más adelante l. ... , 0-0; 12. P3TR,
primer libro Ideas Modemas en Ajedrez, queremos destacar la diferencia con la
especialmente que la réplica J. ... , P4H más pr;cisa continuación sugerida en
es un error que se puede demostrar con nuestro · comentario.
un fuerte ataque contra 4H negro, como 9. A2A, P4A
se hace en el Ruy López, es -admitida ac- 10. P4D, D2A
tualmente en la práctica por los maestros. 11. CD2D, 0-0
12. P3TR, C3A
4. A4T, C3A
s.0-0, A2R Lo ·más destacado de la pos1C10n es ei
estado .de flujo en el centro, el cual es
La alternativa principal S. . •. , C X P; evidentemente favorable a las blancas,
6. P4D, P4CD; 7. A3C, P4D, ha sido puesto que el segundo jugador no puede
con frecuencia desechada a causa de los ponerle fin, sino con desventaja para él ..
numerosos puntos débiles que crea a las En tales posiciones las negras deben obli-
ne!!:ras, pero como ofrece al segundo ju- gar. a su oponente a declarar sus inten-
gador mayor espacio de acción para sus ciones en ~1 centro -P5D y P X PR- .
piezas que otras defensas, es usada con ya que no puede .emprender nada debid()
frecuencia por los jugadores comhinativos. a que el centro no est á estabilizado.

162-
Las negras quieren provocar esta esta· mer.te se la ced~•t a las torres negras y
bilización con la jugada del texto C3AD. se limitan a cubrir algunos puntos de en·
Muchos jugadores, con el mismo propÓ· !rada,
sito, prefieren A2D y TRIA, porque el De esta forma, apreciando en su verda·
C negro en 4TD puede prestar buenos dero sentido la jugada P4TD, se puede
servicios amenazando, por ejemplo, ir a comprender que no es una jugada de ata·
SA, en caso de que las blancas continúen que. Las perspectivas de ataque de las
su desarrollo con CIAR y A3R. blancas es' u en el flanco de rey; La ju·
gada P4T: es un movJmiento preventivo
13. P5D, contra un Josible contraataque negro que
podría !le¡··,: a ser muy fuerte. ·
En su match con Tarrasch (I908), Las.
ker ensayó . en do~ partidas mantener el P5C
equilibrio en el centro sacrificando un
peón con 13. CIAR, pero investigaciones Aquí se debió jugar TIC. La jugada
posteriores han demostrado que el sacri- del texto es un error porque las blancas
ficio no es absolutamente correcto. pueden ahora cerrar permanentemente el
lado de dama con P4A y dedicar su aten-
13 . ... , C1D ción al flanco de rey sin ningún peligro.
14. ¡>4TD, Pero Capablanca demuestra la debilidad
de la jugada PSC de forma más sorpren-
Normalmente, en esta variante de la dente y elegante.
apertura, las blancas emprenden un ata·
que de peones en el lado del rey, donde
la fuerza de su superioridad en el centro Posición después de 14 . ... , P5C
le ofrece mayores posibilidades de movili·
z·a ción que a las restringidas piezas ne- Negras: Vidmar
gras. Por su parte, las negras tratan de pe-
netrar en el flanco de dama, rompiendo
cbn sus peones y abriendo filas de tal for·
tria que pueden confinar las piezas blan-
cas y alejarlas así del ataque al rey negro.
Por estas razones podía parecer ineficaz la
jugada P4TD, porque aunque las blancas
no intentan atacar en el flanco de rey,
desean mantener la posición y además
t~atan de mantener cerrado el flanco de
dama, para evitar un contraataque por
aquí.
Un examen más· detenido nos mostrará
que la jugada P4TD responde al deseo
de mantener cerrado el lado de dama tan·
tÓ como sea posible, alcanzando así una
posición satisfactoria. Porque las blancas
no pueden mantener completamente ce-
hado el lado de dama contra la maniobra
negra P4TD, PSCD. Con P4TD, y even-
t11almente con P X PC, las blancas abren Blancas': · Capablanca
la columna de TD. es cierto, pero ello
evita la apertura de otras. La columna 15. C4A, P4TD
de TD es la menos valiosa para los pla-
.·nes de ataque o cambio de las negras,
porque es la más alejada del centro. Para Parando la amenaza PSTD. PerQ las
evitar el cambio, las blancas deliberada- blancas tienen otras intenciones.

- 163
16. e(3) X P!, A3T una jugada, pero en el Caro-Khann se
17. A3e, Pxe necesitan dos movimientos. En contraste
18. P60, AXP con esta desventaja tiene la defensa Caro-
19. OXA, OXO Khann la ventaja de que el AD se pue-
20. ex o, e2e de desarrollar sin dificultad, mientras que
21. exe, Axe en la defensa francesa, lo mismo que en
22. P X P, PAXP el gambito de dama, se convierte en una
23. P3A, TR10 fuente de molestias para las negras. Des-
24. A3R, pués de Steinitz, las peculiaridades est).'a·
tégicas de una posición han alcanzado
La debilidad de los peones negros del más importancia que el tiempo de des-
flanco de dama y la superioridad blanca arrollo, y la defensa Caro-Khann, que so-
de los dos alfiles prometen la victoria del Ira encont~ar.se ocasionalmente bajo el
primer jugador. nombre de «apertura irregular», goza
ahora de más favor que la defensa fran-
24 . .. . , P3T cesa. Capablanca y otros maestros consi-
25. TR10, A3A deran l. ... , P3AD la mejor réplica a
26. TOlA, AlR l. P4R.
27. R2A, TXT
28. TXT, TlA Después de las jugadas
29. P4e, A20
30. A6e, A3R 1. P4R, P3AO
2. P40, P40
No tendría· objeto tratar de apoyar el
PTD negro con TIT. Las blancas gana- Las blancas tienen aquí tres jugadas
rían fácilmente con TIAD amenazando para elegir: l.a, proteger el peón ataca-
TSA. do con 3. C3AD, continuación que exa-
minaremos más tarde con motivo de la
31. Ax A, PXA partida Alckhine-Tartakower; 2.•, avanzar
32. T80+, el peón 3. PSR, la menos aconsejable
aquí, puesto que la situación de las ne-
La más simple y segura manera de gras está muy lejos de ser restringida,
,ganar. debido a la libertad de su AD. Véase en
este aspecto la siguiente partida; y 3. a,
32 . . .. , TXT cambiar. ·
33. AXT, e2D
34. A X P, e4A 3. PX P, PXP
35. P3C, ex PC 4. A3D,
36. AX P, eso
37. PST, Abandonan Las blancas deben hacer esta jugada de
desarrollo antes que cualquier otra cosa,
pues de lo contrario, las negras tendrían
TEORIA DE LA DEFENSA un fuerte desarrollo de su A en 4A. Si
CARO-KANN las blancas en tonces oponen a este · alfil
el suyo en 3D, conduciría al cambio de
Si comparamos la defensa Caro-Khann los mismos, lo cual está considerado ven-
l. P4R," P3AD con la defensa francesa l. tajoso para las negras. Para ambos ban-
... , P3R (el propósito de ambas es el dos el AR es el de más valor, si conside-
mismo, es decir, realizar P4D), se · perci- ramos que los peones de dama están ya
be que la primera tiene una desventaja fijos (el blanco en casilla negra y el ne·
con respecto al tiempo; Para abrir la par- gro en casilla blanca).
tida completamente, el PAD ha de ir,
más pront,:¡ o más tarde, a 4AD. En la 4 . . .. , C3AD
defensa francesa esto se puede realizar en 5. P3AO, C3A

164-
Para desarrollar al AD a SC antes de grosa para su propio rey. Esta es la ra
que haya sido completada la cadena de z;ón de que en la práctica de esta .,..
peones con P3R En efecto, una parte riante la posibilidad de ganar esté más
esencial de la Idea de la defensa earo- bien del lado de las negras.
Kann, es que el AD no debe quedar en- Ur¡a posición similar de peones, pero
cerrado. con los colores cambiados, se alcanza en
una variante del gambito de dama, que
6. A4AR, el maestro alemán Samisch es muy afi-
cionado a JUgar. l. P4D, P4D; 2. P4AD,
En lugar de esto se ha Intentado tam- P3R; 3. e3AD, e3AR, 4. e3A, eD2D;
bién prevenir el desarrollo del AD nl!gro 5. P X P, P X P; 6. A4A, P3A (esta ju-
con 6. P3TR. Pero la jugada es demasiado gada debe hacerse muy pronto, cuando
pasiva y· la.s negras, en vista de su mejor no inmediatamente); 7. P3R, etc. La tác-
desarrollo, -pueden aceptar sin temo!" el tica de las blancas, similar a la expuesta
aislamiento de su peón-dama y abrir fuer- más arriba, está basada también en ganar
temente la partida con P4R. ventajas posicionales colocando la TR en
IAD !, el C en SAD, avanzando los peo-
6. ..., A5C nes del flanco de dama, mientras ·a las
7. D3C, D1A negras les será muy difícil encontrar una
~· C2D, P3R compensación en el lado de rey.
9. CR3A, A2R
10. 0-0, 0-0
PARTIDA NÚM. 50.
De esta o parecida forma, ambos ban-
dos completan su desarrollo tranquilamen- CARO-KANN
' te. En cualquier caso, el rasgo caracterís-
tico de la posiciÓn que dictará la estra- Blancas: Nimzowitch ·
tegia de cada bando es, para las blancas, Negras: eapablanca
,la columna de rey abierta, y la columna
de AD para las negras. Las blancas colo- l. P4R, P3AD
carán una torre en IR y las negras en 2. P4D, P4D
. lA D. Las blancas colocarán un e en SR 3. PSR, A4A
y las negras en SAD. Si estos caballos 4. A3D,
•son desalojados por P3AR o P3eD, res-
: pectivamente, resultaría una seria debili· Aunque las blancas controlan más es
!dad de los peones. Los caballos situados pacio, las negras tienen el mejor alfil d~
:en tales posiciones· sobre columnas medio pués del cambio de alfiles en 3D. Como
aliie:t;tas los llamaba · Nimzowitch «pues- las blancas se han decidido a debilitar llll1'
tos avanzados». casillas blancas, el juego correcto de su
Finalmente, esta posición da lugar a oponente consiste en hltcer imposible la
·- una típica maniobra de peones. Las ne- ruptura con P-4A-5A, que sería la forma
.gras avanzarán su PCD a se y apoyarán ordinaria del ataque indicado. Parece de-
..esta maniobra con P4TD. Las blancas no ducirse de ello que en esta variante de la
·opondrán con P3TD. Después del cambio defensa Caro-Khann las negras tienen la
•negro P X P o blanco P X P, el peón ne- ventaja. Además la posición es muy si·
igro de AD será muy débil o lo será el milar en esencia a posiciones análogas de
peón de 4D blanco que quedará además las defensas Nimzowitch o Francesa,
aislado. ¿Pueden las blancas realizar una cuando el negro consigue cambiar los. aJ.
maniobra similar a base de su columna files de casillas blancas. Nos remitimos
abierta? Sería aquí por medio de P-4AR- a los comentarios de la partida Brinck
SAR, y en caso de que las negras jueguen mann-Nimzowitsch sobre este particular.
P3CR, avanzar también el Pe a 4eR. En lugar de 4. A3D. también ha sido
Se deduce de esto que la iniciativa blanca ensayada la jugada de ataque 4. ·P4CR,
está basada sobre una posición algo peli- pero es evidentemente incorrecta. El oh-

- 165
JelO es paralizar la posición negra, des- postclon . Por ejemplo, algunas veces se
pués de A3CR, con el sacrificio de Uli contenta con sorprendentes pequeñas ven-
peón con S. P6R. Sin embargo, las ne- tajas, aunque la posición sea tal que otros
gras podían r eplic_ar más simplemente con maestros sientan la necesidad de obtener
4. . . ., A2D, de tal manera que el P de ventaJas mayores. La cosa es que, muy
4CR constituya una debilidad permanen· pronto y claramente, percibe los más pe-
te en la posición blanca. queños matices como ventajas reales que
luego convierte en efectivas sin demasiado
4. A XA trabajo técnico. Sin embargo, esto ha obli-
5. D X A, P3R gado a Capablanca de vez en cuando a
6. C,aAD, D3C aceptar tablas en partidas que ha debido
7. CR2R, P4AD ganar. Otra característica -del estilo de Ca-
8. P X P, AXP pablanca es que no se obstina en man-
9. 0-0, C2R tener uila ventaja que ha conseguido, sino
que siempre está dispuesto a cambiar una
Como hemos dicho, la desventaja de las ventaja por otra. Así, nosotros creemos
blancas yace en la falta de eficacia de su que en la presente partida la mayoría de
alfil, bloqueado por el P de SR y después los maestros habrían sostenido la ventaja
también por el PAR, ya que más tarde o de posición con IS . ... , P4TR, y no cabe
más temprano habrá . que jugar P4AR poner objeción a este método. Pero Ca-
para proteger el PR. Este alfil tampoco pablanca permite la jugada P4CR porque
puede contribuir a la protección de las ha visto que, aun después del cambio del
casillas ~AD y SAR, que están soporta· ineficaz alfil blanco, los peones demasiado
dos por peones negros ; en consecuencia, avanzados le ofrecerán otras ventajas per-
las negras tienen posib~idades de crear manentes.
puntos fuertes en estas casillas, pues las
blancas no podrían desalojar las piezas 16. P4CR, CXA
que se situaran en ellos con movimientos 17. DXC, P4TR
de peón sin debilitar su posición. Así, la
JUgada P3CD debilitaría el P AD blanco, Esta jugada explica por qué las negras
i:l cual, por hallarse en la columna negra permitieron P4CR. Ahoras las blancas es-
abierta, solamente estará seguro mientras tán obligadas a jugar PSCR, y las negras
el PCD permanezca en 2C. La jugada tienen un punto fuerte en su 4AR. Ade-
P4CR debilitaría evidentemente la posi· más, no se trata solamente de un punto.
ción del rey blanco. La posición de los peones blancos es muy
Las negras no· · tienen ninguna razón avanzada y, por lo tanto, débil y llena de
para evitar el cambio de su alfil de 4AD agujeros.
por el caballo blanco de 4 T, puesto que
-en la batalla contra el ineficaz alfil, un 18. PSC, 0-0
e es, por lo menos, tan bueno como el 19. C4D, D3C
mejor alfil. 20. T2A, TRIA
21. P3TD,
10. C4T, D3A
11. C X A, DXC Esta jugada parece debilitar aún más
12. A3R, D2A la posición blanca. Pero no era posible
13. P4AR, C4A dejar el PTD permanentemente sin p ro-
14: P3A, C3A tección, debido a que de otra forma t en-
15. TD1D, P3CR drían que estar alerta contra la sorpresa
de cualquier pequeña combinación, ata·
El estilo de Capablanca se caracteriza que doble, etc.
por diversas peculiaridades, cuya expli-
cación hay que buscar en el hecho de 21. T2A
que son consecuencia de su gran perspi· 22. T3D, C4T
cacia para juzgar los elementos de una 23. T2R, TlR

166-
. Previniendo un ataque con 24. PSA, 33. TR2D, T5R
PRXP; 25. P6R. 34. T4D, T5A
24. R2C, e3A! 35. D2A, D4C
36. R3C, T(SA) X T
eapablanca descubre ahora el verdadero 37. PX T, D5A
plan y, por ello, rechaza la aparente ju· 38. R2C, P4Cl
.gada natural esA. Es decir, el punto
SAD tiene que permanecer accesible para La dama y la torre blancas están limi-
la T que ha de atacar los puntos SR y tadas a la defensa de sus peones de 4D y
.5AR, y el caballo blanco que se encuentra 4A y a la protección de su segunda hori-
en el camino de este ataque será apartado zontal. Ahora veremos cómo esto propor-
por un método que se explicará más ciona a eapablanca la opol'tunidad de de·
tarde. Las blancas están tan encogidas cidir la partida por «zugzwang», Pero
que han de permanecer como pasivos es- antes ha de ayudar a su PeD.
pectadores de esta maniobra de las negras.
39. RIC, PSC
25. TR2D, TRIAD 40. PX P, PXP
26 . .T2R, e2R 41. R2C, D8A
27. TR2D, T5A
28. D3T,
Posición después de 41 . .. . , D8A.
Previniendo e4A.
Negras: Capablanca
28 .... , R2e
29. T2AR, P4T
La continuación del plan de las negras
consiste en PSTD y C-3A-4T-6e. Las blan-
cas se ven obligadas a cambiar este e,
a causa de la amenaza e.4A·5R.
La siguiente jugada de las blancas, en
lugar de la cual debieron jugar TR2D,
le da a Capablanca la deseada oportuni·
dad de quitar el C de 4D de la manera
más rápida.
30. T2R, C4A!
Esta jugada no hubiera sido posible
después de 30. TR2D, debido a la con-
tinuación 31. e X e, Pe X e; 32. D X PT,
TI TR; última jugada defensiva que hu.
hiera sido imposible estando la T en 2R.
Blancas: Nimzowilch
31. ex e,
Después de ·31. TR2D, las negras tam- La ·primera jugada, forzada. Es eviden-
bién habrían obtenido una poderosa su- te que la D y la T no pueden moverse
perioridad de posición con e X e; 32. y P4T d ebilitaría aún más la posición
Txe, TXT; 33. PxT, D4e en combi- blanca. Después de esto, lo mejor para las
nación con T8A. negras sería P6e, y entonces T8R o aun
D8R. Por ello, las blancas están obliga-
31. Pexe das a jugar su rey, haciendo posible la
32. D3A, R3e penetración de la D negra hasta STR.

- 167
42. R3C, DSTR contraofensiva basada en una idea total-
43. T3D, mente diferente; es decir, pueden tomar
ventaja de la ausencia del AD blanco en
Se ve que las blancas no pueden me- el lado de dama y lanzar un ataque contra
jorar su posición, porque son incapaces esta ala. La idea tiene a su favor el hecho
de cambiar la D o la T sin incurrir en de que concuerda perfectamente con los
desventaja. principios generales estratégicos de defen-
sa. Hay dos métodos de jugar: el más an-
43 .... , TSR tiguo, la defensa Cambridge Springs, que
44. T3AR, TSD debe su nombre al hecho de que fue ju-
gada con frecuencia en el torneo .de Cam-
Una jugada de tiempo, porque el blan· bridge Springs, 1904, mientras que la
co, una vez más, se encuentra en «ZUgz· más moderna, la defensa Westphalia, es
wang». Evidentemente, la D no se puede llamada así porque fue analizada en de-
mover. Después de 45. T3CD, sigue TSAR talle por los maestros europeos que a
46. D2D, T6A+; 47. TXT, PST+; 48. bordo del vapor «Westphalia» se dirigían
Iix P, D x T; 49. P3T, P6C; SO. D2T, a Nue,·a York para tomar . parte en el
D6R, y las blancas están perdidas. torneo de 1927.
La idea en ambas defensas yace en el
45. P3C, TSCD ataque contra 3AD blanco por medio de
D4T, ASC v CSR. Pero mientras la Cam-
Otra jugada de tiempo, manteniendo bridge Spri~gs empieza sólidamente con
la posición de jugada forzada.
s.... , P3A
46. T3R, TSAR
47. Abandonan. y así qiteda el punto AD bien protegido,
la ''ariante W estphalia se carateriza por
S.... , ASC en combinación con P4A. Esta
variante es menos sólida, pero más agre-
LAS DEFENSAS DE CAMBRIDGE siva y, por ello, está más de acuerdo con
SPRINGS Y WESTPliALIA EN EL la idea de a taque en que está basado todo
GAMBITO DE DAMA el método de juego, por lo que debiera
ser más correcta que la defensa Cambrid-
Conocemos ya por diversas partidas an- ge Springs.
tiguas, aunque no del todo, la llamada de- Primero examinaremos detenidamente el
fensa ortodoxa -del gambito de dama. método de juego más antiguo.
6. C3A,
1. P4D, P4D
2. P4AD, P3R Las blancas tienen la alternativa de
3. C3AD, C3AR evitar las complicaciones de esta variante
4. ASC, CD2D con la jugada introducida por Capablan-
S. P3R, ca 6. P3TD. Esta jugada es siempre apli-
cable contra la defensa ortodoxa del gan;t-
La forma «ortodoxa» consiste en com· bito de dama y no supondrá una pérdida
pletar ahora el desarrollo de la manera . de tiempo.
más simple dentro de la restringida po·
sición, y así, A2R, 0-0, y entonces pre· 6 . . .. , D4T
parar alguna de las jugadas liberadoras 7. C2D!,
P4AD o P4R, preferentemente después
de P X P, para evitar el aislamiento del Debido a las amenazas CSR y ASC,
PD negro. Estas maniobras tienen por oh· esta jugada casi forzada es excelente, por·
jeto liberar el AD. que rechaza con facilidad el ataque sobre
En \"ez de jugar esta línea defensiva el lado de dama y demuestra la desven·
pura, las negras pueden emprender un·a taja de la posición de la dama en 4T.

168-
En lugar de 7 C2D Tarrasch reco- tener la ventaja. Este es otro ejemplo de
mendaba 7 P X P pero entonces las ne- lo perjudicial que .es tener fe · ciega en
gras pueden tomar sin desventaJa lo mis- la autoridad.
mo con el C ·que con el PR. Según Spiel-
mann, 7 , C5R sería una buena ré- 10. PX PR, CSR
plica. 11. C20 XC, PXC
Aunque el ataque directo sobre el flan- 12. 0-0, AXC
co de dama ha sido rechazado por C2D, 13. P X A, CXP
esto no prueba la ineficacia del sistema.
Como las blancas al jugar C2D han redu- En esta posición, Grunfeld jugó 14.
cido su presión sobre el punto estratégico D X P, ganando entonces sorprendentemen-
5R, las negras pueden ahora ensayar P4R te las negras la dama con P3A; 15. A4A?,
para liberar el AD, lo que constituye el A4A! En lugar de esto, las· blancas po-
verdadero problema de la defensa del gam- dían haber obtenido la ventaja con la evi-
bito .de dama. Este sistema ha sido per- dente jugada 14. A7R.
feccionado por Bogoljubow en particular. La variante Westphalia en su forma
En la continuación damos las siguientes pura, tiene la desventaja de mostrar las
JUgadas de la partida Gruenfeld-Bogolju- cartas de las negras demasiado pronto.
bow. Baehrisch-Ostrau, 1923. Después de l. P4D, P4D; 2. P4AD, P3R;
3. C3AD, C3AR; 4. ASC, CD2D; 5. P3R~
7 ' ASC la jugada 5. . , P3AD no indica nada, y
8. OlA, O-O las blancas continuarán su desarrollo nor-
malmente. Con 5. ., ASC, sin embargo,
En lugar de esto, Alekhine, en el las negras tienen definidos planes de ata-
«match» con Capablanca, usó con éxito que contra el flanco de dama, debiendo,
un sistema recomendado por Rubinstein, por ello, prepararse el primer jugador in·
o sea, PXP;'9 AxC, CxA; 10. CxP, mediatamente con 6. A3D y ·7. CR2R.-T.as
D2A Las negras vigorizan su partida en negras eligirán bien la variante W estpha·
la continuación con 0-0, TRlD, A2D, lia únicamente si las blancas han jugado-
TDIA, AIR, AlA y eventualmente D1C., demasiado pronto C3AR, que las blancas.
·q ue le da una restringida, pero segura puedan ser provocadas a jugar así, depen-
posición. Si las negras consiguen abrir de del estado de la apertura en el mo-
la partida con P4AD, ambos alfiles pue- mento. Desde hace veinte años es cos-
den obtener una gran efectividad. Todavía tumbre iniciar el gambito de dama casi
no ha sido aclarado enteramente el mé- regularmente con l. P4D, P4D; 2. C3AR,
todo de la defensa Cambridge Spings, pero y jugár .solamente entoriées 3. P4AD para
debería ser mejor que el empleado por evitar las complicaciones del contragambi·
Bogoljubow para realizar P4R. to Albín, que tiene lugar con 2 .... , P4R,.
después de · 2. P4AD. Pero actualmente-
9. A2R, nadie teme este contragamhito. No hace
mucho tiempo para provocar un tempra-
En la séptima partida del «match» Ca- no C3AR, la réplica a l. P4D era C3AR,
pablanca-Alekhine, Capablanca jugó 9. porque las blancas no continuaban con
A4T con éxito. Pero allí la réplica negra 2. P4A que permitiría la defensa Buda-
P4R! habría sido mucho mejor que en pest 2. . ., P4R. Pero hoy se teme muy
la presente variante poco a la defen.sa Budapest; así que, de·
acuerdo con In situación psicológica ac-
9. P4R tual de la apertura, recomendamos el si-
¡ruiente sistema para introducir la varian-
A la luz de esta partida. Grunfeld-Bo· te Westphalia:
goljubow, esta jugada se ha considerado
como una absoluta refutación del método 1. P4D, C3AR
de desarrollo de las blancas. La verdad es 2. P4AD, P3R
que las blancas, ·como veremos, deben oh- 3. C3AR,

- 169
La gran mayoría de los jugadores de guiente continuación que conduce a tabla:~
hoy prefiere desarrollar el CR a este pun-
to, porque las consecuencias de 3. C3AD, 10.... , AXC
ASC parecen más difíciles, puesto que por 11. PX A, C5R
este desarrollo las negras han alcanzado 12. AXCR, PXA
su objctim y pueden ahora rechazar el 13. C5R, ex e
gambito de dama. · 14. PXC, O-O
3. P4D con una clara posición de tahlas.
4. C3A, CD2D
5. A5C, ASC
6. P X P, P.~RJ'IDA NÚ~I. 51.
Este cambio debe hacerse ahora o en GAMBITO DE DA}IA
la próxima jugada, porque de otra manera
las negras liberan su caballo con D4T, Nuev.a York, 1927
pudiendo entonces tomar en 4D con el C.
Blancas: Capablanca
6 .... , PX P Negras: Spielmann
7. P3R,
1. P4D, P4D
La jugada más natural. Con respecto a 2. C3AR, P3R
7. D4T, véase la siguiente partida. 3. P4A, C2D
4. C3A, CR3A
7 ... . , P4A 5. ASC, A5C!
s: A3D, D4T
9. 0-0, Poniendo en juego la def~:nsa Wcstpha-
lia, que es aquí perfectamente jugable,
Este sacrificio de peón fue jugado por porque el CR está ya en· 3AR.
Alekhine cont1•a Vidmar en Nueva York,
1927. En Trentschin-Teplitz, 1928, Grun· 6. P X P, PX P
feld ensayó contra Spielmann ]a jugada 7. D4T,
más prudente, 9. D2A, pero no pudo oh·
tener ventaja con ello. Allí continuó: 9. En una partida anterior contra Spiel-
. ,., PSA; 10. ASA, 0-.0; 11. 0-0, TIR. mann, Capahlan~a en este momento ju¡¡ó
Las. nr¡zras pueden, después de esto con 7. D3C, pero después de P4A; 8. P3TD,
AlA, P3CR y P3TR ohtener el cambio A XC+; 9. D X A, PSA, estuvo en des-
de uno de ]os alfiles blancos. Si en esta ventaja de po~ición, porque las nel!ras tie
p0!1irión lns blancas desean obtener una nen una sólida mayoría de peone~ en el
\'enlaja, tienen que avanzar el PR éon lado de dama, mientras la mayoría blan
(:2D y TlR, lo t:ual conduce entre tanto en en el centro parece retrasada, puesto
al ai•lamiento dd PD blanco. que las negras pueden presionar en la co-
lumna de rey.
9. P5A Después del éxito de Capahlanca en la
10. ASA, presente partida, se considerrí la jugada
del tPxto como la refutación de la varian·
En lugar de e~to, en la partida Alekhi- te Westphalia, pero ' tal conclusión era
nc-Vidmar se jui{Ó 10. A2A. La jugada incorrecta, como veremos. en seguida.
riel texto, que procede de Walter, forta.
leee el ataque hlanco si el sacrificio de 7. AXC+
peón es aceptado. Después de A X C ; 11.
P X A, D X P. las blancas obtienen la ven· Con esto, Spielmann hace exactamente
laJa con A X CR Pero en cualquier caso lo que ~u exjH>nentc desea y renuncia al
las negras tienen 11 sn dispo~ición la si- ataque en el l!~tlo de dama, que es In

170-
clave de esta defensa. Lo correcto habría Po5ición después de 17. P4TD.
sido 7 .... , P4A; 8. PxP, AxC+; 9.
P X A, 0- 0. Capablanca creyó que podía Negras: Spielmann
sostener el peón de ventaja con 10. P6A,
porque no tuvo en consideración la exce·
lente réplica D2A !

8. PX A, 0-0
9. P3R, P4A
1 O. A 3D, P5A
11. A2A,

En esta posiCwn, los peones están des·


iguahnentc distribuidos: las blancas tie-
llen la preponderancia en el centro y las
negras en el lado de dama. En tales po-
siciones, la ventaja de los dos alfiles que
poseen las blancas es mucho mayor por-
que la larga diagonal de .éste puede ser
·efectiva simultáneamente en diversos fren·
tes de batalla en contraste con el e, que
tiene 111ás limitada esfera de acción.
La técnica con que Capablanca apro- Blancas: Capablanca
vecha su ventaja es notable. Primero, con
TR1R unida a C2D, agudiza la amenaza
P4R, obligando así a la protección del No obstante, Spielmann había pensado
PAD por P3TD y P4C, y, finalmente, ya en proteger su PCD cuando jugó 15.
arrolla esta cadena de peones con P4TD. . .. , CSR. Pero la única protección· direc-
En realidad, en la buena preparación de ta 17.... , TlC, no es satisfactoria a cimsa
la apertura de la partida yace el secreto de 18. TRlC, D4D; 19. A4A, T3C; 20.
de la . obtención de la superioridad de los T4C, seguida de TDlC. Sin embargo,
alfiles sobre los caballos. Spielmann esperaba al atacar el A blanco
con 17 •... , D4D, ganar el tiempo nece·
11. D2R sario para asegurar su posición con A2C.
12. 0-0, P3TD
13. TRI R, D3R 17 . ... , 040
18. P X P!!, DXÁ
Se amenaza ya. abrir la partida con 19. Ax P, TIC
P4R.
La variante principal de la combina·
14. e20, ción consiste en 19.... , T2T; 20. P6C !,
P4e
D X D; 21. P X T! y las blancas tendrán
15. D5T, esR siempre ventaja material.
Naturalmente, Spielmann evita otra vez 20. PX P, T4C
P4R. Sin embargo, el mismo fin se habría 21. D7J.. C3C
obtenido con la jugada más sólida A2C. 22. P7T, A6T
La jugada del texto le da a Capablanca
la oportunidad de terminar su ataque con Las negras podían resignarse ya aquí,
una bonita combinación. puesto que su oponente por medio de P8T
obtiene una ventaja decisiva de dos peo-
16. ex e, .Pxe nes. Sin embargo Capabla:nca juega ahora
17. P4TD, para algo más que e~o.

-171
23. TRlC, TXT como la torre, el que sea utilizada para
24. TX T, P4A la protección de un peón. Pero incluso
25. A3A, P5A para bloquear el avance de un ¡>eÓn ene-
26. PX P, Abandonaron migo, la torre es menos deseable que un
alfil, que es ·una pieza bastante más débil.
Por ejempl<;~,-imaginemos que el rey blan-
co está en SCR, un peón pasado blanco
FINAL DE TORRE está en 6CR y una torre negra que tenga
que ir a 2CR para blo<piear el peón. Las
Los finales de partidas que en la prác-
blancas podrán forzar ei avance yendo el
tica se producen con más frecuencia son
los de torre. Para llegar a ser un buen rey a 6It" o 6A, mientras que estando un
jugador de ajedrez es necesario un estu- alfil en 2C en lugar de la torre, le seria
dio especial de los mismos. difícil al rey blanco acercarse.
Los · principios del juego correcto de Estas consideraciones conducen al prin
torre en el final de partida están basados cipio, que la experiencia ha confirmado,
en el hecho de que esta pieza es la más que dice que .en los finales de torre se de-
poderosa que disponemos para atacar los be siempre preferir el ataque a mantener-
peones enemigos. Aunque, en general, se se a la defensiva. Por ejemplo, cuando se
puede atacar solamente un peón bloquea-
tiene un peón de ventaja que solamente
do, inmovilizado, la torre puede también
atacar con éxito un peón movible. Para puede ser mantenido por la unión de pie-
ello tiene que tomar una posición sobre zas, es frecuentemente mejor entregarlo
un punto de la misma columna del peón, para ganar el tiempo necesario que nos
para atacar, no sobmente la casilla en que dé la iniciativa, penetrando en la posición
se encuentre emplazado, sino también to- contraria con la torre o darle un apoyo vi-
das las posibles posiciones futuras que goroso a un peón pasado. Recíprqcawen-
pueda adoptar en su avance. La misma te, en una posición pobre, la mejor . posi-
circunstancia que hace que la· torre y el bilidad de éxito yace en un enérgico con-
peón se muevan en una línea recta, ex-
traataque que en una defensa impaciente
plica por qué la torre es la pieza mejor
para apoyar el avance de nuestros pro- de cada peón débil.
pios peones pasados. De aquí, repetimos, Como los buenos resultados ~n ajedrez
que sin moverse, pueda cubrir simultánea· solamente pueden obtenerse por la armó-
mente todos los puntos; porque ha de pa· nica cooperación de las piezas, el rey tam-
sar nuestro peón en su camino a dama. bién debe adaptarse a estas características
Hay una conocida regla, formulada pri- del final de torre y no permanecer a la
mero· por Tarrasclt, que dice que, en aro· defensiva, sino tratar de actuar agresiva-
bos casos, atacando peones enemigos, lo mente, por ejemplo, invadiendo el campo
mismo que apoyando el avance .de los
contrario, los puntos débiles o apoyando
propios, la torre es más eficaz detrás del
peón que delante de él. La razón .princi- a los peones pasados de su bando.
pal de esta regla es que, cada movimiento La frecuencia con que se presentan los
que haga el peón incrementa el campo finales de torre explica por qué los maes-
de · acción de la torre y, por el contrario, tros. de primera fila tienen que conoce.r-
cuando está. colocada frerúe a él cada mo- los a la perfección. Pero ninguno ha ju-
vimiento disminuye · su efectividad. gado estos finales con· la elegante faeilidad.
Mientras la ·torre asf· posee una gran de Capablanca, ni ninguno ha considerado
fue7za ofensiva, oponiéndola a los peones, estas dificultades técnicas, ta.n,. ostensibles
és menos efectiva en esta clase de finales. como evidentes.
Naturalment~;, , ·es, mllY fácil de ve:r qu~ . La· siguiente posición se alcanzó en el
nó es digrÚJ de una pieza tan poderosa torneo de Nueva York, 1924. ·

172-
P03ición después de la jugada 26. Dando a su contrario la oportunidad de·
de las negras. ganar un peón con C-6R-4A. Pero Capa-
blanca ha pensado bien la cuestión y
Negras: Tartakower tiene confianza en el peón pasado que así
obtiene.

32. C6R+
33. R3A, C4A
34. AX C, PXA
35. R3C!!,

Es extraordinariamente instructivo ver


cómo Capablanca no se preocupa por la
igualdad material, sino en apoyar su peón
pasado. '·

35. .. ., TXP+
36. R4T!, T6A
37. P6C, TXP+
38. RSC, T5R
39. R6A!,

Es frecuentemeJ:!.te útil en t:les posicio-


nes la fineza de no capturar el peón ene-
Blancas: Capablanca migo, con objeto de tener guardadas las
espaldas contra los jaques de la torre.
En esta situación las blancas tienen la
ventaja en el flanco de rey, y las negras 39 •.. . , RIC
en el de dama. Sin embargo, las blancas 40. T7C+, RIT
están tomando la iniciativa, lo cual es 41. TX P, TIR
muy importante en tales casos. 42. R X P,

27. PST!, T3A Después de esto, las negras han perdido


28. PX P, PX P toda esperanza.
29. TIT,
42 ... ., T6R
Vemos que las blancas juegan lógica- 43. R6A, T6A+
mente utilizando su lado de rey, no se 44. R5R, T6CR
preocupan por las debilidades de su flan. 45. P7C+, RlC
co de dama. Las negras, por su parte,
hacen ahora una jugada defensiva, que Después del cambio de torre, las blan-
quizá se pudo omitir. cas ganarían más fácilmente.

29. RIA 46. TX P, TSC


30. T7T, T3A 47. RXP, TSAD
31. P4C!, 48. R6D, T7A
49. P5D, TSA
Los impacientes habrían llevado su rey 50. T7AD, T8TD
hacia el lado de dama, pero Capablanca 51. R6A; TXP
está jugando este final de acuerdo con los 52~ P6D, Abandonan
principiQs agresivo~ citados más arriba.
Terminado el juego da la impresión de
31. .. . , CSA ser tan · natural que uno fácilmente olvida
32. PSC!, la dificultad ·de tau precioso final. La di-

- 173
f.icultad es principalmenfe . la naturaleza 36. PST,
psicológica. En ajedrez, como en la vida,
estamos acostumbrados a darle valor a los Todos los comentaristas pusieron inte-
factores materiales, que no es fácil entre- rrogación a esta jugada creyendo q ue las
garse a sacrificios de peones aun cuando
blancas dejaban escapar la victoria, que
sea tan pequeña su utilidad material. Un
notable ejemplo . de esta clase se puede habría sido fácil de forzar con PSC.
hallar en los comentarios hechos por algu-
nos de los principales maestros sobre el 36. p >< p
siguiente final del torneo Moscú, 1925. 37. PX P, TSA

Posición después de la jugada 35. Esta jugada fue designada como per-
de las negras. dedora y sé creyó que se debió jugar pa-
ra obtener tablas, 37 ... . , TSC; 38. P6T,
Negras: Spielmann
T6C, pero es un hecho que Lasker ha-
bría ganado también fácilmente .después
de la jugada negra T5C. Es cierto que
únicamente se puede ganar utilizando u n
método análogo al empleado por Capa-
blanca en la partida anterior, esto es, ig-
norando la defensa de los peones y llevan-
do el rey inmediatamente a proteger el
peón pasado, con 38 . . R4A 1!, T X P+ ;
39. RSC. Este método de ganar es tan
natural, que solamente las ya menciona-
das consideraciones psicológicas pueden
explicar el hecho de que ninguno ·de los
maestros que han analizado el final lo
hayan descubierto. La atención del autor
fue a visada por un ensayo escrito por el
compositor de estudios, F. J. Prokop, de
Blancas. Lasker Praga.

174-
ALEJANDRO ALEKHINE

El actual campeón del mundo nació nes sobre el estilo de Alekhine. Esto se
en M06Cú, el 1 de noviembre de 1892. debe al heeho de que su arte ajedreeístico
Alcanzó la. categoría de maestro en 1909, no es puramente el producto de su ins-
cuando sólo tenía dieciséis años de edad, piración, sino más bien el resultado de
al ganar el primer premio en el torneo una gran inteligencia y de una enorme
nacional ruso, que tuvo lugar en San capacidad de trabajo. Cuando émpezó eran
Petershurgo al mismo tiempo que el tor" de admirar su rica imaginación y sus im-
neo internacional de maestros. A pesar petuosos deseos de ataque. Su fuerza de
de su juventud, antes de la primera gran carácter le mantuvo en la senda que con-
guerra alcanzó grandes victorias, la más duce a la gloria, y no lo desviaron de ella
notable de las cuales fue la de figurar ni su juventud ni la admiración de las
en primer lugar en el torneo de Mann- multitudes. Subordinó sus dotes naturales
heim, 1914, . que quedó interrumpido por a su inteligencia, su talento a su genio.
el estallido de la guerra. Lasker predicó el credo del «Sentido
Después de la revolución rusa fijó su común en el ajedrez». Con este título ge-
residencia en París, donde cursó con éxi- neral redactó una serie de conferencias
to estudios de leyes, que simultaneó con para aprendices del juego. Su objeto era
los de ajedrez. demostrar que el principiante puede ha-
A partir de entonces sus triunfos más cer rápidos progresos si no trata de ceñir-
·resonantes fueron: primeros premios en se a demasiadas reglas, aplicando a los
Budapest, 1921; La Haya, 1921; Carls- problemas ajedrecísticos el simple razonar
bad, 1923 (comp&rtido con Bogoljuhow y y el sentido común usual en las cuestio-
Maroczy); Baden-Baden, 1925; Kecske- nes de la vida práctica, sin considerarlos
met, 1927; y segundos premios en Pis- como algo abstracto, completamente dife-
tyan, 1922 (compartido con Spielmann, rentes a los demás problemas humanos.
detrás de Bogoljuhow), L:mdres, 1922 (de- Esta idea fue desarrollada más tarde por
trás de Capablanca); Semmering, 1926 Alckhine en sus partidas y en sus exce-
(detrás de Spielmann), y Nueva York, lentes obras de ajedrez. (Libro del torneo
1927 (detrás de Capablanca). de Nueva York, 1924, y «Mis cien me-
Estos éxitos hicieron de Alekhine el jores partidas de ajedrez 1908-23» ).
más calificado «challenger» para el cam- En sus ideas y en sus escritos sobre
peonato del mundo. El esperado «match» ajedrez, Alekhine es siempre tan lógico y
tuvo lugar en Buenos Aires en 1927, bajo fácil de entender, tan apartado de cual-
los auspicios del «Club Argentino de Aje- quier tendencia abstracta, que puede ser
drez», y terminó con la victoria de Ale- descrito con el calificativo que tan fre..
khine por 6 a 3 y 25 tablas. cuentemente le han prodigado, de «talen-
Se han escrito las más variadas opinio- to realista».

-175
PARTIDA NÚM. 52. 6. P4R!!,
GAMBITO DE DAMA Las blancas sacrifican su PR con ob-
jeto de conservar el PD, el cual no se
Pistyan, 1922 debilita, como se pudiera pensar, porque
se complementan su propia acción y la
Blancas: Alekhine presión que pronto se ejercerá sobre la
Negras: H. Wolf columna de rey ..

1. P4D, P4D 6 •...• ex PR


2. e3AR, P4AD 7. D4T+,
3. P4A, PX PD
Con objeto de obstruir la columna de
Con P3R se llegaría a la defensa Tar- dama con las piezas negras. Evidentemen-
rasch del gambito de dama, que actual- te, las negras no pueden replicar D2D a
mente goza de muchos partidarios. causa de 8. ASCD.
lndudablemeqte, la jugada del texto es
preferible. Después de la cuarta jugada 7 . . .. • A2D
se llega a una posición simétrica, en la 8. D3C, C4A
cual el problema de explotar la ven.t aja 9. D3R,
de salida es, de cualquier modo, muy di-
fícil. Durante algunos años se consideró Previniendo que el negro juegde P3R.
este problema de solución imposible, y Las negras, por ello, tratan de desarrollar
por ello la preparación del gambito d,e su AR en fianchetto para poder enrocar;
dama por 2. C3AR, un fracaso. Inciden- pero esto también fue evitado por medio
talmente, se llega a la misma posición fre- de breves pero vigorosas jugadas de Ale-
cuentemente al jugar l. P4D, P4D; 2 . . khine.
C3AR, C3AR; 3. P4A, P4A; 4. P x PD,
9 . . . ., P3CR
PxP.
10. C3AR, D2A
4. PX P, e3AR
11. D3A, TIC
12. A3R, P3C
Después de D X P las blancas obten·
13. CD2D,
drían una gran ventaja de desarrollo con
El intento de ganar una pieza por me-
C3A. La jugada del texto conduce a la po-
sición simétrica ya mencionada. Las ne- dio de 13. P4CD, habría fallado a causa
gras pueden · aun mantener la simetría to- de la réplica negra A2C; 14. e4D, D2T
mando el P de 4D, con su C de 3AR. o 14. A4D, AXA; 15. CxA, D4R+, co-
mo también podría ocurrir.
5. ex P, P3TD 13 . ...• A2C
14. A4D, AXA
. Las negras no juegan e X P, porque da- 15. DX A, A4C
rían al primer jugador una pequeña ven-
taja de desarrollo 6. P4R, CSC; 7. A3R! Con el fin de poder desarrollar su eD.
La idea de la jugada 5. . .. , P3TD es es- A4A no habría servido a este mismo ob-
perar ti que el blanco juegue 6. e3AD y jeto, porque después de 16. A2R, las ne-
entonces replicar e X P, después de lo cual gras no podrían jugar CD2D a causa de
P4R . sería evidentemente malo a cawa 17. P4CR, A7A; 18. T1AD.
de exe.
Sin embargo, estas jugadas artificiales 16. AX A+, PXA
en las aperturas solamente se pueden usar 17. 0-0,
con éxito contra un jugador que no las
interrumpa. Alekhine, por el contrario, Las blancas han completado ya su des-
la refutó así: arrollo y se puede ver que la estrategia

.176-
introducida con 6. P4R ha alcanzado su el medio juego, cuando la mayoría de este
objetivo. La presión sobre la columna de lado no puede tomar parte activa en el
rey con la ayuda del peón en SD es d·e mismo a consecuencia de la mayor expo-
efecto decisivo. sición de su rey. La mayoría de peones
17 . .. ., T5T en el lado de dama puede ser también
18. P4eD, DIO ocasionalmente superior a una mayoría de
19. P3TD, COlO peones en el centro cuando éste se en·
20. TRIR, RlA cuentra retrasado. Esto sucedió con el PR
del primer jugador en 3R, en la más anti-
Posición a 20. RlA. gua defensa del gambito de dama, donde
con propósitos de ataque se jugó P4AP
(ataque Pillsbury ).
No obstante, se deduce de la enorme
importancia del. centro del tabletv que la
mayoría de peones aquí es más fuerte que
la mayoría de peones contraria en el flan-
co de dama. Se han perdido muchas par~
tidas por ignorar este hecho y por una
errónea interpretación de la teoría de la
-mayoría de peones en el ílanco de dama,
Los modernos maestros que han descar-
tado completamente esta falsa interpreta-
ci!')n de las . enseñanzas de Steinitz han
traiado deli-beradamente en muchas aper·
turas de obtener la mayoría de peones en
el centro. Un importante medio para ello
en la apertura de PD y similares, en las
cuales el negro o el blanco deben jugar
más pronto o más tarde P4AD para com-
pletar su desarrallo, es, para el blanco o
Ahora sigue la combinación final: para el negro, respectivamente, jugar
P4CD, al objeto de cambiar este peón
21. P6D, C3R por el PA contrario.
22. T XC, PXT La más ingeniosa forma de este tipo de
23. ese, DlC apertura es un inmediato l. P4CD, a 'lo
24. e X PR+, R2A que el negro puede muy bien replicar
25. ese+, RlA con l. ... , P4R y defender este peón,
26. 050, T2C después de 2. A2C, con 2. .. ., P3AR, y
27. C6R+, RIC más tarde establecer un fuerte centro con
28. C X T+, RXC P4D. Como en este sistema las negras no
29. P X P, C3A tienen que jugar P4AD, el principal ob-
30. OX P jetivo de la apertura de las blancas que-
y ]as blancas ganan. da destruido. Por esto está más de acuer- ·
do eon el sistema jugar l. C3AR, y sola-
mente después del movimiento negro P4D
EL «GAMBITO BLUMENFELD» Y jugar 2. P4CD, como en la partida Ale-
SISTEMAS RELACIONADOS khine-Drewit.
Otra apertura perteneciente a este gru-
La mayoría de peones en el lado de po es la llamada «defensa polaca,, '· la
dama es uno de los famosos principios dé cual consiste en r eplicar con l. ... , P4CD
la teoría de Steinitz. La ventaja de te- a l. P4D. Esta defensa es dudosa, puesto
ner mayoría de peones en el flanco de que las blancas pueden construir un fuerte
dama frente a la mayoría del bando opues- centro sin tener que jugar primero P4AD,
to en el flanco de rey ·se hoce sentir en por la misma razón que en la apertura

-177
l. P4CD las negras lo forman con P3AR PARTIDA NÚM. 53
en combinación con P4R.
Actualmente, la más importante varian- GA!\IBITO BLUl\1ENFELD
te de apertura en la cual es característica
la jugada P4CD es en el llamado «gam- Pistyan, 1922
bito Blumenfeld>>. ·
Blancas: Tarrasch
1. P40, C3AR Negras : Alekhine
2. P4AO, P3R
3. C3AR, l. P40, C3AR
2. C3AR, P3R
Las blancas pueden evitar el gambito 3. P4A, P4A
Blumenfeld con 3. C3AD. 4. P50,

3. P4A Aquí 4. P3CR con A2C evita el gam-


4. P50, P4CO bito Blumenfeld.

Este gambito, original del maestro mos- 4 . . .. , P4CO


covita Blumenfeld, fue prácticamente usa- 5. P X PR, PAX P
do por primera vez en torneos de maes- 6. PX P, P40
tros en la partida Tarrasch-Alekhine (Pis- 7. P3R,
tyan, 1922). Tarrasch aceptó el gambito
(véase la partida siguiente), y con ello A partir de esta partida no se ha vuel-
dio a su _fuerte adversario una neta su· to a aceptar el gambito Blumenfeld. El
perioridad en el centro. Hoy día este gam· poderoso centro negro de peones ha sido,
hito no se acepta, por lo general. La más en la continuación de esta partida, lo su·
fuerte continuación para las blancas es : ficiente fuer.te para disuadir a los posibles
aceptadores del gambito. No obstante, to-
5. A5C, PX PO davía está en pie la ·cuestión de si las
hlancas pueden o no aventurarse a acep-
En la nota final explicaremos por qué tar el gambito. Pero a este objeto debie-
este cambio es necesario antes de P3TR. ron jugar 7. CD2D (para prevenir la re-
captura de peón por D4T) y entonces des-
6. P X PO, P3TR arrollar el AR por el flanco, por P3CR
7. AXC, DXA y A2C. Este alfil ejercería bastante pre-
sión sohrc el centro negro de peones.
Con esto se llega a una poslClOn que 7. A30
todavía no ha sido aclarada. Si bien es 8. C3A, 0-0
cierto que las blancas dominan más es· 9. A2R, A2C
pacio, también lo es que las negras con- 10. P3CO, C020
servan sus dos alfiles. 11. A2C, 02R
Por otra parte, habría sido un error 12. 0-0, T01D
jugar P3TR la quinta jugada antes de
cambiar el peón en el centro, porque las Las negras ya han completado su des-
negras obtendrían una clara ventaja con arrollo, v con el avance del PR a SR oh·
6 . .AxC, DxA; 7. C3AD, PSC (a 7 .... , tienen 1;n poderoso ataque.
P3TD seguiría 8. P4 TD) ; 8. CSCD, C3T;
9. P4R. En la línea principal de juego 13. D2A, P4R
mostrada más arriba las blancas no pue· 14. TRlR,
den continuar de una manera similar des-
pués del cambio de P en SD, porque el Las blancas desalojan la casilla lAR
negro replicaría a CSCD con D3CD, para que el CR defienda el punto 2TR,
combinad.o con P3TD. y la casilla ID, para que el CD defienda

17R-
el punto 2AR. P or esta razón, un inme· Los progresos del ataque hasta aquí de-
diato P4R por las negras en su jugada muestran lo difícil que es desmantelar
12, en lugar de TDID, habría sido más una posición sin la ayuda de peones.
fuert e.
2 9. P6C,
14. P5 R
15. C2 D, C4R Con objeto de sacrificar la calidad en
16. CI D, C3A5C 2R después de que el negro haya jugado
17. A XC5 C, P X P y alcanzar así una posición defen-
dible.
Si 17. CIA, la partida se decide rapl·
damen.te por medio de la réplica C6A + ! 29. • • •1 C6C+
30. Rl C, PX P
17. CxA 31. DX PC, P7D
18. ClA, D4C 32. TIAR, CXT
33. ex e, .A3R!
Puesto que las blancas han defendido
convenientemente los puntos 2TR y 2AR,
Posición a 33 . ... , A3R
las negras dirigen el próximo ataque di-
rectamente contra el PCR. Para detener
esta amenaza (C3T-4A-5T ), las blancas
se ven obligadas a mover uno de los peo-
nes del lado de rey, lo cual dará lugar
a nuevas posibilidades de ataque.

19. PHR,

Con objeto de .dar tiempo a proteger el


peón de 2CR por RlT, C2T y TICR.

19. C3T
20. RIT, C4A
21. C2T, PSD

El centro vuelve a vibrar. Las blancas


• no pueden tomar este p.eón, porque a 22.
PxP, P6R; 23. CxP, CxC; 24. PxC,
D6C y ganan.

22. AlA, P6D Las blancas no tienen más defensa. Des-


23. D4A+, RIT pués de 34. D6A con el propósito de pro-
24. A2C, C6C+f teger el punto 2CR con D X P, Alekhine
sugiere la siguiente decisiva continuación:
Naturalmente, este caballo no se puede 34. D6A, T6A; 35. D x PR, A4D; 36.
tomar; 04TD, DxP+ !; 37. RXD, TóC+; 38.
R2T, T7C + y mate en dos jugadas.
25. RIC, A4D
34. RlT, AXPT
Más fuerte que la inmediata ganancia 35. PX A, T6A
de calidad por medio de P7D. 36. C3C, P5T
37. A6A,
26. D4T, C7R+
27. RIT, TlA Ingeniosa jugada, pero demasiado tar-
28. D6T, P4T día para ser útil.

- 179
37 •... , DXA Esta ha sido la última oportunidad de
38. ex P, TXP+ cambiar el rumbo de la partida por me-
dio de PxP.
Las blancas abandonan, puesto que des-
pués de 39. Rle, A7T+, pierden la 15. ex e3A, Txe
dama, y después de 39. 1{2e, D6A +,
todo está perdido. Si P x e, las blancas pueden con PSAD
y D4T bloquear todo el lado de dama, lo
cual Se tía decisivo . teniendo en cuenta la
desventajas¡¡ posición de las piezas negras
PARTIDA NÚM. 54 y la eventual extensión del ataque al lado
de rey, ya que las negras están pobre-
APERTURA IRREGULAR mente situadas en ambas alas. Sin em-
bargo, en la próxima jugada el negro
Portsmouth, 1924 prepara una combinación con la que es-
I:'era liberarse.
Blancas: Alekhine
Negras: Drewitt 16. P5AD,

1. e3AR, P4D Posición a 16. PSAD


2. P4eD, P3R
3. A2e, e3AR
4. P3TD, P4A
La apertura elegida por las 'blancas en-
tra en su terreno característico. Por me-
dio del cambio del Pe por el P A contra-
rio, las blancas obtienei;l mayoría de peo-
nes en el centro, con superioridad posicio-
nay y con ello mejor partida.

S. P X P, AXP
6. P3R, 0-0
7. P4A, e3A
s: P4D, A3e

El alfil habría estado decididamente


mucho mejor emplazado en 3D.

9. eD2D, .D2R
10. A3D, T1D
11. 0-0, A2D Las negras, en esta situación no pue-
den retirnr su alfil, porque entonces ASe
Aquí - o . en ·la continuación las negras decidiría la partida. En caso de que las
debieran abrir la partida con P X P; es negras jugasen A4T, las blancas llevarían
verdad que el primer jugador tendría 1ma su e a ae. Sin embargo, las negras se
clara ventaja, pero ~on el centro cerrado, ven obligadas a. hacer el sacrificio de
la mayoría de los peones ·blancos pronto una pieza, el cual evidentemente ha sido
restringirán la disposición de las piezas preparado en su jugada anterior. Las ·ne-
negras. gras obtienen tres_ peones por su caballo,
pero. todas las líneas se abren al ataque
12. , esR, A1R blanco de tal manera que Alekhine tiene
13. P4A, TD1A la oportunidad de terminar la partidil, con
14. T1A, e2o brillante estilo.

180--
16. CXP Después de 22. ..., P3A seguma 23.
17. PXC, AXP A6T y la partida se decide en pocas ju-
18. T3AR, AXPT gadas.
19. TX T, AXT
En el comentario a la jugada 21 vere- PARTIDA NÚM. 55
m.os que P X T no habría evitado la si·
guiente decisiva ·combinación. GAMBITO DE DAMA
20. AX P+,
Cadsbad, 1923
Es frecuente la creencia . de que no se
aprende a hacer combinaciones, sino que Blancas: Grunfeld
solamente son posibles en aquellos juga- . Negras: Alekhine
dores que .tienen innato talento para ellas.
Sin embargo, es un hecho que el pla- 1. P4D, e3AR
neamiento de · fuertes combinaciones se 2. P4AD, P3R
puede aprender con más facilidad. de la 3. C3AR, P4D
que creen los principiantes. Esta habili- 4. e3A, AiR
dad depende del cálculo y se desarrolla, 5. A5e, CD2D
naturalmente, con la práctica. Las com- 6. P3R, 0--0
binaciones requieren también la imagina- 7. TIA, P3A
ción creadora, la cual se puede estimular 8. D2A, P3TD
con el conocimiento de hechos ·concurren- · 9. P3TD, P3T
tes en ellas. Gran número de combinacio- 10. A4T, T1R
nes pertenecen a tipos similares. 11. A3D,
Probablemente, el ejemplo . más eono-
. cido es el frecuente sacrificio de alfil en Con esto las blancas renuncian a la du-
2TR, para alcan~ar un mate con CSC+ cha por .el tiempo», debatida en los pri-
y DST. El tipo de combinación utilizada meros ensayos de teoría, puesto que pu-
aquí por Alekhine es también muy co- dieron con.tinuar con ll. P3T, u ll. A3C,
nocido. El PCR y el PTR del enroque o la continuación de Vukovic, 11. T1D.
er:¡emigo son eliminados por el sacrificio
de piezas con objeto de introducir después 11. . . ., PXP
un ataque mortal de dama y torre en las 12. Ax P, P4eD
columnas así abiertas. LOs más conocidos 13. A2T, P4A
eje1Jlplos de . este tipo están en las siguien-
tes partidas: Lasker-Bauer ( Amsterdam, Las negras han abierto su partida y
1889), Steinitz-Lasker (Londres, 1899) y su posición empieza a mejorar como con-
Nimzowitsch-Tarrasch (San Petersburgo, secuencia natural del fracaso del intento
1914 ). blanco de mantener cerrada la p~ón
negra. Reconociendo este hecho, las blan-
20. RXA cas deberían completar su desarrollo con
21. T3T+, Rle 14. 0-::-0, al objeto de alcanzar la posi-
ble igualdad. Grunfeld, en lugar de esto,
Si las negras hubiesen jugado en su ignorando su verdadera situación, persi-
19 movimiento P X T y el alfil estuviese gue todavía el fantasma de una ventaja,
todavía en IR, la jugada 22. AXP no Y. en lugar de atender a su desarrollo tra·
sería correcta ahora, debido a la réplica ta de crear· un ataque, · y, frente al exce-
P3A. Por otra parte, las blancas podrían lente contrajuego negro, pronto está en
en ese caso continuar victoriosamente con evidente infenorídad.
22. DST, P3A ; 23. D8T +, R2A; 24.
T7T, DlA; 25. AxA. 14. T1D, P 'X P
15. ex PD, D3e
12. A xPr, Abandonan t6. Ate, AlC

- 181
Con esto. las negras completau su des· Posición de 30. P3A
arrollo sin temor a · las amenazas de su
adversario. Es verdad que, después de 17.
C4D X PC, el negro no debe tomar este
caballo a causa de T X C, pero ganarían
.la ventaja con 17 .... , D3A; 18. C4D,
D.x PC R .
Grunfeld reconoce· ahora que sus in·
lentos no han tenido suerte y se ve obli-
gado a ponerse a la defensiva.

17. 0-0, TD1 .A


18. 020, e4R
19. A X e,
Con objeto de controlar el punto 4R
y poder cambiar el peligroso AD negro.

19. AXA
20. D2A, 30 .... , Txe

Un inmediato A4R sería malo a causa Un. limpio sacrificio de calidad que no
ha . sido una so!Presa para Grunfeld. Es
de TxC. fácil ver que las negras ganan después de
31. P X T, A x P; 32. RIA, CSA, segui-
20 .... , P3e do de .DSA +, Pero Grunfeld fue de opi-
21. D2R, e5A nión que, jugando 31. P X P, podía recu-
22~ A4R, A2C perar la pieza con ~una posición defen-
dible.
C X PT sería un error a causa de 23. 31.PXP, e5A
D3A. 32. P x e, DSA

23. AXA, DXA Las negras no habían contado con esto.


24. TIA, P4R Debieron perder al menos nna pieza, pero
prefirieron que le diesen .mate,
Con el fin de apoderarse del fuerte pún· 33. DX D, TXT+
to 6D para . el caballo mediante el avan- 34. DlAR, ASD+
ce del PR hasta SR. 35. Abandona.

25. C3C, P5R PARTIDA NÚM. 56


26. C4D, TRIO
27. TRIO, C4R GAMBITO DE DAMA

Las blancas ahora trazan un plan para Semmering, 1926


expulsar el caballo negro de 6D.
Blancas : Dawin110n
Negras: Alekhine
28. e2T, C6D
29. TXT, DXT 1. P4D, P4D
30. P3A, 2. C3AR, C3AR

182
3. P4A, P3A Considerando la posición a la luz de
4. P3R, P3R 1!)8 viejos principios, se puede llegar a la
conclusión de que el blanco está tan bien
Alekhine muestra su intención de ju. desarrollado como el negro, tiene una po-
gar la defensa Merano. En aquella época sición algo superior y un peón central.
se consideraba muy fuerte jugar aquí 5. Esta partida ofrece otro ejemplo de la
CD2D, de modo que más tarde, después doctrina ahipermoderna» de que un peón
de la jugada negra P X P, las blancas po· central puede significar una ventaja o
<irían recapturar ventajosamente con el una desventaja. En efecto, el peón aquí
.caballo. Pero a 5. CD2D, Alekhine ha no tiene porvenir, porque la casilla· SR
preparado la fuerte réplica 5. . .. , P4A. está en posesión del negro y nunca podrá
De acuerdo con las viejas ideas, esta ju- avanzar su PAR a 4A. Tampoco el PR
.gada habría sido calificada de pérdida de podrá servir de soporte a piezas blancas,
tiempo; pero los modernos maestros con· lo que harían imposible los peones ne-
.siderarían esta aparente pérdida de tiempo gros de 3AD y más tarde el de PCR. La
bien justificada, porque el blanco con · el permanencia de este peón aquí no hace
desarrollo .de su CD a 2D .se libera de la más que obstnlir el juego dé las piezas
presión sobre 5D, y después de la juga- blancas.
da negra P4A tendrá también que perder
un tiempo en poner su caballo de 2D en 12 ... ., C3C
juego. 13. AJA, TlD

5. C3A, CD2D Otra vez el hipermodernismo. La torre


6. D2A, en la jugada siguiente a la próxima va
a lR, de tal manera que se puede uno
Ahora el blanco se resuelve a evitar. la sentir tentado de hablar de pérdida de
variante Merano, la cual en aquel tiempo tiempo. Pero el objeto de esta jugada es
-era considerada todavía muy fuerte, y inducir al blanco a debilitar la posición
de. su rey, como efectivamente sucede, ya
para ello no juega 6. A3D. Pero des·
pués de la jugada del· texto, Alekhine que se amenaza AXP; 15. RxA, TxC;
.cambia de procedimiento utilizando un 16. TxT, D4R+ .
viejo método, el cual es favorable al blan-
-co, pero que hace molesta la posición de
14. P3T, A2A!
la dama blanca en 2AD, como se verá
Amenazando T x C y D4R, lo que pro·
muy pronto.
voca el desarrollo del AD blanco a 3R.
6. A3D El. lectÓr estará perplejo. ¡. ~é ven·
taja supone para las negras 9hligar a -su
7. A3D, O-O oponente a hacer una sólida jugada de
8. 0-0, D2R desarrollo? Vemos aquí una idea estraté-
9. P4R, PX PA
gica que no había sido aplicada antes de
10. AX P, P4R Alekhine y cuyo único precedente se en-
cuentra en la partida Tarrasch-Alekhine,
Este método había sido utilizado con del torneo de Baden-Baden, 1925. Enten-
anterioridad, como hemos dicho, pero con demos esta idea recordando que en la!
la diferencia de "que la dama blanca es- modernas aperturas los alfiles desarrolla-
taba todavía en ID y el AD en 5C. Esta dos sobre los flancos son, por dos razo-
-diferencia es bastante importante. Ahora nes, superiores al desarrollo central de
las negras amenazan ganar un peón con los mismos, si tratan de demoler las po-
11 ....• PXP; 12. CxP, AxPT, com· siciones centrales de peones.
binado con D3D +. Por esta razón es · natural que desde
2CD y . 2CR, los alfiles ejerzan presión
11. TID, PXP sobre mayor número de puntos centrales
12. C X P, que los alfiles enemigos desde 3R y 3D .

.- 18~
La otra razón es que los alfiles desarro- hio de damas, que les seria decisivamen-
llados en los flanccs -no interceptan el ca- te desventajos.o después de 21. D X D.
mino de las torrt"s situadas en ID y IR exD; 22. CIA, P3A; 23. A2D, exA;
para la lucha en el centro, mientras que, 24. C X e, C6C; 25, PSR, A4AR.
situados en 3R y 3D sí los interceptan,
Se puede ver aquí la desventaja del ama- 21. . "' C4R
zacotamiento de piezas blancas en el cen- 22. ex e, DXC5R
tro, obstruyéndose unas a otras y ofrecien- 23. A3R, A2A
do a su contrario puntos de ataque. 24. C2R, D7T+
Ahora la estrategia empleada aquí por 25. RlA,
Alekhine consiste en apretar más este
bloque, formando el P de 4R parte fija Po~ieión a 25. RlA
del mismo.

15. A3R, TIR!


16. A3D, e4T

La masa de piezas blancas ofrece ya


puntos de ataque, Las negras amenazan
CSAR, porque los peones, desigualmente
distribuidos en ambos flancos, dan la su-
perioridad a los dos alffies negros,

17. e(3A)ZR,
En esta posición es evidente que las
piezas blancas menores impiden a
las to-
rres ocupar las columnas abiertas y re-
trasan así su efectividad,

17. , .. , P3e
Véase el comentario que sigue a la ju- 25. AX P!
gada 12 de las blancas.
Es notable que en la partida Tarrasch-
18. TIR, e20 Alekhine de Baden-Baden, a la que nos
hemos referido para comparar la estrate-
Amenazando atacar las mal colocadas gia en ella usada, la decisión, después
piezas blancas con C4R de las maniobras centrales, se reálizó sor-
prendentemente en el lado de rey.
19. e3AR, A3e
20. A5eR, 26. PX A, DXPT+
27. RIC, A7T+
El cambio de alfiles solamente abriría 28. RIT, esA!
la columna de rey a las negras, lo que 29. cxc,
sería 'peligroso por la razón de que las
blancas conservarían su ·alfil menos efec- Después de A X e, las negras con:
tivo que se encuentra bloqueado por A6C+ habrían dado mate en tres ju-
el PR. gadas.

20 . .. ., D4A 29. 1 Axe+


21. C3A, 30. Rle, A7T+
31. RIT, D6A+
Las blancas deben rel?-unciar al cam- 32. RXA, T4R

184 --
Es evidente que esta combinación está que de hacerlo con el PR la postCII)n de-
en conexión con la de la partida Alekhi· peones negros sería irremediablemente in-
ne-Drewitt. Las negras }J.an sacrificado dos ferior · para el final. Después de PC X C, el
piezas para eliminar los peones blancos blanco, en vez de ventaja, solamente ten-
de CR y TR y así obtener un ataque mor· dría dificultades.
tal de dama y torre. Las blancas se ven
obligadas a sacrificar su dama, quedando 5. e3e, P4R
las negras con una decisiva superioridad
material. Esta jugada es demasiado violenta para
ser buena. Como las blancas han llevado
33. D5A, TXD su CD al flanco de rey, las negras deben
34. AX T, D4T+ tomar la iniciativa en el lado de dama.
Por ello, la continuación que el autor de
Las negras prefieren tomar el mejor este libro jugó por primera vez contra
alfil blanco. Tarrasch en Kissiguen, 1929, es P4AD,
la cual da a las negras una buena y có-
35. R1e, DXA moda partida.
6. e3A, PXP
y las negras ganan.
1. ex P, A4AD
8. D2RI+,
PARTIDA NÚM. 57
Con esta magnífica jugada las blancas
se aprovechan de la partida negra con
CARO-KANN
P4R. Si el negro interpone su dama, las
blancas cambian y obtienen una partida.
Kecskemet, 1927
superior con C4DSA.
Blancas : Alekhine 8. A2R
Negras: Tartakower 9. A3R, P4A

1 P4R, P3AD Al objeto de evitar que las blancas ha-


2. P4D, P4D gan el enroque largo, lo que de otra ma- -
3. e3AD, nera habrícn hecho inmediatamente.

Esta es la continuación que actualmente 10. e4D5A, O-O


está de moda, pero es evidente que no 11. D4A!,
da ninguna ventaja a las blancas.
En general, se puede establecer que Al atacar el P AD negro, las blancas
existen dos defensas contra l. P4R, que ganan el tiempo necesario ,para jugar A 3D
hacen imposible para el primer jugador seguido del enroqlle largo.
obtener la iniciativa y dan a las negras
una partida igualada sin dificultades, de 11. .. ., T1R
tal manera que han hecho casi imposi-
ble abrir el juego con P4R desde que A esta protección indirecta es preEeri·
estas defensas han sido conocidas. Son la ble la protección directa por P3CD, que -
Caro Kann y la variante de la defensa más tarde o más, temprano habrá que -
francesa: l. P4R, P3R ;· 2. P4D, P4D; hacer.
3. C3AD, C3AR; 4. ASC, P x P.
12. A3D, P3CD
3 •.. . , PXP 13. 0-0, A3T
4, ex P, e3A!
Esto da lugar al juego brillante, Sin
Si las blancas cambian este caballo las embargo, -en cualquier caso .las blancas
negras deben recapturar con el PC, por- tienen ya una fuerte posición de ataque.

- 185
Posición .a 13 . ... , A3T VARIANTE DE LA DEFENSA
CAMBRIDGE SPRINGS
REHUSADA

Desde el match Alekhine-Capahlanca se


ha puesto de moda evitar la Defensa
Cambridge Springs. En aquel match se
emplearon dos métodos que han sido fre.
cuentemente imitados desde entonces, Uno
de ellos deriva de Capablanca y el otro
es invención de Alekhine. El método de
Capablanca no da una impresión de fuer-
za, sino más bien de inquietud. Es un
hecho que no es verdaderamente fuerte,
y por medio de algunas jugadas se puede
obtener fácilmente la variante alcanzada
en la partida Grunfeld-Alekhine, la cual
a
es muy favorable las negras. En el mé-
todo elegido por Capablanca, después de

1. P4D, P4D
14. C6T+ !, PXC 2. P4AD, P3R
15. AX P+, CXA .3. C3AD, C3AR
4. A5C, CD2D
5. P3R, P3A
~.aturalmente, si el rey toma el alfil,
se;;uiría: 16. DxP+. Las blancas no continúan con 6. C3A,
sino que para prevenir D4T juegan
16. D4C + , R1T
17.TXD, TRXT 6. P3TD,
18. D4R,
El autor de este libro, en una partida
Esta jugada, .que gana una pieza más con Spielmann, intentó dar a esta juga-
da otro sentido, procediendo así:
)' obtiene así una superioridad material,
es la clave de toda la combinación. Para A2R
el negro, A X T no sería mejor que T X T, ;: óÁ, 0-0
ya que la dama blanca tiene a su dispo- 8. D2A, P3TD
sición la jugada D3A.
para desarrollar su torre no por lA, sino
18. C3AD 9. TID,
19. DX C, AlAR
20. CSA, ASA de tal manera que, después de la jugada
21. AX PT, A4D negra PxP, esta torre se oponga al movi-
D7A, miento liberador P4AD. Para una exacta
22. TDIA
comparación, véase la mencionada par·
23. D4A, T3A tida Grunfeld-Alekhine. Sin embargo, el
24. Ax A, TXA negro podía haber demostrado que el plan
25. D5R+, C3A del primer jugador es ineficaz, replican-
26. C6D, Abandonan do a la jugada de la torre con

9• . .. , P4CD

186-
Contrastando con el método de Capa· Aquí se ha recomendado 8 .... , P3TR,
blanca de declinar la Defensa Cambridge con la idea de que después de 9. A4T,
Springs, tenemos el método de Alek.hine, el e de 2R no podría ir a 3eR o a 4A
al cual hemos .llamado invención porque sin la pérdida de una pieza. Sin embargo,
da una nueva línea de ataque. Además, este confinamiento no duraría mucho, por-
sería erróneo considerar como un método que las negras llevarían su e a 3AR para
la jugada 6. P3TD, que únicamente tien· obtener una partida razonablem.ente übre,
de a evitar complicaciones, mientras Ale- de tal manera que el A en 4T ofrece
khine intenta demostrar lo prematuro de la oportunidad del cambio y entonces el
la jugada negra P3AD, a menos que este P negro de 3TH no serviría para otra cosa
movimiento haya sido hecho como reac- que para punto de ataque de las blancas.
ción natural contra la jugada blanca TIA.
Esto aparece detalladamente en la si- 9. C3C, C1R
guiente partida.
Si las negras hubiesen jugado 9. .. .,
P3TR, el primer jugador habría replica··
PARTIDA NÚM. 58 do 10. P4TR. eapablanca desea dominar
la casilla 4R blanca con e3D y eD3A.
GAMBITO DE DAMA
10. P4TR, C03A
Buenos Aires, 1927 11. 02A, A3R
Blancas: Alekhine
En este momento es, quizá, preferible
Negras: Capablanca P3TR, y en caso de que las blancas jue-
guen 12.· eSA, el negro habría ganado
l. P40, C3AR un tiempo en comparación con la conti·
2. P4AO, P3R nuación de la partida.
3. C3AO, P40
4. A5C, COlO 12. C5A, AXC
5. P3R, P3A 13. AX A, C30
6. PX P, PRX P
Esta jugada se puede hacer ahora por·
Alek.hine IniCia aquí el procedimiento
que después de 14 A X C, las negras ha·
ya mencionado. El cambio parece sor-
brían replicado CxA; 15. AxA, CxA.
prendente y haría creer que el negro se
ha liberado; sin embargo, pronto se ha·
cen evidentes las posibilidades de ataque 14. A30, P3TR
blancas en el lado del rey gracias a la 15. A4AR, T1A
libertad de sus piezas y a su mayoría de
peones aquí, mientras el negro no tiene El objetivo inmediato de esta jugada
oportunidad de hacer uso de su mayoría es el de oponerse al enroque largo de las
de peones en el lado de dama con P4AD, blancas con P4A y así obtener un con-
porque el PD negro se debilitaría. .traataque . rápido. Pero la jugada tiene
un sentido mág profundo, incluso si las
7. A30, A2R };>!ancas no enrocan. Las : :~egtas pueden
8. CR2R, realizar su plan d!' ocupar' el punto SR
aun sacrificando un peón, y por medio
Este desarrollo del CR, que no es usual de la jugada 21. ... , D4TD, abrir la co-
en el Gambito de Dama, es propio de este lumna de AD. Después de la jugada na-
sistema. El C se dirige a 3CR para domi· tural 15 .... , TIR, . la~ blancas obtendrían
nar la casilla SAR, punto débil del cam- un poderoso ataque con 16. 0~0-0,
po negro. C3D5R; 17. P3A, CXC; 18. PxC.

8 • ... , 0-0 16. P4CR!,

- 187
Las negras no deben tomar el P a cau- ¡5, TXT, TXT
sa de la pérdida de calidad después de 26. neo, R2T
A X C, éombinado con ASA. Parece que 27. R3C,
el ataque blanco se abrirá paso en pocas
jugadas, pero ocurre ahora que Capablan- Las blancas proceden ahora a hacer va-
ca, con su sacrificio de peón preparado en ler su mayoría de peones en el centro.
la jugada precedente, hace que la ventaja
de Alekhin_!l se cónvierta en extremada- 27 ... . , R3e
28. P3A, P3A
mente pequeña y solamente triunfa por
el excelente juego de Alekhine en .esta
La jugada R4A sería incorrecta a CaU··
fase d'e.:la 'partida.
sa de P4R+.
16. e3A5R 29. PX P, AXP
17. P5e!, P4TR 30. P4T!,
IS.Axe5R, CXA
19. ex e, Pxe Ahora comienza una maniobra para li-
·20. DX PR, D4T+! berar la torre.

D4D sería inútil, porque después del 30 . ... , R4A


cambio de damas, las blancas evitarían la 31. PST,
entrada de la torrre negra con R2D.
Las blancas amenazan liberarse de la
siguiente manera: 32. P6T, P X P; 33.
21. RIA,
TlTD, TxP; 34. TxP, T2C; 35. TST,
R3R; 36. ASC, con fuerzas iguabdas,
A 21. R2R, seguiría D4C+. Pero des- pero con un evidente dominio de la posi-
pués de 21. RlD, la posición del rey blan- ción por el blanco. A 33. . .. , AlD, se-
co sería extraordinariamente peligrosa y guiría 34. T X P, A3C; 35. A8C. Esta va~
las negras podrían obtener ventaja jugan- riante revela el significado de la contraju-
gada negra a la jugada A4A de las blim-
do TRIR en combinación con P4AD.
cas para proteger su PR.
21. ... , D4D
31. ... , T7R
La ya mt"ncionada idea táctica de las Si en lugar de esto las negras se .hu-
negras. biesen opuesto a los esfuerzos de libera-
ción blancos con P3T, éstos habrían ju-
22. DX D, PX D gado P4C-5C.
23. R2e, T7A
24. TRIAD, TRIA 32. TIAD,

Mucho mejor que 24. T X PC, porque Este sacrificio de peón no trata sola-
las blancas obtendrían una decisiva ven- mente de obtener la iniciativa, sino que
taja de posición con 25. TRlCD, TXT; es el principio de una- extraotdinaria y
26. T X T, P3CD; 27. TIAD. El final en profunda combinación de final.
su totalidad es una demostración del teo-
rema que dice que en el final de torre 32. TxPt
la iniciativa vale más. que una pequeña 33. T5A, R3R
ventaja material. 34. P4R,

188 ·-
Posición a 34. P4R 42. RlC, T7AD
43. A6C, T5A
44. R2C, P3C

Naturalmente. T X P sería un error a


causa de 45. R3A.

45. T5R +, R2D


46. P5T,

Así obtienen las blancas dos peones li-


gados y pasados, después de lo cual ga-
nar no tiene dificultad.

46 .... , PX P
47. R3A, PST
4!!. T5T, T6A+
49. R4C, T5A
50. RSA, AXP

Demasiado inocente para detener el


34.... , AXP avance victorioso de los peones blancos pa·
sados.
Aquí patece que las negras podrían
haber obtenido las tablas con P X P. Esta 51. T7T+, R3A
jugada ha sido recomendada por muchos 52. Ax A, T4A+
críticos . . El argumento que dan es el si- 53. R6R, TXA
guiente: 34 ...... PxP; 35. P5D+, R4A; 54. P5A, T6T
36. P6D+, R3R; 37. PxP, T6C+; 38. 55. P6A, T6AR
R2C, T7C+ ! ; 39. R3T !, TSC; 40. T8A, 56. P7A, P4C
TXP; 41. T8R+, R4A; 42. TxT, RxT; 57. TST,
43. A5C, A6A!; 44. P6T, P x P; 45.
P7D, A4T!; 46. P8D=D, AxD; 47. La más rápida manera de ganar que
A x A, R4A; 48. R3C, P4T, y las ne· tiene la fascinación de un estudio.
.gras obtienen tablas porque el rey blan·
.co está fuera del cuadro del P negro pa· 57. P6T
sado. Pero las blancas pueden jugar 46. 58. T5AR, TXT
R3C!! en lugar de P8D=D, con lo cual 59. PXT, Abo'ndonon
·ganaría- el tiempo necesario para . alcan·
·zar el peón. Después de P7T; 60. P8A=D. P8T
=D, las blancas ganan con 61. D8T+.
35. TX P, A6A
Una mayor resistencia habría ofreCido LA TECNICA DE LAS
35. . .. , A 7A+, aunq1.1e la ventaja blan· COMBINACIONES'
ca es clara después de 36. R3T, T7 A ;
37. T5R+, R2A!; 38. A6C. Está muy extendida la idea de que la
facultad de crear combinaciones en aje-
36. TX P, P3T drez no se puede adquirir, sino que de-
37. A7A!, ASR+ pende más bien de un poder innato de
38. R4C, T7C+ cálculo e imaginación. Los jugadores ex-
39. R3T, T7AR perimentados saben, sin embargo, que esta
40. P4A, T6A+ opinión general es errónea, y que la ma·.
4l. R2C, T7A+ yoría de las combinaciones que .ellos han

- 189.
realizado son debidas al conocimiento de la regla caen automáticamente en el pro-
elementos tales como el famoso sacrificio cedimiento erróneo en los ataques de
de alfil blanco en 7TR o 7AR, el cual dama y torre. Además, la razón lógica de
no da al primer jugador mucho que pen- "la regla es extremadamente simple: cuan-
sar, Parece natural que el poder de com- do el rey permanece en l CR, en el caso
binación se pueda desarrollar con el estu- del ataque vertical (a lo largo de la co-
dio aislado de sus elementos componen- lumna de TR), o en 2TR, en el caso del
tes. Nadie dudará que la destreza para ataque horizontal (a lo largo de la octava
meditar sobre un asunto pensadamente línea), la torre con jaque en 8TR obliga
por anticipado puede ser puesta en prác- al rey a salir de su refugio y a aventu-
tica, y como ha sido probado por los psi- rarse a ir a 2AR o 3CR, respectivamente,
cólogos que la imaginación, que es la que por lo que la dama · puede continuar
proporciona las ideas y sorpresas necesa- el ataque· contra el rey mientras la torre
rias para la combinación, no puede ofre- permanece momentáneamente en 8TR
cer nada absolutamente nuevo, basta li- para evitar que el rey .vuelva a su refu-
mitarse a combinar elementos muy cono- gio. Pero si la dama se sitúa delante y
cidos para desarrollarla, aumentando el da el jaque en 8TR, la más poderosa pie-
conocimiento de tales elementos, za queda inactiva en el rincón y la más
Sería una grata tarea escribir una teo- débil (torre) ha de continuar el ataque
ría completa de las combinaciones; se de- contra el rey, que falla por regla general.
mostraría la concurrencia de tipos de com- Por otra parte, en la posición correcta,
binaciones y mostrar que los principales que es con la dama detrás de la torre, se
factores se deben tener en cuenta al juz- puede con frecuencia desarrollar una im-
gar su corrección y al llevarlas a cabo. parable amenaza de mate, porque la dama
Consideraremos aquí no el eternamente no solamente protege la torre, sino que,
discutido sacrificio de alfil en 7TR com- además, gracias a su fuerza en diagonal,
binado con CSC + y DSTR, sino la coope- quita al rey las casillas de escape. Este
ración de la dama y torre atacando e in- simple caso aparece en el siguiente ejem-
vadiendo la posición del rey negro _de la plo, que procede de las más antiguas par-
forma que es usual en la . práctica des- tidas:
pués del enroque en el lado de rey a
través de la columna de TR o también Blancas: Zuckertort
horizontalmente en la octava línea, si el Negras: Anderssen
rey ·negro se ha escapado; es decir, 2TR
a 2CR, mientras la dama y una torre blan- 1. P4R, P4AD
cas han penetrado en la octava fila. 2. C3AR, P3R
En este grupo de combinaciones hay 3. P4D, PXP
una sola regla, cuyo conocimiento nOs lle- 4. ex P, C3AR
vará a realizarlas correctamente, mientras 5. C3AD, A5C
que al jugador que la desconozca le será 6. A3D, C3A
casi imposible encontrar el verdadero mé- 7. A3R, P4D
todo, porque se perderá entre las innume- 8. P X P, CXP
rables variantes, Esta regla enseña que 9. cxco, PXC
en aquellos casos en que la dama no da 10. 0-0, ex e
mate inmediato, es mejor colocar la torre
delante y la dama detrás de la torre. En Ningún jugador moderno habría juga-
otras palabras: es exactamente lo contra- do así, teniendo a su disposición C X A.
rio de lo que se hace en los ataques de Pero esto ocurrió mucho antes de que
mate con dama y alfil, donde la dama, esta manera de jugar cayese dentro del
por regla general, se sitúa delante del al- campo de las tablas y ellos jugaban en
fil, pues de otra manera éste solamente aquel tiempo con alegría ·y vigor.
podría dar un inofensivo jaque. Pero pre-
cisamente por esta equivocada analogía es 11. P x e, AXP
por lo que los jugadores que no conocen 12. TlC, 0-0

190 ........
t3. nc, A4T
14. ASAD, TJR
15. AXP+!, RXA
115. DST +, R1C
17. T3TR, P3A

La pos1c1on se alcanzó en una partida


del match jugado en Viena, 1914. Con oh·
jeto de atacar, las negras permiten que
uno de los peones de su oponente llegue
a dama. Continuó:
1. PSAD=D, TSD
2. D3AR, DST+
3. R3C, DSR+
Ahora vemos una _típica poSICion de
ataque por la columna de TR. Al pare- Sería un error C4T+, porque el hlan·
co sacrificaría su vieja dama y daría mate
cer, las blancas no , tienen más que un con la nueva.
jaque perpetuo, pero esto es debido a que Se podría pensar que las negras que·
la dama está delante de la torre. Cam- darían satisfechas ahora con unas tablas,
biando la posición de la dama y de la pero han buscado y encontrado una ma-
torre se percibe que las blancas pueden nera de colocar la dama detrás de la torre
y el ataque triunfa rápidamente.
forzar el mate en tr-es jugadas. En efec·
to : la posición de las negras es desespe· 4. R2T, D4R+!
rada porque las blancas tienen tiempo
Las blancas no pueden replicar con 5.
para hacer este cambio. P3C porque las negras forzarían el mate
con A4D!; 6. DxT, D7C+.
18. D6C, A3T
19. T7T, D2A 5. D3CR, DST!
20. D5T,
Con lo que se alcanza la verdadera po-
con mate inmediato. sición. Mucho más débil sería T8 +, lo
que permitiría al blanco . permanecer con
un fuerte peón p asado por una pieza.
Ahora consideremos un ejemplo de ata·
que sobre la octava horizontal. 6. D6D,

- 191
Un paliativo al que las negras no hacen 12. TR1R, O-O
-caso. La más prolongada resistencia, aun- 13. TD1D, D2A
que con el mismo fruto, se haría con 6.
D3R, TST+; 7. R3C, C4T+; 8. R3A, Las blancas han completado su desarro-
TSA+; etc. llo y mantenido así su ventaja de posi-
ción, pero ahora se ven obligadas a ata-
G. T8T+ car si no quieren perder gradualmente
7. R3e, D6A+ esta ventaja.
8. Abandonan.
14. e3e, TRIR
Al!ora, un ejemplo más, esta vez ver· ts. ese, CIA
daderamente reciente: 16. eST!, e3e
17. Axe, PTXA
PARTIDA NÚM. 59 Por este cambio, las blancas han obte-
nido la primera condición para un ataque
DE UNA EXHIBICION DE por la columna' de TR.
SIMULTANEAS EN LODZ
18. e4A,
Blancas : Alekhine
Negras: N. N. Amenazando 19. C x P A, de tal ma-
nera 'que el negro se ve forzado a la si-
1. P4D, P4D guiente réplica:
2. e3AR, e3AR
3. P4A, P3R 18 . . .. , A3D
4. ASe, eD2D 19. exPe!, Pxe
5. e3A, P3A 20. Dx P, T2R
·6. D2A,
Con la intención de jugar D-2D-1R,
Antiguamente, los maestros solían ga- Alekhine demuestra que este plan es in-
nar numerosas partidas a los aficionados adecuado, pero la situación negra no era
después de pocas jugadas a causa de su satisfactoria en cualquier otra conti-
gran conocimiento de la teoría de las aper- nuación.
turas.. Actualmente tienen que evitar ·los
métodos familiares de la teoría si no quie- Posición a 20 . ... , T2R
ren caer en una de las numerosas va-
riantes de tablas. Aquí Alekhine, eviden-
temente, quiere evitar la . Defensa Cam-
bridge Springs y habría tropezado con al-
gtmas dificultades si su oponente hubiese
encontrpdo la correcta réplica 6.
P3TR.
6. D4T

Como el negro no se ha dado cuenta de


la diferencia que supone el que el PR no
esté en 3R, él continúa la Defensa Cam·
bridge Springs tal como la ha aprendido.
7. A2D!, D1D
8. P4R, PX PR
9. e X P, A2R
10. ASD, P3eD
11. 0-0, Ale

192
Ahora sigue el centro de toda la com· habiendo jugado P4R en el primer movi·
binación. Las blancas desean llevar su to- miento, las negras han evitado al menns
rre para atacar por la columna de TR. el Ruy López. Pero a 2. C3AD se puede
Para ello disponen el camino T-3R-3TR. responder muy bien con 2 .... , P4D, con
P ero la correcta formación de ataque exi- la continuación 3. P5R, CR2D; 4. CxP,
ge que la torre debe preceder a la dama. CxP; 5. C3R, P3R; 6. C3A, CxC+;
Por ello la torre irá a 4TR y la dama 7. DxC, C3A, o 3. PxP, CxP; 4. A4A,
a 3TR, y esta disposición es decis.iva. C3C; 5. A3C, P4AD; 6. P3D, C3A, etc.
Evidentemente, en ambas continuaciones
21. T4R, 020 las negra~ alcanzan una posición satisfac-
22. T4T, DlR toria.
23. 030, T2A La real v esencial variante de la De-
24. 03TR, Abandonan fensa Al ":Ítine alcanza después de 2.
o P5R, por
Después de 24 .... , RlA, la partida !e
gana con 25. T8T+, CIC; 26. TlR!,
AlA; 27. D4T.
.
"-· C40

Las negras desean provocar P4AD para


debilitar la columna de dama, base del
LA DEFENSA ALEKHINE ataque después de la jugada negra P3A
y PxP.
Esta defensa fue introducida por Ale-
khine en el torneo de Budapest de 1921, 3. P40, P30
y por ello Ileva justamente su ·nombre. 4. P4AO,
Pero la apertura se debe, en gran parte,
a los trabajos de investigación y análisis Una continuación menos peligrosa para
de Grunfeld. las negras que la formación de cuatro
La idea es después de peones introducida aquí es 4. C3AR, des-
pués de lo cual las negras no deben con-
1. P4R, tinuar simplemente su desarrollo con A4A,
como jugó Tarrasch contra Bogoljubow.
Las negras intentan por medio de en Breslau, en 1925, sino continuar el
ataque contra 4R, que es lo que debió ju-
1. ... , C3AR gar con 4. .. ., A5C, más de acuerdo con
el espíritu de la apertura. Después de 3.
atacar este peón y provocar su avance. A2R, nosotros debemos recomendar la in-
novación 5 .... , C3C.
2. P5R,
4 . . .. , C3C
porque el peón así avanzado ofrece al se- S. P4AR,
gundo jugador un punto de ataque sobre
el centro por P3D. Por otra parte, las En lo que respecta a P X P, véase· la
blancas apenas obtendrían ventaja jugan- siguiente partida:
do cuidadosamente y evitando 2. P5R.
Después de 2. P3D, P4R de las negras 5.... , PXP
puede ser dudoso, porque las blancas pue- 6. PAX P, C3A
den jugar 3. P4AR, con ventaja gracias
a la posición del caballo negro en 3AR. A4A se ha jugado frecuentemente aquí.
Pero. después 2. P3D, las negras pueden Pero en el ataque a los peones centrales
forzar una fácil variante de la Defensa blancos radica el significado de toda la
Siciliana con P4AD. Las negras tienen to- apertura ; por ello es mejor que el alfil
davía menos temor a 2. C3AD, porque e5té en disposición de ir ventajosamente
no conocen nada mejor que 2.... , P4R, a se en previsión de que el blanco juege
llegando así a la Partida Vienesa y no imprudentemente 7. CSAR.

- 193
7. A3R, A4A Aquí parece más natural CD3A. Las
blancas juegan para atacar en el flanco
Ahora las negras no tienen nada mejo1· de· rey y no tienen en cuenta que el
que P3R.
centro no se ha estabilizado todavía, y
8 • . C3AD, es un· hecho conocido que los ataques en
el flanco de rey fallan si el oponente ob-
Quizá sea preferible aquí 8. C3AR, tiene un contraataque a través dal ~en­
como jugó el autor en Viena, 1928, con·
tra puesto que no desean encerrar su al- tro. Grunfeld prepara esta ruptura en
fil de Takacs. Naturalmente, después de las siguientes jugadas de un· modo bien
8. ..., ese, puede seguir 9. C3TD. De meditado y la lleva a cabo en el. último
otra manera, después de la continuación momento, pero co'n el tiempo suficien!c
de desarrollo o después de A5C, el CD para reducir al absurdo el ataque blanco.
blanco puede desarrollarse a 2D, que ase-
gura más el centro de peones. 10.... , TlR
11. D2A, C3e2D
8.... , P3R
9. A2R Por una parte, el e va a lAR con pro-
En esta posición normal, las nep-as pósitos defensivos, y por otra, se intenta
tienen dos continuaciones para romper qUe después de la jugada negra P4D,
el centro blanco. La más antigua consis- las blancas no puedan jugar P5A con la
te en C5CD en combinación con P4A; ganancia de un tiempo.
y la otra, menos molesta y que se pre-
fiere actualmente, es P3AR. Es evidente 12. P4CR, e1A
que las blancas tienen mejor desarrollo
de piezas, pero todavía .no se ha pO!lldo 13. 0-0-0, P3A
encontrar una continuación capaz de 14. e3CR, P4D
compensar la debilidad producida en los 15. PSe, PXP
peones blancos por su prematuro nance.
Con esto las negras aislan el PD blan-
co y obtienen el control de su casilla 4D,
PARTIDA NÚM. 60 y en (!\)nseeuencia, rechazan completa~
mente el ataque blanco y obtiene un
DEFENSA ALEKHINE
contraataque dentro de la situación. Se
Pistyan, 192! puede observar que si los dos peones con-
tinúan capturando, las negras conservan
Blancas: H. Wolf la ventaja.
Negras: Gmnfeld
16. ex P, C4D
1. P4R, C3AR 17. P4TR, ese
2. PSR, C4t:> 18. D1e, CXA
3. P4D, P3D 19. Dx e, D4D
. 4. P4AD, C3C A3R
20. P3T,
5. PX P, PR. X P 21. C2D, P4AD
6. A3R, A2R 22. C!C, PXP
7. A3D, C02D 23. Dx P, TRIA+
8. C2R, C3A 24. C3A, D6C
9. P3TR, O-O
10. C2D, y se tiene:

194-
El ataque negro es ahora abrumador.
Las blancas :no tienen defensa contra la
amenaza de AXPT.

25. C3C2R, .A.XPT


26. PX.A, DXP+
27. R2.A, D6C+
28. R2D,

Las blancas deben inclinarse ante lo


inevitable porque después de 28. RlA,
las, negras deciden la partida aún más
rápidamente con A4A.

28 . .... TID
Y las negras ganan.

- 195
MI SISTEMA DE APERTURA

Si las blancas inician la partida avan· en puntos de ataque del adversario. Esto
zando dos· casillas· un peón central, y no es suficiente para condenar estas ju-
las negras le replican simétricamente, gadas puesto que es dudoso si se podría
las prim~ras tratarán de aprovecharse de hallar un sistema mejor de apertura, es
la. oportunidad que se les brinda para decir, un sistema que ofrezca similares
atacar al peón negro que ha quedado ventajas y menos inconvenientes. Sin em·
fijo, prflSionando así a su oponente .o bargo, las tradicionales jugadas de aper-
abriendo líneas en su ventaja. Como he- tura no están más allá de la crítica, v
mos visto, éste es el verdadero signifi- el jugador .de ajedrez debe ocuparse e~
cado del Ruy López y del Gambito de pensar el problema de hallar un siste·
Dama. Recíprocamente, todos los méto- ma mejor. Como la arertura, en gene-
dos de las negras que tienden a igualar ral, es la lucha por la dominación del
contra l. P4R o l. P4D, tienen con éste ·centro, la característica de tal nuevo sis-
de ~omún ,q ue convierten el peón blan- tema será el deseo de presionar el cen-
co central fijo en su punto de ataque. tro sin fijar los peones centrales dema-
En las aperturas de PR, P4D es, por lo siado pronto.
general, la jugada liberadora para las ne- La 'jugada natural en tal. sistema es l . .
~Uas y en las aperturas de PD, P4D o
C3AR. Presiona el centro al evitar P4R
P4R. y conserva abiertas todas las posibilida-
Por este razonamiento hemos expue~­ des del primer jugador. La obstrucción
to ya con anterioridad que l. ... , P4R que hace al PAR blanco es de poca im-
o l. ... , P4D, no son probablemente la portancia, porque · este P debería, rara·
mejor réplica a l. P4R o l. P4D, res- mente y sólo con grandes precauciones,
pectivamente, puesto que en seguida ofre- ser l¡~nzado a un conflicto en el centro,
cen un punto de ataque a las blancas. a causa de la debilidad que supondría
Este punto de vista es compartido por en la posición de su rey. Como la répli-
muchos maeStros de hoy. Al presente ca l. ... , P4R es imposible, el partida-
creemos que es posible dudar si l. P4R . rio de los viejos puntos de vista juega
y l. P4D son las mejores jugadas para l. ..._, P4D, por lo que en realidad el
iniciar la apertura, ya que hemos visto primer jugador realiza una especie de
que estos peones centrales se convierten defensa india con las blancas. Por esta
en el blanco de las operaciones de las ne- razón Kmoch llama este sistema ataque
gras para obtener la igualdad. Se dedu- indio. Pero el estudioso no debiera ad-
ce de esto . que no importa el buen as- mitir esta designación, que le induciría
pecto que las jugadas l. P4R y l. P4D a · aplicar los principios de la defensa in-
puedan tener, ya que se puede ganar dia al ataque indio. La diferencia esen-
la libertad de movimiento, dominar el cial yace en . el hecho de que las ne-
centro y abrir la partida con otros peo- gras juegan la defensa india con el de-
nes lo que supone también una debili- seo de obtener 13. igualdad. El primer
dad principalmente porque se convierten jugador, por el contrario, elige un defi-

197
nido sistema de apertura para sacar ven· está caracterizada por la primera jugada
taja de la misma y mejorar sus posibi· C3AR. Kmoch, quien es de la opinión
bilidades. Ahora . bien, es evidente para de que a las aperturas no se le debiera
cualquier jugador experimentado que un dar el nombre de personas, sugiere para
ataque que ha de traer una ventaja, si los dos sistemas discutidos aquí las de·
está basado en un movimiento de ven· signaciones de «ataque indio de Dama»
taja, puede producir un efecto contra- y «ataque indio de Rey». Exactamente lo
rio cuando el desarrollo es insuficiente. mismo qu e en la defensa india, _creemos
Al principio de 1923, dos sistemas de que pronto se verá lo superfluo de estos
ataque indio de esta clase fueron intra; nombres. Mientras la defema india de
ducidos en el juego de los maestros. Uno rey está muriendo, el ataque indio de
de ellos, procedente· de Nimzowitsch, in· dama se juega raramente hoy.
tenta continuar la presión contra el pun· La mejor defensa contra este sistema
to débil SR después de l. C3AR, con 2. de · ataque que Tartakower ha "llamado
P3CD y A2C. Nimzowitsch, que se ha la «apertura del porvenir», es el contra·
acreditado inventando el mejor método de ataque empleado por primera vez por
defensa india, ha aplicado, como vemos, Lasker en Nueva York en 1924. Segu.
los métodos de esta defensa al ataque. ramente, el método de Lasker tiene más
Pero lo que es b? eno para la defensa, estima a causa de la fama de su creador
paTa obtener la igualdad, no es conve- y por el ~xito que con él alcanzó, que
·niente para obtener la ventaja. La ten- por su verdadero valor, como se va - a de-
dencia, expresada en este sistema, de ata- mostrar a continuación.
car ·.los puntos débiles, al objeto de es-
tablecer puntos fuertes avanzados y, por l. C3AR, P4D
otra parte, dejar intactos los puntos fuer· 2. P4A, P3AD
tes del contrario, conduce a una posición
cerrada de mutuo bloqueo, en la cual la
ventaja de salida apenas cuenta. Esta es Inferior ~ería 2 ... . , P3R, a causa del
la verdadera razón para que este siste- confinamiento del AD. Nimzowitsch V
ma sea ideal para el segundo jugador, otros maestros son partidarios de 2. . . :,
como ya hemos explicado en otro · mo- P X P,. pudiendo recuperar las blancas su
mento, pero como sistema de ataque di- P con 3. C3TD, o todavía más simple-
fícilmente se convertiría en norma. mente con 3. P3R.
Con objeto de sacar ventaja de la aper· 3. P3CD,
tura, se debe jugar un sistema que no
permita al segundo jugador establecer una
posición cerrada siil desventaja en espa· · Después de la jugada negra P3AD, el
cío ni colocar baluartes inrnovibles en PAD blanco debe ser defendido, mien-
el centro. No los puntos débiles, como en tras que después de P3R, se puede ju·
la defensa, sino los fuertes que pueden gar un inmediato 3. P3CR; porque des-
convertirse en baluartes, deben ser lle- pués de PxP, 4. D4Tl es útil.
vados bajo el fuego. En esta idea está
basado el sistema de apertura introduci- 3 • ... , A4A
do por el autor de este libro. Después
de l. C3AR, P4D, las blancas dirigen su _E ste desarrollo de A, que para darle
ataque, no contra el punto débil SR, sino una retirada se jugará después Gugada
contra SD, continuando con 2, P4AD, 9) P3TR, caracteriza el sistema de Las-
P3CR y A2CR. En la nomenclatura de ker, Bogoljubow jugó más tarde (Mos·
la teoría de aperturas, a este sistema de cú, 1925) contra el autor de este libro
apertura se le· ha dado el nombre ·del ASC, método que posteriormente Úle usa·
autor, de acuerdo · con la sugerencia del do por Capablanca.
maestro servió Vukovic. Además, existe
la designación apertura Zuckertort, que 4. P3C, C3AR
es ·mucho i:nás general, en efecto, porque 5. A2CR, P3R-

198-
Si las negras antes de esta jugada ha- Este sistema de ataque, el cual nu es
-cen CD2D, el simple cambio P X P da completamente nuevo, ha sido desarrolla-
ya a las blancas una pequeña pero defi- do por Reti como su arma especial. Si
nitiva ventaja. tenemos que elegir entre las numerosas
designaciones usadas para esta apertura
6. A2C, CD2D las que toman el nombre de un jugador,
7. 0-0, A3D solamente puede elegirse la de «apertura
., Reti» o «Sistema Retil> .
Aquí el A está expuesto y, además, (Para los nombres y precursores de
-está en el camino de la D si la columna este sistema de apertura, véase el capí-
.de dama se abriese eventualmente. Por
tulo anterior. Nota del autor.)
-esta razón consideramos la modesta ju-
.gada de Spielmann. 7. A2R la mejor.
4. PSD
8. P3D,
Como en la mayoría de los casos, pa-
Si las negras hubiesen elegido el sis- sar prematuramente del centro del table-
tema 2 .... , P3R, confinando su AD, en· ro es dudoso aquí. Habría sido mejor
tonces P4D sería muy fuerte ahora. P3A.

8.... , 0-0 5. P3D, A2C


9. C3A, 6. P4CD,
Mucho más fuerte que CD2D, porque ¡Excelente! El PD negro tiene que
la táctica de la apertura de las blancas ser aislado, y entonces o capturado o
aspira a demoler el baluarte negro de --después de P3R- forzado a cambiar
m. en 3R, después de lo cual las blancas
9 •... , P3TR . obtienen una decisiva superioridad en el
10. P3TR, centro.

Una jugada preparatoria de P4R !, que 6 . . . ., 0-0


·de otra forma sería contestada con ASCR. 7. CD2D!, P4A
10. D2R Las negras no tienen una estrategia de-
11. D~A, fensiva satisfactoria, aunque la jugada del
texto detiene la amenaza principal men-
·y las blancas mantendrán la superioridad cionada.
·en el centro con P4R.
Los comentarios sobre la siguiente par- 8. C3C,
·tida del maestro y excelente analista
'Hans Kmoch fueron publicados origina- ¡ Otra vez muy ~ien! Como las negras
riamente en un diario de Viena. abrirían la diagonal de ITD si juega
P3CD, no les queda nada sino el sigÚien-
te pobre cambio.
PARTIDA NÚM. 61
8 . ... , PXP
Carlsbad, 1923
Deben rendir si.1 orgullo cambiando e..
Blancas : Reti bloqueado PSD por el exterior PSC.
Negras: Rubinstein
9. A2C,
1. C3AR, P4D
2. P3CR, C3AR Siempre la jugada precisa. Un inme-
3. A2C, P3CR diato CD X P sería débil a causa de la
4. P4A, réplica P4R.

-199
9. ... , C3A 22. ... , AXA
10. CDX P, ex e 23. RXA, TR1D
11. AXC, P3C 24. C6A, T3D
12. P3TD, 25. T3R, TlR
Abriendo la columna ventajosamente. Maroczy es de la opm10n que se debió.
Por otra parte, un asalto sobre la TD sacrificar la calidad, mejor o peor, en
negra con i2. C2D fallaría completamen· 3AD negro. Pero. esto sólo habría retar-
te a causa de DXA; 12. AxT, CSC!, dado el desastre un tiempo.
etcétera.
12.... , A2C 26. DSR,
Amenaza AxC; 14. AxA, ·nxA; 15. (Para provocar P3A y hacer permanen-
A X T, CSC y ganan. temente imposible el socavamiento de SD
13. A2C, y de la posición del C en 6A. Nota del
autor.)
Pero ahora las negras tÍ'fnen que cam-
biar en 3T. 26 .... , P3A
27. D2C, P4R
13. PXP 28. D5C!,
14. T X P, D2A
15. D1T, La D está aquí en una verdaderamente-
Se puede asegurar que Reti no descu- fuerte posiCión. Ataca 6C, y en cualquier
brió esta jugada, j la inventó ! Es muy caso previene el sacrificio · liberador en
fuerte y dibuja completamente las verda- 6A.
deras características de la partida. Las ne- 28 .... , R2A
gras him de darse prisa para sacudirse 29. T1CD, C2D
la presión sobre 2CR. 30. P3A, T1AD
15.... , C1R
16. Ax A, ex A Posición después de 30 . ... , TIAD
17. 0-0, C3R
18. TIC, Negras: Rubi113tein
Amenaza 19. TxPT, TXT; 20.
D X T, puesto que la captura de la D
con T1T fallaría por DxP.
18. A3A
19. P4D, A5R
20. T1 D, P4TD
Con objeto de ·eliminar la amenaza la'
tente contra 2TD negro. Por otra parte,
la casilla 3CD negra es ahora más dé-
bil que antes 19 era 2TD.
21. P5D, C4A
22. C4D,
Ganando la casilla 6AD para el C. El
gran estratega Rubinstein está. ya com-
pletamente vencido, cosa rara, porque si
bien, es cierto que Rubinstein ha perdido
partidas, ha ocurrido casi invariablemen-
te a través de grandes combinaciones. Blancas: Reti

200-
3 i. T3D!, 48. P X P, R2R
49. R4A, R20
¡Muy bonito! Las negras preparaban 50. RSA, Abandonan
la igualdad con ClC. Las blancas, por
ello, defienden su PD de tal manera que,
después de ClC, puedan continuar victo- EL CENTRO DE PEONES COMO
riosamente con 32. P5A. OBSTRUCCION DE SUS PROPIAS
PIEZAS
31. "" ., P5R
Un centro de p eones avanzado a la
Después de C4A, las blancas ganan con cuarta casilla y bloqueado puede tener
32. D X P C, etc. El sacrificio de un peón otras desventa jas además de las ya apun-
para desalojar el C de 6A es un precio tadas de ser el blanco del ataque ene-
muy caro. migo. Puede constituir también una obs-
trucción para sus propias piezas, espe-
32. PXP, C4R cialm en te el alfil y otras, y en el fin,
33. Dx PC!, incluso para el rey. Mantener los p eones
centrales retrasados como en la llamada
Porque después de C X T ; 34. P XC,· «pa rtida hipermodernan es verdaderamen-
etcétera, el ej é rcito de p eones pasados te Yentajoso aun en la última fase del
blancos ganaría fácilmente. final. Un ej emplo de esta clase nos ofre-
ce el siguiente final , procedente de una
33. ex e partida jugada en el torneo de Moscú.
34. P5A!, 1925.

La punta de la maniobra introducida Posición después de la jugada 27 negra.


con 31. T3D! La inmediata r epresalia
en 6A sólo conduciría a unas tablas. Negras: Romanowski

34. ... , T2D


35. PXC, TXT
36. DXD+, TXD
37. P X T, TXP
38. T7C+, RIR
39. P4D, T3T
40. T6C!,

Captnrando otro -peón,. porque si las


.negras cambian seguiría 41. PxT, RID;
42. P5R, P x P; 43. PxP, P5T; 44.
P6R, P6T; 45. P7C, R2A; 46. P8C=
D+, R x D; 47. P7R, P7T; 48. P8R=
D+, y ganan. El resto es demasiado sim·
pie y no necesita explicación.

40. ... , TIT


41. TX P, P5T
42. T2A, P6T
Blancas: R eti
43. TZT, R2D
44. PSD, P4C
45. R3A, TST Si en esta posrcwn el PR blanco eo,-
46. R3R, P4T tuviera en 4R y el A en 4AD, habría
47. P4T, .fXP una absoluta igualdad para los dos k :1-

201
dos. La diferencia en la pos1c10n de · los· Preparando la combinación que 11igue:
peones de rey, sin embargo, da la supe-
rioridad a las blwcas. El PR negro es 36. P4C, P3C
inútil y además restringe la actividad del 37. TX P, -R4C
A negro. Para comprender toda la exten- 38. T7T, RXP
sión del daño que supone este peón cen-
tral, debemos preguntarnos qué ventajas Amenazan mate con PXP. Si 39.
se derivan para las blancas en la conti- P X P, entonces P4A mate. Después de
nuación del hecho de que la casilla 4R 39. P6A, seguirían unas tablas forzadas
no se puede hacer inaccesible a sus pie- con R4C; pero ahora triunfa la culmina-
zas por cualquier peón. ción de la contra-combinación que las
Por lo pronto, el A blanco se encuen- blancas tienen preparada hace varias ju-
tra muy bien en esta casilla, que será gadas.
usada como vía por la torre y, final-
mente, constituye un punto fuerte para 39. A6R;
el rey blanco.
Las negras deben aceptar este sacrifi-
28. T4A, RlA cio, porque después de T2R, las blancas
29. R3A, TIA ganarían con 40. TXP, TXT; 41.
30. P3R, A6A PXP+.
31. P4TD,
PXA
Las blancas toman ventaja de la opor-
tunidad de avanzar su retrasado PTD.
Naturalmente, no .40. T X T a causa de
31. R2R PCXP mate.
32. ASO, T2A
33. T4T, P3T 40 ... . , TlD
34. R4R, R3A 41. T7T, R4C
35. T5T,
El A se libera con una jugada de re-
Ahora las blancas, que han obtenido traso, 41. ... , A8R; 42. PST, AST; 43.
una dominante posición para sus piezlls P6T, A3A; 44. P7C, TlCR; 45. T7C,
gracias a la casilla 4R, amenazan ganar A X P; 46. P7T, y las negras están obli-
con P4C en combinación con P4T y gadas a jugar TITD, a causa de la ame-
PSC +, ya que la invasión de 8T por la naza T8C, después de lo cual las hlan·
T decidiría siempre la partida rápidamen· cas ganan fácilmente con 4 7. T X A+.
te. No hay nada que se pueda hacer es-
tratégicamente contra esta amenaza y la 42. P7C, R3T
ingeniosa combinación inventada por Ro- 43. P5T, R2T
manowski es por ello m·á s admirable. Pero 44. P6T, T3D
como · suele ocurrir en el juego de combi-
nación, las mejores posibilidades son para De otra forma, las blancas ganan CO':
las piezas .mejor colocadas, y así, las blan- T7C, en combinación con P7T y TSC.
cas consiguen frustrar la combinación
enemiga. El punto esencial de todo esto 45. P4T, ASR
es el triste emplazamiento del A negro, 46. P5T, AST
que está impedido por sus propios peo- 47. P6T, Abandonan
nes de llegar a tiempo a la defensa.
Después de A3A, la niás simple ma-
35 .... , T2D nera de ganar es 48. T7AR.

202 -
IN DICE

Pogs.
PRIMERA PARTE

MAESTROS DE AYER

Prólogo . .. ...... .... ..... . ... ... . . 7


Ricardo Re ti . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 9
Adolfo Anderssen . . . . . . . .. 11
Pablo Morphy . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
Guille~o Steinitz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 33
Siegbert Tarrasch .. . .. . . . . . . . .. . .. . . .. .. . . .. 56
Sobre la Teoría de la Partida Española ... .. . 62
El Gambito de la Dama .. . .. . .. . .. . . . . . .. . .. 65
;_\fanuel Lasker . .. .. . .. . .. . . . . .. . .. . .. . . .. . .. .. . .. . .. . 69
La Defensa de Steinitz en la Partida Española . .. .. . .. . 79
La Vari ante de Cambio en la Partida Española .. . . .. 84
Carlos Schlechter .. . . . . .. . . .. . .. .. . .. . .. . .. . . .. . .. .. . 93
Harry Nelson Pillsbury ... .. . ..... . ..... . 101
Ejemplos de rupturas interesantes .. . .. . 101

INDICE DE PARTIDAS

Rosanes-Anderssen.- Gambito Falkbeer . . . . . . . . . . .. 12


Rosanes-Anderssen.-Gambito Kieseritzky ... ... .. . 14
Anderssen-Paulsen.-Defensa Philidor . . . . .. 18
Meek-Morphy.-Gambito · Escocés ... ..... ...... ... . 24
Lichtenhein-Morphy.-Gambito Escocés ... .. . . .. . .. 26
Schulten-Morphy.-Gambito Falkbeer ....... _. .. . .. 27
Morphy-Meek.-Partida' l'ranr.e~a, ... .. . .. . . . . . . . .. . . . . . .. 28

-203
Págs.

Morphy-Aficionado.-Gambito Evans .... ....... . 29


Morphy-Brunschweig e ·lsouard.- Defensa Philidor 31
Dnbois-Steinitz.-Partida Italiana . . . . . . ... ... . .. 34
Blackburne-Steinitz.-Gambito Evans ... 35
Steinitz-Mongredien.-Fianchetto ue Rey 38
Steinitz-Macdonnel.-Defensa Philidor ............. .. 40
Paulsen-Steinitz.-Partida de los Tres Caballos .. . 41
Rosenthal-Steinitz.-Partida de los Tres Caballos 43
Steinitz-~lackburne.-EEpañola .. . . .. .. . ... .. . 46
EngÍic.lJ.-S~einitz.-Española .. . .. . .. . .. . .. . .. . 48
Steinitz-'I:schigorin.-Española ... . :. .. ......... . 51
Steinitz-Bardeleben.-ltaliana .. . .. . .. . 53
Tarrasch-Noa.-:-;-Francesa .. . . .. .. . .. . . :. .. . 57
.Ta·rrasch-Marco.-Rusa .. . .. . .. . .. . ... . ..... 60
Tarrasch-Lasker.-Española ... . .. .. . ... .. . .. . 62
Tarrasch-Mieses.-Francesa .. . .. . ... .. . ... . ....... . 64
Tarrasch-Tartakower.- Contragambito Albin ... ... .·.. 66
Blackburne-Lasker.-Gambito del Centro ........ .. .. 71
Lasker-Napier.-Siciliana ......................... .. 74
Marshall-Lasker.- Española . .. .. . ... ... .. . ... .. . 76
Tarrasch-Lasker.-Española ... ... . .......... . 81
Lasker-Capablanca.-Española .. . ........... : 85
Rubinstein-Lasker.-Gambito de Dama .. . 88
Schlechter-Marco.-Gambito de Dama .. . . .. 93
Schlechter-John.-Gambito de Dama .......... .. 95
Schubert-Schlechter.-Gambi.to de Dama ..... .... ............ . 98
Pillsbury-Marco.-Gambito de Dama , ..... ....... .... . 104

SECUNDA PARTE

MAESTROS DE HOY

Prólogo· . . . • . . .. . . . . .. . .. . . .. .. . . . . .. . . .. . . . .. . Í09
Geza Maroczy .._. ........ . ................ .. 111
Erank J. Marshall ........................ .. . 116
Rodolfo Spielmann .......................... . 119
·y ariante del Gambito en la Aperiura Vienesa. 119
Milan Vidmar ................ . .... . ......... .. ... . ......... 122
Javier Tartakower ........................... , .. . .... . 125
Holandesa ...................................... . 125

204-
Piigs.

Effim D. Bogoljubow ... 130


Aaron N"unzOwitch . . . . .. 140
.La Variante Hanhan 142
Defensa India ......... .. . ··' .. ,. .. . 145
Akiba Rubinstein . . . . . . . .. 151
Apertura de los Cuatro Caballos ... ,. . 154
José Raúl Capablanca . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 161
Teoría de la Defensa Caro-1\.ann .. . .. . . .... ." .. . 164
Las Defensas de Cambridge y Westphalia en el Gambito de Da~a 168
Final de Torre ..... . . ... .............. ..... . 172
Alejandro Alekhine .. ...... . . .. . .... . .. ...... ....... ... .. ...... . 175
El Gambito Blumenfeld y Sistemas Relacionados . . . . . . . . . . . . . .. 177
Variante de la Defensa Cambridge Spring3 Rehusada 186
La Técnica de las Combinaciones .... . . 189
La Defensa de Alekhine . . . . . . . . . . .. 193
Mi Sistema de Apertura ... .... ... ..... .. . 197
El centro de peones como obstrucción de sus propias piezas 201

INDICE DE PARTIDAS

Mieses.-Maroczy.-Gambito Danés ... ... ... ... ... ... 111


Maroczy-Euwe.-Defensa Siciliana .. . .. . . . . . .. 113
Marshall-Bum.~Gambito de Dama 116
Marshall-Kline.-Gambito de Dama . . . ... .. . •· . 117
.Spielmann-Flambreg . .. ... ... ... ... . .. ... ... .. . 120
cRubinstein-Vidmar.-Defensa Budapest ... ... ... 122
·Maroczy-Tartakower.-Holandesa ... .. . ... ... 127
Bogoljubow-Wolf.-India ... ... ... ... ... ... ... .. . ... 131
'Bogoljubow-Mieses.-Defensa Holandesa ... .. . .. . . . . 132
Von Holzahausen-Bogoljubow.-Defensa Siciliana .. . ... ... ... 135
Johner-Bogoljubow.-Gambíto de Dama ... .. . ... ... ... ... . .. ... .. . 137
Nimzowitch-Salwe.-Defensa Francesa ... .. . . . . . . . . .. . . . . . . . .. ... 141
Teichmann-Nimzowitch.-Defensa Philidor - Variante Hanham . . . .. . 143
Johner-Nimzowitch.-Defensa Nimzo-India .-.. . .. .. . ... 146
Brinckmann-Nimzowitch.-Defensa Nimzowitch .. . .. . . . . 148
Marshall-Rubinstein.-Apertura P. D. ... ... ... ... .. . .. . 151
Tarrasch·Rubinteins.-Apertura de los 4 Caballos .. . .. . 155
Rubinsteín-Hromadka.-Gambito de Rey Rehusado . . . 158
Capablanca-Vidmar.....:..Ruy López . .. . . . . . . ... .. . ... . . . 162

-205
Págs.

Nimzowitch-Capablanca.-Caro-Kann .. . ... ... .. . .. . ... .. . ... ... .. . 165


Capablanca-Spielmann.-Gambito de Dama ... ... ... 170
Alekhine-Wolf.-Gamhito de Dama ...................... :. ... ... ... . 176
Tarrasch-Alekhine.-Gambito Blumenfeld 178
Alekhine-Drewitt.-Apertura · Irregular ... . . . . .. 180
Grunfeld-Alekhine.-Gambito de Dama .. . . . . . .. 181
Dawinson-Alekhine.-Gambito de Dama .. . 182
Alekhine-Tartakower.-Caro-Kann .............. . 185
Alekhine-Capablanca.--,-Gambito de Dama .. . . .. 187
Zuckertort-Anderssen . . . ... .. . . :. .. . .. . .. . .. . ... .. ... . 182
Alekhine-N. N.-En simultáneas· .................. · 192
Wolf-Grunfeld.-Defensa Alekhine •.. .. . .• • .. . . .. . .. 194
Reti-Rubinstein .. . .. . . .. .. . ... .. . . .. ... ... .. . .. . 199

206 ~·
Las partidas seleccionadas por Reti
son la plataforma desde la que
desarrolla sus revolucionarias ideas ajedrecísticas.
Las conclusiones de Reti
y la "escuela hipermoderna" por él creada
no fueron plenamente comprendidas en su época.
La posteridad ha visto
a la estrella de Reti brillar con luz propia
y poderosa a través de su genial obra escrita.
Su sistema didáctico no puede ser ignorado hoy
por ningún ajedrecista.
Leer a Reti, como a Nimzowitch ,
es algo preceptivo para quien estudia
y practica ajedrez.

EDITORIAL
FUNDAMENTOS

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