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UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y SOCIALES


COMISIÓN DE ESTUDIOS DE POSTGRADO
POSTGRADO EN CIENCIAS ADMINISTRATIVAS
DOCTORADO EN GERENCIA

Seminario:
Métodos Cualitativos y Competencias para la Investigación

El método de Investigación-Acción y su
aporte al conocimiento científico y a la Gerencia

Prof. Participante
Dr. Esmelin Graterol MSc. César Salazar Acevedo

CARACAS, 20AGO18

1
INDICE

Pág.
Resumen 3
Abstract 4
Introducción 5
Desarrollo 6
1. La investigación cualitativa 6
2. Origen del método de Investigación-Acción 12
3. La Investigación – Acción; el término y el método 15
4. La Investigación – Acción en las tesis doctorales 22
5. La Investigación – Acción y su aporte a la Gerencia 23
Conclusiones 25
Bibliografía 26

El método de Investigación-Acción y su
aporte al conocimiento científico y a la Gerencia

Autor: MSc. César Salazar Acevedo

RESÚMEN

2
El presente escrito tiene como propósito realizar un análisis de los aspectos que conforman el
método de Investigación – Acción desde su origen dentro del enfoque de tipo cualitativo, pasando por
sus componentes y características, con el fin de contribuir a la visualización y comprendimiento de
esta importante herramienta para el investigador. En primer lugar, se realiza un preámbulo en lo
referente a la investigación de corte cualitativa, su relación y diferencias con respecto a su
contraparte en el aspecto cuantitativo, semejanzas, diferencias y la complementareidad entre estas al
momento de efectuar una investigación. Seguidamente se observa una síntesis justificativa del origen
y surgimiento del método de Investigación – Acción, así como también sus principales atribuciones
como aspecto fundamental en la resolución de situaciones problemáticas, mejoramiento de
ambientes laborales y agentes promotores de transformación y cambio en las organizaciones.
Posteriormente, y asumiendo la pertinencia del tema en comento con los estudios actualmente
desarrollados, se ubica la relación entre el referido método de investigación con la elaboración de
tesis doctorales y el aporte al ámbito gerencial. Finalmente, se presentan las conclusiones obtenidas
a partir del presente ensayo, en las cuales encontramos los momentos medulares que fundamentan
la utilización del método, así como también los aspectos en los cuales ha sido producto de críticas
provenientes de otras corrientes y autores con posturas epistémicas contrarias.

Descriptores: Enfoque cualitativo, Investigación, Investigación – Acción, Sujeto de estudio,


Organización, Solución de problemas.

The Research-Action method and its


contribution to scientific knowledge and Management

Author: MSc. César Salazar Acevedo

3
ABSTRACT

The purpose of this paper is to carry out an analysis of the aspects that make up the
Research - Action method from its origin within the qualitative approach, going through its components
and characteristics, in order to contribute to the visualization and understanding of this important tool
for the researcher. First, a preamble is made regarding qualitative research, its relationship and
differences with respect to its counterpart in the quantitative aspect, its similarities, differences and the
complementarity between them at the time of conducting an investigation. Following is a summary
justifying the origin and emergence of the Research - Action method, as well as its main attributions as
a fundamental aspect in the resolution of problematic situations, improvement of work environments
and promoters of transformation and change in organizations. Subsequently, and assuming the
pertinence of the subject in comment with the currently developed studies, the relationship between
the aforementioned research method is located with the elaboration of doctoral theses and the
managerial scope. Finally, the conclusions obtained from the present essay are presented, in which
we find the core moments that support the use of the method, as well as the aspects in which it has
been the product of criticisms coming from other currents and authors with opposite epistemic
positions .

Descriptors: Qualitative approach, Research, Research - Action, Subject of study, Organization,


Problem solving.

INTRODUCCIÓN

Es del conocimiento de muchos que tanto en los tiempos actuales como en anteriores épocas,
la búsqueda del conocimiento y posteriormente la posesión del mismo ha dominado las masas a
través de distintos elementos, bien sea de acción, textuales o lingüísticos, expresados estos últimos
mediante la versatilidad del discurso, con sus distintas modalidades y acepciones. Es por ello que es
de suma importancia que la información, obtenida a través del conocimiento científico y este a su vez

4
producto de la investigación, sea capaz de satisfacer interrogantes y necesidades del ser humano, a
fin de contribuir eficazmente con el desarrollo de las sociedades.

De igual manera, el devenir de las ciencias ha traído como consecuencia la multiplicidad de


paradigmas, enfoques, métodos, teorías, etc, que decantan en mejores procesos y prácticas, con el
objeto de comprender en sus diferentes facetas el mundo que nos rodea.

En el ámbito de las ciencias sociales, por una parte hay un nuevo enfoque que abandona la
neutralidad y apoliticidad que las había caracterizado, por otro lado se produce un cambio de
paradigmas que tiene también su incidencia en lo estrictamente metodológico. Basado en ello, una
actitud aséptica, lejana y no comprometida frente a lo que se estudia, es suplida por un compromiso
de la acción, por una opción de clase y por una metodología (cognitiva y de acción a la vez),
preocupada por solucionar los problemas concretos que afectan de manera especial a los sectores
populares.

En este sentido, el método de investigación – acción surge al final de la primera mitad del siglo
XX como nueva propuesta metodológica, dentro de un contexto caracterizado por una variada gama
de preocupaciones teóricas y prácticas que inciden en la búsqueda de nuevas formas de intervención
e investigación social, con miras a proporcionar soluciones concretas a las diferentes situaciones
problemáticas presentes en grupos y organizaciones de distintos niveles y características.

Es por ello que el propósito del presente escrito es desentrañar el origen, características y
evolución del método de Investigación – Acción como un importante componente de la comunidad
científica, así como también al aporte realizado al ámbito gerencial en el sentido de contribuir con el
apuntalamiento de organizaciones sanas, eficientes, humanas y productivas, con un camino
claramente trazado hacia el desarrollo y progreso de sus respectivas sociedades.

DESARROLLO

1. La Investigación Cualitativa

Ciertamente, desde sus orígenes el ser humano ha sentido la necesidad de sobrevivir ante los
constantes y permanentes cambios que se han presentado a lo largo de la historia de la humanidad,

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desde las eras prehistóricas hasta el actual siglo XXI pasando por una gran cantidad de momentos
evolutivos, cada una con sus características específicas y marcadas por hitos temporales y hechos
determinantes en el desarrollo de las distintas sociedades que conforman el globo terráqueo.

En este devenir, el individuo se ha preguntado, criticado, clasificado, categorizado,


cuestionado, etc no sólo las interrogantes básicas tales como el por qué, dónde, cuándo y cómo de
todo cuanto le rodea, bien sea del mundo natural o de lo artificialmente construido, sino también de
ése mundo complejo y en ocasiones complicado que representa el interior del ser humano, tanto en lo
biológico y anatómico como en lo mental, e inclusive el plano espiritual.

Tales ansias de conocimiento han tenido a lo largo de la historia innumerables y destacados


exponentes, tanto en lo individual como agrupados en escuelas del pensamiento, como lo fueron los
antiguos sofistas y filósofos griegos, el círculo de Viena, la escuela de Franckfurt, etc. Todos ellos,
indiferentemente de sus posiciones paradigmáticas, se vieron influenciados y motivados por un factor
común que no ha variado en el devenir del tiempo, y no es otro que la necesidad de buscar, descubrir
y controlar el conocimiento en sus múltiples expresiones y derivaciones, con el objeto primordial de
comprender el entorno que los rodea y de esta manera tener la posibilidad en su mayoría de
contribuir a facilitar las diferentes acciones que se ejecutan en el quehacer diario del ser humano,
permitiendo de esta manera el desarrollo de las sociedades en pro de beneficios que garanticen
aspectos como calidad de vida, compartimiento del conocimiento y nuevas áreas de formación, entre
otros.

En este sentido, es donde aparece y calza perfectamente el término angular del conocimiento,
como lo es la investigación en sus diferentes modalidades. Y es que la investigación ha sido el
eslabón ideal, el puente por excelencia que enlaza la dimensión de lo no conocido con lo que está por
descubrirse e inclusive actualizar y/o mejorar. Se investiga para descubrir, para responder
interrogantes que el ser humano se plantea ante hechos y vivencias sin explicación aparente, ante
divergencias y dicotomías presentes entre la teoría y la práctica, o bien sea para llenar algún vacío en
los conocimientos previos.

Es por ello que, para hacer descubrimientos el investigador necesita una serie de virtudes
tanto innatas como adquiridas que contribuyan de manera significativa a la consecución y
consolidación de etapas en el proceso general de investigación, con el fin de lograr alcanzar los
propósitos previamente establecidos, entre las cuales destacan virtudes como la objetividad y la
sensibilidad.

6
Tal como lo expresa el biólogo Selye (1956), citado por Strauss y Corbin (2002), no es el
hecho de ser el primero en ver algo, sino de establecer conexiones sólidas entre lo que se conocía
antes y lo hasta ahora desconocido, lo que constituye la esencia del descubrimiento específico.

Lo señalado previamente nos indica que la interacción entre el investigador y la investigación


amerita un equilibrio de suma importancia en el proceso general de investigación, ya que el nivel de
objetividad que utilice durante el desarrollo de la misma le permite tener una mayor o menor grado de
confianza en el hecho de que sus hallazgos sean razonables e imparciales en el problema que se
esté tratando, mientras que la sensibilidad le permite alcanzar dotes de creatividad y descubrir
nuevas posturas y teorías a partir de los datos encontrados.

En el marco de lo anteriormente expresado, Palella y Martins (2006) señalan que la


investigación se aplica a múltiples acciones que realiza el ser humano para satisfacer su búsqueda o
resolver cualquier problema que le afecta. A su vez, técnicamente definen la investigación como un
procedimiento ordenado, controlado y riguroso, mediante el cual manejamos objetos, hechos o ideas,
con el fin de extender, corregir o verificar el conocimiento sobre este objeto.

Ahora bien, el espectro y ámbito que conlleva al desarrollo de toda investigación, bien sea su
naturaleza, tipología y características es tan amplio que la descripción de sus componentes y
particularidades ha sido por demás tratada por diversos teóricos a lo largo de la historia y a distintos
niveles, motivo por el cual en esta oportunidad iremos sólo decantando aspectos que nos guíen hacia
la identificación, descripción y comprensión del método conocido como Investigación – Acción.

En el marco de lo anteriormente presentado, existe la particularidad de que todo investigador


que realmente se jacte de serlo y dependiendo del escenario, temática y objeto de estudio, por lo
general se encuentra inserto en uno o varios paradigmas o corrientes del pensamiento o
conocimiento. Este sentido, observamos que los paradigmas vienen a ser el producto de las
creencias, valores y técnicas que se comparten socialmente, se construyen con el tiempo y se
estructuran en contextos determinados. Tienen entre otras de sus características, que una vez
asumidos son altamente arraigados por sus simpatizantes y prácticamente su desecho sólo puede
ser producto del reemplazo por otro paradigma.

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Citando nuevamente a Palella y Martins (2006), un paradigma es una manera de representar
objetivamente un conocimiento, un modelo al cual se llega para convalidar una manera de percibir la
realidad, utilizando un lenguaje y una forma particular de ver las cosas.

Otro aspecto fundamental en lo que concierne al proceso de investigación es el de los


denominados enfoques, cuya acepción más genérica, de acuerdo a Losada y Casas (2008), es una
perspectiva para analizar algo, la cual consta de interrogantes, conceptos, presuposiciones (con
frecuencia implícitas) y unas reglas de inferencia para llegar a conclusiones aceptables dentro del
enfoque en cuestión.

En este orden, es así como se llega entonces al momento de la investigación en donde la gran
interrogante se convierte en cuál de los dos paradigmas clásicos es el más conveniente a utilizar en
la misma, y para ello existe una gran cantidad de factores a tomar en cuenta de acuerdo a las
condiciones y variables presentes en el proceso investigativo, con miras a la generación de
conocimiento científico.

Es entonces que aparecen en escena los métodos de investigación con enfoque cuantitativo y
cualitativo, caracterizándose el primero por la supremacía del dato, el cual una vez trabajado y
analizado simboliza una realidad. La premisa fundamental de este enfoque es que lo que no se mide
no es acreedor a credibilidad alguna. De igual manera, concibe a la ciencia como descripción de
fenómenos y no se preocupa por explicarlos. Así mismo, su metodología es de tipo hipotética-
deductiva, es decir, parte de supuestos o hipótesis para comprobarlas mediante resultados
posteriores producto del análisis de información de campo.

En segundo lugar, pero no menos importante, encontramos en contraposición el enfoque


cualitativo, el cual se caracteriza por centrar su atención en las relaciones y roles que desempeñan
los seres humanos en el contexto y escenario donde se desempeñan. En este enfoque el investigador
básicamente se da a la tarea de interpretar roles, interacciones, conductas, comportamientos,
actividades, etc relacionadas fundamentalmente con el ámbito social y cultural, tanto en lo individual,
grupal, organizacional y desde el punto de vista de la sociedad.

Por su parte, Strauss y Corbin (2002) señalan que el enfoque cualitativo es cualquier tipo de
investigación que produce hallazgos a los que no se llega por medio de los procedimientos
estadísticos u otros medios de cuantificación, prevaleciendo el análisis de corte interpretativo.

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De este modo, observamos entonces que el enfoque cuantitativo centra su atención en el
análisis de los datos obtenidos para luego verificar y aprobar sus hipótesis iniciales, mientras que en
forma opuesta el enfoque cualitativo intenta llegar a la esencia del ser en todas sus perspectivas
posibles, a fin de obtener respuestas a los diferentes fenómenos que afectan e influyen en el ser
humano.

Ahora bien, paradójicamente, a pesar de ser opuestos los dos enfoques mencionados no
implica que sean excluyentes uno del otro, de allí que surjan las denominadas investigaciones mixtas,
como consecuencia de la búsqueda de la complementariedad entre ambos enfoques y la integridad
deseada en la investigación en desarrollo. En este sentido, es importante en forma supra que el
investigador conozca y aplique cada enfoque en su justo momento, a pesar de que al final de cuentas
necesariamente uno pueda prevalecer sobre el otro. A tal efecto, el arte de investigar exige
sensibilidad a los matices de los datos, tolerancia a la ambigüedad, flexibilidad en el diseño y una
gran dosis de creatividad.

De igual manera, se hace imperante que el investigador no confunda el enfoque cuantitativo


con herramientas cuantitativas de naturaleza estadística ya que incluso en las investigaciones
netamente cualitativas no dejan de utilizarse en mayor o menor proporción herramientas que permiten
al investigador visualizar de una u otra manera las tendencias y/o resultados de las variables
presentes en el objeto de estudio.

Al hablar sobre análisis cualitativo, nos referimos no a la cuantificación de los datos


cualitativos, sino al proceso no matemático de interpretación, realizado con el propósito de descubrir
conceptos y relaciones en los datos brutos y luego organizarlos en un esquema explicativo teórico
(Strauss y Corbin 2002).

A continuación una breve síntesis comparativa entre ambos enfoques, con el objeto de
coadyuvar en su visualización:

Enfoque cualitativo Enfoque cuantitativo


Ventajas Propensión a “comunicarse con” los Propensión a “servirse de ” los sujetos de
sujetos de estudio estudio
El investigador se limita a preguntar El investigador se limita a responder
Comunicación horizontal entre el Comunicación vertical entre el investigador
investigador y los investigados. Mayor y los investigados.

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posibilidad de estudiar los factores
sociales en un escenario natural
Son fuertes en términos de validez Son débiles en términos de validez interna
interna pero débiles en términos de pero fuertes en términos de validez
Desventaja validez externa. Los resultados no son externa. Los resultados son generalizables
s generalizables a la población. a la población.
Preguntan a los cuantitativos: ¿Cuán Preguntan a los cualitativos: ¿Cuán
particularizables son los hallazgos? generalizables son los hallazgos?
Fuente: Palella y Martins (2006)

A manera de preámbulo al siguiente aspecto Palella y Martins (2006) señalan que la diferencia
fundamental entre ambos esquemas consiste en que la investigación cuantitativa estudia la
asociación o relación entre variables cuantificadas, mientras que la investigación cualitativa ubica y
estudia los fenómenos en su contexto estructural y situacional. De allí la importancia de tener claro
tales premisas, a fin de avanzar hacia el tema medular del presente escrito, como lo es el método de
Investigación – Acción.

Ahora bien, en concordancia con lo expresado en párrafos anteriores, cada uno de los
enfoques anteriormente planteados tiene en su haber diversas formas de diseñar, plantear y ejecutar
la investigación que se desea desarrollar, dependiendo obviamente de las características de las
variables a analizar, sujetos u objetos de estudio, entornos, etc. Es de esta manera como observamos
en el enfoque cualitativo los métodos denominados como Investigación-acción, Método biográfico,
Estudio de Caso, Teoría Fundada, Fenomenología, Hermenéutica, Método etnográfico,
Etnometodología y el Interaccionismo simbólico.

Para efectos del presente escrito se tiene como propósito desarrollar la importancia y
relevancia del método de Investigación – Acción, y para ello es conveniente tener inicialmente en
cuenta lo expresado por René Descartes en su famoso e icónico Discurso del Método, citado por
Ugas (2011), en el cual se expresa que:

“Mi intento no es enseñar aquí el método que cada cual debe seguir para conducir bien
su razón, sino solamente mostrar de qué manera traté de conducir la mía”

Con ello, Descartes señala claramente que cada investigador es libre y consciente de escoger
el método que considere conveniente y pertinente de acuerdo a las características del fenómeno
tratado, sin embargo, debe observar especial atención en determinar el método más acorde al

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escenario planteado, ya que no todos los métodos funcionan o se comportan idóneamente ante las
mismas variables de estudio. En otras palabras, de acuerdo al objeto empírico, la disciplina, área del
conocimiento y/o problemática de estudio se debe utilizar el método apropiado, ya que este tiene
como finalidad guiar el desarrollo de la investigación para generar conocimiento veraz, oportuno y de
utilidad a la sociedad.

Sobre este particular se debe observar especial atención, ya que tomando en cuenta lo
expresado por Ugas (2011):

“No toda manera de hacer algo puede identificarse como un método, ni su uso da una
solución por el simple hecho que alguien necesita hacerlo. Hay que diferenciar entre la capacidad
para realizar una investigación mediados por un método, y considerar que por el simple hecho de
declarar su uso ya se produce conocimiento. Decir que se tiene un método no es garantía de estar
capacitado para su aplicación”.

Sin embargo, todo método debe ir acompañado y acompasado de una metodología, la cual se
puede definir como aquella serie de pasos procedimentales a ejecutarse en forma secuencial y
sistemática para materializar la ejecución del método seleccionado.

A tal efecto, Ugas (2011) opina que el método establece reglas y la metodología una
secuencia que lo hace posible, de igual manera, un método implica el ordenamiento teórico que
sistematiza unas premisas a investigar, mientras que la metodología enuncia las operaciones
necesarias para indagar el asunto a investigar.

Bajo esta perspectiva, es evidente entonces que se hace imperante la necesidad de una
simbiosis muy bien articulada en la selección y aplicación del método en pro de lograr los objetivos
deseados, bajo una metodología coherente y apropiada.

2. Origen del método de Investigación – Acción

A lo largo de la historia de la ciencia se observa que todas las propuestas o paradigmas de


investigación tienen el propósito de dar respuesta a las múltiples interrogantes del ser humano, bien
sea desde un punto de vista teórico o práctico, o la combinación de ambos. En el caso de la
Investigación – Acción esta tiene el fin expreso de promover procesos participativos entre los sujetos
que son sometidos a estudio.

11
Tomando en cuenta lo indicado por Ander-Egg (1990), las denominaciones que inicialmente se
utilizaron para catalogar a la Investigación – Acción fueron muy variadas: en un primer momento se
habló de desarrollo de la comunidad, acción comunitaria, promoción popular, promoción social,
educación popular, etc. Aún con diferentes nombres y modalidades, estas formas de intervención
social tenían en común un propósito central: movilizar los recursos humanos e institucionales, para
lograr un desarrollo de base, con la participación de la misma gente destinataria de los programas.

Dada la naturaleza inicial del método en comento, en cuanto a la utilización de herramientas


de contacto directo con el sujeto de estudio tales como encuestas, cuestionarios y entrevistas, existen
diversas opiniones con respecto al origen del mismo en el ámbito científico, sin embargo la gran
mayoría de los teóricos coinciden en que el origen del término propiamente dicho se le atribuye al
investigador multidisciplinario Kurt Lewin hacia el año 1944, cuando junto a los trabajos de John
Collier y William White descubrieron la necesidad de vincular la investigación a la acción, pues sólo
así los miembros de las empresas podrían utilizar de mejor manera los resultados para impulsar
cambios organizacionales favorables.

A raíz de estas primeras incisiones en la práctica del método se obtuvieron dos importantes
hallazgos, como lo son:

a. Los miembros de las organizaciones podían aplicarlos para guiar acciones y cambios.
b. Los sociólogos podrían estudiar el proceso para obtener otros conocimientos aplicables
en distintas áreas del conocimiento.

Según Cummings y Worley (2008), en las décadas entre 1945 y 1970 hubo importantes
investigadores que trabajaron y perfeccionaron este método, tales como Kurt Lewin, Lester Coch,
John French, John Collier (en las comunidades indígenas), Floyd Mann y Rensis Likert, entre otros,
teniendo todos en común la aplicación de un patrón ordenado sistemática y metodológicamente que
consta de la obtención de datos, retroalimentación de datos, planeación de la acción, implementación
y la obtención de datos de seguimiento tanto en la investigación de la acción como en la
retroalimentación por encuesta básicamente.

En este sentido, para Chacón y Graterol (2015) el método de Investigación – Acción surge
como otra manera de abordar la creación de conocimiento tanto en la explicación y comprensión
como para la transformación y el cambio.

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Desde mediados de la década de los años sesenta y bajo un ambiente de auge de las luchas
populares, de reformulaciones en el campo de las ciencias sociales y de decepción sobre la utilidad
de los métodos tradicionales y clásicos de investigación social, aparecen en Latinoamérica nuevas
tendencias y propuestas metodológicas, sobretodo en el campo de la intervención social. Todas estas
basadas inicialmente por los avances obtenidos por el método de Investigación – Acción en países
principalmente del hemisferio norte.

En otro orden de ideas, también encontramos hacia la década de los años sesenta la
presencia y utilización del método de Investigación – Acción en Latinoamérica, principalmente en el
área de la educación, así como en zonas sub urbanas y rurales, por lo que se le atribuyó inicialmente
un carácter populista más que científico propiamente dicho. De este modo, algunos de los autores
latinoamericanos que han trabajado a fondo y difundido este método han sido Paulo Freire en Brasil,
Orlando Fals Borda en Colombia y Ezequiel Ander-Egg en Argentina, todos con importantes aportes a
la ciencia, basado en el desarrollo del método en comento.

De igual manera, se observa que en las últimas décadas la metodología utilizada en la


Investigación – Acción ha logrado desarrollar y optimizar continuamente los procedimientos propios
en pro de alcanzar las mejores prácticas y los objetivos propuestos. A tal efecto, y a fin de buscar
constantemente la mejora continua, unificación de criterios y la producción del conocimiento científico
se han realizado diversos eventos académicos de carácter mundial, entre los que podemos destacar
los celebrados en Cartagena (1977 y 1997), Yugoslavia (1980), Nicaragua (1989, Suráfrica (2003) y
Bogotá (2007).

Probablemente la Investigación – acción sea una de las modalidades investigativas que más
polémicas ha desatado entre los círculos científicos y académicos, tal vez porque desafía todas las
concepciones y los procedimientos propios de la investigación tradicional, que a juicio de sus críticos,
ha permanecido por fuera de las necesidades y los problemas de la realidad social, económica,
cultural y educativa (Cerda 1995).

A raíz de lo expresado en el párrafo anterior, muchos han sido los detractores del método de
Investigación – Acción, e inclusive han llegado a tildarlo de poco fundamento científico al asociarlo
con estudios que en lugar de basarse en escuelas propias del pensamiento buscan la orientación
hacia una u otra ideología política. Esto último motivado al gran auge que este método tuvo en
Latinoamérica en las décadas de los 60 y 70, en donde su utilización estuvo primordialmente dirigida

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a los ámbitos educativos, así como también en los niveles o estratos bajos de las diferentes
comunidades, sin embargo, esto obedece a la naturaleza propia del método cuyo objetivo medular es
la resolución de problemas en donde el sujeto de estudio tiene el rol principal, guiado por el
investigador.

Basado en el párrafo anterior, los contrarios al método en cuestión han criticado fuertemente a
teóricos como Fals Borda, citado por Cerda (1995), cuando éste realizó las siguientes afirmaciones,
catalogándolo como un método que se sale del marco tradicional del pensamiento científico al darle
un carácter ideológico de empoderamiento de las masas al mantener que entre las atribuciones más
relevantes de la Investigación – Acción se encontraban:

a. Hacer retornar la información al pueblo, en el lenguaje y en la forma cultural en que


tuvo origen.
b. Establecer el control del trabajo por el pueblo y por los movimientos de base.
c. Popularizar las técnicas de investigación.
d. Integrar la información como base del intelectual orgánico.
e. Mantener un esfuerzo consciente en el ritmo de acción / reflexión del trabajo.
f. Reconocer la ciencia como parte del quehacer de toda la población.
g. Aprender a escuchar.

En similitud a esta perspectiva, Chacón y Graterol (2015) señalan que la intención de la


Investigación – Acción es proporcionar una metodología de investigación y aprendizaje colectivo de la
realidad, basado en un análisis crítico con la participación activa de los grupos implicados, que se
orienta a estimular la práctica transformadora y el cambio social.

Sin embargo, retornando a las raíces del término Investigación – Acción observamos que este
método es uno de los primordialmente utilizados por los especialistas en la disciplina del Desarrollo
Organizacional ya que su metodología y herramientas proporcionan una interesante e integral
simbiosis entre la sencillez de las acciones y la complementariedad de los términos necesarios y
requeridos en una intervención organizacional.

Bajo esta premisa, Cummings y Worley (2008) definen al Desarrollo Organizacional como un
proceso que aplica los conocimientos y métodos de las ciencias de la conducta para ayudar a las
empresas (organizaciones) a crear la capacidad de cambiar y de mejorar entre otras cosas su
eficiencia, desempeño financiero y un alto nivel de calidad de vida laboral.

14
De allí pues que, el histórico evolutivo del desarrollo Organizacional señala que esta disciplina
se ha desarrollado hasta ahora bajo cinco (05) raíces bien demarcadas, que si bien no
necesariamente se encuentran demarcadas en forma cronológica muestran los aspectos
fundamentales y originarios que han dado paso a la misma, tales como son:

a. Primera raíz: entrenamiento en el laboratorio (1946-actual).


b. Segunda raíz: investigación – acción y retroalimentación por encuesta (1944-actual).
c. Tercera raíz: normativa (1955-actual).
d. Cuarta raíz: productividad y calidad de vida laboral (1958-actual).
e. Quinta raíz: Cambio estratégico (1968-actual).

3. La Investigación – Acción; el término y el método

El método de Investigación – Acción es un método enmarcado dentro del enfoque cualitativo,


cuyo objeto principal es el de ubicar la resolución de problemas través de la participación activa de los
actores sujetos de estudio, por ser estos los principales afectados y por lo menos empírica y
esencialmente conocedores de la situación o escenario presente. En un segundo plano, pero no
menos importante, también se busca de una u otra manera emancipar a los sujetos a través del
empoderamiento de la situación, y es en este momento donde desde el punto de vista de la disciplina
del Desarrollo Organizacional el investigador pasa a ser lo que se denomina un interventor en la
situación, con un constante devenir entre los roles de investigador y participante, por supuesto con la
suficiente madurez para identificar la delgada y delicada línea que separa tales funciones en este tipo
de actividad investigativa.

De igual manera, otra de las particularidades fundamentales de éste método es la creación,


participación o colaboración en el conocimiento científico, bien sea en descubrir y fundamentar
nuevas teorías, reforzar las ya existentes o en su defecto refutarlas con basamentos lo
suficientemente argumentables y válidos. Este aspecto revierte especial atención, ya que el
investigador debe tener absolutamente claro su norte en cuanto al propósito o fin ulterior de lo que se
pretende lograr, motivado a que en el método de Investigación – Acción sus componentes y etapas
estás diseñadas básicamente para ubicar respuestas rápidas y concretas en vías a la resolución de
problemas.

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En este mismo orden, el método de Investigación – Acción conlleva a resolver las tensiones
existentes hasta el momento entre la teoría y la práctica, entre el sujeto y el objeto, entre el
pragmatismo simple y el conocimiento, y exige un compromiso tanto con el cambio transformador de
los involucrados como de la situación problemática, ya que requiere flexibilidad y recursividad por ser
este un tradicional proceso lineal sino más bien cíclico (Chacón y Graterol, 2015).

Por otro lado, Kemmis y McTaggart (1988), citados por Rojas (2014), mantienen que la
Investigación – Acción es una forma de indagación colectiva emprendida por participantes en
situaciones sociales con el propósito de mejorar la racionalidad y la justicia de sus prácticas sociales
o educativas, así como la comprensión de éstas y de las situaciones donde ellas tienen lugar.

Sin embargo, para Rigny (2000) la base de la Investigación – Acción es la maximización de las
oportunidades de alcanzar el objetivo mediante la recolección de datos sobre los efectos de la acción
a partir de que estos son sujetos de medición, y la utilización de estos datos para rectificar y
reorientar la acción reduciendo sus elementos negativos y reforzando los elementos que más
convergen en el alcance de los objetivos.

Así mismo, es importante aclarar que existen diferentes enfoques para abordar y poner en
práctica el método de Investigación – Acción desde cada uno de los paradigmas medulares del
conocimiento. Es así como entonces podemos hablar de:

PARADIGMA
FENOMENOLÓGICO -
POSITIVISTA CRÍTICO
INTERPRETATIVO
Añade la emancipación como
Diseñar y aplicar un plan de
objetivo último y primordial de
intervención eficaz para Busca desarrollar el
la investigación a través de
PROPÓSITO

mejorar las habilidades pensamiento práctico de los


una transformación profunda,
profesionales y resolver sujetos participantes, ampliar
producto de la reflexión que
problemas. Interés en la la comprensión, estimular la
conduce al cambio de
mejora práctica, mas no en la reflexión.
actitudes y a nuevas
comprensión.
convicciones.
16
ROL DEL INVESTIGADOR
Consultor o asesor. No se Compartir la auto-reflexión y
Experto. Incorpora al sujeto
plantea un desarrollo de los con los participantes.
en el proceso de
participantes en tanto Concepción activista y
investigación.
comunidad auto-reflexiva. militante.

Fuente: Rojas (2014) / Diseño: propio

Otro punto de vista a tomar en cuenta es el planteado por Sandin (2003), con respecto a los
enfoques con los cuales se puede asumir la Investigación – Acción, a saber:

Enfoque
cualitativo

Métodos orientados Métodos orientados al


a la comprensión cambio y la toma de
decisiones
Investigación etnográfica
Estudios de Casos Investigación-acción
Etnometodología Investigación evaluativa

Fuente: Sandin (2003), citado por Duarte y Parra (2015)

Dada la diversidad de criterios entre autores con respecto a las características fundamentales,
a continuación una primera visualización de las mismas, bajo la óptica de Duarte y Parra (2015).

Fines epistemológicos Construir planes de intervención para la toma de conciencia social


Relación con el objeto de investigación Las personas son sujetos que se autoanalizan y transforman la realidad
Tratamiento de la información Los casos individuales o contextualizados son fuentes de conocimiento
Existencia del objeto El objeto es creación del ser humano
Estrategias para el desarrollo del Define conjeturas, crea situaciones propicias para un aprendizaje
conocimiento significativo y de cambio social
Criterio de éxito Comprueba si las acciones emprendidas permiten alcanzar los resultados
previstos
Tipo de generalización Limitada, contextualizada en el escenario de estudio

Fuente: Ceretto y Giacabbe (2009) adaptado por Parra (2015) citado por Duarte y Parra (2015)

17
A su vez, y con un punto de vista relativamente similar es el descrito por Ander-Egg (1990), el
cual se muestra a continuación:
Se decide a partir de lo que interesa a un grupo de personas o a un colectivo. Sólo se aplica a
Objeto de
situaciones o problemas de la vida real, no a juegos de simulación, a situaciones de laboratorio o a la
estudio
realización de un trabajo de campo para entrenamiento en la metodología.
Transformación de la situación problema que afecta a la gente involucrada, orientado a ser utilizado
Finalidad del para actuar de una manera más eficaz sobre un aspecto de la realidad con el propósito de transformarla
estudio o modificarla, ya sea como forma de satisfacer una necesidad, resolver un problema o atender a la
demanda de algún centro de interés de la gente.
Interacciones Interacción / combinación entre la investigación y la práctica, entre el proceso de investigación y la
presentes acción interventora.
Fundamento Supuesto de que el pueblo (actuante y pensante) es el principal agente de cambio social y que éste
de será más viable si la gente tiene mejor comprensión de su situación, de sus posibilidades de cambiarla
funcionamient y de las responsabilidades que ello implica.
o
Supone la superación de toda forma de relaciones dicotómicas jerarquizadas entre el investigador que
Relaciones
aporta su caudal teórico y metodológico, y la gente involucrada que contribuye con sus experiencias,
dicotómicas
vivencias y conocimientos existenciales de su propia realidad.
Formas de Exige formas de comunicación entre iguales que establecen una serie de relaciones con el propósito de
comunicación realizar un trabajo en común.
Supone un compromiso efectivo y declarado del investigador con la gente involucrada en el programa y
Compromiso
que participa en el estudio y transformación de su realidad. Esta asunción del compromiso supone
del
también una no neutralidad valorativa, ideológica y política, o si se quiere decirlo positivamente, supone
investigador
una opción.
Por su índole es preferible su aplicación en organizaciones de tamaño medio como máximo, ya que de
Tamaño de la
lo contrario de dificulta la participación de los sujetos en el proceso investigativo. Para poblaciones de
población
gran tamaño se considera la utilización de otras metodologías, técnicas y procedimientos clásicos.
Fuente: Ander-Egg (1990) / Diseño propio

18
El método de Investigación – Acción como todo método, se fundamenta en una metodología, la cual se encarga de materializar
paso a paso las normas o reglas generales de este: A tal efecto, el siguiente cuadro comparativo muestra las secuencia a seguir en el
método en comento de según la opinión de varios autores, siendo entonces las etapas de la Investigación – Acción:
De acuerdo a
Kurt Lewin, citado Modelo clásico de Modelo positivo,
Etapas Duarte y Parra (2015) por Cummings y Investigación-acción, citado por citado por Cummings Rojas (2014) Ander-Egg (1990)
Worley (2008) Cummings y Worley (2008) y Worley (2008)
Selección de la Identificación de las necesidades básicas,
1 Descongelamiento Identificación del problema Iniciar la investigación Reflexión inicial
situación problemática problemas y centros de interés
Planificación conjunta
Recolección de la Consultoría con experto en Investigar las mejores Formulación del problema: definir la
2 Movimiento o cambio de actividades y
información ciencias del comportamiento prácticas problemática y delimitar el campo de estudio
estrategias
Puesta en práctica del
Organización de la Obtención de datos y diagnóstico Técnicas o procedimientos a utilizar para
3 Recongelamiento Descubrir los temas plan y observación del
información preliminar recoger datos y obtener información
proceso
Interpretación y Retroalimentación al cliente o Imaginar un futuro Reflexión en torno al
4 Trabajo de campo: recolección de datos
reflexión grupo más importante preferido proceso y los resultados
Implementación de los Diseñar y proporcionar Ajustes en el cambio
5 Diagnóstico conjunto del problema Ordenación y clasificación de la información
planes de acción formas de crear el futuro planeado
Recogida de nuevos
6 Planeación conjunta de la acción Análisis e interpretación de los datos
cambios
Presentación formal
7 Acción Redacción del informe preliminar
de la teoría
Obtención de datos luego de la
8 Elaboración del diagnóstico
acción
9 Elaboración del programa o proyecto
10 Formación de los equipos y/o grupos de trabajo
Desarrollo de las actividades puesta en marcha
11
de proyectos y/o programas
Control operacional realizado mediante la acción
12
reflexión sobre lo que se va haciendo
Fuente: diseño propio

19
Tomando como referencia el cuadro anterior, se observa que entre los diferentes autores
citados existen puntos de encuentro o semejanzas, las cuales se pueden plasmar en el siguiente
modelo:

Modelo general de cambio planificado aplicando el


método de Investigación-Acción

Planeación e Evaluación e
Entrada y
Diagnóstico implementación institucionalización
contratación
del cambio del cambio

Fuente: Cummings y Worley (2008)

De acuerdo a Chacón y Graterol (2015), existen cuatro (04) tipos de desarrollo del método de
Investigación – Acción, los cuales son:

a. Investigación – Acción de diagnóstico, se realiza sobre un problema y haciendo


recomendaciones para su solución.
b. Investigación – Acción Participante, los participantes se involucran en todo el proceso de
investigación.
c. Investigación – Acción Empírica, se acumulan datos de la experiencia del grupo en estudio.
d. Investigación – Acción Experimental, exige un estudio controlado de la eficacia relativa de las
diversas técnicas utilizadas en situaciones sociales similares.

Ahora bien, tal como se observa en el párrafo anterior, la Investigación – Acción es aplicable a
diversas modalidades de acuerdo al ámbito y escenario que se necesite investigar. Basado en ello,
una de las aristas que más auge ha cobrado en las últimas tres décadas es el de la Investigación –
Acción – Participativa, la cual supone la simultaneidad de los procesos de conocer y de intervenir, y a
su vez implica la participación de la misma gente involucrada en el programa de estudio y de acción.

20
En este orden de ideas, Ander-Egg (1990) caracteriza esta modalidad de la siguiente manera:

a. Trata el aspecto de investigación, ya que se fundamenta en un procedimiento reflexivo,


sistemático, controlado y crítico que tiene por finalidad estudiar algún aspecto de la realidad, con una
expresa finalidad práctica.
b. Basado en la acción, motivado a que indica que la forma de realizar el estudio es ya un modo
de intervención y que el propósito de la investigación está orientado a la acción, siendo ella a su vez
fuente de conocimiento.
c. Promueve la participación, por ser esta una actividad en cuyo proceso están involucrados
tanto los investigadores (o equipo técnico) como la misma gente destinataria del programa, que ya no
son considerados como simples objetos de investigación, sino como sujetos activos que contribuyen
a conocer y transformar la realidad en la que están implicados.

Ahora bien, basado en lo expresado en párrafos precedentes es importante que el


investigador tenga muy bien definidos los alcances, características, naturaleza y metodología a
utilizar al poner en práctica el método de Investigación – Acción, a fin de darle el uso adecuado y en
su justa medida. A tal efecto, Kemmis y McTaggart (1988), citados por Rojas (2014) señalan algunos
aspectos de especial atención para los investigadores a fin de no confundir lo que no es Investigación
– Acción, tal como sigue a continuación:

a. Investigación sin evidencias.


b. No es una simple solución de problemas, ya que supone mejorar significativa y
radicalmente aspectos de comprensión y concientización.
c. No es una investigación centrada en sí mismo, sino en el sujeto de estudio.
d. No es la simple y burda aplicación de un método científico, es una modalidad que en
realidad debe interesarse por los sujetos implicados y generar el cambio deseado.

Bajo otro punto de vista, es importante tener en cuenta que a pesar de las múltiples bondades
del método de Investigación – Acción este no es la excelencia de la investigación científica y
continuamente se encuentra en la búsqueda de la optimización de sus procedimientos para dar
respuesta tanto a la comunidad científica como a los involucrados en condición de sujetos de estudio.

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Tomando en cuenta la anterior premisa, es conveniente resaltar lo expuesto por Ander-Egg
(1990), referente a los falsos mitos que envuelven a la Investigación – Acción:

“Dentro de quienes recurren a la Investigación - Acción, se cae en uno de los mitos que
pretende superar: el cientifismo, en cuanto a la sobrevaloración de la ciencia, la técnica
y la razón. Es decir, tratan de buscar de manera particular los fundamentos de tipo
científico para justificar su validez, como si esta viniera dada sólo por su carácter
científico, más que por su utilidad práctica o por los valores que sustenta y supone. No
todo lo científico es útil o moralmente aceptable, por el hecho de ser ciencia. Ni todo lo
útil y éticamente válido, debe y puede apoyarse científicamente. Por otra parte, algunos
partidarios del método en cuestión dicen apoyarse en la práctica y luego realizan
denodados esfuerzos intelectuales por tratar de buscar fundamentos y justificaciones
fundamentalmente científicas. Esto expresa el mito de considerar que sólo lo que se
tilda de científico es bueno, objetivo y válido teóricamente. No está mal hacer esfuerzos
por fundamentar teóricamente una forma de intervención social, pero esto no parece ser
lo sustantivo desde la perspectiva y los supuestos de la investigación - acción. Otro
error bastante generalizado entre algunos investigadores es afirmar que la comunidad
crea teorías con la utilización de este método. De lo que no caben dudas es que
proporciona mejores conocimientos para que la misma gente encuentre soluciones a la
problemática existente, lógicamente con la asistencia técnica de agentes externos. Pero
de ahí a crear ciencia hay un abismo. La Investigación – Acción podría aportar también
al desarrollo de una teoría, pero ese no es su propósito principal”.

Desde esta perspectiva, se presenta una buena oportunidad para la reflexión de la


conveniencia o no en la utilización de un método que realmente pueda satisfacer las necesidades
tanto del investigador como del sujeto y entorno de estudio, al momento de seleccionar entre tantos
paradigmas, enfoque, métodos, metodologías, etc.

4. La Investigación – Acción en las Tesis Doctorales

Dado el importante uso de herramientas cuantitativas de corte estadístico presentes en el


método de Investigación – Acción el uso del mismo en Tesis Doctorales constituye uno de los
desafíos más profundos y delicados para el investigador, dado que de no utilizarse con la debida
prudencia y conocimiento puede llegar a confundirse con métodos de enfoque cuantitativos.

22
De acuerdo a las características y fines de la Investigación – Acción, en donde encara
claramente estrechas relaciones tales como teoría y práctica, reflexión y acción, investigador y sujeto,
tal método pasa a ser un elemento de supra importancia al permitir no sólo presentar soluciones
viables a situaciones problemáticas de una organización en cualquiera de sus modalidades, tipología
o naturaleza, sino permitir la creación de conocimiento partiendo directamente de las vivencias y
resultados obtenidos por los sujetos de estudio, permitiendo una constante interacción e inclusive la
posibilidad de modificar y actualizar teorías, de acuerdo al momento cursado en la investigación, ya
que está adquiere una forma espiral en donde cada nuevo hallazgo representa una contribución
importante tanto para los resultados parciales como para el propósito final.

Visto lo anterior, es conveniente traer a colación lo expresado por Duarte y Parra (2015),
quienes señalan que a diferencia del positivismo clásico la Investigación – Acción emerge para
transformar la realidad, no depende de las teorías previas y se construye con alguien y no sobre
alguien, por lo que es una teoría que proviene de una indagación profundamente auto reflexiva cuyo
corpus teórico depende de las vivencias de los actores sociales involucrados en la investigación.

En este sentido, la Investigación – Acción se convierte entonces en una rica fuente de


información y una experiencia inigualable para el investigador al poder contar simultáneamente con la
oportunidad de resolver una situación específica que atañe a un sujeto de estudio (grupo,
organizaciones, sociedad, etc) y a su vez poder tener las herramientas suficientes para indagar a
profundidad en la búsqueda de crear conocimiento teórico que a su vez permita la solución de
problemas prácticos de mayor nivel.

5. Aporte gerencial del método de Investigación – Acción.

El campo gerencial se desarrolla en un mar de disciplinas que convergen coordinada y


sistemáticamente bajo la premisa de los procesos de toma de decisiones y el ejercicio del liderazgo
en escenarios caracterizados por el permanente cambio y las exigencias del mantenimiento eficiente
de las actividades propias de las organizaciones y el logro de objetivos. En este sentido, la
investigación se encuentra íntimamente relacionada con las grandes problemáticas que confrontan
estas mismas organizaciones.

Una de las mayores preocupaciones de las sociedades es el establecimiento y mantenimiento


de organizaciones que sean racionales y se adapten lo mejor posible a comportamientos imprevistos,

23
así como también a resultados inciertos, con el fin de obtener óptimos resultados con los diversos
aportes recibidos de distintos aspectos, dentro de los cuales se encuentra la investigación científica.

De acuerdo a lo manifestado por Rigny (2000), un componente importante en la continua


problemática que atraviesan las organizaciones es la eficacia y aceptabilidad social con que los
esfuerzos humanos se matizan y se canalizan dentro de estas.

Evidentemente, es una ilusión buscar una solución que elimine de una sola vez la gran gama
de problemas de las organizaciones, así como también es conveniente resaltar que la utilización de
un método no es garantía absoluta de su éxito. La simplificación de premisas referentes a los lazos
entre los estudios de tiempo y movimiento y su relación con temas acerca de la productividad,
satisfacción y eficacia no siempre permiten de buenas a primera explicar toda la complejidad de los
comportamientos humanos en el medio organizacional.

Las soluciones eficaces requieren fundamentalmente de un sólido cuerpo de conocimientos


teórico prácticos de diversas disciplinas de estudio, y a su vez de la correcta operacionalización y
aplicación de estos.

Es por ello que la investigación forma parte de la vida íntima de toda organización cimentada
en principios de funcionamiento sólidos, ya que dadas sus características esta constituye una
herramienta de amplias ventajas en el progreso de tal organización.

A tal efecto, la investigación permite a las organizaciones:

a. Analizar los puntos fuertes y débiles de la misma (exploratoria o descriptiva).


b. Permitir la comprensión de los procesos (explicativa).
c. Proponer soluciones y las aplica (investigación-acción).
d. Evaluar los efectos (evaluativa).

Basado en lo anteriormente expresado, observamos entonces que la investigación constituye


una aproximación rigurosa que permite al gerente abordar ciertos problemas que se presentan bajo la
forma de interrogantes. Determinándose entonces que en las organizaciones la investigación no es
un lujo sino una necesidad tan presente como el hecho de que los problemas organizacionales
forman pate de la realidad cotidiana, y es en este sentido donde el método de Investigación – Acción

24
cobra especial importancia por ser este ideal para abordar situaciones problemáticas en dichas
organizaciones.

Concluyendo

El método de Investigación – Acción viene a ser entonces un proceso de carácter social y con
sentido colaborativo en cuya metodología el investigador necesariamente asume un rol activo, es
decir, no sólo se trata de buscar el conocer y/o comprender sino más bien de indagar en la
significación del pasado para entender el presente, así como también participar activamente en la
transformación de los grupos u organizaciones de estudio para un mejor desempeño y rendimiento
futuro.

Dado lo anterior, la validez y éxito en el uso del método de Investigación – Acción viene dado
por dos premisas fundamentales, como lo son en primer lugar la eficacia de la acción transformadora
basada en la optimización del cambio que se pretende lograr, y como segundo aspecto consolidar el
requerimiento de contribuir con la construcción y porte al conocimiento teórico, fundamentado en el
correcto uso de los paradigmas empleados y su lógica concatenación con la realidad.

En otras palabas, y en sentido general, el propósito de la Investigación – Acción no se limita a


comprender o a predecir, sino que tiende a reemplazar el estado actual de las distintas situaciones
objeto de estudio por uno de mejores condiciones que todavía no existe.

En resumidas cuentas, la Investigación - Acción es un método que al igual que otros no


escapa de la posibilidad de revisarse y reinventarse continuamente, por lo que se puede afirmar una
permanente construcción en este aspecto. Sin duda alguna, y tal como lo ha demostrado su devenir
en el campo científico, es un método completamente abierto a los cuestionamientos, críticas y aportes
provenientes de los diversos ámbitos económicos, académicos, culturales, sociales o políticos, entre
otros. Ninguno de sus componentes básicos, como lo son la concientización, la praxis, la relación
sujeto-objeto de la investigación, la participación o la acción, escapan del debate de la comunidad
científica en sus diferentes niveles y acepciones. Igual sucede con elementos vinculados a su
práctica, a los aspectos técnicos, metodológicos y sus diversas formas de aplicarlos.

A manera de colofón, para concluir entonces que podemos señalar el permanente debate en
cuanto a la pertinencia o no de uno u otro método, o bien entre la significancia y relevancia de la
Investigación – Acción vinculada al conocimiento científico o a corrientes sociales populistas como

25
aspectos no definitivos ni determinantes en la búsqueda de conocimientos que permitan desarrollar
teorías y solucionar problemas o conflictos del ser humano en sus diferentes facetas.

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