TEORÍA DE LOS QUEBRANTOS

La teoría de los quebrantos de las expectativas fue presentada en un inicio por Judee
Burgoon y Jones como una teoría sobre la comunicación no verbal. Intentaron explicar
las reacciones que tienen las personas cuando alguien inesperadamente quebranta los
limites socialmente establecidos de su espacio personal. Sin embargo, pasando los años
esta teoría se ha expandido para englobar conductas tanto verbales como no verbales,
extendiendo así su rango para incluir aplicaciones en el ámbito emocional, marital y de
comunicación intercultural.

El tema central de esta teoría es que todas las personas tienen expectativas de cómo debe
de llevarse a cabo una interacción. Estas expectativas incluyen comportamientos como la
distancia física durante la interacción, la expresión fácil, el ritmo discursivo, el volumen
de la voz, el contacto visual, la inclinación del cuerpo, el tacto y muchos otros. En gran
medida, las personas no están conscientes de estas expectativas hasta que son violadas o
quebrantadas. Cuando alguien se para muy cerca o demasiado lejos, mira fijamente o
toca, es entonces cuando se es consciente que las expectativas de la interacción han sido
violadas. Esta descripción de las expectativas es el corazón de la teoría.

Para Burgoon, los humanos tienen cierto grado de libre albedrío porque pueden
inspeccionar e interpretar la relación y el vínculo que tiene con su compañero de
conversación, y dependiendo del resultado que se quiere lograr con la otra persona
deciden si quebrantar o no sus expectativas.

En cuanto al conocimiento, la teoría de los quebrantos supone que existe una única verdad
por conocer. Esta única verdad consiste en normas para todas las actividades
comunicativas, y cada quebranto que se hace a cada una de estas normas tiene resultados
específicos y predecibles.

La teoría de los quebrantos de las expectativas se basa en la manera como se presentan

los mensajes a los otros y los tipos de comportamientos que los otros adoptan durante la
conversación. Los postulados que guían la teoría son los siguientes:

1. La interacción humana está dirigida por expectativas, es decir, la gente posee

expectativas con respecto a sus relaciones con los demás. La expectativa es una
predicción. Mentalmente se procesa el contexto, el tipo de relación y las
características del comunicador con el fin de predecir su comportamiento. Las
expectativas incluyen los comportamientos verbales y no verbales.
 » Contexto: Se refiere a las normas culturales que se representan en
diferentes situaciones
» Factores de relación: Incluyen la similitud, familiaridad, aficiones y
estatus relativo.
» Características del comunicador: Incluyen la edad, sexo, características
de la población del lugar de nacimiento, apariencia física, personalidad y
estilo de comunicación.

Burgoon afirma que la estructura de las expectativas es similar en todas las

culturas, sin embargo, el contenido de esas expectativas difiere notoriamente entre
una cultura y la otra.

2. Las expectativas sobre el comportamiento humano son aprendidas, la teoría

asume que las personas aprenden sus expectativas de la cultura en general y de
los individuos pertenecientes a esa cultura.
3. Las evaluaciones de la desviación están medidas por el valor de recompensa
del comunicador, “El valor de recompensa del comunicador” se refiere a la
tendencia humana de evaluar una persona, dependiendo de la recompensa
potencial que pueden ofrecer. Las preguntas de ¿Qué puede hacer el por mí? Y
¿Qué me puede hacer a mí? Cruzan por nuestras mentes continuamente cuando
alguien sobrepasa nuestras expectativas. Son varias las recompensas que un
comunicador puede ofrecer a otro, entre ellas, las sonrisas, el asentir con la cabeza,
la atracción física, la similitud de actitudes, el poder, el estatus, el nivel
socioeconómico, la credibilidad o la competencia. Burgoon cree que las personas
tienen la capacidad de recompensar o castigar en una conversación, y manifiesta
que los individuos aportan características tanto positivas como negativas a una
conversación. Le llama a esto “La potestad del comunicador de recompensar”. Lo
más importante es lo que se transmite en la conversación, se suele desilusionar de
una conversación que muestra desinterés, desaprobación, desconfianza y rechazo.
4. Valoración del quebranto, las expectativas no se definen en términos absolutos,
sino que operan dentro de un determinado rango. Según Burgoon, primero
interpretamos el significado del quebranto y luego definimos si nos gusta o no.
De manera similar, cuando se considera quebrantar las expectativas del otro,
primero se evalúa el resultado que se tendrá el quebranto, y después se considera
llevarlo a cabo o no. El significado de algunos quebrantos es fácil de deducir.
 Cuando el comportamiento tiene un significado social reconocido, los
comunicadores pueden fácilmente saber si pueden ir más allá de los que otros
esperan. Por otra parte, si la valoración es negativa, o sea si se evalúa que la acción
no será bien recibida, se debe de hacer menos de lo que el otro espera. Sin
embargo, si la valoración es positiva, es decir, si la conducta es apreciada por el
otro, debemos de ir por el máximo. Por otro lado, algunos quebrantos de las
expectativas pueden ser ambiguos y abiertos a múltiples interpretaciones. La
valoración del quebranto es diferente a la valoración de la recompensa. La
valoración del quebranto se centra en una valoración misma.

Para finalizar, Burgoon reconoce que no se puede usar esta teoría para situaciones
específicas referentes a los resultados de contacto fisico. Ella recomienda hacer mayor
trabajo descriptivo antes de aplicar la teoría a cualquier comportamiento no verbal.
La teoría tiene dos defectos: No describe completamente la vasta reciprocidad en las
interacciones y no explica si la valoración del comunicador sustituye la valoración del
comportamiento o viceversa. Sin embargo, esta teoría contiene criterios de una buena
teoría científica, los cuales son: Avanza hacia una aplicación razonable, explica
claramente lo que tiene lugar en la mente de los comunicadores y como pueden
controlar estos el comportamiento verbal y el modelo brinda consejos prácticos para
lograr una mejor manera de las metas de la comunicación ( credibilidad, influencia y
atracción).