Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Reg. n° 1307/2019
1 Sentencia del 10.7.17, Sala II, jueces Sarrabayrouse, Morin y Niño, registro n° 565/17.
2 Sentencia del 15.2.19, Sala II, jueces Sarrabayrouse, Morin y Días, registro n° 96/19.
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE CASACIÓN EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL - SALA 2
CCC 60677/2017/TO1/CNC1
3 Cfr. al respecto Julio B. J. MAIER, Derecho procesal penal, t. 1, Parte General, 2ª ed., 3ª
reimpresión, Editores del Puerto, Buenos Aires, 2004, p. 828 y sigs.
4 Cfr. Daniel PASTOR, Recodificación penal y principio de reserva de código, Ad- Hoc, Buenos Aires,
morena que fueron lesionadas e injuriadas por una persona que las conminó para que regresaran a su
país de origen, bajo la amenaza de introducirlas en una cámara de gas. El proceso penal
correspondiente fue sobreseído por la fiscalía tras el pago de una multa de 300 marcos, de acuerdo
con el §153 a de la Ordenanza Procesal Penal alemana. Esta decisión colisiona, según el autor
mencionado, con el interés estatal de mantener los valores fundamentales de la sociedad y la
conservación de la paz jurídica, señalado en los manuales de Derecho penal como los fines principales
del Derecho penal. Cfr. autor citado, Kriminalpolitik und Strafrecht (“Política criminal y Derecho penal”)
en Hans – Jürgen LANGE (comp.), Kriminalpolitk. Studien zur inneren Sicherheit (“Política criminal.
Estudios sobre seguridad interior”), Verlag für Sozialwissenschaften, Wiesbaden, 2008, p. 307. Otro
caso polémico sobreseído por aplicación del §153 a de la Ordenanza Procesal Penal alemana es el del
Contergan o de la Thalidomida; cfr. Eugenio C. SARRABAYROUSE, Responsabilidad por el producto, Ad –
Hoc, Buenos Aires, 2007, ps. 38 – 50.
6 Cfr. Julio B. J. MAIER, Derecho procesal penal, t. 1, Parte General, op. cit., ps. 834 – 836;
también, Alberto BINDER, Sentido del principio de oportunidad en el marco de la reforma de la justicia penal de
América Latina, en Estudios sobre la acción penal y el principio de oportunidad, 2ª ed., Ediciones BLG, Lima,
2017, ps. 125 – 165.
precedentes citados, si la función del Derecho penal es la protección
subsidiaria de bienes jurídicos y ser la ultima ratio del sistema, la conducta
desplegada, no solo por el escaso o casi nulo valor de la luz de
emergencia de la que intentó apoderarse Acosta, sino también porque fue
recuperada en ese mismo momento, muestran que el razonamiento de la
sentencia no es arbitrario. En efecto, el juez de la instancia anterior
destacó que el artefacto de inmediato fue devuelto a la empresa sin
siquiera remitirlo al tribunal (fs. 123).
Las características del hecho revelan que el juez de mérito
consideró correctamente la inexistencia de una acción que por sus
características disvaliosas justifique la intervención del Derecho penal, en
especial, si se toma en cuenta que no existió violencia contra las personas
en la conducta reprochada. Por lo demás, la explicación brindada por
Acosta acerca de los motivos por los que había intentado apoderarse de
la luz de emergencia también fue considerada atendible, sin que se
advierta arbitrariedad en el punto o una errónea interpretación de la ley.
Cuando Acosta declaró, indicó que el hecho juzgado fue cometido en un
momento de desesperación porque quería darle de comer a su pareja
embarazada y su objetivo era revender la luz de emergencia por la que
estimó podría obtener aproximadamente $ 200 (cfr. el registro de la
audiencia, archivo 6093, minuto 6 en adelante).
El juez también destacó, basado en las pruebas colectadas
en la causa, que Acosta se encontraba en un estado de vulnerabilidad
extremo cuando tuvo lugar el hecho: en situación de calle, con su
compañera Romina Beatriz Parada embarazada, quien en su momento
también fue detenida y presenciaba como público la audiencia de debate
junto con una bolsa de residuos negra donde, según indicó el acusado, se
encontraban todas sus pertenencias (ropa y unas mantas para cobijarse);
y que al momento de intentar apoderarse de la luz de emergencia, su
intención era comprar un sándwich para su pareja porque habían
perdido el turno para llegar al Comedor Comunitario y poder desayunar
(fs. 123). En este punto, cabe destacar que la prueba valorada resultaba
suficiente para que el juez concluyera como lo hizo, y no se advierte la
pertinencia del informe socio ambiental reclamado por la fiscalía, habida
Poder Judicial de la Nación
CÁMARA NACIONAL DE CASACIÓN EN LO CRIMINAL Y CORRECCIONAL - SALA 2
CCC 60677/2017/TO1/CNC1
7Sentencia del 22.5.17, Sala II, jueces Sarrabayrouse, Morin y Niño, registro n° 399/2017.
8Cfr. respecto a este tema, la tesis de maestría inédita de Victoria Beatriz Simán Pollastri,
Derecho penal y pobreza: la propuesta de síndrome de trasfondo social podrido (Rotten social background síndrome) de
Richard Delegado, dirigida por Íñigo Ortiz de Urbina Gimeno, presentada ante la Universidad de
Barcelona para acceder al título de Máster en Estudios Jurídicos Avanzados; allí se cita, entre otros, a
Roberto GARGARELLA, La coerción penal en contextos de injusta desigualdad, Facultad de Derecho (UBA),
Buenos Aires; Gustavo BEADE, Acuerdos y desacuerdos y dudas sobre las soluciones democráticas al castigo
penal, Revista Argentina de Teoría Jurídica, Universidad Torcuato Di Tella, Escuela de Derecho,
Volumen 12 (diciembre de 2011), y Eugenio R. ZAFFARONI / Alejandro ALAGIA / Alejandro
SLOKAR, Derecho penal. Parte General, Ediar, Buenos Aires, 2002, ps. 657 y sigs.
Por compartir el examen realizado, adhiero a la solución
propuesta por el juez Sarrabayrouse, en los términos expuestos en el
caso “Cutule”9.
En virtud del acuerdo que antecede, la Sala II de la
Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional de la
Capital Federal, por mayoría, RESUELVE:
RECHAZAR el recurso de casación interpuesto por la
fiscalía a fs. 130/139 y confirmar la sentencia en todo cuanto fue materia
de agravio; sin costas (arts. 456, inc. 1° y 2°, 457, 463, 465, 468, 469, 470
y 471 a contrario sensu, 530 y 531, CPPN).
Se deja constancia que conforme surgió de la deliberación y
en razón del voto coincidente de los jueces Eugenio C. Sarrabayrouse y
Daniel Morin, el juez Horacio Días no emite su voto por aplicación de lo
que establece el art. 23, último párrafo, CPPN (texto según ley 27.384).
Regístrese, notifíquese a las partes intervinientes en esta
instancia, comuníquese (acordada 15/13, CJNN y Lex100) y remítase al
Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional Nº 29, quien deberá
notificar personalmente al imputado; sirviendo la presente de atenta nota
de envío.
PAULA GORSD
Secretaria de Cámara
9 Sentencia en fecha 10.07.17, registro n° 565/2017, Sala II, jueces Niño, Sarrabayrouse y
Morin.