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*Filosofía.
La filosofía es la ciencia de todas las cosas por sus razones últimas, adquirida por
la luz natural de la razón:
*La otra cara de la filosofía será aquella que en apariencia se contrapone a estos lugares
comunes.
¿Cómo hemos llegado hasta aquí? ¿Cómo hemos pasado de ser simios
insignificantes a ser los gobernantes del planeta Tierra?
Los humanos controlan el planeta porque son los únicos animales que pueden
cooperar flexiblemente y en masa.
Sin embargo, nosotros usamos el lenguaje no solo para describir la realidad sino
para crear nuevas realidades, realidades inventadas.
o Dioses.
o Política/Derecho.
o Economía.
o Dignidad humana.
o Amor (romántico).
Hemos construido sobre esta realidad objetiva una segunda capa de realidad
imaginaria, una realidad basada en entidades imaginarias.
1
24 de febrero de 1976. Historiador y escritor israelí de padres libaneses, profesor en la Universidad Hebrea
de Jerusalén, autor entre otras obras de Sapiens, una breve historia de la humanidad, libro en que se analiza
de manera novedosa la historia de la especie humana.
https://www.ted.com/talks/yuval_noah_harari_what_explains_the_rise_of_humans?language=es
2.- Se acerca a lo natural, a lo objetivo.
*Filósofos malditos:
Bernand Mandeville.
Marqués de Sade.
Thomas de Quincey.
Arthur Schopenhauer.
Max Stirner.
Philipp Mainländer.
Friedrich Nietzsche.
Antonin Artaud.
Ayn Rand.
Albert Caraco.
Emil Cioran.
Pentti Linkola.
Thomas Ligotti.
*Bernard Mandeville.
Vida y Obra.
Contexto histórico.
Pero ambos bandos (razón y revelación) son susceptibles a repulsión recíproca por propia
naturaleza.
o Por un lado los designios divinos son por sí mismos y en sí mismos inamovibles,
por otro lado la acción humana es dinámica y cambiante.
Y teniendo en cuenta que toda naturaleza es dictaminada por Dios surge
la evidencia de que en ciertos momentos de la naturaleza humana son
incompatibles con la voluntad de Dios, de tal modo que esa misma
naturaleza creada por Él necesita ser negada para complacerle. Así, se
concluye una incompatibilidad entre razón y religión a final de cuentas.
El cristianismo nos ordena que sometamos nuestros deseos naturales
porque se originan en el dominio del pecado original y en nuestra
corrompida naturaleza.
Ética.
“(…) empeñados por millones en satisfacerse mutuamente la lujuria y vanidad. Así pues, cada
parte estaba llena de vicios, pero todo el conjunto era un Paraíso.”
El vicio es fundamento para prosperidad social.
El meollo de semejante planteamiento radica en la definición de virtud.
o Religiosa y teológicamente, la virtud es superación de una corrompida naturaleza
humana.
La conquista de uno mismo gracias a la Gracia Divina.
Creyente: Virtuoso es el que se autocontrola,
o Abandonado de sí en los brazos de la divinidad.
o Racionalistamente: virtud es conducta bajo el imperativo de la razón.
o Mandeville amalgama ambas posturas y sostiene: virtuoso es aquello junta
ambas posturas. Aquellos actos “por los cuales el hombre, contrariando el
impulso de la Naturaleza, procuraría el beneficio de los otros o el dominio de
sus propias pasiones mediante la racional ambición de ser bueno.” (p.27)
o El virtuoso niega su naturaleza por paradigmas racionales.
o A esta amalgama se le llama rigorismo.
Sociedad.
Genealogía de la moral.
El amor propio es una inclinación natural.
o Todos los animales actúan según su amor propio, intereses y necesidades sin
tomar en cuenta cuánto bien o mal puede hacerse a terceros.
“Las virtudes morales son la prole política que la adulación engendra en el orgullo.”2
* La educación gratuita.
o Aconseja la ignorancia para que no tengan necesidad de aspirar a un nivel
socioeconómico superior y sigan trabajando.
o La fábula… “No hay nadie que…” p. xliv, xlv.
“No quisiera que me creyeran cruel, y estoy seguro, si en realidad me conozco algo, de que
aborrezco la inhumanidad; pero ser compasivo en exceso cuando la razón lo prohíbe y el interés
general de la sociedad requiere firmeza de pensamiento y resolución, es debilidad imperdonable.
Sé muy bien que siempre se argüirá en mi contra que es bárbaro negar a los hijos de los pobres
la oportunidad para desarrollar sus facultades, puesto que Dios los dotó de dones naturales y
genio igual que a los ricos. Pero no creo que esto sea más penoso que su falta de dinero, cuando
tienen las mismas inclinaciones a gastar que los demás.”
* La fábula… p. xlviii.
*Marqués de Sade.
Donatien Alphonse François de Sade.
2
La fabula de las abejas, Mandeville, p. 28.
3
Sade, Philipe Sollers.
Sade es, probablemente, el único filósofo maldito como tal y en cuanto tal.
Vida y obra.
* A su muerte era conocido como el autor de la «infame» novela Justine, por lo que pasó los
últimos años de su vida encerrado en el manicomio de Charenton. Dicha novela fue
prohibida, pero circuló clandestinamente durante todo el siglo XIX y mitad del siglo XX.
*Sade es sutil pese a todas las voluptuosidades, y lo es en tanto que es necesario desentrañar
sus postulados de entre los arrebatos.
4
La naturaleza del Amor, Singer, Tomo II, p. 386.
5
La naturaleza del Amor, Singer, Tomo II, p. 386, 387.
*Sostiene el Divino Marqués en los 120 días de Sodoma.
*Pero nada malo hay en semejante situación, todo lo contrario, aceptar, asimilar, comprender
para sublimar dichas atrocidades conlleva el y al placer: El exquisito placer de torturar y ser
torturados.
*Así, como apunta Michel Onfray, el vientre de la madre es hado de todos los destinos.
La mujer violenta engendrará héroes crueles, la madre nimia y abnegada parirá
pusilánimes caritativos, humildes observantes del bienestar ajeno.
El determinismo sadiano es total, absolutamente radical, de lo que se sigue que es
imposible alterarlo.
Por lo tanto no queda más remedio que abandonarse a la propia condición.
Bueno es para el sádico que haya masoquistas, y bueno es para estos que existan
aquellos.
Aquél manso que busca el bendito martirio para el bienestar de los hombres debe
encontrarse agradecido con aquél que le manda a la pena del desollamiento.
Maravilloso para el verdugo que haya hombres que se sientan orgullosos de morir por
su dios porque es por ellos que puede regodear su sanguinaria sed.
*En Sade los sufrientes deben no sólo encontrar placer en sus suplicios, sino además estar
agradecidos con sus torturantes.
Gracias a ellos subliman sus anhelos y cometidos.
Evidentemente plantearlo viceversa es necesario.
Jamás nadie ha podido nunca tener la oportunidad de escoger qué quiere ser y cómo.
Víctimas y victimarios, polos opuestos que se complementan, asimilan y subliman en
la interacción brutal de la vejación.
*Muchas formas, modos y maneras existen para entablar dichos improperios, sin embargo
aquellos por excelencia son los que responden a cuestiones de orden sexual.
Es en lo sexual, pero sobretodo en los sexual/genital, donde la vulnerabilidad del ser
humano se expresa fehacientemente.
*En cada vituperio existe un interés personal, no importa que los macabros actos se ejecuten
en grupo, en algunos casos en equipo, la finalidad no es el bienestar del grupo, sino el propio.
La ética sadiana es preponderantemente egoísta.
*Así, el planteamiento filosófico se resuelve en una metafísica oscura y dolorosa, cuyo único
medio para conocer, asimilar y acercarse es la acción terrible del dolor/placer.
6
Ibíd. p.384-385
Mucho distrae el amor de la infamia: fiebre ardiente que nos devora, nos consume,
sin darnos más que goces metafísicos.7
*La constitución ontológica isolista divide en dos instancias todo cuanto acontece en el
mundo: fuertes y débiles, amos y esclavos, libertinos y decorosos, víctimas y victimarios,
aristócratas y pópulo, ricos y pobres, etc.
Una parte de la humanidad existe para sufrir al ley de la otra y esto, si no es bueno,
de menos es necesario y natural porque no puede ser de otra manera.
7
Ibíd. p. 385
8
Los ultras de las luces, Onfray p. 284.
*Las leyes de la Naturaleza son individuales y es en el ejercicio diario del libertinaje donde
hayamos cuál es la propia.
*Sin embargo es posible en la filosofía del Marqués encontrar ciertas generalidades como en
lo femenino.
Asegura Sollers que en Sade la figura de lo femenino nunca será ni lo que se dice que
es ni lo que se cree que es, podrá ser mejor o peor, tanto una cosa como la otra, pero
nunca eso sostenido.
Justine y Juliette, por ejemplo, son mucho más que lo planteado, son todo un universo
creado y recreado desde y por cada lectura.
La mujer tiene mucha mayor inclinación a la crueldad porque posee un sistema más
sensible.
A esto puede sumarse la idea sobre una empatía neutra en la que se es empático no
nada más para bien, sino también para la ferocidad.
o ¿Cómo podrían inventarse torturas tan atroces si no se es empático con el
dolor ajeno?
o Identificarse con el sufrimiento del otro procura que la imaginación vuele
creando más y mejores métodos de suplicio.
o La empatía sadiana es paradójica en tanto faculta el pleno desarrollo en la
aplicación de torturas, pero no encuentra cabida en un sentido amable en tanto
está inserta en el Isolismo.
*Es claro, la empatía sádica remite a la apatía en tanto ambas se constituyen isolistamente.
El Marqués de Sade exhorta a la apatía.
De algún modo, a pesar de ser esto contra natura, los seres humanos buscan en un
momento dado de su vida quimeras como el ser empático con sus semejantes,
fantasmas como la moral y Dios, pero el correcto fluir se encuentra en regresar a lo
natural, es decir, al desinterés ajeno en aras del perfeccionamiento en la obtención del
placer propio.
Pero ¿Cómo poder alimentar el dolor ajeno sádicamente si no me pongo yo en su
lugar? Es claro que existe una imaginación mórbida que puede ayudar, pero entonces
no se daría el suculento toque, el toque sádico.
o Lo sádico en esta lectura responde a ese momento de disfrutar del dolor ajeno
porque se pone en el lugar del otro, he aquí el punto de quiebre.
o El verdugo es pusilánime cuando aplica la penitencia sin disfrutar, dejará de
ser simplón para convertirse en el ser superior de Sade, cuando saboree la
tortura.
o Desde su postura como torturador hasta la empatía imaginativa del torturado.
El perfecto sádico se regodea en su aberración toda vez que se pone en el lugar
del otro, vive en su fantasía el dolor infligido y logra recrear la pena en
suplicios aún más terribles. El sádico ejemplar es masoquista también.
*Ahora bien, el dolor imaginado no se vive en carne propia, ¿por qué? Porque el ser del ser
humano es isolista, una mónada cerrada que no pude experimentar al otro.
En este sentido no queda más que ser apático.
La acción es discriminativa, usar la empatía sólo para la tortura, pero no para la
(ilusión de la) compasión, hacer uso de la apatía frente a la necesidad del otro, pero
no para la implantación del dolor.
Hacer uso de la empatía para procurar el dolor ajeno permite el desarrollo de la
crueldad, es decir, es ontológicamente factible, pero la empatía como piedra angular
para el apoyo a la otredad es un ensueño, como mónadas cerradas no es posible
hacerlo.
La apatía es factible en su uso cuando la inclinación del hombre se dirige a la otredad
en la “caridad”, para reafirmar el Isolismo, pero no ante la aplicación de tormentos,
retenerse en Sade sería un contrasentido.
*Todo este panorama inserto en el modo más sedicioso que existe: la transgresión sexual.
*Tan simple y directo el ser del ser humano. La contra metafísica y la ontología del Divino
Marqués se resuelven funesta y fríamente, erotismo sanguinario.
La obra de Sade puede no ser erótica en tanto la eroticidad obliga al reconocimiento
de la otredad, pero puede serlo, al mismo tiempo, si atendemos a que los libertinos de
Sade toman en cuanta al otro en el sentido que se ha descrito ya.
*Disfruto, luego existo; y si existo, el mundo, el hombre y todos los dioses pueden
perfectamente dejar de existir.
*Las acciones sin lugar a duda son constitutivas del ser sadiano.
Como apunta Juliana González9, el “cómo” del vivir humano resulta determinante
del propio ser.
Los seres que se han elevado a esta categoría son seres únicos, seres superiores que
por dejarse llevar encuentran un juego de apatía empática fluida.
Estos seres humanos están por encima de las leyes y los designios divinos.
*El cómo que determina el ser de los seres debiera no querer jamás recibir daño alguno, sería
necesario elucubrar una máxima como: No hacer a los demás lo que no quiero que me hagan.
Pero esto dejaría al libertino en condiciones similares a la de aquellos que por
Naturaleza son inferiores a él, y esto no nada más es poco deseable, sino, incluso,
contrario a la Naturaleza.
Por otro lado, frente a los que son de “igual” condición, ¿qué hacer?
9
Ethos destino del hombre, Juliana Gonzales, p. 11.
10
Sade, Sollers.
¿A ellos no hacer lo que no quiero que se me haga? No, por supuesto que no, es
necesario por Naturaleza delimitar las posiciones y jerarquías, para ello “Haced a los
demás lo que no quisierais que os hicieran a vosotros”.
Justamente, y en primer lugar, para evitar que ellos me lo hagan a mí y segundo
porque en este ejercicio se gestan los placeres, el disfrute en esta tierra.
*La guerra que esto conlleva es verdaderamente monstruosa, pero entregarse a los gustos
más atroces sin descanso es placer ilimitado. La Naturaleza sola se encargará de decidir quién
está en la jerarquía apropiada.
*De este modo existe una regulación natural. Regulación sensitiva que nada tiene que ver
con la moral, Dios, el Estado o el dinero.
*Pareciera que por el hecho de que el ser humano es malvado por naturaleza disfruta con el
sufrimiento ajeno, lo cual puede ser correcto, pero también es una necesidad ontológica que
rige las acciones con tal de ponderar los estatus adecuados.
“se metamorfosea pronto en placeres mil veces más exquisitos que los que le brindarían la
debilidad y la indulgencia para consigo mismo”12
Y continúa:
11
Sade, Sollers p. 23.
12
La naturaleza del Amor,Singer, Tomo II, p. 388
no cometer más que daños; pero como no siempre se puede hacer, todavía
nos queda la estimulante perversidad de no hacer nunca el bien.”13
*Por supuesto, como bien observa Onfray, el remordimiento que pueda esto generar no es
más que bagatela.
A primera instancia porque este tipo de sensaciones responde una conciencia
impactada por la moral predominante, moral medrosa y mezquina.
Pero también agrega inútilmente más mal al mal. No impide el mal ni borra lo ya
dado.
Estos seres únicos, en su proceso, tal vez pudieran experimentar el remordimiento
haciendo que un acto espantoso carezca del placer de haberlo cometido.
En otras palabras, si algo bueno fuera en la atrocidad sería el placer, placer que
obnubila el sentir remordimiento. Mejor entonces acometer con frialdad y regodearse
con los hechos.
*Si se es una mónada cerrada ontológicamente hablando no puede sino serse egoísta en un
plano ético: “Una sola gota de nuestra sangre vale más que todos los ríos de sangre que los
otros puedan derramar.”
*Egoísmo cuya finalidad es la obtención del placer personal, vivir acorde a la naturaleza es
satisfacer los deseos propios a toda costa.
Los otros están ahí para el placer personal, ya sea que los usemos o que nos dejemos
usar.
Tanto sádicos como masoquistas ven en el otro un medio para la obtención de placer:
El dolor amor mío, se mezcla muy lentamente con el placer, y antes de que os deis
cuenta no experimentaréis más que el éxtasis auténtico.14
Este egoísmo es sadomasoquista.
*Los muchos son sociedad y Justina y Julieta son representaciones de una misma persona así
como de la sociedad.
La una masoquista la otra sádica.
Así, lo socialmente permitido es antinatural: la moral, la religión, estados puritanos,
etc. son ajenos completamente a Ella.
Onfray formula que Sade no vocifera “Libertad, Igualdad y Fraternidad”, sino
“Fatalidad, Desigualdad y Crueldad”.
Si fuera menester delimitar paradigmas sociales sólo cabría una Aristocracia15
disoluta o delincuencia exacerbada, ambas, claro está, incorporadas al crimen sexual:
Los fascistas son los verdaderos anarquistas, refiere Pasolini en su famosísima obra
maestra, Saló16.
*Fantasmas, Sade.
*Lautreamont y Sade, Maurice Blanchot. p. 19, 33, 35, 42, 43, 45, 46.
*Testamento. Sade.
*Phillipe Sollers con voz de Sade sostiene: La antorcha de la filosofía se enciende siempre
con la del follar.18
17
Hernández Arias, José Rafael, Nietzsche y las nuevas utopías, p. 124.
18
Sollers 109.