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Instituto Tecnológico Superior de Tlaxco

División de Ingeniería Química.

Agosto-Diciembre 2019

Ingeniería de costos.
Catedrático: Margarito Manuel Desales

Investigación:

Nombre del alumno: Andrea Pérez Báez


1. Amortización.
1.1. Definición y concepto.

La definición de amortización en el ámbito de la economía es la depreciación o


reducción del valor de un activo o pasivo. Por su parte, en términos
empresariales, el concepto de amortización presenta varias acepciones aunque
siempre asociadas al valor de un bien o pasivo con la vida útil del mismo.

La amortización hace referencia a la pérdida de valor que registra cualquier


elemento con el paso del tiempo, de ahí que se defina como una manera de
cuantificar la pérdida de valor.

El término amortizar se define como la manera de distribuir el coste de una


inversión como gasto durante los periodos en los que esa inversión va a permitir
conseguir ingresos. Este concepto es la expresión contable de la depreciación que
sufren los elementos del inmovilizado, ya sea por motivos tecnológicos, el paso del
tiempo o el uso. A los gastos generados por la actividad empresarial debe
sumarse la amortización del inmovilizado material.

La amortización facilita el cálculo de los gastos, cuya diferencia con los ingresos
contribuye a obtener el cálculo del resultado de explotación y valorar
el patrimonio de una compañía. A través de este término se añade a los productos
el gasto de la depreciación.

1.2. Objetivos de la aplicación de la amortización.


 Mostrar contablemente la pérdida de valor de los elementos que se amortizan
 Permite conocer el valor neto de los elementos.
 Distribuye durante los años de vida útil de los productos que se amortizan el
coste originado por la depreciación de ellos.
 Detraer de los beneficios la parte de amortización que compensando la pérdida
de valor del inmovilizado permita a la compañía conservar los recursos
precisos para evitar la descapitalización.
2. Depreciación.
2.1. Definición y concepto.

La depreciación es la pérdida de valor de un bien como consecuencia de su


desgaste con el paso del tiempo.

Este concepto se relaciona con la contabilidad de un bien, dado que es muy


importante dotar provisiones en una empresa para que sus gestores tengan en
cuenta la pérdida que se produce año tras año del valor en libros de ese activo.

La depreciación permite aproximar y ajustar el valor del bien a su valor real en


cualquier momento en el tiempo.

 La depreciación es una parte de la contabilidad muy importante que se


debe tener en cuenta en la valoración los bienes de una empresa, tanto
inmovilizado material como inmovilizado inmaterial u otro tipo de bienes. De
no contabilizarse, no se cumplirían las normas de contabilidad internacional
y la empresa podría tener graves multas económicas, ya que no estaría
informando correctamente a sus accionistas o a los inversores acerca de
sus cuentas anuales.
 La depreciación supone valorar un bien de forma racional y debe analizarse
con mucho rigor, especialmente en aquella donde el valor de los activos es
muy elevado, como por ejemplo los edificios, ya que una incorrecta
dotación por depreciación de un activo puede perjudicar gravemente al
balance de una empresa y puede hacer que la empresa llegue a quebrar
dado que no ha contemplado una situación real del valor de sus activos en
caso de que requiera de liquidez y tenga que venderlos.

Algunos ejemplos de bienes que se deprecian pueden ser un edificio o un


coche, éste último ejemplo es muy conocido ya que existen análisis que
indican que el valor de un coche se deprecia en 10% de forma anual sobre su
precio original. Esto no es una fórmula exacta, pero sí que es una
aproximación.

Muchos analistas utilizan otros valores o cálculos de depreciación que tienen en


cuenta otras variables relacionadas con la oferta y la demanda, como por ejemplo
el número de Kilómetros, el año de fabricación del coche, el estado del coche, el
color del coche, el registro de partes de accidente realizados, las revisiones del
coche llevadas a cabo.

Por tanto, en el ejemplo en cuestión, se puede ver que no existe un modelo único
o estándar de contabilizar la depreciación de un activo.

2.2. Métodos de depreciación.

2.2.1. Método de la línea recta

Es el método más fácil de utilizar. Para calcularlo, únicamente hay que dividir el
valor original del activo a depreciar entre sus años de vida útil.

Depreciación anual = Valor del activo/vida útil

Por lo tanto, para calcularlo lo primero que hay que hacer es calcular la vida útil
del activo que va a depreciarse.

Vida útil de los activos fijos:

Por ley, a los bienes inmuebles se les suele aplicar una vida útil de 20 años, 10
años a los bienes de mobiliario y maquinaria y algunos transportes (trenes,
aviones y barcos), y 5 años a los vehículos y equipos informáticos.

Además de la vida útil, hay que tener en cuenta otro dato denominado el valor
residual o de salvamento de los activos. Este valor es el que se calcula que tendrá
el activo una vez finalizada su vida útil; es decir, cuánto dinero se podrá obtener
del mismo. Este valor no es obligatorio en el cálculo.
Una vez sabemos los años de vida útil y el valor residual del activo en cuestión, se
puede realizar el cálculo de la depreciación.

Ejemplo.

Pongamos el ejemplo de que compramos una furgoneta por un valor de 30 000 €.


La vida útil del vehículo, como hemos comentado en el párrafo anterior, es de 5
años.

Dividiendo, nos sale que 30 000/5 = 6 000 €, lo que sería la depreciación anual. Si
se quiere conocer la depreciación mensual, únicamente hay que dividir esta cifra
entre los 12 meses del año, o la original entre los 60 meses de los 5 años. Esto
nos daría un resultado de 500 € por mes.

Por lo tanto, con el método lineal la depreciación sería completamente equitativa;


es decir, la misma para todos los periodos, ya sean días, meses o años de vida útil
del activo.

2.2.2 Método de la suma de los dígitos del año.

Este es un sistema acelerado que aumenta la cuota anual de depreciación durante


los primeros años de utilización, para luego disminuir según van pasando los años.
Para ello se aplica la fórmula siguiente:

(Vida útil que le queda al activo/suma dígito)*Valor original del activo.

Para calcularla se necesita el valor de la suma de dígitos, que se calcula de la


forma siguiente: (V (V +1)) / 2 (V=Vida útil total del activo).

Ejemplo:

En el ejemplo anterior de la furgoneta, la suma de dígitos nos daría: (5(5+1))/2=15


De esta forma, la fórmula final quedaría así: (5/15)*30 000= 10 000 €

Esto quiere decir que el primer año la depreciación de la furgoneta sería de 10 000
€, y no de 6000 como en el método de línea recta.

En cambio, para el segundo año la vida útil pasaría a ser 4 años en vez de 5;
luego el cálculo varía. Al hacer los cálculos, en este otro año nos daría: (4/15)*30
000= 8 000 €.

Lo mismo haríamos con el resto de años, que van teniendo una depreciación cada
vez menor.

2.2.3. Método de la reducción de datos.

Este método también busca una rápida depreciación. Para implementarlo es


necesario tener el valor residual del activo en cuestión. La fórmula es la siguiente:

Tasa de depreciación = 1- (Valor residual/Valor activo) 1/V, donde V es la vida


útil del activo.

Ejemplo.

Volvamos a la furgoneta. Si tenemos en cuenta un valor residual o de salvamento que


sea un 10 % del valor total (10 % de 30 000= 3000 €), la fórmula quedaría así:

Tasa de depreciación= 1 – (3000/30 000)1/5= 0,36904

Una vez con este dato, se aplica al valor original del activo:

30 000* 0,36904 = 11 071,2 € que se depreciarán el primer año.

Para el segundo año, el valor será (30 000 -11 071,2) = 18 928,8
Por lo tanto, la depreciación del segundo año será la siguiente:

18 928,8* 0,36904 = 6985,5 €

Y así sucesivamente, teniendo cada año una menor depreciación hasta el fin de la
vida útil del vehículo.

2.2.4. Método de las unidades de producción.

Este método, al igual que el de la línea recta, realiza una distribución equitativa de
la depreciación todos los años de vida útil. Como indica su nombre, tiene en
cuenta las unidades producidas por el activo, con lo que es un sistema adecuado
para calcular la depreciación de maquinaria o equipos que producen unidades. En
el caso anterior de la furgoneta sería más complicado, ya que habría que calcular
cuántas unidades ayuda a fabricar la misma.

Para calcularlo, en primer lugar hay que dividir el valor del activo por el número de
unidades que produce en el total de su vida útil. Una vez hecho esto, en cada
periodo se tiene que multiplicar el número de unidades de ese periodo por la
depreciación correspondiente de cada unidad.

Ejemplo.

Esta vez tenemos una máquina con un valor de 100 000 €, que en toda su vida
produce 2000 unidades.

Por lo tanto, 100 000 /2000 = 500. Esto significa que cada unidad producida tiene
un coste de depreciación de 500 €.

En el caso de que el primer año la maquinaria produjese 200 unidades, la


depreciación de ese año sería de 200*500= 10 000 €.
En cambio, si en el segundo año produce 300, la depreciación entonces será de
300*500=15 000 € en el segundo año.

Y así lo haríamos de forma sucesiva para el resto de los 10 años útiles que posee
la máquina.

Bibliografía.

Raymond H. Peterson, Depreciación, John Wiley and Sons, Inc., 2002. Recuperado de:
https://www.lifeder.com/metodos-depreciacion/

Garcia, I. (01 de 12 de 2017). Economia simple.net. Recuperado el 27, Viernes de 09 de


2019, de https://www.economiasimple.net/glosario/amortizacion

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