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Apocalipsis sin misterios

Pr. Aluízio A. Silva


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Presentación
¿Qué vio Juan en la Isla de Patmos?
Cristianos en todo el mundo desean con toda sinceridad conocer a fondo las
revelaciones dadas al apóstol Juan por Jesucristo en la isla de Patmos, a pesar de
que estén registradas todas en el último libro de la Biblia Sagrada, el misterio creado
acerca de Apocalipsis hace con que muchos eviten su lectura. Con el lanzamiento de
esta valiosa obra que ahora está en sus manos, Apocalipsis pasa a ser un libro
accesible a cualquier cristiano.

En las páginas de Apocalipsis sin misterio, el pastor Aluízio A. Silva hace lo que se
propuso a desmenuzar la propia obra “mostrar que Apocalipsis no es un libro
enigmático y misterioso, sino que puede ser entendido por cualquier cristiano
nacido de nuevo”.

La obra nace de una serie de mensajes ministradas en la iglesia Videira de Goiania, se


divide en dos partes: en la primera, Aluízio se dedica a lanzar conceptos básicos que
preparan al lector a entender todo el contexto que cerca la obra, desde el ambiente
histórico hasta una breve biografía del apóstol Juan. En la segunda parte, el autor
comenta uno por uno los veinte y dos capítulos de Apocalipsis, sin esquivarse de
ningún símbolo o evento que fueron relatados por el vidente Juan.

Enfatizar una parte de la verdad sin tomar en cuenta las otras es violar aspectos de
la verdad produce discordia. Por eso la iglesia necesita tener equilibrio al destacar
algunas verdades. Equilibrar significa armonizar, organizar todas las partes en un
conjunto agradable y armónico. Esa organización, el pastor Aluízio, hace muy bien
al interpretar Apocalipsis a la luz de toda la Biblia y no como una parte separada del
libro sagrado. La naturalidad como el libro es explicado sorprende al lector y
quiebra cualquier tabú que se pueda tener en relación a ese misterioso libro.

El autor evita el exceso de detalles, comentarios desnecesarios, interpretaciones


extravagantes y cuestionables, con el objetivo de dejar claro que las escrituras
hablan por si mismas al confirmar las verdades explicadas en Apocalipsis con otras
partes de la Biblia.

El texto es rico en informaciones sobre la historia de la iglesia, muestra en cada


página que el autor es un maestro de la palabra y consigue ser profundo sin ser
complicado y ser sencillo sin ser superficial, dos cualidades que pocos autores
consiguen conciliar.

Es imposible quedar indiferente delante de este libro, en cada capitulo el autor


desafía, confronta al lector a vivir de acuerdo con el padrón que Dios estableció
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para su novia. Para muchos lectores, varios conceptos presentados aquí tal vez sean
totalmente nuevos; por eso, es recomendable que el libro sea leído con mucha
atención y oración, buscando siempre con cuidado la cantidad de referencias
bíblicas. Así como los bereanos que cuando el apóstol Pablo les presentó el
evangelio de Cristo, fueron más nobles que los tesalonicenses, pues recibieron el
mensaje con gran interés examinando todos los días en las escrituras (Hechos 17:11)

Muchos volúmenes ya fueron escritos sobre Apocalipsis; sin embargo, tal vez nadie
haya conseguido entrar tan profundamente en la explicación de los símbolos y
visiones contenidas en el libro. Algunos autores explican lo obvio y saltan los puntos
difíciles de los cuales todavía no tienen entendimiento. Otros se tornan tan
complejos que nadie consigue entenderlos. El pastor Aluízio no huye de ninguno de
los textos, sino encara capítulo por capítulo, explicando al detalle a través de las
páginas escritas cada hecho por mas oscuro que aparentemente parezca.

Con esa publicación, la editora Videira da una gran contribución a la iglesia


Evangélica, principalmente a los líderes y pastores que se fatigan en la enseñanza de
la palabra y que a partir de ahora contarán con una excelente herramienta para sus
estudios y una fuente de pesquisa de valor incalculable.
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Sumario.
Parte I
1. Introducción…………………………………. 6
2. Visión general……………………………….. 9
3. El significado de los números ……………...15
4. La visión de los vencedores……………….. 21
5. La salvación y el reino……………………… 26
6. Los tres juicios ………………………33

Parte II
1. Compañero en la tribulación
en el reino y en la perseverancia (Cap. 01)………40
2. La visión de Jesús glorificado (Cap. 01) …………55
3. La iglesia de Éfeso (Cap. 02) ……………………..62
4. La iglesia de Esmirna (Cap. 02)…………………...70
5. La iglesia de Pérgamo (Cap. 02)…………………..76
6. La iglesia de Tiatira (Cap. 02)……………………...81
7. La iglesia de Sardis (Cap. 03)…………………….87
8. La iglesia de Filadelfia (Cap. 03)…………………..92
9. La iglesia de Laodicea (Cap. 03)…………………..97

Revelaciones del trono de Dios (Cap. 04)……………….103


Los que viven delante del trono(Cap. 04)……………………...108
El cordero y el libro sellado (Cap. 05)…………………………..120
Los siete sellos (Cap. 06)………………………………………...127
Los dos pueblos de Dios (Cap. 07)……………………………..137
Las siete trompetas (Cap. 08 – 09)……………………………..146
La visión del ángel (Cap. 10) …………………………………....159
Los dos testigos (Cap. 11)…………………………………….....169
La mujer y el dragón (Cap. 12)…………………………………..175
Tres visiones del arrebatamiento (Cap. 12)……………………185
Comprendiendo el arrebatamiento (Cap. 12)…………………..195
La bestia que emerge del mar- el anticristo (Cap. 13)………...204
La bestia que emerge de la tierra- falso profeta (Cap. 13)……215

La gran tribulación en la óptica de Dios (Cap. 14)……….222


Las siete Copas (Cap. 15 – 16)……………………………………..232
La gran Babilonia (Cap. 17 – 18)…………………………………..245
Las bodas del cordero (Cap. 19)…………………………………..260
El Armagedón (Cap. 19)……………………………………………270
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El milenio (Cap. 20)………………………………………………....279


La Nueva Jerusalén (Cap. 21)……………………………………..288
La eternidad (Cap. 22)……………………………………………...300
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Parte I

Llaves para comprender Apocalipsis


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Introducción
De entre los libros de la Biblia, Génesis y Apocalipsis son los más hostilizados por el
diablo. Entre los dos, Génesis es el más ignorado.

Para los intelectuales: historiadores, científicos, antropólogos, geólogos,


arqueólogos, etc. Génesis es apenas un mito. Las historias de Adán y Eva, del
conocimiento del árbol del bien y del mal, del diluvio, de la serpiente hablante y
tantas otras, no pasan de fantasías de la mente humana. En su cruzada para ignorar
todo el texto bíblico, el diablo colocó en la mente de las personas que Génesis es
solamente una ficción.

¿Por qué el diablo hace eso? Porque Génesis 3:15 registra la primera profecía de la
Biblia, donde Dios mismo declara que Satanás será derrotado en el final. “Yo voy a
ejecutar juicio contra ti” – dijo Dios mirando a la serpiente – de la mujer vendrá
aquél que ha de aplastarte la cabeza.

El diablo oyó aquella profecía. Él sabe que el Señor no puede mentir, pronto se
cumplirá lo que Él dijo, porque es soberano: reino absoluto sobre las cosas. De ese
modo, el diablo sabe que poco tiempo le resta (Ap. 12:12)

Con relación a Génesis, la artimaña del maligno consiste en convencer las personas
de que se trata apenas de un mito, mas en Apocalipsis la estrategia es diferente. Él
busca resistirle mostrando como un libro misterioso, enigmático, de difícil
entendimiento. Muchos piensan que solamente los eruditos y los catedráticos
consiguen entenderlo, el enemigo quiere hacer de Apocalipsis un libro sellado; sin
embargo es una obra abierta delante del pueblo de Dios. Si usted es salvo y
regenerado, si dentro de su espíritu reside el Espíritu Santo de Dios; entonces el
Espíritu Santo abrirá ese libro delante de ti.

En esa batalla espiritual, no quede sorprendido; si al leer la palabra de Dios, ocurren


bloqueos en la mente, dificultad de concentración, sueño, etc. El enemigo no quiere
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que usted las asimile la palabra, porque en Apocalipsis se cumple la profecía de Gn.
3:15 – la antigua serpiente que se transformó en Dragón, será lanzado en el lago de
fuego. Eso está escrito y determinado en Apocalipsis 20:10. Para Dios, la
condenación eterna del diablo en el lago de fuego ya es un hecho.

Sin embargo, existen otras razones por las cuales el libro de Apocalipsis, es tan
olvidado. ¿Usted ya observó cómo algunos se sienten incómodos con el contenido
de esta obra, y por qué se incomoda tanto? Porque Apocalipsis confronta al
creyente con la necesidad de ser fiel hasta la muerte (2.10), perseverar (2:25), vigilar
(3.2,3.11), arrepentirse (2:5, 16; 3.3,19), ser celoso (3.19). El libro habla todo el tiempo
sobre la disciplina (3.19), justicia (3.18; 19.8), el día de la ira divina (6.17) y el juicio
final (11.18, 20.12,13). Claro que eso incomoda, porque muchos quieren una vida
cristiana fácil. Muchos practican el cristianismo de la falta de compromiso: nos es
necesario vigilar ni orar mas, basta reprender al demonio una vez por día y listo, se
acabó el problema, nadie mas necesita arrepentirse de nada, no es necesario mas
cultivar el celo por la palabra de Dios, ni el fervor en la ministración, ni la dedicación
al primer amor. Apocalipsis produce ansiedad en esa clase de personas.

Otra razón porque muchos no quieren leer Apocalipsis es porque en sus mentes,
Dios es exclusivamente un Dios de amor, que consecuentemente jamás queda
irado. Piensan que la ira es una emoción excluida de la personalidad divina,
lamentablemente es una equivocación, porque además de ser un Dios de amor, Dios
es también un Dios justo. Así como nosotros criaturas imperfectas e injustas:
abominamos la maldad, la violencia y la injusticia. Dios también abomina los hechos
que confrontan y ultrajan a su justicia. Apocalipsis es el libro que habla sobre el día
en que Él va hacer justicia al mundo: juzgar al impío y derramar sobre él su ira.

Parece claro que a muchos no les gusta de oír al respecto del juicio. Está llegando el
día en que Él va juzgar tanto los vivos como los muertos, conforme Apocalipsis. Por
causa de eso, muchos evitan su lectura.

Muchos realmente sienten miedo cuando leen Apocalipsis y esa es otra razón
porque son negligentes en su lectura. Tienen recelo sobre el conocimiento de la
realidad del infierno. Apocalipsis muestra claramente que el infierno existe. Es la
morada de aquellos que no fueron santificados por el lavar regenerador y
purificador de la sangre de Jesús. Apocalipsis es asustador, hace estremecer por
dentro. Cuando imagino el destino que la Biblia reserva a las personas que están
viviendo aquí totalmente ajenas e indiferentes a Dios, mi corazón se estremece y se
agrava mucho más el encargo de anunciarles la palabra de Dios.

También el cristiano activista desagrada leer Apocalipsis, porque de inicio, el


enfoque no es la obra, el trabajo realizado, sino el testimonio coherente con la
palabra. Apocalipsis es un libro que trata de la relación entre el cristiano y
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Jesucristo, el énfasis no está en la actividad o en la obra humana, sino en la relación


con Dios, el énfasis está en su corazón haber sido conquistado por Dios. ¿Tú amas al
Señor? ¿Su corazón es para Él, independiente de cualquier cosa? Muchos de
nosotros infelizmente queremos apenas el ritual, la liturgia, el activismo y no una
relación personal con Dios.

En el apocalipsis, veremos siempre cosas extraordinariamente sobrenaturales


sucediendo en la tierra, en el cielo y en el mar. En un ritmo alucinante: mortandad
debido a guerras, hambre, pestes y grandes calamidades (6.4, 6, 8) un gran
terremoto que hace desaparecer montañas, montes e islas (6.12, 14) eclipse solar y
lunar simultáneamente (6.12), lluvia estelar, caída de meteoritos y hombres
quemados por el sol siete veces mas caliente (16.8, 9, Is.30:26) los impíos siendo
tomados por una gran angustia, desespero y terror (6.15, 16), truenos y voces
retumbantes, relámpagos y terremotos (8.5; 16.18; 11.19), tinieblas y oscuridad (6.12;
8.12; 9.2), langostas y escorpiones (9.3). Eso agrede la mentalidad la mentalidad
natural de las personas, que por causa de eso, tienden a rechazar el libro.

En Apocalipsis, todo tiene una apariencia sobrenatural: un mar de vidrio, criaturas


con cuatro caras, seres vivientes con ojos en la frente y atrás, ancianos gigantescos
y ángeles prodigiosos (4.4-8). Además de eso cosas tremendas y situaciones
inusitadas acontecen: Juan come un libro que simultáneamente, era dulce al paladar
y amargo al estómago (10.10).

Es asustador ¿verdad? La mente humana que no está acostumbrada con el lenguaje


celestial de Apocalipsis, se perturba delante de una dimensión imperceptible a los
sentidos; por eso la razón porque la lectura de Apocalipsis produce temores de
angustias y miedo en aquellos que están acostumbrados a analizar los hechos de
una manera simple y racional.

Si sientes que el enemigo ha usado una de esas situaciones para crear obstáculos y
hasta de impedirlo de estudiar Apocalipsis, le desafío a hacer una oración ahora
mismo. Así, estarás quebrando todo preconcepto, todo desinterés, opresión y todo
tipo de cadena mental maligna que esté amarrando su mente. Resista a los poderes
del infierno por el poderoso nombre de Jesucristo. Toda mentira y artimaña, control
y bloqueo, opresión y aflicción demoniaca caerán por tierra ahora, en el poderoso
nombre de Jesús.

A partir de hoy, comience a leer Apocalipsis. No lo haga deprisa, sino lento. Léalo
varias veces, hasta quedar claro en su mente todo su contenido, y a medida que lo
lee, el Espíritu Santo del Señor le traerá revelación.
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Visión General
Los libros de Génesis y Apocalipsis poseen muchas semejanzas en el lenguaje, en el
ambiente y en los personajes. La serpiente en Génesis a través de los siglos se
transforma en el dragón en el Apocalipsis – comió mucho polvo de la tierra y creció.
En Génesis, hay un árbol de la vida (Gn 2:9; 3:22, 24), en Apocalipsis también (2.7;
22.2, 14). En Génesis, el árbol de la vida era regada por un rio que salía de Edén
(Gn.2:10), en Apocalipsis está al margen del rio de la vida (Ap.22.1-2). En Génesis hay
una gran torre (Gn.11:4) – la torre de Babel, que crece hasta tornarse la gran
Babilonia en Apocalipsis (Ap.14.8; 16:19; 18.2). Todo lo que se tuvo inicio en Génesis
es consumado en Apocalipsis. Apocalipsis; por tanto, es un libro conclusivo e
indispensable.

De entre las obras que hacen parte del canon, Apocalipsis fue el último a ser
considerado como inspirado por Dios. Otros como los evangelios y las cartas
paulinas, tuvieron un proceso de reconocimiento menos demorado. Algunos
reformadores como Lutero quisieron sacarlo del canon. Para él, Apocalipsis era
totalmente místico (basado apenas en símbolos). Además sin Apocalipsis la Biblia
quedaría inacabada, inconclusa; otros libros quedarían sin sentido, sus doctrinas
quedarían indefinidas sin las revelaciones de Dios que se consumaron en
Apocalipsis. Este libro es vital para nuestra fe. Por eso es imprescindible conocerlo
profundamente.

El nombre del Libro.


La palabra Apocalipsis significa revelación, no se trata; por lo tanto, de un libro
sellado como imaginan algunos equivocadamente. Si trae revelación, no puede
tenerse como oculto, cerrado o misterioso, fue el último libro de la Biblia a ser
escrito, es la síntesis y la conclusión del propósito de Dios para el hombre.
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El autor.
Apocalipsis fue escrito por el apóstol Juan, el discípulo amado de Jesús, Juan
escribió además de Apocalipsis el evangelio y tres cartas del nuevo testamento.

Juan fue un hombre santo del Señor, numerosas veces fue aprisionado. El imperio
romano intentó de todas las formas matarlo, pero sin éxito; porque el Señor dijo
que Juan no moriría hasta dar a conocer la revelación (Juan 21:20-23).

La tradición dice que Juan de anciano, frecuentaba a la iglesia de Éfeso y no


predicaba extensos sermones, pero siempre que tenía la oportunidad mencionaba
las mismas palabras: “nuevo testamento vos doy, que vos améis unos a los otros,
así como yo les amé”. En la próxima reunión pensaban que él iba decir algo
diferente, pero él decía lo mismo. Tal vez piense que sería maravilloso escuchar la
misma cosa, pero es un engaño. Juan llegaba delante de ellos con lágrimas en los
ojos y decía: “hijitos un nuevo mandamiento vos doy…” cada vez que los hermanos
lo escuchaban, eran movidos por la vida de Dios y todos lloraban tocados por el
Espíritu Santo.

Una cosa es hablar de nuestra mente, o sea, sobre conocimientos adquiridos con
lectura o con algo que juzgamos interesante. Otra cosa es completamente diferente
es el Espíritu Santo de Dios ministrar a nuestro espíritu y una vez que recibamos
revelación, podemos transmitir vida a las personas. Vivimos en una época en que los
hombres rechazan oír la verdad sencisla de la palabra de Dios, mas están en busca
de cosas complejas y misteriosas.

Era imposible resistir a Juan, el discípulo amado, donde él estaba predicaba; si lo


colocaban en la cadena, los prisioneros y el carcelero se convertía y la cárcel se
convertía en una extensión de la iglesia. Cambiaban de presidio y lo mismo
acontecía, todos del lugar se convertían hasta que consiguieron una solución: lo
colocaron solito en una isla desierta para que a nadie diese su testimonio. El
objetivo era apartarlo, así que lo llevaron a Patmos, donde Juan tuvo revelación del
Apocalipsis.

Juan fue un hombre que vio Jesús, primero anduvo con el Señor, se recostó en su
pecho por ocasión de la última cena, vio su gloria entre los hombres. De los
discípulos, él era el más afectuoso y tal vez el más próximo de Jesús. Juan vio a
Jesús en la carne y también vio a Cristo glorificado con sus cabellos blancos como la
nieve y sus ojos como el sol al medio día, los pies como el bronce pulido, caminando
entre los candelabros de oro. ¡Que privilegio! Que podamos tener esa revelación
también. Necesitamos conocer el Jesús histórico que está en los evangelios, así
como el Jesús vivo que habita en la gloria y dentro de nosotros.

¿Cuándo fue escrito el libro?


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Apocalipsis fue el último libro del nuevo testamento a ser escrito, alrededor el año
95 D.C. cuando todos los apóstoles ya estaban muertos. Juan fue el último a morir y
el único que tuvo muerte natural. Sabemos que cuando lo escribió, estaba en la isla
de Patmos para donde había exiliado.

La interpretación del libro.

En Apocalipsis 1.19, el Señor dice a Juan: “escribe pues las cosas que viste y las que
son, y las que acontecerán después de estas”. En Apocalipsis hay algunas profecías
que se cumplieron, otras que eran realidad en los días de Juan y otras la mayor parte
de ellas que se refieren a eventos que irían acontecer. Tal vez sea por eso que
existan tres líneas principales de interpretación del libro: los preteristas, los
históricos y los futuristas.

1. Preteristas.

Preterista viene del pretérito, o sea del pasado. Ellos creen que la mayor parte del
libro ya se cumplió en la lucha entre la iglesia y el imperio romano con la victoria de
la iglesia al final. Los preteristas creen que la mayor parte de la obra se cumplió en la
época del imperio romano, creen que; por ejemplo, que Nero era el anticristo, que la
iglesia cuando se tornó iglesia oficial del imperio romano, estaba comenzando el
milenio que se encerró con la reforma protestante, el Renacimiento o el Iluminismo.
Ellos interpretan Apocalipsis a partir de hechos ya pasados.

2. Históricos.

Ellos declaran que las profecías envuelven todo el periodo de la historia de la iglesia.
Creen que Apocalipsis ya se cumplió varias veces, creen que Nero, de hecho, era un
anticristo más que Hitler. Así ellos creen que muchos anticristos surgieron en el
recorrer de la historia. Para ellos de una manera o de otra, la gran tribulación se
cumplió con los terremotos, huracanes, inundaciones y todas las calamidades que
ha acontecido durante la historia. Ellos ven el cumplimiento del libro de Apocalipsis
reiteradas veces en el recorrer de la historia.

3. Futuristas.

Según esa línea, la mayor parte de los eventos de Apocalipsis todavía aguarda un
cumplimiento futuro, apenas parte de los capítulos 2 y 3 se cumplieron.

Pienso que cada una de estas líneas tiene algo para contribuir. Es indiscutible como
dice el preterista que algunas partes del libro se cumplieron parcialmente como en
las siete iglesias del Asia menor. Por otro lado, cada una de ellas tipifica periodos
enteros de la historia de la iglesia conforme los que interpretan históricamente.
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Todavía los eventos más importantes del libro no encuentran paralelos en la


historia. Vea el caso de Israel, hace cien años nadie imaginaba que la nación sería
restaurada como aconteció en 1948. En 1967 por ocasión de la guerra de los seis
días, Israel conquistó Jerusalén que volvió a ser la capital del pueblo judío. Todos
esos eventos obligaron los libros de la escatología a ser rescritos. Hace cien años no
había como entender la profecía de Daniel en que se dice que el anticristo hará una
alianza con Israel por siete años. Hoy vemos que todo es posible, por eso creemos
que la mayor parte del libro todavía espera un cumplimiento literal.

El estilo del libro.

Un nuevo en la fe puede concluir precipitadamente que el libro tiene símbolos por


demás, y por eso, sea difícil de entender. Mas no hay tanta dificultad como se
piensa. Apocalipsis no es un libro complicado ni incomprensible a pesar de los
muchos símbolos presentes. Apocalipsis es el único libro parecido en el nuevo
testamento con otros dos del antiguo testamento, Daniel y Zacarías. En el nuevo
testamento, Apocalipsis es único porque realmente es lleno de escenas
extraordinarias con seres vivientes, trompetas, Copas, bestias terribles, fieras con
diez cuernos y ángeles increíbles. Son cosas que nos dejan perplejos, pero no se
deje enredar por el engaño maligno. A la verdad, el libro de Apocalipsis no es tan
complejo como parece ni tan lleno de símbolos.

Apocalipsis presenta aproximadamente treinta símbolos, la mitad de ellos es


revelada por el propio libro y la otra mitad está presente en otros libros de la Biblia
como Daniel y Zacarías, que nos esclarecen el sentido. Vea el verso doce del primer
capítulo. Surge la escena: Jesús caminando entre los candelabros de oro y usted
apresuradamente concluye que no entiende nada. Sin embargo, en el versículo
veinte dice: “cuanto al misterio de las siete estrellas son los ángeles de las siete
iglesias y los siete candelabros son las siete iglesias”. Ahora entiende que los
candelabros son iglesias y las estrellas son los líderes de ellas. El Señor está
apacentando y cuidando.

En el capítulo cuatro, verso cinco “del trono salen relámpagos, voces, truenos y
delante del trono arden siete tochas de fuego que son los siete Espíritus de Dios” se
puede leer y cuestionar ¿qué es ese fuego? El propio texto explica que es el Espíritu
Santo de Dios.

Símbolo es una representación, que en la mayoría de las veces, posee apenas una
ligación metafórica con la cosa representada; por ejemplo, el cordero representa
Jesús, pero él no es literalmente un cordero. Esto es un símbolo. El Espíritu Santo
puede ser simbolizado por el fuego, por el aceite, o por la paloma, mas él no es
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ninguna de esas cosas. Lo importante es saber que todos los símbolos de


Apocalipsis son explicados en la propia Biblia.

Lea el capítulo cinco, verso seis (…). ¿Qué son los siete ojos? Son los siete Espíritus
de Dios que también son siete tochas.

Observe también el capítulo ocho, verso tres (…). Aquí el incienso es la oración de
los santos.

El capítulo doce, verso nueve dice (…). ¿Quién es la serpiente, el dragón? El texto
mismo responde: el diablo. Avance ahora para el capítulo diecisiete, verso doce (…).
¿Qué son los diez cuernos? Son diez reyes. Juan vio un animal, una bestia terrible
que tenía diez cuernos, mas él esclarece que esos cuernos representan diez reyes.
De esta forma, usted es capaz de entender lo que está diciendo Apocalipsis 17:15
revela “me habló también: las aguas que viste, donde la meretriz está sentada, son
pueblos, multitudes, naciones y lenguas” se entiende claramente el símbolo. Las
aguas aquí representan pueblos y naciones.

Apocalipsis menciona varias veces; por ejemplo, la ropa de lino fino y usted tal vez
pueda ser que no entienda. Mas si lee con cuidado el capítulo diecinueve, verso
ocho, usted hará que el lino finísimo los hechos de justicia de los santos.

Rechace el pensamiento de que Apocalipsis es un libro sellado, misterioso,


reservado apenas para los doctores. Es la palabra de Dios que está en la Biblia para
la edificación de los santos. Es menester leerlo con atención, porque en la mayor
parte cuando propone un símbolo, revela también el significado. Los símbolos están
presentes para esclarecer y no para oscurecer el sentido del texto. Dios quiere
comunicarse y no esconderse en misterios; además de esos símbolos, lo que se
tiene es la palabra de Dios clara y directa. Muchas veces la escena descrita envuelve
ángeles y seres vivientes que deberían ser entendidos como descripciones reales.

La división y el contenido del libro.


El libro posee una división natural fácilmente perceptible.

1. Capítulo uno: la revelación de Cristo.


2. Capítulos dos y tres: las siete iglesias del Asia.
3. De cuatro a veinte y dos: conclusión de la historia de la redención.

El contenido de Apocalipsis incluye todo el gobierno soberano de Dios en la historia,


desde la ascensión de Cristo hasta la nueva Jerusalén. La historia de ese gobierno es
contada a través de grupos de ítem: siete sellos, siete trompetas y siete Copas.
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Los primeros cuatro sellos abarcan la historia del mundo de la ascensión de Cristo
hasta su vuelta (Ap.6:1-8). En esos cuatro sellos, vemos cuatro caballos y cada uno
de ellos con un caballero.

El primer caballero significa la predicación del evangelio, el segundo la guerra, el


tercero el hambre y el cuarto la muerte. El quinto sello habla del clamor de los
santos martirizados (6:9-11). En el final de esta era, estos santos clamaran a Dios por
venganza. El sexto sello abarca el tiempo de la gran tribulación (6:12-17). En aquellos
días, Dios derramará su ira sobre la tierra.

Las siete trompetas son el contenido del séptimo sello y también nos hablan de la
gran tribulación. Las cuatro primeras trompetas son el juicio sobre la tierra, el mar,
los ríos, sol, luna estrellas (8:7-12). La sexta trompeta muestra lo que realmente será
la gran tribulación. En la séptima trompeta, están incluidas las siete Copas que son la
conclusión de la gran tribulación (15.1 a 16.21).

La última trompeta es la más compleja de todas. Ella incluye todo desde el fin de la
gran tribulación hasta la eternidad, su contenido consiste en el reino eterno de
Cristo, el juicio de los muertos, la recompensa de los santos y la destrucción de
Satanás el anticristo, el falso profeta y todos sus seguidores.
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El significado de los números.


Para poder comprenderse más fácilmente el libro de Apocalipsis es necesario tener
claro del significado de los números en la Biblia. En su lectura, se puede percibir que
ciertos números aparecen con bastante frecuencia como el siete, el doce, el cuatro.
Recuerde que ellos no surgen en la Biblia por si acaso, poseen un significado.

La Biblia usa los números de uno a seis como básicos para los otros. Todos los
demás tienen sus significados esenciales a partir de los seis primeros. El número
siete es el número perfecto, pero el 8 es 7+1, o sea, un número que indica un nuevo
ciclo. 10 es 5×2, 12 es 3×4 y así sucesivamente.

El número 1.

El número 1 habla de armonía y unidad. Dios es la fundación, todo comienza en Él,


nadie procede de ese modo, el número uno representa el Dios absoluto. Para con
Dios todo es uno: hay un solo Dios (1 Tm.2:5, Dt.6:4). La Biblia declara que la pascua
como el inicio de los meses (Ex.12:2). Primero porque fue el tiempo en que Él vino
para salvar su pueblo. Todo primogénito era santo al Señor (Ex.22:29). También era
suya toda primera cosecha y todo primer fruto. El número uno apunta para la
unidad, para el Dios absoluto. Él es el único Dios.

El número 2.

El número dos es el número del Señor Jesús. Dios es tres en uno y uno en tres,
dentro de la trinidad el hijo es la segunda persona. El número dos es por lo tanto el
número del Señor Jesús, el dos tiene un significado semejante al ocho. La palabra de
Dios dice que Él es el segundo hombre (1 Cor.15:47) en romanos es el segundo Adán.
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Jesús tiene dos naturalezas: es plenamente Dios y plenamente hombre. Su obra


posee dos estados: encarnación y glorificación. El sacrificio por el pecado en
Levíticos 5:7 tenía dos palomas, mostrando los dos aspectos de la salvación.

El número dos habla también de la comunión, adición y ayuda (Ec.4:9-12) el Señor


Jesús vino para tener comunión con el hombre, trajo Dios para dentro del hombre y
llevó el hombre para dentro de Dios.

Dos también es el número del testimonio. En la Biblia todo testimonio necesita de


mínimo dos personas. Los discípulos eran fueron enviados en pares (Mt.10), porque
el testimonio doble es fiel y verdadero (Dt.17:6, 19:15, Mt.18:16, 2Cr.13:1, 1Tm.5:19).
Dos es el testimonio de Cristo. La Biblia que los panes que quedaban en el lugar
santo eran dos, que apunta para el testimonio. Durante la gran tribulación habrá
dos testigos que predicarán en Jerusalén (Ap.11:3). Apocalipsis nos muestra que uno
de los nombres de Jesús es el testigo fiel y verdadero (Ap.1:5, 19:13). Dependiendo
del contexto, el dos también puede significar división y contraste.

El número 3.

Existen tres números en la palabra de Dios que significan plenitud: el tres, el siete y
el doce. Ellos poseen básicamente el mismo significado, indicando algo completo. El
número tres; por tanto, apunta para algo completo relacionado a Dios que es trino,
tres que son uno. El hombre es la imagen semejante de Dios, por eso Él es trino:
espíritu, alma y cuerpo. La familia para ser familia tiene que tener padre, madre e
hijo, porque expresa la relación de la trinidad. Tres también es el número de la
resurrección, porque Él resucitó al tercer día. Jonás quedó tres días en el vientre de
un pez y el Señor dijo que eso era una señal de la resurrección. El bautismo es hecho
en el nombre del padre, del hijo y del Espíritu Santo. Pedro negó a Jesús tres veces y
por tres veces y por tres veces Jesús le preguntó si él lo amaba. La primera epístola
de Juan 5:8 menciona tres testigos sobre la tierra y el cielo. Ellas son el Espíritu, la
palabra y la sangre, ellas son testigos porque apuntan para las tres obras de las tres
personas de la trinidad.

El número 4.

El cuatro es el número de la creación. Son cuatro los elementos: tierra, aire, agua,
fuego. Apocalipsis 7:1 muestra que son cuatro los vientos de la tierra. Eso no
significa que en la tierra existan cuatro vientos, pero que ellos soplan sobre toda la
creación. Son cuatro las estaciones del año y también los puntos cardenales: norte,
sur, este y oeste. Son cuatro los imperios mundiales mencionados en el libro de
19

Daniel, de Nabucodonosor hasta Cristo. Los cuatro evangelios narran la historia de


Jesús viviendo en este mundo, lidiando con su creación. En la parábola del
sembrador, son cuatro los tipos de suelo del corazón, mostrando que abarca toda la
creación de Dios. El juicio del mundo tiene cuatro aspectos en Apocalipsis: la guerra,
el hambre, la enfermedad y el terremoto. Por eso el número cuatro en la Biblia
apunta para la creación.

El número 5.

El número cinco significa responsabilidad delante de Dios. En la parábola de las


vírgenes, se tiene dos grupos: cinco necias y cinco prudentes (Mt.25:2). Es el
número de dedos de nuestra mano indicando que tenemos compromiso con
nuestros hechos, nuestras manos simbolizan nuestras obras. La consagración de
Aron y la purificación del leproso tenían cinco unciones que eran aplicadas en cinco
partes del cuerpo, mostrando que somos responsables por la unción recibida. El
Señor multiplicó cinco panes para alimentar cinco mil personas y David usó cinco
piedras para vencer a Goliat. Sabemos que el quinto reino mencionado en Daniel,
será el reino de Cristo y para entrar en ese reino tenemos que tener compromiso. En
Levítico tenemos cinco ofrendas que hablan de las obligaciones del hombre para
presentarse delante de Dios. De esta forma, el número cinco simboliza
responsabilidad delante de Dios.

El número 6.

Es el número del diablo (Dn.3:1, Ap.13:18). Es también el número del hombre caído
en rebelión contra Dios y unido con el diablo. Seis es el número del hombre creado
viviendo sin Dios en el mundo. El hombre fue creado en el sexto día. Puede trabajar
seis días por semana (Ex.23.12). El número del anticristo es 666 significa el hombre
intentando ser Dios, es el ápice del humanismo y de su independencia de Dios. En el
antiguo testamento un esclavo solo podía ser esclavo por seis años, en el séptimo
año, él tenía que salir libre. Según la cronología de la Biblia, la historia del hombre en
la tierra tiene seis mil años desde Adán hasta hoy. Entendemos que el séptimo será
el milenio. El sexto sello habla de la ira del cordero sobre la humanidad. Goliat tenía
seis dedos en las manos, seis dedos en los pies y seis codos de altura (I Sm.17:4-7).
También las dimensiones de la estatua de Nabucodonosor eran 60 por seis,
mostrando que es un tipo de anticristo (Dn.3:1-3). El anticristo se levantará contra
todo que se llama Dios, es la consumación de Babel, es el hombre viviendo
independiente de Dios, diciendo: no necesitamos de ti, no queremos sujetarnos a
nadie, ni adorar a nadie, no queremos doblarnos delante de nadie. El anticristo es el
20

ápice del humanismo. Cada vez oímos el mensaje de que el hombre es el centro, de
que el hombre es capaz de todo, de que él mismo es su propio Dios.

El número 7.

El número siete tiene el mismo significado del tres: completo y perfección. En


cuanto que el número tres es la perfección de Dios, el número siete es la perfección
de acción en la historia, en el tiempo y en la iglesia. A partir del número siete, todos
los números son una composición de los seis anteriores. Siete es normalmente la
suma de tres más cuatro. Tres es el número de Dios trino unido con su creación
representada por el número cuatro. Todo lo que habla de la acción divina en el
tiempo y en medio de su creación es siete. Por eso el séptimo día, el sábado fue
santificado (Gn.2:1-3). Enoc, el séptimo de Adán, fue trasladado (Jd.14). Después que
Noé entró en el arca hubo todavía siete días de tolerancia, de gracia (Gn.7:4). Jacob
sirvió a Labán por siete años. En Egipto hubo siete años de abundancia y siete años
de escasez. El candelabro tenía siete lámparas. La sangre tenia que se esparcida
siete veces significando la redención perfecta. El sábado es el séptimo día
simbolizando el perfecto descanso que Dios nos ofrece. Durante la fiesta de los
panes sin levadura, había una ofrenda de holocausto hecha por siete días,
simbolizando la perfecta consagración. La fiesta de los tabernáculos duraba siete
días, simbolizando la perfecta gloria. La lucha contra Jericó fue hecha con siete
sacerdotes, usando siete trompetas, marchando por siete días, simbolizando
perfecta victoria. Naamán margulló siete veces en el rio Jordán, entendido como
perfecta purificación. Job tuvo siete hijas después de su tribulación, simbolizando la
perfecta bendición. Jesús habló siete palabras en la cruz. Había siete diáconos en la
iglesia primitiva. Son siete las parábolas del reino en Mateo 13. Son siete las fiestas
que había en Israel y también siete las iglesias que había en Apocalipsis. Existen
muchos grupos de siete: son siete espíritus de Dios, siete candelabros, siete
lámparas, siete cuernos, siete ojos, siete trompetas, siete plagas, y siete Copas. En
total, en Apocalipsis, el siete es mencionado cincuenta y seis veces; por tanto,
comprender el significado de ese número es muy importante para el entendimiento
de este libro.

El número 8.

El número ocho significa resurrección o nuevo comienzo, la verdad la resurrección


es un nuevo comienzo. Es alguien que murió, resucitó y está teniendo un nuevo
comienzo. Por eso, el domingo es nuestro día de descanso, pues es el día de la
resurrección. El domingo para nosotros es el primer día, para nosotros es el octavo,
el día de recomienzo, de la nueva creación. La Biblia habla de ocho personas que
21

salieron del arca, simbolizando resurrección, porque pasaron por la muerte en el


diluvio y salieron para una nueva vida. La circuncisión ocurría en el octavo día,
porque circuncidar significa cortar la carne. David era el octavo hijo. El leproso era
purificado en el octavo día. Las primicias eran traídas en el octavo día. El sacerdote
trabajaba en el octavo día de la consagración. La transfiguración se dio en el octavo
día para mostrar que después de la resurrección nosotros seremos glorificados
(Lc.9:28-36).

El número 9.

El número nueve no aparece en Apocalipsis, tiene dos significados: puede significar


ingratitud, porque fueron nueve los leprosos que no volvieron para agradecer
(Lc.17:11-19). O puede significar una obra humana incompleta, pues el nueve es la
combinación de cuatro más cinco; o sea la creación más la responsabilidad. Es por
eso que se tienen nueve dones del Espíritu, nueve frutos de la carne y nueve frutos
del Espíritu.

El número 10.

El diez significa perfección, esto es, la perfección natural del mundo. En la palabra
de Dios, el diez es compuesto de cinco más cinco o seis más cuatro. Cinco más cinco
nos habla de doble responsabilidad; o sea, responsabilidad completa. Es por eso
que el sistema que usamos es decimal y habla de la responsabilidad de todo
hombre. Eran diez los mandamientos, diez eran las vírgenes y diez fueron las plagas
en Egipto. Los discípulos oraron diez días. Eran diez los siervos en Lucas 19:13.

El número 12.

El número doce posee básicamente el mismo significado del siete, todavía se


diferencia, porque siete es la perfección de la acción de Dios en la historia del
hombre en el tiempo, mientras que doce es la perfección de su acción para la
eternidad. Por eso, todo lo que es eterno en Apocalipsis es doce, pero todo lo que
tiene fin es siete. Siete es tres más cuatro, mas doce es tres veces cuatro. Así la gran
tribulación acontece en la mitad de un periodo de siete años, porque es una acción
perfecta de Dios, pero acaba, tiene fin. Los siete sellos y las siete trompetas son una
acción completa de Dios, pero solo un tiempo, mientras que doce es eterno. La
Biblia habla que son doce meses, doce discípulos, doce puertas de Jerusalén, doce
piedras preciosas en el pecho y en los hombros del sumo sacerdote, doce panes y
doce espías. Jesús fue a Jerusalén a los doce años. Son doce las legiones de ángeles.
22

Apocalipsis 21 se refiere al número doce: la nueva Jerusalén posee doce puertas,


doce fundamentos, doce tronos, doce perlas y doce piedras preciosas. Todo lo que
es eterno es doce.
23

La visión de los vencedores.


Para que comprendamos apropiadamente el Apocalipsis, necesitamos verificar
algunos conceptos fundamentales. Uno que se debe comprender es que hay una
diferencia entre salvación y galardón. El galardón es la recompensa de los
creyentes. ¿Cuál es la diferencia entre ser salvo y recibir la recompensa? La salvación
se relaciona con la vida eterna, mientras que el galardón vendrá en el tiempo en que
el Señor irá distribuir la recompensa para los siervos que fueron fieles. Se alcanza la
salvación por la gracia mediante la fe y no por obras. La recompensa, por otro lado,
depende del mérito.

Supongamos que yo sea un hombre muy rico, dueño de una universidad y usted una
persona ignorante y pobre, pero que desea estudiar y aprender; entonces me
propongo a pagar sus estudios y para los que quieran estudiar. La matrícula es
gratis y todo lo que necesite estudiar es gratis. Eso es salvación, Jesús era muy rico y
pagó para que entres en la escuela. La matrícula es la salvación, las mensualidades
están pagadas, usted no necesita desembolsar nada, está pagado todo. Jesús ya
pagó el precio.

A pesar de eso, su diploma no es gratis, es necesario estudiar. ¿Aquél que pagó la


universidad puede estudiar en su lugar? Es necesario trabajar mucho y sudar la
camisa; si usted fuera aprobado en el examen final, entonces estará apto para
recibir el diploma. La matrícula fue gratis, ero el diploma es caro, la salvación es la
matrícula, por medio de ella, todos entramos en la escuela de Dios, mas el diploma
es el reino, la recompensa. Algunos quieren apenas quedar en la escuela, porque les
gusta la compañía de los alumnos, del recreo, de las clases; sin embargo todo puede
ser consumado con una buena nota. Muchos entran en la escuela, pero ni todos
reciben el diploma, muchos fueron salvos, pero ni todos recibirán la recompensa del
reino. Muchos son llamados, mas pocos los escogidos (Mt.22:14).
24

Cuando moré en el exterior, tuve un amigo que estudiaba en la universidad hace


diez años. La visa de él era de estudiante, por eso necesitaba estar matriculado para
continuar en el país, el objetivo de él era solo estudiar, él no quería graduarse.
Actualmente hay muchas iglesias así, estudian años y años, no quieren el diploma,
quieren apenas quedar estudiando.

La salvación es la universidad pagada, todo ya fue pagado, pero usted debe trabajar
arduamente. Ese trabajo arduo es la cualificación para recibir el diploma. Al final
habrá una evaluación y si usted no sale aprobado, no recibirá el diploma de siervo
bueno y fiel.

Nadie es expulsado de la universidad solo por haber salido mal en el examen, del
mismo modo, nadie perderá la salvación por salir reprobado.

¿Qué sucede con el alumno que sale mal en la evaluación? Repite el año o queda
para la recuperación. ¿Qué será en el milenio entonces? La recuperación. El
problema es que son mil años.

La salvación se da por medio de Cristo, apenas por la sangre del cordero, tú puedes
ser lavado, perdonado y justificado. Cuando somos pecadores, nuestro objetivo
debe ser la salvación; sin embargo una vez salvos, nuestro objetivo debe ser la
recompensa. Preocupémonos ahora en recibir el diploma en el reino.

Si no tenemos claro la diferencia a respecto de salvación y recompensa, surgirá una


gran dificultad para comprender ciertas partes de la Biblia. Hay versículos que
hablan a respecto de la recompensa y muchos lo aplican para la salvación. Haciendo
eso incurrimos en extremos, es por eso que algunos colocan la salvación como algo
tan difícil e intangible, consecuentemente sería mas fácil de hacer todas las
penitencias de los religiosos. La salvación a la verdad es algo tan sencillo: basta
creer con el corazón y confesar con la boca que Jesús resucitó y es Señor (Rm.10:9-
10). La recompensa, por otro lado no es tan sencillo. La recompensa será dada
apenas a los vencedores.

El vencedor.

En todas las cosas somos más que vencedores por medio de aquél que nos amó
(Rm.8:31-37). Si la recompensa es para los vencedores, entonces podemos concluir
que todo creyente será recompensado, porque todos son vencedores. De hecho es
verdad. Sin embargo necesitamos entender la diferencia entre posición legal y
posición experimental. Legalmente somos más que vencedores, Cristo nos
garantizó la victoria; por lo tanto, es posible que no vivamos eso en nuestra
experiencia.
25

Posición legal es aquello que es nuestro por derecho, en Cristo Jesús somos
vencedores porque Él ya pagó el precio, murió y resucitó, subyugó principados y
potestades. Él venció y porque estamos en Él, también somos vencedores. La
posición de Él es la nuestra.

Posición experimental es tomar en la experiencia aquello que ya es verdad


legalmente. Es posible ser heredero legal de una gran fortuna y en la práctica vivir
en la misería absoluta. Algunos son hijos del rey, mas viven como si fuesen esclavos.

Charles Spurgeon cuenta que cierta vez fue invitado para orar en la casa de una
hermana anciana muy humilde que ya estaba casi partiendo para encontrarse con el
Señor, cuando él entró en la casa quedó muy sensibilizado con la sencillez del lugar,
pero lo que más le llamó la atención fue un cuadro parecido con una diploma
pegado en la pared. Después de haber orado por la hermana, gentilmente la
preguntó que era ese cuadro, ella respondió que había trabajado por muchos años
para una señora muy rica y después de su muerte, la había dejado ese cuadro como
recuerdo. Él pidió para mirar y llevó ese cuadro a un abogado. La sorpresa fue: aquel
cuadro era la verdad un documento de herencia. Aquella pobre señora, era la
verdad muy rica, por ser analfabeta no sabía el valor del documento y lo guardaba
como un simple recuerdo.

¿Esa historia no produce una sensación des confortable? Es doloroso pensar que
podemos ser dueños de una gran fortuna y vivir en la misería. Esa es la historia de
muchos creyentes: son legalmente ricos, pero experimentalmente son pobres. La
parte de Dios es dar, nuestra parte es apropiarnos. Si no hay apropiación no hay
disfrute de la herencia, vencedores son aquellos que ya entraron en la experiencia y
se apropiaron de aquello que es de todo creyente por derecho. Por eso una cosa es
ser salvo y otra cosa es ser vencedor.

A pesar de todo creyente nacido de nuevo, ser un vencedor legalmente, se sabe que
esto no es la experiencia de todos. La verdad existen muchos creyentes que viven
como derrotados. ¿Un creyente derrotado es salvo? Nuestra salvación es una
cuestión de legalidad y no de experiencia. Ella no depende de nuestra victoria
personal, sino de la victoria del Señor Jesús. Una cosa es ser salvo, otra es ser
vencedor. La salvación es el don de Dios a todo aquél que cree en Él, pero apenas el
vencedor recibirá la recompensa. La salvación es por la fe, con todo la recompensa
es por las obras que practicamos delante de Dios.

Digo pues, que durante el tiempo en que el heredero es menor, en nada difiere del
esclavo, puesto que Él es el Señor de todos (Gl.4:1). Existen muchos creyentes que
mismo siendo hijos en nada difieren del esclavo, son dueños de todo, pero viven
como si no tuviesen nada. Vencedores son todos los creyentes que ya entraron en la
experiencia de la herencia. Es posible percibir que se vencedor es una cuestión de
26

madurez. Vencedores son maduros, derrotados viven como niños, vencedores son
espirituales, mientras que los derrotados son carnales. La salvación es una cuestión
de estar en Cristo, mas el reino depende de Cristo estar en nosotros, viviendo su
vida y transmitiendo su carácter. Todos nosotros ya tenemos la victoria legalmente
sobre el diablo, la carne y el mundo, pero ni todos la poseen de forma experimental.

La recompensa es el reino.
El tiempo en que los creyentes vencedores serán recompensados es llamado de
reino, o sea, es la recompensa de los creyentes que entran en la experiencia de la
victoria.

El sermón del monte, en Mateo cinco a siete, habla del reino de los cielos. Estas
enseñanzas del Señor nos dicen como el hombre puede entrar en el reino de los
cielos, Mateo cinco a siete habla repetidamente sobre el tema de la recompensa. El
reino de los cielos es mencionado tres veces en las bienaventuranzas (Mt.5:3, 10-12).

Debemos reconocer que la recompensa es el reino de los cielos. Esas promesas nos
muestran que el reino de los cielos es la recompensa de Dios. No hay diferencia
entre los dos (Mt.5:46, Mt.6:1, Mt.6:2, 4, 6, Mt.6:17-18).

El asunto principal del sermón del monte en Mateo cinco a siete es el reino de los
cielos (Mt.16:27-28).

Dios recompensará o disciplinará una persona salva de acuerdo con sus obras. Hay
dos hechos aquí: primero, el hombre será recompensado de acuerdo a sus obras. En
segundo lugar, la recompensa será distribuida cuando Cristo vuelva en la gloria de
su padre con sus ángeles. Será el tiempo en que Él establecerá su reino sobre la
tierra; por tanto, solamente cuando el reino inicie es que la recompensa iniciará
(Ap.11:18).

Cuando el Señor se torne rey y el reino del mundo se torne reino de nuestro Señor y
de su Cristo; entonces eso será el tiempo para darse la recompensa a los santos, a
los pequeños y a los grandes, en otras palabras el tiempo del reino es el de la
recompensa. Cuando el reino venga, la recompensa también vendrá.

Se sabe que la recompensa es la obtención de la corona y del trono. ¿Qué es una


corona? Nos es simplemente un sombrero esculpido de oro y adornado con
diamantes. Representa una posición en el reino y la gloria en el reino. Una corona
representa algo. Cuando alguien pierde la corona, pierde el poder que ella
representa. La corona es el símbolo del reino. La corona es un símbolo del reino (1
Ts.2:19).
27

Paulo dijo: combatí el buen combate, completé la carrera, guardé la fe y ahora la


corona de la justicia me está guardada, la cual el Señor recto juez me dará en aquel
día y no solamente a mi, sino también a todos aquellos que aman su venida (2
Tm.4:8). Pablo no quería ganar nada para colocar en la cabeza, sabía que la corona
era una posición en el reino. Para recibirla es necesario que el creyente sea
aprobado.

Bienaventurado el hombre que soporta con perseverancia, la aprobación; porque,


después que ser aprobado, recibirá la corona de la vida, la cual el Señor prometió a
los que lo aman (Tg.1:12, Pe.5:4).

Jesús advirtió a la iglesia de Filadelfia contra el riesgo de perderse la corona “vengo


sin demora, conserva lo que tienes para que nadie tome tu corona (Ap.3:11)”. Así
como la corona, el trono también es una recompensa para los vencedores. ¿El trono
se trata apenas de una sisla adornada? Es un símbolo del reino. Representa una
posición en el reino, es la autoridad y la gloria en el reino. Cuando se dice que el rey
de determinado país perdió el trono, estamos afirmando que él perdió su reino. El
trono y la corona en si mismos no son significativos, existen apenas para simbolizar
el reino. En otras palabras, la recompensa es el reino. La Biblia nos muestra que la
recompensa es simplemente el reino.
28

La salvación y el reino.
El reino no será apenas el tiempo en que los creyentes aprobados recibirán la
recompensa, podemos decir que el propio reino es la recompensa.

Es realmente fundamental que entendamos la diferencia entre ser salvo y ser


recompensado con el galardón en el reino. Muchos se contentan apenas con la
salvación, pero ella es apenas una puerta de entrada y una vez que ultrapasamos, el
Señor desea que prosigamos hasta que recibamos el reino.

1. La salvación nos llega por la gracia mediante la fe, el reino es adquirido por las
obras.

La salvación es una dádiva. La palabra del Señor nunca enseña que ella puede ser
adquirida por las obras, ella es gratuita. Nadie puede comprarla, por eso que Jesús
la compró para nosotros. Debemos ser radicales con relación al hecho de la
salvación ser por la gracia y nada más. La salvación nos vendrá con confesión del
nombre del Señor más la quiebra de maldición o confesión acompañada de la
actitud de dejar de fumar, mudar de ropa o cualquier otro medio. Es un regalo que
nos llega por la gracia mediante la fe. Es gracia, únicamente gracia.

La verdadera invitación del Señor es: venga de la forma como está, Él no dice para
lavarnos primero o cambiarnos de vida. Es el Señor que va mudar nuestra vida, es el
evangelio de la gracia, o sea, es la provisión para la salvación (Is.55:1, Ap.22:17).
29

Porque el salario del pecado es la muerte, mas el don gratuito de Dios es vida eterna
en Cristo Jesús nuestro Señor (Rm.6:23). Don es igual a un regalo. La salvación es un
regalo que nos es dado de Dios, la única condición es que la creamos; si creemos,
entonces somos salvos (Ef.2:8-9).

La salvación acontece en un instante, nuestro espíritu se regenera cuando recibimos


la vida eterna dentro de nosotros, la salvación es la puerta de entrada (Rm.10:9-10).
Ella es una cuestión que dice a respecto del infierno, mas el vencedor apunta para la
recompensa. Muchos están preocupados apenas con el infierno. Una vez que usted
es salvo, olvide del infierno, no creemos en la pérdida de la salvación porque el
Señor dice: “mas a todos cuantos lo recibieron, les dio el poder de ser hechos hijos
de Dios, a saber, a los que creen en su nombre (Jn.1:12)”

Si tengo un hijo, por mas que él haga alguna cosa mala, no dejará de ser mi hijo. El
Señor también dice que aquél que va a Él, nunca y nadie lo arrebatará de sus manos
(Juan 10:28). Comprendiendo que ni todos creen de esa forma, porque hay dos
líneas teológicas al respecto: el arminianismo y el calvinismo. El arminianismo
enseña que la salvación depende de nosotros y que si somos fieles hasta el final
seremos salvos. El calvinismo, por su parte, predica que la salvación no depende de
nosotros, es un don de Dios; si yo la recibí estoy salvo y Dios no va poder cogerlo de
vuelta.

Aparentemente parecen contradictorias, pero puede haber un equilibrio entre estas


visiones.

Ambos poseen respaldo bíblico, pero aun así generan problemas, el arminianismo
solo ve la salvación, casi nunca ve la recompensa, normalmente enseña que si usted
viene a Jesús va ganar una recompensa en el cielo. Lo que no es verdad, pues nadie
va ganar la recompensa por recibir a Jesús como salvador. No se puede pretender
recompensa por ser salvo. Salvación es una cosa y la recompensa es otra. El
arminiano se equivoca en este punto, ellos también viven angustiados, porque cada
vez que caen en pecado concluyen que perdieron la salvación. Sin embargo, son
creyentes más celosos y comprometidos debido al temor de perder si no fueran
suficientemente fieles.

Para los calvinistas, en cambio, no hay pérdida de salvación, llevan la soberanía de


Dios a serio, y como no hay pérdida de la salvación muchos viven relajadamente.
Una vez que Dios es soberano, ellos concluyen entonces que no necesitan orar, no
necesitan ayunar, buscar ni servir a Dios con más celo. Se tornaron aquel creyente
de última categoría, más muertos para las cosas de Dios. Probablemente son
creyentes, pero no vencedores.

Nuestro énfasis es el equilibrio entre la visión de la gracia y de las obras; porque si


por un lado, usted fue salvo por la gracia, por otro lado fue salvo para las obras. Así
30

no será más juzgado con respecto a la salvación; con todo, lo será con relación a la
recompensa, por haber hecho o no obras que merecen la aprobación de Dios.

El calvinismo es positivo porque enseña una verdad: la salvación por la gracia es un


regalo que no se pierde. Por otro lado el arminianismo es bueno porque predica el
compromiso, la seriedad para con Dios, la vigilancia y la oración, mismo que todo
eso sea por temor de ir al infierno. Las dos líneas teológicas, la verdad tienen lados
de una misma moneda, necesitamos equilibrarlas. La salvación es por la gracia
mediante la fe, mientras el reino depende de nuestras obras después que somos
salvos. Existen predicadores que dicen que si usted viene a Jesús va ganar una
corona en el cielo. Eso definitivamente está en desacuerdo con la palabra de Dios.
Nadie va recibir una corona simplemente por ser salvo, es necesario tener obras.
Nosotros salvos por la gracia para buenas obras (Ap.2:23).

¿Si la salvación es adquirida enteramente por la gracia mediante la fe, como será
adquirida el reino? Cumpliéndose las condiciones de Dios ligadas a fidelidad,
santidad y perseverancia. Jesús dice en el sermón del monte: bienaventurados los
humildes de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos (Mt.5:3).

¿Para entrar en el reino de los cielos necesitamos ser humildes? Ya mostramos que
la salvación es de gracia, así no necesitamos tener alguna virtud especial para que
seamos salvos.

¿Usted cree que existe algún pecador virtuoso? Todo pecador es miserable,
arrogante y soberbio. Pero si el creyó con el corazón y confesó con la boca, es salvo;
por otro lado, Jesús dice que para heredar el reino, es necesario ser humilde y negar
a si mismo.

También no hay necesidad de ser perseguido para ser salvo. Mas para recibir la
recompensa de reinar con el Señor, algunas veces será perseguido por causa de la
justicia (Mt.5:20).

Si tú piensas que por ser salvo, necesita ser más santo que un fariseo, está con
serios problemas. Probablemente, pocos de nosotros entraríamos en el cielo. Del
punto de viste externo, el fariseo era irreprensible (Fp.3:6). Imagínese alguien que
daba el diezmo hasta el comino de la huerta. Mas para heredar el reino y ser un
vencedor, usted debe exceder en mucho la justicia de los fariseos (Mt.7:21).

Para ser salvo primeramente no tenemos que hacer la voluntad de Dios, antes
necesitamos confesar con la boca y creer con el corazón, como dice Romanos 10:9.
Entre tanto, para reinar tenemos que hacer su voluntad. ¿Cuántos creyentes pueden
decir honestamente que quieren hacer la voluntad de Dios? Reconocemos que es
posible ser salvo y todavía así, no hacer la voluntad de Dios. De ese modo, tal
creyente no puede decir que es un vencedor (Mt.11:12).
31

No es necesario esforzarse porque la salvación es gratis, pero el reino es adquirido


por las obras y frecuentemente requieren esfuerzo de nuestra parte. La palabra de
Dios, reiteradas veces, nos muestra que la recompensa es dada según las obras de
cada creyente (Ap.22:12, 1 Co.3:8, Cl.3:23, 24, Rm.4:4).

2. La salvación es eterna, el reino durará mil años.

La salvación no será más larga para unos que para otros, es igualmente eterna para
todos. Entre tanto, el reino de los cielos durará el tiempo del milenio, algunos
reinarán y otros serán disciplinados. El reino tiene comienzo y fin, la salvación no (1
Co.15:24, 25).

3. La salvación no pide sacrificio, el reino puede pedir.

La salvación no depende del estado de pobreza, ningún creyente realmente cree


que para ser salvo sea necesario vender todos los bienes (Mt.19:24). Últimamente
hubo muchas personas famosas y ricas en la iglesia y jamás se escuchó alguien
diciendo finalmente, el camello pasó por el ojo de una aguja. No es necesario donar
lo que quiere que sea con el objetivo de salvarse.

Mas el reino es diferente, si siendo salvo, todavía quedo manifestando actitudes de


avaricia y amor al dinero, estaré actuando como un derrotado y no seré
recompensado. Es muy difícil un rico tornarse un vencedor, por causa del gran amor
que devotan al dinero. Es raro encontrar un rico que sea realmente fiel en el diezmo,
ellos ofrendan grandes cantidades, mas que no representan ni el diez por ciento del
diezmo, cuanto mas cumplen la justicia excedente exigida por e reino (Mt.19:12).

La salvación no se condiciona a estados civiles ni es necesario hacer voto de


castidad. Mas para heredar la recompensa, algunas veces es necesario; por ejemplo,
si usted no se casó, debe permanecer virgen hasta el casamiento. De otra forma,
será un creyente derrotado.

Apocalipsis 20 nos muestra que los mártires recibirán el reino, pero no dice que son
los únicos que recibirán. La Biblia; por lo tanto, nunca nos muestra que el hombre
deba ser martirizado a fin de recibir la vida eterna. El reino; por tanto es diferente,
se requiere esfuerzo, inclusive el martirio para obtenerlo (Ap.20:4).

4. La salvación es un regalo, el reino es conquista.

Cierta vez la madre de Santiago y Juan fue hasta Jesús con un pedido muy especial
(Mt.20:21-23). El Señor no pudo atender al pedido de aquella madre porque el reino
no es algo que se da, sino que se conquista. El reino es una recompensa. Ellos
dijeron al Señor que hasta beberían del cáliz, pero así mismo el señor no atendió el
32

pedido. En la cruz, cuando estaba casi por morir, uno de los ladrones le hizo el
mismo pedido (Lc.23:42, 43).

El pedido del ladrón envolvía el reino, entre tanto la respuesta de Jesús fue con
relación a la salvación. Referente al reino, Él no podía hacer nada, ya que el ladrón
no tenía obras, estaba convirtiéndose en la hora de la muerte; por lo tanto, no tuvo
tiempo para hacer algo para el Señor, que le respondió con relación al paraíso. Es
como si dijese: Hoy serás salvo, mas con relación al reino nada puede ser hecho.

Hay un engaño muy grande en medio de la iglesia, me refiero al hecho de que


algunos piensan que la muerte tiene algún poder de perfeccionarnos. Caso si
morimos ignorantes, es seguro de que llegaremos ignorantes y si morimos sin
obras, así llegaremos.

Bienaventurado es aquél que tiene la oportunidad de servir al Señor en vida, porque


sus obras lo acompañarán, quien no las posee, va llegar de manos vacías delante de
Dios (Ap.14:13).

La muerte no tiene nada para añadirnos nada, quien muere niño en la fe, así llegará
al cielo, él no va adquirir conocimiento en un cerrar de ojos solo porque se libró del
cuerpo. Quien no tuvo la oportunidad de hacer algo en la vida, no tendrá
repentinamente obras delante del Señor. Si la muerte tuviese el poder de añadirnos
algo o de transformarnos, no habría la necesidad del Señor morir en la cruz.

El milenio será el tiempo en que el Señor va completar la obra en la vida de muchos


creyentes, Él cumplirá su promesa. Sabemos que muchos mueren sin que esta obra
sea completada (Fl.1:6).

El Señor busca frutos, como se ve en el pasaje de la vid en Juan 15, Jesús estaba
afirmando: Yo soy la vid verdadera y ustedes son los ramos, mi padre está buscando
frutos y el ramo que no da frutos es cortado y echado en el fuego.

Aquél que no de frutos, pasará por el fuego de la disciplina de Dios en el milenio.


Pecando o yendo en pecado para el milenio, estará delante de Dios del mismo
modo, o será disciplinado aquí o será disciplinado allá caso no se arrepienta
(Mt.5:25). El texto afirma que necesitamos arreglar con aquél que está ofendido con
nosotros con razón. Si no resolvemos, puede ser que él muera; entonces no habrá
como corregir aquí el problema, él llevará el caso delante de Dios, el texto significa:
mientras que estamos vivos. Si usted muere con algo pendiente, en el día del juicio,
el Señor va pedirle cuentas; si fuera el caso, habrá disciplina y punición. No se
engañe pensando que la muerte puede librarlo de la disciplina de Dios. El padre
disciplina los hijos en cualquier tiempo.
33

El caso no reside apena en ofender a alguien, necesitamos ser cuidadosos para que
no guardemos rencor. Jesús dijo que si no perdonamos a aquellos que nos ofenden,
seremos entregados a los verdugos en aquel día (Mt.18:34-35).

5. La salvación es igual para todos, en el reino hay grados.

Cada uno será recompensado de acuerdo con sus obras, quien no las tuviera, no
tendrá recompensa. Quien ejecutó obras malas estará sujeto a corrección. En el
reino, hay diversos niveles de graduación, algunos recibirán diez ciudades, otros
cinco (Lc.19:17-19).

Caerá a algunos meramente una recompensa, otros todavía recibirán un galardón.


Algunos ganarán una rica entrada en el reino y hay quien entre en el reino sin una
rica entrada (2 Pe.1:11).

Por tanto, existen diferentes graduaciones en el reino. Por el contrario, nunca habrá
una cuestión de graduación relativa a la vida eterna, que es la misma para todos.
Nadie recibirá diez años a más o menos que el otro. No existe diferencia en la vida
eterna, todavía en el reino habrá diferencia.

El reino y la vida eterna son dos cosas absolutamente diferentes, la condición para
ser salvos es la fe en el Señor. Más allá de la fe no hay otra condición, pues los
requisitos ya fueron cumplidos por el hijo de Dios, la muerte de su hijo satisfizo a
todas las exigencias de Dios. Entrar en el reino de los cielos es otra cuestión:
requiere obras. Hoy un hombre es salvo por la justicia de Dios, todavía no podemos
entrar en el reino de los cielos a menos que nuestra justicia exceda a los escribas y
fariseos (Mt.5:20). Salvación es cuestión de conocer a Dios, mas el reino es cuestión
de ser conocidos por Él.

La cuestión de la vida eterna es completamente basada en la obra del Señor Jesús;


con todo, la cuestión del reino está basada en las obras del hombre. Evidentemente,
ellas son hechas en la dependencia del poder de Dios.

Se puede ver que hasta el mismo reino es al final una cuestión de la gracia.

¿Qué obras podemos hacer para Dios por nosotros mismos? ¿y si hacemos en la
fuerza de Él, no es maravilloso que Él todavía así nos recompense? La Biblia dice que
Dios no es servido por manos humanas, así mismo nos llama para que seamos sus
siervos y cooperadores (Hechos 17:25). Es un privilegio ser llamado de ayudante de
Dios. Todavía piensa: que obra podemos hacer en un nivel tan excelente que
pudiese agradar el padrón divino de Aquél que creó los cielos y la tierra. Solamente
por la gracia lo hacemos.

¿Y en caso de quien se convirtió ya anciano y no tuvo tiempo de edificar obras


delante de Dios ni acumular tesoros en el cielo? Mismo así quien se convirtió mas
34

tarde, podrá tener una recompensa igual al que se convirtió más joven y tuvo más
tiempo de acumular tesoros en el cielo, porque Dios mira principalmente la
intención del corazón. Podemos ver ese principio en la parábola de los trabajadores
de la viña en Mateo 20:8-16.

6. La salvación ya está definida, el reino está en abierto.

La vida eterna ya está definida, por eso podemos tener certeza de la salvación.
Todavía, ser un vencedor es una cuestión de que está en abierto, puede ser hoy y no
serlo mañana o viceversa. Salomón es un ejemplo de alguien que comenzó bien la
corrida pero la terminó mal. Jacob, por otro lado, comenzó mal la corrida, pero
terminó bien. La recompensa; por tanto, es algo que permanece abierto y la
persona que posee una corona hoy puede no tenerlo mañana.

He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona.
(Ap.3:11).

Apocalipsis es un libro de justicia, es necesario puntuar la diferencia entre salvación


y recompensa, la salvación viene por la fe, la recompensa por las obras. La salvación
es eterna, la recompensa dura mil años. La salvación nunca se basa en méritos
humanos, sino la gracia de Dios (Is.55:1, Juan 4:10, Ef.2:8-9, Tito 3:5, Ap.22:17). La
recompensa por otro lado no es un regalo de Dios, sino es obtenido por buenas
obras (Ap.22:12, 1Co.3:18; Cl.3:23-25, Rm.4:4).
35

Los tres Juicios


Para que comprendamos apropiadamente el Apocalipsis, necesitamos saber
también que la palabra de Dios enseña sobre el juicio del hombre. Habrá tres juicios:
el de los creyentes en el tribunal de Cristo, el de las naciones por ocasión de la
vuelta de Jesús y el de gran trono blanco.

1. El juicio de los creyentes en el tribunal de Cristo.

Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo,


para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo,
sea bueno o sea malo (2 Co.5:10).

El juicio de los creyentes no cambia la condenación, una vez que ellos ya poseen la
vida eterna (Juan 3:18, Rm.8:1). El tribunal de Cristo es una cuestión de galardón o
disciplina (2 Co.5:10, Rm.14:10-12, Mt.25:14-30, 1 Co.3:10-15). Los salvos serán
juzgados en el tribunal de Cristo, en cuanto los impíos serán juzgados por Dios en el
juicio del gran trono blanco.

El juicio de los creyentes en el tribunal de Cristo será antes del milenio, por ocasión
de su venida y el juicio de los impíos será después del milenio. El juicio de los
creyentes no es para perdición, sino para recompensa, mas el de los impíos es para
la condenación.

La palabra de Dios no deja dudas:

Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu
hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo... (Rm.14:10,12).
36

Mat 16:27 Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y
entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.

Mismo que hayamos sido salvos, todavía así, seremos juzgados por Dios. Tal hecho
no tiene relación alguna con el infierno, es un juicio para el galardón.

Rev 22:12 He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno
según sea su obra.

1Co 4:4 Porque aunque de nada tengo mala conciencia, no por eso soy justificado; pero el
que me juzga es el Señor.
1Co 4:5 Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual
aclarará también lo oculto de las tinieblas, y manifestará las intenciones de los corazones; y
entonces cada uno recibirá su alabanza de Dios.
Si existe la recompensa, lógicamente existe también la punición.

Heb 10:30 Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor.
Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo.

Heb 10:31 ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!

Naturalmente cuando confesamos nuestros pecados, ellos son perdonados y no hay


ningún registro más delante de Dios. El problema es la práctica de cosas dignas de
reprobación o violar un mandamiento. Esta persona será disciplinada y considerada
mínima en el reino: Jesús dijo:

Mat 5:19 De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy
pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos;
mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los
cielos.

Ese juicio de los creyentes es representado en la parábola de los talentos (Mt.25:14-


30). En el final, el Señor vendrá para acertar cuentas con sus siervos, aquel será el
tribunal de Cristo. Observe que en esa parábola, los siervos no fueron juzgados por
la fe que ellos tuvieron, fueron juzgados por las obras, o sea, si ellos sabían o no
administrar los talentos. El problema es que uno de los siervos enterró el talento, él
no hizo algo pecaminoso como adulterar, robar o matar, él ni perdió el talento que
había recibido, apenas lo enterró, lo dejó intacto e inerte. Sin embargo fue obligado
a prestar cuentas de su fidelidad o fue disciplinado (Mt.25:14-30).

La palabra de Dios no muestra en el evangelio de Lucas, no solamente la posibilidad


de la pérdida de la recompensa, sino también la posibilidad de los azotes.

Luc 12:47 Aquel siervo que conociendo la voluntad de su señor, no se preparó, ni hizo
conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes.
Luc 12:48 Mas el que sin conocerla hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco; porque
a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le
haya confiado, más se le pedirá.
37

Pablo dijo:
1Co 3:13 la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el
fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará.

¿Cómo puede alguien sufrir daño por el fuego sin tener ningún tipo de sufrimiento?

Juan 15:6 El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los
recogen, y los echan en el fuego, y arden.

No permanecer en el Señor y ser lanzado fuera o no en el fuego son experiencias de


disciplina y punición delante de Dios; si un creyente cae en el pecado y no se
arrepiente, podrá ser disciplinado por Dios. Un pecado en la vida de un impío es
pecado, un pecado en la vida de un creyente es igualmente pecado, los creyentes
que supieron y no hicieron la voluntad de Dios, recibirán muchos azotes. Los
creyentes que no supieron y no hicieron la voluntad de Dios recibirán pocos,
naturalmente los azotes son apenas una ilustración humana de la disciplina que
recibiremos en aquel día; si no hacemos la voluntad hoy. Aquél que posee más luz
tiene mayor responsabilidad.

2. El juicio de las naciones en la venida de Cristo.


El juicio de las naciones se dará de acuerdo con la forma como cada nación tratará a
los judíos y los cristianos perseguidos por el anticristo durante la gran tribulación
(Mt.25:31-46, Ap.16:12-16, 19:11-21).

Ese segundo juicio está en Mateo 25 y es conocido por el juicio de las naciones.
Cuando el Señor Jesús vuelva, todas las naciones todavía continuarán existiendo
sobre la tierra, ni todas naciones morirán durante la gran tribulación. Así, aquellos
que no murieron serán juzgados por Él en su venida, esas naciones serán juzgadas
con base en lo que se lee en Mateo.

Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces
se sentará en su trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y
apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las
ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. Entonces el Rey dirá a los de su derecha:
Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación
del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber;
fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis;
en la cárcel, y vinisteis a mí. Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo
te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te
vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo,
o en la cárcel, y vinimos a ti? Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en
cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis (Mat 25:31-
40).
38

Normalmente se tiene dos interpretaciones de esta parábola: una afirmando que se


trata del juicio universal y otra diciendo que se refiere al juicio de los creyentes; por
otro lado, esta parábola se aplica a las naciones; por tanto, a los gentiles. Si fuese un
juicio universal debería incluir judíos y la iglesia. Mas sabemos que no hay una
enseñanza sobre el juicio universal en la Biblia.

Este juicio es para las naciones o los gentiles, la palabra “nación” es traducida como
gentil, en otros lugares como en Mateo 4:15, 10:5, 18, 20, 25. Este juicio acontece
antes del milenio porque el Señor dice que en su venida reunirá a las naciones. Así el
juicio de las naciones será antes del trono blanco (Ap. 20:11-15). Este será para todos
que murieron sin Cristo. Esta parábola muestra el juicio de aquellos que estarán
vivos por ocasión de la vuelta del Señor. Otra duda muy común es con relación al
hecho del Señor separar las naciones como el pastor separa las ovejas de los
cabritos. Como el texto habla de las ovejas, las personas concluyen
apresuradamente que se trata de la iglesia; sin embargo, las naciones mencionadas
aquí significan los gentiles. Ellas no pueden denotar la iglesia por los siguientes
motivos:

a. Las ovejas habían hecho algo a Cristo sin saber; por tanto, las ovejas en este
caso no se refieren a los creyentes, pues un creyente sabe lo que está
haciendo algo para el Señor, porque es movido por el Espíritu.
b. La iglesia es escogida antes de la fundación del mundo como dice Pablo en
Efesios 1:4 según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que
fuésemos santos y sin mancha delante de él. En cuanto las ovejas mencionadas
aquí tienen origen desde la fundación del mundo: Mat 25:34 Entonces el Rey
dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado
para vosotros desde la fundación del mundo.

El juicio de las naciones resulta en vida o muerte eterna, mas los creyentes ya tienen
vida eterna. Como fue visto el juicio de los creyentes en el tribunal de Cristo es para
recompensa y no para condenación; si fuese para los creyentes, entonces se podría
concluir que la salvación es por las obras, lo que es contrario a la revelación de la
justificación por la fe.

c. Cuando el Señor proclama “tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me


diste de beber, estuve desnudo y me vestiste, estuve preso y fuiste a
visitarme” el texto muestra que algunos cumplieron esos preceptos,
mientras que otros no. Lo más impresionante es que aquellos que
cumplieron no sabían que habían hecho algo para el Señor y preguntaron
“¿Señor, cuando fue que nosotros te vimos desnudo y te vestimos, te vimos
con hambre y te dimos de comer, te vimos preso y fuimos a visitarte?” y el
Señor responde: cuando hiciste a uno de estos mis pequeñitos hermanos, a
mi lo hiciste.
39

d. El juicio de las naciones no es basado en la fe. El Señor no dice nada al


respecto de creer en el evangelio o en el mensaje de salvación. Es un juicio
basado en obras. ¿Qué obras? Los que fueron condenados fueron
simplemente porque no cuidaron de los pequeñitos hermanos del Señor.
Una vez que comprendemos que son las ovejas, necesitamos ahora entender
que son los pequeñitos. Según la Biblia, el Señor tiene tres diferentes tipos
de hermanos: los judíos, porque son de la misma raza (Hechos 7:23-26,
Rm.9:3), los propios hermanos de Jesús en la carne (Mat.12:46-48, 13:55) y la
iglesia (Mat.12:48-50). No parece lógico que el texto se refiera a los
hermanos de Jesús en la carne, los demás hijos de María; por tanto,
podemos concluir que los hermanos pequeñitos de Jesús son los judíos y la
iglesia.

El juicio de las naciones será entonces, conforme al modo como ellas hayan tratado
a los judíos y a la iglesia que no haya sido arrebatada durante la persecución que el
anticristo va promover contra ellos durante la gran tribulación.

Durante la gran tribulación, el anticristo establecerá una marca sin la cual no se


podrá comprar ni vender (Ap.13:16-17). En esas circunstancias, la vida de los
creyentes (que no fueren arrebatados) y de los judíos quedará muy difícil y es en ese
momento que recibirán ayuda de algunos que el Señor llama de ovejas (Mt.25:32).
Todavía, ellos lo harán sin saber que estarán a la verdad haciendo para el propio
Cristo. El resultado de ese juicio es que algunos, llamados de ovejas en el texto,
participarán de la bendición de tener el Señor como rey durante el milenio. Ellos
serán las naciones sobre las cuales el Señor reinará. Los otros llamados de cabritos,
lanzados en el infierno.

3. El juicio del trono blanco.

Es el juicio de aquellos que murieron sin Cristo, ellos resucitarán al final del milenio y
serán lanzados vivos en el lago de fuego y azufre (Ap.20:11-15). No existe tal cosa,
como juicio universal en la palabra de Dios, Dios no mescla plateas. Cada juicio se
dirige para un tipo de gente, el juicio del tribunal de Cristo es solamente para los
siervos y va suceder luego que el Señor vuelva, cuando todos los creyentes
resuciten. El de gran trono blanco, por su vez, ocurrirá después del milenio.

Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la
tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. Y vi a los muertos, grandes y
pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es
el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los
libros, según sus obras. Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el
Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus
obras. Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda.
Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego. (Ap.20:11-15).
40

PARTE II

ANÁLISIS DEL LIBRO


41

Compañero en la tribulación, en el reino y en la


perseverancia

Apocalipsis es un libro de conclusiones, las verdades de Dios son sembradas en


Génesis, mas la consumación de todas ellas está en Apocalipsis; si no tuviésemos el
libro de Apocalipsis no tendríamos la consumación de la historia, de la redención, ni
la conclusión del propósito de Dios y no sabríamos al respecto del futuro de la
iglesia ni del destino final de Lucifer.

Dios es un Dios de propósitos y en Génesis vemos la revelación de su propósito de


tener el hombre como su imagen y semejanza para representarlo en la tierra y para
tener comunión con el Él. Cuando Dios creó al hombre, Él creó a su imagen y
semejanza, cuando alguien miraba para Adán, sabía que se trataba de alguien
parecido a Dios.

Cuando Dios creó al hombre, sabemos que Satanás ya estaba aquí y él ciertamente
contempló en el hombre la imagen de Dios, hubo día en que Satanás dijo: Isa 14:14
sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo.

El mayor deseo del Lucifer era ser como Dios. ¿Usted consigue imaginar su ira y su
envidia en el día en que lo vio al hombre por la primera vez? Puedo imaginar la
escena, Satanás estaba rodeando la tierra y paseando por ella cuando un bello día
ve a Dios paseando en el jardín, él queda perplejo, pues aquél que iba andando
parecía ser el propio Dios. Él se aproxima y queda sorprendido: no es Dios, pero es
completamente semejante a Él. El hombre era todo lo que él deseaba ser:
semejante al altísimo. Creo que en aquel día su envidia lo corroyó y desde entonces
planeó la caída del hombre.
42

La mayoría de los maestros concuerda que el primer pecado fue la soberbia de


Lucifer, personalmente creo que fue la envidia. El maligno tuvo envidia de Dios y
hoy tiene con el hombre, no es de admirarse su odio contra el hombre. Es difícil
entender de porque él tienta al hombre todo el tiempo, destruir la imagen de Dios
en nosotros a través del pecado.

Dios creó al hombre a su imagen y semejanza para ejercer dominio y ser su


expresión. El hombre fue creado para expresar a Dios en su apariencia, en su
carácter, en su creatividad, en su santidad, y ciertamente en su gloria. Una vez que
el hombre tiene la imagen de Dios, puede ser su representante en la tierra.

Gen 1:26 Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra
semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en
toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.

Dios le dio la autoridad para ejercer el dominio como si fuese Dios, cualquiera que
viese a Adán sabría que él lo representaba, pues era semejante a Dios. Imagen nos
habla de autoridad, Adán ejerció autoridad en la tierra como la del propio Dios. El
hombre fue creado para gobernar.

¡Que propósito maravilloso! Representar y expresar a Dios. Después de que el


hombre fue creado, el diablo entró en escena para intentar de frustrar su propósito,
todavía no consiguió. Una vez que Dios decide hacer algo, su deseo se cumplirá. El
diablo entró en escena y el hombre cayó en pecado, perdió la imagen de Dios y
recibió el veneno de la serpiente dentro de si, envenenado, el hombre se tornó hijo
del diablo, semejante a él.

Todavía el hombre continuó en el centro del propósito de Dios. Dios decreta para la
serpiente que de la simiente de la mujer vendría uno que iría aplastar su cabeza. A
partir de ahí, Dios comenzó a ejecutar su plan de traer al hombre de vuelta para si,
para cumplir su propósito original, el hombre necesitaba ser restaurado; entonces
Cristo vino y en la cruz redimió nuestros pecados. En toda la Biblia tenemos el
desenvolvimiento de la historia de la redención, de cómo Dios rescató los hombres,
mas en Apocalipsis nosotros tenemos la conclusión que vemos que Dios nos hizo
reyes y sacerdotes (Ap.1:6). Si tuviésemos apenas los evangelios en la Biblia, eso
sería una bendición, pero no sería suficiente, en los evangelios conocemos la
redención, mas la redención no es el cumplimiento final del propósito divino. Dios
no creó al hombre para salvarlo, la redención es apenas una corrección de ruta.

Imagine que usted llame a su hijo para ir a una fiesta, él se arregla y va para el jardín
a jugar mientras te espera. Pero algo inesperado sucede: su hijo cae y se ensucia en
el barro mientras jugaba. La situación ahora cambió, usted no puede salir a pasear
con él de esa forma. Pero mientras está en la ducha, su hijo concluye que es mejor
quedar jugando allí que salir a pasear.
43

Ir a la fiesta es el propósito, ducharse es apenas una corrección de ruta. En el mismo


principio, el propósito de Dios no era simplemente lavar el hombre de pecado, eso
fue una corrección de ruta. Su propósito es tener al hombre como rey y sacerdote
para representarlo. Muchos creyentes imaginan que la salvación es el objetivo final
de Dios para el hombre y como aquél niño, quieren apenas quedar en la ducha. El
objetivo de Dios final de Dios es tener al hombre como rey y sacerdote.

Uno de los objetivos de Apocalipsis es mostrar el establecimiento del reino de Dios,


Él está restaurando su derecho sobre la tierra, para hacer de ella su reino (Ap.11:15).
Cuando Cristo vino, introdujo el reino de Dios (Lc.17:21, Mt.12:28). Ese reino fue
aumentando a través de la iglesia (Mt.16:18-19). La consumación cuando Cristo y los
creyentes vencedores reinen en el milenio sobre la tierra (Ap.2:26-27; 12:5; 20:4, 6).

Así, en Apocalipsis tenemos la conclusión de propósito de Dios. En Génesis el


hombre fue creado a la imagen y semejanza de Dios para expresarlo y representarlo
en autoridad. En Apocalipsis Dios establece la iglesia como reyes y sacerdotes, el
reino es para representarlo en autoridad y el sacerdocio es para expresarlo en
santidad.

Ap. 5:10 y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.

Apocalipsis es la conclusión de los cuatro tópicos principales: el propósito de Dios, la


redención del hombre, la iglesia y el destino de Satanás.

La revelación – 1.1

Apocalipsis es la conclusión y la consumación de la revelación del Señor en toda la


Biblia, la mayoría de las verdades es sembrada en Génesis. Los otros libros,
especialmente en el nuevo testamento, las envuelven, mas Apocalipsis es la
conclusión final. A pesar del libro revelar muchas cosas, la revelación básica es la
persona del Señor Jesús, Él es el sumo sacerdote en medio de las iglesias, cuidando
de ellas y juzgándolas (Ap.1:13-16). Él es el león de la tribu de Judá y el cordero en el
trono de Dios, también es el ser viviente en medio de los veinte y cuatro ancianos en
Ap.5:1-6.

Apocalipsis es una revelación de la persona de Jesús (Ap. 1:1). Solamente en


Apocalipsis podemos verlo como el sumo sacerdote cuidando de las iglesias
(Ap.1:13-16). Como el cordero que fue muerto y como el león de la tribu de Judá (5:1
a 6:1). Cristo aquí posee siete ojos (5:6) y una espada afilada sale de su boca (1:16).

La primera palabra es revelación, no se trata primariamente de una revelación del


futuro, de las cosas que han de ser, antes es revelación de una persona. Lo que se
tiene antes de todo es la revelación del Señor Jesús.
44

La manera como el Señor es revelado en Apocalipsis es diferente de la de otros


lugares en la palabra, en ninguno de los evangelios vemos una descripción de Él,
mas en Apocalipsis comienza una visión extraordinaria en la cual Juan lo describe en
gloria.

Nuestro objetivo es conocerlo, la vida eterna es esta: Juan 17:3 Y esta es la vida eterna:
que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.

La vida eterna es conocer al Señor Jesús; por tanto, Apocalipsis es un libro de


revelación del Señor Jesús.

En Cantares vemos al Señor Jesús como el amado, Jesús es aquél que tiene los ojos
como de palomas y los cabellos negros, en cambio en Apocalipsis, sus ojos son
como llamas de fuego y sus cabellos son blancos como la nieve (1:14)

Los evangelios dicen que su palabra es llena de gracia y de verdad, en cambio en


Apocalipsis una espada de dos filos que sale de su boca (1:16). Juan Bautista dice
que Él es el cordero de Dios que saca el pecado del mundo, en Apocalipsis, Juan vio
el cordero que fue muerto sentado sobre el trono, mas uno de los ancianos dice que
Él es el león de la tribu de Judá (5:5, 6:1). ¿Quién es el que está en el trono? ¿es el
cordero o el león? Él es los dos: el cordero para los redimidos y el león que vence a
Satanás.

¿En qué otro lugar se puede leer que Jesús tenía siete ojos? (5:6) no es que en
realidad tenía los siete ojos, recuerda sobre el número siete, eses siete ojos son los
siete espíritus de Dios. Después se dice al final del libro que Él es aquél que viene
montado en un caballo blanco en su muslo escrito: fiel y verdadero, el alfa y la
omega, aquél que salió venciendo y para vencer (19:11-16). Él es el que está
caminando entre los candelabros de oro, pero que subyugar las naciones debajo de
sus pies (1:13-16). ¿En qué otro lugar tenemos esa revelación del Señor? Es la
revelación final de Mesías y Príncipe de paz, todavía es también el Dios fuerte y
padre de la eternidad.

No hay otro lugar donde se hable tanto a respecto de la persona de Jesús.


Apocalipsis es la revelación del Señor Jesús glorificado. Hay uno que está en el cielo,
sentado a la derecha del trono de Dios, Él es el cordero y el león, es el hijo del
hombre y el hijo de Dios.

El testimonio de Cristo – 1:2-3

Por un lado, es la revelación de Cristo, por otro lado su testimonio. El testimonio de


Cristo es la iglesia, Él es representado bajo varias formas en Apocalipsis.
45

En el primer capítulo, ella es simbolizada por los candeleros o candelabros en medio


de los cuales el Señor está caminando (1:12-20). Esos candelabros son de oro y el
hecho de ser oro, revelan que poseen la naturaleza del propio Dios. El oro siempre
simboliza la naturaleza y la gloria de Dios.

Sabemos que el propio Señor es la luz del mundo, ahora quedamos sabiendo que
somos el candelabro que sustenta esa luz delante de la humanidad. La iglesia
sustenta el testimonio del señor Jesús en medio de las tinieblas de este mundo.

En Apocalipsis 21:23 Dios es la Luz y el cordero es la lámpara; sin embargo la iglesia


será por la eternidad, el candelabro que sustenta la lámpara para que se expanda la
luz de Dios. Ap. 21:23 La ciudad no tiene necesidad de sol ni de luna que brillen en ella;
porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera.

La iglesia también puede ser vista en la gran multitud incontable, de pie delante del
cordero (Ap.7:9). El Señor verá el penoso trabajo de su alma en los muchos hijos
generados para Dios, no será pequeña la multitud de los salvos.

En Apocalipsis, la iglesia es la cosecha que está lista para ser recogida (Ap.14:1-5, 16).
Nosotros somos como una labora que necesita crecer y tornarse madura. La parte
de la labora que madure primero es llamada de primicias, en el antiguo testamento
las primicias no eran llevadas al depósito, sino al templo (Ex.23:19). Después que el
resto de la labora estuviese madura, era llevada para el depósito. Lo mismo
acontece en la iglesia, los vencedores serán las primicias que serán recogidas antes
de la cosecha de los demás santos en la cosecha.

La iglesia también es el ejército que seguirá al Señor Jesús para derrotar el anticristo
al final de la gran tribulación (Ap.19:14-19, 17:4). Ellos son llamados elegidos y fieles.
Mas la mayor revelación de la iglesia en todo Apocalipsis es la nueva Jerusalén
(Ap.21:1 a 22:5). Ella es el cumplimiento final del cumplimiento del propósito de Dios
de tener a su novia, habrá un día en que vamos a casarnos con la divinidad. No
afirmamos que seremos dioses, mas es cierto que así como no se hallaba una
compañera idónea para Adán en Génesis, no existe compañera idónea para el Señor
fuera de la iglesia. Ser idóneo es estar a la altura, es ser semejante. En el fin seremos
tal cual Él es.

Del Edén, Dios contemplaba la nueva Jerusalén, su propósito era de tener un


cuerpo, un pueblo, un tabernáculo, una familia, una esposa. Todas estas figuras para
un mismo aspecto: Dios deseaba entrar en cada hombre siendo su vida, su placer, su
alimento, su todo.

Ese es el sentido de la expectativa divina de que Adán comiese del fruto del árbol de
la vida, que es Cristo; si así aconteciese, el hombre recibiría a Dios para dentro de si
como su nueva vida, lo que no significa “bios” la vida física ni “psique” la vida del
46

alma, sino “Zoe” la propia vida de Dios, la vida con la cual Él vive y subsiste. La vida
no creada, sino eterna (Ef.1:22, Ef.2:15, Gl.3:14, Ap.21:2-3, Ap.22:3-4).

Dios desea ser recibido para dentro de los hombres, formando así su novia con que
desea casarse. Casamiento es una figura, una metáfora, de una comunión
maravillosamente estrecha, sin límites cuya base es el amor. ¿Qué nos une a Dios?
¿Qué une Dios a nosotros? Es el amor.

Toda historia humana es el relato de un maravilloso romance entre Dios que


empeña todo para tenernos en ese nivel tan íntimo de comunión, cuya base es el
amor y nosotros su novia. Que amor maravilloso, consecuentemente, la ilustración
final de la iglesia es la novia. Noviazgo no remete a un amor apasionado.

Esa pareja de casados, entre tanto, debe tener la misma naturaleza, es imposible
mesclar o ligar íntimamente cosas cuya naturaleza es incompatible. Eva debería ser
sacada de Adán, de otra manera no habría comunión ni casamiento.

El mismo ocurre con la iglesia, éramos todos hijos de los hombres, el novio por su
vez era el hijo de Dios. La encarnación fue la divinidad entrando en la humanidad, Él
era el prototipo de nueva raza, era el segundo Adán, el unigénito, Aquél que era el
único engendrado. Para que haya casamiento debemos ser de la misma naturaleza
que él, debemos ser sacados de su costisla; esto es de aquello que Él era en si
mismo. En la resurrección eso aconteció, ahora somos como Él es en nuestro
espíritu. Soy hijo del hombre con el hijo de Dios dentro de mí. Puede haber
casamiento ahora, somos semejantes, tenemos la misma naturaleza.

La dedicatoria a las iglesias – 1:4-5

Juan, a las siete iglesias que están en Asia: Gracia y paz a vosotros, del que es y que era y
que ha de venir, y de los siete espíritus que están delante de su trono;
y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de
la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre (Ap.1:4-5).

El saludo de Juan envuelve las tres personas de la trinidad “… de Aquél que es, que
era y que ha venir” refiriéndose a Dios padre. “a cerca de los siete Espíritus de Dios”
refiriéndose al Espíritu Santo. ¿Existen los siete Espíritus? Evidentemente que no, es
por eso que hacemos confusión cuando no sabemos el significado de los números,
el número siete significa completo y perfección. ¿Entonces por qué no se dice
apenas de parte del Espíritu de Dios? Sencislamente porque en Apocalipsis tenemos
la plenitud de todo, vemos la plena operación del Espíritu Santo sobre la tierra, de
ahí que son los siete Espíritus de Dios. El Espíritu Santo es una tocha de fuego, mas
en Apocalipsis es una tocha siete veces más intensificada (Ap.4:5). Eso significa que
47

en los últimos días la acción del Espíritu Santo para juzgar, salvar y liberar será
extraordinariamente intensificada.

Por fin dice: “de parte de Jesucristo, testigo fiel, el primogénito de los muertos y el
soberanos de los reyes de la tierra”. ¿Por qué Juan escogió llamar a Jesús de testigo
fiel? Juan y sus compañeros esperaban por su venida en aquellos días, ellos no
imaginaban que se pasarían milenios. Después de sufrir persecución, prisión, quedar
exiliado y segregado en un isla solo, Juan se sentía completamente abandonado. El
diablo acusándolo decía: ¿Dónde está tu Dios? En esos momentos necesitamos
declarar que el Señor Jesús es testigo fiel que lo que Él habló se cumplirá; si Él dijo
que viene, ciertamente todo ojo lo verá. Tal vez Juan abandonado en aquella isla, un
tremendo apóstol, un hombre de milagros, solito con casi cien años de edad, podría
estar escuchando: ¿valió la pena, dónde está tu Dios? Juan esperaba en Aquél que es
testigo fiel, el soberano de los reyes de la tierra.

Libres por la sangre – 1:5

La sangre de Jesús no purifica apenas, también liberta, no tenemos que vivir más
como esclavos del pecado, pues la misma sangre que nos purifica tiene el poder de
libertarnos, la sangre fue el precio de nuestra redención. Éramos esclavos del diablo
y del pecado, mas el Señor vino y pagó el precio para libertarnos. Cuando se
entiende que la base de la esclavitud se acabó, se comienza a ser victorioso, la base
de la esclavitud era la propiedad. Hoy; por lo tanto, fuimos comprados y poseemos
un nuevo dueño. Porque pertenecemos a Él ahora, estamos legalmente libres de la
antigua esclavitud.

Reyes y sacerdotes – 1:6

Dios planeó en Génesis tener el hombre como su imagen y semejanza para


representarlo en la tierra para tener comunión con él, pero el enemigo intentó
frustrar su propósito y el hombre cayó en pecado. A partir de ese momento y por
todo el nuevo testamento tenemos la historia de la redención, de cómo Dios
rescató a los hombres, en Apocalipsis vemos la conclusión, vemos que Dios nos hizo
reino y sacerdotes (Ap.1:6)

Desde el principio, Dios deseó tener su reino sobre la tierra, cuando Cristo vino,
introdujo su reino (Lc.17:21, Mt.12:28). Ese reino fue de Cristo y los creyentes
vencedores reinarán sobre la tierra en el milenio (Ap.2:26-27, 12:5, 20:4-6).
48

He aquí que viene con las nubes – 1:7-8

La vuelta de Jesús posee dos aspectos: el aspecto oculto y el aspecto evidente a las
claras. El oculto es lo que llamamos de arrebatamiento y las claras es la vuelta de
Jesús en las nubes. Son dos eventos distintos que deberán suceder en momentos
diferentes, el arrebatamiento será antes de la gran tribulación y la vuelta de Jesús
en las nubes acontecerá después de la gran tribulación. El aspecto secreto es
también llamado de arrebatamiento de los creyentes vencedores.

1. EL ASPECTO OCULTO.
Primeramente, Cristo vendrá como ladrón.

Ap. 3:3 Acuérdate, pues, de lo que has recibido y oído; y guárdalo, y arrepiéntete. Pues si
no velas, vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti.

Ap. 16:15 He aquí, yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus ropas,
para que no ande desnudo, y vean su vergüenza.

Mat 24:40 Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado.
Mat 24:41 Dos mujeres estarán moliendo en un molino; la una será tomada, y la otra será
dejada.

Esos textos nos muestran claramente que el arrebatamiento acontecerá de


sorpresa, no habrá ninguna señal, será como la venida de un ladrón. Como no se
sabe cuando viene un ladrón, es necesario estar preparado constantemente. Como
ni todos están vigilando, se concluye que ni todas las iglesias serán arrebatadas,
muchos son llamados, mas pocos los escogidos, muchos son los salvos, mas pocos
cualificados. En aquel día, serán arrebatados apenas los que estuvieren vigilando. En
cambio a los que quedaren, eso no significa que necesariamente que nos sean
salvos, sino que estaban cualificados delante de Dios.

El arrebatamiento no es para todos los creyentes, Él viene como ladrón, porque


viene para robar un tesoro precioso y ese tesoro son los santos vencedores que
están resplandeciendo en medio de la noche.

El arrebatamiento acontecerá en hora desconocida, ningún ladrón dice previamente


a la hora de su llegada, por eso será en la hora desconocida (3:3).

Mat 24:36 Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi
Padre.

Mat 24:42 Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.

Mat 25:13 Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de
venir.
49

Jesús dijo que ni Él mismo sabe el día y la hora de su retorno, algunos intentarán
marcar la hora, mas quien puede saber más que Jesús. Él viene a aquellos que están
vigilando, vigilar es estar despierto en medio de la noche.

Apocalipsis dice que Él vendrá como la estrella de la mañana (Ap.2:28), mientras que
Malaquías dice que Él vendrá como el sol (Ml.4:2). La palabra de Dios dice que Él
viene como ladrón y también dice que todo lo verá (Ap.1:7). Eso se refiere a dos
momentos, porque el ladrón no viene con las nubes, algún ladrón enciende la
lámpara cuando llega y ni toca trompeta. Diferente de de la vuelta a las claras, en el
arrebatamiento, no habrá trompetas sonando, el sol no va escurecer ni la luna
quedará como sangre. No hay señales en el arrebatamiento, puede acontecer en
cualquier momento.

Para ver la estrella de la mañana, debemos estar despiertos en la madrugada,


porque el horario que más brisla es cuando el día está casi naciendo. Si deseamos
ver la estrella de la mañana, mas en la vuelta a las claras todo ojo lo verá como el sol
de la justicia.

Ap. 2:28 y le daré la estrella de la mañana.

Mal 4:2 Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas
traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada.

En el arrebatamiento el Señor vendrá para buscar los vencedores.

Ap. 12:5 Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; y
su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono.

Sabemos que Él viene para buscar a los vencedores. Apocalipsis 12 habla de la mujer
vestida como el sol, con las doce estrellas en la cabeza y la luna debajo de los pies,
esa mujer es una señal en el cielo. Ella apunta para todo el pueblo de Dios en la
historia y tiene varios hijos de Dios (v.17), mas ella está embarazada de un hijo
varón. Ese hijo no es Cristo como algunos imaginan, después de nacer, es
arrebatado hasta el trono de Dios. Los demás descendientes de la mujer, son
perseguidos por el dragón durante los tres años y medio de la gran tribulación.

Ese hijo varón es una parte de la iglesia que será arrebatada hasta el trono de Dios
(12:5). El hijo varón representa aquí la parte fuerte de la mujer, o sea los creyentes
vencedores.

2. El aspecto evidente.

El aspecto evidente es la vuelta del Señor Jesús propiamente dicha, para la vuelta
del Señor en los aires, muchas señales sucederán. La Biblia habla que en aquellos
días, el sol se oscurecerá y la luna se tornará como la sangre, la abominable
desolación será colocada en el templo y acontecerá la gran tribulación como nunca
50

hubo. Además de eso, sabemos que el anticristo vendrá como el falso profeta y
habrá dos testigos predicando en Jerusalén. Todas esas señales serán visibles.

En su vuelta, el Señor será visto por todas las tribus de la tierra.

Ap. 1:7 He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y
todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén.

No queda claro que si la tierra mencionada en Apocalipsis 1:7 se refiere a todo el


planeta o apenas a Israel. Basados en Zacarías 12.10 es probable que se refiera
apenas a Israel.

Zac 12:10 Y derramaré sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu
de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por
hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito.
Zac 12:11 En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén, como el llanto de Hadadrimón en el
valle de Meguido.

Así que Él venga sobre las nubes en Israel, todos los pueblos lo contemplarán:

Mat 24:27 Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente,
así será también la venida del Hijo del Hombre.
Mat 24:30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces
lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes
del cielo, con poder y gran gloria.

La venida secreta del Señor llamada de arrebatamiento sucederá antes de la gran


tribulación, la venida evidente a las claras será después de la gran tribulación.

En su aspecto secreto nadie sabe cuando será el tiempo, mas en el segundo las
señales son evidentes en la palabra de Dios. Ocurrirá al sonar la última trompeta
(séptima) ella marcará el final de la gran tribulación (Ap.18:1, 1 Ts.4:16, 1 Co.15:52) el
anticristo deberá manifestarse antes de la venida del Señor (2 Ts.2:1-4,8).

Mat 24:29 E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se


oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias
de los cielos serán conmovidas.
Mat 24:30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces
lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes
del cielo, con poder y gran gloria.

1Ts. 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta
de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
1Co 15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se
tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos
transformados.
51

La vuelta del Señor será en las nubes (Ap.1:7, 14:4, Mt.24:30). De acuerdo con
Hechos1:11-12, el Señor vendrá de la misma manera que subió al cielo, una vez que Él
subió del monte de los Olivos, es de allá que vendrá (Zc.14:4).

Zac 14:4 Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en
frente de Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el
oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se
apartará hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur.

He 1:11 los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo?
Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto
ir al cielo.
He 1:12 Entonces volvieron a Jerusalén desde el monte que se llama del Olivar, el cual está
cerca de Jerusalén, camino de un día de reposo.

Él vendrá con los santos vencedores para establecer su reino sobre la tierra y
vencerá. Zac 14:15 Así también será la plaga de los caballos, de los mulos, de los camellos,
de los asnos, y de todas las bestias que estuvieren en aquellos campamentos.

Él también destruirá al inicuo con el soplo de su boca (Ap.19:11-21, 17:13-14, 16:12-16,


Zc.14:3-5, 2 Ts.2:8).

La parte de la iglesia cree que habrá un avivamiento mundial en esos días, creo que
Dios se está moviendo sobre la tierra, mas no hay respaldo bíblico para un
avivamiento de proporciones mundiales antes de la gran tribulación.

Al leer Joel 2:28-31, veremos que las señales que acompañarán ese avivamiento son
prodigios en el cielo y en la tierra: sangre, fuego, y columnas de humo, el sol se
convertirá en tinieblas y la luna en sangre. Esas señales acontecerán durante la gran
tribulación. El avivamiento que barrerá la tierra entera vendrá después del
arrebatamiento de los creyentes vencedores.

Vamos imaginar la situación, en esta noche aconteció el arrebatamiento, personas


desaparecieron, pero no todos los hermanos, porque creemos que la mayoría
quedará aquí. En esa altura, en medio de la confusión causada por la situación, ellos
sabrán que ahora el tiempo está determinado y poco tiempo resta. La vuelta del
Señor deberá ser inminente. ¿Cuál será la actitud de los creyentes que quedaren? ¿Si
supiésemos que el arrebatamiento aconteció en esta noche, iríamos continuar
aplicando millones de dinero en el banco? Los pastores no necesitarán más llorar
pidiendo ofrendas, porque los hermanos traerán todo espontáneamente, las cosas
materiales van perder valor. No hará sentido de ambicionar grandes cosas (a la
verdad ni hoy hace sentido).

En ese sentido las personas buscarán a Dios de una forma infinitamente más intensa
que hoy, en todos habrá disposición de morir por el Señor y por el evangelio y en
ese tiempo se cumplirá se cumplirá la palabra de que el evangelio del reino será
52

predicada a toda criatura (Mt.24:14). Predicar para musulmanes será un desafío


pequeño, predicar para el comunista chino será nada. ¿y por qué? Porque el
arrebatamiento habrá ocurrido, y debemos añadir todavía que en algún momento
del arrebatamiento, el anticristo se levantará y perseguirá a los santos que
quedaren. Muchos serán martirizados en la gran tribulación.

El arrebatamiento va producir el mayor avivamiento de la historia, mas no quiero


hacer parte, yo quiero avivamiento ahora en mi vida para poder ser arrebatado
como un creyente vencedor; si estuviéramos experimentando avivamiento en
nuestras vidas, entonces seremos arrebatados. Si el fuego del Señor está sobre
nuestras vidas, estamos aptos para ser arrebatados y estar delante del trono.

Necesitamos ser fuego hoy, según la carta a los hebreos, el Señor hace de sus
ministros brasas de fuego (Hb.1:7). Hay muchas maneras de usted ver el cielo y el
infierno. Mas la mejor es entender el fuego, la Biblia afirma que nuestro Dios es
fuego consumidor (Hb.12:29). No podemos tener comunión con ese Dios si no
somos fuego también. La única manera de habitar con ese Dios es tornándonos
fuego como Él, es por eso que Él nos transforma en brasas de fuego; por eso jamás
iremos al infierno, porque el infierno ya no nos alcanza. Nosotros también somos
fuego, fuego no quema fuego. ¿Podrán los hombres compadecer delante de Dios
sin recibir la nueva naturaleza de fuego? La presencia de un Dios que es fuego
consumidor es el propio infierno para aquél que nos es fuego.

La presencia de Dios es plenitud de alegría y delicias si somos fuego como Él, mas si
no lo somos, no llegaremos cerca de Dios, porque puede ser un infierno. Delante de
Él hay un mar de fuego líquido (Dn.7:10). ¿Quién puede estar delante de Dios?
Solamente que fueron transformados en brasas de fuego. Por eso que la segunda
muerte no tiene más poder sobre nosotros.

El mismo principio se aplica al avivamiento. ¿Si Dios es fuego consumidor, tiene


sentido un hijo de Él ser frio como hielo? No tiene sentido. ¿Cómo sabemos que
alguien estuvo con Él? cuando está con el fuego. Los discípulos en el camino de
Emaus sentían el corazón quemar en cuanto conversaban con Jesús (Lc.24:32). Si
alguien estuviere quemando en ebullición, es porque estuvo con Jesús. La frialdad
es una señal de que alguien está lejos del fuego, quien no tiene comunión con el
fuego está destinado a ser frio. Esos no podrán subir en el arrebatamiento, el Señor
viene para arrebatar los que están en ebullición. Los demás tendrán que ser
atizados hasta coger fuego y entonces, después subirán también.

Su vuelta tiene dos aspectos, el oculto y el evidente. El aspecto oculto es llamado


también de arrebatamiento. Para el arrebatamiento no hay señal alguna, porque Él
viene como ladrón. En el aspecto evidente, Él vendrá y todo ojo lo verá.
53

Compañero en la tribulación, en el reino y en la perseverancia – 1:9-11

Ap 1:9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en


la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios
y el testimonio de Jesucristo.

Hay ciertas cosas que son inevitables en la vida de un creyente, una de ellas es la
tribulación. Según la palabra del Señor, las tribulaciones son necesarias porque
tienen un fin provechoso. Romanos 5:3-4 dice que la tribulación produce buenas
cosas en nosotros como perseverancia y esperanza, no debemos esperar una vida
cristiana destituida de dificultades y luchas. Todavía necesitamos hacer una
distinción entre la tribulación del reino y aquello que es fruto de una siembra.

La Biblia afirma que todo lo que plantamos inevitablemente cosechamos (Gl.6:7). A


veces plantamos algo que nos es la voluntad de Dios, con todo así mismo
cosecharemos. Lo serio es que nunca cosecharemos algo diferente de lo que
plantamos y ni en la misma cantidad, siempre cosechamos más (Os.8:7)

Además de eso, existen tribulaciones que vienen ataques del maligno, no


necesitamos sujetarnos a nada que claramente procede del maligno. Un hijo de Dios
no tiene que aceptar la convivencia con la opresión del maligno.

Existen aquellas tribulaciones que proceden de Dios, recuerde que Juan estaba
preso en la isla de Patmos, Patmos no era ningún lugar para pasar de vacaciones; si
somos perseguidos por causa de ser creyentes, alegrémonos en eso. Si somos
atacados o criticados por causa de nuestra fidelidad a Dios o por hacer lo que es
correcto fuéramos demitidos, regocijémonos en eso. Tenemos compañeros en esa
tribulación.

Juan fue nuestro compañero en la tribulación, sino también en el reino. La voluntad


de Dios es que comencemos a reinar hoy y no cuando morimos (Rm.5:17).

El vencedor es compañero en la tribulación, en el reino e inclusive en la


perseverancia, Apocalipsis habla de perseverancia, nos exhorta todo el tiempo a
perseverar hasta el fin. Hay un camino colocado delante de nosotros. La puerta y el
camino son estrechos.

Cuando pienso en perseverancia, me viene a la mente la imagen de aquella


maratonista que quedó famosa en las olimpiadas de 1988 cuando llegó cojeando en
la línea de llegada. Ella no estaba entre las primeras, pero su imagen corrió por todo
el mundo como símbolo de alguien que supera las propis fuerzas, el dolor, la
angustia y no se deja vencer. Algunas veces nos hemos sentido en la vida cristiana
como aquella maratonista, nos sentimos con ganas de parar, pero decidimos
intentar un poco más. Eso es perseverar, es superar nuestros límites.
54

Vencedor es el que supera, perseverar es siempre ir un poquito más allá de lo que se


fue anteriormente, esa pequeña conquista hace del atleta un vencedor. Así sucede
con el cristiano, no podemos acomodarnos donde estamos, podemos ser mejores
de lo que ya somos, podemos ir más allá de lo que ya estamos. Podemos amar más
de lo que amamos hoy, podemos ser más plenos que hoy, somos capaces de
conocer un poco más y de ir hasta el fin en esa estrada.

La expresión “en Jesús” acontece pocas veces en el nuevo testamento.


Encontramos la expresión “en Cristo” diversas veces, mas no “en Jesús” ¿Cuál es la
diferencia? “en Cristo” nos habla del Señor como ungido, glorificado, como aquél
que nos da vida y comparte con nosotros todas las cosas de Dios. Estar en Cristo es
estar en el cuerpo, es recibir todo lo que viene de Él.

Estar en Cristo es disfrutar de la salvación, de la gracia y toda suerte de bendición,


mas estar en Jesús es participar de su sufrimiento. El nombre de Jesús denota un
hombre de dolores (Is.53:3). El nombre Jesús es su aspecto humano, dice la Biblia
que era un hombre de dolores que sabe que es padecer. Estar en Jesús significa ser
participantes de sus sufrimientos.

Él tuvo sufrimientos físicos, en el alma y en el espíritu. Muchos han compartido de


sus sufrimientos físicos, mas debemos participar también de otro aspecto de su
sufrimiento: el rechazo. Ser cambiado con un criminal es terrible. Los judíos decían
“queremos a Barrabás, fuera con este” eso duele.

El sufrimiento del Señor que hoy debemos compartir es exactamente ese: ser
preterido, rechazado, olvidado, perseguido por causa de lo que creemos, por causa
de lo que enseñamos, por causa de nuestra fe, como el Señor fue siendo inocente,
ser declarado culpado, enseñado la verdad, siendo llamado de engañador, siendo
pobre, mas enriqueciendo a muchos. Eso es estar en Jesús, es ser participante de su
sufrimiento.

Juan no dice que estaba en Patmos porque el gobierno romano lo prendió, antes
dijo que estaba en el exilio por causa de la palabra de Dios y del testimonio de Jesús.
Ese es un hombre que está en Jesús.

En el verso 10, leemos que Juan se halló en espíritu, observe que la palabra espíritu
está con la letra minúscula, porque apunta para el espíritu humano, Juan tuvo la
revelación en el espíritu de él. La manera como usted tiene revelación es por su
propio espíritu, si no sabemos discernir nuestro propio espíritu, tendremos
dificultad para crecer espiritualmente.

La expresión “día del Señor” es polémica, la mayoría de los comentaristas en


cambio concuerda que se refiere al domingo y no al sábado. La iglesia primitiva no
tenía el sábado como día de reunión. Ellos recogían las ofrendas en el primer día de
55

semana, cuando la fiesta del ágape que era la fiesta del amor entre los redimidos del
Señor (1 Co.16:1,2). El domingo fue el día en que los primeros cristianos separaron
para estar con Él porque simboliza el nuevo comienzo, la nueva creación. El número
ocho significa nuevo comienzo. Consecuentemente, no es el primer día, es el
octavo.

En una época en que ser cristiano era constituirse enemigo del estado, los primeros
creyentes se reunían a las cinco de la mañana porque creían que deberian reunirse a
la hora en que Jesús había resucitado. El cristianismo era tenido como ilegal. Fue en
ese contexto de comunión con Dios que Juan tuvo la revelación.

Ella existe para los compañeros en la tribulación, en el reino y en la perseverancia.


Esas tres cosas caminan juntas. ¿Nosotros queremos el reino? Entonces tenemos
que ser compañeros en la tribulación y en la perseverancia.
56

La visión de Jesús glorificado


Esta es la única descripción del Señor Jesús que encontramos en toda la Biblia. Los
evangelios hablan de su obra, mas nada se dice al respecto de su apariencia, tal cual
Él es hoy, nosotros también seremos un día. Él es el primogénito y nosotros los
demás hijos de Dios.

AQUÉL QUE ESTÁ EN MEDIO DE LAS IGLESIAS LOCALES – 1:13

Aquí la palabra del Señor hace una descripción del Señor Jesús, en el versículo 13,
Juan dice que Él está en medio de los candelabros. El candelabro entre los cuales el
Señor fue visto representan las iglesias conforme el versículo 20: “el misterio de las
siete estrellas que viste en mi mano derecha y los siete candelabros son los siete
iglesias”. Conforme la palabra del Señor, Él está paseando en medio de esos
candelabros.

Su palabra revela también que los candelabros son iglesias locales (1:20). Juan vio
apenas siete candelabros representando siete iglesias; sin embargo en aquella
época existían mucho más que las siete mencionadas. Siete es un número simbólico,
significa que esas siete representan todas las otras y el Señor Jesús glorificado fue
visto caminando en medio de las iglesias paseando por medio de ellas, cuidando y
apacentando su pueblo.

La iglesia posee dos aspectos: el de la iglesia universal y el de la iglesia local. La


iglesia universal es la reunión de todos los santos que forman el cuerpo de Cristo,
ella es expresada a través de las iglesias locales, que son las comunidades
57

expandidas por las ciudades del mundo entero. Apocalipsis dice que la iglesia local
es un candelabro, leemos que Dios es la luz, Cristo es la lámpara y la iglesia local es
el candelabro que sustenta la lámpara (Ap.20:23).

El candelabro era hecho de oro macizo. En el antiguo testamento, el candelabro


simbolizaba al Espíritu Santo, ahora simboliza las iglesias. La iglesia hoy es la botija
de aceite, en la punta de cada hasta del candelabro había una lámpara que quemaba
con aceite. Esa lámpara es Cristo y la luz que ella expande es el propio Dios, la
iglesia es el candelabro que está sustentando el testimonio de la luz de Dios en
Cristo en la tierra. Cada iglesia local es un candelabro y el Señor Jesús está paseando
en medio de ellos, eso significa que con su mirada prescrutador de fuego, Él está
protegiendo y apacentando las iglesias.

Escribiendo para la iglesia de Éfeso, el Señor manda que ella se arrepienta de sus
obras, sino, su candelabro sería removido, cuando la luz del candelabro se apaga,
este pierde sentido de existir y el Señor remueve.

Los candelabros eran todos iguales, eso nos muestra que el padrón de Dios para las
iglesias es el mismo, una iglesia llena del Espíritu Santo e incendiada por su poder no
será muy diferente de otra igualmente incendiada. Dos iglesias llenas del Espíritu se
parecen mucho porque los candelabros son todos iguales.

El material del candelabro es de oro, en la Biblia simboliza la naturaleza y la gloria de


Dios, el hecho del candelabro ser hecho de oro nos muestra que solamente será si
ella tuviera el oro de la presencia de Dios. Como el candelabro, cada iglesia es
simbólicamente oro macizo.

El hijo del hombre – 1:13

El Señor Jesús es plenamente Dios y plenamente hombre, hay una visión


equivocada en medio de la iglesia, según el cual, después de la resurrección, Jesús
se torna apenas Dios. Eso no es verdad, hay un hombre sentado a la diestra de Dios
y este hombre que allí está sentado, también es Dios. Él está allá para mostrar que
como él seremos también un día, esa es nuestra esperanza. Después de glorificados
seremos tal cual es Él. hay un hombre en el cielo e hijos de Dios en la tierra.

Hoy para nosotros es vital ser llamados hijos de Dios porque nosotros ya no somos
de este mundo, todavía necesitamos declarar que Jesús es el hijo del hombre y no
apenas Dios, porque Él es la primicia, el primogénito, nuestro hermano. Es vital que
reconozcamos que Jesús vino en carne y se tornó el hijo del hombre, es importante
reconocer que Él vino en carne porque, para que la redención de la humanidad
pudiese acontecer, era necesario que el sangre de un hombre perfecto fuese
58

derramado; si Jesús no vino en carne, entonces Él no era hombre, no derramó su


sangre; si su sangre no fue derramado, entonces el hombre no fue redimido; si el
hombre no fue redimido, entonces no tenemos esperanza ni salvación.

Un sacerdote – 1:13

Esos vestidos talares son vestidos sacerdotales, así que en Apocalipsis no se


mencione ninguna vez que Cristo está allí como sacerdote, sabemos que el hecho
de Él estar vestido con vestidos talares, los vestidos sacerdotales, lo identifican
como sacerdote.

Exo 28:33 Y en sus orlas harás granadas de azul, púrpura y carmesí alrededor, y entre ellas
campanislas de oro alrededor.
Exo 28:34 Una campanisla de oro y una granada, otra campanisla de oro y otra granada,
en toda la orla del manto alrededor.
Exo 28:35 Y estará sobre Aarón cuando ministre; y se oirá su sonido cuando él entre en el
santuario delante de Jehová y cuando salga, para que no muera.

Si el Señor Jesús está en gloria intercediendo por cada uno de nosotros como
sacerdote, ministrando delante de Dios a favor de su iglesia como abogado.

1Jn 2:1 Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere
pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.

El sumo sacerdote que está paseando en medio de los candeleros es nuestro


abogado, capaz de comprender nuestra aflicción, Él es capaz de comprendernos
nuestras luchas, porque Él un día se hizo un hombre y fue tentado en todas las
cosas sin pecar. Cuando en medio de la tentación, el pecado lo asedia y usted ve que
está envuelto en un remolino, clame por socorro, Él puede socorrerlo en su
tentación.

Una cinta de oro en el pecho – 1:13

En Cantares, el Señor es presentado como Aquél que es el amado, el novio que está
listo para el casamiento, mas en Apocalipsis Él se presenta como el sumo sacerdote
cuyos cabellos blancos como la nieve teniendo el pecho ceñido con una cinta de
oro.

Ceñir significa fortalecer para el trabajo y el pecho apunta para el amor y cuidado, el
Señor; por tanto, con amor, cuidado y firmeza nos apacienta como nuestro
sacerdote.
59

Exo 28:4 Las vestiduras que harán son estas: el pectoral, el efod, el manto, la túnica
bordada, la mitra y el cinturón. Hagan, pues, las vestiduras sagradas para Aarón tu
hermano, y para sus hijos, para que sean mis sacerdotes.

El cabello blanco como la nieve – 1:14

En el libro de Cantares, el Señor es retractado con cabellos negros como el cuervo


simbolizando la juventud, el vigor, la fuerza y el poder del Señor.

Can. 5:11 Su cabeza como oro finísimo;


Sus cabellos crespos, negros como el cuervo.

Mas en Apocalipsis, Cristo el glorificado tiene cabello blanco, simbolizando su


eternidad.

Los ojos como llamas de fuego – 1:14

Nuevamente Cantares dice que los ojos del amado son como los de las palomas, una
mirada amable y dulce.

Can. 5:12 Sus ojos, como palomas junto a los arroyos de las aguas,
Que se lavan con leche, y a la perfección colocados.

Apocalipsis sin embargo dice que los ojos del Señor son como llamas de fuego. El
fuego significa juicio (1 Co 3:13, Hb.6:8, 10:27, 12:29). Los ojos escudriñan, el hecho de
sus ojos ser como fuego significa que nada oculto queda delante de Dios, que todo
ve, la motivación, el corazón, la actitud. No ocultaremos nada de Dios, porque sus
ojos son como llamas de fuego y sus ojos están sobre su iglesia. Él está caminando
entre los candeleros de oro.

Los ojos del Señor están vueltos para cada iglesia local, eso es lago muy serio
porque todo lo que está escondido vendrá a ser revelado. Lo que hoy está oculto
será manifiesto y lo que hablan escondidos en los cuartos será oído (Mt.10:26). Por
eso, sin santidad nadie verá al Señor, pues no podemos llegar delante de Él en
pecado, para Él no existe tiniebla alguna, donde Él mira se ilumina.

Los pies como bronce – 1:15

En la Biblia el bronce simboliza el juicio de Dios, hay muchos materiales con sentido
simbólico en la palabra de Dios. El oro simboliza la gloria y la naturaleza de Dios, la
plata nos habla de la redención, entre tanto el bronce simboliza el juicio y el juicio de
Dios. Observe que en el tabernáculo de Moisés, el lugar santo y el lugar santísimo
60

eran completamente hechos de oro porque apuntan para la intimidad y la comunión


con Dios. Realmente en el atrio todo era de bronce por causa del juicio del pecado
hecho por medio de sacrificios de animales.

Los pies del Señor son de bronce porque Él mismo ejecutará los justos juicios de
Dios y su andar fue probado, lo que cualifica para juzgar. El Señor con los pies pisará
el lagar de la ira de Dios, como quien pisa las uvas. Él ejecutará los juicios de Dios y
pisará la cabeza de la serpiente.

Ap. 19:15 De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las
regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios
Todopoderoso.

En la palabra de Dios los pies nos hablan de apropiación “todo lugar que pisar la
planta de vuestro pie, será vuestro (Js.1:3)” dijo el Señor a Josué, cuando pisamos,
estamos apropiándonos, tomando pose. Por otro lado, los pies también eran una
forma de sujetar y dominar. Cuando los reyes eran subyugados, simbólicamente el
vencedor le pisaba la cabeza en el cuello, era una manera de decir: tú estás debajo
de mis pies, sujeto a mi. Cuando el Señor venga, Él no vendrá apenas juzgar, va
apropiarse de la tierra que por derecho le pertenece.

La voz como muchas aguas – 1:15

La voz del Señor es solemne y sería, cuando Él habla todo despierta, después de oír
su voz Juan cayó como muerto. La voz del Señor abala los fundamentos de los
hombres. El salmo 29 dice:

Sal 29:3 Voz de Jehová sobre las aguas;


Truena el Dios de gloria,
Jehová sobre las muchas aguas.
Sal 29:4 Voz de Jehová con potencia;
Voz de Jehová con gloria.
Sal 29:5 Voz de Jehová que quebranta los cedros;
Quebrantó Jehová los cedros del Líbano.
Sal 29:6 Los hizo saltar como becerros;
Al Líbano y al Sirión como hijos de búfalos.
Sal 29:7 Voz de Jehová que derrama llamas de fuego;
Sal 29:8 Voz de Jehová que hace temblar el desierto;
Hace temblar Jehová el desierto de Cades.
Sal 29:9 Voz de Jehová que desgaja las encinas,
Y desnuda los bosques;
En su templo todo proclama su gloria.

Cuando Dios habla el mundo se abala, cuando el Señor habla, las fortalezas del
diablo caen por tierra.
61

Sustentando las siete estrellas – 1:16

En la mano del Señor había siete estrellas, el versículo 20 explica que las siete
estrellas son los ángeles de las siete iglesias, la palabra ángel en el original significa
mensajero. No se trata; por tanto de los ángeles celestiales, mas de hombres
enviados por el Señor como mensajeros a cada iglesia, como mensajeros, ellos son
porta voces del Señor.

Podríamos decir que son los pastores o presbíteros, mas la Biblia no dice eso, ni
siempre los que poseen título son aquellos que pagan el precio por la vida de la
iglesia. No es por tener el título de pastor o presbítero que el Señor lo reconoce
como el ángel de la iglesia. El Señor está interesado apenas en la realidad, el ángel
de la iglesia es alguien que oye de Dios, que es porta voz de Dios, que participa del
consejo de Dios. Por ser representado por un ángel, es alguien que posee una visión
celestial y está posicionado en los lugares celestiales, es alguien que tiene el
encargo y no apenas el cargo; si hay ángeles, la iglesia prospera; si hay apenas
portadores de títulos ocupando cargos, la iglesia defina.

Esas estrellas están en las manos del Señor; entonces, si somos líderes que de hecho
somos sus mensajeros, necesitamos estar conscientes de que el Señor no
solamente pasea entre los candeleros, mas también nos carga en las manos; si
somos líderes, la palabra del Señor asegura que Él está cargándonos en las manos.
Ese es el cuidado del sacerdote, escudriñando y juzgando, pero también cuidando.

En la boca una espada de dos filos – 1:16

Vea que Cantares dice que su hablar es muchísimo dulce y que Él es totalmente
deseable.

Can. 5:16 Su paladar, dulcísimo, y todo él codiciable.


Tal es mi amado, tal es mi amigo,
Oh doncellas de Jerusalén.

Según Lucas, todos se maravillaban con palabras de gracia que le salían de los
labios.

Luc 4:22 Y todos daban buen testimonio de él, y estaban maravillados de las palabras de
gracia que salían de su boca.

A pesar de su hablar ser dulce y lleno de gracia, así miso es una espada de dos filos.
Heb 4:12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos
filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne
los pensamientos y las intenciones del corazón.
62

Esa es la palabra del Señor liberada entre nosotros, es la palabra del Cristo
resucitado y glorificado.

Observe como el Señor se revela para la iglesia: su mirada como fuego (con el cual
nos juzga), su voz como muchas aguas (con la cual nos corrige) y la espada afilada
que sale de su boca (con la cual nos instruye y disciplina).

El rostro brillando como el sol – 1:16

Cantares dice que su faz es rosada:

Can 5:10 Mi amado es blanco y rubio, Señalado entre diez mil.

Ahora su rostro brilla como el sol al medio día (Ap.1:6), cuando Moisés contempló su
rostro de Dios, resplandecía, no percibimos, mas cada vez que nos colocamos
delante de Dios, algo de su gloria está siendo infundida en nosotros. Tal vez hoy,
nuestro rostro natural no manifiesta esa gloria, pero llegará la hora en que la gloria
de los hijos de Dios se manifestará y la gloria del Señor que está sobre nosotros será
vista.
Moisés contempló al Señor y su rostro resplandeció, nosotros iremos a Contemplar
por toda la eternidad y seremos participantes de su gloria, la glorificación es nada
más que contemplarlo. En el día en que lo veamos cara a cara seremos tal cual Él es;
por eso anhelamos por ese día.

Nosotros podemos contemplarlo porque Él es fuego y nosotros también, en su


venida las tribus de la tierra lo contemplarán, pero en vez de alegrarse van a llorar
con llanto porque nos conseguirán verlo. Su rostro es como el sol al medio de día.
Nadie consigue mirar para el sol y al medio día. Solamente los limpios de corazón
verán a Dios (Mt.5:8), definitivamente, sin santidad nadie verá lo verá (Hb.12:4).
63

La iglesia en Éfeso

En Apocalipsis, los candeleros representan las iglesias (1:20). Había en el cielo siete
candeleros representando siete iglesias en la tierra, una vez que había una iglesia en
la tierra, debe haber un candelero correspondiente en el cielo
Juan vio apenas siete, en los días de Juan no existían apenas siete iglesias en la
tierra, sin embargo siete candeleros fueron vistos en el cielo, concluimos así que las
iglesias son simbólicas y por se en número de siete, representan la totalidad de las
otras iglesias.
Podemos entender esas iglesias de tres formas, en primer lugar, ellas existieron
realmente y los problemas y virtudes mencionados aquí eran reales, siendo así, las
cartas ciertamente fueron útiles en su edificación. Es el aspecto histórico.

Todavía las iglesias pueden ser usadas como modelos espirituales que sirven de
advertencia a toda y cualquier iglesia en cualquier época de la historia. En todas las
épocas hubo iglesias a las cuales esas exhortaciones fueron apropiadas.

Apocalipsis es prioritariamente profético, en virtud de eso, cada iglesia puede ser


también una representación profética. Todos lo maestros concuerdan que cada una
de estas iglesias representa un determinado periodo de la historia de la iglesia
desde el primer siglo hasta la vuelta del Señor.

Evidentemente todos esos enfoques son correctos, todavía enfocaremos el último


como base para el análisis de cada iglesia.
64

Todas las cartas poseen la misma estructura, comienzan con una revelación del
Señor, exponen reprensiones o elogios y terminan con una palabra a los
vencedores.

Ciertamente una de las principales razones para que comprendamos estas cartas es
descubrir cual es el padrón de vencedor, atentando para las reprensiones y elogios
expresos en ellos, podemos construir un cuadro que demuestre lo que es ser un
vencedor.

Los vencedores no son personas extraordinarias, ni tampoco se refiere a todos los


salvos, son los creyentes normales en tiempos de anormalidad. Se vio
anteriormente que los vencedores son aquellos que fueron aprobados y por eso
recibirán recompensa en el reino. La recompensa siempre es prometida a ellos en
cada una de las cartas, mas eso no significa que los vencedores apenas serán salvos.
Los miembros genuinos de cada una de estas iglesias serán salvos, mas apenas los
vencedores recibirán la recompensa.

Los vencedores en cada iglesia son aquellos que son aprobados por responder a las
reprensiones hechas por el Señor en cada una de ellas; por ejemplo, el Señor
reprende a la iglesia de Éfeso por haber abandonado el primer amor, luego el
vencedor será aquél que atienda a la reprensión y volver al primer amor. Las siete
cartas; por tanto, representan un retrato de lo que significa ser un vencedor.

Entre las iglesias, cinco fueron censuradas y elogiadas, una no recibió ni censura ni
elogio y una fue elogiada, Éfeso fue elogiada y censurada. Desde el punto de vista
profético, Éfeso representa la iglesia del primer siglo.

1. La revelación del Señor – 2:1

Para cada carta, el Señor Jesús se presenta con un nombre especial de acuerdo con
las necesidades de cada iglesia. Su nombre nos habla de aquello que Él es. Él mismo
es nuestra provisión y suficiencia.

En esa carta, Él se presenta como aquél que conserva en las manos siete estrellas
que anda en medio de los siete candeleros de oro. El líder que está al frente de esa
iglesia, el Señor lo carga en su mano derecha que es la mano fuerte. Él apacienta a
su iglesia y también sustenta con brazo fuerte quien la lidera.

2. Mensaje a la iglesia – 2:2-6


2:2 Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a
los malos, y has probado a los que se dicen ser apóstoles, y no lo son, y los has hallado
mentirosos.
65

La primera señal del vencedor es que él tiene obras, labor y perseverancia. ¿Cuál es
la diferencia? Obras significan trabajo; entonces Jesús está diciendo: mira yo
conozco tu trabajo, trabajo es bueno, el trabajo en la casa de Dios es importante,
mas el Señor no conoce apenas el trabajo. Él conoce también la labor.

Trabajo es aquello que usted hace dentro del límite de su obligación, mas labor es
hacer más allá de lo que fue pedido. Algunos trabajan, otros dan la sangre, algunos
trabajan, mas hay otros que sudan la camisa. Es como un equipo de futbol, existen
jugadores que juegan, entrenan, hacen todo lo que es exigido en el contrato, eso es
trabajo. Mas hay otros jugadores que no miden esfuerzos, no sacan la pierna en el
momento de la bola dividida, ellos están para superarse. El equipo puede hasta
ganar algunos partidos con jugadores que trabajan, pero si quiere ser campeón,
serán necesarios tener jugadores que van más allá del trabajo que laboren.

Algunos hacen cosas en la casa de Dios, mas otros están dispuestos a desgastarse,
eso es labor. Jugar bola, muchos juegan, pero en el pasar de los años, solo los que
laboran son reconocidos.

El Señor dice que conoce las obras y la labor, pero todavía resta algo más: la
perseverancia. ¿Qué es perseverar? Hay jugadores que trabajan, otros hasta laboran;
sin embargo existen aquellos que están dispuestos a jugar hasta lesionados. Juegan
sintiendo dolor, pero juegan. Cuando todo conspira para hacernos desistir, el
cansancio, el dolor, la angustia, todavía así nos levantamos y proseguimos – eso es
perseverar. Solo hay perseverancia donde hay des conforto, impedimentos graves,
barreras terribles. Cuando otros jugadores están lesionados y el equipo nos
necesita, ahí está nuestra oportunidad para el sacrificio; eso es perseverar. ¿Pero
cuantos creen que eso vale la pena hacer eso por causa del reino de Dios? Eso me
recuerda a María que derramó todo aquel bálsamo precioso sobre Jesús. ¿Qué dijo
Judas? ¡Que desperdicio! Perseverar es hacer lo que nadie tendría coraje de
pedirnos. Los hermanos de Éfeso laboraban por el Señor, no estaban detrás de
cargos, sino de encargos. Cargo es trabajo, mas encargo es labor.

Los hermanos de Éfeso también no podían soportar hombres malos ni cosas malas,
además colocaban a prueba a los líderes que llegaban declarándose apóstoles
(Ap.2:2). Un vencedor posee esa santa indignación. Vencedores no se impresionan
con la santa oratoria, no se entusiasman con el volumen de voz, con el golpe en el
púlpito, etc. Vencedores con osadía prueban los pretenciosos apóstoles para tener
certeza que verdaderamente son hombres de Dios.

No es errado probar a aquellos que deseen liderar, el problema es que somos llenos
de respetos humanos, percibimos que la persona dice una cosa y vive otra, es un
fariseo hipócrita, pero así mismo no lo confrontamos. Queremos ser comprensivos
66

simpáticos. Los efesios no soportaban los falsos apóstoles y colocaban a prueba


aquellos que se decían enviados de Dios.

En el verso tres leemos que los hermanos de Éfeso tenían perseverancia en medio
de las pruebas sin desfallecer, el gran test es la presión. El vencedor es testado en
medio de la presión. Normalmente preferimos oír lo que las personas dicen cuando
todo va bien en días de calma y viento suave. Mas ignoramos cuando ellas dicen
cuando el cielo oscurece y la tempestad cae, Dios es diferente de nosotros, Él no
llama para aquello que hablamos con la cabeza fría, Él espera hasta que la situación
calienta, entonces baja el oído y dice: puede hablar hijo mío que te estoy
escuchando. Cuando alguien habla con la cabeza caliente, siempre lo disculpamos
diciendo: “no llames, él está con la cabeza caliente”. Lo que hablamos con la cabeza
fría muestra lo que queremos ser, mas lo que hablamos con la cabeza caliente
muestra aquello que realmente somos.

La única forma de que conozcamos lo que ocurre en nuestro interior es siendo


sometidos bajo la presión, solamente cuando Dios esprime, brota lo que está dentro
de nosotros. Aquellos hermanos fueron testados en medio de pruebas, en medio de
tribulaciones y fueron aprobados. La perseverancia solamente puede ser observada
en medio de adversidades y persecuciones, la valentía de un soldado solo se conoce
en medio de la batalla. Ser un vencedor es perseverar en medio de la tribulación
hasta ser aprobado como esos hermanos de Éfeso. Hasta aquí tenemos apenas
elogios del Señor a esta iglesia; sin embargo, hay ciertas cosas que deben ser
corregidas.

Cuando vaya exhortar a alguien, comience elogiando, es el Señor Jesús quien nos
enseña eso. Después de elogiar bastante, dijo: pero tengo algo contra ustedes,
abandonaron el primer amor.

La palabra “próten”, que puede ser traducida como mejor. El primer amor es el
mejor amor, es como si el Señor: yo tengo una cosa contra ustedes mis queridos de
Éfeso, ustedes trabajan, tienen obras, han tenido tribulación y han perseverado,
pero abandonaron el primer amor.

El primer amor es aquel fervor inicial de cuando conocimos al Señor, los vencedores
son aquellos que preservan el mejor amor para el Señor, aquel más caliente, más
precioso, aquel más fuerte.

No seremos útiles para Dios a menos que lo amemos apasionadamente. Dios no


está detrás de trabajadores, sino de una novia. Dios no creó Adán y lo colocó en una
fábrica, antes lo colocó en el jardín de Edén, que quiere decir jardín de delicias, el
hombre fue colocado en el Edén para tener comunión, para amar al Señor.
67

¿En qué está basada nuestra relación con Dios, en ceremonias y ordenanzas o en el
amor? Dios hasta elogió el trabajo, la obra, la perseverancia de los efesios, pero
todo quedó ofuscado por causa de un corazón frio en el cual ya se apagara el primer
amor.

Por la fe somos salvos, mas por el amor recibimos la recompensa, sin fe es imposible
agradar a Dios, mas la intimidad es reservada para aquellos que lo aman.

Se que la palabra pasión no es la más apropiada, mas no hay otra mejor, nosotros
necesitamos ser apasionados por el Señor Jesús. El primer amor demuestra
intensidad en nuestra relación con el Señor.

Apocalipsis es la conclusión de una historia de amor, al final la novia viene bajando


del cielo ataviada, lista para recibir al novio. ¡Aleluya! La principal condición que se
espera de una novia es que ella sea apasionada.

En Mateo, leemos a respecto de las vírgenes y novias que el Señor declaró no


conocer (Mt 25:12). Existen algunos locales en que la palabra del Señor afirma no
conocer alguien (Mt.7:23). ¿Quién es aquél que el Señor conoce? El apóstol Pablo
dijo que Él lo conoce a aquél que lo ama (1 Co.8:3). Por tanto, conocer Jesús nos
garantiza la salvación, mas ser conocidos por Él nos conduce al reino.

Cuando amamos percibimos la persona amada en todo y todo es oportuno para


hablar para hablar de ella, yo hago una dinámica con mis alumnos, lo llamo de: “sea
loco por un día”. El objetivo es desenvolver un corazón para amar más al Señor,
durante todo el día cada uno debe mirar a Jesús en todo. No es que todo sea Dios
(esa es una herejía) todo apunta para Él y testimonio a respecto de Él, entonces
podemos verlo en aquello que Él creó. Yo entonces oriento: cuando usted vaya abrir
la puerta diga: esa no es una puerta verdadera, solo el Señor es la puerta que me
permite entrar en la gloria. Si usted estuviere caminando declare: ese camino no
lleva a ningún lugar, el único camino verdadero es el Señor Jesús. Al tomar un vaso
de agua declare que Él es al agua de vida. Cuando vaya a comer proclame: esta
comida no puede matar mi hambre, Jesús es el pan que descendió del cielo y yo
quiero comer de Él. Cuando vaya descansar diga: el Señor es mi descanso. El jalar el
cubre cama: Señor debajo de tus alas yo descanso. Al entrar en la ducha: la
verdadero agua que me lava es el agua de de la palabra de Dios. Cuando coja el
jabón declare: eso no limpia ninguna cosa, solo la sangre de Jesús me purifica la
vida. Tal vez nos digan que estamos locos, pero todo apasionado pierde un poco la
razón.

Ap. 2:5 Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras;
pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres
arrepentido.
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Las primeras obras a las cuales el Señor se refiere es el primer amor, es notable que
amarlo sea el tipo de obra que Él aprueba y que a pesar de todo trabajo, labor y
perseverancia, el Señor no esté satisfecho. Solamente un corazón lleno de amor por
el Señor puede mantener el candelero acceso.

En Éfeso, por más de mil años no hubo iglesias, hoy hay iglesias en Roma, Corinto,
Tesalónica, mas no hay en Éfeso. El candelero fue removido.

Las puertas del infierno no pueden prevalecer contra la iglesia, el diablo no tiene
poder para destruir la iglesia, pero cuando la iglesia se enfría su corazón, el Señor
mismo remueve. Un candelero sin fuego se torna inútil, cuando el Señor fue visto en
medio de los candeleros de oro, Él estaba cuidando para que la llama no se apague
en ninguno de ellos. Sin embargo, cuando la llama se apaga, el candelero necesita
ser removido.

Ap. 2:6 Pero tienes esto, que aborreces las obras de los nicolaítas, las cuales yo también
aborrezco.

¿Qué son las obras de los nicolaítas? Ni la palabra de Dios ni la historia de la iglesia
encontramos mención alguna de un movimiento con ese nombre. Cuando no
encontramos ninguna mención en la Biblia a respecto de algo y ni tampoco en la
historia, eso significa que aquello es simbólico.

En ese caso el significado de la palabra es la clave para que entendamos el símbolo.


La palabra nicolaíta es compuesta de dos palabras en el griego: nicos, y laicos,
“nicos” significa conquistador, dominador, “laicos” significa el pueblo común.
Entonces el significado de “nicolaítas” es: dominadores del pueblo. El significado
del nombre apunta, entonces para el clericalismo dentro de la iglesia. Si queremos
ser vencedores, debemos rechazar la obra de los nicolaítas, o sea, la obra del
clericalismo.

Existen todavía muchos engaños con respecto al clericalismo. Primero, algunas


personas piensan que ser anticlerical es condenar todo tipo de autoridad, eso es un
error. Dentro de la iglesia existen autoridades constituidas por Dios. El Señor
sustenta en las manos el ángel de la iglesia, que puede ser el líder, el pastor o el
presbítero. Si no tenemos el gobierno, lo que resta es el caos.

El clericalismo surge cuando los líderes intentaron impedir que los demás miembros
del cuerpo funcionen, transformando la obra de Dios en un emprendimiento de
profesionales que se colocan como intermediarios entre los miembros de la iglesia y
el Señor.

Históricamente, el nicolaísmo o clericalismo, comenzó a suceder en el primer siglo,


mas su auge aconteció en el siglo cuarto con Constantino. Constantino fue el
emperador romano que tornó el cristianismo la religión oficial del imperio. Hasta
69

aquel momento, ser cristiano era ser un enemigo del estado, sujeto a ser
perseguido, comido por fieras, acerrado por el medio, preso, desterrado y muerto.
En el siglo quinto, la historia dice que Constantino supuestamente tuvo la
experiencia de conversión y oficializó la iglesia sacándola de la clandestinidad. Como
resultado la iglesia creció y se llenó de personas que ni eran convertidas
genuinamente. Todos querían pertenecer a la religión del emperador.

Los obispos de la iglesia, tal vez con buena intención no podían permitir que
personas en aquellas situaciones estuviesen al frente; entonces decidieron que el
pueblo, el laico, se sentaría para aprender y los más instruidos, llamados de clérigos
irían enseñar. De ahí para que se proclamen mediadores entre el pueblo y Dios fue
un paso.

El clericalismo es una de las peores plagas que ha asolado la iglesia en esos casi dos
mil años, las funciones del cuerpo fueron destruidas, la iglesia se tornó un lugar
donde las personas simplemente asisten.

Es por eso que la visión de las células es tan importante, es un instrumento de Dios
para matar esa enfermedad, maligna del clericalismo y para restaurar las funciones
del cuerpo. En la visión celular, todos los miembros funcionan, todos pueden hablar
y sobre todo, todos pueden liderar o oír de Dios. Cada creyente volvió a ser un
ministro.

Las células son un instrumento de Dios para que alcancemos la visión de ser una
iglesia de vencedores. Pedro dice que somos sacerdotes (1 Pe.2:9) cada creyente
puede oír a Dios, cada uno puede tener dirección de parte de Dios, cada uno puede
tener acceso a la Biblia.

La forma más común del clericalismo es aquella de arriba para abajo, en la cual los
pastores son los únicos ministros por ellos son los que poseen el título. Ya escuché
pastores diciendo que los demonios solo salen por medio de ellos, no sucede nada
si cualquier creyente los expulsa, es necesario ser un creyente graduado.

En un iglesia en células también existen formas sutiles de clericalismo, llamamos de


clericalismo místico, hay personas que se colocan como superiores, por encima de
los demás, de una manera mística: a través de visiones y experiencias
sobrenaturales. No digo que tales experiencias no puedan ser verdaderas, sino
deben servir de base para que alguien se coloque encima de los demás santos,
impidiéndolos de ministrar.

3. La recompensa del vencedor – 2:7


70

Ap. 2:7 El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré
a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios.

Esta promesa nos recuerda lo que ocurrió en el Edén, Dios creó el hombre y lo
colocó en el paraíso. El árbol de vida fue colocado en el jardín para que el hombre
pudiese comer de ella; sin embargo no comió. Después que él cayó en el pecado,
fueron colocados dos querubines con espadas de fuego paseando en la puerta del
Edén para impedir que él venga a comer de ella. El vencedor, sin embargo va pasear
en medio del paraíso de Dios y comerá del árbol de la vida. En otras palabras, el
vencedor es aquél que cumple el propósito original de Dios. Es como si padre dijese:
voy honrarlo y colocarlo en una posición de prominencia, porque él conoció mi
corazón y me agradó, andando de acuerdo con mi propósito.
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La iglesia en Esmirna
Esta carta se inicia con la revelación de uno de los nombres de Jesús:

Ap. 2:8 Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que estuvo
muerto y vivió.

En otras palabras: yo soy la resurrección y la vida. ¿Por qué el Señor se revela de esa
manera tan linda para la iglesia en Esmirna? Porque esa iglesia era una iglesia de
mártires.

La iglesia en Esmirna es un cuadro profético de la iglesia del segundo y tercer siglo,


ese fue el periodo de mayor persecución de la historia de la iglesia.

Los romanos tenían una diversión abominable, gustaban de ver leones comiendo
cristianos vivos. En el coliseo, colocaban de un lado los leones que quedaban sin
comer nada hasta por dos meses y de otro lado los cristianos. El resultado era un río
de sangre, hubo ocasiones en que murieron tantos cristianos que la sangre en la
arena llegaba hasta los tobillos. Dice la historia que en ciertas ocasiones, había
tantas personas en la arena que los leones se recusaban por miedo, los principales
cristianos eran obligados a atizar los animales para que fuesen atacados por ellos.
La mayoría de los cristianos de la iglesia de Esmirna murieron en la arena luchando
contra los leones hambrientos.

La historia dice que ellos entraban en la arena cantando himnos al Señor, en Roma
existe todavía el coliseo, ese terrible anfiteatro con capacidad para veinte mil
personas, testimonió el mayor martirio de los creyentes en toda la historia. Es un
lugar maldecido, habitación de demonios con certeza.
72

Esa fue la era de la iglesia de Esmirna, un época en que tornarse un cristiano era
simplemente comprar un billete para la eternidad, era una época en que decidirse
por Jesús era constituirse un traidor del estado. Los cristianos temían en decir:
Jesucristo es el Señor. Eso era un crimen una vez que apenas el emperador podría
ser llamado de señor.

1. La revelación del Señor – 2:8

La palabra Esmirna viene de mirra y significa sufrimiento, esa iglesia representa las
iglesias bajo persecución. Es para ellas que el Señor dice: yo soy el primero y el
último. Yo estoy viendo el comienzo y también estoy garantizando el final de la
historia, yo estuve muerto, pero reviví, ustedes están muriendo y van revivir
también. El nombre del Señor suple nuestra fe, su nombre es todo lo que
necesitamos.

2. Mensaje a la iglesia – 2:9-10

No hay reprobación para esa iglesia, todavía no hay elogios también. Aquí el Señor
conforta y consuela, es una iglesia sufrida. No posee muchas obras porque no tiene
condiciones de trabajar, la persecución es grande, el Señor dice:

Ap. 2:9 Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico), y la
blasfemia de los que se dicen ser judíos, y no lo son, sino sinagoga de Satanás.

Revelándose como aquél que estuvo muerto y resucitó, el Señor está hablando de
su resurrección, la tribulación es un medio que Dios usa para que podamos
experimentar el poder de la resurrección (Fp.3:10). Es en medio del sufrimiento que
podemos vencer la muerte.

Además de atribulada, la iglesia era pobre. Alguien puede preguntarse: ¿Es


necesario ser pobre para tornarse un vencedor? Ciertamente no necesitamos ser
pobres para ser vencedor, mas Jesús dijo que es más fácil un camello pasar por el
ojo de una aguja que un rico entrar en el reino de los cielos (Mt.19:24). Él habló eso
con respecto al reino y no con respecto a la salvación, todos concordamos que un
rico puede ser salvo, pero la chance de un rico a ser un vencedor es la misma de un
camello pasar por el ojo de una aguja.

El Señor dice que ellos naturalmente eran pobres, mas espiritualmente ricos.
Evidentemente pobreza material no resulta automáticamente en riqueza para con
Dios. Infelizmente existen personas pobres de dinero, pobres de mente y también
pobres en experiencia con Dios. Pobreza por si solo no es sinónimo de humildad, es
posible ser pobre y al mismo tiempo arrogante y pretensioso, mismo que eso sea
raro. Mas sobre los ricos no hay nada que discutir, su actitud es siempre pretensioso
y autosuficiente, por pensar que no necesitan de Dios, su postura es de arrogancia.
73

A pesar de eso no debemos mirar para lo exterior, pues el valor de un hombre no


está en los bienes que posee (Lc.12:15) lo que importa es cuanto acumuló delante de
Dios. El vencedor es aquél que es rico para con Dios, él puede ser pobre
financieramente, mas el hecho es el haber acumulado tesoros en el cielo. Esta
iglesia estaba acumulando tesoros en el cielo, por eso el Señor dice que ella era
pobre aquí, pero rica allá.

Ap. 2:9 Yo conozco tus obras, y tu tribulación, y tu pobreza (pero tú eres rico), y la
blasfemia de los que se dicen ser judíos, y no lo son, sino sinagoga de Satanás.

¿Es posible existir un judío falso? ¿Cómo identificar un verdadero judío? Romanos 2
afirma que el verdadero judío no es aquél que nació de padre y madre judíos ni es
aquél que fue circuncidado. El verdadero judío es aquél que es interiormente.

Rom 2:29 sino que es judío el que lo es en lo interior, y la circuncisión es la del corazón, en
espíritu, no en letra; la alabanza del cual no viene de los hombres, sino de Dios.

Los judíos que perseguían la iglesia en Esmirna eran judíos en la carne, pero eran
falsos judíos delante de Dios, porque el verdadero judío es aquél que tiene el
corazón circuncidado para amar a Dios. El Señor los llama de sinagoga de Satanás, o
sea, habitación de demonios.

Ser un vencedor en esa iglesia es rechazar todo aquello que viene del judaísmo, no
debemos intentar transformarnos a nosotros mismo en judíos ni usar transformar la
iglesia en algo judaico porque eso no procede del Señor. ¿Cómo podemos identificar
conceptos y prácticas judaicas en la iglesia? El judaísmo posee cuatro características
básicas.

La primera de ellas es el templo, el templo era el centro de la religión judaica en el


antiguo testamento. Dios no habitaba en cualquier lugar, Él habitaba en un lugar
llamado Israel, pero ni en Israel no habitaba en cualquier lugar, sino en una ciudad
llamada Jerusalén, mismo en Jerusalén no era en todas las casas que Él habitaba,
sino en un edificio llamado templo, hasta en el templo, estaba solo en un lugar
llamado lugar santísimo. Si un judío quería adorar a Dios, tenia que ir para el templo,
porque era allá que Dios habitaba.

Nosotros somos el templo de Dios hoy, estrictamente hablando, el cristianismo es


una religión que no posee edificios ni templos. El judaísmo tenía templo, nosotros
no los tenemos más. Si volviéramos a establecer edificios como templos,
incurriríamos en un retroceso al judaísmo.

Ser un vencedor hoy es entender que somos el templo de Dios y que Dios no habita
en edificios, nosotros somos su morada, Dios no habita en el edificio de la iglesia,
cuando usted se va del culto, Él lo acompaña. Él habita con usted, porque sagrado
es usted y tú estás lleno de Dios donde vaya se torna sagrado también. Somos su
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templo y lo cargamos dentro de nosotros, donde nosotros pisamos Dios hinca sus
pisadas, donde nosotros llegamos Dios llega junto.

Algunos pastores religiosos terminan el culto orando “ahora despídenos en paz” se


puede el Señor diciendo: Yo no me despido, voy junto con ustedes. Otros
comienzan el culto orando solemnemente: “ahora entrando en tu presencia” quedo
pensando ¿Dónde estaban antes? Otros piden que las personas vengan al altar
refiriéndose al púlpito de madera. Creer que Dios habita en un edificio es una
herejía. Esa visión templista es un impedimento serio al mover de Dios.

Mas una vez, la visión celular es el camino del vencedor, cada institución es la cara
del edificio donde se reúne, pero una iglesia en células no existe en función del
edificio donde se reúne. El edificio para nosotros es apenas un lugar de
entrenamiento y celebración, la vida normal de la iglesia acontece en otros lugares
en nuestro día a día. A pesar de que en el antiguo testamento, Dios habitaba en un
templo, eso ya no sucede en el nuevo testamento, bíblicamente hablando, la iglesia
del nuevo testamento posee un lugar de reunión, mas no posee templos.

Los templos representan una gran contradicción del cristianismo, la verdad ellos no
existían hasta el segundo siglo; si usted buscaría por la iglesia en el primer siglo,
sería conducido a un grupo de persona reuniéndose en una casa, porque eran en
casas que ellos se reunían.

La segunda característica del judaísmo es la ley, no hay judaísmo sin la ley, la ley era
el centro de la vida del pueblo. Para el autor de la carta a los hebreos, la ley de los
judíos era escrita en tablas de piedras, pero la ley de la nueva alianza en el nuevo
testamento es escrita en nuestros corazones (Hb.8:10). El Espíritu nos enseña a
respecto de todas las cosas, la ley del Espíritu fue impresa dentro de nuestro propio
espíritu y no necesitamos mas seguir la ley de Moisés, porque la ley del nuevo
testamento es superior. No se trata de memorizar simplemente normas y reglas,
sino de tener una persona residiendo dentro de nosotros. Nadie puede seguir la ley
y cumplir plenamente la voluntad de Dios, para eso necesitamos tener la ley del
Espíritu de vida, una persona dentro de nosotros hablando con nosotros,
orientándonos y dirigiéndonos.

No tenemos que seguir ninguna liturgia o tradición judaica como lunas nuevas,
fiestas y cosas semejantes. No debemos celebrar más la fiesta de los tabernáculos o
la fiesta de pentecostés. Hoy nuestro pentecostés es el Espíritu Santo de Dios,
nuestro tabernáculo es el Señor Jesús que descendió del cielo y vino a habitar con
nosotros y en nosotros. Él nuestro todo, el cumplimiento de todo y todo se resume
en Él, porque el fin de la ley es Cristo para justicia de todo aquél que cree en Él
(Rom.10:4). No debemos seguir más leyes exteriores. El Espíritu de verdad nos
conduce a toda verdad.
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La tercera característica del judaísmo es su clase sacerdotal, actualmente en el


cristianismo no existe una clase sacerdotal, todos somos sacerdotes del Señor,
como dice Pedro:

1Pe 2:9 Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por
Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;

Los hermanos de Esmirna eran perseguidos por esos falsos judíos que querían
transformar la iglesia en un pedazo de Israel. También hoy tenemos personas que
quieren trasformar la iglesia en una sinagoga judaica.

La cuarta característica distintiva del judaísmo son las promesas de Dios, el Señor
cumplirá las promesas hechas a los judíos porque Él es fiel. El autor a los hebreos
dice que nuestras promesas son superiores, porque son basadas en una alianza
superior.

Heb 8:6 Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor
pacto, establecido sobre mejores promesas.

Finalmente el Señor dice a esta iglesia:

Ap. 2:10 No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de
vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel
hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

Como no quedó en la historia ningún registro a cerca de una tribulación especifica


de diez días, creemos una vez más que se trata de algo simbólico. Necesitamos
entender el sentido a la luz de la propia palabra, hay otras ocasiones en la Biblia en
que el periodo de diez en mencionado. Dos de ellas en el antiguo testamento hablan
de un periodo de diez días, la primera fue cuando Abraham mandó a Eliezer a la
tierra de sus padres para buscar una esposa para Isaac. Cuando el siervo de
Abraham llegó al lugar, escogió a Rebeca, la familia le pidió diez días para
despedirse de la chica (Gn.24:55).

El segundo caso se dio cuando Daniel, Ananías, Misael y Azarías pidieron al


compañero del rey Nabucodonosor para que no se alimenten de la comida real,
impropia a los judíos, sino apenas de legumbres y agua durante diez días. Era un
tiempo de prueba; si al fin de esos diez días, ellos tuviesen una apariencia mejor que
los demás continuarían alimentándose conforme la costumbre judaico (Dn.1:12).

Esos diez días significan un periodo pequeño, pero completo, de prueba y test.
Tribulación de diez días es una tribulación completa, el vencedor será testado en un
tiempo completo de tribulación determinado por Dios.

La iglesia de Esmirna estaba sufriendo, todavía ese sufrimiento era conocido


delante de Dios y determinado en su soberanía. Eso es un gran consuelo: toda
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tribulación por la cual tenemos que pasar, tiene un tiempo determinado y es


conocido delante de Dios, nunca va más allá de lo que está establecido. También no
excede los límites de nuestras propias fuerzas. No significa, por tanto, que sea un
periodo literal de diez días, sino un espacio de tiempo, breve determinado por el
Señor (1 Cor.10:13).

3. La recompensa del Señor – 2:11

Al vencedor el Señor dice: Ap. 2:10 No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el
diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis
tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

Fiel hasta el punto de morir y fiel hasta que la muerte llegue. La “corona de la vida”
es un premio concedido apenas a los vencedores, ellos de ningún modo sufrirán el
daño de la segunda muerte.

Ap. 2:11 El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no
sufrirá daño de la segunda muerte.

Este daño se refiere al prejuicio que algunos creyentes tendrán por ocasión del
tribunal de Cristo, así que la segunda muerte no tenga poder sobre nosotros, se
puede sufrir algún daño semejante.

Escribiendo a los corintios, Pablo dice que nuestras obras serán probadas delante de
Dios por el fuego.

1Co 3:13 la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el
fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará.

Todavía, sabemos que la obra de algunos se quemará por ser descalificados, mas
ellos mismos serán salvos como que a través del fuego.

1Co 3:14 Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa.


1Co 3:15 Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo,
aunque así como por fuego.

Observe que el creyente con obras erradas sufrirá un daño por medio del fuego, él
mismo será salvo, pero habrá un daño. Ese es el daño de la segunda muerte. El
vencedor no sufrirá de forma alguna ese daño o disciplina.
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La iglesia en Pérgamo
La iglesia en Pérgamo es la iglesia del cuarto siglo, el periodo en que ella se unió al
imperio romano bajo el poder de Constantino. La palabra Pérgamo significa altura o
elevación, en términos proféticos, representa también la iglesia del quinto siglo, el
momento en que fue elevado a la posición de religión oficial del imperio.

Constantino fue un emperador romano que se convirtió al cristianismo, dice la


tradición que cierta vez cuando salía a la guerra, él tuvo una visión. Al mirar al cielo
vio una cruz y oyó una voz que le decía: “con este señal vencerás”. Constantino hizo
entonces una cruz o su símbolo y lo mandó colocar en el brazo y en los escudos de
sus soldados. Tiempos después el emperador oyó hablar sobre una religión de un
cierto Jesús que había muerto crucificado. Esa secta tenía como símbolo una cruz,
Constantino entendió que debería hacer de esa religión la religión oficial del imperio
romano.

Si antes la persecución era dirigida a los cristianos, ahora que el emperador se tornó
cristiano, todos los que no eran cristianos podían eventualmente estar en apuros
con el estado. Así todos querían participar de la religión del emperador. No había
espacio en las reuniones de las iglesias para acomodar a tanta gente, el emperador
todavía lanzó una especie de incentivo religioso: prometió a los que entren para la
iglesia un pedazo de pan, una ropa nueva y algunas monedas de plata. Es por esa
razón que la iglesia de Pérgamo significa matrimonio o unión. Pérgamo habla del día
en que la iglesia se casó con el mundo.

1. La revelación del Señor – 2:12


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Ap. 2:12 Y escribe al ángel de la iglesia en Pérgamo: El que tiene la espada aguda de dos
filos.

¿Por qué una espada? Porque ella es apta para separar, la espada del Señor separa,
divide alma y espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y
las intenciones del corazón (Hb.4:12). Esa espada es para separar la iglesia del
mundo. En el verso 16, el Señor dice que vendrá con la espada de su boca a destruir
las falsas doctrinas que infectaron esa iglesia.

2. Mensaje a la iglesia – 2:13-16


Ap. 2:13 Yo conozco tus obras, y dónde moras, donde está el trono de Satanás; pero
retienes mi nombre, y no has negado mi fe, ni aun en los días en que Antipas mi testigo
fiel fue muerto entre vosotros, donde mora Satanás.
La primera cosa que el Señor dice a esta iglesia es que ella habita donde está el
trono de Satanás y que ella no negó ni el nombre ni la fe (v.13). En el cristianismo de
Éfeso y Esmirna, no había templos, mas a partir de Pérgamo los templos se
expandieron por todo el imperio.

Para acompañar la suntuosidad de los templos, los obispos y los sacerdotes también
tuvieron que adecuar esas mudanzas. Antes vivían en extrema simplicidad, sobre
todo por causa de las persecuciones de las autoridades romanas, ahora con el
emperador y la nobleza frecuentando los cultos, no podían más presentarse mal
vestidos y de sandalias en los pies. El emperador mandó hacerles ropas nuevas y
ricamente parametradas, y así, la ostentación y la riqueza entraron en medio de la
iglesia. Su sede sería ahora en Roma, aquí con certeza estaba el trono de Satanás.

A pesar de haberse casado con el mundo, había algo de bueno en la iglesia de


Pérgamo, mismo bajo la contaminación de ese casamiento ilegítimo, conservó el
nombre del Señor y no negó la fe. Allí también hubo un cierto Antipas.

No hay ningún registro histórico o bíblico de alguna persona pro eminente con ese
nombre. Por eso, una vez más concluimos que se trata de algo simbólico, el nombre
“Antipas” significa aquél que es contra todo. Su nombre es compuesto de “Anti”
que significa contra y “pas” que significa todo.

Antipas no es aquél que está apenas a fin de contradecir. Por ser un fiel testigo, es
contra la influencia del mundo, quedando siempre del lado de Dios. Necesitamos ser
Antipas para ser vencedores. No existe ningún vencedor que no sea Antipas, hay
que conciliar el ser Antipas sin ser antipáticos.

Si nuestra manera de vivir no es contraria al mundo, no somos vencedores, ser


vencedor en la iglesia en Pérgamo era ser Antipas. Como pastor no quiero el elogio
del mundo, antes quiero ser para el mundo aquella persona que habla lo que nadie
quiere hablar. No hay como estar bien con todo el mundo todo el tiempo, es
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necesario saber la hora de decir si o no, de apretar las manos o de dar las espaldas,
de concordar o discordar. Si queremos ser simpáticos todo el tiempo con todo el
mundo, vamos a terminar disgustando a Dios. Si queremos agradar a Dios,
tendremos que asumir la postura de Antipas como nuestra identidad, caso contrario
corremos el riesgo de tornarnos como Pérgamo, la iglesia que se casó con el
mundo.

Cuidado con el doble estilo de vida, en la iglesia es uno y otro afuera. Cuidado con
aquellos que dicen “negocios son negocios, iglesia aparte” cuidado con aquellos
cuya vida espiritual es apenas un pasatiempo de final de semana, tales personas
necesitan un encuentro con Dios. En la vida de un cristiano, la palabra de Dios, en la
vida de un cristiano, la palabra de Dios debe permear todo: matrimonio, creación de
hijos, negocios, relación con los empleados, escuela, vida social, hasta el tránsito
mejora en las calles, cuando en un ciudad existen creyentes vencedores que ponen
en práctica los principios de la palabra de Dios.

Ap. 2:14 Pero tengo unas pocas cosas contra ti: que tienes ahí a los que retienen la doctrina
de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los hijos de Israel, a comer de
cosas sacrificadas a los ídolos, y a cometer fornicación.

¿Quién era Balaam? Era un profeta pagano, nacido en Mesopotamia, ese profeta
misterioso surgió en el escenario de la Biblia justamente cuando el pueblo de Israel
venia por el desierto a camino de Canaán. Cuando los medianitas tomaron
conocimiento de la presencia de Israel, acampados en los campos de Moab, se
angustiaron mucho y temieron por sus vidas. Y Balac, rey de los medianitas envió
mensajeros a Balaam ofreciendo muchas honras y dinero para que maldiga a Israel
(Nm.22:5,6).

Cuando el profeta estaba en camino montado en una mula, Dios envió un ángel con
una espada desenvainada para interceptarlo, pero Balaam no vio el ángel. Mas la
mula viéndolo se desvió dos veces del camino dejando el profeta irritado a punto de
golpearlo, más adelante donde la isla era estrecha y no había otra forma de
desviarse ni para la derecha ni para la izquierda, la mula se escapó y se echó. Y una
vez mas, Balaam irado la golpeó, fue entonces que el ángel del Señor abrió la boca
de de la mula y ella preguntó porque razón la estaba golpeando, después Dios abrió
lo ojos del vidente y él vio al ángel en su frente y el le dijo:

Num 24:17 Lo veré, mas no ahora; Lo miraré, mas no de cerca; Saldrá ESTRELLA de Jacob, Y
se levantará cetro de Israel, Y herirá las sienes de Moab, Y destruirá a todos los hijos de Set.

Viendo que no podía hacer encantamiento contra Jacob ni adivinación contra Israel,
el profeta mercenario mudó de estrategia y aconsejó a Balac enviar mujeres de
Moab para el medio de Israel. “y el pueblo se a prostitución con las hijas de Moab”
(Num.25:1; 31:16).
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Balaam; por tanto es una figura que representa principios espirituales, el nuevo
testamento habla de tres cosas aspectos de Balaam.

a. El camino de Balaam (2 Pe.2:15).

El camino de Balaam es hacer la obra de Dios por dinero, Balaam un profeta


mercenario, cobraba por sus profecías. Actualmente también existen iglesias que
venden las bendiciones de Dios, no de forma declarada, sino sutilmente. Una vez
una hermana me dijo: “pastor yo estoy orando para que aparezca un enfermo rico”,
pregunté: ¿Un enfermo rico, para qué? Respondió: para que yo ore por él y ahí
cuando sea curado me de un carro de regalo. Que lógica mundana, escuché de un
pastor que siempre esperaba una recompensa de las personas después de
bendecirlos. La doctrina de Balaam, vista así, procede del maligno.

b. El segundo aspecto es el error de Balaam (Jd.11).

Él pensó que Dios estaba irado con su pueblo, por eso era permitido a maldecirlo. El
pueblo de Israel, de hecho era desobediente, era un pueblo terrible, rebelde y
desobediente. Así mismo, cuando Balaam quiso maldecirlo, Dios no permitió. Nunca
vi un pastor o líder que fuese negativo para con la iglesia y prosperase. Hablar mal
de la iglesia es lo mismo que maldecirla, muchos pastores hablan mal de ella y
disminuyen su valor pensando que están siendo profeticos, mas ellos viven debajo
del engaño de Balaam. La iglesia puede tener todos los errores de los cuales es
acusada, pero nunca piense que Dios es contra ella.

Muchos llamados profetas de la actualidad pasan el mensaje que Dios está irado
contra su iglesia cuando hablan de ella continuamente de forma negativa.

c. La doctrina de Balaam.

Ese ciertamente es el punto principal de la iglesia de Pérgamo (Num.31:15, 16). Su


doctrina es el matrimonio de la iglesia con el mundo, no consiguiendo maldecir al
pueblo, Balaam dio un consejo a Balac:

Num 31:15 y les dijo Moisés: ¿Por qué habéis dejado con vida a todas las mujeres?
Num 31:16 He aquí, por consejo de Balaam ellas fueron causa de que los hijos de Israel
prevaricasen contra Jehová en lo tocante a Baal-peor, por lo que hubo mortandad en la
congregación de Jehová.
Num 31:17 Matad, pues, ahora a todos los varones de entre los niños; matad también a
toda mujer que haya conocido varón carnalmente.

El consejo de Balaam trajo prostitución e idolatría dentro de Israel y provocó una


plaga entre el pueblo, causando la muerte de veinte y cuatro mil personas
(Num.25:9). La doctrina de Balaam incentiva la caída de toda separación entre la
iglesia y el mundo. “deja de estrés, deja de ser Antipas”, aconsejan los seguidores
de Balaam.
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Además de la doctrina de Balaam, había en Pérgamo aquellos que sustentaban la


doctrina de los nicolaítas. Una vez mas, el Señor trata el caso de los nicolaítas
dentro de la iglesia.

En Éfeso, existía la obra de los nicolaítas, pero aquí en Pérgamo ella se transformó
en doctrina, hubo un avance, lo que antes era apenas un comportamiento ahora se
tornó en una ideología. El hecho de los nicolaítas aparecieren en ese contexto,
unidos a los que practican la doctrina de Balaam nos muestra el surgimiento de un
tipo de clero mercenario. En estos días en que muchos se tornaron hasta dueños de
iglesias, no es difícil entender como ellas pueden unirse. La advertencia del Señor es
que Él vendrá para pelear con la espada de su boca; eso se refiere al juicio de Cristo
por medio de la verdad de su palabra.

3. La recompensa del vencedor – 2:17


Ap. 2:17 El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere,
daré a comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita
escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe.

El maná escondido es el maná que estaba dentro del arca en el tabernáculo,


sabemos que solamente el sumo sacerdote podía entrar en el lugar santísimo, pero
él ni podía comer de ese maná. La promesa de comerlo habla por tanto de un
privilegio todavía mayor, es la comunión íntima Jesús.

En la palabra de Dios, piedra es para edificación, cuando Jacob durmió en el camino


para Harán, él tuvo el sueño de la escalera que ligaba el cielo con la tierra, al
despertar cogió la piedra que había puesto como almohada, derramó aceite sobre
ella y llamó aquel lugar de Betel, que quiere decir casa de Dios (Gn.28:10-19). Jesús
dijo que edificaría su iglesia sobre la piedra y el propio Pedro dijo que somos piedras
vivas para la edificación de la casa de Dios (1Pe.2:5). El maná escondido tiene el
propósito de transformarnos en esa piedra de edificación con un nuevo escrito.

Recibir un nombre significa cambio de vida, la base para que seamos útiles en la
edificación y el cambio de vida (nombre). Esa mudanza de vida ocurre justamente
cuando comemos del maná escondido que muda nuestra constitución para piedras
vivas.

Dice la historia que en las votaciones en la democracia griega, era usada una piedra
blanca con el nombre de cada candidato. Siendo así, se podría decir que la piedra
con nuestro nombre escrito apunta para el hecho de que seamos electos y
escogidos por Dios.
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La Iglesia en Tiatira
La razón por la cual estudiamos la Biblia es porque queremos conocer la voluntad
de Dios; sin embargo, solo conocimiento trae consigo responsabilidad “aquél a
quien mucho le fue dado, mucho le será exigido” (Lc.12:47, 48). El Señor va requerir
de cada uno de nosotros todo aquello que Él nos ha enseñado.

Todavía es falsa la idea de que la ignorancia nos disculpa delante de Dios. Aquél que
erró porque no sabía la voluntad de Dios será disciplinado así mismo, aunque menos
severamente (Lc.12:48). Mas aquél que aprendió y tuvo la revelación de la palabra,
que la conocía profundamente, sabía cual era su voluntad y no la colocó en práctica,
este será disciplinado más severamente. Por eso es necesario actuar seríamente,
pues a partir del momento en que nuestros hijos son abiertos, tenemos una
responsabilidad delante de lo que nos fue revelado.

El Señor no nos llamó apenas para que seamos oidores de la palabra o para dejarnos
deslumbrados con las cosas espirituales, Él quiere cambiar nuestra vida mediante el
poder de la palabra. Mas para que eso ocurra, es necesario que nos coloquemos
bajo la influencia de ella. Debemos nos permitir ser transformados por la palabra de
Dios, ella debe influenciar nuestro modo de pensar, de actuar y de hablar.

Queremos más que ser una iglesia grande o un pueblo numeroso, nuestro mayor
desafío es ser considerados dignos de nombre – cristianos que llevamos sobre
nosotros. Que alguien algún día pueda decir: este pueblo realmente se parece con
Jesús, esta iglesia puede ostentar el nombre de Cristo.

En los capítulos anteriores analizamos las iglesias de Éfeso, Esmirna y Pérgamo,


cada una de ellas apunta proféticamente para un periodo de la historia de la iglesia:
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Éfeso es la iglesia del primer siglo, Esmirna de los siglos dos y tres, Pérgamo del siglo
quinto. Históricamente estas tres iglesias ya pasaron. Vamos estudiar ahora las
iglesias de Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea. Estas cuatro estarán aquí en la tierra
cuando Jesús volvió.

Al todo del inicio al fin son siete iglesias. El número siete es un número de
perfección, representa la consumación del plan de la redención en la historia. Estas
siete iglesias son divididas en dos grupos, las tres primeras forman un grupo porque
las cartas destinadas a ellas no se mencionan la vuelta de Jesús y todas ellas traen el
mismo padrón de promesa para los vencedores. Las últimas cuatro forman el
segundo grupo, en estas se mencionan la vuelta de Jesús y el padrón de la promesa
a los vencedores fue mudado realzando más la posición en el reino. Eso prueba que
las tres primeras iglesias forman un grupo y las cuatro ultimas otro grupo. Podemos
afirmar que estas cuatro son las que permanecerán hasta la vuelta del Señor.

La palabra Tiatira significa sacrificios de perfumes o olor de aflicción, la iglesia de


Tiatira proféticamente apunta para el periodo de la edad media con el gobierno del
papado de Roma.

Hasta el cuarto siglo, la iglesia fue perseguida y considerada proscrita por las
autoridades romanas, mas con la conversión de Constantino, el cristianismo salió de
la legalidad tornándose la religión oficial de su imperio. Las consecuencias de esa
unión con el estado fueron terribles: de un lado, la doctrina de los nicolaítas,
estableciendo una casta clerical en la iglesia extinguió las funciones del cuerpo; de
otro lado, con el establecimiento de la sede de la iglesia en Roma, ella alcanzó
hegemonía sobre las demás y estableció el papado (sexto siglo). De esa forma,
Tiatira se tornó la iglesia católica romana.

1. La revelación del Señor – 2:18

Para cada iglesia, el Señor se revela de una manera diferente para atender una
necesidad específica. La iglesia en Tiatira, el Señor se revela con el hijo de Dios:
“estas cosas dice el Hijo de Dios… (v.18)” y no como el hijo de maría.

La Biblia deshace el matriarcado de Tiatira al presentar Jesús como juez soberano y


absoluto. Él “tiene los ojos como llama de fuego y los pies semejante al broce pulido
(v.18)”. Tanto el fuego como el bronce simbolizan el juicio y el juicio de Dios, el
Señor Jesús está juzgando la iglesia, su juicio es acompañado por los ojos
semejantes a la llama de fuego. Es una mirada que a todo revela y delante del cual
nada queda oculto u oscuro.

2. Mensaje a la iglesia – 2:19-25


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En primer lugar, el Señor dice que conoce las obras de esa iglesia:

Ap. 2:19 Yo conozco tus obras, y amor, y fe, y servicio, y tu paciencia, y que tus obras
postreras son más que las primeras.

Existe algo de bueno dentro de la iglesia católica, es probable hasta existan


personas salvas dentro de ella. Alguien puede sorprenderse con lo que el Señor dice
aquí a respecto de la perseverancia y de las últimas obras más numeroso que las
primeras (v.19). Nosotros tenemos la tendencia de creer que el catolicismo es
completamente maligno, pero eso es una exageración. El catolicismo también es
cristianismo, es posible que la cualifiquemos de una iglesia apóstata, degradada y
prostituida. Mas es iglesia y como tal, existe o existió alguna cosa buena en ella, las
últimas obras de esa iglesia serán más numerosas que las primeras.

Se equivoca quien piensa que la iglesia católica no hace obras o que los católicos no
creen en Dios, la iglesia católica hace obras, ellos creen en Dios ciertamente,
necesitamos ser cuidadosos, no salga por allí criticando la iglesia católica o los
católicos. No tenga aquella actitud mezquina y tonta de llegar donde un católico
diciendo que él está yendo para el infierno o que sirve al diablo, ese no es el
testimonio de Cristo.

Evidentemente existen mucho menos católicos de lo que se imagina, pues ni todos


los que se dicen católicos lo son de hecho. La cadena de noticias CNBB estima que
cerca de 9% de los brasileños realmente son católicos, aquellos que se dicen que son
católicos “no practicantes” la verdad no los son. ¿Cómo alguien puede ser algo sin
practicar? Es como si alguien dijese: soy honesto no practicante o ladrón no
practicante. Quien no practica no es.

Católico es aquél persona que cree y practica la enseñanza de la iglesia, el restante


es católico solo de nombre apenas de tradición familiar. Hay ejemplos: la iglesia
católica prohíbe el uso de la píldora anticoncepcional, ¿Pero quien obedece?
Conforme el vaticano es pecado y la relación sexual que no se destina a engendrar
hijos, ¿Pero quien escucha? ¿En cuanto al aborto y al divorcio? La mayoría de los que
se dicen católicos ni saben lo que profesan.

La iglesia católica es simbolizada en el capítulo 17 por la gran Babilonia, mas aquí es


representada por Jezabel (v.20). ¿Quién era Jezabel? Era una sacerdotisa de Baal
que se casó con Acab, rey de Israel. Ella fue responsable por llevar a Israel a
prostituirse con la idolatría pagana influenciado por Jezabel, el rey Acab no apenas
sirvió y adoró a Baal, sino también le edificó casa y altar en Samaria (1 Rs.16:30-32).

Jezabel era solamente la esposa de Acab, rey de Israel; sin embargo quien
gobernaba de hecho era Jezabel. Ella murió comida por canes como punición de
Dios.
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En Apocalipsis 12, la mujer es la iglesia, mientras en el capítulo 17 es una meretriz


simbolizando la gran Babilonia. Por una cuestión de coherencia, la mujer aquí debe
significar la propia iglesia en Tiatira que por ser adúltera, posee algo de la gran
meretriz del capítulo 17. Prostitución en la palabra de Dios es un símbolo de
idolatría.

Jezabel en este caso es la mujer del capítulo 17, ella persiguió y mató muchos
hombres de Dios en Israel. En contra partida, la iglesia católica fue la institución que
más persiguió y mató los siervos de Dios a través de la historia. En la edad media el
número de fieles que fueron muertos y perseguidos por esa iglesia así como lo hizo
su homónima Jezabel en el antiguo testamento alcanzó cifras increíbles, así como
Jezabel, la iglesia católica mató muchos hombres de Dios.

De ese modo, el Señor conservó siete mil (1Rs.19:18) en los días de Jezabel, él
también debe conservar un grupo dentro de la iglesia de Tiatira.

Ap. 2:24 Pero a vosotros y a los demás que están en Tiatira, a cuantos no tienen esa
doctrina, y no han conocido lo que ellos llaman las profundidades de Satanás, yo os digo:
No os impondré otra carga.

Mateo nos habla de la parábola de la mujer que escondió el fermento en medidas de


harina hasta quedar todo leudado (Mt.13:33). Hay quien piensa que esta parábola
presenta un significado positivo indicando el crecimiento de la iglesia. No es verdad,
porque en la Biblia, fermento es siempre algo negativo, maligno y demoniaco,
fermento siempre simboliza pecado e hipocresía (Ex.12:15, Mt.16:11, Mc.8:15, 1Co5:7-
8). Esa mujer maligna que vino y colocó fermento en la harina pura es Jezabel, que
en este caso, simboliza la propia iglesia católica. El fermento de Jezabel es la
idolatría y la prostitución. Después de colocar el fermento, la masa pude hasta
crecer, mas es un crecimiento faso e impuro. En el mismo principio, la iglesia católica
puede hasta ser grande, pero es un tamaño falso, fermentado.

¿Cuál es la prostitución de Jezabel? Siempre que la iglesia católica llega a un lugar,


ella se casa con los ídolos del lugar. Esta prostitución espiritual es llamada de
sincretismo religioso. En Brasil se mescla con espiritismo. En Umbanda, san Jorge es
Ogum, María es Iemanjá, Jesús es Oxalá; esto es mescla y prostitución.

En la biblia no existe oración por los muertos, la iglesia católica a pesar de eso,
observó la enseñanza de los cultos ancestrales de las religiones orientales e
instituyó el día de afinados.

La navidad es otra de las prostituciones de la iglesia católica, los europeos tenían la


costumbre de adorar al dios sol y hacer una fiesta celebrando el nacimiento del sol
en diciembre. La iglesia católica transformó esta fiesta en la navidad con el árbol
sagrado y su papa Noel. En todo el lugar a donde va, la iglesia católica se prostituye.
86

El culto católico es básicamente judío, el sacerdote está actuando como un


sacerdote del viejo testamento. El catolicismo tiene los santos, tiene los ídolos,
tiene María y una infinidad de otras personas canonizadas y beatificadas.

¿Por qué el culto católico gira en torno de María? Porque todas las otras religiones
con excepción del judaísmo y del cristianismo tiene una diosa. ¿Qué hizo la iglesia
católica? Inventó una diosa, por mas que un católico quiera decir que María no es
diosa, ella es tratada como si fuese diosa. Siempre que un católico se arrodisla
delante de una estatua de María (o de otro santo parecido) y reza o le pide algo, él
lo hace con reverencia y temor, eso es prostitución espiritual. María es una figura
que fue tomada por prestada del paganismo y colocada como diosa. En el
cristianismo genuino no existe ninguna diosa.

En el versículo 24, el Señor habla al respecto de las cosas profundas de Satanás, en


el original, la palabra traducida por “cosas profundas” es batea. En otras partes de
la Biblia, la palabra batea es traducida como misterios. El hecho más marcante es
que una de las palabras más usadas en la teología católica es sin duda “misterio”. Si
pregunta para un católico como él prueba que María glorificada y asunta el cielo, él
va decir que eso es un misterio. Fue sobre los misterios que la iglesia católica creó
sus dogmas. El pan que se transforma en el cuerpo y el vino que se transforma en
sangre es un misterio, la imagen que lloró es también un misterio. La iglesia católica
está por tanto, repleta de misterios; entre tanto, en ese pasaje, el Señor llama esos
misterios por el nombre de batea, esto es, son cosas profundas, no oriundas de
Dios, por e contrario de Satanás.

3. La recompensa del vencedor – 2:26-29


Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo le daré autoridad sobre las
naciones, y las regirá con vara de hierro, y serán quebradas como vaso de alfarero;
como yo también la he recibido de mi Padre; y le daré la estrella de la mañana (Ap.2:26-
28).
En 1 Reyes, el Señor dice que preservó siete mil personas que no se dejaron
prostituir por Jezabel:

1 Rs. 19:18 Y yo haré que queden en Israel siete mil, cuyas rodislas no se doblaron ante Baal,
y cuyas bocas no lo besaron.

En el mismo principio, existe un número de personas preservadas por Dios dentro


de Tiatira, siete mil personas en un universo de millones, puede representar poco,
pero una cosa es cierta: Dios siempre tiene los remanecientes fieles en medio de las
tinieblas. Usted puede estar cierta de que es posible alguien salvarse mismo dentro
de la iglesia católica, no hay duda, es preconcepto pensar que es imposible Dios no
está allí. Él siempre va donde su nombre es invocado de todo corazón.

Recibir la estrella de la mañana es participar del arrebatamiento, en Malaquías Jesús


es el sol de la justicia (Ml.4:2) y en Apocalipsis, Jesús es la estrella de la mañana
87

(Ap.22:16). Mateo dice que todo ojo lo verá la vuelta de Jesús (Mt.24:30) y
Apocalipsis dice que el Señor viene como ladrón (Ap.3:3, 1615). De ahí concluimos
que la vuelta de Jesús es diferente del arrebatamiento. El arrebatamiento es oculto
en una noche cuando solamente la estrella de la mañana puede ser vista, mas en su
vuelta, Jesús vendrá como el sol de la justicia y todo lo verá.
88

La iglesia en Sardis
Sardis significa “remaneciente” proféticamente, la iglesia en Sardis apunta para la
época de la reforma protestante. La iglesia en Sardis simboliza la iglesia reformada.

Esa fue una época en que muchos fueron usados como instrumentos de Dios para
que hagan una revolución. Hombres como Martin Lutero, Juan Calvino, Zwinglo,
John Knox y otros, cuyos escritos todavía hoy nos sirven de base para que
comprendamos la palabra de Dios, hombres que fueron usados por el Señor para
traer la luz en una época de densas tinieblas, donde no había completo
conocimiento de Él. Algunos de esos hombres hasta perdieron sus vidas para traer
de nuevo al mundo la revelación de justificación por la fe, del sacerdocio universal
de todo creyente y del libre acceso a la palabra de Dios.

1. La revelación del Señor – 3:1

Para la iglesia de Sardis, el Señor se presenta como aquél que tiene los siete
Espíritus de Dios y las estrellas, Dios no posee realmente siete Espíritus. El siete
simboliza lo que es pleno y siete veces intensificado, es una manifestación más
intensa porque es la necesidad de esa iglesia.

Por esta razón, Jesús se presenta a esta iglesia como aquél que tiene los siete
Espíritus de Dios y las siete estrellas. En el capítulo 1, verso 20 se ve que las estrellas
89

son ángeles de las iglesias, eso significa; por tanto, que el Señor desea incendiar la
iglesia a través de su líder.

2. Mensaje a la iglesia – 3:14

A pesar de toda la revelación que esa iglesia provocó, el Señor coloca aquí un
problema:

Ap. 3:1 Escribe al ángel de la iglesia en Sardis: El que tiene los siete espíritus de Dios, y
las siete estrellas, dice esto: Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y
estás muerto.

Eso significa que esta iglesia tenía apariencia, pero no poseía realidad, en la época
de la reforma protestante, había un fuerte énfasis en la doctrina, la preocupación
era con la ortodoxia. Era necesario tener doctrina correcta, ellos se preocupaban
con una relación viva con Dios. Una ortodoxia correcta sin un corazón intenso es lo
mismo que muerto delante de Dios, el objetivo final de la fe es la relación; si la fe no
alcanza el objetivo, ella se torna muerta. Apenas tener la doctrina cierta no sirve
para Dios, Él está preocupado en conquistar en nuestro corazón. El señor dice que
las obras de esta iglesia no son enteras y completas. No basta abrir la Biblia y tener
la doctrina, necesitamos tener al Señor y la iglesia.

El vencedor es aquél que tiene realidad y no apenas nombre, el Señor abomina


quien tiene la apariencia sin realidad y mantiene una pose de piedad, una apariencia
de espiritualidad y de celo, pero que a la verdad, no tiene fuego quemando delante
de Dios.

Eso nos recuerda a los fariseos, hablaban la cosa cierta, pero no practicaban. Es
mejor ser un pecador golpeando la mano en el pecho, clamando a Dios que un
fariseo lleno de ortodoxia correcta, pero muerto.

En la iglesia reformada, eso acontece, lo que ellos enseñan es correcto. La teología


reformada es a la verdad la más correcta. Mas no tiene realidad de aquello que
predican, pues no saben lo que es un corazón intenso y apasionado por el Señor, no
entienden lo que es un creyente hambriento y sediento de la justicia y de la
presencia del Señor, ellos están interesados apenas en que las personas aprendan
doctrinas exactas, pero no se preocupan en llevarlas a tener una relación con el
novio como una novia apasionada. Para casarse no basta que la novia sea correcta,
ella necesita estar apasionada.

Debemos hacer una cosa sin omitir la otra, necesitamos creer de la manera correcta,
pero es necesario también tener el corazón correcto delante de Dios. El v.3 revela
que esta iglesia estará aquí por ocasión del arrebatamiento.
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Ap. 3:3 Acuérdate, pues, de lo que has recibido y oído; y guárdalo, y arrepiéntete. Pues si
no velas, vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti.

Las iglesias reformadas estarán aquí por ocasión del arrebatamiento, pues es para
ellas que el Señor hace esa grave advertencia.

En el arrebatamiento, el Señor viene como el ladrón, es como el ladrón porque


nadie sabrá la hora, él no avisa la hora en que viene, así será en el día del
arrebatamiento. Su vuelta será diferente, Él vendrá en las nubes y todo lo ojo lo
verá, mucha señales precederán a su venida en los aires.

En Sardis había unas pocas personas que eran dignas y para ellas el Señor dice que
andarán a su lado (Ap.3:4). ¿Algún hombre es digno de andar al lado de Jesús?
Ciertamente que no, la llave para la comprensión de ese texto es la ropa. Vestidos
simbolizan nuestra relación con Dios; si vamos comparecer delante de Dios
necesitaremos de dos tipos de ropas. La primera está en Gálatas:

Gal 3:27 porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.

Las primeras ropas son los vestidos de salvación que nos capacitan para estar con el
Señor, para participar de su gloria. Los vestidos de salvación nosotros recibimos
como regalo del Señor Jesús cuando fuimos salvos (Is.61:10).

Apocalipsis habla a respecto de una segunda ropa:

Ap. 19:8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente;
porque el lino fino es las acciones justas de los santos.

La primera ropa es un regalo, mas la segunda la ropa nosotros mismos la estamos


tejiendo con nuestros actos de justicia, después de salvos recibimos una ropa para
tapar nuestra desnudez, pero esta ropa no es la que la novia va usar en el
casamiento.

En Mateo, leemos la parábola de las bodas (Mt.22), en ella el Señor va a las bodas
del matrimonio de su hijo, encuentra un ciudadano que no estaba vestido con ropa
de casamiento y le pregunta: ¿amigo como entraste aquí? Naturalmente él entró
porque tenía los vestidos de salvación, todavía no tenía el derecho de estar allí
porque no estaba vestido apropiadamente para la ocasión. Los vestidos de
salvación lo habilitan para la vida eterna y los actos de justicia lo habilitan para
participar de las bodas y recibir la recompensa. La recompensa no es destinada para
quien posee apenas los vestidos de la salvación, es destinada para quien tejió con
actos de justicia sus vestidos nupciales.

3. La recompensa del vencedor – 3.5-6


91

El Señor dice a los vencedores que “de ningún modo borrará su nombre del libro de
la vida; por el contrario confesará su nombre delante del padre y delante de los
ángeles” (v.5). Tener el nombre escrito en el libro de la vida es salvación, mas ser
confesado es la honra de la recompensa.

Andar con el Señor en aquel día, vestido de blanco como Él está vestido, es una
recompensa que ni todos recibirán, porque ni todos son dignos de andar con el
Señor. Solo andará con el Señor aquél que ya camina con Él aquí. Esta es la obra que
Él espera; si andamos con el padre aquí, nosotros manifestaremos actos de justicia,
porque Él nos guía por veredas de justicia.

Hoy cuando decimos que andamos con Él, significa que nosotros lo seguimos,
andamos en pos de Él; si hoy seguimos sus pisadas, nuestra vida se llenará de sus
obras.

Sin embargo, en aquel día ya no andaremos en pos de Él, sino a su lado. Hoy
caminamos en pos de Él porque lo seguimos, Él va al frente y nosotros pisamos en
sus pisadas, mas aquel día andaremos al lado de Él, porque estar a su lado es
disfrutar de una posición de honra, solo anda al lado quien es amigo y digno.

En aquella época, el hombre andaba al frente y sus esclavos iban atrás, hoy como
siervos del Señor estamos andando detrás de Él, porque somos sus esclavos, sus
siervos. Mas en aquel día cuando Él nos honre, va colocarse a nuestro lado, eso es
válido solamente para aquellos que son dignos. Eso será la gran gloria, cuando
alguien pregunte: ¿Quién es aquél que está andando al lado de Jesús? Nuestra gloria
será ser vistos al lado de Jesús. ¿Cuál es la gloria de las personas hoy en día? ¿No es
ser fotografiadas al lado de personas importantes y famosas? Estar al lado de
alguien importante nos hace importantes también.

“el vencedor será así vestido de vestiduras blancas y de modo ninguno borraré de
su nombre del libro de la vida, por el contrario confesaré su nombre delante de mi
padre” eso es maravilloso. ¿Qué es mejor? ¿Conocer alguien importante o ser
conocido por él? mejor todavía es ser reconocido por él delante de todos. Yo me
recuerdo que años atrás cuando todavía era adolescente, había una iglesia grande
en mi ciudad, los pastores de allí eran famosos y muy conocidos, había un gran
mover. Cierto día juntamente con otros hermanos, fuimos a visitar aquella iglesia,
cuando llegamos a la puerta, el pastor de la iglesia estaba allá, yo estaba pasando
sin decir nada, de repente me llamó por el nombre. Yo miré a mis amigos y sonreí:
¿Están viendo? Él me conoce.

Probablemente no existe palabra más linda en los labios de los otros que nuestro
propio nombre. Hoy nosotros lo confesamos delante de los hombres, mas en aquel
día, Él va confesarnos delante de su padre y de los ángeles. Él va decir: padre, este
de aquí es Juan, mi amigo, y Juan se va llenar de tanta gloria.
92

No hay gloria mayor que ser confesado y conocido por Él, conocerlo garantiza la
salvación, mas ser reconocido por Él da derecho al reino.

A respecto de la expresión: “de ninguna forma borraré su nombre del libro de la


vida” parece que muchos la entienden como siendo una amenaza de la pérdida de
la salvación, el texto no dice que de hecho, Él va borrar el nombre, Él dice que de
ninguna manera Él no va borrar su nombre. Si tuviese manera de borrar, así mismo
Él no lo borraría de ninguna forma.

Algunos piensan que Dios escribe con lápiz, si usted pecó, Él lo borra; se arrepintió,
escribe de nuevo. Si fuese así muchos nombres ya hubieran ahuecado en el libro de
la vida de tanto borrar y escribir, borrar y escribir nuevamente. Los dones de Dios
son irrevocables y el lapicero que Él usa no tiene borrador que borra. La salvación es
un regalo y no queda bien coger regalos de vuelta; si fuese un contrato, Él podría
coger de vuelta la parte de Él si dejásemos de cumplir la nuestra. Mas es una dádiva
que nos fue dada cuando menos merecíamos.

No estoy insinuando que el Señor quiera que vivamos una vida cristiana chueca,
estoy apenas diciendo que, mismo después de ser salvos, a veces cometemos
errores. Juan sin embargo dice que tenemos un abogado, Jesús es nuestro
abogado. ¿Usted cree que Él está dispuesto a borrar nuestro nombre del libro de la
vida? Él es nuestro abogado.

Necesitamos descansar en la fidelidad de Dios, nuestro nombre fue escrito y jamás


será borrado, porque fue escrito con la sangre de Jesús que es la marca. Yo diría
todavía: nuestro nombre fue escrito con letras de fuego; si nuestro corazón fue
quemado, recibimos una cicatriz que jamás puede ser borrado. Después de confesar
nuestro nombre en aquel día con la voz como de muchas aguas para que todo el
cielo escuche, Él todavía nos dará un nuevo nombre. Hoy nosotros lo alabamos, mas
en aquel día Él nos alabará. Hoy nosotros lo exaltamos, entonces, Él nos tomará por
la mano y a su lado caminaremos juntos.

Hay un dicho que dice: dime con quien andas y yo te diré quien eres tú.

Yo ando con Jesús, ahora dígame: ¿Quién soy? Y ¿usted con quién anda?
93

La iglesia en Filadelfia
Filadelfia significa “amor fraternal” es la iglesia del amor fraternal. Apenas dos
iglesias no recibieron reprensión del Señor: Filadelfia y Esmirna. Ellas por lo menos
tienen tres cosas en común. La iglesia en Esmirna tenía un problema con los falsos
judíos (Ap.2:9) y la iglesia en Filadelfia también (Ap.3:9). Las dos iglesias son
probadas y la promesa para ambas sería recibir la corona (Ap.3:11). Son dos iglesias
muy semejantes.

Creemos que las iglesias después de Tiatira estarán aquí por ocasión de la vuelta de
Jesús. ¿Cuál es la base para esta afirmación? Porque en cada una de ellas hay una
mención de la vuelta de Jesús, en la iglesia de Tiatira, hay la mención de la estrella
de la mañana; en la iglesia de Sardis, el Señor viene como ladrón y en la iglesia de
Filadelfia se menciona la hora de la aprobación que hay de venir sobre todos los que
habitan sobre la tierra, o sea, la gran tribulación. Esas tres iglesias hablan de la
vuelta del Señor; por tanto, son iglesias que apuntan para nuestro tiempo.

La iglesia en Tiatira representa proféticamente la iglesia de la edad media que


continua hasta hoy. La iglesia de Sardis apunta para la iglesia reformada que
también continua hasta hoy.

La iglesia de Sardis salió de Tiatira y la iglesia de Filadelfia sale de Sardis; si la iglesia


de Sardis apunta para la iglesia reformada. ¿Para cuál periodo apunta la iglesia de
94

Filadelfia? Ella apunta para el cristianismo de los siglos dieciocho y diecinueve,


cuando hubo una reacción al formalismo y a la frialdad de las iglesias protestantes
reformadas.

Ese fue un movimiento que enfatizaba una relación próxima, amorosa e íntima con
Dios, la iglesia de Filadelfia proféticamente representa aquellas iglesias que
rechazan el formalismo muerto. No existe un movimiento único, son pequeñas
congregaciones expandidas por toda la tierra.

1. La revelación del Señor – 3:7


Ap. 3:7 Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el
que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre:

Eso es maravilloso, nadie puede cerrar la puerta que Él abre; si Dios nos colocó en
una posición, solo saldremos de allí cuando Él quiere. Mas no debemos pensar que
toda puerta abierta por Él significa que Dios desee que quedemos en ella
indefinidamente. Naturalmente la puerta del casamiento es para el resto de la vida,
pero puertas de empleo, pueden ser abiertos hoy y cerradas después. El Señor
cierra una puerta hoy para abrir mañana otra todavía mayor. Muchas se abrirán
porque el Señor nos conduce de gloria en gloria.

No se debe desanimar si por si acaso se cierra una puerta. Se cuenta que cierta vez
un hombre estaba viajando en un barco que naufragó, solo él escapó, él fue
entonces para una isla desierta. Intentando allí sobrevivir debajo de la lluvia y el sol,
clamó a Dios y pidió gracia de poder construir una choza para abrigarse de los
elementos de la naturaleza. El Señor lo capacitó y él construyó una choza, él vivía
con tranquilidad, pero su deseo era regresar, hasta que un día él oró al Señor
pidiéndolo que enviase alguien para rescatarlo. En una mañana, él estaba en la playa
y comenzó a llover, de repente un rayo cayó sobre la choza incendiándolo. Aquello
lo dejó desolado y molesto con Dios, primero el barco se había hundido y ahora la
choza había sido destruida “¿en una isla tan grande, el rayo tenía que caer
justamente sobre mi choza?” lamentaba él. Parado en la playa, se martirizaba
viendo la choza en fuego, percibió que una nave venía en su dirección. Finalmente
sería rescatado, después de subir a la nave, preguntó al comandante: ¿Cómo es que
ustedes descubrieron que yo estaba perdido aquí? El comandante respondió:
nosotros no sabíamos, pero de lejos vimos que choza se estaba quemando e
imaginábamos que fuese la señal de alguien pidiendo socorro.

A veces para que el barco de la salvación llegue, Dios tiene que quemar choza; ese
incendio es solo la señal de que algo mayor está viniendo del mar. El Señor tiene las
llaves.

2. Mensaje a la iglesia – 3:8-11


95

Ap. 3:8 Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la
cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra,
y no has negado mi nombre.

La iglesia en Filadelfia había prosperado y crecido, las iglesias que avanzan en esa
visión de una relación intensa con Dios y de comunión profunda con Dios, son
iglesias que crecen y nadie puede resistirlas.

Filadelfia es una iglesia de poca fuerza, ciertamente aquí no se refiere a su fuerza


espiritual, sino a su fuerza política. Tiatira y Sardis son iglesias fuertes, ambas son
mantenidas por gobiernos en muchos lugares de Europa, mas las iglesias
representadas por Filadelfia son iglesias independientes, sin poder político.

En el verso 8, el Señor dice que Filadelfia guarda su palabra sin negar su nombre, es
interesante que la iglesia de Sardis que apunta para las iglesias reformadas, valore
mucho el nombre, para ellas el nombre viene antes de cristiano. Es común que las
personas digan: “yo soy eso o aquello” antes de declararse cristianos. Mas Filadelfia
no es así. El nombre no importa, no hace diferencia la placa que está en la puerta del
edificio. Necesitamos tener cuidado para no negar el nombre del Señor amando el
nombre de una denominación.

Algunos problemas son comunes entre las iglesias, el primero fue el caso de los
nicolaítas que aparece en las iglesias de Éfeso y Pérgamo, el segundo caso es el
problema del judaísmo.

Analizamos el caso del judaísmo cuando hablamos de la iglesia de Esmirna. ¿Qué es


el judaísmo? El judaísmo posee cuatro condiciones que lo caracterizan. La primera es
el templo, el templo era el lugar donde Dios habitaba, mas hoy Dios no habita en
casa hecha por manos humanas (He.7:48). La iglesia del Señor es la habitación de
Dios.

El segundo elemento que caracteriza el judaísmo es la ley, esa ley era exterior,
escrita en tablas de piedras. Hoy la ley del Espíritu está escrita en la tabla de nuestro
corazón. Esa es una gran diferencia.

En tercer lugar, en el judaísmo existía la figura del sacerdote responsable por la


mediación entre Dios y los hombres, en el cristianismo, nosotros somos hechos
sacerdocio real y nación santa (1Pe.2:9). No se necesita más de mediación del
hombre, ni necesitamos que otro oiga a Dios y nos transmita. Cada uno de nosotros,
del menor al mayor puede conocer a Dios y oírlo.

El cuarto elemento que caracteriza el judaísmo son las promesas. Hebreos 8:6
afirma que las promesas de la nueva alianza son muy superiores.
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En el verso 9, el Señor dice que hará con que algunos de los que son de la sinagoga
de Satanás, de esos que así mismo se declaran judíos y no son, vengan y póstrense a
los pies de la iglesia y conozcan que el Señor ha amado a Filadelfia. La iglesia no
tiene nada que ver con el judaísmo, no tenemos que volver a las prácticas del
judaísmo, debemos antes seguir las prácticas apostólicas.

Ap. 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la
hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran
sobre la tierra.

¿Cuál es la probación que va venir sobre toda la tierra? Es la gran tribulación, la


promesa es que los hermanos de Filadelfia serán guardados de ella. ¿Por qué serán
guardados? Porque guardaron la palabra de la perseverancia.

3. La recompensa del vencedor – 3:12-13

La promesa es de ser guardado de la hora de la tribulación. La hora de la probación


en este contexto de Apocalipsis se refiere a la gran tribulación, lo que ellos tenían
era la palabra y el testimonio. El Señor manda que conserven lo que tienen para que
nadie robe sus coronas.

Ap. 3:11 He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu
corona.

Esos hermanos de Filadelfia ya poseían la corona, todavía ella puede ser tomada.
Por eso el Señor advierte: conserva lo que tienes, porque puede ser perdido.

La salvación es algo que ya está definido en nuestra vida, es eterna y nadie podrá
tomarla, la corona; sin embargo, puede ser tomada. La corona o el premio depende
de cómo nosotros terminamos la corrida, un atleta puede comenzar mal la corrida,
mas en medio del trayecto puede recuperarse y hasta vencerla. Lo que importa es la
manera como finaliza. Algunas personas comienzan bien y terminan mal, otros; sin
embargo, comienzan mal y terminan. Para Dios lo que interesa es el fin de la carrera.

Por eso no podemos quedar acomodados pensando que la cuestión de la


recompensa ya está resuelta, la recompensa esté abierta. Salomón fue alguien que
comenzó bien, un día el Señor le apareció y le dijo: Salomón pide lo que quieres y yo
te daré. Salomón comenzó bien, pidió sabiduría. ¿Pero como terminó? La Biblia
registra que él se casó con setecientas mujeres y se envolvió en la idolatría por
causa de ellas.

Jacob; por otro lado, comenzó mal, engañando al padre y al hermano, pero tuvo un
fin diferente. Después de luchar con Dios, fue transformado en Israel. Aquél que
luchó con Dios y prevaleció.
97

Nuestra trayectoria pudo haber iniciado mal, lo más importante es el final de la


historia. No debemos acomodarnos por causa de un buen comienzo, lo que importa
es como concluiremos delante de Dios nuestra carrera; es por eso que Él advierte a
no perder lo que tenemos (Ap.3:11). La corona que tú tienes puede ser pasada para
otro si tú te quedas parado o se desvía del objetivo en medio del camino.

La corona nos habla de una posición que esta iglesia ya posee, pero puede ser
perdida. Se pierde la corona cuando se delega a otros lo que no podía ser delegado.
Saúl perdió definitivamente la corona en el día en que delegó a David la
responsabilidad de luchar contra Goliat. Cuantos pastores han perdido sus iglesias
porque delegaron la dirección a otros, cuantas esposas delegaron para las
secretarias su responsabilidad con el marido. Cuantos padres delegaron sus
responsabilidades la educación de sus hijos para otras personas. Todos ellos
perdieron su posición porque pasaron la corona. La verdad la corona no es tomada
forzosamente, sencislamente la entregamos.

Ap. 3:12 Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá
de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la
nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo.

Ser columna es una gran gloria, es ser sustentación y ornamento. Será columna en
el futuro aquél que ya es columna hoy en la iglesia. Dios nos dio un testimonio para
que sustentemos, aquél que resiste es columna.

Ser considerado columna es tener primacía, posición de mayor honra. Retire la


columna y el edificio caerá. Una cosa es ser pared y otra es ser columna, algunos son
piedras de edificación, otros son columnas de ostentación (1Pe.2:4-5). Sin columna
no hay edificio, nadie puede tocarla indebidamente, nadie puede ahuecarla
inadvertidamente. Es posición de honra.

A cada iglesia, el Señor da una promesa para el vencedor, su propósito es nuestra


victoria. Ser un vencedor es responder en cada una de la advertencias que el Señor
hace a cada una de las iglesias.
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La iglesia en Laodicea
La iglesia de Tiatira sale de Pérgamo, la iglesia de Sardis sale de la iglesia de Tiatira,
la iglesia de Filadelfia; por su vez sale de Sardis. Mas la iglesia de Laodicea sale de la
iglesia de Filadelfia. Del mismo que la iglesia protestante salió de la iglesia Católica,
también las iglesias evangélicas libres salieron de las protestantes.

La palabra Laodicea se origina de otras dos palabras griegas “Laus y Dicea”. Laus
viene de laicos que significa pueblo común, Dicea significa costumbre, opinión,
consejo. Laodicea significa entonces, el gobierno de las tradiciones del pueblo o el
gobierno de la opinión del pueblo. Es el contrario de los nicolaítas. Para el nicolaíta,
el pueblo no tiene autoridad, quien decide y ordena es el clero. ¿Y qué es Laodicea?
El clero no manda en nada, quien manda es el pueblo, es la iglesia de la democracia.

Si el clericalismo no es de Dios, la democracia dentro de la iglesia también no es, la


palabra de un nuevo convertido no puede tener el mismo valor que la de un anciano
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lleno del Espíritu. Es necesario buscar revelación del padrón celestial para el
gobierno de la iglesia.

El clericalismo nicolaíta no es padrón de Dios, mucho menos la democracia


laodicense. El deseo del corazón de Dios es que en la iglesia existían hombres
capaces de oírlo. Que ellos puedan ser como los ángeles de las iglesias, que una
posición celestial puedan gobernar por medio de la unanimidad del cuerpo.

El ángel de cada iglesia debe gobernar, mas no con clericalismo intentando parar la
función de los miembros del cuerpo ni tampoco ignorando el clamor y las
percepciones de los demás hermanos.

Proféticamente, Laodicea representa la iglesia de los últimos días, históricamente


Laodicea son todas las iglesias que un día probaron el mover de Dios, pero que
infelizmente se enfriaron. Laodicea es una iglesia que un día fue fiel.

1. La revelación del Señor – 3:14

Para Laodicea, el Señor se presenta como “el amén, el testigo fiel y verdadero, el
principio de la creación de Dios” como el amén, el testigo fiel y verdadero, el Señor
está declarando que todo aquello que Él dice se cumplirá.

Algunos imaginan que el principio de la creación de Dios mencionado aquí, significa


que Jesús fue creado o tuvo inicio. La palabra principio en el griego tiene también el
sentido de fuente y origen, así el texto sería mas bien traducido como la “fuente de
la creación de Dios, el origen de toda la creación” esta iglesia, más que todas las
otras necesita reconocer quien es la fuente y el sustentador de todas las cosas.

2. Mensaje a la iglesia – 3:15-20

La principal característica de Laodicea es ser tibia. ¿Qué lleva a la iglesia a no ser


caliente ni fría? Antes de todo es un deseo mórbido de agradar a todos. Cuando
queremos agradar los fríos y también los calientes, el resultado es la tibieza. Tibieza,
es por tanto, deseo de agradar a hombres antes que agradar a Dios.

Otro aspecto de la tibieza es el deseo de ser equilibrado, esta es una exhortación


que oímos frecuentemente: “sea equilibrado”. Naturalmente, todo extremismo es
peligroso; sin embargo, la tibieza no es sino un equilibrio térmico. Cierta vez,
encontré un pastor que reclamaba de rechazo en su ciudad, tanto por los
tradicionales como por los pentecostales, en su opinión eso acontecía porque él era
equilibrado, en realidad lo que él consideraba su cualidad era su tibieza. Por ser tibio
no se adaptaba a algún lugar. Para el tradicional, él era caliente, para el pentecostal,
muy frío. En otras palabras, era tibio.
100

La intención del tibio no es desagradar a nadie, cuando se es frío o caliente, eso


incomoda. El deseo de agradar a los otros parece muy bonito y hasta muy espiritual,
pero no agrada a Dios. La peor maldición que existe en el medio evangélico es
querer ser simpático siempre. La iglesia de Laodicea es así: una iglesia simpática,
todo el mundo gusta de ella, menos el Señor que está a punto de vomitarla de la
boca. El Señor no soporta ese medio termo: nunca es demás, nunca es de menos,
nunca ataca, nunca defiende, no huele ni apesta, no es fría ni caliente.

Además de eso, Laodicea se cree rica y abastada; eso no refiere a riqueza material,
todavía que esa iglesia sea rica también materialmente, sino a riqueza espiritual.
Cuantas iglesias están cerradas para el mover de Dios porque juzgan ya poseerla.
Otras piensan que no necesitan aprender ninguna cosa con nadie, al final poseen los
mejores maestros y teólogos. ¿Quién puede enseñarlos? El diagnóstico del Señor es
duro: tú no percibes que eres ciego y miserable, pobre y desnudo (v.17).

¿Cómo puede alguien creerse rico y Dios lo taja de miserable? Ciertamente es


porque los que se juzgan tener, no poseen valor espiritual genuino. Tal vez posea
mucha erudición, pero ninguna revelación, mucha música, pero ninguna adoración;
mucho trabajo, pero ningún fruto; mucha bulla, pero ninguna unción; mucho
patrimonio, pero ninguna riqueza espiritual.

Aveces lo que suponemos ser riqueza no pasa de tejidos rotos a los ojos divinos, lo
peor es cuando nos juzgamos entendidos en la evaluación espiritual somos tenidos
como ciegos. Los laodicenses tenían el mismo problema de los fariseos: tenían ojos,
mas no veían, tenían ojos, mas no oían.

Todo conocimiento verdaderamente espiritual es fruto de revelación, tener


revelación no significa ver algo que nadie vio, al contrario, es ver bajo la óptica de
Dios, es como Él ve. Revelación es tener el corazón incendiado por su luz que trae la
palabra “Rhema”. Para esa iglesia, la palabra de Dios está sellada, ella no ve ninguna
cosa porque su corazón no está inclinado para Dios. El mero conocimiento
intelectual de la Biblia es destituido de valor; si todo lo que tenemos es eso,
entonces no poseemos ninguna cosa. Este tipo de conocimiento no cambia la vida
de nadie, antes es considerado por Dios como ceguera.

Además de pobres y ciegos, los laodicenses están desnudos a los ojos de Dios. Se
sabe que los vestidos espirituales nos hablan de una relación con Dios, todo
creyente los recibió, con todo el Señor dice que Laodicea está desnuda. Ciertamente
esa desnudes se refiere a los vestidos nupciales, porque Él dice que esa iglesia
necesita comprar vestiduras blancas. Los vestidos de salvación no pueden ser
comprados; por el contrario, son recibidos de gracia. Por otro lado, tiene un precio:
los actos de justicia (Ap.19:8). A pesar de la situación lamentable de Laodicea, ella
no deja de ser iglesia.
101

Todavía ella necesita pagar el precio para adquirir las cosas genuinamente
espirituales, la indisposición para pagar el precio es lo que nos lleva a ser tibios. Para
que seamos calientes tenemos que pagar de incomodar los fríos, para que seamos
ricos en Dios, necesitamos pagar el precio. Paulo nos advierte que algunos edifican
con materiales baratos como madera, paja y heno porque no quieren pagar el
precio por el oro, por la plata y por las piedras preciosas (1 Co 3.12).

El primer ítem que ellos necesitan comprar es el oro. En la Biblia, el oro refinado
apunta para la gloria, para la presencia y la naturaleza del proprio Dios. Todas las
veces que el Señor habla, su Palabra es oro; siempre que el Espírito fluye, su unción
es oro. Es por eso que, muchas veces, los hermanos tienen visión de oro lloviendo
en nuestras reuniones. Siempre que Dios se mueve, esto es oro. La riqueza que
poseemos es solamente una: Su unción en nuestras vidas. Quien no tiene unción es
pobre, no tiene nada. El pobre es aquel que nunca tiene nada para compartir, nada
para decir de la parte de Dios – ese es pobre. Ese oro de Dios, todavía, no puede ser
distribuido gratuitamente – el tiene un precio. Es necesario ganarlo. El Señor
aconsejo a la iglesia a comprarlo. Unción no pasa por acaso, alguien la adquirió. El
segundo ítem a ser adquirido son vestiduras blancas. Ellas nos hablan de vestiduras
nupciales y deben ser compradas. Después de las vestiduras de salvación,
necesitamos de vestiduras nupciales tipificadas por las ropas bordadas del Salmo
45.14 y también por el lino finísimo de Apocalipsis 19.8.

La vestidura nupcial es hecha de nuestros actos de justicia, ella nos cualifica a


participar del reino y de la fiesta de bodas. Todos debemos tener dos vestiduras: las
de salvación – que es el proprio Cristo (Rm 13,14; Gl 3.27), y las nupciales – que son
nuestros actos de justicia (Is 61.10). Con relación a las nupciales, deben ser
compradas, el precio es tejerlos con nuestros actos de justicia, porque el lino
finísimo simboliza los actos de justicias de los santos (Ap19.8).

Finalmente, el Señor aconseja a la iglesia de Laodicea a comprar colirio para que


pueda ver (v. 18). Ese “ver” es algo inherente al espíritu. Colocar colirio en los ojos
significa buscar un corazón receptivo. La iglesia de Laodicea era arrogante y juzgaba
que no necesitaba aprender mas nada con nadie. Quien no se dispone a aprender
con los otros también no va aprender directamente con el Señor.

No debemos intentar aprender solos, por orgullo, aquello que nuestro hermano
sabe. Dios nos va resistir. Entretanto, si nos disponemos a aprender con el hermano,
la luz de Dios vendrá a través de el. Si en nuestra ciudad, el Señor esta moviéndose
en algún lugar, debemos ir hasta allá para aprender; si no lo hacemos y intentamos
aprender solos, Dios podrá resistirnos, porque El no le agrada al soberbio. La
situación dramática de esta iglesia puede ser percibida en el versículo 20:

He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré
a él, y cenaré con él, y él conmigo.(Ap 3.20)
102

¿Qué iglesia es esta que el Señor esta del lado de afuera tocando la puerta? ¿Qué
condición miserable es esta que coloca a Jesús del lado de afuera llamando? Los
comentaristas están de acuerdo que esa puerta que el Señor esta tocando es la
puerta del corazón. Laodicea es, por lo tanto, una iglesia que no tiene a Jesús en el
corazón. Tal vez lo tenga en la doctrina, o en la liturgia, nunca en el corazón.

Todavía así, el Señor reafirma: todavía hay tiempo para ti, “yo disciplino a quien amo
y estoy tocando en su puerta ahora”. La entrada del Señor en el corazón de esa
iglesia no es para salvarla, pues ellos son salvos, caso contrario no serían iglesia. El
Señor quiere cenar con ellos. Cenar es cuestión de comunión, de querer estar con El
y amarlo. En la Biblia, comer juntos es algo muy serio, compartir el pan es solo para
amigos. Los judíos, por ejemplo, jamás comían con los gentiles. Laodicea es una
iglesia que no tiene una comunión con el Señor porque no tiene amistad con El.
Jesús dijo que sus amigos son aquellos que hacen su voluntad. La iglesia de
Laodicea no conoce y ni tampoco practica la voluntad del Señor.

Es difícil abrir la puerta cuando la casa esta llena y no hay mas espacio. Cierta vez, un
profesor llegó en su sala de clases con una jarra de vidrio. Quería enseñar algo
profundo a sus alumnos. Delante de ellos coloco una gran piedra dentro de la jarra y
preguntó: ¿esta jarra esta llena? Todos concordaron que si. El entonces tomo unas
piedras menores y las colocó dentro del jarro. Las piedritas entraron y ocuparon los
espacios vacios. El entonces pregunto por segunda vez: ¿esta llena? Los alumnos
quedaron un poco constreñidos, pero concordaron que estaba llena. Pero el salió
todavía y trajo una arena bien delgada y la coloco en el jarro. La arena entro en los
espacios que había entre las piedritas y la piedra. Por tercera vez el pregunto: ¿esta
llena? Ahora nadie se atrevía a responder, porque ni imaginaban lo que podría venir
a seguir. El profesor entonces dijo: ahora yo voy de hecho llenar el jarro. El vino,
coloco agua dentro del jarro que lleno todos los espacios vacios.

Después de todo eso el pregunto: ¿Qué lección aprendieron con esta experiencia?
Ellos respondieron rápidamente: esto es fácil. No importa lo cuan ocupados
estemos, siempre hay espacio para mas algún compromiso. El profesor concluyo.
Esta lección es buena, pero hay una más profunda todavía: si ustedes no colocan la
piedra primero, después no hay como hacerlo. Si no somos cuidadosos, podremos
llenar nuestras vidas de otras cosas hasta el punto de no haber mas espacio para la
Piedra.

3. La recompensa del Vencedor – 3.21,22

¡Que es ser un vencedor? Las personas piensan que el vencedor es alguien fuera de
lo común, viviendo en un padrón superior a los demás. Entretanto, el vencedor es
103

aquel que no abandona el primer amor. Vencedor es aquel que rechasa las obras de
los nicolaítas, la doctrina de Balaán y las profecías de Jezabel. El vencedor es un
Antipas, que no apenas tiene el nombre de quien vive, pero esta vivo de verdad.
Vencedor es aquel que conserva lo que tiene, que no es tibio, pero caliente. En fin,
es aquel que no tiene miedo de ser radical en Dios, ni de abrir la puerta para el Señor
entrar y cenar. A el, el Señor le promete una maravillosa recompensa:

Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he


vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. (Ap 3.21)
104

La revelación del trono de Dios


Hay un trono en el centro del universo y ese trono debe estar en el centro de
nuestras vidas también. El representa el gobierno, la autoridad, la soberanía y el
señorío de Dios sobre el universo. Todo mover de Dios en la historia sucedió porque
alguien vio al trono. No hay como servir a Dios sin temor y tremor. Es solamente
después de contemplar el trono que podemos tener temor y tremor genuinos.
Todas las cosas de Dios solo pueden ser obtenidas a partir del trono.

1. Hay alguien sentado en el Trono – 4.1-3

Juan no tuvo osadía para definir a Dios. El se refiere al Señor como alguien sentado
en el trono. Si el trono de Dios es indefinible, mucho más indefinible es Dios.

Juan dice que no hay “alguien en el trono”. El es alguien porque es una persona,
diferentemente de lo que algunos dicen, refiriéndose a Dios como una fuerza
espiritual, un ente, un ser, o cualquier cosa impersonal. Juan también dice que El es
“semejante”. Tal es el temor de Juan que el no se atreve referirse a Dios a no ser
usando comparaciones. Antes de conocer el trono, necesitamos conocer Aquel que
se sienta sobre el. El no puede ser explicado o definido, solo puede ser conocido en
la intimidad del corazón.

2. Hay un arco-iris alrededor del Trono – 4.3


Ese arco iris simboliza alianza de Dios con nosotros:
Gen 9:13 Mi arco he puesto en las nubes, el cual será por señal del pacto entre mí y
la tierra.

Después que Noé salió del arca, Dios hizo una alianza con él y con su descendencia:
nunca mas destruiría la tierra a través del diluvio (Gn.9:13). Dios estableció el arco
105

iris como señal de esa alianza, la primera cosa que se ve en el trono a su alrededor
es un gran arco iris. Él está allí para recordarlo que su trono es un lugar de gracia y
de fidelidad.

Heb 4:16 Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar


misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

Cuando contemplamos el trono y vemos el arco iris nos recordamos de la salvación


de Dios, Dios pactó con la redención no apenas del hombre sino también de toda la
creación. Aquellos que poseen la revelación del trono del Señor son también
comprometidos con la salvación y la redención de la humanidad. Aquellos que
conocen el trono de Dios son comprometidos con su salvación; si alguien dice
conocerlo su gobierno, a su señorío y su trono; si no se compromete con la
salvación de las naciones todavía no vio nada. Quien vio al Señor como Pablo, solo
puede decir después: “hay de mi si yo no predicara el evangelio” (1 Co.9:16).
Después de ver el trono del Señor, la primera cosa a acontecer es que un arco iris
queda impreso en nuestro corazón, comenzamos a tener compromiso por la
salvación de las vidas.

3. Del trono salen relámpagos, voces y truenos – 4:5


Si comparamos el verso 5 con el cuatro y el cinco del capítulo ocho,
concluiremos que esos relámpagos, voces y truenos son liberados por la
oración, cuando oramos en línea con el trono hay luz, voz y quiebra de los
fundamentos. Esas voces, relámpagos, truenos y terremotos apuntan
también para el juicio de Dios, tal percepción nos asombra, produce temor
delante del padre.

Delante del trono salen voces, relámpagos y truenos que suenan como explosiones.
¿Qué significan voces, relámpagos y truenos? A principio nos hablan del juicio de
Dios y de poder juzgador. Apocalipsis 8; sin embargo, dice que esos mismos señales
acontecen cuando nuestras oraciones son lanzadas en le tierra. Cuando oramos,
nuestras oraciones suben como incienso delante de Dios, los ángeles entonces las
cogen y las juntan al fuego del altar. Después de eso como respuesta a las
oraciones, los ángeles con sus incensarios lanzan en la tierra esta mescla de fuego
con incienso resultando en voces, truenos y terremotos. Nuestras oraciones son
como vapor que sube a los cielos y se condensa delante del trono de Dios, después
ellas retornan en forma de una gran tempestad con truenos, voces, relámpagos y
terremotos.

A veces pensamos que la obra del Señor es hecha por “grandes hombres de Dios”,
la verdad es que el todo poderoso está planeando y haciendo obra de arquitectura,
acciones a través de oraciones de millones de fieles que está abalando la tierra.
Cuando oramos en línea con ese trono, cosas misteriosas suceden: relámpagos
106

traen luz en medio de las tinieblas, terremotos abalan los poderes del infierno y
voces celestiales traen la revelación del corazón de Dios sobre la tierra. La oración
tiene el poder de traer la autoridad del trono de Dios para la tierra. Por eso ore.

4. Delante del trono arde el fuego del Espíritu – 4:5


No hay fuego y poder sin el trono que representa el señorío de Dios; si tú
deseas el fuego de Dios en su vida, necesita venir delante del trono es allí
que arde el fuego de Dios. Ese es el fuego que depura y mata los gérmenes
del pecado (Sl.97:3; Dn.7:9), delante del trono hay siete tochas de fuego que
son los siete Espíritus de Dios, son siete para indicar su significado pleno y
absoluto. Juan dice que el trono es de fuego, pero que delante de de el
existen siete tochas que son los siete Espíritus de Dios. Daniel, sin embargo,
afirma que el trono de Dios es hecho de fuego “su trono eran llamas de
fuego y sus ruedas eran fuego ardiente” (Dn.7:9). A la verdad, el propio Dios
es fuego consumidor (Hb.12:29).

Efesios dice que hay solamente un Espíritu que es el Espíritu Santo de Dios (Ef.4:4).
¿Cuál es el sentido de mencionar siete Espíritus de Dios? Siete es un número
simbólico que significa perfección y plenitud, los siete Espíritus significan la plenitud
de la acción del Espíritu de Dios. Existen varios símbolos del Espíritu Santo en la
palabra: el aceite, la paloma, el agua viva, mas aquí Él es fuego que consume, que
depura, que purifica, que nos trasmite la naturaleza de Dios. Aquellos que se
colocan delante del trono son confrontados con las siete tochas del Espíritu Santo
de Dios. En el capítulo 5, cuando Juan tiene visión del cordero, ve también que el
cordero tiene siete ojos que son también los siete Espíritus de Dios. Él escudriña,
conoce y ve, Él es fuego.

Son siete Espíritus de Dios que todo ve, todo escudriña. No intente nada esconder
nada de Dios, porque Él ve todo, Dios ve lo íntimo, ve el corazón, ve la motivación.
Mismo aquel pequeño sentimiento allá en lo íntimo, Dios lo conoce. No tenga temor
de los hombres, los hombres no ven nada, son ciegos, nada perciben más allá de la
capa exterior. Dios; sin embargo, ve todo del alma, por eso tenga temor de Él.

5. Hay un mar de vidrio como cristal – 4.6

Delante del trono hay un mar de vidrio semejante al cristal, limpio, cristalino y
transparente. Delante del Señor solo hay lugar para transparencia y verdad. El
Salmo 89 dice que la justicia y derecho son fundamentos del trono de Dios: Sal. 89:14
Justicia y juicio son el cimiento de tu trono; Misericordia y verdad van delante de tu rostro.
107

Juan dice que el trono está sobre un mar de vidrio; eso significa que justicia y verdad
son manifiestas por la transparencia del mar de vidrio. Nada traduce mejor la
transparencia que la justicia y la verdad, delante del trono no hay lugar para la
disimulación y fingimiento, porque estamos pisando sobre algo muy limpio y
transparente. Transparencia es la base del trono de Dios, justicia y verdad sus
caminos. Quien se ve en la luz de Dios nunca más puede ser el mismo, la gran señal
de quien contempló el trono es el arrepentimiento y la contrición. 1 Juan 1:7 dice que
necesitamos andar en la luz: pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos
comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.

En Apocalipsis, el río de agua de vida sale del trono de Dios y es brislante como
cristal (Ap.22:1), no podría ser diferente porque sale del mar de vidrio, el mar de
vidrio es mesclado con fuego (Ap.15:2) y Daniel dice que el río que sale del trono
también es de fuego.

Dan 7:10 Un río de fuego procedía y salía de delante de él; mislares de mislares le servían, y
millones de millones asistían delante de él; el Juez se sentó, y los libros fueron abiertos.

Juntando las descripciones se concluye que el río de agua de vida es a la verdad un


rio de fuego, todo que dice al respecto de Dios es representado por fuego, luego
simbólicamente nuestro Dios es fuego, su trono es fuego, sus hijos son columnas de
fuego y el propio mar de vidrio es a la verdad un lago de fuego. En el final, todos
tendrán que comparecer delante de ese mar de fuego. Los que son hijos tendrán la
naturaleza de fuego del padre, mas los demás serán condenados en el mar de vidrio
que se tornará para ellos el lago de fuego.

El cielo y el infierno a la verdad se resumen en la presencia de Dios, todo depende


del hombre, Dios es el mismo. El sol que viene sobre el barro es el mismo que viene
sobre la mantequisla; si la mantequisla derrite y el barro endurece, la culpa no es del
sol, sino de la naturaleza de eso elementos. Si el hombre no muda de naturaleza, no
podrá llegar delante de Dios que es fuego consumidor. Mas Dios hace de sus
ministros columnas de fuego (Hb.1:7). ¿Por qué Dios que es fuego, hace de nosotros
columnas de fuego? Para que podamos tener comunión con Él, es por eso que carne
y sangre no podrán heredar el reino de Dios. Todo hombre comparecerá delante de
Dios un día. ¿Qué va ser de aquellos que no son columnas de fuego? ¿Qué será de
aquellos que no fueron fuego semejantes al altísimo? Ellos se hundirán en el mar de
fuego, donde el propio infierno será lanzado.

6. Del trono sale el río de vida – 22.1

Nunca confunda la emoción con el verdadero fluir del Espíritu, en Daniel el río es
también de fuego (Dn.7:10), Jesús dice que ese fluir tiene que venir del interior. Mas
en Apocalipsis dice que el río sale del trono.
108

Ap. 22:1 Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como
cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero.

El rio sale del trono, cuando el trono está puesto en nuestro interior es de allí que el
rio va fluir, tal rio es de fuego.

Dan 7:10 Un río de fuego procedía y salía de delante de él; mislares de mislares le servían, y
millones de millones asistían delante de él; el Juez se sentó, y los libros fueron abiertos.

El rio del agua de vida sale del trono de Dios, Él solo fluye donde el trono está
establecido; si el trono divino estuviere establecido en su corazón, ese rio fluirá de
su interior, justamente porque el trono está allá. El trono es solo un símbolo del
señorío y del gobierno de Dios; si el gobierno está en su corazón, el rio fluye; en
cambio si usted hace lo que parece mejor a sus propios ojos, si eres tú quien decide
y determina sus propias circunstancias, el fluir se seca.

Sequedad es la condición de quien está lejos del trono, no es una cosa de orar
mucho o de ayunar hasta morir, es una cuestión de sujeción a Aquél que está en el
trono, el rio solo fluye para abajo; si quedamos debajo del trono, sometiéndonos a
Él, el rio fluirá espontáneamente. No hacemos más lo que creemos mejor, hacemos
apenas lo que el rey que está en el trono determinó.
109

Los que viven delante del Trono


Del de Dios proceden todas las cosas, su trono es el centro del universo. El centro
del universo no es el hombre, no es un planeta, ni es una galaxia. El centro del
universo es este punto, el trono de Dios. Evidentemente el Señor no se cansa ni
necesita sentarse, el trono es algo simbólico que representa la soberanía de Dios, la
autoridad y el gobierno. Es a partir del trono que Dios actúa y gobierna. Todo
hombre que vio el trono de Dios fue transformado, Daniel por causa de la visión
quedó alarmado y débil (Dn.15:16). Isaías cuando vio al Señor sentado en un alto y
sublime trono, gritó exasperado “hay de mi, estoy perdido, porque soy un hombre
de labios impuros, mis ojos vieron al rey, el Señor de los ejércitos” (Is.6:1-5). El
propio Juan, cuando vio Jesús en el capítulo 1 de Apocalipsis, cayó como muerto.
Ezequiel cayó estático (Ez.1:26-28). El trono abala toda fuerza humana, abala todos
los conceptos y los fuerza a que se curven reconociendo la soberanía del altísimo.

La cualidad de nuestra vida cristiana depende de la revelación que tenemos del


trono de Dios, en una época en que ser íntimo de Dios es meramente cantar una
balada romántica, la visión del trono se torna esencial. Cuando hombres caen en el
error de contemplar el santo de Israel de igual para igual, se pierde el temor y el
censo de reverencia debida al omnipotente que soberanamente reina en su trono,
una vida profunda es medida por el nivel de su temor delante de Dios. Cuanto más
superficial el creyente, más él lidia con las circunstancias espirituales de forma
liviana. Mas cuando el hombre ve por los ojos del espíritu, el trono y la majestad, él
110

no consigue mas ser displicente en su vida espiritual. Es la visión del trono que trae
el temor.

Necesitamos ser escavados por el Señor en nuestra vida espiritual para que haya
profundidad en nosotros, vivimos la generación de la superficialidad: personas,
mensajes y relaciones superficiales. Jesús dice que la semisla de la palabra germina
rápido en las superficiales, pero por no conseguir penetrar las raíces, el que nace
luego se seca (Mt.13:5). ¿Cuál es la razón de la superficialidad? Jesús responde: es
por causa de las piedras que están escondidas por abajo. La superficialidad es una
forma de esconder las piedras del ego y de la carne.

Nadie se torna profundo naturalmente, la profundidad es producida bajo dos


condiciones: el amor y el temor. La primera condición es un genuino amor por el
Señor. Cuando amamos a Dios y tenemos el intenso deseo de Dios por Él, nos
disponemos a remover las cosas erradas que están ocultas en nosotros; eso nos
conduce a la intimidad; sin embargo, el amor no es la única condición para que nos
profundemos en Dios. Para equilibrar ese sentimiento, necesitamos del temor.
Cuanta falta de temor hay ahora entre los hijos de Dios y no hay temor de Dios
porque no hay revelación de su trono.

Cuando Jesús fue tentado por el diablo, Él venció la tentación usando tres armas
(Mt.4). La primera es la palabra de Dios, para cada tentación maligna, Él respondía:
“está escrito” ¡está escrito! Las otras dos armas fueron el temor y la adoración. Tal
vez no se perciba eso de inmediato, se puede ver esas dos armas en las ultimas
respuestas del Señor.

En el primer ataque del maligno; Jesús se agarró de la palabra “si tú eres hijo de
Dios, transforme esas piedras en panes” al que Jesús respondió “no solo de pan
vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”. En esa ocasión,
Jesús vence al diablo con la palabra. Mas luego el diablo lo llevó al pináculo del
templo y los instigó para que saltase “porque está escrito que a sus ángeles para
que te guarden y no tropieces en alguna piedra”. ¿Cuál fue la respuesta de Jesús?
No tentarás al Señor tu Dios. La respuestas, por tanto, fue el temor.

Es por el temor que no se tienta; si tenemos temor, no jugaremos con Dios, con la
palabra ni con el Espíritu Santo, ni de orar o de buscar poder, ni tampoco buscamos
jugar con el pecado. Las cosas de Dios son serías, Dios es un Dios serio y aquél que
se aproxima de Él debe hacerlo con seriedad. Entonces el diablo le mostró los reinos
y profirió: “yo te voy a dar todo eso si postrado me adorares”. El Señor le
respondió: solo al Señor tu Dios adorarás. La tercera arma que el Señor usó fue la
adoración. La adoración es un arma que está relacionada con el amor de Dios,
muchos saben que la alabanza es arma contra el diablo, la mayoría concuerda que la
palabra es una espada contra el enemigo. Mas pocos perciben que el temor es la
111

protección y arma contra Satanás, la única manera de desenvolver un santo temor


de Dios es entendiendo que hay un Señor que está sentado en el trono del universo,
hay un trono en el universo, de donde Dios gobierna todo y todos. Y un día, cada
uno de nosotros tendrá que prestar cuentas delante de Él que reina y gobierna, la
visión del trono es básica para nuestra vida espiritual. El creyente que no tiene
revelación del trono no puede decir que comprende lo que es el señorío de Dios.

Necesitamos tener relación con Dios de una forma equilibrada, para crecer
necesitamos del amor de un lado y del temor por otro, los dos conceptos parecen
irreconciliables, pero no es cierto. ¿Cómo conciliamos amor con temor? Yo tengo
dos hijas, ellas tienen libertad en casa conmigo, es la casa del padre, ellas comen lo
que quieren, abren la congeladora, entran en todas las cómodas. No hay espacio
restricto, saben que lo que es mío es de ellas también, ella juegan, corren conmigo,
saltan en mi, me besan, en fin disfrutan de mi. Saben que me pueden amar porque
tienen plena convicción y confianza de que yo las amo y no hago esfuerzos para
demostrarlas. Eso es amor, esa base de relación es vital, yo no podría vivir sin eso ni
ellas. Mientras si fuera apenas eso, tendremos un problema, es necesario que haya
otra cara de la moneda. Cuando mis hijas saben que hicieron algo y que de alguna
manera me desagradaron, quedan realmente aprensivas y dependiendo de la
gravedad hasta asustadas. Ellas me conocen y saben que mi reacción puede ser muy
severa; por tanto, a pesar que me amen y tener intimidad conmigo, también tienen
mucho cuidado para que no hagan aquello que me desagrada. Eso es temor.

No estoy diciendo para tener miedo de Dios. Lo que quiero decir es que intimidad
sin reverencia y respeto es superficialidad emocional. Dios tiene el dominio sobre
todas las cosas, incluyendo su vida. Jesús dijo: no temáis los que matan el cuerpo y
no pueden matar al alma, teme mas bien aquél que puede hacer perecer en el
infierno tanto el alma como el cuerpo (Mt.10:28). Debemos temer a aquél que tiene
el poder sobre la muerte y sobre la vida, es ese temor reverente que nos protege
del pecado. Es la falta de temor que impide la mayoría de los creyentes abandonen
el pecado. En el monte de Sinaí, Moisés dijo: Exo 20:20 Y Moisés respondió al pueblo:
No temáis; porque para probaros vino Dios, y para que su temor esté delante de vosotros,
para que no pequéis.

Algunos calientan la falsa ilusión de que Dios no disciplina a nadie, no caiga en esa
trampa. “horrenda cosa es caer en las manos del Dios vivo” (Hb.10:31). Temible es
Aquél que está en el trono.

Juan cuenta que vio a alguien sentado en el trono (v.2). ¿Quién es ese que está
sentado en el trono? Él sabe que es Dios que está en el trono, pero que no se atreve
a decirlo. Es alguien porque se trata de una persona – no es alguien como enseña la
nueva era, no es una energía, una cosa, sino un ser. El auto-Existente. Aquél que
existe, el eterno. Juan mura y ve ese alguien y no algo, ve esa persona que es, tiene
112

voluntad, posee una personalidad, Juan no consigue describirlo, porque Dios es


indescriptible, es indefinible.

El libro de Apocalipsis describe el trono, sin embargo, no consigue describir Aquél


que está sentado, porque Dios no puede ser definido con palabras humanas, Él
jamás podría ser expreso con palabras naturales, el Dios a quien yo y tú servimos, el
Todopoderoso, el eterno, está más allá de las explicaciones humanas. Está más allá
de las especulaciones, de las discusiones de la mente humana. Por más que los
hombres discutan y hagan teologías a respecto de Él, ningún hombre puede
definirlo y por eso Juan dice: Él es alguien. Él es el único, el inexprimible, el
extraordinario, aquello que nuestra mente no aprende, nuestro espíritu absorbe y
recibe. Por eso Él siendo Espíritu, solamente puede ser percibido por nuestro propio
espíritu, no necesitamos definirlo, necesitamos apenas recibirlo.

Se puede ver en Apocalipsis por lo menos tres categorías de seres que habitan
delante de Dios: los ángeles, los seres vivientes y los veinte y cuatro ancianos.
Estudiar sus características nos ayuda a entender cuales son las características de
alguien que vive delante del trono de Dios.

1. Los ángeles.

Apocalipsis declara que son tres tipos de seres que viven delante del trono. Los
ángeles, los seres vivientes y los vente y cuatro ancianos. Eses seres que viven
delante del trono de Dios sirven para nosotros como ilustración de como debe ser
nuestra vida si deseamos también ser contados entre aquellos que viven delante de
su trono. La primera criatura que encontramos son los ángeles. Alguien tal vez
concluya precipitadamente que ellos no nos sirven de modelos espirituales. Mas
ellos no están distantes de nosotros.

Ap. 21:17 Y midió su muro, ciento cuarenta y cuatro codos, de medida de hombre, la
cual es de ángel.

Apocalipsis nos muestra que la medida de ángeles es igual a medida del hombre,
eso significa que la medida del ángel es la misma del hombre. Existen muchas
ocasiones en la palabra de Dios en que ángeles aparecen y no sabemos como definir
inmediatamente si son ángeles o si son hombres. Cuando Abraham recibió
visitantes para hablar al respecto de la destrucción de Sodoma y Gomorra, el texto
no deja claro al principio si eran hombres o ángeles. Al inicio Abraham los recibió
como si fuesen hombres. Lo mismo hizo Lot y hasta los habitantes de Sodoma, ellos
no tenían alas, ni eran criaturas brislantes, poseían apariencia humana como
nosotros. Otra vez Josué estaba en el campo, cuando vio el ángel del Señor, él no
tuvo claridad y le preguntó: ¿eres de nosotros o eres contra nosotros? (Js.5.13), Él no
sabía hasta que el ángel se identificó. Hebreos narra que muchos sin saber
hospedaron ángeles (Hb.13.2). O sea pensando que eran hombres. No quiero ser
113

demasiadamente místico, pero puede ser que usted ya se haya deparado con un
ángel por ahí y ni percibió de lo que se trataba.

No tenga dudas, ángeles no poseen documento de identidad angelical o celestial, a


veces, parecen hombres como nosotros, es por eso que Apocalipsis habla que la
mediada del hombre es la medida del ángel. Ángeles son seres misteriosos, la
palabra del Señor afirma que fueron enviados para servir o para proteger aquellos
que han de heredar la salvación.

Heb 1:14 ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que
serán herederos de la salvación?

La idea del ángel de la guarda es ciertamente católica, todavía el hecho es que el


ángel del Señor acampa alrededor de los Lo que temen y los libra (Sl.34:7). Jesús fue
quien dijo: los ángeles de los pequeñitos ven el rostro del Señor constantemente, o
sea, los pequeñitos tienen ángeles (Mt.18:10). Apocalipsis es lleno de ángeles, ellos
son operarios celestiales, como se dice por ser criaturas del trono, ellos sirven como
ilustración de aquellos que hacen del trono el centro de sus vidas. La primera
característica de ellos es que son mensajeros a la iglesia y las naciones (Ap.1:1, 14:6).

En Apocalipsis el Señor va confesar nuestro nombre delante de los ángeles (Ap.3:5).


Entonces ellos son testimonios de la confesión de Jesús, Él tiene un testimonio para
dar y los testigos son los ángeles. En ese sentido nosotros también estamos
testificando para el mundo el testimonio de Dios. Ese es el papel de aquellos que
están delante del trono. Mas adelante leemos que un ángel tiene un evangelio para
predicar (Ap.14.6). Nosotros como ellos, tenemos la misma tarea, somos testigos
del evangelio de Dios. Si usted desea identificarse con aquellos que viven delante
del trono, recuerde que ellos tienen un evangelio para predicar.

Ap. 7:1 Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, que
detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la tierra,
ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.

Los ángeles retienen las fuerzas espirituales que operan en la tierra, del mismo que
la iglesia, sobre todo a través de la intercesión, ellos impiden la operación del diablo.
La iglesia tiene autoridad para atar los poderes demoniacos y desatar los cautivos
mediante la oración. Los que están delante del trono tienen autoridad para atar y
desatar (Mt.18:18).

Uno de los trabajos de los ángeles en Apocalipsis es sellar a los escogidos de Dios
(Ap.7:3). Esa tarea es la misma que hacemos cuando bautizamos personas, el
bautismo es un sello y fuimos llamados como la iglesia para bautizar y sellar los
escogidos de Dios. Ese es un trabajo de los que viven delante del trono. Mas el sello
no reside en apenas en el bautismo de las aguas, es igualmente el bautismo en el
114

Espíritu. En Efesios, el fuego del Espíritu es el sello de la propiedad (Ef.1:13).


Solamente quien está delante del trono puede tener acceso al fuego que marca los
escogidos.

Cada carta enviada a las siete iglesias del Asia es direccionada al ángel de la iglesia,
naturalmente se refiere a su líder, pero es notable que ese dirigente sea llamado de
ángel. El verdadero ángel de cada iglesia es a la verdad una criatura que vive delante
del trono con otros ángeles semejantes a él. La palabra “ángel o ángelos” en el
original griego significa mensajero. Así como ellos también somos mensajeros de
Dios.

Los ángeles realmente también son encargados de anunciar los juicios de Dios en
Apocalipsis (8:2, 14:1-13, 16:1-21). Semejantemente también nosotros fuimos
llamados no apenas para predicar el evangelio de las buenas noticias, sino inclusive
para anunciar proféticamente el juicio de Dios vendrá en la gran tribulación.
Necesitamos anunciar a los hombres que tenemos un Dios soberano y que todos
prestaremos cuentas delante de Él, cuando Dios envía a alguien, envía aquél que
está delante del trono.

Ap. 10:2 Tenía en su mano un librito abierto; y puso su pie derecho sobre el mar, y el
izquierdo sobre la tierra;
Ap. 10:3 y clamó a gran voz, como ruge un león; y cuando hubo clamado, siete truenos
emitieron sus voces.
Ap. 10:4 Cuando los siete truenos hubieron emitido sus voces, yo iba a escribir; pero oí una
voz del cielo que me decía: Sella las cosas que los siete truenos han dicho, y no las escribas.

Los ángeles declaran los misterios y los oráculos del Señor, de acuerdo con la carta a
los efesios a nosotros también fue revelado el misterio de Dios, la iglesia. Aquellos
ángeles oyeron algo que era enigma y no pudieron revelarlo, pero a nosotros nos
fue dada la gracia de declarar delante del mundo sus misterios.

En el capítulo 12, leemos que hubo una guerra en el cielo y que lo ángeles pelearon
(12:7), como ellos y hasta junto con ellos, también hacemos guerra espiritual. Como
las de ellos, nuestras armas son espirituales: nosotros guerreamos con la
intercesión, la adoración, la alabanza, la palabra y la sangre. Daniel dice que el trono
de Dios era y sus ruedas eran fuego ardiente (Dn.7:9). Ellas nos muestran que el
trono de Dios, es sin duda un carro de fuego. Aquellos que están delante del trono
son también guerreros.

En el capítulo 21, los ángeles están guardando y vigilando las puertas de la nueva
Jerusalén (21:12). Eso nos recuerda de guardar y pastorear el rebaño. La Nueva
Jerusalén simboliza la iglesia y proteger a sus puertas significa celar por ella.
Nosotros también estamos guardando sus puertas.
115

Todo aquello que los ángeles hacen, nosotros también hacemos, como ellos
tenemos una misión profética anunciando los juicios divinos, ellos son testigos y
nosotros también, ellos predican el evangelio eterno y nosotros predicamos el
evangelio de la gracia, ellos declaran el misterio y los oráculos de Dios y nosotros
enseñamos su palabra, ellos hacen guerra espiritual y nosotros también hacemos,
ellos guardan como nosotros las puertas de la iglesia; por tanto, todo aquello que
dice a respecto a los ángeles, nos dice al respecto. Eso muestra que no importa si
somos hombres o ángeles, si estamos delante del trono, nuestro trabajo será el
mismo.

2. Los seres vivientes.

La característica de los seres vivientes está en ser ministros delante del trono, la
razón de su existencia es adorar a Dios, incansablemente declaran día y noche
“santo, santo, santo es el Señor Dios el Todo poderoso, Aquél que era, que es y que
ha de venir” una consecuencia inevitable de la revelación del trono es la adoración a
Dios. Cuando vemos el trono somos tomados de tal perplejidad y maravisla que
nuestra reacción es adorar y ministrar al creador.

La característica más sobresaliente de los seres vivientes es la cantidad de ojos, ojos


delante, detrás, alrededor y para adentro. Los ojos son la puerta del alma, los ojos
de esos seres nos hablan antes de todo de visión espiritual. Donde no hay visión el
pueblo se corrompe, apenas aquellos que están delante del trono pueden indicar la
dirección y la visión de Dios (Pv.29:18). Los ojos de esos seres nos hablan de
revelación, delante del Señor, ellos ven completamente. Revelación es esencial en la
vida espiritual, todo depende de lo que usted ve, lo que usted ve caracteriza sus
actitudes y ellas determinan de lo que usted es (Ef.1:17-19). Nuestra actitud está
siempre de acuerdo con nuestra visión; si nuestro punto de viste es el dinero, vamos
a ver a las personas como un medio para obtenerlo, veremos un cifra encima de
cada persona o cosa. Si la actitud es mala toda su vida será tinieblas, muchos
matrimonios están turbados porque el marido “ve a la mujer como objeto” y
muchas mujeres ven al marido como un cero a la izquierda. Pastores ven sus ovejas
como cifras y así sucesivamente.

Jesús dijo que los ojos son como lámpara del cuerpo (Mt.6:22). Con tantos ojos,
esos seres vivientes viven en completa luz, ellos poseen visión en cuatro
dimensiones. La primera es la del frente, es la visión de la realidad en vuelta del
futuro. La segunda es la vista por detrás, significa la visión de la retaguardia, donde
el enemigo actúa, pero también mira para el pasado para ser capaz de evaluar sus
hechos. La tercera es dirigida al redor, ellos poseen ojos para ser sensibles a los que
lo cercan. La última dimensión es la interior, sus ojos se voltean para dentro, eso
significa que ellos se perciben, se evalúan y ven la propia alma desnuda. Una de las
mayores características de un creyente carnal es no percibirse, no percibir la paja
116

que está en el propio ojo, cuando él se depara con el trono, sus ojos se abren de
dentro y su condición muda.

La segunda característica de los seres vivientes es que ellos poseen cuatro caras, en
forma de hombre, león, cordero y águila. El número cuatro simboliza la creación, los
seres vivientes representan toda la creación de Dios. En el primero capítulo de
Génesis encontramos seis grupos de animales, de esos seis grupos, dos no están
representados aquí: los peces y los réptiles. Debido a que la serpiente ser un reptil,
ella representa el enemigo de Dios, Satanás. Los peces por su vez, son criaturas
marítimas y el mar simboliza la muerte. En el nuevo cielo y la nueva tierra, el mar
dejará de existir porque la muerte será vencida (Ap.21:1).

Los seres poseen la cara de un león, del hombre, del cordero y del águila, cada una
de estas caras posee un significado espiritual. En primer lugar, cada cara apunta
para el Señor Jesús, Jesús es el león de la tribu de Judá, mas por otro lado es
también el cordero sacrificado, Jesús es la exacta expresión y la imagen de Dios
como el hombre y al mismo tiempo es del cielo como el águila.

Esas cuatro caras apuntan para cada uno de los evangelios. El evangelio de Mateo
es la cara del león, pues es el evangelio del rey, en Mateo Jesús es mostrado como
el rey. La cara del cordero apunta para el evangelio de Marcos, aquí Jesús es visto
como el siervo. En Lucas, Jesús es apuntado como el hombre, el evangelio de Lucas
retrata Jesús como el hijo del hombre. Por fin, el evangelio Juan lo muestra como el
hijo de Dios que descendió del cielo, eso es representado por la cara del águila.

Los seres vivientes también son un símbolo de una espiritualidad integral, revelan la
vida de aquellos que viven delante del trono. La cara del león simboliza fuerza y
ferocidad. La cara del cordero nos habla de trabajo y sacrificio, la cara del hombre, la
inteligencia y la cara del águila apunta para la visión y objetividad.

No es difícil encontrar personas con una de estas características individuales


específicas, lo difícil es encontrar alguien que consiga equilibrar estas cuatro
dimensiones en sus vidas.

Es necesario la fuerza del león y el sacrificio del cordero, es difícil equilibrar la fuerza
y la debilidad, es paradójico: Dios usa al débil, sin embargo rechaza la debilidad.
¿Qué significa eso? Dios usa aquél que es débil delante de Él, pero que es fuerte
delante de los hombres y del diablo. La inversión de estos valores es el problema:
generalmente somos fuertes delante de Dios y débiles delante de los hombres.

¿Cómo puede ser alguien fuerte delante de Dios? Fuerte es aquél que consigue
guardar rencor por meses y años, es gasto de energía es inimaginable, fuerte es
aquél que consigue pecar y esconderse de Dios, fuerte es aquél que consigue tener
117

problemas con alguien por días y no resolver, normalmente quien es fuerte así es
débil delante de los hombres, porque siempre busca la piedad del otro.

Jacob luchó con Dios y salió descoyuntado, mas el Señor dijo que su nombre sería
“Israel, aquél que luchó con Dios y prevaleció”. Extraño, porque a la verdad Jacob
había perdido la lucha al salir lesionado. Esa es la victoria: perder para Dios. Quien
pierde para Dios gana al diablo, pero aquél que le resiste, inevitablemente pierde la
batalla para el enemigo. Ser débil delante de Dios es depender de Él y declarar que
sin su fuerza no hacemos nada. Débil delante de los hombres es aquél que cede
delante de cualquier trampa, que tiembla delante de la batalla y retrocede por causa
de la oposición; ese no sirve para Dios, necesitamos tener disposición para el
sacrificio como el cordero y también asociarla a la inteligencia con la vida espiritual,
simbolizada por la cara del hombre. Espiritualidad no es sinónimo de ceguera e
incapacidad de explicar la propia fe; por el contrario, los que están delante del trono
renuevan sus fuerzas como las águilas (Is.40:31). Que apuntan para la objetividad y
la visión. Aquellos que sirven al Señor deben tener una vida espiritual que tenga
rumbo y propósito. Para ellos, las cosas no suceden simplemente, sino en función
de un propósito. Esa es la visión del águila.

El águila es el ave que mira más lejos, es capaz de ver una cobra rastreando en un
peñasco a cinco kilómetros de distancia, el águila es un ave que caza la cobra; sin
embargo no es cazado por ella. Ella viene de arriba y cae exactamente donde está la
víbora. Esas cuatro caras traducen el carácter de aquellos que viven delante del
trono, ellos poseen la fuerza del león, la disposición al sacrificio del cordero, la
inteligencia del hombre y la visión del águila.

La ultima y más importante característica de los seres vivientes es la adoración


continua, esos seres vivientes proclaman continuamente “santo, santo, santo es el
Señor Dios Todo poderoso, aquél que era, que es y que ha de venir”. En el cielo ellos
son revestidos de funciones sacerdotales, el hecho de proclamar continuamente la
santidad del Señor indica que el trono se asocia a la santidad. Los que están delante
del trono son como Él, igualmente santos. Al mencionar santo tres veces y en tres
verbales se prueba la Trinidad y eternidad de Dios y sin duda indica la inmutabilidad
de Dios: el eterno Yo Soy. Puede todavía apuntar para el que ha de venir, o sea, la
dimensión de vuelta de Jesús. La vuelta del Señor debe ser algo vivo en nosotros, es
imprescindible amar la venida del Señor (2 Tm.4:8).

La Biblia hace alusión al nombre apenas de tres ángeles: Miguel, Gabriel y Lucifer.
Cada uno de ellos es mencionado en una circunstancia especifica, a saber: Judas
relata que Miguel contendía con Lucifer por causa del cuerpo de Moisés. Miguel es
un arcángel asociado a la guerra. El otro ángel citado en la Biblia es Gabriel, él es
quien trajo la respuesta de la oración a Daniel, y ciertamente fue él quien visitó a
Zacarías para avisarlo del nacimiento de Juan el Bautista, como también a José para
118

hablar del nacimiento de Jesús; por tanto, Gabriel es el ángel asociado a la entrega
de mensajes.

El tercer ángel es Lucifer que aparece en Isaías, donde su nombre es traducido


como brislante estrella de la mañana (Is.14:12). Se sabe que se tornó diablo y
Satanás. Ezequiel afirma que ese ángel era un querubín encargado de algo en el
cielo, era el arcángel de la adoración. Eze 28:13 En Edén, en el huerto de Dios estuviste;
de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio, jaspe, crisólito, berilo y
ónice; de zafiro, carbunclo, esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y flautas
estuvieron preparados para ti en el día de tu creación.

Soberbio, él quiso ser igual a Dios, impresionado con la propia belleza, se olvidó de
su posición envidiándolo y buscando ser como Dios.

Había tres ángeles con posiciones de destaque en el cielo, como si fuesen misterios,
uno era ministro de guerra, el otro encabeza el ministerio de las comunicaciones, el
tercero era responsable por la adoración, pero este cayó. Hay un espacio vago en el
gobierno celestial; por eso, Jesús dice en el capítulo cuatro de Juan que Dios busca a
la verdad, desde entonces Él esta buscando adoradores que adoren en espíritu y en
verdad. Esta es la razón porque Dios creó al hombre para la alabanza de su gloria,
había un propósito especial en la creación del hombre. Fuimos llamados para la
adoración, nosotros recibimos el ministerio sacerdotal.

Los seres vivientes están proclamando constantemente la santidad de Dios y lo


hacen día y noche. Mientras su adoración es limitada, en cuanto la nuestra será
perfecta, porque conocemos a Dios más que los ángeles. Nosotros conocemos algo
de Él que los ángeles nunca probaron: su gracia. En el cielo contaremos a los
ángeles a respecto de la maravillosa gracia de Dios que nos fue destinada.

3. Los veinte y cuatro ancianos.

La interpretación pre-tribulacionista interpreta el primer versículo del capítulo


cuatro como siendo el momento del arrebatamiento de la iglesia. La expresión
“sube aquí” de Apocalipsis 4:1 es tomada como refiriéndose a toda la iglesia y los
veinte y cuatro ancianos registrados en ese capítulo son tenidos como símbolos de
la iglesia glorificada; eso es forzar demasiadamente el texto, pues la expresión sube
aquí se refiere tan solamente a Juan y no a toda la iglesia, lo que sería algo extraño
al texto, claramente se ve la persona de Juan en foco allí.

Definitivamente, esa hermenéutica está en desacuerdo con la Biblia y con la lógica,


observe que en el capítulo cuatro todo es literal. Juan está de hecho, viendo un
trono con un arco iris, un mar de vidrio, con multitud de ángeles, cuatro seres
vivientes y las siete tochas. Todo es una descripción literal. ¿Por qué apenas los
119

veinte cuatro ancianos serían simbólicos? Ellos no simbolizan la iglesia la iglesia


glorificada por los siguientes motivos:

a. En primer lugar, veinte y cuatro no es el número de la iglesia, solo se puede


considerar el siete y sus múltiplos; como por ejemplo, las siete iglesias del
Asia.
b. En ningún la palabra de Dios se refiere a los ancianos para simbolizar la
iglesia. La iglesia es novia, familia, cuerpo, labor, jamás anciano.
c. Ellos están sentados en tronos y usan coronas de oro en sus cabezas. La
iglesia no puede ser glorificada antes de Cristo.
d. Hay quien argumente que los ángeles no poseen coronas, todavía Miguel es
llamado de príncipe (Dn.10:13, 21, 12:1). El símbolo de la corona es la realeza y
Miguel siendo príncipe puede poseer una corona.
e. Se ve claramente que los ancianos nunca experimentaron la redención. El
cántico de ellos es el de la creación (4:11) y en 5:9-10, ellos cantan a respecto
de la salvación de la iglesia y no su propia.
f. En el capítulo 5:8, los ancianos traen las oraciones de los santos. ¿Cómo es
posible la iglesia traer la oración de la propia iglesia si los ancianos
representan la iglesia? Eso torna el texto completamente sin sentido.
g. ¿Si los ancianos representan la iglesia, como puede ella conocer a si misma?
En 7:13, uno de ellos pregunta a Juan ¿los que se visten de vestiduras blancas,
que son y de donde vinieron? Le respondí: mi Señor, tú lo sabes. Él entonces
me dijo: ellos son los que vienen de la gran tribulación, lavaron sus vestiduras
con la sangre del cordero (Ap.7:13-14). Es incoherente la iglesia preguntar
sobre la propia iglesia como si no reconociese.
h. En el propio verso 14, Juan llama el anciano del Señor. Si ellos representan a
la iglesia y Juan siendo uno de los principales apóstoles, él sería un anciano
de los ancianos (7:14).
i. Algunos dicen que los ancianos no pueden ser ángeles porque los ángeles no
envejecen. ¿y Dios envejece? Mientras que en Daniel, Él es llamado de
anciano de días (Dn.7:9, 13, 22).
j. No podemos decir que los veinte y cuatro ancianos son simbólicos, ellos son
literales, es cierto que Juan conversó con ellos. Jamás alguien dialoga con
alguien que es simbólico en la Biblia; eso tornaría la comprensión de la
palabra de Dios imposible, pues nunca sabríamos cuando los personajes son
reales o simbólicos.

En el capítulo 4, todos los personajes son literales: el que está en el trono, Jesús, los
ángeles y los seres vivientes. ¿Por qué apenas los veinte y cuatro ancianos habrían
de ser figurados? Ellos son por tanto, los gobernantes del universo, autoridades
sujetas al trono. No son apenas ángeles, sino una categoría más alta de ellos porque
120

están sentados alrededor del trono y cada uno posee también un trono y una
corona.

Existe uno que está sentado en el trono, alrededor de él existen más veinte y cuatro
igualmente sentados en tronos con coronas en la cabeza y que viven y reinan en el
nombre de Dios. Los veinte y cuatro ancianos son los primeros de la creación divina,
la ancianidad de ellos lo comprueba. Antes de la creación del hombre, fueron ellos
creados por Dios con el fin de gobernar el universo y actualmente lo están
gobernando, el hecho de tener coronas y estar sentados en tronos justifica tal
afirmación. Todavía ellos gobiernan bajo el poder y la sujeción al trono de Dios. La
palabra afirma que esos 24 ancianos se postran delante de Él.

No apenas se postran delante de Dios, sino también entregan sus coronas delante
de Él, ceden el espacio de su trono. Tal hecho sucede porque está próximo el día en
que asumiremos esta posición. Dios desea que hombres creados a su imagen y
semejanza, portadores de su naturaleza, engendrados de su simiente, sus hijos y
herederos, reciban las coronas de su herencia. Esos 24 ancianos se curvarán delante
del Señor para entregarlas, y Él lo hará porque el tiempo del gobierno de ellos ya se
cierra, lo nuestro apenas está comenzando. Somos los herederos del trono y del
reino, en fin tomaremos sus lugares en el gobierno del universo, administraremos el
universo junto con Dios, los ángeles serán a la verdad nuestros siervos. Yo se que
muchos desean ver ángeles, pero son ellos que desean mucho conversar con
nosotros, ellos es que se van a someter a nosotros. Estamos hoy en posición inferior
a los ángeles por causa de nuestra limitación de nuestra naturaleza humana, llegará;
sin embargo, la hora que esa inferioridad momentánea acabará y nosotros seremos
tal cual el Señor es.

Para ejercer la justicia y el gobierno de Dios, ellos deben estar vestidos de blanco,
vestidos de blanco en la Biblia simboliza justicia y verdad.

Ap. 4:11 Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas
las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas.

Esos ancianos viven en función de la creación y por causa de ella adoran a Dios, de
esta manera el cántico de ellos es el cántico de la creación. En un sentido amplio,
ellos tipifican a todos los que ejercen autoridad. Vestidos de blanco muestran que
nos es posible ejercer autoridad del Señor como representarlo sin verdad y justicia.

Ellos depositan las coronas delante del trono en reconocimiento a Dios como fuente
de poder y autoridad, además de eso se postran cada vez que los seres vivientes
dan gloria a Dios. Solo queda de pie delante del trono, aquél que está postrado en
rendición.
121

El cordero y el libro sellado


El libro de Apocalipsis posee una estructura muy sencisla, el capítulo primero
introduce la visión del Cristo glorificado. El segundo y el tercero hablan al respecto
de la iglesia, es compuesto por las cartas a las siete iglesias. El cuarto capítulo trae la
revelación del trono de Dios y del quinto al décimo primero, se tiene la consumación
del propósito divino en la forma de siete sellos, siete trompetas y siete Copas.

En el séptimo sello existen siete trompetas y dentro de la séptima trompeta existen


siete Copas. Todo se consume en el final del cap. 11, del capitulo 12 hasta el final se
ve una explicación más detallada de algunos hechos y personajes mencionados en
los capítulos anteriores. Se trata de una estructura fácil de entendimiento. Son siete
sellos, en el último de ellos hay siete trompetas. En la séptima se tienen siete Copas.
Esa es la estructura básica del Apocalipsis.

a. El misterio del gobierno de Dios – 5.1

Juan en ningún instante habla el nombre de Dios, apenas hace mención a alguien
sentado en el trono. Naturalmente el que está sentado en el trono es Dios y en su
mano derecha, Juan ve el libro escrito por dentro y por fuera, sellado con siete
sellos. La mano derecha en la Biblia es la mano de poder que indudablemente habla
de finalidad y propósito. El que está en su mano derecha significa su finalidad y su
122

propósito. Cristo está sentado a la diestra del padre exactamente porque todo el
objetivo de Dios se cumple en Cristo Jesús y por medio de Él.

El libro tiene dos significados: es el libro de la redención y del propósito de Dios


oculto desde siglos y de las generaciones, era una costumbre antigua, antes de la
muerte de alguien escribirse su testimonio en la presencia de siete testigos que
sellaban el libro hasta la muerte del testador. El testamento es la voluntad del
testador; sin embargo, en ese caso, Dios que es el testador, no puede morir y nadie
fue hallado digno de abrirlo.

Ese libro es un testamento, un documento de herencia, ¿siendo escrito por Él y


sellado por Él, quien podría abrirlo? Una vez que solo puede ser abierto con la
muerte del testador y Dios como testador jamás muere, surge un enigma sellado.
Esa fue la causa del lloro de Juan. No había alguien cualificado, a nos ser Jesús que
es Dios que probó la muerte adquiriendo con eso el derecho legal de abrirlo.

Jesús es Dios y cuando se hizo hombre, probó la muerte y con ese desenlace, el
testamento ahora puede ser abierto una vez que el testador murió. Dios por si
mismo no puede morir; Cristo Jesús probó la muerte y ahora el libro puede ser
conocido. Ese libro apunta también para la redención de la tierra y del hombre. El
libro de Levítico explica la redención o el rescate.

En la ley de Moisés, había una ley específica que se relacionaba con la tierra y con la
propiedad. Después que el pueblo entró en la tierra prometida, ella fue dividida
entre las tribus y en cada tribu las familias recibieron un pedazo de tierra. Aquella
parte de tierra de una tribu debería permanecer con aquella tribu en el recorrer de
las generaciones, Dios pretendía con esa medida preventiva impedir el
empobrecimiento, la excesiva concentración de riquezas y tierras por una persona o
por un pequeño grupo de individuos.

Cuando alguien se empobrecía en Israel y no tenía condiciones de mantenerse, la


única opción era vender su tierra, pero aquél que la compraba, sabía que no estaba
adquiriendo una pose definitiva, simplemente arrendaba la tierra. A cualquier
momento un miembro de aquella familia podía levantarse económicamente y
tendría el derecho de recuperar su propiedad. En el caso, él sería el pariente
rescatador.

Cuando alguien iba vender su propiedad, se tomaba un libro y eran escritas todas las
características, las dimensiones, las divisas, todo lo que había en aquella propiedad y
las condiciones en las cuales aquella transacción había sido hecha, era sellado en la
presencia de los jueces, y si un día uno de los familiares quisiese recuperar la tierra,
él pagaría el valor y tomaría del juez el libro sellado.
123

Apocalipsis trata de esos derechos y obligaciones. En las manos de Dios, el juez de


toda la tierra, está el libro de la pose y escritura, pues la tierra fue perdida por el
hombre en el Edén. Como un testamento aquel libro solamente puede ser abierto
por Jesús, el hijo de Dios. Mientras como libro de la redención, solo puede ser
abierto por un pariente cercano. Al tornarse hijo del hombre, Jesús se calificó para
adquirir lo que el hombre había perdido. Jesús nos rescató y el libro de la propiedad
puede ser abierto por el juez porque tenemos un pariente que puede quitar la
deuda.

b. No se halló ningún digno – 5.2-7

Juan lloraba porque “ni en el cielo ni en la tierra, nadie podía abrir el libro, ni mismo
mirar” para abrir el testamento era necesario alguien que hubiese pasado por la
muerte y resurgido. Para abrir el libro de la redención era imprescindible un
rescatador que fuese alguien completamente sin pecado y completamente
aprobado. Los requisitos eran demasiadamente altos, por eso Juan lloraba.

Mas uno de los ancianos se acerca a Juan y le dice: “no llores, el león Judá, la raíz de
David, venció para abrir el libro y sus siete sellos” (v.5). no había alguien apto para
desvendar el misterio del propósito de Dios y realizar la redención.

El Señor cumple su propósito, desde la eternidad Él planeó tener al hombre. El


pecado hizo con que momentáneamente su deseo fue postergado. El Señor Jesús
vino para que el eterno propósito de Dios pudiese concretizarse, el contenido del
libro; por tanto, es la nueva alianza. La nueva alianza es una obra que aborda la
redención y el propósito de Dios para con la iglesia, Israel, el mundo y el universo.

El libro que está en las manos de Dios es el de la alianza, contiene el cumplimiento


de la redención y del propósito divino. Nadie podía abrirlo, no había alguien digno;
sin embargo, el Señor Jesús lo hizo porque Él es el león de la tribu de Judá. El ángel
habló de león, pero Juan vio el cordero. Cuando el Señor es retractado como el león,
el objetivo es mostrarlo como guerrero fuerte contra el enemigo. El anciano
proclama: “Juan no llores, porque el león de la tribu de Judá venció”. Juan
inmediatamente paró de llorar, limpió los ojos, miró de nuevo para el trono, solo
que no vio un león. La Biblia dice que rodeado por ancianos y en el medio del trono
había un cordero (v.5-6). Jesús es llamado de león, pero Juan vio un cordero. Hay
dos problemas en el universo: el diablo y el pecado. Como león, Jesús resolvió el
problema del diablo y como cordero, Él solucionó el problema del pecado. Jesús
obligatoriamente tenía que ser león y cordero.

¿Quién es Él? Él es león y Él es el cordero. Es león porque en la Biblia simboliza


fuerza, majestad y realiza, es el león de la tribu de Judá porque pisó en la cabeza del
diablo. Pedro enfatizó que “Satanás anda a nuestro alrededor, rugiendo como un
león, buscando a alguien para devorar” (1Pe.5:8), pero Satanás es un león sin
124

dientes, no es un verdadero león. Solo hay un verdadero león: el león de la tribu de


Judá, Él se conserva a nuestro lado rugiendo para Satanás.

Para el enemigo, Él es el león, para nosotros es el cordero. Mismo que los ángeles
no necesitan de redención, necesitan de alguien para derrotar el enemigo de Dios;
pues uno de ellos se tornó enemigo. Fue un ángel que proclamó que Él es el león,
porque los ángeles saben que hay un problema en el universo: la caída de Satanás.
Los ángeles saben que alguien del tipo de ellos, de su especie, otro ángel, se tornó
enemigo del Señor; por tanto, los ángeles saben que era necesario que alguien se
levantase para derrotar ese enemigo de Dios. Ningún otro ángel era digno, sino el
león de la tribu de Judá lo venció.

Jesús, como el león de la tribu de Judá, es el cumplimiento de la profecía de Jacob:

Gen 49:8 Judá, te alabarán tus hermanos;


Tu mano en la cerviz de tus enemigos;
Los hijos de tu padre se inclinarán a ti.
Gen 49:9 Cachorro de león, Judá;
De la presa subiste, hijo mío.
Se encorvó, se echó como león,
Así como león viejo: ¿quién lo despertará?
Gen 49:10 No será quitado el cetro de Judá,
Ni el legislador de entre sus pies,
Hasta que venga Siloh;
Y a él se congregarán los pueblos.

En Apocalipsis 5, el Señor es el león de la tribu de Judá, es el cordero que había sido


muerto y también es la raíz de David. ¿Qué significa la raíz de alguna cosa? Significa
que Él es el origen. Todos nosotros sabemos que Jesús es la descendencia de David,
pero aquí se dice que Cristo es la raíz de David, indicando que David es proveniente
de Él: “el león de la tribu de Judá, la raíz de David, venció para abrir el libro y los
siete sellos” (v.5). por otro lado, la Biblia también dice que Cristo es el renuevo de
David indicando que Él también vino de David. “Isa 11:1 Saldrá una vara del tronco de
Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces.”

David fue el hombre que obtuvo el testimonio de agradar el corazón de Dios, él fue
llamado del hombre conforme al corazón de Dios (Hech.13:22). Abraham fue
llamado de amigo de Dios (Stg.2:23), David; sin embargo, tuvo un título más íntimo.
Jeremías profetizó:

Jer 23:5 He aquí que vienen días, dice Jehová, en que levantaré a David renuevo justo, y
reinará como Rey, el cual será dichoso, y hará juicio y justicia en la tierra.

En Apocalipsis, Jesús es la raíz de David. ¿Cómo conciliar esas dos cosas? El renuevo
brota cuando se corta un árbol y queda solo el tronco. El renuevo es el renacimiento
125

del árbol. Jesús es la raíz por un lado y por otro es el renuevo, Jesús es el originador,
de ese modo es Aquél que debería venir. Como raíz de David es el hijo de Dios como
el renuevo, Él es el hijo del hombre. Es por eso que Él es el alfa y la omega, el
principio y el fin. Él es la raíz y también Él brotó y que está creciendo donde parecía
no haber más vida.

Ese es nuestro Dios, Aquél que hace surgir vida donde no era posible haberla de
ninguna forma. Juan vio un cordero en medio del trono, un cordero como haber
inmolado recientemente (v.6). Eso indica que esa escena en el cielo sucedió luego
después de la ascensión de Jesús. El Señor Jesús murió en la cruz y al tercer día
resucitó, después de haber quedado algunos días en la tierra con los discípulos, Él
ascendió a los cielos, donde Juan vio esa escena: un cordero como haber sido
muerto recientemente.

Si loa ángeles tenían un problema, nosotros los hombres también tenemos,


nosotros caímos delante de Dios, la humanidad cayó en el pecado y está alejada de
Él. Necesitamos de la redención y de ser redimidos. ¿Y quién hizo eso? El cordero de
Dios que saca el pecado del mundo. Para el diablo Él es el león, para nosotros es el
cordero; por tanto, no tenga prisa en decir quien es Jesús, Él es león y el cordero, el
suplemento perfecto para todo lo que necesitamos, como león, Él nos da la victoria
sobre el diablo; como cordero, nos lava de todo pecado y nos libra de toda
condenación.

El Señor JESÚS no es un cordero común, Él es el cordero con siete cuernos que


representan fuerza, el hecho de ser siete representa la fuerza completa o plena;
mismo que haya sido muerto recientemente, Él posee fuerza para subyugar
(Dt.33:17).

El cordero que Juan vio no es natural, usted jamás encontrará un cordero como este
en ninguna parte. La palabra dice que ese cordero tenía siete cuernos y siete ojos.
¿Usted ya vio un cordero con cuernos? Sólo el cordero de Dios.

El número siete representa perfección o plenitud, mientras que el cuerno en la Biblia


significa poder. El hecho de tener siete cuernos significa que Él tiene todo el poder o
poder completo. El dijo: toda la autoridad me fue dada en el cielo y en la tierra
(Mt.28:18). No sobró ninguna autoridad para el enemigo, además de siete cuernos,
el cordero posee también siete ojos, los siete ojos son los siete Espíritus de Dios
(Zc.3:9, 4:10). Los ojos de Cristo son para escudriñar y juzgar, son como faroles, todo
lo que mira, también iluminan. Los ojos son la expresión de cualquier persona, así
los ojos de Cristo lo expresan; sabemos que los siete ojos de Cristo son los siete
Espíritus de Dios. De ese modo, el Espíritu es la expresión de Cristo. El Espíritu Santo
es quien revela y expresa a Cristo, Él está sobre el Señor de una manera completa e
intensificada.
126

Él habita hoy en su iglesia y habitando en nosotros hoy, construye la imagen de


Cristo. El Espíritu Santo nos fue dado como iglesia para que podamos cumplir el
propósito original de Dios: ser la exacta imagen y semejanza del Señor Jesús; eso es
lo que significa los siete Espíritus que también son siete tochas que están ardiendo
delante del trono de Dios. Como los ojos del cordero, Él es como farol, donde mira
ilumina; no hay tinieblas delante de Él, no hay nada que le sea oscuro u oculto.

c. La adoración de los ángeles en el cielo – 5.8-10

Nosotros substituiremos esos ancianos angélicos como sacerdotes y reyes del


universo, el hecho de tener las Copas muestra que ellos nos ayudan en nuestras
oraciones; cuando nosotros oramos de forma prevaleciente, tales oraciones llenan
las Copas y entonces los ancianos devuelven estas oraciones mescladas con
incienso sobre la tierra y hay relámpagos, voces, truenos y terremotos. Los ángeles
son mensajeros que ejecutan las órdenes de Dios, pero el trabajo de ellos depende
de nuestras oraciones. Observe que en sus cánticos, en el verso 10, ellos dicen “los”
mostrando que no hacen parte de la iglesia.

d. La alabanza a Dios y al cordero – 5:11-14

Ap. 5:9 y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro y de abrir
sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de
todo linaje y lengua y pueblo y nación;
Ap. 5:10 y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la
tierra.

Aquí son los ángeles que están cantando y ellos están cantando a nuestro respecto,
el Señor abrió el libro y con su sangre compró para Dios los que proceden de toda
tribu, lengua, pueblo y nación. Esos que Dios compró también constituyeron reino y
sacerdotes, imagen y semejanza, vasos e instrumentos.

Cuando creó el hombre, Dios lo creó con un propósito y el libro que está en la mano
derecha de aquél que está en el trono contiene ese propósito que se cumplió en
Cristo. El objetivo de Dios es que Adán fuese rey sobre la tierra. Como rey, Dios
quería él dominase y sujetase la tierra. Mas Dios deseó que Adán fuese sacerdote
para expresarlo en su imagen y semejanza de tal manera que quien mirase para
Adán viese a Dios en él y en sus descendientes. La voluntad del señor es más que
nuestra salvación, Él no murió solo para salvarnos, murió para que propósito
pudiese ser cumplido. Necesitamos predicar un evangelio más profundo que
simplemente decir a las personas que vengan para el Señor para tener paz,
descanso, prosperidad, cura y liberación. Esas cosas son buenas y vitales, pero hay
algo más, necesitamos predicar el evangelio del plan y de la voluntad eterna de
Dios, el evangelio del reino. Necesitamos enseñar que Dios quiere hacer de nosotros
127

su imagen y semejanza para que seamos su expresión sobra la tierra. Ese el reino:
imagen y semejanza para ser reyes y sacerdotes.

Ap. 5:11 Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono, y de los seres vivientes,
y de los ancianos; y su número era millones de millones.

Busque construir toda la escena en su mente. Hay un trono, su apariencia es de


piedra de jaspe y hay un arco iris alrededor, a su alrededor hay veinte y cuatro
tronos y en ellos están sentados veinte y cuatro ancianos, además de cuatro seres
vivientes. Delante del trono hay un mar de vidrio mesclado de fuego y siete tochas
ardiendo continuamente. Se percibe también un cordero como que había sido
muerto en medio del trono y delante de esa escena, los ángeles están llegando, son
millones y millones todos juntos en un ambiente solemne delante del trono de Dios.
Toda esa multitud está cantando y del trono todavía salen voces, relámpagos y
truenos que rebumban estremeciendo los cielos. El cielo está reunido aquí, porque
el cordero de Dios, el que fuera muerto, resucitó y ahora está entrando por los
portales celestiales.

La escena del capítulo cinco aconteció luego después de la resurrección de Jesús y


su ida a los cielos. Nosotros tenemos aquí querubines, serafines, seres angelicales,
seres vivientes y Dios sentado en el trono con el libro en su mano derecha. Mas de
repente surge el cordero, el que fue muerto recientemente. Él está entrando por los
portales celestiales y viene para hacer la redención eterna, Él es considerado digno,
viene y toma el libro de las manos de Dios; el misterio divino no se encuentra más ni
oculto ni sellado, el león de la tribu de Judá venció y abrirá el libro.

Cuando el cordero toma el libro “los millones de millones” cantan y proclaman en


gran voz:

Ap. 5:12 que decían a gran voz: El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las
riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza.

Con todo, la redención no existe apenas para el hombre, ustedes se juntan ahora en
ese inmenso coro celestial, es la creación que aguarda la manifestación de los hijos
de Dios (Rm.8:19-22).

Ap. 5:13 Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en
el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al
Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.

Juan está traduciendo algo que él oyó en el mundo espiritual, está diciendo que
todo ser, toda criatura, todos los mamíferos, réptiles, aves, estaban cantando juntos
con todos los seres celestiales. Esa es la solemnidad de la abertura de los sellos que
compartiremos en el próximo capítulo.
128

Los siete sellos


Hay una escena en el cielo, el libro que estaba en la mano de Dios fue tomado por el
cordero de Dios que ahora está sacando los siete sellos. Los cuatro primeros son un
grupo y los otros tres forman otro. Esos cuatro sellos todavía no representan la gran
tribulación. Antes de la vuelta del Señor Jesús, habrá un periodo llamado de la gran
tribulación con duración de tres años y medio o 1260 días. Ese periodo solo
comenzará en el séptimo sello, el sexto sello es el inicio de los dolores y el anuncio
del día del Señor que efectivamente aconteció en el séptimo sello.

Dentro del sello existen siete trompetas, ellas son el contenido del séptimo sello y
constituyen la gran tribulación. En la última trompeta tenemos las siete Copas que
son la descripción del juicio de Dios sobre el reino del anticristo. La séptima
trompeta marca el final de esa era y la vuelta de Jesús. Cuando el ángel toque la
última trompeta, los muertos resucitarán y los que estuvieren vivos serán
arrebatados para que se encuentren con el Señor en los aires. Solo Dios sería el
autor de tal obra, es fascinante ver como su estructura es sencisla y al mismo
tiempo misteriosa.

Aquel libro que estaba en la mano de Dios padre y que nadie podía abrir y ahora
abierto por el cordero, contiene la historia del gobierno de Dios, de la ascensión de
129

Cristo hasta su vuelta. En un cierto sentido es la propia obra de Apocalipsis a partir


del capítulo cinco. Los primeros cuatro sellos son anunciados por los cuatro seres
vivientes que simbolizan la creación. Esos primeros cuatro sellos consisten en una
corrida de cuatro caballos y sus caballeros. Los caballeros no son personas reales,
sino cosas personificadas. El primer caballero es el evangelio, el segundo la guerra,
el tercero el hambre y el cuarto la muerte. Después de la ascensión de Cristo, esas
cuatro criaturas comenzaron a correr el mundo y continuarán hasta su vuelta.

El primer sello – 6.1-2


Los cuatro primeros sellos revelan la historia de la humanidad desde el día en que el
Señor resucitó hasta el día de su vuelta, ellos resumen la historia de la humanidad;
no son apenas profecías, sino son un retrato de la propia historia de la humanidad
en esos dos mil años. Los cuatro sellos son los cuatro caballeros recorriendo toda la
tierra, desde el día en que el Señor fue llevado a los cielos hasta el día en que Él
vuelva. Hoy mismo están andando como hicieron en los últimos dos mil años.

Ap. 6:1 Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes
decir como con voz de trueno: Ven y mira.
Ap. 6:2 Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue
dada una corona, y salió venciendo, y para vencer.

Luego que el primer sello fue abierto, uno de los cuatro seres vivientes, cuya voz era
semejante al del trueno “ven”. Inmediatamente surgió un caballo blanco como un
caballero armado de un arco, al cual fue dada una corona.

El caballo blanco simboliza la proclamación del evangelio, ese caballero es el


evangelio predicado por la iglesia, que salió venciendo y para vencer; eso significa
que en esos dos mil años el evangelio nunca dejó de ser predicado. En los últimos
dos mil años, la iglesia hace parte de la historia y no hay como contar la historia de la
humanidad sin hablar de la iglesia; si el Señor no vuelve antes y el hombre consigue
morar en la luna, allí también usted encontrará un grupo de hermanos cantando
himnos. Mientras que el Señor no vuelva, la iglesia no pasará, es por eso que ese
caballero salió para vencer, además es el único que salió para ese fin.

Todo lugar donde el evangelio llega, prevalece. Nadie puede resistirlo ni detenerlo.
Lenin pasó, Marx pasó y Mao-Tse-tung también. El muro de Berlín cayó por tierra y
el comunismo en Europa acabó. La iglesia sin embargo permanece, el evangelio
salió venciendo y para vencer.

El caballero tiene un arco en la mano, pero no tiene una flecha, porque la flecha de
ese arco ya fue disparada. En la cruz, el Señor Jesús la arremató y acertó el corazón
de Satanás derrotándolo. Nuestro enemigo fue vencido, en la cruz, Jesús distendió
130

el arco, disparó la flecha y triunfó sobre él. El evangelio es la proclamación de la


victoria del cordero de Dios.

El arco no tiene ninguna utilidad sin la flecha. Sin la flecha, el arco es un símbolo de
la paz, porque sin la flecha no hay guerra. En lugar de ella, el caballero recibió una
corona. Pablo dice que el evangelio es corona.

2Co 4:4 en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para
que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de
Dios.

El evangelio es la gloria de Cristo, corona en la Biblia simboliza la gloria, el evangelio


es coronado de victoria. Algunos quieren identificar aquí la persona del anticristo
que también posee coronas (Ap.13:1), pero eso no hace sentido, porque los otros
tres caballeros representan cosas: la guerra, el hambre y la muerte. Por una
cuestión de coherencia el primer caballero también necesita ser una cosa. Hasta la
vuelta del Señor, el evangelio siempre prevalecerá; eso significa que por más que
haya persecución y resistencia, la iglesia siempre estará aquí y el mensaje del
evangelio siempre será predicado.

El segundo sello – 6.3-4


Cuando el segundo sello fue abierto “salió otro caballero rojo y a su caballero le fue
dado poder para quitar la paz de le tierra para que los hombres se matasen unos a
los otros, también le fue dada una espada grande” el segundo caballero es la
guerra, el color rojo significa dos cosas: sangre y guerra. Quitar la paz de la tierra y
matar unos a los otros con una espada nos habla claramente de guerra. A este
segundo caballero fue dado el derecho de quitar la paz de la tierra, él parece estar
en oposición al primero que trae la paz a la tierra.

El Señor dijo que siempre habrá guerras en la tierra para quitar la paz de los
hombres. Desde la ascensión de Cristo hubo guerra y nunca hubo siquiera un
tiempo de completa paz en todo el planeta. Solo habrá paz en la tierra cuando el
príncipe de paz venga para establecer su reino, en todas las épocas hubo guerras.
No los encare como señal de la venida de Jesús, antes como evidencia del gobierno
de Dios en la historia. Las guerras acontecen porque está decretado en el gobierno
de Dios, el libro que estaba sellado y fue abierto por el cordero.

El tercer sello – 6.5-6


131

Cuando el cordero abrió el tercer sello, Juan vio “un caballo negro y su caballero con
una balanza en la mano”. Él tiene una balanza en la mano simbolizando carestía,
inflación y escasez de alimentos. La balanza es un instrumento característico de la
actividad comercial, particularmente de la venta de cereales. La balanza en este
contexto es el símbolo de la escasez y el caballo negro simboliza el hambre.

Hubo todavía una voz diciendo: “una medida de trigo por un denario, tres medidas
de cebada por un denario…” esas medidas simbolizan la inflación. Es apenas una
ilustración de la ley más conocida del capitalismo: la ley de la oferta y de la
demanda. Cuando la oferta de productos en el mercado es mayor que la demanda,
la tendencia de precios es bajar; por otro lado, cuando la demanda es mayor que la
oferta, los precios suben. “y no dañase el vino y el aceite” ellos son mencionados
para mostrar que son productos nobles, consumidos apenas por los ricos. En
tiempo de escasez, solo esas personas pueden seguir consumiendo el aceite y el
vino. La desigualdad social continuará existiendo hasta que venga el reino de Cristo,
nos es que Dios haya planeado o deseado este estado de cosas, mas la paz y la
igualdad solamente serán traídas por Cristo en su reino milenar.

El tercer caballero representa el hambre, es un caballero negro porque el color de


los hambrientos es oscuro. El libro de lamentaciones dice que el hambre produce
una apariencia oscura en las personas.

Lam 4:8 Oscuro más que la negrura es su aspecto; no los conocen por las calles;
Su piel está pegada a sus huesos, seca como un palo.
Lam 4:9 Más dichosos fueron los muertos a espada que los muertos por el hambre;
Porque éstos murieron poco a poco por falta de los frutos de la tierra.

Lam 5:9 Con peligro de nuestras vidas traíamos nuestro pan


Ante la espada del desierto.
Lam 5:10 Nuestra piel se ennegreció como un horno
A causa del ardor del hambre.

Las crisis económicas y el hambre están presentes en la historia en esos dos mil
años, vivimos hoy la época más abundante de todos los tiempos, nunca se plantó y
se cosechó tanto como en nuestras épocas; sin embargo, según la ONU, billones de
personas van a dormir todos los días como hambre. La historia de la humanidad es
la historia del evangelio, de las guerras y del hambre que siempre sigue la guerra, así
el caballo negro acompaña al caballo rojo.

El cuarto sello – 6.7-8


Ap. 6:7 Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente, que decía: Ven y mira.
132

Ap. 6:8 Miré, y he aquí un caballo amarillo, y el que lo montaba tenía por nombre Muerte,
y el Hades le seguía; y le fue dada potestad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar
con espada, con hambre, con mortandad, y con las fieras de la tierra.

El cuarto caballero es la muerte, en el original, el cuarto caballo tiene el color


amarillo de un cadáver.

El infierno es el Hades, el lugar donde están las almas de los condenados


aguardando el juicio del trono blanco (Ap.20:11-15).

No se debe confundir el infierno como el lago del fuego, el Hades es una prisión
provisoria, mientras la otra – el lago de fuego no queda lista. En el final, el propio
infierno será lanzado para dentro del lago de fuego.

Ap. 20:14 Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte
segunda.

La segunda muerte es el momento en que las personas que están en el infierno,


serán lanzadas en el lago de fuego. ¿Cuál es el tipo muerte provocado por el cuarto
caballero? De acuerdo con el versículo ocho, le fue dada autoridad sobre la cuarta
parte de la tierra para matar a espada, por el hambre, con la mortandad y por
medio de fieras de la tierra. Aquí, ciertamente se incluye las epidemias, las cuales
siempre existirán

En la edad media hubo la peste negra que disminuyó la población de Europa. En


1918 en el final de la primera guerra mundial, hubo una plaga mundial conocida
como la gripe española que en pocos meses provocó la muerte de millones de
personas.

Los cuatro caballeros están en plena actividad. El evangelio prospera siempre que
estas tres cosas suceden: guerra, hambre y calamidades. No nos gusta el hambre,
mucho menos de guerra y tampoco de tragedias. Pero hay que reconocer que las
personas buscan primero a Dios justamente en esos momentos de infortunios.

Esos caballeros están en una corrida y los tres últimos hacen con que el primero
venza, donde hay guerra, hambre o muerte, el evangelio es siempre es bien
sucedido. Todavía el primero tiene el poder de vencer los otros tres.

En Brasil en los últimos diez años, tal vez por causa de la crisis en que está la
economía: los asalariados están perdiendo su poder adquisitivo, el desempleo
rondando y noqueando los trabajadores, la desvalorización de la moneda, la
corrupción dilapidando los cofres públicos, la falencia de la educación, de la salud y
de la seguridad pública. Cuando la crisis presiona, las tradiciones caen por tierra; sin
un cuerpo saludable, sin dinero en el bolsillo y sin comida en el plato, no hay
tradiciones que se mantengan. El evangelio no puede impedir que los otros
133

caballeros cabalguen, pero por el poder del evangelio, la muerte, el hambre y la


guerra son anuladas por la autoridad en el nombre de Jesús.

El quinto sello – 6.9-11

A partir del quinto sello no hay más caballos ni caballeros; eso muestra que los siete
sellos están agrupados en dos grupos: uno con cuatro y otro con tres sellos. En la
palabra de Dios, el siete es normalmente la suma de tres más cuatro o de cuatro
más tres. El número cuatro simboliza la creación, es por eso que los cuatro primeros
están relacionados con la creación. Naturalmente los tres últimos sellos están
relacionados con el propio Dios.

El número tres simboliza la trinidad, el número de Dios. Esa combinación de tres


más cuatro significa el Señor relacionado con su creación; mientras que los cuatro
primeros sellos acontecen simultáneamente, los otros tres no son así, los tres
últimos son consecutivos. Los cuatro primeros sellos son cosas, los tres últimos son
acontecimientos.

Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por
causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían.
Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y
vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra?
Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo,
hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían
de ser muertos como ellos (Ap.6:9-11).

El quinto sello es el clamor se los mártires de la iglesia. En estos dos mil años, donde
que el evangelio se ha predicado, mislares y mislares de personas han sido
martirizados por causa del testimonio de Jesús.

Los primeros cristianos que llegaron a Brasil eran franceses. Registrada por la
historia oficial como un intento de invasión por Francia, la verdad, aquellos
franceses estaban huyendo de la persecución movida contra ellos por la inquisición.
Siendo Portugal un país católico, no permitía que ningún navío conduciendo herejes
protestantes aportase libremente en sus colonias. Los portugueses hundieron los
navíos franceses que entraron en el puerto del Rio de Janeiro, matando a todos sus
tripulantes y pasajeros. Además esos navíos ni eran navíos de guerra como registran
los historiadores católicos. Después de eso por más de doscientos años ningún
cristiano evangélico vino para Brasil.

El quinto sellos se refiere a los que fueron martirizados desde el primero siglo hasta
la vuelta de Jesús. El primer caballero que anunció el evangelio desencadenó el
martirio de los fieles santos. Sabemos que el mundo ya es del maligno y donde se
predica el evangelio, los poderes malignos son confrontados. Así que es un hecho,
134

que el evangelio confronta al infierno y hay una retaliación maligna, la retaliación


maligna es el martirio de los santos de Dios. La Biblia dice que esos mártires están
clamando debajo del altar de Dios, se trata de una referencia al alter del holocausto
que había en el tabernáculo en el templo de Salomón. Debajo del altar había un
recipiente para contener la sangre que caía de los animales que eran ofrecidos
como sacrificio.

De acuerdo con Levítico, la vida del hombre estaba en su sangre (Lv.17:11). Es por
eso que las almas de los mártires se encuentran debajo del altar que está delante de
Dios, simbolizando que también fueron derramadas delante de Él y aceptadas como
sacrificio vivo. Los mártires fueron sacrificados por causa del amor al evangelio y a
nuestro Dios, debido a eso, sus vidas están guardadas debajo del altar que está
delante del trono de Dios.

Después de haber guardado un largo periodo cerca hasta el fin de esta era, los
santos martirizados clamarán por venganza delante de Dios, y entonces vendrá el
día del Señor (16:6, 18:20, 24). El sexto sello, como veremos es la respuesta del
Señor a sus clamores.

Cada uno de los santos martirizados recibió una vestidura blanca, eso indica que el
sacrificio de ellos fue aceptado delante de Dios. Ellos deberían reposar hasta que el
número de ellos sea completo. Esa es una referencia a los que serán todavía
martirizados durante la gran tribulación (20:4).

Nota sobre el Hades. El Hades es dividido en dos partes: el paraíso y el infierno. El


paraíso es la parte agradable del Hades, es también llamado de Seno de Abraham.
Las dos partes del Hades son separadas, siendo una parte para los impíos y otra
para los santos.

Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y
murió también el rico, y fue sepultado.
Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en
su seno.
Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro
para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy
atormentado en esta llama.
Pero Abraham le dijo: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también
males; pero ahora éste es consolado aquí, y tú atormentado.
Además de todo esto, una gran sima está puesta entre nosotros y vosotros, de manera
que los que quisieren pasar de aquí a vosotros, no pueden, ni de allá pasar acá (Luc.16:22-
26).

Concluimos así que los fallecidos hoy están en dos lugares: los que mueren con
Cristo están en un lugar llamado como seno de Abraham o paraíso, y los que
mueren sin Cristo en el Hades o infierno. Son lugares relativamente cercanos y
135

concluye la narrativa: los que están de un lado pueden ver los otros. Apenas un
abismo separa el paraíso del infierno.

Surge la pregunta: ¿no hay nadie en el cielo ahora? No, pues todavía nadie fue para
el cielo. Entre tanto las personas que murieron sin Cristo ya están disfrutando de la
presencia de Dios en un lugar llamado seno de Abraham. El infierno es apenas un
espacio provisorio de tormento, el tormento final será en el lago de fuego donde el
propio infierno será lanzado después del juicio del trono blanco (Ap.20:4). Este local
queda muy probablemente en el centro de la tierra, pues Jesús dijo:

Mat 12:40 Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así
estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches.

Jesús murió y fue al paraíso como dice Lucas. Luc 23:43 Entonces Jesús le dijo: De
cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Pero al leer Hechos, descubrimos que Él fue al infierno también o al Hades (He.2:27).
Así, tanto el paraíso como el infierno están en una región que se puede llamar
genéricamente de Hades. Cuando morimos no vamos para el cielo todavía, sino para
el paraíso, solamente iremos para el cielo después de la resurrección. El paraíso es
también llamado del tercer cielo por Pablo.

2Co 12:2 Conozco a un hombre en Cristo, que hace catorce años (si en el cuerpo, no lo sé;
si fuera del cuerpo, no lo sé; Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el tercer cielo.
2Co 12:3 Y conozco al tal hombre (si en el cuerpo, o fuera del cuerpo, no lo sé; Dios lo
sabe),
2Co 12:4 que fue arrebatado al paraíso, donde oyó palabras inefables que no le es dado al
hombre expresar.

Así que el paraíso no sea todavía el cielo, ya es un ante gozo de la gloria celestial. Lo
que Pablo vio y oyó son cosas tan maravillosas que ni le era lícito referirse.
Evidentemente estaremos con Cristo después de nuestra muerte, como dijo Pablo:
Fp 1:23 Porque de ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar
con Cristo, lo cual es muchísimo mejor.

No podemos negar que hoy estamos con Cristo, naturalmente sin ese cuerpo
tendremos mayor mayo comunión con Cristo. Sin embargo solamente estaremos en
el cielo después de la resurrección cuando recibiremos el cuerpo glorificado. El
paraíso todavía no es el cielo.

1Ts 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta
de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
1Ts 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados
juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre
con el Señor.
136

Observa que estaremos con el Señor juntos para siempre solamente después de la
resurrección, antes de eso estaremos con Él, pero solamente en el paraíso.

El sexto sello – 6.12-17


Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro
como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre;
y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando
es sacudida por un fuerte viento.
Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se
removió de su lugar (Ap.6:12-14).

El sexto sello parece ser la respuesta de Dios al clamor de los santos martirizados y
marca el comienzo de las calamidades sobrenaturales que introducirán a la gran
tribulación. El sexto sello todavía no es la gran tribulación propiamente dicha, es tan
solamente el principio de los dolores, una advertencia a los hombres para que se
arrepientan y se vuelvan a Dios antes que venga el día del Señor, que es la gran
tribulación, Joel dice que habrá un señal en el cielo. Se trata del sexto sello:

Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y
vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones.
Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días.
Y daré prodigios en el cielo y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo.
El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande y
espantoso de Jehová (Joe.2:28-31).

Consecuentemente los señales descritos en el sexto sello son el cumplimiento de la


profecía de Joel, después de esas señales se inicia la gran tribulación, el día del
Señor. Podemos afirmar así que ella acontecerá efectivamente en los días del
séptimo sello. El séptimo sello incluye las siete trompetas.

Estas mismas señales descrito por Joel y que son vistos en el sexto sello, también
precederán la venida del Señor. Mat 24:29 E inmediatamente después de la
tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las
estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.
Mat 24:30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces
lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las
nubes del cielo, con poder y gran gloria.
Joel dice antes que venga del día del Señor, entre tato, Jesús dijo “luego después de
la gran tribulación”. El día del Señor es la gran tribulación. Concluimos entonces que
estas señales en el cielo deberán acontecer dos veces, una en el inicio de la gran
tribulación y otra en el final antes de la vuelta del Señor (Lc.21:25, 26).

El sol oscurecer, la luna quedar como sangre y las estrellas que caerán son señales.
La primera vez que esas señales acontezcan, sepa que si el arrebatamiento no
sucedió, estará en la inminencia de acontecer. La segunda vez sepa que Jesús está
volviendo. Espero que tú no estés más aquí en la primera vez que el sol se oscurezca
137

y la luna quede como sangre, porque esa será la señal del inicio de la gran
tribulación. Todavía no es la gran tribulación, sino es la señal de su inicio. De la
segunda vez, será el fin de ella, porque luego en seguida, Jesús vendrá en las nubes.

El verso 16 comenta: los hombres clamarán a los montes y a los rocas diciendo: “cae
sobre nosotros y escóndenos del rostro de aquél que está sentado en el trono y de
la ira del cordero, porque llegó el gran día de la ira de ellos…” el gran día de la ira es
la gran tribulación. Hombres clamarán intentando esconderse por causa de la
conciencia que los estará acusando delante de la presencia de Dios. Ellos sabrán que
aquellas señales son sobrenaturales.

Muchos hermanos quedan preocupados en contar cuantos terremotos,


inundaciones, huracanes, maremotos, incendios y otras calamidades ocurren a cada
año. No deberíamos quedar tan preocupados con esas cosas, pues desde que existe
el mundo, esas cosas acontecen. Ellos todavía no son la gran tribulación, pues ella
no será un tiempo de calamidades naturales las que ocurrirán en aquellos días,
serán sobrenaturales. Será algo tan terrible que la tierra no será un buen lugar para
vivir. El sexto sello; por tanto, es una advertencia y servirá de señal para la gran
tribulación propiamente dicha, que abarcará las siete trompetas incluidas en el
séptimo sello.
138

Los dos pueblos de Dios


Hay en mi corazón un anhelo por la vuelta del Señor Jesús, no que yo sea infeliz en
este mundo o esté viviendo en un momento ruin. El Señor es con nosotros, Él es
nuestro pastor, nos apacienta a cada día y cuida de nosotros, fui suplido, guardado
y protegido por su gracia. El Señor ha bendecido nuestro camino y nos prosperó
dándonos abundancia grande. Todo eso es bueno, pero quiero estar con Él, quiero
poder decir a cada día: Maranata, ahora ven Señor Jesús.

En el libro de Apocalipsis existen varios paréntesis y el capítulo es uno de ellos.


Observe que el séptimo sello es retomado en el capítulo ocho, el capítulo ocho es
de esa forma la continuación del capítulo seis. El sexto sello es una advertencia de
Dios a los hombres sobre la venida de la gran tribulación. Pero antes que eso ocurra,
Dios sellará sus dos pueblos: los judíos y la iglesia.

El capítulo siete, se divide en dos partes: del uno al ocho se refiere a Israel, y del
versículo nueve hasta el final, a la iglesia. Israel y la iglesia son dos pueblos que el
Señor constituyó como su posesión; a pesar de la rebeldía de Israel, Dios va tratar
esa nación por amor a Abraham y a la alianza formada con él. El Señor trata de
maneras distintas Israel y la iglesia. Antes de la gran tribulación, los judíos serán
marcados, a pesar de eso solo la iglesia será arrebatada.

1. Los 144 mil sellados de Israel – 7.1-8


139

Ap. 7:1 Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra,
que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la
tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol.

Ese viento es el viento de los juicios de Dios, el viento en principio representa la


acción del Espíritu Santo de Dios. Hay circunstancias en que el viento nos habla del
juicio de Dios. Hay muchos lugares donde el viento simboliza juicio como en Jonás
1:4, Isaías 11:15, Éxodo 15:10, Jeremías 49:36 y 51:1

Los ángeles y los vientos son cuatro y apuntan para la creación y el mundo,
recuérdese que el número cuatro apunta para el mundo creado.los cuatro vientos
denotan los cuatro puntos cardenales, el Señor manda que los ángeles guarden
hasta que todos los siervos de Dios sean sellados. A partir del séptimo sello, hay el
inicio de la gran tribulación. Mas antes de abrir el séptimo sello, el Señor hace algo
muy serio: Él manda marcar a todos aquellos que son de Él. Durante la gran
tribulación será también el tiempo en que el anticristo estará reinando sobre la
tierra. Como el Señor, él también aplicará una marca en aquellos que le pertenecen,
antes de eso; sin embargo, Dios va marcar en la frente a los que son de Él.

Cuando el cordero abra el séptimo sello, tendrá inicio la gran tribulación, el tiempo
de la ira de Dios sobre la tierra, el tiempo profetizado por los profetas como siendo
el gran día y terrible día del Señor; antes que el Señor flagele este momento, Él tiene
que marcar a aquellos que son suyos, porque su ira vendrá sobre aquellos que le
pertenecen. El juicio de Dios no caerá sobre aquellos que reciban su marca,
definitivamente el tiempo de la ira no recaerá sobre el pueblo de Dios. No se sabe
que sello es este, con certeza es algo que los ángeles reconocen, es probable que
no sea visible al hombre natural. Es algo relacionado al mundo espiritual, esta es la
manera de Dios preservar a sus escogidos mientras ejecuta su juicio.

Ap. 7:2 Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo;
y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño
a la tierra y al mar.

Este es el quinto ángel, el surge del nacimiento del sol, tiene el sello del Dios vivo y
apunta para el Señor Jesús, algunas veces Jesús es llamado de ángel del Señor. En el
antiguo testamento, Moisés vio el ángel del Señor; Josué los vio; el propio Abraham
tuvo contacto con el ángel del Señor y en algunos momentos, en el antiguo
testamento, él era el propio Señor Jesús. Ese quinto ángel es el Señor Jesús, Él tiene
este sello y viene para marcar aquellos que son suyos.

El remaneciente de Israel serán sellados antes del séptimo sello, mientras que la
iglesia está sellada desde hoy, el sello de la iglesia es el Espíritu Santo dentro de
nosotros, físicamente nadie consigue percibir algo diferente en nosotros; sin
embargo, el mundo espiritual sabe que hay un sello sobre nuestras vidas, es un sello
140

de propiedad (Ef.1:13). Somos las ovejas del Señor. ¿Qué hace el dueño del rebaño
con sus ovejas? Él las marca con fuego. El fuego del Espíritu Santo ardiendo en
nuestro corazón es su marca. Somos propiedad exclusiva de Dios (1Pe.2:9). El padre
tiene dos pueblos en la tierra: Israel y la iglesia. Él prometió a Abraham que su
descendencia sería como las estrellas del cielo y como la arena del mar. En una
analogía podemos decir que la arena del mar son los judíos y las estrellas del cielo
somos nosotros, la iglesia. Así que el pueblo de Israel todavía esté en ignorancia y
en rebelión contra Dios, sabemos que así mismo es pueblo de Dios. Dios hizo una
alianza con Abraham y por eso salvará a Israel.

Como dice Pablo a los romanos, apenas el remaneciente será salvo (Rm.9:27). Los
ángeles están aquí preparados para ejecutar el juicio del séptimo sello, ellos están
posicionados, y de repente se oye una voz que dice: aseguren los vientos del juicio
de Dios y no hagan nada, no damnifiquen nada, sino esperen hasta que los siervos
de Dios sean marcados. ¿Con quiénes ellos comienzan marcando? Los judíos.

Con respecto a Israel es necesario reconocer que ellos están en incredulidad, ellos
todavía se pegan a su vieja religión y están en rebelión contra Dios. Las profecías
indican que continuaran así hasta el último día. Dios todavía permanece fiel a su
alianza con el pueblo de Israel, Él cuidará de su pueblo por causa de su alianza.

Dentro de los judíos, ciento cuarenta y cuatro mil serán sellados, no se puede
afirmar categóricamente que ese número sea literal. Ciento cuarenta y cuatro mil
son doce mil por doce mil. Sabemos que el doce a semejanza de siete, significa
perfección, completo, plenitud. Entonces ciento cuarenta y cuatro mil no hablan de
un número pleno y completo; es posible que sea un número simbólico, con todo
creo que es literal. Serán 144000 remanecientes judíos en aquel día.

Esa es la cantidad contada y separada por Dios, el Señor sabe cuántos y cuáles serán
separados en aquel día para no sufrir el juicio de Dios, los que serán sellados por
Dios no sufrirán con la gran tribulación que está pronto a venir sobre la tierra.
Podemos mientras tanto estar seguros de que ese número se refiere a los judíos y
no a la iglesia.

A respecto de la relación de las doce tribus hecha a partir del verso cinco, tres
hechos deben ser observados. En primer lugar, el primogénito fue mudado.

El primogénito en el antiguo testamento tenía una función muy especial, sabemos


que Jacob deseó ardientemente el derecho de primogenitura porque el primer hijo
tenía el derecho a una herencia doble y también sobre él quedaba el encargo del
sacerdocio de la familia. El primogénito recibía un importante privilegio delante de
Dios. La primogenitura no reside apenas en nacer primero, primordialmente él
debería responder a Dios.
141

El primogenito en la lista debería ser Rubén, mas Judá fue colocado en su lugar, ¿Y
por qué? Rubén fue rechazado por Dios por causa de su vida pecaminosa (1Cr.5:1-2),
él resolvió tener contacto sexual con una de las concubinas de su padre (Gn.34:1-31).
La pecaminosidad nos remueve de nuestra función sacerdotal, nos quita la unción
así como sacó la primogenitura de Rubén. Cuando leemos aquí la lista de las doce
tribus, Rubén ya no es el primero, él perdió el privilegio o la corona que estaba
destinada para él. Judá tomó su lugar, es por eso que el Señor advierte: “vengo sin
demora, conserva lo que tienes para que nadie tome tu corona”. Judá acabó
recibiendo algo que era para ser de Rubén.

Una segunda cosa que se percibe en el texto es la posición de José, tanto él como
su hijo Manasés son mencionados como tribus; eso indica que José recibió una
doble herencia, algo reservado para el primogénito (1Cr.5:1-2). Una de las tribus
aparece con su nombre y otra con el nombre de su hijo Manasés; eso significa que
José, a pesar de no haber recibido la preeminencia de Judá, recibió una doble
herencia. ¿Por causa de qué? Debido a su obediencia, usted debe recordarse de la
historia de José, él fue tentado por la mujer de Potifar, una prueba realmente serio,
y porque él pasó en esa prueba fue calificado para asentarse en el trono de Egipto.
Cuantos Josés en la historia prefirieron dormir con la esposa de Potifar y no
pudieron sentarse en el trono. Cuantos hombres y mujeres fueron probados por
Dios y fueron descalificados. Que podamos estar entre aquellos que como José
fueron probados en el test de Dios e por eso podrán sentarse en el trono en aquel
día y recibir la doble herencia como José recibió.

La tercera cosa digna de notar es que una de las tribus quedó fuera: la tribu de Dan
¿Por qué quedó fuera? La Biblia dice que la tribu de Dan se enredó con la idolatría
(Jz.18:30-31, 1Rs.12:29-30, 2Rs.10:29). Se tornaron sacerdotes de Baal y por eso
fueron rechazados. Es necesario tener mucho cuidado con la pecaminosidad y más
cuidado todavía con la idolatría. El pecado de Rubén le quitó la recompensa y la
idolatría de Dan lo llevó a ser cortado fuera.

2. Los santos arrebatados – 7:9-17


Sabemos que Israel está en rebelión con Dios, mismo que el hombre sea hallado
infiel, el Señor permanece fiel. Mismo que Israel haya fallado con relación a la
alianza, Dios no va fallar porque tiene una alianza con Abraham y finalmente el
remaneciente será salvo. Antes que el Señor derrame su ira sobre la tierra, Él marca
144000 del pueblo de Israel (Rm.11:25, He.15:14; 19).

Dios marca el pueblo de Israel, pero con la iglesia es diferente. Vea lo que dice el
versículo nueve: “Después de estas cosas, vi una gran multitud que nadie podía
142

contar, de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas de pie delante del trono y
delante del cordero, vestidos de vestiduras blancas con palmas en las manos”.

Aquí vemos los dos pueblos que Dios posee: los judíos y la iglesia. Dios guardará sus
dos pueblos de manera diferente, los judíos serán marcados, pero la iglesia será
arrebatada. Del mismo modo que el hijo varón del capítulo 12 será arrebatado para
estar delante del trono, la multitud se encuentra se encuentra de pie delante del
trono. Como veremos posteriormente en el capitulo 12, el hijo varón simboliza los
creyentes vencedores que serán arrebatados, ese texto no menciona
explícitamente el arrebatamiento, mas ciertamente se refiere al mismo.

La gran tribulación solo comienza en el octavo capítulo, pero antes de eso, en el


capítulo siete antes de la abertura del séptimo sello, la iglesia (aquellos que
estuvieren preparados) será arrebatada. Será una multitud que nadie podrá contar
una vez que apunta para los hombres y mujeres de Dios de toda la historia que
estarán delante del trono de Dios.

El verso nueve nos habla sobre una multitud tan grande a punto que nadie
enumerar, ella vendrá de todas las naciones, tribus, lenguas y pueblos. Dios será
glorificado en todas las lenguas, será adorado en todas las lenguas que ya existieron
sobre la tierra, estas personas serán como sus representantes y estarán allí para
adorarlo en su propio idioma, estarán de pie delante del trono y delante del cordero
y estarán vestidos de vestiduras blancas.

La palabra vestiduras está en el plural. Un creyente tiene por lo menos dos


vestiduras de salvación y los vestidos de lino finísimo, que según Apocalipsis apunta
para los actos de justicia de los santos (Ap.19:8) la primera vestidura apunta para la
salvación, una vez que todos “cuantos fuimos bautizados en Cristo de Cristo nos
revestimos” (Gl.3:27). Ese primer vestido garantiza nuestra salvación, pero no es
suficiente para recibir el reino.

Necesitamos de un segundo vestido que está en Apocalipsis, o sea, el vestido de


justicia (Ap.19:8). Las primeras recibimos de gracia y la segunda tenemos que tejerla
día a día con nuestras obras de justicia delante de Dios. Ellos están con palmas
blancas en las manos. Levítico dice:

Lev 23:40 Y tomaréis el primer día ramas con fruto de árbol hermoso, ramas de palmeras,
ramas de árboles frondosos, y sauces de los arroyos, y os regocijaréis delante de Jehová
vuestro Dios por siete días.

¿Por qué cada uno de los salvos están con una palma en las manos? Para que
comprendamos Apocalipsis, tenemos que conocer el resto de la Biblia, esas
palmeras tienen un significado. Los ramos de las palmeras eran separados en una
fiesta muy especial llamada: “fiesta de los tabernáculos”.
143

Existían varias fiestas en Israel, tres de ellas se sobresalían: la fiesta de la pascua, la


fiesta de los tabernáculos y la fiesta del pentecostés. Todas ellas eran proféticas y
dos de ellas ya se cumplieron. La fiesta de la pascua apuntaba para la muerte del
Señor en l Cruz, Él murió exactamente en el día de la pascua y es nuestro cordero
pascual. La fiesta del pentecostés se realizó con la venida del Espíritu Santo. La
fiesta de los tabernáculos por su vez, no se cumplió completamente, en parte ella se
cumplió en el día en que el Señor se hizo hombre en Belén, Él era Dios
tabernaculándose con nosotros. Mas el cumplimiento final y definitivo acontecerá
cuando Él vuelva o cuando fuéremos arrebatados.

Juan dice que el verbo se hizo gente y habitó entre nosotros (Jn.1:14). En el original
la palabra habitar es tabernacular; por tanto, quedaría así: “y el verbo se hizo gente
y tabernaculó entre nosotros”. En la primera vez, Él vino por un tiempo para cumplir
otro propósito que era la pascua; hoy, Él vendrá para reinar y extender sobre
nosotros su tabernáculo. El verso quince narra que aquél que se sienta en el trono
extenderá sobre ellos su tabernáculo, o sea, su habitación. Es por eso que tienes
palmas en las manos, pues ellos vinieron a celebrar una fiesta al Señor.

Y tomaréis el primer día ramas con fruto de árbol hermoso, ramas de palmeras, ramas de
árboles frondosos, y sauces de los arroyos, y os regocijaréis delante de Jehová vuestro
Dios por siete días.
Y le haréis fiesta a Jehová por siete días cada año; será estatuto perpetuo por vuestras
generaciones; en el mes séptimo la haréis.
En tabernáculos habitaréis siete días; todo natural de Israel habitará en tabernáculos,
para que sepan vuestros descendientes que en tabernáculos hice yo habitar a los hijos de
Israel cuando los saqué de la tierra de Egipto. Yo Jehová vuestro Dios.
Así habló Moisés a los hijos de Israel sobre las fiestas solemnes de Jehová (Lev.23:40-44).

La fiesta de los tabernáculos conmemoraba el tiempo en que el pueblo de Israel


anduvo en el desierto, periodo en que ellos no sufrieron necesidad del cualquier
tipo, y para que celebren ese milagro una vez por año, durante siete días, ellos
deberían habitar en tiendas hechas de ramos de palmeras. Era una gran fiesta,
porque nuestro Dios es Dios de fiestas, Él desea festejar mucho con sus hijos, no
que Él no sea serio, sino, Él ama la intimidad de su familia.

Las palmas también apuntan para el cumplimiento profético de que por fin los
justos florecerán como palmeras en los atrios del Señor.
Sal 92:12 El justo florecerá como la palmera;
Crecerá como cedro en el Líbano.
Sal 92:13 Plantados en la casa de Jehová,
En los atrios de nuestro Dios florecerán.
144

Uno de los ancianos tomó la palabra diciendo: ¿Aquéllos que se visten de vestiduras
blancas que son y de donde vinieron? Juan mismo responde: mi Señor tú lo sabes. Él
entonces me dijo: ellos son los que vienen de la gran tribulación.

Como la gran tribulación comienza apenas en el séptimo sello, o sea, en el capítulo


ocho, la expresión “gran tribulación” mencionado aquí debe tener otro sentido. Es
indiscutible que nuestra vida es llamada también de gran tribulación. Al final no
pasamos por un mar de rosas tendidas en nubecitas blancas, en el mundo
tendremos aflicciones como dijo Jesús. Todos tenemos sufrimientos en la vida,
Pablo dice que la tribulación es importante porque produce perseverancia y hasta
experiencia. La tribulación desencadena un proceso de crecimiento; por eso el
anciano afirma que son ellos los que vienen de la gran tribulación, los ángeles al
vernos, ven una gran tribulación. Todos pasamos por tentaciones y luchas, todos
nosotros somos atraídos por cosas impropias y llevados a tener reacciones erradas.
Nuestra vida es una gran resistencia que puede llegar hasta la sangre; eso es una
tribulación.

Ap. 7:9 Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de
todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia
del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos.

Esta gran multitud está de pie delante del trono; eso se refiere claramente al que
Jesús dijo en Lucas 21:36 y que apunta indiscutiblemente para el arrebatamiento. El
verso quince dice que se hallan de pie delante del trono del cordero. El Señor no
explica en Lucas lo que estar en pie y cuales son las condiciones para estar allí, de
pie, delante del trono del cordero.

Luc. 21:34 Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de
glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros
aquel día.

El día al cual se refiere Jesús, es la gran tribulación, en el cual:

Luc. 21:35 Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la
tierra.
Luc 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de
todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre.

Sólo estará de pie delante del hijo del hombre, aquellos que vencieren las orgias de
esta vida y que no se dejaron embriagar por las preocupaciones de este mundo.
Apocalipsis siete es el momento en que los que vigilaren y oraren podrán escapar de
la gran tribulación; de ese modo, se hallarán de pie delante del trono de Dios y del
cordero.

En la eternidad serviremos al Señor día y noche en su santuario (v.15), ese trabajo


será un servicio sacerdotal de adoración y ministración delante del trono; fuimos
145

salvos con un propósito. Nosotros somos sacerdotes e iremos ministrar en el


santuario de Dios por toda la eternidad, nosotros serviremos a Dios de día y de
noche en su santuario. Como sacerdotes iremos a reinar junto con Él.

Dios extenderá su tabernáculo sobre nosotros (v.15), su habitación será nuestra


habitación. Otra cosa importante: aquél que se sienta en el trono extenderá sobre
nosotros su tabernáculo como una gallina que abre sus alas y protege sus pollitos. Él
extenderá y nosotros habitaremos con Él por toda la eternidad.

El cordero nos pastoreará y nos guiará a fuentes de aguas vivas (v.16-17). Pastorear
en este caso significa alimentar, en aquel tiempo nada nos faltará (Sl.23:1). Además
de eso, beberemos de las fuentes de agua de vida que es el propio Padre.

No tendremos hambre ni sed o calor (v.16), debajo del pastoreo divino nada nos
faltará y nunca más sentiremos cualquier necesidad. El verso alude “jamás tendrán
hambre, nunca más tendrán sed, no caerá sobre ellos el sol ni ardor alguno” o sea,
no tendremos mas necesidades de alguna cosa. Él será nuestro suplemento
perfecto, en el cielo ni habrá comida porque no habrá hambre; pero así mismo
podremos alimentarnos conforme Apocalipsis 22:2. Podremos comer del fruto del
árbol de la vida, pero no tendremos más hambre, porque hambre nos habla de
desconformo e insatisfacción. También no habrá más el sol, una vez que Dios mismo
será nuestra luz.

Hoy estamos con el Señor en el espíritu, sin embargo, en aquel día nuestros ojos lo
verán y nuestros oídos oirán. Vamos a contemplarlo cara a cara y seremos tal cual Él
es, estaremos inmersos en su gloria; no es posible ser hijo de Dios y no anhelar por
ese día.

Solamente aquél que ama la venida del Señor y anhela por eso, recibirá la
recompensa en aquel día. 2Ti 4:8 Por lo demás, me está guardada la corona de justicia,
la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los
que aman su venida.

El premio del reino es solamente para los que aman su venida, para aquél que clama
diciendo: Señor yo quiero el cielo, no porque mi vida en la tierra sea ruin, sino
porque yo quiero estar con el Señor y que es incomparablemente mejor. ¿Existe un
anhelo verdadero por el cielo en nuestros corazones?

El último versículo dice: “pues el cordero que se encuentra en medio del trono los
apacentará y los guiará para las fuentes de agua de vida y Dios les enjugará de los
ojos toda lágrima”. Es lindo el paradoxal de ese versículo. El cordero los apacentará,
normalmente quien apacienta es el pastor, pero el texto dice que quien nos
apacentará es el cordero. Una cosa es ser apacentado por el pastor, otra cosa es ser
apacentado por un cordero. El pastor nunca sabe lo que la oveja sufre, jamás tuvo
146

garrapata en la lana o en el cuero, el pastor tiene apenas una noción de lo que sufre
la oveja, nunca vivió en la experiencia. por eso el apacentar de un pastor es distante,
él no consigue sentir lo que la oveja siente, jamás pasó por alguna cosa igual. La
promesa del Señor, sin embargo, es el apacentar del cordero. ¿Sabes por qué Él se
tornó un cordero? Para que comprendamos mejor: una cosa es entender alguien
oyendo explicaciones, otra es sufriendo las mismas cosas y teniendo las mismas
experiencias. Jesús se hizo cordero y es capaz de comprendernos, porque Él
también es oveja como nosotros. El apacentar es mucho más próximo y más
amoroso, hay más cuidado, porque Él sintió en la propia piel los sentimientos de las
ovejas.

La Biblia también dice que Él nos conducirá a las fuentes del agua de vida y Dios va
enjugar nuestros de toda lágrima; por un lado, el cordero nos lleva para las aguas de
la vida, por otro lado, el Señor seca las lágrimas de nuestros ojos. Si actualmente,
nuestra bebida son las lágrimas como menciona David (Sl.102:9). En aquel día, Él va
conducirnos a las fuentes del agua de vida y va “extender sobre nosotros su
tabernáculo”. Eso es algo maravilloso, en ese capítulo vemos como Dios cuida de su
pueblo. Cuando esté listo para juzgar a la tierra, Él sellará su pueblo terreno, los
judíos y arrebatará a su pueblo celestial.
147

Las siete trompetas


Los primeros cuatro sellos son simultáneos ya que el sexto sello y el séptimo son
consecutivos, el séptimo sello está compuesto por siete trompetas, algunos piensan
que las siete trompetas sucede a los siete sellos, pero eso es una equivocación. La
verdad la siete trompetas son el contenido del séptimo sello.

La séptima trompeta por su vez incluye las siete Copas o flagelos. Las Copas no
suceden a las trompetas, sino son el contenido de la séptima trompeta; esas siete
trompetas como contenido del séptimo sello, constituye aquello que llamamos de
gran tribulación o el tiempo de la ira divina. La séptima trompeta encerrará esta era
e introducirá el reino, cielo nuevo y tierra nueva.

1. La gran tribulación.
El contenido del último ocho es básicamente sobre la gran tribulación; por tanto,
necesitamos comprender exactamente lo que ella significa. Algunos versículos
bíblicos dicen que ese tiempo de tribulación acontecerá en un periodo determinado
de tres años y medio (Dn.7:25, 12:7; Ap.12:14), otros hablan de cuarenta y dos meses
(Ap.11:2, 13:5) o de 1260 días (Ap.11:2, 13:5). Todavía las tres descripciones anteriores
representan el mismo periodo de tiempo, lo cual muchas veces, también es llamado
de un tiempo, dos tiempos y mitad de un tiempo (Ap.12:14).

La gran tribulación tiene tres nombres: la gran tribulación, el gran terrible día del
Señor y un nombre más peculiar “la segunda mitad de la septuagésima semana de
Daniel”. Esta denominación se relaciona a una profecía bíblica que está en Daniel
148

9:24-27. Es llamada de profecía de setenta semanas y es muy importante para que


comprendamos la secuencia de los eventos bíblicos.

Las setenta semanas de Daniel

Para comprender la profecía de las setenta semanas, es necesario entender que el


pueblo mencionado allí es el pueblo de Israel, ciudad santa es Jerusalén y las
semanas son de años y nos de días.

La profecía fue dada a Daniel, vea lo mencionado en el verso 24:

Dan 9:24 Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad,
para terminar la prevaricación, y poner fin al pecado, y expiar la iniquidad, para traer la
justicia perdurable, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo de los santos.

¿Quién es el pueblo y la ciudad de Daniel? El pueblo es Israel y la ciudad es Jerusalén,


esas semanas no se componen de días, sino de años, que equivalen a 490 años;
siendo la profecía para Israel, los años aquí son años lunares de 360 días.

Todavía en el verso 24, el objetivo de la profecía es traer al mesías para hacer cesar
las transgresiones, dar fin a los pecados, hacer la expiación de la iniquidad y
completar el tiempo de Dios, el texto continúa:

Dan 9:25 Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a
Jerusalén hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; se
volverá a edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos.

Daniel estaba en Babilonia cuando el ángel le apareció, él hacia parte del grupo de
cautivos llevados para Babilonia cuando Nabucodonosor invadió e incendio a
Jerusalén, destruyéndola completamente. Así el ángel le dijo: “a partir del día en
que salga la orden permitiendo la reedificación de Jerusalén, 483 años estarán
determinados, o sea, siete semanas y 62 semanas”. Esta orden está en Nehemías
capítulo 2, versos de 1 a 6, cuando el rey Artajerjes permitió a Nehemías retornar a
Jerusalén y restaurar los muros; eso aconteció en el día 1° de marzo de 445 a.C. a
partir de ese día son contados 69 semanas de años. La profecía dice que serán dos
periodos: en las primeras siete semanas o 49 años, la ciudad será reedificada con el
templo. Al final de las otras 62 semanas, el Mesías será muerto.

El verso 26 continua:

Dan 9:26 Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, mas no por
sí; y el pueblo de un príncipe que ha de venir destruirá la ciudad y el santuario; y su fin será
con inundación, y hasta el fin de la guerra durarán las devastaciones.

El ungido se refiere a Cristo y desde el día en que el templo fue restaurado hasta la
muerte del ungido se pasaron 62 semanas.
149

La profecía se cumplió; Jesús por tanto, tenía un día exacto para morir. El verso 26
todavía dice que después de la muerte del ungido, la ciudad y el templo serían
destruidos por un príncipe que habría de venir; eso se cumplió en el año 70 de
nuestra era, cuando el general Tito destruyó Jerusalén y el templo. Después de eso
el templo no fue reedificado aun, se cuenta siete semanas y más 62 semanas, lo que
totaliza 69 semanas, pero de acuerdo con la profecía, 70 semanas están
determinadas, o sea, está faltando una. El verso 27 nos habla de la semana que falta.

Dan 9:27 Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará
cesar el sacrificio y la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá
el desolador, hasta que venga la consumación, y lo que está determinado se derrame
sobre el desolador.

Ese desolador que se refiere el texto, es el príncipe que ha de venir, el anticristo. El


anticristo hará una alianza con Israel por una semana o siete años. Cuando él hiciere
ese acuerdo, comienza la cuenta regresiva de los últimos siete años. De esta forma,
la última semana de Daniel inicia en el día en que el anticristo haga alianza con
Israel. Mas en la mitad de la semana, él quiebra la alianza haciendo cesar el sacrificio
y la ofrenda de manjares y sobre el ala de las abominaciones vendrá el asolador.

El anticristo hará una alianza con Israel. La primera mitad de la semana, o sea, los
primeros tres años y medio, será de paz, pero en medio de los siete años vendrá el
abominable de la desolación. Jesús dijo que cuando veamos el abominable de la
desolación, sabremos que ese es el comienzo de la gran tribulación, la cual nunca
hubo ni habrá jamás sobre la tierra.

Mat 24:15 Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que
habló el profeta Daniel (el que lee, entienda).

Mat 24:21 porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio
del mundo hasta ahora, ni la habrá.

La gran tribulación ocurrirá entonces en los últimos tres años y medio, ella inicia en
la última semana de Daniel. Esa última semana comenzará cuando el Anticristo haga
una alianza con Israel. En medio de la semana, él quebrará la alianza y colocará el
abominable de la desolación en el templo. El templo no existe hoy, pero
ciertamente será reconstruido. Ese abominable será probablemente su imagen, que
será introducido en el templo para ser adorada; cuando el anticristo haga eso,
comenzará la gran tribulación que deberá durar tres años y medio.

La idea popular en medio evangélico sobre la gran tribulación es que su comienzo se


dará cuando la iglesia fuere arrebatada, de hecho que el arrebatamiento será antes
de la gran tribulación, mas no existe ninguna profecía bíblica que nos permita
prever cuanto tiempo transcurrirá entre los dos eventos, puede ser que se pasen
meses o años. El hecho que marca el inicio de la gran tribulación es aquello que
150

Jesús llamó de abominable desolación siendo colocada en el templo de Jerusalén.


Muchos eventos estarán aconteciendo durante la gran tribulación, el capítulo ocho
de Apocalipsis se detiene solamente en calamidades que han de venir sobre la tierra
por causa del juicio de la ira de Dios sobre el hombre.

Más adelante veremos que otras cosas estarán aconteciendo simultáneamente, el


anticristo estará reinando con la ayuda del falso profeta. Una marca será
establecida, llamada la marca de la bestia; los cristianos y los judíos que quedaren
serán perseguidos y habrá dos testigos profetizando en Jerusalén con señales y
prodigios.

2. El cielo después de la abertura del séptimo sello – 8.1-6


Los sellos serán abiertos secretamente, mientras las trompetas serán tocadas
públicamente, las trompetas de 8.1-2, son una respuesta a la oración de los santos
en el quinto sello.

Ap. 8:1 Cuando abrió el séptimo sello, se hizo silencio en el cielo como por media
hora.

Con la abertura del séptimo sello hubo silencio en el cielo durante media hora, el
silencio indica solemnidad, algo muy importante y grave está por suceder: una
mudanza de época, es el fin de la era de tolerancia para la era de Dios; una era está
pasando y una otra era está comenzando. Eso es tremendo, esa media hora de
silencio marca la transición entre una fase y otra, es el preludio que prepara la
platea para el acto principal. Delante del trono ya se encuentran todos los
convidados: los cuatro seres vivientes, los veinte cuatro ancianos, los ángeles es de
millones de millones de mislares y una gran multitud de vencedores que nadie podía
enumerar.

Actualmente los hombres hablan de Dios con desprecio, blasfeman y los cielos se
callan, los hombres profieren mentiras contra Dios, lo acusan, hacen chistes con su
nombre, colocan el santo nombre del Señor en sus obscenidades, en sus filmes y en
sus músicas inmundas. Llegan al punto de proclamarse dioses, blasfemando de esta
manera contra el Dios verdadero, y todavía así los cielos toleran, nada acontece, no
vemos las personas siendo fulminadas, no vemos el juicio de Dios viniendo sobre la
tierra. Todo por que no vivimos en el juicio de Dios, sino en el tiempo de gracia.

El silencio del cielo ahora es una señal, el cordero abrirá el séptimo sello y Dios se
levantará de su trono. El tiempo de tolerancia tendrá fin, toda blasfemia será
castigada, todo pecado será punido, todo lo que el hombre hace en la tierra será
vengado en aquel día.
151

En el verso tres, el Señor aparece como el octavo ángel, en el antiguo testamento


Cristo era llamado de el ángel del Señor (Gn.22:11-12, Éx.3:2-6, Jz.6:11-24, Zc.1:11-12,
2:3-5, 8-11, 3:1-7). Cuando fue revelado andando en medio de las iglesias, Juan dijo
que Él era como el hijo del hombre. Mas en la ministración de los juicios de Dios
sobre la tierra, Él es visto como ángel, un mensajero, alguien que fue enviado por
Dios. El hecho de Él ser descrito como “otro ángel” nos revela que es especial, es el
octavo ángel.

Observe la mención de dos altares en el verso tres; eso nos hace ver que hay una
realidad del tabernáculo en los cielos del cual el terreno era apenas una sombra.
“Vino otro ángel y quedó parado de pie junto al altar…” (v.3a). ese es el primer altar
mencionado en el capítulo 6, verso 9. Eso muestra que el templo de Salomón era
una réplica o una sombra de algo que existe en el cielo. el primer altar mencionado;
por tanto, debe ser el altar del holocausto que había en el templo de Salomón
(Éx.27:1-8).

Ap. 3:8 Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual
nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has
negado mi nombre.

Ahora se tiene otro altar, el altar de oro que está delante del trono, ese es el altar
del incienso que está en el lugar santo (Éx.30:27). En el cielo existe un templo,
entienda eso, donde existen dos altares: el primero es el altar de holocausto, el
segundo es el altar de oro que se encuentra delante del trono, ese es el altar del
incienso.

Ap. 8:4 Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las
oraciones de los santos.
Ap. 8:5 Y el ángel tomó el incensario, y lo llenó del fuego del altar, y lo arrojó a la tierra; y
hubo truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto.

Es impresionante cuantos principios espirituales están envueltos aquí. Ese ángel


ciertamente se refiere a la persona del Señor Jesús porque es Él quien recoge
nuestras oraciones. En ese contexto, el incienso no es la oración, visto que Él ofreció
incienso junto con las oraciones, además de la oración, el incienso en la Biblia,
simboliza también la justicia de Cristo. Ese ángel que apunta para el Señor Jesús,
tomó las oraciones de los santos, las mescló con el incienso y las lanzó sobre la
tierra.

Dios va ejecutar el juicio de la gran tribulación porque hay personas orando en la


tierra; esas oraciones lanzadas de vuelta a la tierra fueron hechas bajo fuerte
presión, son muy específicas, tales como: venga tu reino pronto Señor. Son las
oraciones de aquellos que estarán aquí por ocasión del séptimo sello, ellos estarán
viviendo bajo la presión de ver el nombre del Señor siendo blasfemado, la presión
152

de ver los hombres diciendo que son dioses. La presión de querer contemplar el
reino de Dios.

Entonces no hay ninguna duda de que después de aquella multitud de vencedores


de haber sido llevados delante del trono de Dios, todavía habrá aquí una gran
multitud orando y clamando a Dios, es por causa de esas oraciones que Dios va
ejecutar el juicio sobre la tierra. Esas oraciones anteceden al toque de las trompetas,
porque la oración es el canal por medio del cual el Señor actúa en la tierra, Él
escogió actuar por medio de la oración de su pueblo, hasta el mismo la gran
tribulación será resultado de la oración de los santos. Por eso que nosotros
necesitamos orar. El Espíritu Santo viene para producir en nosotros el clamor y
cuando existe un clamor verdadero, Él actúa, su mover es fruto de oración.

Si queremos ver las iglesias creciendo, si deseamos ver los poderes espirituales de
las ciudades siendo abalados, nuestras oraciones tiene que hacer los cielos producir,
truenos, voces, relámpagos y terremotos. ¿Cuál es el motivo de eso? Abalar los
poderes del infierno, si queremos ver la iglesia abalando los poderes del infierno,
tenemos que orar porque el Señor va tomar esas oraciones y va lanzar de vuelta
sobre la tierra; y cuando Él haga eso no habrá fundamento espiritual que
permanezca intacto, todo estremecerá. Entonces con los poderes del infierno
abalados, saquearemos el espolio del reino de las tinieblas.

Durante el séptimo sello todavía habrá santo orando en la tierra (Lc.18:7-8), entre
tanto, puede significar también la oración de los santos martirizados del quinto sello
(6:9-11). Recuérdese que ellos clamaron al padre por venganza. La gran tribulación
será la venganza del todo Poderoso.

El séptimo sello es compuesto de siete trompetas, a partir de entonces, Juan


comienza a describir cada trompeta y lo que va acontecer sobre la tierra. Las siete
trompetas son divididas en dos grupos: el primero es compuesto por las cuatro
primeras trompetas, en la primera trompeta es alcanzada la tercera parte de las
florestas, plantaciones y pomares de la tierra. En la segunda trompeta, la tercera
parte del mar es atingida. En la tercera, es atingida la tercera parte de los ríos y de
las nacientes. En la cuarta, la tercera parte del sol, de la luna y de las estrellas es
herida. En ese periodo, el hombre no es atingido directamente, apenas sufrirá las
consecuencias.

La primera trompeta – 8.7

Desde el comienzo del mundo ocurren calamidades naturales, en las trompetas; sin
embargo, las calamidades serán sobrenaturales. Dios mismo estará derramando su
ira sobre la tierra. Ap. 8:7 El primer ángel tocó la trompeta, y hubo granizo y fuego
153

mezclados con sangre, que fueron lanzados sobre la tierra; y la tercera parte de los árboles
se quemó, y se quemó toda la hierba verde.

Creo que ese pasaje, la tercera parte de la tierra se refiere a una parte específica del
planeta que corresponde a una tercera parte de la tierra. De esa forma cuando la
trompeta toque, una región correspondiente a una tercera parte de la tierra será
atingida.

Es posible que Dios use cosas naturales para ejecutar ese juicio de la primera
trompeta, sabemos que el granizo es una lluvia de piedras incendiadas, es cierto
que naturalmente, se trata de una asombrosa lluvia de meteoritos que va incendiar
y devastar un tercio del planeta y producirá incendios de proporciones
continentales. La cantidad de víctimas fatales entre hombres y animales sin duda
serán asustadoras. La primera trompeta es el juicio de Dios sobre la tierra.

La segunda trompeta – 8:8-9

Ap. 8:8 El segundo ángel tocó la trompeta, y como una gran montaña ardiendo en fuego
fue precipitada en el mar; y la tercera parte del mar se convirtió en sangre.
Ap. 8:9 Y murió la tercera parte de los seres vivientes que estaban en el mar, y la tercera
parte de las naves fue destruida.

En la segunda trompeta, la tercera parte de los animales marinos morirá y la tercera


parte de las embarcaciones será destruida.

La visión de una montaña ardiendo en llamas y cayendo es una impresión nítida de


un meteoro de gran dimensión que se incendiará al entrar en contacto con la
atmósfera. Los científicos dicen que en la eventualidad de un meteoro caer en la
tierra, su caída sería precedida por una lluvia de otros menores. Los menores son la
lluvia de granizos de la primera trompeta y en esta segunda tenemos un impacto
más severo.

En simulaciones hechas en la Nasa, el impacto de un meteoro de apenas quince


kilómetros de diámetro cayendo en el mar produciría una onda de hasta dos mil
metros de altura que entraría continente adentro por más de quinientos kilómetros.
El impacto de ese meteoro haría la tierra tambalear como un ebrio (Is.24:20). Como
el resultado del impacto, todos los volcanes entrarían en erupción y cubrirían toda la
atmósfera con ceniza volcánica. Durante meses, la luz solar no penetrará
completamente, las plantaciones por cusa de eso no darían su fruto, habría mucha
hambre. Toda la civilización que nosotros conocemos hoy, será abalada.

La tercera trompeta – 8.10-11


154

Ap. 8:10 El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran estrella, ardiendo como
una antorcha, y cayó sobre la tercera parte de los ríos, y sobre las fuentes de las aguas.
Ap. 8:11 Y el nombre de la estrella es Ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en
ajenjo; y muchos hombres murieron a causa de esas aguas, porque se hicieron amargas.

La tercera trompeta revela que una estrella caerá del cielo, evidentemente la Biblia
narra el evento de nuestro punto de vista. Cuando vemos un meteoro cayendo,
luego pensamos que es una estrella, la verdad son meteoritos. Estrellas son cuerpos
celestes mayores que la tierra, del punto de vista de quien está en la tierra,
meteorito que cae es como una estrella. Esa estrella grande caerá en algún lugar de
la tierra que posee un tercio del agua potable que existe en el planeta, un tercio de
los ríos y de los manantiales de la tierra serán contaminados producida por esa
estrella candente. En consecuencia de esa contaminación, mislares de esas
personas morirán.

Intente imaginar la situación, esas trompetas son consecutivas. En la primera un


tercio de la tierra es incendiada, imagina la cantidad de polución lanzada a la
atmósfera, el ambiente en la tierra comienza a quedar muy insoluble y difícil.
Después de eso la tercera parte de los animales del mar mueren por ocasión de la
segunda trompeta. El agua del mar quedará como sangre por causa de los millones
de animales marinos como peces, ballenas, tiburones y delfines que serán muertos
en un solo día. Después de eso, un tercio de las aguas potables serán atingidas. El
escenario no es ni un poco confortable; sin embargo, lo peor está por venir.

La cuarta trompeta – 8.12

Ap. 8:12 El cuarto ángel tocó la trompeta, y fue herida la tercera parte del sol, y la tercera
parte de la luna, y la tercera parte de las estrellas, para que se oscureciese la tercera parte
de ellos, y no hubiese luz en la tercera parte del día, y asimismo de la noche.

Como ya dije, Apocalipsis estaba siendo escrito bajo el punto de vista de quien
estaba en la tierra y para los que estuvieren en esa ocasión, el sol, la luna, las
estrellas, o mejor la tercera parte de ellos oscurecerá. Con seguridad es oscuridad
será producida por una nube espesa probablemente de ceniza volcánica y humo
bloqueará el paso de la luz solar. Como vimos, después del impacto de uno o más
meteoros, los volcanes entrarán en erupción lanzando toneladas de cenizas en la
atmósfera y como consecuencia del gran incendio ocasionado por la primera
trompeta, habrá mucho humo en la atmósfera.

¿y los creyentes que quedaren aquí? ¿Ellos sufrirán la gran tribulación? No sufrirán
nada, pues serán guardados por Dios (Ap.9:4), ellos; sin embargo, sufrirán la
persecución del anticristo. Busque construir un cuadro en su mente: mientras que
155

las trompetas están sonando, el anticristo estará reinando y persiguiendo a los


judíos y los cristianos que quedaron. Muchos serán martirizados.

La quinta trompeta – 9.1-12

Antes de que el ángel toque la quinta trompeta, un águila en el cielo proclama con
gran voz tres “ay”. Esos tres “ay” son las ultimas trompetas; eso muestra la división
de ellas en dos grupos. Las primeras cuatro trompetas son direccionadas sobre la
tierra, mares, ríos, sol y estrellas. Las tres últimas; sin embargo, están direccionadas
para el hombre. En las primeras cuatro trompetas habrá una explicación natural
para las calamidades, en las tres últimas el juicio será sobrenatural.

Todas las veces que la Biblia atribuye características humanas para las cosas
inanimadas es porque aquello se trata de un símbolo. La quinta trompeta comienza
con una trompeta cayendo del cielo y recibiendo una llave, esa estrella
diferentemente de las otras mencionadas en las primeras trompetas, claramente se
refiere a un ángel. En la Biblia, ángeles muchas veces son comparados a estrellas
(Job.38:7, Ap. 12:4).

Vemos en ese ángel una referencia a Satanás, Isaías 14:12 que él era la estrella de la
mañana, ese ángel caído recibió las llaves del abismo y parece que es en el abismo
que los demonios habitan o por lo menos están presos. En los evangelios leemos
que los demonios rogaron a Jesús para que no los mandase para el abismo (Lc.8:31).
Ese ángel caído del cielo recibió la llave de la habitación de los demonios. Lucas
10:18, habla del juicio de Satanás, pero aquel juicio todavía no fue ejecutado,
solamente acontecerá en la quinta trompeta.

En el capítulo 12:9-10 quedamos sabiendo que Satanás será lanzado en la tierra


cuando fuere arrebatado el hijo varón, que representa los santos vencedores. Ya
vimos que los vencedores fueron arrebatados antes que las trompetas suenen, pero
es solamente en la quinta trompeta que Satanás es lanzado en la tierra.

Hoy Satanás habita en regiones celestiales, mas en la quinta trompeta será lanzada
a la tierra. Hemos visto al Señor sacando los sellos y la historia aconteciendo, pero la
figura del anticristo todavía no se había manifestado. Ahora por ocasión de la quinta
trompeta, él será levantado como jefe sobre la tierra, en la quinta trompeta, él es
llamado de ángel del abismo, Abadón o Apolión (9:1-11).

En las cuatro primeras trompetas habrá una explicación natural para las
calamidades, entre tanto, a partir de que la quinta trompeta no habrá más tales
explicaciones. Por la descripción de las langostas podemos concluir que son
demonios, ellos actúan como escorpiones y en la Biblia, los escorpiones simbolizan
156

demonios: Luc 10:19 He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre
toda fuerza del enemigo, y nada os dañará.

Ellos no tocan en la hierba verde como escorpiones normales, sino apenas en los
hombres y todavía solamente en los hombres que no poseen el sello de Dios sobre
si (v.4). El sello es algo espiritual, entonces las langostas tienen que ser también; los
que están sellados con el sello de Dios son los judíos que fueron sellados después de
la abertura del sexto sello y parte de la iglesia que no fue arrebatada. Ellos serán
guardados de la gran tribulación.

La descripción de ellos como teniendo corazas, rostros como de hombres, coronas


en la cabeza, cabellos como de mujeres y los dientes como de león, refuerza la
visión que se trata de demonios. Mas lo principal es que ellos tienen como rey a un
ángel del abismo, cuyo nombre es Abadón y Apolión, ellos son apenas algunos
nombres mas de Satanás.

Por tanto las últimas tres trompetas no son naturales, sino sobrenaturales. La
duración de esa plaga será de cinco meses, esos demonios no tendrán permiso para
matar a los hombres, pero la angustia de ellos será tan grande que desearán la
muerte y la muerte huirá de ellos. Con la tierra parcialmente oscura, las fuentes del
agua damnificadas, el mar atingido y parte de la tierra destruida, como vimos en las
cuatro primeras trompetas, un tipo de plaga así torna la vida en la tierra
intensamente angustiante.

El Señor permitirá que esos hombres que adoran demonios ahora sientan los
tormentos de esos mismos demonios sobre si. Hoy nosotros vemos posesiones
demoniacas; sin embargo, durante la quinta trompeta, las personas serán poseídas
y flageladas por demonios en un nivel que nosotros desconocemos. Ellos serán
sueltos del abismo, atacarán la carne humana, en aquellos días no habrá nadie para
expulsarlos como sucede ahora. La acción del diablo y de los demonios será
limitada. Las personas serán poseídas de una manera jamás imaginada.

La sexta trompeta – 91.13-21

Cuando el sexto ángel toque la trompeta, una voz grita de los cuatro ángulos del
altar, que son los cuatro cuernos del altar de incienso, donde era colocada la sangre
para hacer la redención en el antiguo testamento (Lv.16:18). Eso indica que el juicio
de Dios está basado en la redención de Cristo. Es porque los hombres no creen en la
redención que Dios envía su juicio.

Al sonar la quinta trompeta nadie murió, aquellos demonios no tenían autorización


para matar, sino apenas para causar dolor, aflicción y angustia. Ahora sin embargo,
una cantidad formidable de demonios será liberado y tendrán el poder para matar
157

los hombres. El número de esos demonios que serán liberados serán de doscientos
millones.

De acuerdo al versículo quince, todo eso fue preparado “para la hora, el día, el mes
y el año, para que maten la tercera parte de los hombres” no nos parece que se
trate de una fecha, sino de un periodo que tendrá la duración de un año, un mes, un
día y una hora. Durante ese periodo un tercio de la humanidad morirá. La quinta y la
sexta trompetas juntas acontecen en un periodo de un año y medio.

Muchos maestros creen que esas divisiones de caballería de los ejércitos citados en
ese pasaje, son demonios; y así siendo los cuatro ángeles que lideran esos ejércitos
también son demonios que estaban presos para cumplir un propósito específico de
Dios. Otros, sin embargo afirman que son ejércitos humanos; eso hace algún
sentido, pues en este caso China; por ejemplo podría movilizar un ejército de 200
millones de soldados fácilmente. Eso se armoniza con la sexta Copa que dice que
ese ejército viene del Oriente (16:12), el color de sus caballos y de sus caballeros es
rojo como del ejército chino. En su intervención contra Israel, ese ejército atraviesa
por India, Asia central y todos los países al norte de Israel, pasa por el río Éufrates,
cuyo lecho estará seco y llega finalmente a Jerusalén para la batalla del Armagedón
en el final de la gran tribulación (16:16). Esa incursión militar tendrá una duración de
un año, un mes, un día y una hora, tiempo para producir dos billones de muertos (si
fuese hoy).

Si esa interpretación estuviere correcta, China tendrá un papel importante en ese


drama protagonizada por la sexta trompeta. Como veremos al ser derramada la
sexta Copa de la ira de Dios, las aguas del río Éufrates secarán permitiendo el paso
de ese ejército que viene del nacimiento del sol – el Oriente (16:12), cuyo objetivo es
invadir Jerusalén y destruirla. Será la batalla final, en el valle de Armagedón, donde
todos los ejércitos se reunirán para guerrear en Israel (16:16). Cuando eso
acontezca, el más importante pasaje de la historia – Jesucristo entrará en escena. Él
volverá en medio de batalla y aplastará a todos esos ejércitos.

A pesar de la lógica de esa interpretación, me inclino a creer que eso ángeles “que
se encuentran atados junto al gran río Éufrates” son ángeles mismos y nos
generales chinos; esos ángeles serán liberados y comandarán un ejército de 200
millones de demonios.

La palabra de Dios nos dice que de hecho existen ángeles presos, todo comienza en
Génesis:

Gen 6:1 Aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la
tierra, y les nacieron hijas,
Gen 6:2 que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron
para sí mujeres, escogiendo entre todas.
158

Gen 6:3 Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque
ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años.

Gen 6:4 Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los
hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes
que desde la antigüedad fueron varones de renombre.

La palabra traducida como “gigante” en el original es “nefilin” la palabra “nefilin”


significa literalmente “caidores” o aquellos que hacen caer. Ellos fueron
engendrados por medio de la unión entre los hijos de Dios y las hijas de los
hombres.

Según algunos interpretes, los hijos de Dios y los hijos de los hombres serían de
linajes distintas de hombres. El linaje de de los hijos de los hombres sería el que
procede de Caín, un linaje de hombres perversos, infieles y asesinos. El linaje de los
hijos de Dios serían los descendientes del otro hijo de Adán llamado Set, serían
hombres piadosos y temerosos de Dios. Con la mescla de esos linajes surgieron los
nifilins.

Lo que invalida esa interpretación es el hecho de que en el antiguo testamento, Dios


no tiene hombres como hijos. Solamente en el nuevo testamento somos llamados
de hijos de Dios y somos nacidos de Dios. Además de eso, nadie se torna hijo de Dios
por descendencia. Porque mi abuelo era Enoc, no significa que yo soy hijo de Dios.
En la Biblia, nadie ingresa en la vida espiritual por herencia biológica. Esos hijos
mencionados aquí no eran hombres, sino ángeles. En Job los ángeles son llamados
de hijos de Dios: Job 1:6 Un día vinieron a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios,
entre los cuales vino también Satanás.

Job también dice: Job 2:1 Aconteció que otro día vinieron los hijos de Dios para
presentarse delante de Jehová, y Satanás vino también entre ellos presentándose delante
de Jehová.

Por una cuestión de coherencia y contexto, los hijos de Dios en el libro de Job deben
ser los mismos del libro de Génesis; eso significa entonces que hubo un momento
antes del diluvio en que los ángeles caídos tuvieron relaciones sexuales con
mujeres, engendrando otros seres, los cuales también se tornaron seres
demoniacos.

Hace algunos años, fue publicado en Brasil y en varios países un libro relatando la
historia de la liberación de una ex sacerdotisa de Satanás, en ese libro la autora
cuenta que Satanás tenía siete novias en Estados Unidos y mantenía relaciones
sexuales con todas ellas. El objetivo de él era engendrar un hijo, que cosa
impresionante. Yo mismo ya fui testigo de personas dando su testimonio que
tuvieron relaciones sexuales con demonios que tenían celos de ellas, no permitía
que nadie tocase en ellas, ellos hasta podían matar sus rivales. Cuando los ángeles
159

fueron a sacar a Lot de Sodoma, los hombres de aquella ciudad quisieron mantener
relaciones sexuales con ellos y cuando Lot les ofreció sus dos hijas vírgenes,
aquellos hombres las rechazaron porque querían de hecho, los ángeles (Gn.19:1-11).

En la epístola de Judas dice que:

Jud 1:6 Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia
morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran
día;
Jud 1:7 como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que
aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por
ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno

Judas está diciendo que esos ángeles no guardaron los límites de su propio cuerpo
físico, esto es el cuerpo angelical; esos ángeles saliendo de los límites de su cuerpo o
domicilio se entregaron a la prostitución como los habitantes de Sodoma y
Gomorra; además de eso, ellos siguieron a otra carne, o sea, una criatura de otra
especie para prostituirse. Tales ángeles fueron presos para el juicio del gran día de la
gran tribulación. Si es el caso, esos ángeles mencionados en Judas son aquellos que
fueron guardados “para la hora, el día, el mes y el año” conforme Apocalipsis 9:14-
15.

Esos ángeles están guardados para la sexta trompeta que son 200 millones de
ángeles y cuando fueren libertados matarán un tercio de la humanidad. Son ángeles
tan terribles, tan demoniacos que no se contentarán en poseer el cuerpo de alguien,
su deseo es matar las personas.
160

La visión del ángel


Como sucede con el capítulo siete que es un paréntesis entre el sexto y el séptimo
selo, los capítulos diez y once son dos paréntesis: la visión del ángel de Dios y el
ministerio de los dos testigos en Jerusalén durante el gobierno del anticristo, eses
dos paréntesis acontecen entre la sexta y la séptima trompeta.

1. La visión del ángel – 10.1-6


Ap. 10:1 Vi descender del cielo a otro ángel fuerte, envuelto en una nube, con el arco
iris sobre su cabeza; y su rostro era como el sol, y sus pies como columnas de fuego.
Ap. 10:2 Tenía en su mano un librito abierto; y puso su pie derecho sobre el mar, y el
izquierdo sobre la tierra;
Ap. 10:3 y clamó a gran voz, como ruge un león; y cuando hubo clamado, siete truenos
emitieron sus voces.

Ese ángel es el Señor Jesús, en otros pasajes de Apocalipsis, Él también es llamado


de ángel, Él es el ángel que sube del nacimiento del sol, teniendo el sello de Dios
(7:2), el ángel que carga el incensario con las oraciones de los santos (8:3). En este
pasaje, Él es visto viniendo para tomar pose de la tierra. Todas las características
atribuidas a ese ángel son a la verdad características del propio Cristo. En primer
lugar vemos que Él está vestido de una nube (v.1). Todavía no está sobre la nube,
como en Mateo 24:30 y 26:24. Venir sobre la nube es venir abiertamente, pero a la
altura de la sexta trompeta Él estará vestido de una nube, o sea, su venida todavía
es secreta.
161

En segundo lugar se lee que Él tiene un arco iris sobre la cabeza (v.1) ese el mismo
arco iris que circunda el trono de Dios (4:3). Es el arco iris de la alianza de Dios con el
hombre, conforme Génesis 9:8-13. Dios hizo una alianza con el hombre, eso indica
que el juicio de Cristo es ejecutado de acuerdo con la alianza.

La tercera característica del ángel: su rostro es como el sol (v.1). Cuando Juan vio a
Jesús en al capítulo 1, él dijo que su rostro era como el sol (1:16). Esa es una
evidencia de que ese ángel es la verdad, el Señor Jesús.

En seguida constata que sus pies son como columnas de fuego (v.1) cuando Dios
descendió sobre el monte Sinaí para entregar los diez mandamientos a Moisés, el
pueblo de Israel vio el monte humeando y columnas de fuego ardiendo de modo
que nadie podía aproximarse (Éx.19:18). Esa columna de fuego simboliza el juicio de
Dios, pies como columnas de fuego significa que Él viene para juzgar (Hb.12:29).

Esas cuatro características físicas indiscutiblemente apuntan para el Señor Jesús,


además de ellas, existen todavía tres señales importantes. En el primero, Él posee
un librito en la mano (v.2), ese librito es el mismo que Él tomó de mano del padre, lo
cual solo Él era digno de abrir (5:7). Ese libro estaba por dentro y por fuera y sellado
con siete sellos.

Como vimos este es el libro de la alianza o testamento, siendo el Señor, el heredero


y el rescatador, Él está con el libro en la mano como autorización de pose.

El libro estaba sellado en el capítulo cinco, ahora está casi completamente abierto,
porque la mayoría de los sellos fueron abiertos. A la medida en que los sellos fueron
abiertos, el libro se tornó más pequeño y ahora es un librito. A pesar de eso, todavía
es un libro, porque no está todavía consumado.

El segundo señal a ser considerado es el hecho de su pie derecho estar sobre el mar
y el izquierdo sobre la tierra (v.2). Cuando los israelitas se preparaban para entrar en
la tierra prometida, el Señor les dijo: Jos 1:3 Yo os he entregado, como lo había dicho a
Moisés, todo lugar que pisare la planta de vuestro pie.

Colocar los pies, según la palabra de Dios, significa tomar pose (Dt.11:24, Js.1:3;
Sl.8:6). Significa que él viene a tomar pose de la tierra.

Así como Dios mandó que Israel pisase en la tierra para apropiarse de ella, e Señor
Jesús viene para apropiarse de la palabra del Salmos 2:

Sal 2:7 Yo publicaré el decreto; Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy.
Sal 2:8 Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión tuya los confines de la
tierra.
El Hecho de Jesús venir y pisar con el pie derecho en la tierra y el izquierdo en el mar
significa que Él está viniendo para tomar pose. El Señor viene para tomar de la mano
del diablo aquello que él usurpó. A pesar de él ser llamado como el príncipe de este
162

mundo, la tierra no le pertenece, está llegando aquél que es el verdadero dueño, su


nombre es el príncipe de la paz. Él viene para apropiarse de aquello que Él compró
con su propia sangre: el hombre, la tierra y toda la creación.

Finalmente leemos que Él habla como león, Él ruge como león, no hay duda de que
se trata del Señor Jesús, pues Él es el león de la tribu de Judá. Proverbios dice que el
rugido del león es como la voz del rey. Pro 19:12 Como rugido de cachorro de león es la ira
del rey, Y su favor como el rocío sobre la hierba.
El ángel brandó como el león, eso significa que Él es el propio rey. Cristo como rey,
es provocado a la ira y su indignación resonará por toda la tierra. En los evangelios
Él es el cordero de Dios para hacer la redención, ahora Él es el león de la tribu de
Judá para juzgar a Satanás y el mundo.

2. El cumplimiento del misterio de Dios – 10.7

Después que el rey Jesús brandó, los siete truenos emitieron sus voces (v.4). Juan
oyó lo que los truenos dijeron cuando iba registrarlas, una voz del cielo le dijo:
guarda en secreto las cosas que los truenos hablaron y no las escribas; eso es
interesante. ¿Si lo que fue dicho por los truenos no era para ser escrito, por qué
hablaron? ¿Y si no es para ser revelado, por qué registrar el hecho? Yo creo que ellos
hablaron a respecto de la venida del Señor, porque el ángel dijo: ya no habrá
demora.

Un día los truenos hablarán y la iglesia oirá, en este día, el pueblo de Dios va tomar
conocimiento de lo que ellos profirieron. La venida de Jesús solo será sorpresa para
quien estuviere durmiendo, para los que están atentos habrá muchas señales que la
precederán. Ya no habrá más demora, sino en los días de la voz del séptimo ángel,
cuando él estuviere para tocar la trompeta, se cumplirá entonces el misterio de Dios
anunciado a sus siervos, los profetas (v.6-7).

La séptima trompeta incluye las siete Copas de los flagelos de Dios (que es al final
de la gran tribulación), el milenio, el gran trono blanco, la nueva Jerusalén y el nuevo
cielo y la nueva tierra. La séptima trompeta es bien amplia e incluye el
completamiento del misterio de Dios. Ella es la última trompeta mencionada por
Pablo en sus dos cartas.

1Co 15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se


tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos
transformados.
1Ts 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con
trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
163

3. El misterio de Dios
Ap. 10:6 y juró por el que vive por los siglos de los siglos, que creó el cielo y las cosas
que están en él, y la tierra y las cosas que están en ella, y el mar y las cosas que están
en él, que el tiempo no sería más,
Ap. 10:7 sino que en los días de la voz del séptimo ángel, cuando él comience a tocar la
trompeta, el misterio de Dios se consumará, como él lo anunció a sus siervos los
profetas.

De Adán a Cristo todo fue desvendado, durante este tiempo de la gracia de Dios,
todo es un misterio. Podemos ver por lo menos siete misterios que son
mencionados y revelados en el nuevo testamento. En aquellos días, cuando el
séptimo ángel toque la trompeta, todos esos misterios serán completamente
revelados delante del mundo.

a. La encarnación de Cristo.

Las personas no entienden como Dios puede hacerse hombre, ellas prefieren
pensar que Cristo era apenas un hombre, pero Él era Dios y eso es un misterio. 1Ti
3:16 E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne,
Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo,
Recibido arriba en gloria.
Es un misterio que haya alguien en el trono y al mismo tiempo en medio del trono
haya un cordero (5:6). El cordero es el que está sentado en el trono, no son las
mismas personas, pues en seguida, el cordero recibe el libro de aquél que está
sentado en el trono (5.8). En este escenario tenemos: aquél que está sentado en el
trono, el cordero de pie en medio del trono y el Espíritu de Dios siendo las siete
tochas y los siete ojos del cordero. Esa descripción es capaz de dejar a cualquier
confuso. La encarnación es un gran misterio.

a. El propio Cristo.

Todavía hoy muchos no saben hoy como posicionarse con respecto de Cristo: si Él
era un buen hombre, un maestro o un engañador. Cristo es un misterio que será
desvendado en aquellos días.

Col 2:2 para que sean consolados sus corazones, unidos en amor, hasta alcanzar
todas las riquezas de pleno entendimiento, a fin de conocer el misterio de Dios el
Padre, y de Cristo,
Col 2:3 en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del
conocimiento.

La palabra Cristo en la Biblia se refiere a Jesús como cabeza y a la iglesia como su


cuerpo, Cristo es la unión misteriosa entre la divinidad y la humanidad, Cristo es la
mescla espiritual entre nosotros y Dios, en Cristo somos parte de la divinidad, Él es
la divinidad y nosotros somos su cuerpo, su extensión. Somos uno con Él, porque el
cuerpo implica en una unidad, lo que dice respecto a la cabeza también dice al
respecto del cuerpo, lo que la cabeza tiene, el cuerpo también posee. El tipo de la
164

cabeza es el tipo del cuerpo. Nosotros tenemos la vida de Dios dentro de nosotros,
entre tanto este misterio se cumplirá completamente en los días de la última
trompeta. Cristo y su iglesia que es su cuerpo, serán vistos en las nubes con poder y
gloria.

Un día encontré alguien que se declaró un budista cristiano, yo le dije: si tú sabes lo


que es el budismo, debe reconocer que eso es una posibilidad, pues en el budismo
no hay Dios y Jesús declaró ser uno con Dios, Él es Dios. Él medio molesto
respondió: Jesús fue un gran hombre, si usted sería cristiano no diría algo así,
respondí. Esta respuesta lo asustó y él respondió: ¿Usted no cree que Él fue un gran
hombre? Yo creo que Él fue más que eso, pero a la verdad tú ni crees en eso,
continué.

Permítame explicarle, hubo un día en que Jesús se declaró igual a Dios (Jn.5:18). Él
dijo: yo y el padre somos uno, quien viene a mi, ve al padre (Jn.14:9). Los judíos
entendieron eso que hasta quisieron apedrearlo por causa de esa afirmación. Él dijo:
antes que Abraham existiese, yo soy (Jn.8:58). Yo Soy es el nombre de Dios, usted
no puede afirmar que Jesús es un gran hombre y todavía así no creer en esas
afirmaciones que Él hizo a respecto de si mismo. Usted solo tiene tres salidas a esas
afirmaciones de Jesús: la primera posibilidad es que Él era un mentiroso, porque si Él
no es Dios como afirmó serlo; eso hace de Él un mentiroso. Usted no puede decir
que un mentiroso es un gran hombre, Él pudo haber enseñado cosas bonitas, pero
si era mentiroso y engañador, no era gran hombre. La segunda posibilidad es
reconocer que Él era completamente loco que tenía delirios al afirmar ser Dios; si no
admite que Él fue mentiroso y engañador, entonces tal vez admita que Él fue un
lunático, pero si admite que fue un loco; por favor no diga que Él fue un gran
hombre. Si no cree en la primera ni en la segunda posibilidad, entonces solo resta
una alternativa: Él habló la verdad cuando dijo ser Dios, en caso si haya dicho la
verdad, entonces Él es Dios y no apenas un gran hombre.

Esas colocaciones dejaron aquél hombre perplejo y en aquel día, él tuvo que admitir:
no se puede aceptar las enseñanzas de Jesús y al mismo tiempo rechazarla. Jesús es
el Señor. En los últimos días de la trompeta, ese misterio será completamente
revelado al mundo.

b. La iglesia.

Un tiempo atrás, fui pagar una cuenta y recibí un dinero a más del vuelto,
normalmente cuando el vuelto es pequeño ni cuento y lo coloco en el bolsillo, pero
en aquel día cuando llegué a la casa, percibí que había dinero sobrando. Volví
inmediatamente para devolverlo, el funcionario me miró como si fuese un
extraterrestre, ¿volvió para devolver el dinero? Me pregunto sorprendido, le dije:
165

ese dinero no es mío, va hacer alguna diferencia en su caja y tú tendrás que pagar
después. Él me respondió medio como que boca abierta: tú eres muy extraño, yo
respondí: es porque no soy de aquí, a la verdad soy de otro mundo, un peregrino, mi
mundo es otro. Él parecía que estaba viendo un extraterrestre, de allá de donde
vengo no cogemos nada de nadie, por el contrario nosotros damos, es por eso que
yo vine devolverle el dinero. La sorpresa de él tradujo este misterio: el creyente
verdadero es un enigma, la iglesia verdadera es un misterio, las personas del mundo
no consiguen entender un creyente lleno del Espíritu Santo. Nosotros somos
misteriosos para ellos, nuestro comportamiento, ética y moral parecen
completamente absurdos para ellos.

Ef. 3:4 leyendo lo cual podéis entender cuál sea mi conocimiento en el misterio de Cristo,
Ef. 3:5 misterio que en otras generaciones no se dio a conocer a los hijos de los hombres,
como ahora es revelado a sus santos apóstoles y profetas por el Espíritu:
Ef. 3:6 que los gentiles son coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la
promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio.

En los días de la última trompeta todos van a entenderán, seremos glorificados y


todos dirán: ellos eran así, porque verdaderamente eran hijos de Dios.

c. El reino de los cielos.

La manera como Dios opera actualmente por medio de su pueblo es un gran


misterio.

Mat 13:11 El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los
misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.
Ef. 6:19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a
conocer con denuedo el misterio del evangelio.

Tanto el reino de Dios como las buenas nuevas del Evangelio son un misterio, el
reino del Señor todavía es enigmático, porque ese reino hoy está oculto dentro de
nosotros (Lc.17:21). Todavía en los días de la última trompeta, el enigma del reino de
Dios será revelado, porque en aquellos días los reinos de este mundo se tornarán
del Señor Jesús y Él reinará visiblemente sobra toda la tierra.

d. El habitar interior de Cristo.

La humanidad piensa que somos locos cuando decimos que tenemos Cristo
habitando dentro de nosotros; eso también es un misterio.

Col 1:26 el misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha
sido manifestado a sus santos,
166

Col 1:27 a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre
los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria.

El misterio que estuvo oculto desde la eternidad es Cristo habitando en el hombre,


Dios habita dentro de nosotros, la única manera de Él realizar su obra en el hombre
es viniendo a habitar dentro de él; eso es un misterio: el padre se colocó dentro de
nosotros. La vida de Dios fue inyectada dentro del hombre, es como un santo virus:
tiene un ciclo de incubación, maduración y reproducción. Una persona infectada por
un virus inicialmente no percibe porque primero el virus queda incubado. Solamente
mas tarde, cuando el virus hubiere cumplido su ciclo, se manifiesta la enfermedad.
La misma cosa sucede con nosotros, nosotros tenemos dentro de nuestro espíritu
el santo virus de la vida divina. Un día se manifestará en su plenitud y cuando eso
suceda, el misterio sobre su habitación en nosotros será desvendado y todos verán
que somos hijos suyos porque nos tornaremos tal cual Él es.

Que cosa maravillosa vivir la vida con la cual el propio Dios vive, Él ya colocó dentro
de nosotros, es por eso que yo no creo en la pérdida de la salvación. Para ese virus
divino no existe cura, una vez contaminado por ese virus no hay maneras; si
subimos a los cielos, Él estará allá, si hacemos nuestra cama en el más profundo
abismo, Él estará allá; si tomamos alas de la alborada y nos detuviéramos en los
confines del mundo, Él estará allá esperándonos y nos dirá: nadie puede arrebatarlo
de mi mano.

Algunos hermanos quedan preocupados por saber si las personas que se apartan de
la iglesia, son de hecho salvas. Yo no me preocupo ¿Sabes por qué? Porque si ellas
fueron contaminadas, no hay más cura para ellas, correrán el mundo pero volverán.
Mas si no fueron contaminadas, también nunca retornarán, porque de hecho nunca
fueron de aquí. Es un misterio Dios dentro de nosotros contendiendo contra el
diablo y con la carne. Hay Dios, el Espíritu Santo peleando dentro de nosotros
contra el diablo y contra la carne. Nosotros somos la habitación del Señor, Dios
habita dentro del hombre, ese es el centro de todo el evangelio. ¿Cuál es la
diferencia entre el cristianismo y todas las demás religiones? Todas ellas enseñan al
hombre un camino para agradar a Dios, el cristianismo; sin embargo, nos enseña un
camino. Jesús nunca dijo que vino para enseñarnos un camino, Él apenas dijo: yo soy
el camino, Él nunca dijo: yo voy orar al padre para que ustedes tengan vida o voy a
enseñarlos la manera para que tengan vida; Él apenas afirmó: Yo soy la vida. Él
nunca dijo: voy a enseñarlos la verdad, apenas afirmó: Yo soy la verdad. Por eso que
Pablo dice que todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento están ocultos en
Cristo. ¿Dónde está ese Cristo hoy? Está en nuestro espíritu. Nosotros cargamos
dentro de nosotros la sabiduría que necesitamos, ser cristianos es nada más que
dejarnos ser conducidos por ese Cristo que habita en nuestro interior. Ser cristiano
es permitir que Él sea todo en nosotros.
167

Cuando Él dijo: Yo soy el camino, está afirmando que él es el camino para vencer el
pecado, las drogas, la prostitución, el homosexualismo, para tener un buen
matrimonio, para ser próspero y hasta rico. Muchos quieren formulas y métodos
para alcanzar todas estas cosas, pero no hay ninguna fórmula. Él es el camino,
teniendo a Él vencemos todo, las personas siempre me piden: pastor me enseña
algunos pasos para vencer eso o alcanzar aquello. Mas no hay pasos, hay el camino,
Cristo es el camino. Cuanto más Cristo fluya en nosotros, más tendremos las
realidades de las bendiciones de Dios.

El mundo no entiende porque es un misterio, pero para nosotros es una realidad


íntima dulce y maravillosa, el Señor Jesús está tan próximo de nosotros que ni
mismo en el cielo Él podrá estar más cerca, porque Él está dentro de nosotros.
Disfrutando de una unión así ¿Cómo es posible no tener intimidad? Si no la
alcanzamos, el problema no está en Cristo que está en nosotros, el problema está
en que a veces los ignoramos, relacionándonos con Él de manera religiosa, natural y
hasta meramente intelectual. Volvámonos entonces para nuestros espíritus que es
el lugar donde Él habita.

e. La resurrección de los santos.

No sabemos como, los cuerpos fueron quemados, destruidos o comidos por fieras
podrán resucitar, pero en aquellos ese misterio se completará.

1Co 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos
transformados,
1Co 15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se
tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos
transformados.

El nuevo testamento menciona siete misterios. La resurrección es uno de ellos que


suene la séptima trompeta, fue por eso que JESÚS dijo que en los días de la voz del
séptimo ángel cuando él esté por tocar la trompeta, se cumplirá entonces el
misterio de Dios, según Él anunció a sus santos, los profetas (Ap.10:7). Todos los
misterios se cumplirán, el último de ellos, la resurrección y la glorificación sucederá
cuando se toque la séptima y la última trompeta.

f. El evangelio.

El propio mensaje que predicamos es locura para los que se pierden y no puede ser
entendida por el hombre natural (1Co.2:14).
168

Ef. 6:19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a
conocer con denuedo el misterio del evangelio.
Rom. 16:25 Y al que puede confirmaros según mi evangelio y la predicación de
Jesucristo, según la revelación del misterio que se ha mantenido oculto desde
tiempos eternos.

La primera vez, Cristo vino sentado en un jumento, Él vino para humislarse y sufrir
una muerte de cruz; eso ha sido un misterio, pero en los días de la última trompeta
Él vendrá en un caballo blanco y los pueblos los verán que el cordero de Dios que
quita los pecados del mundo, también es el león de la tribu de Judá que reinará
sobre las naciones.

4. Juan comiendo el librito – 10.8-11


Ap. 10:8 La voz que oí del cielo habló otra vez conmigo, y dijo: Ve y toma el librito que
está abierto en la mano del ángel que está en pie sobre el mar y sobre la tierra.
Ap. 10:9 Y fui al ángel, diciéndole que me diese el librito. Y él me dijo: Toma, y cómelo;
y te amargará el vientre, pero en tu boca será dulce como la miel.

El primer pecado fue una cosa de comer, comer en la palabra de Dios tiene el
sentido simbólico de inyectar, colocar dentro. Cuando el hombre comió del fruto del
árbol del conocimiento del bien y del mal; por ejemplo, él colocó la naturaleza del
pecado dentro de si.

Juan recibe el libro para ser devorado, eso significa que la palabra de Dios debería
ser colocada dentro de él; así como el alimento después de ser digerido viene a
hacer parte de nosotros mismos, la palabra recibida por revelación después de
digerida en nuestro espíritu también tiene el poder de hacer parte de nosotros
mismos. Tanto Jeremías como Ezequiel comieron la palabra de Dios.

Jer 15:16 Fueron halladas tus palabras, y yo las comí; y tu palabra me fue por gozo y por
alegría de mi corazón; porque tu nombre se invocó sobre mí, oh Jehová Dios de los
ejércitos.

Eze 2:8 Mas tú, hijo de hombre, oye lo que yo te hablo; no seas rebelde como la casa
rebelde; abre tu boca, y come lo que yo te doy.
Eze 2:9 Y miré, y he aquí una mano extendida hacia mí, y en ella había un rollo de libro.

Eze 3:1 Me dijo: Hijo de hombre, come lo que hallas; come este rollo, y ve y habla a la casa
de Israel.
Eze 3:2 Y abrí mi boca, y me hizo comer aquel rollo.
Eze 3:3 Y me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu vientre, y llena tus entrañas de este rollo
que yo te doy. Y lo comí, y fue en mi boca dulce como miel.
169

Juan dice que el sabor del libro era dulce en la boca y amargo en el estomago; eso
significa que aquel libro era la palabra de Dios, Juan tendría que profetizar mucho
todavía (Ap.10:11) y para profetizar la palabra de Dios le era necesario comerla
antes. Comer la palabra del Señor es un principio espiritual válido para nosotros en
cualquier circunstancia. Para que hablemos de parte de Dios primero tenemos que
comer la palabra.

Ese acto de comer la palabra tiene dos momentos: el primero, ella es dulce como la
miel, es el momento en que recibimos la revelación cuando el Señor abre nuestro
entendimiento, cuando nuestro corazón es convencido por la palabra, ahí entonces
decimos: ¡ah! Ahora estoy entendiendo, ¡ahora percibo! Esa experiencia es dulce y
agradable. Después de eso, viene el segundo momento, cuando el Señor viene para
tornar esa palabra una experiencia en nuestra vida; eso a veces es amargo.

Los dos momentos son necesarios, es necesario probar la naturaleza dulce y


sabrosa de la palabra, pero también tenemos que experimentar la parte amarga del
tratamiento de Dios. La palabra es recibida como vida en nuestro espíritu, pero
debe hacerse carne en nuestra experiencia. Juan dice que el verbo se hizo carne,
ella tiene que transformarse en una realidad visible en nosotros, necesitamos
tornarnos la palabra ambulante.

Otra forma de comprender ese proceso es viendo como las porcelanas son
pintadas, cuando una porcelana es pintada, al principio esa tinta puede ser
removida. Después que aquella porcelana pintada es llevada al fuego, la tinta
penetra e impregna de tal forma que la cerámica llega a hacer parte de ella.

Nosotros somos esa porcelana y la tinta es la palabra de Dios, somos pintados


cuando recibimos la palabra, en ese momento ella puede ser fácilmente borrada por
el olvido, pero si después de recibir fuéremos llevados al fuego de Dios; entonces
aquello que aprendimos viene a hacer parte de nosotros y nunca más lo
olvidaremos. La palabra es impresa en nosotros por el fuego.

No basta apenas comerla, es necesario digerir aquellos que comemos; si no


experimentamos el sabor amargo de la palabra, eso significa que ella no fue
asimilada en nuestro ser. Antes de profetizar, Juan necesitó experimentar sus dos
sabores: dulce en el primer momento y amargo en el segundo. Antes de profetizar
al mundo, necesitamos que ese alimento celestial sea digerido en nuestro espíritu
tornándose algo visible en nosotros.
170

Los dos testigos


Los capítulos diez y once son paréntesis entre la sexta y la séptima trompeta. En el
capítulo diez, tenemos la visión de Cristo viniendo para tomar pose de la tierra y en
el capítulo once vemos la revelación de los dos testigos que profetizarán en
Jerusalén durante la gran tribulación.

Al evaluar sobre esta visión, tres cosas deben ser consideradas. En primer lugar,
necesitamos entender el tiempo, el espacio del tiempo abarcado por esa profecía es
de cuarenta y dos meses, 1260 días (v.2-3). Ese es el tiempo de la gran tribulación o
de la segunda parte de la septuagésima semana de Daniel (Dn.12:7, 7:25, 9:27).

Cuando el anticristo haga una alianza con Israel comienza la septuagésima semana,
en medio de la semana, él quebrará el acuerdo (Dn.9:27, Ap.13:7), perseguirá los
judíos y los forzará a interrumpir la adoración a Dios (Ap.13:7; Dn.7:21, 8:11-12).
Cuando él quiebre la alianza, también colocará el abominable de la desolación en el
tiempo, entonces tendrá inicio de la gran tribulación. Durante ese tiempo, los dos
testigos estarán profetizando.

La segunda cosa que necesitamos entender es el lugar donde los dos testigos
profetizarán, el palco de su ministerio será en la ciudad de Jerusalén, que será
entregado a los gentiles, principalmente al anticristo.

La tercera cosa que debemos tener en mente es que la duración del ministerio de
esos dos testigos será de cuarenta y dos meses o tres años y medio. Esos dos
testigos son dos oliveras y dos candelabros que profetizarán vestidos de paño de
saco (Zc.4:11-14, Ap.11:3-4). Ellas son Moisés y Elías.
171

1. Jerusalén pisada por los gentiles – 11.1-2


Ap. 11:1 Entonces me fue dada una caña semejante a una vara de medir, y se me dijo:
Levántate, y mide el templo de Dios, y el altar, y a los que adoran en él.
Ap. 11:2 Pero el patio que está fuera del templo déjalo aparte, y no lo midas, porque ha
sido entregado a los gentiles; y ellos hollarán la ciudad santa cuarenta y dos meses.

Juan recibió instrucciones para medir el santuario de Dios con una caña y una vara,
en la Biblia la caña es usada para medir que significa apropiación (Nm.35:2-5, Ez.45:1-
3, 20, 48:8, 12, 15). La vara por su vez se relaciona con la disciplina (Prov.10:13).
Cuando tenemos la vara y la caña juntas, ocurre la medición para ver algo de
acuerdo con el padrón y así traer la disciplina y el juicio.

El santuario está relacionado a los judíos, lo que indica que el templo deberá ser
construido en Jerusalén. La Biblia dice que del templo serán medidos el lugar santo
y el lugar santísimo, pero las medidas del atrio no serán tomadas. El motivo es que
los gentiles llegarán a los pies de la ciudad santa – Jerusalén.

Luc 21:24 Y caerán a filo de espada, y serán llevados cautivos a todas las naciones; y
Jerusalén será hollada por los gentiles, hasta que los tiempos de los gentiles se cumplan
(Is.52:1).

Jerusalén será pisada por los gentiles, esto es, será tomada y gobernada por ellos
durante tres años y medio. Vamos recordar algunos hechos históricos: en el año de
1967, Jerusalén fue reconquistada por los judíos durante la guerra de los seis días,
en esa guerra relámpago, Israel sufrió el ataque de sus seis enemigos del mundo
árabe: sirios, egipcios, libios, jordanianos, etc. Entre tanto en una semana Israel
destruyó todos sus enemigos alrededor, como despojo de guerra, tomó de vuelta
las planicies del Sinaí y del Golán. Jerusalén que estuvo en poder de los árabes, fue
reconquistada, al vencer la liga árabe, Israel declaró que Jerusalén sería la capital de
los judíos para siempre, ellos jamás saldrán de allá. Es claro que esa declaración es
una señal profética, a partir de aquella fecha, Jerusalén dejó de ser un territorio
gentílico para tornarse nuevamente la ciudad de los judíos.

La palabra del Señor declara que Jerusalén todavía será dominada por los gentiles
durante cuarenta y dos meses, estos son los cuarenta y dos meses de la gran
tribulación. En ese periodo, entrarán en escena los dos testigos que profetizarán
vestidos de saco.

2. Los dos testigos – 11.3-14

¿Quiénes son estos dos testimonios? Existen varias teorías al respecto. La primera
de ellas se dice que se traten de dos personas desconocidas hoy, que se levantarán
172

en aquellos días para profetizar, no tratándose; por tanto de ningún personaje


bíblico conocido. Esa teoría encuentra una dificultad: la palabra de Dios dice que
estos dos testimonios son las dos oliveras que están delante del Señor (11:4 y Zc.4:11-
14). Por tanto, ellas existen y apenas esperan el tiempo para que se manifiesten, no
pueden ser dos personas desconocidas que todavía van surgir.

Una segunda teoría afirma que se tratan del Elías y Enoc, esa afirmación está basada
en el hecho de que tanto Elías como Enoc no murieron y que por tanto, necesitan
venir para morir, porque todo hombre debe morir una vez como está escrito: Heb
9:27 Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y
después de esto el juicio.

¿Mas qué decir de los santos arrebatados vivos? Ellos ciertamente no morirán. A
pesar que Enoc profetizó la venida del Señor (Jd.14-15) es improbable que él sea uno
de los testigos, porque no tuvo ninguna relación con Israel, él fue un patriarca que
vivió antes del diluvio, probablemente tres mil años antes de Israel. Los dos
testigos, por otro lado, deben estar relacionados con Israel.

La tercera posición con la cual concordamos, declara que los dos testigos son Elías y
Moisés. Algunos no concuerdan de Moisés, porque así él moriría dos veces. ¿Pero
qué decir de Lázaro, que murió dos veces y otro que fueron resucitados como el
soldado con los huesos de Eliseo, el hijo de la viuda de Naín y Eutico?

Nadie contradice que Elías sea uno de los testigos, porque está escrito en
Malaquías. Mal 4:5 He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día de Jehová,
grande y terrible.

Juan Bautista vino en el mismo espíritu de Elías, pero Juan no era Elías. Ciertamente,
Elías vendrá en los días de la gran tribulación y será uno de los testigos, creemos
que los dos testigos son Elías y Moisés por los siguientes motivos:

a. Moisés y Elías estuvieron juntos, anteriormente en el monte de la


transfiguración (Mt.17:3).
b. Moisés representa la ley y Elías, los profetas (Lc.16:16).
c. Los judíos llamaban el antiguo testamento como “la ley y los profetas”.
d. Elías fue el mayor de los profetas, Moisés fue el legislador de Israel, el padre
de la nación.
e. Las obras de los dos testigos son semejantes a los hechos de Moisés y Elías
(compare Ap.11:5-6 con Éx.7:17, 19, 9:14, 11:1, 2Rs.1:10-12; 1Rs.17:1 y Stg.5:17).
f. Moisés transformó agua en sangre mientras que Elías hizo descender fuego
del cielo, hecho que se producirá durante el ministerio de los dos testigos
(11:5,6).
g. La venida de Elías fue predicha por Jesús: Mat 17:11 Respondiendo Jesús, les
dijo: A la verdad, Elías viene primero, y restaurará todas las cosas.
173

Además de eso la última profecía del antiguo testamento menciona que Elías
será enviado antes que venga el gran terrible día del Señor (Ml.4:5).
h. Las dos oliveras y los dos candelabros son mencionados en Zacarías 4:3, 11,
12, 14. Ellos son los dos hijos del óleo que estarán delante de Dios.
i. Hay cierta semejanza entre el ministerio de los dos testigos y de Cristo.
j. Tanto el ministerio de los dos testigos como duran exactamente tres años y
medio (Ap.11:3).
k. Los dos testigos serán muertos y resucitarán tres días y medio después, de la
misma forma que Jesús (Ap.11:11).

La venida de esos dos testigos representa la consumación de la gracia, de la


misericordia y la paciencia de Dios para con los judíos. Durante tres años y medio,
ellos ejercerán un ministerio semejantemente a los de Moisés y Elías; por tanto, la
vida de esos dos testigos servirá de señal para los judíos, también no lloverá durante
ese tiempo y la falta de lluvia provocará una calamidad. Por causa del cumplimiento
de esa profecía, los dos testigos serán odiados por todos.

La Biblia no esclarece sobre lo que los dos testigos predicarán, probablemente


testificarán a respecto de Jesús el Mesías de Israel que vino para los que son suyos,
pero los suyos no lo recibirán. Los judíos, finalmente comprenderán que aquél
extraño rabí de Galilea no fue otro sino el Mesías tan ansiosamente esperado.
Ciertamente lamentarán de haberlo entregado a los romanos para crucificarlo. Mas
con toda certeza, se alegrarán al saber que Él resucitó y volverá otra vez.

Ellos profetizarán vestidos de sacos de cilicio (v.3). Los sacos son símbolos de pesar
(2Sm.3:31). Ellos no predicarán el evangelio de la alegría, pero profetizarán vestidos
de luto, advirtiendo al pueblo a huir de la adoración del anticristo. El ministerio de
ellos será un ministerio de juicio (v.5). hoy no podemos herir aquellos que se
levantan contra nosotros, ni podemos matar o quemar personas en nuestras
prédicas, pero los dos testigos tendrán ese poder. El ministerio de Jesús fue un
ministerio caracterizado por la gracia, mientras que el de los dos testigos será
caracterizado por el juicio, o sea no lloverá durante tres años y medio, el agua que
sobró será transformado en sangre, caerá fue del cielo y morirá siete mil personas
en el terremoto que devastará Jerusalén.

El ministerio de esos dos testigos será tremendo, si alguien pretenda causarles


daño, saldrá fuego de sus bocas y los enemigos serán consumidos (v.5). Ellos
tendrán autoridad para cerrar el cielo para que llueva. Stg. 5:17 Elías era hombre sujeto
a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió
sobre la tierra por tres años y seis meses.

Ellos también tendrán autoridad para transformar agua en sangre y para herir la
tierra con todo tipo de flagelos cuantas veces quieran (v.6). Moisés agua en sangre
174

en la biblia y mandó venir flagelos en Egipto y ellos profetizarán exactamente


durante tres años y medio, o sea, 1260 días (v.3). El ministerio de eso dos testigos
deberá recordar a los judíos el ministerio de Elías y de Moisés.

En el final de su ministerio, ellos serán muertos por el anticristo (v.7). La bestia


mencionada aquí es el anticristo, que subirá del abismo (17:8) y del mar (13:1), él hará
guerra a los dos testigos y a los santos (13:7). El ministerio de los dos testigos tienen
la misma duración del ministerio de Jesús: tres años y medio, y del mismo modo
como Jesús murió en la plaza pública, ellos también morirán, ellos serán muertos
por el anticristo (v.7) y durante tres días y medio sus cuerpos quedarán expuestos
públicamente. Imagine el pensamiento del maligno: yo maté el otro y dejé que lo
enterrasen, después todo el mundo dijo que él resucitó. Ahora voy a matar esos
dos y no dejaré que sus cuerpos sean sepultados, quedarán expuestos en plaza
pública hasta podrecer. Así los judíos que creyeron en ellos percibirán que fueron
engañados.

Pero después de tres días y medio ellos resucitarán, eso es una señal muy clara para
los judíos, cuando los dos testigos resuciten, los judíos sabrán que sus testimonios
eran verdaderos – Jesucristo también resucitó y entonces clamarán por Jesús.
Todavía ni todos los judíos creerán, apenas los ciento cuarenta y cuatro mil, al final
de ese periodo la ciudad de Jerusalén se tornará como Sodoma (Is.1:9-10, 3:9,
Jr.23:14) y como Egipto (Ez.23:3, 8, 19, 27). El Texto no la llama por el nombre, mas
es la ciudad donde el Señor fue crucificado (v.8).

Luego después de haber subido al cielo en una nube, los testigos delante de todo el
mundo, ocurrirá un gran terremoto que destruirá la décima parte de Jerusalén y
causará la muerte de siete mil personas y los que restaren de los judíos glorificarán
al Dios del cielo (v.13). Recuérdese que también hubo un terremoto cuando Jesús
resucitó.

La resurrección de los dos testigos es diferente de aquella mencionada por Pablo


(1Ts.4:16) e igualmente diversa del Señor que resucitó al tercer día. Lázaro fue
resucitado al cuarto día, entre tanto esos dos testigos resucitarán después de tres
días, después de eso serán arrebatados, inclusive este arrebatamiento es diferente
de aquello predicho por Pablo (1Ts.4:17).

Busque reunir todas las informaciones ofrecidas hasta ahora a respecto de los
acontecimientos de la gran tribulación, habrá un señal en el cielo, el solo se
convertirá en sangre, la luna se oscurecerá. Cosas terribles van a acontecer en toda
la tierra que ya no será un buen lugar para vivir pues un tercio de los animales
marinos habrá muerto, un tercio del agua potable será contaminada, durante cinco
meses habrá una acción demoniaca que producirá extremo dolor y angustia.
Durante un año, un mes y un día doscientos millones de demonios van a matar un
175

tercio de los habitantes de la tierra, mientras eso los dos testigos estarán
profetizando en Jerusalén, el anticristo estará haciendo señales y prodigios y hasta
hará caer fuego del cielo. el falso profeta lo hará resucitar y dará poder de hablar a
una estatua, una marca será establecida, los creyentes que estuvieren aquí serán
perseguidos por no adorar la imagen ni recibir la marca; ese tiempo será el pero de
los tiempos que ya hubo en la tierra. Con todo al sonar la última trompeta, todas
estas cosas habrán pasado.

La séptima trompeta – 11.15-19

Cuando la séptima trompeta suene muchas cosas acontecerán, en cada una de las
seis trompetas anteriores apenas un ítem aconteció, pero en la séptima trompeta
mucho se verá como se lee en el verso 8. Eso puede ser resumido así: la ira de Dios
consistiendo en las siete Copas (15:1, 16:1-21), el último lamento para los moradores
de la tierra (Ap.11:18), el reino de Cristo (11:15-17). El juicio de los muertos (11:18), el
galardón de los profetas y los santos (2Co.5:10) y la resurrección y arrebatamiento
de los santos (1Co.15:23, 52, 1Ts.4:16-17).

De ese modo, la séptima trompeta incluye todos los eventos desde el fin de la gran
tribulación a la eternidad futura: la resurrección, el galardón, la destrucción de la
gran Babilonia (Ap.17:1-19:6), la bodas del cordero (Ap.19:7-9), la destrucción del
anticristo, del falso profeta, de Satanás y sus seguidores (19:11-20:3), el reino milenar
(Ap.20:4-6), el juicio final de los muertos y de Satanás (Ap.20:7-20, 11-15), el nuevo
cielo, la nueva tierra y la nueva Jerusalén por la eternidad (Ap.21:1-22:5).
176

La mujer y el dragón
Apocalipsis relata los hechos del fin de los tiempos, hay un total de veinte y dos
capítulos, en el final del capítulo once se puede decir que todo terminó (Ap.10:7;
11:15). No se considera los últimos once capítulos como continuación de los once
primeros.

Los capítulos de doce a dieciocho son un suplemento de los once primeros, nos
dicen como el reino de este mundo se tornará el reino del Señor y de su Cristo. Los
primeros once capítulos son un esbozo general, los once últimos capítulos nos dan
los detalles de determinados eventos y personajes importantes.

1. La visión del arca de la alianza – 11.19

Hay muchas visiones en Apocalipsis, entre tanto hay dos centrales: la visión del
trono en 4:2 y la visión del templo en 11:19, las visiones de cuatro a once se basan en
el trono, las de 12 a 22 tiene base en el templo de Dios. Las visiones de los sellos y de
las trompetas son basadas en la autoridad del trono y en el recuerdo del pacto, el
arco iris es la señal de la alianza.

El trono es el lugar donde Dios ejerce autoridad, todavía el templo es el lugar donde
Él habita, el arca es la expresión del propio Dios. El hecho del santuario abrir
significa que es fiel a si mismo, el Señor efectuará su eterno propósito.
177

2. ¿Quién es la mujer de Apocalipsis 12?

Necesitamos antes de todo percibir que la mujer es una señal, un símbolo espiritual.
Existen varias teorías sobre esa mujer. La iglesia católica enseña que esa mujer se
María y que el hijo varón es JESÚS. Esa interpretación no hace el menor sentido,
porque el texto no encaja con los hechos reales. María de hecho fue para el Egipto,
pero jamás huyó para el desierto ni tampoco fue guardada por 1260 días.

La mayoría de los evangélicos cree que la mujer sea una metáfora de Israel, ellos
usan como base el texto de Génesis 37:9 en que José tuvo un sueño: el sol, la luna y
once estrellas se curvaban delante de él, visto que la mujer está vestida del sol,
tiene la luna en los pies y está con una corona de doce estrellas, la visión de Juan
parece corresponder al sueño de José.

Según la Biblia, la mujer de Apocalipsis 12 no puede ser María ni Israel, veamos los
argumentos:

a. Una vez que esa visión es revelada en el cielo, esa mujer es totalmente del
cielo. María ni Israel tienen esta posición.
b. Esa mujer, después de dar a luz un hijo varón, ella huye para el desierto. Si
decimos que la mujer es Israel y el hijo es Cristo, eso no corresponde a
hechos reales de la historia.
c. La dispersión de Israel no fue por causa de la ascensión, si de hecho Cristo es
el hijo varón, además de eso el verso 17 dice que sus descendientes tienen el
testimonio de Jesús. Israel nunca sustentó el testimonio de Jesús.
d. Mientras que esta mujer estaba sufriendo para dar a luz el hijo varón, ella
encuentra al dragón; ese dragón tenía siete cabezas y diez cuernos. En el
capítulo 17:7-12, se ve que esas cabezas y esos cuernos representan algo del
futuro; por tanto, no pueden referirse a Israel, a María o a Jesús.
e. Los versos de siete a nueve narran que Satanás fue expulsado para la tierra,
basados en Efesios seis sabemos que eso todavía no se concretizó, pues
nuestra guerra todavía persiste en las regiones celestes; eso muestra que
tales hechos no se refieren a eventos de la época de Jesús.
f. Después que la mujer dio a luz el hijo, el dragón la persigue, muchos ven en
eso María. De hecho que María huyó para Egipto después de dar a luz a
Jesús, pero no después de su ascensión. El verso 17 habla del restante de la
descendencia de la mujer; eso no puede ser María, esos descendientes
tienen el testimonio de Jesús. El pueblo de Israel guardó los mandamientos
de Dios, pero no el testimonio de Jesús.

¿Quién es esa mujer entonces? El verso 17 del capítulo 12 nos dice que la
descendencia de esa mujer es constituida de dos grupos: los que guardan los
mandamientos de Dios y los que tienen el testimonio de Jesús. Claramente los que
178

guardan los mandamientos de Dios son una referencia a los judíos y a los que
guardan el testimonio de Jesús se refiere a la iglesia. La mujer por tanto representa
la totalidad del pueblo de Dios: ella incluye tanto Israel como la iglesia y hasta
mismo los patriarcas que vivieron antes de Israel.

Eso puede ser identificado por las partes que componen la señal de la mujer: el sol,
la luna y las estrellas. El sol apunta para la iglesia, la luna se refiere a Israel y las
estrellas son los patriarcas. Así se puede afirmar que esa mujer apunta para la
totalidad del pueblo de Dios en la historia: los patriarcas, Israel y la iglesia.

En toda la Biblia el pueblo de Dios es representado por una mujer (Is.54:5, Jr.3:14,
31:32, Os.2:19-20). Por otro lado, Jesús es siempre el novio (Mt.9:15, Jn.3:29,
2Co.11:2).

3. La descripción de la mujer.

Existe una correlación interesante entre la mujer de Apocalipsis doce y Eva en el


capítulo tres de Génesis. Solamente una mujer encontró la serpiente en el antiguo
testamento y esa mujer fue Eva, en Génesis tres. Y solamente una en nuevo
testamento: la mujer de Apocalipsis doce. Ambas mujeres fueron perseguidas por
una serpiente, los dolores de parte en Génesis tres están también aquí en
Apocalipsis 12 y esas dos mujeres producen una simiente para el cumplimiento del
propósito de Dios (Gn.3:15).

Esta mujer de Apocalipsis 12 es la misma que Dios había propuesto en su voluntad


eterna para el cumplimiento de su propósito en relación al enemigo. En el capítulo
doce de Apocalipsis; por tanto, se cumple la profecía de Dios revelada en Génesis
3:15. Eva fue engañada por el dragón – la antigua serpiente y cayó en el pecado. El
Señor prometió que de la semiente de la mujer vendría uno que pisaría la cabeza de
la serpiente.

Esa profecía se cumplió antes de todo en Cristo que en la cruz destruyó a Satanás;
Satanás debería ser todavía pisado debajo de los pies de la iglesia (Rm.16:20). Es una
profecía que tendrá un cumplimiento completo en el futuro, cuando la mujer que es
el pueblo de Dios, engendrará un descendiente que aplastará la cabeza de la
serpiente cuando fuere arrebatado hasta el trono de Dios. Eso se refiere al hijo
varón.

En Génesis vemos la mujer que fue perseguida y de cierta manera derrotada, pero
en Apocalipsis 12 nosotros vemos la mujer nuevamente, pero esta vez ella engendró
la simiente, el hijo varón que aplastará la cabeza de la serpiente. Ese es el
cumplimiento final de la profecía de Génesis. Los personajes son los mismos, pero al
179

final de la historia será diferente. En Génesis tenemos la promesa de la simiente, en


Apocalipsis 12 vemos esta simiente naciendo.

Siendo la mujer un símbolo, cada parte de su descripción también debe ser


entendida simbólicamente. En primer lugar, la mujer está vestida de sol; cuando
Jesús vino, la palabra de Dios dice que vino el sol de la justicia (Lc.1:78-79) y una gran
luz nació iluminando aquellos que estaban en tinieblas (Mt.4:13-16). La mujer está
vestida de luz y el nuevo testamento la iglesia es la luz del mundo; por tanto, el sol
con la cual esa mujer está vestida y que es la mayor parte de ella, apunta para la
iglesia, porque solamente la iglesia es llamada de luz del mundo, solamente la iglesia
es convidada para resplandecer como el sol (Fl.2:15, 2Co.3:18).

Esa mujer tiene también la luna debajo de los pies, eso no quiere decir que ella está
encima de la luna, en el sentido de sujetarla, sino que la luna está debajo de ella.

En la Biblia, la luna simboliza algo que apenas refleja la luz, nosotros sabemos que el
antiguo testamento es sombra de aquello que hoy es realidad en el nuevo
testamento. Las verdades de la ley que fueron reveladas al pueblo de Israel, eran
apenas el reflejo de aquello que tenemos hoy brislando en la iglesia; por tanto, la
luna apunta para Israel, para los santos de la dispersión de la ley.

Esa mujer tenía una corona de doce estrellas que simbolizan los patriarcas de Adán
hasta la época de la ley (Dn.12:3). Ellos son estrellas porque son santos individuales
que constituyen la buena base donde el árbol del pueblo de Israel se asentó.

La estrella en la cabeza de la mujer nos habla de una corona, nosotros sabemos que
los patriarcas que vinieron antes de la ley son la corona de gloria, ellos son aquella
buena raíz donde el árbol del pueblo de Israel creció. Es por eso que Israel no puede
ser arrancado, es por causa de Abraham, por causa de Isaac, por causa de Jacob,
Set, Enos, Enoc, Noé y muchos otros patriarcas que fueron estrellas
resplandeciendo en una época de tinieblas. Ellos ahora son las estrellas en la cabeza
de la mujer, concluyendo esa mujer tiene tres partes: las estrellas, el sol y la luna.
Las estrellas apuntan para los patriarcas, la luna apunta para los santos de Israel de
la época de la ley y el sol, que es la mayor parte de la mujer, apunta para la iglesia.
Esa mujer representa así los santos de todas las épocas, ella es una señal de todo el
pueblo de Dios y de todas las eras.

4. El hijo varón.

El verso dos dice que la mujer está embarazada, estar embarazada es figurativo.
Significa que la madre y el hijo son uno y que la condición de la madre es la
condición del niño. Podemos decir que el hijo está incluido en la madre; eso significa
180

que ese hijo hace parte de la mujer, de tal manera que quien mira para la mujer ve
solamente mujer y no el hijo. Ese hijo participa de todo lo que la mujer participa y él
tiene todo lo que la mujer tiene. El hijo varón; por tanto, es una parte de la propia
mujer.

Si la mujer es una señal, entonces el hijo varón también tiene que ser una señal, no
pude ser literal. El hecho de estar embarazada indica que el hijo está unido a ella
íntimamente, en lo que se refiere a su unión, ellos son uno, madre e hijo, pero en lo
que es al futuro ellos tienen un futuro diferente. El hijo es arrebatado al trono y la
mujer huye para el desierto, el hijo varón no se refiere a Jesús, pues como vimos Él
no se encaja en la historia; si el hijo es parte de la mujer y está unido a ella podemos
decir que el hijo varón se refiere a los santos vencedores de todas las épocas.

¿Qué significa el hijo varón? En la Biblia, la mujer está asociada a la dependencia, la


vida femenina simboliza dependencia, por eso el pueblo de Dios en todas las épocas
es comparado a una mujer o novia. Por otro lado, la vida masculina simboliza fuerza
y liderazgo, por eso Dios es siempre masculino en la Biblia. El hijo varón siendo
masculino, simboliza fuerza, así ese hijo varón es la parte fuerte de la mujer que son
los creyentes vencedores.

La obra de la iglesia como representante del Señor es sujetar y dominar sobre


Satanás, la iglesia no alcanzó el propósito de Dios ni lo conoce. ¿Qué hace Dios? Él
escoge un grupo de vencedores que cumplirán su propósito, llamamos eso de
principio de vencedores, el hijo varón está aquí para ilustrar esa verdad espiritual,
Dios tiene algo para realizar en cada época y todo su pueblo es convocado para
hacer parte de su mover, todavía apenas una parte responde. Esa parte es el hijo
varón, los vencedores; eso puede ilustrar en muchas partes de la palabra de Dios.

En Éxodo 19, Dios invitó todo el pueblo para que fuese una nación de sacerdotes,
pero la nación no respondió, Dios entonces alcanza su propósito a través de una de
las tribus, los levitas que respondieron positivamente.

El mismo principio es visto en el caso de Gedeón, toda la nación debería guerrear,


pero por ser miedosos y perezosos; dios separó apenas trescientos. A través de
esos trescientos, Dios alcanza su propósito, la victoria de ellos fue la victoria de toda
la nación y todos son beneficiados.

Después del cautiverio, todo israelita debería haber vuelto para reconstruir la
nación, pocos de ellos respondieron y retornaron, pero que esos pocos benefició a
toda la nación y el regreso de ellos es reconocido como el regreso de toda la nación,
fueron pocos los que volvieron.

Dios siempre alcanza su propósito a través de un remanente fiel, los levitas fueron
hechos sacerdotes y toda la nación fue bendecida. Los trescientos de Gedeón
181

lucharon y vencieron la batalla, la victoria conquistada fue una credibilidad a todo el


pueblo de Israel. Lo mismo sucede con la iglesia, ni todos los miembros de la iglesia
responden para cumplir con la voluntad de Dios; Él entonces separa un grupo
dentro de la iglesia para alcanzar su propósito. Es ese grupo que nosotros llamamos
de creyentes vencedores.

El hijo varón se refiere a los vencedores mencionados en las cartas a las siete
iglesias, recuérdese que la promesa para el vencedor está relacionada con el reino.
Aquí vemos el cumplimiento de aquellas promesas, cuando el hijo varón regirá a las
naciones con vara de hierro junto con el Señor Jesús.

El hijo varón a la verdad representa a los vencedores desde la fundación de la


iglesia, o sea, de dos mil años hasta aquí. Cuando Jesús resucitó, con Él resucitaron
los santos del antiguo testamento, luego ellos no hacen parte de esos vencedores,
representados por ese hijo varón, serán arrebatados para el trono de Dios.

5. El gran dragón.

La descripción de 12:3 es la misma de 13:1, eso muestra que el dragón y la bestia son
uno en naturaleza y propósito, la diferencia entre la bestia y el dragón es que en uno
está la corona en la cabeza y en el otro la corona está en los cuernos. El objetivo del
diablo es tener autoridad.

La primera cosa que se dice es que la antigua serpiente se tornó un dragón ¿Cómo
sucedió eso? Ella creció porque comió mucho en esos milenios que se pasaron. En
Génesis tres, el Señor condenó la serpiente a comer del polvo de la tierra. Nosotros
sabemos que cobra no come polvo; entonces el polvo es algo simbólico, apunta
para la carne del hombre que fue hecha del polvo de la tierra.

La comida de la serpiente es carne, no en el sentido físico, sino en el sentido


pecaminoso. El pecado es comida de la serpiente, donde hay pecado, hay también
un demonio junto. Asociado a todo pecado siempre existe un demonio, es por eso
que existen demonios de la bebida, del sexo, de la prostitución, del robo, etc. Al
pecar atraemos demonios y cuando continuamos en el pecado, estamos
alimentando un demonio en nuestras vidas.

El primer vaso de bebida alcohólica puede ser solo de curiosidad, el segundo vaso es
tentación, es el diablo tentándote porque le gustó su carne; pero el tercer vaso ya
es un demonio, usted no consigue abandonar más y se torna esclavo del él. Preste
atención: los tres aquí son un ejemplo, el proceso es un poco más largo, lo que
quiero decir es que en el comienzo es solo curiosidad, después se torna una
tentación, pero al fin el demonio entra para esclavizar. La serpiente se tornó un gran
dragón comiendo de la carne del pecado que el hombre le dio en los últimos
milenios.
182

La segunda cosa que se dice es que el dragón era rojo, ese color simboliza la sangre;
por eso el segundo caballero era rojo, porque él simboliza la sangre derramada en la
guerra. El dragón es rojo porque en todos estos milenios, él ha perseguido y
matado. Él mató tanto que quedó rojo ensangrentado.

El versículo cuatro dice que ese dragón arrastra la tercera parte de las estrellas del
cielo; eso es una referencia a los ángeles que siguieron a Satanás en su caída.

Las estrellas del cielo representan ángeles (Job 38:7, Is.14:12). También el versículo
nueve dice que él fue lanzado a la tierra juntamente con sus ángeles, ese texto no se
refiere a la caída original del diablo, cuando él cayó y fue expulsado para la tierra. El
versículo apunta para el tiempo en que él será expulsado de las regiones celestes –
los aires – y lanzado para estar aquí en la tierra. La quinta trompeta habla respecto
de una estrella que cayó del cielo y que recibe las llaves del abismo. Aquella estrella
es Satanás y aquel es el momento cuando él será lanzado en la tierra. Por tanto, él
será lanzado en la tierra por ocasión de la quinta trompeta.

Él desciende a la tierra con gran furia, porque sabe que poco tiempo le resta, por
eso él liberará los demonios que están en el abismo que infringirán gran tormento a
los hombres durante la gran tribulación.

Apocalipsis habla todavía que el nombre de él es diablo y Satanás, “Diablo” viene


del griego “diábolos” que significa acusador y difamador, “Satanás” por su vez
significa “adversario”. El primer trabajo que el dragón hace es seducir como leemos
en el verso nueve y su segundo trabajo es acusar como leemos en el verso diez. El
primer trabajo del maligno es seducir, él seduce y llama a su tentación despertando
apetitos, intereses, instintos y voluntades. Usted piensa que eso pensamientos
proceden de ti mismo, pero son lanzamientos lanzados por el diablo. Él es quien
habla a su mente: anda allá, no tiene nada que ver, puedes hacer, después confiese
y queda en paz. Usted piensa que tales pensamientos viene de su propia mente,
pero a la verdad son demonios hablando y usted piensa que procede de ti mismo.

Después de seducirlo y llevarlo a caer, él viene a acusarlo en su mente y delante de


Dios, el diablo acusó a Job (Job 1:9, 2:4-5), a Josué (Zc.3:1-2) y ahora nos acusa
delante de Dios día y noche (Ap.12:10). Nunca llegaremos al punto de no necesitar la
sangre de Jesús, no importa lo cuan maduro seamos; muchos piensan que la sangre
de Jesús es doctrina para el nuevo convertido, pero eso es un engaño, necesitamos
continuamente. Ese acusador no apenas nos acusa de día y de noche delante de
Dios, él también acusa a Dios delante de nosotros.

¿Cómo funciona la acusación del diablo? Muchos de nosotros pensamos que


acusación es solamente aquella sensación de peso en la consciencia, aquella culpa
por haber seguido la seducción del pecado. Mas la acusación también toma la forma
de pensamientos como: yo no soy nada, yo no sirvo para nada, son pensamientos
183

de que Dios no nos ama más y hasta desistió de nosotros; eso es acusación. Todo
hombre siente eso, pero los vencedores vencen y subyugan la acusación por la
sangre de Jesús. Hay otra acusación todavía más sutil, usted tiene consciencia de
que no hizo nada de errado, pero así mismo tiene una sensación interior de estar
descalificado, es un sentimiento de que nunca oramos lo suficiente, nunca hicimos
lo suficiente que nunca podemos agradarlo. Luego él lanza pensamientos como: yo
no puedo ser un buen líder, yo no estoy listo para ser usado por Dios, la acusación
trae postración y retroceso. El vencedor es aquél que no cede bajo de la acusación.

Otras veces él acusa a Dios delante de nosotros al lanzar dudas del tipo: ¿Dónde
estaba Dios en la hora que estabas necesitando? No vale la pena servir a Dios, no
vale la pena todo ese esfuerzo, las exigencias de Dios son muy severas. Tú tienes
que vencer esas acusaciones también, él está difamando a Dios en su mente.

Sabemos que hoy mismo, el maligno odia los santos y hace todo para resistirlos y
hasta eliminarlos. Imagine cuando él fuere lanzado en la tierra, sabiendo que poco
tiempo le resta, lleno de furia. La gran tribulación será el tiempo de la ira de Dios y
de la furia de Satanás.

Él perseguirá a la mujer y al resto de la descendencia de ella arrojando contra ella un


río, la palabra de Dios nos muestra que ese río simboliza ejércitos en ese contexto
(Is.8:7-8, 17:12-13, Jr.46:7-9, 47:2-3). Él entonces enviará sus ejércitos contra la mujer,
pero la tierra abrirá su boca y tragará el río que el dragón arrojó contra la mujer. La
tierra aquí ciertamente se refiere a ciertos lugares o países que no acatarán
completamente las órdenes del anticristo y protegerán la mujer y el resto de su
descendencia.

6. El hijo varón arrebatado.

Paulo en su carta a los gálatas, explica la diferencia entre la madre y los hijos de
acuerdo a la óptica espiritual (Gl.4:26-27). Los muchos hijos componen la madre, el
hijo varón representa a muchos, pues el verso once dice “ellos”. Tres veces es
mencionado regir con vara de hierro (Ap.2:26-27, 19:15).

El hijo es arrebatado para el trono; eso denota el arrebatamiento separado de los


creyentes, pues los demás creyentes serán arrebatados para el encuentro con el
Señor en las nubes cuando Él venga por ocasión de la última trompeta.

Dos cosas suceden por causa de ese arrebatamiento: la mujer huye para el desierto
por 1260 días y hay batalla en el cielo, en esa batalla es interesante observar el
nombre de Miguel, que significa ¿Quién es como Dios?
184

Después que el hijo varón es arrebatado, Satanás es lanzado a la tierra; Pablo nos
habla de alguien que lo detiene (2Ts.2:6). Ciertamente no es el Espíritu Santo y por
tanto debe referirse a los santos. Observe que el dragón es lanzado solamente en la
tierra después que el hijo varón es arrebatado. Sabemos que es la sal que impide el
podrecimiento completo del mundo. Jesús dijo que algunos creyentes pueden
perder el sabor, pero los vencedores representan la verdadera sal que impide la
acción completa del maligno. Después que los vencedores fueren arrebatados, no
habrá restricción alguna para la acción del diablo; veremos eso con más detalles en
el próximo capítulo.

Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y
se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta
contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de
Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios. ¿No os acordáis que cuando yo estaba todavía
con vosotros, os decía esto? Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su
debido tiempo se manifieste (2Ts.2:3-6).
El trabajo de la iglesia es básicamente traer el reino y subyugar a Satanás.

7. La actitud de los vencedores.

Apocalipsis nos habla a respecto del vencedor sentarse en el trono (Ap.3:21). ¿Cómo
vencieron ellos? Este capítulo nos muestra las tres armas que el vencedor usa contra
el dragón. La primera arma es la sangre de Jesús Ap. 12:11 Y ellos le han vencido por
medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron
sus vidas hasta la muerte.

La sangre de Jesús no es apenas para nuestra purificación y salvación, y es también


válido para vencer al diablo. No se trata de hablar como si fuese una frase mágica:
“la sangre de Jesús tiene poder”, sino es para declarar a Satanás: yo fui perdonado y
lavado, sobre mi no hay condenación ni culpa, porque la sangre de Jesús ya me lavó,
yo puedo entrar con osadía en el lugar santísimo. No es por mi justicia, es por la
justicia de Cristo, nos es porque yo hago, es porque Él ya hizo. Cuando el diablo
viniere para hacernos recordar nuestro pasado, debemos hacerle recordar el futuro
de él.

La segunda arma es: 12:11 Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de
la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.

La palabra “testimonio” es colocar en nuestra boca la confesión de la verdad de


Dios. No mire para las circunstancias, fírmese en la verdad. Es cierto que yo no
puedo, pero la verdad es que podemos todos en aquél que nos fortalece, es un
hecho que quedamos enfermos, pero la verdad es que Él llevó todas mis
enfermedades; es un hecho que yo no tengo dinero, pero la verdad es que mi Dios
según su riqueza en gloria, ha de suplir en Cristo Jesús cada una de mis necesidades.
185

La tercera arma es: “no amaron la propia vida” (v.11). Para Dios, la fuerza con la cual
usted hace alguna cosa es más importante de lo que tú haces, para Él lo que importa
es el origen. Lo que es nacido originado en el Espíritu es espíritu, la palabra vida
usada aquí es la vida del alma. Necesitamos rechazar aquello que procede de
nuestra fuerza humana. No amar la vida significa también no preservarse, no medir
esfuerzos para hacer la voluntad de Dios, no buscar el propio conforto, sino si es
necesario, estar dispuesto hasta la muerte para que venga el reino de Dios.

8. El restante de la descendencia de la mujer

En el verso 17, vemos que hay una parte de la iglesia que va pasar por la gran
tribulación, es denominada de restante de la descendencia de la mujer y se
constituye en la parte de la iglesia que no estaba preparada por ocasión del
arrebatamiento.

El hijo varón es una pequeña parte de la iglesia, la mayor parte de los santos estará
aquí y será perseguida por el dragón, muchos morirán por causa de esa persecución
(v.14). El tiempo de esa persecución está determinado: será un tiempo, dos tiempos
y mitad de un tiempo, o sea, tres años y medio.

El enemigo arrojará de su boca un río contra los santos que quedaren, esas aguas
significan ejércitos; esos ejércitos perseguirán a la iglesia, pero el Señor irá
protegerla (v.16), esos santos que quedaren son llamados del restante de la
descendencia de la mujer (v.17). Eso significa que la mujer posee el hijo varón, pero
posee muchos hijos que son sus descendientes.

El restante de los descendientes de la mujer representa dos grupos. El primer grupo


son los que guardan el mandamiento de Dios, o sea, los judíos. El segundo grupo
son los que tienen el testimonio de Jesús lo que evidentemente apunta para la
iglesia. Los judíos que guardan el mandamiento y la iglesia que guarda el testimonio
de Jesús, son los dos pueblos que el Señor posee sobre la tierra.
186

Tres visiones del arrebatamiento


El arrebatamiento es con certeza uno de los asuntos más importantes en esos
tiempos del fin. La palabra “arrebatamiento” no significa intentar de subir al cielo,
sino que el Señor nos recibirá en su venida. El arrebatamiento es diferente de la
segunda venida de Jesús propiamente dicha. Antes de volver, Él arrebatará los
creyentes vencedores para estar con Él delante del trono, ya vimos que la vuelta del
Señor tiene dos aspectos: uno oculto y otro evidente, el aspecto oculto es el
arrebatamiento y el aspecto evidente la vuelta del Señor propiamente dicha.

Habrá un periodo de tiempo antes de la vuelta de Jesús llamado de gran tribulación,


en ese tiempo el anticristo estará operando juntamente con el falso profeta, serán
días de gran angustia como nunca hubo ni habrá después sobre la tierra.

Los creyentes no tienen un acuerdo sobre cuando será el arrebatamiento, hay


diferentes puntos de vista sobre ese asunto. Algunos creen que todos los creyentes
serán arrebatados antes de la gran tribulación, son llamado de pre-tribulacionistas.
Otros creen que todos los creyentes deben pasar por la gran tribulación,
normalmente no hacen distinción entre el arrebatamiento y la vuelta de Jesús, son
llamados de post-tribulacionistas. Otro grupo cree que una parte será arrebatada
antes de la gran tribulación y la otra después, este pensamiento es llamado de
arrebatamiento parcial – que es nuestro punto de vista. Ese concepto es defendido
de forma contundente por Watchman Nee en su libro: el rey y el reino de los cielos.

El hecho de existir diferentes puntos de vista y opiniones no nos da el derecho de


acusar aquellos con los cuales no concordamos. Nuestra comunión no puede ser
basada en esas cuestiones, sino cada uno debe tener bien claro dentro de si su
propia opinión.
187

Es necesario que conozcamos las razones de cada una de las escuelas de


pensamiento escatológico.

1. Argumentos pre-tribulacionistas

a. La iglesia será librada de la ira venidera.


1Ts 5:9 Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por
medio de nuestro Señor Jesucristo.

Muchos creen que la ira mencionada aquí se refiere a la gran tribulación y así
afirman que los creyentes no pasaran por ella, pero eso está incorrecto. De hecho
que los creyentes no sufrirán la ira de Dios, o sea, la tribulación que ha de venir
sobre las naciones no se aplica a la iglesia. ¿Qué decir de la persecución del
anticristo? Durante la gran tribulación, aquellos creyentes que quedaren y los que se
convirtieren, serán perseguidos por el maligno y a la verdad muchos serán muertos.

b. La gran tribulación es apenas para los judíos.


Jer 30:6 Inquirid ahora, y mirad si el varón da a luz; porque he visto que todo
hombre tenía las manos sobre sus lomos, como mujer que está de parto, y se han
vuelto pálidos todos los rostros.
Jer 30:7 ¡Ah, cuán grande es aquel día! tanto, que no hay otro semejante a él;
tiempo de angustia para Jacob; pero de ella será librado.

Setenta semanas están determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para
terminar la prevaricación, y poner fin al pecado, y expiar la iniquidad, para traer la justicia
perdurable, y sellar la visión y la profecía, y ungir al Santo de los santos.
Sabe, pues, y entiende, que desde la salida de la orden para restaurar y edificar a Jerusalén
hasta el Mesías Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos semanas; se volverá a
edificar la plaza y el muro en tiempos angustiosos.
Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, mas no por sí; y el
pueblo de un príncipe que ha de venir destruirá la ciudad y el santuario; y su fin será con
inundación, y hasta el fin de la guerra durarán las devastaciones.
Y por otra semana confirmará el pacto con muchos; a la mitad de la semana hará cesar el
sacrificio y la ofrenda. Después con la muchedumbre de las abominaciones vendrá el
desolador, hasta que venga la consumación, y lo que está determinado se derrame sobre
el desolador (Dn.9:24-27).

Dan 12:1 En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está de parte de los
hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue desde que hubo gente hasta
entonces; pero en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallen escritos
en el libro.
Dan 12:2 Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos
para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.
188

Basados en esos textos, los pre-tribulacionistas dicen que la tribulación es apenas


para los judíos, pero Apocalipsis dice que este día vendrá sobre todos los que
habitan sobre la tierra (Ap.3:10). Naturalmente Jeremías y Daniel hablaron a los
judíos porque sus profecías eran enderezadas a ellos. Mas Apocalipsis dice: Ap. 3:10
Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de
la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la
tierra.

c. La iglesia es mencionada después del tercer capítulo de Apocalipsis.

Según esta interpretación, los capítulos dos y tres de Apocalipsis se refieren al


tiempo de la iglesia y el capítulo cuatro habla de su arrebatamiento. La expresión:
“sube aquí” de Apocalipsis 4:1, es tomada como refiriéndose a toda la iglesia y los
veinticuatro ancianos, mencionados en el capítulo cuatro representarían la iglesia
glorificada.

En primer lugar, la expresión “sube aquí” se refiere solamente a Juan y no a toda la


iglesia, lo que sería extraño al texto, es forzarlo demasiadamente, darle el sentido
de arrebatamiento de la iglesia.

En segundo lugar los veinticuatro ancianos no son la iglesia por los motivos ya
mencionados cuando estudiamos el capítulo cuatro.

a. Veinticuatro no es el número de la iglesia, solamente lo son siete y sus


múltiplos, como por ejemplo las siete iglesias del Asia.
b. En ningún lugar la palabra de Dios usa ancianos para simbolizar ancianos.
c. Ellos están sentados en el trono con coronas de oro en sus cabezas, la iglesia
no puede recibir gloria antes de Cristo.
d. Los ancianos nunca experimentaron la redención, el cántico que ellos cantan
en el capítulo cuatro es el cántico de la creación (4:11), en 5:9-10 ellos cantan
a respecto de la salvación de la iglesia y no de ellos mismos.
e. Los ancianos traen las oraciones de los santos en 5:8, ¿Cómo puede la iglesia
traer la oración de la propia iglesia si los ancianos representan la iglesia?
f. ¿Si los ancianos representan la iglesia como puede desconocer a si propia
como fue vista en 7:13?
g. Juan llama el anciano del Señor, si los ancianos representan la iglesia; Juan
siendo uno de los primeros apóstoles, sería un anciano de los ancianos (7:14).
h. No se puede decir que los veinticuatro ancianos son un símbolo, ellos son
entendidos literalmente porque Juan conversó con uno de ellos. Jamás
alguien conversa con un símbolo en la Biblia.

En el capítulo cuatro, todos los personajes son literales: el que está en el trono;
Jesús, los ángeles, los seres vivientes. ¿Por qué apenas los veinticuatro ancianos
deberían de ser un símbolo? Los pre-tribulacionistas dicen que después del capítulo
189

tres de Apocalipsis, la palabra griega no es mencionada, pero obviamente ciertas


descripciones de refieren a la iglesia como: como reino de sacerdotes (5:10), los que
tienen el testimonio de Jesús (12:17), los testigos de Jesús (17:6) y los siervos de Dios
(19:2). Además de eso, Apocalipsis 22:16 dice que el libro de Apocalipsis fue escrito
para las iglesias y no para Israel.

d. Todos los creyentes serán arrebatados.

La enseñanza básica del pre-tribulacionista predice que todos los salvos serán
arrebatados basados en los siguientes textos.

1Ts 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta
de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
1Ts 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados
juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre
con el Señor.

1Co 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos
transformados,
1Co 15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se
tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos
transformados.

Esos textos apenas hablan del hecho del arrebatamiento, mas no tratan del tiempo.
Además de eso, el texto dice que el arrebatamiento debe acontecer después de la
última trompeta que marca el fin de la gran tribulación. Sería por tanto, una
evidencia que comprobaría el post-tribulacionismo.

e. Los creyentes serán guardados de la gran tribulación.

Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de


glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre
vosotros aquel día.
Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la tierra.
Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas
estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre (Luc.21:34-36).

Ap. 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré
de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que
moran sobre la tierra.

A pesar de hablar sobre el libramiento, esos textos hacen una promesa condicional.
Lucas; por ejemplo, dice que es necesario vigilar y orar para no embriagarse con las
cosas de esta vida. Si todos los creyentes cumplieren las condiciones, serán todos
preservados; caso contrario no, sabemos que muchos creyentes no vigilan y hay
aquellos que ni están esperando la venida del Señor. Para ellos la promesa de
libramiento no se aplicará.
190

f. El Espíritu Santo será sacado de la tierra.

Los pre-tribulacionistas creen que el Espíritu Santo sería sacado de la tierra durante
la gran tribulación. Ellos afirman eso basados en la segunda carta de Pablo a los
tesalonicenses.

2Ts 2:6 Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su debido tiempo se
manifieste.
2Ts 2:7 Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente
lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio.

Esa es una interpretación basada en suposición, el texto no lo afirma de forma clara,


el diablo será aplastado debajo de los pies de la iglesia y no del Espíritu Santo; por
tanto, es más correcto pensar que son los creyentes vencedores que restringen la
acción del diablo, como la sal preserva algo del podrecimiento. A la verdad, el
dragón es solamente suelto en la tierra después que el hijo varón es arrebatado
para estar delante del trono.

g. No habrá salvación durante la gran tribulación.

Esa es una conclusión basada en la afirmación anterior de que el Espíritu Santo será
sacado, ¿pues como habría la salvación sin la actuación del Espíritu Santo sobre el
hombre? Mas Apocalipsis hace referencia a los que vienen de la gran tribulación que
vencieron la bestia y su número (Ap.15:2). O ellos fueron salvos durante la gran
tribulación o ya eran creyentes, en ambos casos se nota la presencia del Espíritu
Santo aquí.

Ap. 15:2 Vi también como un mar de vidrio mezclado con fuego; y a los que habían
alcanzado la victoria sobre la bestia y su imagen, y su marca y el número de su
nombre, en pie sobre el mar de vidrio, con las arpas de Dios.

2. Argumentos post-tribulacionistas.

a. El arrebatamiento será después de la manifestación del anticristo.


2Ts 2:3 Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga
la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición,
2Ts 2:4 el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de
culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por
Dios.

Hay una promesa clara de que, si cumplimos las condiciones, seremos preservados
de la probación que ha de venir sobre todo el mundo (Ap.3:10). Es cierto que una
parte de la iglesia cumplirá la condición y será arrebatada. Mas por ese texto, vemos
191

que por lo menos una parte de los creyentes será arrebatada por ocasión de la
vuelta de Jesús después de la gran tribulación, pues todas las señales que la
anteceden acontecerán durante la gran tribulación. El texto afirma claramente que
la vuelta del Señor solo se dará después que fuere manifestado el hombre de la
iniquidad, lo que se refiere al anticristo y eso acontecerá en la gran tribulación.

b. El arrebatamiento será después de la última trompeta.


1Ts 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con
trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán
primero.
1Ts 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos
arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así
estaremos siempre con el Señor.

La última trompeta (que es la séptima) sonará al final de la gran tribulación. Basados


únicamente en ese texto, podemos concluir que el arrebatamiento deberá
realmente acontecer únicamente después de la gran tribulación. Mas eso
contradice otros principios de la palabra de Dios, vemos claramente en Ap.3:10 y
Lucas 21:36 que por lo menos una parte de la iglesia cumplirá las condiciones y será
puesta y será reservada de la gran tribulación

Si todos vamos a ser arrebatados después de la gran tribulación, es inútil la orden


bíblica de vigilar y orar, porque ya sabríamos la hora. Si fuese al final de la
tribulación, podríamos esperar hasta el último instante para buscar a Dios.

Si todos los creyentes serán arrebatados después de la gran tribulación, nosotros


esperaremos más por el anticristo que por el Señor Jesús, ya que el anticristo viene
primero. Debemos esperar la venida del Señor y no la del anticristo (Tito 2:13).

c. No existe un arrebatamiento secreto de la iglesia.

Como se puede percibir, para los post-tribulacionistas no existe algo como el


arrebatamiento secreto de la iglesia, para ellos el arrebatamiento sucederá junto
con la vuelta del Señor.

Todavía, la palabra del Señor nos dice claramente que el Señor viene como
ladrón; si es como ladrón, no puede ser a las claras precedida por una banda.
16:15 He aquí, yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus
ropas, para que no ande desnudo, y vean su vergüenza.

Esa visión falla en distinguir la diferencia entre al arrebatamiento y la vuelta del


Señor, hay una diferencia entre Cristo viniendo para sus santos y Cristo viniendo con
los santos.
192

Jud 1:14 De éstos también profetizó Enoc, séptimo desde Adán, diciendo: He aquí, vino el
Señor con sus santas decenas de mislares,
Jud 1:15 para hacer juicio contra todos, y dejar convictos a todos los impíos de
todas sus obras impías que han hecho impíamente, y de todas las cosas duras que
los pecadores impíos han hablado contra él.

3. El arrebatamiento parcial.

a. El arrebatamiento de la iglesia sucederá en dos momentos.

En un primer momento, el Señor vendrá como un ladrón y llevará a los creyentes


vencedores antes de la gran tribulación, ese arrebatamiento será secreto. En un
segundo momento, Él vendrá visiblemente y arrebatará todos los demás creyentes
para que estén con Él en los aires. Este es el momento de la segunda venida
propiamente dicha que acontecerá en el final de la gran tribulación.

b. Hay diferencia entre el arrebatamiento y la vuelta de Jesús.

Comparando Mateo 24:42, 1 Tesalonicenses 5:2-4 y 2 Tesalonicenses 2:3, podemos


decir que son dos eventos. Si existe una señal evidente, no se puede decir que es
como ladrón. En Mateo 24:42 parece ser antes de la gran tribulación y en 2
Tesalonicenses 2:3 parece ser después.

El arrebatamiento de los creyentes vencedores, o sea, de aquellos que estuvieren


vigilando, será antes de la gran tribulación. La vuelta de Jesús con sus
acompañantes acontecerá después de la gran tribulación y de la manifestación del
anticristo.

Mat 24:42 Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.
Mat 24:43 Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de
venir, velaría, y no dejaría minar su casa.
Mat 24:44 Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre
vendrá a la hora que no pensáis.

1Ts 5:2 Porque vosotros sabéis perfectamente que el día del Señor vendrá así como ladrón
en la noche;
1Ts 5:3 que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción
repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.
1Ts 5:4 Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda
como ladrón.

2Ts 2:3 Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la
apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición.

c. El arrebatamiento será una sorpresa, la venida será precedida de señales.


193

Nadie sabe la hora del arrebatamiento, pero al respecto de la vuelta de Jesús se


podrá saber, pues habrá muchas señales que la precederán (Mc.13:32 y Mt.24:29-
30).

Mat 24:29 E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se


oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las
potencias de los cielos serán conmovidas.
Mat 24:30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces
lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las
nubes del cielo, con poder y gran gloria.
Mat 24:31 Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de
los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.

d. Participar del arrebatamiento es una cuestión de estar vigilando.

Para participar del arrebatamiento, necesitamos cumplir las condiciones impuestas


por Dios, mismo siendo salvos podemos no estar vigilando. Aquellos que no vigilen
y no cumplan con las condiciones serán perseguidos y muertos por el anticristo.

Luc 21:34 Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de
glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre
vosotros aquel día.
Luc 21:35 Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la
tierra.
Luc 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de
todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre.

Ap. 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la
hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran
sobre la tierra.

e. El Espíritu Santo operará en la tierra durante la gran tribulación.

La profecía de Joel no se cumplió completamente en el día del pentecostés. Joel


afirma que en aquel día habrá prodigios en el cielo y en la tierra: sangre, fuego y
columnas de humo, el sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre. Esa
descripción apunta para el tiempo de la gran tribulación, la gran tribulación será el
tiempo de las últimas lluvias (Hechos 2:15-21, Jl.2:28-31).

Joe 2:28 Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros
hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán
visiones.
Joe 2:29 Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos
días.
Joe 2:30 Y daré prodigios en el cielo y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo.
Joe 2:31 El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande
y espantoso de Jehová.
194

Habrá mucha salvación durante la gran tribulación, sabemos que eso solamente
puede acontecer por obra del Espíritu Santo, también los creyentes que fueren
dejados para atrás se tornarán en vencedores por el poder del Espíritu Santo y
tendrán que vencer la marca de la bestia.

f. El arrebatamiento y la vuelta de Jesús son momentos diferentes.

La promesa de Jesús es que aquellos que vigilaren y oraren, escaparán de la gran


tribulación y estarán de pie delante del hijo del hombre, o sea, delante del trono
(Lc.21:36). Apocalipsis también menciona que los arrebatados estarán delante del
trono (Ap.7:15). Después de estudiar el capítulo 12, descubrimos que el hijo varón
representa los creyentes vencedores y en ese pasaje, el hijo varón es arrebatado
para estar delante del trono; todos esos textos muestran que el arrebatamiento de
los vencedores es para estar delante del trono.

Pablo, sin embargo dice que los que fueren arrebatados se encontrarán con el
Señor en los aires (1Ts.4:17). Así no hay duda que el arrebatamiento para estar con el
Señor en los aires se refiere a la vuelta propiamente dicha que acontecerá en el final
de la gran tribulación.

1Ts 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos
arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así
estaremos siempre con el Señor.

4. Algunos argumentos contra el arrebatamiento parcial.

a. El arrebatamiento es parte de la redención.

La salvación depende de fe, mientras tanto, el arrebatamiento depende de fe y


conducta, pues Lucas dice claramente que es necesario estar vigilando. No se dice
en algún lugar de la palabra que necesitamos vigilar u orar para ser salvos, pero para
ser arrebatados es necesario esa conducta. Creemos que un creyente no pierde la
salvación, ¿Pero qué decir de un creyente que estuviere adulterando en la hora del
arrebatamiento? Sin santidad nadie verá al Señor (Hb.12:14). Un creyente puede ser
salvo y no estar andando en santidad; eso puede ser testificado por la experiencia
de cada uno.

b. No se puede dividir el cuerpo. ¿Una parte va y otra queda?

El cuerpo es una ilustración de vida. No podemos imaginar que el cuerpo de Cristo


sea compuesto apenas por los creyentes que están vivos, el cuerpo de Cristo está
compuesto por todos los santos de todas las épocas. Además de eso, la parte
195

principal del cuerpo, la cabeza, está en el cielo a la diestra de Dios. Siendo así el
cuerpo ya estaría dividido, pues Cristo está en el cielo, muchos santos ya murieron,
mientras que nosotros todavía permanecemos aquí.

c. ¿Y los que murieron antes del arrebatamiento?

Un creyente que no fue un vencedor y ya murió obviamente no pasará por la gran


tribulación. A pesar de eso, también será juzgado y disciplinado en el tribunal de
Cristo (2Co.5:10).

d. Hay diferencia entre trigo y joyo, pero no entre trigo y trigo.

Concordamos enfáticamente que no hay diferencia entre trigo y trigo, todavía todos
necesitan concordar que existe diferencia en el tiempo de cosecha de cada uno.
Sabemos que una parte del trigo madura más rápido que los otros, lo que maduran
primero son llamados de primicias (Ap.14:4). Apocalipsis muestra claramente que
hay una diferencia entre la cosecha de las primicias y la cosecha final. En el
arrebatamiento, el Señor viene para buscar las primicias. La cosecha acontecerá por
ocasión de la vuelta del Señor (Ap.14:15).

e. ¿Cómo explicar el texto de 1 Tesalonicenses 4:15-17?

Ese texto habla de la venida de Jesús propiamente dicha y no del arrebatamiento de


los creyentes vencedores, la palabra arrebatamiento es usado en el texto, pero se
refiere a la vuelta del Señor.

Otra manera de entender los dos eventos es percibiendo que ambos son tratados
como siendo arrebatamiento. El primero es el arrebatamiento hasta el trono y el
segundo arrebatamiento es para el encuentro del Señor en las nubes.

Aquello que los teólogos llaman de arrebatamiento parcial nosotros llamamos de


arrebatamiento de los creyentes vencedores. Como ya dijimos en la Biblia vemos
dos aspectos del arrebatamiento: el arrebatamiento de los vencedores y el
arrebatamiento de los demás creyentes en la vuelta del Señor Jesús.
196

Comprendiendo el arrebatamiento
Las personas de modo general, tienen una visión genérica de las verdades de la
palabra de Dios. De manera superficial ellas dicen que todos los que creen en Jesús
son salvos y por eso serán arrebatados. De hecho eso es una verdad; sin embargo,
de trata de una explicación muy genérica, necesitamos comprender que en la
realidad en nuevo testamento habla al respecto de dos arrebatamientos: uno antes
de la gran tribulación y otro después de la gran tribulación. El primer
arrebatamiento es para que estemos delante del trono y el segundo es para
encontrarnos con el Señor en las nubes.

En el capítulo doce de Apocalipsis, vimos que el hijo varón fue arrebatado para el
trono, ese hecho acontece antes de los 1260. En el final de la gran tribulación,
cuando Jesús venga, Él va arrebatar los santos que aquí permanecieron para
encontrarse con Él en las nubes, son dos eventos distintos. Uno es el
arrebatamiento de los vencedores y otro es de la mayoría de los creyentes para las
nubes. Uno va acontecer antes de la gran tribulación y el otro después de la gran
tribulación, lo que va acontecer antes no es precedido por señales, es como el
ladrón, nadie sabe el día ni la hora. El arrebatamiento que ocurrirá después de la
gran tribulación no será un misterio, pues será precedido de una serie de señales.

Por tanto, no sea tan genérico para entender la palabra del Señor, muchos con
miedo de parecer complicado, acaban simplificándola de manera impropia. No
queremos pasar la idea de que ese asunto es sencillo, la verdad tiene su
complejidad. Es necesario, sin embargo, que tengamos la disposición de entrar en la
palabra con honestidad y leer todo aquello que ella tiene para decirnos sobre eso.

1. El arrebatamiento de los creyentes vencedores.


197

La vuelta de Jesús será definitivamente antes del milenio, el arrebatamiento de los


vencedores será antes de la gran tribulación y el arrebatamiento de los creyentes
para las nubes con Cristo será en la última trompeta, que sonará al final de la gran
tribulación. La gran tribulación es una realidad bíblica, ella ciertamente vendrá,
serán días tan severos que tendrán que ser abreviados para que algunos sean
salvos.

Mat 24:21 porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio
del mundo hasta ahora, ni la habrá.
Mat 24:22 Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los
escogidos, aquellos días serán acortados.

El día de la ira de Dios ha de venir sobre todos los habitantes de la tierra.

Luc 21:34 Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de
glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre
vosotros aquel día.
Luc 21:35 Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la
tierra.

Como ya estudiamos, ese será el tiempo del último sello o de las siete trompetas. La
gran tribulación vendrá de forma repentina y abrupta como los dolores de parto de
una mujer encinta y eso acontecerá cuando estuvieren hablando de paz y seguridad.

1Th 5:3 que cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción
repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán.

Ese también será el tiempo en que el diablo descenderá a la tierra con gran furia, en
esa época él sabrá que su tiempo es corto y hará posible para atormentar al
hombre.

Ap. 12:12 Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos. ¡Ay de los moradores de la
tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran cólera, sabiendo que
tiene poco tiempo.

Todavía es un hecho que el tiempo de la ira de Dios sobre el mundo no dice respecto
a los santos de la iglesia del Señor, así que los creyentes queden para ese tiempo
serán de alguna forma guardados, porque la ira de Dios no está guardado para
nosotros. Todavía así debemos anhelar para ser arrebatados antes de la gran
tribulación, porque la palabra de Dios es enfática en afirmar que el gran dragón hará
guerra contra el restante de la descendencia de la mujer como estudiamos en el
capítulo doce.

Ya vimos que esa mujer es la totalidad del pueblo de Dios, incluyendo tanto la iglesia
como los hijos de Israel. Estos son dos grupos: los que guardan la ley y los que
guardan el testimonio de Jesús. El dragón hará guerra contra ellos: Ap. 12:17
Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de
198

la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio
de Jesucristo.

En ese tiempo muchos santos serán martirizados por el anticristo, pues le serpa
dada la autoridad para perseguir a los santos. Ap. 13:7 Y se le permitió hacer guerra
contra los santos, y vencerlos. También se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo,
lengua y nación.

No estamos aguardando esos terribles eventos, estamos aguardando el


arrebatamiento para ser libres de esas persecuciones. Existen sin embargo
promesas de que podremos librarnos de aquellas persecuciones y angustias que
deberán acontecer.

Jesús dijo: Luc 21:34 Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se
carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente
sobre vosotros aquel día.
Luc 21:35 Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la
tierra.
Luc 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de
todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre.

Si vigilamos y oramos, podemos escapar de esas cosas que tienen que suceder ¿Qué
son esas cosas? La gran tribulación. Dios tiene una promesa para sus santos, solo
que esa promesa es condicional, es necesario vigilar y orar para no embriagarnos
con las preocupaciones de este mundo. Para ser arrebatados, tenemos que cumplir
esas condiciones, debemos estar despiertos mientras que los otros duermen,
tenemos que preservarnos de las orgias, de la embriagues, de los cuidado de esta
vida y guardar la palabra de la perseverancia. Sabemos ni que todo creyente está
vigilando y orando; por lo tanto, es claro que ni todos serán arrebatados.

Ap. 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la
hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran
sobre la tierra.

La probación que ha de venir sobre el mundo entero ciertamente es la gran


tribulación, el Señor está diciendo que aquella iglesia será guardada porque guardó
la palabra de la perseverancia, es una promesa condicional. Sabemos que hay
creyentes que no guardaron la palabra de la perseverancia, por eso no serán
también guardados de la gran tribulación.

La palabra de Dios dice que será tomada y dejado el otro.

y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida
del Hijo del Hombre.
Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado.
Dos mujeres estarán moliendo en un molino; la una será tomada, y la otra será dejada.
Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.
199

Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir,
velaría, y no dejaría minar su casa.
Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora
que no pensáis (Mat 24:39-44).

Muchos descartan que ese versículo diciendo se refiere apenas a los judíos, la
verdad una parte del capítulo veinticuatro de Mateo es la respuesta de Jesús a las
tres preguntas hechas por los discípulos: ¿Cuándo sucederán estas cosas? ¿Cuál será
la señal de su venida? Y ¿Cuál será la señal de la consumación de los siglos? (Mat
24:3). La primera pregunta se refiere a los judíos y es respondida del verso uno hasta
el verso veintiocho, la segunda pregunta también se refiere a los judíos y es
respondida desde el veintinueve hasta el treinta y uno. Por tanto Mateo 24:1-30 se
refiere a los judíos, pero a partir del verso 32, el Señor responde la tercera pregunta
que trata de la consumación de los siglos y eso indiscutiblemente se refiere a la
iglesia. La primera parte referente a los judíos es literal, mientras que la segunda es
básicamente alegórica y espiritual, porque se refiere a la iglesia.

El verso 42 deja claro que esa profecía del arrebatamiento se refiere a los creyentes,
pues la exhortación es para aquellos que tienen al Señor. Algunos piensan que lo
que fue dejado no era creyente. El texto, sin embargo dice que no sabemos a que
hora vendrá el Señor. El Señor no es Señor de los incrédulos ni manda a los
incrédulos que vigilen, ese texto; por tanto, se refiere apenas a personas
convertidas. La cuestión del arrebatamiento es colocada de manera sencisla, ambos
creyentes estarán trabajando, uno será tomado y otro dejado.

Al oír esta palabra, no piense que ahora debe envolverse en cosas espirituales,
puede ser que a partir de ahora, usted quiera quedar todos los días orando en el
predio de la iglesia o trancado en un cuarto solo buscando a Dios esperando su
venida. Preste atención, no hay ningún pasaje bíblico que nos enseñe a vivir así; por
el contrario, el Señor nos enseña que necesitamos trabajar para ganar la vida, para
tener la dignidad y comer nuestro pan sin depender de los otros. Es por eso que el
texto dice que dos estarán trabajando, dos estudiando, dos pesquisando, dos
haciendo algo normal de la vida. No van a estar en un culto orando ni en una vigilia
esperando, ellos van a estar viviendo la vida normal. Yo aconsejo a usted a vivir su
vida de forma normal. Trabaje, estudie, haga lo mejor que pueda, pero esté
vigilando íntimamente, porque uno será tomado y el otro dejado. Mientras hacemos
esas cosas seculares debemos mantener esas cosas en Dios.

El hecho de ser llevado uno de los creyentes no significa que el otro que fue dejado
no sea salvo, él apenas no está maduro, no hacia parte de la labor en condición de
ser cosechada. Los dos que estarán en el campo tendrán la misma apariencia
exterior, pero exterior serán diferentes, lo que diferencia los dos hermanos es la
cuestión de madurez. Los creyentes vencedores son aquellos que están maduros y
200

listos para ser cosechados. No es que uno era trigo y el otro era joyo, ambos son
trigos, pero un trigo está más maduro y por eso será cosechado primero.

No existen señales del tiempo del arrebatamiento, puede acontecer en cualquier


momento, lo que podemos decir con certeza es que el arrebatamiento de los
creyentes vencedores acontecerá antes de la gran tribulación. La palabra de Dios
nos dice cuanto tiempo después del arrebatamiento la gran tribulación comenzará,
pero parece que no será inmediatamente (Ap.3:10).

La gran tribulación también es llamada de 1260 días o un tiempo, dos tiempos y


mitad de un tiempo, en Apocalipsis doce vemos claramente que el hijo varón es
arrebatado antes de ese tiempo.

Ap. 12:5 Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; y
su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono.
Ap. 12:6 Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que allí la
sustenten por mil doscientos sesenta días.

Como ya afirmamos anteriormente, la promesa de Lucas 21:36 es que aquellos que


vigilaren y oraren escaparán de la gran tribulación y estarán de pie delante del hijo
del Hombre, o sea, delante del trono.

Luc 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de
todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre.

Apocalipsis también menciona que los arrebatados estarán delante del trono
(Ap.7:15) y después de estudiar el capítulo 12, descubrimos que el hijo varón
representa los creyentes vencedores y allí el hijo varón es arrebatado para estar
delante del trono, todos esos textos muestran que el arrebatamiento de los
vencedores será para estar delante del trono.

El arrebatamiento de los vencedores es completamente diferente del


arrebatamiento de los demás creyentes, ellos serán arrebatados para las nubes
(1Ts.4:17). Como ya dijimos, las promesas del arrebatamiento son condicionales,
existe un precio para ser pagado si deseamos participar del arrebatamiento de los
vencedores. La primera condición es vigilar y orar (Lc.21:36).

Muchos dicen que basta ser salvo para ser arrebatados, pero es necesario también
vigilar y orar. Si basta ser salvo, nadie necesitaría vigilar y orar. Mas aquí está claro
que solo escaparán de la gran tribulación los que estuvieren vigilando y orando.

Cuando hablamos de orar, nos referimos a una vida de oración, no simplemente de


orar en el culto, sino vivir una practica de oración, es orar mientras estudiamos,
trabajamos, su vida se torna una oración continua. ¿Qué significa vigilar? Es estar
201

despierto en medio de la noche, vigilar no para caer en tentación, no para caer en el


error, no para tener la conducta del mundo.

La segunda condición es quedar desapercibido, significa no dejar alguna cosa no


resuelta ni nada inconcluso.

Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado.
Dos mujeres estarán moliendo en un molino; la una será tomada, y la otra será dejada.
Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.
Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir,
velaría, y no dejaría minar su casa.
Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora
que no pensáis (Mat 24:40-44).

El Señor está diciendo que debemos estar listos, ¿Qué es estar listo? Es estar con la
vida lista y correcta, si hay enojos, resuelva cada una de ellas; si hay demandas que
sean resueltas; si hay pecado no confesado que sea confesado y abandonado.
Busque estar listo para encontrarse con el Señor. Viva hoy como si Jesús estuviese
volviendo mañana.

La tercera condición es tener la lámpara encendida y estar vestido con el lino


finísimo que son los actos de justicia de los santos.

Estén ceñidos vuestros lomos, y vuestras lámparas encendidas;


y vosotros sed semejantes a hombres que aguardan a que su señor regrese de las bodas,
para que cuando llegue y llame, le abran en seguida.
Bienaventurados aquellos siervos a los cuales su señor, cuando venga, halle velando; de
cierto os digo que se ceñirá, y hará que se sienten a la mesa, y vendrá a servirles.
Y aunque venga a la segunda vigilia, y aunque venga a la tercera vigilia, si los hallare así,
bienaventurados son aquellos siervos.
Pero sabed esto, que si supiese el padre de familia a qué hora el ladrón había de venir,
velaría ciertamente, y no dejaría minar su casa.
Vosotros, pues, también, estad preparados, porque a la hora que no penséis, el Hijo del
Hombre vendrá (Luc 12:35-40).

La cuarta condición es amar la venida del Señor, amar su venida es tener en el


corazón un deseo ardiente de estar con el Señor, muchos nos desean, no esperan ni
aman la venida del Señor, tales creyentes no son vencedores.

2Ti 4:8 Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez
justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.

Cierta vez cuando predicaba sobre este asunto, una hermana me habló: pastor yo
quería casarme primero. Se trata de alguien que no ama la venida del Señor, ya oí
personas diciendo: yo quería tener tantos hijos antes de ser arrebatada. Si hay
alguna cosa que usted quiera y ame más que la venida del Señor, usted está
descalificado. Tal pensamiento muestra que el corazón no está en el cielo, sino aquí
en la tierra, ni todos aman la venida del Señor.
202

Por fin necesitamos también ser fieles a la palabra del Señor guardarla en el
corazón, no seguimos tradiciones o religiones humanas, sino seguimos la palabra
viva de Dios. Cuando actuamos así somos perseguidos y resistidos, por eso
necesitamos guardar la palabra de la perseverancia.

2. El arrebatamiento de los demás creyentes.

En el capítulo 14 de Apocalipsis, nosotros tenemos dos grupos, el primero es


llamado de primicias (v.4) y están delante del trono (v.3). El segundo grupo es
descrito como siendo la siega (Ap.14:14-16). Si tenemos las primicias y la siega es
porque existen dos grupos de trigo, las primicias representan el trigo que maduró
primero y la siega es la cosecha final.

Ap. 14:14 Miré, y he aquí una nube blanca; y sobre la nube uno sentado semejante al Hijo
del Hombre, que tenía en la cabeza una corona de oro, y en la mano una hoz aguda.
Ap. 14:15 Y del templo salió otro ángel, clamando a gran voz al que estaba sentado sobre la
nube: Mete tu hoz, y siega; porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la
tierra está madura.
Ap. 14:16 Y el que estaba sentado sobre la nube metió su hoz en la tierra, y la tierra fue
segada.

El apóstol Pablo en 1 Tesalonicenses enfatiza:

1Ts 4:15 Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que
habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.
1Ts 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta
de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
1Ts 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados
juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre
con el Señor.

¿Usted ya se preguntó por qué el texto habla “los que quedemos”? a la verdad
algunos ya partieron, si no hubiese partido nadie, no habría la necesidad del autor
para decir “los que quedemos” debido a un grupo que ya partió. Estos son los que
fueron arrebatados antes de la gran tribulación.

El momento del arrebatamiento de la mayoría de los creyentes está muy claro en la


palabra de Dios. Primeramente ocurrirá por ocasión de la última trompeta, o sea, la
séptima, que marcará el final de la gran tribulación.

1Ts 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta
de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.

1Co 15:52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se


tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos
transformados.
203

Aquellos que enseñan que todos los creyentes serán arrebatados antes de la gran
tribulación están absoluto desacuerdo con la palabra de Dios, pues la última
trompeta solamente sonará al final de la gran tribulación.

Ap. 10:7 sino que en los días de la voz del séptimo ángel, cuando él comience a tocar la
trompeta, el misterio de Dios se consumará, como él lo anunció a sus siervos los profetas.

Ap. 11:15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían:
Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los
siglos de los siglos.

La palabra de Dios también es absolutamente clara al afirmar que el arrebatamiento


de la mayoría de los santos será después de la manifestación del anticristo; por
tanto, en el final de la gran tribulación.

Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os
rogamos, hermanos,
que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por
espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día
del Señor está cerca.
Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y
se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición,
el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto
que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios (2Ts.2:1-4).

Apocalipsis 12 muestra que después que el hijo varón fuere arrebatado, el restante
de la descendencia de la mujer será perseguido, ella solo será arrebatada después
de ser perseguida por el anticristo por tres años y medio.

Ap. 12:5 Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; y
su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono.

Ap. 12:14 Y se le dieron a la mujer las dos alas de la gran águila, para que volase de delante
de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un tiempo, y tiempos, y la
mitad de un tiempo.

Ap. 12:17 Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra
el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el
testimonio de Jesucristo.

Apocalipsis 14:14-16 nos revela que el tiempo del arrebatamiento de la mayoría de


los santos se dará en la consumación de los siglos, esta consumación de los siglos es
llamada de siega. Mat 13:39 El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del
siglo; y los segadores son los ángeles.

Después de todo eso, podemos decir que la época del arrebatamiento de la mayoría
de los santos es bien conocida, pues se dice que será en la séptima trompeta, cerca
al fin de la gran tribulación. Los vencedores serán arrebatados para el trono y
204

después la mayoría de los santos será arrebatada en el final de la gran tribulación


para el encuentro con el Señor en las nubes; eso ocurrirá después de la venida del
anticristo, después de la persecución y de todo lo que está preparado para la gran
tribulación. En este tiempo, el restante de la iglesia será arrebatado y se encontrará
con el Señor en las nubes.

Entonces queda obvio que hay dos tipos de creyentes. Hay de los creyentes que
vigilan, oran y guardan la palabra de la perseverancia y que por eso serán guardados
y hay aquellos que no fueron encontrados listos y por eso pasarán por la gran
tribulación. Será un tiempo en que serán perseguidos, disciplinados y preparados
para ser arrebatados y encontrarse con el Señor en las nubes. Después de eso,
estarán maduros y harán parte de la siega.

La condición para el arrebatamiento de la mayoría de los creyentes es que la mies


esté madura, para participar de ese arrebatamiento basta apenas creer en el hijo de
Dios como Señor y salvador.

Ap. 14:15 Y del templo salió otro ángel, clamando a gran voz al que estaba sentado sobre la
nube: Mete tu hoz, y siega; porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra
está madura.
205

La bestia que sale del mar – el anticristo


La palabra anticristo es un adjetivo y como tal puede ser aplicada a una serie de
personas en la historia, en estos dos mil años, tuvimos muchos hombres que fueron
anticristos. Ciertamente Nero fue un tipo de anticristo como la mayoría de los
emperadores romanos y Juan dijo: 1Jn 4:3 y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo
ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, el cual vosotros
habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo.

El anticristo será una especie de hombre contra Dios, todos aquellos que vinieron
antes eran apenas sombra de aquél que es el propio anticristo, él es el hombre de la
iniquidad y el hijo de la perdición que se manifestará en los últimos días (2Ts.2:3).
Apocalipsis 13:1 trata a respecto de él.

Ap. 13:1 Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete
cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre
blasfemo.

Podemos percibir claramente que esta visión es simbólica, a veces para comprender
la palabra de Dios, necesitamos el auxilio de las personas que poseen más
experiencia. Como tengo muchos años de estudio de la palabra de Dios, al leer ese
texto, ya se que la visión es inédita en la Biblia, ella ya aconteció una vez con el
profeta Daniel que en el antiguo testamento, tuvo una visión semejante de una
bestia de siete cabezas y diez cuernos.

La palabra bestia significa un animal feroz e indescriptible, ese animal feroz tenía
siete cabezas, siete cuernos, sobre los cuernos diez diademas y sobre las cabezas
206

nombres de blasfemias. El animal era parecido a un leopardo con pies de oso y boca
de león.

Antes de estudiar propiamente el capitulo 13 de Apocalipsis, tendremos una visión


general de lo que la palabra de Dios dice a respecto del anticristo.

1. La estatua de Nabucodonosor – Daniel 2:31-44

El pueblo de Israel fue llevado cautivo quinientos años antes de Cristo por el imperio
babilónico. El emperador de Babilonia llamado Nabucodonosor, cierta noche tuvo
un sueño que lo dejó sobre modo perturbado. En el sueño vio una gran estatua,
cuya apariencia era terrible.
Dan 2:32 La cabeza de esta imagen era de oro fino; su pecho y sus brazos, de plata; su
vientre y sus muslos, de bronce;
Dan 2:33 sus piernas, de hierro; sus pies, en parte de hierro y en parte de barro cocido.

Al despertar el rey determinó que los sabios le diesen significado, pero sin contarles
el sueño. No hubo en el reino nadie capaz de declarar al rey el sueño y su
significado.

Fue entonces de entre los cautivos de Judá, Dios levantó un profeta, Daniel a quien
el Señor reveló tanto el sueño como su significado y dijo Daniel al rey:

Pero hay un Dios en los cielos, el cual revela los misterios, y él ha hecho saber al rey
Nabucodonosor lo que ha de acontecer en los postreros días. He aquí tu sueño, y las
visiones que has tenido en tu cama… (Dn.2:28-35).

La estatua de Nabucodonosor simboliza el sistema político mundial, cada una de las


partes de la estatua representa los imperios mundiales que sucedieron a través de la
historia de los días de Daniel hasta el final de los tiempos.

La cabeza de oro simboliza el imperio babilónico, es de oro porque del punto de


vista espiritual, Nabucodonosor era: Dan 2:37 Tú, oh rey, eres rey de reyes; porque el
Dios del cielo te ha dado reino, poder, fuerza y majestad.
Dan 2:38 Y dondequiera que habitan hijos de hombres, bestias del campo y aves del cielo,
él los ha entregado en tu mano, y te ha dado el dominio sobre todo; tú eres aquella cabeza
de oro.

El pecho y los brazos de plata representan el imperio medo persa que vino luego en
seguida bajo el dominio de Ciro. Ese imperio es representado por los dos brazos
porque era constituido de dos reinos: el de Media y el de Persia. La Persia
corresponde hoy a Irán.

El tercer imperio, el imperio griego o macedónico es simbolizado por el cuadril de


bronce. Al frente de ese imperio Alejandro el grande, conquistó todo el mundo
conocido en aquella época hasta la India. Observe que la calidad del material va
207

disminuyendo mientras que la fuerza va aumentando. El oro es un metal frágil y


macizo, pero es valioso. Babilonia es la cabeza de oro, porque Nabucodonosor
reinaba solo con vara de hierro. En ese sentido su reino simbolizaba al de Jesús, que
también un día reinará solo con cetro de fierro. A medida que los imperios van
pasando, el poder pierde en calidad, pero gana en fuerza.

El cuarto imperio, el romano se simboliza por las piernas de fierro, era un imperio
tan poderoso que no había quien pudiese resistirlo. La verdad el imperio romano no
fue derrotado por ningún otro, simplemente cayó solito. Después de este, no se
levantó ningún otro imperio mundial.

El imperio romano, sin embargo resurgirá en los últimos días, representado por los
pies mitad de barro y mitad de fierro, pero no será como en la antigüedad. Será de
fierro todavía, porque tendrá mucho poder, pero con poca consistencia, porque va
estar mesclado con barro. Esa mescla de barro y fierro representa la democracia, el
último imperio romano tendrá estas dos características: la consistencia de fierro y la
fragilidad de barro, será constituido de diez reyes. En eso reside su fragilidad,
porque dependerá de alianzas políticas para mantenerse en el poder. Los pies de la
estatua apuntan para el imperio del anticristo, sobre el cual caerá una piedra grande
que es Jesús – la roca de los siglos – cuyo reino se transformará en la gran montaña
que llenará toda la tierra. Eso indica que el Señor volverá en los días de ese imperio,
porque Él es aquella piedra y su reino es esa montaña que llenará toda la tierra. La
estatua será totalmente destruida por la piedra, de ella no sobrará nada, o sea,
todos los imperios pasarán, en el reino de Cristo no habrá ni siquiera un recuerdo de
ellos.

2. El cuarto animal – Daniel 7

En Apocalipsis 13:2, la bestia es semejante al leopardo con pies de oso y boza de


león, esos animales están allí para mostrar que el imperio del anticristo será la
consumación de todos los imperios. Cada unos de esos animales corresponde a la
visión de Daniel en el capítulo siete.

En el primer año de Belsasar rey de Babilonia tuvo Daniel un sueño, y visiones de su cabeza
mientras estaba en su lecho; luego escribió el sueño, y relató lo principal del asunto.
Daniel dijo: Miraba yo en mi visión de noche, y he aquí que los cuatro vientos del cielo
combatían en el gran mar.
Y cuatro bestias grandes, diferentes la una de la otra, subían del mar.
La primera era como león, y tenía alas de águila. Yo estaba mirando hasta que sus alas
fueron arrancadas, y fue levantada del suelo y se puso enhiesta sobre los pies a manera de
hombre, y le fue dado corazón de hombre (Dn.7:1-4).

El primer animal es el león con alas de águila que corresponde a la otra estatua de
Nabucodonosor, o sea: el primer animal simboliza el imperio babilónico. El símbolo
208

de Nabucodonosor era un león con alas, un león con alas de águila es algo
poderoso: el mayor de las aves de rapiña y el mayor de los depredadores unidos en
un solo animal.

Dan 7:5 Y he aquí otra segunda bestia, semejante a un oso, la cual se alzaba de un
costado más que del otro, y tenía en su boca tres costislas entre los dientes; y le fue
dicho así: Levántate, devora mucha carne.

El segundo animal es el oso con las costislas entre los dientes, apunta para el
imperio medo persa, representado por el pecho y los brazos de plata de la estatua.
El oso sale del león así como el imperio medo persa salió del imperio babilónico.

Dan 7:6 Después de esto miré, y he aquí otra, semejante a un leopardo, con cuatro alas de
ave en sus espaldas; tenía también esta bestia cuatro cabezas; y le fue dado dominio.

El tercer animal – el leopardo, simboliza el imperio griego, representado por el


cuadril de bronce de la estatua, el leopardo recuerda agilidad y Alejandro el grande
conquistó todo el mundo en poco mas de tres años. Alejandro murió muy joven a
los 33 años y después de su muerte el imperio macedónico fue dividido entre sus
cuatro generales: Ptolomeo, Seleuco, Antipater y Filitero. Es por eso la razón del
leopardo tener cuatro cabezas y cuatro alas.

A pesar de no haber sido descrito, el cuarto animal es el más asustador de todos.


Daniel informa apenas que él tiene diez cuernos y dientes de fierro, el fierro lo
asocia a la cuarta parte de la estatua, las piernas de fierro. Ese extraño animal con
dientes de fierro simboliza el imperio romano.

Esas dos visiones – la de Daniel y la de Nabucodonosor, tiene el mismo significado.


Entre tanto, acontecieron bajo puntos de vista diferentes. La visión de
Nabucodonosor fue la de un hombre sin Dios que se deslumbra en esos imperios,
pensando como maravillosos, espantoso, sensacionales y extraordinarios. Mas del
punto de vista divino que vimos en el capítulo siete, esos imperios no pasan de
animales horrendos, extraños y bestias. Para Dios, los reinos humanos son cosas
monstruosas e indescriptibles.

El cuarto animal tiene diez cuernos, así como el animal de Apocalipsis 13. Veamos:

Ap. 13:1 Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete
cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un
nombre blasfemo.
Ap. 13:2 Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca
como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad.

Esa bestia tiene diez cuernos que corresponden a partes de la estatua en Daniel dos,
hay una ligación estrecha entre Daniel y Apocalipsis, la descripción de uno es
semejante al otro.
209

El cuarto animal apunta para el imperio del anticristo y en cierto sentido lo que se
dice del imperio también se refiere al propio anticristo. La descripción que se hace
del animal, que es el imperio, también se aplica al anticristo que es una persona. El
cuarto animal de Daniel es el imperio del anticristo, la bestia en Apocalipsis es el
propio anticristo.

La fiera que Daniel vio erra terrible, espantosa y muy fuerte, el imperio del anticristo
será muy fuerte, tiene grandes dientes de fierro y uñas de bronce, lo que muestra
como serán realizadas sus conquistas. El poder que él recibe es el poder militar – el
poder bélico.

Esta bestia tiene un cuerno pequeño que sube entre los diez cuernos (Dn.7:8, 20, 24,
26). El anticristo es ese pequeño cuerno, el cual tiene ojos y una boca que habla con
insolencia.

3. El pequeño cuerno – Daniel 7


Dan 7:19 Entonces tuve deseo de saber la verdad acerca de la cuarta bestia, que era tan
diferente de todas las otras, espantosa en gran manera, que tenía dientes de hierro y
uñas de bronce, que devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies;
Dan 7:20 asimismo acerca de los diez cuernos que tenía en su cabeza, y del otro que le
había salido, delante del cual habían caído tres; y este mismo cuerno tenía ojos, y boca
que hablaba grandes cosas, y parecía más grande que sus compañeros.
Dan 7:23 Dijo así: La cuarta bestia será un cuarto reino en la tierra, el cual será diferente
de todos los otros reinos, y a toda la tierra devorará, trislará y despedazará.

Los diez cuernos corresponden a los diez reyes que se levantarán de aquel mismo
reino y después de ellos se levantará otro, el cual será diferente de los primeros y
abatirá a tres reyes. Proferirá palabras contra el altísimo e incitará en cambiar los
tiempos y la ley, los santos les serán entregados en las manos por un tiempo, dos
tiempos y mitad de un tiempo, o sea, tres años y medio. Por lo tanto, la profecía se
refiere al anticristo que reinará sobre el imperio romano resurgido en los días de la
gran tribulación. Él perseguirá los judíos y los cristianos aquí en la tierra durante su
reinado.

Dan 7:22 hasta que vino el Anciano de días, y se dio el juicio a los santos del Altísimo; y
llegó el tiempo, y los santos recibieron el reino.

El imperio del anticristo será formado por diez reyes que también pueden
representar diez sistemas diferentes de gobierno. De entre los diez gobernantes,
uno gobierna más de un país, a la verdad son diez reyes que posiblemente estarán
gobernando todo el mundo. Ellos son representados por los diez cuernos y también
por los diez dedos de la estatua.

Dan 7:24 Y los diez cuernos significan que de aquel reino se levantarán diez reyes; y tras
ellos se levantará otro, el cual será diferente de los primeros, y a tres reyes derribará.
210

En el inicio serán diez reyes, pero cuando el anticristo se levante, él abatirá tres de
entre los diez, al final serán apenas el anticristo y más siete. De acuerdo con
Apocalipsis 13:1, la bestia, esto es el anticristo, tiene diez cuernos y siete cabezas. De
los diez cuernos, tres serán abatidos, restando apenas siete (Dn.7:20).

El cuerno tiene siete ojos de hombre, simbolizando a un hombre. Uno de aquellos


cuernos proferirá blasfemias contra el altísimo. El anticristo se levantará contra todo
que se llama Dios, contra cualquier forma de culto y proferirá palabras insolentes y
blasfemias contra el Señor.

En aquellos días antes de su venida, el arrebatamiento habrá acontecido y


consecuentemente, él tendrá que dar explicaciones exhaustivas sobre lo ocurrido.
El arrebatamiento será noticia obligatoria en todos los telenoticiarios, las páginas de
los periódicos llamarán la atención para los sorprendente e inexplicable
desaparecimiento de millones de personas en todo el mundo.

Probablemente los cristianos que queden serán tomados de gran fervor,


compromiso y predicarán el evangelio con bastante osadía, ellos estarán
conscientes de que una parte de la iglesia fue arrebatada y que el Señor Jesús está
volviendo para reinar y desearán mantenerse fieles delante de Él. Los cristianos que
no fueren arrebatados serán entregados en las manos de anticristo, sufrirán todo
tipo de privaciones y persecuciones, por un tiempo, dos tiempos y mitad de un
tiempo, o sea, tres años y medio.

Antes de eso, el anticristo intentará cambiar los tiempos y la ley, estas previsiones
ciertamente se refiere a los judíos. Daniel se refiere a la ley de Moisés, cambiar los
tiempos significa que él va abolir todas las fiestas. En la Biblia hay siete fiestas, las
cuales todavía son conmemoradas en Israel. Cambiar la ley significa que la ley de
Moisés será revocada.

Ahora imagine lo que sucederá a la iglesia: será lanzada en el desierto, donde los
santos del altísimo serán perseguidos por el anticristo (Ap.12:13-18). Probablemente,
él promoverá una campaña de difamación y escarnecimiento contra Dios; por
ejemplo: las personas serán estimuladas a desenvolver sus potencialidades místicas
a fin de: mantener contactos con seres extraterrestres y sus naves espaciales, los
cuales hay milenios antes de la existencia del hombre, ya visitaban la tierra. Todos
nosotros somos descendientes de eses viajantes cósmicos, esa historia de que hay
un Dios gobernando el universo es mitología, todos nosotros somos dioses, dirá él.
Hoy, el mundo entero está envuelto en ese clima de esoterismo.

El anticristo es ese pequeño cuerno que se levantará y el imperio del anticristo se


convertirá en el imperio romano resurgido en los últimos días.

4. El príncipe – Daniel 9:26-27


211

Dan 9:26 Y después de las sesenta y dos semanas se quitará la vida al Mesías, mas no
por sí; y el pueblo de un príncipe que ha de venir destruirá la ciudad y el santuario; y su
fin será con inundación, y hasta el fin de la guerra durarán las devastaciones.

Ese príncipe que ha de venir, se refiere a Tito, el general romano que destruyó
Jerusalén, él es un tipo de anticristo. El versículo 27 se refiere al anticristo: “él hará
alianza con muchos por una semana”. No se sabe cuanto tiempo durará el gobierno
del anticristo, pero lo cierto que él hará una alianza de siete años con Israel.

Entre tanto, a la mitad de los siete años, él prohibirá todo culto a Dios y profanará el
templo de Jerusalén, colocando su propia imagen en el lugar santo. Mat 24:15 Por
tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta
Daniel (el que lee, entienda) (Dn.9:27).

Cuando ese brislante y extraordinario emperador mundial se manifieste, debajo de


toda la inspiración e influencia del diablo, él será idolatrado y adorado.

5. El asolador – Daniel 11:36-38

Históricamente los hechos mencionados en Daniel once ya se cumplieron con la


venida del emperador griego Antioco Epifanio. Todavía sabemos que él era apenas
un tipo de anticristo que se manifestará en el futuro (Dn.11:21-35). La abominación
desoladora mencionado por Jesús en Mateo 24, tuvo un primer cumplimiento con
él, que sacrificó un puerco en lugar santísima en el año 168 aC. “Dan 11:31 Y se
levantarán de su parte tropas que profanarán el santuario y la fortaleza, y quitarán el
continuo sacrificio, y pondrán la abominación desoladora.”

Jesús, sin embargo dijo que eso acontecerá nuevamente y cuando acontezca,
marcará el inicio de la gran tribulación (Mt.24:15).

Dan 11:36 Y el rey hará su voluntad, y se ensoberbecerá, y se engrandecerá sobre todo


dios; y contra el Dios de los dioses hablará maravislas, y prosperará, hasta que sea
consumada la ira; porque lo determinado se cumplirá.

El anticristo se engrandecerá sobre todo aquello que se llama Dios, él será contra
Dios, él hará cosas increíbles y será prospero hasta que se cumpla la indignación,
porque aquello que se está determinado será hecho.

Él no tendrá respeto a los dioses de sus padres, ni al deseo de las mujeres ni a


cualquier Dios, porque sobre todo se engrandecerá (Dn.11:37). Por causa de eso
algunos dicen que él será homosexual, lo que parece ser verdad porque según 1
Timoteo 4:3, él es contra el matrimonio llegando hasta prohibirlo.

Los valores serán invertidos en aquellos días, a los ojos de Dios el mundo no está
mejorando, por el contrario está caminando de mal en peor. El mundo puede estar
mejor desde el punto de vista tecnológico, del conforto, del conocimiento humano;
212

sin embargo del punto de vista de Dios, que es la dignidad y la verdad, el mundo
camina de mal a peor. Ya es normal hablar de matrimonio entre homosexuales y de
aquí a algún tiempo será común un hijo divorciarse de sus padres. Ese es uno de las
señales de la venida del Señor, porque Él viene a convertir el corazón de los padres a
los hijos y de los hijos a los padres (Ml.4:5.6).

En el verso 38 vemos:

Dan 11:38 Mas honrará en su lugar al dios de las fortalezas, dios que sus padres no
conocieron; lo honrará con oro y plata, con piedras preciosas y con cosas de gran precio.

El anticristo dará valor apenas al poder bélico, que para él será un dios o dios de las
fortalezas.

6. La bestia viniendo del mar – Apocalipsis 13:1-10

Vamos ahora concentrarnos en la visión de Juan en el capítulo 13 de Apocalipsis.

Ap. 13:1 Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete
cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre
blasfemo.
Ap. 13:2 Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca
como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad.

Esta bestia contiene todos los elementos de los imperios mundiales que vinieron
antes mostrando que es una continuación de la revelación de Daniel. Ella sale del
mar, ¿Qué mar es este? En Daniel, es el mar Mediterráneo, aquí sin embargo, las
naciones. De acuerdo con Apocalipsis 17:15, las aguas (del mar) son pueblos,
multitudes, naciones, lenguas. El mar apunta para las naciones del mundo; por tanto
el anticristo no procede no procede de Israel.

En 11:27, la bestia sale del abismo para matar a los dos testigos: Moisés y Elías
durante la gran tribulación. ¿Quién estará gobernando en ese periodo? El anticristo;
por tanto el abismo y el mar de donde sale la bestia es la misma cosa, abismo es el
lugar de la habitación de demonios (Ap.9:11), ¿Quién es el que sale del abismo? El
anticristo, luego él será la encarnación del maligno. Como será eso, no sabemos.
Todo indica que será una reproducción de Lucifer, en otras palabras, el anticristo
será la cristalización de todo lo que Satanás posee solo que en una forma humana.

Apocalipsis 13:1 es la misma descripción del dragón que persigue la mujer en el


capítulo 12:3, el diablo también es un dragón con siete cabezas y diez cuernos,
exactamente como el anticristo; eso significa que el anticristo es la exacta expresión
humana de Lucifer.

Los diez corresponden a los diez dedos de la estatua (Dn.2:33), los cuales también
son diez reyes y las siete cabezas son siete reyes o siete montes:
213

Ap. 17:9 Esto, para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes,
sobre los cuales se sienta la mujer.

Eso significa que la capital del imperio será una ciudad edificada sobre siete montes,
los cuales simbolizan también siete reyes. Esta ciudad con certeza es Roma, visto
que ella es históricamente conocida como la ciudad de siete colinas.

Ap. 13:3 Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y
se maravilló toda la tierra en pos de la bestia,
Ap. 13:4 y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia,
diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella?

Una de las cabezas de la bestia que salió del mar está herida mortalmente, pero
resucitará, esta cabeza se refiere al propio anticristo. Será de hecho tan maravilloso
y extraordinario que no habrá duda sobre el poder de él. él será adorado por todos
los moradores de la tierra, cuyos nombres nos fueron escritos en el libro de la vida
del cordero que fue muerto desde la fundación del mundo (13:8).

Ap. 13:7 Y se le permitió hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También se le dio
autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación.

El imperio del anticristo es constituido de diez reyes que gobernarán toda la tierra,
es como si fuese el dirigente de una comunidad de naciones de todo el mundo. El
anticristo tendrá el poder de matar los santos, inclusive los dos testigos: Moisés y
Elías (11:7).

Es muy difícil actualmente entender como será posible al anticristo perseguir los
cristianos a punto de matarlos, cambiar valores tan arraigados como la liberta de
culto y expresión. La pena de muerte es algo que está disminuyendo en todo el
mundo y en los lugares donde todavía se aplica, está cada vez más debajo de
presión para ser banida. Algún evento deberá desencadenar un cambio radical de
mentalidad, creemos que ese evento crucial será el arrebatamiento de los santos
vencedores. Cuando el arrebatamiento acontezca los hombres tendrán que explicar
de alguna forma lo acontecido, cuando perciban que millones de personas
simplemente desaparecieron, ellos intentarán explicar y la explicación más plausible
será atribuir eso a una invasión extraterrestre; tal vez digan que los creyentes
arrebatados eran invasores disfrazados. El anticristo dirá: no podemos aceptar
ninguna religión más, la religión ahora somos nosotros, el hombre, nosotros somos
nuestros dioses, Dios es apenas la figura de una alienígena que vino para
dominarnos. Un evento como el arrebatamiento, tiene el poder para cambiar la
mentalidad mundial, los creyentes que quedaren serán considerados como
enemigos del estado.

¿Usted que pensaría si aconteciese un supuesto extraterrestre mantuviese un


contacto con la tierra? Todo en la Biblia sería explicado a partir de ese punto de
214

vista, dirían que Jesús era apenas un extraterrestre que estuvo aquí. El enemigo es
capaz instaurar un engaño de esa magnitud.

La instauración, implementación del engaño vendrá. Hoy la operación del diablo


todavía no está liberada porque los creyentes vencedores detienen esa acción en la
tierra, el maligno todavía no puede levantarse del mar, las acciones del enemigo son
bloqueados por la presencia del hijo varón en la tierra. Cuando el hijo varón fuere
arrebatado para el trono de Dios, la operación del engaño será liberada y por no dar
crédito a la verdad, el padre permitirá la operación del engaño (2Ts.2:9-11).

7. El hombre de la iniquidad – 2 Tesalonicenses 2:3-10

Pablo nos da también una descripción festación del anticristo, él lo llama de hombre
inicuo e hijo de perdición.

2Ts 2:3 Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la
apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición.

Como es descrito por Daniel, Pablo dice claramente que él se levantará contra toda
forma de culto.

2Ts 2:4 el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto;
tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.

Cada vez más las personas perciben que la religión es causa de muchas guerras y
terrorismo, llegará el tiempo en que la apostasía y las personas tendrán aversión a
cualquier tipo de religión. Es la hora del hombre ser proclamado como su propio
Dios, la venida del anticristo será el ápice del humanismo y de la independencia de
Dios.

2Ts 2:6 Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su debido tiempo se
manifieste.
2Ts 2:7 Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente
lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio.

Quien detiene la manifestación del hijo de perdición hoy es la parte de la iglesia


compuesta por los creyentes vencedores, ellos son la sal que impiden que no se
deteriore la carne, es la sal que impide el podrecimiento total. Sabemos que ni todo
miembro de la iglesia es una sal que sale. Hay personas que ya perdieron el sabor,
todavía hay muchos creyentes que son salados e impiden la acción del maligno; esos
son vencedores, los que están impidiendo que se manifieste el hijo de perdición.
Antes de la gran tribulación; sin embargo, esos santos vencedores serán
arrebatados y cuando eso acontezca, el tendrá el camino abierto para manifestar
toda operación del engaño.
215

El ministerio de iniquidad ya opera y hay muchos anticristos actuando en la tierra,


pero todavía no llegó de hecho aquél que ha de venir, el anticristo promoverá
señales y maravislas con el objetivo de mostrar que el hombre no necesita de Dios.

2Ts 2:9 inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y
prodigios mentirosos,
2Ts 2:10 y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron
el amor de la verdad para ser salvos.

Por no acoger el amor verdadero para ser salvos es que Dios les manda la operación
del error, para que den crédito a la mentira a fin de que sean juzgados todos
aquellos que no den crédito a la verdad, por el contrario se deleitaron con la
injusticia.
216

La bestia que sale de la tierra – el falso profeta


Apocalipsis menciona la trinidad satánica:

Ap. 16:13 Y vi salir de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del falso
profeta, tres espíritus inmundos a manera de rana.

Por ese texto, tú ves que hay tres personajes actuando: la bestia que es el anticristo,
el dragón que es Satanás y el falso profeta. Esos tres estarán actuando en la tierra
en aquellos días.

En el capítulo 19, verso 20 leemos que:

Ap. 19:20 Y la bestia fue apresada, y con ella el falso profeta que había hecho delante de
ella las señales con las cuales había engañado a los que recibieron la marca de la bestia, y
habían adorado su imagen. Estos dos fueron lanzados vivos dentro de un lago de fuego
que arde con azufre.

El destino de la bestia que es el anticristo y del falso profeta será en el lago de


fuego. Hablamos sobre el dragón en el capítulo 12 y del anticristo, él es la bestia que
sale del mar. Vamos entender ahora la figura del falso profeta.

La bestia que sale de la tierra es el falso profeta (Ap. 16:13, 19:20, 20:10). La primera
bestia sale del mar que representa al anticristo que vendrá de naciones gentílicas.
217

La segunda viene de la tierra, ella representa al falso profeta que debe venir de
Israel, la tierra simboliza a Israel.

1. Pareciendo cordero, habla como dragón – 13.11-13


Ap. 13:11 Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a
los de un cordero, pero hablaba como dragón.

El hecho de tener dos cuernos significa que el falso profeta tiene menos poder que
el anticristo, él parece cordero, pero habla como dragón. Guarde bien esto: con esa
falsa apariencia de cordero, él intentará de hacerse pasar como un seguidor de
Jesucristo, ciertamente él se identificará como un mensajero de Dios.

El falso profeta tendrá que desviar la atención de dos testigos del capítulo 11,
haciendo también caer fuego del cielo, será difícil distinguir al falso profeta de los
dos testigos, porque ambos tendrán el poder de hacer señales como hacer caer
fuego del cielo. Vemos así que las señales no son criterio fundamental de
discernimiento entre el falso y el verdadero (Mt.24:24 y 2Ts.2:9-10).

2. Trabajando para el anticristo – 13:14

Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese
una marca en la mano derecha, o en la frente;
y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la
bestia, o el número de su nombre.
Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es
número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis (Ap.13:16-18).

La primera bestia – el anticristo emerge del mar que simboliza las naciones; eso
indica que el anticristo no es judío. Entre tanto, la segunda bestia – el falso profeta
emerge de la tierra que simboliza la tierra prometida o Israel. Todo indica entonces
que el falso profeta será judío.

El falso profeta se levantará durante la gran tribulación o sea durante los tres años y
medio del reinado del anticristo. En ese trayecto probablemente la bestia sufrirá un
atentado terrorista al cual vivirá sorprendentemente. Delante de eso el falso
profeta mandará hacer una imagen de la bestia, al cual para que todo el mundo vea
concederá el aliento de vida, y la bestia será adorada por todos como si fuese el
propio Cristo. Los que no adoren morirán de forma sobrenatural, los milagros y
prodigios producidos por el falso profeta serán tan convincentes que seducirán a
todo el mundo y pocos se recusarán a recibir el sello con la marca de la bestia. El
dragón, al anticristo y el falso profeta forman la trinidad satánica.

Ap. 13:12 Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la
tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada.
218

El anticristo será una persona tan extraordinaria que los hombres pensarán que es
el propio Mesías; eso acontecerá justamente cuando él sea herido mortalmente y
después de ser dado muerto por los médicos, resucitará. Delante de eso el falso
profeta proclamará: “este es el Mesías que vino para reinar y establecer su reino en
la tierra” esa falsa resurrección es apenas la astucia de Satanás para intentar de
engañar aun a los elegidos. Después de esa cura milagrosa, el falso profeta mandará
construir una imagen del anticristo y exigirá la adoración de todos, eso será el inicio
ciertamente el momento de la persecución a los judíos y al restante de la iglesia,
pues ellos ciertamente no se curvarán delante del anticristo.

El anticristo opera también grandes señales de manera que hasta fuego del cielo
hará caer en la tierra delante de los hombres.

También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la
tierra delante de los hombres.
Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en
presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la
bestia que tiene la herida de espada, y vivió.
Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e
hiciese matar a todo el que no la adorase (Ap.13:13-15).

Cuando el falso profeta hiciere hablar la imagen, el mundo idólatra va delirar y


doblarse delante de ella. El falso profeta también operará grandes señales de
manera que hasta fuego del cielo hará caer en la tierra. En Mateo 24:24, el Señor
Jesús predijo que eso acontecerá: “porque seguirán falsos cristos y falsos profetas,
operando grandes señales y prodigios” y el apóstol también advierte, diciendo:

2Ts 2:9 inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y
prodigios mentirosos,
2Ts 2:10 y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron
el amor de la verdad para ser salvos.

En la misma ocasión en que se manifiesten el falso profeta y el anticristo, Dios


levantará en Jerusalén también los dos testigos: Moisés y Elías. Ellos también
operarán señales y prodigios, tales como impedir que llueva, transformar agua en
sangre, hacer caer fuego del cielo y traer flagelos sobre la tierra. Cuando hubieren
concluido el testimonio, serán matados por el anticristo, sus cuerpos quedarán
expuestos en la plaza pública durante tres días y medio. Después de eso, vendrá
sobre ellos el Espíritu de Dios que los resucitará y subirán al cielo en una nube
delante de todos.

¿Cómo distinguir entre el falso profeta y los profetas de Dios – Moisés y Elías en
Jerusalén? Es el mismo criterio que debemos usar hoy. ¿Cómo distinguir entre un
pastor verdadero y un pastor falso? ¿Entre una iglesia verdadera y una falsa? ¿A
través de señales? Por su puesto que no, las señales también pueden ser realizadas
219

por los falsos profetas. El Señor Jesús dijo que en los últimos días, se levantarán
muchos falsos profetas y operadores de milagros, los cuales actúan bajo el espíritu
de engaño; por tanto, expulsar demonios, curar enfermos, operar prodigios y
señales no son criterios para distinguirse la mentira de la verdad, el falso del
verdadero.

El falso profeta tiene la apariencia del cordero, pero habla como dragón, la cuestión
es lo que la persona es y no lo que aparenta ser. Es claro que queremos ver señales,
prodigios, milagros y maravislas sucediendo entre el pueblo de Dios. Mas esas cosas
no son el fundamento, el fundamento mismo es el carácter y la santidad. Observe
bien: el cordero no se parece al dragón.

Juan Bautista no hizo ningún milagro, pero fue el mayor de los profetas, porque
vivió en santidad, en corrección, en integridad y en pureza. En los días del anticristo
y del falso profeta será muy difícil distinguir la piedad de la iniquidad, ellos matarán
a los profetas, los cuales denunciaran sus obras de engaño y todos los que no
adoraren la imagen del anticristo (que fue incitado por el falso profeta) serán
muertos.

De tiempos y tiempo oímos hablar de una imagen que llora y otras hasta lloran
sangre. Mas la Biblia dice que esta estatua hablará y eso no será un efecto especial.
Ella realmente hablará, personalmente creo que será algo extraordinario que las
personas se curvarán espontáneamente delate de ella.

¿Qué sucederá cuando aparezca una estatua prodigiosa como esa? Ciertamente
habrá una peregrinación mundial para verla y eso en días de mucha tribulación y
angustia. El faso profeta hará con que mueran todos los que no adoraren la imagen,
aquellos que dudaren y no quisieren curvarse morirán en aquellos días.

Intente construir en su mente el escenario de la gran tribulación, son tres años y


medio, tiempos extraordinarios, en los cuales muchos prodigios jamás vistos
sucederán.

En la primera trompeta, el mar será atingido y un tercio de los animales será


destruido juntamente con un tercio de las embarcaciones. La segunda trompeta
atingirá la tierra y un tercio de las vegetaciones serán quemadas. En la tercera
trompeta un tercio del agua potable del planeta será contaminado, después de eso
un tercio del sol y la luna oscurecerán, pero todo eso todavía no es nada. Sumada a
este escenario catalítico, hay dos testigos profetizando en Jerusalén. Ellos
profetizarán por tres años y medio y dirán: no adoren la estatua de la bestia, adoren
solamente a Dios. Ellos harán caer fuego del cielo, harán señales y prodigios,
mientras eso la imagen del anticristo estará en el templo, ella exigirá adoración
juntamente con el falso profeta. En ese tiempo el anticristo va sufrir un atentado,
morirá pero resucitará. Hasta hoy solo Jesús resucitó por si mismo, pero en aquellos
220

días, el anticristo también resucitará. Será la operación del engaño en su nivel


máximo, los dos testigos serán muertos por no adoraren la imagen.

Juntamente con eso en la quinta trompeta por cinco meses, un gran número de
demonios causará dolor y afligirá la tierra como langostas, en ese tiempo los
hombres intentarán morir y no conseguirán. En seguida 200 millones de demonios
serán sueltos durante un año, un mes y un día, y van matar un tercio de la población
de la tierra.

Paralelamente a esos eventos, el falso profeta hará una señal para marcar a todos
aquellos que confiesen a la bestia, de tal manera que quien reciba esa señal no
tendrá más salvación. Porque no se trata solamente de una señal envolviendo
tecnología, será una señal que va envolver también la fe. Quien ni no quiera recibir
esa marca no podrá comprar ni vender, entonces los santos serán perseguidos en la
tierra, el Señor guardará muchos de ellos, pero el anticristo prevalecerá contra ellos
y serán martirizados. Todo eso estará sucediendo en un periodo de tres años y
medio, sin duda serán los peores tres años y medio de la historia. Jesús dijo en
Mateo 24 que nunca hubo días como ese y nunca habrá después.

Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese
una marca en la mano derecha, o en la frente;
y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la
bestia, o el número de su nombre.
Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es
número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis (Ap.13:16-18).

Intente imaginar la situación, aparece alguien diciendo: “el dinero es un problema,


por eso creamos un dinero virtual, entonces en vez de que cargues dinero o una
tarjeta de crédito en su bolsillo, hicimos un pequeño chip que contiene todos sus
datos, tan pequeño que puede ser puesto debajo de la piel”. Imagine ahora que ese
chip pueda ser leído por un escáner y esté escrito toda su historia, sus datos
médicos, familiares, genéticos, profesión, grado de instrucción, en fin todo a su
respecto. Si hubiera algún accidente, en segundos será posible bajar toda la
información a su respecto.

Con ese chip no necesitarás más cargar dinero, su salario estará depositado en su
cuenta, para hacer una compra bastará pasar la mano en un lector óptico y el valor
será registrado en su cuenta. ¿Eso sería maravilloso, verdad? Sería práctico y
confortable, eso es inevitable, ciertamente va acontecer. Yo le pregunto
¿actualmente qué pastor sería loco de decir que quien acepte ese chip irá para el
infierno? ¿En qué impedirá ese chip la salvación de alguien? ¿No sería ese
pensamiento absurdo? Son cosas sin ninguna explicación espiritual, algunos dicen
que el código de barra es el diablo, pero se trata apenas de un avance que facilitó
221

mucho la vida de los comerciantes. Naturalmente la marca de la bestia será lago


físico, pero ella tendrá una connotación espiritual evidente.

Añadiendo a eso de hecho de que algo inédito habrá acontecido: millones de


personas fueron arrebatadas, ellas simplemente desaparecieron, cuanto menos
esperaren estarán dos en el campo y uno será tomado y el otro será dejado; dos
estarán en una máquina de costura, una será tomada y la otra dejada; dos estarán
en una tienda uno será tomado y el otro dejado. Será un fenómeno de repercusión
mundial, cuando el arrebatamiento acontezca todo será diferente. Aquella marca
no será algo apenas comercial, será algo espiritual también, una vez que allí en
aquel chip habrá también un control de fe, de aquello que tú cree. Ahí las cosas
cambian de figura.

Si el gobierno determina que la marca será la forma de identificación de todo


ciudadano, los creyentes que se recusaren estarán practicando la desobediencia
civil, ¿y si además de rechazar la marca, ellos también predicaren contra eso? Ellos
serán considerados como enemigos del estado, en aquellos días habrá una
persecución severa contra los creyentes que quedaren.

La marca de la bestia será algo de mucho significado espiritual que simplemente un


sistema electrónico, sus implicaciones no serán simplemente comerciales, al recibir
la marca de la bestia, las personas estarán adhiriendo a un sistema religioso cuyas
leyes serán enseñadas e impuestas a los ciudadanos por el falso profeta. Para
implantar ese sistema, el falso profeta contará con la autoridad del anticristo y
también con la eficacia de Satanás para operar grandes señales.

A respecto del número 666 no queremos intentar de descifrarlo porque muchos


hicieron eso de manera eficiente, existen muchos que son anticristos en nuestros
días en los cuales ese número puede ser identificado. No apenas personas sino
también cosas y objetos traen embutidos en si esa marca. Eso es apenas una
evidencia de que el ministerio de iniquidad ya opera en la tierra (2Ts.2:7).

El número seis es el número del hombre caído en rebelión contra Dios y unido al
diablo, en esta expresión 666, el número 6 está representado tres veces. Luego 666
apunta para el hombre en su grado máximo de independencia y rebelión contra
Dios.

Desde ya nosotros sabemos que su número es 666, sabemos que los códigos de
barra tienen 666 y que todas las letras del alfabeto tienen un correspondiente
numérico. Hagamos una prueba, sustituyamos las letras por su correspondiente
numérico y percibiremos que el nombre de algunas personas famosas tienen en su
suma el número 666. Líderes religiosos, líderes empresariales y otras
personalidades ciertamente son tipos de anticristos, el anticristo sin embargo,
todavía no está aquí, porque lo que lo detiene todavía no fue removido. De
222

cualquier forma esperamos por el arrebatamiento y no por la venida del inicuo, es


eso lo que importa para nosotros.

El número del anticristo es 666 porque él se levantará contra todo que se llama
Dios. En el final, hasta la propia iglesia católica será destruida. ¿Por qué el anticristo
se levantará contra todo tipo de religión? Porque acontecerá alguna cosa muy grave
y provocará el desconfianza y la persecución a todas ellas, sobre todo a los
cristianos y judíos. Ciertamente el arrebatamiento será ese evento, de esa forma los
hombres se unirán a Satanás que los convencerá de que también son dioses. Esta es
la razón porque 666 tanto es el número de la bestia como del hombre, que a ella se
une.

Ya afirmamos anteriormente que no se pierde salvación, quien es salvo es salvo


para siempre, dice el Señor:

Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen,


y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi
Padre.
Yo y el Padre uno somos (Jn.10:27-29).

Usted no puede perder la salvación, con todo puede perder la gloria del reino.

Ser salvo es una cuestión de gracia, pero participar de la fiesta nupcial es una
cuestión de cualificación espiritual, o sea, es una cuestión de ser o no ser vencedor.
En los días del anticristo, los creyentes que no participen del arrebatamiento
quedarán aquí, porque el arrebatamiento no es para todos los creyentes, sino
apenas para los creyentes calificados. Muchos son llamados, pero pocos son
calificados, en el día del arrebatamiento, solamente los calificados subirán.

El arrebatamiento acontecerá antes de la gran tribulación, pero la vuelta del Señor


será después; eso significa que muchos pasarán por todo el periodo de la gran
tribulación. Yo se que el Señor nos guardará de aquel juicio que viene sobre el
mundo, pero no los guardará de las persecuciones que vendrá sobre la iglesia.

Estamos llegando a un momento crítico de nuestra vida cristiana y de la propia


historia, es el momento de dejar de jugar de ser cristiano. Es hora de buscar la
obediencia completa en medio de la iglesia, es tiempo de santidad y compromiso
por encima todo.

Hoy es el momento en que aquellos que trabajan deben trabajar como si no


trabajasen, aquellos que estudian como si no estudiasen, los que poseen bienes y
dinero, como si no las poseyesen. Viva para el Señor y use todo para la gloria de
reino de Dios.
223

La gran tribulación desde la óptica de Dios


El capítulo 14 trata de cosas que estarán aconteciendo durante la gran tribulación
hasta la consumación final.

El primer punto con lo cual nos deparamos es con el número 144000, ¿Se refiera a la
iglesia o Israel? ¿Es un número literal o simbólico? Los 144000 mencionados en el
capítulo siete claramente se refiere al pueblo judío, pues allí las doce tribus son
contadas. Aquí en el capítulo 14, no puede referirse a los judíos, una vez que el texto
dice claramente que se trata de las primicias del Señor: Ap.14:4 Estos son los que no
se contaminaron con mujeres, pues son vírgenes. Estos son los que siguen al Cordero por
dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los hombres como primicias para
Dios y para el Cordero.

Evidentemente que los judíos no son tratados como primicias en Apocalipsis, sino
como remanentes, o sea, exactamente lo opuesto. Las primicias serán los
vencedores arrebatados antes de la gran tribulación. Ellas simbolizan el hijo varón.

Con respecto al número, se puede decir que en el capítulo siete es literal porque
toda su descripción es también literal, en el capítulo 14 el número es simbólico
porque la descripción de los salvos allí solamente se aplica a la iglesia:

Ap. 14:4 Estos son los que no se contaminaron con mujeres, pues son vírgenes. Estos son
los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de entre los
hombres como primicias para Dios y para el Cordero;
Ap. 14:5 y en sus bocas no fue hallada mentira, pues son sin mancha delante del trono de
Dios.
224

La división del capítulo es bastante clara: primero tenemos las primicias que son
arrebatadas antes de la gran tribulación. Después de eso, tenemos las cuatro voces
que relatan hechos que ocurrirán durante la gran tribulación, después de las cuatro
voces tenemos la ciega, el arrebatamiento de todos los santos por ocasión de la
vuelta del Señor y por fin tenemos la vendimia que acontecerá en la vuelta del
Señor.

1. Las primicias – 14.1-5


La primera vez que se menciona los 144000 en el capítulo siete ciertamente se
refiere al pueblo de Israel, allí son mencionadas las doce tribus y muestra el
remanente judío que será salvo. Todavía en esa segunda mención no se refiere al
mismo evento.
El libro de Apocalipsis es concluido con la séptima trompeta en el capítulo once. Se
sabe que después de la última trompeta, el reino de Cristo será establecido. Lo que
hay del capítulo doce hasta el 22 son descripciones adicionales de eventos y
personajes que constaban de la primera parte del libro, pero que ahora son
descripciones más detalladamente. Se tiene por ejemplo la descripción del
anticristo, el falso profeta, de la gran babilonia y de la nueva Jerusalén.
Conforme el mismo principio, el capítulo 14 es una descripción adicional de algunos
eventos que ocurrirán en la gran tribulación hasta la vuelta del Señor. Los eventos
del capítulo siguen por tanto un orden cronológico y la primera cosa que se
menciona son los 144 mil.

Ellos no pueden referirse a los judíos del capítulo siete, pues aquellos que fueron
marcados para pasaren por la gran tribulación, mientras ellos ya estarán junto al
cordero antes de la gran tribulación. También la descripción que se hace en el
versículo cuatro se encaja con los judíos: ellos siguen al cordero, son redimidos y son
castos. Mas lo principal es que el verso cuatro afirma que son las primicias. Aquellos
judíos eran remanentes, ser remanente es ser el último, pero ser la primicia significa
ser el primero.

Por eso se concluye que se trata de los creyentes vencedores que serán arrebatados
antes de la gran tribulación; eso se torna todavía más claro cuando recordamos que
todas las veces que el arrebatamiento es mencionado, los vencedores son llevados
para estar delante del trono. Lo mismo sucede aquí como leemos en el verso 3:
“entonaban nuevo cántico delante del trono, delante de los cuatro seres vivientes y
de los ancianos” no se trata; por tanto, de los judíos que fueron marcados antes de
la gran tribulación.

“Miré y he aquí que el cordero de pie sobre el monte Sion y con Él 144000 marcados
en su frente con su nombre y con el nombre de su padre”. Conforme Hebreos 12:22,
el monte Sion aquí citado no es el monte Sion de Jerusalén, sino el celestial. Los
144000 que están con el cordero son un número simbólico, en el capítulo siete se
225

refiere a los judíos que literalmente serán salvos, pero aquí representa a los
vencedores; por tanto es un número simbólico. 144000 = 1000 x 12 x 12.

En la Biblia existen dos números, en especial simbolizan la perfección: el siete y el


doce, ambos son una composición de tres y cuatro. Tres es el número de la trinidad,
el número de Dios y cuatro es el número de la creación. Siete por tanto es tres más
cuatro, o sea, Dios actuando en su creación; pero doce es tres por cuatro, o sea, Él
es unido eternamente a su creación, el hombre. Es Dios colocando su propia
naturaleza divina dentro del hombre.

En la descripción de la nueva Jerusalén – la novia de Cristo – en los capítulos 21 y 22,


el número está relacionado varias veces. Veamos:

Ap. 22:2 En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la
vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la
sanidad de las naciones.

Todo es doce, porque es para la eternidad. ¿Por qué los 144000? Porque
simbólicamente son 1000 x 12 x 12, por tanto los ciento cuarenta y cuatro mil
representa la plenitud de los vencedores, o sea, aquellos que cumplieron el
propósito del padre en su tiempo, aquellos que maduraron antes de los demás.

Los vencedores son las primicias, son aquellos en cuyas frentes están escritos los
nombres del cordero y del padre. Nosotros somos propiedad exclusiva del Señor, ya
fuimos marcados por su nombre, nosotros tenemos el nombre de nuestro
propietario y dueño marcado sobre nuestra vida.

Son aquellos que entonarán un nuevo cántico delante del trono, de los cuatro seres
vivientes y de los ancianos.

Ap. 14:2 Y oí una voz del cielo como estruendo de muchas aguas, y como sonido de un gran
trueno; y la voz que oí era como de arpistas que tocaban sus arpas.
Ap. 14:3 Y cantaban un cántico nuevo delante del trono, y delante de los cuatro seres
vivientes, y de los ancianos; y nadie podía aprender el cántico sino aquellos ciento cuarenta
y cuatro mil que fueron redimidos de entre los de la tierra.

Las voces de los vencedores suenan como el sonido de las aguas de una gran
catarata o de un trueno, la alabanza en los cielos es bulliciosa. A los hermanos que
no les gusta la alabanza altisonante quedarán incomodados allá. Entre tanto, a
pesar de todo ese estrépito será una alabanza solemne y sublime como el sonido de
un arpa.

Los vencedores solamente entonarán un cántico nuevo delante del cordero, cuya
letra y melodía no será aprendida por nadie ni por los ángeles. ¿Qué significa un
nuevo cántico? En la Biblia los canticos nos hablan de experiencias, todas las veces
226

que un hombre o mujer de Dios tuvo una experiencia en la Biblia, cantaba un cántico
nuevo que hablaba de su experiencia.

Nadie puede aprender el cántico de aquellos 144000 ni los ángeles, ellos cantan el
cántico de la redención, del perdón y de la salvación. Aquellos ángeles que están en
la gloria, no tuvieron esa experiencia; por tanto, no podrán junto con nosotros en
aquel día, porque es un cántico de los que fueron separados por Dios antes de la
fundación del mundo y comprados por la sangre del cordero. Los ángeles no podrán
cantar ese cántico porque no necesitan de salvación, no entienden lo que es la
carne, la tentación y las presiones que nosotros enfrentamos. Por eso solamente
nosotros cantaremos el Señor en aquél día.

Ap. 14:4 Estos son los que no se contaminaron con mujeres, pues son vírgenes.

Castidad aquí es algo simbólico, ciertamente está en oposición a la prostitución de


la gran tribulación. Si no fuese así, apenas hombres arrebatados. ¿Dónde estarían las
mujeres? Las hermanas también hacen parte de los vencedores, el texto aquí no se
está refiriendo apenas a los hombres. Los vencedores son hombres como mujeres,
la expresión “los que no se macularon con mujeres” simboliza una vida pura
(Mt.19:11-12, 1Co.7:7, 34, 37).

En la Biblia, la idolatría es simbolizada por la prostitución, cuando alguien se desvía


para otros dioses o divide su corazón con otras cosas, comete un acto de
prostitución espiritual. Los vencedores son personas que no se macularon con otras
cosas, el corazón de ellos está envuelto exclusivamente en Dios, los vencedores
casados también han de reinar con Cristo; entonces no importa si somos casados o
no, lo que interesa es somos puros delante de Dios completamente para Él. La
castidad exigida de nosotros es no tener ídolos en nuestro corazón.

Estos son los que siguen al Cordero por dondequiera que va. Estos fueron redimidos de
entre los hombres como primicias para Dios y para el Cordero (Ap.14:4b).

Esos vencedores son aquellos que siguen el cordero, ellos no comandan al cordero
ni van al frente de Él.

Las primicias son las primeras cosechas o los primeros frutos maduros, ser vencedor
no es una cuestión de ser especial ni de ser excepcional, ser vencedor es apenas ser
normal en tiempos de anormalidad, ser vencedor no es resucitar muertos en el
desayuno, dar la vista a un ciego en la hora de almuerzo y en la noche hacer caer
fuego del cielo. Vencedor es ser maduro en el tiempo en que ser espera madurez.
Mientras otros se contaminan, nosotros nos mantenemos puros y vírgenes para
Dios, Él es el único novio, solo para Él nos guardamos.

La ausencia de mentiras en nuestra boca significa que no tenemos ningún vínculo


con el diablo, que es el padre de la mentira. En el final todos los que hacen parte de
227

la obra de Dios son cosechados; pero las primicias maduran antes que los demás. Al
final todos llegarán a la estatura de Cristo, pero aquellos que crecieren primero
serán cosechados como las primicias, ellos son los vencedores.

Ser vencedor cuesta caro, la recompensa será más que cualquier sacrificio hecho; si
hoy nosotros los alabamos, en aquel día Él nos honrará; si hoy nosotros lo servimos,
en aquel día Él va colocar la mesa y nos servirá; si hoy para Él somos la recompensa y
la herencia en los santos, en aquel día Él será para nosotros nuestra herencia: el
propio Señor Jesús.

2. Las cuatro voces – 14.6-13

Después del arrebatamiento viene la gran tribulación y en la óptica celestial cuatro


cosas deben acontecer.

La primera voz – 14.6-7

En ese primer acto, surge un ángel predicando el evangelio eterno. ¿Quién es ese
ángel? Es difícil de responder. En Apocalipsis la palabra ángel es aplicada a tres
grupos: los ángeles propiamente dichos, al Señor Jesús y a nosotros los creyentes.
En las cartas a las siete iglesias; por ejemplo en los capítulos dos y tres, ellas fueron
escritas para el ángel que estaba al frente de cada una ellas. Allí ángel es un hombre.
En el capítulo diez, el ángel fuerte que desciende del cielo es Jesús, entre tanto, en
este texto es difícil saber si es un ángel mismo, el Señor Jesús o a la iglesia. Creemos
que son los ángeles mismos.

Aquí se levanta otra cuestión: ¿Los ángeles pueden predicar el evangelio? La


respuesta es si y no, depende del evangelio a ser predicado. Lo que este ángel va
predicar recibe el nombre de evangelio eterno y es diferente del evangelio de la
gracia (He.20:24) predicado por la iglesia y cuyo contenido básico es
arrepentimiento y fe (He.20:21) para perdón y regeneración (Lc.24:47, Jn.1:12).

Pablo estaba dispuesto hasta morir por causa del evangelio de la gracia como narra
en Hechos:

He. 20:24 Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con
tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar
testimonio del evangelio de la gracia de Dios.

¿En que consiste el evangelio de la gracia? De acuerdo con Pablo al testificar tanto a
judíos como a griegos el arrepentimiento para con Dios y la fe en nuestro Señor
Jesucristo (He.20:21). El evangelio de la gracia es el arrepentimiento para con Dios y
228

la fe para con Jesús, en otras palabras el evangelio de la gracia predica la salvación y


el nuevo nacimiento. Juan 1:12 muestra como nos tornamos hijos de Dios. Jn. 1:12 Mas
a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos
hijos de Dios.

El evangelio de la gracia predica el arrepentimiento y el perdón de los pecados a


través de la sangre de Jesús. Esta es la razón porque el hombre como pecador
redimido de sus pecados puede predicar el evangelio de la gracia.

Mas durante la gran tribulación será predicado el evangelio eterno, es posible que
sea el mismo del reino mencionado en Mat 24:14 Y será predicado este evangelio del
reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.

Creo que este evangelio del reino es el evangelio eterno, será predicado a todas las
naciones durante la gran tribulación, ¿Cuál es el mensaje de ese evangelio? Es
aquella que fue anunciada por el ángel. Ap. 14:7 diciendo a gran voz: Temed a Dios, y
dadle gloria, porque la hora de su juicio ha llegado; y adorad a aquel que hizo el cielo y la
tierra, el mar y las fuentes de las aguas.

¿Por qué este mensaje? Porque en aquel momento la imagen del anticristo estará
siendo adorada. En otras palabras: “adoren aquél que creó al hombre y todas las
cosas, no adoren una imagen creada”. El evangelio eterno no predica el mensaje de
salvación, al contrario desafía al hombre a adorar a Dios como el único creador, por
esa razón los ángeles como adoradores delante del trono pueden predicar el
evangelio eterno.

El mensaje será como está escrito en Ap.14:7, aquí no se dice para adorar aquél que
murió en la cruz o aquél que venció la muerte, sino el mensaje es: “temed a Dios
porque ha llegado la hora de su juicio en la gran tribulación”.

La segunda voz – 14.8

Ap. 14:8 Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad,
porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación.

La gran Babilonia será una organización religiosa dirigida por el falso profeta para
exaltar al anticristo, en algún momento durante la gran tribulación caerá. Como
vimos en el capítulo 14 narra en orden cronológica algunos eventos que estarán
aconteciendo durante la gran tribulación, en los capítulos 17 y 18 veremos a
respecto de Babilonia y de su caída.

La tercera voz – 14.9-12


229

Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha
hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación.
Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y
recibe la marca en su frente o en su mano,
él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y
será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;
y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de
noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su
nombre.
Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de
Jesús (Ap.14:8-12).

Aquí es anunciado el destino de aquellos que adoran la bestia y reciben su marca: el


tormento eterno. Por eso tenemos que afirmar que la marca será algo con
connotación espiritual y no apenas un objeto como un chip de computador. Quien
recibe la marca sufrirá el juicio de Dios aquí y después la condenación eterna.

Los que reciben la marca son aquellos que adoraron al diablo en vez de adorar a
Dios, prefieren las tinieblas en vez de la luz. El padre no creó el hombre para el
infierno, Él no desea que los hombres sufran la condenación, el lago de fuego fue
preparado para el diablo y sus ángeles, pero si el hombre decide acompañar al
diablo, entonces es para allá que debe ir. El hombre solo será condenado si quiere,
una vez que Dios nos da el escape en Cristo en Jesús.

La cuarta voz – 14.13

Ap. 14:13 Oí una voz que desde el cielo me decía: Escribe: Bienaventurados de aquí en
adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus
trabajos, porque sus obras con ellos siguen.

El cuarto ángel está proclamando: Bienaventurado es aquél que por no adorar la


bestia ni aceptar su marca, pierde la propia vida. Bienaventurado es aquél que
muere en el Señor, porque tendrá descanso de sus obras y recibirá del Señor la
recompensa que le fue destinada. La cuarta voz es de consuelo para los mártires
que serán sacrificados por el anticristo.

3. La siega – 14.14-16
Ap. 14:14 Miré, y he aquí una nube blanca; y sobre la nube uno sentado semejante al
Hijo del Hombre, que tenía en la cabeza una corona de oro, y en la mano una hoz
aguda.

La hoz aguda vista en la mano de Jesús, son los ángeles – ellos son los segadores. En
la parábola del trigo y joyo en Mateo 13:24-30, 36-43, el Señor Jesús dice que en la
consumación de los siglos enviaría los ángeles para separar el trigo del joyo. Esa hoz
230

es nada más que la operación de esos ángeles. Mat 13:39 El enemigo que la sembró es
el diablo; la siega es el fin del siglo; y los segadores son los ángeles.

Ap. 14:15 Y del templo salió otro ángel, clamando a gran voz al que estaba sentado sobre la
nube: Mete tu hoz, y siega; porque la hora de segar ha llegado, pues la mies de la tierra
está madura.

Esta es la siega de los creyentes que pasaron por la gran tribulación, aquellos
creyentes que no estaban entre las primicias mencionados en el verso 4,
participarán de esa siega por ocasión de la vuelta del Señor. 1Ts 4:17 Luego nosotros
los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en
las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.

Esta es la etapa final del arrebatamiento – la cosecha de la siembra que tardaron en


madurar.

La siega es la consumación de los siglos que acontecerá por ocasión de la última


trompeta (1Ts.15:51-52; 1Ts.4:15-17), cuando sea tocado, el Señor Jesús vendrá en las
nubes y Él entonces enviará a sus ángeles, los segadores que recogerán a todos los
escogidos en los cuatro cantos de la tierra. Esa será la cosecha de todos los santos
maduros al final de la gran tribulación y es la propia vuelta del Señor Jesús en las
nubes (1Ts.4:17).

Antes de la tribulación y de las cuatro voces, tenemos el arrebatamiento de las


primicias, o sea, de los creyentes maduros, al final de la gran tribulación, Jesús
volverá en las nubes y ese será el momento de la siega. Usted puede escoger si
quiere hacer parte de las primicias o de la siega, la cosecha de los creyentes
acontecerá en dos momentos; eso perece bien claro en Apocalipsis. Una cosa son
las primicias y otra cosa es la siega.

4. La vendimia – 14.17-20
Salió otro ángel del templo que está en el cielo, teniendo también una hoz aguda.
Y salió del altar otro ángel, que tenía poder sobre el fuego, y llamó a gran voz al que
tenía la hoz aguda, diciendo: Mete tu hoz aguda, y vendimia los racimos de la tierra,
porque sus uvas están maduras.
Y el ángel arrojó su hoz en la tierra, y vendimió la viña de la tierra, y echó las uvas en el
gran lagar de la ira de Dios.
Y fue pisado el lagar fuera de la ciudad, y del lagar salió sangre hasta los frenos de los
caballos, por mil seiscientos estadios (Ap.14:17-20).

La vendimia es la siega de las uvas producidas por la vid falsa; Jesús es la vid
verdadera y los creyentes son los ramos (Jn.15:1-5). Si Jesús es la vid verdadera, la
otra vid es el mundo que es falsa. Mientras nosotros la iglesia somos ramos de la vid
verdadera, aquellos que no conocen a Jesús son los ramos de la vid falsa que será
vendimiada y sus uvas serán lanzadas en el gran lagar de la ira de Dios, ese lugar es
el valle del Armagedón, un campo de batalla profético donde todos los ejércitos de
la tierra se reunirá para guerrear contra el Señor (Ap.16:16).
231

La vendimia es el Armagedón, pero incluye también el juicio de las naciones, el cual


ya estudiamos. Tú debes recordar que el primer juicio es el tribunal de Cristo, donde
todos los salvos comparecerán para prestar cuentas de sus obras (2Co.5:10). Ese
juicio es exclusivo a los creyentes y no dice respecto a la salvación, sino a la
recompensa.

El segundo juicio acontecerá en el final de la gran tribulación cuando el Señor


vuelva, serán juzgados todos los que restaren de las naciones, por eso es llamado de
juicio de las naciones. El tercer juicio ocurrirá al final del milenio, es el juicio del gran
trono blanco destinado a los que murieron sin Cristo. Ellos resucitarán y serán
juzgados por Dios, el propio Señor Jesús describió ese juicio:

Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces
se sentará en su trono de gloria,
y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como
aparta el pastor las ovejas de los cabritos.
Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.
Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino
preparado para vosotros desde la fundación del mundo.
Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero,
y me recogisteis;
estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.
Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te
sustentamos, o sediento, y te dimos de beber?
¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos?
¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?
Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos
mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis (Mat.25:31-40).
La Biblia afirma que la salvación es por la fe y no por obras (Ef.2:8-9). Mas las
naciones serán juzgadas por las obras, ¿Qué obras? Durante la gran tribulación, la
iglesia será perseguida y ni todos ayudarán el anticristo a perseguirla; por tanto,
durante el juicio de las naciones, las personas serán juzgadas de acuerdo de la
manera como trataron la iglesia perseguida. Aquellos que durante la gran
tribulación, socorrieren a los pequeños hermanos de Jesús, dándola comida, abrigo,
asistencia, o cualquier otra forma de ayuda serán guardados y separados para
participar del reino de Jesús. Entre tanto todos los que aceptaren la marca de la
bestia y persiguieren a la iglesia en aquellos días serán separados y lanzados en el
infierno. Ese es el juicio de las naciones.

El juicio; por tanto, será de acuerdo con el evangelio eterno predicado en la primera
voz y también conforme la marca de la bestia como advertida en la segunda voz.

Sabemos que los ejércitos de la tierra se reunirán para pelear con el Señor porque
no aceptan su gobierno sobre la tierra. Mas aquellos que aceptaren participar de
ese reino para ser salvas de la condenación, las personas tendrán que recibir al
Señor y reconocerlo como Señor y rey en aquel día como en todas las épocas.
232

Todos los que fueren separados por Dios en el juicio de las naciones disfrutarán de
la bendición del milenio como ciudadanos del reino. Durante el milenio los judíos
serán sacerdotes y enseñarán las naciones, los vencedores de la iglesia estarán
reinando con Cristo por mil años y las naciones que fueren separadas serán los
súbditos que probaran la maravisla de ser gobernadas por el príncipe de paz.
233

Las siete Copas


Vamos recapitular lo que hemos visto hasta aquí, todas las cosas son consumadas al
final del capítulo once cuando sonó la séptima y última trompeta. A partir de ese
momento en que la séptima trompeta fue tocada:

Ap. 11:15 El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían:
Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los
siglos de los siglos.

Los capítulos de doce a veinte y dos son una descripción o explicación adicional de
algunas cosas y acontecimientos que están incluidos en los eventos narrados hasta
el capítulo once.

El capítulo doce es un prólogo de la gran tribulación e introduce personajes y


eventos que estarán en escena durante aquel periodo: la mujer, el restante de su
descendencia, el hijo varón – los vencedores, el dragón, la guerra en el cielo y el
dragón persiguiendo la mujer y los descendientes de ella.

En el cap. 13 se tiene la descripción del anticristo y del falso profeta: la bestia que
emerge del mar y la bestia que emerge de la tierra.

Al cap. 14 es una descripción cronológica de los hechos que acontecerán durante la


gran tribulación, los capítulos 15 y 16 que estudiaremos ahora, describen el juicio de
Dios sobre el reino y el trono del anticristo. Cronológicamente, los hechos aquí
relatados se sitúan al final de la gran tribulación.
234

A pesar de haber alguna semejanza entre ellas, las Copas no son una repetición de
las trompetas, basados en la primera y la quinta Copas podemos ver que estas
tratan del juicio de Dios sobre el trono del anticristo y sobre la gran Babilonia.

Las siete Copas son acontecimientos incluidos en la séptima trompeta, el cap. 15 es


una continuación natural del once, hasta la escena que vemo15 es una continuación
natural del once, hasta la escena que vemos al final del cap. 11 es la misma del inicio
del cap. 15, veamos:

Ap. 11:19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el
templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.

Este versículo es exactamente el mismo del cap.15:5 “Después de estas cosas miré, y
he aquí fue abierto en el cielo el templo del tabernáculo del testimonio”
Por tanto las escenas relatadas en el cap.15 están conectadas cronológicamente al
final del cap.11 que narra la séptima trompeta, así las Copas son también el
contenido de la séptima trompeta.

1. Los vencedores de la gran tribulación – 15:1-8


Desde el inicio hasta la gran tribulación, los vencedores son presentados, existen
tres tipos de vencedores: los que ya murieron, los que serán arrebatados vivos y los
que vencerán la bestia en el periodo de la gran tribulación, en este pasaje son estos
últimos.
Mientras que tú estés vivo, todavía puede ser un vencedor porque su carrera no fue
completada, la victoria nunca es decidida en el inicio de la carrera, sino al final.
Alguien puede comenzar mal y terminar muy bien o viceversa. Jacob y Salomón son
ejemplos de eso. Jacob comenzó muy mal como un derrotado, pero terminó como
un vencedor, como un príncipe de Dios. Salomón por su lado comenzó como
vencedor, pero tuvo un final mediocre: envuelto en el libertinaje y en la idolatría.

Los vencedores de la gran tribulación son aquellos que no temieron la bestia ni se


importaron en ser perseguidos por ella, no amaron la propia vida, por eso fueron
muertos como mártires. El anticristo que es la bestia, perseguirá duramente
aquellos que no fueren arrebatados. Para estos solo hay un destino: adorar la bestia
y recibir su marca o sufrir la persecución y martirio por amor al cordero. Estos
vencedores son aquellos mencionados en el siguiente pasaje:

Ap. 14:12 Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y
la fe de Jesús.
Ap. 14:13 Oí una voz que desde el cielo me decía: Escribe: Bienaventurados de aquí en
adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus
trabajos, porque sus obras con ellos siguen.

En el verso 2 dice que ellos vencieron la bestia, su imagen y el número de su


nombre, no adoraron la imagen de la bestia hecha por el falso profeta. La imagen
235

que por la eficacia de Satanás, recibirá el aliento de vida, ella será una mentira
ilusionista de Satanás imitando a Dios cuando creó al hombre. Será una imagen
hablante y realizadora de señales que dejará a todos maravislados, sobre todo a los
idólatras. Entre otras cosas, esa imagen exigirá que la adoren y quien se recuse será
muerto. Delante de eso los vencedores son aquellos que vencieron la imagen de la
bestia, ellos rechazaron recibir en sus cuerpos el número de la bestia que es 666.
Sabemos que al recibir este número la persona estará de alguna manera
blasfemando contra Dios y contra el Espíritu Santo.

Jesucristo separó la blasfemia contra el Espíritu Santo de los demás pecados, Él


afirmó que para todo pecado existe perdón, mientras que el pecado de blasfemia
contra el Espíritu Santo no existe perdón en este mundo ni en lo venidero (Mar.3:28-
29). Consecuentemente no habrá salvación para quien reciba de esa marca en la
frente o en la mano derecha. Por su parte la Biblia declara que esa persona:
Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y
recibe la marca en su frente o en su mano,
él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y
será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero;
y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de
noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre
(Ap.14:9-11).

Por tanto los vencedores son aquellos que vencieron el número del nombre de la
bestia por rechazaren la marca, los creyentes sufrirán una implacable y cruel
persecución, no podrán comprar ni vender alguna cosa. Que días terribles serán
aquel tiempo. ¿Cómo se alimentarán, cómo pagarán sus deudas y compromisos? Los
asalariados serán despedidos de sus empleos, los empresarios autónomos y
profesionales liberales perderán sus clientes y distribuidoras. Serán muy fuertes las
presiones y las tentaciones para volverse atrás y concordar con el falso profeta, en
aquellos días la iglesia pasará por el periodo de mayores atrocidades de su historia.

Hoy para nosotros, el gran desafío es librarnos de ese tenebroso momento que
vendrá sobre la tierra y la única salida es esta: calificarnos hoy como vencedores. A
cada día me convengo más de la verdad de ese mensaje, solamente el creyente
calificado delante de Dios hace parte del rol de los creyentes vencedores. Para
calificarnos como vencedores, necesitamos vivir según principios como: vigilancia
espiritual, despojamiento de la carne, amar la venida del señor, hacer la voluntad del
padre, tener aceite sobrando en la vasija, servir al Señor con todo el empeño y si es
necesario resistir al pecado hasta la sangre (Hb.12:4). Ser vencedor debe ser nuestra
meta. No podemos ser meros frecuentadores de cultos, tenemos que ser gente
calificada por Dios, no importa si los hombres nos elogian o no, lo que importa es el
elogio que sale de la boca de Dios. En aquel día yo quiero oír estas palabras: “siervo
bueno y fiel”.
236

Juan vio un mar de vidrio mesclado de fuego y los vencedores de la bestia de pie
sobre ese mar, él ya había visto ese mismo mar antes delante del trono en el
capítulo 4, en aquella ocasión, no había nadie sobre el mar. Mas ahora todos los
vencedores están sobre ese mar.

A pesar de no mencionarse aquí, el hecho de estar sobre el mar de vidrio significa


que resucitarán, porque nadie estará delante del trono sin haber recibido un cuerpo
glorificado.

¿Quiénes son esos vencedores? ¿Son las primicias? No, son los vencedores contra la
bestia, o sea: aquellos que no adoraron ni fueron marcados con su número. Durante
la gran tribulación, tres cosas deben ser vencidas: la bestia, la imagen de la bestia y
el número del nombre de ella.

Los vencedores ministrarán con instrumentos delante de Dios, ellos no tocarán


cualquier instrumento terreno, sino arpas divinas y cantarán el cántico de Moisés y
del cordero.

Ap. 15:3 Y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo:
Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos
son tus caminos, Rey de los santos.
Ap. 15:4 ¿Quién no te temerá, oh Señor, y glorificará tu nombre? pues sólo tú eres santo;
por lo cual todas las naciones vendrán y te adorarán, porque tus juicios se han manifestado.

Tenemos aquí apenas el cántico del cordero, el cantico de Moisés está registrado en
Éxodo 15:1-18. Moisés entonó ese cántico delante del mar rojo, los vencedores por
su vez, entonarán esos dos cánticos de pie sobre el mar de vidrio mesclado con
fuego.

Existe correlación espiritual entre este mar de vidrio mesclado con fuego y el mar
rojo, en este último fueron precipitados vivos Faraón y sus soldados, en aquel día
serán lanzados Satanás y sus seguidores. Delante del mar rojo, Moisés entonó su
cántico y sobre el mar mesclado de fuego los vencedores entonarán su cántico de
Moisés y del cordero. Bíblicamente Satanás simboliza Satanás, Faraón fue
sumergido en el mar rojo; por eso no tenemos dudas en afirmar que el mar de vidrio
mesclado con fuego se transformará en el lago de fuego donde e diablo será
lanzado.

Dios siempre ejecutó su juicio de dos formas: a través del agua o a través de fuego,
la forma como Él ejecutará su juicio sobre la tierra durante la gran tribulación será a
través del fuego. En el primer juicio, las agua del diluvio se tornaron como el mar y
en el segundo, el mar de vidrio mesclado con fuego se tornará el lago de fuego
(19:20). Los vencedores entre tanto no sufrirán ese juicio, ellos están sobre el mar
de vidrio mesclado con fuego; eso significa que están encima de ese juicio.
237

En el cántico que los vencedores entonan ellos proclamarán dos cosas: “grandes y
admirables son tus obras y justos y verdaderos son tus caminos”. En primer lugar
exaltan las obras de Dios, en segundo lugar los caminos del Señor. Son dos cosas
que necesitamos conocer: las obras y los caminos de Dios. Conocer el poder de Dios
y conocer los principios por los cuales Él actúa. Nadie puede afirmar que conoce
verdaderamente a Dios si no conoce las escrituras y su poder (Mat.22:29).
Conocemos al Señor por sus caminos y sus caminos nos conducen a sus obras.

¿Por qué estamos estudiando la palabra? Porque debemos conocer los caminos del
padre y andar por ellos, Dios solo opera sus obras entre nosotros cuando
comprendemos y andamos en sus caminos. Si no hemos visto más las obras de Dios
entre nosotros es porque no hemos respetado sus caminos. Si no respetamos los
caminos de Dios, tampoco veremos sus obras aconteciendo entre nosotros.

Muchas personas quieren Dios de una manera o de otra, todavía la manera


apropiada de conocer a Dios es conociendo estas dos cosas: sus obras y sus
caminos, y eso solo sucede cuando permitimos su mover en nuestras vidas
trayéndonos revelación en nuestro espíritu. ¿Tú quieres ver los milagros de Dios?
Entonces entre en los caminos de Dios y conozca la manera como Él actúa.

En el capítulo 20, leemos algo mas sobre los vencedores de la gran tribulación:

Ap. 20:4 Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las
almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que
no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni
en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años.

Ellos son aquellos que morirán decapitados por el anticristo durante la gran
tribulación, ellos morirán por causa del testimonio de Jesús y de su palabra, y el
testimonio de Jesús es este: Él nació de la virgen, vivió sin pecado, murió en la cruz
por los pecados de la humanidad, resucitó al tercer día, subió a los cielos, está
sentado a la derecha de Dios y va volver para juzgar a los vivos y muertos y después
reinar sobra la tierra. Por su obra venció el pecado, el diablo y el mundo, y hoy
habita en cada creyente que por ese poder, puede ser un vencedor. El testimonio de
Jesús son las obras de Dios y sus caminos.

La recompensa es reinar con Cristo durante el milenio, ese privilegio no es solo de


los vencedores de la gran tribulación, sino de aquellos que son victoriosos en todas
las épocas. Esos creyentes vencedores se sentarán sobre tronos para juzgar y reinar
con Cristo durante el milenio, el milenio es llamado de “el reino de los cielos”
porque será el tiempo en que los cielos estarán reinando. Es importante que quede
claro que solamente los vencedores reinarán en el milenio, después del milenio, el
Señor habrá concluido la obra que comenzó en cada uno de nosotros de acuerdo
238

con lo que está escrito en la palabra: Flp. 1:6 estando persuadido de esto, que el que
comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.

El propósito del Señor Jesús es que todos nos tornemos tal cual Él es y para que esa
obra se complete en nuestras vidas necesitamos cooperar con Dios: obedeciéndolo,
orando, adorándolo, estudiando y oyendo la palabra a fin de que la fe nos sea
añadida. Muchos no cooperan con Dios, prefieren quedar durmiendo en casa en de
participaren de las reuniones de estudio, ministración y alabanza. Adorar es algo tan
enfadoso, de oración ni hablar, vigilas parece locura, ayuno algo casi medieval. No
están cooperando con el Señor, y si murieren así, la obra no habrá sido completada
en la vida de ellos y si la obra no fue completada aquí, ha de ser completada durante
el milenio.

No se engañe, usted no se tornará vencedor sentado en la sala de su casa, viendo


televisión y viendo filmes toda la semana, el precio cobrado de los vencedores es
muy alto. Es necesario golpear el cuerpo y reducirlo a la esclavitud para no ser
descalificado (1Co.9:27). Los que combatieren ese buen combate recibirán la corona
de vida y reinarán con el Señor los mil años (2Tm.4:8-8).

2. Las siete Copas – 16:1-21


Apocalipsis 8:13 menciona tres ayes: el primero ay está en 9:12 y el segundo ay está
en 11:14. El tercer ay no se menciona en la séptima trompeta; por eso creemos que
las siete Copas son el contenido de la séptima trompeta y constituyen el tercer ay.

Además de eso, Apocalipsis 15:1 dice también que las siete Copas son la
consumación de la ira de Dios, indicando que hacen parte de la séptima trompeta.
Otra evidencia de que las Copas son el contenido de la séptima trompeta es el
hecho del capítulo quince ser una continuación del capítulo once. La escena descrita
en el final del capítulo once es la misma del inicio del capítulo quince. Ap. 11:19 Y el
templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo
relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo.
Ese versículo es exactamente lo mismo del capítulo 15:5 Después de estas cosas miré,
y he aquí fue abierto en el cielo el templo del tabernáculo del testimonio.

Necesitamos ver la escena en el cielo antes del derramamiento de las siete Copas,
una escena en el cielo es revelada en tres ocasiones: antes de los siete sellos
(Ap.4:2-8, 5:5-6), antes de las siete trompetas (8:3-4) y antes de las siete Copas (15:5-
8). En las dos primeras escenas, el centro es el trono, pero a partir de 11:19, el centro
es el tabernáculo celestial y el arca.

Después de estas cosas miré, y he aquí fue abierto en el cielo el templo del tabernáculo del
testimonio;
y del templo salieron los siete ángeles que tenían las siete plagas, vestidos de lino limpio y
resplandeciente, y ceñidos alrededor del pecho con cintos de oro.
239

Y uno de los cuatro seres vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro, llenas de la ira
de Dios, que vive por los siglos de los siglos (Ap.15:5-7).

Antes de una acción en la tierra, hay siempre una acción en el cielo, antes de la
abertura de los siete sellos tuvimos la revelación del trono indicando que los siete
sellos son el resultado del gobierno soberano de Dios en la historia antes que
toquen las trompetas.
Otro ángel vino entonces y se paró ante el altar, con un incensario de oro; y se le dio
mucho incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos, sobre el altar de oro
que estaba delante del trono.
Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones
de los santos.
Y el ángel tomó el incensario, y lo llenó del fuego del altar, y lo arrojó a la tierra; y hubo
truenos, y voces, y relámpagos, y un terremoto (Ap.8:3-5).

Las trompetas son el resultado de algo que acontece en el altar y está delante del
trono, eso significa que las siete trompetas son respuesta a las oraciones de los
santos.

Aquí en el capítulo quince vemos otra escena aconteciendo, de repente el cielo se


abra y aparece el santuario del tabernáculo del testimonio. Una cosa es el santuario
y otra es el trono, el trono tiene un significado, el templo con el arca tiene otro.

En el antiguo testamento la preocupación de Dios era mostrarse con el Señor de los


ejércitos – el Señor que reina, el énfasis está en el trono. En el nuevo testamento el
énfasis está en la iglesia – en el ministerio de Dios que somos nosotros el santuario y
la habitación de Dios.

El trono habla de la soberanía de Dios para juzgar todas las cosas, el arca habla del
establecimiento del reino. Solo Salomón pudo edificar el templo y colocar el arca
adentro, pues en sus días se cumplió la victoria sobre todos los enemigos alrededor
y hubo paz; por eso el arca fue vista porque el reino ahora será establecido por
Aquél que viene montado en el caballo blanco.

En Apocalipsis quince, la cuestión no es más el trono, sino la habitación de Dios; eso


significa que los últimos flagelos tienen una relación íntima con Dios y con su
habitación, o sea, la iglesia.

Mientras que las siete trompetas fueron fruto de la oración de los santos, los siete
flagelos son fruto de la alabanza que ellos tributan a Dios – es la adoración de los
vencedores sobre el mar de vidrio que libera el poder divino.

El centro del tabernáculo ahora es el arca, o sea: el lugar santísimo se abrió: “y fue
vista el arca del alianza” (11:19), Ap. 15:6 y del templo salieron los siete ángeles que
tenían las siete plagas, vestidos de lino limpio y resplandeciente, y ceñidos alrededor del
pecho con cintos de oro.
240

Eso significa que esos ángeles están vestidos como sacerdotes y no como soldados,
en nuestro concepto natural esperábamos que esos ángeles fuesen guerreros, pero
no lo son.

Del cap. 1 hasta el cap. 11 el centro es el trono de Dios con el arco iris, pero a partir
de ahí el centro es el templo con el arca.

Los siete ángeles salieron del templo, ellos son vestidos de sacerdotes (Ez.44:17) y
no de guerreros, ángeles que ejecutan la venganza deberían ser soldados de
acuerdo a la opinión humana. Las trompetas son el resultado de los santos mártires
(Ap. 6:9-11) y de los santos (Ap.8:3-6), las Copas son el resultado de la alabanza de
los mártires que vencieron la bestia.

Ap. 15:8 Y el templo se llenó de humo por la gloria de Dios, y por su poder; y nadie podía
entrar en el templo hasta que se hubiesen cumplido las siete plagas de los siete ángeles.

¿Por qué nadie podía entrar en el santuario? Porque nadie más podría interceder,
Dios no puede cambiar más su acción – ya está determinado todo, Él determinó que
mientras no se cumplan los siete flagelos, nadie entrará allá adentro, nosotros
sabemos el poder de la súplica de un justo (Stg.5:17).

Ap. 16:1 Oí una gran voz que decía desde el templo a los siete ángeles: Id y derramad sobre
la tierra las siete copas de la ira de Dios.

Al contrario de las demás voces, esa no viene del trono, sino del santuario, entre
tanto, a partir del capítulo doce el santuario se torna el centro de donde proceden
las acciones de Dios.

Ap. 16:1 Oí una gran voz que decía desde el templo a los siete ángeles: Id y derramad sobre
la tierra las siete copas de la ira de Dios.
Ap. 16:2 Fue el primero, y derramó su copa sobre la tierra, y vino una úlcera maligna y
pestilente sobre los hombres que tenían la marca de la bestia, y que adoraban su imagen.

Las siete trompetas hacen parte del séptimo sello y la última de ellas – la séptima,
incluye las siete Copas. En el cap. 8 leemos lo siguiente:

Ap. 8:13 Y miré, y oí a un ángel volar por en medio del cielo, diciendo a gran voz: ¡Ay, ay,
ay, de los que moran en la tierra, a causa de los otros toques de trompeta que están para
sonar los tres ángeles!

Esa águila surge en el periodo de la cuarta trompeta y hace esta advertencia: “las
tres siguientes trompetas son tres ay”. Al final del periodo referente a la quinta
trompeta está escrito que el primer ay pasó (9:12), o sea la quinta trompeta. En
seguida encontramos: Ap. 11:14 El segundo ay pasó; he aquí, el tercer ay viene pronto.

Pero a partir de ahí, el tercer ay no es citado más, en seguida surge la séptima


trompeta y ningún ay es liberado; eso significa que la continuación del cap. 11 es el
241

cap. 15 y consecuentemente el tercer ay es la séptima trompeta que trae consigo las


siete Copas con los flagelos de Dios. La séptima trompeta abarca toda tierra,
todavía las siete Copas serán derramadas solamente sobre el imperio del anticristo.

Alguien puede cuestionar que el verso dos del cap.16 menciona la palabra tierra, de
hecho la palabra “tierra” es mencionada en el verso dos, pero ni siempre la palabra
tierra significa todo el planeta en la Biblia. Recuérdese que Juan estaba escribiendo
durante el imperio romano y en su mente la tierra era nada más que el imperio
romano. Eso puede ser ilustrado en el evangelio de Lucas.

Luc. 2:1 Aconteció en aquellos días, que se promulgó un edicto de parte de Augusto César,
que todo el mundo fuese empadronado.

La palabra imperio no aparece en el original, en el original la palabra empleada


Es “oikoumene” que significa toda la tierra habitada. ¿En aquella el emperador
podía convocar toda la tierra para empadronarse? Es lógico que no, eso
incluiría a China y a la India que ya eran habitados, pero no hacían parte del
imperio.
Toda la tierra habitada no es todo el planeta de acuerdo con Lucas, es por eso que la
traducción actualizada fue usada la palabra imperio, porque el significado a la
verdad es ese. En Apocalipsis 16, la palabra tierra parece también ser específica
para el imperio de la bestia que es el imperio romano resurgido.

Las Copas y las trompetas a pesar de ser semejantes no son la misma cosa,
veamos como ejemplo la segunda Copa:
Ap. 16:3 El segundo ángel derramó su copa sobre el mar, y éste se convirtió en sangre
como de muerto; y murió todo ser vivo que había en el mar.
Compare con la segunda trompeta:
8:8 El segundo ángel tocó la trompeta, y como una gran montaña ardiendo en fuego fue
precipitada en el mar; y la tercera parte del mar se convirtió en sangre.
La segunda Copa es peor que la segunda trompeta, mientras que en la segunda
trompeta murió apenas la tercera parte de los seres existentes en el mar, con la
segunda Copa murieron todos ellos. Las Copas son más intensas y peores que
las trompetas, además de eso, mientras estas abarcan toda la tierra, aquellas se
destinan al trono del anticristo como ilustrado en la primera y quinta Copas
(v.10-11).

El imperio del anticristo es el resurgimiento del imperio romano, el antiguo imperio


romano estaba circunscrito a Europa, norte del África y Oriente Medio. Entre tanto
su influencia se reflejaba sobre el mundo entero. Yo creo que lo mismo va acontecer
en los últimos días. El imperio del anticristo será en el lugar donde era el imperio
romano, su influencia sin embargo será mundial.

La primera Copa – 16.1-2


242

V. 16:2 Fue el primero, y derramó su copa sobre la tierra, y vino una úlcera maligna y
pestilente sobre los hombres que tenían la marca de la bestia, y que adoraban su imagen.
El anticristo estará reinando durante la gran tribulación y por medio del falso
profeta, él exigirá adoración de las personas, colocando una imagen en su propio
santuario en Jerusalén, además de eso, establecerá una marca sin la cual nadie
podrá comprar o vender alguna cosa (13:16-17). El juicio de la primera Copa es
justamente sobre los hombres que recibieron esa marca.

Cuando esa Copa es derramada, todas las personas que recibieron la marca de la
bestia y adoraron su imagen son acometidas de úlceras malignas y perniciosas.
Particularmente pienso que surgirá un tipo de cáncer justamente en el local de la
marca, eso comprueba que la marca será algo físico y que ni todos los habitantes de
la tierra recibirán. Cuando el Señor vuelva por ocasión de la vendimia, todos los que
tuvieren esa marca serán condenados.

La segunda Copa – 16.3


V. 16:3 El segundo ángel derramó su copa sobre el mar, y éste se convirtió en sangre como
de muerto; y murió todo ser vivo que había en el mar
Si la primera Copa fue derramada apenas sobre los que tenían la marca de la bestia,
es probable que este mar apunte apenas para los mares que circuncidan el imperio
del anticristo, o sea: el mar Mediterráneo y el mar Norte.

La tercer Copa – 16.4-7


El tercer ángel derramó su copa sobre los ríos, y sobre las fuentes de las aguas, y se
convirtieron en sangre.
Y oí al ángel de las aguas, que decía: Justo eres tú, oh Señor, el que eres y que eras, el
Santo, porque has juzgado estas cosas.
Por cuanto derramaron la sangre de los santos y de los profetas, también tú les has dado a
beber sangre; pues lo merecen (Ap. 16:4-6).

El ángel en este momento, está explicando porque derramó la Copa: “…por cuanto
esos hombres derramaron sangre de santos y profetas” ahora ellos también deben
beber sangre. ¿Fueron todos los países del mundo que derramaron sangre de
santos y profetas? No, la mayor persecución a la iglesia ocurrió en Europa, en la
época del imperio romano y después en países como Francia, España e Italia en la
edad media, Europa es el cementerio más grande de los santos y profetas del
planeta. Es una evidencia más de que las Copas son un juicio específico sobre el
imperio de la bestia – el imperio romano resurgido.

La cuarta Copa – 16.8-9


Ap. 16:8 El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los
hombres con fuego.
Ap. 16:9 Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios,
que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.

El sol se calentará de tal forma que quemará a las personas, Isaías 30:26 dice que el
sol se calentará siete veces más: Isa 30:26 Y la luz de la luna será como la luz del sol, y la
243

luz del sol siete veces mayor, como la luz de siete días, el día que vendare Jehová la herida
de su pueblo, y curare la llaga que él causó.
Si La propia luna emitirá calor como el sol, deberá haber algún tipo de explosión o
erupción solar. Otra posibilidad es que el sol propiamente dicho no se altere, sin
embargo la atmósfera que nos protege, tal vez esté damnificado de tal forma que
los rayos solares penetrarán sin ningún filtro, lo que provocará el sufrimiento de las
personas con quemaduras terribles.

Puede haber una combinación de las dos posibilidades, haber alguna erupción solar
que emitirá una gran onda de calor sobre la tierra y los lugares donde la capa de
ozono está damnificada sufrirán más intensamente, ese será ciertamente el imperio
de la bestia.
Ahora busquemos ir untando los hechos, primero, las personas que tuvieren la
marca transformada en algo como cáncer. Después las aguas de los mares y de
los ríos fueron contaminados y por fin las personas están siendo quemadas por
el sol. La angustia será muy grande, pero así mismo las personas no se
arrepentirán de sus pecados.

La quinta Copa – 16.10-11

v. 16:10 El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia; y su reino se cubrió de
tinieblas, y mordían de dolor sus lenguas,
v. 16:11 y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se
arrepintieron de sus obras.

Las siete Copas al contrario de las trompetas y de los sellos, sucederán en una
secuencia muy rápida, el periodo del tiempo entre la primera y la quinta Copa
parece ser muy pequeño, visto que las personas acometidas de úlceras y que fueron
quemadas por el sol todavía no sanaron y continúan sufriendo dolores terribles.
Luego después de las úlceras, las severas quemaduras del sol agravarán todavía más
dolores.

La quinta Copa traerá tinieblas, igual las que vinieron sobre Egipto, lo que tornará el
sufrimiento todavía más angustiante; si pensamos que no habrá agua disponible ni
para la ducha por causa de la segunda y tercera Copa, la plaga de las tinieblas se
tornará todavía más angustiosa. Úlceras perniciosas y turbias que no pueden ser
lavadas y quemaduras que producen secreciones, llevarán a las personas a la
desesperación en medio de las tinieblas.

La sexta Copa – 16.12-16

La sexta trompeta es bien semejante a la sexta Copa, en ella los cuatro ángeles que
estaban amarrados a la ribera del río Éufrates son sueltos y cuando esos ángeles
fueren libertos, ellos comandarán doscientos millones de demonios en su caballería
244

(9:14-16). Esos ángeles se encontraban preparados para la hora, el día, el mes y el


año para que maten la tercera parte de los hombres.

En la sexta Copa, el río Éufrates se seca para que vengan los reyes del oriente y del
norte, es por eso que muchos creen que la sexta Copa es una explicación más
detallada de la sexta trompeta.

Las trompetas tienen una explicación global, las Copas son específicas el reino de la
bestia. Mas en ese punto las Copas y las trompetas coinciden en una sincronía
exacta, caminamos para la destrucción final cuando los ejércitos de la tierra se
reunirán en Israel en un lugar llamado Armagedón.

Esa Copa es la reunión para el Armagedón, el objetivo del enemigo es destruir Israel
(Zc.14:12) y luchar contra Cristo y su ejército que estarán viniendo en las nubes.

Ap. 16:12 El sexto ángel derramó su copa sobre el gran río Éufrates; y el agua de éste se
secó, para que estuviese preparado el camino a los reyes del oriente.
Ap. 16:13 Y vi salir de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del falso
profeta, tres espíritus inmundos a manera de ranas.

Observe aquí que la trinidad satánica: el dragón, la bestia y el falso profeta. De la


boca de ellos salen espíritus demoniacos con poder para engañar las personas, son
espíritus de demonios operadores de señales y se dirigen a los reyes del mundo para
reunirlos de todo el mundo para la pelea del gran día del Dios Todopoderoso
(Ap.16:16).

¿Qué pelea es esa? Vea el v.16: Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama
Armagedón.

La sexta Copa a la verdad es un preparación: Dios está permitiendo que las naciones
se junten, la Biblia no entra en detalles de cómo será esa reunión. Una cosa es
cierta: el río Éufrates secará literalmente para dar paso a los ejércitos que se dirigen
al valle del Armagedón, en Meguido. El valle del Armagedón está localizado
probablemente en las faldas del monte Carmelo, en Israel que se convertirá como
un hormiguero humano. Los ejércitos que se reunirán allí serán compuestos por lo
menos de 200 millones de soldados del Oriente. Además de esos ejércitos, vendrán
también ejércitos del Occidente (Ap.17:12-14, 19:11-19). Será una movilización
mundial, cuando todas las diferencias ideológicas serán olvidadas, en aquel
momento bajo en engaño de Satanás, Jesucristo e Israel serán enemigos los
comunes y esos ejércitos pelearán contra el Señor Jesús y contra Israel.

En aquellos días ya se verá la señal del hijo del hombre en el cielo, Jesús dijo que
aparecerá una señal celeste antes que el baje a la tierra (Mat.24:30). Será una señal
inconfundible y todos los hombres sabrán de lo que se trata. Tal vez el anticristo los
245

convenza que se trata de una invasión extraterrestre y que todos deben juntarse
para defender la tierra.

Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla.
Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de
Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y
hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará
hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur.
Y huiréis al valle de los montes, porque el valle de los montes llegará hasta Azal; huiréis de
la manera que huisteis por causa del terremoto en los días de Uzías rey de Judá; y
vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los santos (Zc.14:3-5).

En aquel día el Señor aplastará el lagar de su ira (Zc.14:17-20; Is.63:1-6, Jl.3:9-14) y


todos los soldados serán muertos (Ap.19:20-21, Zc.14:3; 12-15, 12:4-9). Israel será
salvo (Zc.12:3-8; 14:4-5; Jl.3:14-17), y un río de sangre correrá de aquellos que
pelearen contra el Señor. Zac. 14:9 Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel
día Jehová será uno, y uno su nombre.

La séptima Copa – 16.17-21


v. 16:17 El séptimo ángel derramó su copa por el aire; y salió una gran voz del templo del
cielo, del trono, diciendo: Hecho está.

Como ya vimos hasta el cap.11, todas las acciones viene de trono, después hasta
aquí, las acciones proceden del santuario. A partir de la séptima Copa hay una
unión del trono con el santuario. La voz que se escuchó salió del santuario del
lado del trono, diciendo: “está consumado”.
Ap. 16:18 Entonces hubo relámpagos y voces y truenos, y un gran temblor de tierra, un
terremoto tan grande, cual no lo hubo jamás desde que los hombres han estado sobre
la tierra.

Este terremoto es aquel que Isaías se refiere cuando dice que la tierra va temblar
como ebrio.
Isa 24:20 Temblará la tierra como un ebrio, y será removida como una choza; y se agravará
sobre ella su pecado, y caerá, y nunca más se levantará.

Sabemos que la tierra es inclinada en su eje, esa inclinación hace que el clima en los
polos sea muy severo. La Biblia dice que durante ese gran terremoto, la tierra
estará temblando; eso significa que la tierra probablemente volverá a su eje
normal. Consecuentemente en el milenio, el clima del planeta será
transformado.
Y la gran ciudad fue dividida en tres partes, y las ciudades de las naciones cayeron; y la gran
Babilonia vino en memoria delante de Dios, para darle el cáliz del vino del ardor de su
ira.
Y toda isla huyó, y los montes no fueron hallados.
Y cayó del cielo sobre los hombres un enorme granizo como del peso de un talento; y los
hombres blasfemaron contra Dios por la plaga del granizo; porque su plaga fue
sobremanera grande (Ap.16:19-21).
246

Nada resistirá esa lluvia de piedras en que cada una de ellas pesará treinta kilos y así
mismo los hombres blasfemaron de Dios.
La gran Babilonia descrita en los cap. 17 y 18 caerá justamente en la séptima Copa.
Existe una Babilonia religiosa y una Babilonia material representada por una
ciudad, es esta la ciudad que se refiere el texto. En el próximo capítulo veremos
su significado.
247

La gran Babilonia

Babilonia o Babel es citada por primera vez en Génesis cap. 11 cuando ocurrió la
confusión de lenguas. En esa ocasión los hombres se unieron para reconstruir una
torre que llegase hasta el cielo y se torne célebre el nombre de ellos por las
generaciones futuras.

Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras.
Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar,
y se estabecieron allí.
Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el
ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla... (Gen.11:1-8).

El principio de Babel se desenvolvió en la Biblia hasta tornarse la Babilonia en


Apocalipsis, en Génesis 10:8-10, vemos el significado de Babel.

Y Cus engendró a Nimrod, quien llegó a ser el primer poderoso en la tierra.


Este fue vigoroso cazador delante de Jehová; por lo cual se dice: Así como Nimrod,
vigoroso cazador delante de Jehová.
Y fue el comienzo de su reino Babel, Erec, Acad y Calne, en la tierra de Sinar (Gn.10:8-10).

Algunos comentaristas dicen que la expresión “valiente cazador delante de Dios”


fue traducida en Septuaginta como “valiente cazador contra Dios” (Gn.10:9). El
propio nombre Nimrod en hebraico significa rebelión.

Las leyendas a respecto de Nimrod sustentan que él se tornó invencible y convenció


a las personas a no depender más de Dios, sino de si mismas. También de acuerdo a
248

la leyenda, él temía el nacimiento de un líder que llevase el pueblo de vuelta a Dios.


A semejanza de Faraón y Herodes, ordenaron la matanza de niños. La tradición
judaica dice que haciendo eso, él intentaba impedir el nacimiento de Abraham.

Génesis 11:4 dice que el objetivo de Nimrod era construir una torre que llegase al
cielo, según algunos comentaristas esa frase sería mejor traducida por “cuyo topo
esté en el cielo”. El objetivo era el ocultismo, el trazado de la torre de Babel
obedecía a una lógica esotérica con el objetivo de canalizar poderes espirituales.

Además de eso, ellos querían construir una torre para que se torne el nombre de
ellos célebre, todas las veces que el nombre de un hombre intenta sobrepujar o
aparecer más que el nombre de Dios, tenemos establecido en principio de Babel o
Babilonia. Recuérdese de cómo el Señor trató los grandes ministerios americanos
que traían el nombre humano antes que de Dios.

Babel evidencia la iniciativa del hombre de querer llegar al cielo mediante esfuerzos,
la tierra fue construida con ladrillos y argamasa que representan la obra humana. En
la palabra de Dios, nunca se dice que Él haya edificado con ladrillos, sino con
piedras. Jesús dice que Él es la piedra angular y que la iglesia también constituida de
piedras, sería edificada sobre Él (Mat.16:17, 18, 1Pe.2:4-5). Al final, la nueva Jerusalén
es edificada con piedras preciosas (Ap.21:18-20).

Piedras son diferentes de ladrillos, ellas hechas y transformadas por Dios, los
ladrillos son fabricados por el hombre. Las ciudades de depósito de Faraón eran
hechas de ladrillos (Ex.1:11, 14a). Eso nos muestra que las piedras representan la
obra de Dios y los ladrillos por su vez simbolizan el esfuerzo humano y la obra del
enemigo. La nueva Jerusalén – antítesis de Babel es construida con piedras
preciosas, significando una obra divina. Por tanto, Babel significa la obra producida
por el esfuerzo humano.

Tanto Dios como el diablo poseen una línea de edificación en la historia Bíblica, en
Génesis Satanás edifica Babel, pero Dios llama a Abraham para habitar en Dios
profetizando la ciudad de la cual Dios es arquitecto y el constructor (Hb.11:9-10).
Después vemos a Faraón esclavizando el pueblo de Israel para construir las ciudades
de depósito; sin embargo Dios llama a Moisés para que conduzca el pueblo al monte
para levantar allí una casa para Dios, el Tabernáculo. Salomón edificó el templo con
el arca, pero después Nabucodonosor vino y destruyó todo llevando el oro del
templo para Babilonia.

La edificación de Satanás avanza en el recorrer de la historia hasta que en


Apocalipsis ella se torna la gran Babilonia. El Señor igualmente ha edificado su
propósito en recorrer de la historia hasta su consumación en la nueva Jerusalén; por
tanto, la gran Babilonia es colocada en oposición a la Nueva Jerusalén.
249

En la palabra de Dios debemos recordar que Babilonia posee tres aspectos. El


aspecto literal es la ciudad de Mesopotamia construida a margen del río Éufrates
que leemos en el libro de Daniel, la Babilonia religiosa está aquí en cap. 17 y la
Babilonia material en el cap. 18.

Apocalipsis registra dos aspectos de esa Babilonia, en el cap. 17 se tiene la meretriz


que se encuentra sentada sobre muchas aguas y la mujer que está sentada sobra la
bestia escarlata (v.1-3). El propio texto explica el significado de esos personajes. Esa
mujer que es también una prostituta, se identifica como la “gran ciudad que domina
sobre los reyes de la tierra” (v.18) y las aguas “donde la meretriz está sentada son
pueblos, multitudes, naciones y lenguas” (v.15).

La mujer del versículo uno es la misma del tres, ella aparece en posiciones
diferentes. Primero está sobre las aguas (v.1), que simbolizan pueblos y naciones
(v.15), ella también aparece también sobre la bestia escarlata en el verso tres que es
el imperio del anticristo. Eso nos habla de dos aspectos de la gran Babilonia,
mientras está sentada sobre la bestia, ella es un sistema religioso, y sentada sobre
las aguas es una ciudad. Son dos aspectos de una sola cosa: lo espiritual y lo
material. El sistema religioso que es una matriz, está sentado sobre una ciudad, la
ruina de esta ciudad es anunciada en el cap. 18.

Se concluye así que la gran Babilonia tiene dos aspectos que se mesclan y se
interponen: la Babilonia religiosa sobre la bestia y la Babilonia material sobre las
aguas.

1. La gran prostituta

La primera pregunta a responder es: ¿Quién es la gran Babilonia? Históricamente no


existe otra institución que pueda caber en la descripción de Apocalipsis 17, a no ser
la iglesia católica romana; sin querer herir la susceptibilidad de los católicos no hay
duda en afirmar que no existe otra institución en el planeta que se encuadre en el
que está escrito en la palabra, sino la iglesia católica romana. Esa iglesia es la
prostituta aquí de Apocalipsis.

En el versículo cuatro:

Ap. 17:4 Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro de piedras
preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la
inmundicia de su fornicación.

¿Qué es prostitución en la Biblia? En el antiguo testamento cuando el pueblo de


Israel caía en idolatría, Dios decía que estaban cayendo en prostitución, prostitución
es idolatría e idolatría es prostitución. Nos existe otro ramo del cristianismo más
idólatra que la iglesia católica. Es una multitud de ídolos, imágenes y santos que ni el
mismo es capaz de decir cuantos son, todos ellos son adorados en todo el mundo.
250

Para Dios eso es abominación, pienso que ni deberíamos decir que la iglesia católica
es cristiana, ella es esencialmente mariana, cristiano es quien sigue a Jesús. Los
católicos siguen a María; a pesar de no haber recibido el título de diosa, ella ha sido
honrada como tal. La devoción y el amor de los católicos por María trasciende a la
devoción y amor que expresan a Dios padre, Dios hijo y Dios Espíritu Santo.

En el libro “Las Dos Babilonias”, Alejandro Hislop afirma que fue un Babel que surgió
en emblema idólatra más satánico visto hasta hoy: la madre con el bebé. La historia
narra que el personaje de Madonna es el mismo tiempo madre y esposa de Nimrod,
Semíramis fue esposa de Nimrod y después de la muerte de él, tuvo un hijo que dijo
ser la encarnación de Nimrod como mesías. Esa invención babilónica se expandió
por todo el mundo: en Egipto era Ísis y Horus, en India es Isi y Iswara, en Roma era
Fortuna y Júpiter, en Grecia era Ceres y Pluto, pero el mismo emblema había
también en Tíbet, Grecia, China y Japón y actualmente en la iglesia católica.

No es por si acaso que afirmamos que el catolicismo es la Babilonia, la adoración de


la mujer con el niño en el brazo comenzó en Babel que es Babilonia. Hoy el centro
del catolicismo es la mujer con el niño en el brazo; eso es abominación delante del
Señor, es prostitución, una persona que tiene al Espíritu Santo de Dios en si no
puede adorar otro dios, sino el Dios único y verdadero. Hay un solo Dios y un solo
mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús (1Tm.2:5).

María fue usada por el Señor de la misma forma como también somos usados, ella
fue una santa mujer sin duda y debe ser modelo y ejemplo para nuestras hermanas.
Entre tanto, nunca en algún de la palabra del Señor nos manda adorarla o quien
quiera que sea. Es blasfemia decir que Dios tiene madre, es blasfemia decir que la
obra creada puede ser adorada como si fuese Dios. Un cristiano que tiene al Espíritu
Santo no puede adorar a María.

No podemos tener comunión con quien adora imágenes, las personas que adoran
imágenes están bajo la maldición de Dios, la Biblia tiene una posición bien firme en
esa cuestión:

Deut 7:25 Las esculturas de sus dioses quemarás en el fuego; no codiciarás plata ni oro de
ellas para tomarlo para ti, para que no tropieces en ello, pues es abominación a Jehová
tu Dios;
Deut 7:26 y no traerás cosa abominable a tu casa, para que no seas anatema; del todo la
aborrecerás y la abominarás, porque es anatema.

Maldecido es esto que está escrito; si tú tienes una casa o cualquier cosa
relacionada con ídolos, quémelas en el fuego.

Para los católicos; María es más importante que Jesús, Él apenas en niño Dios o el
Dios niño, esa tradición fue asimilada de Babilonia. Semírames y Tammuz su hijo, el
dios niño eran adorados. Para Roma “todas las cosas están sujetas al imperio de la
251

virgen, hasta el propio Dios” es por eso que ella es la patrona de Brasil, de Portugal,
de Francia. Para el mundo católico, María es su protectora y su guardián, los
sacerdotes católicos afirman que no existe otro que intercede por nosotros, sino
María; eso es blasfemia. ¿Cómo ellos tienen coraje en decir eso? Quien intercede por
nosotros es el Espíritu de Dios, el Señor Jesús es nuestro abogado, María no
intercede por nadie. Eso es prostitución, por eso debemos ser radicales contra
cualquier tipo de idolatría en medio de la iglesia. La iglesia católica como la gran
Babilonia se ha prostituido de muchas formas en el recorrer de los siglos, la navidad;
por ejemplo es otra prostitución del catolicismo. Yo no celebro la navidad, pues no
veo en esa conmemoración ningún vínculo cristiano. Apenas aprovecho el feriado
para quedar junto con mi familia.

La navidad era la fiesta de Saturno, el dios sol del imperio romano y cuando
Constantino forzó la cristianización del imperio, la saturnalia – nombre de la fiesta
promovida a Saturno, se transformó en la navidad. La iglesia justificó su acto con
este argumento: “Jesús es el sol de la justicia; por tanto el dios sol es el propio
Jesús” esta afirmación es verdadera apenas en un punto: Jesús es el sol de la
justicia, pero colocar a Jesús sobre el altar de Saturno es nada más que prostitución.

La navidad no tiene ninguna ligación con el nacimiento de Jesús, caso si sería


verdad, sería el personaje principal. ¿Quién recibe las honras? Quien es celebrado es
papa Noel. ¿Cuáles son los símbolos de navidad? Papa Noel y el árbol, ese árbol era
preferido de Tammuz, el árbol de navidad es un símbolo pagano. Los romanos
conmemoraban a saturnalia cortando árboles como se acostumbra hacer hoy. Yo no
estimulo a nadie conmemorar la navidad ni decorar su casa con símbolos navideños.
Mas si quieren aprovechar la fecha la fecha para hacer algo genuinamente cristiano,
reúnan la familia y prediquen el evangelio para todos; sin embargo no use ninguno
de esos símbolos del paganismo. Usarlos es prostitución.

En ningún momento la Biblia nos instruye a celebrar el nacimiento de Jesús, al


contrario nos orienta a participar de la cena y así anunciar la muerte del Señor hasta
su vuelta, mas la prostitución ignora la muerte de Jesús. Dicen que Él no murió por
causa de nuestros pecados, fue apenas un mártir que aquellos judíos perversos
mataron. La prostituta no habla de la vuelta de Jesús porque es mito medieval, es
mejor hablar del nacimiento del niño Jesús. Es más fácil colocar el Dios
Todopoderoso en la condición de un niño impotente y débil.

La iglesia católica como la meretriz de Apocalipsis 17, tiene un cáliz de oro, esto es la
apariencia de piedad, pero en el interior de ese cáliz solo existe abominación.
Veamos más cosas: el día de los muertos o el día de los fallecidos. En la Biblia no
existe ni un día dedicado a los muertos, crearon el día de los fallecidos que es un
feriado religioso con el objetivo de agradar a los orientales. En los países orientales,
los ancestrales son objeto de culto y adoración. En la cristianización de esos
252

pueblos, Roma no apenas les permitió conservar divinidades tutelares y ceremonias


paganas, sino también las adoptó.

¿Por qué nosotros los evangélicos no veneramos los muertos? Porque en la Biblia
enseña claramente que aquellos que murieron en Cristo no están muertos, están
vivos con el Señor, Dios no es un Dios de muertos, Él es Dios solo de vivos.

La hagiología católica es otro aspecto de la prostitución. Adorar santos es


abominable, entre tanto, adorar santos es demoniaco. A pesar que la iglesia católica
de haber reconocido que San Jorge nunca existió, jamás prohibió su devoción. Es
ceguera espiritual causada por la locura de la idolatría conforme profetizó Isaías
(Is.45:16-20).

Cuando adoran santos están a la verdad invocando muertos, que es abominación


delante de Dios, todo ese panteón de santos no pasa de influencia pagana. En el
hinduismo y mismo en la mitología griega, existe un dios para cada aspecto de la
vida cotidiana. Por tanto son millones de dioses, para no desagradar los paganos
convertidos, Roma hizo la misma cosa, creó semidioses llamados de santos
encargados de cada aspecto de la vida de sus devotos.

Hasta la misa es una prostitución del catolicismo con el judaísmo, en ella están
presentes todos los aspectos del culto judío del antiguo testamento. El padre es un
sacerdote paramentado, el altar es el lugar santísimo, la eucaristía es un sacrificio,
las oraciones son literalmente inciensos quemados y las velas están esparcidas
recordando el candelabro. ¿Qué decir de las oraciones por los muertos, el culto a las
almas, las fiestas populares y folclóricas? Es tarea ingrata hablar de todo sincretismo
religioso que ha caracterizado la prostitución religiosa de Roma con todo el mundo.

2. La descripción de la gran Babilonia – 17.1-6

En el verso cinco se lee:

Ap. 17:5 y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA


MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA.

¿Por qué la Babilonia es la madre de las meretrices? Porque no es la única, posee


hijas. ¿De dónde salieron las denominaciones evangélicas históricas? De la iglesia
católica. ¿Cuáles son esas denominaciones? Presbiterianos, episcopales y luteranos;
por ejemplo en Brasil, los protestantes históricos difieren un poco de los del
exterior. En otros países son muy parecidos con la iglesia católica: templos llenos de
vitrinas coloridas y liturgia muerta donde el culto se parece más con una misa. La
iglesia católica hoy está en confabulaciones ecuménicas con los luteranos y
episcopales. ¿Para qué? Para unirse en torno a un solo gobierno y liderazgo. Creo
que eso va suceder antes del arrebatamiento de la iglesia; sin embargo no debemos
pensar que apenas las denominaciones históricas están contaminadas con la gran
253

meretriz. Si un grupo tiene algo del catolicismo, entonces es una hija meretriz. Así
como en Roma, muchas iglesias evangélicas trabajan en base al lucro y la ganancia,
eso también es señal de prostitución. Debemos rechazar en nuestras iglesias todo
aquello que procede de Roma como; por ejemplo el clericalismo y el templismo.
Algunas iglesias idolatran al pastor, otras el propio edificio.

El hecho de la meretriz de haberse prostituido con los reyes de la tierra significa que
esta institución es también política. La iglesia católica es esencialmente política. La
Babilonia posee dos aspectos: lo material y el religioso, el cap.17 se refiere a la
Babilonia religiosa y no a la material cuya caída es descrita en el cap.18.

El verso seis comenta que la meretriz está embriagada con la sangre de los santos y
con la sangre de los testigos de Jesús (Ap.17:6). La historia denuncia que en treinta
años de inquisición fueron muertos mislares de creyentes. Las compañías de Jesús –
de los jesuitas – mataron más de un millón de herejes entre 1500 y 1600 d.C. esos
herejes eran personas que creían en el señor Jesucristo y eran fieles a la palabra de
Dios.

En algunos momentos, la Biblia mescla la Babilonia material con la religiosa, que es


la iglesia católica. Probablemente la Babilonia material se refiere al Vaticano. Europa
fue el lugar donde más se derramó la sangre de los testigos de Jesús en toda la
historia y delante de Dios, esa sangre no quedará sin venganza. Además uno de los
nombres del Señor es el vengador – aquél que venga la sangre de los inocentes. El
Señor también es un juez justo: “A mi me pertenece la venganza, dice el Señor” el
día de la venganza está cerca. El verso 4 declara que la mujer está vestida de
púrpura o escarlata, en la Biblia el color púrpura significa autoridad, dignidad
(Jn.19:2-3). Los cardenales usan el rojo y ese color es el color oficial del Vaticano; eso
significa que la Babilonia religiosa tiene autoridad. Además ella ya tuvo más poder y
autoridad de lo que tiene hoy.

Esa mujer se adorna con oro, piedras preciosas y perlas, en Ap.22, la nueva Jerusalén
también es constituida de esos mismos materiales. Mientras la nueva Jerusalén es
edificada con ese material, la prostituta apenas se adorna, ella tiene en la mano un
cáliz de oro. En la Biblia, el oro representa la naturaleza y la gloria divina. La iglesia
católica posee el cáliz de oro que es Jesús, porque todavía lo confiesa. Entre tanto,
lo más importante en ese caso es lo que está dentro del cáliz. ¿Qué hay en el cáliz?
Está transbordando de abominaciones y las inmundicias de la prostitución de la
iglesia católica. Esa iglesia de hecho hasta menciona el nombre de Jesús y
eventualmente lo invoca. En su apariencia ella está con el que se puede llamar de
algo divino, celestial; pero por dentro el cáliz está lleno de inmundicias y
prostituciones.
254

3. La bestia escarlata – 17.7-18

Fue constatado que la bestia es el imperio romano resurgido, inclusive el propio


anticristo.

Ap.17:8 La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a
perdición.

Era, no es y está por venir, significa que ya vino en el momento no existe todavía,
pero volverá a existir en el futuro.

Esa es la misma bestia que sube del mar en el cap.13, esa prostituta sentada sobre la
bestia es Babilonia, ella es el imperio romano, que era, que hoy no es, pero subirá de
nuevo. La bestia es también el octavo rey “que procede de los siete y camina para la
destrucción”, o sea: el anticristo (Ap.17:11). Ella es tanto el imperio del anticristo
como es el propio anticristo, ella vendrá del abismo, ella y el dragón son del mismo
color: escarlata o rojo (17:3, 12:3). Eso muestra que el anticristo y el dragón son uno,
en el propósito, en la naturaleza y hasta en la apariencia.

En el verso tres se percibe que la bestia es impregnada de blasfemias, la gran


blasfemia del imperio romano en el pasado era el hecho de sus emperadores de
llamarse a si mismos como dioses. Ciertamente el anticristo tipificado por aquello
césares, se proclamará dioses. Recuérdese que el imperio del anticristo será el
imperio romano resurgido, esa será la gran blasfemia que proferirán: cada ser
humano es un dios. En aquellos días enseñarán que hay un poder increíble dentro
del hombre que le permite realizar todo lo que quiera, el hombre no necesita de
Dios porque él mismo ya es un dios. Esta es el mismo mensaje que la Nueva Era está
predicando, es el principio que rige la Babilonia: atribuir a la criatura la posición del
creador.

La mujer está sentada sobre una bestia que tiene siete cabezas, el verso nueve dice
que las siete cabezas son siete montes.

Esto, para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes, sobre los
cuales se sienta la mujer (Ap.17:9).

¿Cuál es la ciudad que está edificada sobre siete montes o siete colinas? Todos
saben que es Roma conocida como la ciudad de las siete colinas. ¿Cuál es la parte de
Roma que representa la mujer? Ciertamente es el vaticano.

Por tanto, el catolicismo es la Babilonia religiosa sentada en la bestia y el Vaticano es


la misma Babilonia material sentada sobre las aguas que representa las naciones. La
primera es un sistema religioso y la segunda es una ciudad – el Vaticano. Mas esos
siete montes también son siete reyes, la interpretación tradicional es que esos siete
reyes son siete imperios mundiales que ya hubo sobre la tierra, ellos son
255

representados en parte en la estatua de Nabucodonosor. El texto dice que ellos


eran, ya no son, pero tornarán a ser. Son los siguientes imperios: egipcio, asirio,
babilónico, medo-persa, griego y romano. Es por eso que se dice que el séptimo
imperio todavía revivirá, se rata de la resurrección del imperio romano, pero a la
verdad es el imperio del anticristo.

17:10 y son siete reyes. Cinco de ellos han caído.

Aquí el ángel dice a Juan que pasaron cinco imperios, los imperios: egipcio, asirio,
babilónico, medo-persa y griego ya habían pasado en los días de Juan.

Uno es, y el otro aún no ha venido; y cuando venga, es necesario que dure breve tiempo
(Ap.17:10b).

Se puede deducir que el sexto era el imperio romano, pues era ese el imperio
cuando Juan escribió el Apocalipsis. El otro todavía no llegó y cuando venga tiene
que durar poco tiempo. El séptimo imperio será el imperio romano resurgido, el
anticristo va gobernar sobre este imperio resurgido.
Ap.17:11a La bestia que era, y no es, es también el octavo.

La bestia que era y no es se refiere al imperio romano resurgido, así como el


anticristo, el octavo rey. En la visión de Daniel, la bestia tenía siete cuernos y sobre
el séptimo tenía un pequeño cuerno, cuya boca hablaba con insolencia (Dn.7:8, 20).
El octavo a la verdad será el anticristo – la propia personificación del diablo, él va
morir y resucitar, o sea: Satanás enviará un espíritu maligno que entrará en el
cuerpo sin vida del anticristo y pasará a actuar como si fuese el mismo.
Ap. 17:12 Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino;
pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia.

Esos diez reyes son los diez dedos de los pies de la estatua de Nabucodonosor, ellos
recibirán autoridad real apenas por una hora. Esos diez reyes aparecerán y
desaparecerán muy abruptamente. Ellos “tienen un solo pensamiento y ofrecerán a
la bestia el poder y la autoridad que poseen” (Ap.17:13).

El v.14 es una referencia a la batalla del Armagedón en la cual el anticristo y esos


diez reyes pelearán contra el cordero.

Ap. 17:14 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de
señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.

Observe que el Señor los vencerá junto con los elegidos o escogidos y no con los
salvos, una cosa es ser llamado (ser salvo) y otra es ser escogido (ser vencedor).

En los versos 16 y 17 se ve en el final el propio anticristo y los diez reyes que


destruirán la iglesia católica, la gran Babilonia. No está claro si eso será al comienzo
256

o al final de la gran tribulación, pero será algo extraordinario, una señal de la venida
de Jesús.

Me dijo también: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos,
muchedumbres, naciones y lenguas.
Y los diez cuernos que viste en la bestia, éstos aborrecerán a la ramera, y la dejarán
desolada y desnuda; y devorarán sus carnes, y la quemarán con fuego;
Porque Dios ha puesto en sus corazones el ejecutar lo que él quiso: ponerse de acuerdo, y
dar su reino a la bestia, hasta que se cumplan las palabras de Dios (Ap.17:15-17).

Es increíble como el propio Dios, aquí está usando el anticristo, el propio Dios
incitará en el corazón de él. Como fue dicho, esa prostituta es la iglesia católica
asociada con algunos protestantes. La Biblia está diciendo claro que el anticristo la
destruirá. ¿Y qué señal poderosa es esa? Quien esté aquí durante la gran tribulación
ciertamente entenderá eso. Hoy es imaginable que eso suceda, pero el anticristo lo
hará cuando Dios lo quiera, el Señor va ejecutar el juicio y es para eso que usará el
propio diablo para juzgar y destruir completamente la gran Babilonia.

Ap. 17:18 Y la mujer que has visto es la gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra.

La iglesia católica es más que una iglesia, ella es un estado, políticamente soberano
y reconocido por los demás países. En Brasilia en el sector de las embajadas, se
encuentra la embajada del Vaticano. Es al mismo tiempo la sede religiosa y política
de la santa Sé. La iglesia católica es una potencia política y económica, el Vaticano
tiene su propio banco. Dicen que un tercio de la ciudad de Roma pertenece a la
iglesia católica, en Brasil su patrimonio es incalculable, sus catedrales están
ornamentadas con oro y piedras preciosas. Además de eso su acervo en obras de
arte es el más grande y el más valioso en el mundo. En función de eso grande es el
interés de los países en mantener relaciones diplomáticas con el Vaticano. La
meretriz no apenas domina sobre los reyes de la tierra como también se prostituye
con ellos (Ap.17.2).

El v.18 introduce al cap.18, en el cual se anuncia la caída de la gran Babilonia


material. Ese anuncio ya se había hecho antes en el cap.14:8.

Ap. 14:8 Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad,
porque ha hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación.

En este caso se refiere a la caída de la Babilonia religiosa que sucederá en cualquier


momento de la gran tribulación. Ahora en el cap.18 tenemos la caída de una ciudad
en el final de la gran tribulación, es aquella que está edificada sobre siete montes: el
Vaticano.

4. La caída de Babilonia material – 18.1-24


257

La Babilonia posee tres aspectos: literal (Gn.11), el religioso (Ap.17) y el material


(Ap.18). La dificultad en comprender ese capítulo es que a veces, los dos últimos
sentidos se mesclan. El cap.18 se inicia con la aparición de un ángel grandioso que
no es otro sino Jesús como sucede en 7:2, 8:3, 10:1. Eso significa que la destrucción
de la Babilonia material debe acontecer en la venida de Cristo.

Ap.18:1 Después de esto vi a otro ángel descender del cielo con gran poder; y la tierra
fue alumbrada con su gloria.

Tanto Apocalipsis 14:8 como 18:2 hablan de la caída de Babilonia, parece que la
Babilonia religiosa caerá en el comienzo de la gran tribulación y la material al final. El
aspecto religioso de la gran Babilonia es la prostitución, pero el aspecto material es
el comercio.

Ap. 18:2 Y clamó con voz potente, diciendo: Ha caído, ha caído la gran Babilonia, y se ha
hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda
ave inmunda y aborrecible.
Ap. 18:3 Porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación; y los
reyes de la tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la tierra se han enriquecido de
la potencia de sus deleites.

En el verso 4 se escucha un llamado de Dios para que su pueblo salga de Babilonia.

Ap. 18:4 Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis
partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas.

Como la gran Babilonia posee dos aspectos: el religioso y el material, el apelo para
retirarse de ella debe envolver los dos aspectos, el religioso y el material.

Dadle a ella como ella os ha dado, y pagadle doble según sus obras; en el cáliz en que ella
preparó bebida, preparadle a ella el doble.
Cuanto ella se ha glorificado y ha vivido en deleites, tanto dadle de tormento y llanto;
porque dice en su corazón: Yo estoy sentada como reina, y no soy viuda, y no veré
llanto;
Por lo cual en un solo día vendrán sus plagas; muerte, llanto y hambre, y será quemada
con fuego; porque poderoso es Dios el Señor, que la juzga (Ap.18:6-8).

Esta ciudad se considera indestructible, sin embargo caerá en un solo día, ella será
destruida y consumida por el fuego; es como si hubiese ocurrido la explosión de una
bomba de gran porte. Restarán solamente cenizas, ruinas y mucho humo. Los reyes
de la tierra que se prostituyeron con ella, lamentarán profundamente por su caída.

Ap. 18:9 Y los reyes de la tierra que han fornicado con ella, y con ella han vivido en deleites,
llorarán y harán lamentación sobre ella, cuando vean el humo de su incendio.

El juicio divino sobre Babilonia será por causa de los santos, apóstoles y profeta,
porque “en ella se halló sangre de profetas, de santos y de todos los que fueron
sobre la tierra” (18:24). ¡Impresionante! Esa ciudad va desaparecer en un momento,
258

es notable como el libro de Apocalipsis usa un texto tan extenso para hablar a
respecto de Babilonia; si Dios abomina tanto la prostitución y la idolatría, nosotros
también tenemos que abominarla y sentir por ella la misma repugnancia.

Los frutos codiciados por tu alma se apartaron de ti, y todas las cosas exquisitas y
espléndidas te han faltado, y nunca más las hallarás.
Los mercaderes de estas cosas, que se han enriquecido a costa de ella, se pararán lejos por
el temor de su tormento, llorando y lamentando,
Y diciendo: ¡Ay, ay, de la gran ciudad, que estaba vestida de lino fino, de púrpura y de
escarlata, y estaba adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas!
Porque en una hora han sido consumidas tantas riquezas. Y todo piloto, y todos los que
viajan en naves, y marineros, y todos los que trabajan en el mar, se pararon lejos;
Y viendo el humo de su incendio, dieron voces, diciendo: ¿Qué ciudad era semejante a esta
gran ciudad?
Y echaron polvo sobre sus cabezas, y dieron voces, llorando y lamentando, diciendo: ¡Ay,
ay de la gran ciudad, en la cual todos los que tenían naves en el mar se habían
enriquecido de sus riquezas; pues en una hora ha sido desolada!
Alégrate sobre ella, cielo, y vosotros, santos, apóstoles y profetas; porque Dios os ha
hecho justicia en ella.
Y un ángel poderoso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la arrojó en el
mar, diciendo: Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más
será hallada (Ap.18:14-21).

5. ¿Babilonia o nueva Jerusalén?

El ápice de Apocalipsis son dos ciudades: gran Babilonia y la nueva Jerusalén. La


nueva Jerusalén es caracterizada por la pureza y el compromiso único – el novio. La
gran Babilonia por su vez es llamada de meretriz o prostituta. La prostitución de la
gran Babilonia simboliza en primer lugar: la idolatría. ¿En su vida hay algo ligado a la
gran Babilonia? Lo que caracteriza es la prostitución de la idolatría, entonces evalúe
si ella está presente en su vida.

La prostitución en segundo lugar está ligada con el negar del nombre, toda mujer
que recibe el nombre de su marido; si una mujer es la señora Santos, no será
llamada de señora Olivera o Pereira, o Silva, porque eso sería prostitución. No
niegue el nombre del Señor en su vida. Yo soy cristiano y me interesa poco el
nombre escrito en la puerta del edificio de la iglesia, yo soy cristiano y mi marido es
el Señor Jesús, yo soy casado con Él y no acepto ser llamado por otro nombre.
Muchos antes de ser cristianos, asumen el nombre de su denominación, eso
también es prostituirse. La Babilonia posee muchas hijas (17:5). No piense que solo
una iglesia o una religión es la gran Babilonia, se trata de un sistema religioso que va
envolver muchas religiones e iglesias.

La tercera característica de Babilonia es el comercio, las naciones se embriagaron


con su comercio y ella hasta comercializaba almas humanas (18:13). Por tanto no se
259

trata de un comercio cualquiera, sino de un comercio de almas. Tenga mucho


cuidado si su iglesia se tornó un lugar de comercio. Iglesias tan ricas, lujosas que son
dueñas de bancos, de empresas, multinacionales, todas se tornaron un comercio.
Iglesias pequeñas también se tornaron balcones de negocios viviendo en función
del dinero. Si la iglesia se tornó un medio de comercio, eso es Babilonia y nos es la
nueva Jerusalén. Prostitución es apenas un tipo de comercio, lo más vil, hay iglesias
y pastores que viven en función del dinero, ellos no están preocupados en edificar
los santos, apenas en saber si habrá retorno financiero; eso es prostitución.

La cuarta forma de prostitución ocurre cuando el hombre es alzado a una posición


de intermediario entre Dios y los hombres, no piense que el pastor es un
intermediario entre Dios y tú, no diga: Habla con Dios a mi respecto porque Dios lo
va escuchar. Eso es prostitución, lo peor sucede cuando los líderes y pastores
asumen esa posición y a si mismos se dan títulos y nombres exaltados. Eso es
prostitución.

¿Qué existe de la gran Babilonia en nosotros? Y ¿Qué hay de la Nueva Jerusalén en


nosotros? Lamentablemente todavía hay muchas cosas en nosotros que se parecen
con la Babilonia, otra característica de la prostitución es el ritual y la hipocresía. Dios
aprecia el corazón, Babilonia es aquella que tiene el cáliz de oro, tremendo y lindo
por fuera, pero por dentro está lleno de inmundicia y suciedad, Dios no mira lo
exterior sino el interior. Si su culto a Dios es basado en un ritual, si para ti agradar a
Dios es una cuestión de cantar solo determina la música varias veces o hacer un
movimiento o una repetición mecánica, formal e impersonal sin que su corazón
participe, sepa que eso es prostitución. Dios busca hombres que lo tengan
completamente en el corazón.

Necesitamos evaluar si estamos edificando la nueva Jerusalén o cooperando para


que venga la gran Babilonia que era adornada con oro, plata y piedras preciosas, ella
tiene pompa. A nosotros nos gusta la pompa, pero el carpintero de Nazaret es
sencillo, las cosas de Dios son sencislas y fáciles de entenderse.

La Biblia también dice que la gran Babilonia es la madre de los misterios; si su


religión es basada en ellos, eso también es prostitución. El cristianismo se origina en
revelación y no en misterios, ser cristiano es tener revelación. Antes era de hecho
que estaba oculto y escondido, era misterio, pero ahora fue revelado a los santos.

1Co 2:9 Antes bien, como está escrito:


Cosas que ojo no vio, ni oído oyó,
Ni han subido en corazón de hombre,
Son las que Dios ha preparado para los que le aman.
1Co 2:10 Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo
escudriña, aun lo profundo de Dios.

El Señor es Dios de luz, de claridad y de entendimiento.


260

El último aspecto de la prostitución a ser compartida es el compromiso asumido con


muchos al mismo tiempo, prostitutas no tienen alianza ni respetan compromisos.
¿Ya vieron como actúan los católicos? Existen católicos espíritas, católicos
marxistas, católicos esotéricos. Ellos son católicos y son simultáneamente cualquier
cosa. ¿Conocen creyentes que no tienen compromiso con algún lugar y ninguna
iglesia? Es porque aman la prostitución.

No se puede tener compromiso del mismo nivel con más de una persona, el
compromiso que yo tengo con mi esposa, tengo solo con ella. El compromiso que
un hermano tiene con su pastor es solo con él, no puede ser con más de uno; caso
contrario, será prostitución. Hay personas que dicen: “mi compromiso es solo con
Dios”. Nadie puede decir que tiene compromiso con Dios si no tiene compromiso
con los hombres, pues así como usted no puede decir que ama a Dios que no ve, si
tú no amas a tu hermano que ves, lo mismo se aplica al compromiso. ¿Cómo es que
se puede tener compromiso con el Dios invisible no teniendo con los hombres a los
cuales se ve y toca? Quien no se compromete con hombres de Dios también no se
compromete con Dios.

Es fundamental entender eso, Apocalipsis concluye con dos ciudades: la gran


Babilonia y la nueva Jerusalén. ¿En cuál de las dos estás? Necesitamos abandonar
toda práctica de Babilonia y avanzar a fin de que vivamos en el padrón de la nueva
Jerusalén. En Jerusalén nosotros somos casados y unidos solamente con Él
eternamente.
261

Las bodas del cordero


El cap.19 prácticamente concluye Apocalipsis, los capítulos 20, 21 y 22 se refieren a
los detalles que sucederán después de los hechos aquí registrados. En este capítulo
se encierra también la era del gobierno humano en la tierra. El principal propósito
de Dios en relación al ser humano no es apenas perdonarle los pecados, sino
preparar: 1Pe 2:9 Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo
adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su
luz admirable.

La novia del cordero. La salvación del hombre nunca fue el propósito final de Dios, al
contrario fue apenas una corrección de rumbo. El Señor no creó al hombre y la
mujer en el Edén para salvarlos del pecado, Él los creó con otro propósito y una vez
que nuestro destino es corregido a través de la salvación, el Señor retoma su
objetivo final: preparar una novia para su hijo el Señor Jesucristo. Muchos de
nosotros estamos presos apenas al propósito de salvación y juzgamos que ella es
todo de lo que necesitamos. La verdad, sin embargo es que ella es solamente la
puerta de entrada para llegar a la posición de la novia del cordero.

En el Edén, Dios plantó un jardín y puso allí al hombre y le dio el encargo de cuidar
de toda la creación. Todos los demás seres creados por Él tenían compañera para si,
todavía el vivía solo; entonces Dios dijo:
262

Gen 2:18 Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea
para él.

¿Qué quiere decir idónea? Alguien que esté a la altura, en el mismo nivel, que pueda
suplirlo y con quien pueda completarse.

En seguida, el Señor Dios trajo al hombre.

Gen 2:19 Jehová Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los
cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y todo lo que Adán
llamó a los animales vivientes, ese es su nombre.
Gen 2:20 Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y a todo ganado del campo;
mas para Adán no se halló ayuda idónea para él.

Los mejores intérpretes de las escrituras afirman que al mandar a Adán nombrar los
animales; Dios quería que él perciba lo cuanto era diferente de los demás seres
creados. Ninguno de ellos podía suplirlo en sus necesidades afectivas y así se
profundó la búsqueda de Adán por alguien que fuese semejante.

Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó
una de sus costislas, y cerró la carne en su lugar.
Y de la costisla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.
Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será
llamada Varona, porque del varón fue tomada (Gen.2:21-23).

En la carta a los efesios; Pablo habla al respecto de esa unión entre el hombre y la
mujer, para él es una misteriosa analogía de la unión de Cristo con la iglesia.

Ef. 5:31 Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y los dos
serán una sola carne.
Ef. 5:32 Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia.

La verdad, Adán simboliza Cristo, mientras que Eva simboliza la iglesia. Hubo un día
en que Dios se tornó hombre (Jn.1:14). Antes Él era solamente Dios, pero ahora es
también hombre en Cristo, Adán era apenas una foto, una ilustración del verdadero
Adán que es Cristo.

El Señor entonces da inicio al proceso de traer Eva a la existencia y el primer paso es


hacer el hombre dormir. En la Biblia, dormir significa morir, el Señor Jesús tuvo que
morir para traer a la existencia a su novia. Por tres días y tres noches, Él estuvo
durmiendo el sueño de la muerte. Jesús fue el grano de trigo que cayó en la tierra
para morir, crecer y engendrar muchos granos (Jn.2:24) y así hacer el pan – que es
su cuerpo – la iglesia (1Co.10:17).

Eva fue formada de una costisla, eso significa que la iglesia salió de Cristo. Así como
Adán fue la materia prima para la creación de su compañera. Jesucristo también es
la materia prima para edificar la iglesia, solamente los que proveniente de Cristo
263

puede ser iglesia, todo lo que no es Cristo no es iglesia. Así como Eva era otra forma
de Adán, la iglesia es apenas otra forma de Cristo, Adán era la imagen de Dios y Eva
era la imagen de Adán. Cristo es la imagen de Dios, mas la iglesia es la imagen de
Cristo. La iglesia es exactamente como Cristo en su naturaleza (1Jn.3:2).

Todo lo que es natural, del ego y de la carne tiene parte en la iglesia y no puede ser
usado en su edificación, la cuestión de la fuente y el origen de las cosas es la primera
lección en la vida cristiana, más importante de lo que hacemos es la fuente de
nuestras acciones. Solamente es aceptable delante de Dios lo que tiene como
materia prima el propio Cristo.

El sueño de Adán simboliza la muerte de Cristo, su despertar representa su


resurrección. Cuando Adán vio a Eva, dijo: “ella es hueso de mis huesos y carne de
mi carne”. He visto bueyes, leones, peces y aves, pero ninguno de ellos podría hacer
par conmigo. En el mismo principio nosotros podemos ser uno con Cristo, porque
somos carne de su carne y hueso de mis huesos. Somos de tipo, somos de su
especie, podemos ser su par y su auxiliadora idónea.

En la realidad, Cristo y la iglesia son un solo espíritu (1Co.6:17), el objetivo divino es


ser uno con el hombre, Él lo alcanzó por la cruz y por la resurrección. Eso de
tornarse en una sola carne es un gran misterio en la palabra. Primero, porque habla
de una unión tal entre Dios y los hombres que nos lleva a ser divinos sin que seamos
Dios.

Por otro lado, muestra que la iglesia no es una cuestión de varios cristianos estar
juntos con otros cristianos, no es una cuestión de muchos hombres, sino de una
vida. La iglesia solo es iglesia porque posee muchos hombres que itnen muchos
hombres tienen una misma vida que es Cristo, cada uno de nosotros tiene una
porción de Cristo y cuando estas porciones de Cristo son colocadas juntas, entonces
tenemos la iglesia.

El Señor Jesús creó todas las cosas y también las nombró, todavía para él no había
una compañera idónea, era necesario que ella fuese tal cual él es – carne de su carne
y sangre de su sangre. Y aquí está la consumación de la historia: Dios en Cristo
tendrá para si su novia – la iglesia, que está lista para presentarse al novio; entonces
habrá un casamiento que implica en una fusión de vidas. Cada vez que un hombre y
una mujer se casan, están proféticamente anunciando que un día el Señor Jesús se
va casar con su iglesia. Cuando un hombre y una mujer se unen, se tornan una sola
carne y en el día en que Cristo se una a la iglesia, ambos se tornarán un solo espíritu.
La iglesia es la instrucción más sagrada que existe en la tierra, ella está destinada a
unirse a Dios por los siglos de los siglos. Usted no tiene idea de los que eso. Es por
esa razón que la novia no puede tener ninguna mancha, mácula o arruga, también
no puede ser inmadura porque necesita ser compañera idónea.
264

La unión espiritual que tendremos con el Señor es simbolizado por el acto sexual,
este es el motivo porque la relación sexual entre un casado debe realizarse apenas
en el matrimonio. Así como el matrimonio es sagrado, el acto sexual también lo es.
¿Ya percibió que el diablo siempre busca herir la santidad de Dios a través del sexo?
Siempre fue así en todas las épocas desde Sodoma y Gomorra. Actualmente
estamos viviendo la época de mayor permisividad sexual de la historia, el sexo hoy
es algo banal y vulgar, entre tanto, todo eso ha de ser restaurado.

1. Serán después de la destrucción de Babilonia.

La fiesta de las bodas es mencionada después de la destrucción de la grande porque


esta es una imitación maligna de la novia. Ambas tiene perlas y piedras preciosas,
ambas tienen algo de Dios y de Cristo representado por el oro y tiene algo de la
novia porque son mujeres. Mas la imitación maligna necesita salir de escena para
que la realidad divina pueda manifestarse.

2. Serán después del arrebatamiento – 1Ts.4:15-17

Las bodas del cordero se darán después del arrebatamiento de los creyentes para
las nubes en la venida del Señor.

Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos
quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.
Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios,
descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados
juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre
con el Señor (1Ts.4:15-17).

Las bodas del cordero se darán después de la caída de la gran Babilonia, el Señor
Jesús vendrá hasta las nubes donde se encontrará con la novia. En ese primer
momento, Él no descenderá a la tierra, desde las nubes Él atraerá para si a los
santos que fueren salvos y establecerá su tribunal donde cada creyente será
juzgado de acuerdo con sus obras.

¿Usted se recuerda de la parábola de las vírgenes en Mateo 25? Eran diez vírgenes
que con sus lámparas encendidas salieron al encuentro del novio. Cinco de ellas
fueron prudentes, llevando consigo aceite para reabastecer sus lámparas caso fuese
necesario. Las otras cinco llevaron apenas aceite en las lámparas y como su novio
demoró en llegar, el aceite de las lámparas se acabó. Las vírgenes prudentes más
que tener prisa, reabastecieron sus lámparas; entre tanto, las necias tuvieron que
salir para comprar aceite. En ese momento llegó el novio y se dieron inicio las bodas.
Cuando las vírgenes necias retornaron con aceite. No pudieron entrar al salón de
fiestas porque la puerta había sido trancada. Eso no quiere decir que ellas no fueron
265

salvas, apenas no participaron de la fiesta porque no fueron cualificadas. Ni todos


los salvos participarán de las bodas por el mismo motivo por el cual ni todas las
vírgenes de la parábola pudieron entrar.

3. Serán después del tribunal de Cristo – 2Co.5:10

La fiesta de las bodas se realizará después del juicio del tribunal de Cristo.
Recuérdese que el tribunal es para los creyentes y no es un juicio para condenación,
sino para la recompensa. Aquellos que fueren galardonados en el tribunal de Cristo
participaran de las bodas, y los que no lo fueren, no irán para el infierno, pero no
participarán de la fiesta.

2Co 5:10 Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de
Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo,
sea bueno o sea malo.

Es posible ser salvo y no tener recompensa o galardón como es declarado por


Pablo:

1Co 3:15 Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo,
aunque así como por fuego.

De acuerdo con Jesús las cinco vírgenes necias no fueron admitidas en la fiesta de
las bodas (Mat.25:1-3). Los que sufrirán el daño (1Co.3:15) no participarán de la
fiesta. El siervo que enterró el talento también fue dejado de fuera. El tribunal de
Cristo no es para determinar la salvación, sino el galardón de cada creyente.

El tribunal de Cristo existe para todos los salvos, muchos serán alabados y
recompensados; otros no serán elogiados ni reprendidos, ciertamente habrá
algunos que serán reprendidos y hasta disciplinados. Algunos se presentarán
vestidos de lino finísimo. Sus obras están fundamentadas sobre oro, plata y piedras
preciosas, el fuego no las quemará; otros entre tanto estarán como desnudos, sus
obras están fundamentadas sobre madera, paja y heno que no resistirán al fuego.
Esas personas recibirán vestidos de salvación, pero a pesar de eso murieron en
deuda con Dios.

El pecado no confesado es deuda delante de Dios, ¿Qué sucede con un creyente que
muere en pleno acto de adulterio? ¿Pierde la salvación? No. La salvación no se
pierde, pero ¿Qué pasará a esa persona cuando llegue delante de Dios, será
elogiada? No. Ciertamente la reprensión será como de aquél hombre de la parábola
de las bodas (Mat.22:11-14). Sin las ropas nupciales – las del lino finísimo – nadie
recibirá galardón. Quien no posee obras de justicia, también no tendrá la
recompensa.
266

Algunos predicadores convidan las personas a recibir Jesús con la promesa de


recibir una corona en el cielo; eso es un error. Nadie recibirá una corona alguna solo
porque es salvo, la salvación es un regalo, una dádiva de Dios y nadie será premiado
por recibir un regalo. La recompensa viene por las obras de justicia practicadas, si
alguien no anda fidelidad y temor al Señor, en santidad y obediencia a las órdenes
de la palabra de Dios, ¿Cómo podrá reinar con Cristo? Quien no se dispone a
evangelizar sus parientes, amigos y conocidos, ¿Cómo podrá reinar con Cristo?
Quien no se dispone a orar y ayunar por la conversión de otras personas, quien cree
que es muy penoso y difícil, quien vive embriagado por la vida natural, con el dinero,
con el trabajo y con los placeres del mundo, ¿Cómo podrá llegar delante del padre y
reinar con Él? Dios es justo, querido lector, el galardón es exclusivo para aquellos
que presentan actos de justicia requeridos por el Señor en su palabra. ¿Tú quieres
reinar con Cristo? Entonces busque aplicar lo más rápido posible este principio a su
vida: viva el día de hoy como si Cristo estuviese volviendo mañana.

Nosotros no necesitamos apenas de salvación, necesitamos también del galardón,


no basta la justificación, necesitamos de la aprobación (Ap.17:14). La justificación es
para salvación, mas la aprobación es para el galardón. El v.9 dice que es
bienaventurado quien es invitado para la cena de las bodas. Solo vencedores serán
invitados y no todos los salvos, las cinco vírgenes necias quedarán fuera de la
recompensa.

Las bodas en si serán cortas, pero la fiesta que la sigue basado en Mateo 22 deberá
durar mil años. En el milenio los creyentes vencedores reinarán con Cristo y esta
será la recompensa, que seamos co-reyes y también la novia. Ahora siendo salvos,
se requiere todavía que nos tornemos vencedores para recibir el reino como
galardón.

4. Los vestidos de la novia – 19:5-7

De acuerdo con Mateo 22:11-12, el texto de Apocalipsis 19:8-9 debe referirse a los
vencedores que tejieron sus vestidos nupciales en ese contexto la novia se refiere a
los vencedores al paso que el texto de Ap.21:2 se refiere a todos y menciona la novia
después del milenio cuando todos los creyentes habrán alcanzado la madurez y así
harán parte de la novia por ocasión del matrimonio.

Ap. 21:2 Y yo Juan vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo, de Dios,
dispuesta como una esposa ataviada para su marido.

La prontitud de la novia depende de su madurez.

Ap. 19:9 Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las
bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios.
267

Hay la cena de las bodas y la propia boda del cordero, hay la cena del matrimonio y
la propia fiesta del casamiento. La cena es un preanuncio de lo que será la fiesta.

Ap. 19:8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente;
porque el lino fino es las acciones justas de los santos.

La Biblia hace referencia a los dos tipos de ropas: los vestidos de salvación y de
justicia. La primera ropa que recibimos son los vestidos de salvación.

Gal 3:27 porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.

Todo hombre en su esfuerzo humano ha intentado cubrir su propio pecado como


Adán y Eva en el Edén intentaron esconderse con hojas de higos. Ese intento es
inútil, una vez que la única manera de cubrir el pecado es por la sangre (Hb.9:22).

Adán y Eva necesitaban cubrirse, Dios vino, les hizo ropas y los vistió, para eso el
Señor tuvo que matar un animal (ciertamente un cordero). Así que quien miraba a
Adán veía el cordero, por causa de las vestimentas que fueron colocadas en ellos,
tenían la apariencia de cordero. Cuando Dios lo miraba, veía primero la piel del
cordero; eso significa que Dios los justificó, ser cubierto es ser justificado. Ser
justificado significa ser vestido de Cristo – el cordero (Gl.3:27).

Es lo que ocurre con nosotros, así que somos cubiertos por Cristo, Él puede ser visto
en nosotros. Hoy el cordero de Dios nos cubre con su sangre, tornándose así
vestidos de salvación para todos aquellos que creyendo en Él, lo confiesen como
Señor y salvador personal. Mas hay una segunda ropa, los vestidos de justicia,
también llamadas como vestidos nupciales. La novia está vestida de lino finísimo
resplandeciente: el propio texto explica que el tejido simboliza los actos de justicia
de los santos. Actos de justicia son obras practicamos delante de Dios, esa ropa nos
cualifica para participar de la fiesta de las bodas.

En una de sus parábolas Jesús habla al respecto de un hombre que no tenía las
ropas nupciales.

Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis.
Y saliendo los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos
y buenos; y las bodas fueron llenas de convidados.
Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí a un hombre que no estaba vestido de
boda.
Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin estar vestido de boda? Mas él enmudeció.
Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de
afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.
Porque muchos son llamados, y pocos escogidos (Mat.22:9-14).

Todos aquellos que respondieron a la invitación en las encrucijadas son salvos, nadie
puede atender a la invitación y no ser salvo, así el hombre sin ropa nupcial es salvo,
268

pero no tenía ropa nupcial. Ella es tipificada por el lino fino y resplandeciente que
son los actos de justicia y también por las ropas bordadas del Salmo 45:

Sal 45:13 Toda gloriosa es la hija del rey en su morada;


De brocado de oro es su vestido.
Sal 45:14 Con vestidos bordados será llevada al rey;
Vírgenes irán en pos de ella,
Compañeras suyas serán traídas a ti.

Aquel hombre fue salvo porque atendió la invitación de salvación y vino para las
bodas (Fp.3:9; 1Co.1:30; Rm.3:26), entre tanto no puede participar del disfrute de la
cena de las bodas, una vez que no manifestó la justicia de Cristo en su vivir diario, el
vestido nupcial hecha de nuestros actos de justicia es nuestra cualificación para el
reino o la cena de las bodas. Todos nosotros debemos tener dos vestidos: la
salvación que es el propio Cristo como nuestra justicia (Rom.13:14, Gl.3:27), y los
vestidos nupciales que son nuestros actos de justicia (Is.61:10).

En aquella época, las ropas nupciales de los convidados eran provistas algunas
veces por el propio dueño de la fiesta. Dios preparó para nosotros vestidos de
justicia, pero aquel hombre confió en su propia justicia. Muchos piensan que por
estar debajo de la gracia, el Señor no será rigoroso con ellos, pero es un engaño,
aquellos que están en la gracia serán más severamente cobrados. No podemos ser
descuidados.

Sabemos que nos tenemos más problemas con respecto a nuestra salvación, pero y
¿Con respecto al tribunal de Cristo? Algunos serán descalificados para entrar en la
cena de las bodas que deberá durar todo el milenio. En esta parábola los convidados
y la novia son la misma cosa; por eso cuando el Señor entró y encontró alguien que
no traía ropas nupciales, le preguntó: “amigo, ¿cómo entraste aquí sin vestido
nupcial?” él enmudeció, entonces el rey ordenó que él fuese lanzado afuera
(Mat.22:11-14).

El hombre sin la ropa nupcial es lanzado fuera, eso no significa que él fue para el
infierno, pero que recibió la disciplina dispensacional del milenio. Durante el milenio,
los creyentes vencedores disfrutarán de la gloria del reino (Cl.3:4), mientras los
derrotados podrán sufrir disciplina dejando de participar de la gloria del reino. En el
juicio del tribunal de Cristo, algunos recibirán una premiación mayor que otros,
algunos serán disciplinados y otros no serán una cosa ni otra.

La mayoría de los cristianos dicen que ese creyente sin la ropa de salvación no es
salvo, la razón de eso es no admitir que un creyente pueda ser disciplinado y punido
en las tinieblas exteriores. No piense en las tinieblas de acuerdo a nuestro concepto
natural, la Biblia dice; por ejemplo que nuestro mundo está en tiniebla, tinieblas es
un lugar de exclusión y vergüenza. No debemos iludirnos, cuando Dios es lleno
gracia, Él verdaderamente es; sin embargo cuando es severo, realmente es severo.
269

El Señor fue muy enfático cuando dijo que muchos son llamados, mas pocos
escogidos. Ser llamado es recibir la salvación (Rom.1:7; 1Cor.1:2, Ef.4:1), mientras ser
escogido es ser calificado para recibir la recompensa. Muchos son llamados, pero
pocos son los vencedores.

En algún momento la Biblia asocia lloro y crujir de dientes al infierno, eso aquí
significa arrepentimiento profundo, en el infierno no habrá arrepentimiento, sino
solo odio y blasfemias contra Dios. En el infierno no habrá personas arrepentidas,
solamente el Espíritu Santo nos puede llevar a un arrepentimiento genuino. El salmo
45 describe los dos trajes nupciales de la novia:

Sal 45:13 Toda gloriosa es la hija del rey en su morada;


De brocado de oro es su vestido.
Sal 45:14 Con vestidos bordados será llevada al rey;
Vírgenes irán en pos de ella,
Compañeras suyas serán traídas a ti.

El primer traje es de oro, o sea, la salvación. ¿Por qué es de oro? Porque el oro
simboliza la naturaleza divina. Cuando tú recibes a Jesús, recibió también la vida
eterna, la propia vida de Dios. El segundo traje nupcial bordado con lino finísimo es
aquella con que la novia se presenta delante del rey. Nuestros actos de justicia son
bordados por el Espíritu Santo en nuestra ropa nupcial; sin ella el Espíritu Santo
jamás nos conducirá a la presencia del rey, donde recibiremos la premiación. En
Apocalipsis, también encontramos la descripción de estos vestidos:

Ap. 3:4 Pero tienes unas pocas personas en Sardis que no han manchado sus vestiduras; y
andarán conmigo en vestiduras blancas, porque son dignas.
Ap. 3:5 El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro
de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre, y delante de sus ángeles.

Observe bien: para ser salvo no es necesario ser digno – a la verdad la salvación es
para el pecador más indigno; mientras para andar del lado del Señor es necesario
tener dignidad, ella es alcanzada a través de santificación, o sea: de los actos de
justicia.

Amado lector no juegue con el pecado, no deje ningún pecado oculto o no


confesado en su vida, ande en santidad, temor, fidelidad delante de Dios; si hubiere
resentimiento y molestias de alguien, libere perdón para quien los causó. Si existen
prácticas erradas, abandónelas, resista al pecado hasta la sangre si fuese necesario.
No sirve en nada esconderlo ahora, pues en aquel día, delante del tribunal de Cristo
todo será revelado. Si usted confiesa su pecado hoy, en aquel día no habrá ningún
recuerdo de ellos; recuérdese de esto: pecado confesado es pecado perdonado y
una vez perdonado, nada más le es imputado.

Oiga lo que el Espíritu está diciendo a la iglesia:


270

Ap. 3:18 Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas
rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez;
y unge tus ojos con colirio, para que veas.

Esa fue una palabra para la iglesia de Laodicea; o sea, para los salvos que había allí.
Estaban necesitando comprar el traje nupcial, ellos ya tenían los vestidos de
salvación que les fueron dados graciosamente. La salvación no tiene un precio;
entre tanto, los vestidos de justicia los tienen. En Mateo leemos que muchos son los
llamados, pocos escogidos (Mat.22:14). Eso significa que muchos son llamados para
salvación, pero pocos de entre los llamados son aprobados delante de Dios, los
escogidos serán llamados por el cordero para pelear a su lado contra el anticristo y
el falso profeta y los vencerán. Estos que pelearán al lado del cordero son llamados,
los escogidos y los fieles (Ap.17:14).

Imagine tres manzanas en una canasta, una de ellas es de plástico, las otras dos son
naturales: una está perfecta, la otra inmadura, ¿Cuál de ellos escogerías? La
manzana saludable naturalmente. Esas manzanas tipifican tres tipos de personas: la
manzana saludable representa el creyente espiritual; la manzana inmadura
representa al creyente carnal, y la manzana de plástico al impío. Si tú eres una
manzana de plástico, representa una manzana de falsa y su destino será el infierno;
si usted es una manzana inmadura es una creyente carnal y derrotado. Hay dos tipos
de creyentes: el carnal y el espiritual, ambos son salvos. Vea sin embargo lo que
acontece: el creyente espiritual es escogido, mientras el carnal es salvo “como que a
través de fuego” como dice Pablo (1Co.3:15).

Mi anhelo grande es estar entre los escogidos, yo quiero tener mis obras aceptadas
por Dios, yo no pretendo estar entre aquellos que serán salvos como que por el
fuego, me importa agradar a Dios, mismo que eso implique en ser criticado o
rechazado por los otros. Al final yo quiero recibir un elogio que está en la boca del
Padre, puede parecer presunción quiero ser elogiado por Dios. La suprema
aspiración es esta: que en aquel día al aproximarme del trono, vea mi Señor
sonriéndome y diciendo: “siervo bueno y fiel”.
271

El Armagedón
Después que toda la iglesia fuere arrebatada para estar con el Señor en las nubes,
Satanás, el anticristo y el falso profeta juntarán las naciones para pelear contra
Cristo y los vencedores. El cap.17:14 afirma que solamente los elegidos o escogidos
pelearán; probablemente el argumento será de que se trata de una invasión
alienígena. Habrá un tiempo en que el hombre va declarar guerra contra Dios, la
guerra del Armagedón es necesaria porque Dios dará la oportunidad de limpiar la
tierra antes del milenio. Sabemos que Satanás, el anticristo y el falso profeta todavía
estarán actuando, por eso el Señor vendrá para vencerlos.

La vuelta de Jesús descrita en Apocalipsis 19 es una de las descripciones más


dramáticas y hipotéticas de toda la palabra del Señor, tremendo evento será ese. Su
vuelta será en medio de una gran batalla – la batalla del Armagedón. La Biblia
describe la batalla del Armagedón en otros textos, pero en ese texto en particular,
Jesús es el personaje principal del evento, la narración describe la manera como Él
descenderá en su gloria montado en un caballo blanco; esa es una descripción muy
fuerte, Él viene como un rey conquistador, un héroe. La Biblia dice que cuando Elías
subió al cielo, aparecieron carros y caballos de fuego. Yo creo que aquí se trata de
un caballo de fuego también.

En aquella época cuando los generales romanos conquistaban una tierra, ellos
capturaban a sus reyes y los llevaban como prisioneros. Dice la historia que
272

entraban en Roma en un cortejo triunfal, la entrada del general victorioso era


esplendorosa, él entraba montado en un caballo; así también será la vuelta de
Jesús: una entrada triunfal, montado en su caballo blanco, viene a proclamar su
victoria. Jesús vendrá montado en un caballo blanco para contrastar con su primera
venida, cuando entró en Jerusalén montado en un jumento.

No es una escena elegante un buen adulto montado en un jumento, los pies casi
que topan el suelo, Él necesita quedar con las piernas media abierta, no se puede
llamar aquello de galope, es algo desubicado un hombre adulto, alto, montado en
un jumento. Es una escena patética, fue así la primera vez venida del Señor, Él no
tenía la espada desenvainada en la mano y no llegó como un general, vino como un
siervo humilde y sirvió humildemente. Vino para salvar como cordero de Dios, dice
que podía pedir legiones de ángeles para librarlo de aquella hora, pero no lo hizo.

Por otro lado, en la segunda vez cuando Él venga, no será más montado en un
jumento, vendrá montado en un caballo blanco como los generales vencedores. No
será el siervo; por el contrario, el rey de reyes y el Señor de señores. Con Él vendrán
mislares de ángeles y los santos también montados en caballos blancos.

1. El guerrero
Ap. 19:11 Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba
se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea.

Ya vimos un caballero montado en un caballo blanco en Ap.6:2 que se trata del


evangelio. Aquí sin embargo, es el propio Señor Jesús, el blanco indica aquello lo
que es puro y aprobado. Mientras lucha contra el enemigo, el Señor muestra su
pureza y su justicia montado en un caballo blanco, Él es conocido por el nombre de
“fiel y verdadero” aquél que juzga y pelea con justicia. A la verdad Jesús jamás falló
ni fallará; por tanto Él ha de cumplir cada una de sus promesas, el Señor es fiel para
con los que esperan en Él. Por ser fiel necesita, necesita ser el vengador y venir para
destruir los enemigos.

Ap. 19:12b Sus ojos eran como llama de fuego.

Eso significa que donde el Señor mira no puede haber tinieblas, todo va estar
manifiesto ante los ojos de Aquél que todo ve. ¿Sabes por qué va ser manifestado?
Porque sus ojos son como llamas de fuego, el Señor no puede contemplar las
tinieblas, porque para donde Él mira todo se torna luz; y cuando el Señor mire para
dentro del hombre, todo será manifestado. Los ojos de Él son penetrables y
escudriña todas las cosas.

Ap. 19:11 Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se
llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea.
273

La palabra del Señor dice que todo juicio fue entregado en las manos de Él, Jesús va
juzgar vivos y muertos, Él no juzga apenas, también ejecuta el juicio. Posee poder de
juzgar y también de ejecutar la sentencia, y eso hará con justicia, una vez que ese
también es uno de sus nombres. Su pelea es el resultado de su juicio justo.

Ap. 19:12 Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y
tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo.

Diademas representan gloria y victoria, Cristo fue coronado y glorificado con


muchos tipos de gloria.

Ap. 19:12 Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y
tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo.

En aquellos días, cuando un atleta vencía una competencia, recibía una diadema
representando su victoria. Los atletas vencedores reciben una diadema, pero Jesús
no solo tiene uno, Él tiene muchos porque fue coronado con muchas glorias; Él fue
coronado con honra, verdad, poder y majestad. Recibió todas las glorias por eso
vendrá con muchas diademas.

Ap. 19:12 Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y
tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo.

¿Qué significa tener un nombre desconocido? En la Biblia, conocer el nombre es


conocer a la persona; cuando Dios revela su propio nombre, Él está dándose a
conocer. Mas aquí está diciendo que cuando Él vuelva, vendrá con un nuevo
nombre escrito en las diademas, y nadie conoce ese nombre, sino Él.

¿Cuánto conocemos nosotros del Señor Jesús? A la verdad, a pesar de haber más de
cien nombres del Señor en la Biblia, nosotros necesitamos reconocer que
conocemos apenas algunos de ellos, ¿Pues cuantos de esos nombres hemos
experimentado en nuestras vidas? Necesitamos conocerlo todavía más, ese
conocimiento es muy importantísimo. Conocer Jesús es lo mismo que conocer la
vida eterna, pues esa vida está en Él, y la vida eterna es esta, dijo Juan conocer el
Señor Dios como el único Dios verdadero y a Jesucristo a quien Él envió (Jn.17:3).
Entonces la vida eterna es conocer a Cristo. Es por eso que Él tiene un nombre que
nadie conoce, el conocimiento de Él es eterno. Juan dijo que si fuese contar todo lo
que Jesús hizo, ni el mundo entero cabrían los libros que serían escritos (Jn.12:25).

Ap. 19:13a Estaba vestido de una ropa teñida en sangre.

Los vestidos de Jesús están teñidos de sangre, símbolo de alianza entre Dios y el
hombre, Jesús está volviendo para tomar pose definitiva de aquellos que Él compró
con su propia sangre. En la cruz, la creación también fue redimida y restaurada por
274

el Creador. Las ropas teñidas de sangre son el comprobante de que Él compró y


pagó el precio de nuestra redención eterna.

Ap. 19:13b y su nombre es: EL VERBO DE DIOS.

En el versículo anterior, Juan afirma: Jesús tiene un nombre que nadie conoce, en
seguida; sin embargo, uno de los nombres es revelado: verbo de Dios. Verbo es
palabra, la palabra es la expresión y la explicación de algo. Siendo la palabra de Dios;
Jesús es la definición, la expresión y la explicación de algo. Cristo es Dios revelado.

Heb. 1:3 el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y


quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la
purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la
Majestad en las alturas.

Si tú quieres parecer misterioso quede en silencio, quien queda en silencio es


siempre tenido como misterioso. Así sucedía con Dios mientras no había hablado, Él
era misterioso; en el día en que comenzó a hablar a los padres por los profetas, Él
comenzó a mostrarse. Mas en el día en que Jesús vino, Él se mostró
completamente, cuando Jesús vuelva, nosotros veremos la completa expresión y
definición de Dios en Él.

Ap. 19:14 Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en
caballos blancos.

Ese lino finísimo blanco y puro es una referencia a los vencedores que son los
electos y fieles mencionados en el cap.17:14 y 19:8.

En un primer momento, el Señor arrebata la iglesia para las nubes, donde acontece
el juicio de los salvos para la entrega de los galardones. Después el Señor
descenderá a la tierra con los santos vencedores para pelear en la batalla del
Armagedón, aquí de acuerdo con Mateo 24:30, toda la tierra contemplará la señal
de la venida de Jesús. Será motivo suficiente para el anticristo y el falso profeta
reunieren las naciones para defenderse de una invasión extraterrestre, en seguida
marcharán contra la nación de Israel porque el Señor vendrá en las nubes sobre
aquel país.

El proceso de la vuelta del Señor no será un evento rápido, porque vendrá en las
nubes y cuando estuviere allí con sus santos, el anticristo reunirá un número de
ejércitos extraordinario. Eso llevará algún tiempo, algunos piensan que Él viene a
buscar a la iglesia; la verdad que Él viene con la iglesia. Porque ella va encontrarse
con Él en las nubes y vamos a quedar en las nubes por algún tiempo con Él cuando
haya el juicio. Cuando el Señor Jesús venga a pisar realmente en la tierra, eso no
será un evento rápido, vendrá acompañado de aquellos en los versos 8 y 9, están
275

vestidos de lino finísimo. Sabemos que solamente participarán de la fiesta aquellos


que están vestidos de lino finísimo, blanco y puro.

En los versos 8 y 9, el lino finísimo es ropa de creyente, entonces en el verso 14, los
que usan ese mismo lino deben también ser los creyentes, de esa forma los ejércitos
que vendrán con el Señor son los santos vencedores, ellos es que vendrán con
Jesús, son ellos que están vestidos de lino finísimo y que vendrán para guerrear al
lado del Señor contra el anticristo, el falso profeta y el dragón.

El lino finísimo, los actos de justicia no son apenas vestidos nupciales, son ropas de
guerra, hoy también no existe ninguna batalla espiritual sin ese lino finísimo. Ap.
19:15 De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá
con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.

En los evangelios Jesús dijo: Jn. 12:48 El que me rechaza, y no recibe mis palabras, tiene
quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.

Ese será el juicio del Señor sobre los rebeldes en aquellos días.

El Señor Jesús no tendrá ninguna necesidad de arma natural para combatir sus
enemigos, la palabra que sale de sus labios es una espada afilada, hiriendo las
naciones. Cuando Jesús vino la primera vez, los hombres esperaban que Él estuviese
viniendo con cetro de fierro para subyugar los enemigos del pueblo de Israel y para
establecer su trono en Jerusalén. Entre tanto, Él vino como un cordero manso y
humilde. Esta vez Él está viniendo no más como cordero, sino como un león, ahora
está revelando su verdadero nombre para que todos sepan que verdaderamente, Él
es: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.

En el verso 15, el Señor vendrá para regir las naciones con el cetro de fierro, símbolo
de poder y autoridad, las naciones todavía tendrán una naturaleza rebelde. La
prueba es que al final del milenio, seguirán al diablo nuevamente; por eso Él tendrá
que regirlas con cetro de fierro, que indica autoridad y poder absoluto.

Ap. 19:16 Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y
SEÑOR DE SEÑORES.

El manto nos habla de dignidad y nobleza, mientas el muslo nos habla de la parte
más fuerte del cuerpo, su señorío y realeza están basados en su dignidad y poder.

2. El ejército – v.14

Algunos creen que los ejércitos en ese versículo apuntan para los ángeles, la verdad
se refiere a los creyentes escogidos en 17:4, que vendrán para pelear y para asumir
el reino con Cristo. Ni la tierra ni tampoco el reino fueron dados a los ángeles; por
tanto ellos no tiene autoridad sobre Satanás, mientras que a los santos fueron
276

dados el reino y la tierra y fueron ellos que recibieron autoridad para pisar el diablo
debajo de sus pies; eso se cumplirá completamente en aquel día.

Ese ejército viene vestido de lino finísimo, es la misma descripción de los creyentes
vencedores en el verso 8, esos ejércitos son; por tanto los creyentes salvos
vencedores. Así la ropa nupcial también es una ropa de combate. El lino finísimo
cualifica para la guerra.

3. Los enemigos – v.19

Un ángel se pondrá de pie sobre el sol y clamará con gran voz convocando todas las
aves que vuelan por medio de los cielos, diciendo:

Y vi a un ángel que estaba en pie en el sol, y clamó a gran voz, diciendo a todas las aves
que vuelan en medio del cielo: Venid, y congregaos a la gran cena de Dios,
Para que comáis carnes de reyes y de capitanes, y carnes de fuertes, carnes de caballos y
de sus jinetes, y carnes de todos, libres y esclavos, pequeños y grandes.
Y vi a la bestia, a los reyes de la tierra y a sus ejércitos, reunidos para guerrear contra el que
montaba el caballo, y contra su ejército (Ap.19:17-19).

Los enemigos son los reyes de la tierra con sus ejércitos, la bestia y el falso profeta,
los reyes son principalmente los diez que sigue al anticristo (17:12-14). Los ejércitos
incluyen por los manos 200 millones de 9:16 y 16:12, pero ciertamente serán mucho
más.

El Armagedón es nada más que una declaración de guerra del anticristo, del falso
profeta y del dragón contra Dios. El diablo usará como pretexto para esa
declaración de guerra, la amenaza de una invasión alienígena, el escenario mundial
ya está preparado para eso. Los estudios cinematográficos no se cansan de
alimentar nuestra curiosidad sobre el asunto, la propia NASA admite públicamente
que sus científicos están desenvolviendo proyectos con el objetivo de establecer
contacto con habitantes de otros planetas; por tanto cuando el Señor Jesús
estuviere volviendo, el mundo entero seducido por Satanás pensarán que se trata
de una invasión extraterrestre y en ese tiempo serán movilizados más de 200
millones de soldados (Ap.9:16), que constituirán la mayor y más extraordinaria tropa
de caballería de toda la historia.

Esa espectacular tropa de caballería marchará para Israel y se acampará en un lugar


llamado valle de Josafat o valle de Meguido – de donde viene la palabra
Armagedón, nada de eso será una sorpresa porque ya está profetizado.

Proclamad esto entre las naciones, proclamad guerra, despertad a los valientes,
acérquense, vengan todos los hombres de guerra.
Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces; diga el débil: Fuerte soy.
Juntaos y venid, naciones todas de alrededor, y congregaos; haz venir allí, oh Jehová, a
tus fuertes.
277

Despiértense las naciones, y suban al valle de Josafat; porque allí me sentaré para juzgar a
todas las naciones de alrededor.
Echad la hoz, porque la mies está ya madura. Venid, descended, porque el lagar está
lleno, rebosan las cubas; porque mucha es la maldad de ellos.
Muchos pueblos en el valle de la decisión; porque cercano está el día de Jehová en el valle
de la decisión.
El sol y la luna se oscurecerán, y las estrellas retraerán su resplandor.
Y Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén, y temblarán los cielos y la tierra;
pero Jehová será la esperanza de su pueblo, y la fortaleza de los hijos de Israel (Jl.3:9-16).

La Biblia dice: Zac 14:2 Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir contra
Jerusalén.

Apocalipsis narra que es el diablo que va juntar esas naciones; entre tanto, Zacarías
afirma que es el Señor. Eso revela que es la soberanía de Dios que está comandando
las acciones del anticristo.

He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti serán repartidos tus despojos.


Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir contra Jerusalén; y la ciudad será
tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las mujeres; y la mitad de la ciudad irá
en cautiverio, mas el resto del pueblo no será cortado de la ciudad.
Después saldrá Jehová y peleará con aquellas naciones, como peleó en el día de la batalla.
Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos, que está en frente de
Jerusalén al oriente; y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia el oriente y
hacia el occidente, haciendo un valle muy grande; y la mitad del monte se apartará
hacia el norte, y la otra mitad hacia el sur (Zac.14:1-4, 6, 7, 9).
El está avisando que participará personalmente de esta gran batalla de Armagedón,
Él marcó el día y el local en que va presentarse para este confronto: será en el día
del Señor, en el monte de los olivos, exactamente en el mismo lugar de donde subió
al cielo después de la resurrección (Is.63:1-6, 14:4, 12, Is.2:2-3, Zac.8:20-23).

Dios anticipa lo que sucederá a Israel.

Zac. 13:8 Y acontecerá en toda la tierra, dice Jehová, que las dos terceras partes serán
cortadas en ella, y se perderán; mas la tercera quedará en ella.
Zac. 13:9 Y meteré en el fuego a la tercera parte, y los fundiré como se funde la plata, y los
probaré como se prueba el oro. El invocará mi nombre, y yo le oiré, y diré: Pueblo mío; y él
dirá: Jehová es mi Dios.

Y les hace esta promesa: “Jerusalén será santa, extraños no pasarán más por ella”
(Jl.3:17). El poderoso ejército del anticristo de 200 millones de soldados será
aplastado por el Señor, sus cuerpos quedarán esparcidos por el campo de batalla y
servirán de comida a los buitres. El anticristo y el falso profeta serán lanzados en el
lago de fuego y azufre, después de esa batalla, el Señor establecerá su trono en
Jerusalén, de donde reinará con los vencedores sobre toda la tierra por mil años.

Los reyes de la tierra pelearán contra el Señor Jesús, si eso no estuviese escrito en la
Biblia, yo tendría dificultad de creer que algún día la humanidad tendría la audacia
278

de luchar contra Dios, pero eso va suceder. Llegará el día en que la humanidad se
revelará en un nivel tan terrible contra Dios que cogerá sus cañones y sus misiles a
fin de atacarlo; ese es el ápice de la rebeldía y de la enfermedad humana.

Cuando el hombre pecó en el jardín del Edén, él lo hizo engañado, cuando el Señor
mandó el diluvio, el hombre se tornó corrompido, pero llegará la época en que la
obediencia y la rebeldía alcanzarán niveles tan altos que el hombre va luchar contra
Dios. De ese modo habrá dos tipos de personas en la tierra en el retorno de Jesús,
un grupo será compuesto de aquellos que lo esperan y el otro de los quieren
expulsarlo.

Todavía, la Biblia dice que Él pisará en el lagar de la ira del Todopoderoso y los
ejércitos que se reunirán en aquel día serán muertos. El Señor vendrá montado en
su caballo blanco y vendrá para tomar pose de la tierra, será un día sangriento
porque Él vendrá exactamente en medio de una batalla épica.

Todo el mundo está gobernado por Satanás, o sea los reinos de este mundo
pertenecen al diablo, no piense que él simplemente entregará. El enemigo peleará
contra el Señor de todas las formas.

Se que su sueño es ir para el cielo, pero a la verdad nosotros vendremos para la


tierra junto con Él, hay hermanos que sueñan ir para el cielo y cuando afirmo que no
será así, y por el contrario, es Jesús que viene para la tierra, ellos quedan con un
semblante decepcionado.

En la vuelta de Jesús, todo ojo lo verá, pero ni todos los ojos que lo verán quedarán
admirados, algunos van a apuntar para Él sus bazucas, sus cañones, sus armas, sus
misiles intentando destruirlo. A la verdad las naciones se lamentarán (Mat.24:30,
Ap.1:7).

Ap. 19:19 Y vi a la bestia, a los reyes de la tierra y a sus ejércitos, reunidos para guerrear
contra el que montaba el caballo, y contra su ejército.

Jesús y la iglesia están montados en caballos blancos, el ejército se refiere a la


iglesia. Los reyes de la tierra con sus ejércitos congregados amontonarán todo su
arsenal para pelear contra Jesús. Por tanto, la vuelta del Señor va ser un combate.

Si usted todavía no entendió lo que es guerra espiritual, va entender en aquel día,


será una gran lucha, el texto menciona todavía a partir del v.20 y 21:

Ap. 19:20 Y la bestia fue apresada, y con ella el falso profeta que había hecho delante de
ella las señales con las cuales había engañado a los que recibieron la marca de la bestia,
y habían adorado su imagen. Estos dos fueron lanzados vivos dentro de un lago de
fuego que arde con azufre.
Ap. 19:21 Y los demás fueron muertos con la espada que salía de la boca del que montaba el
caballo, y todas las aves se saciaron de las carnes de ellos.
279

La espada que sale de la boca del Señor es la palabra, ella puede dar vida o puede
matar, en ese día ella va matar y el Señor va aprisionar los enemigos que serán
enviados para el lago de fuego. Satanás será aprisionado por mil años, mientras que
el falso profeta y el anticristo serán lanzados vivos en el lago de fuego y azufre.

Ap. 20:1 Vi a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo, y una gran cadena
en la mano.
Ap. 20:2 Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás, y lo ató por
mil años;
Ap. 20:3 y lo arrojó al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase
más a las naciones, hasta que fuesen cumplidos mil años; y después de esto debe ser
desatado por un poco de tiempo.

La Biblia dice que Jesús vendrá para reinar con un cetro de fierro, hoy Jesús
apacienta a su iglesia con un cayado de pastor; pero las naciones, Él regirá con cetro
de fierro. Con relación a su iglesia, Él la apacentará basado en su amor y cuidado;
mientras que a las naciones las regirá con poder y autoridad.

En Romanos 8, leemos que la creación gime aguardando la manifestación de los


hijos de Dios, ella acontecerá en la vuelta del Señor cuando los hijos de Dios serán
manifestados y glorificados. La tierra será restaurada, todavía las naciones no serán
regeneradas. El diablo estará preso, por eso no habrá seducción maligna, pero
todavía existirá el pecado, de ahí la necesidad del Señor tener que reinar con cetro
de fierro.
280

El milenio
El reino milenar fue exactamente profetizado en la palabra de Dios, el salmista
anuncia proféticamente el reinado de Mesías (Sal.2:6; 72:1). El Señor Jesús recibirá
las naciones por herencia y las regirá con cetro de fierro.

Sal.2:6 Pero yo he puesto mi rey


Sobre Sion, mi santo monte.
Sal.2:8 Pídeme, y te daré por herencia las naciones,
Y como posesión tuya los confines de la tierra.
Sal. 2:9 Los quebrantarás con vara de hierro;
Como vasija de alfarero los desmenuzarás.

El profeta Isaías profetizó:

Isa 2:2 Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa
de Jehová como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él
todas las naciones.

En aquellos días, las naciones subirán al monte del Señor, el monte Sion en
Jerusalén para aprender la ley y el camino del Señor. Durante el milenio, las
naciones vivirán en paz y sus armas de guerra serán transformadas en arados, la
tierra producirá frutos en abundancia y no habrá hambre.

Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de


Jehová como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él
todas las naciones.
Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del
Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de
Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.
Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en
rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se
adiestrarán más para la guerra (Is.2:2-4).
281

Guerra será una cosa de museo, todas las naciones subirán a Jerusalén para adorar
al Señor. “todos los que restaren de todas las naciones que vinieren contra
Jerusalén subirán de año en año para adorar al rey, el Señor de los ejércitos y para
celebrar la fiesta de los tabernáculos”. Todavía las naciones no serán regeneradas,
porque todavía habrá desobediencia y pecado, con todo el Señor estará reinando
con vara de hierro. “Si alguna de las familias de la tierra no suba a Jerusalén para
adorar al rey, el Señor de los ejércitos, no vendrá sobe ella la lluvia… vendrá la plaga
con que el Señor herirá las naciones que no suban a celebrar la fiesta de los
tabernáculos” (Zac.14:16-21).

En el milenio, el hombre será extremamente longevo. Isa 65:20 No habrá más allí niño
que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de cien
años, y el pecador de cien años será maldito.

El reino de Jesús será de justicia y paz, la tierra será liberta de la maldición que la
alcanzó cuando el hombre pecó. Sabemos que después de la caída, la tierra pasó a
producir cardos y espinos que simbolizan plagas como virus y bacterias; sin
embargo en el milenio esas cosas dejarán de existir.

La propia creación será redimida del cautiverio de la corrupción para la liberta de la


gloria de los hijos de Dios (Rom.8:21b). En aquellos días, los animales carnívoros
perderán su ferocidad.

Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro y el león
y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará.
La vaca y la osa pacerán, sus crías se echarán juntas; y el león como el buey comerá paja.
Y el niño de pecho jugará sobre la cueva del áspid, y el recién destetado extenderá su mano
sobre la caverna de la víbora.
No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la tierra será llena del
conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar (Is.11:6-9).

Isa 65:25a El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá paja como el
buey; y el polvo será el alimento de la serpiente.

Isa 35:6 Entonces el cojo saltará como un ciervo, y cantará la lengua del mudo; porque
aguas serán cavadas en el desierto, y torrentes en la soledad.
Isa 35:7 El lugar seco se convertirá en estanque, y el sequedal en manaderos de aguas; en
la morada de chacales, en su guarida, será lugar de cañas y juncos.

Además de la restauración de los animales, la propia tierra será restaurada, no habrá


desiertos ni lugares áridos que no puedan ser habitados, ríos brotarán del desierto,
no habrá lugares sin vida en la tierra.

La palabra de Dios declara enfáticamente que esa nueva orden mundial, de justicia,
paz, prosperidad tan ansiosamente aguardada por las naciones, solamente será
establecido cuando el Señor Jesucristo estuviere reinando en la tierra.
282

Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni
argüirá por lo que oigan sus oídos;
Sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra;
y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío.
Y será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad ceñidor de su cintura (Is.11:3-4).

Toda la tierra se llenará del conocimiento del Señor como las aguas cubren la mar
(Is.11:10). Acerca de eso nos fue revelado por los profetas Isaías y Zacarías:

Isa 4:2 En aquel tiempo el renuevo de Jehová será para hermosura y gloria, y el fruto de la
tierra para grandeza y honra, a los sobrevivientes de Israel.

Isa 16:4 Moren contigo mis desterrados, oh Moab; sé para ellos escondedero de la
presencia del devastador; porque el atormentador fenecerá, el devastador tendrá fin,
el pisoteador será consumido de sobre la tierra.
Isa 16:5 Y se dispondrá el trono en misericordia; y sobre él se sentará firmemente, en el
tabernáculo de David, quien juzgue y busque el juicio, y apresure la justicia.

Isa 32:1 He aquí que para justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio.
Isa 32:2 Y será aquel varón como escondedero contra el viento, y como refugio contra el
turbión; como arroyos de aguas en tierra de sequedad, como sombra de gran peñasco en
tierra calurosa.

Isa 40:9 Súbete sobre un monte alto, anunciadora de Sion; levanta fuertemente tu voz,
anunciadora de Jerusalén; levántala, no temas; di a las ciudades de Judá: ¡Ved aquí al Dios
vuestro!

Isa 40:10 He aquí que Jehová el Señor vendrá con poder, y su brazo señoreará; he aquí que
su recompensa viene con él, y su paga delante de su rostro.
Isa 40:11 Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno
los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas.

Isa 61:4 Reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los asolamientos primeros, y
restaurarán las ciudades arruinadas, los escombros de muchas generaciones.

Isa 65:21 Edificarán casas, y morarán en ellas; plantarán viñas, y comerán el fruto de ellas.

Zac 8:20 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Aún vendrán pueblos, y habitantes de
muchas ciudades;
Zac 8:21 y vendrán los habitantes de una ciudad a otra, y dirán: Vamos a implorar el favor
de Jehová, y a buscar a Jehová de los ejércitos. Yo también iré.

Zac 8:23 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: En aquellos días acontecerá que diez
hombres de las naciones de toda lengua tomarán del manto a un judío, diciendo: Iremos
con vosotros, porque hemos oído que Dios está con vosotros.

Es impresionante, no habrá muchos judíos en el milenio, los que fueren salvos serán
apenas los remanentes, no serán más que 144 mil; entonces las personas de las
naciones cuando encontraren un judío pedirán que les enseñe la palabra del Dios.
283

Los judíos serán sacerdotes de Dios durante el milenio, mientras que los vencedores
de la iglesia reinarán con Cristo como co-reyes.

Zac 14:16 Y todos los que sobrevivieren de las naciones que vinieron contra Jerusalén,
subirán de año en año para adorar al Rey, a Jehová de los ejércitos, y a celebrar la fiesta de
los tabernáculos.

El milenio será realmente maravilloso, cosas extraordinarias acontecerán. Allí no


habrá enfermos ni maldiciones como pobreza, hambre o guerra, los animales
salvajes serán mudados, será prácticamente otro mundo; pero todavía será la vieja
tierra. Los nuevos cielos y la nueva tierra solamente vendrán en el final del milenio
(Sal.72:1-17; Is.12:1-5; Is.16:5; Is.32:1-2; Is.40:9-11).

1. La prisión de Satanás – 20.3


Vi a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo, y una gran cadena en la
mano.
Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás, y lo ató por mil
años;
Y lo arrojó al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase más
a las naciones, hasta que fuesen cumplidos mil años; y después de esto debe ser
desatado por un poco de tiempo (Ap.20:1-3).

Después de la guerra del Armagedón, el Señor establecerá su trono en Jerusalén


como también juntará las naciones para juzgarlas como se lee en Mateo 25:31-46.
Aquellos que fueren condenados serán lanzados en el infierno y los que fueren
considerados justos participarán del reino del príncipe de la paz. Durante el milenio,
cuando el Señor Jesús establezca su reino sobre la tierra, Satanás estará en la
prisión en un lugar conocido como abismo de donde saldrá por poco tiempo para
sublevar las naciones contra Dios.

En el milenio, las naciones serán restauradas y bendecidas, pero no regeneradas.


Los hombres continuarán pecando, todavía no habrá tanto pecado como hoy
porque Satanás estará preso, muchos de ellos se sujetarán al Señor, no por voluntad
propia, sino porque Él estará reinando con vara de fierro.

Al final del milenio, Satanás será suelto porque las naciones deben ser probadas.
Siendo el Señor noble y bondadoso no desea gobernar sobre nosotros con vara de
fierro, su voluntad es que espontáneamente nos sometamos a su señorío. Durante
los mil años es necesario que Dios gobierne con vara de fierro, o sea, mismo
contradiciendo la voluntad de los hombres, porque Él desea mostrar el reino de paz
y justicia. El milenio será un tiempo en que el hombre podrá conocer el corazón
manso y humilde de nuestro Señor. En los milenios pasados, el hombre ha conocido
lo que es el gobierno de Satanás, ahora él debe conocer el gobierno del príncipe de
la paz.
284

Así como fue en el Edén, el hombre necesita tener opción, dos árboles fueron
colocados en el jardín para que él pudiese escoger, el mismo acontecerá en el final
del milenio. El Señor permitirá que Satanás salga y dejará que las naciones opten,
observe que esas naciones ya habrán experimentado mil años de paz, abundancia,
justicia y prosperidad; sin embargo, según la Biblia, todavía así muchos escogerán a
Satanás.

Ese será el ápice de la rebelión, cuando la humanidad tendrá la oportunidad de


apuntar sus armas contra el propio Dios y decir: después de conocer su reino de paz
y prosperidad, no queremos ser gobernados por ti, preferimos administrar a
nosotros mismos. En ese día vendrá el fin. Los ejércitos de las naciones serán
destruidos y habrá nuevos cielos y nueva tierra.

2. Los tres pueblos del milenio.

Durante el milenio existirán tres clases de personas en la tierra: los judíos, la iglesia y
las naciones, que son llamados de ovejas en Mateo 25:31-46. Esos tres pueblos se
refieren a tres niveles de bendiciones en el milenio.

El primer grupo son los judíos, ellos serán restaurados. Conforme la Biblia asumirán
la función de sacerdotes para enseñar los mandamientos y el camino divino a las
naciones (Zc.8:23, 12:10-14, 13:9; Is.2:2-3; 61:6).

Zac. 8:23 Así ha dicho Jehová de los ejércitos: En aquellos días acontecerá que diez
hombres de las naciones de toda lengua tomarán del manto a un judío, diciendo:
Iremos con vosotros, porque hemos oído que Dios está con vosotros.

El segundo es la iglesia, será constituida de creyentes vencedores y de los salvos de


un modo general. El vencedor reinará con Cristo, pero el creyente que no fuere
cualificado no reinará, no debemos confundir las naciones con esos salvos que no
recibieron la recompensa del reino. Ellos serán tratados por Dios durante el milenio
hasta que alcancen la madurez, hay muchos hermanos que solo se importan con la
salvación; sin embargo ella es apenas la puerta. El salvo necesita crecer y madurar
espiritualmente.

Quien no hubiere alcanzado la madurez espiritual antes de la vuelta de Jesús, la


obtendrá en el milenio, los vencedores se sentarán en tronos y reinarán con el
Señor en el milenio, mientras que los demás creyentes tendrán que llegar a la
perfecta varonilidad, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo durante el
milenio. El tiempo del milenio será la época de las bodas, mientras el matrimonio
propiamente dicho solamente sucederá al final del milenio, cuando todos los
creyentes llegarán a la madurez del hijo de Dios y se constituirán en la novia idónea.
285

El tercer grupo son las naciones de la tierra, tal vez una u otra de ellas deje de
existir; de una manera general las naciones conocidas actualmente continuarán
existiendo durante el milenio. Sobre esas naciones es que reinaremos, es para ellas
que los judíos enseñarán la ley del Señor, ellas son las ovejas de Mateo 25:31-46.

3. Los tronos para juicio – 20.4


Ap. 20:4 Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi
las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios,
los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en
sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años.

La autoridad para juzgar las naciones actúa sobre los creyentes vencedores, o sea,
aquellos que alcanzaron la madurez espiritual. Los inmaduros no podrán gobernar
en el reino, les falta el pleno entendimiento del hijo de Dios, y ese conocimiento es
adquirido solo por aquellos que mantienen una relación personal e íntima con el
creador y con su palabra. Para gobernar es necesario antes conocer los caminos y la
ley del Señor, sus principios y la manera como Él actúa; si alguien no fue tratado por
Dios no lo conoció personalmente en su vida práctica, ¿Cómo es que podrá reinar
con Él? piense más todavía, si alguien ni leyó toda la Biblia, ¿Con base en qué podrá
juzgar las naciones y gobernarlas? El Señor no puede establecer como gobierno que
ni conoce la constitución del reino. Hoy tú estás siendo preparado para ser un juez
con autoridad para juzgar en aquellos días.

4. La última rebelión de la humanidad – 20.7-10

Sabemos que durante el milenio la humanidad será restaurada, pero no regenerada


y todavía habrá la naturaleza pecaminosa en el hombre. No debemos pensar que el
milenio será el cielo, será el tiempo del reinado del príncipe de paz, todavía habrá
imperfecciones. Ellas serán abolidas cuando lleguen el cielo nuevo y la tierra nueva.

Al final del milenio, Satanás será suelto y la humanidad lo seguirá en la última


rebelión contra Dios, es inimaginable que después de tener el propio Señor como
rey, la humanidad todavía se rebele, pero es exactamente eso lo que sucederá, ellos
cercarán Jerusalén, marcharán sobre la tierra, el fuego divino caerá sobre ellos y los
consumirá.

5. El juicio del gran trono blanco.

La Biblia afirma que tres juicios deben suceder. El primero es el tribunal de Cristo, es
dirigido a los creyentes, en el cual cada uno será evaluado según sus obras
(2Co.5:10). No se trata de querer condenarlos, una vez que ya somos salvos, será
286

para recompensa y definición de nuestra posición en el milenio, sucederá por


ocasión de la vuelta del Señor en las nubes.

El segundo es el de las naciones, que son aquellas personas que sobrevivieron a la


gran tribulación y a la guerra del Armagedón. Aquello que no siguieren a Dios ni al
anticristo podrán participar del reino milenar como ciudadanos. Eso sucederá así
que el Señor descienda para la tierra y establezca su trono en Jerusalén; por tanto
antes del milenio. Mateo 25:31-46 describe ese acontecimiento.

El tercero es llamado de juicio del gran trono blanco, en donde todos los impíos de
todas las épocas serán juzgado según sus obras conforme lo que se halla inscrito en
los libros que fueron abiertos delante del Señor (20:11-12). Además de esos libros,
también fue abierto un llamado más de libro de vida, y todos aquellos cuyos
nombres no estuvieron inscritos serán lanzados para dentro del lago de fuego
(20:15). Ese juicio acontecerá en el final del milenio.

Y se abrieron libros, ¿Qué libros son esos? Cada hombre posee un libro donde está
anotado lo que él hizo y habló, es el libro de la vida.

Mat 12:36 Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán
cuenta en el día del juicio.

Aquello que la sangre de Jesús lava es borrado, pero lo que la sangre no lava, queda
escrita en la memoria del día del juicio. Me gusta mencionar aquel dicho: todo
hombre debe hacer por lo menos tres cosas en la vida: plantar un árbol, tener un
hijo y escribir un libro. Usted puede gastar toda una vida y nunca plantar un árbol,
tener un hijo también es una opción y usted no puede tenerlo. Mas escribir un libro
es inevitable. Todo hombre está escribiendo uno; usted puede decir: yo no se
escribir. Es que la verdad usted no lo está escribiendo, lo está dictando. Hay un
escribano celestial que está anotando todo para ti, es su autobiografía. Todo
hombre está escribiendo su propia historia en un libro en el cielo.

Así como un escritor, usted puede definir que tipo de libro será: de terror, una
melancolía, de aventura o de comedia. Usted tiene pode para definir que tipo de
vida quiere vivir, toda buena historia depende de personajes, también puede
escoger cuales de ellos entrarán en su historia. Mas solo hay un personaje capaz de
cambiar el final de la historia; si usted lo convida, Él tiene poder para transformarla.

Mas a nadie le gusta de un final infeliz, triste. Escoge un final feliz para su historia,
los libros que fueron abiertos en Apocalipsis tuvieron un final tenebroso. Los libros
están concluidos y el final de la historia es el lago de fuego y azufre.

Escoja un final feliz para su historia, cambiar el final es todo lo que interesa; es hasta
bueno cuando el libro comienza con una tragedia y termina con una gran victoria.
Un libro puede ser una historia de terror en el comienzo y terminar como un gran
287

romance a la manera de Dios, puede comenzar como un drama, una tragedia, con
todo puede terminar en gloria en el paraíso divino. Es como una sinfonía, es
necesario tener un gran final para levantar la platea. Su libro será leído un día
delante de Dios; si usted lo coloca en su historia, Él ciertamente se alegrará. Mas lo
que existe de bueno a respecto de invitarlo es que Él nos la chance de comenzar un
nuevo libro con una nueva historia y con un nuevo final.

No fueron apenas libros que fueron abiertos, también el libro de la vida lo fue; es un
libro interesante, porque es un rol, una lista. No tener el nombre en esa lista es estar
fuera del High Society celestial. Usted debería hacer cualquier cosa para tener el
nombre allí. Esas listas de los más ricos, de los más bonitos, de los mejores vestidos
no significan nada. El negocio es tener el nombre en la lista de los salvos, el libro de
la vida.

La palabra de Dios comprueba en muchos lugares que el Señor Jesús será el juez en
ese día (Jn.5:22; He.10:42, 17:31, 2Tm.4:1, Rm.2:16). Hoy todavía Él es abogado, por
eso usted puede escoger como le gustaría tenerlo, como su salvador y abogado o
como su juez. El juicio de la gran trono blanco acontecerá en la resurrección de los
impíos o la segunda resurrección (Jn.5:28-29; 1Co.15:23-24).

Jn. 5:28 No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los
sepulcros oirán su voz;
Jn. 5:29 y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo
malo, a resurrección de condenación.

Está bastante claro; por tanto, habrá dos resurrecciones. La primera es llamada de
resurrección de la vida y la segunda resurrección del juicio. De la primera
resurrección participarán apenas los salvos y sucederá antes del milenio por ocasión
de la vuelta del Señor. La segunda resurrección, la del juicio, ocurrirá al final del
milenio y en ella los hombres resucitarán para el juicio del trono blanco.

La muerte es el último enemigo a ser vencido y el lago de fuego es la gran lata de de


basura del universo (1Co.15:26), en ella será lanzado todo el detrito producido por el
pecado, la Biblia muestra claramente la existencia tanto de la salvación como de la
condenación eterna o segunda muerte. El Señor Jesús está volviendo, con Él está el
galardón para los salvos, pero también el juicio y la condenación para aquellos que
no creyeron en Él, el Señor está retornando para juzgar el mundo. Las personas,
cuyos nombres no estuvieren escritos en el libro de la vida del cordero, serán
lanzadas en el lago de fuego y azufre.

¿Qué es la segunda muerte? Es la muerte del cuerpo resucitado que no puede ser
destruido más, es llamada de muerte eterna. Todas las personas que pasaron por la
primera muerte – la muerte física – resucitarán un día. Primero los santos en la
primera resurrección, después los impíos en la segunda; tanto los justos como los
288

impíos resucitarán con cuerpo, alma y espíritu enteros, para el cielo o para el lago de
fuego.

Si su nombre no fue escrito todavía en el libro de la vida, hágalo ahora mismo. La


Biblia afirma: cualquier persona que cree en JESÚS será salvo; creer es nada más
que recibir a Jesús y confesarlo como Señor y salvador.

Rom 10:9 que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón
que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.
Rom 10:10 Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para
salvación.
289

La nueva Jerusalén
El propósito eterno de Dios está revelado en Génesis, para que comprendas la
palabra de Dios, necesita entender cual era el propósito original de Dios, cual era su
sueño, aquello que estaba en su corazón desde la eternidad pasada.

Ese propósito no es revelado en Génesis cuando el padre dice: “hagamos el hombre


a nuestra imagen conforme a nuestra semejanza” (Gn.1:26-28). Imagen y semejanza
son dos palabras claves. ¿Qué es imagen y semejanza? El Señor quería tener al
hombre a su imagen para que el mismo pudiese expresarlo de tal manera que quien
lo viese, estaría como que viendo a Dios.

¿Por qué el hombre debería tener la imagen? El v.28 nos explica “para que él tenga
dominio”. Dios desea un hombre que sea su imagen y semejanza para que tenga
dominio, en otras palabras reine. Eso era su propósito, para que el mismo pudiese
ser alcanzado, ese hombre que era su imagen y semejanza, tenía que ser lleno
también de Dios. El Señor Dios entonces colocó delante del árbol de la vida para que
pudiese recibir la vida divina dentro de si.

El árbol de la vida apunta para el propio Señor Jesús, la Biblia dice que la vida estaba
en Él, Él mismo dijo que era la vida. Lo que Dios tenía en mente es que Adán pudiese
comer de aquel fruto y recibirlo como vida dentro de si.
290

Ese era el propósito de Dios, pero en Génesis tres, el diablo entró en escena y el
hombre cayó en pecado. Dios entonces planea un medio de restaurar al hombre, y
aquello que usted ve en Génesis tres hasta el Apocalipsis 21es sencislamente la
historia de la redención; la historia de la redención no es el propósito de Dios, el
propósito de Dios no era salvar al hombre. Dios no creó al hombre para que caiga en
el pecado, el propósito de Dios era tener al hombre como su imagen, lleno de su
vida para que pudiese reinar en la tierra; ese era el propósito de Dios. Una vez que el
hombre cayó, la redención se tornó necesaria y una vez que el hombre es redimido y
salvo, Dios ahora puede volver a su propósito original.

Lo que veremos ahora en los cap. 21 y 22 de Apocalipsis es simplemente la


conclusión del propósito original de Dios. Cuando Dios creó al hombre en Génesis 1 y
2, Él tenía en mente lo que ahora vamos ver en Apocalipsis 21 y 22 (Ef.3:9-11; 1:9-11).

En el recorrer de la historia, hubo varias dispensaciones, a través de las cuales Dios


perfeccionó un pueblo y pudo revelar más de si mismo al hombre. Sabemos que no
existe evolución humana, lo que existe es una evolución de la revelación de Dios al
hombre. La revelación que tuvieron Noé y Abraham tuvieron de Dios es muy inferior
al que tenemos hoy; por ejemplo, esa revelación fue desenvolviéndose en el
recorrer de la historia. En Apocalipsis alcanzaremos la consumación de la revelación
de Dios.

Podemos decir que al final de todo, habrá habido siete dispensaciones:

- Inocencia – de la creación hasta la caída.


- Consciencia – de la caída hasta el diluvio.
- Gobierno humano – del diluvio hasta Abraham.
- Patriarcas – de Abraham hasta Moisés (Rom.5:14).
- La ley – de Moisés hasta Cristo (Jn.1:17).
- La gracia – de la venida de Cristo hasta su vuelta (He.3:20-21).
- El reino – por mil años después de la venida de Cristo (Ap.11:15 y 20:4-6).

Por medio de la última dispensación Dios completará su obra y entonces vendrán


nuevos cielos y nueva tierra. En la última dispensación, el Señor va perfeccionar a
Israel y el restante de la iglesia que no fueron perfeccionados.

1. El cielo nuevo y la tierra nueva – 21.1-6


Ap. 21:1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra
pasaron, y el mar ya no existía más.

La palabra de Dios revela que el viejo cielo y la vieja tierra serán quemados y los
elementos existentes se desaceran, ciertamente, Pedro se refiere a eso cuando nos
dice:
291

Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con
grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras
que en ella hay serán quemadas.
Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, ¡cómo no debéis vosotros andar en
santa y piadosa manera de vivir,
Esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos,
encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán!
Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales
mora la justicia (2Pe.3:10-13).
Eso acontecerá cuando las naciones, al final del milenio se reúnan para apuntar sus
armas contra Dios. Será tremendo el cataclismo que por fin no solamente nosotros
– el pueblo de Dios – alcanzaremos el nivel de la nueva creación, todo el universo
será renovado y se tornará la nueva creación.

La tierra como la conocemos hoy, dejará de existir y habrá una nueva creación.

Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra,


Y los cielos son obra de tus manos.
Ellos perecerán, mas tú permaneces;
Y todos ellos se envejecerán como una vestidura,
Y como un vestido los envolverás, y serán mudados;
Pero tú eres el mismo,
Y tus años no acabarán (Heb.1:10-12).

En la nueva tierra, las naciones todavía continuarán existiendo (21:24), es


interesante que la palabra usada en el verso es pueblos en plural. Nosotros pueblos
de Dios.

La primera descripción que tenemos del cielo nuevo y la tierra nueva es que el mar
dejará de existir. Ap.21:1 Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la
primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más.

Las aguas en la Biblia tienen un doble significado, pueden representar muerte o


vida; si fuera el mar es muerte, si fuera un río o fuentes de agua es vida. El mar; por
lo tanto, simboliza muerte. Cuando Dios realiza algo siempre hace con armonía y
belleza, cuando vemos la descripción de la tierra en Génesis 1:2 quedamos
asustados: Gen 1:2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la
faz del abismo.

Esa no es la descripción de una obra de Dios, sino es la descripción de la obra de


Satanás, todo aquello que el diablo hace es tinieblas, vacio, sin forma, con un
abismo, es un caos. Dios no creó la tierra así, ¿Y por qué sucedió eso? Porque entre
los versículos uno y dos de Génesis Satanás fue lanzado en la tierra con la tercera
parte de los ángeles, la tierra se tornó la habitación de demonios, por eso era llena
de agua, en tinieblas, sin forma y vacía. Las aguas del mar se tornaron un símbolo de
muerte.
292

El diluvio; por ejemplo, era un símbolo de muerte. Cuando Moisés atravesó el mar
rojo, aquel mar simbolizaba la muerte, las aguas del bautismo representan muerte.
Cuando Jesús fue a expulsar aquellos demonios del hombre gadareno, ellos fueron
para los puercos y esos puercos después de precipitaron en el mar. Jesús dijo que
cuando el demonio sale de una persona anda por lugares áridos buscando un lugar y
cuando no la encuentra retorna (Lc.11:24).

Las personas que practican la magia saben de eso, el lugar de los hechizos es en
medio de cataratas, ríos y mar. Mas cuando haya nuevos cielos y nueva tierra, el mar
no existirá. El hecho del mar dejar de existir, muestra que Satanás y todos sus
seguidores malignos fueron tratados y no serán encontrados en el nuevo cielo y en
la nueva tierra. La muerte es simbolizada por el mar y como no habrá más muerte, el
mar dejará de existir. Isaías dice que no habrá más recuerdos de cosas pasadas.

Isa 65:17 Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra; y de lo primero no
habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento.

Dios tiene una gran habilidad para olvidar. Primero, Él olvida nuestro pecado y por
fin se olvidará de las cosas pasadas.

¿En lo que se refiere a nosotros? No tendremos también memoria de las cosas


pasadas; eso no significa que tendremos una santa amnesia, todavía seremos
capaces de recordarnos de las cosas, pero ellas serán tan remotas venidas de un
pasado tan fuera de nuestra realidad de entonces que no tendremos interés en
recordarnos de ellas. Si después de haber vivido en la misería, alguien se torna un
millonario, él no tendrá la amnesia, pero ciertamente no deseará recordarse de la
vida en la misería.

Vivimos hoy en un tiempo de angustias e injusticias cuando venga el cielo nuevo y la


tierra nueva todo estará correcto, justo y apropiado. 2Pe 3:13 Pero nosotros
esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la
justicia.

Después de ser arrebatados a los cielos, todos los santos redimidos estarán en la
nueva Jerusalén que descenderá del cielo cuando haya una nueva tierra; eso indica
que nuestra habitación eterna no será el cielo sino, la nueva Jerusalén que ve
descender del cielo. El hecho de ser la novia parece indicar que es un símbolo. La
ciudad aquí representa la iglesia glorificada, todavía no podemos afirmar que tal
ciudad no existe físicamente.

Yo se que muchos sueñan en andar en calles de oro, y tal vez queden un poco
decepcionado con lo que voy a decir. La nueva Jerusalén es un símbolo de algo más
profundo y más grande que nuestra mente hoy no sería capaz de comprender.
Respecto a las personas que sueñan en vivir en una mansión celestial con tres
293

cuartos y dos suites, con una calle de oro para andar; respecto a los que sueñan en
dormir en una nube tocando harpa. Creo que todo eso es interesante. Nos
importamos con oro aquí, porque es raro, difícil de encontrar, difícil de tener; si el
cascajo fuese oro, nadie se interesaría. Por tanto, todo en la nueva Jerusalén es
simbólico; si usted insiste en creer que es literal no hay problema, lo importante es
estar en aquel allá.

La intención de Dios es mostrar que los santos de todas las épocas se constituirán al
final del milenio, la nueva Jerusalén, el lugar de la habitación eterna de Dios. Dios no
habita en lugares hechos por manos humanas, Dios habita en nosotros y en nuestro
medio. Nosotros seremos la habitación de Dios y también seremos la novia, vamos
casarnos con Dios; por eso teníamos que ser su imagen, porque nadie se casa con
criatura de otra especie. Nosotros somos de la especie de Dios, de su tipo. Él está
apasionado de nosotros.

Esta ciudad será la novia de Cristo y también el tabernáculo de Dios para su


habitación con el hombre (v.3). Para Cristo será la novia para deleite y satisfacción;
tanto en el antiguo como en el nuevo testamento, Dios compara su pueblo con una
esposa (Is.54:6; Jr.3:1; Ez.16:8; Os.2:19; 2Co.11:2; Ef.5:31-32). Para Dios la nueva
Jerusalén será su habitación eterna (Éx.29:45-46; Num.5:3; Ez.43:7,9; Sal.68:18;
1Co.3:16-17; 2Co.6:16; 1Tm.3:15).

Ap. 21:5 Y el que estaba sentado en el trono dijo: He aquí, yo hago nuevas todas las cosas.
Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.
Ap. 21:6 Y me dijo: Hecho está. Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que
tuviere sed, yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida.

El Señor es el Alfa y la Omega, las letras Alfa y Omega son respectivamente la


primera y la última del alfabeto griego, lo que significa que el Señor es el principio y
el fin. En otras palabras: todas las cosas subsisten en Él.

Ap. 21:4 Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá
más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron.

En el milenio todavía habrá algún sufrimiento dolor y llanto causados por la muerte.
Nosotros ya estaremos glorificados, pero las naciones todavía estarán sujetas a la
muerte, después del milenio ya no habrá todo eso. La muerte será lanzada en el
lago de fuego.

1Co 15:54 Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya
vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la
muerte en victoria.

Ap. 20:14 Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte
segunda.
294

La Biblia trata la muerte como si fuera una persona, una entidad, su acción hoy es
inevitable y su tiempo es inmutable. Todo hombre está debajo de su poder. Se
cuenta que en cierto país de Arabia, había un hombre muy rico y en un día uno de
sus criados fue hacer compras, llegando al mercado se encontró con la muerte
disfrazada de una viejita muy curvada, al verla quedó muy asustado y gritó, al mismo
tiempo hizo la muerte al verlo: soltó un gritó. Él salió corriendo y fue hasta su patrón
a quien relató lo ocurrido, por favor dame dinero – rogó el criado al patrón - la
muerte me está buscando y necesito escapar muy lejos de aquí, yo quiero ir para
Bagdad, el hombre rico le dio dinero y lo dejó partir. En seguida fue al mercado y
encontró allí la anciana. ¿Por qué usted lo asustó a mi criado? ¿Si no quería llevarlo,
por qué lo dejó tan aterrorizado? Preguntó a la muerte. No, yo quise asustarlo, yo
soy quien quedó asustado al verlo hoy aquí en el mercado, pues yo tengo un
encuentro marcado con él mañana en Bagdad.

La muerte es la única certeza de la vida, ella es puntualísima; por más que alguien
intente esquivarla, ella lo encontrará en el local y la hora determinados. Hoy es el
momento apropiado para que decidas tu futuro en relación a la eternidad, ¿Usted ya
reflexionó sobre eso? Una gran multitud será lanzada en el lago que arde con fuego
y azufre. La segunda muerte será algo terrible y tenebroso – la eterna separación de
Dios, en la cual el sufrimiento nunca tendrá fin.

2. El vencedor – 21.7-8

El vencedor en este versículo no tiene el mismo significado de los capítulos dos y


tres, en ellos se trata de una condición para recibir la recompensa; porque el
vencedor alcanzó la madurez antes de los demás. En ese pasaje se refiere a todos
los santos, porque a esa altura todos los hijos de Dios ya habrán alcanzado la
madurez, la estatura del varón perfecto. El milenio será el tiempo en que la obra de
Dios será completada en la vida de ellos.

Al final toda la iglesia será hecha vencedora, porque todos aquellos que están en
Cristo son más que vencedores, todavía que algunos vivan como tales, son más que
vencedores por haberse tornado hijos del Señor; y por causa de eso, serán
disciplinados porque siendo vencedores, vivieron como derrotados, siendo fuertes
vivieron como débiles, teniendo a su disposición toda la provisión divina, vivieron sin
disfrutar cosa alguna. Al final del milenio, todos habremos madurado, a esta altura
todos los creyentes habrán alcanzado la estatura del varón perfecto.

Ap. 21:8 Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y
hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con
fuego y azufre, que es la muerte segunda.

Uno de los motivos por los cuales a las personas no les gusta estudiar Apocalipsis
son afirmaciones como esas, algunos teólogos simplemente prefieren imaginar que
295

el infierno no existe. De acuerdo con el universalismo, una vez que Jesús murió por
todos los hombres, todos ellos crean o no, están salvos. Afirman así que nadie será
condenado.

Entre tanto, contradiciendo ese pensamiento, la palabra de Dios muestra


claramente que el lago de fuego existe. Delante de eso, no podemos quedarnos
callados – es nuestro encargo predicar el evangelio y alertar a las personas contra el
daño de la segunda muerte.

3. La nueva Jerusalén – 21.9-27

La nueva Jerusalén es la composición de todos los redimidos, es algo vivo, un


edificio vivo. En la Biblia vemos las dos abras básicas de Dios: la creación y la
edificación, en la obra de la creación, Dios ordena: “haya”. Y aquello cuya existencia
fue ordenada, pasa existir. Mas en la obra de la edificación, Él reúne todos los
elementos que fueron creados y de ellos hace una obra. En la creación, Él apenas,
pero en la edificación, es empleado un proceso laborioso.

Si observamos los materiales en Génesis dos, veremos que ellos se repiten en


Apocalipsis 21 y 22; eso ilustra la diferencia entre la creación y la edificación. El río
que sale del Edén (Gn.2:20) es el mismo que sale del trono de Dios y del cordero
(Ap.22:1), el árbol de la vida, plantada en medio del jardín de edén (Gn.2:9), es la
misma que está en medio de la plaza de la nueva Jerusalén (Ap.22:2), los minerales
en forma bruta en Génesis 2:11-12, son encontrados en forma acabada, en la muralla
de Jerusalén celestial (Ap.21:18-21). La obra de la creación no era el propósito final
de Dios, su objetivo era edificar la nueva Jerusalén en Ap. 21.

Sabemos que el río simboliza al Espíritu Santo, el árbol de la vida con sus frutos es la
imagen del Señor Jesús. Las piedras debes simbolizar los santos. Eso puede ser
ilustrado en la palabra de Dios en muchas ocasiones.

El primer ejemplo es el sueño de Jacob en Gn.18:7, es la primera revelación de la


casa de Dios, la escalera que liga la tierra hasta el cielo. En Gn.28, huyendo de Esaú,
Jacob llegó a un cierto lugar y allí pasó la noche, tomó una de las piedras del lugar e
hizo de ella su almohada (v.11). y tuvo este sueño: una escalera que ligaba que ligaba
la tierra hasta el cielo con los ángeles bajando y subiendo por ella. Habiendo
despertado del sueño dijo: “este lugar es la casa de Dios, la puerta de los cielos”.
Después tomó la piedra que la puso como almohada y derramó aceite sobre ella,
aquella piedra era un símbolo de otra piedra que vendría – Jesucristo, la piedra
angular. Todos nosotros hoy, somos piedras cubiertas con aceite y constituimos la
casa de Dios, el lugar donde está la escalera que liga la tierra hasta el cielo.
296

El segundo ejemplo está en Mateo 16, en este pasaje la iglesia es revelada por la
primera vez y el Señor muestra como debe ser edificada. La iglesia es edificada por
la transformación de Simón en Pedro; sin transformación no hay edificación, porque
naturalmente somos polvo, somos barro. Mas la casa de Dios solamente puede ser
edificada con piedras.

Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo
reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.
Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas
del Hades no prevalecerán contra ella (Mat.16:16-18).

Esa piedra era el propio Cristo, pero también era la revelación que transformó
Simón en Pedro, después de su confesión el Señor le mudó el nombre de Simón
para Pedro. Tener el nombre mudado significa tener su vida transformada; Simón
fue transformado en una nueva persona, un nuevo hombre que ahora era como una
roca o piedra apta para participar del edificio del padre.

No apenas Pedro fue transformado para ser útil en la edificación de la iglesia, sino
todos nosotros debemos tener la misma experiencia para ser parte de ella. El propio
Pedro dice que todos fuimos hechos piedras espirituales por medio del nuevo
nacimiento.

1Pe 2:5 vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y
sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de
Jesucristo.

La nueva Jerusalén es ese edificio vivo hecho de piedras que viven, construido para
la habitación eterna de Dios.

Dios edifica transformando cada uno en piedra, Jesús es la piedra y el trabajo del
Señor es hacer de ti en esa piedra. Cualquier uno que es edificado sobre ella es
también transformado semejante a ella. Cualquier uno que viene a Jesús es hecho
piedra semejante a Él. Por eso, Pedro afirma que somos piedras que viven,
edificadas como casa espiritual para Dios. Mas si tú piensas que Dios usa cualquier
piedra para construir su iglesia, está engañado. Él no usa piedras vulgares, su
edificio es hecho con piedras preciosas.

Es eso que Pablo nos muestra en 1Co.3:10-13, donde tenemos los materiales de la
construcción del edificio, Pablo dice que el fundamento ya está lanzado, lo cual es
Cristo, pero cada uno debe tener cuidado en como edifica sobre el fundamento.
Algunos quieren edificar con madera, paja y heno. Mas los únicos materiales
aceptados en el edificio de Dios son oro, plata y piedras preciosas, la nueva
Jerusalén es hecha de esos materiales; eso nos muestra que edificar en el padrón de
297

Dios cuesta caro. Ser un vencedor tiene un precio, edificar con madera, paja y heno
es barato, pero el oro, la plata y las piedras preciosas cuestan caro.

La nueva Jerusalén es llamada de novia y esposa, la novia se cumplió en el milenio,


la esposa será por toda la eternidad. Antes de participar de la edificación maravillosa
de la nueva Jerusalén, necesitamos de la revelación. Esa montaña está en contraste
con el desierto de donde Juan vio la gran Babilonia en el cap.17; si deseamos tener la
revelación de Dios, necesitamos de una posición elevada, o sea, necesitamos ser
elevados en espíritu.

Todos los grandes eventos bíblicos sucedieron en un monte, porque en la Biblia


monte es un lugar de revelación, es vida en el espíritu y de elevación, el monte nos
habla de una visión amplia. No puedo contarle estando yo en la cima de un monte si
usted está en el valle, el monte es la vida en el espíritu. La nueva Jerusalén solo
puede ser vista de un monte alto.

Cierta vez un sapo venía saltando por su camino cuando cayó en un pozo, allí abajo
descubrió una gran comunidad de otros sapos, el comenzó a compartirles con ellos
las maravislas de la vida arriba: los árboles, ríos, los colores, la abundancia de
comida y todo lo demás. Pero los sapos del pozo pensaron que esta inventando
todo eso y lo llamaron de loco, el insistía en que deberían salir de allí, porque el otro
mundo era más grande que aquella bola de luz que veían sobre sus cabezas. Mas
ellos no quisieron oír y lo acusaron por tonar la vida de ellos ruin, de llevarlos a ellos
a que se sientan infelices en su pozo y lo mataron. Si usted quiere encontrarlos
alguien del pozo no intente contarle todo lo que vio allá arriba, es peligroso.

La nueva Jerusalén es el cumplimiento final del propósito eterno de Dios de tener al


hombre a su imagen significa que Dios lo creó con su gloria y para su gloria. Nuestro
destino es la gloria.

Pablo nos dice que somos transformados de gloria en gloria a su imagen (2Co.3:18),
en el cap.4:6 vemos que la gloria de Dios es la faz de Cristo; entonces gloria es
parecerse con el Señor, nosotros fuimos designados para esa gloria (1Co.2:7,
1Pe.5:10; Ts.2:12). Hoy estamos siendo transformados en esa gloria (2Co.3:18). Y en el
futuro seremos introducidos en ella (Hb.2:10). En el fin seremos glorificados y
seremos como tal como Cristo es (Rm.8:17,30; 1Jn.3:2).

Sabemos que la apariencia de Dios es descrita como siendo semejante a la piedra de


jaspe (4:3), así también es la apariencia de Jerusalén (v.11). la ciudad es el
cumplimiento del propósito eterno de Dios de hacer el hombre a su imagen y
semejanza y con su gloria para representarlo. Imagen y semejanza es apariencia,
tanto Dios como la novia poseen la misma apariencia: la piedra de jaspe (4:3 y 21:11).
La ciudad tiene la gloria de Dios porque es el cumplimiento del propósito original de
Dios que ahora tiene un pueblo a su imagen y se parece con Él.
298

Yo se que hay algunos que piensan que la gloria es solo un fulgor, un brillo; eso no
está errado, pero es pequeño. Gloria a la verdad es todo aquello que Dios es, o sea,
su exacta imagen y expresión.

4. La descripción de la ciudad.

La nueva Jerusalén es un cubo perfecto donde su largo, ancho y altura miden cerca
de 2,200 kilómetros respectivamente (v.16). La altura de la muralla en torno de la
ciudad es de 72cm.

Ap. 21:17 Y midió su muro, ciento cuarenta y cuatro codos, de medida de hombre, la
cual es de ángel.

La ciudad probablemente existirá conforme a esa descripción, todo lo que se refiere


es simbólico y ciertamente apunta para la iglesia que es la novia de Cristo.

¿Por qué esas dimensiones perfectas como un cubo? La Biblia habla en el antiguo
testamento que el lugar santísimo también era un cubo; así la nueva Jerusalén a la
verdad es un lugar santísimo expandido. ¿Qué era el lugar santísimo? Era el lugar
donde Dios manifestaba su gloria. La nueva Jerusalén es lugar santísimo, es el
tabernáculo de Dios aumentado en una medida gloriosa para el testimonio en todo
el universo de que Dios ahora habita con el hombre.

Ella tiene el nombre de las doce tribus en las puertas, la Nueva Jerusalén incluye los
santos de todas las dispensaciones; sin embargo, las puertas traen los nombres de
las doce tribus. La puerta no habla de entrada y quien nos abrió la puerta para el
reino de Dios fueron los judíos y los profetas, los apóstoles. Los que primero
predicaron el evangelio a los gentiles eran los judíos, porque primero a los judíos fue
revelado los oráculos de Dios.

En la puerta nosotros tenemos las doce tribus, pero en los fundamentos de la


muralla tenemos los nombres de los apóstoles, bajo las murallas están los nombres
de los doce apóstoles, mostrando con eso que la obra de la iglesia es la columna, la
protección y la separación de la ciudad.

El apóstol Pablo nos dice:

Ef. 2:19 Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y
miembros de la familia de Dios,
Ef. 2:20 edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal
piedra del ángulo Jesucristo mismo.

Hoy nosotros estamos construyendo sobre el fundamento de los apóstoles y


profetas, pero en aquellos días, la muralla estará apenas sobre los apóstoles,
299

porque toda profecía se habrá cumplido. La profecía va pasar, la muralla existe para
proteger y separar, pero en aquellos días no será necesario mas protección, todavía
así habrá separación. Lo que nos distingue o nos separa es exactamente eso: el
fundamento – el mensaje apostólico que nosotros tenemos de parte del Señor.

En el verso quince la ciudad fue medida con una vara de oro, el oro simboliza la
naturaleza y la gloria de Dios, en la Biblia todo lo que está relacionado con la
naturaleza de Dios es oro. La vara con la cual se medía la ciudad es una vara de oro,
¿Por qué? Porque la ciudad debería estar de acuerdo con la naturaleza y la gloria de
Dios. La ciudad es edificada básicamente con tres elementos: oro, plata y piedras
preciosas.

El primer elemento es oro. “la ciudad es de oro puro, semejante a un cristal” (v.18).
Es un oro muy especial, es transparente y simboliza la naturaleza y la gloria de Dios,
la ciudad es la expansión del Señor. Hoy esa gloria está desfigurada por causa del
pecado en la vida de la iglesia; entre tanto en aquel día, ella estará completamente
restaurada, el Señor habitará en ella por toda la eternidad.

El segundo elemento son las perlas, con las cuales se hacen las puertas de la ciudad,
son doce puertas, siendo cada una de ellas una perla. En la ciudad todo es mineral,
no se ve ningún elemento vegetal o animal; todavía la perla es una mescla de
mineral con animal. Ella nada es más que un glóbulo blanco, brislante y perlado que
se forma en la concha de la ostra, cuando un grano de arena penetra en su interior
en el fondo del mar. La ostra lo envuelve con una secreción y se transforma en la
perla.

Eso ciertamente es un símbolo de la transformación del creyente, sabemos que el


mar simboliza la muerte. El Señor Jesús es como esa ostra que vino habitar en ese
mar de la muerte, nosotros somos los granos de arenas de arena que fueron
injertados en Él. Una vez estando en Él, fuimos envueltos en su vida y con el pasar
del tiempo, fuimos transformados en perlas para su edificación.

Antes de eso, no teníamos valor ningún y éramos apenas polvo, en Cristo, el Señor
nos atribuyó valor. El Espíritu Santo tomó ese polvo y lo injertó en Cristo, la vida de
Dios comenzó a envolvernos y a fluir en nuestro interior, día a día, hasta que fuimos
transformados en una perla suya. Cada puerta es una perla que expresa la obra
exclusiva de Dios, es Él quien hace de cada de nosotros una perla. Es de Él,
exclusivamente la iniciativa para salvarnos, santificar y transformarnos por medio de
su propia vida. Mas Jesús no es apenas una ostra, Él es también el comerciante rico
que después de encontrar esta perla de gran valor, vendió todo lo que poseía y la
adquirió (Mat.13:45-46).
300

Las puertas de la ciudad son grandes perlas para indicar que entramos en ella por la
transformación y la santificación. Allí no entra polvo, sino entra el polvo
transformado en perlas.

El tercer elemento son las piedras preciosas, la muralla y la columna son de piedras
preciosas que apuntan para la obra del Espíritu Santo que nos transforma. Los
fundamentos de la ciudad son adornados de toda especie de piedras preciosas, en
la Biblia, la piedra preciosa apunta para la acción del Espíritu Santo de Dios. Observe
que cada uno de los materiales básicos, se refiere a una persona de la trinidad. El
oro es el padre, la perla es la obra del hijo y las piedras preciosas son la obra del
Espíritu Santo.

¿Tú sabes como las piedras preciosas con transformadas? Tomemos como ejemplo
el diamante, es compuesto de carbono, la misma composición química del carbón
natural. A pesar de tener la misma composición, son diferentes uno del otro en la
apariencia, consistencia, resistencia y valor. Mientras que uno es brislante y
translúcido, el otro es negro y opaco.

A la verdad todo diamante es un carbón sometido a una gran presión y a una


temperatura altísima para después de algún tiempo ser transformado en diamante.
Del mismo modo el Espíritu Santo opera en nosotros esa transformación usando
esos mismo elementos: la presión, el fuego y el tiempo, ellos son insustituibles. La
obra de transformación operado por Dios no es instantánea, necesita de tiempo: un
día después de otro, Él envía el fuego para consumir las impurezas y todo lo que
está fuera de su voluntad, es necesario que vengan las presiones para traer a luz,
todo que necesita ser cambiado en nosotros. Éramos apenas carbón, después de
pasar por las presiones y por el fuego del Espíritu Santo y añadiendo el tiempo,
fuimos transformados en diamante. Nuestra constitución continúa la misma –
carbono – pero nos tornamos diferentes, llenos de brillo y gloria. En la eternidad
todavía seremos hombres, pero glorificados.

De ese modo cuando el Espíritu Santo de Dios estuviere tratándote, no quedes


triste, antes alégrese, porque a través de ese proceso será transformado en
diamante útil para la edificación de la nueva Jerusalén.

Finalmente vemos que la apariencia de la ciudad es de jaspe (v.18; 4:3). En la visión


que Juan tuvo del trono, él dice que aquél que está sentado en el trono tiene la
apariencia de piedra de jaspe (Ap.4:3). Observe ahora que la ciudad tiene la misma
apariencia. Ap. 21:11 teniendo la gloria de Dios. Y su fulgor era semejante al de una piedra
preciosísima, como piedra de jaspe, diáfana como el cristal.

La nueva Jerusalén es la expresión del propio Dios.


301

La nueva Jerusalén es la novia, Dios mismo está preparándose para casarse y será la
suprema unión del universo. La Biblia es la historia de un romance universal entre
Dios y el hombre, Dios creó el hombre para eso, para unirse con Él. Naturalmente el
matrimonio es solo una ilustración, es aquello que más se aproxima de lo que
experimentaremos en aquel día, es por eso que el casamiento tiene algo de
sagrado. Dios quiere unirse al hombre eternamente y ser uno con él, así como el
hombre y la mujer, al unirse se tornan una sola carne, cuando nos unamos a Dios en
aquel día, seremos uno solo con Él.
302

La eternidad
En esta sección de Apocalipsis tenemos la descripción de las tres cosas
fundamentales de la nueva Jerusalén: el trono de Dios, el río de la vida y el árbol de
la vida. Los tres son fuente de vida, luz y el suplemento de los santos por toda la
eternidad. Cada uno de ellos apunta a una persona de la trinidad. El trono nos habla
del padre, el árbol de la vida nos habla del hijo y el río de agua de vida es el fluir del
Espíritu Santo.

1. El trono de Dios y del cordero.

Como fue dicho en el capítulo 4, el trono de Dios es el origen de todo, los sellos y las
trompetas proceden de allí (Cap.9-11), Él es el trono de autoridad y al mismo tiempo
el trono de gracia (Hb.4:16). Mas a partir del final del cap.11, las acciones del padre
son originados en el santuario (11:19).

Así tenemos el trono y el templo de Dios. El primero es la expresión de gobierno, de


la autoridad y de su administración en la historia. Todo lo que Él hace es a partir de
su trono de autoridad. El templo es el lugar de donde se expresa y se revela en la
comunión con aquellos que los aman.

En la nueva Jerusalén no hay más necesidad de templo, porque Dios en su trono es


ahora el propio santuario (21:22). Por tanto, el templo y el trono se tornaron uno
solo – el trono de Dios y del cordero (22:1). A la verdad hay un solo trono, así como
303

hay apenas un solo Dios que subsiste como Dios padre, Dios hijo y Dios Espíritu
Santo.

2. El río de vida

Ese río es nada más que el Espíritu Santo de Dios, sobre lo cual Jesús afirmó: Jn. 7:37
En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si
alguno tiene sed, venga a mí y beba.
Jn. 7:38 El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua
viva.
Eso Él dijo con respecto al Espíritu Santo; así cuando creemos en Jesucristo, el
Espíritu Santo se torna una fuente de agua viva en nuestro interior.

El río de agua de vida fluye directamente del trono que significa el señorío, la
autoridad y el gobierno divino en nuestras vidas. El Espíritu Santo solo fluirá en
nosotros por medio de nosotros si el trono estuviere establecido en nuestro
corazón; es por eso que algunos no sienten el río fluyendo de su interior, porque no
están sumisos al trono, si no existe eso, el río no tiene de donde fluir. Siempre que
hacemos su voluntad tenemos la sensación de que algo está brotando de nuestro
interior, ese es el fluir del Espíritu Santo viniendo como aguas vivas.

Esa sujeción puede ser vista de dos maneras: objetiva y subjetivamente, la


obediencia objetiva dice al respecto que está escrito en la palabra; por ejemplo: “No
matarás, no adulterarás, no hurtarás, sujetaos a toda institución humana…” la
obediencia es aquella que está clara en la palabra escrita de Dios.

La obediencia subjetiva, sin embargo exige una sujeción a la voz del Espíritu en
nuestro interior; si algo de la voluntad de Dios fuere comunicado a nosotros a través
del testimonio interior del Espíritu a nuestro espíritu, y nosotros todavía resistimos y
desobedecemos, en la hora el río de Dios para de fluir. Solo hay cristianismo
genuino donde el río del agua viva está fluyendo.

Si el trono no está establecido en su interior, no hay ninguna posibilidad para los ríos
de agua viva fluir conforme nos prometió el Señor Jesús. Si usted se dispone a
obedecer a los impulsos del Espíritu en su propio espíritu, no hay nada que pueda
impedir el fluir de los ríos en su interior; tú te tornas una fuente de aguas vivas,
brotando para la vida eterna. Ezequiel 47 dice que el río de Dios sale debajo del
umbral del templo. Eso es maravilloso también, el río solo sale de donde está la
habitación del padre; pero habitación nos habla de comunión. Donde hay comunión
con el Señor allí está el río, cuanto más lejos de la comunión del templo, más seca y
árida se torna la vida, porque no hay un río. Hay personas que sabemos ser
convertidas, pero no consiguen percibir vida en ellas; es porque no tienen el río
fluyendo, están distantes del trono.
304

El trono con el río y el árbol, probablemente están en el topo de la ciudad, es posible


que el río fluya por ella en forma de espiral, porque la ciudad es un cubo teniendo el
mismo ancho, largo y altura (21:16).

El río siempre hubo y ha sido así desde el principio. En Génesis el rio era con cuatro
brazos que bañaba el Edén y que poseía oro en sus márgenes (2:10-14). En Éxodo,
ese río fluye de la roca herida en medio del desierto y la roca era el propio Señor
Jesús (Ex.17:6; 1Co.10:4; Num.20:11). En Salmos es el río de agua cristalino que alegra
la ciudad de Dios, el santuario de las moradas del altísimo (Sal.46:4). En Ezequiel,
ese río sale del templo y se torna profundo llevando vida donde quiere que llegue
(Ez.47:5-9). Después vemos en Juan que en la cruz, el agua sale del lado de Jesús
indicando que Él es la fuente del río de vida (Jn.19:34; Jn.4:10-14; Jn.7:37-38).

Hay un río de vida que recorre toda la palabra de Dios, el v-17 enfatiza que el río es
de gracia; necesitamos entender que a pesar de ser de gracia, tiene un precio a la
manera de Dios. Es necesario arrepentirnos y someternos a su autoridad (21:27).

3. El árbol de la vida.

Ese árbol crece para los lados; eso muestra que es accesible, el árbol de la vida no es
un cedro ni es un eucalipto enorme, ancho e inaccesible, es un árbol que se
expande, una trepadera, donde cogemos el fruto con la mano. Es accesible, las
cosas de Dios son accesibles, no están lejos de ti; como dijo Pablo: “la palabra de
Dios está cerca de ti, en tu boca y en tu corazón” (Rom.10:8). Abra su boca, es solo
abrirla y tú serás transformado, hable con la boca, crea con el corazón y tú estarás
tomando de ese árbol de vida, que es la vid.

Cuando Dios creó al hombre, colocó el árbol de la vida en el paraíso (Gn.2:9).


Después que él pecó el camino fue cerrado (Gn.3:22-24). Hoy; sin embargo, fue
abierto por Cristo (Hb.10:19-20). Al vencedor de la iglesia de Éfeso fue prometido
comerlo (2:7), mas ahora se dice que en la eternidad, todos los redimidos comerán.

El árbol de la vida produce doce frutos por un año, uno a cada mes, para mostrar
que el suplemento de Dios es superabundante y estará disponible al hombre por
toda la eternidad.

¿Tú consigues imaginarte un árbol que produce doce tipos de frutos? Eso nos habla
de las riquezas de Cristo, nos habla de la diversificación y de la abundancia que Él
nos ofrece; o sea, con Él nunca quedamos hastiados, porque el Señor siempre trae
cosas nuevas, Él es siempre nuevo, el hecho de ser el fruto mensual nos muestra
que siempre está fresco y nuevo. Esos frutos serán nuestro alimento para la
eternidad.
305

A pesar de que la nueva Jerusalén no necesita “del sol ni la luna, porque la gloria de
Dios la ilumina y el cordero es su lámpara” (21:23), parece que aquí en la tierra, el sol
y la luna continuarán existiendo normalmente; porque es dicho que el fruto del
árbol es mensual. Y como es mediante el ciclo solar que son establecidos los días,
los meses, el sol todavía será necesario.

Después del milenio, cuando existan nuevos cielos y nueva tierra, la nueva Jerusalén
descenderá del cielo permaneciendo suspensa en algún lugar en el aire, de donde
servirá de luz para las naciones. Ellas continuarán existiendo, pues andarán
mediante su luz y los reyes de la tierra le traerán su gloria (21:24). No habrá más
pecado ni la muerte aquí en la tierra, porque las naciones serán restauradas y van
andar en la luz del Señor.

Ap. 22:2 En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la
vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la
sanidad de las naciones.

A pesar de la muerte de haber sida lanzada en el lago de fuego y azufre, los pueblos
que existirán en la tierra todavía necesitarán de ser perfeccionados y ellos serán
servidos con las hojas del árbol de la vida.

Existe un principio de interpretación bíblica llamado de la primera mención, según


este principio, la primera mención de cualquier asunto en la Biblia determina su
sentido, en líneas generales en el resto de la Biblia. La primera mención de las hojas
está en Génesis tres. Cuando Adán y Eva pecaron, la primera cosa que hicieron
fueron cintas de higos (Gn.3:7). La primera mención de hoja en la Biblia fue una
tentativa humana de cubrir el pecado; por eso las hojas significan obras.

Esas hojas aquí en Apocalipsis son para cura, el v.3 dice que no habrá más maldición.
Enfermedad es maldición; por tanto las enfermedades dejarán de existir, cura aquí
debe tener el sentido de perfeccionamiento, mismo el perfecto puede ser
perfeccionado. Observe un bebé cuando nace, él es perfecto, pero todavía necesita
ser perfeccionado por el crecimiento.

Sabemos que el Señor Jesús es el propio árbol de la vida, así las hojas del árbol son
las obras del Señor Jesús; eso significa que aquello que Él hizo servirá para traer
perfección para las naciones eternamente. En el v.4 leemos que “sus siervos lo
servirán, contemplarán su rostro y en su frente está el nombre de Él”. Esa será señal
de prosperidad eterna.

Hay tres cosas fundamentales en ese texto: el trono de Dios, el río de vida y el árbol
de la vida; esos son tres elementos básicos de la eternidad. El trono de Dios
establecido y nosotros como su novia, tendremos su nombre escrito en nuestra
306

frente y habrá un río y un árbol, porque Dios mismo será nuestra provisión de vida;
Él va ser todo para nosotros: nuestra satisfacción y nuestro placer.

Ap. 22:5 No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol,
porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.

En la nueva Jerusalén no habrá noche ni tinieblas; pero en la tierra el día y la noche


todavía continuarán. La tierra será iluminada por el brillo de la nueva Jerusalén, en la
palabra tenemos una promesa que dice:

Sal. 121:5 Jehová es tu guardador;


Jehová es tu sombra a tu mano derecha.

Eso significa que donde vamos el Señor va junto con nosotros como una sombra, la
sombra solo se manifiesta en la presencia de la luz. Así cuando alguien anda en la
oscuridad, no hay proyección de sombra. Entre tanto, cuando tú andas en la luz de
Dios, la presencia del Señor – como una sombra se proyecta de su lado. Quien anda
en las tinieblas no tiene sobre si la sombra protectora de Dios; por eso tropieza y
cae. Las tinieblas son un lugar de desobediencia y de pecado, en fin, las tinieblas son
cualquier lugar o circunstancia fuera de la voluntad de Dios.

Los siervos del Señor, cuyas frentes están marcadas con el sello de Dios, reinarán
sobre todo el universo. Otro día un hermano me preguntó si creo en la existencia de
extraterrestres, yo no digo que no creo, pero una cosa yo tengo certeza: ninguna
criatura es superior al hombre. ¿POR QUÉ? Porque hay un solo Dios en todo el
universo, Él resolvió tomar la forma de hombre, hoy Jesús está a la diestra de Dios y
Él es hombre. En Jesús, Dios se tornó hombre, ¿no es misterioso eso? Eso significa
que Dios divinizó el hombre en si mismo. Si existe alguna criatura en otro planeta,
debe ser una ameba, un virus o alguna cosa así. ¿Sabe por qué? Porque no hay nada
superior al padre y Dios en Cristo es hombre y es Dios también.

4. El Señor viene sin demora – 22.7-21

Mismo que el libro de Apocalipsis haya sido escrito hace 20 siglos atrás, creemos
que la vuelta del Señor está cerca; si estaba próxima en aquellos días, cuanto más
hoy. Seremos bienaventurados si guardamos las palabras de la profecía (1:3 y 21:7).

Ap. 22:7 ¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la
profecía de este libro.

Esta expresión es repetida más de dos veces: en los versículos 12 y 20, eso revela su
importancia. Por tanto, el carácter de urgencia que ese mensaje expresa no puede
ser subestimado o ignorado por nosotros. La vuelta de Jesús, no hay duda,
acontecerá después de una serie de señales: el anticristo, el número de la bestia,
307

etc. Todavía, el arrebatamiento de la iglesia no será precedida de ninguna señal; por


eso necesitamos vigilar y orar para no ser sorprendidos.

Ap. 22:8 Yo Juan soy el que oyó y vio estas cosas. Y después que las hube oído y visto, me
postré para adorar a los pies del ángel que me mostraba estas cosas.
Ap. 22:9 Pero él me dijo: Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus
hermanos los profetas, y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios.

El Señor usó un ángel para mostrar a Juan que ninguna otra criatura puede ser
adorada, sino Dios. Uno de los ángeles que traía una de las siete Copas mostró a
Juan esas cosas, era un ángel extraordinario que el propio Juan – uno de los
apóstoles y que vio a Jesús glorificado en el cap.1, supuso que él merecía ser
adorado. Que cosa impresionante, mas el ángel se recusó ser adorado por Juan y le
dijo: adora a Dios.

Ap. 22:10 Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo
está cerca.

Al contrario del libro de Daniel, cuya revelación el ángel Gabriel mandó que fuese
sellada hasta el tiempo del fin (Dn.12:4), Apocalipsis es un libro abierto a todos:
puede ser leído y analizado bajo todas las formas. Quien creó la idea de que
Apocalipsis es un libro difícil, por causa de esos símbolos fue el diablo. En este
estudio, Apocalipsis fue abierto delante de ti.

Ap. 22:11 El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía;
y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía.
Ap. 22:12 He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno
según sea su obra.

Observe que el énfasis para nosotros, los creyentes es este: vengo sin demora y
conmigo está el galardón. El Señor está hablando con los creyentes a los cuales
promete recompensar de acuerdo con las obras de cada uno. Galardón significa
originalmente, salario que solo es pagado para quien trabajó. Nosotros los
creyentes, vamos comparecer delante del Señor para prestarle cuentas de lo que
hicimos y dejamos de hacer, y entonces recibiremos galardón o reprensión.

Ap. 22:13 Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último.


Ap. 22:14 Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y
para entrar por las puertas en la ciudad.

El árbol de la vida solo podrá ser tocada por aquellos que tienen el nombre inscrito
en el libro de la vida, o sea: aquellos que lavaron sus vestidos en la sangre del
cordero.

Ap. 22:15 Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los
idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira.
308

Canes, aquí no son animales, son personas. Entres los canes, se encuentran los
idolatras, ellos quedarán del lado de afuera de la ciudad celestial y no tendrán
derecho al árbol de la vida.

Ap. 22:16 Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias.
Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana.

Por un lado, Jesús es la raíz de David – el Mesías de los judíos para los cuales Él
volverá conforme a la alianza con Abraham, por otro lado, Él es la estrella brislante
de la mañana – el novio que volverá para buscar a su novia, la iglesia.

Ap. 22:17 Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed,
venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.

El texto presenta en primer lugar, el Espíritu y la novia. ¿Qué Espíritu es ese? el


Espíritu Santo de Dios, ¿Y la novia? La iglesia. El Espíritu y la novia están en
concordancia cuando ella se llene del Espíritu. El Espíritu y la novia transbordante de
la unción dicen para el novio, que es Jesús: “ven”. El texto exhorta a todos que
oyeron el llamado de la novia a hacer lo mismo: “ven Señor Jesús” – ese es el clamor
que no puede perderse en nuestros corazones. Pablo afirma que la corona de la vida
será concedida a aquellos que aman la venida del Señor Jesucristo (2Tm.4:8).

Ven pronto Señor Jesús y desmascara todo el engaño del diablo, ven pronto Señor e
implanta tu reino de justicia, de pureza y santidad. Ven pronto Señor Jesús y disipa
las tinieblas de la idolatría. Esa misma iglesia, que por el Espíritu llama por la venida
de Jesús, también llama por la salvación, diciendo: “quien tiene sed venga, venga y
beba gratuitamente del agua de la vida”. Si hay un clamor en nosotros por la vuelta
de Jesús, debe haber también un deseo por la salvación de los pecadores – las dos
cosas caminan juntas.

Si queremos ser una iglesia de vencedores, tenemos que levantar nuestra voz y
proclamar a los perdidos: “vengan y beban gratuitamente del agua de vida, vengan
y zambullan en ese río que sale del trono de Dios”. Que cada miembro de la iglesia
siente el encargo de ganar vidas por Jesús, que ellos sean tomados por la
desesperación de conquistar sus familias, vecinos y amigos, que nuestros hogares
se transformen en iglesias, que nuestra luz brille intensamente por todos los cantos
de nuestra ciudad, que las células se multipliquen por todas partes y que en esa
multiplicación perdamos totalmente el control de todo, porque así el Señor estará
en control de nuestras acciones.

Yo se que al final de este estudio, el Espíritu de Dios habrá despertado dentro de ti


un clamor de la novia: “ven Señor Jesús, ven Señor Jesús” que haya un clamor en su
espíritu diciendo: ven Jesús, después de leer este libro, el Espíritu Santo comenzará
a clamar dentro de nosotros. Si usted es alguien que ha andado en el Espíritu, si el
309

trono de Dios ha sido erigido dentro de su corazón, si el río de la vida ha fluido en su


interior; entonces ese río que es el Espíritu Santo, va comenzar a clamar dentro de
usted diciendo: ¡Ven, ven, Señor!

Ore para que el Señor establezca su reino aquí, que venga el reino de la justicia, que
cesen los robos, el fraude, los secuestros, que cese la muerte, los asesinatos, las
violaciones, la violencia. Que venga el reino del príncipe de paz. Oh querido lector,
no podemos ver un telenoticiero y no tener ese clamor dentro de nosotros. Que el
Señor genere en ti una santa indignación con la inmoralidad promiscua de nuestro
tiempo, con el amor enfriándose en casi todos los hombres y afrontan a Dios
negando la realidad del altísimo. Que eso produzca en ti una súplica: venga tu reino.
Yo quiero que después de leer este libro, el Espíritu Santo pueda generar en ti ese
clamor; y que podamos ser una generación, un pueblo, una nación de hombres y
mujeres de Dios que saben que son la novia, que están apasionados y que puedan
decir: Maranata, ven Señor Jesús.

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