Sunteți pe pagina 1din 6

LA TÉCNICA PIKOPIKO

Pikopiko es una palabra hawaiana que significa “centro con


centro”. Esta técnica, que aprendí de mi tío, en principio
consiste en trasladar su atención de un lugar a otro, en
conexión con respiración profunda.

La respiración ayuda a mantener la atención y a aumentar la


energía mental. Hay numerosas variantes y formas de aplicar
esta técnica.

A continuación presentaré cuatro, que son las más útiles para la


sanación inmediata. Cada una de ellas se puede practicar
sentado, de pie, caminando o acostado.

Nuevo ímpetu con pikopiko

Inhale mientras dirige su atención a la parte superior del


cráneo; exhale y traslade su atención al ombligo. Al hacerlo
desee relajamiento o energía fresca a voluntad. Muchas
personas tratan de imaginarse cómo fluye la energía desde la
cabeza al ombligo, pero eso no solamente es innecesario, sino
que puede incluso entorpecer el flujo.

La mejor forma en que funciona pikopiko es cuando usted deja


de manipular algo y simplemente le deja todo el asunto a la
atención. Solamente traslade la atención desde la cabeza al
ombligo y no intente mover la energía.

La técnica es útil cuando se tiene un poco de miedo o una leve


tensión o cuando usted necesita energía fresca o simplemente
como entrenamiento de pikopiko.

Eliminación del estrés con pikopiko

Inhale mientras dirige su atención lo más alto posible sobre su


cabeza (para esto yo uso a menudo una estrella como foco,
pero las nubes o el cielo también sirven). Exhale y traslade su
atención tan abajo como pueda bajo sus pies (el centro de la
Tierra sirve bien, tal como el piso bajo nuestros pies). Deséese
bienestar.
En Mongolia le mostré esta técnica a una mujer chaman de ahí,
que sufría de un repentino ataque de dolores de cabeza y
náuseas. Ella se imaginaba que esas molestias podrían haber
sido causadas por el ataque psíquico de un enemigo, pero yo le
propuse probar primero con esta técnica antes de recurrir a
otros medios.

Si ella padecía simplemente de un fuerte estrés – y así era con


nosotros dos – esta técnica ayudaría. Si su estado no mejorara
con esta técnica, ella podía siempre utilizar sus propios medios.
Pero como la técnica tuvo efecto dentro de pocos minutos, ella
no necesitó entonces realizar rituales de defensa. Yo mismo he
utilizado este pikopiko en muchas situaciones extremas de
estrés y también otras personas la han utilizado con efectos de
sanación desde inmediatos hasta rápidos.

Armonización con pikopiko

Inhale mientras dirige su atención al ombligo; exhale y traslade


su atención a la parte del cuerpo que necesite relajamiento o
sanación.
Como esto mejora de inmediato la circulación, es muy bueno
para utilizarlo en caso de músculos rígidos o con dolor, pero
también actúa como técnica inmediata de sanación en caso de
extremidades dormidas o adormecidas (por una posición tensa
al dormir o al estar sentado).

Cuando despierto en la mañana y noto que mi mano o mi brazo


está dormido, todo lo que necesito para hacer desaparecer el
adormecimiento son treinta segundos con este pikopiko – sin
los más mínimos dolores u hormigueos excesivos.

Incorporar con pikopiko

Inhale mientras dirige su atención a algo que esté fuera de su


cuerpo, que tenga para usted características o asociaciones
deseadas. Exhale y traslade su atención a una parte del cuerpo
en la que deben manifestarse esas características o
asociaciones.

Imagínese el objeto externo de la atención en miniatura, dentro


de esa parte del cuerpo. Deséese el efecto apropiado.
Una vez que paseaba en un parque en Londres, durante una
pausa de un seminario, con algunos participantes, uno de ellos
me dijo que tenía la espalda muy tensa y que no se podía
inclinar hacia delante más de diez grados, sin sentir dolores
punzantes.

Esa vez soplaba una brisa y yo le indiqué las hojas de un roble


que se movían con el viento. Le expliqué esta técnica y le pedí
dirigir su atención a las hojas que se movían.

Él practicó la técnica durante nuestro paseo de quince minutos


de regreso al lugar del seminario. Cuando llegamos allí, él era
capaz de inclinarse casi noventa grados sin sentir dolores.

Al inhalar él había dirigido la atención a las hojas que se movían


y al exhalar se había imaginado que las hojas se movían en su
espalda.

En otra ocasión desperté con el cuello rígido y adolorido,


después que el día anterior habíamos transportado muebles.
Mientras todavía estaba tendido en la cama, coloqué uno de
mis CDs preferidos y practiqué esta técnica: al inhalar dirigí la
atención al lugar de donde salía la música y al exhalar a mi
cuello, mientras imaginaba que la música sonaba en mi cuerpo.
En media hora había desaparecido la dolorosa rigidez.

A los objetos para dirigir la atención que son adecuados para


muchas molestias, pertenece todo lo que se mueve, lo que se
derrite o se disuelve, lo que está tranquilo o quieto o lo que
está cargado con energía o es fuerte.

S-ar putea să vă placă și