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DE BARCELONA
JURÍDICO PENAL
2013
Introducción
El
presente
trabajo
tiene
por
objeto
elaborar
un
análisis
muy
sintético
de
uno
de
los
instrumentos
que
la
ley
de
enjuiciamiento
criminal
chilena
establece
para
descongestionar
el
sistema
persecutorio
de
los
delitos.
En
efecto,
la
reforma
al
proceso
penal
en
Chile,
que
modificó
el
sistema
de
enjuiciamiento
criminal,
reemplazando
el
antiguo
modelo
inquisitivo
y
escrito
por
uno
acusatorio,
adversarial
y
oral,
incluyó
una
serie
de
instrumentos
legales
cuya
finalidad
es
reservar
para
la
etapa
del
Juicio
Oral
aquellos
casos
que
cuentan
con
una
posibilidad
relativamente
certera
de
ser
resueltos
por
el
Tribunal
del
Juicio
Oral
en
lo
Penal;
esto
es
que
los
intervinientes
del
sistema
sean
capaces,
a
partir
de
sus
propias
teorías
del
caso,
y
la
recopilación
de
información
de
calidad,
reconstruir
la
historia
de
lo
que
verdaderamente
ocurrió
a
fin
de
encuadrar
aquella
historia
en
el
marco
de
leyes
penales
sustantivas
que
den
sustento
jurídico
a
la
decisión
reclamada
por
dichos
intervinientes.
Este
conjunto
de
instrumentos
constituyen
un
verdadero
filtro
que
impide
que
el
sistema
se
agobie
con
casos
de
difícil
avance
y
resolución
por
parte
del
órgano
jurisdiccional.
2
Exclusividad
de
la
persecución
penal
pública
El
Ministerio
Público
o
Fiscalía
de
Chile
es
un
organismo
chileno
autónomo,
lo
que
significa
que
no
existe
un
superior
jerárquico
por
sobre
dicha
institución,
que
no
está
sometido
a
ninguna
clase
de
influencias
externas
en
la
toma
de
decisiones,
que
posee
potestad
reglamentaria
propia
y
libertad
de
ejecución
presupuestaria.
Asimismo,
es
un
organismo
jerarquizado.
Este
nuevo
órgano
autónomo,
es
el
encargado
de
elaborar
las
políticas
con
arreglo
a
las
cuales
se
organiza
la
persecución
criminal
y
se
le
entregan
las
competencias
para
dirigir
con
facultad
de
imperio
las
tareas
de
investigación
policial.4
1
Esta
definición
la
encontramos
en
la
Constitución
Política,
en
su
artículo
83,
inciso
1º,
y
es
repetida
en
la
Ley
Pág.
136.
3
Blanco,
Rafael;
Decap
Mauricio;
Moreno,
Leonardo
y
Rojas,
Hugo.
“Litigación
Estratégica
en
el
Nuevo
Procedimiento
Penal.
Editorial
LegalPublishing.
Santiago,
2008.
Págs.
7
y
8.
4
Ídem.
3
imputado.5
Una
vez
que
estamos
en
presencia
de
una
investigación
formalizada
el
Ministerio
Público
deberá
acusar
o
en
su
defecto,
si
carece
de
antecedentes
que
sustenten
su
acusación,
podrá
solicitar
el
sobreseimiento
o
comunicar
su
decisión
de
no
perseverar
en
la
investigación.
Cuando
el
Ministerio
Público,
decide
formalizar
una
investigación,
se
hecha
sobre
sus
hombros
una
tarea
no
menor,
y
que
es
derrotar,
dentro
de
la
arena
del
proceso
penal,
a
una
garantía
y
principio
fundamental:
la
presunción
de
inocencia.
Dicha
tarea
es
una
promesa
de
que
la
investigación
y
el
trabajo
preliminar
indican
seriamente
que
la
presunción
de
inocencia
será
derrotada,
compromiso
que
se
asume
con
la
sociedad
toda
y
en
especial
con
el
Juez
de
Garantía,
pues
cuando
se
formaliza
una
investigación
muchos
derechos
y
garantías
fundamentales
se
resienten
en
lo
más
profundo,
baste
sólo
con
pensar
en
la
posibilidad
de
imponerle
a
este
imputado
formalizado,
la
medida
cautelar
de
prisión
preventiva,
que
aunque
excepcional
y
restrictiva,
es
una
posibilidad
cierta
que
queda
en
manos
del
juez
en
base
a
los
fundamentos
que
el
fiscal
ha
expuesto
en
su
solicitud
replicada
en
audiencia.
4
Aproximación
al
concepto
jurídico
de
Facultad
de
no
perseverar
La
facultad
de
no
perseverar
es
aquella
decisión
que
adopta
el
Ministerio
Público,
y
que
forma
parte
del
conjunto
de
potestades
exclusivas
y
discrecionales
del
órgano
persecutor,
mediante
la
cual
dicho
agente
comunica
al
órgano
jurisdiccional
y
a
los
demás
intervinientes
en
el
proceso,
que
no
continuará
con
el
procedimiento
llevado
a
cabo
en
contra
del
imputado
por
no
haberse
reunido
en
la
etapa
de
investigación
antecedentes
suficientes
que
permitan
sostener
la
imputación
realizada.
5
continuar
con
un
procedimiento
que
lleva
adelante
en
contra
de
uno
o
más
imputados,
por
no
haberse
reunido,
durante
la
investigación,
antecedentes
suficientes
para
fundar
una
acusación”.6
La
facultad
de
no
perseverar,
como
institución,
no
tiene
equivalentes
en
la
legislación
comparada,
ello
debido
a
que
en
un
comienzo
correspondía
a
una
causal
de
sobreseimiento
temporal,
misma
que
fue
excluida
por
el
Senado
en
atención
a
que
contradecía
uno
de
los
principios
básicos
del
nuevo
sistema,
esto
es
el
de
exclusividad
de
la
investigación
por
parte
del
Ministerio
Público,
dado
que
en
el
proyecto
original
se
contemplaba
la
posibilidad
de
que
el
fiscal
que
se
encontraba
investigando
sobreseyera
temporalmente,
por
transcurso
de
los
plazos
legales
para
la
reapertura
de
la
investigación
sin
que
se
hubieran
reunido
nuevos
antecedentes.8
6
Oficio
Fiscal
Nacional
Nº
556,
sobre
Facultad
de
los
fiscales
de
no
perseverar
en
el
procedimiento,
una
vez
cerrada
la
investigación,
de
fecha
18
de
Noviembre
de
2003.
7
Ídem.
8
Horvitz
Lennon,
María
Inés
y
López
Masle,
Julián.
“Derecho
Procesal
Penal
Chileno,
Tomo
I”.
Editorial
Jurídica
de
Chile.
Primera
edición,
Santiago,
2009.
Pág.
585.
6
interviene
el
juez.
Es
decir,
al
Juez
de
Garantía
no
le
cabe
atribución
alguna
en
el
sentido
de
pronunciarse
respecto
de
ella,
ni
aprobándola
ni
rechazándola.
Es
respecto
de
las
consecuencias
jurídicas
que
esta
institución
produce
que
se
han
suscitado
problemas
de
interpretación,
especialmente
en
lo
referente
a
los
9
Caroca,
Alex
“Etapa
intermedia
o
de
preparación
del
juicio
oral
en
el
nuevo
proceso
penal
chileno”.
Editorial
7
derechos
del
imputado,
ya
que
el
hecho
de
que
la
formalización
quede
sin
efecto
podría
plantear
la
posibilidad
de
una
nueva
formalización
en
la
misma
investigación
por
los
mismos
hechos;
implicando
que
al
no
haber
transcurrido
completamente
el
plazo
para
investigar,
se
pudiera
renovar
el
mismo
por
dos
años
más,
conllevando
la
interrupción
una
vez
más
de
la
prescripción
y
vulnerando
el
principio
de
inocencia
y
el
derecho
de
ser
juzgado
en
plazo
razonable.10
Aquello
que
a
primera
vista
podría
no
ser
relevante,
pude
adquirir
una
importancia
máxima,
según
explicaremos
en
el
siguiente
punto.
¿Qué
ocurre
si
el
Ministerio
Público
entre
la
presentación
del
requerimiento
de
no
perseverar
y
la
audiencia
a
que
se
refiere
el
artículo
249
del
Código
Procesal
Penal
cambia
de
opinión,
retira
la
solicitud
y
decide
acusar?
Ello
sólo
será
posible
en
la
medida
que
el
plazo
de
10
días
señalado
en
el
artículo
248
inciso
1°
no
se
encuentre
vencido
y
en
todo
caso
invocando
medios
de
prueba
que
se
obtuvieron
antes
del
cierre.
O
que
el
requerimiento
presentado
ante
un
Juzgado
de
Garantía
incompetente,
o
que
siendo
presentado
ante
el
juzgado
que
corresponde
sea
declarado
nulo
por
cualquier
causa,
declaración
que
tomando
en
consideración
el
plazo
para
alegar
nulidad,
traslado
y
tiempo
de
resolución
judicial,
será
declarada
después
de
vencido
el
plazo
de
10
días
del
artículo
248
inciso
1°,
¿podría
en
estos
casos
presentarse
el
requerimiento
nuevamente?
10
Horvitz
Lennon,
María
Inés
y
López
Masle,
Julián.
Ob.
cit.
Págs.
586
a
588.
8
plazo,
en
cuanto
acto
administrativo,
no
es
tocado
por
la
declaración
de
nulidad
procesal,
acto
que
por
lo
demás
pertenece
a
una
etapa
anterior
del
procedimiento
penal,
la
respuesta
necesariamente
ha
de
ser
negativa.
En
efecto,
algunos
estiman
que
el
fiscal
no
podría
ejercer
la
facultad
de
no
perseverar,
sin
que
previamente
haya
formalizado
la
investigación,
fundamentado
en
que
el
inciso
final
del
artículo
248
letra
c)
del
Código
Procesal
Penal
dispone
que
la
comunicación
de
tal
decisión
dejará
sin
efecto
la
formalización
de
la
investigación
y
dará
lugar
a
que
el
juez
revoque
las
medidas
cautelares
que
se
hubieren
decretado,
y
la
prescripción
de
acción
penal
continuará
corriendo
como
si
nunca
se
hubiere
interrumpido.
Es
decir,
la
norma
da
por
hecho
que
la
investigación
del
hecho
punible
ha
sido
comunicada
al
imputado.
11
Horvitz
Lennon,
María
Inés
y
López
Masle,
Julián.
Ob.
cit.
Págs.
586
y
587.
12
Jurisprudencia
de
Chile
en
materia
penal.
Sentencias
de
los
Tribunales
Superiores
de
Justicia
de
Chile,
desde
2003. http://jurischile-‐penal.blogspot.com/
9
Sin
embargo,
de
acuerdo
al
Oficio
del
Fiscal
Nacional
Nº
556,
de
18
de
noviembre
de
2003,
la
interpretación
anteriormente
expuesta
constituye
un
error,
indicando
que
la
correcta
interpretación
y
aplicación
de
la
norma
pasa
por
entender
que
la
formalización
de
la
investigación
quedará
sin
efecto
en
los
casos
en
que
ésta
haya
tenido
lugar;
el
fundamento
de
esta
posición
radica
en
que
de
no
ser
así,
se
dejaría
sin
solución
todas
aquellas
situaciones
en
las
que
el
fiscal
carece
de
antecedentes
suficientes
para
continuar
seriamente
con
el
procedimiento
y
se
encuentra
impedido
de
utilizar
los
mecanismos
de
archivo
provisional
o
la
facultad
de
no
iniciar
investigación.
Pues,
una
vez
admitida
a
tramitación
una
querella,
aunque
el
fiscal
no
haya
formalizado
la
investigación,
el
Ministerio
Público
queda
impedido
de
utilizar
los
mecanismos
antes
señalados,
consagrados
en
los
artículos
167
y
168
del
Código
Procesal
Penal.
El
criterio
de
la
Fiscalía
Nacional
aludido
anteriormente,
ha
sido
ratificado
por
la
jurisprudencia.
En
este
sentido
se
pronunció
la
Corte
de
Apelaciones
de
Antofagasta,
en
contra
de
la
sentencia
del
Juzgado
de
Garantía
de
dicha
ciudad,
que
negó
al
fiscal
la
posibilidad
de
cerrar
investigación
y
comunicar
la
decisión
de
no
perseverar
por
el
hecho
de
estar
formalizada
la
investigación,
revocó
tal
resolución
con
fecha
1º
de
marzo
de
2002.
Siguiendo
la
misma
línea,
la
Corte
de
Apelaciones
de
Temuco,
en
recurso
de
apelación
Rol
Nº
669-‐2003,
revoca
la
resolución
dictada
por
el
Tribunal
de
Garantía
de
Temuco,
por
la
cual
se
sobreseyó
definitiva
y
parcialmente
la
causa
respecto
de
uno
de
los
imputados,
fundada
en
que
encontrándose
vencido
el
plazo
para
formalizar
la
investigación
sin
que
ella
se
haya
verificado,
precluyó
la
posibilidad
de
ejercitar
la
facultad
de
no
perseverar,
decretando
que
se
tiene
por
formulada
la
decisión
del
fiscal
de
perseverar
en
la
investigación.
Concordante
con
los
fallos
anteriores,
la
Corte
de
Apelaciones
de
Temuco,
en
recurso
de
apelación
ingreso
Nº
78-‐2005,
favorece
la
interpretación
que
ha
sostenido
el
Ministerio
Público,
al
dejar
sin
efecto
el
sobreseimiento
dictado
por
el
Juez
de
Garantía
de
Loncoche,
al
no
aprobar
la
comunicación
de
la
facultad
de
no
perseverar
por
parte
del
fiscal,
ordenando
la
mantención
de
los
efectos
de
dicha
decisión.13
13
Jurisprudencia
de
Chile
en
materia
penal.
Sentencias
de
los
Tribunales
Superiores
de
Justicia
de
Chile,
desde
2003. http://jurischile-‐penal.blogspot.com/
10
Ahora
bien,
si
el
ejercicio
de
la
facultad
exclusiva
del
Ministerio
Público
se
diera
en
el
marco
de
una
investigación
formalizada,
podría
la
parte
querellante
oponerse
y
solicitar
al
Juez
de
Garantía
autorización
para
forzar
la
acusación,
de
acuerdo
a
lo
previsto
en
el
artículo
258
del
Código
Procesal
Penal,
quien
dispondrá
la
remisión
de
los
antecedentes
al
Fiscal
Regional,
a
objeto
de
que
revise
la
decisión
del
fiscal
a
cargo
de
la
causa.
Si
el
Fiscal
Regional
dentro
de
tres
días
decidiere
formular
acusación,
deberá
hacerlo
dentro
de
los
diez
días
siguientes;
si
por
el
contrario
aprueba
la
decisión
de
no
perseverar,
el
juez
podrá
disponer
que
la
acusación
sea
formulada
por
el
querellante,
debiendo
sostener
ésta
en
los
términos
establecidos
por
el
Código
y,
respecto
del
Ministerio
Público,
procederá
a
decretar
el
sobreseimiento
correspondiente;
la
resolución
que
niegue
lugar
a
la
solicitud
será
inapelable.
1)
Que
el
fiscal
comunique
su
decisión,
produciéndose
los
efectos
señalados
y
procediéndose
a
poner
término
a
la
audiencia
por
parte
del
Juez
de
Garantía.
Esto
es
todo
lo
que
el
Juez
de
Garantía
puede
hacer
por
el
querellante,
ante
el
ejercicio
por
parte
del
fiscal,
de
la
facultad
de
no
perseverar.
No
puede
reabrir
la
investigación,
ordenando
la
practica
de
diligencias
de
investigación.
Por
muy
razonable
o
fundamentada
que
sea
la
petición
del
querellante,
la
oportunidad
procesal
ya
precluyó
y
ésta
era
la
contemplada
en
el
articulo
257,
y
mucho
menos
podrá
reabrirla
de
oficio.
Lo
anterior,
esto
es
conceder
al
querellante
la
oportunidad
de
sostener
por
sí
mismo
la
acusación
en
los
términos
que
la
ley
procesal
penal
exige
al
Ministerio
Público,
es
contrario
a
los
principios
que
inspiran
el
sistema,
e
infringiría
11
directamente
el
artículo
80
A
de
la
Constitución
Política
de
la
Republica,
que
entrega
el
monopolio
absoluto
de
la
investigación
a
manos
del
Ministerio
Público.
Sin
embargo,
esto
no
ha
sido
objeto
de
críticas
por
parte
de
los
operadores
del
sistema.
Por
el
contrario,
los
abogados
defensores
privados,
han
defendido
esta
opción,
pues
representa
una
apertura
al
mercado
de
la
defensa
de
las
víctimas,
no
contemplada
en
el
proyecto
original
del
nuevo
código.
El
artículo
53
del
Código
Procesal
Penal
clasifica
la
acción
penal
en
pública
y
privada.
La
diferencia
radica
en
la
posibilidad
de
que
el
delito
sea
perseguible
de
oficio.
Sin
embargo,
hay
delitos
de
acción
pública
en
que
igualmente
se
requiere
la
instancia
particular.
En
efecto,
el
artículo
54
del
código
define
a
los
delitos
de
acción
pública
previa
instancia
particular
como
aquellos
en
que
no
puede
procederse
de
oficio
sin
que,
a
lo
menos,
el
ofendido
por
el
delito
hubiere
denunciado
el
hecho.
Es
el
tipo
de
delitos
que
bajo
la
vigencia
del
antiguo
Código
de
Procedimiento
Penal
tenían
la
denominación
de
“delitos
de
acción
mixta”.
El
carácter
público
de
tales
delitos
radica
en
que
si
bien
el
Ministerio
Público
no
puede
perseguirlos
de
oficio
sin
que
previamente
la
víctima
denuncie
el
hecho,
una
vez
que
el
ofendido
hace
la
denuncia
o
se
querella,
el
fiscal,
no
sólo
está
autorizado,
sino
que
está
obligado
a
investigar
el
hecho,
sin
importar
la
voluntad
posterior
de
12
la
víctima
u
ofendido.
En
consecuencia,
tratándose
de
delitos
de
acción
pública,
en
cualquiera
de
sus
dos
categorías,
si
la
víctima
ha
ejercido
su
derecho
a
interponer
querella
y,
posteriormente,
se
desiste
de
ella,
el
fiscal
deberá
continuar
la
investigación
hasta
las
últimas
consecuencias.
a) Que
la
víctima
se
desista
o
abandone
el
procedimiento:
en
tal
caso
el
fiscal
continuará
investigando
y,
una
vez
concluida
la
investigación,
deberá
acusar
o
comunicar
su
decisión
de
no
perseverar.
Como
se
puede
apreciar,
la
facultad
de
no
perseverar
es
independiente
de
la
decisión
de
la
víctima
de
continuar
ejerciendo
su
derecho
de
acción.
b) Que
el
fiscal
comunique
su
decisión
de
no
perseverar
a
pesar
de
la
posición
de
la
víctima
de
mantener
su
querella.
En
este
caso,
el
artículo
258
del
Código
Procesal
Penal,
autoriza
al
querellante
para
solicitar
al
juez
formular
la
acusación,
quien
la
habrá
de
sostener
en
lo
sucesivo
en
los
mismos
términos
que
el
código
lo
establece
para
el
Ministerio
Público.
Nuevamente
se
aprecia
que
la
querella,
ya
sea
que
se
mantenga
o
abandone
por
su
titular,
es
independiente
de
la
facultad
del
fiscal
de
no
perseverar
en
el
procedimiento.
En
los
delitos
de
acción
privada,
como
la
injuria
o
la
calumnia,
salvo
que
se
cometan
en
contra
de
menores
de
edad,
en
cuyo
caso
la
ley
concede
acción
pública,
el
Ministerio
Público
no
interviene
y
sólo
puede
ser
ejercida
por
la
víctima,
mediante
la
correspondiente
querella.
En
tal
caso,
el
desistimiento
de
la
querella
tendrá
como
consecuencia
el
sobreseimiento
definitivo
de
la
causa
y
la
extinción
de
la
responsabilidad
penal,
tal
como
lo
formula
el
artículo
401
del
código.
Otra
vez
es
posible
observar
las
diferencias
entre
la
facultad
de
no
perseverar
del
fiscal
con
las
de
este
instituto,
es
decir,
el
desistimiento
de
la
querella,
pues
cuando
el
fiscal
comunica
su
decisión
de
no
perseverar,
los
efectos
son
otros.
Así
lo
establece
el
artículo
248
del
código,
que
prescribe
que
tal
decisión
dejará
sin
efecto
la
formalización
de
la
investigación,
dará
lugar
a
que
el
juez
revoque
las
medidas
cautelares
que
se
hubieren
decretado,
y
la
prescripción
de
la
acción
penal
continuará
corriendo
como
si
nunca
se
hubiere
interrumpido.
Es
decir,
nada
de
13
sobreseimiento
ni
extinción
de
la
responsabilidad
penal,
ya
que
el
fiscal
podrá
solicitar
la
reapertura
de
la
causa
si
aparecieren
nuevos
antecedentes
que
permitan
presumir
la
responsabilidad
penal
del
imputado.
14
Bergalli,
Roberto.
“Hacia
una
cultura
de
la
jurisdicción.
Ideologías
de
jueces
y
fiscales”.
Ad
Hoc.
Buenos
Aires,
1999.
14
con
posterioridad
al
ejercicio
de
esta
facultad.
Son
aspectos
que
deben
revisarse
en
la
práctica
para
que
este
tipo
de
soluciones
cumplan
un
rol
de
derecho
más
justo
y
no
como
una
justificación
para
un
mayor
control
punitivo.
No
obstante
que
este
tipo
de
facultades
de
que
gozan
los
particulares
en
el
ejercicio
de
su
acción
penal
privada
pudieran
tener
algún
grado
de
similitud
semántica
con
la
que
gozan
los
fiscales
del
Ministerio
Público
chileno
en
virtud
de
la
ley
procesal
penal
nacional
y
que
les
permiten
decidir
no
perseverar
en
la
persecución
de
un
delito,
lo
cierto
es
que,
tal
como
se
señaló
en
el
punto
referido
al
ejercicio
de
esta
facultad
en
relación
con
el
desistimiento
de
la
querella,
son
dos
institutos
muy
diferentes,
tanto
en
su
formulación
como
en
las
consecuencias
jurídicas
de
los
mismos.
En
efecto,
cuando
el
fiscal
comunica
su
decisión
de
no
perseverar
en
la
investigación
de
un
delito
de
acción
pública,
lo
hace
porque
no
ha
podido
reunir
en
su
investigación
antecedentes
suficientes
que
pudieran
sostener
una
eventual
acusación,
y
el
efecto
de
tal
decisión
no
significa
ni
el
sobreseimiento
15
ni
la
extinción
de
la
responsabilidad
penal
ni
mucho
menos.
En
cambio,
cuando
un
particular
ofendido
por
un
delito
que
no
es
perseguible
de
oficio,
renuncia
a
la
acción
penal
o
habiéndola
ejercido
se
desiste
de
ella,
probablemente
tenga
como
antecedente
una
negociación
previa
en
que
se
decide
perdonar
al
imputado,
con
lo
cual
sí
se
extingue
la
responsabilidad
penal
del
ofensor.
Conclusiones
La
facultad
de
no
perseverar
es
una
creación
sui
generis
de
nuestros
legisladores.
Se
trata,
pues,
de
una
institución
que
no
tiene
homónimos
en
la
legislación
comparada
porque
corresponde
a
lo
que,
en
un
comienzo,
se
había
contemplado
como
una
causal
de
sobreseimiento
temporal.
Desde
el
mensaje
con
que
se
envió
el
Proyecto
de
Código
de
Procedimiento
Penal
(como
se
le
denominó
por
entonces)
a
la
Cámara
de
Diputados,
se
manifestó
la
necesidad
de
restringir
notablemente
el
sobreseimiento
temporal
por
tratarse
de
una
salida
bastante
insatisfactoria.
Ello,
desde
varios
puntos
de
vista:
16
distorsión
en
el
sistema
al
alterar
el
onus
probandi
que,
en
materias
penales,
recae,
como
es
sabido,
sobre
el
Estado.15
En
lo
que
dice
relación
a
la
defensa,
de
los
antecedentes
recabados,
resulta
que
la
utilización
de
esta
facultad
podría
representar
una
hipótesis
de
incerteza
jurídica
y
de
vulneración
al
principio
de
inocencia
y
del
derecho
a
ser
juzgado
en
un
plazo
razonable.
Ello,
porque
quedaría
al
arbitrio
del
Ministerio
Público
usar
dicha
facultad
de
forma
seria,
sin
que
ésta
se
transforme
en
un
subterfugio
para
ampliar
los
plazos
de
investigación
en
desmedro
del
imputado.
15
Oficio
Fiscal
Nacional
Nº
556,
sobre
Facultad
de
los
fiscales
de
no
perseverar
en
el
procedimiento,
una
vez
cerrada
la
investigación,
de
fecha
18
de
Noviembre
de
2003.
16
Horvitz
Lennon,
María
Inés
y
López
Masle,
Julián.
Ob.
cit.
Pág.
585.
17
utilizada,
pasando
hacer
una
herramienta
de
resguardo
para
el
fiscal
cada
vez
que
considera
que
su
teoría
del
caso
no
será
la
vencedora
en
un
juicio
oral.
Lamentablemente,
frente
esta
decisión,
en
caso
en
que
no
exista
formalización,
deja
a
estos
intervinientes
de
brazos
atados,
pues
en
estricto
rigor,
al
ser
ésta
una
facultad
privativa
del
ente
persecutor,
no
cabe
pronunciamiento
judicial
al
respecto.
Sin
embargo,
al
existir
formalización
el
querellante
tendría
derecho
a
solicitar
al
Juez
de
Garantía
el
mecanismo
de
forzamiento
de
la
acusación,
la
que
puede
ser
admitida
o
denegada
por
éste,
careciendo
la
última
decisión
de
medios
de
impugnación.
18
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Ministerio
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20
Índice
INTRODUCCIÓN
..........................................................................................................................................
2
APROXIMACIÓN AL CONCEPTO JURÍDICO DE FACULTAD DE NO PERSEVERAR .................... 5
CONSECUENCIAS
JURÍDICAS
DE
LA
DECISIÓN
DEL
MINISTERIO
PÚBLICO
DE
NO
PERSEVERAR
...............................................................................................................................................
7
FACULTAD
DE
NO
PERSEVERAR
Y
CIERRE
DE
LA
INVESTIGACIÓN
..................................................................
8
FORMALIZACIÓN
DE
LA
INVESTIGACIÓN
Y
FACULTAD
DE
NO
PERSEVERAR
.................................................
9
FACULTAD DE NO PERSEVERAR Y DESISTIMIENTO DE LA QUERELLA ................................. 12
FACULTAD DE NO PERSEVERAR Y CONTROL PENAL: UN BREVE ANÁLISIS CRÍTICO ....... 14
21