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Palabras
Representaciones
y
Resistencias
de mujeres
en el contexto del conflicto armado
colombiano
Historias de vida de mujeres de: Chocó
Cauca
Medellín
y Putumayo

Equipo investigador
Olga Amparo Sánchez G
Socorro Corrales
Sandra López
Alejandra Miller
Marcela Uribe S
Ruta Pacífica de las Mujeres Colombianas
Olga Amparo Sánchez G
Socorro Corrales
Sandra López
Alejandra Miller
Marcela Uribe S

Coordinación Editorial:
Corrección de Textos: Carmen Elisa Chaves Soto
Diagramación: mas - comunicación & media
Impresión:
Con el apoyo de:

Medellín, diciembre de 2005

ISBN
7

Contenido
Introducción
1. Planteamientos acerca de la investigación
1.1 Algunas decisiones teóricas
1.2 Propósitos para el acercamiento a la realidad de las mujeres
1.3 Un acercamiento a la compleja realidad de las mujeres
1.4 Premisas orientadoras para el análisis
1.5 Contexto de la investigación

2 Los hallazgos
2.1 Palabras, representaciones y resistencias de las mujeres del Chocó
2.2 Palabras, representaciones y resistencias de las mujeres de Medellín
2.3 Palabras, representaciones y resistencias de las mujeres del Putumayo
2.4 Palabras, representaciones y resistencias de las mujeres del Cauca
2.5 A manera de síntesis de los hallazgos

Bibliografía
Anexos
Introducción
10 11

El que no sabe lo que le pasa, hace memoria para salvar la interrupción


de su cuento, pues no es enteramente desdichado el que puede contarse a sí
mismo su propia historia.
María Zambrano

La Ruta Pacifica de las Mujeres, en su compromiso de entender, comprender y contribuir


a transformar la compleja y diversa situación de los efectos del conflicto armado en la vida
de las mujeres; se ha dado a la lenta y ardua tarea de tejer y entretejer acción política con
movilización, formación con autonomía e investigación con nuevas formas de acercamien-
to a las múltiples realidades que viven las mujeres. Una de las acciones para acercarse a esas
complejas realidades, en zonas del conflicto armado, fue gestionar recursos y conformar
un equipo de investigadoras feministas dedicadas a la vital acción de la investigación femi-
nista. Conformado el equipo, se dio a la tarea de diseñar la investigación, oír, documentar
y analizar la vivencia de mujeres en zonas de cultivos de uso ilícito: afro descendientes,
indígenas, campesinas y urbanas que han vivido en sus cuerpos los efectos del conflicto
armado.

¿Pero cómo acercarse a realidades tan complejas y tan cercanas, como los efectos del con-
flicto armado en la vida de las mujeres? Largas discusiones, indagaciones y preguntas
estuvieron presentes: ¿Cómo transitar por los efectos del conflicto armado en la vida de
las mujeres, sin que este transito implicara la reproducción de viejos y nuevos esquemas
de investigación, en los cuales las voces de las subyugadas no han tenido un espacio pro-
pio? ¿Cómo indagar sin quedar atrapadas en pretendidas objetividades y racionalidades?
¿Cómo adentrarse en el drama humano que se teje en cada palabra, en cada rebeldía, en
cada risa y en cada llanto de las mujeres afectadas por el conflicto armado?
12 13
Una primera opción, fue asumir los de- en cuenta estos presupuestos, para la inves- es esencial para triunfar sobre la opresión las mujeres; situación que dificulta la do-
sarrollos que el feminismo ha aportado tigación, se definieron diferentes categorías de las mujeres en su variedad infinita y cumentación de los efectos del conflicto en
a la crítica social. Desde el feminismo, la dejando de lado un solo método feminista monótona similaridad1” . la vida de ellas, y en consecuencia, obliga
crítica flota libre de cualquier base teórica o una sola interpretación, optando por un a recurrir a otras fuentes y procedimien-
universalista. Y al no encontrarse anclada acercamiento a la realidad y la teoría que se Adicionalmente, y no por ello menos tos con el propósito de darle la palabra a
en explicaciones universalistas y homogé- pareciera más a un tapiz de múltiples colo- importante, existían otros interrogantes: las mujeres, precisamente a aquellas que
neas, la crítica social cambia de forma y de res que a uno unicolor. Se pretendió mirar ¿cómo enfrentar las narraciones e inter- llevan en su cuerpo, memoria y silencio el
carácter, se vuelve pragmática, contextual a través de un calidoscopio la compleja y pretaciones patriarcales que sobre la vida registro de las catástrofes cotidianas que
y local. Con este cambio aparece también múltiple realidad de las mujeres. de las mujeres circulan en la sociedad co- han signado sus vidas.
un cambio correspondiente en el rol social lombiana? La primera dificultad emerge al
y político de la-el intelectual, la-el investi- La ganancia de asumir esta forma de críti- preguntarse por la relación mujeres – con- Los resultados de este trabajo, no pretenden
gador-a. ¿Pero qué implica el rechazo a una ca social, de opción teórica y metodológi- flicto armado; obstáculo que pareciera de- hablar en nombre de las mujeres afectadas
base teórica universalista?, reconocer que ca, es su utilidad política para la práctica berse al hecho de que por mucho tiempo se por el conflicto armado; las reflexiones
la crítica social necesita de las narraciones feminista de la Ruta Pacífica. Dado que ha considerado que los conflictos sociales, planteadas son producto de la vivencia, la
históricas y de los análisis macro estruc- esta práctica es cada vez más un asunto entre ellos la guerra, generan implicaciones observación, el acercamiento y análisis del
turales sociales y por ello, no tiene porque de alianzas y menos una unidad acerca de directas en la vida de los varones, y en con- saber que otorgaron las veinte mujeres que
abandonar herramientas teóricas impor- un interés o de una identidad solo grupal. secuencia, las mujeres sólo son afectadas amorosamente nos permitieron entrar en
tantes y necesarias para tratar problemas Además, la Ruta reconoce que la diversi- de manera indirecta. Tal consideración, es sus historias de vida; ellas son las portado-
políticos generales, como por ejemplo, el dad de las necesidades y experiencias de la que explicaría los vacíos en las referen- ras de ese conocimiento y experiencia. Lo
sexismo el cual tiene una larga historia y se las mujeres, implica que no hay una sola cias bibliográficas y en las investigaciones que acá se plantea, es el ejercicio necesario
encuentra anclado en todas las sociedades solución posible para hacer frente al im- sobre las mujeres en tiempos de guerra, para que sus sufrimientos y sus resisten-
contemporáneas. pacto del conflicto armado en la vida de pues es significativo que los informes, de cias se conviertan en motores de acción
ellas. La premisa soporte de la práctica modo frecuente, se refieren a su rol como transformadora. La evocación de sus his-
Por lo demás, la teoría feminista no preten- de la Ruta, es que, a pesar de que muje- madre, hija o esposa que tiene que enterrar torias y de sus sentimientos en sus propias
de ser universalista. Y cuando su propósito res en zonas de cultivo de uso ilícito, afro a sus hijos-as, padres o esposos; dejando de voces, quizás es un punto de partida y/o de
de investigación recorre fronteras culturales descendientes, indígenas, urbanas y cam- lado, e incluso no considerando, los efectos llegada del drama humano que la sociedad
y temporales, su forma de estudio es com- pesinas comparten algunos intereses y se no cuantificables en la vida de las muje- colombiana debe conocer y enfrentar, para
parativo en vez de universalizador, y está enfrentan a contradictores-as comunes, res, situaciones que están estrechamente lograr transitar realmente en la construc-
atento a las transformaciones y contrastes, tales puntos en común no son universales vinculadas a temor, soledad, sufrimiento, ción de la paz, con verdad, justicia y repa-
en lugar de formular leyes y explicaciones en modo alguno; por el contrario se en- abandono, sacrificio, silencio, resistencia, ración, y sin vencedores ni vencidos.
abarcadoras. Por ello, se abdica a un sujeto cuentran entrelazados con diferencias de fuerza, vitalidad y sometimiento.
único de historia, reemplazando las nocio- clase, etnia, orientación sexual, e incluso El informe final de la investigación está
nes unitarias de mujer e identidad genérica con conflictos. Como la plantea Linda La mayoría de las fuentes y las investiga- integrado por dos cuerpos. En el primero
femenina por conceptos de identidades so- J. Nicholson: “La investigación sería la ciones consultadas no registran esta con- se incluyen las decisiones teóricas para el
ciales plurales y de construcción compleja, contraparte teórica de una solidaridad dición de subordinación y de servicio, no encuentro con la realidad de las mujeres;
y en los cuales juegan otros conceptos como feminista de muchos niveles, más amplia, se detienen en la consideración de la pos- los propósitos planteados para la investiga-
clase, etnia y orientación sexual. Teniendo compleja y rica. El tipo de solidaridad que tergación del proyecto de individuación de ción y sus puntos y las premisas claves para
14 15
el análisis de las narraciones de las mujeres. El segundo cuerpo, se refiere a los hallazgos
y análisis de la investigación. Por último, no por ello menos importante, se presentan a
manera de anexo las matrices que permitieron organizar y sistematizar la información
obtenida y una bibliografía general sobre el conflicto armado colombiano, el conflicto ar-
mado y las mujeres tanto en el ámbito nacional como internacional y un listado de páginas
web relacionadas con el tema.
1 Planteamientos
acerca de la investigación
19

1.1. Algunas decisiones teóricas para el encuentro con la


realidad de las mujeres en: zonas de cultivos de uso ilíci-
to, afro descendientes, indígenas, campesinas y urbanas
que viven el conflicto armado colombiano
Necesitamos el poder de las teorías críticas modernas sobre cómo
son creados los significados y los cuerpos, no para negar los significados
y los cuerpos, sino para vivir en significados y cuerpos que tengan una
oportunidad en el futuro2.

¿Cómo acercarse teóricamente a la explicación e interpretación de las realidades sobre las


mujeres supervivientes del conflicto armado? En la búsqueda de respuestas a esa pregunta
se indagó y se realizaron aproximaciones, pero con la incertidumbre, que aún hoy persiste,
que la elección diera cuenta de la vida de las mujeres sobrevivientes de la guerra y que sus
voces fueran realmente escuchadas. Una opción, fue asumir la teoría de los conocimientos
situados complejos y perspectivas parciales, la cual nace en el debate teórico feminista,
como una manera de ponerse de acuerdo sobre lo que significa para las mujeres la objetivi-
dad, de contextualizar y obtener respuestas a preguntas formuladas a situaciones sociales
concretas, y en respuesta a las teorías transhistóricas y transculturales.
20 21
Partiendo de una crítica a las discusiones y un compromiso con sentido que consiga urbanas, nos dimos a la tarea de tratar que construye una traducción y una mane-
sobre la objetividad que se han dado desde versiones fidedignas de un mundo real, de dar voz propia a quienes directamente ra específica de ver8.
el feminismo, Donna Haraway, apuesta por que pueda ser parcialmente compartido y sufren, padecen y enfrentan los impactos
la necesidad de pensar en un mundo real, que sea favorable a los proyectos globales del conflicto armado. En este sentido, la alternativa a la objeti-
y por construir la posibilidad de hablar de libertad finita, de abundancia material vidad totalizadora y al relativismo, sería
sobre la realidad desde una objetividad fe- adecuada, de modesto significado en el su- La visión encarnada se asume como res- los conocimientos situados parciales, lo-
minista. Afirma la autora: “Desenmascara- frimiento y de felicidad limitada4” . ponsable de sí misma, como particular y calizables y críticos; conocimientos con
mos las doctrinas de la objetividad porque específica. Es desde la visión encarnada responsabilidad política y que admiten la
amenazaban nuestro embrionario sentido Por la pertinencia del debate y porque la que Haraway concluye como la objetivi- posibilidad, en palabras de Haraway, “(...)
de la subjetividad y de la función colectiva teoría de conocimientos situados comple- dad feminista significa, simplemente, co- de conexiones llamadas solidaridad en la
histórica y nuestras definiciones de verdad, jos y perspectivas parciales, alimentaron nocimientos situados5, en contraposición política y conversaciones compartidas en
y terminamos con una excusa más para no la reflexión y orientaron la lectura de las a la tradicional objetividad científica en la la epistemología”9. En últimas, la autora
aprender ninguna de las físicas posteriores historias de las mujeres; consideramos im- cual, en palabras de la autora, “…el sistema apunta a la construcción de un conoci-
a Newton y una razón más para dejar caer portante plantear los puntos neurálgicos sensorial ha sido utilizado para significar miento objetivo desde nuestros cuerpos,
las viejas prácticas feministas de reparar de la propuesta de Haraway en relación un salto fuera del cuerpo marcado hacia desde nuestra naturaleza encarnada y des-
nuestros propios coches. Son sólo textos, con el problema de las ideologías de la ob- una mirada conquistadora desde ninguna de nuestros lugares y formas de habitar el
de todas formas, así que dejemos a los mu- jetividad. Son necesarios estos enunciados, parte”6. Partiendo de estos enunciados, el mundo; en contraposición a las versiones
chachos que los recojan3” . dado que las historias de vida entrecruzan cuerpo, la palabra y el sentimiento de las relativizadoras y totalizadoras en donde se
razón y emoción, miedo e incertidumbre, mujeres, fueron tránsito obligado para da una igualdad del posicionamiento: no se
Con esto, entre otras cosas, Haraway hace fuerza y resistencia. A los puntos nodales conocer cómo vivían, pensaban y sentían está en ningún sitio pero se pretende estar
una fuerte crítica a la “autoexclusión” de de su apuesta teórica, la autora los nom- el conflicto armado en sus vidas; y adicio- en todas partes10.
las mujeres de la producción de conoci- bra como la persistencia de la vista, y los nalmente, asumir que nuestra objetividad
mientos, en últimas de la producción de objetos como actores y/o el aparato de la como investigadoras, se encontraba res- La crítica de Donna Haraway, se dirige
ciencia, como resultado de la práctica de producción corporal. tringida a la situación específica que de- también a problematizar el sujeto femeni-
un relativismo destructor de cualquier seábamos abordar. no del feminismo; planteando que no existe
opción de objetividad. La apuesta enton- • La persistencia de la vista una solo identidad compartida por las mu-
ces, es por la construcción de una versión La visión objetiva que propone Haraway, jeres; en este sentido, las diferencias entre
feminista de la objetividad, que, antes que La persistencia de la vista se refiere y que el equipo de investigación comparte, las mujeres se comprenderán mejor si son
a una apuesta epistemológica, se refiere a a la necesidad de recuperar la visión en- proviene entonces de la perspectiva parcial tenidas en cuenta como diferencias dentro
una apuesta ética y política. “Así, creo que carnada, para la construcción y produc- que es específica, particular, no inocente y de las mujeres. Y al comprenderlas en su
mi problema y nuestro problema es cómo ción de conocimiento científico. Una vi- responsable de lo que nombra y ordena, de poder constitutivo, serán ellas las que de-
lograr simultáneamente una versión de la sión encarnada se refiere a la pertenencia sus monstruos prometedores y sus mons- finan el sujeto femenino del feminismo en
contingencia histórica radical para todas a un cuerpo, al ver desde un lugar, desde truos destructivos, en últimas, se refiere a su contradicción inherente; y no tanto una
las afirmaciones del conocimiento y los su- una posición. Es decir, desde los cuerpos, la localización limitada del conocimiento identidad fija representada en el concepto
jetos como creadores, una práctica crítica los lugares y las posiciones de mujeres situado7. De esta manera, entendemos la mujer, o en el feminismo como una imagen
capaz de reconocer nuestras propias tecno- en zonas de cultivos de uso ilícito, afro objetividad científica no como algo tras- coherente y asequible. Es decir, no existe la
logías semióticas para lograr significados descendientes, indígenas, campesinas y cendente, sino como un sistema perceptivo mujer víctima del conflicto armado, exis-
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ten sí las mujeres, las múltiples identidades encierra la dialéctica en su autoría del imagen para el siempre problemático y dio, y por el otro, el riesgo de apro-
y diferencias dentro de las mujeres sobre- conocimiento “objetivo” y más adelante siempre poderoso enlace entre significados piarse de la visión de quienes tienen
vivientes y víctimas del conflicto; por ello, dice: “Las versiones de un mundo “real” y cuerpos”13. Los conocimientos situados menos poder.
el feminismo, se encarna para muchas de no dependen, por lo tanto, de una lógica complejos y las perspectivas parciales, en
ellas de formas diversas y a veces antagó- de “descubrimiento”, sino de una relación tanto concepto, implican tres niveles dife- • Análisis: en este nivel los conoci-
nicas. Porque su yo y sus identidades, no social de “conversación” cargada de poder. rentes: mientos situados complejos y las
reclaman una sola y única vindicación. El mundo no habla ni desaparece a favor perspectivas parciales, implican una
de un amo descodificador. Los códigos del • Individual: parte del supuesto del necesaria contingencia, una renun-
• Objetos como actores y/o el mundo no están quietos, a la espera de ser carácter construido de los discursos cia a dar respuestas válidas a través
aparato de la producción corporal leídos. El mundo no es materia prima para sociales, del reconocimiento a las del tiempo y de las culturas. Los
la humanización”11. Se trata entonces de especificidades históricas, sociales conocimientos situados complejos
A través de esta crítica y propuesta en reconocer la intervención del mundo y de e institucionales dentro de las que y las perspectivas parciales se refie-
torno al problema de la ciencia, la autora los sujetos en el conocimiento, permitien- se construyen y de los conflictos y ren a dos problemas centrales. Un
insiste finalmente en un concepto de cien- do “las sorpresas y las ironías en el meollo relaciones de poder que implican primer problema, se encuentra re-
cia que sea capaz de asumir desde sus lu- de toda producción del conocimiento”12. El su elaboración; es necesario iden- ferido a la complejidad en sí de los
gares, las luchas ideológicas. En este punto cuerpo así se convierte en un agente y no tificar cuáles son las condiciones análisis. Complejidad porque ante
Haraway se refiere a la necesidad de dejar en un recurso. que condicionan los nuestros. En una ontología patriarcal dualista y
de ver a los objetos de conocimiento como este sentido resulta vital e impres- jerárquica se debe oponer una on-
algo pasivo e inherente. Lo cual responde La autora, termina así refiriéndose a una cindible el localizarse, situarse en la tología feminista que vea el mundo
a una visión de un mundo igualmente de- categoría importante para una teoría fe- especificidad de la “propia” realidad como un conjunto orgánico en el
terminado y fijo en donde todo puede ser minista de los conocimientos situados: el social, étnica, de clase, económica y que todo está conectado con todo.
un recurso apto para ser apropiado a través aparato de la producción corporal. Para sexual. Identificar las condiciones Y necesidad de deconstruir los con-
de la ciencia. En últimas, esta visión lleva a desarrollar esta categoría, la autora se materiales que determinan la posi- ceptos binarios, es decir, aquellos
una objetificación del mundo como cosa y pregunta por la generación –producción ción de quien habla, la perspectiva que se han formado en oposición
no como agente. Las mujeres que narraron y reproducción actuales- de cuerpos y de política de la que se parte. o en negación a sus contrarios.
su historia, así se constata en todos los mo- otros objetos en posproyectos científicos Deconstruirlos significa vertirlos y
mentos, son sujetas de transformaciones y del conocimiento. Lo que en síntesis quie- • Colectivo: se refiere a la necesidad analizar su creación histórica. “(…)
de reproducción del patriarcalismo, pero re decir que “(…) los cuerpos como objetos de localizar la posición de las mu- Observar la independencia de con-
también sujetos que se mueven y buscan de conocimiento son nudos generativos jeres de las que se está hablando, ceptos aparentemente dicotómicos,
espacios propios para determinar sus vidas materiales y semióticos. Sus fronteras se qué posición de poder o no poder su significado en relación con un
y destinos, aún en la adversidad y el dolor. materializan en interacción social. Las ocupan con respecto a quien habla cierto momento histórico y los mo-
fronteras son establecidas según prácticas de ellas. Cuáles son las relaciones tivos que han llevado a su misma
“Los conocimientos situados requieren roturadoras. Los objetos no existen antes de poder entre las mujeres. De esta construcción”.
que el objeto de conocimiento sea repre- de ser creados, son proyectos de frontera. manera se evita, por un lado, el ries-
sentado como un actor y como un agente, Quizá el mundo se resiste a ser reducido go a calificar al otro colectivo como El segundo problema, tiene que ver con
no como una pantalla o un terreno o un a mero recurso, porque no es ni madre, un “otro” homogéneo, otorgándole la sensibilidad a las diferencias, lo cual
recurso, nunca como esclavo del amo que ni materia, ni murmullo, sino coyote, una un papel pasivo de objeto de estu- “...implica la necesidad de hacer de ellas
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una parte constructiva de la investigación do y transformando. Partimos entonces ponen y superponen en un modo de hacer con las mujeres que viven y sobreviven a
empírica así como de la acción política. El de aceptar que ni el sujeto-objeto, las investigación social, que se ha caracteriza- los efectos del conflicto armado, surgió el
riesgo es la caída en el relativismo cultural. investigadoras, que conoce ni el objeto- do, tradicionalmente, por invisibilizar la concepto de afectación; el cual se “refiere
De ahí que haya una necesidad de cambiar sujeto, las mujeres, que se miran pueden voz y el cuerpo de las mujeres. El segundo al estatus de víctima y de objeto que ca-
la atención del análisis de la diferencia en pensarse como unidades fijas. El yo que (enfrente) alude a admitir la propia confu- racteriza a los seres oprimidos, humilla-
sí a las relaciones sociales que convierten conoce, siguiendo a Haraway, es siempre sión en el ejercicio de pensar, el cómo de dos y explotados que están sometidos a la
esta diferencia en opresión. En este senti- parcial, no terminado ni total. Más bien ésta investigación, situación que lleva al violencia y la represión. Esto quiere decir,
do, es vital realizar análisis que se deten- está siempre construido e inacabado, en- equipo investigador a estrujar sus propios que esos seres han sido simultáneamente
gan en las realidades contradictorias a las tonces, es capaz de ver junto al otro sin horizontes y en consecuencia, a preguntar- y directamente afectados por la agresión,
que se enfrentan las mujeres sin pretender pretender ser el otro. se por otros modos de hacer mundos. la injusticia y la discriminación15. Son víc-
coherencia u homogeneidad colectiva o timas. Habitualmente, cuando se habla de
individual. Análisis que aborden contextos En este sentido, los interrogantes cam- Es precisamente este estar enfrente con las las-os afectadas-os se hace referencia sólo
locales y que estudien las relaciones polí- biaron de ritmo y de lugar. Las preguntas preguntas, enmarañamientos y alternativas, a esa acepción del término. Generalmen-
ticas (de poder) que se dan en ellos; es a orientadoras fueron: ¿quiénes son las muje- que hasta ahora se vislumbran, el que hace te son consideradas-os como afectadas-os
partir de ahí desde donde se debe construir res a las cuales deseamos acercarnos? ¿dón- posible que se pretenda, sino comprender las-os otras-os y no nosotras-os mismas-
la categoría “mujeres”, antes que crear una de viven? ¿cómo piensan? ¿cómo sienten? plenamente, al menos si documentar, te- os. En esta concepción de afectadas-os se
categoría previa y sin referencia a las rela- ¿cómo se ven en el contexto del conflicto niendo como brújula una mirada feminis- fundamenta las posiciones asistencialistas
ciones sociales en las que se enmarca14. armado y cómo las ven? ¿cómo resisten el ta, la realidad de las mujeres colombianas y paternalistas con las que las-os no afecta-
conflicto armado? ¿cómo viven sus rela- en medio del conflicto. Nos acercamos a la das-os tratan o miran a las-os afectadas-os.
1.2. Propósitos para el ciones? ¿qué se ha modificado en sus vidas realidad de las mujeres en zonas de culti- Pero en contraste con esta visión, la inves-
por causa del conflicto armado? Fue pre- vos de uso ilícito, afro descendientes, indí- tigación asume que las mujeres hemos sido
acercamiento a la realidad guntarnos y acercarnos a mujeres diversas, genas, campesinas y urbanas en el contexto afectadas directamente por las prácticas
de las mujeres afro descen- a sus realidades, visiones, sentimientos y del conflicto armado colombiano; desde el de la cultura patriarcal y en este sentido la
dientes, campesinas, indí- experiencias. Y esta reflexión se inicia con reconocimiento de la contingencia del co- guerra como expresión del patriarcalismo,
la palabra enfrentar que designa la acción nocimiento del equipo investigador; desde nos afecta ya sea directa o indirectamente.
genas y urbanas en el con-
del equipo investigador de poner frente a la necesidad de construir con las mujeres
flicto armado colombiano frente, de frente y enfrente. que narraron su historia, visiones parciales El propósito de esta odisea investigativa,
de esa cruenta y dura realidad que a diario fue problematizar el conocimiento acerca
Teniendo como referente la opción El primer acontecer (de frente) nombra la padecen y sobrellevan. No fueron las voces de la vida de las mujeres en el contexto del
teórica, conocimientos situados comple- perplejidad ante el espejo representado por del equipo investigador las que siempre conflicto armado colombiano y, aproximar-
jos y/o perspectivas parciales y la meto- las otras; espejo que hace posible descubrir hablaron en el proceso de la investigación nos desde sus realidades parciales y pers-
dológica elegida, el propósito inicial de las relaciones ocultas; es decir, el símbolo y en el análisis de los resultados, fue la con- pectivas, para que hablaran desde sus cuer-
la investigación que fue indagar por el de sí misma que sale al encuentro de las in- jugación de múltiples voces, la confluencia pos, sus sentimientos y sus pensamientos,
impacto del conflicto armado en la vida vestigadoras y que les hace preguntarse por de diversas experiencias y saberes. y así lograr tener una mejor versión de sus
de mujeres en zonas de cultivos de uso su formación académica, en otras palabras, vidas, en el contexto del conflicto armado
ilícito, afro descendientes, indígenas, que las lleva a intentar identificar algunos Asimismo, al preguntarnos acerca de lo colombiano. Con la finalidad de que logra-
campesinas y urbanas, se fue decantan- de los implícitos que se subordinan, yuxta- que vincula a las investigadoras y a la Ruta, da esta mejor versión, ella se constituya en
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un elemento generador de transformacio- la realidad de sujetos sin memoria escrita criminación, analfabetismo, precariedad, En consecuencia, una historia de vida es
nes individuales y colectivas y permita a la hasta ese momento. pobreza y violencia que atraviesan a las en su más arcana acepción, emergencia
Ruta Pacífica, ser un puente en la acción mujeres que participarán en éste estudio. del yo cultural e históricamente escindido,
política y social de las mujeres. En el caso específico de los estudios de la Asimismo, se debió enfrentar dificultades censurado, silenciado, invisibilizado en lo
mujer, las condiciones sociales e históricas como el miedo de las mujeres y de las in- individual y en lo colectivo. Yo que brota
1.3. Un acercamiento a la de subordinación la habían mantenido in- vestigadoras, por el riesgo que implicaba por acción mancomunada y osada entre
visible, marginada de los espacios donde se colocar en palabras situaciones que podían quien habla y escucha para unir palabras,
compleja realidad de las elaboraban la Historia y las grandes expli- generar situaciones de inseguridad perso- silencios y desafíos de quienes exhaustas
mujeres caciones de la realidad social. A esto se re- nal y familiar. Por ello, sus narraciones se buscan cobijo para que no se enfríe el cora-
fiere Michelle Perrot cuando dice: “primero convierten así en un material invaluable zón ni se “endiose” la razón.
1.3.1. Las historias de vida, un utilizamos los métodos e instrumentos de para visibilizar su situación, para hacerlas
medio para reconocer la voz y la historia clásica. Simplemente, a causa partícipes del proceso de construcción de Adicionalmente, se enfrentaron varios re-
experiencia de las mujeres de la especificidad de objeto ´mujer´ tu- conocimiento, para hacer inteligible una tos al colocar en formato de investigación
vimos que desarrollar ciertas prácticas en realidad social que sitúa a las mujeres en sus narraciones. Un primer reto, lograr fi-
En las ciencias sociales ha sido fun- el campo de las fuentes. Recurrimos más un lugar específico dentro del conflicto delidad a sus voces, palabras, sentimientos
damental el debilitamiento de las hege- a los archivos privados, los diarios íntimos, armado, para dar a conocer el drama hu- y pensamientos, tratando de entender esas
monías teóricas, la crisis de paradigmas, las autobiografías, ya que durante mucho mano que enfrentan, pero también sus múltiples realidades y esas experiencias
las fuertes críticas al empirismo cuanti- tiempo, no se tenía en cuenta a las mujeres resistencias y sus esperanzas. reales de sufrimiento, violencia y resisten-
tativo y al fetichismo del dato que habían en el ámbito público. También apelamos cias. Un segundo, referido a cómo situar-
borrado al sujeto de las explicaciones, la a la historia oral para conocer la vida de En concordancia, las historias de vida son nos ética y políticamente como mediado-
irrupción de nuevas orientaciones teó- mujeres corrientes que no dejaron mu- tradiciones orales que rompen linealidades ras de su conocimiento y experiencia, para
ricas y objetos de estudio. Las críticas y cho rastro”17. previstas y esperadas por los dominadores. que otras personas lo conozcan y aprendan
rechazo del feminismo y los estudios de Este planteamiento acotado de Walter de ellas. Un tercer reto, dar un tratamiento
la mujer, a los monopolios que se atri- Pero más allá de esto, la crítica feminista a Benjamín cuando reconoce que “la historia ético a sus sufrimientos y sus experiencias
buyeron la cientificidad y la verdad del los científicos sociales develaba las relacio- es el dominio de la clase dominante, mien- en el conflicto armado.
conocimiento16. nes de poder y las dinámicas del patriar- tras que los subordinados se relegan al
cado, expresadas en un discurso científico campo de la tradición”. La historia de vida Para muchas mujeres, el conflicto arma-
De esta manera el interés por los grupos que en últimas objetivaba a la mujer como nos permite entonces inferir que las mu- do colombiano se ha convertido en una
sociales excluidos de los grandes relatos un dato y, manteniendo los supuestos jeres afectadas por los conflictos armados realidad cotidiana, expresión de tiempo y
y explicaciones, entre otros, permitió la sexistas de las categorías estadísticas, ne- “narran” sus dramas, aspiraciones por fuera espacio vivido día a día. No es un evento o
construcción de nuevos objetos, sujetos, gaba la subjetividad del conocimiento y del lugar esperado, para situarse en sus te- suceso, es más bien, la condición misma de
métodos y teorías de investigación. Las mu- sobre todo la comprensión y significado de rritorios emocionales de padecimientos y sus vidas. Desde esta dimensión es vital el
jeres, las-os indígenas, las clases populares, la experiencia femenina18. de esperanzas, relatos en las que ellas son relato de vida porque, en palabras de Ca-
los obreros y una multiplicidad de autores actoras y autoras al anudar el yo individual vallaro “historizar la experiencia individual
reclamaban voz propia. Los géneros testi- Factores centrales y determinantes en el con el colectivo, pero reconociendo y sin- (y colectiva), como cadencia temporal de
moniales y las tradiciones orales, se convir- uso de historias de vida en esta investiga- tiendo la distancia entre sus muchos yoes prácticas sociales ligadas a la secuencia de
tieron así en estratégicos para acercarse a ción, son las condiciones de exclusión, dis- en su propio cuerpo y corazón. la cotidianidad; hace aflorar el tiempo co-
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tidiano de los actores sociales”19. Las narra- construidos y en este sentido representan la palabra de aquella que ha deseado decir do que aprender a sobrevivir en medio del
ciones de las mujeres, permitieron historiar realidades sociales, sus dinámicas, relacio- de su contexto a través de su historia. De desangre, es quizá una oportunidad para
sus experiencias individuales y colectivas nes, representaciones y roles. Las “víctimas manera que lo aquí presentado, sólo es un conocer las formas de resistencia ante el
y mirar las múltiples interconexiones con estructurales” expresaron lo más personal, segmento de la tragedia sociocultural que conflicto; resistencia, que de modo cotidia-
sus entornos familiares y sociales. develando al mismo tiempo la verdad más se gesta en y a través del conflicto armado no, ellas inventan y fortalecen haciendo gala
profunda de su lugar social y político20. en Colombia. de valores como la solidaridad, la justicia,
“...Antes pensaba que la Grande era un Las historias de vida fueron portadoras la verdad, la esperanza y la reparación.
pueblito bueno y que uno desarrollaba sus “...Hasta la destrucción lo que yo tenía
actividades cotidianas fácilmente, ahora que
de información, y como tales hablaron de
era suficiente. No Sabía que podía ser libre...” “...Bueno, el problema, el
con la paz pudiera volver a hacer lo que era experiencias que sobrepasaron a las mu- Mujer del Choco. problema principal es que mi esposo se
antes pensaba que Quibdó era una ciudad jeres que las relataron. Fueron evocación: encontraba trabajando en una empresa
muy grande y que yo no podría vivir aquí transmitieron la dimensión subjetiva in- ¿Usted por qué quiere contar su llamada Construequipos, esa empresa de
ahora que vivo aquí pienso que estoy viviendo historia? “...A veces no quiero y otras si, la
aquí y que es la realidad que no esperaba ni terpretativa de las mujeres. Y posibilitaron Construequipos hizo unos convenios con
cuento para que otra persona me de ánimo una empresa que se llama Ociequipos del
quería...” Mujer del Choco. la reflexión: contienen un análisis sobre y valor para seguir viviendo y luchando para municipio de Orito, ellos trabajaban para
la experiencia vivida. Las mujeres que mis hijos, porque quedé con siete hijos, la Ecopetrol, entonces mi esposo era el que
“...Cuando yo fui niña era bien tranquilo, aportan sus historias de vida articularon última con siete años después de la muerte manejaba una volqueta, era conductor de
o sea, era una tranquilidad irremediable que de mi compañero. Los actores armados lo
información, evocación y reflexión. una volqueta, entonces de ahí de Caicedo
no se la puede remediar con nada, era una mataron, yo lo vi, estaba parada en la ventana donde estaba la empresa de Construequipos
tranquilidad que uno podía estarse hasta las de la casa y aunque estaba de noche, yo lo lo mandaron a trabajar para allá para el
cuatro, cinco, seis de la mañana todo una “...Yo pienso que fui educada en una vi pues estaba como a unos 20 o 30 metros municipio de Orito, una vereda que se
noche y a uno le pasaba nada, era tranquilo familia en un pueblo Páez, en un pueblo nasa cuando lo asesinaron...” Mujer de Medellín. llamaba El Empalme, él estuvo allá, mas
porque la gente no se moría así matada o de verdad, de corazón, de nacimiento y de
o menos unos 15 días, y resulta que allá la
asesinada, sino que en ese tiempo la gente raíz. Yo hablo muy bien nasayuwe, yo empecé
primera vez que estuvo lo retuvo la guerrilla.
moría por enfermedades del cuerpo o muy a estudiar en una parte donde no hablaban
nasayuwe, desde pequeña lo aprendí pero ya
Mujeres en zonas de cultivos de uso ilícito, Lo retuvo un día desde las dos de la tarde
de vez en cuando tenia que ser que alguien hasta las once de la noche, le preguntaron
mataba a otro pero así a puño o con cuchillo, grande cuando terminé la primaria mi abuela urbanas, afro colombianas, campesinas,
que cómo se llamaba él, que cómo se llamaba
es decir, no es como ahorita que hay mucha me enseñó, al año aprendí nasayuwe, en este mestizas e indígenas, que a través de sus el papá, que cómo se llamaban los demás
violencia...” Mujer de Putumayo. momento lo hablo pero en todavía no se da la historias de vida, dicen de la situación de familiares, que en qué trabajaban, que que
escritura...” Mujer indígena del Cauca.
ellas en medio del conflicto, a la vez, que hacían, que donde vivían, que a donde habían
En este sentido, el aporte de las historias reconfiguran sus subjetividades y se for- vivido, que a que se dedicaban... El dijo: Stella
yo me puse tan nervioso, que yo no supe en
de vida no se relacionó tanto con la infor- Las historias de vida, permitieron hacer eco talecen como actoras protagonistas de su esos momentos qué hacer, si salir corriendo.
mación que proporcionaron para recons- de la valoración de la subjetividad, lo que vida; pues un modo para saberse a si misma Yo caminaba como si estuviera caminando
truir los hechos tal como fueron vividos equivale a una consideración positiva de las es a través de la narrativa de la propia vida. en cámara lenta. Yo estaba tan nervioso, tan
y percibidos por las mujeres; sino por el Historia abierta a todos y todas, quizá con nervioso que las güevitas se me subieron acá
configuraciones que de sí mismas hicieron
a la garganta del puro susto, de los nervios,
contrario respondió principalmente a la las mujeres que narraron sus experiencias. la intención de contribuir a llenar el vacío del miedo. Y él eso me lo contó cuando vino a
pregunta sobre cómo las mujeres perci- Historias que se nutren de la desesperanza dejado por la historia de corte patriarcal, visitarme. Acá en Caicedo, estaba mi suegra:
ben e interpretan el conflicto armado y y también del valor que se requiere para que le ha dado a las mujeres espacios y lu- en esos diítas había llegado mi suegra del
Valle del Cauca, ella había sido desplazada
sus efectos sobre sus vidas. Desde esta seguir viviendo; historias que se forman a gares para la subordinación y la exclusión. con todos mis cuñados, mis cuñadas, mis
postura se entiende entonces, para el caso través de preguntas y críticas, muchas ve- sobrinos, mis sobrinas porque resulta que a
de esta investigación, que los testimonios ces formuladas en silencio; historias inaca- Acudir a la palabra, al recuerdo y al dolor mi suegro también ya lo habían matado...”
de las mujeres están a la vez socialmente badas, fragmentadas y verdaderas por ser de las mujeres, a las actoras que han teni- Mujer del Putumayo.
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1.3.2. Puntos claves para la giones y edades; con la intención 1.3.3. Las mujeres que narra- • ¿Quiénes nos narraron desde
investigación de recoger sus palabras y aproxi- ron su historia el Cauca?
marnos a los imaginarios sobre el
• La investigación realizada es de conf licto. Por otro lado, conocer
tipo cualitativo de carácter retros- de los efectos del conf licto arma- La cultura patriarcal ha tejido y Las historias de vida de las indí-
pectivo, con información obtenida do en sus vidas y de las relaciones entretejido cuidadosamente el silencio genas recurren sistemáticamente a la
a través de un instrumento de tipo sexo/género/etnia y conf licto y las para las voces de las mujeres, para que construcción simbólica de territorio
cualitativo. formas de resistencia que han di- ellas no hablen con voz propia y por sí para referirse a los lugares, momentos
• El instrumento central para la señado e implementado. Las cate- mismas; sacar esas voces de lo oculto, y sentidos que los pueblos indios le han
recolección de la información fue gorías de análisis por las cuales se de lo no nombrado y de lo no reconoci- otorgado a sus procesos de resistencia y
un cuestionario, que sirvió de guía optó para dar vida y palabra a las do es una posibilidad de penetrar en el supervivencia étnica en la lucha por la
para orientar la narración de la historias narradas por las mujeres mundo de la vivencia de las mujeres, en tierra, al reconocimiento de sus lenguas
historia de vida de las mujeres. fueron: sumisión y subordinación, relación con la guerra. la Ruta Pacífica ancestrales, cosmovisiones y prácticas.
• Las variables que se definieron para cultura patriarcal, memoria-pa- tiene la convicción que servir de vehículo En últimas, por el reconocimiento
orientar la narración y contribuir labra-subjetividades, resistencias para que las voces de las mujeres, sean como sujetos con derechos culturales
a que la memoria de las mujeres individuales y colectivas. escuchadas y sacadas de los rincones de colectivos.
tuviera una voz propia fueron: di- • La información se recogió e inter- las casas es una forma de tejer y urdir, no
mensiones de la vida familiar; di- pretó a partir de un marco concep- solo sus experiencias, sino también una Se trata de historias de vidas narradas
mensiones personales y culturales tual que se apoya en un enfoque fe- manera de permitir que se manifiesten por dos indígenas páez -o nasas como
sobre la afectividad, la sexualidad minista y también bajo el paradigma nuevos lenguajes, nuevos mensajes de re- prefieren autodenominarse en su pro-
y el cuerpo; dimensiones de la vida de la lectura de corte culturalista. sistencia y esperanza. Desde esta convic- pio idioma nasa yuwe 21- y tres indíge-
comunitaria. Formas de resisten- Se trata de una forma de acceder ción, cinco indígenas del departamento nas yanaconas; con edades entre 26 y
cia y respuestas de las mujeres al a la investigación social, entendi- del Cauca, cinco afro descendientes del 55 años. Dos viven en sus comunidades
conf licto armado en lo público y da como un acto de comunicación departamento del Chocó; cinco mujeres indígenas; de las otras tres, una va y
lo privado, representaciones de sí en el cual las investigadoras están de la ciudad de Medellín y cinco del de- viene de su resguardo a Popayán, otra
misma en el conf licto armado y inmiscuidas con su subjetividad y partamento de Putumayo, permitieron vive en la cabecera municipal y la otra
representación del mismo. circunstancias. Asimismo, la infor- que sus voces y relatos salieran de sus está radicada en Popayán; pero las tres
• El tiempo cronológico en el que se mación contenida en las entrevistas territorios emocionales y geográficos. siguen ligadas a sus tradiciones y con-
situó la investigación, para efectos se organizó en matrices. Cada una de las mujeres que participó, vicciones por el cordón umbilical que
del análisis del contexto es entre • Se obtuvo información para el estuvo de acuerdo en contar su historia está enterrado en sus comunidades, su
2000-2003. Las historias de vida contexto de las regiones, Mede- y es una afectada directa por el conf lic- arraigo lo sienten y viven, estén donde
cronológicamente se situaron en la llín, Cauca, Chocó y Putumayo, to, no necesariamente hacían parte de estén. Las dos nasas son bilingües, ha-
infancia, la adolescencia y la vida básicamente a partir de la revisión las organizaciones de mujeres y se en- blan su lengua nativa y por supuesto el
adulta antes y después del conf lic- de estadísticas, documentos y pu- contraban en zonas rurales y urbanas español con niveles distintos, dado sus
to. blicaciones-fuentes secundarias-. con disímiles posibilidades de acceso a experiencias en el mundo blanco, su
• Se realizaron veinte historias de • El grupo investigador estuvo con- servicios como la salud, educación, pro- nivel de escolaridad y la necesidad de
vida a mujeres de diferentes re- formado por cinco investigadoras. tección y vivienda. información para intercambiar.
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Destacar en esta investigación, porque así en un municipio fuertemente afectada “... Teníamos ganado, tres vaquitas para diversas razones, las más comunes son la
el ordeño y con eso uno se defendía, la casa
lo relatan las mujeres, el papel que juega la por las incursiones guerrilleras. Ambas necesidad de tener tierra para cultivar y
era de mi papá porque como somos indígenas
lengua nativa en los procesos de socializa- manifiestan su rechazo rotundo a la nos correspondía un pedazo de tierra y ahí las bonanzas (cauchera, petrolera, coca-
ción y de trabajo organizativo indígenas, es guerra y sienten, al igual que las yana- vivíamos y cultivábamos… ”. Mujer indígena lera) que auguraban mejores condiciones
reconocer que en gran parte la diversidad conas, que el conflicto en Colombia y del Cauca. de vida para las nuevas familias. En su
lingüística de Colombia, está vinculada muy especialmente en las comunidades totalidad provienen de zonas campesinas
con lo que han hecho las mujeres indígenas, indígenas, es una abierta disputa por la “...Mi papá y mi mamá buscaban el del Cauca y de Nariño, llegaron al Putu-
para contribuir a que las lenguas indígenas tierra. Sólo, la indígena de 26 años, está médico tradicional, el médico tradicional nos mayo cuando eran niñas o adolescentes y
no se extingan por influencia, llámese im- en su primera relación de pareja, tres curaba del duende... apenas uno nacía como les quedó en el cuerpo una primera huella
que los abuelos hacían remedio... aunque
posición, del español. Contribución que no tienen una segunda relación. Todas han todavía existe esa creencia del duende. Dicen del desarraigo con su tierra de origen. Una
se ha valorado como otro de los intangibles trabajado como empleadas domésticas unos que si se curan es porque van a ser de ellas es analfabeta y otra ha alcanzado
culturales en los procesos de reconocimien- y el rebusque en otros menesteres es médicos tradicionales, los que no, muchas estudios superiores, el resto tiene algún
veces se enferman, enloquecen y mueren.
to y proyección social de Colombia. parte de sus historias y de sus maneras nivel de primaria o bachillerato. Todas
Yo conozco historias de gente que se ha
de resistir contra la pobreza y no preci- enloquecido; por ejemplo, en la familia de son madres y han sido afectadas de ma-
“...Yo le he dicho a mis hijos y siempre samente, contra el hambre, porque bien mi primer esposo existe mucho esa creencia nera directa por el conflicto armado en la
lo diré y me da rabia porque hay uno de mis y como que a dos hermanos les pasó eso,
hijos que no quiere aprender el nasayuwe y
o mal, si tienen tierra tienen que comer. región, de ellas, cinco se encuentran en
los recuperaron pero como que no pudieron
la identidad de uno es el idioma, su forma de A pesar que las cinco indígenas relatan hacerle efecto los remedios y un día se
situación de desplazamiento y se consi-
ser, su forma de reconocer la autoridad del la pobreza, sobre todo, recuerdan que desaparecieron y los encontraron muertos.. “. deran hoy jefas de hogar.
pueblo de donde viene, su tierra, su forma sus familias no tenían para ponerlas a Mujer indígena del Cauca.
organizativa y todo eso, porque es que los
indígenas han tenido tantas posibilidades estudiar, aunque en otros momentos Provienen de familias campesinas e indí-
“...Fuimos atendidos por una partera
de ir a las universidad y estudiar y las afirman que los papás sostenían que el que todavía vive y es la madrina mía. Mis papás genas, manifiestan en forma permanente a
universidades están abriendo las puertas con estudio era para los hombres y que fue- eran Yanaconas, cuando yo nací mis papás ya través de la palabra y el llanto la idealiza-
esas posibilidades y ya muchos indígenas no hablaban lengua, hay algunas palabras
ron las mamás las que se preocuparon ción de la tierra de la que tuvieron que salir
han sido profesionales, pero esos indígenas que todavía se usan como “atatay”: asco;
profesionales desgraciadamente no han para mandarlas a la escuela. cuando eran niñas o adolescentes, porque
“achichuy”: frío; “acacay”: miedo; “achichay”:
regresado a las comunidades, se han quedado marrullero: enredador, mentiroso pero ya casi ya no había espacio suficiente para cultivar
quizás haciendo manillas y vendiéndolas en Cuatro mujeres dicen que no “tienen nadie habla, esas son las palabras que todavía o porque sus padres creyeron encontrar en
la ciudad; entonces una se pone a pensar eso recuerdo..”. Mujer indígena del Cauca.
qué va a mandar uno los hijos para que se
en su memoria” haber pasado hambre el Putumayo la oportunidad para salir de
queden por allá, si los estamos mandando y que ahora con el desplazamiento, en la pobreza.
a capacitar es porque los necesitamos es en caso de que les toque salir, seguramente • ¿Quiénes nos narraron desde
comunidad, necesitamos profesionales en todo cambiará mucho porque la tierra “...Cuando ya nosotros, por falta de
la comunidad, que se sientan indios y a la el Putumayo? terreno ya nos tocó trasladarnos para acá en
vez profesionales, pero que se sientan de su no se la pueden llevar. Por haber traba- búsqueda de que hubiera más terreno para
tierra y de sus valores culturales...” Mujer jado como empleadas domésticas dicen Las cinco mujeres del Putumayo, poder sobrevivir, luego nos trajeron para
indígena del Cauca. saber lo duro que es vivir en una ciudad que amorosamente nos narraron su his- acá...” Mujer de Putumayo.
que no se conoce ni tienen vecinas que toria oscilan entre 37 y 53 años de edad,
Una de ellas es gobernadora, cargo que las puedan ayudar. En síntesis, las cinco ninguna de ellas es oriunda del Depar- En todos los casos y en muchas opor-
hasta hace poco sólo era para los va- indígenas relatan su identidad étnica tamento, fueron llegando al territorio en tunidades, a sus madres les tocó asumir
rones. La otra, es una reconocida líder con usos y costumbres indígenas. las distintas oleadas de colonización y por la responsabilidad del hogar y el apoyo
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económico porque sus padres, aunque los Las familias de las cinco mujeres afro Es importante destacar el trabajo de las se escenifican en los barrios de la ciudad.
reconocen como proveedores “eran muy descendientes del Chocó se caracteri- mujeres, quienes se han organizado crean- Se debe señalar que las entrevistadas viven
dejados con la familia” o porque quedaron zaban por ser extensas, solo una fami- do lazos de solidaridad para protegerse en barrios de estratos uno, dos y tres; esce-
viudas. En la primera circunstancia, expli- lia respondía al modelo nuclear; lo cual mutuamente y se han vinculado, desde su narios en los cuales se exacerba la contien-
can que en ocasiones los padres no respon- significa que la mayoría convivió con especificidad, a las iniciativas nacionales da protagonizada por los diversos grupos
dían con su función por desinterés, por parientes de diferentes grupos gene- de los movimientos femeninos y feminis- armados.
abandono o porque se gastaba el dinero en racionales y, además, convivieron con tas, ellas han cargado con la familia y la
otras actividades. entenados-as, expresión de la región vecindad creada en medio de la adversidad, Las familias de las mujeres entrevistadas
para diferenciar a las-os hermanas-os e algunas están convencidas de que es nece- en Medellín, se caracterizaban por ser
“...Como mi papá era liberal, él tenía hijas-os de diferentes progenitores, por sario visibilizar su situación y transformar nucleares, solo una familia respondía co-
muchos enemigos que lo buscaban para
matarlo, entonces a mi mamá le tocaba
ejemplo, la hija-o del padre con otra mu- su condición cultural. yunturalmente al modelo extenso; lo cual
quedarse sola con nosotros y a ella le tocó jer; dicha situación hizo que las entre- significa que la mayoría convivió con pa-
trabajar muy duro para ayudarlo, de pronto vistadas sintieran que su posición en la • ¿Quiénes nos narraron desde rientes consanguíneos de primer grado y
mi papá era un poco dejado y le tocaba a familia estaba íntimamente relacionada la zona urbana de Medellín?. que las diferencias generacionales no eran
ella hasta hacer empanadas...” Mujer del
Putumayo. con el vínculo con el padre o la madre. marcadas.
La que se ve, la que se presiente y
• ¿Quiénes nos narraron desde Vale la pena enfatizar la indefensión de el enigma el día y la noche de la mujer 1.3.4. Propuesta para la sis-
el Choco? las mujeres ancianas y jóvenes; la joven y urbana tematización y análisis de las
la anciana representan los extremos en historias de vida.
“...Oye Romanita Páez, carambantúa... una sociedad en la cual las mujeres son Tres de las mujeres han convivido con
mis penas se me pasarán, carambantúa... marginales en la forma como se distribu- hombres y tienen un promedio de 3.3 hi- Para el proceso de sistematización y
pensando en mis bellos días, carambantúa...
ye el recurso y el ingreso, de ahí que mu- jos-as, una tiene un hijo desaparecido, otra análisis de la información metodológica-
Carambantúa enguayabá. ¡Ay carambantúa
enguayaba!..”22. jeres entre 20 y 50 años, deban asumir la uno muerto y la última dos muertos. Las mente se procedió a:
responsabilidad económica de sostener a más jóvenes, que accedieron a la universi- • Establecer elementos para la elabo-
Las mujeres que se dieron a la tarea madres, sobrinas, hijas y tías; la mayoría dad, están solteras, no tienen hijos ni una ración de las categorías analíticas,
de narrar su historia, tienen entre 56 y 30 de las veces lo pueden hacer a través de relación de convivencia Las mujeres de la teniendo en cuenta buscar en los
años, lo cual significa que encarnan tradi- trabajos que no exigen para su desem- zona urbana de Medellín, tienen entre 21 datos patrones de respuestas re-
ciones, creencias y comportamientos del peño formación académica, sino más y 60 años lo cual significa que encarnan currentes; definir unas categorías
Chocó rural de los últimos sesenta años; bien asociados a paciencia, dedicación y tradiciones, creencias, comportamientos tentativas y asignarlas a los conjun-
se precisa el carácter rural porque con fuerza física como son lavar ropa, coci- y transformaciones sociales gestadas en el tos de datos. Se chequeó la homo-
la excepción de una entrevistada, todas nar para familias o restaurantes, limpiar contexto urbano de la ciudad, en los últi- geneidad interna de las categorías,
tienen un origen campesino e incluso la casas o espacios públicos, tejer o hacer mos años, se menciona el carácter urbano relacionando los datos y agrupán-
que nació en la capital Quibdó, vivió una artesanías, trabajos que en promedio, porque todas nacieron en la ciudad y su doles entre sí y determinando que
parte de su vida en el campo, a lo ante- y de acuerdo a testimonios femeninos, vida se ha desenvuelto en Medellín; a lo las categorías fueran mutuamente
rior se agrega el hecho de que todas son reciben un salario de treinta mil pesos anterior se agrega el hecho de que son víc- excluyentes.
víctimas del desplazamiento forzado del ($30.000) mensuales, aproximadamente timas directas e indirectas de las múltiples • Elaborar matrices para la sistemati-
campo hacia la ciudad. U.S 12 dólares. manifestaciones de violencia y guerra, que zación e interpretación de la infor-
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mación, partiendo del tiempo cro- 1.4.1. Cultura patriarcal Pero aproximaciones más contemporáneas es esencial para entender el patriar-
nológico de las narraciones de las como la de Anna Jónasdóttir, proponen un cado, el género, la subordinación
historias de vida. La categorización A través del desarrollo de las socie- desplazamiento de la categoría patriarcado social y el desorden social en que
se inició definiendo la unidad de dades modernas, se han dado diversas que ha tenido como centro de análisis la vivimos las mujeres en cualquier
análisis a partir de la cual se podía interpretaciones a la categoría patriar- explotación socio/económica de las mu- época histórica.
descomponer la información. Y se cado, todas ellas respondiendo a los jeres por los hombres: a una forma de re- • Contribuye a comprender y anali-
construyó una tabla que agrupara las momentos históricos y culturales. Para lación socio/sexual en la que el poder del zar la pérdida de soberanía de las
categorías derivadas de las preguntas Greda Lerner el patriarcado puede ser amor de las mujeres, entregado libremente, mujeres sobre sí y sobre el mundo.
de las historias de vida y organizara las considerado como: “La manifestación e es explotado por los hombres. El amor es • Visibiliza y analiza las institucio-
respuestas por la fuente de informa- institucionalización del dominio mas- una especie de poder humano alienable y nes necesarias para producción y
ción. Después de la primera categori- culino sobre las mujeres, niñas y niños con potencia causal, cuya organización so- reproducción del orden simbólico
zación, se reorganizaron las categorías en la familia y la extensión de los do- cial es la base del patriarcado moderno. El patriarcal.
que arrojaron resultados que podrían minios sobre las mujeres en la sociedad amor hace referencia a las capacidades de
ser agrupados en otros temas, tenien- en general. En la cultura patriarcal los los seres humanos, poderes, para hacer y 1.4.2. Subyugación - Servicio
do en cuenta los tiempos cronológicos hombres ostentan el poder en todas las rehacer su especie, no sólo en la procrea-
en los cuales se periodizaron las histo- instituciones importantes de la socie- ción y la socialización de los niños, niñas, Se puede afirmar que el ser humano
rias de vida. Finalmente, para la ma- dad y las mujeres son privadas del po- sino también en la creación y recreación de se define por su naturaleza culturalizada,
triz descriptiva se elaboró una tabla der. Ello no significa, que las mujeres los adultos como existencias socio/sexua- con la que se nombra el rasgo de distan-
en la cual se cruzaron dos categorías estén totalmente privadas de derechos, les individualizadas y personalizadas23. La ciarse de la impresión sensible, o sea, que
relacionadas público y privado, que inf luencia y recursos”. utilización de la categoría patriarcado tiene es un animal mediato y sus respuestas
se constituyó en un recurso útil dado diversas implicaciones: son interpretaciones, abstracciones de
que permitió describir sintéticamente Kate Millet, avanza en su conceptuali- lo dado. Al respecto Andrés Ortiz-Osés
la información y detectar las formas zación y afirma que: el patriarcado es un • Se puede aplicar al Estado espe- nos dice: “Para la captación de su mundo,
de resistencia y respuesta al conflicto “sistema social y político y un conjunto cialmente cuando éste a través de la el hombre, las mujeres, crea su propio
armado. Ver anexo 1. de relaciones y compromisos estructu- ley y los derechos, garantiza la no instrumentarium: un mundo de formas
rales de acuerdo con el poder en virtud constitución de las mujeres como simbólicas que, como red tupida de re-
1.4. Premisas orientadoras de los cuales un grupo de personas que- sujetos políticos. laciones, proyecta la elemental realidad
da bajo el control de otras”. También la • Permite analizar la heterosexuali- ante-los-ojos. Ésta queda aprehendida
para el análisis. cultura patriarcal, puede ser vista como dad obligatoria y el contrato sexual y aprendida a imagen y semejanza del
un sistema de poder socio/sexual y po- previo al contrato social. Según hombre y de las mujeres. La realidad es
Las categorías orientadoras tienen lítico particular o como el proceso de Carole Pateman: El contrato sexual siempre una realidad simbólicamente
como punto de partida la teoría feminista, apropiación de la sexualidad y la capa- es considerado como el pacto entre ganada y, en tanto, una realidad - implíci-
para el análisis de la situación de subordina- cidad reproductora femenina, por parte los hombres o entre algunos hom- tamente implicadamente- simbólica”24.
ción y opresión de las mujeres. A continua- de una organización social basada en un bres sobre el cuerpo de las mujeres.
ción enunciaremos un conjunto de premisas patrón de ordenamiento masculino, en Un pacto desigual y, no pacífico, Esta realidad simbólica le brinda al ser
que nos permiten orientar el análisis de las el cual lo femenino resulta incompleto, porque no es un acuerdo libre entre humano la posibilidad de crear imágenes
narraciones de las mujeres. desviado e inferior. mujeres y hombres. El pacto sexual y roles para sí y para quienes lo rodean;
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de manera que, pueda vivir y hacer de su turas, sus capacidades, sus lenguajes y sus El cuerpo es el texto en el que se lee el tra- En todas las sociedades humanas se cons-
universo un mundo con significado. Así la métodos. La subjetividad está conformada yecto que define a cada vida, en él quedan truyen normas que definen los contenidos
naturaleza humana es culturalizada, es el por la afectividad - afectos experimenta- plasmadas las alegrías y tristezas, el amor de lo femenino y lo masculino, es decir, a
producto de la condensación de informa- dos, usos afectivos, lenguajes, capacidades y el odio, la memoria y el olvido; por eso partir del sexo como condición biológica
ción sensible que se hace signo y símbolo, y marcas afectivas-, y por la intelectualidad ya en la Grecia antigua, se decía que un expresada en rasgos internos y externos se
los cuales, pese a su carácter artificioso, se del sujeto - capacidades y estructuras de ser humano se re-conoce por sus cicatrices construye el género, como categoría cultu-
instalan como sentido común. En este sen- inteligencia, memoria, olvido, imaginación, – físicas, simbólicas y psíquicas -, por las ral que describe la condición de lo femeni-
tido, se puede pensar que el primer suelo aprendizaje y creación-, así como por los huellas que en su cuerpo se conservan como no y lo masculino. Entonces en la práctica
sobre el cual se configuran signos y símbo- contenidos y los métodos de pensamien- registros de su experiencia, de su existencia, el cuerpo aparece como el criterio para
los, sentido común, es el cuerpo humano. tos. Concebida de esta manera la subjeti- de su participación en la constitución de la establecer una oposición entre femenino y
vidad se expresa tanto en los sentires, en cultura y la humanidad. Pero también en masculino; dicha oposición se erige sobre
De manera que, en la expresión somos y las preocupaciones y en los pensamientos, el cuerpo de cada persona se manifiesta la la relación que establecen los agentes con
tenemos cuerpo se enuncia una relación como en la imaginación, en los sueños, en especificidad cultural de la sociedad, pues el cuerpo, un núcleo axiológico con dos ca-
cultural conformada por cuatro polos que las fantasías, en los humos y en todos los en él se ponen ante los ojos de todos y to- ras: el ser-mujer y el ser-hombre las cuales
describen a la condición humana como lenguajes del sujeto-simbólico, gestual, das las libertades y restricciones, lo posible se cruzan en el esfuerzo por preservar la
indeterminación anclada en la tradición; imaginario, estético-, concretado dentro y y lo imposible de acuerdo con los valores y tensión entre varones y mujeres
el cuerpo es horizonte de alteridad sobre fuera de sí en sus deseos, en sus formas de tabúes de un período histórico particular.
el que se erigen las nociones de sagrado, ser, de estar, y de actuar en el mundo”25. La tensión entre varones y mujeres, no sólo
profano, femenino y masculino; el cuerpo El cuerpo, en tanto localización inmediata configura y perpetua imágenes relativas a
encarna lo excesivo que alude a la contin- Somos y tenemos cuerpo que constata la que conforma el lugar y el campo percepti- lo femenino y lo masculino, sino también
gencia signada por lo sobrenatural, mágico vida, así, cada sensación es una impre- vo y sitúa el punto de vista, implica una ma- propone roles a mujeres y varones, descri-
e irracional haciendo que cada cual expe- sión corporal, una impronta hecha por el terialidad ubicada e inmersa en un proceso biendo un mosaico de comportamientos
rimente la intempestividad y el azar en su cuerpo en el ser; pero a la vez, tenemos histórico. El cuerpo, en esta perspectiva, para unas y otros, así los preceptos cultu-
propia carnalidad. cuerpo con el cual cada cual define su debe ser entendido, al menos, con un doble rales tradicionales le imponen a la mujer
singularidad. Ser y tener cuerpo se co- significado: como locus de interpretaciones conductas orientadas hacia el servicio de
El ser es corporal y define a cada cual como rresponde con la condición humana de culturales, el cuerpo es una realidad mate- otro diferente a sí misma; mientras que, le
unidad diferenciada étnica y sexualmente eterno aprendiz que interpreta el medio, rial que ya ha sido localizada y definida sugieren al varón prácticas orientadas ha-
que se concreta en una subjetividad, que lectura que inscribe en su propio cuerpo, dentro de un contexto social; además, el cia el aprovechamiento para sí mismo.
dice del modo cómo se interpreta el medio como quien escribe la historia de su tiem- cuerpo es la situación de tener que asumir
sociocultural al que se pertenece. Y “la sub- po; se podría decir que los cuerpos son y representar una y otra vez el conjunto de Teniendo en cuenta que se habla de pre-
jetividad tiene como territorio el cuerpo libros en los que se compila el sentir del interpretaciones recibidas sobre él mismo. ceptos culturales tradicionales, se puede
vivido, y es producto de la conformación presente de cada época como el resultan- Así pues, si asumimos el carácter construi- afirmar que el patriarcado promueve un
del sujeto como diversidad y síntesis bio- te del diálogo con la tradición y también do del cuerpo como cuerpo sexuado, nada paradigma de lo femenino que se caracte-
psico-socio-cultural. Así, la subjetividad se de la ruptura con dicha tradición hacia impide pensar en la posibilidad de que esta riza por la formación de un ser-para-otro,
aloja y es a la vez, cuerpo histórico significa- la apertura de la ilusión y la utopía. El categoría pueda cambiar a medida que las por un mosaico de comportamientos que
do social y culturalmente... La subjetividad cuerpo es el escenario de las pulsaciones sociedades evolucionan, o participar en aquí llamamos subyugación servicio; sub-
incluye la dimensión psíquica, sus estruc- del devenir individual y colectivo. combinatorias aún inexistentes. yugación en el sentido que describe con-
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ductas, en este caso, orientadas hacia la En virtud de lo anterior, las historias de nos permite comunicarnos y a la vez dife- La subjetividad es la que nos permite a
enajenación del propio ser para favorecer vida permiten re-cordar: volver a pasar por renciarnos como seres individuales y como mujeres y varones reconocer a qué perte-
el desarrollo de otro que intimida, y en este el corazón y, con-versar cogitar, ejercicio de seres sociales. necemos (no a quién pertenecemos), con
sentido, es de servicio y se define porque sopesar lo vivido, los riesgos asumidos, las qué nos identificamos o nos identifican,
distancia a la mujer del desarrollo de la falencias, las carencias, las intransigencias, Pero también el leguaje permite proble- cuáles son los rasgos o puntos comunes
conformación de un ser- para- sí favorable los senderos y las huellas para vigorizar, matizar las concepciones y las relaciones que tenemos como seres humanos, como
al desarrollo de sí misma. para hallar y construir sendas imaginadas, al percibir y nombrar las dinámicas de la integrantes de una comunidad. Es decir,
poco exploradas y valoradas social y cultu- vida, porque al decir de Foucault “sobre qué imágenes reflejo, qué imágenes cons-
1.4.3. Memoria en palabras ralmente. las palabras ha recaído la tarea y el po- truyo como ser independiente y libre, pero
subjetivas: Otra versión de la der de representar el pensamiento. Pero siempre adscrito a una colectividad.
realidad Al con-versar con mujeres que de una ma- representar no quiere decir aquí traducir,
nera u otra, tienen su trance en la guerra, el proporcionar una visión visible, fabricar 1.5. Contexto de la investi-
Las palabras al nombrar los hechos, los silencio histórico y cultural del que pade- un doble material que sea capaz de repro-
sucesos, las cosas, las personas tejen univer- cen, acrecienta, sin que ellas se den cuenta, ducir, sobre la vertiente externa del cuerpo
gación
sos emocionales, sociales, culturales. Al decir su dolor, pero al con-versar valoran sus el pensamiento en toda su exactitud. Re-
La investigación se llevó a cabo en
de Julia Kristeva “La palabra es cruce de pa- quejas, resaltan sus resistencias individua- presentar es oír en el sentido estricto...” Y
Quibdó, Medellín, Popayán y Puerto
labras” y por ello toda narración, toda verba- les o comunales, su capacidad para sobrevi- oír historias de vida es a lo que la Ruta se
Caicedo, con 20 mujeres procedentes de
lización, expresión oral o escrita es un texto vir y pervivir. En el fondo, lo que se hace en ha dispuesto con esta investigación, pero
diferentes municipios. Con realidades di-
que testimonia, revela, evidencia y protege dicha conversación es una tramitación de no como un mero procedimiento para sus-
versas y todas ellas vinculadas al conflicto
el pensamiento de los pueblos y, pese a las silencios acumulados, de recuerdos guar- tituir una palabra por otra, una historia
armado en sus diversas manifestaciones
barreras para operar cambios, es un proceso dados, de renuncias continuas de sueños por otra. Es un ejercicio de subjetividad,
socio-políticas, regionales e individuales.
de renovación “histórica” constante. jamás hechos realidad y de dolores nunca entendida ésta como lo que cada ser hu-
El punto de encuentro el dolor, la pérdi-
purgados. mano siente, presiente y representa para
da, la subordinación, la negación, la des-
Las palabras son ante todo metáforas, por- sí y para exteriorizar. En otros términos,
esperanza, la resistencia y la fuerza para
que entre el significante y el significado no El ser humano piensa con palabras y es subjetividad es lo que caracteriza al ser
continuar construyendo mejores formas
hay una relación ni lógica ni material, es por medio del lenguaje que va más allá de que afirma algo.
de vida. En sus narraciones las mujeres
una configuración mental y social que se la cultura, o sea, que con el lenguaje se va
afirmaron:
torna en múltiples verdades, dependiendo más allá de lo que históricamente se ha En suma, las subjetividades tejen historias
de quienes la vivencien, la escuchen, la re- cultivado (de aquí la posibilidad de soñar; de sentimientos sobre pertenencias, y re- “Mi vida es la historia del sufrimiento
tomen, la retransmitan y la reelaboren. Es de cambiar, de resistir), lo que está en el presentaciones de un pueblo, comunidad y no me la va creer”. “La esperanza es lo último
decir, se trata de representar, de simbolizar, origen y uso de las palabras, de las frases, o etnia y de su concepción de territorio. que se pierde, pero me ha tocado hacer de
de hacer con las palabras cosas, tejer con el del discurso, de lo que se dice, es el sig- Sentimientos que están relacionados con todo”. Mujer de Medellín.
verso universos emocionales y sociales. Pero nificado que se le adjudica a las palabras los ordenamientos y sentidos sociales de
no el verso en sentido métrico, porque si así dependiendo del entorno y aspiración de preguntarse ¿Quién soy yo? Construcción La mirada a los contextos regionales parte
fuera, toda expresión que no rime, sería un cada quién. Por lo tanto, el lenguaje es la que se forja en diálogo con múltiples tiem- del reconocimiento: de la afectación dife-
lenguaje vulgar, corriente y de allí lo prosaico puerta de entrada y salida de la subjetivi- pos y en la sociedad en la que se vive y se rencial del conflicto armado en la vida de
al contraponer verso y prosa. dad al universo de lo simbólico, a lo que quisiera vivir. mujeres y varones; de las realidades socio-
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políticas tanto en el ámbito nacional como XX. Con los cambios que caracterizan el industria, las centrales energéticas, la cons- También la implementación del narco-
regional; de la sistemática violación de los capitalismo internacional (globalización, trucción del canal interoceánico y el tramo tráfico como industria ha provocado la
derechos humanos y de la forma específica primacía de las multinacionales y el capital de la carretera panamericana y sus desarro- concentración de la propiedad en personas
como ello incide en la vida de las mujeres y financiero, introducción de modernas tec- llos sobre el Tapón del Darién29. distintas a los terratenientes tradicionales,
de la crisis humanitaria que vive el país. Sin nologías, flexibilización laboral y consoli- contribuyó a la modernización económica,
embargo, los contextos regionales se trata- dación de los nuevos ejes estratégicos en el Desde la década de los 80 los grupos situación que quizá no se hubiera conse-
ron de mirar de manera que dieran pistas, Pacífico), el Estado colombiano y las elites insurgentes lograron crecer en número guido en el mismo grado y tiempo, sin la
puntos de encuentros y desencuentros de económicas se han visto abocadas, desde extendiendo su control geográfico y su afluencia de los capitales de esta actividad.
la cultura patriarcal. los años ochenta, a incorporar extensas participación en la vida cotidiana de las co- El narcotráfico reforzó conductas como
áreas del territorio nacional, claves para munidades urbanas; es así como, en medio el contrabando, la ilegalidad, la corrup-
En Colombia se cometen entre 27.000 y responder a estas dinámicas. de la lucha estatal contra el narcotráfico, se ción de la clase política, de las Fuerzas
30.000 homicidios por año y el desplaza- empezaron a gestar vínculos entre la insur- Armadas y la Policía; así como también,
miento forzoso generado por el conflicto En las nuevas áreas incluidas confluyen los gencia, que en ese entonces abanderaba el el arribismo de la gente del común y la
armado afecta a 2.5 millones de personas nudos gordianos de los conflictos de intere- conflicto armado interno, y el narcotráfico. resolución violenta de las diferencias,
en lo corrido de los últimos quince años. ses nacionales, las estrategias de guerra, las Situación que ha hecho más complicada la entendidas como justificaciones para el
Las zonas de mayor pobreza de la pobla- acciones de una modernización excluyente resolución pacífica del conflicto, pues por conflicto que implican la eliminación de
ción, de alta biodiversidad y estratégicas y autoritaria de la economía y la infraes- un lado la insurgencia logró que se vincu- quienes las encarnan.
en la expansión del desarrollo capitalista, tructura promovidas por multinacionales, laran a ella más actores y pudo tener mayor
coinciden con las áreas de mayor conflicto por el Estado y las elites regionales. glo- capital disponible haciendo más letal su 1.5.1. Medellín
en Colombia, en términos de los enfren- balización, proyectos de nación, moderni- acción; en esta situación se fundamenta la
tamientos armados y el desplazamiento. zación del aparato económico, petróleo y justificación del gobierno nacional, de con- Cuando se hace alusión a Medellín
Sin embargo, son hacia éstas donde se ex- coca animan las dinámicas territoriales de siderar sumamente difícil la realización de aparecen dos tipos de descripciones; las
pande el modelo de acumulación, esto es, la guerra y los portafolios de inversión26. negociaciones, pues sostiene que tales gru- primeras relativas al clima primaveral, el
son espacios que concentran los grandes pos son organizaciones criminales. desarrollo industrial, la oferta de servicios
macroproyectos del desarrollo. La expan- En efecto, la herradura comienza en el financieros, las ferias de moda, la pujan-
sión parte de un modelo concentrado en el piedemonte amazónico, sube por el Ori- En este marco es importante señalar que za comercial, el desarrollo del transporte
interior del país hacia la periferia en forma noco, cubre los valles interandinos del río sí bien la siembra de coca y amapola en masivo y la amabilidad de sus habitantes;
de herradura. Magdalena, las depresiones del Sinú, Bajo las zonas controladas por la insurgencia las segundas dicen de una representación
Cauca y Magdalena, extendiéndose hasta el le brindó recursos para su despliegue colectiva de la ciudad como escenario de
La herradura es la transformación y expan- Chocó biogeográfico. En este espacio con- territorial; también es cierto que la pro- disputa de diferentes actores armados y
sión espacial del tradicional «triángulo de fluyen los diversos intereses para controlar, ducción y distribución de narcóticos per- lugar de refugio para miles de mujeres y
oro» (Bogotá, Cali, Medellín), núcleo de las además del poder político y territorial27, el mitieron la expansión de los bloques de hombres de diversas edades y orígenes
relaciones modernas y de la acumulación petróleo y otros yacimientos minerales, la paramilitares que entraron a ser actores étnicos y geográficos, que llegan a esta
capitalista durante el período de vigencia biodiversidad28, los cultivos de uso ilícito, la del conflicto armado. La guerra que hoy ciudad huyendo de la pobreza, violencia y
del modelo económico de sustitución de expansión agraria y ganadera, las autopistas alientan ambos bandos, en campos y ciu- desesperanza de otros sitios en los cuales
importaciones y proteccionismo, entre y puertos multimodales, los aeropuertos y dades, se sostiene en gran parte gracias a fueron vulnerados sus derechos, expecta-
los años cuarenta y ochentas en el siglo proyectos de comunicación, transporte e este modo de financiamiento30. tivas y necesidades.
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De manera que, los dos conjuntos de des- masculina y ha provocado que se piense al En el contexto formado por los dos po- para servir al padre, al hermano, al hijo,
cripciones parecieran decir de una con- paisa, de forma natural, como un hombre los; primero mi hijito traiga plata por las al esposo como al Dios.
dición opuesta en la representación de la ascético, positivista, andariego, aventurero, buenas y sino traiga, segundo madre hay
ciudad, pues se le presenta a quienes no activo, pragmático, comerciante, laborio- una y padre puede ser cualquiera, interesa Hijos muertos que derraman su
viven acá, como un lugar idóneo para el so, aficionado al dinero, motivado al éxito, aproximarse al conflicto armado que se sangre en el intento de copar espacios y
negocio, la inversión económica y el desa- optimista, religioso, independiente, regio- vive actualmente en la ciudad a través de conquistar territorios que operan como
rrollo de iniciativas individuales y corpora- nalista, jugador, ordenado, agresivo, pro- la relación entre las mujeres y los varones pequeños reinos en los cuales imponen
tivas; sin embargo, también se reconoce la gresista, futurista, nervioso, truculento, encarnados en imágenes culturales como; su ley; cada día y por causas no naturales
incapacidad que se presenta en la ciudad espontáneo, locuaz, luchador, cumplidor, madre - guerrero, en las cuales se reconocen mueren hombres y mujeres en Medellín;
para resolver los conflictos que padecen alegre y amable; en síntesis, la personali- el ser femenino y el ser masculino en una así, se ha creado un imaginario de joven
sus habitantes. dad cultural masculina del paisa describe matriz de inclusión y exclusión, que fija sicario y potencial muerto que deambula
un campo semántico caracterizado por el binas de comportamientos para mujeres por las calles de la ciudad, imagen que ha
Los comportamientos y decisiones de ejercicio de la autonomía y la utilización y hombres en Medellín: madre - sicario y estigmatizado a la juventud masculina y
gran parte de la población medellinense de cualquier medio para obtener ventajas; compañera - combatiente, y también pres- la ha confinado al mundo de la no-po-
están relacionados con la vivencia del en este sentido, tiene plena vigencia socio- cribe espacios y acciones como casa - calle sibilidad. La imagen de la madre y del
núcleo axiológico justificado por la an- lógica la frase tan común entre los y las y afecto - contienda. muerto conforma imaginarios sostenidos
tioqueñidad entendida como modelo de medellinenses mi hijito traiga plata por las en realidades sociológicas como el narco-
interpretación y acción vigente31, en tanto buenas y sino traiga. De acuerdo con las realidades tráfico, los homicidios, el porte de armas
paradigma para instaurar roles para mu- culturales, que han dado sentido a la y las acciones militares.
jeres y hombres, que anclados en la tra- Esta misma tradición y como el envés “cultura paisa”, es común encontrar a la
dición, pocas veces son cuestionados; así de esta personalidad masculina paisa, imagen de María, madre de Jesús, como 1.5.2. Chocó
la antioqueñidad, en el contexto urbano, ha representado a la mujer casi de forma referente de la conducta femenina; a lo
se cuela en los sistemas de referencia a la natural como sumisa, fértil, protectora, largo y ancho de la ciudad abundan las En Colombia las comunidades
manera de un sentido común. hogareña, recia, trabajadora, tolerante, imágenes de la madre santa, que sin man- negras pese a su alta participación en
rezandera, pulcra, solidaria, comadre y cha alguna, sufre por la muerte del hijo la totalidad demográfica del país, son
Lo anterior no significa que se desconozca ante toda madre que vela por sus hijos terrenal, hijo de carne y hueso instalado consideradas minorías; es decir, peque-
la transformación en los comportamientos a contraprestación de una supuesta ve- en un tejido social caracterizado por la ñas islas poblacionales con costumbres,
y decisiones de la población medellinense neración. En síntesis, la mujer es pen- exaltación de la riqueza y la prioridad de creencias, valores y usos que se distan-
provocada por los factores sociológicos y sada como aquella que brinda todo para la extensión del territorio. Madre abne- cian del modelo central, que las elites
políticos que se gestan en la ciudad, sino acoger a los otros postergando su deseo gada que sufre en la tierra bajo la prome- han querido presentar como iconos de
al contrario, reconociendo las dinámicas y reemplazando sus necesidades para sa- sa de una felicidad conquistada solo des- nacionalidad. En este sentido, los y las
propias de lo urbano, se aclara cómo di- tisfacer los de quienes siente que están pués de la muerte, tal imagen compone negras han participado de la configura-
chas dinámicas guardan en sí una estrecha casi eternamente a su cuidado, en este un polo del imaginario femenino el otro ción simbólica y política de la “colom-
relación con una matriz de significación caso los hijos; en este sentido, tiene plena polo es la madre patriarcal que espera de bianidad” desde la penumbra, pues han
anclada en la tradición y una concepción vigencia sociológica la frase tan común su hijo la protección que otorga el padre sido confinados-as a permanecer en la
que ha permitido exaltar la idea de una entre los y las medellinenses: madre hay y en ese esfuerzo esclaviza a sus hijas periferia del Estado y los servicios que
raza especial, representada por la acción una y padre puede ser cualquiera. para satisfacer la ley masculina; es decir, éste está obligado a satisfacer.
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Ser negra-o en Colombia, pareciera impli- mestizas del país, que nos se reconocen El Chocó en tanto tierra ocupada sobre- concentran prácticas sociales que tienen
car para el sujeto una inserción desfavora- a sí mismas como encarnaciones de un todo por negros y negras, históricamente un significado asociado a la diversidad
ble en las jerarquías y sistemas de poder proceso de mestizaje también fundado fue en Colombia un escenario de segun- cultural, en la que se expresan jerarquías
económico y político que se han gestado en “lo negro”; es decir, en la música, co- da mano, una tierra de los sin tierra, una basadas en prejuicios. Así en Colombia el
históricamente en el país, es así como, se mida, habla, creencia, estética, mitología periferia que existía por el contraste con origen regional ha tenido un significado
han visto obligados-as a vivir en territorios y fabulación importadas desde Africa y el centro mestizo, andino y que seguía la étnico y éste uno regional.
apartados del desarrollo económico, a des- transformadas en América. De modo que ilusión del progreso económico capitalista.
empeñarse laboralmente en las ocupacio- en Colombia, las comunidades negras han Es así como al mirar el mapa de Colom- El Chocó ocupa una posición de exclusión
nes con más bajas remuneraciones o que no sido obligadas a vivir en la retaguardia de bia pareciera que existen dos países: uno que se traduce en escasas oportunidades para
exigen una preparación académica como el las fronteras agrícolas, infraestructura- central y otro periférico, en el primero se acceder a servicios estatales y a atención gu-
trabajo doméstico o la construcción. En les, urbanísticas y económicas. Los lito- concentra la población, la administración bernamental; pues la ideología que propone
Colombia abundan las mujeres negras que rales, especialmente el Pacífico, han sido pública, la riqueza y los medios masivos de el blanqueamiento como lo deseable, hace
sirven en las casas de los mestizos o blancos, representados por muchos colombianos, comunicación y transporte, en el segundo parte de un imaginario nacional que se afian-
los obreros de la construcción negros son como una extensión de tierra que está ahí la densidad poblacional es más baja, la za geográficamente y se traduce en discrimi-
quienes manejan los taladros de concreto y esperando por ellos, como un escenario ausencia estatal es mayor, los recursos son nación y retraso para las zonas donde hay
en los últimos tiempos su participación en de segunda mano. abundantes y los medios de comunicación poblaciones indígenas y negras; es decir, que
las selecciones de fútbol va en aumento. y transporte son insuficientes; cada uno se distancian ante todo en sus prácticas del
Sin embargo, las dinámicas del conflicto confirma la existencia del otro, formando ideal de blanqueamiento. En consecuencia,
El etnocentrismo que niega la humanidad en Colombia han llevado a que las consi- un articulado histórico y sociológico. De en Colombia, la discriminación étnica está en
del otro-a y cuya máxima expresión es la deraciones relativas a la importancia de manera que, se pueden entender como es- la base de la clasificación socioespacial.
discriminación racial, se ha traducido en los escenarios varíen de acuerdo a inte- cenarios de un conflicto que se origina en
olvido estatal y marginación política, de ahí reses económicos, geoestratégicos, locales las oscilaciones entre opulencia y margi- En el Chocó se pueden distinguir como
que los territorios donde están asentadas y globales, pues lo que está en juego es namiento, explotación y aprovechamiento, grupos étnicos y culturales diferenciados a:
las comunidades negras, de algún modo, una ambición territorial, una ilusión de reconocimiento y olvido. afro chocoanos, indígenas y blanco-mesti-
han sido para muchos colombianos tierras riqueza y quizá una aspiración de trans- zos. Los tres representan modelos que han
de nadie, pues se ha invisibilizado a cada formación social. Así en Colombia la an- En Colombia los procesos históricos y tenido un contacto diferencial entre sí pero
una y uno de sus habitantes; en consecuen- tigua periferia puede ser hoy el centro y sociales han llevado a la conformación caracterizado por la pretensión hegemóni-
cia, se han desconocido y deslegitimado el territorio y los habitantes olvidados y de regiones con características específicas ca de los blanco-mestizos, quienes se han
las relaciones tierra- hombre negro, tierra hasta entonces latentes, súbitamente apa- relativas al mestizaje, economía y política. considerado a sí mismos patrón ideal de
– mujer negra; situación que ha favoreci- recen como protagonistas de una trama Las regiones con gran diversidad cultural, comportamiento y en consecuencia, han
do la condición latente y periférica de las que no eligieron; quizá el cambio de lo como es el caso del Chocó, ocupan una asumido la supremacía sociopolítica. El
comunidades negras en la conformación latente a lo manifiesto sea el producto de posición específica dentro del conjun- imaginario nacional basado en prejuicios
de una identidad multicultural y por ello la reciente demostración de una riqueza to nacional, pues pareciera que fueran etnocéntricos, es vigente axiológicamente
nacional. que ya se presentía, entonces esa tierra representadas, por el común de la gente en las relaciones que orientan a las diná-
de nadie, pues allí estaban los negros-as, que vive en el centro político y económi- micas locales del Chocó. Esta afirmación
Latente porque ha estado silenciada empieza a ser para muchos “el dorado”, la co del país, como zonas “exóticas y ricas”; se sostiene en el análisis de los aspectos de
por el prejuicio peyorativo de las elites tierra prometida. en el sentido, que se cree que en ellas se diferenciación interna de cada grupo, en la
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revisión de las marcas simbólicas, territo- las consecuencias culturales de ser mujer - mestizos que han tenido una desigual La presencia de cultivos de uso ilícito, ha
riales, económicas y políticas reconocidas y con las implicaciones sociales de ser po- distribución de recursos económicos y una sido una de las causas fundamentales para
por todas y todos como criterios de distin- bre y no haber contado con alternativas de desigual valoración social, pero que histó- la desestabilización de la región, tanto por
ción extragrupal, y en la forma como dichas formación; es común ver a las negras ven- ricamente se han confrontado e imbricado los daños ambientales que ocasiona, como
marcas operan como barreras sociales que diendo frutas, comidas fritas, productos por su condición de periferia, representada por la violencia que esto genera, a pesar
fijan puestos para unos y otras definiendo de panadería, lavando ropas, cocinando en como escenario exótico y rico en posibili- de ser minoritaria, si se tienen en cuenta
la cotidianidad. restaurantes y limpiando en casas o lugares dades económicas. las áreas y poblaciones dedicadas a esta
públicos; es decir, realizando oficios que actividad, con respecto al total del depar-
Tales marcas diferenciales se encuentran son hasta impropios para las blancas - 1.5.3. Cauca tamento.
en diversos aspectos y escenarios de la coti- mestizas, que pese a su condición de muje-
dianidad chocoana, es el caso de la división res, no padecen la discriminación cultural Históricamente el departamento del De acuerdo con los últimos datos dispo-
del trabajo; la población negra se ocupa asentada en un imaginario que confina a Cauca es un territorio diverso en lo étnico nibles en el departamento se presentan
principalmente en la extracción minera, la negra a la triple segregación - exclusión: y esta diversidad marca a la vez su diversi- cultivos de uso ilícito de coca, marihuana
el empleo público y en menor grado en la mujer, negra y pobre. dad cultural y lingüística. En el territorio y amapola, principalmente en cinco zonas,
agricultura de subsistencia; los antioqueños caucano tienen presencia diversos grupos que afectan a 25 municipios, los cuales
en el comercio y ganadería y por su parte Mujer negra pareciera, en Colombia, étnicos: comunidades indígenas, comuni- presentaban un área de 6.699 hectáreas de
los costeños en la pequeña agricultura. Es traducirse como pobre, pues la historia dades negras, mestizos y blancos, quienes cultivo ilícito, las que representan aproxi-
común encontrar en las calles de Quibdó patriarcal, que de por sí es ciega al aporte han convivido y construido identidades madamente el 4.3 % del total de la superfi-
almacenes, restaurantes, supermercados, cultural de lo femenino, parece obstinarse y le han dado al Cauca, esa gran riqueza cie agrícola del departamento, y que invo-
tiendas y bares con nombres de lugares que en la crueldad contra la mujer negra, colo- étnica, socio económica y cultural. lucra a 9.378 familias, las cuales equivalen
ofrecen el mismo tipo de servicio en Mede- cándola en el último peldaño de las jerar- al 3.4 % del total de las familias del Cauca.
llín, sus dueños por lo general son “paisas” quías sociales imperantes al momento de Las comunidades indígenas que habitan
con empleados chocoanos/as. ingresar al sistema productivo; de modo el departamento son de las etnias guam- El recrudecimiento del conflicto armado
que, su participación económica es negada bianas, paéces, totoroes, yanaconas, coco- en el Cauca en los últimos años, ha afecta-
Tradicionalmente los blanco-mestizos no o reducida a la explotación de su cuerpo nucos, eperaras, siapidaras, ingas, quienes do directamente los territorios ancestrales,
se ocupan en actividades agrícolas y mine- ya sea en la mina, la siembra o incluso en han desarrollado procesos de autonomía, en los cuales han tenido sus asentamientos
ras, no son propietarios rurales y se ubican la prostitución, situación alienante para las de recuperación de sus territorios y afir- las comunidades indígenas y negras, lo que
en los cascos urbanos como comerciantes o negras, pues ellas son las más acalladas den- mación de su cultura. Las comunidades se evidenció con el desplazamiento del
funcionarios del Estado. La población ne- tro de las silenciadas. Se deben desenvolver negras asentadas en el Norte del depar- Naya, El Tambo, a la costa pacífica donde
gra se dedica a labores agrícolas y mineras en un mundo masculino que usufructúa la tamento, en el valle del río Patía y en la la mayoría de las personas desplazadas,
y sólo hasta hace treinta años que puede servidumbre femenina, exacerbada por las costa pacífica caucana, quienes han venido pertenecían a estos grupos étnicos.
desempeñarse en empleos estatales. condiciones culturales impuestas, y por lo trabajando también en procesos organiza-
general aceptadas, para las mujeres negras. tivos, en la titulación de los territorios que Desde los años 70, los territorios de las
En este esquema rígido de la división del han ocupado tradicionalmente. Igualmen- comunidades indígenas en el departamen-
trabajo la posición de la mujer es la más En síntesis, se puede decir que en el Chocó te Campesinos mestizos, hacen parte de la to han tenido la presencia de los grupos
dramática, pues ella no-solo carga con la han prevalecido tres modelos sociocultu- diversidad de los grupos que tienen asiento guerrilleros de las FARC, ELN, M-19; y
discriminación étnica, sino también con rales: indígenas, afro chocoanos y blancos en el departamento. el Quintín Lame movimiento armado in-
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dígena que hoy se encuentra reinsertado. militares, grupos insurgentes, narcotráfico, las provocó. De una parte, la movilización te de 16 años del municipio de El Bordo,
Las comunidades indígenas han sido claras ejército) y que generan desplazamiento de una opinión nacional que se sesga, to- que fue acosada sexualmente por grupos
y contundentes con los actores en conflic- forzado y crisis humanitaria. El mismo mando partido frente a los actores de la paramilitares y posterior a su denuncia fue
to, para que salgan de sus territorios y no efecto ha generado la aplicación del Plan guerra y que por lo tanto utiliza los hechos asesinada en su casa.
involucren a sus comuneros en el conflicto Colombia en una gran parte del territorio ciudadanos para fines que interesan a uno
armado. Han sido diversos los mecanismos caucano, la política de fumigaciones a los de los actores del conflicto, sin que ese El fortalecimiento de las capacidades de la
de defensa, de resistencia, que vienen utili- cultivos de destinación ilícita ha lesionado haya sido ni el propósito ni el sentido de comunidad para ganar un entorno favora-
zando las comunidades indígenas, frente a a las mujeres en aspectos relacionados con la oposición comunitaria al hecho armado. ble que permita movilizar la opinión hacia
los actores armados, basados en la fortaleza la condición económica (cuando son fumi- De otra, consecuente con la anterior, que su proceso, debe promover la participación
de sus organizaciones, autonomía, arraigo gados, además, los cultivos de pancoger) y el aislamiento, la falta de solidaridad y la ciudadana local y regional en torno a he-
cultural. Entre éstos la posición unánime la salud de ellas y sus familias. inmovilidad ciudadana en favor de la paz, chos ciudadanos de paz, consolidando su
de no salir y abandonar sus territorios, hace temer a los líderes y las lideresas, a las experiencia y haciendo visibles los procesos
el proyecto de las guardias cívicas como Empero, las manifestaciones de resistencia organizaciones de mujeres, y a los miem- que allí se viven. Es necesario comprome-
medida de prevención y seguridad, las civil al escalamiento de la confrontación bros de estas comunidades, que puedan ser ter al sector institucional, a las organiza-
alianzas con otras organizaciones políticas armada, que de manera espontánea reali- objeto de retaliaciones. ciones defensoras de Derechos Humanos,
y sociales que comparten sus principios, zaron las comunidades en los municipios a las ONG y a la sociedad civil, para actuar
para que se movilicen y busquen solucio- de Bolívar, Caldono y Puracé del departa- Se conoce que en los municipios de San- como red ciudadana por la paz, de manera
nes pacíficas y negociadas, a los conflictos mento del Cauca, son expresiones ciudada- tander de Quilichao, Timbío, el Bordo, El que se prevenga cualquier intención que
que los aquejan. nas, que demuestran que la guerra no hace Tambo, Morales y Cajibío entre otros, las pretenda afiliar a la población o parte de
parte del imaginario comunitario y que por mujeres han sido obligadas por parte de ella, bajo estrategias que favorezcan alguna
El Cauca ha sido escenario de los procesos el contrario rechazan los efectos negativos grupos paramilitares a permanecer en sus de las orillas del conflicto armado interno.
de paz realizados con los grupos insurgen- sobre la población, levantando su voz en casas después de las 10 de la noche, se les De igual forma, es muy importante preser-
tes del M-19 y el Quintín Lame, así como defensa de la vida, el interés colectivo y su ha prohibido usar minifaldas y han sido var los líderes y lideresas que han llama-
de diversas negociaciones realizadas por las patrimonio. Y en esta resistencia también acosadas sexualmente; quienes incumplen do a la resistencia civil y a las ciudadanas
organizaciones sociales del departamento las mujeres se la juegan toda: todo su te- con estas imposiciones, son llevadas a los y ciudadanos que han respondido con su
con el gobierno nacional. Esto ha hecho mor pero a la vez su convicción de que no campamentos para que les laven los uni- participación directa, pues sus vidas pue-
que la región se distinga por una activa y es posible la paz cuando se vulnera y lacera formes y les cocinen durante un tiempo. den correr peligro.
permanente movilización social que bus- el cuerpo de las mujeres. En consecuencia De igual manera las mujeres han sido víc-
ca una mayor participación política, unas la resistencia por parte de las organizacio- timas de estos grupos, cuando sus esposos Es importante resaltar que las goberna-
mejores condiciones de vida y la lucha nes de mujeres no se ha fortalecido, debido o vecinos las acusan de infidelidad y son ciones de Cauca, Nariño, Tolima, Huila
contra distintas medidas económicas que al permanente miedo frente a amenazas juzgadas y castigadas por los actores arma- y Putumayo impulsaron un proceso de
lesionan a la sociedad. Simultáneamente a contra la vida de las mujeres o las de sus dos. Algunas lideresas que están al frente integración regional que le apuesta a la
la presencia de las organizaciones sociales, hijos e hijas. de procesos comunitarios, han sido ame- construcción colectiva de país y al desa-
se encuentra un escalamiento del conflicto nazadas por acudir a las alertas tempranas rrollo de un nuevo esquema de Estado,
armado dada una mayor permanencia de La forma como han sido interpretadas es- frente a posibles incursiones de los actores cuyos objetivos esenciales son: diseñar
distintos actores armados que ejercen pre- tas manifestaciones de resistencia civil, ha armados. El último caso conocido ante la políticas sobre el ordenamiento territorial
sión en el territorio y la población (para- distorsionado el carácter ciudadano que opinión pública, fue el de una adolescen- y la reforma política; evaluar las políticas
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de erradicación de cultivos de uso ilícito y tanto, de configuración del clima adecuado el municipio de Puerto Guzmán se fumi- uso ilícito, los-as pequeños-as cultivado-
elaborar una propuesta regional; y avanzar para las condiciones de vida en el plane- garon 3.950 hectáreas35. res habían incumplido sus compromisos,
en la construcción del Plan de Desarrollo ta33. La región amazónica había estado lo cual había llevado al aumento de los
y Paz de la Surcolombianidad. habitada en sus orígenes por indígenas Con posterioridad a la suscripción de varios cultivos de uso ilícito en algunas áreas de
de distintas etnias, que poco a poco fue- de los pactos a finales del 2000 y principios la región. Sin embargo, como se expuso,
De otro lado, la desmovilización de las ron recibiendo en su extenso territorio la del 2001 se intensificaron las campañas el plazo de un año no podía considerarse
Autodefensas Campesinas del Cauca con- llegada de nuevos pobladores de distintas de fumigaciones masivas en Putumayo, vencido para esa fecha. Además, no podía
vierte al departamento en uno de los esce- regiones del país como resultado del pro- bajo la estrategia del Plan Colombia. Para afirmarse contundentemente que los cam-
narios de los procesos adelantados por el ceso colonizador. Inicialmente, el gobierno el año 2001 en los municipios de Puerto pesinos-as e indígenas habían incumplido
gobierno del Presidente Uribe, lo que ge- central impulsó la colonización para la Guzmán, Villagarzón y Puerto Caicedo sus obligaciones (Defensoria del Pueblo,
nera incertidumbre en las organizaciones explotación de recursos naturales como principalmente se fumigaron 23.176 hec- octubre de 2002).
sociales y las comunidades, específicamen- la quina y el caucho (1884-1913), luego la táreas y a partir de agosto del 2002 se rei-
te porque se conoce que es un sector muy violencia bipartidista de los años 50 oca- nició nuevamente la fumigación (Contra- Ante esta realidad, la implementación
reducido el que se desmovilizó, pero las sionó que muchas personas de diferentes loría General de la República ). Pese a ello, de estas acciones han estado rodeadas de
AUC continúan con una amplia presencia regiones del país huyeran de la violencia, aunque ha habido una disminución de los fuertes criticas y oposiciones por parte de
en el territorio caucano. desplazándose a la región. Posteriormente cultivos, los resultados obtenidos han sido las comunidades campesinas e indígenas y
la bonanza petrolera (1963-1970) y por cuestionables; como lo plantean algunas de las organizaciones de la sociedad civil
1.5.4. Putumayo último la bonanza de la coca (1977-1989), investigaciones, el comportamiento de la nacionales e internacionales que rechazan
contribuyeron a que se generaran impor- producción de uso ilícito no se elimina totalmente la forma en que se ha orientado
El departamento de Putumayo se lo- tantes migraciones hacia la Amazonía oc- totalmente, ya que existe una tendencia al la política antidrogas; así la Contraloría
caliza al Sur del país, limita al Norte con cidental; así el crecimiento de la población desplazamiento de los cultivos hacia otras General de la República y la Defensoría
los departamentos de Cauca y Caquetá, en las últimas décadas muestra cómo la regiones, donde antes no existían, generan- del Pueblo, han denunciado reiteradamen-
al Sur con los países vecinos Ecuador y región pasa de tener 250.000 habitantes en do así la reiniciación de un nuevo ciclo de te los impactos ambientales y sociales de
Perú, al Occidente con el departamento 1973 a más de 550.000 en 199934. la producción cocalera. las fumigaciones, tanto por su ineficacia
de Nariño y al Oriente con el departa- como por el deterioro ambiental y el per-
mento del Amazonas. Cuenta con una El departamento de Putumayo ha sido Las fumigaciones han sido consideradas juicio en la salud y en la alimentación. De
extensión aproximada de 24.885 km2, y foco del gran despliegue de la ofensiva con- como una estrategia improcedente del go- este modo, han demandando la suspensión
hace parte de la región amazónica junto tra los cultivos de uso ilícito; se estima que bierno, ya que a pesar de la suscripción de inmediata de las fumigaciones indiscri-
con los departamentos de Amazonas, allí se cultiva cerca del 60% de la coca de varios pactos sociales de erradicación, se minadas, hasta tanto no cumpla con los
Caquetá, Vaupés, Guaviare y Guainía32. todo el país; adicionalmente es considera- han realizado operaciones aéreas, afectan- planes de manejo ambiental que permitan
da una importante área donde se localizan do no sólo a los cultivadores de coca, sino evaluar los impactos en el medio ambiente
La amazonía colombiana corresponde grupos al margen de la ley, quienes extraen también a los que no lo son e incluso a las con el fin de mitigarlos, compensarlos, co-
al 35% de la superficie total del país, sus del comercio de estos cultivos una signi- comunidades firmantes de los pactos. Se- rregirlos y controlarlos y así mismo hasta
ecosistemas están caracterizados por la ficativa porción para su financiación. Las gún el informe de la Defensoría “a juicio tanto no exista un plan de salud de vigilan-
existencia de bosques húmedos tropicales fumigaciones en el Putumayo se empiezan de las autoridades antinarcóticos, vencido cia epidemiológica que realice un estudio
que cumplen con una importante función a desarrollar en julio y agosto de 1997 con el plazo de un año para erradicar manual científico serio esclareciendo los efectos de
de regulación de los ciclos del agua y, por la aspersión de 516 hectáreas y en 1998 en y voluntariamente sus plantaciones de este químico en la salud humana.
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La expansión de los cultivos de uso ilíci- el impacto del conflicto armado, el narco- ha transformado enormemente..., no hay algunas comunidades indígenas, amén de
una solo familia por todos estos cambios.
to ligada al fenómeno del narcotráfico, ha tráfico, y la producción de cultivos de uso las violencias cotidianas en la familia, la
Veamos también cómo la familia se empieza
venido ganando proporciones tan amplias ilícito, entre otros; y como consecuencia de a incorporar a la guerra, el joven vinculado al comunidad y las instituciones mismas“39.
y tan complejas, que se ha articulado fun- los dos anteriores factores, por la configu- conflicto armado, como soldado campesino
cionalmente a la guerra interna que vive el ración de diversas tipologías donde se pue- o red de informante... y la mujer se siente El homicidio deja huérfanos a más de 50.
muy afectada, por esto, es a la que le toca ver
país, y en consecuencia, repercutiendo en den encontrar, en mayor proporción que partir a sus muchachos, es como arrancar una
000 niñas-os y a 15.000 viudas cada año
el escalonamiento del conflicto armado las familias nucleares, a otras estructuras parte de sí para participar en una guerra sin de acuerdo con las cifras de la Consultoría
colombiano. En este complejo escenario familiares. sentido” Mujer del Putumayo para los Derechos Humanos y Despla-
confluyen diversos actores-as que coexis- zados, Codhes. Desde 1980 la violencia
ten y problematizan aun más la situación. En el departamento la organización fa- 1.5.5. La violación de los De- cruzada entre guerrilla, militares, parami-
Por un lado, se encuentran los grupos al miliar más frecuente es: la monoparental, rechos de las Mujeres, un ele- litares, narcotráfico y delincuencia común,
margen de la ley quienes han ejercido una con altos niveles de madresolterismo por mento común a Chocó, Putu- ha provocado el desplazamiento forzado
presión y lucha por el control de territorios encima de los casos de la jefatura del padre mayo, Cauca y Medellín de más de 2.000.000 de personas dentro de
estratégicos con propósitos meramente sin presencia de la madre; familias recom- las cuales el mayor porcentaje corresponde
económicos, políticos y militares, benefi- puestas que han pasado de una a cuatro En Colombia la mayoría de las víc- a mujeres y menores de edad.
ciándose así del negocio del narcotráfico uniones sucesivas; familias extensas, donde timas de la violencia socio- política son
como fuente de financiación, provocando el cohabitan diferentes generaciones y por lo hombres, pero progresivamente se pre- El impacto negativo de la violencia socio-
crecimiento de las actividades de narcotrá- tanto, diferentes clases de concubinatos37. senta un incremento de manifestaciones política se refleja en la composición y diná-
fico y por ende, de la siembra de los cultivos violentas que afectan con especial crudeza mica familiar, así como también, en la des-
de uso ilícito. Por otro lado, se encuentra Es evidente que toda la situación de vio- a las mujeres, niñas y niños. “Las mujeres dibujación de los roles, limites y funciones
el gobierno nacional, quien ha decretado la lencia que vive el departamento, incide en que viven en zonas de conflicto armado que cumple cada uno de las-os miembros
lucha contra las drogas y por lo tanto su las dinámicas familiares y en la violencia al padecen cotidianamente una serie de de la familia. Incide en aspectos económi-
ofensiva militar contrainsurgente. Y final- interior de ella. Según estudios realizados violaciones de sus derechos humanos y cos como el empobrecimiento gradual y
mente la población campesina, vinculada acerca de los efectos del impacto del culti- en particular de los derechos sexuales y progresivo de las mujeres, muchas de ellas
con los cultivos de coca, sobre quienes han vo de coca, el fenómeno del narcotráfico, reproductivos, por parte de los diferentes jefas de hogar, que intempestivamente en-
recaído las peores consecuencias36. el fenómeno del desplazamiento forzado, actores de la guerra. La violencia sexual, contraron la viudez, hallándose indefensas
y el conflicto armado, sobre las dinámicas utilizada como arma política por los gru- y sin recursos para garantizar la supervi-
La sociedad putumayense cuenta con las familiares, reconocen que estos fenómenos pos en conflicto, es una de las formas más vencia propia y la de sus hijas-os.
características de una cultura patriarcal, generan dispositivos culturales38, que se comunes de violencia – no denunciadas,
la cual se reproduce en diversos espacios; configuran sobre la subjetividad y la vida ni investigadas, a que son sometidas las Lo cierto es que la violencia contra la
escuela, familia, iglesia, organizaciones privada de las personas, reproduciendo y mujeres colombianas que habitan en sec- mujer se exacerba en tiempos de conflic-
sociales y estatales, entre otros. En el Pu- manteniendo la violencia intrafamiliar. tores urbanos y rurales, que se encuentran tos armados, adoptando connotaciones
tumayo, las familias presentan tres factores bajo la influencia de estos grupos arma- sexuales como violaciones, acosos, abusos,
que se deben tener en cuenta: su diversidad “En cuanto al impacto tanto de los dos. A estas violencias se suman especia- esclavitud doméstica y sexual y mutilacio-
cultivos de uso ilícito como del conflicto
cultural, como producto de los distintos armado se ve mucho la desintegración
les prácticas discriminadoras existentes nes sexuales. La situación llega al punto
complejos culturales que se han estableci- familiar, originando muerte, mujeres cabeza en algunas de esas zonas, tales como la de que se afirma que las mujeres de los
do en la zona por efecto de la colonización; de familia, viudez. el entorno familiar se venta de niñas y la mutilación genital en barrios saben de complicidad, por acción
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u omisión, en algunos casos, de las mujeres patriarcal a la mujer, es así como, las afro forzado está asociado a masacres, amena- plazamiento está asociado a los pro-
con miembros de grupos paramilitares, y descendientes tienen que vivir las impli- zas y otras prácticas de violencia que se cesos de recomposición de la estruc-
/o con las bandas que han sido cooptadas caciones de la guerra bajo la lógica que derivan del tratamiento de la población tura de la tenencia de la tierra, en
por ellos40. discrimina por sexo/género y etnia, ha- como objetivo militar. Las motivaciones las nuevas fronteras de colonización
ciendo de ellas las más marginadas de las del desplazamiento son diversas y se en- y expansión de la frontera agrícola,
Niñas y Mujeres son víctimas de violacio- marginadas, pues son colocadas en el lugar trecruzan de manera diferenciada según en los territorios con fuerte presen-
nes de sus Derechos Humanos, entre va- más bajo de la jerarquía impuesta por la las prácticas de guerra de los actores ar- cia de los intereses del narcotráfico
rias razones por habitar en territorios de autoridad violenta del varón. mados y la situación del conflicto en las a partir de modalidades de ganade-
disputa, por tener o ser acusadas de tener diferentes regiones del territorio, en una ría extensiva, el latifundismo tradi-
relaciones afectivas o vínculos familiares Para las afro descendientes y las indígenas cambiante geografía política del conflicto cional e incluso los nuevos enclaves
con alguno de los actores armados, por la disputa territorial y el desplazamiento, armado. A continuación se muestra un de agricultura comercial. Además
ser líderes comunitarias, por su condición tienen que ver con procesos largos y con- breve inventario de los motivos asociados se trata de zonas donde la solución
de mujeres. fusos en los cuales se mezclan intereses el desplazamiento forzoso en Colombia. de los problemas y la existencia de
económicos y políticos que chocan entre lazos sociales e institucionales es
Algunas de las formas de violencia que si, porque quienes los abanderan tienen • La demostración de influencia polí- frágil43. Asociado al factor anterior,
a las mujeres afro descendientes, indíge- la misma intención: imponer al otro/a su tico militar en el nivel territorial: El existe una relación entre presencia
nas y campesinas, les impone el conflicto deseo. En años recientes la misma lógica despliegue estratégico de los acto- territorial de los actores armados,
armado interno están relacionadas con hegemónica que ha orientado las acciones res armados sigue distintas lógicas seguridad y protección o riesgo de
la irrupción violenta del mismo en sus de los grupos que combaten en el territo- según las relaciones de poder a que la propiedad y la valorización del
prácticas culturales y en su cotidianidad. rio chocoano y caucano, ha sido la que ha da lugar el enfrentamiento. La ten- suelo. El proyecto paramilitar no
Otras están atravesadas por prácticas estado en la base de su comportamiento dencia de los últimos años apunta cuestiona políticamente la estruc-
discriminatorias y racistas, de los actores en relación con el cultivo de la coca, es así al desarrollo de diferentes tipolo- tura de la tenencia de la tierra y su
armados y no armados. Y muchas de ellas como ya no sólo se disputan el territorio gías de asentamiento territorial de dominio territorial se traduce en
dejan ver lo que supone el desarraigo y y las inmediaciones de los ríos, sino tam- los actores armados: a)territorios mayor valorización. Igual ocurre en
la pérdida de sus tradiciones culturales, bién el acceso a las costas como referentes con presencia hegemónica de uno algunas regiones de predominio de
al ser forzadas a vivir dentro de su terri- geográficos asociados a los mercados de de los actores armados, b) terri- los proyectos insurgentes, aunque
torio pero bajo el control de los actores este cultivo. torios en disputa y c) territorios en términos generales esta presencia
armados, o bien fuera de su territorio por de eventuales incursiones, que su- suele producir incertidumbre sobre
el desplazamiento, enfrentando al llegar 1.5.6. Desplazamiento forza- gieren cierta inestabilidad y están la propiedad, cobro de impuesto
a las ciudades una triple discriminación do y las mujeres condicionados por los ritmos de la revolucionario e inseguridad con la
por ser mujeres, por ser afro colombianas guerra irregular. consecuente desvalorización.
y por estar desplazadas“41. El desplazamiento forzado42 identi-
fica una serie de hechos que amenazan la • El conflicto se arraiga fundamen- • La lucha por el control o la deses-
El conflicto tiene unos contenidos espe- integridad de las poblaciones y que des- talmente en las regiones en las que tabilización de zonas dotadas de
cíficos cuando se trata de las afro descen- truye sus lazos sociales, históricos, a la se han venido desarrollando nuevas recursos naturales en explotación
dientes y las indígenas, pues a él se añade el vez que les obliga a abandonar sus bienes. fuentes de acumulación económica. o potencialmente explotables en el
tratamiento histórico dado por la cultura En términos generales el desplazamiento Por eso, entre otras causas, el des- futuro (En Urabá, la industria ba-
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nanera, el latifundio de tierras antes • El control de corredores y zonas tos como el Putumayo en donde desplazamiento forzoso, en un primer
selváticas del Darién, la economía estratégicas en el ámbito militar antes de dar inicio en el 2001 a las momento deben enfrentar la destrucción
petrolera y aurífera). Igual ocurre -zonas de tráfico de armas e inten- fumigaciones, como parte del Plan de vidas, de bienes y lazos sociales, y en
con las zonas donde se localizan dencias de guerra o de tránsito de Colombia, se estimó que más de 10 segundo, la supervivencia y la reconstruc-
megaproyectos públicos o privados economías ilegalizadas-. Y las for- mil personas fueron desplazadas, ción del proyecto de vida y de Los lazos
en desarrollo (especialmente los mas de relación e influencia sobre de ellas un 50% lo hicieron hacia el sociales. Investigaciones recientes afirman
nuevos proyectos de infraestructu- las economías de los cultivos de territorio ecuatoriano45. que: “desde el momento de la destrucción
ra energética y de comunicaciones productos de uso ilícito y en general y del desarraigo se encuentran elementos
que tienen importantes impactos del narcotráfico. Las investigaciones realizadas, en el país, diferenciales, por ejemplo, entre los moti-
de valorización de tierras las cuales sobre mujeres y desplazamiento, coin- vos que han llevado a hombres y mujeres
empiezan a ser objeto de disputa). • La disputa por la recomposición ciden en afirmar que se dan tres situa- jefes de hogar a huir de su región. Los
política regional y el control e in- ciones por las cuales las mujeres se ven hombres aducen las amenazas como la
• Demostraciones de fuerza con fi- fluencia sobre los gobiernos territo- obligadas a desplazarse. Las mujeres que razón determinante del desplazamiento.
nes estratégicos y políticos (actos riales, cuyo poder político, fiscal y se encuentran entre los diferentes ac- Al mismo tiempo, las mujeres mencionan
de presencia armada con interés administrativo se ha incrementado tores armados, sin compromiso directo el asesinato como la causa primordial
político en zonas claves. El caso de sustancialmente a raíz de los proce- con el conflicto pero ante la pérdida de de la huida”47. El desplazamiento para
Putumayo, los santuarios del adver- sos de descentralización del Estado alguno o alguna de sus familiares, ven las mujeres tiene implicaciones visibles
sario y la misma zona de distensión colombiano. Además de la prevalen- involucradas su integridad y su seguri- e invisibles. En las primeras, se pueden
se convierten en regiones objetivo cia de redes locales de poder y sus dad. El desplazamiento es entonces una ubicar la viudez, la pobreza, el deterioro
en términos militares. De hecho, a consecuencias sobre las dinámicas forma de garantizar su seguridad y la del físico, los cambios en las dinámicas fami-
comienzos de 2001 la FARC golpea de protección y extorsión sobre los resto de la familia. Las mujeres que no liares y en el entorno. En las segundas,
uno de los centros de operaciones pobladores. pierden a miembros de su familia pero el impacto del miedo, del chantaje, del
de Carlos Castaño en Córdoba así ante la situación de tensión, conflicto, abuso sexual en la vida síquica y afectiva
como los paramilitares desarrollan • Los efectos de la fumigación de los zozobra e inseguridad en la zona deci- de las mujeres.
estrategias para influir en los terri- cultivos ilícitos, es una realidad en den desplazarse, por el miedo a seguir
torios de distensión del Caquetá y la Amazonía y Orinoquía. Desde enfrentando la situación de inseguridad. El desplazamiento forzado afecta tam-
sus alrededores. 1995, miles de campesinos, colo- Y las mujeres que desde tiempo atrás, bién a las organizaciones femeninas,
nos, jornaleros de la “raspa” y “flota- han ganado liderazgo y legitimidad en su pero, por las condiciones en las que éste
• El repoblamiento dirigido y el desa- dores” que se quedaron sin trabajo localidad y que por amenazas, desapari- se produce, no es visible tal afectación. A
rrollo de proyectos que puedan ser al disminuir el volumen de la hoja ción de familiares o asesinatos de ellos, partir de la información estadística y los
la base social y política de los acto- de coca para cosechar, emigraron sienten en peligro su vida y la del resto estudios sobre la caracterización social
res armados. La destrucción de rea- de manera anónima por temor a de la familia, recurren al desplazamiento de la población desplazada, existente, no
les o potenciales bases sociales del la pobreza y a la doble sindicación como una forma de protección para ellas es posible saber cuántas de las mujeres
adversario o de sectores sociales que de narcotráfico y subversión que y sus familias46. desplazadas pertenecían a una organiza-
puedan tener finalidades políticas y con frecuencia se les endilga 44. Un ción social. Adicionalmente, las líderesas
sociales similares a las de los adver- ejemplo claro de los efectos de la Asimismo, estudios realizados en el país sociales que son desplazadas buscan el
sarios, juega un papel decisivo. fumigación ocurre en departamen- muestran que las mujeres víctimas del anonimato por temor a ser ubicadas.
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Según los estudios de Codhes. el destino mujer murió cada 50 días como víctima de frentamientos armados; implementación los pueblos indígenas. Dichas reivindi-
de los desplazados y desplazadas es el de homicidios contra personas socialmente de estrategias militares; amenazas a los caciones han estado relacionadas con la
las-os vencidas-os en a guerra. Sus pro- marginadas; y cada 7 días, una mujer mu- compañeros; temor de cooptación de identidad cultural y la autonomía como
piedades, sus animales y sus derechos son rió en combate. un integrante de la familia; muerte del requisitos de supervivencia. Para las-os
botín del vencedor. Sus fuentes de ingreso compañero; hurto de los bienes por par- afro descendientes, las-os indígenas el te-
desaparecen, igual que sus redes familiares Este promedio diario significa que, en un te de un grupo armado; bloqueos de las rritorio es el escenario en el cual deviene
y vecinales de apoyo. Llevan el duelo y el año, 363 mujeres perdieron la vida por la vías de comunicación que hacen que las la cotidianidad, las prácticas de produc-
miedo adentro, y encuentran el rechazo violencia sociopolítica. De éstas, 311 mu- comunidades sufran hambre y miedo a ción, los rituales, la relación con la natu-
indiferente de los citadinos y la impoten- rieron fuera de combate, es decir, en la ca- ser víctima de cualquier tipo de violencia raleza; es decir, la vida. En este sentido, el
cia burocrática para atender la emergencia lle, en su casa, o en su trabajo, de las cuales implementada por un grupo armado. desplazamiento forzado se configura en
social. Son los testigos mudos de la guerra, 277 lo fueron por ejecución extrajudicial una acción que atenta contra el derecho
que la sociedad y el estado prefieren igno- u homicidio político; 27 por desaparición En el caso del Chocó “la intensificación a la vida, pues niega la vivienda, el sus-
rar, así como a la crisis humanitaria en la forzada; y 7 por homicidio contra perso- del conflicto armado ha generado que el tento, tener relaciones de familiaridad y
que se encuentra el país. nas socialmente marginadas”49.Continúa 88% de su población (afro descendiente vecindad, mantener relaciones ancestra-
el informe afirmando que “entre octubre de e indígena) padezca no solo los homici- les, dejar de lado costumbres y formas de
Para las mujeres en las zonas de conflic- 1999 y septiembre de 2000, por lo menos, dios y las desapariciones, sino también habitar un espacio, renunciar a la tierra y
to armado, la situación no sólo tiene que 15 niñas50 fueron víctimas de violencia los desplazamientos de población. En un a la posibilidad de estar en ella.
ver con el enfrentamiento armada entre sociopolítica. También murieron 21 mu- principio, estos éxodos se orientaban a
los diferentes actores, guerrilla, militares jeres jóvenes51. En Colombia al igual que centros poblados del Chocó y Antioquia. La condición de las afro descendientes
y paramilitares, sino también con el abu- en otros países que han vivido la guerra, Adicionalmente en el Norte, en Urabá, e indígenas, es dramática, ellas se ven
so sexual, el maltrato físico, el chantaje la violencia sexual contra las mujeres es se organizaron comunidades de paz para obligadas a desplazarse a las ciudades, lo
y la presión a que son sometidas por los utilizada como arma de guerra, como una garantizar el retorno de estas poblaciones cual implica violaciones a sus derechos
diferentes actores del conflicto. Uno de los manera de deshonrar al enemigo o como en condiciones seguras. Aun así, estas co- políticos, económicos, sociales y cultura-
más críticos impactos del conflicto armado un trofeo que se obtiene. munidades han sufrido nuevos desplaza- les, y formas de discriminación racial y
en la vida de las mujeres, es la violación a mientos y sus habitantes han tenido que discriminación por razones de sexo/gé-
sus derechos fundamentales. De acuerdo Según datos de la Red de Solidaridad So- desplazarse, una y otra vez. O en el peor nero52 . Cuando son jóvenes y por falta de
con el informe elaborado por la Mesa de cial, para el último año, 2002, se estima de los casos han quedado aisladas del res- oportunidades, algunas de ellas se ven
Trabajo de Mujer y Conflicto Armado48, que el 17.81% de la población desplazada to del mundo porque los grupos armados obligadas a trabajar sexualmente no solo
“los asesinatos de mujeres a causa del con- por el conflicto armado, es afro descen- les impiden desplazarse. corriendo el riesgo de las enfermedades de
flicto armado se incrementaron en el 2000. diente. El desplazamiento está cada vez transmisión sexual sino también cargan-
De un promedio de una víctima cada día más afectando a las comunidades negras Es innegable que para las comunidades do con la censura social que acompaña a
y medio en 1999, se pasó a una víctima e indígenas asentadas en territorios que negras y los pueblos indígenas, los signi- la prostitución. Otras se dedican al servi-
diaria, entre octubre de 1999 y septiembre se convirtieron en objeto de interés y ficados del territorio están relacionados cio doméstico en casas de familia, donde
del 2000: una víctima, cada día y medio, a disputa de los diferentes grupos armados con las reivindicaciones étnicas y terri- padecen el acoso sexual de los varones.
causa de ejecuciones extrajudiciales y ho- legales e ilegales que hoy combaten en toriales que se emprendieron a finales Las jóvenes tienen pocas oportunidades
micidios políticos; una mujer cada 14 días el país. Las razones del desplazamiento de la década de los ochenta, en el primer y por lo general ocupan los lugares más
fue víctima de desaparición forzada; una son múltiples: huir de las masacres; en- caso, y desde la conquista española, para bajos en la escala salarial.
62

2 Los hallazgos
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Como se enunció en la parte de los propósitos, la investigación tuvo como finalidad acer-
carse a las múltiples y diversas realidades de mujeres en zonas de cultivos de uso ilícito y
afro descendientes, indígenas, campesinas y urbanas impactadas por el conflicto armado
colombiano. Los hallazgos con respecto a las mujeres que viven y conviven con el conflicto
armado, no estuvieron definidos en condiciones de laboratorio, sino por situaciones co-
tidianas, de la vida real. Las preguntas fueron sobre sí mismas, sobre sus instituciones y
sistemas de valores y sobre temas como la sexualidad, el cuerpo, los cambios en sus vidas
por causa del conflicto, y sus resistencias.

La investigación asumida como un proceso iniciado desde la formulación de las pregun-


tas, la conformación del equipo, la definición del marco conceptual y de la metodología,
la recolección de la información, la sistematización, análisis y elaboración del documento
final; permitió una comprensión más amplia y profunda de los conocimientos situados
complejos y la contingencia del conocimiento y de los seres humanos. Así como volver a
constatar que el punto de encuentro y desencuentro en la vida, de las mujeres, está signa-
do por las prácticas y efectos de la cultura patriarcal sobre ellas.

Esta comprensión implicó reconocer lo que nos separa y lo que nos une como mujeres.
Aceptar que las investigadoras también tenemos problemas comunes con quienes narra-
ron sus historias y que nos une a ellas, la experiencia en tanto víctimas del sexismo, de la
represión y la explotación. Por lo tanto, la comprensión de los conocimientos parciales, se
inició a partir de la doble conciencia, que en tanto investigadoras, estamos concientes de
las estructuras objetivas dentro de las cuales vivimos y nos desempeñamos. Así por ejem-
plo, existía-existe- una asimetría de poder, entre las mujeres que narraron sus vidas y las
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investigadoras, la cual no se transforma por un cuerpo sexuado, a ver desde el lugar y decisiones, el abanico de posibilidades acuerdo con las mujeres, el rol productivo
la elección de una metodología feminista o las posiciones propias y desde el lugar y las se extendía del padre al padrastro o al de la mujer no era tenido en cuenta, no se
por algún esfuerzo idealista de identifica- posiciones de las mujeres. En este sentido, el hermano mayor. En el caso del padre o consideraba que el varón obtenía mano de
ción con las víctimas del conflicto armado. gesto, la palabra, la risa, el llanto, el silencio, el padrastro dicho rol estaba cimentado obra para trabajar en la tierra o la mina a
los temores y el abrazo fueron expresiones de en la participación económica, pues él cambio de la alimentación de la mujer y
Reconocer estos hechos fue un primer cuerpos dolidos, enajenados; cuerpos sufri- era reconocido como proveedor, en el las-os niñas-os; es decir, el padrastro no es-
paso para avanzar en una investigación que dos, cuerpos inhibidos y cuerpos liberados. caso del hermano mayor la situación se taba ofreciendo algo por nada y la mujer sí
realmente pudiera responder a las opciones justificaba en el hecho de que el padre o tenía participación en el sostén económico
teóricas y metodológicas elegidas; pero sobre Los hallazgos de la investigación se refie- el padrastro habían muerto o no estaban de la familia.
todo contribuir a la construcción de una ob- ren a los temas narrados por las mujeres. y la madre, pese a que se convertía en la
jetividad feminista, la cual se encuentra dada, El equipo investigador ha tratado de ser proveedora económica de la familia, legi- “Mi papá, trabajaba y traía el dinero
a la casa, los hombres hacían trabajo en el
entre otras, por la conjugación de diversas lo más fiel a las reflexiones e historias de timaban sus decisiones en la aprobación monte, buscaban el pescado, cortaban la
realidades e interpretaciones que permiten ellas; sin desconocer que existen los fil- de su hijo mayor. leña, sembraban el arroz y el maíz y las niñas
una mirada crítica y darle un significado tros y las posturas de las investigadoras. lavábamos la ropa, cocinábamos y barríamos”.
histórico al sufrimiento y la resistencia de las Asimismo, las narraciones de las mujeres “ La persona más poderosa de niña, Mujer del Chocó.
era mi hermano pero yo no le paraba bolas,
mujeres. nos permitieron realizar un acercamiento un día lo iba a matar porque le iba a pegar Las representaciones del conflicto
y análisis de las situaciones vívidas por a mi hermanita y las otras dos le caímos en familiar tienen dos dimensiones centrales:
El siguiente paso, fue asumir, que aquello que ellas. Para el análisis de las narraciones de encima, mi mamá estaba pescando y por eso la primera estaba configurada por el eje
él se aprovechó”. Mujer del Chocó. autoridad – poder, en este sentido se
nos vinculaba, por un lado, y lo que simultá- las mujeres se tiene como herramienta de
presentaban disputas entre quien ostentaba el
neamente nos separaba, por el otro, -el saber, trabajo a la teoría feminista. Es decir, fue “La persona con más autoridad era mi poder y quien estaba desposeído del mismo,
la clase, la etnia, el lenguaje y la educación- no darse a la tarea de pensar las múltiples y hermano mayor y porque mi mamá lo quiso por ejemplo padre – madre y hermano mayor
eran datos absolutos. Existe un nivel en que diversas realidades desde la pretensión de así, nosotras le teníamos más miedo a él que a – hermanas. La segunda dimensión estaba
la mamá”. Mujer del Chocó. formada por el eje celos – reconocimiento,
nosotras, como mujeres, somos afectadas de desenmascarar la cultura patriarcal y sus se daban desavenencias entre madre – tía y
manera similar por las relaciones patriarca- diversas prácticas y valores. madre – padre – madrastra. La conjugación
les; por lo tanto, durante el proceso de inves- En relación con los roles y jerarquías, se de ambas dimensiones pone en escena una
presenta una constante en la diferenciación tensión por el poder –autoridad encarnada
tigación tuvimos la oportunidad de hablar y 2.1. Palabras, representa- en relaciones de reconocimiento y celos. Las
dialogar con las mujeres desde la perspectiva de los lugares femenino y masculino en la
común de la experiencia de la vivencia del
ciones y resistencias de las familia. En dicha constante el varón es pro-
mujeres compiten por el amor del varón, de
una manera similar a como la madrastra y la
patriarcado. En este sentido, se hizo posible mujeres del Chocó veedor y la mujer madre y ama de casa; sin hija se disputan el amor del esposo - padre.
el acercamiento tan necesario con las otras embargo, vale la pena señalar que cuando
mujeres y la indispensable toma de distancia 2.1.1. Tiempo cronológico se presentaba una unión entre una mujer “... mi mamá sacaba cosas del negocio
para dárselas a una hermana y la otra le
respecto a nosotras mismas. niña que tenía hijos-as de una relación o rela- contaba a mi papá.... ellos se agarraban a
ciones anteriores con un varón sólo, a ella pelear y nosotros a llorar, él le pegaba con una
La investigación posibilitó al equipo inves- Al poner en presente la experiencia le tocaba trabajar en lo económicamente correa...”. Mujer del Chocó.
tigador, y en alguna medida a las mujeres de la infancia, las mujeres coincidieron productivo hombro a hombro con el varón
“Las situaciones que generaban
narradoras de sus vidas, recuperar la visión en afirmar que durante su niñez era un que desempeñaba el rol de padrastro. Es conflicto en mi familia eran porque mi tía
encarnada, asumiendog la pertenencia a personaje masculino quien tomaba las importante resaltar esta situación, pues de era confianzuda con el padrastro... cuando
68 69
se daban conflictos me ponía a llorar.... “... esos no son juegos de niñas, los La sexualidad no fue un tema de discusión ninguna sabía a qué obedecía la sangre, solo
pero quien resolvía el conflicto cuando se de los hombres son distintos... se van a volver
para ninguna de las mujeres, no recono- una manifiesta que su madre le hizo tener
presentaban era mi hermano mayor y mi hombres...”. Mujer del Choco.
abuela daba consejos... pero se daba mucha cen influencias al respecto y se afirma que miedo, a su cuerpo por el hecho de que
violencia con la palabra... mi mamá era la que fueron las circunstancias las que se dieron, ya podía embarazarse. La aceptación y el
pegaba y mi papá ofendía con la palabra... me
La cultura patriarcal está en la base de los
no hubo en ningún caso una preparación. gusto por el propio cuerpo, es variable y se
pegaban por desobediente, traviesa y porque sueños que de niña tenía cada una de las
La sexualidad tabú contrasta con las rela- encuentra vinculada a la estética; así unas
pedía permisos para ir a bailar...” Mujer del mujeres. Ser enfermera, profesora y ma-
Chocó. ciones familiares que se presentaban; pues manifiestan que no les gustaba por gordas
dre son opciones de vida que comparten
sí bien no se hablaba del tema, el varón y y otras que sí les gustaba por delgadas; es
“...los conflictos eran entre la madrastra culturalmente una suerte de compromiso
la mujer podían tener diversas relaciones decir, es un gusto afincado en la tradición
y el papá por problemas de mi persona, ella quería y disposición favorable de estar para el
de convivencia con otros y otras sin que cultural que hace de lente para definir lo
que mi papá no me diera nada y me mantuviera otro, de servirle y protegerle, de acogerlo y
sometida, que él consiguiera para ella y sus hijos por ello hubiera un rechazo social. Podría que es armonioso.
hacerlo con afecto. Enfermera, profesora y
y no para mí. Entre mis hermanos eran porque pensarse que esta flexibilidad relativa a las
mi hermano discutía con mi hermana porque no madre son tres caras de la misma imagen “Me incomodaba por el tamaño de la
prácticas sexuales traducía una modalidad
quería que ella lo sirviera sino yo, yo fui como su femenina del servicio. cadera y por eso no me gustaba mucho mi
mamá, yo lo cargue de niñito y sentía más afecto de las relaciones económicas, pues la mujer cuerpo”. Mujer del Chocó.
por mí...” Mujer del Chocó. “...mi sueño de niña era estudiar y requería de un compañero para el sustento
ser mujer del novio que tenía...”. Mujer del de sus hijos-as y el varón necesitaba de una “Me gustaba mi cuerpo porque nada le
La afectividad aparece como un continente Chocó. mujer y sus hijos e hijas como mano de sobraba”. Mujer del Chocó.
enigmático en la mayoría de las narraciones “... yo quería ser una gran enfermera...”.
obra para el trabajo agrícola y minero.
de las mujeres. Se mantenían límites entre Mujer del Chocó. Después de la escuela, la iglesia apare-
niñas y niños, la relación era posibilitada “... mi recuerdo de niña sobre el
afecto, el amor y la amistad, es con mi primer ce como un lugar de referencia para
por la institucionalidad, por ejemplo la es- “... yo deseaba ser azafata o mujer
policía...”. Mujer del Chocó. novio, nos besábamos, abrazábamos, sabroso las niñas del Chocó, todas coinci-
cuela mixta, la iglesia o la celebración de un pasaba yo con él... nunca nos hablaron de den en su importancia y al recono-
cumpleaños. Los espacios para la expresión eso... eran cosas al escondido para que uno no
cerlo como lugar de visita se hace
de la afectividad y para compartir juegos supiera nada...” Mujer del Chocó.
No deja de llamar la atención el contraste evidente que sus familias estaban de
y experiencias, no solo eran regulados en que se puede establecer entre dos respuestas “... nunca vi a mi mamá y mi papá acuerdo conque este era un espacio
términos de acceder o no a ellos; sino tam- brindadas; por un lado, una mujer recono- teniendo expresiones de afecto... nunca me para lo femenino; situación que con-
bién que se regulaban los comportamientos hablaron de la sexualidad, solo oía a otras
ce que no quería “ser esposa sino ser libre”; compañeras pero no entendía muy bien lo
trasta con la restricción para visitar
permitidos a unas u otras. En caso que las mientras que otra, afirma que deseaba “ser que pasaba...mi familia no decía nada sobre la lugares tradicionalmente de niños
niñas traspasaran esos límites, eran acusa- la mujer del novio que tenía”. El contraste sexualidad y el afecto..” Mujer del Chocó. como el potrero, pues las niñas solo
das de machorras. Este señalamiento, era hace emerger situaciones históricas de la podían ir allí cuando se volaban; su
una forma de hacerles ver que estaban usur- cultura patriarcal, en las cuales resalta la Teniendo presente las respuestas dadas al vida social era restringida a la mira-
pando espacios y roles no permitidos para condición subyugada de la mujer a los de- tema de la sexualidad, no sorprende que el da vigilante de la madre. Recuerdan
ellas, pero aún más de subvalorar y burlarse seos masculinos, una la ve como inhibición cuerpo tampoco fuera centro de discusión, que entre los niños había juegos de
de dicha osadía. a la libertad y la otra como realización de todas afirman que nadie les habló del cuer- contacto físico que no eran promo-
su deseo, lo interesante es que una y otra po en general y menos del femenino en par- vidos entre las niñas. Las mujeres
“...si las niñas jugábamos los juegos
de los niños, mi mamá y mi abuelita nos decía definen su sueño como mujeres en la rela- ticular, situación que se ilustra en la forma reconocen haber tenido relaciones
machorras..”. Mujer del Chocó. ción con lo masculino y el matrimonio. como vivieron la primera menstruación, con los adultos, ya fuera porque les
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daban consejos o las comadres que cuela; todas reconocen en sí mismas el 2.1.2. Tiempo cronológico pendientes de lo que pasaba en la casa; los
les preparaban comidas como un deseo de aprender y piensan que las ins- mujer adulta, antes de la si- roles de las hijas eran estudiar, hacer labo-
modo de integrar a las niñas con las tituciones donde se resolvían los conflic- tuación del conflicto armado res domésticas y ayudar en el cuidado de
labores domésticas de las mujeres. tos eran necesarias para el desarrollo de los y las hermanas menores.
la convivencia; también aparece como un “ Mamita, mamita, ¿quién es mi papá?
“... además de la escuela de niña iba a De tantos que son, no sé cuál será. Ándate a “Antes cuidaba los niños y vendía
aspecto significativo el hecho de que estas
la playa a bañarme, bailes, a jugar fútbol y a la calle y ponte llorá, y el que te acaricia ese abarrotes, ahora trabajo fuera de la casa, paso
la iglesia mi familia es muy católica...”. Mujer
instituciones trabajan para la comunidad y es tu papá”53. más en la calle que adentro de la casa”. Mujer
del Chocó. que en ciertas temporadas ofrecían regalos del Chocó.
a los menos privilegiados-as. Vale la pena La composición de la familia cam-
“... yo iba a la quebrada, a los detenerse en la afirmación de la escuela
potreros, a donde las amigas y a la iglesia...”. bió, pues como mujeres adultas solo la de La socialización de los hijos e hijas, res-
Mujer del Chocó. como un lugar agradable por el trato dado mayor edad permaneció bajo un modelo ponde al modelo familiar que se le propuso
por la profesora, quien las hacía sentir de familia extensa. En lo relativo a la toma a cada una de las entrevistadas durante su
“... de niña los lugares a los cuales inteligentes y como seres con capacidades de decisiones se presenta una replica del infancia, pues el varón sigue apareciendo
iba eran a los bailes de cumpleaños, fiestas de
y valores. En relación con el lugar donde modelo vivido de niña, es así como el como el proveedor y la mujer como madre
la escuela y a la iglesia a misa cuando iba el
cura...”. Mujer del Chocó. vivían expresan un sentimiento de arraigo compañero es quien toma las decisiones de familia; también parece persistir la no-
y pertenencia. en especial las relativas a lo económico y consideración positiva de la participación
“.. íbamos de paseo al campo, de la mujer en el mundo productivo, pues
la participación de ellas está vinculada al
viajaba con mi madrastra a otros pueblos a “El mejor lugar del mundo, me gustaba
pasear donde sus familiares, solo una vez fui hogar y el cuidado de los niños y niñas. las labores que ella desempeña sean en el
el río y la cultura, pensaba que vivía en el
a un baile y mi papá me pegó horrible y no paraíso, pensaba que mi pueblo era muy lindo campo o en la mina, no son valoradas como
volví a ir a bailes hasta que fui libre. También y quería que hubiera un aeropuerto, esperaba En lo concerniente a los roles, en todas las trabajo. En este punto y teniendo en cuen-
a la iglesia...”. Mujer del Chocó. poder seguir disfrutando de ese ambiente”. narraciones el varón era quien debía soste- ta los riesgos que acompañan a una extra-
Mujer del Chocó.
ner económicamente la familia, las mujeres polación, se propone pensar que existe una
En lo relativo a las personas más impor- relación entre dos hechos: el primero, una
se encargaban del cuidado de los hijos e hijas
tantes del lugar donde vivían, el abanico se El lugar de procedencia, el cuerpo y la mujer con hijos-as se une a un varón y pese
y algunas colaboraban en el sostenimiento
abre de lo privado a lo público, mientras sexualidad conforman una tríada no muy a que trabaja igual que él, piensa que él es
económico a través de la participación en
para unas las personas importantes perte- pensada y cuestionada en el mundo de quien exclusivamente sostiene a la familia;
el comercio y en trabajos agrícolas y mi-
necían al núcleo familiar y de vecindad y las niñas; hipótesis configurada a través el segundo, una mujer trabaja en la mina
neros, una de ellas se desempeñaba como
representaban cariño, protección y compli- de sus respuestas, pues pareciera que se y/o en el campo pero piensa que ella no
profesora. Es importante, destacar que los
cidad; para otras los importantes, estaban presentara una actitud fenomenológica participa en la economía familiar. Una y
trabajos agrícolas y mineros no eran con-
en lo público y eran los comerciantes, el con cada uno de los tres como referen- otra no se ven como agentes económicos
siderados como aportes económicos sino
cura, el alcalde y el policía, quienes vivían tes de vida. Tierra, cuerpo y sexualidad, y ambas a través de una unión sexual se
como una extensión de la responsabilidad
en los mejores lugares y tenían que ver con componen vértices sobre los que se erige desconocen como quienes han asumido la
femenina para la seguridad alimentaria,
la atención y resolución de los conflictos cada vida como un incesante deambular seguridad alimentaria de su familia, pues la
pues en el monte se cultivaba pan coger y
que se presentaban. entre tradición y cambio, vida y muerte, primera muchas veces se une al varón para
en la mina se trataba de conseguir algo para
memoria y olvido, determinación e inde- intercambiar por comida. Los roles de los que sus hijos-as no aguanten hambre y la
Las instituciones más legitimadas fueron terminación, ser de la vida definido como segunda trabaja igual que él para conseguir
hijos eran estudiar, pescar, ayudar al padre
la inspección, la alcaldía, la curia y la es- femenino o masculino. el mismo objetivo.
en su trabajo, hacer los mandados y estar
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Gran parte de los conflictos familiares pa- públicos como el baile eran más permisivos, La sexualidad aparece para algunas mu- entre mujeres estaba fundada en la amistad.
reciera tener como base las prácticas sexua- pero la distinción entre mujeres y varones jeres adultas como tema de conversación, Su relación con los varones estaba mediada
les de los varones, pues tres de las entre- en relación con la manifestación del cariño ellas pudieron compartir sus inquietudes por la vida social como compartir en bailes
vistadas afirman haber tenido discusiones era marcada, también señalan como espa- sobre el deseo y el embarazo con su com- o reuniones en las cuales se intercambian
con sus compañeros, que incluso llegaron a cios de afectividad a los relacionados con el pañero y amigas, pero para otras el tema comentarios y chistes. Las instituciones
los golpes, porque sostenían relaciones con trabajo comunitario y las fechas especiales permaneció en la penumbra pues no pu- más importantes eran la inspección, la cu-
otras mujeres y por obligarlas a tener rela- como el día de la madre, un cumpleaños o dieron compartirlo con nadie y la sexua- ria y el puesto de salud, en consecuencia,
ciones sexuales. Ambas situaciones ponen alguna celebración. lidad se convirtió en una experiencia des- los líderes estaban asociados a dichas insti-
de manifiesto el hecho de que permanece agradable, en sus palabras algo maluco. tuciones y a las juntas de acción comunal.
la tensión sostenida en las dimensiones El reconocimiento de la singularidad y No obstante, no se puede dejar de lado La única mujer que ostentaba liderazgo era
autoridad – poder y reconocimiento –ce- autonomía pareciera ser que no tenía es- el hecho de que se generó un cambio en la enfermera, lo que ratifica que el princi-
los, tensión identificada en sus familias de pacio, pues en la mayoría de las entrevis- relación con el entorno familiar infantil, pal rol de la mujer estaba afincado en el
niñas. Otro conflicto es el que se presenta- tas se afirma que el compañero no tenía pues algunas de las entrevistadas sí habla- servicio a otro.
ba entre los hermanos y la hermana, pese a en cuenta lo que ella pensaba, sentía y de- ban con sus hijos e hijas sobre el momen-
no haber un componente sexual sí hay uno seaba; algunas dicen que sus hijos e hijas to de iniciar la vida sexual, el embarazo, La admiración por alguien era variable de
de relaciones socio-afectivas entre varo- si las tenían en cuenta, lo cual pareciera las enfermedades de transmisión sexual mujer a mujer, mientras una expresa no
nes y mujeres, que actualiza la dimensión corroborar la situación descrita anterior- y la planificación familiar y con amigas y haber admirado a nadie en particular, otra
poder –autoridad. Al igual que durante la mente en relación con los roles de mujeres otras mujeres sobre los sentimientos ge- afirma que su compañero era la persona a
infancia la tensión se traducía en violencia y varones, pues las mujeres en tanto ma- nerados en los encuentros sexuales. Una la que más admiraba, también eran objeto
verbal y física y en la mayoría de los ca- dres podían decidir con autoridad sobre mujer afirmó hablar con su compañero de admiración las personas que trabajan
sos la entrevistada reaccionaba de manera el hogar. Para algunas de las entrevistadas de cuándo ella deseaba y cuándo no, pero con la comunidad, como los presidentes de
agresiva ante la agresión padecida. Sin em- su autonomía fue difusa y permanecieron aclaró que él no era del Chocó y además juntas de acción comunal y los sacerdotes.
bargo, una mujer advierte que en su familia en una posición de satélite que giraba de que había estudiado en la universidad. Hay una respuesta que merece considera-
no había discusiones fuertes, pero cuando acuerdo con el sentir masculino. ción: “a las mujeres por no decir nada por
se daba una desavenencia el compañero “no El cuerpo durante la edad adulta no apare- los golpes recibidos de sus compañeros”.
permitía manifestaciones violentas, si me En lo relativo a los sueños, la constante ce como escenario de autonomía femenina, Dicha respuesta lleva a preguntarse por el
desesperaba el compañero no avanzaba en está vinculada al desarrollo académico de las mujeres no expresan su afirmación per- valor que la sostiene, es decir, por el silen-
la discusión”. los hijos e hijas, pues deseaban una casa en sonal en él, un ejemplo de lo anterior es el cio, sufrimiento, sacrificio y tolerancia ante
un lugar donde ellos y ellas pudieran estu- siguiente testimonio. situaciones que son adversas al ejercicio de
La afectividad seguía siendo claroscuro, diar; una manifestó incluso el sueño de po- “El cuerpo era algo para tener hijos, una la autonomía.
pues las manifestaciones afectivas eran der estudiar. Se hace énfasis en el lugar de vez vi al compañero masturbándose y le
más usuales con los hijos e hijas y en las la madre que vislumbra su sueño a través pregunte por qué y para qué, él me pego y Sobre la situación de las mujeres en la vida
situaciones en las cuales se reafirmaban del deseo de un porvenir satisfactorio para me dijo que me mataba sí me veía haciendo comunitaria se puede decir que solo dos de
los roles femeninos vinculados a la mater- sus hijos e hijas, de alguna manera poster- lo mismo”. Mujer del Chocó. ellas hacían parte de organizaciones como
nidad, lo anterior lo confirma una de las gando su ser pues éste se diluye en el rol la junta de padres de familia de la escuela y
entrevistadas “si éramos cariñosas con los materno y en la certidumbre de no haber En la vida comunitaria persisten las fronte- la tesorería de la junta de acción comunal,
hombres nos decían putas”. Los escenarios podido realizar el sueño que tenía de niña. ras entre varones y mujeres, pues la relación otras dos no pertenecían a ninguna orga-
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nización y la última participaba de manera que las mujeres ya habían tenido experien- todo con las mujeres jóvenes y ancianas. Es Algunas mujeres cuentan que cuando lle-
colateral, en el sentido, pues acompañaba a cias sexuales, éstas, con pocas excepciones, así como no es raro encontrar en los asen- garon a Quibdó, por el desplazamiento
su cónyuge, quien sí era integrante activo no eran objeto femenino de representación tamientos de desplazados y desplazadas en forzado, sus compañeros no encontraban
de movimientos campesinos. lingüística en lo público. Quibdó, lugar de llegada para ellos y ellas, trabajo porque la escasa oferta laboral esta-
familias con mujeres de diversas edades: ba casi restringida a lo doméstico y ese no
En relación con los valores de un líder 2.1.3. Tiempo cronológico abuelas, adolescentes, hermanas, niñas. era un trabajo para un varón; al disminuir
todas las entrevistadas coincidieron en la mujer adulta afectada por el En los asentamientos proliferan mujeres, su participación económica se resquebrajó
honradez como el más importante, acom- conflicto niñas y niños, se ven adolescentes varones su potencia como agente del núcleo fami-
pañado del respeto, humanismo, toleran- expresando su deseo de irse, esperando el liar y el silencio se convirtió en su modo de
cia, solidaridad, humildad, recursividad “A pesar de que nosotras llegamos a aquí momento preciso para huir. estar. Algunos varones intentaron impedir
a Quibdó, y que no nos vieron como buenas
y cumplimiento. Como se ve describen personas, a pesar de la discriminación, a pesar
a sus compañeras participar en procesos
condiciones de la persona al servicio de la de los golpes que hemos tenido no con palos Bajo esta perspectiva es importante precisar comunitarios. Ellas enarbolaron la respon-
sociedad; en este sentido, se tiene una idea sino con el trato que nos han dado, a pesar de que si bien las mujeres ahora toman decisio- sabilidad de la maternidad y la impotencia
precisa de un liderazgo para el beneficio todo hemos luchado y echado para delante, nes, dicha situación más que obedecer a un masculina para participar en acciones pú-
porque a pesar de que aguantamos hambre,
de la comunidad y se resalta la honradez desnudez y no tenemos salud y educación, acto voluntario responde a una coyuntura blicas, una realidad cultural que favoreció
quizá por ser el punto más frágil identi- hemos sido fuertes y no decaemos”. Mujer del provocada por la muerte, desaparición, de- esta reacción femenina, fue el hecho de que
ficado por las mujeres en el ejercicio del Choco. solación, depresión, inestabilidad o huida en el Chocó la iglesia cumplió y cumple un
liderazgo, pues narran experiencias en las de sus compañeros; en otras palabras, no papel central en la atención y apoyo a las
cuales los líderes manejaron mal recursos, Luego de la situación de conflicto armado tuvieron opción y la vida las obligó a cargar familias en situación de desplazamiento, y
no fueron claros con la comunidad y esta- que cada una vivió, cuatro quedaron como con la familia y en consecuencia a decidir. siempre las mujeres reconocían a la iglesia
ban vinculados a grupos armados ya fuera cabeza de familia, pues sus compañeros como un lugar femenino, de ahí que las re-
por temor o conveniencia. están muertos, desaparecidos o se fueron. Los cambios en la familia modifican los ro- laciones mujer – iglesia fueran más sólidas
Todas, aún la que vive con su compañero, les de varones y mujeres, en el caso de ella, que las de los varones en esta institución.
En lo referente al lugar donde vivían, casi asumieron la responsabilidad económica al rol tradicional de madre y ama de casa, Otro elemento afincado en la tradicional
todas están de acuerdo en señalar que se y afectiva de la familia, ahora ellas toman se suman las responsabilidades económi- cultura patriarcal, es el que la mujer no
encontraban tranquilas allí, que su moles- las decisiones. Son víctimas del desplaza- cas y el liderazgo social, pues tres de ellas siente vergüenza para pedir y reconocer
tia era con circunstancias de la naturaleza, miento forzado, lo que provocó que tres son claramente líderes de sus comunida- sus carencias si ello representa algún tipo
solo una mencionó la insolidaridad de de ellas volvieran al modelo de familia des. Pero hay que anotar que de estas tres, de beneficio para sus hijas e hijos.
algunas personas, en términos generales extensa, pues sus madres ancianas y so- dos ejercían una suerte de liderazgo en sus
todas tenían un sentido de pertenencia y brinas jóvenes quedaron desprotegidas y lugares de vivienda. La participación de las La condición del joven es dramática, no
arraigo con el lugar. fueron desplazadas. mujeres se carga con otras responsabilida- tiene un lugar. Se presenta una situación
des después del conflicto armado. Por su en la cual el hijo pareciera opacarse en pro-
La tierra en la que se vivía, el cuerpo y la Como lo narraron las mujeres, debido a la parte, los varones que sobreviven al con- porción al desfallecimiento simbólico del
sexualidad parecen, en términos generales situación de conflicto armado, las mujeres flicto parecen diluirse hasta convertirse padre. Mientras que las hijas siguen ayu-
y sin desconocer algunos cambios, seguir adultas no solo tienen responsabilidad con en una sombra desde la distancia, pues se dando en el cuidado de la familia y la casa a
haciendo parte de una constelación feno- su familia nuclear; sino también, en muchos fueron del hogar o se quedaron en la casa la vez que estudian; los hijos se convierten
menológica más que discursiva, pues pese a casos con la de la familia extensa, sobre pero con la palabra silenciada. en sedentarios con aspiraciones nómadas,
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irse, buscar otro lugar. Es como sí el con- pues antes se tenían celos por otra mujer en la consecución de recursos y resolución Es importante señalar que esta actitud, no
flicto le quitará brillo a la vida del varón ahora el hijo tiene celos de sus hermanos o de sus problemas. es exclusivamente un resultado del con-
que lo sobrevive, pues éste no encuentra hermanas, en síntesis la mujer pasa de ser flicto armado, sino más bien, el producto
roles que ejercer, la vida ya no es igual y quien siente celos de su marido a ser celada La mayor conciencia femenina sobre su del fortalecimiento del rol materno que
sufren una desarticulación completa en por sus hijos. liderazgo demuestra cambios en la valo- empuja a la mujer abrirse camino cueste
relación con el tejido social. ración que tienen sobre sí mismas; ya no lo que cueste; en este sentido, nunca se
Las reacciones ante los conflictos familia- admiten de manera sumisa el rol de servicio podría pensar que el conflicto contribuye
“Cuando desaparecieron a mi res son variables, pero en todas se presenta incondicional de la mujer que todo lo tolera, a la autonomía femenina, sino que ante
compañero, mi hijo mayor estuvo mucho
tiempo callado, el más pequeño no jugaba
una tendencia hacia la calma en relación al contrario, se promueven la participación la soledad y el abandono masculino ella
tanto, ahora seis años después, la relación con con el pasado y al lugar que en dichas cir- política. Aunque todas ellas añoran la tran- cumple con los dos roles. También en el
ellos es muy difícil, no quieren estudiar, no cunstancias tenía su madre; no obstante, quilidad del lugar de donde fueron despla- cambio de la mujer juega un papel decisivo
quieren hacer nada en la casa, son groseros, aún se presenta la violencia verbal y físi- zadas, reconocen que antes no sabían qué la relación con otras mujeres dispuestas a
rebeldes, he intentado por todos lados y nada,
yo he acudido a los sacerdotes para que me ca en algunos de sus hogares y reconocen hacer ni a quién acudir ante una situación salir adelante, este aspecto es vital, pues
ayuden, pero ellos no quieren nada, no sé qué desesperarse con sus hijos. Es particular el de conflicto, que el haber vivido la expe- anteriormente las entrevistadas no tenían
voy a hacer con ellos, pero tienen que servir hecho de que ninguna mencionó una situa- riencia del desplazamiento las ha obligado relaciones de compañerismo para lograr un
para algo“. Mujer del Chocó.
ción de conflicto en la cual el agente fuera a conocer y actuar. fin con otras mujeres. Formaron una suer-
una hija. Además todas se sienten prota- te de hermandad desplazando la patria, lo
Los conflictos familiares se desplazaron, gonistas en los conflictos de sus familias ya Al principio no pensaron que el desplaza- cual se traduce en una mayor conciencia
los hijos empiezan a ocupar un rol como sea por participar o mediar. En el cuerpo miento fuera una forma de resistencia pero de su ser femenino y en la disminución de
agentes de disputa y confrontación. Las femenino quedan las huellas de la barbarie, éste las llevó a organizarse, realizar marchas antagonismos entre ellas, es como sí ahora
mujeres afirman que discuten con sus unas perdieron peso por las tensiones, el de protesta, reclamar sus derechos; acudir a se pudiera decir:
hijos porque ellos se sienten menos que- hambre y la enfermedad que acompañan los medios de comunicación nacionales e in-
ridos, también porque no cumplen con las al desplazamiento y otras en sus manos ternacionales. Ellas entablaron acciones de “Entre mujeres no nos pisamos la
demandas de ellas o simplemente por las muestran la sobrecarga de trabajo. tutela en la defensa de sus derechos, parti-
manguera”. Mujer del Chocó.
condiciones económicas adversas. La mu- ciparon de foros y se tomaron lugares públi-
jer que vive con su compañero afirma tener La vida comunitaria se caracteriza por dos cos como espacios de vivienda. Aprendieron Las mujeres que narraron su experiencia
conflictos con él, por su rol de líder. Se dimensiones: solidaridad y desconfianza. a tener palabra pública y reconocieron que actuaron ante el conflicto cuando lo pade-
puede pensar que las dimensiones del con- La solidaridad se da en la formación y parti- sólo a través de organizaciones sus deman- cieron. Antes pensaban que era un asunto
flicto poder – autoridad y reconocimiento cipación de organizaciones orientadas hacia das podrían tener eco. Mientras vivían esta de peleas entre padres, parejas o vecinos, de
– celos, siguen vigentes pero adquieren la reivindicación y respeto de sus derechos; situación extendieron lazos de solidaridad pronto se vieron enfrentadas a amenazas,
nuevas formas; por ejemplo, el poder – au- la desconfianza opera en la relación con el con otras mujeres, se hicieron compañeras desapariciones, muertes, pobreza, soledad,
toridad está presente en los reclamos por otro-a, de quién no se sabe nada y dicha y crearon una red de comunicaciones y separaciones y desplazamiento. Entendie-
el liderazgo y el eje reconocimiento – celos ignorancia se traduce en sospecha sobre los apoyo alimentario a través de restaurantes, ron que había diferentes intereses y actores,
está en las demandas de los hijos a las ma- vínculos que puede tener. El temor a morir y están forjando posibilidades económicas aterrizaron a una realidad colombiana que
dres. Sin embargo, hay una variación que es latente y está en el ambiente. Las relacio- implementando lavaderos comunitarios; en les impedía volver a determinados sitios,
vale la pena señalar: la tensión sexual fue nes con las mujeres se fundamentan en el definitiva, las mujeres le están dando la cara que las obligaba a llevar una oración den-
desplazada por un reclamo en lo afectivo, compañerismo, la relación con los varones y el corazón a la vida. tro de la cartera, a no sentarse solas en la
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mitad de un bus, a no salir de noche, a no armados no violen los derechos de la po- 2.1.4. Resistencias de las mu- primer plano la consideración sobre la
hablar con desconocidos, a advertirle a los blación civil y, que las mujeres se unan jeres del Chocó vida, aunque ello signifique sacrificar la
hijos los riesgos de vincularse a un grupo para conseguir la paz a través de la com- “estabilidad” que le ofrece la tradición; se
del conflicto y a las hijas de enamorarse de prensión de que lo que está pasando tie- Las mujeres narraron diversas y arriesga a irse haciendo eco a la premisa
un actor armado. ne que ver con ellas y en consecuencia, múltiples formas de resistencia en lo pri- de proteger la vida de sus seres queridos.
deben y tienen el derecho a participar en vado y lo público. En lo privado el despla-
Sobre los grupos armados y sus prácticas la negociación. Para todas el diálogo y zamiento forzado es la primera reacción. Después de la situación de conflicto ar-
en lo público piensan que “no hacen nada el reconocimiento de que todos y todas Es importante señalar que por lo general mado que le tocó vivir a cada mujer, la
bueno, secuestros, desalojos, saqueos, hacen parte de un mismo territorio es la son los varones quienes sufren las ame- familia adoptó diferentes mecanismos de
extorsiones, vacunas, matanzas y amena- solución. nazas y las mujeres quienes toman la de- sobrevivencia: separación, fortalecimiento
zas”. Para ellas son los responsables de su cisión de irse, dejar la tierra y abandonar de los roles femeninos y asunción de lide-
indefensión pues por ellos están desplaza- Los grupos armados identificados son las pertenencias. Se podría pensar que el razgo, participación en organizaciones de
das y sus hijos e hijas no pueden estudiar guerrillas, paramilitares, ejército, poli- desplazamiento es una situación en la que carácter comunitario y desconfianza ante
y no tienen garantías de salud. Sienten cía y milicias, su identificación comen- se materializa la sin salida de las perso- los desconocidos. Frente a la separación
temor que las maten y/o a sus hijos-as, zó en 1994 y se agudizo durante 1996, nas que padecen los intereses expansivos vale la pena resaltar que son los varones los
que las torturen, las cojan o desaparezcan período en el cual el departamento fue de los grupos armados. Algunos varones que abandonan el hogar materno, lo cual
a un integrante de sus familias. La inse- el escenario de las acciones de los para- compañeros de estas mujeres murieron se explica por el hecho de que son quie-
guridad tiene un lugar importante en su militares en contra de la guerrilla, que- por no haber querido salir, de modo que, nes, por lo general, pueden ser reclutados
cotidianidad pues tres reconocen sentir dando la población civil en medio de la pese a no ser una elección autónoma, el por los grupos armados y en lo relativo a
temor en la calle y las otras dos en el lu- contienda y con la única opción de des- desplazamiento se convierte en una mo- la desconfianza se evidencia la ruptura de
gar donde vivieron el desplazamiento. plazarse, pues eran acusados de servir a dalidad de resistencia en cabeza feme- los hilos que hacen posible la trama social,
uno u otro grupo. La situación se hizo nina, orientada hacia la protección de la pues ella implica: suspicacia, recelo, sos-
Sobre la resolución del conflicto en el más dramática por la ausencia del Esta- vida, ante la acción violenta. pecha, escepticismo, desengaño, cuidado,
Chocó son pesimistas pues opinan que do, que empezó a figurar en el escenario astucia, prevención y escrúpulo.
cada vez es más violento y los jóvenes se bajo la acción militar. El varón parece albergar más temores
están involucrando más, que no hay forma al momento de abandonar la tierra, esta Como se ve el desplazamiento parece
de sacar a los grupos armados de su terri- Los actores armados representan para situación parece justificarse en la inse- llevar a quienes lo padecen a formar
torio, que no se sabe qué grupo está aca- las mujeres “desconfianza, violencia, guridad que le provoca enfrentarse a un pequeños círculos de relaciones, pues
bando con el otro porque el conflicto viene injusticia, impotencia, personas que no medio económico desconocido y donde alguien desconocido es potencialmente
de tiempo atrás y es muy confuso, que el piensan en su madre o en los demás, una no cuenta con ninguna garantía para un agente de conf licto, un agresor, así la
Estado no hace nada para resolverlo y que gente que anda matando y no piensa en mantener su rol de proveedor. De ahí que, sospecha está en la sombra de cualquie-
se presentan situaciones para prolongarlo nadie, no piensa que tiene una madre exprese mayores resistencias para aban- ra, situación completamente adversa
como la tristeza, soledad y orfandad. que va a sufrir por eso, peligro, deses- donar la que considera su tierra, el reino para establecer vínculos de amistad, ve-
peranza y destrucción de la sociedad”. en donde su palabra encarna autoridad y cindad, hermandad y solidaridad; pero
Esperan del Estado y los grupos arma- Ninguna de las mujeres avala la acción poder como lo muestran las respuestas de sí favorable para la desunión, individua-
dos negociación, aunque reconocen que violenta de los grupos armados, sienten las entrevistadas. La posición masculina, lismo y prelación de intereses personales
es un ideal, que el ejército y los grupos por ellos dolor, rabia y miedo. contrasta con la de la mujer, ella pone en sobre los colectivos.
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En lo público, los movimientos y espacios marchas por la vida y por los derechos de ven afirmó que la madre y el padre to- por celos afectivos y por la concepción
femeninos aparecen como instancias de los y las desplazadas. maban las decisiones, las dos mujeres que de singularidad afincada en la propiedad
acogida para las mujeres desplazadas, pues tienen entre cuarenta y cincuenta años individual.
allí se fortalecen como líderes y gestionan En síntesis, podemos decir que las mujeres indicaron al padre.
proyectos colectivos por oficios y necesida- reaccionan protegiendo la vida familiar, Las reacciones ante el conflicto eran di-
des como restaurantes y lavaderos comu- asegurando la alimentación de sus hijos e “Las decisiones, era como muy versas, pues se presentaba por el hecho
dividido, unas cosas él y otras ella, mi mamá
nitarios, que se convierten en soluciones hijas, asociándose con otras mujeres y bus- educación, alimentación y mi papá sobre
de que la madre se “ofuscara” y el padre
alimentarías y en alternativas económicas. cando el apoyo de la iglesia para gestionar vivienda y economía”. Mujer de Medellín. se quedará en “silencio”, y que el padre se
soluciones, situación que contrasta con la asociara con su “preferida” contra la madre
La iglesia juega un papel central en el pro- profunda desconfianza que sienten por Durante la niñez, en las familias de las mu- y los otros-as hijos-as hasta el punto de
ceso de fortalecimiento público de lo feme- las instituciones estatales destinadas a su jeres, los roles de varones y mujeres eran llegar a golpear a la madre y presentarse
nino, pues tradicionalmente la mujer ha atención y que no conocen. muy estáticos: varón proveedor y mujer discusiones violentas con manifestaciones
estado vinculada más a ella que el varón, lo madre y ama de casa. Cuando las condi- físicas. La madre era tolerante y pasiva y
cual permite que sean las mujeres las que Queda el recuerdo y con ella la memoria ciones económicas fueron más adversas la tanto el padre como la madre, usaban la
toquen sus puertas. Además aún la iglesia escrita, en medio de risas y lágrimas, de mujer también conseguía dinero pero en violencia física contra los hijos e hijas. Las
cuenta con cierto margen de acción que no mujeres generosas que cuentan su historia ocupaciones que no entraran en conflicto mujeres más jóvenes afirmaron que por lo
tienen las organizaciones de carácter civil para que una y otro escuchen las experien- con su rol de madre; por ejemplo, coser, general el padre no era castigador.
como las O.N.G, que en muchas ocasio- cias de horror y resistencia que se han te- curar, recoger material de reciclaje, atender
nes se ven limitadas por las presiones y jido en medio de sensaciones, aceptaciones un taller, todas ellas en el hogar o muy cer- Las manifestaciones de afectividad parecen
acciones de los diferentes grupos armados; y renuncias. ca del mismo. decir de mujeres inhibidas para demostrar
es por ello que la iglesia aparece como un el afecto a su compañero delante de los
lugar para gestionar y jalonar acciones de 2.2. Palabras, representa- “A mi hermana mayor le tocó irse a
trabajar a una casa de familia y a la otra le
hijos e hijas; solo una afirmó haber visto
carácter público. Otro aspecto importante
que hay que considerar en el papel que jue-
ciones y sentimientos de toco trabajar con mis padres en el basurero”. manifestaciones afectivas entre su madre
Mujer de Medellín. y padre; otra dijo que su padre si las tenía
ga la iglesia, es que en zonas marginadas las mujeres de Medellín con la madre, pero ella era distante. Con
políticamente del país como es el caso del Los conflictos familiares se dividían en los hijos e hijas la situación era diferente,
Chocó, ella ha ocupado el rol de regulado- 2.2.1. Tiempo cronológico
dos tipos: primero los que se presenta- pues tanto la madre como el padre tenían
ra de las relaciones sociales; en este sentido niña
ban entre la madre y el padre porque él expresiones de afecto con sus hijas-os, lo
se vive más bajo la lógica del “yo creo” que abusaba del consumo de alcohol y tenía que fue reconocido especialmente por las
bajo la lógica de un Estado que garantice En lo relativo a la toma de decisio-
relaciones con otras mujeres, también más jóvenes. Algo que merece considerar-
y regule los derechos de cada ciudadano-a. nes en la familia, el panorama es variable,
por el desencanto femenino por la acti- se es el hecho de que en un caso la entre-
En el Chocó la iglesia, ante un Estado au- pues dos mujeres reconocen a la madre,
tud masculina; los del segundo se daban vistada se auto-define como la preferida de
sente, ha hecho de vocera de la población otras dos al padre y una a ambos. Es
entre los hermanos y hermanas por celos su padre porque él siempre le demostraba
civil no solo ante los grupos armados sino importante señalar que quienes identi-
del afecto demostrado por el padre hacia que la quería, pero no hacía lo mismo con
también ante el mismo Estado, de ahí que ficaron a la madre, tenían padres cuyos
uno-a de ellos- as porque se cogían las su esposa y otros hijas-os, dice que su pa-
las mujeres busquen el apoyo de la iglesia trabajos implicaban largos períodos por
cosas que pertenecían a otro-a. Como dre la consentía porque era la niña, que el
para acometer protestas, acciones de tutela, fuera del hogar. Mientras que la más jo-
se ve el conflicto familiar era motivado amor del padre era grande.
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“...conseguía cinco centavos de dad y al hecho de que su padre jugará con todos estaban vinculados a lo público y al estamos hoy y cada mes le va a venir, tiene
salchichón para mí, aunque no hubiera para que cuidarse, tomar agua de panela, no comer
ella. Pero no todas las mujeres tienen estos reconocimiento social, ya sea por la destreza
nadie más...” Mujer de Medellín. naranja... Me dio mucha rabia, le dije a mi
recuerdos, una afirma no tener ninguno de habilidades corporales como las que exi- mamá que no me hablara pues en el colegio
porque no tenía amigos y amigas, además gen el deporte y la danza o por capacidades todo el mundo se había burlado de mí.
El recuerdo sobre la afectividad es varia- Hubiera querido que la tierra me tragara...”.
la madre no la dejaba salir porque las casas intelectuales como las requeridas por cual-
ble, en un caso la entrevistada salía a la Mujer de Medellín.
entre sí eran distantes y vivía en un barrio quier profesionalización académica.
calle a reunirse con sus amigos y amigas,
de ocupación subnormal, a donde llegaba
y recuerda que iban a la casa de una niña En lo relativo a la valoración del cuerpo
gente muy diferente y no siempre “buena”, En relación con la sexualidad las cinco afir-
a la que no dejaban salir, afirma que ex- varía de una posición indiferente a una
cuando era niña se decía que había un va- maron que nunca en su familia les habla-
ploraban sus cuerpos a través de besos y de gusto o disgusto por la opinión o ac-
rón que violaba y mataba a los niños-as. ron de ella. Las narraciones de las mujeres
abrazos y compartían mientras prepara- ción de un tercero. Es indudable que en la
muestran que la educación sexual fue de-
ban comiditas (juego infantil en el cual apreciación del cuerpo juegan elementos
Todas, con excepción de una respuesta, legada en personas que no pertenecían al
cada participante pone lo que puede: un sociales afincados en procesos culturales
afirmaron que no había distinción entre núcleo familiar, el colegio y amistades, no
huevo, una cebolla, un puñado de arroz y del patriarcalismo, a través de los cuales se
niñas y niños en juegos públicos, que ellas fue considerada un tema y en consecuencia
un poquito de aceite. forman y divulgan estereotipos de belleza
participaron o vieron que las niñas jugaban siempre hubo silencio. El cuerpo tampo-
fútbol, corrían por las calles, se escondían, co fue un tema familiar, cuando se hacía y fealdad, que inciden al momento de sen-
“...mi principal recuerdo es que con
brincaban y hacían lo mismo que los niños. referencia a él aparecía bajo la representa- tir agrado y/o desagrado por él, de ahí que
mis vecinos me fui a jugar a una manga, las
niñas nos metimos el vestido por los calzones Situación que merece pensarse en relación ción del cuerpo como templo de Dios. Se se concentre la atención en aspectos como
y salíamos a desfilar que éramos señoritas
con los roles tan estáticos entre los adultos, desconocían sus procesos y el temor estaba la delgadez, la obesidad y la contextura del
de un reinado, en esos juegos teníamos cabello.
novios, siempre me tocó un negrito; cuando pues cuando se llega a una etapa, quizá la presente no solo para conocerlo sino tam-
estábamos en pleno desfile pasó un hombre y pubertad, esta indiferenciación cambia, bién para aceptarlo y disfrutarlo. “...mi cuerpo me gustaba, me gustaba
nos dijo “me las voy a comer”; yo le dije, no se las mujeres se “asientan”; mientras que los todo, pero cuando fui creciendo no me
me vaya a comer las manos y él respondió “por “...tuve dificultades al momento de usar
ahí no es, es por la vagina y todas empezaron varones continúan teniendo libertad de gustaba mi cabello porque hasta que tuve diez
short..., pensé mucho en mi madre cuando años fue muy lacio y una vez mi hermana me
a correr, yo le pregunté, si nos come por ahí, movimiento y acción en lo público. empecé a sentir deseos de tener una relación lo cortó y se encrespo, desde ahí me aterró...”.
¿por dónde vamos a orinar...?”. Mujer de sexual...” Mujer de Medellín Mujer de Medellín.
Medellín.
El sueño sobre lo que esperaban y querían
hacer es variable y habla de sus posiciones “La llegada de mi primera menstruación Los lugares más visitados eran la iglesia,
La mayor del grupo reconoce como un en la familia y la forma cómo interpretaban fue la locura, no quiero acordarme. Ese día
me cogió el día para ir a estudiar, me bañé a la casa de la abuela, quebradas, fincas,
recuerdo de afectividad al período de va- su medio social; una deseaba ser patinadora la carrera y no noté que deje los pantalones, casas de amigas, cine, canchas y parques.
caciones en el campo cuando podía jugar y después bailarina, otra quería irse muy le- ella los vio y muy enojada me pregunto sí eran La iglesia estuvo presente en todas las res-
y dormir. La más joven recuerda el afecto jos y ser una abogada o médica, la más joven míos, me dobló una toalla y me la hizo poner
puestas, lo que demuestra que era un lugar
que sentía por una amiga mayor que ella, primero ser enfermera y más adelante soñó entre las piernas y no me dijo nada. Me sentía
muy incomoda y pensé por qué mi mamá me en la formación de la niña. Estos espacios
la esperaba después del colegio y ambas con ser psicóloga, la mayor ser profesional, puso esto y en el recreo me metí al baño y vi... hablan de la coexistencia de costumbres
se cuidaban en un barrio signado por vio- trabajar en una oficina con un buen salario Grite como una loca y me quede encerrada rurales y urbanas; es decir, de la yuxtaposi-
lencias de diferente origen, también hace y ser admirada, y otra ser cantante. Como se y llamaron a la monja y ella abrió la puerta
ción de tradiciones y transformaciones que
... Yo pensaba que mi mamá me había hecho
referencia a la importancia que daba la ve los sueños no estaban relacionados con ha caracterizado al desarrollo de Medellín
usar unos ganchos y me había cortado... Ella
madre a tener para ella un regalo en navi- la formación de una pareja y la maternidad, me ayudó y me dijo: Anote la fecha a la que durante los últimos sesenta años; es así
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como perviven visitas al campo y a la casa el papá y la mamá. La relación con los y década de los noventa y quienes vieron “...él regaló la tierra que tenía, a
medida que iba llegando gente desplazada,
de la abuela, a la vez que se habita lo públi- las adultas mayores en algunos casos se cómo en Medellín cada vez más se tenían
él fue quien llenó el barrio, porque cuando
co: cine, canchas y parques. Es importante dio porque los padres no consideraban que enterrar amigos, novios, hermanos y se encontraba a alguien con problemas le
destacar la visita a la casa de amigas, pues que hubiera riesgos, mientras que en compañeros de clase. No sorprende que decía “venga que allí hay donde, no se quedé
habla de la vecindad que se entreteje en los otros no se presentó porque lo considera- ellas nombren a la iglesia, pues en los ba- por ahí”. Me acuerdo que cuando se fue
regando la gente, empezó a llegar la policía
barrios urbanos. ban inadecuado, marcando de este modo rrios en los que se presentaban mayores y a los niños que corríamos más nos ponían
otra separación: el mundo de los niños, dificultades económicas y de seguridad, a hacer pilas de piedras, al más grande por
Solo dos mujeres afirmaron que pudieron el mundo de las niñas y el mundo de los la iglesia lideró un trabajo con los y las la tarde lo ponían en un lugar estratégico
tener relaciones cercanas con los niños; sin adultos mayores. En este último, al igual jóvenes a partir de la formación de gru- para que mirara, porque la policía siempre
atacaba en las horas de la tarde. Cuando el
embargo, una de ellas aclara que la relación que en la primera infancia, tampoco había pos juveniles, convirtiéndose por mucho muchachito veía que venían los carabineros
se dio principalmente por la participación distinción entre niñas y niños. tiempo, en casi la única respuesta institu- en caballos, bajaba y decía “viene la policía,
en actividades organizadas por la iglesia. cional ante la barbarie padecida y prota- viene la policía”; para no dejar entrar a
los policías, los niños sabíamos que nos
Las tres restantes dijeron que su padre y Las instituciones reconocidas como las más gonizada por los jóvenes de la ciudad.
teníamos que atrincherar a recoger piedras,
su madre no les permitieron relacionarse importantes fueron la escuela, la iglesia, la en ese momento los adultos se replegaban
con niños, en dos de estos casos quien se Junta de Administración Local, la policía y Pero este carácter social de la iglesia no en varios grupos para contrarrestar, porque
oponía era el padre, en el otro la madre, la familia. Las razones de su elección son se puede separar de su misión evangeli- la policía llegaba dándole bolillo a todo
mundo, mujeres, hombres, niños, a quien
pero en los tres la razón de la prohibición variables: la escuela porque en ella se pasa- zadora, de ahí que se promoviera a María fuera”. Mujer de Medellín.
fue “pensaban que hombres y mujeres no ba mucho tiempo y se estructuraba la per- madre de Dios como modelo femenino.
podían estar juntos”. sonalidad, en ella se podía compartir con Se incentivaba la participación de la jo- 2.2.2 Tiempo cronológico mu-
otras niñas, cantar, hacer obras de teatro ven en los grupos promoviendo la asun- jer adulta, antes de la situa-
Los roles de los adultos son estáticos, y era importante estudiar. La iglesia por- ción de valores como amor, solidaridad ción directa de conflicto ar-
varón proveedor y mujer madre y ama de que a través de ella se dio cohesión entre y apoyo que orientaban a acciones como mado
casa, pero no se reconoce que haya distin- los habitantes del barrio, las familias eran recreación, alfabetización y conferencias,
ción entre niños y niñas en la participa- muy católicas y en ella se reforzaba la fe pero en ningún caso, siguiendo los testi-
ción de juegos, sin embargo, se afirma que mediante la enseñanza del amor a la vir- monios, se propuso una transformación Las familias siguieron conservando
los padres no aceptaban la relación niño gen. La Junta de Administración Local por social que no acudiera al tradicional rol el modelo nuclear. Sin excepción recono-
– niña; puede ser que no había distinción el trabajo comunitario. La policía aparece femenino. cieron a la mujer como quien tomaba las
en los juegos y que ella aparecía durante solo en una respuesta “La institución más decisiones; por ejemplo, las solteras dicen
la pubertad. importante era la policía como referente No deja de sorprender la percepción de que su madre decidía porque en la mayoría
ante el peligro y desprotección”. La familia una entrevistada sobre la policía, pues de de los casos el padre estaba ausente todo
Para las mujeres, las personas más impor- por la protección económica del padre y la acuerdo con ella, esta institución operaba el día o su empleo implicaba estar en otro
tantes eran aquellas que brindaban afec- ternura de la madre. como una amenaza, lo cual es compren- lugar. Hubo una que afirmó que la madre
to, confianza y protección: la vecina del sible al revisar su historia de vida, pues intentaba consultarla a ella y su hermano,
barrio abuela de todos y todas, el señor y La iglesia aparece en las respuestas de de niña vivió en un barrio que se originó una dijo que sus hijos intervenían en lo
la señora solidarios en épocas duras, las las mujeres más jóvenes; es decir, en las mediante una ocupación espontánea, que relativo a la educación y el hogar. El papel
amiguitas con quienes se compartía, el referencias de quienes representan a las aún hoy es considerado por la Adminis- masculino en las decisiones estaba vincu-
sacerdote con una fuerte vocación social, adolescentes de la primera mitad de la tración Municipal una invasión ilegal. lado a lo económico.
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En relación con los roles, permaneció el niales y pretenda interferir en el desempeño En relación con las manifestaciones de afec- cuales se generaba el espacio para expresar
modelo de su niñez: padre proveedor eco- público de la chica. to, solo un varón las tenía con la compañera inquietudes, sensaciones y motivaciones.
nómico y la mujer madre y ama de casa; (madre) pero ésta no lo hacía. Ninguna También se hablaba con los hijos sobre el
sin embargo hubo una variación, la mujer, Ante los conflictos familiares las reacciones reconoció que la madre o ella le manifestara uso del condón y las responsabilidades, solo
de manera más frecuente, participa activa- fueron diversas, en algunos casos se pre- públicamente afecto al compañero, situa- una expresó que le contaba ciertas cosas
mente de la economía del hogar y en algu- sentaba la violencia verbal, en los más dra- ción contraria a lo que acontecía con los y a su madre para que sintiera que le tenía
nos casos se convirtió en líder comunitaria. máticos ésta iba acompañada de agresiones las hijas, con ellos y ellas las expresiones confianza. La mayor de las entrevistadas
Los hijos menores tenían el rol de estudiar, físicas y castigos. Las mujeres se dejaron eran proliferas; como sí al hombre adulto se dijo que ella nunca habló de sexualidad por
los mayores trabajar para cubrir sus gastos atrapar por las manifestaciones agresivas le tratará exclusivamente como proveedor y considerar que era algo muy íntimo.
y en un caso se reconoce que el hijo posi- de los varones y por ello también fueron autoridad distante pero intimidante.
bilitó el vínculo familiar. Las hijas estudiar agentes de violencia, ya no se quedaban en Las dos más jóvenes y universitarias, dis-
y colaborar con las labores domésticas, al silencio y lloraban sino que respondían bajo En lo relativo a los sueños de mujer adulta cuten del tema con su compañero. Vale
respecto se dice que en muchas ocasiones la lógica “si me pega le pego, nos tenemos es casi todos estuvieron orientados por un de- la pena destacar, que sí bien hablaban de
para resolver una desavenencia con la ma- que matar”. Sin embargo, las más jóvenes seo que implicaba a un tercero. Ellos hablan sexualidad, lo hacían en un contexto de es-
dre o evitar que ella se enojara, la hija lavaba adoptaron conductas como la conciliación y de la forma cómo se producen transforma- pacios de mujeres, lo cual pareciera expre-
la ropa de toda la familia o limpiaba la casa. el diálogo o el silencio y la distancia para que ciones en la cultura patriarcal, pues si bien sar que pese a ser una situación en la cual
Estas tareas son encargadas a las mujeres las cosas se calmaran. Vale la pena destacar prevalecen los valores asociados a la mujer están involucrados varones y mujeres, aún
cuando llegan a la pubertad. Las dos más que en relación con su madre las mujeres – madre, también lo es que la mujer empie- no se han ganado los espacios para poder
jóvenes, por su participación en grupos, se adultas cambiaron, pues ya no se aguanta- za a pensarse así misma independiente de debatir conjuntamente sobre sus deseos
convirtieron en líderes juveniles. ban infinitamente las violencias masculinas, su rol materno y en consecuencia a culti- y singularidades. También es importan-
ya que llegó el momento en que decidieron var sueños profesionales que implican una te detenerse en el tratamiento dado a la
En lo relativo a los conflictos familiares, separarse y echar a los compañeros del ho- participación diferente en la formación del sexualidad desde la protección y responsa-
se presentaban entre la madre y el padre y gar. tejido social. Los sueños describen anhelos bilidad, pues sí bien la madre le hablaba a
éstos con las-os hijas-os. Entre la pareja se de paz para la sociedad, estabilidad y edu- sus hijos del uso del condón; no les hablo
daban por celos provocados porque el varón De las cinco, tres reconocieron como re- cación para los hijos y desarrollo de aspira- sobre el deseo, la elección, el momento, las
tenía una relación con otra mujer, por situa- cuerdo de afecto una situación en la cual ciones profesionales circunstancias y otros aspectos que no se
ciones económicas y consumo de alcohol y compartieron con varones y mujeres una ce- limitaran a la prevención de una enferme-
por el trato que el varón le daba a la mujer. lebración como una graduación, la navidad “... mi sueño era que se pudiera recuperar dad de transmisión sexual o un embarazo
la vida de barrio y se acabará la violencia...”, “...
Las discusiones entre padres e hijas estaban o cualquier otra circunstancia propicia para mi sueño era tener una casa grande para mis
precoz; además hablaba con sus hijos, a las
asociadas a la crítica e incluso actitud nega- matizar las fronteras entre varones y muje- hijos y yo...”, “... mi sueño era ver a mis hijos hijas nadie les decía nada. Todas las muje-
tiva (restricción de horarios) del padre a las res. Dos mujeres afirmaron que su principal profesionales...”, “..mi sueño era ayudar a la gente res reconocieron la influencia de alguien
actividades que como líder desempeñaba la recuerdo de afecto estaba asociado al hecho a resolver sus problemas y también cantar...”; “... en la sexualidad, las más jóvenes identifi-
mi sueño era ser una psicóloga y dedicar mi vida
joven y por el uso que los hijos e hijas tenían de compartir con otras mujeres por trabajo a mi profesión...”. Mujeres de Medellín. caron a la madre,
del teléfono. Como se ve hay una actitud comunitario y amistad. Al respecto vale la
diferencial entre varones y mujeres, la cual pena destacar que las actividades en las cua- De adultas la sexualidad aparece como tema “...la persona que más me influenció
se pone de manifiesto en el hecho de que les se tejieron lazos de solidaridad fueron fue mi madre, pensé mucho en ella antes de
de conversación con otras mujeres pertene- tener mi primera experiencia sexual…” Mujer
el hombre tenga relaciones extramatrimo- especialmente recordadas. cientes a grupos y organizaciones, en las de Medellín.
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“...la persona que más me influenció dicen de la cosificación e instrumenta- “Valoro mi cuerpo pero no me gusta situación de desplazamiento y con con-
fue mi madre porque siempre hemos tenido por flaca”. Mujer de Medellín.
lización del cuerpo, en tanto soporte de diciones económicas muy precarias. Esta
una relación cercana...” Mujer de Medellín.
los valores ascéticos promovidos por la “Me gustaba mi cuerpo porque era el participación en organizaciones les per-
Es importante pensar por qué la imagen cultura burguesa que exige una apariencia mío, yo era como una madre que me gustaba mitió que su círculo de relaciones fuera
sin huellas de sudor, humor, mugre y en mi cuerpo menos mis senos por grandes, pero más amplio que el del común de las mu-
y palabra de la madre estuvieron presen- estaba bien”. Mujer de Medellín.
tes en la decisión de iniciar la vida sexual, consecuencia vida. De un cuerpo – má- jeres de la ciudad. La mujer que no hacía
quizá y a modo de hipótesis, se puede decir quina al servicio de la producción y en parte de ninguna organización también
oposición, a la economía del exceso y el Como mujeres adultas tuvieron la oportu- tenía relaciones estrechas con las mujeres,
que la madre vigilante de la ley del padre nidad de relacionarse con los varones, pues
controla emocionalmente el cuerpo de la derroche sin finalidad alguna. afirma que compartían actividades pues se
ya la madre haciendo eco de la palabra del reunían a cocinar, bordar y conversar.
joven; ella necesita la aprobación materna padre no tenía la misma influencia que du-
para ejercer su autonomía, es decir una Casi todas valoraban su cuerpo como so-
porte y expresión de su singularidad, lo rante la niñez. Cuatro reconocieron haber Las respuestas de las mujeres hablan de un
autonomía femenina afincada en la madre sostenido buenas relaciones de compañe-
quien acude a la autoridad de la sombra cual no significa que estuvieran satisfechas contacto mayor, durante la pubertad, con
plenamente con su apariencia física. Se pre- rismo y trabajo con los varones, pero la más los varones, pero aún prevalecen espacios
del padre. Cuando la joven tiene una re- joven del grupo de las entrevistadas afirmó
lación sexual que piensa sería reprobada senta una variedad de respuestas: aquellas exclusivos de lo femenino en los cuales ellas
que piensan el cuerpo como posibilitador no haberse relacionado con ellos. Acá cabe se sienten bien y reconocen su diferencia;
por la madre prefiere ocultarla, creando de anotar que ella vivía en un barrio que pa-
este modo una situación de silencio y tabú de conocimiento, a quienes no les gusta lo cual se corrobora con lo expresado en
por la forma, aquellas que ven en su cuerpo decía altos índices de violencia protagoni- relación con la sexualidad, pues de ella se
en relación con su sexualidad. Las muje- zada por los jóvenes; de ahí que, como una
res que ya habían convivido con alguien la maternidad como potencia, destacando habla sobre todo con otras mujeres y en los
la diferencia corporal con lo masculino, y forma de protección personal, eligiera no espacios de las organizaciones que hacen
reconocieron como influencias en su vida relacionarse con los varones de su entorno.
sexual a sus compañeros. también la que se reconoce en la especifici- posible escenarios para el desarrollo feme-
dad de su cuerpo. Lo cual, pero por circunstancias diferentes, nino a través del intercambio de experien-
pareciera replicar los temores de los padres cias y el afianzamiento de valores como la
“...la persona que más me influenció y las madres que no permiten a las niñas solidaridad y el amor.
fue mi segundo compañero pues yo lo quería, “Pienso que la libertad del hombre con relacionarse con los niños, en el caso de
mi primer novio el padre de mi primer hijo, su cuerpo era falsa porque tenían que contener
su expresividad, los hombres tenían mayores ella como adulta por no tener contacto con En relación con los líderes del lugar donde
fue algo bonito y no fingido; pues con el
segundo compañero al principio me toco impedimentos para demostrar afecto con el agentes de violencia. Lo importante de la vivían se hace la distinción entre los tradi-
fingir mientras me acostumbraba, los que más cuerpo: Ni hombres ni mujeres podíamos situación, es que prevalece la separación y
demostrar cosas con el cuerpo, éste aparecía cionales de las Juntas de Acción Comunal
me han influenciado han sido los compañeros
para determinar aseo, el cuerpo nunca ha sido
que ésta se fundamenta en un temor. y las cooperativas y los nuevos vinculados a
que he tenido...” Mujer de Medellín
un tema importante, lo más importante era la la violencia: los jefes de bandas, milicianos,
limpieza y el cuidado de sí mismo, el cuerpo
En relación con el cuerpo, las más jóve- no era tan importante“. Mujer de Medellín. De las mujeres que narraron su historia paramilitares y guerrilleros. Estos últimos
nes reconocieron que la libertad corporal cuatro hacían parte de organizaciones, fueron imitados por los jóvenes quienes
masculina era algo que debería conside- “A mi me ha gustado mi cuerpo por ser el las dos más jóvenes pertenecían a grupos también quisieron imponer sus decisiones
rarse antes de afirmase. Las respuestas que me permite sentir y conocer”. Mujer de juveniles. Las dos mayores a cooperativas a través de las armas y las chicas quisieron
de las mujeres mayores plantean que en Medellín. formadas para contrarrestar la pobreza estar con ellos. Ante el conflicto la reacción
el contexto de Medellín se tejen las rela- “No me gustaba mi cuerpo porque era que se vivía en los barrios de ocupación de estos líderes fue diversa: eran los gue-
ciones cuerpo – higiene, cuerpo – trabajo; muy gorda”. Mujer de Medellín. subnormal, donde se albergan familias en rreros que se enfrentaban, quienes manda-
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ban, definían límites y horarios, establecían Trabajadora de Colombia fui la Coordinadora Las instituciones reconocidas como más en el cual viven su hija, nieta y dos hijos,
Seccional de Medellín y representé a mi
cuotas para personas, carros y tiendas. Mu- importantes fueron: las O.N.G que esta- a una le mataron un hijo y su compañero
organización en un viaje por Austria...” Mujer
chas mujeres y varones les daban el poder de Medellín. ban mediando en el conflicto y apostándole se fue, la otra aún vive con sus padres y
para que resolvieran problemas familiares. a la vida; Pastoral Social por el apoyo que hermano y la última se independizó del
Muchos de los líderes eran milicianos, eran “Hacía parte de una cooperativa de brindaba; la familia, la escuela, la organiza- núcleo familiar. Aumentaron los hogares
mujeres y representaba al barrio en la Pastoral
generadores de violencia y se preocupaban Social. Hacía parte de una Corporación, tuve la
ción comunitaria y la iglesia porque todas donde las mujeres se convirtieron en el
por asuntos como los desalojos de la poli- oportunidad de viajar a Europa representando a le permiten a las personas capacitarse y de- único soporte económico.
cía y la pavimentación de las calles. Ante las y los jóvenes de esa Corporación y participaba sarrollar la organización como una forma
el conflicto los líderes asumieron el control en acciones de proyección con mujeres jóvenes”. de transformación social, y Bienestar Fa- En lo relativo a la toma de decisiones ya sea
Mujer de Medellín.
de la vida de la gente del barrio, del manejo miliar porque ayudaba con los problemas porque se dio la independencia del hogar
del territorio, de lo permitido y prohibido. “... estaba organizada en la Asociación de relacionados con la manutención de las-os familiar, el compañero se marchó o porque
Mujeres de mi barrio, pertenecía a la Junta de hijas-os. Estas instituciones dicen de in- se llegó a la mayoría de edad, todas afirma-
Acción Comunal y era la coordinadora de un
Las mujeres consideraban que los valores de tervenciones en lo público y en lo privado. ron que ahora ellas toman las decisiones.
semillero, un restaurante y de deporte....” Mujer
un líder debían ser solidaridad, honradez, de Medellín. Vale la pena destacar que no aparece en las En lo referente a los roles desempeñados
transparencia, estar dispuestos a aprender y respuestas ninguna referencia a las instan- por las mujeres, éstos se incrementaron si
compartir, involucrar los principios a la vida Es importante destacar que los conflic- cias creadas por el Estado y la administra- se les compara con los de sus madres o con
personal, responsabilidad, sinceridad, res- tos violentos en la ciudad de Medellín no ción local para posibilitar la convivencia y su situación anterior. Las que estudiaron
peto, tener como principio la democracia, promovieron la participación política y pú- la resolución de los conflictos. ejercen como profesionales y líderes comu-
gestionar, disposición y capacidad de dar blica de las mujeres, pues muchas de ellas nitarias, las otras también emprendieron
amor. Como se ve son principios que vin- ya habían tomado conciencia de que era 2.2.3. Tiempo cronológico el camino de lo público y participan en
culan lo privado y lo público, que proponen necesario salir a conquistar sus sueños y a mujer adulta afectada por el grupos de mujeres, algunas encabezan ac-
una actitud social afincada en una posición exigir sus derechos, ya estaban organizadas. conflicto ciones de divulgación y protesta de los fa-
personal orientada hacia la convivencia pa- El hablar de la guerra solo evidenció que su miliares de desaparecidos-as; sin embargo,
cífica y el desarrollo colectivo. Mientras el problemática personal, familiar y barrial “Es difícil aprender a convivir con las que tienen hijas-os siguen ocupándose
liderazgo barrial se iba tornando un ejerci- era común a muchas mujeres y esta realidad el dolor mientras la enigmática muerte de ellas-os y del cuidado de la casa, aún las
cio despótico sostenido en el uso de armas las empujó a unirse para proponer otras se perfila en la distancia, mientras los profesionales y reconocidas líderes, con-
de corto y largo alcance, que implicaba el formas de convivencia y en consecuencia sueños se derrumban y una sensación de tribuyen con el sostenimiento económico
desplazamiento intra urbano o el silencio fortalecer movimientos de mujeres esta vez rocío nos sorprende”54. y el mantenimiento doméstico del hogar.
de los antiguos líderes, las mujeres entre- también orientados por la demanda de la Como se ve el conflicto urbano ha hecho
vistadas, con excepción de una, ya hacían resolución pacífica de los conflictos. En este En relación con la conformación de la que la mujer cargue con más responsabili-
parte de propuestas civiles orientadas hacia sentido, la guerra les ayudó a comprender la familia se presentaron cambios, pues el dades en lo público, sin que se pueda des-
el respeto a la vida y el derecho a tener una barbarie que acompaña a una cultura cen- conflicto ha acabado con vidas, ha genera- prender de los asignados en lo privado por
vida digna: trada en la expropiación, desconocimiento do desapariciones y desplazamientos. Es la tradicional cultura patriarcal.
y silenciamiento de la diferencia. Pero las así como una de las entrevistadas ahora
“...en ese tiempo ya hacía parte de condiciones en las cuales se desenvolvía su vive con sus padres ancianos pues un hijo Pese a que las madres siguen atendiendo
organizaciones juveniles, de algunas del barrio y
había representado a mi barrio, ciudad y país en vida ya las había llevado a transformarse a se fue para el exterior y el otro está des- al hogar y a los varones que hacen parte
varias acciones como por ejemplo en la Juventud sí mismas. aparecido, otra está desplazada del barrio de él, ya no están tan centradas en este rol
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pues los hijos empiezan a ocuparse de sus Este conflicto familiar ilustra la sin sali- “...el hecho que más me afectó no es Las jóvenes refuerzan su amistad y la ex-
uno, sino varios: En 1990 la muerte de mi hijo
propios asuntos ya sea trabajando para su da ante la acción bélica, en la que quedan presan con abrazos y apoyándose en gru-
en manos de la policía, aclarando que tuvo
propio sostenimiento o permaneciendo muchas mujeres y sus familias: el ejército problemas legales por su vinculación a una pos donde pueden compartir sus temores
mucho tiempo ausentes. La situación de nacional u otro ejército. Además muestra banda y fue drogadicto. En 2002 el asesinato e inquietudes, esto no siempre pasa con los
las hijas no es igual, ellas tienen que es- como se transforma “el destino” femenino de mi otro hijo. Las operaciones militares que varones adultos. La solidaridad femenina
sufrimos en la Comuna 13, la que más resalto
tudiar, trabajar para ayudar con los costos de la madre abnegada hacia la madre gue- es la Orión y después mi detención durante
se acrecentó pues las mujeres que tenían
familiares y colaborar en el mantenimien- rrera, que reclama a su sangre vengarse; es diez días acusada, sin orden de captura, experiencias, como la desaparición de un
to doméstico de la casa. En relación con el decir, que quizá de modo inconsciente, se de múltiples delitos entre ellos rebelión, ser querido, crearon grupos de resistencia
rol del compañero se afirma que cuando acerca al comportamiento de aquellos que situación que produjo posteriormente mi civil y protesta a esta acción. El efecto del
desplazamiento intra urbano...”. Mujer de
sigue viviendo en el hogar continua con el le quitaron la vida a su hijo. Medellín. conflicto en la vida personal de algunas
rol de proveedor; en algunos casos se fue mujeres ha hecho que se vuelvan más dis-
y la mujer asumió este rol trabajando en Las reacciones ante el conflicto familiar Como se ve las mujeres han sido víctimas y tantes, que sientan rabia y odio, que otras
lo que resulte. son diversas. Hay quienes tienen una po- observadoras de las violencias que se viven intenten romper con sus inhibiciones, asu-
sición conciliadora y acuden al diálogo, y en Medellín, han temido por sus hermanos man las responsabilidades económicas y
“Mi hija trabaja para ayudar a sus cuando la situación está muy difícil po- emocionales de su núcleo familiar y sigan
hermanos, mi hijo menor estudia y el mayor
y padres, han perdido o enterrado a sus
tiene su vida aparte”. Mujer de Medellín.
nen distancia después de haber expresado hijos, han sido desplazadas y han tenido apostándole a la vida a través de iniciativas
su posición. Otras se tornan agresivas y que ver cómo se le quita la vida simbólica y organizativas y pacifistas.
Los conflictos al interior de la familia, en acuden a la violencia física y verbal para física a la juventud. Cada muerte parecie-
el presente, se dan por razones variadas, terminar en llanto. Todas reconocen que ra estar acompañada del mensaje “puede El efecto del conflicto en la familia es con-
sin embargo se puede decir que las situa- su participación en grupos de mujeres les que la próxima víctima seas tú o alguien tundente: el aislamiento de sus integran-
ciones económicas en muchos casos ope- ha permitido estar más tranquilas y tener a quien amas, en la ciudad no hay refugio tes, los lazos se resquebrajaron, la rabia,
ran como motivaciones. Por ejemplo, la mayor paciencia y tolerancia ante las difi- donde se está”. El espacio para la vida se el deseo de venganza, la desesperanza, la
escasez de comida hace que los hermanos cultades. Cada una de las entrevistadas re- restringió, el liderazgo se frenó y aumentó restricción en los horarios, la presencia de
pelen entre sí porque uno no le guardó conoce un momento o situación en el cual el temor. temores, las amenazas sobre la vida de los
comida al otro y se presentan discusiones los conflictos que se viven en la ciudad las varones, las agresiones sexuales padecidas
fuertes entre el padre y la hija, porque éste afectaron. El conflicto generó un cambio en las expre- por las mujeres, la abstención de participar
no puede cubrir sus necesidades educati- siones afectivas, hoy por hoy los jóvenes se en la vida del barrio, la soledad, el empo-
“...el hecho que más me afectó fue brecimiento, la muerte y la separación de
vas. Hay otro tipo de conflictos familia- que mi hermano estuvo en medio de una
expresan corporal y verbalmente el afecto
res que son provocados directamente por balacera sin razones, solo por el hecho de pues sienten que en cualquier momento la familia. Como responsables de lo que les
el conflicto que se vive en Medellín: ese estar compartiendo con sus amigos llegaron sus amigos pueden morir sin que hayan toco vivir reconocen a diversos actores.
unos desconocidos y empezaron a disparar...”. sabido lo mucho que los querían. Pero con
es el caso de una madre y un hijo que se Mujer de Medellín. “... los milicianos que imponían su
recriminan y culpan mutuamente por la las expresiones de las madres que enterra- autoridad a través de las armas y el Estado
muerte de un hermano, ella desearía que “...el hecho que me marcó fue ver a mi ron a uno o varios hijos la situación no es por su ausencia y no brindar ningún tipo
él tuviera “el valor” de vengar la muerte hijo desfigurado, su muerte, todo empezó igual, pues ellas piensan que algo se endu- de garantía en especial, en ese tiempo, a los
cuando las milicias se metieron con mis hijos reció en su corazón, que aunque intentan jóvenes...”. Mujer de Medellín.
de su hijo, él la acusa de la muerte de su y querían llevárselos, ellos se fueron para el
hermano por haberlo presionado para ejército huyendo de los milicianos...”. Mujer ser cariñosas ya no pueden porque murió “... creo que el responsable es el Estado
que ingresara al ejército. de Medellín. la alegría de su casa. que nos acorrala a las mujeres y la sociedad
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que no le da oportunidad de trabajo a una y en este sentido conservan la esperanza ellas con la muerte o desaparición de sus hijos cepcional. Se puede afirmar, que quienes
mujer mayor de veinticinco años, también los también murió su sexualidad.
y tienen un proyecto futuro. Sobre las escuchan, apoyan y se arriesgan a promo-
paramilitares que amenazaron a mis hijos..” . “...no tengo compañero, a veces me
Mujer de Medellín. madres que han enterrado o tenido que siento sola pero no estoy pensando en eso, ya ver una transformación social que impli-
vivir con la desaparición de sus hijos, no hablo casi con mis hijos de sexualidad...” que cambios en la vida de las mujeres, son
“... pienso que los responsables eran pesa un signo de fatalidad, desconcierto Mujer de Medellín. personas admiradas.
bandas vinculadas al narcotráfico que hoy
están vinculadas al paramilitarismo...”. Mujer
y resignación, pues ya no saben cual es “... a este nivel mi vida ha cambiado
de Medellín. su sueño o piensan que aunque les gus- mucho pues antes yo era más tranquila y En lo relativo a los sueños sobre el lugar donde
taría multiplicar en su comunidad lo que ahora estoy a la defensiva. La sexualidad se vive hay diversas respuestas, mientras unas
“...pienso que los responsables son han aprendido, eso es imposible por las ahora es más para mi un asunto para guardan la esperanza de que las personas no
lideres de la comunidad que deseaban, y compartir lo que he aprendido por mi vida y
quizá aún, aplastarme a mí por no ceder a sus circunstancias actuales de su propia vida las capacitaciones, hablo con mis hijos sobre se tengan que desplazar y puedan trabajar,
presiones o caprichos, la policía y la comunidad (desplazamiento y resentimiento). enfermedades, embarazos, edad adecuada y reclaman una actitud diferente y sueñan con
que se quedaban a veces pasivas frente a lo que el uso del preservativo, pero no la pienso en una transformación colectiva que frene la
pasaba dejando que otros actores tomaran el términos personales, como para mí...“. Mujer
Después de la experiencia de conflicto, la violencia de procesos económicos que hacen
control...”. Mujer de Medellín. de Medellín.
vivencia de la sexualidad se afectó y para del sujeto un siervo del consumo; otra parece,
entender el proceso es necesario hacer dis- con el conflicto y la muerte de su hijo, haber
Llama la atención que se identifique a la tinciones entre las más jóvenes sin hijos y Los líderes del barrio son los líderes de perdido hasta la capacidad de soñar.
comunidad, los líderes y jóvenes como las mayores que son madres. Las primeras bandas vinculadas a paramilitares, aún
responsables del conflicto, pues ello evi- han ganado confianza, en especial por su controlan la vida de la gente del barrio, “...que se instalen referentes de vida y
amor, que disminuyan el consumo y el valor dado
dencia la forma como éste se ha infiltrado participación en grupos de mujeres y su for- el manejo del territorio y lo permitido y a la apariencia, que se instale una vida más justa y
en la cotidianidad afectando la vida pri- mación personal; esta confianza se expresa prohibido, pero se acentuó el control so- en armonía con la humanidad y la naturaleza…”
vada de los sujetos, haciendo que la vio- en que hablan del tema con sus parejas y bre el cuerpo de las mujeres, pues inter- Mujer de Medellín.
lencia se convierta en el paradigma para en las organizaciones a las que pertenecen, vienen en cómo se visten, cómo actúan e “... que se despierte la conciencia de la
la resolución de los conflictos. Es notable no tienen reparos en poner en palabra las influyen mucho en la vida cotidiana. Las gente y que no sea tan vendida…”. Mujer de
la queja de las mujeres sobre el abandono experiencias, inquietudes, insatisfacciones mujeres siguen reconociendo a grupos Medellín.
estatal, pues se sienten sin oportunida- y sensaciones, se están preguntando sobre ilegales como líderes de sus barrios y de- “… que la gente pueda vivir tranquila
en su propia casa y pueda trabajar...” Mujer de
des y en consecuencia, atrapadas entre la los vínculos entre autoestima, afecto y nuncian cómo su poder se ha extendido Medellín.
violencia, la pobreza y el desamparo. Si- sexualidad; piensan que la relación con sus hasta el cuerpo y autonomía femeninos. “... ahora estar en la comuna es como estar
tuación similar viven los jóvenes quienes madres ha cambiado pero no lo suficiente muerto en vida. No espero nada del lugar donde
no tienen en el presente garantías para pues aunque toleran más a sus novios, aún Sobre la persona que más admiran se vivo...”. Mujer de Medellín.
desarrollar su futuro. prevalece el silencio sobre muchos aspectos. presentaron algunos cambios; por ejem-
Pareciera que para las jóvenes el principal plo, empezaron a admirar a otras mujeres El concepto que tienen las mujeres sobre sí
En lo relativo a los sueños que tienen en efecto del conflicto en la sexualidad es la por su liderazgo, por atreverse a soñar mismas en el conflicto evidencia que la auto
la actualidad se presenta un horizonte mayor relevancia que se le da al momento, y proponer una relación más armoniosa representación se nutre de elementos perso-
diverso en el cual persisten los deseos de pues el futuro es incierto. con la vida y la naturaleza; algunas ad- nales, culturales y sociales en los cuales se
ayudar a la comunidad acompañados por miran a políticos por haber escuchado intercalan posiciones y reflexiones, en espe-
los anhelos de viajar, si bien las mujeres Las mujeres madres después de haber sus demandas y haberles brindado apoyo, cial las madres oscilan de víctimas y respon-
enterrado o no saber nada de sus hijos, no
más jóvenes quieren seguir estudiando piensan en la sexualidad, pareciera que para señalan su calidad humana como algo ex- sables, a otra vez ser víctimas.
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“No apostarle a la guerra, no estoy de de las armas; cada una expresa su recelo y visto morir, han tenido que enterrar, han formando la idea de que Medellín es el cen-
acuerdo con el conflicto armado, ni con la
molestia con la presencia de grupos arma- buscado a alguien sin resultados durante tro del país, brindando oportunidades a las
eliminación del otro por su diferencia lo cual
es una forma que se instala desde lo simbólico dos, los descalifican moral y socialmente. años, han sido culpabilizadas sin funda- personas que se quieren salir del conflicto,
y los discursos, pero también estar en un mento y cada día aumentan las estadísticas con la escucha y la razón, creando espacios
barrio de conflicto como el mío me permitió “Unos obedecen ordenes, otros están de mujeres violadas en la ciudad. para el diálogo como una responsabilidad
reflexionar y reafirmar mi oposición y apoyo a convencidos de su acción y representan la
la resolución pacífica, reflexiva y no violenta” injusticia del país, son los guerreros ignorantes
de todos. Se identifican aspectos cultura-
Mujer de Medellín. que quieren homogeneizar eliminando la El Estado fue reconocido agente en el con- les, sociológicos, económicos y se resalta la
diferencia, afectan la cotidianidad porque flicto y no esperan nada de él. Las respues- responsabilidad compartida y la confianza
“Lo sufría y lo generaba, estoy muy a le quitan felicidad, pues le juegan a una tas hablan de la insatisfacción femenina para brindarle una oportunidad al otro.
la defensiva y no entiendo su razón de ser. De vida superficial y le apuestan a referentes de
niña era observar y permanecer en silencio violencia, matan los sueños y la esperanza”. con el desempeño estatal, reclaman una
y ahora discuto e implemento formas de Mujer de Medellín. distribución justa de los ingresos, acuerdos 2.2.4. Resistencias de las mu-
resistencia activa. Víctima de la violación de humanitarios, honestidad en las institucio- jeres de Medellín
los derechos y de la libertad. Pensaba que yo “Dañan la sociedad y nos quitan
nes y presencia en los lugares de conflicto.
era la del problema porque era desobediente, la posibilidad de vivir y quedarnos
me gustaba la calle y la libertad de actuar tranquilos en un lugar, los he visto tirando Todas, pese a su pesimismo, en diferentes Las respuestas de resistencias son
con mis amigas y amigos, ahora soy víctima”. vicio (consumiendo sustancias ilegales), respuestas, mencionaron la necesidad de la variadas van desde continuar apostándo-
Mujer de Medellín. disputándose la cabeza de un joven y ayudaron negociación. le a la vida, participar en organizaciones
a que mataran a mi hijo”. Mujer de Medellín.
barriales y en el movimiento de mujeres,
Antes de vivir una experiencia de violencia “No espero nada porque a veces no fortalecer la recreación, los sueños y la
“Son un perjuicio, una lacra que ni
generada directamente por el conflicto, ellos mismos saben a qué están jugando, nos
tiene la capacidad por ser cómplice de lo que
capacitación de la comunidad en general
cada una pensaba que era “peleas”, que no pasa. Del Estado no creo en nada, pero voy a
hacen abandonar las tierras. Nos dividen y hacer parte de acciones orientadas hacia
hacerme unas ilusiones”. Mujer de Medellín.
tenía la magnitud de ahora. El concepto aplastándonos, nos hacen dar miedo atacando
también con psicología, cogen la gente con el respeto de los derechos humanos. Pero
estaba vinculado a una situación más bien verbo barato para que digan cosas en contra
“El Estado podría intentar que en también, el silencio se convirtió en una
de mediano alcance y de resolución en el cada lugar donde hoy hay conflicto no haya
de otras personas para salvarse a sí mismos,
ningún actor armado y se necesita que haya forma de resistencia, pero la más impor-
mundo privado y personal. Después de cualquier persona puede ser enemigo y pagar
un ejército y una policía honestos”. Mujer de tante fue el nexo con O.N.G vinculadas
vivir una experiencia violenta generada por lo que no ha hecho ya sea con la vida o
con una detención,.mienten, estafan, roban y
Medellín. a mujeres, derechos humanos y jóvenes,
directamente por el conflicto, es claro su compran conciencias”. Mujer de Medellín. lugares en los cuales se ha brindado capa-
carácter social y la forma como se encuen- El llamado común de las mujeres en rela- citación en cada área y se ha fortalecido
tran inmersas en él, a pesar de su voluntad. Los grupos armados les generan diferentes ción con los grupos armados es a tomar el respeto, la resistencia y el liderazgo
También es claro el hecho de que ninguna temores: que las maten o asesinen a alguien conciencia, entonces, se puede pensar que
mujer lo legitima. que aman, en general que maten, que las representan a los grupos armados como Como formas de resistencia reconocieron
hagan volver a pasar por la muerte de un asociaciones de sujetos sin conciencia. En tanto en el espacio público como priva-
Los conceptos de cada una sobre los gru- hijo, que las violen porque a jóvenes del ba- las respuestas algunas expresaron su pesi- do el silencio, pero también la acción y
pos armados son variados y van desde la rrio les ha pasado, que desaparezcan a un mismo en relación con los grupos trans- el fortalecer valores como los religiosos.
sanción hasta el buscar algunas explicacio- ser querido y no se vuelva a saber nada de formen su acción y abandonen las armas. Algunas afirmaron que no identificaban
nes. En ningún concepto hay una valora- él, que digan y hagan cualquier cosa pues Consideran que el conflicto en Medellín, ninguna resistencia diferente al silencio,
ción positiva de los grupos armados y en no tienen conciencia. Cada una expresa se debe resolver negociando, recuperando otras hablaron de acciones colectivas como
consecuencia se da una reprobación al uso temores fundados en lo empírico pues han espacios desde lo emocional y físico, trans- semanas culturales, denuncias, proclamas,
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marchas por el amor a la vida, desplaza- la policía estaba entrando a matar a los La gran mayoría aún tiene ilusión y le reconocen como proveedores “eran muy
jóvenes en el barrio, me motivo la muerte de
miento intra urbano, fortalecimiento de apuesta a la vida, están ahí, cada rostro es la dejados con la familia” o porque quedaron
tantos jóvenes trabajadores y sanos” Mujer de
los lazos familiares y de la solidaridad. Medellín. promesa de una voz y una ilusión. Mujeres viudas, en la primera circunstancia, expli-
Formas de resistencia que oscilan del si- que fusionan su diferencia a favor de una can que en ocasiones los padres no respon-
lencio a la denuncia pasando por el aban- “Sentí que tenía que actuar ante el acción civil enarbolando su deseo de trans- dían con su función por desinterés, por
conflicto cuando empecé a ver que las mujeres
dono de todo lo querido. Pese al carácter jóvenes se estaban involucrando de una forma
formación. Diferencia femenina que acoge abandono o porque se gastaban el dinero
colectivo de la actividad, las mujeres dicen tan directa a los combos, me motivó la decepción a la otra, haciéndola parte de la ilusión. en otras actividades.
que existen riesgos para quien denuncie de ver que las mujeres que siempre hemos estado
en el mundo de lo afectivo y somos agentes de “...como mi papá era liberal, él tenía
o acometa alguna resistencia. Cuando se
socialización y en cierta forma las personas 2.3. Palabras, representa- muchos enemigos que lo buscaban para
habló de las resistencias femeninas el ho-
rizonte se amplió.
que vinculamos, de un momento a otro somos
agentes de violencia y conflicto armado”. Mujer
ciones y resistencias de las matarlo, entonces a mi mamá le tocaba
quedarse sola con nosotros y a ella le tocó
de Medellín. mujeres del Putumayo trabajar muy duro para ayudarlo, de pronto
“Las mujeres, como madres, se enfrentan mi papá era un poco dejado y le tocaba a
o hablan con los líderes del barrio y salen a lo “La situación que me llevó a actuar ella hasta hacer empanadas...”. Mujer del
fue cuando los paramilitares nos echaron y
2.3.1. Tiempo cronológico
público para protestar o ser intermediarias, Putumayo.
muchas identifican la organización como desaparecieron a mi familia, me motivó verme niña
una forma de resistencia. Protestar, hablar, sola y con necesidad de saber qué había pasado
con mis parientes desaparecidos. Mujer de La autoridad y las decisiones eran toma-
no más guerra, no más violencia”. Mujer de En la infancia, las mujeres que
Medellín. Medellín. das en la mayoría de los casos por una fi-
narraron su historia, vivieron el primer
gura masculina (padre, abuelo, padrastro,
“Las mujeres hemos resistido “Sentí que tenía que actuar cuando desarraigo de su tierra. Provienen de
hermano mayor), cuando ésta faltaba, las
uniéndonos para poder soportar la situación, empezaron las acciones militares en el barrio, familias campesinas e indígenas, mani-
conformamos una red de comunicaciones me motivó ver que los niños estaban sufriendo decisiones podían ser tomadas por las mu-
fiestan en forma permanente a través de
basada en el teléfono y hemos enfrentado a los y que el conflicto estaba afectando a la sociedad jeres.
violentos diciéndoles que respeten el barrio y civil y no a los combatientes, salimos a protestar la palabra y el llanto la idealización de la
que no traigan muerte, dolor y robos”. Mujer y muchos niños y civiles murieron”. Mujer de tierra de la que tuvieron que salir cuando “… mi papá tenía más autoridad
de Medellín. Medellín eran niñas o adolescentes, porque ya no porque él quería que lo que se diga eso sea...
había espacio suficiente para cultivar o era más autoritario... uno no podía decir
Los tres significantes claves de la nada, no podía reprochar nada..” . Mujer del
resistencia de las mujeres en Medellín parecen Las formas de resistencia femenina surgen de porque sus padres creyeron encontrar en Putumayo-
ser: palabra, unión y organización; en este la necesidad de actuar ante la barbarie padeci- el Putumayo la oportunidad para salir de
sentido, se han transformado en relación con
da por varones, mujeres, niños y niñas; no ha- la pobreza. “... las decisiones las tomaba mientras
la socialización tradicional que las empujaba a mi papá vivió, mi papá. Aunque yo sé que
no ponerse de frente y enfrente de su palabra, blan de una reacción afincada exclusivamente le consultaba mucho a mi mamá, ellos
“...cuando ya nosotros, por falta de
a estar en bandos opuestos luchando por el en el efecto personal, sino en la situación del terreno nos tocó trasladarnos para acá en hablaban, Después de que él murió, si ya le
reconocimiento masculino y a no emprender barrio, en cómo hacer frente a la impotencia búsqueda de que hubiera más terreno para tocaba a mi mamá y mi hermano mayor”; “...
acciones públicas con impacto social. Las después de que ya pasamos de ser niños, él
motivaciones que las llevaron a actuar son
por el hecho de que los jóvenes mueran, de poder sobrevivir...” Mujer del Putumayo.
siguió trabajando (hermano mayor) como si
diversas. que las jóvenes se involucren en el conflicto él hubiera sido el hombre de la casa. Que pues
“Sentí que tenía que actuar ante el y que el futuro desaparezca ante los propios En todos los casos y en muchas opor- él era el que trabajaba, ya a mi mamá ya no la
conflicto por la muerte continua de muchos ojos. Policía, paramilitares y combos aparecen tunidades, a sus madres les tocó asumir dejaba trabajar, sino que, mi mamá y yo nos
amigos, me motivó la impotencia, el dolor y quedamos en la casa cocinando y haciendo
como los principales agentes ante los cuales se la responsabilidad del hogar y el apoyo
la transformación negativa del barrio. Sentí todo lo de la casa, lavando y él era el que se
que tenía que actuar ante el conflicto cuando deben implementar acciones de resistencia. económico porque sus padres, aunque los entendía con los trabajadores, y animales de
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afuera, y el era el que determinaba, tal cosa Los conflictos familiares se presentaban, “... mi mamá sufría calladamente, porque “... Me gustaban más los consejos de mi
vamos a hacer hoy, tal cosa en la semana y así, mi mamá no era una de esas personas que fuera mamá porque mi mama me los daba no como
en todos los casos, por distintas formas de
el era el hombre de la casa, yo lo considero agresiva ni fue altanera ni fue grosera, ella sufría regaño sino como consejos, en cambio mi papá
como la persona que determinaba todo allá...”. asumir el poder al interior de las familias, todas sus consecuencias en silencio..”. Mujer del si era más drástico... pero como bravo a toda
Mujer del Putumayo. por los padres celosos, autoritarios y los Putumayo. hora regañándonos...”. Mujer del Putumayo.
excesos con el alcohol. Las peleas entre
: “...yo le decía en el caso en que pues
En todos los casos se asumían roles y je- hermanos y hermanas también son comu- los hombres se iban a seguir aprovechando de
En el contexto social, la afectividad de las
rarquías de las familias tradicionales. El nes, especialmente porque ellos querían nosotras... Me llegaron a querer abusar de mí.... niñas estaba dada por su relación con otras
rol de las madres era atender a los hijas-os imponer sus criterios. Desobedecer las or- Yo sentía que ella (mamá) se sentía mal pero ella niñas y niños, específicamente en el espa-
y esposo, darles afecto, realizar las labores denes de las personas mayores generaban nunca me decía nada, ella no…Ella guardaba cio escolar que es el único en el que podían
silencio, ella no me decía nada...” Mujer del
domésticas, tejer y criar animales domésti- conflictos entre padres-madres e hijas-os. Putumayo compartir actividades con los varones, y a
cos para ayudar en el sustento familiar, en través de los juegos, que siempre eran di-
estas labores educaba a las hijas, quienes “...Un día que él llegó borracho, había tenido “... y me pegó con rejo me dio una pela ferenciados. Todas mencionan a sus maes-
discusiones con mi mamá y nosotros no sabíamos, durísima eso me dejo moreteada, yo ya estaba
debían apoyarla en la crianza de los her- cuando llega a buscarla y la busca por toda la casa,
tras, como mujeres que aunque las casti-
como grandecita yo tenia como unos 15 años yo
manas-os menores. Los padres trabajaban creo que llevaba un cuchillo en la mano, él estaba no salía porque me daba pena que me miraran gaban, les daban afecto y las influenciaron
en su mayoría en labores agrícolas y los súper... así, pero diga, alocado. Verlo en esa acción los pies morados”; “...los fuetazos que él le daba a en su niñez. Las condiciones culturales no
hijos debian apoyarlos en estas tareas. Los ¡uhf! Para mí fue una imagen terrible. Y desde allí uno, con uno solo que le dieran era para sacarle permitían que existieran demostraciones
yo le perdí como se dice el amor y sentía mucho verdugones de sangre a uno en los pies...” Mujer
varones no realizaban tareas de la casa, sin miedo...”. Mujer del Putumayo. del Putumayo.
de afecto entre el padre y la madre o hacia
embargo algunas veces las niñas debían los hijos-os. No recuerdan que se dieran
ayudar también en el campo. Solo una de ellas plantea que el mal genio La madre juega un papel esencial en la di- demostraciones de afecto entre la pareja.
de su madre era lo que generaba conflictos. mensión afectiva, es ella quien a través de los
“... la pobre... mi mamá tenía muchas “...mi papá y mi mamá no se
funciones, le tocaba estar pendiente del marido, Las infidelidades del padre eran también consejos, la educación y la permanencia físi- demostraban cariño entre ellos dos, nunca les
de los hijos, se puede decir que de todo, porque mi motivo de conflicto. Y el silencio de las ma- ca, generaba lazos de afecto entre la familia. conocí una caricia a ellos, mi papá era muy
papá fue un poquito dejado con nosotros”. Mujer dres frente al conflicto es una constante en Y a pesar que ésta, en la mayoría de los casos apático, ellos no se demostraron ese amor que
del Putumayo. una pareja debe tener, nunca lo vi...”. Mujer
todas las familias, motivado por el temor a era quien ejercía el castigo físico, por miedo al del Putumayo.
“Me tocaba lavar, cocinar, lavar loza y dejar la agresión de los esposos o por el temor a padre el vínculo con las hijas era muy grande.
arreglado todo... los oficios de los varones eran de quedarse solas. Asimismo, cuando aparecían Pero aunque se reconocía el vínculo fuerte
afuera nada más, a ellos no les enseñaban a hacer los padrastros, los conflictos se presentaban con las madres, se le reprochaba su silencio Los sueños de la niñez están, en todos los
nada de lo que era adentro de la casa porque eso
era de las mujeres... ellos trabajaban boliando
por intento de abuso sexual hacia las hijas, y resignación frente al abuso sexual por parte casos, asociados a la posibilidad de estu-
machete y cuando no pues descansando... nosotras sin que la madre interviniera. Las mujeres del padrastro o por el maltrato físico y psico- diar para ganar más poder al interior de la
nunca descansábamos...” Mujer del Putumayo. afirman que la forma más común de resol- lógico que ejercía el padre. familia y la comunidad: ser profesora, en-
ver los conflictos en su vida de infancia, era fermera, actriz, siempre un quehacer que
“... en esa época la función de mi mamá,
pues, era cocinar, atender la casa, atender los el castigo físico. “ ... mi mejor recuerdo de mi niñez era está ligado culturalmente a la función de
obreros y atendernos a nosotros y también mi mamá, porque mi mamá me enseñó a ser ser mujer, pero que al mismo tiempo tiene
participar en algunas reuniones de la comunidad... “... mi papá no, a mi mama no la juiciosa, una mujer buena, y la mamá es mamá un importante reconocimiento social, que
las funciones de mi papá, en ese tiempo eran, maltrataba en golpes pero de pronto con y el papá se encuentra, papá es cualquiera...
otra mujer si, únicamente mi papá conseguía por que si así es, papá es cualquiera y ya, así genera poder en las comunidades rurales.
llevar a la casa lo que necesitábamos, lo que nos
hacía falta, en cuanto a la comida..” Mujer del mujeres por ahí, y de todos maneras mi mamá es, mamá no se encuentra detrás de la puerta Como mujeres soñaban con ser madres
Putumayo. no le iba a gustar...”. Mujer del Putumayo. y papá cualquiera...” Mujer del Putumayo. y fue el único sueño que la sociedad y la
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cultura les permitió tener, los sueños que “... hacerse respetar es no dejarse burlar para ellas algo reciente, no hay recuerdos “...la persona más importante era el
de los hombres, porque a veces los hombres presidente de la Junta comunal que siempre era
rompían con ese mandato no fue posible específicos de la violencia liberal - conserva-
quieren utilizar a la mujer, solamente para tener hombre porque prácticamente en ese tiempo lo
realizarlos y siempre afloró el llanto cuan- las relaciones sexuales, o lo engañan a uno, le dora de mediados de siglo. Además de la es- que era a las mujeres no nos tenían en cuenta
do recuerdan que: prometen a uno que se van a casar, que lo van cuela y algunos lugares de recreación como para nada..”. Mujer del Putumayo
a apoyar mientras se burlan –decía mi mamá- los ríos, las niñas participaban de manera
“Ninguno de los sueños se cumplió. mientras se burlan y ya no la voltean ni a ver,
lo que hacen es desprestigiarla y la que lleva del
permanente en las actividades de la iglesia, Los conflictos comunitarios se presentaban
Mi sueño era ser algo importante, ser alguien
en la vida... prácticamente no fue posible, los bulto es siempre la mujer no?, tiene que responder esta condición de manera conjunta con una generalmente por riñas entre los varones
sueños todos fueron perdidos”. Mujer del de todas formas sola...” Mujer del Putumayo. rigurosa educación religiosa en la familia, de la comunidad cuando ingerían alcohol,
Putumayo influyó fuertemente en el proceso de forma- algunas veces por la mala utilización de los
“... ser niña mala era ser grosera,
desobediente y acostarse por allí con el que
ción de la personalidad y el carácter de las recursos que llegaban a la comunidad.
La sexualidad es un tema que no se toca primero le proponga”. Ser una niña buena “...era niñas, volviéndolas mujeres sumamente re-
en casa, sin embargo en las prohibiciones prácticamente no tener novio, solo estar en la ligiosas La relación con las personas adultas “...los hombres eran peleones por esas
casa y no más que hacer los oficios...” Mujer del borracheras que se pegaban con guarapo, no
que se hacen a las niñas, está implícito se daba en esos espacios: actividades, festi-
Putumayo. faltaba, si iban a festivales que salieran peleando,
y siempre asociado el concepto católico vales y eventos programados por la iglesia y peleaban a garrote y a piedra...”. Mujer del
de la virginidad como el aspecto de dig- ocasionalmente con las vecinas. Putumayo.
nidad más importante para las mujeres, El cuerpo de las niñas es invisibilizado por
especialmente dadas las condiciones de ellas, sus familias, la sociedad y la iglesia. “...en la comunidad se peleaban a veces
“...en ese tiempo no había violencia, ni nada, ni porque algunos líderes serruchaban con los
pobreza en la que viven, ya que la virgi- El cuerpo solo aparece en la dimensión de
se conocía violencia, todos dormíamos afuera recursos…”. Mujer del Putumayo.
nidad se convierte en el único tesoro que la sexualidad en el que debe ser cuidada su
porque nos hacia calor adentro, ahora ya no
las mujeres pobres pueden tener. De igual virginidad. Ninguna de ellas hace mención
se puede dormir afuera, no se compara como La organización y la participación comuni-
manera, la calificación de niñas buenas al cuerpo en términos de gustos o cuidado
ahora tanta violencia”. Mujer del Putumayo taria no eran acciones sociales que se impu-
o malas, está asociada directamente a la del mismo, La única referencia al cuerpo
sieran con fuerza en ese momento y en esos
manera como éstas viven su sexualidad. la hacen cuando manifiestan que cuando “...era una tranquilidad que uno podía
estarse hasta las cuatro, cinco, seis de la mañana lugares rurales del sur del país, ninguna de
Las niñas buenas son de la casa, no tienen se enfermaban sus madres las curaban con
todo una noche y a uno le pasaba nada, era ellas hacía parte de organizaciones infantiles
novio y no se embarazan, las niñas malas remedios caseros. tranquilo porque la gente no se moría así matada o juveniles, nuevamente, los espacios de par-
andan en la calle, tienen novios, son al- o asesinada sino que en ese tiempo la gente
“...me infundieron bastante sobre el moría por enfermedades del cuerpo...”. Mujer
ticipación se reducían para las mujeres y las
gunos de los mensajes que les son dados cuidado del cuerpo humano frente a un hombre del Putumayo. niñas, a las actividades de la iglesia. El único
a las niñas, como una forma no solo de o sea que uno no debía ser deshonesto que uno espacio de participación y organización que
control de la sexualidad y la afectividad no debía entregarse rápido a un hombre que “...a veces en navidad, en las novenas que
luego quedar en embarazo, sobre todo eso fue
recuerdan era la Junta de Acción Comunal,
sino también de reproducción de la cul- los vecinos acostumbraban a hacer en los velorios,
para mí lo que me ha marcado hasta ahora...”. así era donde yo más iba y participaba...”. Mujer
pero estaba reservado para los varones:
tura patriarcal, la cual considera que la Mujer del Putumayo. del Putumayo.
sexualidad de la mujer no existe. En este “No pertenecía a ninguna organización
sentido, consideran que la presencia del comunitaria porque en ese tiempo, en esa época
Todas las mujeres vivían en zonas rurales, La autoridad comunitaria estaba siempre re- no había nada de organización”. Mujer del
padre es importante porque permite ejer- que idealizan por la conexión con la tierra presentada en una figura masculina (alcalde, Putumayo.
cer vigilancia y control sobre el cuerpo y la ausencia de violencia. Hay total coinci- inspector de policía, presidente de la Junta
de las mujeres de la casa y mostrar a la dencia en la tranquilidad que había en sus Comunal, sacerdote) y las instituciones más “En ese tiempo no se hacían esas
organizaciones que se hacen ahora que uno
comunidad que deben respetarlas. épocas de infancia, el conflicto armado es importantes son la Iglesia y la escuela. hace grupos...”.. Mujer del Putumayo
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“...en ese tiempo no había organización, “...el sacerdote Alcides Jiménez, me durante la infancia, con la diferencia que momento están orientados a la posibilidad
pero cuando iba el padre a la misa yo era había mandado un mensaje con un hermano
ellas dan gran importancia a la educación de sacar adelante a sus hijos e hijas (en tér-
la primera que estaba allá...”. Mujer del que si yo quería trabajar con él en un programa
Putumayo. que tenía acá en el Putumayo y entonces de las niñas y al trabajo de las hijas. Los hi- minos educativos, sociales y económicos).
quería que yo me viniera a trabajar...”. Mujer jos mayores deben aportar económicamen- Mencionan el afecto que tienen hacia sus
del Putumayo. te a la familia, una vez empiezan a trabajar hermanas-os, y fundamentalmente una
En términos generales, durante su ni-
ñez, las mujeres del Putumayo hacían “...yo trabajaba con el padre Alcides y
y asumen de inmediato espacios de poder enorme gratitud hacia sus madres. Es evi-
parte de familias patriarcales, en las gracias a él empezó a surgir la organización en la toma de decisiones. Los valores fa- dente su condición de dadoras de afecto y
que sus madres y ellas mismas eran comunitaria y de las mujeres...”. Mujer del miliares se fundan en la educación católica protección a sus familias, importante lugar
Putumayo. y la virginidad continúa siendo importante en sus afectos, ya que se sienten, de alguna
propiedad de los padres y esposos. Los
roles tradicionales asignados a varones para la formación de las hijas. manera, valoradas y reconocidas en lo que
La mitad de las mujeres manifestó que piensan y hacen, específicamente dos de
y mujeres, permitían enormes desequili-
ambos trabajaban y aportaban económi- “...yo si le hablo a mis hijas que se hagan ellas que tienen una vinculación importan-
brios de poder al interior de las familias, respetar la dignidad de la mujer, que estudien
camente al hogar, y por lo tanto algunas te con las organizaciones de mujeres creen
reforzando el papel autoritario de los y no se embaracen...”. Mujer de Putumayo.
decisiones se tomaban de manera compar- que en ese espacio son valoradas por las
varones. La violencia intra familiar era
tida. Una de ellas tomaba las decisiones de “...los adolescentes hoy en día deben compañeras. No mencionan la existencia
condición permanente en la resolución
manera conjunta con su hijo mayor, y las ser educados para tener una relación sana, de expresiones de afecto con sus parejas.
de los conf lictos, a pesar de ello, dicen hermosa y querida por Dios, o sea la
otras dos tenían esposos autoritarios que
que “la violencia no existía en ese tiem- responsabilidad mas que todo que los niños
tomaban todas las decisiones de manera y las niñas tengan una relación a su debido “... allá en el pueblo yo me mantenía
po”, es decir, para ellas este término solo cuidándolo y protegiéndolo para que no
unilateral. Lo anterior significa una fuerte tiempo y con mucha responsabilidad...”.
se acuña a la violencia política. Parece le pasara nada a mi esposo... “. Mujer del
asociación entre la provisión económica y Mujer del Putumayo.
ser que las mujeres no tienen una noción Putumayo.
el poder al interior de las familias, las mu-
clara de la violencia estructural. No todas mencionan las razones de los
jeres que aportaban económicamente en “... yo soy la mujer más feliz del mundo
el sostenimiento familiar tenían mayores conflictos familiares durante esta etapa de con mi mamá porque ella nos supo crecer
2.3.2. Tiempo cronológico sus vidas. Algunas hacen alusión a proble- sola...”. Mujer del Putumayo.
posibilidades de tomar decisiones. Sin em-
mujer adulta, antes de la si- mas de infidelidad y dejan entrever com-
bargo, en todas prevalece el rol de madres “... lo más importante es mi mamá
tuación directa de conflicto portamientos de maltrato físico y verbal
cuidadoras de los hijas-os, el esposo y el porque ella me enseñó a ser una mujer
hogar, fortaleciendo los procesos de doble por parte de ellos buena...”. Mujer del Putumayo.
Familias conformadas por ellas, sus
y triple jornada (empleo, comunidad, ho-
compañeros, hijos e hijas y en algunas “... mi esposo se fue un año de vacaciones
gar) para las mujeres, sin que ellas siquiera
ocasiones yernos, nueras y nietos-as. con otra muchacha...”. Mujer del Putumayo, No hay suficientes referencias a la dimen-
se lo cuestionaran.
Antes del conf licto, a excepción de sión sobre la sexualidad en este momento
“...me maltrataba, al trabajar me dejaba
una, eran mujeres que vivían con sus todos los oficios a mí, ha sido muy violento...”. de sus vidas. Lo único que mencionan
compañeros, cuatro de ellas en zonas Las mujeres que trabajaban en el hogar, Mujer del Putumayo. son los consejos que dan a sus hijas para
rurales del Putumayo y una en el casco realizaban adicionalmente labores agrícolas que “se hagan respetar de los hombres” y
urbano. Antes del conf licto, muchas de y cría de animales domésticos, que no son La dimensión afectiva está muy marcada la participación en algunos talleres sobre
ellas y sus compañeros eran líderes y reconocidas por ellas o sus familias como por el afecto y el amor que ellas profesan sexualidad que se han dictado en el pues-
liderezas comunitarios-as, formadas-os aporte económico. Los roles de hijos e hijas hacia sus hijos e hijas, con quienes com- to de salud, en este sentido se traslada la
por la iglesia. son similares a los vividos en sus hogares parten más tiempo. Sus sueños en ese importancia de la virginidad a los valores
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de las hijas. El cuerpo continúa siendo in- tenía que tomar decisiones frente a alguno plazados por los paramilitares. Las cinco de la responsabilidad que sienten por
visible para ellas, no aparecen patrones de de los bandos. mujeres son víctimas del desplazamiento proteger y salvaguardar a los otros-s,
belleza que las haga sentir bien o mal con forzoso y se consideran cabeza de familia, trabajan por salarios y condiciones pre-
respecto a su cuerpo, posiblemente por las “... por acá siempre estuvo la guerrilla, pues aunque dos de ellas aún viven con carias, lavando ropa, en la galería, ven-
que controlaba todo y a uno a veces le tocaba
condiciones de pobreza y marginalidad hacer lo que ellos decían, pero cuando llegaron
sus esposos estos no han conseguido tra- diendo puerta a puerta.
rural en la que la mayoría de ellas vive, las las Auto defensas, todo se puso con mucha bajo y a las mujeres les ha tocado asumir
hace distantes de los esquemas de belleza violencia...”. Mujer del Putumayo. la responsabilidad económica y afectiva “... por lo menos llevamos algo de comer a
del mundo occidental masificado desde los de la familia durante el desplazamiento. la casa, lo importante es no dejar morir los
medios. Solo una de ellas, menciona la im- Tener la tierra para cultivar y/o la casa pro- hijos de hambre...”. Mujer del Putumayo.
portancia de tener un cuerpo sano, porque pia para vivir es una importante condición Es claro que las mujeres desplazadas no
es lo que le permite trabajar: para la felicidad de las mujeres que narra- sólo son las sostenedoras de las estrate- “...porque acá en el pueblo se tiene que tra-
ron su historia, pues es esto lo que genera gias del desplazamiento, sino que deben bajar duro, uno se jode mucho, por ahí la-
“... yo nunca me he enfermado, y por arraigo y opciones de futuro para sus fami- soportar el mayor peso de la supervivencia vando ropa para el arriendo, energía, agua
eso puedo trabajar en lo que sea...”. Mujer del
lias, ya que ellas como colonas han sufrido familiar, redoblando sus esfuerzos para y todo lo demás. En el campo que uno cría
Putumayo.
un primer exilio de su región de origen y tratar de sustentar, en las más precarias gallinas, cría cachamas, pues en esa finca
asirse a lo que la nueva tierra les ofrecía se condiciones, a sus hijos e hijas. Como al- tenia de todo...”. Mujer del Putumayo
Cuatro de ellas ejercían un importante
convirtió en un aspecto importante para la gunas de ellas manifiestan, aunque viven
liderazgo en sus comunidades, antes de
cohesión de la familia. con sus compañeros. No es sólo la responsabilidad económica
ser afectadas por el conflicto; pertenecían
a distintas organizaciones comunitarias la que recae en las mujeres desplazadas, lo
“... tenía una finca muy buena, tiene 8 “...ellos no van a trabajar por una migaja que se quiebra por el desarraigo se funda
mixtas y de mujeres, trabajaban como pro- hectáreas de chontaduro, tiene caucho, son 42 que les paguen, ellos dicen que no tienen por
motoras de salud, promotoras comunita- en pasto braquiaria y bario, gramalote negro qué ir a regalarle el trabajo a nadie..”. Mujer
en los fragmentos de sentido que las mu-
rias y en proyectos de seguridad alimenta- y varias luminosas, tenia bien organizada del Putumayo. jeres pueden sostener como significantes:
ria. El liderazgo, en la mayoría de los casos
la casa... y dejar todo eso es lo más duro...” la memoria, la cultura, la historia de la fa-
Mujer del Putumayo. “Nosotros hemos hecho un análisis y
fue fomentado y fortalecido por la Iglesia. milia, el afecto, lo que les permita ligar su
decimos que las mujeres, en general, somos
Las otras dos compañeras tenían esposos cabezas de hogar cuando somos desplazadas, nueva condición con algunos aspectos de
2.3.3. Tiempo cronológico normalidad que vivían en sus territorios.
que eran líderes en la región. Las institu- cuando tenemos esposos desempleados,
mujer adulta afectada por el cuando son desempleados somos los jefes de En sus “nuevas casas” tienen por doquier
ciones más importantes eran la alcaldía, las conflicto hogar, por la violencia porque nos matan a los
organizaciones y la iglesia, el papel de la aquellos elementos simbólicos que ligan
esposos, por ser viudas y casi siempre porque
iglesia es preponderante en la construcción los esposos no asumen la responsabilidad, así sus afectos con la tierra y la historia que
del tejido social del Putumayo. A pesar de De las cinco mujeres del Putumayo, de sencillo, porque ellos dejan que la mujer les fueron despojados, una forma de re-
sea la que busque la forma de sobrevivir. Eso, sistencia a perder la memoria aunque sus
que siempre hubo presencia de algún actor a dos amenazaron sus esposos los para- ellos son más tranquilos, las mujeres nos
armado, podían hacer sus vidas tranquila- militares, otras dos soportaron la desapa- preocupamos más y por ese mismo hecho
miradas estén siempre puestas en el fu-
mente, ya que no existía otro actor que se rición de sus compañeros en manos de la nos dejan la carga a nosotras”. Mujer del turo. Pequeñas huertas en los patios que
disputara el territorio, por lo tanto se gene- guerrilla, El esposo y el hijo de una de Putumayo. ayudan al sostenimiento, al recuerdo y al
raba cierto “equilibrio” en las relaciones del ellas fueron asesinados en su casa por los sentir de la tierra; plantas y flores en ollas,
paramilitares, dos hijos y la hermana de Las mujeres, como parte de los esque- canastos, latas viejas y frascos de colores de
actor armado y la comunidad, pues esta no
una de ellas fueron amenazados y des- mas de explotación laboral femenina y diversas formas que adornan sus espacios
se encontraba en medio de dos fuegos y no
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recordando la grandeza de la naturaleza quisiera tener las hijas, protegerlas, pero a “Los conflictos se daban entre todos. En primera instancia, las organizaciones de
veces la situación no le ayuda a uno y por otro Allí unos le echaban la culpa a unos y los
que las rodeaba. Fotos de sus seres queri- mujeres, de desplazados-as y mixtas se con-
lado que cada uno tiene que ser protagonista otros a los otros, bueno, los hijos que bueno
dos desaparecidos o asesinados en aquellos de su propia historia, yo les decía a mis hijas que ustedes por andar metidos en esas vierten en los conductos utilizados por ellas
lugares en donde sería imposible no verlos que a ellas les ha tocado duro...”. Mujer del organizaciones que no se sabe qué; que ahora para mejorar las condiciones económicas, en
de manera permanente. Putumayo nos van a llevar quién sabe dónde a sufrir y este primer momento las reivindicaciones
que los padres que no, que eso ya se vino, que
“... mi hijo es el que más me apoya eso es programado por el gobierno, por los
políticas, no hacen parte de sus prioridades,
Se presentan transformaciones en los porque el ya trabaja... yo hablo mucho con él cultivos… Bueno, eso es una sola discusión aquellas mujeres que han logrado un poco
roles, debido a las nuevas responsabi- sobre lo que hacemos en la familia...”. Mujer y porque pues no lo atienden a uno como es más de estabilidad en el nuevo territorio,
lidades asumidas por las mujeres, pero del Putumayo. debido, lo mandan a uno de un lado para el tienen posiciones políticas frente sus dere-
otro”. Mujer del Putumayo.
no necesariamente en las jerarquías. A “ ...mi esposo a ratos se siente como chos o la guerra, más claras y definidas, sin
pesar de que después del conflicto, por muy indefenso, no sé, como muy nervioso y “Un conflicto grande que tengo ahora embargo todas reconocen que en el espacio
condiciones que las han obligado a ello, pues a toda hora busca la protección mía... las es que mi marido no está, que me he quedado organizativo se sienten “valoradas y respe-
mujeres somos las que más llevamos del bulto, sola... le matan a uno la vida íntima...”. Mujer
participan más en las decisiones, siguen tadas”, generando un vínculo afectivo con
por nuestra sensibilidad y querer proteger...”. del Putumayo.
consultándolas con los esposos o con los Mujer del Putumayo. la organización que las ha apoyado en la re-
hijos mayores. Sus roles de madre y lide- “... él se mantiene malgeniado, ya mi hijo construcción de sus vidas.
resa no solo prevalecen sino que se han volvió pero prácticamente como traumatizado
Los hijos adolescentes o jóvenes tienen era que el no quería hablar, a el le dio un
fortalecido, buscan de manera permanen- mayores dificultades para asumir la con- trauma pero duro, el no quiere hablar, el no
El mayor apoyo afectivo lo encuentran en sus
te la protección de la familia y para ello se dición del desplazamiento, en palabras de quiere salir...”. Mujer del Putumayo. hijos e hijas y en sus madres. Ellas continúan
apoyan en la organización comunitaria. ellas “no quieren arriesgarse al sufrimiento, siendo dadoras de afecto en sus familias aun-
A pesar de que se desdibujan algunos de ellos quieren vivir bien, ellos no aceptan A diferencia de lo que vivieron en su ni- que reconocen que algo se quiebra después
los roles de los varones, éstos continúan, que uno a veces tiene subidas y bajadas, ñez, ellas dicen resolver los conflictos por de la vivencia que tuvieron, que hace que se
desde la sombra, ejerciendo autoridad en cambio a las hijas, ambas desplazadas, la vía del diálogo, aunque reconocen que sientan destrozadas, sin amor y sin sueños;
en la familia. Los roles de las hijas ado- les tocó asumir como padre y madre en la en algunas ocasiones hay situaciones de sin embargo, persisten en la reconstrucción
lescentes o jóvenes se asimilan al de las economía y el afecto. maltrato, lo importante para ellas en los de “lo vital”: la unión de la familia, el cariño
madres, ellas las apoyan en las labores momentos de conflicto, es elegir material entre sus miembros, los valores familiares.
domésticas, estudian, y protegen a la vez, “... los varones de la familia se quejan y simbólicamente, de manera adecuada,
a sus respectivas familias. permanentemente de su condición, pero no “...prácticamente por el conflicto mi
las condiciones que le permitan una con- familia toda se separó, la una para allá la otra
aportan lo suficiente para sobrellevarla o
superarla. Mujer del Putumayo. tinuidad en la historia de la familia, es para acá, otro pues la falta de mi mama que se
“... mis hijas pues también a ellas, les
decir, mantener siempre la normalidad y murió tal vez fue por eso y la otra pues seria
llevar ella la carga psicológica y física que que no se que ya es como vivir una como sin
tocó asumir el mismo papel mío, o sea, asumir Los conflictos familiares se presentan por amor como que ya uno no vive como tranquilo
de padre y de madre cuando los esposos se diversas razones: la inestabilidad económi- esto representa. Es claro ver a través de yo no se como ya a toda hora vive uno como
fueron, ellas les toco vivir las consecuencias los conflictos familiares como hay una
de la economía y cuidado de los hijos que ca que genera problemas con las parejas, el atemorizado...”. Mujer del Putumayo.
llorando por el papá, que ¿dónde está?, que cuestionamiento que hacen los hijos a su exigencia hacia las mujeres para que sos-
tengan la memoria familiar, construyan “...después del conflicto, como esposa me
vamos donde mi papá, que mi papá ¿por qué madre y su padre por la condición en la que sentí pues sola y muy triste con todo lo que pasó,
no viene?, que esto y que lo otro, entonces estabilidades que orienten la senda de sus
ellas y al fin me tomaron el parecer, mamá
viven, el sentimiento de soledad y desarrai- que más, como toda madre el sueño es tener su
usted qué opina de esto, que esto, que hace, go que vuelve irascibles a los miembros de familias, y diseñen nuevos arraigos en el hogar completo, su unidad familiar...”. Mujer del
desconocido territorio. Putumayo.
entonces yo como madre, usted sabe, que uno la familia.
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“... eso queda uno como que no come, son utilizadas como mensajeras de uno u Todas fueron afectadas en algún mo- Todas las mujeres tienen una participación
no duerme, uno se siente destrozado, no tenia
otro bando y posteriormente desapareci- mento por las fumigaciones y expresan activa en la comunidad, hacen parte de las
ningún sueño, no, no podía dormir... todavía
me duele, no me pasa eso, para poder olvidar es das o asesinadas claramente los efectos de las mismas en organizaciones de mujeres, de desplazados
mas peor todavía, tengo muchos recuerdos de mi el cuerpo de las mujeres. El fenómeno y de grupos de la iglesia. Una de ellas ha
hijo, siempre estar viendo las fotos, los recuerdos “...algunas personas nos decían: ‘no de los cultivos de destinación ilícita participado en elecciones populares. Cua-
es muy duro olvidar...”. Mujer del Putumayo. se vayan, a ustedes no les han dicho nada,
cómo que no nos han dicho nada, no nos han
afecta a las mujeres en varias dimensio- tro de ellas tenían importantes vínculos
dicho nada porque no han tocado nuestro nes. En el cuerpo lacerado por el vene- comunitarios en el territorio que habita-
El refugio afectivo está en la religión, pro- cuerpo, pero si tocaron con nuestros hijos no o agredido por el transporte de las ban, el ejercicio del liderazgo no es una
fesan, sin excepción, un enorme amor a que es como un pedazo de la vida y el cuerpo mercancías hacia otros lugares; en las actividad nueva en su quehacer. La parti-
Dios, y consideran que esta condición les de nosotros entonces eso es hacerle algo a
relaciones afectivas con sus compañeros cipación comunitaria está motivada por
da fuerza para soportar su situación. Es nuestra familia...”. Mujer del Putumayo.
o hijos, y en la condición económica. la necesidad de tener mejores condiciones
importante anotar sin embargo, que casi “A las mujeres, cuando las utilizan económicas para sus familias a través de
todas reconocen en las compañeras de la por ejemplo para seducir a otro del bando
proyectos productivos, compra de tierras o
organización, la solidaridad y el apoyo en contrario por ejemplo se han dado casos que “... el cuerpo de las mujeres sí es
las seducen y sacan información y luego las afectado por las fumigaciones, también hay de vivienda. Como se mencionó anterior-
el que se fundamenta el afecto, también matan, hemos visto eso, nos han contado eso mente, las reivindicaciones políticas de sus
muchas afecciones de la piel, y eso genera
sienten que lo que piensan y dicen es re- es triste, nos están utilizando o cuando las muchas alergias y a veces la gente no sabe derechos como mujeres, está presente solo
conocido en este espacio. Los sueños de las utilizan también para transportar ilícitos, por qué, y es porque también a veces les
en algunas de ellas. Las que han logrado
mujeres después de la acción directa del por ejemplo mercancías o lo que se produce ha tocado en las fincas, me contaba por
pienso que todo eso va para los actores ejemplo una amiga que les tocó metersen mayor estabilidad después del desplaza-
conflicto, están relacionados con el retorno armados y luego las utilizan para comprar sus debajo de unas hojas de un ramito porque miento, las que han militado hace mucho
a la tierra, la estabilidad económica para dotaciones, sus cosas”. Mujer del Putumayo. la avioneta pasó por encima bañándoles con tiempo en las organizaciones de mujeres o
ellas y sus familias y el fin de la violencia ese glifosato...”. Mujer del Putumayo.
las que tienen un mayor nivel educativo.
del conflicto armado. El cuerpo de las mujeres es utilizado en
ese binomio conflicto armado - cultivos “Las fumigaciones también nos 2.3.4. Resistencias de las mu-
“... yo creo que la acogida que nos han
de destinación ilícita, para transportar ha afectado, por eso también hubo jeres del Putumayo
hecho de todas formas aquí en Mocoa han
sido las amigas, de pronto también unos la droga procesada, convirtiéndolas en el desplazamientos, la gente también se
eslabón más débil de la cadena y aprove- desplazó e igual acá también la mujer tiene
familiares, pero las mujeres son las que han En general, reconocen en la Ruta Pa-
que frentear la economía del hogar, algunas
estado prestas a apoyarnos...” Mujer del chando la vulnerabilidad de muchas de
Putumayo.
el esposo pues ha cogido para otro lado y cífica de las Mujeres y la organización de
ellas en su condición de madres cabeza las han dejado abandonadas, porque pues mujeres el espacio que les posibilita supe-
de familia. de pronto los esposos están acostumbrados
El eje cuerpo -maternidad es indivisible en a coger su billete y a la hora acá pues no rar algunos aspectos del desplazamiento
la subjetividad de las mujeres, está presen- recogen nada, entonces ya no le gusta esa y las secuelas de las acciones directas del
te cuando mencionan las amenazas hacia “... el conflicto aquí está muy ligado a la vida entonces agarran y se abren dicen conflicto en sus vidas. El encuentro con
producción de la coca, donde hay producción ellos, deja a la mujer sola, entonces la otras mujeres se convierte en la forma de
la vida de sus hijos porque ellos hacen par- de coca ahí están los actores armados, porque mujer le toca acá responder por los hijos,
te del cuerpo de las madres. Reconocen hay intereses económicos con lo que ellos se entonces allí se afecta la mujer y también resistencia más importante para ellas, en
la incidencia de los actores armados en el sostienen, entonces por qué son las mujeres, las en cuestión de salud también las mujeres un espacio y una sociedad que las agrede
que están en la cárcel, aquí en Mocoa, la mayoría somos afectadas por problemas de salud, se de manera permanente, pero que a la vez
cuerpo y sexualidad de las mujeres que ha-
en el 70% son mujeres que han traficado con su enferman de cáncer, tantas infecciones que
bitan los territorios en conflicto, explican han resultado entonces yo a eso le achaco a
les exige sostener y resolver los efectos
cuerpo o trasladando mercancías de un lado a
cómo a través de la seducción las mujeres otro.. .”. Mujer del Putumayo. las fumigaciones”. Mujer del Putumayo. del conflicto en términos sociales y fa-
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miliares. Por ello tienen claridad, que es mantener viva la memoria, las mujeres se re- fumigaciones de los cultivos de uso ilícito. porque si a ellas les ocurre algo, la familia
en la acción colectiva con otras mujeres sisten a perder la identidad que las liga con Solo dos de ellas consideran que el origen y los hijos e hijas quedarán desprotegi-
en donde tienen la opción para salir ade- el territorio del que fueron desplazadas. del conflicto tiene causas estructurales. dos.
lante. La solidaridad, reconocimiento y Para todas, las prácticas de los actores
apoyo de otras mujeres, es la clave para La mayoría de ellas (cuatro) se asumen armados son dañinas. No consideran que “...me da miedo que a cualquier hora le
dejen a uno por allí, si uno se muere, con morir
avanzar un escalón en la recuperación de como víctimas inocentes del conflicto, di- éstos actúen por convicción política sino acaba, pero el que queda, queda luchando...”.
su identidad, la recuperación económica cen no entender las razones por las cuales por objetivos específicos que reconocen Mujer del Putumayo.
y tejer lazos que las afiancen en el nuevo vivieron tal situación. La otra mujer, con básicamente como económicos alrededor
y desconocido territorio. más experiencia en el liderazgo comunita- del negocio de la coca ”... me da miedo, temor, de encontrarme
esos grupos, mas que todo la guerrilla,
rio reconoce que el conflicto la afectó por porque yo estoy viviendo la incertidumbre del
“...yo les diría a las mujeres que la unión la labor social que ella o su esposo hacía “...para mi un conflicto es por ejemplo desaparecimiento de mi esposo, yo no se de
hace la fuerza... primero debemos ayudarnos ahora entre los grupos armados al margen
entre nosotras y después ir a las entidades
en las comunidades, reconoce los intereses de la ley, por ejemplo aquí en nuestro
pronto eso qué consecuencias generarán con
el paso del tiempo...”. Mujer del Putumayo.
municipales y departamentales...” Mujer del específicos de los actores armados para res- departamento del Putumayo el principal
Putumayo. quebrajar el tejido y la organización social y conflicto que se está dando de siempre, ya
ella como “la piedra en el zapato” para que hace mucho rato es entre la guerrilla y los Las mujeres del Putumayo, son de alguna
“... uno siente como que rabia, siente
no puedan avanzar en su objetivo, de esta
paramilitares...”. Mujer del Putumayo. manera optimistas frente a la resolución
como venganza como cosas profundas en
manera reivindica su quehacer comunitario del conflicto. Esperan del Estado apoyo
el corazón, de que uno, no se, se ha roto un “El conflicto es la muerte de mi hijo,
poquito, de que ahora yo me he unido a lo de la violencia y el desplazamiento, tener que económico que ayude a superar las con-
la Ruta Pacifica, las mujeres pues han tenido “no sé por qué nos pasó eso, a nosotros perder todo lo que se robaron, la muerte de mi diciones de pobreza en las que las deja el
diálogo con la sicóloga y con las mujeres pues nos criaron siendo muy correctos en las cosas, marido, de mi hijo...”. Mujer del Putumayo. desplazamiento, esperan poder recuperar
ellas me han dado valor y yo otra vez estoy no nos gusta lo malo, nos gustan las cosas que
volviendo a coger motivación otra vez...”. “La fumigación de los cultivos
la tierra que dejaron y el retorno a su cul-
se hacen por la derecha... será pruebas de mi
Mujer del Putumayo. Dios...” Mujer del Putumayo también es un conflicto, pues con la comida tura, a su territorio. Algunas esperan que
pues fumigaron y fumigaron todo lo que es el Estado combata con autoridad a los
“...entre las mujeres tenemos que “y son ellas quienes en el momento de comida, plátano, yuca, entonces todo murió grupos armados. De los grupos armados
seguir luchando y continuar trabajando por la acción directa no sabían qué hacer o a dónde por parejo...”. Mujer del Putumayo.
nuestros sueños... nosotras y otras mujeres esperan que “recapaciten”, que dejen las
acudir, en este sentido, son también quienes
sigamos diciéndole al Estado y a los actores mayores dificultades han tenido para superar “Le han hecho mucho daño al país, armas o “que respeten los derechos hu-
armados que queremos que cese la guerra...” el desplazamiento”. Mujer del Putumayo. le han hecho mucho daño a las familias manos
Mujer del Putumayo. colombianas, mucho daño, mucho secuestro,
“...hay personas que quieren manejar, mucha extorsión, mucho desaparecimiento,
imponer sus ideales por encima de lo que sea, mucha muerte, ellos le han hecho mucho
En la dimensión de lo privado, las resisten- daño a la vida del ser humano...”. Mujer del “... esa gente es muy mala (paramilitares)
por la fuerza y que quienes obstaculicemos
cias están orientadas a fortalecer su papel o estemos ahí interfiriendo de alguna u otra Putumayo. esa gente no, que quiten esa gente, vivimos
es, vivimos es nosotros humillados por esa
como transmisoras de valores a sus hijos e manera en sus propósitos, quieren sacarlos a
gente, tanto de unos y de otros...” Mujer del
hijas: “con el conflicto pues estamos for- como de lugar, eliminarnos para poder lograr
Putumayo.
lo que se proponen...” Mujer del Putumayo.
mando hijos para la guerra y eso no se quie- En la esfera de lo privado, todas sienten
re, es decir la idea no es formar hijos para gran temor frente a las prácticas de los “...yo espero que el Estado no apoye
mas estos grupos, que apoye empresas y que
la guerra sino para la tolerancia...”; de igual El concepto de conflicto es manejado bá- actores armados, fundamentalmente trate de acabar las armas que es por lo de las
manera al sostener la continuidad histórica sicamente desde la esfera de lo público, porque les da miedo la muerte “sin saber armas es que estamos ahora en la violencia...”.
de la familia por medio de lo simbólico, de muy referido al conflicto armado y a las la razón porque lo vayan a matar a uno” o Mujer del Putumayo.
114 115
2.4. Palabras, representa- Las cinco afirman que no se les permitía ju- inmediato el llanto se le agolpa, pero se mucho a uno en la boca, a pesar del mie-
gar con niños ni relacionarse con personas repone para cantarla. do yo siempre contestaba cualquier cosa”.
ciones y resistencia de las adultas, los espacios femeninos y masculinos Mujer del Cauca.
mujeres del Cauca estaban claramente diferenciados, así como el “Ella cada vez que peleaba con mi papá
cantaba una canción, y esa si no se me ha
espacio de las niñas, niños y adultos. olvidado y eso era como el alivio de ella cantar
Es importante relacionar y contrastar
2.4.1. Tiempo cronológico y como que soñaba cosas yo creo y eso que yo este silencio, testimoniado directamente
niña “Somos indígenas, y allá los papases, mi me sentaba al lado de ella y yo repita y repita por las mujeres, con el silencio escolar ob-
papá porque yo quedé huérfana de nueve años, hasta que me la aprendí. Se llamaba “Cuando
mi papá siempre nos cohibía la amistas con los
servado en los indígenas en los espacios
En su infancia, las cinco mujeres las aves dejan su nido” y yo digo que eso decía
hombres, entonces nosotras allá siempre nos mucho, ella algo pensaba y ella siempre le educativos formales del país. El silencio
indígenas, fueron a la escuela y a pesar comunicábamos por medio de cartas, nunca nos pedía a la virgen de las lajas que la llevara, mi de los paeces ante extraños, ante personas
de las madrugadas y distancias, era para dejaban ni visitar ni hablar; por ejemplo uno papá le pegaba mucho”. Mujer del Cauca. que no son de su comunidad, se puede
ellas el único espacio para relacionarse salía al mercado el día lunes, mi papá tenia una
tiendita entonces los muchachos le mandaban a entender como un saber y una comunica-
con otras niñas. Dan testimonio de la uno una cartica entonces uno al que le gustaba Las mujeres consideran que el silencio o ción estratégica. Su actitud en la escuela,
valoración que se daba a las niñas-os. le contestaba y al que no le gustaba pues no le esconderse era para ellas la única solu- de aprender silenciosamente, parece ser la
contestaba, uno no le contestaba esos papelitos ción al conflicto de su hogar, dos indí-
“La gente de antes no miraba a los
estrategia frente a la educación de la socie-
esas carticas que mandaban siempre en sobre de
niños como ahora sino que para los niños era carta”. Mujer del Cauca.
genas desde muy niñas pensaron que lo dad mayor, como ellos mismos la llaman.
lo peor, por ejemplo si iban a servir almuerzo mejor era huir y otra pensó en suicidarse; Silencio sigiloso que desquicia al maestro,
primero le daban a los mayores y los niños “Con adultos no, con el que más me no comprendía porque la mamá no se fractura el currículo, hace discontinuo el
eran de último”. Mujer del Cauca. relacionaba era con una hermana, empecé a defendía y porque no la quería. Salía de
relacionarme con adultos una vez que me fui a
mensaje al establecer un puente donde
“cuando llegaba gente particular estudiar a Popayán”. Mujer del Cauca. su escondite sólo después que su padre sólo hay una ruta para el discurso pero no
mi abuela nos hacía encerrar en una pieza golpeaba a su mamá para la respuesta y menos para la pregun-
mientras la gente comía y se iba, por eso fue “... una pareja que a veces no se ta; puente que ante el discurso dominador
que mi mamá se salió de allí. Mis abuelos comprenden, por cualquier cosa discuten, por
también tomaban decisiones, ellos eran los
“El silencio era lo más frecuente, yo reco- interpone un silencio férreo que señaliza
eso yo salí de la casa, ellos mantenían peleando
que “tráigame, que lléveme” y ellos eran mucho, por ejemplo mi papá la mandaba hacer nozco que a uno lo marcan desde peque- un límite. Sólo cuando el maestro escudri-
muchas veces los que nos castigaban”. Mujer cualquier cosa y ella no la hacía bien, entonces ño con eso, porque a uno no lo dejaban ñe la razón de este silencio cultural, y no
del Cauca. la gritaba y le pegaba, él le daba muy duro a mi opinar para nada, yo era una de la que específicamente escolar, podrá evidenciar
mamá...”. Mujer del Cauca.
más me daban porque era muy contesto- los espacios para el silencio, los espacios
“A todos nos pusieron a estudiar, na y hasta de pronto por eso mi mamá era de su uso, su historia y su función.
pero a los primeros les tocó muy difícil para muy autoritaria porque a mí me daba mu-
estudiar porque de donde vivíamos nosotros Para algunas de ellas las relaciones en-
a donde tocaba la escuela había tres horas tre el padre y la madre eran conf lictivas cho porque yo era muy respondona en ese Así podrá saber por qué el paéz de regreso
de ida y tres horas de venida caminando, en y generaban incertidumbre y dolor. La tiempo y yo le respondía porque veía que a casa, camino a la parcela o de viaje al pá-
unos peñascos, entonces yo me acuerdo que
madre amenazaba con abandonarlos y las cosas eran injustas, no eran como ella ramo siempre está hablando, sonriendo y
mis hermanos los levantaban cuando cantaba decía y el lema de ella era que si una per-
el primer gallo, como a la una de la mañana hoy entienden el porqué de las amena- poco lugar deja para el silencio, aun cuando
a hacer café y arepas, la ida de la finca era zas ya que les ha tocado vivir situaciones sona mayor aunque estuviera mintiendo uno supone que calla. Podrá saber el maes-
a las cuatro de la mañana con un mechero
similares. Una de las indígenas recuer- por el hecho de ser mayor no se lo podía tro por qué el paez cuando pisa el espacio
alumbrando unos peñascos horribles. contradecir entonces yo muchas veces le escolar es como si llegará a otro mundo
Hombres y mujeres íbamos a la escuela”. da la canción que la mamá cantaba. Al
Mujer del Cauca. cantarla se le anuda la garganta y de decía que eso no era así y ella le pegaba que, si bien “conoce “, no le pertenece, le es
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extraño. Se dará cuenta de que no les falta “...nos castigaba ¿qué le haría yo?, a los doce años y ella me trató mal, ella dijo para hacer oficio sino que hay que dejarles un
recuerdo, me acuerdo que me iba a castigar, que ahora si era una mierda..., que tenía que rato para que se diviertan”. Mujer del Cauca.
razón para no hablar pues en la escuela se
pero no me acuerdo si me alcanzó a castigar, cuidarme, yo no sabía qué era eso, quería
les dijo que debían olvidar su lengua, su pero yo me acuerdo tanto, ¿qué le haría yo? saber por qué sangraba, yo me sentía mal,
costumbre de mascar coca, su práctica del Ya que mi mamá cogió el rejo pa´ castigarme, sentía vergüenza”. Mujer del Cauca
Recuerdan a las maestras como personas
amaño, su cosmovisión, en fin se les “ense- y yo me volé de un barranco, me acuerdo, que les brindaron mucho cariño pero tam-
ñó” a avergonzarse de sí mismos. cuando yo iba en el aire mi mamá sonó a “Era un tema que no se conocía, yo poco ellas le hablaron de la sexualidad.
decir: ¡esa muchacha se va a matar! Me volé creo yo ya estaba grandecita cuando nacían
por no recibir fuete..”. Mujer del Cauca. mis otros hermanos entonces yo veía que a mi “La profesora de una vereda. Ella me
Los roles y funciones de varones y mu- mamá la encerraban en una pieza y tapaban daba a entender, con ella compartía más. Me
jeres se encontraban claramente delimi- “Yo a mi mamá le tenía miedo, más todo por debajo de la puerta para que nadie se decía mire que ese libro dice... yo me acuerdo
que amor sentía miedo y respeto porque nos asomara, cuando uno escuchaba que lloraba un tanto de una leyenda de un libro que decía
tados, todas además de limpiar y cocinar castigaba muy duro por cosas que no tenían niño y le decían a uno que la virgen le trajo el “Cuando vayas a una fiesta nunca te hagas en
debían ayudar en el trabajo de la huerta razón y respeto, por el mismo miedo”. Mujer niño que por un huequito y yo preguntaba que partes oscuras, ni permitas que tu rosa blanca,
que era una labor que generalmente ha- del Cauca. por dónde y me decían que por un huequito que llevas en la cintura, que no se aje, ni se
de la puerta y me acuerdo cuando pasaban los
cían los varones. Sólo una de las indíge- deshoje”; a mi papá nunca le pude preguntar,
caldos y todo eso con harto cilantro y perejil
nas dice que tales tareas se las pusieron El padre era quien les proporcionaba algo y uno con esas ganas de entrar y podíamos
en cambio ella me dio a entender, con ella
compartíamos, siempre iba ella porque me
cuando ya era grande. de cariño. No obstante este reconocimiento entrar al otro día pero había que sahumarse gustaba leer”. Mujer del Cauca.
le incriminan a sus papás los malos tratos para poder entrar”. Mujer del Cauca.
“Cuando ya éramos grandes nos ponían que le daban a sus mamás.
a jabonar, a ordeñar las vacas, a dejar almuerzo Ninguna recuerda haber pensado en su
Todas recuerdan que la inspección de po-
a los peones, mi mamá cuando estaba solita cuerpo durante su infancia ni haber vis-
conmigo era muy linda pero cuando estaban
“...mi mamá como que se dedicaba licía, la escuela y la iglesia eran las insti-
mucho al trabajo, no se en qué pero como to expresiones de afecto entre su mamá
mis otros hermanos me trataba distinto, por tuciones que había en sus comunidades y
una forma, sería como la preocupación del y su papá.
ejemplo me mermaba el plato de comida, a mí maltrato, uno le hablaba y ella no le ponía en los últimos tiempos el Cabildo donde se
siempre me daba menos en todo pero yo no cuidado, en cambio a mi papá si como que pueden ir a quejar.
les guardo rencor”. Mujer del Cauca. “Como a los 13 o 14 años que uno
era mas apegado a los hijos siempre vivía empieza mirarse sí, yo me veía bien, me
cargándolo a uno, y en ese tiempo nunca “Yo veía que varias personas eran gustaba como era, que tenía bonita piernas,
La relación con la madre se daba en algunas pensar mal que me iba hacer algo...” Mujer importantes, aparte de la señora negra, el que mis ojos eran bonitos, que mi nariz era
del Cauca.
oportunidades en un contexto de tensión y inspector, la enfermera, los profesores porque bonita, yo me miraba todo. Lo que más me
le enseñaban a leer a los niños, los cantos, gustaba eran las piernas porque tenía unas
conflicto. La madre no tenía tiempo para
Sobre el sexo nunca nadie les habló, fue daban cosas buenas, cosas que uno nunca piernas bien bonitas y toda la gente me decía
ellas porque siempre estaba trabajando en había conseguido y el inspector me parecía ¡uy!, que piernotas”. Mujer del Cauca.
la lana y por estar mambeando ni siquiera en la relación de pareja que descubrieron bueno porque la inspección se abre sólo los
les ponía cuidado.“...cuando le hablaba vivía tal dimensión humana. Lo único alusivo al días de mercado y entonces el día de mercado
muy pegada del trabajo y eso de mambear tema es cuando una comenta que su madre hacían cola para hablar con el inspector y él La única mención del cuerpo es para decir
la maltrató cuando supo que había mens- solucionaba los problemas, todavía no había que sus mamás lo cuidaban en el embarazo
no le daba posibilidad de hablar con no- Cabildo, el cura, conseguía remesas, conseguía
sotros”. La abuela jugó un papel muy im- truado. La mayor dice que su padre vino a ropa, iba a las veredas a llevar comida y ropa y la dieta con yerbas y cuando les venía la
portante en una de ellas, casi fue su mamá hablarle a los 18 años sobre la menstrua- a las casas, él se preocupaba mucho por llevar menstruación. Negar o tan siquiera poner
con ella aprendió nasayuwe. Pero también ción como si fuera una enfermedad. juegos, sopa de letras, loterías, ping pong, en duda la relación entre cuerpo y natura-
dominó, él hizo un salón grandísimo y colocó
recuerdan que les impedía relacionarse con mesas entonces después de la misa decía
leza que las culturas amerindias han cons-
“A mí nunca nadie me explicó qué era truido o intuido sería un abrupto desde
los adultos. Se percibe una especie de cen- la sexualidad, mi mamá era muy ignorante
“invito a los niños y niñas para jugar, a los
sura a sus madres porque las castigaban. porque a mí me vino la menstruación como
padres les recuerdo que los niños no son sólo todo punto de vista. Pero lo que también es
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cierto es que las indígenas reconocen que tuaciones diferentes a las que vivieron sus Las mujeres consideran que la mayor actores armados no son indígenas. Todas
no han sido tratadas acorde a lo que son: madres y padres; conservando la estructura conquista de los pueblos indígenas es la ellas han perdido miembros de su familia
personas que al igual que los varones me- de madre, padre e hijas-os, pero planteando recuperación del territorio que es la base ya sea por la acción de la guerrilla, de los
recen consideración para cuidar su cuerpo, la importancia de trabajar para brindarles fundamental para obtener la identidad, la paramilitares o de la propia familia por
para pensar en su capacitación, participa- un futuro mejor. historia, el presente y el pasado. Algunas disputa del territorio. Ellas consideran
ción en su deseo y necesidad de gobernar de ellas han participado en procesos de que es importante realizar acciones que
para brindar protección, para relacionarse “A ver les cuento, sucede que yo me formación lo cual les ha permitido mirar las protejan de los grupos armados, pues
casé en el 1969, me tracé la meta que yo sólo
con otras personas y comunidades. tenia que tener tres hijos y eso lo hablé a mi
como posible hacer parte de los Cabildos a sus comunidades llega mucha gente a
marido cuando éramos novios yo siempre le ayudar y no se puede confiar porque pue-
La autoridad está representada y reconoci- hablaba, yo tuve cinco años de noviazgo con “.. sucede que en ese tiempo yo estaba den ser actores ilegales.
mi marido, entonces yo le hablaba que uno apenas recibiendo capacitación del derecho
da en la figura de su padre aunque las cinco de la mujer..., pues como a uno lo ordenan a
tenia que tener los hijos y había que trabajar “No hemos logrado hacer una acción
dicen que la mamá mandaba a la hora de para poderlos hacer estudiar”. Mujer del que vaya a socializar y yo fui en una reunión y
contundente, quisiéramos en mi Resguardo
contratar trabajadores. Cauca. socialicé, al señor no le gustó, o sea no solo a
hacer una resistencia donde no entren ni
él a mucha gente no sé, un día me dijeron que
los paramilitares, ni guerrilleros, ni ejército
“Mi mamá, autoridad en el sentido de ser “Bueno, teníamos el noviazgo y yo le yo no podía participar... dijeron que yo fuera
ni policía porque ellos lo que hacen es
autoritaria pero en el sentido de autoridad como hablaba de que debíamos trabajar para poder gobernadora y él no me dejó.. Dijo que No...
formar problemas, a mi finca ya entraron los
amor era mi papá, a él me acuerdo que cuando tener los hijos y hacerlos educar y al no le que yo estaba llevando políticas de afuera..
paramilitares, allá no vive nadie porque les
llegaba y estaba haciendo frío él se acostaba y gustaba, o sea, él en ese tiempo no decía nada bueno se me ocurrió un día en una asamblea
da miedo, me tocó venirme para acá porque
uno se le podía tirar en las faldas, en la ruana de todo decía que si todo, que si y mi propuesta llamarle la atención, le dije mire señor...
entraron los paramilitares a la región y
un momento a otro”. Mujer del Cauca. era que a los tres años tuviéramos el primer profesor --es que él es profesor, él estudió
empezaron a merodear la finca y a preguntarle
hijo, hija o hijo uno en ese tiempo no sabia que en la Normal de La Vega y entonces le dije
a la gente los nombres de nosotros y en una
habían esas radiaciones, esas cosas de saber si profesor... Usted que cree que me impide a mi
Sus lugares en la niñez eran lugares tran- ocasión sacaron a un compañero para matarlo
eran hombre o mujer, sólo lo que Dios dijera; trabajar como en un cargo público, yo que es
pero él se voló y puso demanda y por eso
quilos, sitios donde no había peligro para bueno me casé y mier... que uno se casa y no lo que tengo para que me impida a mi trabajar,
están bravos con nosotros, ellos tienen toda
está preparado para.. ni el hombre ni la mujer yo quiero trabajar con la comunidad, y más
caminar, donde había mucha naturaleza, los la información de nosotros entonces tenemos
y entonces me caso y lo primero que quede que todo con los derechos de la mujer... Dijo:
pajaritos, el río y las huertas hacían parte de fue embarazada..y yo no estaba de acuerdo a que no, que yo estaba llevando una política
que cuidarnos no llevando los hijos allá, yo
si voy allá llevo otra cédula diferente, en
sus comunidades. Tanto para las yanaconas que eso sucediera primero, sino que primero de afuera que eso no era conveniente; le dije
una ocasión iba para la finca con mi hija y
y para las nasas ser mujer les decían sus había que trabajar para poder tener bien a los que yo me había capacitado bien ¡cual era la
se subieron al bus y la chiquita preguntaba
hijitos”. Mujer del Cauca. política de afuera!, yo no sabía...” Mujer del
mamás era tejer sus propios vestidos y las Cauca
si eran guerrilleros o paramilitares, yo creo
ruanas de quienes serían sus esposos, saber en Dios y pidieron que bajáramos todos, los
hombres acá y las mujeres acá y empezaron a
cocinar y ayudar en la huerta. En sus familias se presentaban conflictos 2.4.3. Tiempo cronológico requisar los bolsos cuando venia otro carro y
cuando ellas expresaban lo que deseaban mujer adulta afectada por el no alcanzaron a requisarme y me fui con otra
2.4.2. Tiempo cronológico como mujeres; pero tanto en sus familias de conflicto
amiga corriendo y nos devolvimos”. Mujer del
mujer adulta, antes de la si- Cauca.
origen como en las suyas el silencio era una
tuación del conflicto forma de enfrentar el conflicto. Las cinco Las indígenas sienten y se pregun- Las indígenas consideran que el gobierno
indígenas consideran además que en sus te- tan por qué les ha tocado vivir en medio es responsable porque casi siempre que
De mujeres adultas, se asumían con rritorios se presentan conflictos, fundamen- de tantas presiones e interpretaciones hay una masacre en cualquier parte ya se
rupturas en relación con sus familias pa- talmente, porque se les quiere despojar de la blancas. Aunque hubo indígenas en el sabía y las autoridades no hacen nada. Las
ternas y maternas, pues deseaban vivir si- tierra que tradicionalmente han habitado. Quintín Lame manifiestan que ahora los cinco reconocen que la organización es la
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única forma de hacerle frente a la guerra, otra opción económica y terminan enfren- Todas las mujeres se sienten orgullosas de “Yo pienso que el conflicto con la
guerrilla es por los cultivos ilícitos y con los
pero si los hacen salir de los Resguardos tándose entre la familia o parientes, en- su identidad étnica, tanto en lo individual
compradores que es gente extraña que llega y
los dividen y esto es lo que los grupos ar- tonces, las más afectadas son las madres. como en lo político o en lo religioso. Con- se va. El conflicto cada vez se agudiza más”.
mados desean porque les interesa las tierras Y temen por el futuro de los jóvenes por la sideran que son diferentes pero no inferio- Mujer del Cauca.
y los recursos naturales y la biodiversidad anterior situación, pero muestran su fuer- res. Además, respetan que sus hijos e hijas
de la que son guardianes. Y dicen que la za y esperanza para que sus territorios no salgan de los Resguardos porque lo deseen Uno de los impactos del conflicto armado,
desconfianza es un elemento presente en sean campos de batallas. pero no porque se les obliga, porque se les para las mujeres, es la violencia intra fami-
sus vidas. engaña con promesas de tener lo elemental, liar; dado que los varones obtienen mejores
“Estamos afectadas por el peligro que lo que la vida les ha negado para vivir. ingresos producto de los cultivos ilícitos y
“Mejor dicho nos toca seguir luchando estamos atravesando donde pienso mucho en
las niñas adolescentes”. Mujer del Cauca.
los ingresos los destinan a la bebida. Ante
para que las comunidades indígenas no “Espero que otras mujeres tomen
desaparezcamos”. Mujer del Cauca.
esta situación muchas niñas de 12 años se
conciencia de la importancia de hacer respetar
“Estamos dispuestas a salir a contarle
sus derechos Considero que las mujeres
van de las casas porque ya no se aguantan
No podemos confiar ni en la familia al mundo que no queremos extraños, que al papá o la misma mamá. También el Ca-
responden de una forma vulnerable frente
porque ya sea por asuntos de tierras o porque queremos trabajar, que queremos volver a
confiar que la vida vale la pena, que hay gente
al conflicto por la sumisión a los hombres bildo ha ido detectando drogadicción y
tenemos gente nuestra en los diferentes bandos Quedarnos en silencio ante el conflicto
enfrentados. Entonces no sabemos cómo buena, que somos capaces de negociar, que afectaciones por las fumigaciones.
provoca más daño. Estamos cansadas pero no
proceder, con quién hablar a quien pedir ayuda nuestra gente preparada la necesitamos para
derrotadas” . Mujer del Cauca.
ya que hasta en el propio gobierno hay personas intercambiar y desarrollar el conocimiento “Mi hija nació con malformaciones, es
que llevan y traen y cuando uno menos piensa propio y externo; que tenemos limitaciones un ser que sólo yo que vivo con ella sabe que
todos (ejército, guerrillla, paramilitares, pero que no implican barbarie, que pueden Las mujeres reconocen que deben compro- existe, porque de la cama nunca se levanta, me
delincuentes, en fin todos los que creen tener llegar a nuestras comunidades con la seguridad meterse cada vez más con el futuro de sus toco servirla en todo y no ha habido poder
razón) están buscando para matar. Y esto de volver a salir y de regresar cuando se necesita humano para que el gobierno me ayude ni
o quiera”. Mujer del Cauca. comunidades para lo cual se necesita más
parece que no importara, hay una obsesión siquiera para comprarle una droga para que
por encontrar culpables en las comunidades y mejor liderazgo. En consecuencia consi- no convulsione. Ella nació así porque cuando
cuando quienes han causado el mal son “Queremos ahora en este país desgarrado deran que la transparencia, el saber sobre yo estaba en embarazo llegó de repente una
personas ajenas que llegaron por nuestras y sin esperanzas a la vista, alzar nuestras voces, derechos humanos y saber escuchar a la avioneta a fumigar a la vereda dizque porque
tierras o que se aprovechan de nuestra pobreza nuestras miradas y dar todo nuestro acumulado hay que acabar con la coca, pero al parecer
histórico como seres que nunca hemos
comunidad son los valores más importan- lo que quieren es acabar con la pobreza de
para ofrecer trabajo en tareas indebidas y por
esto los hijos se van, las hijas son engañadas agenciado la guerra, para proponer y trabajar tes para ejercer liderazgo. una vez por todas, mejor con la gente que no
y los maridos los matan y nosotras somos las por una Colombia distinta, por la Colombia tenemos ni para comer y por esto estaba en mi
últimas en darnos cuenta que la guerra se nos que soñamos, que necesitamos como el lugar Ellas ven que el conflicto armado es pro- parcela cuidando la yuca y la cebolla cuando
metió a la casa. Mujer del Cauca. para vivir sin miedos, contrario a los que nos ese pájaro de metal llegó, yo supe realmente
está sucediendo actualmente que nos acecha la gresivo, que aumenta por el cultivo ilícito de su daño cuando mi hija nació así “. Mujer
muerte por la desconfianza que despertamos y que la gente cultiva la amapola porque es del Cauca.
El conflicto armado afecta a las mujeres, por estar participando, por estar enseñando, lo único que se vende y es lo que da plata.
por ejemplo los hijos por falta de recursos aprendiendo lo que es el diario convivir; por El conflicto armado aumenta a pesar de los
decir que nuestro cuerpo, nuestros sentimientos
Para las mujeres que narraron su historia,
económicos, por falta de tierras producti- no deben ser usados como botín de los grupos programas del gobierno porque los dineros los actores armados generan atropello,
vas, o familias numerosas que escasamen- armados; pero también por estar planteando están destinados a la gente que siembra, afectan la libertad de las personas con las
te viven en una huerta pequeña, terminan que las mujeres queremos participar y exigir entonces los que no sembraban el cultivo amenazas, las matanzas y con apropiación
recursos para que nuestras ideas salgan a flote
ingresando al ejército para solventar sus y resurja una nueva patria y una nueva manera
ilícito terminan sembrándolo para recibir de las tierras. Estas situaciones les generan
dificultades económicas y si un hermano de relacionarnos con respeto y con dignidad”. las ayudas. Eso es una cadena que no ter- miedo, intranquilidad y les restan posibi-
se va, al otro hermano la guerrilla le ofrece Mujer del Cauca. mina sino que se va agrandando. lidades para estar desarrollando procesos
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propios. Los paramilitares han matado a solver los problemas mediante el diálogo. cuidarse, hablar, denunciar y pedir ayuda es pensarnos y entendernos en el conf licto,
más gente con la idea que son informantes Aunque dicen que sus familias no hacen lo que han acordado para romper el cerco la lectura se encuentra mediada por los
y las más afectadas son las mujeres porque mucho para protegerse del conflicto ar- al que quieren someter a las comunidades filtros que las investigadoras hicimos de
se quedan solas con sus hijos y tienen que mado sino que se acogen a lo que decida para apropiarse de sus territorios. Por lo las narraciones.
enfrentarse con un medio adverso para el Cabildo y a veces dichas decisiones no tanto recomiendan no salir de los territo-
mantenerlos y trabajar muy duro para son compartidas en la familia, entonces rios. Así también quieren frenar el despla- 2.5.1. Subjetividades e iden-
poder educarlos. Las mujeres consideran las toma por sorpresa cuando los actores zamiento al que se han visto obligados. tidades entre la opresión y la
que los paramilitares invaden su vida armados han llegado a sus comunidades. libertad
privada y no respetan sus creencias y va- 2.5. A manera de síntesis
lores tradicionales. Uno de las formas de resistir al conflicto La construcción de las identidades y subje-
armado es no estar dando información
de los hallazgos tividades es de carácter relacional. Las ca-
“Por aquí nosotras las mujeres ya no a extraños. El silencio ha sido una forma tegorías de feminidad y masculinidad son
podemos vestirnos con la ropa adecuada para
el calor, estos señores también utilizan el
de protegerse y de proteger a su familia. En este aparte se consignan los intrínsicamente relaciones y se significan
fúsil para obligarnos a no ponernos “chores” Otra manera de hacerle frente a los actores principales hallazgos de la investiga- mutuamente, son construcciones sociales
o faldas cortas porque esto va en contra de armados es que como mamás les hablan a ción; ellos deben ser considerados como poseedoras de una historia. En este sen-
la moral y así, les damos mal ejemplo a los sus hijos para que no se dejen convencer
hijos”. Mujer del Cauca.
pistas que las mujeres nos señalan con tido, las subjetividades de las mujeres que
de quienes les dicen que se vayan a buscar sus narraciones; para continuar explo- narraron sus historias, expresan la riqueza
mejor futuro. rando, comprendiendo, analizando las y variedad de las experiencias vividas desde
Las mujeres indígenas viven múltiples
vulnerabilidades. Si realizan proyectos por expresiones de la cultura patriarcal y la subordinación, la opresión, la violencia y
Las indígenas mayores y con más trayecto- generando acciones para su transfor- desde intentos de libertad y de resistencia.
ellas mismas se piensa que es la guerrilla la
ria en trabajo organizativo reconocen que mación. Los hallazgos se refieren a las Muestran de múltiples formas sus capaci-
que les ordena qué hacer y entonces el ejér-
su vida privada ha cambiado por su parti- formas como la cultura patriarcal se dades para aprender y transformarse a pe-
cito las retiene y solo hasta que demuestran
cipación en los procesos comunitarios ya ha imbricado en la vida de las mujeres, sar de la desgracia y el sufrimiento y para
que trabajan por el bien de las mujeres, las
que como indígenas han participado en las sus movilidades y presencias en los di- acumular recursos. La eficacia de sus sub-
sueltan. Luego la guerrilla considera que
luchas indígenas para resistir al exterminio ferentes ciclos vitales; asimismo, las re- jetividades les ha permitido la auto conser-
son informantes del ejército. “Y en la casa
social y cultural que históricamente han puestas y las formas como ellas la viven, vación y sobrevivir al conflicto armado, in-
nos dicen que para evitar problemas no
padecido. Proceso en el que han aprendido reproducen y padecen; es decir como se crementándose su capacidad de respuestas
volvamos a reuniones y si vamos recibimos
de liderazgo, de ayuda mutua, de cuidarse manifiesta el patriarcalismo en las sub- para hacer frente a un medio adverso no
una tunda”.
de personas que no son de su comunidad. jetividades femeninas, en sus diversas solo para ellas, sino también para sus seres
2.4.4. Resistencias de las mu- identidades, en las dinámicas familiares, más queridos. Y al actuar en su beneficio,
La capacitación, la organización y la soli- en la sexualidad, en la afectividad, en el protección y preservación de su integridad
jeres del Cauca
daridad son para las indígenas las formas cuerpo y en los procesos generados por tanto en lo privado como en lo público, las
que colectivamente hacen posible que los el conf licto armado, en su percepción mujeres han incrementado su ser.
Las cinco indígenas coinciden en actores armados respeten sus territorios y del mismo y en sus resistencias. No se
afirmar que sus vidas, en lo personal y sus procesos culturales. Acuden al Cabildo puede pensar que los hallazgos fueron Es decir, han podido construir medidas
familiar, han cambiado porque ya cono- para denunciar y aunque el silencio ante explícitamente planteadas por las 20 relacionadas con sus dotaciones y la caren-
cen sobre sus derechos y sobre cómo re- los extraños es una de sus estrategias para mujeres que donaron sus vivencias para cia de los recursos para enfrentar la vida
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cotidiana. Podríamos atrevernos a afirmar desconocido y subvalorado, tanto en áreas se afirman de forma positiva, en muchos sus sueños de niñas y mujeres adultas se
que las mujeres han tenido la capacidad de rurales como urbanas. momentos de sus vidas, para tratar de re- encuentran imbricados pensamientos mí-
metaforizar sus experiencias de vida. En parar la descalificación. Las identidades ticos, creencias, poder e ideología. Ponen
este sentido, las historias de vida no fue- La diversidad de las experiencias identita- de las mujeres se muestran cambiantes en palabras a la cultura patriarcal en torno a la
ron otra cosa que metáforas que hicieron rias, permite acercarse a las relaciones y las sus configuraciones. Configuraciones que función y papel de las mujeres y destacan
posible retrotraer a la memoria de quienes formas como las mujeres vivieron-viven la entran en conflicto pero presente siempre de diversas formas la función simbólica de
con-versaron esas representaciones, esas semejanza, las diferencias, la especificidad un cuerpo subjetivizado, una historia en la maternidad.
ideas para que fluyera el ser, para que el su- y la singularidad con otras mujeres: sus constante revisión, un nudo de relaciones
jeto perdido, extraviado, invisibilizado, si- madres, hermanas, hijas, amigas y compa- y narraciones sociales y un yo en perma- En todas las historias de vida, la relación
lenciado, pusiera en palabras sus vivencias, ñeras de la organización. Ellas de formas nente interacción con las-os otras-os. madre-hija aparece como elemento clave
sus dolores, sus propuestas, sus sueños y variadas expresaron su pertenencia a los para entender la identidad femenina. La
sus derrotas. Construcciones emocionales diferentes grupos: familiares o comunita- La cultura patriarcal, está en la base de madre responsable de la crianza cuidado
y sociales que permiten a las mujeres sub- rios; pero también sus distanciamientos de los sueños que de niña tenía cada una de de las hijas-os; pero a diferencia de los
sistir en medio de la barbarie para proyec- ellos. Expresaron a través, de sus narracio- las entrevistadas. Ser enfermera, profe- varones las hijas comparten con su madre
tar sus vivencias y sus necesidades. nes sus experiencias fundamentales del “Yo sora y madre son opciones de vida, que la identidad femenina dándose una fu-
mismo, como mismidad, limitada y sólo comparten culturalmente una suerte de sión de la mujer y la madre. Esta fusión se
En las narraciones de las mujeres, se plas- vivible en el reconocimiento de lo propio, compromiso y disposición favorable de produce desde el inició de la vida cuando
man sus experiencias como sujetos en torno en la singularidad irrepetible”55. estar para el otro, de servirle y protegerle, se internaliza a la propia madre como el
a su ser y a su existir, con elementos mul- de acogerlo y hacerlo con afecto. Enferme- símbolo de la mujer, es decir, en la subje-
ti-referenciales en torno a sus identidades. Sus experiencias involucran los afectos y ra, profesora y madre son tres caras de la tividad de cada una, la mujer es idéntica a
Identidades complejas en las cuales se vi- los sentimientos sobre sus yoes, las viven- misma imagen femenina del servicio. Sin la madre56. La auto-identidad de las mu-
sualizan elementos descriptivos e interpre- cias corporales subjetivas, las imágenes, los embargo, se prestan algunas fisuras en el jeres, se elaboró a través de las semejanzas
tativos sobre sus vivencias, que involucran sueños en lenguajes de auto-referencias y patriarcalismo, se observa que hay valores con su madre. La madre, cumpliendo el
pensamientos y afectos sobre sí mismas de autorretratos. Se mueven estas expe- que persisten y a la vez se incorporan otros mandato patriarcal, les enseñó y asignó los
y sobre los otros; así como las ausencias riencias entre la convicción de ser inclui- que anteriormente fueron asociados casi estereotipos de la feminidad y de la mujer.
presentes en sus ciclos vitales, lo reprimi- das unas veces y ser excluidas otras; con exclusivamente a lo masculino, como es el Lo hizo a través de la palabra, las normas,
do y lo olvidado. Constatan cómo viven sentimientos de no pertenecer, de no ser caso de irse muy lejos, ser admirada, tener el tabú, el tratamiento sobre el cuerpo y
experiencias identitarias cuyos sentidos se semejantes a los varones; pero reclaman- un buen salario y ser famosa; es decir, em- la sexualidad, la asignación de funciones
han construido por medio de complejos y do de formas diversas su pertenencia y su prender la aventura, centralizar la atención y comportamientos. La intervención en
diversos procesos de-construcción, resig- condición como humanas. Ellas constatan y conquistar la autonomía económica. el moldeamiento de la subjetividad de su
nificación e innovación de su experiencia cómo en el mundo patriarcal en el cual Proceso de continuidad y discontinuidad hija y los poderes que ejercía sobre ella,
como mujeres. Ellas han construido sus viven, sus identidades son subvaloradas, que habla de la forma cómo se transforma posibilitaron que la madre fuera una pro-
identidades, afro descendientes, indígenas, negadas y negativizadas; pero también de dicha cultura, quizá debido a las dinámi- tagonista de primer orden en la infancia
urbanas, campesinas entre otras, en una formas diversas se oponen a la desvaloriza- cas propias de lo urbano, en donde las in- de las mujeres. Ellas se sentían obligadas
permanente interacción con los otros-as ción negativa de sus identidades y, confron- fluencias sobre niñas y niños son diversas a cumplir el mandato de la madre; pero
y como resultado de su hacer en el mun- tadas con su entorno y con los otros, padre, y menos controladas que en los escenarios cumplir este mandato implicó que emer-
do. Y su mundo ha sido sistemáticamente hermanos, compañeros, madre, hermanas, rurales. En las narraciones de las mujeres, giera el conflicto madre-hija.
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En la relación madre-hija se establecen juegan un papel importante en los proce- plinado para la producción y para la re- patriarcal. La afectividad y la sexualidad,
vínculos de poder que suelen reproducir sos de construcción de sus subjetividades producción, construidos ambos campos aparece como un continente enigmático en
y ampliar las relaciones de poder de la so- e identidades. Varones y mujeres apren- como disposiciones irrenunciables. la mayoría de las narraciones de las muje-
ciedad patriarcal. Esta cultura exige, aún dieron a ser varoniles y femeninas en un res. Ellas constatan de diversas y múltiples
hoy, asumir el peso de la propia auto ne- juego de poderes, de roles, asignaciones, Pareciera que el cuerpo de las mujeres es formas que cada sensación es una impre-
gación para la continuidad de la especie. posiciones y valoraciones diferentes se- la base para definir su condición de mujer sión corporal, una impronta hecha por el
La mayoría de las narraciones muestran gún el sexo al cual pertenecen. Varones y y la apreciación patriarcal dominante la cuerpo en el ser; pero a la vez, ese cuerpo
cómo ellas se encuentran atrapadas en los mujeres tienen un mandato que cumplir considera un don natural: “El ser conside- las definió en su singularidad. Ser y tener
roles estereotipados de esposa, madre, hija sin traspasar las fronteras y cuando ello rada cuerpo-para-otros, para entregarse al cuerpo se corresponde con su condición
y ama de casa permaneciendo olvidadas se hace se da la sanción ya sea por parte hombre o procrear, ha impedido a la mujer humana de eternas aprendices que inter-
intelectualmente. A oscuras, sin saber que de la madre, el padre o las instituciones ser considerada como sujeto histórico-so- pretan el medio, lecturas que inscriben en
de ese subempleo de la conciencia feme- sociales. En el proceso de construcción de cial, ya que su subjetividad ha sido reduci- sus propios cuerpos, como quien escribe la
nina depende la vida moral y emocional sus identidades y subjetividades, las figu- da y aprisionada dentro de una sexualidad historia de su tiempo; se podría decir que
de la familia. ras que admiraban y admiran son aquellas esencialmente para otros, con la función los cuerpos de las mujeres son libros en
relacionadas con el servicio o el poder. específica de la reproducción”58. los que se compila el sentir del presente de
“La niña se identifica con su madre en La maestra, la enfermera, el cura, el líder cada época como el resultante del diálogo
el proyecto de quién quería ser, a la vez comunitario o el líder político; es signi- Cuerpo-sexualidad-afectividad, subvalo- con la tradición y también de la ruptura
que la madre se identifica con la hija en ficativo que las mujeres no expresaron rados y sobre valorados como ejes sobre con dicha tradición hacia la apertura de la
el recuerdo de quién fue. Este vínculo admiración por ninguno de los actores los cuales se estructura su condición y ilusión y la utopía.
de ser una en la otra le otorga al vínculo armados, aunque ellos representen poder subordinación y son los que las mantie-
identificario una cualidad de entrecruza- en sus comunidades. nen en la dependencia y también sobre los El cuerpo de las mujeres, es el texto en el
miento en el cual interviene, así mismo, la cuales se funda y se desarrolla la opresión que se lee el trayecto que define a cada una
propia madre de la madre, especialmente 2.5.2. Cuerpo- sexualidad- que totaliza sus vidas, como grupo social de sus vidas, en él han quedado plasmadas
la madre que la madre tuvo cuando era afectividad, acorralados por y como particulares. Cuerpo-sexualidad- las alegrías y tristezas, el amor y el odio,
adolescente”57. Reconocer la importancia la cultura patriarcal afectividad, entregados por las mujeres a la memoria y el olvido. Pero también en
de dicha relación y no sancionarla, abri- los hombres y a los otros, y así se relaciona el cuerpo de cada mujer, se manifiesta la
ría posiblemente nuevos horizontes para La triada cuerpo-sexualidad- afec- con ellos59. especificidad cultural de la sociedad, pues
la autonomía y para la autoestima de las tividad, aparece como territorio en el en él se ponen ante los ojos de todos y to-
mujeres; contribuiría sin lugar a dudas, a cual se expresa el poder de la cultura pa- Las relaciones afectivas y sexuales han sido das las libertades y restricciones, lo posible
transformar la cultura patriarcal que co- triarcal. Las relaciones de poder marcan fuente de sufrimiento y dificultad para casi y lo imposible de acuerdo con los valores
loca a las mujeres en la rivalidad y en la cuerpo-sexualidad-afectividad, obligan, todas las mujeres que narraron su historia, y tabúes de la cultura patriarcal. Cuerpo
negación de la otra para dar cierto sentido dominan, someten a la negación, lo fuer- algunas han vivido violencias innombra- aceptado, negado, violentado, asumido o
a su existencia. zan a trabajos y exigen signos. El cuer- bles y sus compañeros sexuales o los de rechazado de acuerdo con los mandatos y
po de las mujeres se convierte en fuerza sus madres se han encargado de ejercer estereotipos culturales.
Las mujeres de diversas formas consta- útil cuando es productivo y sometido. El violencia sexual contra sus hijas o contra
tan cómo la familia, la escuela, la iglesia cuerpo y la sexualidad de las mujeres son, ellas, haciendo del espacio familiar y de la En el trayecto de las narraciones se esta-
y otras instituciones sociales jugaron y en efecto, campo político definido, disci- relación una continua expresión del poder blecen para las mujeres, disposiciones con
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las cuales se inhibe el ejercicio de la auto- pero salvo el caso de las “putas”, en el resto ma abierto en el cual se dan múltiples y intercambios que organizan las sociedades
determinación frente a la sexualidad como está asociado de manera subordinada y al diversos intercambios con otras institu- patriarcales, y todas las modalidades de
modo de relacionarse con el cuerpo propio. servicio de la procreación. ciones y organizaciones y con el contexto trabajo productivo que en ellas se reco-
Adicionalmente, el ejercicio masculino de socio-político en el cual se encuentra in- nocen, se valorizan, se retribuyen como
la violencia en la familia y en la guerra, ge- Se plasman en sus historias la asociación serta; es decir que recibe y acusa impactos un asunto de los varones. Las mujeres, los
nera un costo que se traslada a la mujer, entre sexualidad y reproducción, como sociales, políticos, económicos, culturales signos, las mercancías, se reenvían siempre
constriñendo su participación en la pro- si la función de la sexualidad de la mujer y religiosos. Las funciones que cumplen para su producción al hombre” . Claramen-
ducción del capital cultural e inhibiendo fuera exclusivamente para la procreación. las familias se encuentran orientadas a te se ve cómo se reproduce y refuerza uno
su autonomía. Pareciera que las mujeres relacionaran la reproducción de nuevas generaciones, de los pilares del patriarcalismo, el cual
como característica básica de su sexualidad a la socialización de niñas-os, a la trans- supone que el trabajo de re-producción
La sexualidad tabú contrasta con las rela- la relación entre erotismo y procreación, la misión de valores, normas y roles de la material, natural y corporal no tiene valor
ciones familiares que se presentaban; pues cual a nivel de los sujetos aparece escindida. sociedad colombiana. y por tanto no debe ser valorado; dándose
sí bien no se hablaba del tema, el varón y •”Socialmente y como parte de una cultura una apropiación por parte de los varones
la mujer podían tener diversas relaciones binaria, la sexualidad femenina escindida La autoridad básicamente es ejercida por del trabajo productivo-reproductivo de las
de convivencia con otros y otras sin que produce grupos de mujeres especializadas los varones y excepcionalmente por las mujeres. Asegurando así el intercambio de
por ello hubiera un rechazo social. Podría en aspectos de la sexualidad desintegrada: mujeres; las tareas se encuentran clara- las mujeres entre los varones. Las mujeres
pensarse que esta flexibilidad relativa a las las madres y las putas. El cuerpo de las mu- mente diferenciadas por sexo /género y según Luce Irigaray, “devienen en seres a
prácticas sexuales traducía una modalidad jeres procreadoras es entonces cuerpo pro- las expresiones de afecto, el silenciamiento quienes les resulta denegada la condición
de las relaciones económicas, pues la mujer creador, cuerpo vital para los otros, cuerpo de las emociones y los sentimientos, pa- de sujetos sociales, tal como lo sostiene la
requería de un compañero para el susten- útero, claustro. Espacio para ser ocupado recen ser una constante en las familias de autora, división sexual del trabajo exige
to de sus hijos-as y el varón necesitaba de material y subjetivamente, para dar vida a las mujeres. Hablan las historias de cómo que la mujer haga de su cuerpo el sustrato
una mujer y sus hijos e hijas como mano los otros. El cuerpo de las mujeres eróticas reproducen las estructuras sociales funda- material del objeto del deseo, pero que no
de obra para el trabajo agrícola y minero, es un cuerpo erótico para el placer de los mentales, definiendo en su interior diversas accede jamás a éste”62.
como es el caso del Chocó otros, espacio y mecanismo para la obten- relaciones simétricas o complementarias,
ción de placer por otro”60. jerárquicas o igualitarias teñidas siempre Se muestra una paternidad opresiva, que
La casi totalidad de mujeres no ha vivido por valores afectivos. En el espacio familiar no da lugar al desarrollo de las hijas e hijos.
la sexualidad en condiciones de libertad, 2.5.3. Las dinámicas familia- se despliegan rígidos códigos de género que Él no representa un modelo pues su figura
goce y autonomía. La sexualidad ha esta- res expresión del patriarcado se movilizan a causa del conflicto armado extrema atenta contra la imagen de padre
do sancionada por la religión y la familia o situaciones de crisis en la familia. La protector y mediador entre el espacio de la
y sólo ha sido posible en el matrimonio Las familias como lo testimonian familia se erige en guardiana de cualquier casa y el espacio público. No cuenta con
y la vivencia libre de la sexualidad es ca- las mujeres, no se reducen a la suma de desviación a dichos códigos y normas. la admiración de casi todas las mujeres.
lificada como el ejercicio de la “puta”. El interacciones entre madre, padre e hijas- Por lo contrario representa un modelo
erotismo es el espacio vital reservado a es- os y las relaciones entre ellos-as; sino que Se encuentran presentes en todas las masculino a rechazar, pero un modelo con-
tas mujeres ubicadas en el lado negativo, se expresan como una totalidad dinámica historias de vida los espacios claramente tradictorio, por un lado, una masculinidad
en el mal, y son consideradas como malas que asume la función de diferenciación y diferenciados para varones y mujeres, valo- fundamentada en una imagen de macho
mujeres. Sin embargo, el erotismo está de lazo entre sexos y entre generaciones. rizando el trabajo de los varones y subva- viril, guerrero y sexualmente irrefrenable;
presente en la vida de todas las mujeres Las familias se presentan como un siste- lorando el trabajo de las mujeres; “todos los y por otro lado, una masculinidad centrada
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en la ausencia de las funciones paternales, 2.5.4. El conflicto armado las surgen propuestas alternativas haciéndose significa una exacerbación tanto de la sub-
del cuidado y la protección. obliga a rehacer sus vidas el panorama más complejo y fragmentado. yugación como del servicio en oposición al
Emergen las mujeres y sus organizaciones cuidado de sí, que favorezca el desarrollo y
Las representaciones del conf licto fami- En el contexto del conflicto armado como protagonistas sociales y políticas y la formación consciente de las mujeres. En
liar tienen dos dimensiones centrales: las subjetividades, las identidades y las su interés por participar en la vida política, este sentido, los sueños, esperanzas, ilusio-
la primera estaba configurada por el eje relaciones entre mujeres y varones son entre otros, son ejemplos de los nuevos pro- nes y expectativas de las mujeres se pos-
autoridad – poder, en este sentido se pre- impactadas. El efecto del conflicto en la cesos que viven luego del conflicto armado tergan y ellas quedan acorraladas por las
sentaban disputas entre quien ostentaba familia es contundente: el aislamiento de que colocan en juicio las visiones tradicio- necesidades de su núcleo familiar. En esta
el poder y quien se considera estaba des- sus integrantes, los lazos se resquebrajan, nales sobre ellas y al mismo tiempo crean situación adquiere vigencia plena para ellas
poseído del mismo, por ejemplo padre – la rabia, el deseo de venganza, la deses- nuevas prácticas y nuevos mensajes sobre “hacer cualquier cosa por los hijos”; se redi-
madre y hermano mayor – hermanas. La peranza, la restricción en los horarios, la capacidad de las mujeres para enfrentar mensiona el rol de madre y los contenidos
segunda dimensión estaba formada por la presencia de temores, las amenazas creativamente la adversidad y el dolor. simbólicos que a través de él se le exigen
el eje celos – reconocimiento, se daban sobre la vida de los varones, las agresio- cumplir a las mujeres. No cabe duda que
desavenencias entre madre – tía y madre nes sexuales padecidas por las mujeres, Las movilidades de roles entre los sexos/ durante los conflictos armados, indepen-
– padre – madrastra. La conjugación de la abstención para participar en la vida géneros y entre generaciones, obliga a con- dientemente de su intensidad y duración
ambas dimensiones pone en escena una de la comunidad, la soledad, el empobre- tinuar viviendo de otra manera, a hacer, a son frecuentes las siguientes situaciones:
tensión por el poder –autoridad encar- cimiento, la muerte y la separación de buscar, a crear algo. En este panorama de
nada en relaciones de reconocimiento y la familia, son algunas de las aristas del cambios e incertidumbres sobre el futuro, • Silencio: Las mujeres padecen el
celos. Las mujeres compiten por el amor conflicto armado en la vida de las muje- en las familias se producen discontinui- abuso sexual, psicológico, físico
del varón, de una manera similar a como res. La pérdida de miembros de la familia, dades, las cuales generan conflictos, nego- y moral de los combatientes y no
la madrastra y la hija se disputan el amor el desplazamiento forzado y las movili- ciaciones y redefiniciones. Pero a pesar de combatientes en silencio, pocas
del esposo - padre. dades en los roles que tradicionalmente estas discontinuidades, las familias tienen veces lo denuncian y cuando lo
han desempeñado mujeres y varones, son la capacidad de ser espacios flexibles y hacen no siempre su palabra tiene
En este contexto de tensión, por lo ge- signos de nuevas dinámicas tanto en los versátiles con gran capacidad para generar eco legal; además culturalmente es
neral, se presentaban manifestaciones espacios privados como en los públicos. cambios y acomodarse a las nuevas reali- usual que no se le considere víctima
de violencia física, verbal y simbólica dades. Además, también se presenta un sino responsable del abuso; el silen-
ejercida por diferentes actores: padre, Los referentes femeninos y masculinos se cierto socavamiento del patriarcalismo por cio parece ser una constante de lo
hermano mayor y abuela castigadores transforman, emergiendo nuevas represen- la tendencia al mayor empleo femenino a femenino provocada por la descon-
de mujeres, niñas y niños. En muchas taciones de la feminidad y la masculinidad la vez que se produce una sobreexplotación fianza en una sociedad patriarcal y
ocasiones la madre y la madrastra, que conviven conflictivamente con los de las mujeres, lo que redunda en mayo- su ejercicio de la legalidad.
también, asumían este rol; convirtién- antiguos modelos. El modelo tradicional res tensiones hacia la vida familiar y una
dose en una suerte de verduga de sus caracterizado por una sobre valoración nueva distribución del estrés social, antes • Sometimiento: Las mujeres tienen
propios hijos e hijas y de vigilantes de de la maternidad, la superioridad moral asociado principalmente al varón. que acceder a los caprichos de quie-
la obediencia a la palabra del padre, el de las mujeres y la pureza a semejanza de nes combaten pues ellos ejercen el
hermano mayor y la abuela; esta última la virgen María, ha dejado de ser el más Durante y después del conflicto la bina sub- control social y la única forma de
era quien encarnaba la tradición que importante símbolo disponible para las yugación - servicio adquiere los matices de preservar la vida, en muchas situa-
legitimaba la acción masculina. mujeres. Al lado de esas representaciones silencio, sometimiento y sacrificio, lo cual ciones, implica aceptar la voluntad
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de otro aunque dicha acción signi- las obligó a cargar con la familia y en con- La entrevistada que vive con su compa- En el cuerpo femenino quedan las huellas
fique contradecir el propio deseo, secuencia a decidir. ñero afirma tener conflictos con él por de la barbarie, unas perdieron peso por
este es el caso de las mujeres que son su rol de líder. Se puede pensar que las las tensiones y hambre que acompañan al
esclavizadas de diferentes formas El conflicto armado incidió en la familia de dimensiones del conflicto poder – auto- desplazamiento, otras en sus manos mues-
como son lo doméstico y lo sexual. las mujeres en forma contundente: amena- ridad y reconocimiento – celos, siguen tran la sobrecarga de trabajo. Se resecan
zas, acusaciones de pertenecer o favorecer vigentes pero adquieren nuevas formas; la tierra, el cuerpo y la sexualidad, el por-
• Sacrificio: Las mujeres se ven obli- a uno de los grupos en contienda, pérdida por ejemplo, el poder – autoridad está venir parece no existir, el tiempo se dilata
gadas a atender a su familia incluso de todo tipo de bienes, muerte del compa- presente en los reclamos por el liderazgo en la pobreza y se encoge para conseguir
a su esposo, pues los varones, sin ñero, entrega de hijos al ejército para que y el eje reconocimiento – celos está en las comida. Las amigas quedaron atrás, los re-
considerar la edad, muchas veces no se los lleven otros grupos armados, des- demandas de los hijos a las madres. Sin cuerdos de afecto se diluyen en el pasado y
quedan en situaciones precarias aparición y desplazamiento forzado. Los embargo, hay una variación que vale la solo quedan fragmentos de la solidaridad
(con limitaciones físicas y/o psi- cambios en la familia modificaron los roles pena señalar: la tensión sexual fue des- gestada en medio de la marginación de los
cológicas), haciendo que la mujer de varones y mujeres, en el caso de ellas, al plazada por un reclamo en lo afectivo, desplazados y desplazadas, quienes año-
ofrezca su vida al servicio de sus se- rol tradicional de madres y amas de casa, pues antes se tenían celos por otra mujer ran sus ríos, quebradas, plantas, sonrisas
res queridos; un ejemplo de ello son se suman las responsabilidades económi- ahora el hijo tiene celos de sus hermanos y juegos de sus niños y niñas. Quedaron
los efectos del desplazamiento, en cas y el liderazgo social. La participación o hermanas, en síntesis la mujer pasa de viudas, sin vivienda, desplazadas, pobres,
la mayoría de los casos las mujeres de las mujeres se carga con otras responsa- ser quien siente celos de su marido a ser solas, separadas de sus seres queridos y
son las responsables de las condicio- bilidades después del conflicto armado, se celada por sus hijos. con la incertidumbre por el futuro. Todas
nes económicas y emocionales de la sienten acorraladas por las circunstancias sienten que lo que les tocó vivir es el resul-
familia. Los varones, por su forma- y su acción no se limita al núcleo familiar, Es importante señalar que esta actitud tado de la acción de los enfrentamientos
ción, consideran muchos trabajos sino que se extiende a la vecindad y al gru- de las mujeres no exclusivamente un re- entre los diversos actores armados por la
innobles de su condición masculina. po de mujeres que comparte su situación, sultado del conflicto armado; sino más disputa del territorio y el poder político.
en este caso el desplazamiento forzado. bien, el producto del fortalecimiento del
Como lo narraron las mujeres, debido a la Por su parte, los varones que sobreviven al rol materno que la empuja a abrirse cami- Después del conf licto armado, el cuerpo
situación de conflicto armado, las mujeres conflicto parecen diluirse hasta convertir- no cueste lo que cueste; en este sentido, tampoco es el objeto – sujeto de la dis-
adultas no solo cargan con la responsabili- se en una sombra desde la distancia, pues nunca se podría pensar que el conflicto cusión; es más bien, el texto en el cual
dad de su familia nuclear, sino también en se fueron del hogar o se quedaron en la contribuye a la autonomía femenina, sino unos y otras, cercanos y extraños pueden
muchos casos con la de la familia extensa, casa pero con la palabra silenciada. que ante la soledad y el abandono mascu- leer los efectos de la guerra, marginación
sobre todo con las mujeres jóvenes y an- lino ella cumple con los dos roles. Tam- y explotación de quienes han querido ne-
cianas Bajo esta perspectiva es importante Los conflictos familiares cambiaron, los bién en el cambio de la mujer juega un pa- garles el derecho al ser. El conf licto ar-
precisar que si bien las mujeres ahora to- hijos empiezan a ocupar un rol como pel decisivo la relación con otras mujeres mado se encarna, se hace cuerpo porque
man decisiones, dicha situación más que agentes de disputa y confrontación. Las dispuestas a salir adelante. Construyen testimonia el resecamiento de la vida, de
obedecer a un acto voluntario responde a entrevistadas afirman que discuten con alianzas solidarias y proyectos comunes la insensatez de la acción que derrama
una coyuntura provocada por la muerte, sus hijos porque ellos se sienten menos desplazando la patria, lo cual se traduce sangre, siembra desperanza y promueve
desaparición, desolación, depresión, ines- queridos, también porque no cumplen en una mayor conciencia de su ser feme- temor, el cuerpo de las mujeres se hace
tabilidad o huida de sus compañeros; en con las demandas de ellas o simplemente nino y en la disminución de antagonismos cargo de este sufrimiento y su piel parece
otras palabras, no tuvieron opción y la vida por las condiciones económicas adversas. entre ellas. la faz de un desierto con pequeños oasis
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que se dejan ver en la ternura, genero- 2.5.5. Resistiendo, viviendo, paradoja: por un lado, sufrir el acorra- La existencia de organizaciones de muje-
sidad y valentía de estas mujeres que se resistiendo lamiento de los diferentes grupos en res, el intercambio de sus experiencias de
echaron encima la vida. contienda. Se ve desplazada de su par- sumisión a la autoridad patriarcal, su ra-
Las formas de resistencia femenina cela, terruño, vereda y/o barrio pero se bia, su interés y compromiso ha conferido
El concepto de conf licto deja el ámbito surgen de la necesidad de actuar ante la le impide movilizarse. Por el otro, se le a estas mujeres tal coraje y fortaleza, que
privado, para ser considerado un asunto barbarie padecida por varones, mujeres, reclama, culturalmente ser “salvadora” y han sido capaces de construir acciones de
social que implica la vida de mujeres, niños y niñas; no hablan de una reacción reparadora de una sociedad construida resistencia no solo al conflicto armado sino
hombres, niñas y niños, todas tienen afincada exclusivamente en el efecto per- sin su plena participación, a través del también a la cultura patriarcal. Al principio
claro el carácter público del conf licto y sonal, sino en la situación de su comuni- amor, cuidado, ternura y protección que no pensaron que el desplazamiento fuera
piensan que hay razones sociales que lo dad, en cómo hacer frente a la impotencia puede brindar en el núcleo familiar, a la una forma de resistencia pero éste las llevó
provocan, más reconocen que hay una por el hecho de que los jóvenes mueran, vez, que se le acusa de ser responsable de a ver la importancia de la organización,
violación incesante de los derechos hu- de que las jóvenes se involucren en el con- conductas violentas y agresivas entre las- realizar marchas de protesta, reclamar sus
manos. Sobre los grupos armados y sus flicto y que el futuro desaparezca ante os jóvenes por haber ingresado al mundo derechos; acudir a donde estaban los me-
prácticas en lo público piensan que “no los propios ojos. Es ante el poder de los laboral. Bajo este enfoque las mujeres dios de comunicación nacionales e inter-
hacen nada bueno, secuestros, desalojos, varones y actores armados que se deben parecieran no contar con las condiciones nacionales; entablaron acciones de tutela
saqueos, extorsiones, vacunas, matanzas implementar acciones de resistencia. para ser para sí misma, y para actuar de en la defensa de sus derechos, participaron
y amenazas”. Para ellas son los respon- acuerdo a su conciencia sin la presión de de foros y se tomaron lugares públicos
sables de su indefensión pues por ellos Tres elementos son claves en la resisten- agentes exógenos que les reclamen ejercer como espacios de vivienda. Aprendieron a
están desplazadas y sus hijos e hijas no cia de las mujeres: palabra, unión y orga- el rol de madre tradicional o mujer gue- tener palabra pública y reconocieron que
pueden estudiar y no tienen garantías de nización; en este sentido, se han trans- rrera; lo cual constituye los polos de una solo a través de organizaciones sus deman-
salud. Sienten temor que las maten y/o formado en relación con la socialización misma posición patriarcal, que somete a das podrían tener eco. Mientras vivían esta
a sus hijos-as, que las torturen, las cojan tradicional que las empujaba a no ponerse la mujer a una ética de servicio para otro situación extendieron lazos de solidaridad
o desaparezcan a un integrante de sus de frente y enfrente de su palabra, a estar ya sea hija-o, padre-madre, esposo, her- con otras mujeres, se hicieron compañeras
familias. La inseguridad tiene un lugar en bandos opuestos luchando por el reco- mano-a o comunidad. y crearon una red de comunicaciones y
importante en su cotidianidad reconocen nocimiento masculino y a no emprender apoyo alimentario a través de restaurantes,
sentir temor en el espacio público y en el acciones públicas con impacto social. El El desplazamiento opera como un estalli- y están forjando posibilidades económicas;
privado. silencio es otra estrategia de resistencia, do en el orden y tejido social, pues invierte en definitiva, las mujeres le están dando la
para enfrentar el poder y la guerra tanto los roles de unas y otros, ellas enfrentan el cara y el corazón a la vida.
Cada mujer de forma diversa y con len- en lo público como privado. Silencio no nuevo mundo con un sentido agudo de la
guajes variados manifiesta que la única como elemento de resignación y acepta- responsabilidad familiar, él se desvanece Las mujeres en sus búsquedas, esperanzas
salida al conf licto es la organización ción sino como forma de sobrevivir ellas en la añoranza y pesadumbre de lo per- y dolores han tenido la capacidad de dise-
y por ende la solidaridad, y para que y sus familias. dido. Para él, el desplazamiento traduce ñar medidas de protección como fortalecer
esto se logre, en palabras de una de las muerte simbólica, para ellas penurias que la comunicación y advertir sobre lugares y
mujeres entrevistadas, “las mujeres no Antes, durante y después del conflicto se deben enfrentar y sobrepasar. Bajo esta situaciones, lo cual llevó a redefinir las re-
podemos, no debemos, no queremos se- armado las mujeres colombianas pare- óptica, ante el desplazamiento las mujeres laciones con los vecinos. Para algunas mu-
guir calladas ni por decisión y menos, cieran estar condenadas por la cultura se erigen sobre sí mismas, mientras que los jeres la única opción fue el desplazamiento
por imposición” patriarcal a protagonizar una extraña hombres se repliegan en su ser. intra urbano o regional. El encuentro con
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otras mujeres se convierte en la forma de resistencia más importante para ellas, en un
espacio y una sociedad que las agrede de manera permanente, pero que a la vez les exige
sostener y resolver los efectos del conflicto en términos sociales y familiares. Por ello
tienen claridad, que es en la acción colectiva con otras mujeres en donde tienen la opción
para salir adelante. La solidaridad, reconocimiento y apoyo de otras mujeres, es la clave
para avanzar un escalón en la recuperación de su identidad, la recuperación económica y
tejer lazos que las afiancen en el nuevo y desconocido territorio.

Las mujeres, presentan sentimientos de optimismo y pesimismo en relación con la resolu-


ción del conflicto armado, pues consideran que son variados y antagónicos los intereses en
juego y que pareciera no existir una real voluntad para buscar una salida negociada. Pero
esperan del Estado, apoyo económico que les permita superar las condiciones de pobreza
en las que las deja el desplazamiento; recuperar la tierra que debieron abandonar y el re-
torno a su cultura, a su territorio. Algunas esperan que el Estado combata con autoridad a
los grupos armados. De los grupos armados esperan que “recapaciten”, que dejen las armas
o “que respeten los derechos humanos.

La gran mayoría aún tiene ilusión y le apuesta a la vida, están ahí, cada rostro es la pro-
mesa de una voz y una ilusión. Mujeres que fusionan su diferencia a favor de una acción
civil enarbolando su deseo de transformación. Diferencia femenina que acoge a la otra,
haciéndola parte de la ilusión, del sueño y de la vida.
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160 161
Anexo 1. Categorías
iniciales
FUENTES
Historia de Historia de Historia de Historia de Historia de
(deductivas) vida 1 vida 2 vida 3 vida 4 vida5
Matrices para la sistematización Vida Comunitaria
Matriz para la primera categorización. Tiempo Cronológico niña (Dimensiones
de la vida
La categorización se inició definiendo la unidad de análisis a partir de la cual se podía comunitaria)
descomponer la información. Y se construyó una tabla que agrupara las categorías derivadas Matriz para la primera categorización.
de las preguntas de las historias de vida y organizará las respuestas por la fuente de Tiempo cronológico mujer adulta afectada por el conflicto
información.
Antes del conflicto
Categorías Historia de Historia de Historia de Historia de Historia de
Categorías FUENTES iniciales vida 1 vida 2 vida 3 vida 4 vida5
iniciales Historia de Historia de Historia de Historia de Historia de (deductivas)
(deductivas) vida 1 vida 2 vida 3 vida 4 vida5 Familia y
Concepto(s) conflicto
de poder armado
(Conformación de Roles y
la familia-toma de jerarquías en
decisiones) la familia
Roles y jerarquías Conflictos
en la familia familiares
Concepto de Dimensiones
conflicto familiar personales
(Representaciones y culturales
sobre conflictos sobre la
familiares) afectividad
Dimensiones Dimensiones
personales y personales
culturales sobre la y culturales
afectividad sobre la
Dimensiones sexualidad
personales y Dimensiones
culturales sobre la personales
sexualidad y culturales
Dimensiones sobre el
personales y cuerpo
culturales sobre el Vida
cuerpo comunitaria
162 163
Después del conflicto
Concepto de
Después del conflicto actores armados
Categorías Fuentes y sus prácticas
iniciales –Público
Historia de Historia de Historia de Historia de Historia de
(deductivas) Concepto de
vida 1 vida 2 vida 3 vida 4 vida5
actores armados
Familia y conflicto
y sus prácticas
armado
–Privado
Roles y jerarquías
en la familia
Conflictos
familiares
Segunda matriz para la categorización y el establecimiento de sub-categorías.
Dimensiones
Tiempo cronológico niña, mujer adulta antes y después del conflicto
personales y
culturales sobre la
Después de la primera categorización, se reorganizaron las categorías que arrojaron resultados
afectividad
que podría ser agrupados en otros temas, teniendo en cuenta los tiempos cronológicos en los
Dimensiones cuales se periodizaron las historias de vida:
personales y
culturales sobre la
Tiempo cronológico niña, mujer adulta antes y después del conflicto – familia y dinámicas
sexualidad
Categoría deductiva (general) Historia de vida 1
Dimensiones
personales y Proposiciones agrupadas por Categorías inductivas
culturales sobre el temas (subcategorías)
cuerpo Concepto(s) de poder. Ejercicio de autoridad en la
Vida Comunitaria (Conformación de la familia: familia
toma de decisiones y roles) Toma de decisiones relativas
Formas de
al hogar
resistencia
y respuesta Toma de decisiones relativas
– Público a la vivienda
Formas de Toma de decisiones relativas
resistencia a la economía
y respuesta Toma de decisiones relativas
– Privado a la educación
Concepto de Forma en que se tomaban las
sí misma en el decisiones
conflicto
Concepto del
conflicto
164 165
Tiempo cronológico niña, mujer adulta antes y después del conflicto – familia y dinámicas Tiempo cronológico niña, mujer adulta antes y después del conflicto – familia y dinámicas
Roles y jerarquías en la Rol principal de la madre Dimensiones personales y Principal recuerdo sobre el
familia Rol principal de las mujeres culturales sobre la afectividad afecto, el amor y la amistad
con niños y niñas
Rol principal del padre
Normalización y Calificación
Rol principal de los varones de los roles de las niñas
Tres roles asignados cuando Expresiones de afecto entre
niña a la entrevistada padre y madre
Persona más poderosa para la Persona que más la influenció
entrevistada (de niña) en su afectividad
Persona con más autoridad Dimensiones personales y Educación sexual
para la entrevistada culturales sobre la sexualidad Conceptos de la familia sobre
Concepto de conflicto Situaciones que generaban la sexualidad y el afecto
familiar (Representaciones más conflictos familiares Persona que más la influenció
sobre conflictos familiares) Formas de resolución de en su sexualidad
Sujetos(as) entre conflictos familiares Reconocimiento a los
los que se presentaban más Respuesta de la entrevistada sentimientos, pensamientos y
conflictos a los conflictos familiares deseos de las niñas
Respuesta de la entrevistada Sujetos(as) y permisividad en
cuando estaba involucrada en las demostraciones de afecto
el conflicto Dimensiones personales y Gusto por el propio cuerpo
Persona a la que acudía la culturales sobre el cuerpo Posibilidad de realizar la
entrevistada
voluntad propia
Sujeto(s) a(s) que resolvían
Sueños de niña
los conflictos
Prácticas de resolución más ¿Qué quería ser como mujer?
frecuentes: diálogo, silencio, Sujetos(as) y permisividad
violencia física y/o verbal en las demostraciones de
Miembros de la familia que sexualidad
ejercían estas prácticas
Situaciones en las que se
ejercían estas prácticas
166 167
(Footnotes)
1
.NICHOLSON. Linda J. Compiladora. Feminismo y posmodernismo. Feminaria. Editora Buenos Aires. 1992. Pp. 27.
2
HARAWAY, Donna J. Ciencia, Cyborgs y mujeres. La reinvención de la naturaleza. España. Ediciones Cátedra.1995. Pg. 322.
3
HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp.319-320.
4
. HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp. 321.
5
HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit . Pp. 319-320.
6
HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp. 324.
7
HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp.325 -326
8
HARAWAY, Donna J.1995. Op-cit. Pp.327.
9
HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp.328.
10
: HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp..329.
11
HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp.341.
12
.HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp. 343.
13
HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp. 345.
14
. HARAWAY, Donna J. 1995. Op-cit. Pp. 346.

15
MIES, Maria. ¿Investigación sobre las mujeres o investigación feminista?. El debate en torno a la ciencia y la metodología feminista en Deba-
tes en torno a la metodología feminista. Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Xochimilco. México.1998. Pp. 99.
16
MASSOLO, Alejandra. “Testimonio autobiográfico femenino: un camino de conocimiento de las mujeres y los movimientos urbanos en
México.” En multicopiado. Sin datos. Pp 13.
17
. MASSOLO: Alejandra. Op-cit. Pg. 11
18
. MASSOLO, Alejandra. Op-cit. Pp. 10.
19
MASSOLO, Alejandra. Op-cit Pp. 16.
20
.MASSOLO, Alejandra. Op- cit Pp. 19.
21
Nasa significa gente, ser humano y, yuwe significa boca, palabra, idioma. En consecuencia se trata del idioma de los nasa.
22
Carambantúa, es canto tradicional. Tomado de Alé Kuma Cantaoras.
23
.JONASDOTTIR, Ana. . El poder del amor:¿Le importa el sexo a la democracia?. Colección feminismos. Ediciones Cátedra. Madrid. 1993.
Pp.45.
24
ORTIZ- OSÉS. Andrés. Mundo, Hombre y Lenguaje Crítico. Ediciones Sígueme: Salamanca. 1975. P. 20
25
. LAGARDE Marcela. Identidad genérica y feminismo. Instituto Andaluz de la Mujer, Sevilla España. 1998. Pp. 15-16..
26
CLADEM-CORPORACION CASA DE LA MUJER, Diagnóstico sobre derechos sexuales y reproductivos, Colombia 1995-2000, p.
15. Bogotá 2004.
27
. La estrategia bélica de las fuerzas combinadas militares-paramilitares pretende dar solución de continuidad sobre esta espacialidad en forma
de herradura. Uno de los extremos se inicia en el eje de producción petrolera (las dos vertientes de la cordillera Oriental) y del oleoducto que
concluye en el golfo de Morrosquillo. Igualmente buscan controlar las zonas de cultivos ilícitos en las altillanuras del Orinoco y Amazonas,
y el territorio estratégico para la construcción del canal interoceánico. Lo anterior explica la alianza de las autodefensas de Córdoba y Urabá
(controladas por los hermanos Castaño) y los paramilitares dirigidas por Víctor Carranza (controlan zonas de Cundinamarca, Boyacá, Meta
y Casanare), en la autodenominada organización Autodefensas Unidas de Colombia. De esta forma ejército y autodefensas hacen presencia y
ejercen control en las zonas petroleras de Putumayo, Casanare, Meta y a lo largo del Magdalena. Los ejércitos de la insurgencia operan en estas
áreas, por lo que el nivel del conflicto es más agudo en estas zonas. Ello explica la acción militar a través de bombardeos y operativos en las lla-
nuras del Yarí, las altillanuras del Orinoco, zonas de cordillera y Chocó biogeográfico. Estas acciones afectan principalmente a las comunidades
allí asentadas, teniendo que desplegar diversas formas de sobrevivencia y provocando innumerables desplazamientos forzosos por razones de la
violencia política y los intereses económicos asociados.
28
. Esta situación explica los procesos de privatización de las empresas del Estado, las medidas de desregulación económica y las nuevas leyes
que entregan la soberanía del subsuelo y la biodiversidad a las transnacionales, violando los derechos de los colombianos establecidos en la
Constitución- el caso que afecta la comunidad indígena U´wa es uno de los más ilustrativos-.
29
CLADEM-CORPORACION CASA DE LA MUJER, 2004, op-cit. P p 15.
30
CONFLICTO URBANO Y DERECHOS HUMANOS EN MEDELLÍN. BALANCE DESDE DIFERENTES SECTORES SO-
CIALES - 2002. IPC. Primera edición Mayo 2003, Medellín. P 18.
31
Hipótesis corroborada durante el trabajo de campo realizado para la monografía de grado titulada “Mito-Identidad-Territorio. Una Propues-
ta de Hermenéutica Urbana. El caso de la Antioqueñidad en Medellín.” Departamento de Antropología, Universidad de Antioquia.1995 por
López, Sandra y Murillo, Gonzalo. Trabajo en el cual se indago por la antioqueñidad como mito, es decir matriz de significación que sirve de
lecho a la configuración de un ser cultural.
32
. POVEDA Sandra. El Putumayo como escenario de las políticas antidrogas, y la afectación en la vida de las mujeres. Ruta Pacífica de la
Mujeres. 2003. Pp. 17.
33
SÁNCHEZ, Maria Dolores, “La sustentabilidad del desarrollo” en: VARGAS, Ricardo, “Desarrollo Alternativo en Colombia: Pautas para
una redefinición política”. Ed. CINEP, Bogotá, septiembre 1994. Pp 11.
168 169
34
MINISTERIO DEL MEDIO AMBIENTE. “El Putumayo, el medio ambiente y los cultivos de uso ilícito”. Bogotá enero de 1999.
35
VARGAS MEZA Ricardo. Fumigación y Conflicto. Santafé de Bogotá 1999. TM Editores-TNI-Acción Andina. Página 107.
36
. POVEDA, Sandra. 2004. Op-cit Pp 22
37
POVEDA, Sandra. 2004. Op-cit Pp 26
38
Se entienden como los mecanismos culturales que las instituciones y las personas interiorizan como dados, y que estructuran la subjetivi-
dad.
39
POSADA GONZÁLEZ. Carmen. Estudio Exploratorio “Interrelaciones entre la violencia intrafamiliar y la violencia socio – política”.
CERFAMI, Centro de Recursos Integrales para la Familia. Consejería para la Mujer. Medellín 2000. P 8.
40
CONFLICTO URBANO Y DERECHOS HUMANOS EN MEDELLÍN. Balance desde Diferentes Sectores Sociales - 2002. IPC.
Primera edición Mayo 2003, Medellín. P 89
41
MENDOZA, BALCÁZAR Ursula. Impacto del Conflicto Armado sobre las Mujeres Afro colombianas. Fundamentado en la información
aportada por las mujeres participantes en el taller nacional con mujeres afro colombianas “Efectos de la violencia del conflicto armado en las
mujeres afro colombianas”, organizado por la Mesa de Trabajo “Mujer y Conflicto Armado”, septiembre 23 a 25 de 2002. En Mujer y Conflicto
Armado. Informe sobre violencia sociopolítica contra mujeres y niñas en Colombia. Tercer Informe 2002. Bogotá, 2003. P 23
42
Es necesario señalar que las diversas dinámicas de desplazamiento expresan también la existencia de un conjunto de conflictos y guerras
regionales, dentro de las cuales los escenarios son muy diversos coyuntural e históricamente.
43
Cfr. REYES, POSADA Alejandro. Paramilitares en Colombia: contexto, aliados y consecuencias”. En: Análisis Político, No.12. Bogotá:
Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales, Universidad Nacional. Enero – Abril de 1991. Pp.10.
44
Cfr. PUYANA Yolanda y MUTIS Aura María. Cultivos Ilícitos y desplazamiento en la Amazonia y la Orino quía. En: Desplazados, Migra-
ciones internas y Reestructuraciones Territoriales. Editores: Fernando Cubides, Camilo Domínguez. Observatorio Socio – político y Cultural
– Centro de Estudios Sociales, Universidad Nacional de Colombia. Ministerio del Interior. 1999. Pp. 8.
45
Cfr. CODHES INFORMA Boletín de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento. No. 34. Alarma en las Fronteras
por el Plan Colombia. Bogotá. 2000. Pp.5.
46
TOBON O, Gloria y OTERO V, YuIi. Mujeres y desplazamiento una realidad en la Ciudad de Montería. Corporación María Cano. Mon-
tería Córdoba 1997. Pp. 22.
47
MEERTENS Donny. Víctimas y sobrevivientes de la guerra: tres miradas de género. En la revista Foro No 34 Ediciones Foro Nacional por
Colombia. Bogotá junio de 1998. Pp. 16.
48
. MESA DE TRABAJO MUJER Y CONFLICTO ARMADO. Informe Preliminar para la relatora especial de Naciones Unidas sobre
violencia contra las mujeres. Bogotá, 2001. Pp.7.
49
Comisión Colombiana de Juristas. Situación de las mujeres y niñas víctimas de violencia sociopolítica y el conflicto armado en Colombia,
Bogotá, marzo de 2000. mimeo.
50
La Convención sobre los Derechos del Niño, en su artículo 1°, define una niña o niño como persona menor de 18 años.
51
Se clasifican como “jóvenes” las víctimas respecto de las cuales la fuente o la noticia exprese esa característica, sin precisar la edad, y las víctimas
con edades expresadas de 18 a 25 años incluso.
52
MENDOZA, BALCÁZAR Ursula. Impacto del Conflicto Armado sobre las Mujeres Afro colombianas. En Mujer y Conflicto Armado.
Informe sobre violencia sociopolítica contra mujeres y niñas en Colombia. Tercer Informe 2002. Bogotá, 2003. P 33
53
CUERO, Margarita. Olaymeló. Tomado de Alé Kuma Cantaoras. Con esta canción Margarita Cuero enseño a sus nietas Benigna y Emeris,
las voces del currulao.
54
LÓPEZ, MARTÍNEZ. Esther. Fragmento del poema Es Difícil. En Lluvia de Palabras. Centro literario de Antioquia. Poemario 15 años.
Medellín. 1994. P 15
55
LAGARDE Marcela. 1998. Op-cit. Pp. 21.
56
. LAGARDE Marcela. 1998. Op-cit. Pp. 43.
57
. LOPEZ CASTAÑO, Martha. Del dolor y el exilio, a la construcción de la identidad femenina de las mujeres desplazadas. Bogotá, 1996.
Pp. 43.
58
. LAGARDE Marcela. Los cautiverios de las mujeres: madre esposas, monjas, putas, presas y locas. Universidad Autonoma de México,
UNAM, 1997, Pp. 177.
59
. LAGARDE Marcela. 1997. Op-cit. Pp. 180.
60
. LAGARDE Marcela. 1997. Op-cit. Pp. 190..
61
. BURIN Mabel. Estudios sobre la subjetividad femenina. Mujeres y salud mental. Grupo Editor Latinoamericano, Buenos Aires Argentina,
1987. Pp 129.
62
. BURIN Mabel. 1987. Pp. 130.

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