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H.L.A. HART, EL CONCEPTO DE DERECHO.

CAPÍTULO I
PREGUNTAS PERSISTENTES

Existe falta de una visión clara del conjunto porque de una parte los juristas y
operadores del derecho han reflexionado sobre el mismo y se han formulado un
concepto, al mismo tiempo, el resto de la sociedad tiene una noción sobre lo que
supone es el derecho y las reglas; sin embargo, subsiste la pregunta ¿qué es
derecho? (“…La misma situación fue expresada en algunas famosas palabras de
San Agustín sobre la noción de tiempo “¿Qué es pues tiempo? Si nadie me lo
pregunta lo sé; si deseo explicarlo a alguien que me lo pregunta, no lo sé…” pág.
17).

La profunda perplejidad que ha mantenido viva la pregunta, no es ignorancia u


olvido o falta de capacidad para reconocer los fenómenos a los que la palabra
“derecho” comúnmente se refiere. (pág.6)

Se responde al último de los denominados tres problemas recurrentes (resolverlos


conlleva a elucidar la naturaleza del derecho) es decir, ¿Qué son las reglas, y en
qué medida el derecho es una cuestión de reglas? (los otros dos son ¿en qué se
diferencia el derecho de las órdenes respaldadas por amenazas, y qué relación
tiene con ellas? y ¿en qué se diferencia la obligación jurídica de la obligación moral,
y qué relación tiene con ella?)

Primero, la predictibilidad del castigo (sanción prevista por la ley en caso de su


incumplimiento o violación) es un aspecto importante de las reglas jurídicas, pero
no es el único que explica la razón de su cumplimiento: el juez al castigar, toma a la
regla como guía y a la trasgresión como la razón y justificación del castigo al
transgresor (pág. 13), el juez no ve en la regla un enunciado que expresa que él y
otros probablemente castigarán las transgresiones, aunque el espectador podría
considerarla de esta manera; el aspecto predictivo es irrelevante para el juez
mientras que el status de ella como guía y justificación es esencial.

El propósito del libro no es dar una definición de derecho, en el sentido de una regla
según la cual se puede poner a prueba la corrección del uso de la palabra; su
propósito es hacer avanzar la teoría jurídica proporcionando un análisis más
elaborado de la estructura distintiva de un sistema jurídico nacional, y una
mejor comprensión de las semejanzas y diferencias entre el derecho, la
coerción y la moral, como tipos de fenómenos sociales. En los capítulos del
libro se describen los elementos esenciales del concepto de derecho, que tienen
primordial importancia en su elucidación. (pág. 20).

Consecuentemente, la regla de reconocimiento y la validez de la ley es un


elemento esencial del derecho.

CAPÍTULO II
NORMAS JURÍDICAS, MANDATOS Y ÓRDENES

Noción de mandato: (Austin), cuando se da un mandato no es menester que haya


una amenaza latente de daño para el supuesto de desobediencia. Mandar es
característicamente ejercer autoridad sobre hombres, no el poder de causar daño,
y aunque puede ir combinado con amenazas de daños, un mandato no es
primariamente una apelación al miedo sino al respeto a la autoridad. (pág. 26).

En este sentido, la idea de mandato con su fuerte conexión con la autoridad está
mucho más cerca de la idea de derecho que la orden respaldada por amenazas; no
obstante a lo anterior, porque el elemento de autoridad involucrado en el derecho
ha sido siempre uno de los obstáculos en el camino de cualquier explicación fáctica
de lo que el derecho es, por lo tanto, no podemos usar provechosamente la noción
de mandato en la elucidación del derecho, pues ella también implica dicho elemento.
Sin embargo, Hart sigue a Austin en el intento de construir a partir del mando la idea
de derecho.

Cuestión: el mandato implica autoridad y si la regla de reconocimiento es un


mandato entonces si la regla de reconocimiento me dice el derecho válido,
entonces como justificar la autoridad de la regla de reconocimiento, su
obediencia si no hay derecho antes del derecho, es decir, ¿de dónde emana
la autoridad de la regla de reconocimiento?

Es un hecho que la sociedad es grande y compleja, ya no es simple, por lo tanto el


derecho no puede funcionar simplemente como informar a cada gobernado acerca
de las prohibiciones y derechos que tiene, ninguna sociedad podrían mantener el
número necesario de órganos para asegurar que cada uno de sus miembros sea
informado, en forma oficial y separada, de cada uno de los actos que debe realizar.

Consecuentemente la forma típica de la ley es: (1) indica un tipo general de


conducta y (2) se aplica a una clase general de personas de quienes se espera que
adviertan que rige para ellas y que cumplan con lo prescrito.
Cuestión: la generalidad de la regla de reconocimiento en una sociedad
compleja, es decir, es generalmente aceptada; existe consenso uniforme, por
eso, la regla de reconocimiento es en cierto aspecto, sentido común, se está
de acuerdo en los criterios para que una ley sea válida o no.

El sistema jurídico es único, en donde se pueden distinguir una jerarquía de


elementos supremos y subordinados; es supremo e independiente frente a otros
sistemas jurídicos; es general; coercitivo; permanente o perdurable hasta que se
revoque; generalmente obedecido.

Dondequiera que haya un sistema jurídico es menester que exista alguna persona
o cuerpo de personas que emitan órdenes generales respaldadas por amenazas y
que esas órdenes sean generalmente obedecidas, y tiene que existir la creencia
general de que estas amenazas serán probablemente hechas efectivas en el
supuesto de desobediencia. Esa persona y cuerpo deben ser internamente supremo
y externamente independiente (pág. 32).

CAPÍTULO IV
SOBERANO Y SÚBDITO

Características de los sistemas jurídicos: (1) el carácter continúo de la autoridad


para crear derecho que poseen una sucesión de legisladores diferentes y (2) la
persistencia de las normas muchos después de que su creador y quienes le
prestaban obediencia habitual han desaparecido. (pág. 64).

Cuestión: la permanencia de la regla de reconocimiento a pesar de las


generaciones, es decir, el consenso general continúa vigente.

Cuestión: me pregunto si es viable que la regla de reconocimiento haya ido


evolucionando desde la sociedad simple a la compleja, inició como un vínculo
primitivo, como un hábito generalizado para considerar como válida alguna
orden o ley, conforme fue evolucionando la sociedad, el hábito permaneció
quizá por la eficacia de sus resultado, pues de lo contrario se hubiera
abandonado el criterio y sustituido por otro, si permanece es porque la
generalidad lo ha aceptado y nota que produce resultados positivos para la
validez del derecho; en palabras de Hart los hábitos de la mayoría son
convergentes (pág. 66).
La regla de reconocimiento no inició compleja, no era derecho escrito sino un
hábito, en la actualidad evolucionó y nos ha permitido, al menos en nuestro
sistema jurídico, identificar la regla de reconocimiento con el parámetro de
validez establecido en la constitución.
Es como con el hábito de obediencia a Rex I y Rex II, no se tiene la certeza de
que subsista a Rex II, pero en este caso así ha sido; sólo después de que
sepamos que sus órdenes han sido obedecidas durante algún tiempo,
podremos afirmar que se ha establecido un hábito de obediencia (pág. 67), en
el caso de la regla de reconocimiento, un hábito de permanencia.

Hart nos dice que fracasa la noción del hábito de obediencia porque no pueden
conferir a un nuevo legislador ningún derecho o potestad de suceder al anterior y a
dar órdenes en su reemplazo, además, la obediencia habitual al legislador anterior
no puede por sí sola hacer probable que las órdenes del nuevo legislador serán
obedecidas o fundar una presunción en tal sentido. Para que en el momento de la
sucesión existan aquel derecho y esta presunción tiene que haberse dado de algún
modo en la sociedad, durante el reinado del legislador anterior, una práctica general
más compleja que cualquier práctica que pueda ser descrita en términos de hábitos
de obediencia. A saber, la aceptación de la regla según la cual el nuevo legislador
tiene título a suceder (pág. 69).

Cuestión: sin embargo, esto no aplica a la regla de reconocimiento porque


subsiste a pesar de que los legisladores y demás titulares del poder público
cambien.

Cuestión: ¿qué autoridad dicta la regla de reconocimiento? La generalidad o


alguna en específico.

Los hábitos se distinguen de las reglas sociales porque la desviación o no


realización de la regla trae crítica y formas de presión, esto no sucede con los
hábitos; las desviaciones del modelo son una razón para formular la regla; para que
exista una regla social, al menos, algunos tienen que ver en la conducta que se trata
una pauta o criterio general de comportamiento a ser seguido por el grupo como un
todo (aspecto interno de las reglas).

Cuestión: corrección ¿la regla de reconocimiento es una regla social? O inició


como tal.

La aceptación de una regla por una sociedad en un determinado momento no


garantiza su existencia continuada.

Cuestión: ¿cómo es que ha permanecido la regla de reconocimiento? ¿Por


qué? Considero que es por su efectividad o porque no se han encontrado
mejores criterios de validez para la ley. Ha cambiado y ahora tenemos validez
formal y sustancial; la ley es válida porque ha sido creada por órgano
competente y se ha seguido el procedimiento de creación, además porque
respeta el contenido de la constitución.

La aceptación general es un fenómeno complejo, dividido, en cierto modo, entre los


funcionarios y los ciudadanos comunes, que contribuyen de diferentes maneras a
la misma y, con ello, a la existencia de un sistema jurídico. Se puede decir que los
funcionarios del sistema reconocen explícitamente aquellas reglas fundamentales
que confieren autoridad legislativa: los legisladores, cuando dictan normas de
acuerdo con las reglas que los facultan a dictarlas, los tribunales, cuando identifican
como normas a ser aplicadas por ellos las dictadas por las personas así facultadas,
y los expertos, cuando guían a los ciudadanos comunes por referencia a las normas
dictadas de esa manera. El ciudadano común manifiesta su aceptación, en gran
medida, mediante la aquiescencia con los resultados de estos actos oficiales. Acata
las normas jurídicas que son creadas e identificadas de esta manera, y también
deduce pretensiones y ejercita potestades conferidas por ellas. Pero puede saber
muy poco acerca del origen de éstas o de quienes son sus creadores: puede ser
que algunos únicamente sepan que las normas son “el derecho”. Este prohíbe cosas
que los ciudadanos comunes quieren hacer, y los ciudadanos saben que pueden
ser arrestados por la policía y condenados por un juez si desobedecen. (pág. 76).

Cuestión: se acepta por la generalidad porque todos, o mayor parte,


consideran que son los criterios correctos de validez conforme a los valores
de la sociedad, su forma de pensar, identidad común, etc.
La regla de reconocimiento como criterio de unidad y coherencia del sistema
jurídico; es una regla generalmente aceptada.

CAPÍTULO V
EL DERECHO COMO UNIÓN DE REGLAS PRIMARIAS Y SECUNDARIAS

Tipos de reglas:

1. Básico o primario. Las reglas de este tipo prescriben que los seres humanos
hagan u omitan ciertas acciones, lo quieran o no. Imponen deberes. Se refieren a
acciones que implican movimiento o cambios físicos. Se ocupan de las acciones
que los individuos deben o no hacer.

2. Secundario. Dependen del primer tipo o son secundarias conforme a él;


establecen que los seres humanos pueden, haciendo o diciendo ciertas cosas,
introducir nuevas reglas del tipo primario, extinguir o modificar reglas anteriores, o
determinar de diversas maneras el efecto de ellas, o controlar su actuación.
Confieren potestades públicas o privadas. Prevén actos que conducen no
simplemente a movimiento o cambio físico, sino a la creación o modificación de
deberes u obligaciones. Se ocupan de las reglas primarias; especifican la manera
en que las reglas primarias pueden ser verificadas en forma concluyente,
introducidas, eliminadas o modificadas y su violación determinada de manera
incontrovertible; son de reconocimiento, cambio y adjudicación.

Se dice que una regla impone obligaciones cuando la exigencia general en favor de
la comunidad es insistente, y la presión social ejercida sobre quienes se desvían o
amenazan con hacerlo es grande (pág. 107). Tales reglas pueden ser de origen
consuetudinario, es decir, puede no haber un sistema centralmente organizado de
castigos frente a la transgresión de ellas, la presión social puede únicamente asumir
la forma de una reacción crítica u hostil que no llega a sanciones físicas; en cambio,
cuando hay sanción física, se está inclinado a clasificar las reglas como una forma
rudimentaria o primitiva de derecho.

Lo que vale la pena destacar es que la insistencia en la importancia o seriedad de


la presión social que se encuentra tras la regla es el factor primordial que determina
que ellas sean concebidas como dando origen a obligaciones (pág. 108). Se las
cree necesarias para la preservación de la vida social o de algún aspecto de
ella al que se atribuye gran valor.

Punto de vista interno: desde los operadores del derecho.

Punto de vista externo: desde los observadores.

Regla de reconocimiento: (pág. 117) se introduce como la forma más simple de


remedio para la falta de certeza del régimen de reglas primarias; especifica alguna
característica o características cuya posesión por una regla sugerida es
considerada como una indicación afirmativa indiscutible de que se trata de una regla
del grupo, que ha de ser sustentada por la presión social que éste ejerce. La
existencia de tal regla de reconocimiento puede asumir una enorme variedad de
formas, simples o complejas (en el derecho primitivo puede consistir en un
documento escrito o algún monumento público en donde hay una lista o texto de las
reglas, dotado de autoridad).

Paso del mundo prejurídico al jurídico puede cumplirse en etapas distinguibles, la


primera es la reducción a escritura de las reglas hasta ese momento no escritas, no
es el paso crucial pero sí es importante. Lo que es crucial es el reconocimiento
de la referencia a la escritura o inscripción como revestida de autoridad, es
decir, como la forma propia de resolver las dudas acerca de la existencia de
la regla. Donde hay ese reconocimiento hay una forma muy simple de regla
secundaria: una regla para la identificación incontrovertible de las reglas primarias
de obligación.

En un sistema jurídico desarrollado las reglas de reconocimiento son más


complejas: en lugar de identificar las reglas exclusivamente por referencia a un texto
o lista, ellas lo hacen por referencia a alguna característica general poseída por las
reglas primarias, puede ser el hecho de haber sido sancionadas por un cuerpo
específico, o su larga vigencia consuetudinaria, o su relación con las decisiones
judiciales.

Cuando hay más de una de tales características generales son consideradas como
criterios de identificación, (pág. 118) pueden establecerse normas para su posible
conflicto estructurándolas en un orden de superioridad, como ocurre, por ejemplo,
con la usual subordinación de la costumbre o del precedente a la ley; que es
considerada una “fuente superior” de derecho.

La complejidad puede hacer que las reglas de reconocimiento en un sistema jurídico


moderno parezcan muy diferentes de la simple aceptación de un texto revestido de
autoridad.

La regla de reconocimiento en un sistema simple o complejo trae consigo


muchos elementos distintivos del derecho al proporcionar un digno con
autoridad introduce la idea de sistema jurídico. Porque las reglas no soy ya un
conjunto discreto inconexo, sino que, de una manera simple, están unificadas.
Además, en la operación simple de identificar una regla dada como poseedora de
la característica exigida de pertenecer a una lista de reglas a la que se atribuye
autoridad, tenemos el germen de la idea de validez jurídica.

Cuestión: introducir el trabajo de la constitución jurídica como norma jurídica


suprema.

Cuestión: la regla de reconocimiento dota de unidad a las reglas, da pauta


para la creación del sistema jurídico y es parámetro para la validez de la ley.

Cuestión: ¿cuál es el fundamento de la autoridad de la regla de


reconocimiento?
Hay una conexión obvia entre las reglas de cambio y la regla de reconocimiento:
donde existen las primeras, las últimas necesariamente incorporarán una referencia
a la legislación como característica identificadora de las reglas, aunque no es
menester que mencionen todos los detalles del procedimiento legislativo.

Si la estructura social es simple de tal suerte que la única fuente de derecho es la


legislación, entonces la regla de reconocimiento se limita únicamente a especificar
que la sanción legislativa es la única marca o señal identificatoria, o criterio de
validez, de las reglas (pág. 119).

Cuestión: no es simple en la actualidad, la legislación no es la única fuente de


derecho; depende de si se refiere a la ley en sentido restringido, o amplio,
porque tenemos también la jurisprudencia que es de fuente judicial, no
legislativa.

Las reglas de adjudicación confieren potestades jurisdiccionales y acuerdan un


status especial a las declaraciones judiciales relativas a la transgresión de
obligaciones; definen los conceptos de juez, tribunal, jurisdicción y sentencia.

Un sistema con reglas de adjudicación está necesariamente comprometido a una


regla de reconocimiento de tipo elemental o imperfecto porque si los tribunales están
facultados para hacer determinaciones revestidas de autoridad sobre el hecho de
que una regla ha sido transgredida, no puede evitarse que ellas sean consideradas
como determinaciones revestidas de autoridad acerca de cuáles son las reglas. Así,
la regla que confiere jurisdicción es también una regla de reconocimiento que
identifica a las reglas primarias a través de las decisiones de los tribunales, y estas
decisiones se convierten en una “fuente” de derecho (pág. 121).

Cuestión: toda regla de adjudicación es RR pero no la inversa porque la RR


comprende cuestiones más amplias que la de adjudicación; por eso es
imperfecto.

Cuestión: el concepto de validez, entre otros más conceptos del Derecho, son
elucidados mejor en términos de la combinación de las reglas primarias de
obligación con las reglas secundarias de reconocimiento, cambio y
adjudicación. (fundamento en la pág. 122).

CAPÍTULO VI
LOS FUNDAMENTOS DE UN SISTEMA JURÍDICO
Los fundamentos de un sistema jurídico se dan en una situación social compleja,
en donde se acepta y utiliza la regla secundaria de reconocimiento para la
identificación de reglas primarias de obligación.

Dondequiera que se acepte la regla de reconocimiento, tanto los particulares como


los funcionarios tienen criterios con autoridad para identificar las reglas primarias
de obligación; los criterios pueden asumir una o más formas: (1) referencia a un
texto revestido de autoridad, (2) a una sanción legislativa, (3) práctica
consuetudinaria, (4) declaraciones generales de personas especificadas, (5)
decisiones judiciales pasadas, dictadas en casos particulares.

En un sistema simple el único criterio para identificar algo como derecho es una
simple referencia al hecho de haber sido sancionado por el soberano (Rex I), la
existencia de la RR se manifiesta en la práctica general de los funcionarios o de los
particulares de identificar las reglas mediante ese criterio.

En un sistema moderno en donde hay variedad de fuentes de derecho, la RR es


compleja: los criterios para identificar el derecho son múltiples y por lo común
incluyen una constitución escrita, la sanción por una legislatura y los precedentes
judiciales. En la mayor parte de los casos se adoptan provisiones para posibles
conflictos, clasificando estos criterios en un orden de subordinación y primacía
relativas. (pág. 126). La RR contiene una ordenación jerárquica de distintos criterios
de identificación, se manifiesta en la práctica general de identificar las reglas
mediante dichos criterios. (pág. 127).

Si se confunde entre subordinación y primacía entonces se obtiene algún


fundamento espurio de que todo el derecho es esencialmente o realmente producto
de la legislación.

Por ejemplo, en el common law inglés la costumbre y el precedente están


subordinados a la legislación, puesto que las reglas consuetudinarias y las reglas
del common law pueden verse privadas de su status de derecho por una ley, sin
embargo, no deben su status de derecho a una ley, tienen el carácter de ley por
la aceptación de una RR que les acuerda ese lugar independiente en el
sistema, aunque subordinado (pág. 126).

La RR rara vez se formula en forma expresa como una regla, aunque


ocasionalmente los tribunales pueden enunciar en términos generales el lugar o
jerarquía de un criterio de identificación respecto a otro, por ejemplo, cuando afirman
la supremacía de las Leyes del Parlamento sobre otras fuentes de derecho. En la
mayor parte de los casos, la RR no es expresada, sino que su existencia se
muestra en la manera en que las reglas particulares son identificadas, ya por los
tribunales u otros funcionarios, ya por los súbditos o sus consejeros.

Sin omitir precisar que existe una diferencia entre el uso que los tribunales hacen
de los criterios suministrados por la RR y, el uso que otros hacen de dichos criterios:
cuando los tribunales llegan a una conclusión particular sobre la base de que una
regla particular ha sido correctamente identificada como derecho, lo que ellos dicen
tiene un status especial revestido de autoridad, en mérito a lo establecido por otras
reglas.

La RR rara vez es formulada; en lugar de ello es usada por las autoridades (pág.
127).

Cuestión: entonces la RR, los criterios están en la interpretación de la ley, en


la jurisprudencia, ella nos dice el lugar jerárquico de la Constitución, tratados
internacionales, etc.

Cuestión: si bien es cierto Hart expresa que rara vez se formula en forma
expresa la RR, también no es menos cierto que en la actualidad si lo está, en
la constitución.

Punto de vista interno: el uso de jueces y otros operadores del derecho, de RR no


expresadas para identificar reglas particulares del sistema; al usar las RR
manifiestan su propia aceptación de las reglas en cuanto a reglas orientadoras, esta
actitud trae aparejado un vocabulario característico, distinto de las expresiones
naturales del punto de vista externo. Se expresa como el derecho dispone que…
Esta actitud de aceptación compartida de reglas se contrapone a la de un
observador que registra ab extra el hecho de que un grupo social acepta tales reglas
(punto de vista externo), la expresión es En México reconocen como derecho…

El enunciado interno no enuncia el hecho de que la RR es aceptada, sino que la


aplica al reconocer como válida alguna regla particular del sistema.

El enunciado externo, sin aceptar necesariamente la RR, enuncia el hecho de que


otros la aceptan.

Si se comprende este uso de una regla de reconocimiento aceptada al formular


enunciados internos, y se lo distingue cuidadosamente de un enunciado fáctico
externo que afirma que esa regla es aceptada, desaparecen muchas oscuridades
referentes a la noción de “validez” jurídica. Porque la palabra “válido” es usada con
más frecuencia, aunque no siempre, precisamente en tales enunciados internos,
que aplican a una regla particular de un sistema jurídico una regla de reconocimiento
no expresada pero aceptada. Decir que una determinada regla es válida es
reconocer que ella satisface todos los requisitos establecidos en la regla de
reconocimiento y, por lo tanto, que es una regla del sistema (pág. 128).

Los enunciados de validez no enuncian expresamente que la RR ha sido satisfecha.

Cuestión: la teoría de Hart no prohíbe ni excluye que la RR sea escrita.

Perplejidades relacionadas con la validez:

(1) Relación entre validez y eficacia del derecho: eficaz quiere decir que una
regla de derecho que exige cierta conducta es más frecuentemente
obedecida que desobedecida, en este tenor no se relaciona con la validez,
excepto cuando la RR incluye entre sus criterios, como algunas lo hacen, la
provisión de que ninguna regla ha de valer como regla del sistema si hace
mucho que ha dejado de ser eficaz. El uso normal de enunciados internos
tiene lugar en un contexto de eficacia general, ello no implica decir que los
enunciados de validez significan que el sistema es generalmente eficaz.

(2) Relación entre validez y existencia: en un sistema simple la existencia es un


enunciado externo; es un sistema complejo, el enunciado de que una regla
existe es un enunciado interno que aplica una RR aceptada, pero no expresa,
y que, significa únicamente que la regla es válida según los criterios de
validez del sistema. En cambio, la RR sólo existe como una práctica
compleja, pero normalmente concordante, de los tribunales,
funcionarios y particulares, al identificar el derecho por referencia a
ciertos criterios. Su existencia es una cuestión de hecho. (pág. 137).

Cuestión: los criterios de identificación del derecho o de validez son variados


y dependen de cada sistema jurídico.

Cuestión: la validez de una regla no implica que sea efectiva, puede o no


obedecerse, pero ello no le resta su status de derecho válido, aunque en la
mayor parte de los casos resulta inútil referirse al derecho válido que no se
observa.

El enunciado interno de que una regla es válida es una razón de la decisión.

La regla de reconocimiento que suministra los criterios para determinar la validez


de otras reglas del sistema es en un sentido importante, que trataremos de clarificar,
una regla última; y cuando, como es usual, hay varios criterios clasificados en
orden de subordinación y primacía relativas, uno de ellos es supremo. (pág. 132).

Lo anterior no es lo mismo a la teoría criticada de que en todo sistema jurídico tiene


que haber una potestad legislativa soberana que es jurídicamente ilimitada.

No es lo mismo regla última y criterio supremo:

(1) Criterio supremo de validez jurídica: si las reglas identificadas por referencia
a él son reconocidas como reglas del sistema, aun cuando contradigan reglas
identificadas por referencia a los otros criterios, mientras que las reglas
identificadas por referencia a los últimos no son reconocidas si contradicen
las reglas identificadas por referencia al criterio supremo. Se refiere a un
lugar relativo en una escala y no importa ninguna noción de potestad
legislativa jurídicamente ilimitada. (pág. 132).

(2) RR como regla última: se cuestiona la validez de un reglamento y las leyes


superiores jerárquicamente hasta que se llega a una regla que proporciona
criterios para la determinación de la validez de las otras reglas, pero que, a
diferencia de lo que ocurre con las inferiores, no está subordinada a criterios
de validez jurídica establecidos por otras reglas. (pág. 133).

Mientras que la validez jurídica de otras reglas del sistema puede ser
demostrada por referencia a ella, su propia validez no puede ser demostrada,
sino que se demuestra su existencia por referencia a la práctica efectiva, a la
forma en que los tribunales identifican lo que ha de tenerse por derecho,
y a la aquiescencia o aceptación general frente a esas identificaciones
(pág. 135).

Cuestión: la constitución es un criterio supremo de validez jurídica.

Cuestión: la RR es única y se compone de diversos criterios: legislativo,


judicial, jurisprudencial, sentencias, constitución; la constitución es el criterio
supremo.

En un sistema jurídico simple las ideas de RR, criterio supremo y legislatura ilimitada
parecen convergir.

Cuestión: ¿cuál es el fundamento o validez de la RR?


No puede presentarse una cuestión de ese tipo respecto de la validez de la propia
RR que proporciona los criterios; ella no puede ser válida ni inválida, simplemente
se la acepta como adecuada para ser usada de esta manera. Expresar este hecho
simple diciendo en forma oscura que su validez “se da por admitida pero no puede
ser demostrada”, es como decir que damos por admitido, pero no podemos
demostrar, que el metro de París, que es el criterio último de corrección de todas
las medidas en el sistema métrico, es en sí correcto. (pág. 135).

Es importante distinguir entre (1) dar por admitida la validez y (2) presuponer la
existencia de tal regla.

La RR escapa a las categorías convencionales empleadas para describir un sistema


jurídico (pág. 138), puede ser un hecho y derecho:

Derecho: es una característica definitoria del sistema jurídico y por ello es digna de
llamarse derecho porque proporciona los criterios para la identificación de otras
reglas del sistema.

Hecho: cuando se afirma que existe, se formula un enunciado externo sobre un


hecho efectivo que se refiere a la manera en que son identificadas las reglas de un
sistema eficaz.

No se puede limitar a ser hecho o derecho.

La regla de reconocimiento última puede ser considerada desde dos puntos de vista:
uno de ellos se expresa en el enunciado externo de hecho que afirma la existencia
de la regla en la práctica efectiva del sistema; el otro, se expresa en los enunciados
internos de validez formulados por quienes la usan para identificar el derecho. (pág.
139).

Lo crucial es que haya una aceptación oficial unificada o compartida de la RR; para
que exista tiene que ser considerada dese el punto de vista interno como un criterio
común y público de decisiones judiciales correctas y no como algo que cada juez
simplemente obedece por cuenta propia.

Condiciones necesarias y suficientes mínimas para la existencia de un sistema


jurídico: (1) las reglas de conducta válidas según el criterio de validez último del
sistema tienen que ser generalmente obedecidas, (2) sus RR que especifican los
criterios de validez jurídica, y sus reglas de cambio y adjudicación, tiene que ser
efectivamente aceptadas por sus funcionarios como pautas o modelos públicos y
comunes de la conducta oficial.
CAPÍTULO VII
FORMALISMO Y ESCEPTICISMO ANTE LAS REGLAS

La distinción entre la incertidumbre de una regla particular y la incertidumbre del


criterio usado para identificarla como regla del sistema, no es siempre clara. Pero
alcanza claridad máxima cuando las reglas son normas legislativas, con un texto
revestido de autoridad. (pág. 184).

Los criterios de la RR no son estáticos, a menos que así se prescriba; si es el caso,


su estaticidad se erradica con el cambio en el sistema, mediante la violencia.

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