Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Averigüe lo que se mide en la tubería o el depósito para que pueda seleccionar materiales
compatibles con el fluido del proceso. Todas las partes en contacto con el medio del
instrumento , deben estar fabricados de materiales resistentes a la corrosión. El material por
defecto es el acero inoxidable 316 L, pero para aplicaciones específicas existe una gran
variedad de materiales como Hastelloy, Monel, etc.
Un separador dispone de una membrana flexible para separar el fluido de medición del
elemento sensible. La presión del medio provoca una flexión de la membrana que se
traslada a un líquido en el interior del separador. Este líquido a su vez transmite la presión a
un mecanismo para generar un movimiento rotatorio de la aguja para visualizar los valores
de presión del proceso.
ambientes muy agresivos se recomienda manómetros con materiales especiales como por
ejemplo Monel. En estos casos conviene seleccionar instrumentación homologada por
NACE (National Association of Corrosion Engineers).
Los manómetros de acero inoxidable a partir de diámetro 100 aguantan solo puntualmente
una sobrepresión de 30%. La mejor práctica consiste en seleccionar un rango que equivale
aproximadamente el doble de la presión normal de servicio. Si, por ejemplo, la presión
normal del servicio es de 8 bar, el manómetro debe disponer de una escala de valor final de
16 bar o más.
Las condiciones relevantes que provocan el mayor desgaste son las vibraciones mecánicas,
temperaturas extremas, pulsaciones y picos de presión. En caso de vibraciones se
recomienda una caja con relleno de líquido. En casos extremos se debe seleccionar una
versión del tipo Direct Drive. Para contrarrestar fuertes pulsaciones se debe montar un
limitador de presión o una válvula.
Los manómetros de proceso están diseñados con tubos tipo Heavy Duty y otros
componentes. Hay que evitar aplicar tipos estándar en aplicaciones extremas para evitar
roturas de tubo.
Los procesos industriales requieren condiciones exactas para unos resultados óptimos. En la
mayoría de los procesos se exige una exactitud con un margen de 1% del valor final. Se
debe verificar periódicamente esta exactitud para mantener la seguridad de proceso.
9 – Seleccione un medidor con una esfera legible Parece una obviedad pero en la practica
se aprecia a menudo instrumentación con indicación analógica que no corresponde a las
normativas vigentes. Se debe seleccionar exclusivamente instrumentos que cumplen las
normativas EN 837 – 1 expresamente indicado en la esfera. Solamente así se asegura la
visibilidad correcta.