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UNIDAD 1
Concepto de derechos reales
ARTÍCULO 1882. Concepto
El derecho real es el poder jurídico, de estructura legal, que se ejerce directamente sobre su objeto, en
forma autónoma y que atribuye a su titular las facultades de persecución y preferencia, y las demás
previstas en este Código.
a) El derecho real es el poder jurídico: el poder jurídico es un derecho subjetivo, cuya esencia consiste en
un señorío de la voluntad, sobre personas o cosas, que se ejerce de propia autoridad y, por lo tanto, en
forma autónoma e independiente de toda otra voluntad.
b) De estructura legal: se haya vinculado con la creación legal de todos los derechos reales.
La ley genera el tipo legal otorgándole un nombre y un contenido que, en general, no puede ser
modificado por los particulares. Está regida mayoritariamente por normas de orden público quedando un
estrecho margen para la actuación de la voluntad de los particulares.
c) Que se ejerce directamente sobre su objeto: es característico del derecho real la relación directa e
inmediata que se produce entre el titular del derecho y la cosa que constituye su objeto.
d) En forma autónoma: se hace hincapié en la inmediatez característica básica de los derechos reales, ello
implica que el derecho real para su ejercicio no requiere la participación de persona alguna, el titular per se
puede ejercer todas las facultades que el derecho le otorga.
e) Y que atribuye a su titular las facultades de persecución y preferencia, y las demás previstas en este
Código: resalta el artículo los dos ius típicos de los derechos reales (explicados anteriormente) y señala
además, que existen otras facultades que se prevén en el Código.
"Es un derecho absoluto, de contenido patrimonial, cuyas
normas sustancialmente de orden público, establecen entre una persona (sujeto activo) y una cosa
(objeto) una relación inmediata, que previa publicidad obliga a la sociedad (sujeto pasivo) a abstenerse de
realizar cualquier acto contrario al mismo (obligación negativa), naciendo para el caso de violación una
acción real y que otorga a sus titulares las ventajas inherentes al iuspersequendi y al ius praeferendi."
Las normas que regulan los derechos reales son
sustancialmente de orden público, es decir, que están vinculadas al plexo de principios de orden superior,
políticos, económicos, morales y algunas veces religiosos, a los cuales una sociedad considera
estrechamente vinculada la existencia y conservación de la organización social establecida30 y que, por eso
mismo, no pueden ser dejadas de lado por las convenciones privadas.
Como el derecho real se imprime, por así decirlo, directamente
sobre la cosa, y es oponible a todos, su titular puede perseguir aquélla en manos de cualquiera que la
tenga, para ejercer su derecho, naturalmente que con las limitaciones que le impone la propia ley, por
razones, más que nada, de seguridad jurídica.
Otra ventaja de la que gozan los derechos reales: derecho de
exclusión, que se materializa en la posibilidad de dejar de lado y prevalecer, no sólo sobre los derechos
personales sino aun sobre los reales de fecha posterior, y que se concreta en la máxima qui prior est
tempore, potior est iure.
CONCEPTO DE GUILLERMO ALLENDE: “El derecho real es un derecho absoluto, de contenido patrimonial,
cuyas normas sustancialmente de orden público, establecen entre una persona (sujeto activo) y una cosa
determinada (objeto), una relación inmediata que, previa publicidad, obliga a la sociedad (sujeto pasivo) a
abstenerse de realizar cualquier acto contrario al mismo (obligación negativa), naciendo para el caso de
violación una acción real y que otorga a sus titulares las ventajas inherentes al ius persequendi y al ius
preferendi.”
a) Derecho absoluto: implica su oponibilidad erga omnes;
b) De contenido patrimonial: los derechos reales son susceptibles de valor, por lo que integran el
patrimonio;
c) Sustancialmente de orden público: lo que surge del "numerus clausus", todas las normas relativas a los
derechos reales son de orden público;
d) Sujeto activo: Puede serlo una persona física o ideal;
e) Objeto: son las cosas: ciertas, individualmente determinadas, en el comercio y actualmente existentes;
f) Relación inmediata: su titular, para extraer el beneficio de la cosa sobre la que recae el derecho, no
necesita ningún intermediario;
g) Publicidad: si el derecho real puede oponerse a todos, es indispensable que ese derecho pueda ser
conocido también por todos. Hay dos formas de cumplimentarlo: la tradición y la inscripción en registros
especiales;
h) Sujeto pasivo y su deber de abstención: es la base del concepto de la "obligación pasivamente
universal". El sujeto pasivo es toda la sociedad, quien está obligada a respetar la acción del titular del
derecho sobre su cosa, es decir no debe hacer nada contra la propiedad ajena;
i) Acciones reales: Protegen a los derechos reales en caso que se atente contra su existencia, plenitud o
libertad.
j) Ius persequendi: es el derecho de perseguir la cosa de manos de quien la detente. Detentar es tener sin
derecho.
k) ius preferendi: es la relación derecho real-tiempo. “primero en el tiempo mejor en el derecho”. El
derecho real primero en el tiempo es el que tiene la preferencia.
Derechos reales como derechos subjetivos
El derecho real es un derecho subjetivo, ya que integra una serie de derechos y atribuciones otorgadas por
el ordenamiento jurídico a favor de una persona para obrar en defensa y protección de sus intereses. Los
derechos reales conceden a su titular facultades, potestades sobre una cosa, por lo tanto son derechos
subjetivos. Como por ej. el dueño de una cosa tiene la facultad de defenderse ante una turbación ilegítima
de sus derecho sobre la cosa. Siendo el derecho subjetivo un interés jurídicamente protegido a través del
derecho objetivo.
Los derechos reales en la clasificación de los derechos – comparación con los personales
Por su oponibilidad
a) Absolutos
b) relativos
Por su contenido
c) Patrimoniales: se traducen en un valor económico
d) Extrapatrimoniales: sin valor económico
Podemos decir que los derechos reales están dentro de los derechos absolutos, ya que el sujeto tiene
absoluta potestad sobre un objeto determinado y su ejercicio no requiere de otro sujeto. No así son los
derechos personales que son derechos relativos.
Los derechos reales son patrimoniales por su contenido como tbm los personales pueden serlo.
Art.1908: Enumeración. Las relaciones de poder del sujeto con una cosa son la
posesión y la tenencia.
La doctrina tradicional conoció con el nombre de “relaciones posesorias” o “relaciones reales”,
e incluso de “relaciones materiales”. Se trata de relaciones de hecho que vinculan a una o varias
personas con una cosa. No ha de pensarse que las relaciones de poder se agotan en esas dos. El art.
1911 CCyC contempla a los “servidores de la posesión”, quienes al no revestir la condición de
poseedores ni de tenedores, vienen a titularizar una categoría de relación de poder distinta a la
posesión y la tenencia. A ello habría que agregar la yuxtaposición local —también llamada “simple
relación de lugar”—, no mencionada en ninguna disposición del CCyC pero pacíficamente aceptada
por la doctrina. Como tal, puede estar sustentada en un derecho personal (v.gr., derivado de un
contrato de locación, comodato, mutuo, etc.) o uno real (v.gr., dominio, usufructo, entre otros), o
por el contrario, pudo haberse constituido con prescindencia de todo derecho (v.gr., la que
corresponde a un usurpador o un ladrón).
En el primer caso se estará ante una “relación de derecho” a la que se agrega una “relación de
hecho”; en el segundo, ante una “relación de hecho” únicamente.
TENENCIA
ARTÍCULO 1910. Tenencia
Hay tenencia cuando una persona, por sí o por medio de otra, ejerce un poder de hecho sobre una
cosa, y se comporta como representante del poseedor.
El que tiene efectiva mente una cosa pero reconociendo en otro la propiedad, es simple tenedor de la cosa
corpus falta de animus domini el objeto
Constituye una relación de poder de una categoría inferior a la posesión, aunque ciertamente
más relevante que los servidores de la posesión y la denominada yuxtaposición local. Esta norma
describe a la tenencia como una relación de poder en la que únicamente se encuentra presente el
corpus y en la que el animus domini viene a constituir un elemento extraño. De modo que el
tenedor, si bien tiene la posibilidad de disponer físicamente de la cosa, reconoce que la posesión se
encuentra en cabeza de otra persona. Entonces, en la tenencia está presente el corpus, el poder físico
sobre la cosa, y falta el animus domini, ya que el tenedor reconoce a otra persona como dueño de la
cosa.
Conclusión:
Si hay corpus y animus domini exteriorizado, habrá posesión.
Si hay corpus pero falta el animus domini, habrá tenencia.
Clasificación:
TENENCIA
CONCESIÓN PERMISO
Habrá posesion de las cosas cuando una persona, por si o por otro, tenga una cosa bajo su poder,
el objeto corpus
LEGÍTIMA
PO BUENA FE
SE
SIÓN HURTO
CON RELACIÓN A
ESTAFA
MUEBLES
ABUSO DE CONFIANZA
ILEGÍTIMA VICIOSA
VIOLENCIA
CON RELACIÓN A
MALA FE CLANDESTINIDAD
INMUEBLES
ABUSO DE CONFIANZA
NO
VICIOSA
POSESIÓN VICIOSA: (art. 1921): Posesión viciosa. La posesión de mala fe es viciosa cuando es de
cosas muebles adquiridas por hurto, estafa, o abuso de confianza; y cuando es de inmuebles,
adquiridos por violencia, clandestinidad, o abuso de confianza. Los vicios de la posesión son
relativos respecto de aquel contra quien se ejercen. En todos los casos, sea por el mismo que causa el
vicio o por sus agentes, sea contra el poseedor o sus representantes.
La posesión viciosa contempla supuestos de mala fe calificada por diversas causales. Ellas son:
RESPECTO A MUEBLES
a) Hurto: Es el apoderamiento ilegítimo de la cosa mueble, total o parcialmente ajena, sea
que se haga mediante el uso de la fuerza en la cosa o con violencia física en la persona, o bien sin el
empleo de fuerza ni de violencia. De ahí que el supuesto comprende la figura del hurto (art. 162 CP),
y, la más grave, del robo (art. 164 CP), previstas en la legislación penal.
b) Estafa: Es una especie de defraudación pues quien adquiere la cosa recurre al engaño para
obtenerla y convertirse así en poseedor (v.gr., el adquirente exhibe el documento de otra persona e
invoca dicha identidad a fin de que la cosa le sea entregada y haciendo creer a quien la entrega que
lo estaba haciendo a la persona sustituida).
c) Abuso de confianza: caso en donde un tenedor que está obligado a devolver una cosa
intervierte el titulo para así poseer en nombre propio abusando de la confianza de quien le entregó
la cosa.
RESPECTO A INMUEBLES
a) Violencia: Comprende la realización de actos materiales de fuerza (violencia física) y la
proliferación de amenazas (violencia moral o verbal). El vicio afecta la adquisición y la conservación
de la posesión de inmuebles, supuesto este último que tiene lugar cuando, por ejemplo, una persona
ingresa en forma clandestina —sin violencia— en un predio ante la ausencia de sus moradores, pero
una vez que estos regresan, los repele por la fuerza o amenazas. O por ej. sacar al poseedor a golpes
de la casa.
b) Clandestinidad: La posesión del inmueble se adquiere de una manera disimulada u
oculta, o aprovechando la ausencia del poseedor o tomando los recaudos para que los que tiene
derecho a oponerse no se enteren.
c) Abuso de confianza. Se refiere a quien ha recibido una cosa inmueble, a título de tenedor
(un locatario) con obligación de restituirla a aquel cuya posesión representa y, sin embargo, omite
hacerlo. Intervierte el título y comienza a poseer como si fuera el dueño.
Los vicios que afectan la posesión de mala fe son relativos. Ello implica que solo pueden
ser invocados por aquella persona que los ha padecido y que ha sido víctima del vicio. De modo que
el usurpador por violencia solo es poseedor vicioso por el vicio de violencia respecto del despojado,
pero no ante los demás.
ARTÍCULO 1920. Determinación de buena o mala fe
La buena o mala fe se determina al comienzo de la relación de poder, y permanece invariable
mientras no se produce una nueva adquisición. No siendo posible determinar el tiempo en que
comienza la mala fe, se debe estar al día de la citación al juicio.
Si no fuere posible determinar tal momento, la norma indica que, a fin de establecer el
tiempo en que comienza la mala fe debe estarse al día de la “citación al juicio”, o lo que es lo mismo,
al que resulta de la diligencia de notificación del traslado de la demanda con causa en una
reclamación respecto de la cosa (juicio de reivindicación). Esto tiene interés cuando, estando
probada la mala fe, no fuere posible determinar en qué momento ella comenzó, lo cual tiene
trascendencia a los efectos de las consecuencias previstas en los arts. 1935 (Adquisición de frutos o
productos según la buena o mala fe) en cuanto a la restitución de los frutos percibidos y los que por
su culpa haya dejado de percibir y art. 1936 ccc (Responsabilidad por destrucción según la buena o
mala fe) con relación a la responsabilidad por la destrucción total o parcial de la cosa.
ARTÍCULO 1945. Extensión. El dominio de una cosa comprende los objetos que forman un todo
con ella o son sus accesorios. El dominio de una cosa inmueble se extiende al subsuelo y al espacio
aéreo, en la medida en que su aprovechamiento sea posible, excepto lo dispuesto por normas
especiales. Todas las construcciones, siembras o plantaciones existentes en un inmueble pertenecen
a su dueño, excepto lo dispuesto respecto de los derechos de propiedad horizontal y superficie. Se
presume que las construcciones, siembras o plantaciones las hizo el dueño del inmueble, si no se
prueba lo contrario.
Las cosas que se encuentran materialmente adheridas a un bien, forman un todo
y, en esa extensión, se comprende el dominio. A tal fin, debe hallarse materialmente adherido a la
cosa, sea mueble o inmueble, sin que incida en esta solución la posibilidad o no de ser separado de
ella. En el marco de las cosas adheridas al suelo, se hallan las cosas adheridas a él como las siembras
o plantaciones. Con respecto a los frutos y productos, al propietario le corresponden ambos. Los frutos
civiles (un alquiler por ej.) tbm le pertenecen al propietario de la cosa.
La regla indica que —respecto del inmueble— el dominio se extiende a toda su
profundidad y se proyecta al espacio aéreo en líneas perpendiculares. El dueño del fundo está entonces
autorizado a retirar y demoler las construcciones del vecino que avancen sobre su espacio aéreo, pero
el ejercicio de ese derecho no debe ser abusivo. También cabe considerar la vigencia del Código
Aeronáutico (ley 17.285) y en particular lo dispuesto en su art. 6° que establece:
“Nadie puede, en razón de un derecho de propiedad, oponerse al paso de una aeronave. Si le produjese
perjuicio tendrá derecho a indemnización”.
El dominio también se extiende al subsuelo y comprende a todos los objetos que
se encuentren bajo el suelo, como los tesoros que el dueño del fundo encuentre y en cuanto a las
minas, sólo los minerales de tercera categoría pertenecen al dueño del fundo (canteras, arenas,
etc.).Los bienes de las demás categorías son considerados de dominio público (como oro y plata) y
aguas subterráneas ruinas y yacimientos de interés científico tbm. Esta remisión implica considerar lo
previsto respecto de tesoros según se regula más adelante y respecto de las minas, a lo previsto en el
Código de Minería.
ARTÍCULO 1946. Dominio imperfecto
El dominio es imperfecto si está sometido a condición o plazo resolutorios, o si la cosa está gravada
con cargas reales.
El dominio es perpetuo, y se denomina imperfecto si está sometido a condición o plazos
resolutorios, pues precisamente tales efectos inciden sobre la continuidad del ejercicio del derecho.
Otro tanto sucede cuando la cosa se encuentra gravada con cargas reales. El dominio imperfecto o
menos pleno —como se lo reconoce— se halla fuertemente limitado, sea porque está gravado con
otros derechos reales —lo que implica que el propietario se encuentra impedido de usar, gozar o
disponer de la cosa en la forma en que podría hacerlo si no hubiese constituido sobre ella algún otro
derecho real—; sea porque es temporario —el derecho no está sujeto a durar indefinidamente—.
Y comprende 3 clases:
1º. Desmembrado: son los gravados con cargas reales. Ataca el carácter de exclusividad de la
propiedad. Es un dominio imperfecto porque el derecho de propiedad carece de toda utilidad
y de una parte de los beneficios económicos que reporta, al estar el bien gravado respecto de
terceros con un derecho real, como servidumbre, usufructo, uso, habitación, hipoteca o
anticresis.
2º. Revocable: (Art. 1965): “Dominio revocable. Dominio revocable es el sometido a condición o
plazo resolutorio a cuyo cumplimiento el dueño debe restituir la cosa a quien se la transmitió.
La condición o el plazo deben ser impuestos por disposición voluntaria expresa o por la ley.
Las condiciones resolutorias impuestas al dominio se deben entender limitadas al término de
diez años, aunque no pueda realizarse el hecho previsto dentro de aquel plazo o éste sea mayor
o incierto. Si los diez años transcurren sin haberse producido la resolución, el dominio debe
quedar definitivamente establecido. El plazo se computa desde la fecha del título constitutivo
del dominio imperfecto.” Ataca el carácter de perpetuidad de la propiedad. Es un dominio
imperfecto porque el derecho de propiedad ha sido transmitido en virtud de un título
revocable. Forma, hay dos formas de revocación del dominio:
→ A voluntad de quien lo ha transmitido: pacto de retroventa, cláusula de arrepentimiento del
vendedor.
→ Cuando el actual propietario pueda ser privado de la propiedad por una causa derivada de
su título: revocación de una donación por una ingratitud, pacto comisorio expreso.
3º. Fiduciario: ataca el carácter de perpetuidad de la propiedad. Es un dominio imperfecto
porque, si bien el derecho de propiedad existe en cabeza del denominado “fiduciario”, esta
propiedad es transitoria, ya que quedará extinguida el día en que se cumpla la condición o
plazo resolutorio. Ejemplo de clase: fideicomiso inmobiliario. El fiduciante es la constructora,
y el que entregó el lote, ya que ambos aportan el capital. El fiduciario será quien administra el
fideicomiso. Luego el beneficiario que antes era fiduciante, recupera la titularidad del dominio
al recibir dos unidades funcionales.
Dominio del estado Las cosas del dominio del estado (provincial o nacional), se subdividen en:
A. De dominio público del estado: son las que pertenecen al estado como órgano político y son
de uso común (por ej. una plaza). Son inalienables e inajenables (no se puede vender una
plaza), son inembargables e imprescriptibles (no se pueden adquirir por medio de usucapión)
ARTICULO 235.- Bienes pertenecientes al dominio público. Son bienes pertenecientes al dominio público,
excepto lo dispuesto por leyes especiales:
a. el mar territorial hasta la distancia que determinen los tratados internacionales y la legislación especial, sin
perjuicio del poder jurisdiccional sobre la zona contigua, la zona económica exclusiva y la plataforma
continental. Se entiende por mar territorial el agua, el lecho y el subsuelo;
b. las aguas interiores, bahías, golfos, ensenadas, puertos, ancladeros y las playas marítimas; se entiende por
playas marítimas la porción de tierra que las mareas bañan y desocupan durante las más altas y más bajas
mareas normales, y su continuación hasta la distancia que corresponda de conformidad con la legislación
especial de orden nacional o local aplicable en cada caso;
c. los ríos, estuarios, arroyos y demás aguas que corren por cauces naturales, los lagos y lagunas navegables, los
glaciares y el ambiente periglacial y toda otra agua que tenga o adquiera la aptitud de satisfacer usos de interés
general, comprendiéndose las aguas subterráneas, sin perjuicio del ejercicio regular del derecho del propietario
del fundo de extraer las aguas subterráneas en la medida de su interés y con sujeción a las disposiciones locales.
Se entiende por río el agua, las playas y el lecho por donde corre, delimitado por la línea de ribera que fija el
promedio de las máximas crecidas ordinarias. Por lago o laguna se entiende el agua, sus playas y su lecho,
respectivamente, delimitado de la misma manera que los ríos;
d. las islas formadas o que se formen en el mar territorial, la zona económica exclusiva, la plataforma
continental o en toda clase de ríos, estuarios, arroyos, o en los lagos o lagunas navegables, excepto las que
pertenecen a particulares;
e. el espacio aéreo suprayacente al territorio y a las aguas jurisdiccionales de la Nación Argentina, de
conformidad con los tratados internacionales y la legislación especial;
f. las calles, plazas, caminos, canales, puentes y cualquier otra obra pú-bica construida para utilidad o
comodidad común;
g. los documentos oficiales del Estado;
h. las ruinas y yacimientos arqueológicos y paleontológicos.
B. De dominio privado del estado: son aquellas en dónde éste actúa como un simple particular.
ARTICULO 236.- Bienes del dominio privado del Estado.
Pertenecen al Estado nacional, provincial o municipal, sin perjuicio de lo dispuesto en leyes especiales:
a. los inmuebles que carecen de dueño;
b. las minas de oro, plata, cobre, piedras preciosas, sustancias fósiles y toda otra de interés similar, según lo
normado por el Código de Minería;
c. los lagos no navegables que carecen de dueño;
d. las cosas muebles de dueño desconocido que no sean abandonadas, excepto los tesoros;
e. los bienes adquiridos por el Estado nacional, provincial o municipal por cualquier título.
Sobre estos bienes privados, el estado (nacional, provincial y municipal) puede tener un
derecho de propiedad al igual que cualquier particular. Son prescriptibles, embargables y
enajenables.
Respecto a las municipalidades y sus bienes, son aquellos en que el estado provincial o
nacional, ha puesto bajo el dominio municipal. (Por ej. calles, plazas) y tbm tienen bienes de
dominio público y privado.
MUEBLES INMUEBLES
CONSTRUCC INVASIÓN
TESO TRANSFOR APROPIA ACCESIÓN DE
ALUVIÓN AVULSIÓN SIEMBRA- COLINDAN
ROS MACIÓN CIÓN MUEBLES
PLANTACIÓN TE
Límites al dominio:
Forman parte del status normal del dominio, ocurre que ningún derecho es absoluto, en el
sentido de ilimitado. La CN establece que los derechos están sujetos a las leyes que reglamentan su
ejercicio y el dominio no queda fuera de esta concepción. Claro que estos límites deben ser
razonables para no desnaturalizar el derecho del que hablamos, y son impuestas éstas limitaciones
en interés público. Entonces podemos decir que los límites al dominio son las normas legales que
regulan este derecho real, compatibilizando los derechos y obligaciones que gozan los hombres en
sus relaciones de vecindad y en miras del interés público.
NORMAS ADMINISTRATIVAS. (Art. 1970): “Las limitaciones impuestas al dominio privado
en el interés público están regidas por el derecho administrativo. El aprovechamiento y uso del
dominio sobre inmuebles debe ejercerse de conformidad con las normas administrativas aplicables
en cada jurisdicción. Los límites impuestos al dominio en este Capítulo en materia de relaciones de
vecindad, rigen en subsidio de las normas administrativas aplicables en cada jurisdicción.”
De lo que se trata, en definitiva, es de adaptar la propiedad privada para que pueda cumplir
sus fines individuales y sociales, armonizando —de ese modo— con los requerimientos del interés
general. En pos de esa finalidad se la somete a una serie de limitaciones en miras a la conveniencia
y al interés superior de la sociedad. Las limitaciones al dominio pueden imponerse teniendo en
cuenta un fin o interés público o privado. De ahí que el artículo disponga que las limitaciones
impuestas al dominio privado en el interés público estén regidas por el derecho administrativo y
no por el derecho civil.
ARTÍCULO 1977. Instalaciones provisorias y paso de personas que trabajan en una obra
Si es indispensable poner andamios u otras instalaciones provisorias en el inmueble lindero, o
dejar pasar a las personas que trabajan en la obra, el dueño del inmueble no puede impedirlo, pero
quien construye la obra debe reparar los daños causados. (Andamiaje)
Cabe considerar los supuestos de la facción de mejoras o edificaciones. Ello, por cierto,
excluye la condición de definitiva y hasta quedaría autorizada la intervención jurisdiccional si, en
un caso de evidente abuso, aquellas ocasionan trastornos innecesarios a los vecinos. Las
construcciones en predios vecinos (mejoras o edificaciones), usualmente exigen realizar
construcciones provisorias en predios contiguos, como andamios, con el objeto de que desde allí se
labore o se impida que materiales afecten al vecino. A su vez, del precepto se deduce que el vecino
no tiene en tal caso derecho a oponerse, bien que deja a salvo su derecho a ser indemnizado. Ello,
por cierto, no excluye la necesidad del constructor de requerir el correspondiente permiso para la
colocación de los andamios o servicios, pero en caso de negativa o silencio ante ese requerimiento,
podrá aquel recurrir a la justicia para que lo obligue a soportar las molestias.
ARTÍCULO 1978. Vistas. Excepto que una ley local disponga otras dimensiones, en los
muros linderos no pueden tenerse vistas que permitan la visión frontal a menor distancia que la de
tres metros; ni vistas laterales a menor distancia que la de sesenta centímetros, medida
perpendicularmente. En ambos casos la distancia se mide desde el límite exterior de la zona de
visión más cercana al inmueble colindante
Bajo el término “vistas” el artículo engloba los supuestos en que el propietario vecino
realiza aberturas (ventanas, balcones, etc.) en su inmueble desde las que, de manera directa u
oblicua, puede acceder con su visión el predio contiguo. Fuera de ese caso, en las construcciones
que realice dentro de su predio, cada propietario puede abrir vistas solo a una distancia superior
de las medidas mínimas prescriptas. Es claro que una abertura en la pared lindera, afecta la
privacidad del vecino cuando están ubicadas a una distancia inferior a la indicada en las normas
señaladas. Hay distintas clases de vistas: las frontales y las laterales u oblicuas. En las primeras, la
vista es directa y, por ello, no pueden estar a una distancia menor a tres metros de la línea
divisoria. En las laterales u oblicuas, en cambio, la vista es más forzada, pues únicamente se logra
torciendo la cabeza, es decir mirando de costado, y por esa razón la ley es menos rigurosa y las
admite hasta una distancia de sesenta centímetros desde la línea de separación de las dos
propiedades. En caso de que se violen las medidas mínimas, nace una acción a favor del poseedor o
propietario del predio afectado, para lograr judicialmente el restablecimiento de la situación al
momento anterior en el que ella se generó.
ARTÍCULO 1979. Luces
Excepto que una ley local disponga otras dimensiones, en el muro lindero no pueden tenerse luces
a menor altura que la de un metro ochenta centímetros, medida desde la superficie más elevada
del suelo frente a la abertura.
Tratándose de un muro lindero, la abertura de luces está permitida bajo determinadas
pautas de altura (la ventana debe estar colocada a una altura no menor a la de un metro ochenta
centímetros) desde la superficie más elevada del suelo frente a la abertura. Ello persigue el
propósito de evitar que se mire u observe a través de ella. Las medidas que fija el artículo se
aplican en tanto que las legislaciones locales no establezcan otra. Prevalecen, en su caso, las
establecidas por las municipalidades. En caso de que se violen las medidas mínimas, nace una
acción a favor del poseedor o propietario del predio afectado para lograr judicialmente el
restablecimiento de la situación al momento anterior en el que ella se generó.
ARTÍCULO 1980. Excepción a distancias mínimas. Las distancias mínimas indicadas en los
artículos 1978 y 1979 no se aplican si la visión está impedida por elementos fijos de material no
transparente.
Elementos fijos con material no transparente, pueden serlo aquellos de cualquier sustancia
(vidrios, hierros, plásticos, etc.) en la medida que impidan la vista hacia el predio vecino y estén
enclavados en la abertura.
ARTÍCULO 1981. Privación de luces o vistas
Quien tiene luces o vistas permitidas en un muro privativo no puede impedir que el colindante
ejerza regularmente su derecho de elevar otro muro, aunque lo prive de la luz o de la vista.
Tal sería el caso de elevar una pared, hacer una construcción, en fin, ejercer regularmente el
derecho desde su fundo, “aunque lo prive [al otro] de luz o de la vista”.
ARTÍCULO 1982. Árboles, arbustos u otras plantas
El dueño de un inmueble no puede tener árboles, arbustos u otras plantas que causan molestias
que exceden de la normal tolerancia. En tal caso, el dueño afectado puede exigir que sean
retirados, a menos que el corte de ramas sea suficiente para evitar las molestias.
Si las raíces penetran en su inmueble, el propietario puede cortarlas por sí mismo.
No refiere únicamente a árboles o arbustos, sino que incluye el genérico de “otras
plantas”, compatibilizando la regulación en cualquier clase de vegetal con la finalidad de admitirlo
con el límite referido. Por tal motivo, y solo en la medida en que ello acontezca, es que se regula el
asunto en este artículo autorizando a demandar el retiro de los árboles, arbustos u otras plantas.
En el caso de las ramas, ellas pueden avanzar sobre la propiedad vecina, en cuyo caso el dueño de
esta podrá pedir al dueño del árbol que las corte. Tratándose de raíces, está eximido de tal
requerimiento y puede cortarlas directamente, esto es por sí mismo. Los dueños no pueden tener
en sus inmuebles árboles, arbustos o plantas que causen molestan que excedan la normal
tolerancia. La razón de esta norma es evitar daños que pueda ocasionar dicha vegetación respecto
a la humedad que producen.
UNIDAD 5- CONDOMINIO
CONCEPTO:
ARTÍCULO 1983. Condominio. Condominio es el derecho real de propiedad sobre una cosa que
pertenece en común a varias personas y que corresponde a cada una por una parte indivisa. Las
partes de los condóminos se presumen iguales, excepto que la ley o el título dispongan otra
proporción.
La regulación del condominio se inicia con esta norma, que además de definirlo, consagra el
principio de igualdad entre las partes indivisas de los condóminos. El condominio supone la
existencia de varias personas que son titulares de una cosa por una parte indivisa. La parte indivisa
es la medida del derecho de cada condómino o comunero. En cuanto a la definición en ella se
denotan los tres elementos propios de la figura —pluralidad de titulares, unidad de objeto
(CONCRETO, MATERIAL) y existencia de una parte indivisa.
En la segunda parte del artículo se establece una presunción que opera en los casos en que
exista alguna duda sobre el valor de la parte alícuota de cada comunero. Obviamente, la
presunción que se consagra es iuris tantum, lo que implica que deba dejarse de lado cuando la ley
o el título que sirve de causa al condominio prevean otra cosa. Por otra parte, la presunción
consagrada parte de la base de que es natural que si la participación en el condominio fuera de una
medida distinta a la igualitaria, esa circunstancia debió haber sido plasmada en el acto de
constitución del condominio —o la ley, si fuere el caso—, incluso en convenciones o actos
posteriores, a instancias del condómino que cuenta con una participación mayor. De modo que, si
no se procedió de ese modo, es porque todos los comuneros tienen una parte alícuota de igual
medida.
CARACTERES:
a) Titularidad plural: necesariamente tiene que existir pluralidad de sujetos titulares de
derechos para que se dé el condominio.
b) Unidad de objeto: el derecho de los copropietarios recae sobre una o varias cosas, muebles o
inmuebles. Aunque se trate de varias cosas, ellas son consideradas, a los efectos de este derecho
real, como un solo objeto.
c) Titularidad en cuotas partes indivisas: el derecho de propiedad pertenece en común a
varias personas y corresponde a cada una por una parte indivisa. Pero esas partes son ideales no
materiales. El derecho de propiedad se encuentra fraccionado entre los diversos propietarios,
correspondiéndole a cada uno de ellos en la medida de la cuota parte que le pertenece, mediante
un porcentaje: un medio, un tercio, un sexto, etc.
Condominio romano y germánico:
ROMANO GERMÁNICO
* ES EL QUE TOMA NUESTRO CCC- * NO EXISTEN ALÍCUOTAS.- ES UN
ESTABLECE LA PROPIEDAD POR CUOTAS, CONDOMINIO SOLIDARIO, EN MANO COMÚN.-
CUOTAS PARTES, INDIVISAS, ABSTRACTAS.- LOS ACREEDORES DE CADA UNO DE LOS
EL OBJETO CORPORAL ES DE TODOS, PERO CONDÓMINOS NO PUEDEN ATACAR AL
CADA CONDÓMINO TIENE UNA CUOTA CONDOMINIO.- SÓLO SE RESPONDE FRENTE
PARTE (UN DERECHO INDIVIDUAL)- ESA A LOS ACREEDORES COMUNES.- LA PARTE
ALÍCUOTA PUEDE DISPONERSE INDIVISA NO EXISTE, SINO UN DERECHO
LIBREMENTE.-EL ACREEDOR PARTICULAR INDIVIDUAL A LO QUE RESULTE EL DÍA DE
INDIVIDUAL DE CADA CONDÓMINO PUEDE LA LIQUIDACIÓN.-
AGREDIR A LA CUOTA PARTE DEL DEUDOR
CONDÓMINO.- NACE PARA MORIR, A TRAVÉS
DE UNA ACCIÓN (DE PARTICIÓN) SE PUEDE
PONER FIN A ÉSTE.
Régimen de administración
ARTÍCULO 1993. Imposibilidad de uso y goce en común. Si no es posible el uso y
goce en común por razones atinentes a la propia cosa o por la oposición de alguno de los
condóminos, éstos reunidos en asamblea deben decidir sobre su administración.
El uso y goce conjunto e indistinto a que tienen derecho los condóminos puede, en
determinados casos, ser imposible en los hechos. Para estos supuestos, y siempre que ninguno de
ellos haga uso de la facultad que tienen de pedir la división de la cosa común (art. 1997 CCyC), se
establece que la cuestión debe ser resuelta en la asamblea.
ARTÍCULO 1994. Asamblea
Todos los condóminos deben ser informados de la finalidad de la convocatoria y citados a la
asamblea en forma fehaciente y con anticipación razonable. La resolución de la mayoría absoluta
de los condóminos computada según el valor de las partes indivisas aunque corresponda a uno
solo, obliga a todos. En caso de empate, debe decidir la suerte.
El CCyC hace especial hincapié en la necesidad de que todos los condóminos sean debidamente
citados a la asamblea e informados de su finalidad. La citación no puede efectuarse de cualquier
manera. Debe ser fehaciente, lo que supone que debe estar documentada y ser auténtica, esto es
realizada a través de un medio que aleje toda duda sobre su veracidad y el día en que se llevó a
cabo. A esos efectos, podrá recurrirse a la notificación del condómino por intermedio de un
escribano público, por carta documento o por algún otro procedimiento que aleje toda duda sobre
su efectividad y fecha. Se exige además que se practique con una anticipación razonable. Lo
razonable dependerá de las circunstancias del caso, tales como la distancia del domicilio de los
condóminos con relación al lugar de la reunión, la urgencia del asunto, entre otras. A fin de
aprobar la decisión sobre el tema de la convocatoria, no se exige la unanimidad de los comuneros
sino que basta con la mayoría absoluta, o sea, más de la mitad. Puede ocurrir que, sumados los
votos, se arribe a un empate.
Régimen de los frutos
ARTÍCULO 1995. Frutos. No habiendo estipulación en contrario, los frutos de la cosa
común se deben dividir proporcionalmente al interés de los condóminos.
Los frutos de la cosa común deben repartirse entre los condóminos de acuerdo a la parte
indivisa que a cada uno corresponda. La solución es lógica, pues esa es la medida de su derecho.
De todos modos, esta regla es supletoria de lo que convencionalmente puedan pactar los
interesados. De ahí que pueda pactarse una división igualitaria, no obstante que las partes
indivisas no lo sean, e incluso que los frutos se entreguen a uno de los condóminos, con exclusión
de los demás. Solo a falta de una previsión convencional cobra virtualidad la regla de la
distribución proporcional.
Extinción del condominio
Modos comunes de extinción: art. 1907 CCCN
Al precisar sobre los modos generales, en el marco de estas disposiciones, invita a concentrarnos
en tres hipótesis comunes, que son:
a) la desaparición definitiva del objeto de los derechos reales;
b) la voluntad expresa de renunciar al derecho ejercido;
c) la reunión de más de un derecho sobre la cosa.
Modo particular de extinción: la partición
ARTÍCULO 1997. Derecho a pedir la partición
Excepto que se haya convenido la indivisión, todo condómino puede, en cualquier tiempo, pedir la
partición de la cosa. La acción es imprescriptible.
El derecho a pedir la partición es la prerrogativa más importante que se reconoce a los
condóminos. El art. 1997 CCyC parece limitar las causales de la indivisión a la convencional
(“excepto que se haya convenido la indivisión...”), pero, en rigor, las fuentes que pueden derivar en
ese estado, además del contrato (art. 2000 y 2331 CCyC), son la ley. Es el caso del condominio que
recae sobre muros, cercos y fosos (art. 2006, inc. d, CCyC), de los accesorios indispensables al uso
común de varios inmuebles (arts. 1894 y 2004 CCyC) y el que recae sobre las partes, lugares y
bienes comunes en los conjuntos inmobiliarios (art. 2074 CCyC), la voluntad del testador (art.
2330 CCyC); la decisión judicial (art. 2001 ccyc) y la voluntad del cónyuge supérstite (art. 2332
CCyC).
Efectos de la partición: en principio, declarativos y no traslativos de derechos (art. 2403)
Pedir la división es un derecho potestativo, si cualquiera de los comuneros no se ponen de acuerdo
cualquiera de ellos pueden acudir a la justicia y usar la acción de división de condominio. Este ppio
gral de que se puede pedir la partición cede cdo se pactó lo contrario.
ARTÍCULO 1999. Renuncia a la acción de partición. El condómino no puede renunciar
a ejercer la acción de partición por tiempo indeterminado.
La norma sienta la regla de que el condómino no puede renunciar al derecho de pedir la
partición de la cosa común por tiempo indeterminado, de lo que se infiere —y ello lo corrobora el
art. 2000 CCyC— que la renuncia por tiempo determinado está permitida. De esta manera se
plasma la intención del legislador de impedir que los condóminos, por medio de un acuerdo,
puedan suprimir de manera absoluta la facultad de solicitar la división del condominio (art. 1997
CCyC), que como se ha señalado, es de orden público.
ARTÍCULO 2000. Convenio de suspensión de la partición
Los condóminos pueden convenir suspender la partición por un plazo que no exceda de diez
años. Si la convención no fija plazo, o tiene un plazo incierto o superior a diez años, se considera
celebrada por ese tiempo. El plazo que sea inferior a diez años puede ser ampliado hasta completar
ese límite máximo.
Una unidad funcional puede ser un local comercial, consultorio, una oficina, un
departamento etc.
El objeto del derecho real de propiedad horizontal es un inmueble edificado, cuyas unidades
funcionales reúnan ciertas características: independencia funcional y salida a la vía pública.
No se trata de dos objetos sino de uno (el inmueble propio), integrado por sectores cuya
interdependencia funcional hace imposible separarlos. En definitiva, el objeto del derecho real de
propiedad horizontal es la “unidad funcional” compuesta del sector privativo independiente y del
porcentaje sobre el terreno y demás partes y cosas comunes. El espacio propio está conformado
por un cubo de aire delimitado por divisiones horizontales y verticales y por cosas propias del
titular de la unidad funcional (tabiques divisores de ambientes, las puertas, las ventanas, artefactos
de iluminación, artefactos de calefacción y/o refrigeración, sanitarios, revestimientos de los
distintos ambientes como por ejemplo alfombras, cerámicas, azulejos, papeles, pisos flotantes o el
revestimiento de los balcones, entre otros).
Cada reglamento, según las características edilicias y la finalidad de las unidades funcionales,
detallará en forma precisa y concreta cuales son las partes y cosas comunes.
Bienes comunes de uso exclusivo
Son aquellas partes del edificio que por su ubicación no pueden ser usados por todos los
propietarios sino por uno o algunos de ellos, con el fin de asegurar el uso de algunos bienes
comunes a unidades a las que éstas acceden de modo exclusivo (balcones, patios anexos a una
unidad, terrazas). El uso es exclusivo generalmente se determina en los reglamentos, la modalidad
de ese uso, las obligaciones de cada usuario en su mantenimiento, los problemas derivados del
deterioro proveniente del uso y el deber de conservación, debe estar a cargo, como regla, de la
persona que lo aprovecha en forma exclusiva.
ARTÍCULO 2042. Cosas y partes comunes no indispensables
Son cosas y partes comunes no indispensables:
a) la piscina;
b) el solárium;
c) el gimnasio;
d) el lavadero;
e) el salón de usos múltiples.
Esta enumeración tiene carácter enunciativo.
UNIDAD 11
DISPOSICIONES GRALES.
Tenemos los derechos reales sobre cosa ajena:
De disfrute: Tienen sobre la cosa el uso y el goce pero no la propiedad.
Usufructo / uso / habitación / servidumbre.
De garantía: garantizan el pago de una deuda.
Hipoteca / Prenda / Anticresis.
Función de la Garantía
ARTICULO 242 CCC.-Garantía común. Todos los bienes del deudor están afectados al cumplimiento de
sus obligaciones y constituyen la garantía común de sus acreedores, con excepción de aquellos que
este Código o leyes especiales declaran inembargables o inejecutables. Los patrimonios especiales
autorizados por la ley sólo tienen por garantía los bienes que los integran.
Garantía común de los acreedores.-
ARTICULO 743.- Bienes que constituyen la garantía. Los bienes presentes y futuros del deudor
constituyen la garantía común de sus acreedores. El acreedor puede exigir la venta judicial de los
bienes del deudor, pero sólo en la medida necesaria para satisfacer su crédito. Todos los acreedores
pueden ejecutar estos bienes en posición igualitaria, excepto que exista una causa legal de preferencia.
El derecho real de garantía es el que tiene un acreedor sobre cosa ajena (del deudor o de un
tercero) que garantiza el pago de la deuda a aquel acreedor. Es decir, el deudor pone como garantía
una cosa, para que en caso de incumplimiento, el acreedor se cobre de ella.
Por un lado tenemos la Obligacion, y por otro lado la garantía real (existe gracias a la obligación).
La garantía real NO son Obligaciones accesorias, sino que es accesorio a la Obligación.
La garantía real persiste por la obligación insatisfecha, si se cumple se da la baja.
La garantía real es un acuerdo entre el acreedor y el deudor
ARTICULO 1893.- Inoponibilidad. La adquisición o transmisión de derechos reales constituidos de
conformidad a las disposiciones de este Código no son oponibles a terceros interesados y de buena fe
mientras no tengan publicidad suficiente.
Se considera publicidad suficiente la inscripción registral o la posesión, según el caso.
Si el modo consiste en una inscripción constitutiva, la registración es presupuesto necesario y suficiente
para la oponibilidad del derecho real.
No pueden prevalerse de la falta de publicidad quienes participaron en los actos, ni aquellos que
conocían o debían conocer la existencia del título del derecho real. – El derecho real de garantía, existe
igual aunque no esté registrado.
Características:
Convencionalidad:
Los DR de G, solo pueden ser constituidos por Contrato, acuerdo de partes, celebrado por los
legitimados (el titular del objeto gravado - sea o no el deudor principal – y el acreedor de la obligación a
garantizar) y con las formas que la ley indica para cada tipo (contrato de hipoteca, contrato de
prenda).
Accesoriedad:
Los DR de G son accesorios al crédito que aseguran, son intransmisibles sin el crédito, y se extinguen
con el principal, excepto en los supuestos legales previstos.
La extinción de la garantía por cualquier causa, incluida la renuncia, no afecta la existencia del crédito.
(Si se transmite el crédito, se transmite la garantía, si se extingue la deuda también el DR de G.
Si se extingue la garantía, no afecta a la obligación principal).
Especialidad en cuanto al objeto:
ARTICULO 2188.- Especialidad en cuanto al objeto. Cosas y derechos pueden constituir el objeto de los
derechos reales de garantía. Ese objeto debe ser actual, y estar individualizado adecuadamente en el
contrato constitutivo.
El objeto de los DR de G, pueden ser cosas (auto, buque, inmueble, etc.) y derechos. Debe ser actual, y
estar individualizado adecuadamente en el contrato constitutivo.
Se debe individualizar, determinar y precisar la cosa afectada al cumplimiento de la obligación, para
saber cuales son los bienes que van a garantizar la deuda y el importe por el que se responde por dicha
cosa.
Especialidad en cuanto al crédito:
ARTICULO 2189.- Especialidad en cuanto al crédito. El monto de la garantía o gravamen debe estimarse
en dinero. La especialidad queda cumplida con la expresión del monto máximo del gravamen.
El crédito puede estar individualizado en todos los elementos desde el origen o puede nacer
posteriormente; mas en todos los casos, el gravamen constituye el máximo de la garantía real por todo
concepto, de modo que cualquier suma excedente es quirografaria, sea por capital, intereses, costas,
multas, u otros conceptos.
ARTICULO 2187.- Créditos garantizables. Se puede garantizar cualquier crédito, puro y simple, a plazo,
condicional o eventual, de dar, hacer o no hacer. Al constituirse la garantía, el crédito debe
individualizarse adecuadamente a través de los sujetos, el objeto y su causa, con las excepciones
admitidas por la ley.
Obligación asegurada puede estar sujeta a una condición suspensiva - la garantía accede a un
crédito exigible recién cuando se cumpla la condición.-
Obigación sujeta a una condición resolutoria – la deuda es exigible pero desaparece si se cumple la
condición, en ese caso desaparece un gravamen.-
Defectos en la especialidad
ARTICULO 2190.- Defectos en la especialidad. La constitución de la garantía es válida aunque falte
alguna de las especificaciones del objeto o del crédito, siempre que se la pueda integrar de acuerdo al
conjunto de las enunciaciones del acto constitutivo.
Los defectos s/ objeto o crédito pueden sanearse.-
ARTÍCULO 23. — Reemplácese el texto del artículo 2189 del Código Civil y Comercial de la Nación por el
siguiente:
Especialidad en cuanto al crédito: En la constitución de los derechos reales de garantía debe
individualizarse el crédito garantizado, indicándose los sujetos, el objeto y la causa.
El monto de la garantía debe estimarse en dinero y puede no coincidir con el monto del capital del
crédito.
Se considera satisfecho el principio de especialidad en cuanto al crédito si la garantía se constituye en
seguridad de créditos indeterminados, sea que su causa exista al tiempo de su constitución o
posteriormente, siempre que el instrumento contenga la indicación del monto máximo garantizado en
todo concepto, de que la garantía que se constituye es de máximo, y del plazo a que se sujeta, el que
no puede exceder de diez (10) años. La garantía subsiste no obstante el vencimiento del plazo en
seguridad de los créditos nacidos durante su vigencia.
ARTICULO 2210.- Duración de la inscripción. Los efectos del registro de la hipoteca se conservan por el
término de veinte años, si antes no se renueva.
ARTÍCULO 24. — Reemplácese el texto del artículo 2210 del Código Civil y Comercial de la Nación por el
siguiente:
Duración de la inscripción: Los efectos del registro de la hipoteca se conservan por el término de treinta
y cinco (35) años, si antes no se renueva.
Indivisibilidad: Característica y a la vez un principio
Los DR de G, son indivisibles, es decir que cada uno de los bienes afectados a una deuda y cada parte
de ellos, están afectados al pago de toda la deuda y cada una de sus partes. El acreedor cuya garantía
comprenda varios bienes puede perseguirlos a todos conjuntamente, o solo a uno o alguno de ellos,
con prescindencia de a quien pertenezca o de la existencia de otras garantías.
Puede convenirse la divisibilidad de la garantía respecto al crédito y de los bienes afectados.
También puede disponerla el juez fundadamente, a solicitud de titular del bien, siempre que no se
ocasione perjuicio al acreedor, o a petición de este último si hace a su propio interés.
Toda la deuda gravita sobre todo el objeto afectado, si se divide la deuda o se extingue
parcialmente no ocurre lo mismo con la garantía. Hasta que no se pague el DR es indivisible (y hasta
que no se salde la deuda el objeto no estará libre de gravamen.)
La garantía no es divisible. La deuda si puede ser divisible (refinanciación). Si nada dice rige
plenamente la indivisibilidad. Es decir, se exige hasta el último centavo y no se cancela. Es renunciable,
el acreedor puede poner en el Contrato Constitutivo, que cumplido el 80 % se da de baja la garantía por
ej.
ARTICULO 2199.- Responsabilidad del propietario no deudor. El propietario no deudor, sea un tercero
que constituye la garantía o quien adquiere el bien gravado, sin obligarse en forma expresa al pago del
crédito asegurado, responde únicamente con el bien objeto del gravamen y hasta el máximo del
gravamen.
ARTICULO 2192.- Extensión en cuanto al objeto. En la garantía quedan comprendidos todos los
accesorios físicamente unidos a la cosa, las mejoras y las rentas debidas (frutos civiles, montos que
ingresan al patrimonio del titular).
Sin embargo, no están comprendidos en la garantía:
a) los bienes físicamente unidos a la cosa que están gravados con prenda constituida antes que la
hipoteca o son de propiedad de terceros, aunque su utilización por el deudor esté autorizada por un
vínculo contractual;
b) los bienes que posteriormente se unen físicamente a la cosa, si al tiempo de esa unión están
gravados con prenda o son de propiedad de terceros, aun en las condiciones antes indicadas.
Extension en cuanto al crédito: Cubre el capital adeudado y los intereses posteriores a su constitución,
como asi también los daños y costas posteriores que deriven del incumplimiento. Los intereses daños y
costas anteriores a la constitución de la garantía quedan comprendidos en su cobertura sólo en caso de
haberse previsto y determinado expresamente en a convención.-
ARTICULO 2195.- Facultades del constituyente. El constituyente de la garantía conserva todas las
facultades inherentes a su derecho, pero no puede realizar ningún acto que disminuya el valor de la
garantía. Si esto ocurre, el acreedor puede requerir la privación del plazo de la obligación, o bien puede
estimar el valor de la disminución y exigir su depósito o que se otorgue otra garantía suficiente.
Por ej: no puede destruir la propiedad.
ARTICULO 2196.- Inoponibilidad. En caso de ejecución, son inoponibles al acreedor los actos jurídicos
celebrados en perjuicio de la garantía.
ARTICULO 2204.- Cancelación del gravamen. Las garantías inscriptas en los registros respectivos se
cancelan:
a) por su titular, mediante el otorgamiento de un instrumento de igual naturaleza que el exigido para
su constitución, con el que el interesado puede instar la cancelación de las respectivas constancias
registrales;
b) por el juez, ante el incumplimiento del acreedor, sea o no imputable; la resolución respectiva se
inscribe en el registro, a sus efectos.
En todos los casos puede requerirse que la cancelación se asiente por nota marginal en el ejemplar del
título constitutivo de la garantía.
ARTICULO 1885.- Convalidación. Si quien constituye o transmite un derecho real que no tiene, lo
adquiere posteriormente, la constitución o transmisión queda convalidada.
EN CC no regia para la hipoteca este principio, había que ser titular sino era nulo.
En CCC no dice nada no era necesario. No veian porque sacar el principio. Generalmente hoy en dia se
puede usar el principio.
ARTICULO 2198.- Cláusula nula. Es nula toda cláusula que permite al titular de un derecho real de
garantía adquirir o disponer del bien gravado fuera de las modalidades y condiciones de ejecución
previstas por la ley para cada derecho real de garantía.
HIPOTECA-----------------------------------------------------------------------------------------------
ARTÍCULO 2205. Concepto
La hipoteca es el derecho real de garantía que recae sobre uno o más inmuebles
individualizados que continúan en poder del constituyente y que otorga al acreedor, ante el
incumplimiento del deudor, las facultades de persecución y preferencia para cobrar sobre su
producido el crédito garantizado.
Análisis:
Puede recaer sobre “uno o más inmuebles individualizados”. La hipoteca constituye una
limitación al derecho de propiedad de quien la constituye. Pareciera que solo dichas cosas pueden
quedar gravadas con este derecho real. Sin embargo, debe tenerse presente que el superficiario se
encuentra facultado para constituir derechos reales de garantía sobre “el derecho de construir,
plantar o forestar o sobre la propiedad superficiaria”. Este derecho real es otorgado al acreedor
hipotecario, quien puede perseguir el inmueble afectado en manos de quien esté, es decir, aun
cuando haya sido enajenado por el constituyente del gravamen y se encuentre en poder de los
sucesivos adquirentes, puede requerir su ejecución y venta, como cabría hacerlo contra quien
constituyó la hipoteca (derecho de persecución). Esta prerrogativa fue analizada al tratar los arts.
1882 y 1886 CCyC.
ARTÍCULO 1882. Concepto
El derecho real es el poder jurídico, de estructura legal, que se ejerce directamente sobre su objeto,
en forma autónoma y que atribuye a su titular las facultades de persecución y preferencia, y las
demás previstas en este Código.
ARTÍCULO 1886. Persecución y preferencia
El derecho real atribuye a su titular la facultad de perseguir la cosa en poder de quien se
encuentra, y de hacer valer su preferencia con respecto a otro derecho real o personal que haya
obtenido oponibilidad posteriormente.
Otro punto a destacar es que tampoco es exacto que continúa/an en poder del
constituyente, ya que el propietario puede enajenarlo/s a terceros. Al acreedor hipotecario le
asisten 2 acciones diferentes contra su deudor:
1º. Acción personal, reclamando el pago de su crédito
2º. Acción real, ejecución y venta del bien para cobrarse con su precio
Naturaleza jurídica de la hipoteca: es un derecho real de gtía.
ARTÍCULO 2206. Legitimación
Pueden constituir hipoteca los titulares de los derechos reales de dominio, condominio, propiedad
horizontal, conjuntos inmobiliarios y superficie.
Una cuestión que no debe dejar de ser meritada es que, al momento de constituirse el
gravamen hipotecario, la propiedad debe ser de aquel que lo afecta. De lo contrario no se
encontraría verificada la legitimación que requiere el artículo. Aun así, puede agregarse, con la
innovación que recibiera el instituto de la convalidación (art. 1885 CCyC), podría ocurrir que el
gravamen constituido por quien no era titular del derecho real, quedara como constituido al
adquirirlo posteriormente.
Dueño: persona humana o jurídica que es dueña de un inmueble que puede constituir
hipoteca.
Condominio: la hipoteca debe ser constituida por todos los condóminos, individualmente
solo puede afectar su parte indivisa.
ARTÍCULO 2207. Hipoteca de parte indivisa
Un condómino puede hipotecar la cosa por su parte indivisa.
El acreedor hipotecario puede ejecutar la parte indivisa sin esperar el resultado de la partición.
Mientras subsista esta hipoteca, la partición extrajudicial del condominio es inoponible al acreedor
hipotecario que no presta consentimiento expreso.
Este artículo implica:
No es oponible al acreedor, debiendo estar presente en la partición y prestar consentimiento
expreso.
PH: el titular de una unidad funcional sujeta al régimen de PH pude gravarla con una
hipoteca. E incluirá el gravamen a su porción de las cosas y partes comunes si las hay.
Conj. Inmob.: ídem a lo referido a PH
Superficie: el titular del derecho de superficie esta facultado para hipotecar su D° construir,
plantar o forestar sobre la propiedad superficiaria.
TC (tiempo compartido) y CP (cementerio privado):
ARTÍCULO 2110. Inembargabilidad
Las parcelas exclusivas destinadas a sepultura son inembargables, excepto por:
a) los créditos provenientes del saldo de precio de compra y de construcción de sepulcros;
b) las expensas, tasas, impuestos y contribuciones correspondientes a aquéllas.
Tenemos entonces que ciertos acreedores pueden embargar, y eventualmente llevar a remate para
cobrarse con el producido (aunque, como regla, sin privilegio) el sepulcro titularidad del deudor.
Tales acreedores resultarían el vendedor (el propio empresario del cementerio) o quien lo
construyó o eventualmente quien lo reparó. Lógicamente las deudas que se generen por falta de
pago de las expensas, tasas, impuestos y contribuciones correspondientes a las parcelas también
son excluidas de la inembargabilidad, por lógicas razones que hacen al mantenimiento del sistema
de cementerio privado así como al deber genérico de todo ciudadano de contribuir al
sostenimiento del estado.
ARTÍCULO 2208. Forma del contrato constitutivo
La hipoteca se constituye por escritura pública excepto expresa disposición legal en contrario.
La aceptación del acreedor puede ser ulterior, siempre que se otorgue con la misma formalidad y
previamente a la registración.
La escritura pública es requerida “ad solemnitatem”. Sin ella, el acto carece de existencia legal y no
sería posible demostrarlo por otros medios.
ARTÍCULO 2209. Determinación del objeto.
El inmueble que grava la hipoteca debe estar determinado por su ubicación, medidas
perimetrales, superficie, colindancias, datos de registración, nomenclatura catastral, y cuantas
especificaciones sean necesarias para su debida individualización.
UNIDA 12
ANTICRESIS
ARTÍCULO 2212. Concepto.
La anticresis es el derecho real de garantía que recae sobre cosas registrables individualizadas,
cuya posesión se entrega al acreedor o a un tercero designado por las partes, a quien se autoriza a
percibir los frutos para imputarlos a una deuda.
Análisis: La anticresis es otro derecho real accesorio y de garantía. Recae sobre una o varias cosas
registrables ajenas. Como la hipoteca y la prenda, rige a su respecto la necesidad de convención
(art. 2185 CCyC).
ARTÍCULO 2185. Convencionalidad. Los derechos reales de garantía sólo pueden ser constituidos por
contrato, celebrado por los legitimados y con las formas que la ley indica para cada tipo.
Es un derecho real accesorio pues, como la hipoteca, depende de una obligación que
garantiza. Este derecho concede la posesión de una cosa fructuaria al acreedor denominado
anticresista o a un tercero designado por las partes —que ejerce la posesión en nombre de aquel—,
a quien se autoriza percibir los frutos para imputarlos al pago de la obligación.
Es indudable que su constitución importa una desmembración del dominio, dando origen a
un dominio imperfecto (art. 1964 CCyC).
ARTÍCULO 1964. Supuestos de dominio imperfecto. Son dominios imperfectos el revocable, el
fiduciario y el desmembrado.
En cuanto a su objeto la novedad es que el D° no solo se constituye sobre inmuebles sino
tbm sobre cosas muebles registrables.
TOTAL PARCIAL
ACCIONES REALES---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
ARTÍCULO 2247. Acciones reales
CONCEPTO: Las acciones reales son los medios de defender en juicio la existencia, plenitud y libertad de
los derechos reales contra ataques que impiden su ejercicio.
Las acciones reales legisladas en este Capítulo son la reivindicatoria, la confesoria, la negatoria y la de
deslinde. Las acciones reales son imprescriptibles, sin perjuicio de lo dispuesto en materia de
prescripción adquisitiva.
Es una novedad en la legislación vigente incluir a la de deslinde dentro de las acciones reales. La
naturaleza real de estas acciones determina la competencia de los jueces del lugar en el cual se
encuentra la cosa objeto del reclamo.
ENUMERACIÓN:
1º. Acción reivindicatoria
2º. Acción confesoria Vélez contemplaba sólo estas 3
3º. Acción negatoria
4º. Acción de deslinde
ARTÍCULO 2248. Finalidad de las acciones reales y lesión que las habilita.
La acción reivindicatoria tiene por finalidad defender la existencia del derecho real que se
ejerce por la posesión (EXCEPTO LOS D° REALES DE GTÍA. Y LA SERVIDUMBRE) y corresponde
ante actos que producen el desapoderamiento.
La acción negatoria tiene por finalidad defender la libertad del derecho real que se ejerce por la
posesión y corresponde ante actos que constituyen una turbación, especialmente dada por la
atribución indebida de una servidumbre u otro derecho inherente a la posesión.
La acción confesoria tiene por finalidad defender la plenitud del derecho real y corresponde
ante actos que impiden ejercer una servidumbre u otro derecho inherente a la posesión.
Las acciones reales competen también a los titulares del derecho de hipoteca sobre los inmuebles
cuyos titulares han sido desposeídos o turbados o impedidos de ejercer los derechos inherentes a la
posesión.
CONFESORIA PLENITUD
NEGATORIA LIBERTAD
Acción reivindicatoria---------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Es la más importante, la más utilizada en la práctica y de mayor amplitud normativa. Su fin como dice la
norma es recuperar la posesión o la tenencia.
Los legitimados activos son:
tooodos los titulares de derechos reales que se ejercen por la posesión. (Dominio, condominio,
propiedad horizontal, conjuntos inmobiliarios, tiempo compartido, cementerio
privado…legitimados genéricos)
acreedores hipotecarios (siendo legitimados especiales)
Son 5 los casos de legitimados especiales:
1. Cesionario
2. Comprador sin tradición
3. Heredero
4. Legatario
5. Cotitular
Cesionario:
ARTICULO 1616. Derechos que pueden ser cedidos. Todo derecho puede ser cedido, excepto que lo
contrario resulte de la ley, de la convención que lo origina, o de la naturaleza del derecho.
ARTICULO 1617. Prohibición. No pueden cederse los derechos inherentes a la persona humana.
Este articulo lo que indica es el ppio. Gral de cesibilidad de las acciones, incluyendo las reales.
Ahora quien es el cesionario?
El titular de un D° real sobre una cosa cuya posesión ha perdido por desapoderamiento puede
intentar la acción reivindicatoria para recuperarla. Ahora bien puede ocurrir que en lugar de hacerlo por
sí mismo ceda a un tercero los derechos que tenga sobre esa cosa y así habrá cedido al cesionario
también la acción reivindicatoria. Así el cesionario puede incoar contra el poseedor la acción a pesar de
no ser el titular de un D° real. De tratarse de bienes inmuebles el acto de cesión debe hacerse por
escritura pública. Comprador sin tradición:
El comprador con título suficiente pero al que aún no se le hizo la tradición no es titular del derecho
real. La cuestión requiere distinguir 2 tipos de situaciones fácticas:
A. Que la cosa se halle en poder del vendedor: en este caso el comprador puede ejercer contra el
vendedor una acción nacida del contrato (acc. Personal)
B. Que la cosa la posea un tercero: fue objeto de mucho análisis en la doctrina y la jurisprudencia.
En el fallo plenario de Arcadini c/ Maleca 1958 se reafirmó el criterio de que en toda
compraventa se realiza una cesión “tácita” de la acción reivindicatoria. Revistiendo el
comprador el carácter de cesionario implícito.
Heredero:
El heredero del titular de un derecho real aun cdo no haya tenido nunca la posesión del inmueble,
puede intentar las acciones reales.
ARTÍCULO 2280. Situación de los herederos. “Desde la muerte del causante, los herederos tienen
todos los derechos y acciones de aquél de manera indivisa, con excepción de los que no son transmisibles
por sucesión, y continúan en la posesión de lo que el causante era poseedor.”
ARTÍCULO 2337. Investidura de pleno derecho
Si la sucesión tiene lugar entre ascendientes, descendientes y cónyuge, el heredero queda investido de
su calidad de tal desde el día de la muerte del causante, sin ninguna formalidad o intervención de los
jueces, aunque ignore la apertura de la sucesión y su llamamiento a la herencia. Puede ejercer todas las
acciones transmisibles que correspondían al causante. No obstante, a los fines de la transferencia de
los bienes registrables, su investidura debe ser reconocida mediante la declaratoria judicial de
herederos.
ARTÍCULO 2338. Facultades judiciales
En la sucesión de los colaterales, corresponde al juez del juicio sucesorio investir a los herederos de su
carácter de tales, previa justificación del fallecimiento del causante y del título hereditario invocado.
En las sucesiones testamentarias, la investidura resulta de la declaración de validez formal del
testamento, excepto para los herederos enumerados en el primer párrafo del artículo 2337.
Legatario:
ARTÍCULO 2497. Bienes que pueden ser legados
Pueden ser legados todos los bienes que están en el comercio, aun los que no existen todavía pero que
existirán después. El legatario de bienes determinados es propietario de ellos desde la muerte del
causante y puede ejercer todas las acciones de que aquél era titular.
ARTÍCULO 2498. Legado de cosa cierta y determinada
El legatario de cosa cierta y determinada puede reivindicarla, con citación del heredero. Debe pedir su
entrega al heredero, al administrador o al albacea, aunque la tenga en su poder por cualquier título. Los
gastos de entrega del legado están a cargo de la sucesión.
El legado de cosa cierta y determinada es aquel en virtud del cual se le atribuye al legatario el
ejercicio de un derecho real sobre una cosa que pertenece al causante. Dada la naturaleza del llamado
del legatario, este no recibe de pleno derecho la posesión sobre los bienes, sino que corresponde que
solicite su entrega al heredero, al administrador de la sucesión o al albacea, aunque dichos bienes se
encuentren en su poder por cualquier título. El art. 2498 CCyC dispone que para el supuesto que la cosa
no le hubiera sido entregada al legatario, este podrá reivindicarla de terceros detentadores (art. 2252
CCyC y ss.), pero en dicho proceso debe citarse al heredero. El motivo de la citación al heredero es a los
efectos de que pueda excepcionar sobre la validez del legado, o la inhabilidad para recibir del legatario.
Entonces cómo opera la citación del/los heredero/s? Si prestan conformidad o guardan silencio
queda habilitada la acción al legatario. Si la objetan, el legatario deberá esperar a la aprobación del
legado para ejercerla acción reivindicatoria.
Cotitular:
ARTÍCULO 2251. Cotitulares. Cosa juzgada
Las acciones reales competen a cada uno de los cotitulares contra terceros o contra los restantes
cotitulares.
Cuando la acción se dirige contra los cotitulares siempre lo es en la medida de la parte indivisa.
Cuando se dirige contra terceros puede tener por objeto la totalidad o una parte material de la
cosa, o puede reducirse a la medida de su parte indivisa.
Restablecido el derecho sobre la totalidad o parte material del objeto, el ejercicio por cada condómino
se circunscribe a su parte indivisa.
La cosa juzgada extiende sus efectos respecto de todos los que pudieron ejercer su derecho de defensa
en juicio.
El contenido de la sentencia relativo a la indemnización del daño aprovecha o perjudica sólo a los que
han intervenido en el juicio.
2 situaciones fácticas:
1) Acción dirigida contra otro cotitular
2) La acción dirigida contra un tercero
Analizando las situaciones fácticas vemos que puede ocurrir por ej. que un condómino u otro
cotitular sea privado de la posesión de la cosa por otro copropietario que pretende excluirlo en el
ejercicio de sus derechos. Éste podrá promover una acción en la medida de su parte indivisa. Cada uno
de los condóminos puede ejercer la acción de reivindicación de su parte ideal contra aquel cotitular que
lo ha excluido del de su coposesión. La sentencia lo que hará será resolver reconociendo el del derecho
del condómino lesionado y colocarlo en pie de igualdad con los restantes.
Ahora bien tbm puede darse la situación de dirigir la acción contra un tercero. Que podrá
reclamarle a ese tercero?
1) Una parte material: si prospera la acción, se transformará en coposeedor legitimo junto con el
ilegitimo y segura sieno cotitular co los oros condóminos.
2) Una parte ideal
3) La totalidad de la cosa: de elegir esta opción, pueden darse 2 resultados:
a. Si la acción prospera, se beneficiarán los restantes condóminos.
b. Si pierde la acción, se perjudicará únicamente ese cotitular, el que inicio la acción. Esto se
debe al ppio procesal y constitucional de defensa en juicio: nadie puede soportar las
consecuencias de una sentencia de un proceso por el cuál no fue parte.
Legitimados pasivos:
poseedor actual
a nombre de un tercero
tenedor
a nombre del
reivindicante
El caso típico es que la acción reivindicatoria se dirija contra el poseedor que despojo al titular
del derecho real. Si la cosa ya no está en poder del autor del desapoderamiento, la acc puede dirigirse
contra los sucesores.
Además de admitirse la acción de reivindicación contra el poseedor tbm puede intentarse contra
un tenedor. Y distinguimos 2 situaciones: que el tenedor posea para un tercero o para el propio
reivindicante.
En la primera situación (un tercero) podría ocurrir que una persona desapodere al titular de un
derecho real, se convierta en poseedor y que alquile la cosa a un tercero (tenedor). El tenedor de la
cosa a nombre de un tercero puede liberarse de los efectos de la acción si individualiza al poseedor. Si
no lo individualiza, queda alcanzado por los efectos de la acción, pero la sentencia no hace cosa juzgada
contra el poseedor. Como el poseedor no ha sido parte en el juicio, es evidente que la sentencia no
puede tener efectos de cosa juzgada a su respecto, y podría luego entablar una acción posesoria contra
quien triunfó en la reivindicación. Recuperada la posesión, quien fuera actor en la acción reivindicatoria
seguida contra el tenedor, podría iniciar una nueva acción real, pero —esta vez— contra el poseedor.
Cuando el actor decide reclamar el restablecimiento de su derecho real, no por ello pierde la posibilidad
de añadir la reparación de los daños sufridos, pero ya no lo hará en forma sustitutiva, sino en forma
complementaria en cuanto a que la violación del deber de no dañar a otro da lugar a la reparación del
daño causado) y accesoria a la acción principal (es decir, sin que se requieran dos acciones para lograr
ambos resultados).
Cuando el actor opta por perseguir la indemnización sustitutiva del daño, el resarcimiento pasará a
constituirse en el único objeto de la acción, pues pierde el derecho a ejercer las acciones reales.
ACCIÓN NEGATORIA----------------------------------------------------------------------------------------------------------------
“La acción negatoria tiene por finalidad defender la libertad del derecho real que se ejerce por la
posesión y corresponde ante actos que constituyen una turbación, especialmente dada por la atribución
indebida de una servidumbre u otro derecho inherente a la posesión”.…CUANDO UNA PERSONA
PRETENDE TENER UNA SERVIDUMBRE INDEBIDA EN NUESTRA PROPIEDAD.
FUNDO B
FUNDO A
FUNDO B
FUNDO A
AUTO
PISTA
no pueden acumularse
UNIDAD 15 PUBLICIDAD
La publicidad es uno de los elementos que componen la estructura de los derechos reales. Los
sistemas que para lograrla fueron adoptando los países son pasibles de diversas clasificaciones según el
criterio que se utilice.
Las dos clasificaciones más importantes de los sistemas registrales son:
1º. Declarativos: la inscripción reconoce la preexistencia del derecho y solamente le otorga
oponibilidad a terceros
2º. Y constitutivos: los hace existir
Estas dos clasificaciones son independientes una de otra
La mayoría de los casos los sistemas declarativos son no convalidantes, y los constitutivos son
convalidantes (aunque no necesariamente es siempre así).
El régimen argentino de registración inmobiliaria es declarativo y no convalidante. Los sistemas
declarativos y no convalidantes son habitualmente adoptados en países que cuentan con un notariado
de tipo latino, como el nuestro. El argumento jurídico más relevante en pro de nuestro sistema y de los
que siguen sus lineamientos es el funcionamiento combinado de los institutos de la reserva de prioridad
y la retroprioridad, conocida vulgarmente con el nombre de ’bloqueo registral’, que brinda seguridad
preventivamente (evitando el conflicto).
Desde el punto de vista económico, la más notoria desventaja de los sistemas constitutivos y
convalidantes es el costo de la indemnización o seguro que se debe abonar para cubrir sus falencias,
que los hacen notoriamente más gravosos que a los sistemas como el nuestro.
Sistema registral argentino
Antecedentes: El primer atisbo de registración inmobiliaria en nuestro país se observa con la
creación de los ’Oficios de Hipotecas’, que sólo inscribían ese derecho real (por ser el único en el cual el
acreedor no tenía relación real con la cosa). El sistema de transmisión de los otros derechos reales
continuó siendo el romano del título y el modo, y la función publicitaria la cumplía la relación real
estable. Por la necesidad de dotar a esa función publicitaria sobre inmuebles de mayor seguridad y
cognoscibilidad, al poco tiempo de entrar en vigencia el código civil comenzaron a crearse los Registros
de la Propiedad.
Sistema actual: Características del sistema. Las principales son:
a) adopción de un sistema declarativo (arts. 2° y 20) y no convalidante (art. 4°), que mantiene la
transmisión mediante título y modo;
b) protección de los negocios en gestión (o sea, todavía no celebrados) mediante la reserva de
prioridad indirecta, cuya naturaleza es la de una anotación preventiva (art. 25);
c) instauración de la técnica del folio real para todos los registros del país (art. 10);
d) como principio general el registro recepta documentos (arts. 2° y 3°), es decir, títulos con la
forma de escritura pública (mayormente) o algún otro instrumento público judicial o administrativo
(excepcionalmente, instrumentos privados con firmas certificadas: art. 3°, último párrafo);
e) se establecen límites a las facultades de calificación del registrador, como se expresa en la
exposición de motivos.
Objeto de la registración: (competencia material y territorial del Registro de la Propiedad). Se
registran: títulos, es decir, actos jurídicos con virtualidad constitutiva, transmisiva, modificatoria,
declarativa o extintiva de derechos reales (con la forma expresada en el punto anterior), medidas
cautelares, diversos tipos de anotaciones y algunos derechos personales. El modo no se inscribe, y por
lo tanto no es un presupuesto para el acceso del título al registro. Respecto a la competencia territorial,
las provincias y la ciudad de Buenos Aires cuentan con uno o más registros en los cuales se inscriben o
anotan los actos que tengan por objeto inmuebles que se encuentren dentro de ellas.
Naturaleza jurídica de la registración: Si bien para los contratantes es una necesidad y no una
obligación, sí lo es para el notario, cuyo deber de inscribir surge de la normativa específica.
Principios registrales: preceptos orientadores, directrices de un ordenamiento registral
determinado que informan todas sus disposiciones.
Autenticidad. Indica que el registro recibe documentos auténticos o autenticados.
Rogación. El registro no actúa de oficio, sino que requiere la instancia de los interesados.
Consentimiento. La variación de la situación registral debe contar con la conformidad de su
titular o sus sucesores
Tracto sucesivo. Impone que se conserve el ’encadenamiento’ de las inscripciones mediante la
verificación de la identidad entre el disponente de un derecho y quien para el registro es titular
del mismo.
Especialidad. El principio implica la individualización de tres aspectos: sujeto, objeto y derecho.
Legalidad. impone al Registro la verificación del cumplimiento de los otros principios registrales
para proceder a la inscripción o anotación del documento.
Inscripción. implica la necesidad del ingreso del documento al registro para una adecuada
publicidad.
Legitimación: Es el pronunciamiento de un oficial público acerca de la legalidad de un acto
jurídico. Este pronunciamiento requiere el análisis previo del registrador sobre el cumplimiento
de determinados requisitos en el documento. La legitimación es gradual, y se cumple a medida
que se verifican la autenticidad, la rogación, la determinación del objeto, sujeto y derecho a
registrarse, la ubicación en un rango determinado y el encadenamiento con inscripciones
anteriores.
Inoponibilidad: la inscripción presume iuris et de iure que el título o el derecho es conocido por
todos. Este principio se relaciona con la eficacia del negocio, y no con su validez. Decimos
oponibilidad del negocio y no del instrumento.
Fe pública registral: existen dos posturas diferentes. Por un lado, la fe pública puede ser,
además de notarial y judicial, administrativa, especie que es esencialmente alitigiosa. El asiento
registral sirve como prueba de la existencia de la documentación que lo originara en caso de
pérdida de la misma. En este sentido, se considera que es independiente de la recepción o no del
principio de convalidación, por cuanto la fe pública existe aunque la inscripción no convalide. La
posición mayoritaria sostiene la identidad de este principio con la convalidación.
Prioridad
Existen dos tipos de prioridad: la directa y la indirecta, y esta última también cuenta con una reserva.
Directa: la prioridad entre dos o más documentos que se refieran al mismo inmueble estará dada
por la fecha y el número de presentación que se le asignara a cada uno. Para poder proceder de esa
manera, el registro llevará un sistema de ordenamiento diario en el que, por orden cronológico, se
anotará la presentación de los documentos.
Indirecta: a un documento registrado no podrá oponérsele otro de igual o anterior fecha, a no
ser que éste se hubiere instrumentado durante el plazo de vigencia.
Estas disposiciones crean dos institutos que son el sello distintivo de nuestro sistema registral
inmobiliario. El primero es el certificado de dominio y el segundo el de anotaciones personales o
inhibiciones. La certificación expedida por el registro es una anotación preventiva (art. 25), y genera la
reserva de prioridad indirecta, una auténtica protección del negocio jurídico en gestación. El plazo de
esta reserva es de quince, veinticinco o treinta días corridos.
El segundo instituto, creado por el art. 5°, es la retroprioridad o prioridad indirecta propiamente
dicha. Las escrituras públicas que sean presentadas al organismo registral dentro del plazo de cuarenta
y cinco días a contar desde su otorgamiento, se considerarán registradas a la fecha de su
instrumentación. El incumplimiento del plazo de alguno de los dos institutos, sea el de 15, 25 o 30 días
de los certificados o el de 45 días de la retroprioridad, hace perder al documento los beneficios de la
prioridad indirecta, y su situación debe contemplarse a la luz de la prioridad directa considerándose
registrado el día de su presentación. Todo el plazo conformado por la reserva de prioridad indirecta y
por la retroprioridad es llamado ’bloqueo registral’, por entender que impide la anotación o inscripción
en la matrícula de un acto que se le oponga al que está ’protegido’ por el Registro.
Publicidad: La función imprescindible de los registros inmobiliarios, cualquiera sea el
sistema que adopten, es la publicidad, entendida como la posibilidad que tienen los
terceros de conocer las constancias del Registro. La publicidad material se da por
exhibición de asientos y la formal por la expedición de certificados e informes.
Los certificados son pedidos por escribanos o funcionarios públicos que van a autorizar actos
jurídicos con vocación registral y provocan la reserva de prioridad.
Los informes, por el contrario sólo cumplen con la llamada ’publicidad-noticia’, describiendo a
quien lo pide las constancias de la matrícula, sin reservar prioridad alguna ni asegurar la inmutabilidad
de las constancias. Éstos son los que piden los abogados cuando a los efectos de un proceso judicial se
requiere saber la situación jurídica del inmueble.
Este principio de inatacabilidad puede provocar perjuicios, por lo cual el sistema Australiano
adoptó un régimen de seguro con el propósito de resarcir a quienes resultaren dañados en sus
intereses. Con tal objeto, todo interesado debe abonar el equivalente al dos por mil (2 %o) del
valor de los bienes inscriptos y con los recursos así obtenidos se indemniza a los perjudicados.
Sistema de clandestinidad: publicidad incompleta.
El Derecho Inmobiliario Registral: Concepto. Contenido.
Se puede definir al derecho inmobiliario registral como el conjunto de normas que regulan
la registración de los actos de constitución, modificación, transmisión y extinción de los derechos
reales sobre bienes inmuebles y la organización y funcionamiento del Registro de la Propiedad.
Contenido: el derecho inmobiliario registral constituye un desenvolvimiento de la parte del
derecho civil destinada al derecho de cosas, y, concretamente a los modos de adquirir y perder la
propiedad de bienes. Es un derecho de naturaleza material y en parte de naturaleza formal. En
dicho derecho hay una parte dedicada a la organización del Registro de la propiedad y al modo de
llevarlo y a la estructura de los asientos que deben extenderse en sus libros, pero además de esta
parte formal, existe un contenido material en el que el derecho inmobiliario predica efectos
sustantivos que se manifiestan en los llamados principios de legitimación y de fe pública registral.
Los principios Regístrales. Concepto. Enumeración y explicación de cada uno de
ellos.
Concepto: Los principios registrales son el resultado de la sintetización o condensación
técnica del ordenamiento jurídico hipotecario en una serie sistemática de bases fundamentales,
orientaciones capitales o líneas directrices del sistema. Estos principios sirven de guía al juzgador,
economizan preceptos, facilitan la comprensión de la materia y elevan a la categoría de científicas
las investigaciones propias de la especialidad.
Enumeración y aplicación de los principios:
A) PRINCIPIO DE INSCRIPCION: Este principio determina si la formalidad de la
inscripción constituye un factor para que el negocio dispositivo de inmuebles provoque la
transmisión o desplazamiento de la sustancia jurídica inmobiliaria del transmitente al adquirente.
B) PRINCIPIO DE PRESUNCION DE EXACTITUD REGISTRAL o PUBLICIDAD: Se
entiende por publicidad aquel requisito que añadido a los que rodean a las situaciones jurídicas,
asegura frente a todos, la titularidad de los derechos y protege al adquirente que confía en sus
pronunciamientos, facilitando de esta manera el crédito y protegiendo el tráfico jurídico. El fin de
la publicidad es la SEGURIDAD JURIDICA que proporciona los medios de defensa eficaz de los
derechos de los contratantes al mismo tiempo que crea las condiciones necesarias para el
conocimiento de la situación verdadera de las relaciones jurídicas inmobiliarias. La publicidad
otorga certeza al contenido del registro de modo que sus asientos gozan de la presunción de
exactitud aunque tales asientos no concuerden exactamente con la realidad jurídica.
C) PRINCIPIO DE ROGACION: Rogación significa pedido, petición, es decir, las
anotaciones e inscripciones en el registro DEBEN SER SIEMPRE PEDIDAS ya que el Registro no
actúa de oficio, pueden pedirlas: a) El Autorizante (Escribano) del documento que se pretende
inscribir o anotar; b) Quien tuviere un interés en asegurar el derecho que se ha de registrar (ej.: el
particular que sufre perjuicios por la inactividad del Escribano que autorizó la escritura). Este
principio tiene algunas excepciones: i) Las anotaciones de medidas cautelares (embargos,
inhibiciones, etc.) caducan a los cinco años de pleno derecho, sin necesidad de rogación (art. 701
del Cód. Proc. Civil); ii) Las anotaciones de los hipotecas caducan a los veinte años 8siempre que
no se renueve su inscripción), sin necesidad de rogación.
D) PRINCIPIO DE LEGITIMACION REGISTRAL: por este principio el titular registral es
tratado como verdadero titular del dominio o derecho real inscripto a su nombre. La inscripción es
el punto de partida de la eficacia del principio porque de ella nace la presunción de que el derecho
existe y pertenece al titular registral. El titular goza de la presunción "iuris tantum" a su favor,
porque una vez probada la existencia de la inscripción, el favorecido se ve liberado de la
obligación de probar la existencia del derecho; de este modo el titular registral litiga desde una
posición privilegiada porque no necesita de ningún tramite previo para lograr el reconocimiento
del derecho inscripto por parte de quienes lo desconozcan, lesionen o perturben; debiendo
quienes lo desconocen probar la no titularidad del derecho real invocado por aquel que inscribió
su derecho real.
E) PRINCIPIO DE FE PÚBLICA REGISTRAL: Es otra de las manifestaciones del principio
de exactitud del contenido del Registro, en cuya virtud el contenido registral se reputa
irrebatiblemente exacto en provecho del Tercer Adquirente como medio de lograr la seguridad en
el tráfico jurídico de inmuebles. Este principio se manifiesta mediante una doble presunción: a) la
presunción "iuris tantum" de que los derechos existen y pertenecen al titular registral y b) la
presunción "iure et de iure" en virtud del cual los terceros adquirentes se encuentran en una
posición inatacable. Esto es, la presunción de exactitud del Registro y presunción de Integridad
del Registro, que produce el efecto de que "lo que no está inscripto en el Registro en el momento
de la adquisición no existe; lo no inscripto no perjudica a terceros".
F) Existen otros principios no menos importantes como:
El principio de Prioridad: este principio se concreta en que "aquel en cuya virtud el acto
registral que primeramente ingresa en el Registro de la Propiedad, se antepone, con preferencia
excluyente o superioridad de rango, a cualquier otro derecho real que, siéndole incompatible o
perjudicial, no hubiera aún ingresado en el Registro o lo hubiere sido con posterioridad, aunque
dicho acto fuese de fecha anterior";
El principio de especialidad: Este principio establece que el inmueble debe estar
individualizado perfectamente (valor, ubicación, quien es su titular, si tiene gravámenes hay que
especificar su monto, por ej.. una hipoteca por un monto determinado, etc.) y todos los datos
deben ser inscriptos en los asientos registrales.
El Principio de Tracto Sucesivo: Este principio significa que el orden de prioridad de cada
titular que se va sucediendo, forma una cadena, y cada nueva inscripción se apoya en la anterior.
Ej.: si en el asiento registral aparece Juan Pérez como Titular, entonces es él y no otro el único que
puede vender o gravar dicho bien.
El Registro de la Propiedad. Concepto. Importancia.
El Registro de la Propiedad es la institución encargada de registrar y dar publicidad a los
actos de constitución, modificación, transmisión y extinción de los derechos reales sobre bienes
inmuebles; tiene por objeto la inscripción de los actos y contratos relativos al dominio y demás
derechos reales sobre fincas.
Importancia: El Registro de la Propiedad es la institución encargada de dar publicidad a los
actos y negocios constitutivos, modificativos o extintivos de los derechos reales sobre bienes
inmuebles.
Publicidad de los derechos reales. Legislación Nacional. La publicidad en materia de
derechos reales, es la exteriorización de las situaciones jurídicas reales, referidas a cosas
individualizadas, a los efectos de que, posibilitando su cognoscibilidad por los terceros
interesados po los terceros, puedan serle oponibles.
Dirección General de Registros Públicos. Estructura.
La Dirección General de los Registros Públicos está organizada por la Ley Nº 879/81 que
establece el "CODIGO DE ORGANIZACIÓN JUDICIAL", que en su Título IX, art. 262 establece
que la Dirección General comprende en total catorce registros, que son los siguientes:
a) Inmuebles;
b) Buques;
c) Automotores;
d) Aeronaves;
e) Marcas y Señales;
f) Prenda con Registro;
g) Personas Jurídicas y Asociaciones
h) Derechos Patrimoniales en las relaciones de familia;
i) Derechos Intelectuales;
j) Público de Comercio:
k) Poderes;
l) Propiedad Industrial;
m) Interdicciones, y
n) Quiebras y convocatorias.
El Registro que nos corresponde analizar de acuerdo con los objetivos de la materia es el de
Inmuebles. El art. 311 del COJ., establece.
"El Registro de Inmuebles se llevará abriendo uno particular a cada finca, comenzando por
la primera inscripción que se expida, y agregando a continuación todas las inscripciones,
anotaciones y cancelaciones posteriores, sin dejar claros entre unas y otras".
El art. 315 del COJ prescribe:
"En cada uno de los registros de inmuebles, hipotecas, embargos e inhibiciones se llevaran
dos libros índices, por orden alfabético, según la letra que corresponda a la inicial del apellido del
dueño de los bienes. Uno de ellos se conservará en la oficina de origen, y el otro se remitirá al
archivo"
Actos inscribibles.
De acuerdo a los principios generales consagrados por el COJ, los actos sujetos a la
formalidad de la inscripción son, fundamentalmente, aquellos por medio de los cuales se
constituyen, transmiten, modifican o extinguen derechos reales. Así, se llevan al registro las
modificaciones y extinciones de derechos reales, las anotaciones preventivas así como a los actos
que tengan por consecuencia restricciones al derecho de propiedad; así cabe mencionar los
siguientes:
Los derechos reales: dominio y condominio, usufructo, uso y habitación, servidumbres activas e
hipotecas. Lo que se inscribe es el Acto que constituye, modifica o extingue un derecho real.
El Código de Organización Judicial establece en el art. 269:
"En el registro de Inmuebles se anotarán los derechos reales y sus modificaciones o extinciones; los
bienes afectados al régimen legal del bien de familia, así como la inhibición, embargo, u otras
restricciones al derecho de propiedad. Se anotarán, asimismo, los contratos de locación".
Cabe expresar que para la realización de un acto jurídico referente a constituyen, transmiten,
modifican o extinguen derechos reales, los Notarios y Escribanos Públicos deben solicitar al
Registro de Inmuebles el "Certificado de las condiciones de dominio" que tiene el efecto de
"BLOQUEO" registral por un determinado plazo, en este sentido el C.O.J. establece:
Art. 280 (modif.. por Ley 963/82): "Ningún Escribano podrá extender, aunque las partes lo
soliciten, escritura alguna que transmita o modifique derechos reales sin tener a la vista el
Certificado del jefe de la Sección correspondiente, en el que conste el domicilio del inmueble y sus
condiciones actuales, bajo pena de destitución del cargo y sin perjuicio de las responsabilidades
emergentes.
Dicho Certificado será expedido en el día y será válido por el término de veinte días en la
Capital y treinta días en el Interior incluyendo los inhábiles. Durante su vigencia no podrán
inscribirse los embargos, inhibiciones o cualquier otra restricción de dominio, ni ningún
instrumento público o privado que restrinja, modifique, constituya o limite derechos referentes al
mismo bien.
Tampoco podrán expedirse otros certificados relativos al mismo inmueble.
El Funcionario que no observare las prescripciones que anteceden serán pasibles de las mismas
sanciones establecidas para los Escribanos Públicos".