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CAPÍTULO I
PREGUNTAS PERSISTENTES
Existe falta de una visión clara del conjunto porque de una parte los juristas y
operadores del derecho han reflexionado sobre el mismo y se han formulado un
concepto, al mismo tiempo, el resto de la sociedad tiene una noción sobre lo que
supone es el derecho y las reglas; sin embargo, subsiste la pregunta ¿qué es
derecho? (“…La misma situación fue expresada en algunas famosas palabras de
San Agustín sobre la noción de tiempo “¿Qué es pues tiempo? Si nadie me lo
pregunta lo sé; si deseo explicarlo a alguien que me lo pregunta, no lo sé…” pág.
17).
El propósito del libro no es dar una definición de derecho, en el sentido de una regla
según la cual se puede poner a prueba la corrección del uso de la palabra; su
propósito es hacer avanzar la teoría jurídica proporcionando un análisis más
elaborado de la estructura distintiva de un sistema jurídico nacional, y una
mejor comprensión de las semejanzas y diferencias entre el derecho, la
coerción y la moral, como tipos de fenómenos sociales. En los capítulos del
libro se describen los elementos esenciales del concepto de derecho, que tienen
primordial importancia en su elucidación. (pág. 20).
CAPÍTULO II
NORMAS JURÍDICAS, MANDATOS Y ÓRDENES
En este sentido, la idea de mandato con su fuerte conexión con la autoridad está
mucho más cerca de la idea de derecho que la orden respaldada por amenazas; no
obstante a lo anterior, porque el elemento de autoridad involucrado en el derecho
ha sido siempre uno de los obstáculos en el camino de cualquier explicación fáctica
de lo que el derecho es, por lo tanto, no podemos usar provechosamente la noción
de mandato en la elucidación del derecho, pues ella también implica dicho elemento.
Sin embargo, Hart sigue a Austin en el intento de construir a partir del mando la idea
de derecho.
Dondequiera que haya un sistema jurídico es menester que exista alguna persona
o cuerpo de personas que emitan órdenes generales respaldadas por amenazas y
que esas órdenes sean generalmente obedecidas, y tiene que existir la creencia
general de que estas amenazas serán probablemente hechas efectivas en el
supuesto de desobediencia. Esa persona y cuerpo deben ser internamente supremo
y externamente independiente (pág. 32).
CAPÍTULO IV
SOBERANO Y SÚBDITO
Hart nos dice que fracasa la noción del hábito de obediencia porque no pueden
conferir a un nuevo legislador ningún derecho o potestad de suceder al anterior y a
dar órdenes en su reemplazo, además, la obediencia habitual al legislador anterior
no puede por sí sola hacer probable que las órdenes del nuevo legislador serán
obedecidas o fundar una presunción en tal sentido. Para que en el momento de la
sucesión existan aquel derecho y esta presunción tiene que haberse dado de algún
modo en la sociedad, durante el reinado del legislador anterior, una práctica general
más compleja que cualquier práctica que pueda ser descrita en términos de hábitos
de obediencia. A saber, la aceptación de la regla según la cual el nuevo legislador
tiene título a suceder (pág. 69).
CAPÍTULO V
EL DERECHO COMO UNIÓN DE REGLAS PRIMARIAS Y SECUNDARIAS
Tipos de reglas:
1. Básico o primario. Las reglas de este tipo prescriben que los seres humanos
hagan u omitan ciertas acciones, lo quieran o no. Imponen deberes. Se refieren a
acciones que implican movimiento o cambios físicos. Se ocupan de las acciones
que los individuos deben o no hacer.
Se dice que una regla impone obligaciones cuando la exigencia general en favor de
la comunidad es insistente, y la presión social ejercida sobre quienes se desvían o
amenazan con hacerlo es grande (pág. 107). Tales reglas pueden ser de origen
consuetudinario, es decir, puede no haber un sistema centralmente organizado de
castigos frente a la transgresión de ellas, la presión social puede únicamente asumir
la forma de una reacción crítica u hostil que no llega a sanciones físicas; en cambio,
cuando hay sanción física, se está inclinado a clasificar las reglas como una forma
rudimentaria o primitiva de derecho.
Cuando hay más de una de tales características generales son consideradas como
criterios de identificación, (pág. 118) pueden establecerse normas para su posible
conflicto estructurándolas en un orden de superioridad, como ocurre, por ejemplo,
con la usual subordinación de la costumbre o del precedente a la ley; que es
considerada una “fuente superior” de derecho.
Cuestión: el concepto de validez, entre otros más conceptos del Derecho, son
elucidados mejor en términos de la combinación de las reglas primarias de
obligación con las reglas secundarias de reconocimiento, cambio y
adjudicación. (fundamento en la pág. 122).
CAPÍTULO VI
LOS FUNDAMENTOS DE UN SISTEMA JURÍDICO
Los fundamentos de un sistema jurídico se dan en una situación social compleja,
en donde se acepta y utiliza la regla secundaria de reconocimiento para la
identificación de reglas primarias de obligación.
En un sistema simple el único criterio para identificar algo como derecho es una
simple referencia al hecho de haber sido sancionado por el soberano (Rex I), la
existencia de la RR se manifiesta en la práctica general de los funcionarios o de los
particulares de identificar las reglas mediante ese criterio.
Sin omitir precisar que existe una diferencia entre el uso que los tribunales hacen
de los criterios suministrados por la RR y, el uso que otros hacen de dichos criterios:
cuando los tribunales llegan a una conclusión particular sobre la base de que una
regla particular ha sido correctamente identificada como derecho, lo que ellos dicen
tiene un status especial revestido de autoridad, en mérito a lo establecido por otras
reglas.
La RR rara vez es formulada; en lugar de ello es usada por las autoridades (pág.
127).
Cuestión: si bien es cierto Hart expresa que rara vez se formula en forma
expresa la RR, también no es menos cierto que en la actualidad si lo está, en
la constitución.
(1) Relación entre validez y eficacia del derecho: eficaz quiere decir que una
regla de derecho que exige cierta conducta es más frecuentemente
obedecida que desobedecida, en este tenor no se relaciona con la validez,
excepto cuando la RR incluye entre sus criterios, como algunas lo hacen, la
provisión de que ninguna regla ha de valer como regla del sistema si hace
mucho que ha dejado de ser eficaz. El uso normal de enunciados internos
tiene lugar en un contexto de eficacia general, ello no implica decir que los
enunciados de validez significan que el sistema es generalmente eficaz.
(1) Criterio supremo de validez jurídica: si las reglas identificadas por referencia
a él son reconocidas como reglas del sistema, aun cuando contradigan reglas
identificadas por referencia a los otros criterios, mientras que las reglas
identificadas por referencia a los últimos no son reconocidas si contradicen
las reglas identificadas por referencia al criterio supremo. Se refiere a un
lugar relativo en una escala y no importa ninguna noción de potestad
legislativa jurídicamente ilimitada. (pág. 132).
Mientras que la validez jurídica de otras reglas del sistema puede ser
demostrada por referencia a ella, su propia validez no puede ser demostrada,
sino que se demuestra su existencia por referencia a la práctica efectiva, a la
forma en que los tribunales identifican lo que ha de tenerse por derecho,
y a la aquiescencia o aceptación general frente a esas identificaciones
(pág. 135).
En un sistema jurídico simple las ideas de RR, criterio supremo y legislatura ilimitada
parecen convergir.
Es importante distinguir entre (1) dar por admitida la validez y (2) presuponer la
existencia de tal regla.
Derecho: es una característica definitoria del sistema jurídico y por ello es digna de
llamarse derecho porque proporciona los criterios para la identificación de otras
reglas del sistema.
La regla de reconocimiento última puede ser considerada desde dos puntos de vista:
uno de ellos se expresa en el enunciado externo de hecho que afirma la existencia
de la regla en la práctica efectiva del sistema; el otro, se expresa en los enunciados
internos de validez formulados por quienes la usan para identificar el derecho. (pág.
139).
Lo crucial es que haya una aceptación oficial unificada o compartida de la RR; para
que exista tiene que ser considerada dese el punto de vista interno como un criterio
común y público de decisiones judiciales correctas y no como algo que cada juez
simplemente obedece por cuenta propia.