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El sujeto de derecho.

Persona.

Proviene del latín “personae”. Persona se les denominaba a las máscaras usadas en el teatro romano.

En sí, los romanos no construyeron una teoría general sobre quien era persona.

La dogmática moderna llama persona a quien tiene capacidad jurídica, aptitud para ser titular de derecho.

En Roma habían 3 estatus que daban a la persona capacidad jurídica. Status libertatis (ser libre), Status
civitatis (ciudadano romano), y status familiae (jefe de familia o sui iuris).

El derecho privado romano reconoció 2 categoría de personas, las físicas y las jurídicas (patrimoniales, sin
naturaleza humana.

Con respecto a los estatus, cuando se habla de Status libertatis, el hombre podía ser libre o esclavo.

Status Civitatis, romano o no ciudadano. Status Familia, jefe de familia o sometido al paterfamiliae.

Principio y extinción de la persona física.

El nacimiento era el comienzo de la existencia física. Primero, el que estuviera separado del cordón
umbilical. Para los sabinianos, la existencia de la persona física se daba cuando comenzaba a respirar,
mientras que para los proculeyanos cuando comenzaba a llorar, y obviamente que tenga forma humana.

El nasciturus carecía de personalidad jurídica por eso no podía ser titular de derecho y obligaciones.

La persona física se extingue con la muerte.

Capacidad jurídica y capacidad de obrar/hecho.

El sujeto de derecho es el que tiene capacidad jurídica y que goza de los 3 status, esta capacidad jurídica se
complementaba con la que le permitiera ejercerlos por sí mismo sus derechos que vendría a ser la capacidad
de obrar.

La falta de capacidad constituye la incapacidad, que puede ser de derecho, cuando la persona carece de
aptitud legal para ser titular de algún derecho o de hecho, si le falta aptitud para ejercer por sí misma los
derechos.

Incapacidad de derecho: en el caso del gobernador de una provincia, este no podía contraer matrimonio con
mujeres domiciliadas en su jurisdicción, ni adquirir inmuebles enclavados. Los tutores y curadores estaban
inhabilitados a adquirir los bienes de su pupilo.

Incapacidad de hecho se debe distinguir capacidad absoluta (menores de 7 años “minor infans”. Los
dementes se encontraban en una situación parecida “furiosi”) o relativa (maior infans. También se
encontraba la mujer).
Causas modificativas de la capacidad.

Diversas circunstancias civiles, naturales, y sociales provocaban modificaciones en la capacidad jurídica de la


persona, así como la degradación del honor, la religión, la condición social, la profesión. Otras repercutían
sobre la capacidad de obrar para eliminarla o restringirla como la edad, el sexo, las enfermedades.

“STATUS LIBERTATIS”.

Ocupaba el primer rango, pues la degradación provocaba una extinción en cuanto la personalidad, ya que si
perdía la libertad, también perdía la ciudadanía y el derecho de familia. Era como la muerte civil.

“STATUS CIVITATIS”.

Únicamente los que gozaban de la ciudadanía romana eran capaces de derecho. Se dividían en 2 clases, los
ciudadanos romanos y los peregrinos. Entre ambos se encontraba una clase intermedia llamada latinos.

En el 212 por Antonino Caracalla, la ciudadanía se extendió a todos los súbditos libres del imperio.

Los peregrinos no gozaban del Ius civile. Tenían que pagar un impuesto especial.

Ciudadanos, peregrinos y latinos.

En Roma, era ciudadano por nacimiento, o por liberación de la esclavitud o por concesión de la autoridad.
Eran ciudadanos por nacimiento los hijos concebidos por padres unidos en legítimo matrimonio y también el
hijo nacido de madre ciudadana. Las manumisiones solemnes hacían de un esclavo a un hombre libre y
romano. Por concesión llegaron ser romanos, los extranjeros que formaron parte del ejercito romano.

Los extranjeros eran ahombres libres de otras ciudades (no bárbaros). Había 3 clases de peregrinos. Los
llamados “pregrini dediticii” que eran miembros de pueblos que habían resistido a la dominación romana,
los “peregrini alicuius civitatis” miembros de pueblos unidos a Roma por Alianzas.

Entre el medio de estos 2, estaban los latinos que se distinguían en 3 clases. Los “latini veteres” estaban en
una condición más favorable. Gozaban de derecho público y privado. Los “latini coloniarii” solo del ius
commerci y los “lattini iuniani no podían testar, ni ser instituidos como herederos por testamento, cosa que
los latini coloniarii sí.

“STATUS FAMILIAE”.

Situación en la que se encontraba un hombre libre y ciudadano con relación a una determinada familia. L

Las personas, de acuerdo con el status familiae, se distinguían en Sui Iuris y Alieni Iuris.

“SUI IURIS” Y “ALIENI IURIS”.

Sui iuris era el sujeto autónomo de cualquier potestad familiar, el ciudadano que no tuviese ningún
ascendiente legítimo masculino vivo que fuese libertado de la potestad paterna mediante la emancipación.
El hombre sui iuris denominado paterfamilias. Esta condición se le daba sólo al hombre. No a la mujer.
La persona sometida al poder familiar, cualquiera que fuese su sexo o edad, era ALIENI IURIS,
comprendiéndose entre ellas al Filiusfamilias, descendiente legítimo o hijo adpotvio de un paterfamilias.

Los Sui iuris gozaban de plena capacidad jurídica. Podía ser titular de 4 potestades: la patria potestas (poder
del paterfamilias sobre sus hijos y personas agregadas al grupo familiar, la Dominica Potestas (poder sobre
los esclavos), la Manuu maritalis (sobre la esposa) y el Mancipium (potestad que ejercía sobre un hombre
libre, entregado por un delito cometido).

El Filiusfamilias se encontraba en una situación distinta a la del Pater, no en cuanto al goce de derechos
públicos, sino en lo relativo a los derechos privados, dado a que los Alieni Iuris tenían una capacidad
restringida debido a la situación de dependencia en la que se encontraba respecto del pater. Los Filos no
podían contraer matrimonio sin autorización del pater. Los bienes que adquirían se incorporaban al
patrimonio del pater.

REPRESENTACIÓN DE LOS INCAPACES.


TUTELA Y CURATELA.

Las personas plenamente capaces eran titulares de sus derechos. El derecho romano admitió que los
incapaces de hecho tuvieran un representante legal. Esta función de tutor estaba basada en la edad, sexo,
enfermedad mental, etc. Estaba la Tutela y la Curatela.

Los hijos a la muerte del pater pasaban a ser sui Iuris, adquiriendo plena capacidad de derecho. Incluso los
Sui Iuris impúberes (menores de 14) y las mujeres de cualquier edad. Aún así, debían ser sometidos al poder
de un tutor.

El tutor era el cargado de proteger al impúber y a las mujeres bajo su tutela y también los bienes
patrimoniales.

Aparte de la tutoría estaba también la curatela, institución creada para proteger el patrimonio de las
personas que no estaban bajo la tutela. Estaba destinada a proteger el patrimonio de los enfermos mentales
y pródigos.

La diferencia entre ambas instituciones es que la tutela correspondía en casos de incapacidad, como edad y
sexo, en cambio la Curatela, aparecía cuando mediaba una causa particular o accidental. Como en el caso de
una persona incapaz, pero antes había gozado de plena capacidad.

TUTELA DE LOS IMPÚBERES.

Las personas Sui Iuris que no habían alcanzado la pubertad necesitaban por su incapacidad de obrar un tutor
para realizar los negocios jurídicos en su nombre, los cuales el no podía realizarlo por sí mismo.

En sí, el tutor debía sustituir al padre del incapaz, debía defender el patrimonio del pupilo. Ahora la defensa
del pupilo en lo educacional correspondía a los parientes.

Ya en épocas del cristianismo se admite que las mujeres puedan realizar la función de tutor.
FUNCIONES DEL TUTOR: AUCTORITAS Y GESTIO.

Auctorititas era el acto por el cual el tutor con su presencia prestaba al pupilo asentimiento para la
realización de negocios jurídicos del impúber, convirtiendo este acto, de invalido, a uno dotado de validez.

Cuando el impúber era menor de 7 se trataba de un INFANTIA MINOR. Para realizar un negocio jurídico el
tutor debía actuar por medio del Gestio. No había necesidad de cooperar con el pupilo en sus actos
jurídicos, sino de celebrarlos si necesidad siquiera de su presencia. Se trataba de una representación legal
necesaria.

Al terminar las relaciones derivadas de la tutela, el tutor está obligado a transmitir al pupilo los derechos
que hubiera adquirido como consecuencia de la Gestio.

CESACIÓN DE LA TUTELA.

Cesaba por causa del impúber. También en caso de que el tutor sea remplazado por otro. Cuando caía en
capitis demanutio máxima cuando se cumplía la condición resolutoria o se producía el vencimiento del
término fijado por el testador.

TUTELA DE LAS MUJERES.

Las eran impúberes estaban sometidas a la tutela impuberum, si ya alcanzaban la pubertad a la tutela
malierum. Con la progresiva independización de la mujer, esta institución fue disminuyendo en importancia.

Las funciones del tutor debido a que la mujer sólo tenía incapacidad relativa de obrar, se reducían a la
interposición de la auuctoritas para dar valizidez a dterminados negocios jurídicos. En ningún caso el tutor
actuaba por gestio.

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